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MÓDULO: TRANSFORMACIONES Y DESAFÍOS DE LA EDUCACIÓN TEMA: USTED ES TECNOLOGÍA Y LA TECNOLOGÍA ES SOCIAL (HASTA LA MÉDULA) Introducción El propósito central es llegar a cuestionarnos si es posible hablar de impactos de la tecnología o de cómo se concibe (desde diferentes enfoques) la relación entre ciencia, tecnología y sociedad, y qué implicancias puede tener esto, pensando en la educación y las tecnologías. Iniciemos, entonces, este recorrido haciéndonos algunas preguntas: Tecnología y sociedad Miremos a nuestro alrededor. A nuestra vista aparecerán innumerables ejemplos de cómo las tecnologías han modificado el entorno en el que los humanos vivimos. Y están las tecnologías, y nosotros como humanos. Ahora mismo, mientras están leyendo, estamos transitando en conjunto un proceso educativo, y durante este recorrido nos cuestionaremos constantemente cuál es la relación entre estos elementos. Entonces, surgen preguntas propias y escuchadas al pasar, pensamientos y reflexiones que habremos escuchado o pensado, simplemente, por ser habitantes contemporáneos del planeta Tierra: ¿Las tecnologías han revolucionado la sociedad? ¿Todos los cambios sociales son causados por la tecnología? ¿El “avance” tecnológico es imparable? ¿Existe sólo un único desarrollo tecnológico posible? ¿La tecnología es la clave para solucionar los problemas educativos?, ¿todos?, ¿alguno?, ¿ninguno? Todas estas preguntas recuperan parte del conocimiento (“¿natural?”) que tenemos y que flota en el aire sobre la tecnología. Pero podemos hacernos otras preguntas que cuestionen precisamente esta naturalidad. Otras preguntas que nos abran la posibilidad de profundizar el análisis: ¿Qué es la tecnología? ¿Acaso son los aparatos o máquinas? Y más aún, podríamos llegar a cuestionar con nuestras preguntas aquellas ideas que consideramos incuestionables y que damos por sentado y seguro: ¿Existe algo que podemos denominar tecnología diferenciado de otra cosa llamada humanidad? Sí, en efecto, esta última pregunta está dirigida a desarmar una idea que damos por obvia y natural -la tecnología y la sociedad son dos entidades que pueden ser definidas de manera independiente- y de esta manera estudiar cuáles son las influencias que una ejerce sobre la otra. Pero la existencia de estas dos entidades completamente separadas, idea

1.1. Educación y Tecnologia

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  • MDULO: TRANSFORMACIONES Y DESAFOS DE LA EDUCACIN

    TEMA: USTED ES TECNOLOGA Y LA TECNOLOGA ES SOCIAL (HASTA LA MDULA)

    Introduccin

    El propsito central es llegar a cuestionarnos si es posible hablar de impactos de la tecnologa o

    de cmo se concibe (desde diferentes enfoques) la relacin entre ciencia, tecnologa y sociedad, y

    qu implicancias puede tener esto, pensando en la educacin y las tecnologas.

    Iniciemos, entonces, este recorrido hacindonos algunas preguntas:

    Tecnologa y sociedad

    Miremos a nuestro alrededor. A nuestra vista aparecern innumerables ejemplos de cmo las

    tecnologas han modificado el entorno en el que los humanos vivimos.

    Y estn las tecnologas, y nosotros como humanos. Ahora mismo, mientras estn leyendo,

    estamos transitando en conjunto un proceso educativo, y durante este recorrido nos

    cuestionaremos constantemente cul es la relacin entre estos elementos.

    Entonces, surgen preguntas propias y escuchadas al pasar, pensamientos y reflexiones que

    habremos escuchado o pensado, simplemente, por ser habitantes contemporneos del planeta

    Tierra:

    Las tecnologas han revolucionado la sociedad? Todos los cambios sociales son causados por

    la tecnologa? El avance tecnolgico es imparable? Existe slo un nico desarrollo

    tecnolgico posible? La tecnologa es la clave para solucionar los problemas educativos?,

    todos?, alguno?, ninguno?

    Todas estas preguntas recuperan parte del conocimiento (natural?) que tenemos y que flota en

    el aire sobre la tecnologa. Pero podemos hacernos otras preguntas que cuestionen precisamente

    esta naturalidad. Otras preguntas que nos abran la posibilidad de profundizar el anlisis: Qu es

    la tecnologa? Acaso son los aparatos o mquinas? Y ms an, podramos llegar a cuestionar

    con nuestras preguntas aquellas ideas que consideramos incuestionables y que damos por

    sentado y seguro: Existe algo que podemos denominar tecnologa diferenciado de otra cosa

    llamada humanidad? S, en efecto, esta ltima pregunta est dirigida a desarmar una idea que

    damos por obvia y natural -la tecnologa y la sociedad son dos entidades que pueden ser

    definidas de manera independiente- y de esta manera estudiar cules son las influencias que una

    ejerce sobre la otra. Pero la existencia de estas dos entidades completamente separadas, idea

  • que reside en el imaginario de todos nosotros, ha venido siendo cuestionada desde algunas

    perspectivas tericas (que presentaremos sintticamente en esta misma sesin), y al cuestionar la

    relacin tecnologa-sociedad nos iremos preguntando por las consecuencias de este enfoque

    sobre cmo encaramos nuestra tarea educativa.

    Pues bien, las perspectivas tericas de las que venimos hablando nos plantean esta dificultad de

    establecer algunas fronteras (que anteriormente parecan claras). Un ejemplo tomado de un texto

    de Wertsch (1991) puede comenzar a iluminar esta idea. James Wertsch retoma ideas de otro

    autor para explicar la idea de Vygotzky acerca de cmo la accin de la mente puede ser mediada:

    Bateson (1972) ha ofrecido la siguiente ilustracin: Supongamos que soy ciego, y uso un bastn.

    Voy, tap, tap, tap, tap, Dnde comienzo yo? Se encuentra mi sistema mental limitado por el

    mango del bastn? Est limitado por mi piel? Comienza por la mitad superior del bastn?

    Comienza en la punta del bastn? Pero stas son preguntas sin sentido... (Wertsch, 1991:50).

    Retomamos este prrafo ya que logra dar una imagen sencilla de la dificultad de delimitar algunos

    campos/objetos que consideramos evidentes. As como es difcil delimitar a la persona (dnde

    empieza su sistema de percepcin) en el ejemplo anterior, tambin podemos preguntarnos cul es

    el lmite, en general, entre tecnologa, sociedad, naturaleza, o ms an, preguntarnos si es posible

    establecer diferencias entre ellos.

    Usted es tecnologa y la tecnologa es social (hasta la mdula)

    La frase no la digo yo, (que me creo totalmente de carne y hueso). Es un provocador planteo de

    Hernn Thomas, Mariano Fressoli y Alberto Lalouf , investigadores del Instituto de Estudios sobre

    Ciencia y Tecnologa de la Universidad de Quilmes En el libro Actos, actores y Artefactos, que se

    public en el ao 2008 discuten mi idea de que yo soy slo de carne y hueso:

    La existencia de hombres y mujeres sobre la Tierra (y en el espacio exterior, claro!)

    Es impensable sin tecnologas. Haga usted un simple ejercicio mental. Cul de las

    actividades que realiza cotidianamente es posible sin recurrir al uso de alguna

    tecnologa?, despertarse?, baarse?, desayunar caf, jugo y medialunas?, viajar

    a su trabajo?, su trabajo?, o, tal vez ir al cine o al teatro? No hablemos de cosas

    obvias, como asistir a un programa de televisin, o de chatear en su computadora, o

    hablar por telfono! Todo lo que se vincula a su existencia, desde la ms simple de las

    comunicaciones verbales hasta el complejo acto de leer este libro participa de una

    dimensin estrictamente humana: la tecnologa.

    Y no se trata solamente de los artefactos que utiliza usted, y de las mltiples redes de

    las que estos artefactos forman parte (energa, transporte, logstica, comunicacin,

  • etc.) sino tambin de los conocimientos necesarios para producir y utilizar esas

    tecnologas. Aun de todas aquellas que usted utiliza sin saber cmo es que sabe

    operarlas. Aquellas que aprendi a utilizar por el mero hecho de estar all. Ya pens

    tambin en las mltiples, infinitas series de prcticas estereotipadas que usted pone en

    juego en cada acto de su vida, desde escribir o jugar al tenis, hasta manejar su

    automvil o disear programas de computacin? Centenares de miles de tcnicas,

    tcitas o codificadas, que usted aprendi a desplegar, con mayor o menor

    competencia, a lo largo de su vida.

    Es que, en verdad, no se trata de sus tecnologas y usted", o en un nivel ms

    abstracto, de la relacin entre tecnologa y sociedad. Usted est tecnolgicamente

    constituido. Usted es un ser tecnolgico, ms all de que esta idea le resulte agradable

    o no. Porque las sociedades estn tecnolgicamente configuradas, exactamente en el

    mismo momento y nivel en que las tecnologas son socialmente construidas y puestas

    en uso. Todas las tecnologas son sociales. Todas las tecnologas son humanas (por

    ms inhumanas que a veces parezcan). Pero no solo se trata de considerar a las

    tecnologas como productos o procesos productivos. Solo recientemente hemos

    percibido que las formas de organizacin son tambin tecnologas. Desde aquellas

    que asignan un orden a un conjunto de operaciones de produccin, de acciones

    blicas, o de sistemas de evacuacin de un estadio, hasta aquellas que adquieren

    formatos normativos, como los sistemas legales o las regulaciones de comercio. En

    este nivel organizacional, una legislacin no se diferencia de otros artefactos

    tecnolgicos.

    La dimensin tecnolgica atraviesa la existencia humana. Desde la produccin hasta

    la cultura, desde las finanzas hasta la poltica, desde el arte hasta el sexo. Lo curioso

    es que, normalmente, reflexionamos poco sobre la tecnologa. Pasa desapercibida,

    naturalizada como la lluvia o las olas. Solo se hace visible en dos momentos

    particulares: cuando deja de funcionar o cuando cambia rpidamente. (...)

    No hay una relacin sociedad-tecnologa, como si se tratara de dos cosas separadas.

    Nuestras sociedades son tecnolgicas as como nuestras tecnologas son sociales.

    Somos seres socio-tcnicos.

    A partir de las ideas de estos autores, entonces, comienzo a poner en duda mi creencia de que

    soy slo de carne y hueso y a asumir mi condicin de ser un ser socio-tcnico. Pero esto no

    significa una versin empobrecida de Robocop. Somos seres sociotcnicos porque nuestra

    existencia como humanos est atravesada por tecnologa. Pero, a qu nos referimos cuando

  • pensamos en la tecnologa? Esbozaremos algunas ideas que permitan entenderla como algo ms

    que dispositivos o herramientas.

    La tecnologa

    Qu es?, o cmo podemos definir a la tecnologa?

    PARA SABER MS

    OTRAS VOCES

    Bruno Latour, un reconocido terico francs plantea ideas que

    cuestionan los vnculos entre tecnologa y sociedad.

    Incluso la forma de los humanos, de nuestro propio cuerpo, est

    en gran parte compuesta por negociaciones sociotcnicas y

    artefactos. Concebir de manera polar a humanidad y tecnologa es

    desear una humanidad lejana: somos animales sociotcnicos y

    cada interaccin humana es sociotcnica. Nunca estamos

    limitados a vnculos sociales.

    Ms sobre Latour:

    Bio: http://www.brunolatourenespanol.org/00_biografia.htm

    http://www.brunolatourenespanol.org/

  • Thomas Hughes define que la sociedad y la tecnologa conforman un tejido sin costura

    (seamless web), un complejo entramado donde tecnologa, ciencia, sociedad se entremezclan y

    se entrelazan. Es decir que lo que denominamos sociedad o tecnologa es una compleja malla de

    interacciones en la cual es difcil (sino imposible) aislar productos o relaciones exclusivamente

    sociales o exclusivamente tecnolgicas.

    Bajo los mismos principios podemos analizar la relacin entre el conocimiento cientfico y la

    sociedad. No existe el conocimiento cientfico independiente de sus vinculaciones e implicaciones

    sociales. La idea de una ciencia neutra, o de una tecnologa neutra que se desarrollan

    aisladas, sin estar vinculadas a las contingencias sociales no puede enmarcarse dentro del

    modelo terico que generan estos autores. Pensemos ahora en cmo puede desarticularse la

    frase o idea que escuchamos frecuentemente: la ciencia (o la tecnologa) es neutra, y su valor

    depende del uso que se haga de ella: un cuchillo puede ser bueno o malo... Un arma puede ser

    PARA SABER MS

    QUIN ES THOMAS HUGHES?

    Thomas P. Hughes, es ingeniero y miembro del Departamento de

    Historia y Sociologa de la Ciencia en la Universidad de Pennsylvania.

    Desde sus inicios como investigador, se interes por la historia de la

    tecnologa, objeto de estudio sobre el que cuenta con una ya larga

    bibliografa. Sus investigaciones se dirigen hacia el estudio de la

    evolucin de las ideas en el que se insertan otras importantes

    cuestiones, como el impacto mutuo de la tecnologa y de la sociedad;

    las trayectorias intelectuales de los hombres que hicieron posible el

    desarrollo de un determinado hallazgo y la mutua relacin entre los

    factores geogrficos y la tecnologa. Su propia tesis doctoral le abri el

    camino para posteriores investigaciones.

    Mercedes Arroyo http://www.ub.edu/geocrit/b3w-44.htm

    Biblio 3W. Revista Bibliogrfica de Geografa y Ciencias Sociales.

    Universidad de Barcelona, n 44, 30 de julio de 1997.

    http://hss.sas.upenn.edu/people/thomas-hughes

  • buena o mala... O un televisor puede ser bueno o malo... Pero qu sucede si pensamos que el

    nuevo televisor de pantalla LCD que disfrutamos est ensamblado en pases donde se autoriza el

    trabajo esclavo, o que para la extraccin de sus materias primas se ha recurrido a prcticas

    depredatorias del medio ambiente, y que la produccin de energa con la cual se alimenta la

    fbrica, y el transporte, y el comercio, etc.

    Retomemos el texto de Thomas y otros (2008) que ya citamos (cuando planteamos que usted es

    tecnologa y la tecnologa es social) quienes describen de manera grfica cmo se va

    conformando este complejo entramado, en el cual cada objeto en s mismo est embebido de una

    larga cadena de relaciones sociales:

    Recin cuando se corta el suministro de energa pensamos -normalmente, entre

    maldiciones- en la compaa elctrica, las regulaciones del sistema de energa local, el

    servicio de atencin al pblico. Y por qu maldecimos? No simplemente porque se

    han apagado las lmparas, sino porque percibimos que con el apagn han dejado de

    funcionar el ascensor, la heladera, el telfono inalmbrico, el televisor, la radio, y todos

    los artefactos que nos rodean cotidianamente. Si pensamos un poco ms, tambin

    tomamos conciencia de la eventual escasez de agua, del estado de los alimentos, del

    lavado de nuestras ropas, del profundo aburrimiento que nos invade lentamente

    cuando lo que queda por hacer es aguardar el regreso de la energa a la luz de una

    vela. Claro que la vela es tambin un artefacto de iluminacin. Solo que corresponde a

    otro sistema tecnolgico que no requera electricidad, pero s a la produccin de cera y

    un sistema de transporte, distribucin y comercializacin. Habremos comprado

    velas?, durarn hasta que vuelva la luz? Porque siempre regresa, en algn mgico

    momento en que nos alegramos por haber superado la crisis, y poder volver a

    nuestras prcticas cotidianas.

    Pero, durante ese luctuoso momento en que solo podemos reflexionar a oscuras, a

    veces podemos percibir otra de las caractersticas de las tecnologas que manejamos:

    su interconexin, su interdependencia. Hacemos un viaje imaginario que comienza en

    el interruptor y contina por los sistemas de cables. Recorremos la casa visualizando

    lo que est directamente conectado a la red. Avanzamos hasta los sistemas troncales

    de distribucin, pasamos por subestaciones y llegamos a unidades de generacin

    (turbogeneradores, centrales hidroelctricas). Y no hay por qu detenerse! Desde

    sistemas de produccin, distribucin y abastecimiento de gas y fueloil a regmenes de

    lluvia y nieve en la cordillera, nos trasladamos hasta pozos de petrleo, guerras en

    Medio Oriente o fenmenos de cambio climtico. Las ramificaciones que se nos

    presentan son mltiples: minas de cobre, fibras pticas, sistemas de control

    informatizados, formacin de recursos humanos, regulaciones de servicios elctricos,

  • polticas de privatizacin, estrategias de desarrollo industrial, polticas de ajuste,

    empresas, inversiones, ideologas. Y el recorrido se complica an ms si incorporamos

    (y cmo excluirlos!) polticos y procesos de toma de decisiones, empresarios y

    negocios, tcnicos ingenieros, publicistas y cientficos, agentes de atencin al pblico y

    funcionarios burocrticos pblicos y privados, productores y usuarios.

    Para colmo, no se trata de poder clasificar a priori esas acciones en series

    homogneas de artefactos tecnolgicos y actos sociales. Porque los ingenieros se

    entremezclan con los procesos de toma de decisin, los polticos con los sistemas

    financieros, los negocios con el mantenimiento del tendido elctrico, los cables con los

    economistas, las lmparas con las empresas transnacionales, las centrales

    hidroelctricas con Greenpeace, la luz que no se enciende con Jos Alfredo Martnez

    de Hoz y la carne deteriorndose en la heladera con Domingo Cavallo.

    Y no se trata de que nos hayamos vuelto maniaco-obsesivos, sino de que las

    relaciones entre humanos y artefactos nos llevaron, en un viaje de causas a efectos, a

    reconstruir un laberinto heterogneo de hombres y mquinas, de grupos sociales y

    sistemas tecnolgicos. Llega un momento en que nos detenemos, porque regres la

    luz y podemos volver a distraernos con todos esos artefactos en los que gastamos

    nuestros salarios, o porque comenzamos a marcarnos por la complejidad del

    entramado de actos y artefactos.

    En tanto la sociedad y la tecnologa conforman esta compleja red de la cual es imposible

    diferenciar sus componentes, estudiar y analizar este entramado no se trata de aislar y fragmentar

    intentando identificar lo que es una cosa o la otra, sino de destejer, desenmaraar, reconocer

    cmo cada uno de estos aspectos se va involucrando y modificndose junto con los otros. La

    intencin es destrenzar la trenza, en lugar de cortarla y repartir los pedazos entre reas de estudio

    acotadas.

    La metfora de la trenza resulta muy til para echar luz sobre otra de las ideas y frases que

    escuchamos (y decimos) frecuentemente y que mencionbamos como parte de las preguntas que

    iniciaban esta sesin: el impacto de las tecnologas (por ejemplo, en la educacin!). Pero, si no es

    posible pensar la relacin tecnologa-sociedad de manera lineal, y unidireccional, donde los

    efectos o consecuencias de una se vierten o impactan sobre la segunda, tampoco podemos

    referirnos a la idea de impacto de las tecnologas, (ya sean positivas o negativas). Frases

    como... por culpa de X entonces Y o gracias a X entonces Y (donde X es una tecnologa e Y un

    efecto social o personal) desde el enfoque que estamos desarrollando aqu deberan ser

  • reemplazadas por expresiones que den cuenta del complejo tejido que conforma este entramado

    sociotcnico.

    Profundicemos en estas ideas....

    Los estudios de la tecnologa se han mostrado especialmente crticos con los anlisis de impactos

    sociales de la tecnologa. En primer lugar, el trmino impacto sugiere un proceso casi mecanicista

    en el que causas y efectos se enlazan mediante una relacin simple o, incluso, automtica. Nada

    de esto se observa en la realidad. No existe, por ejemplo, un vnculo directo e inmediato entre la

    mquina de vapor y la revolucin industrial: las mediaciones entre uno y otro fenmeno son muy

    complejas y, en todo caso, se extendieron durante, como mnimo, un siglo (el tiempo durante el

    cual las antiguas ruedas hidrulicas convivieron con las mquinas de vapor).

    En segundo lugar, los impactos son claramente relativos a su contexto social. Una misma

    tecnologa tiene efectos muy distintos en configuraciones sociales y culturales diversas. Los

    magnificados efectos de la imprenta o de la plvora en Europa, por ejemplo, fueron muy diferentes

    a los que se produjeron en China. Esta misma relatividad cultural en los efectos ha sido

    demostrada por innovaciones clsicas tan significativas como el estribo, la rueda o la brjula. En

    resumen, los impactos de la tecnologa estn mediatizados por factores no puramente

    tecnolgicos.

    Estas dos caractersticas problemticas de los llamados impactos sociales de la tecnologa

    sugirieron a algunos especialistas la posibilidad de explorar la otra cara de la moneda: qu

    efectos tiene el medio social entendido de forma amplia sobre la tecnologa? Los factores

    sociales, culturales o polticos, influyen de alguna forma en el cambio tecnolgico, en los

    procesos de innovacin tcnica? Es, en resumen, la relacin entre tecnologa y sociedad

    bidireccional?

    La lnea de investigacin surgida de estos interrogantes se ha mostrado especialmente prolfica y

    fructfera y ha dado lugar, en los ltimos veinte aos, a un nmero abrumador de estudios de

    casos que demuestran, efectivamente, que, lejos de desarrollarse de forma autnoma, el cambio

    tecnolgico est configurado por fuerzas sociales de diverso orden.

    Los investigadores han sido especialmente cuidadosos en el momento de analizar episodios en

    los que se planteaban disyuntivas tecnolgicas; momentos en los que existan diversas opciones

    tcnicas para seguir. Es en estos casos donde se muestra de forma ms clara cmo las

    decisiones tomadas a favor de una opcin no son, en muchos casos, explicables a partir,

    nicamente, de consideraciones puramente tcnicas. El abanico de factores no tcnicos que

    intervienen en la configuracin del cambio tecnolgico es, sin embargo, muy heterogneo. En

  • ocasiones se trata de relaciones de poder entre clases o grupos sociales; en otras, de los

    intereses de distintos grupos de usuarios, de las relaciones de competencia entre empresas, de

    las diversas culturas ingenieriles involucradas, de la estructura organizativa de una empresa, etc.

    PARA SABER MS

    LOS ESTUDIOS DE CIENCIA, TECNOLOGA Y SOCIEDAD

    Todos los autores que hemos citado hasta este momento son parte de

    la tradicin de los estudios denominados CTS, Ciencia, Tecnologa y

    Sociedad, en los cuales se combinan miradas provenientes de

    diversas disciplinas para producir un enfoque abarcativo sobre la

    ciencia y la tecnologa, que no considere exclusivamente a la

    tecnologa slo como la aplicacin prctica de la ciencia y a la ciencia

    como una actividad neutral y autnoma. En palabras de Argos:

    La perspectiva CTS se enfrenta a la visin tradicional o concepcin

    heredada de la ciencia, segn la cual la actividad cientfica tiene como

    fin el descubrimiento de nuevos conocimientos sobre la realidad, con

    lo que sera objetiva y neutral. Para esta concepcin, la historia de la

    ciencia consistira en la acumulacin constante de saberes de forma

    independiente de otros factores del entorno. Por ltimo, desde esos

    planteamientos la tecnologa no sera ms que la aplicacin a la

    prctica de los conocimientos producidos por la ciencia. Por el

    contrario la perspectiva CTS defiende otra consideracin de las

    relaciones entre ciencia y sociedad que podra ser resumida en las

    tres premisas y la conclusin del llamado silogismo CTS. La primera

    premisa afirma que la actividad tecnocientfica es tambin un proceso

    social como otros; la segunda pone de manifiesto los efectos para la

    sociedad y la naturaleza de la actividad tecnocientfica; la tercera

    premisa supone la aceptacin de la democracia, y de ellas se deriva

    una conclusin final: es necesario promover la evaluacin y el control

    social de la actividad tecnocientfica

    http://www.grupoargo.org/cts_fin.pdf

  • Los estudios de CTS, maduraron a partir de los aos 80 (del siglo XX) como

    una conjuncin de diferentes disciplinas que indagaron sobre la tecnologa

    de forma diferente a la que se haba realizado hasta ese momento. No slo

    se introdujeron nuevos marcos tericos sino que tambin fueron relevantes

    al estudio de otros aspectos de la tecnologa.

    Durante la segunda mitad del siglo XIX se han consolidado

    acadmicamente disciplinas como la historia de la tecnologa, la filosofa de

    la tecnologa, la economa del cambio tecnolgico o la gestin de la

    innovacin. Pero, a partir de la dcada de los 80, se cristaliza un primer

    esfuerzo por constituir un frente de investigacin verdaderamente

    interdisciplinario que permita el estudio global de la innovacin tecnolgica:

    los llamados estudios de tecnologa (technology studies) [13]. (Fatalismo y

    tecnologa: es autnomo el desarrollo tecnolgico? Eduard

    Aibar Puentes http://www.uoc.edu/web/esp/art/uoc/0107026/aibar.html

    Este mbito de investigacin interdisciplinaria se ha caracterizado,

    bsicamente, por los siguientes principios metodolgicos:

    Vocacin marcadamente emprica de los estudios.

    Anlisis de los procesos de innovacin desde sus orgenes y no slo de

    los productos tecnolgicos acabados.

    Estudio de los perodos de inestabilidad (controversias, crisis,

    desacuerdos...) y no slo de los de estabilidad en el desarrollo

    tecnolgico.

    Estudio de todos los factores y agentes que intervienen en el cambio tcnico

    sin prejuicios previos sobre cules son elementos centrales y cules

    contextuales o secundarios.

    Integracin de anlisis econmicos, polticos, sociolgicos o filosficos sin

    otorgar privilegios, a priori, a ninguna perspectiva.

    Estudio de los episodios de innovacin fracasada y no slo de la lograda.

  • Construccin social de la tecnologa

    Hemos avanzado hasta este punto mencionando reiteradamente el concepto de construccin

    social de la tecnologa. Vale la pena detenerse un instante para profundizar en esta idea. A qu

    hace referencia este concepto? Qu significa que algo es socialmente construido?

    Esta idea aparece reiteradamente en diversos textos y situaciones y es tambin utilizada como

    muletilla por muchos cientficos sociales. Emplearemos un fragmento de la colega de Flacso-

    Ecuador, Mara Eugenia Rodrguez Crdoba, que en su tesis de maestra plantea:

    En ciencias sociales suele denominase construccin social al proceso por el cual una

    prctica que surge en una cultura o contexto social particular termina por parecer obvia

    o natural a aquellos que la practican. Para el constructivismo, la realidad se construye

    socialmente en un proceso dinmico que se reproduce al actuar e interpretar el

    mundo. Berger y Luckmann definen a la construccin social como la manera en que

    los miembros ordinarios de la sociedad construyen la realidad diaria de las

    instituciones sociales en el curso de su mundana actividad habitual (Berger y

    Luckmann, 1968).

    Qu implicaciones tuvo la idea de que la realidad es construida y ya no es una realidad objetiva

    dada? A partir de este anlisis se derribaron muchos conceptos que eran tomados como axiomas

    (como principio indiscutibles). A partir de la ptica del constructivismo social (como se denomina a

    esta corriente terica) se ponen en tela de juicio los a priori ltimos de cada una de las disciplinas.

    Lo que es social y lo que es tecnolgico, lo que es psicolgico o corporal son resultados y

    no puntos de partida para realizar los anlisis.

    En el mbito especfico de los estudios de la ciencia, tecnologa y sociedad se rompen los

    compartimientos disciplinares que aislaban a cada una de estas ciencias. La sociologa empieza a

    mezclarse con estudios sobre tecnologa abrindose el campo a los estudios sociales de la

    tecnologa.

    Cerremos esta apartado citando a otros de los te ricos reconocidos en el campo de la

    construccin social de las tecnologas: Trevor Pinch.

  • PARA SABER MS

    ACERCA DE TREVOR PINCH

    Trevor J. Pinch socilogo americano, nacido en Irlanda. Es titular de

    una ctedra en el Departamento de estudios de la ciencia y la

    tecnologa de la Universidad de Cornel (USA) Estudi fsica en el

    Imperial College de Londres y luego se doctor en sociologa en la

    Universidad de Bath (UK). Junto a Wiebe E. Bijker, Thomas Hughes y

    Harry Collins es el iniciador de una de las corrientes de investigacin

    socioconstructivista sobre la construction social de la tecnologa

    (SCOT)

    Adaptado y traducido de: http://fr.wikipedia.org/wiki/Trevor_Pinch

    El desarrollo de un artefacto tecnolgico no es simplemente un logro

    tcnico; inmerso en l se encuentran consideraciones sociales, polticas

    y econmicas. La parte ms difcil de dichos anlisis es demostrar la

    manera en que los artefactos mismos contienen a la sociedad inmersa

    en ellos,

    Mediante una operacin heurstica, de base emprica: abrir la caja

    negra de la tecnologa. (Thomas, p. 220)

  • Impactos sociales y determinismo

    La idea de la autonoma de la tecnologa acostumbra a ir ligada a otro tpico sobre la tecnologa

    que tambin ha hecho fortuna a lo largo de la historia y que parece vivir su edad de oro en torno a

    las TIC: el determinismo tecnolgico. Los deterministas tecnolgicos consideran, bsicamente,

    que el desarrollo tecnolgico condiciona, como ningn otro elemento singular, el cambio y la

    estructura sociales. Dicho de otra forma, que la fuente ms importante de cambios sociales, a lo

    largo de la historia, son las innovaciones tecnolgicas. Ciertas tecnologas acaban afectando,

    segn este punto de vista, a todos los mbitos sociales: las instituciones, las formas de

    interaccin, el imaginario cultural e, incluso, las cosmovisiones.

    La mayora de discursos y estudios que tematizan los llamados impactos o efectos sociales de la

    tecnologa acostumbra a asumir, de una manera explcita o implcita, alguna forma de

    determinismo tecnolgico. Ciertas innovaciones tecnolgicas se interpretan entonces como

    fuentes de transformaciones sociales radicales o, incluso, revolucionarias. Algunos de los

    ejemplos histricos ms loados en este tipo de narrativas son: el estribo y la sociedad feudal, la

    mquina de vapor y la sociedad industrial o los microprocesadores y la llamada sociedad de la

    informacin.

    Segn postulada por tericos, cientficos sociales y naturales, ingenieros, y presente en el

    imaginario colectivo popular, la Tecnologa acta como motor del cambio social. La Tecnologa

    determina la Historia. Esto quiere decir que la implementacin de una tecnologa especfica causa

    transformaciones sociales, moldea y condiciona las conductas, las costumbres y el

    funcionamiento general de la sociedad que la acoge. Por ejemplo, puede afirmarse que la Europa

    del siglo XV no estuvo en la capacidad de emprender su travesa de descubrimiento y conquista

    del Nuevo Mundo hasta que tuvo el conocimiento de la brjula y de otros aparatos de navegacin,

    o que la Revolucin Protestante encabezada por Martn Lutero no hubiera sido posible, ni tan

    siquiera imaginable, de no ser por la difusin de la imprenta en Europa. Acercndonos un poco a

    nuestro tiempo, podramos decir que la expansin de las ciudades, la creacin urbanstica de los

    suburbios no se habra llevado a cabo sin la existencia del automvil.

    La perspectiva determinista se caracteriza por considerar la relacin entre tecnologa y sociedad

    como unidireccional: mientras que la evolucin de la sociedad (en sus aspectos econmicos,

    polticos o culturales) es consecuencia del desarrollo tecnolgico est, pues, determinada por l

    , la tecnologa sigue un curso particular de acuerdo con sus propias leyes. Parece, adems, como

    si la tecnologa se desarrollase en un mbito externo al medio social: como una especie de factor

    exgeno con una dinmica propia.

  • Se acostumbra a identificar la citada lgica interna del desarrollo tecnolgico con la mejora de la

    eficiencia de los artefactos tcnicos. Se considera que cada innovacin en un mbito concreto

    produce un artefacto ms eficiente que sus predecesores, es decir, que desarrolla su funcin con

    mayor eficacia, menos consumo energtico y menos efectos no deseados. Los ordenadores

    digitales, por ejemplo, son mucho ms eficientes que las calculadoras mecnicas; el telfono, que

    el telgrafo, y las centrales nucleares, que los molinos hidrulicos. La eficiencia, en resumen,

    como motor interno de la innovacin tecnolgica, se interpreta como un factor puramente tcnico

    (o cientfico), objetivo, indiscutible y al margen de cualquier consideracin social o valorativa.

    El fin del determinismo tecnolgico

    Desde el inicio estuvimos revisando los enfoques y las justificaciones que dan cuenta de la

    sociedad y de la tecnologa como una trama compleja. Sin embargo, estos no son los enfoques

    ms difundidos y reconocidos socialmente. Volvamos a explorar otros enfoques para pensar las

    relaciones tecnologa/sociedad. Para eso vale la pena mencionar algunos puntos en que se

    especifican cmo se concibe a la tecnologa desde el determinismo y contrastar estas

    caractersticas con el enfoque (planteado a lo largo del desarrollo de esta sesin) en que se

    entiende a la tecnologa como construccin social. Recordemos la metfora del tejido sin costuras.

    Estas son algunas de las principales observaciones que se realizan sobre este enfoque:

    El determinismo tecnolgico es reduccionista:

    Se centra especficamente en las relaciones de causa efecto, monovariables, un

    modelo muy asociado a la explicacin cientfica de las llamadas "ciencias duras". Sin

    embargo, en ciencias sociales es muy difcil encontrar una variable aislada como

    causa de un efecto. Lo contrario del anlisis reduccionista es un enfoque holista, en el

    cual el fenmeno es concebido como interacciones complejas. (tecnosocial, tejido sin

    costuras).

    El determinismo tecnolgico aplica modelos mecanicistas.

    Todo se puede analizar como sistemas de mquinas con piezas que cumplen

    determinadas funciones y que en conjunto llevan a cabo una tarea. Si todos los

    elementos tienen un comportamiento predeterminado las consecuencias son

    predecibles.

  • El determinismo tecnolgico cosifica la tecnologa, la considera como una cosa

    material, homognea y monoltica. El desarrollo tecnolgico slo puede tener un nico

    camino de desarrollo posible, que es el camino que dicta la propia tecnologa.

    El determinismo tecnolgico concede autonoma a la tecnologa, que es supra social,

    independiente, autocontrolada, autorregulada, separada de lo que llamamos

    sociedad.

    El determinismo tecnolgico concibe la Neutralidad de la tecnologa. No es buena ni

    mala en s misma, sino que su valor reside en cmo se aplica. Tiene un valor

    instrumental.

    De esta forma, el determinismo tecnolgico logra sustraer a la tecnologa del campo

    del debate. Siendo la tecnologa asptica y (paradjicamente natural) va construyendo

    su propia historia como una serie de triunfos sobre lo que la rodea. Finalmente

    retomemos la frase de Schmucler cuando dice que la tecnologa es aquello que

    convierte en humano al hombre: la tecnologa es el medio en el que (no con el que)

    los hombres se vuelven humanos.

    PARA SABER MS

    HCTOR SCHMUCLER

    Hctor Schmucler, reconocido terico argentino escribe sobre el

    determinismo tecnolgico como la ideologa dominante del siglo

    XX.

    El tecnologicismo o determinismo tecnolgico, es el discurso de la

    tecnologa, que trasciende los discursos polticos. A decir del

    autor, las grandes contradicciones ideolgicas del siglo XX no eran

    ms que mscaras para ocultar la ideologa de la tcnica. Esta

    ideologa ha logrado instaurarse en el sentido comn y convierte en

    una tautologa la relacin entre progreso-optimismo y tecnologa.

    Ms all de todas las diferencias ideolgicas, (entendidas como

    formas de ver el mundo) en todos los modelos de sociedad se

    inclua la nocin de progreso respaldado siempre por los avances

    tecnolgicos.

  • TECNOLOGA Y EDUCACIN

    Es posible que a esta altura del texto uno se encuentre aburrido o perdido, o piense que se

    trastocaron o mezclaron pginas. Por qu hablamos tan profusamente de tecnologa y sociedad

    cuando estamos encarando en la educacin?

    Y es exactamente por ello. El mismo ejercicio de desnaturalizacin que aplicamos a tecnologa y

    sociedad puede ser realizado para tecnologa y educacin, y ayudarnos as a delinear lo que

    esperamos, deseamos, sabemos sobre la tecnologa y la educacin.

    Al igual que hicimos al inicio de este desarrollo, podemos cuestionar si tecnologa y educacin son

    dos entidades separadas. Si fuera as, podramos entonces hablar de los impactos sobre la

    educacin y las transformaciones que se producen (sean en el sentido positivo o en el negativo).

    Pannabecker seala que la idea de los impactos tecnolgicos en la sociedad estn embebidos

    en el discurso preeminente sobre tecnologa y educacin, puesto que la nocin de impacto

    parece ms sencilla de comprender y resulta funcional a muchos actores involucrados.

    Mirando en perspectiva, a lo largo del siglo XX y lo que ya hemos recorrido del XXI, la tecnologa

    siempre apareci en el horizonte educativo como la bala mgica que poda solucionar todos los

    problemas educativos. La tecnologa siempre tuvo la funcin de remedios de los males

    educativos. En este planteo queda clara la idea de separacin entre la educacin como una

    entidad independiente de la tecnologa, la que se utilizara como herramienta para atender

    diversas problemticas: mejorar la eficiencia, modernizar, etc.

    Pero, hasta qu punto podemos aislar tecnologa y educacin? Si la educacin formal

    institucionalizada es un dispositivo social creado para dar respuesta a un problema social (el de

    brindar educacin), este dispositivo es una construccin social, a la que se le dio forma y

    estructura de acuerdo a los saberes de la poca. Si bien el hecho educativo, es algo compartido

    con otras especies, no resulta natural tal como se produce ni su forma ni la estructura que cobra

    en la educacin institucionalizada.

    La educacin formal es una construccin humana para lograr determinados fines y que se apoya

    en los conocimientos que la humanidad ha acumulado. Podemos entonces ampliar el concepto de

    tecnologa y considerar a toda la educacin (al menos la educacin sistematizada) como una

    tecnologa y no como una prctica que hace uso de dispositivos tecnolgicos. La idea de

    fragmentar los conocimientos, racionalizar y jerarquizar a travs de un currculo, la idea de tener

    un profesional a cargo, la idea de tener una carrera docente, la forma de organizacin de los

  • espacios, la idea de segmentar el da en unidades de trabajo. Todas estas ideas no son naturales.

    Un sistema educativo, un aula, la tarea de un maestro, no son objetos naturales. Son una

    construccin que hemos desarrollado para lograr un producto que es un sujeto educado.

    Edith Litwin (1995), una de las referentes argentinas ms reconocidas en el campo de la

    tecnologa educativa seala: ...Los procesos educativos se convierten en formas sociales

    planificadas de las cuales la escuela es la ms representativa.

    Juana Sancho, una importante investigadora del campo de las Tecnologas y la Educacin,

    seala:

    que para dar respuesta a las funciones bsicas de la educacin (transmitir

    conocimientos, habilidades, tcnicas y garantizar la continuidad y el control social, los

    estados generaron una serie de dispositivos, tecnologas organizacionales y

    simblicas, en lo que se denomina sistema escolar. Sancho, en su ya clsico texto,

    Para una tecnologa educativa, cita a Mecklenburger: La escuela es una tecnologa de

    la educacin, en el mismo sentido que los coches son una tecnologa del

    transporte Como la escolaridad masiva, las clases son inventos tecnolgicos

    diseados para llevar a cabo una tarea educativa. Son un medio de organizar a un

    gran nmero de personas para que puedan aprender determinadas cosas (Sancho,

    1994).

    PARA SABER MS

    JUANA SANCHO

    Juana M. Sancho Gil es catedrtica de Universidad del Departamento de Didctica y

    Organizacin Educativa de la Universidad de Barcelona.

    Es coordinadora del grupo de investigacin consolidado Subjetividades y Entornos

    Educativos Contemporneos (ESBRINA) http://www.ub.edu/esbrina. Co-directora del

    Centro de Estudios sobre el Cambio en la Cultura y la Educacin http:// www.cecace.org

    del Parque Cientfico de la Universidad de Barcelona.

    Tiene una larga experiencia de gestin de proyectos de investigacin, asesoras y evaluacin de programas institucionales. Ganadora del primer premio nacional de

    investigacin en 1987 (Entre pasillos y clases), del segundo en 2003, junto con

    Fernando Hernndez (El clima escolar en los centros de secundaria: Ms all de los

    tpicos) y de una mencin honorfica en el 2007 por la investigacin colectiva: Con voz

    propia. Los cambios sociales y profesionales desde la experiencia de los docentes.

    Codirige la coleccin Repensar la educacin de la editorial Octaedro y ha publicado un buen nmero de libros y artculos en medios nacionales e internacionales relacionados

    con la innovacin y la mejora de la educacin, la formacin docente y el impacto de las

    tecnologas de la informacin y la comunicacin en la educacin.

  • En otro apartado citbamos tambin el texto de Thomas (2008), quien, casi al pasar, apunta una

    idea que resulta muy importante para entender el sistema educativo como tecnologa. Deca

    Thomas en el texto: Slo recientemente hemos percibido que las formas de organizacin son

    tambin tecnologas.

    Qu significa que la escuela, el sistema educativo, sea tecnologa?

    En primer lugar, no debe entenderse como si fuese un aparato o una maquinaria compleja. La

    escuela como tecnologa representa una red tecnosocial en donde intervienen actores humanos y

    actuantes tecnolgicos. Cuando hablamos de educacin sistemtica, nos referimos a una

    compleja red tecnosocial en la que convergen dispositivos, tecnologas, actores humanos y

    actuantes no humanos como aulas, escuelas, currculo, carrera docente, etc.

    Desde las perspectivas que analizamos en este desarrollo, cuando pensamos en el sistema

    educativo y la tecnologa como dos objetos independientes, se considera que la tecnologa con

    sus impactos (benficos) puede ser la solucin para los problemas educativos.

    Pensar la educacin (instituciones educativas) como hechos tecnolgicos en s mismos ayuda a

    pensar de otra forma la manera en la que se entrelazan estos conceptos. No es posible esperar

    resultados predecibles, causas y consecuencias de aplicacin de nuevos dispositivos, ya que la

    interaccin con otras (decimos otras y no nuevas) tecnologas desplazan las relaciones y los

    equilibrios asignados en el sistema, abrindose un nuevo campo de negociaciones que puede

    resolverse de diferentes maneras en cada institucin, regin, municipio, pas, etc.

    En otro nivel, es necesario tambin entender el juego de relaciones dentro de las instituciones

    especficas. Los cambios artefactuales proponen cambios dentro de los roles, y empieza a jugarse

    el poder dentro de cada una de las instituciones, y as como en una caja china, lo que sucede a

    nivel nacional, suceder tambin (con otros resultados) a nivel provincial, municipal, hasta llegar a

    la situacin del aula donde todos estos factores intervienen en la construccin de un nuevo

    equilibrio.

    Qu cambia y qu no cambia? Qu hacer con las TIC?

    Entonces, si disponemos de nuevas tecnologas y lo que deseamos es producir cambios en la

    educacin, este cambio tecnolgico va a afectar a todo el dispositivo educativo, es decir, a toda la

    estructura montada a fin de permitir que las nuevas generaciones transiten la educacin

    institucionalizada. No es posible (o no debera) esperar modificaciones slo de procesos

    fragmentados: por ejemplo escribir en un blog en lugar de escribir en un cuaderno, o que el

  • docente seale las partes de la planta en la pizarra electrnica en lugar de mostrar una lmina

    rada. Estos son ejemplos de pseudotransformaciones (similares a las que hemos asistido durante

    el siglo XX) y que no dan cuenta de las verdaderas y profundas transformaciones a las que se

    puede llegar repensando la educacin utilizando las TIC.

    Por el momento, y como ejercicio preliminar podramos identificar qu parte de lo que

    denominamos educacin sistematizada es el dispositivo, aquello susceptible de modificarse en

    tanto se integren otras tecnologas. Porque la articulacin de nuevas tecnologas debera permitir

    rearmar, repensar, modificar toda la estructura de este dispositivo. Si la tecnologa est imbricada

    en lo que denominamos educacin, los cambios tecnolgicos deberan permitir transformaciones

    profundas, pero ello, a su vez, queda mediado por todas las estructuras organizacionales,

    institucionales, polticas y econmicas de la educacin

    El recorrido de esta lectura termina de cobrar sentido a partir de los anlisis que hemos realizado

    y que nos permiten reinterpretar algunos hitos de la historia ms relevantes del siglo XX de la

    tecnologa en la educacin. Es posible sostener, entonces, que en los intentos de incorporacin o

    integracin de las tecnologas hasta el presente es recurrente la idea de considerar al dispositivo

    educativo como una caja cerrada a la cual hemos naturalizado. El aula, las escuela, los roles y

    personas que las pueblan parecen ser un ambiente dado per s, y en el cual intentamos agregar

    (otras) nuevas tecnologas: cine, radio, televisin, computadoras, que se esperaba pudieran

    ejercer un efecto curativo sobre los problemas educativos. La tecnologa se aplicaba como una

    medicina de la caja negra de la educacin esperando la remisin de la enfermedad. Dentro de

    la caja negra sus estructuras fundamentales seguan siendo las mismas. El fracaso de la

    incorporacin de las tecnologas pareciera estar relacionado con la imposibilidad o la deliberada

    decisin de no considerar a la tecnologa como una integrante de los procesos educativos y que

    las nuevas tecnologas (de cada poca) debieran permitir abrir la caja negra de la educacin.

    La pregunta de qu puede (y debe) cambiar y transformarse con las TIC cobra otro sentido y otras

    dimensiones. Las respuestas pueden ser diferentes y variadas. Pero si consideramos las metas y

    los objetivos que intentamos lograr durante el recorrido en el sistema educativo, qu forma le

    daramos en la actualidad sabiendo que contamos con las TIC? Si lo que pretendemos es

    obtener, al final del recorrido, ciudadanos que puedan razonar, que puedan entender y

    transformar la realidad, cmo disearamos el dispositivo utilizando los recursos con que

    contamos en la actualidad? Seguramente muchas cosas no seran como las conocemos hoy, pero

    tambin sabemos que este complejo entramado sociotcnico resulta una tambin compleja red en

    la cual los cambios se van dando como resultado de negociaciones entre todos los elementos y

    actores intervinientes.

  • Referencias

    Litwin, Edith. (1995). Los cambios educativos: calidad e innovacin en el marco de la tecnologa

    educativa En Litwin, E. (compiladora) Tecnologa educativa. Politica, historia, propuestas. Buenos

    Aires: Paidos

    Ronderos, Paula y Valderrama, Andrs (2003) El Futuro de la Tecnologa: una aproximacin

    desde la historiografa. En Revista .Nmero 5. OEI. Disponible en

    http://www.oei.es/revistactsi/numero5/articulo5.htm (ltimo acceso abril 2011) SANCHO, Juana

    (1994): Para una tecnologa educativa. Barcelona: Horsori Editorial.

    SCHMUCLER, HECTOR (1997): Memoria de la Comunicaci n. Buenos Aires:

    Editorial Biblos

    THOMAS HERNAN, BUCH ALFONSO (2008): Actos, actores y artefactos: Sociologa de la

    tecnologa. UNIV. NAC. DE QUILMES, Bernal

    WERTSCH, J. (1991): Voces de la mente. Un enfoque sociocultural para el estudio de la accin

    mediada. Madrid: Visor.

    Langdon Winner, Tienen poltica los artefactos? http://www.oei.es/salactsi/winner.htm

    Publicacin original: "Do Artefacts Have Politics?" (1983), en: D. MacKenzie et al. (eds.), The

    Social Shaping of Technology, Philadelphia: Open University Press, 1985.

    Versin en espaol de Mario Francisco Villa

    El Futuro de la Tecnologa: una aproximacin desde la historiografa

    Paula Ronderos y Andrs Valderrama Universidad de los Andes, Bogot, Colombia

    http://www.oei.es/revistactsi/numero5/articulo5.htm

    Lecturas optativas y complementarias:

    Fatalismo y tecnologa: es autnomo el desarrollo tecnolgico?

    Eduard Aibar Puentes http://www.uoc.edu/web/esp/art/uoc/0107026/aibar.html

    Grupo Argo:

    Qu es CTS? http://www.grupoargo.org/cts41_42.pdf

    La sala de lecturas del portal de Ciencia, Tecnologa, Sociedad e Innovacin, de la Organizacin

    de Estados Americanos, es un excelente punto de entrada para acceder a toda clase de

    documentos que enfocan la problemtica abordada en esta seccin

    http://www.oei.es/salactsi/index.php

    Construccionismo http://sociotecno2.wordpress.com/

    Articulo pannebecker en ingles

    http://scholar.lib.vt.edu/ejournals/JTE/v3n1/pannabecker.pdf