EN ESTA CASA NOS QUITAMOS LAS MÁSCARAS · Mientras cantaba sin que nadie supiera que allí había una rana, el peluquero cortaba el pelo a un cliente. Un largo mechón fue a caer

1 Buenos Días PRIMARIA

Campaña Pastoral 2019-2020

Lunes, 24 de febrero

EN ESTA CASA NOS QUITAMOS LAS MÁSCARAS ¡Buenos días! Hoy hablaremos de quitarnos las máscaras, de no aparentar ser lo que no somos. Empecemos esta mañana escuchando este fragmento del Evangelio: CITA BÍBLICA: 2 Corintios 5, 12 «No nos recomendamos otra vez a vosotros, sino que os damos oportunidad de estar orgullosos de nosotros, para que tengáis {respuesta} para los que se jactan en las apariencias y no en el corazón». LECTURA: El problema de Mario Mario era un niño de 12 años que vivía en un pequeño de Andalucía. Cada mañana salía de su humilde casa y se dirigía a su colegio que quedaba bastante lejos de su casa. Atrás, encerradas en cuatro paredes, quedaban una serie de penurias: su madre quedaba en cama aquejada de una grave enfermedad y su padre cuidándola sin cesar, el padre no tenía trabajo. Llevaba más de dos años en paro. Mario llegaba a su cole y dejaba volar su imaginación: contaba a sus compañeros lo bien que estaban en su casa; su madre hacía unos riquísimos pasteles y su padre limpiaba alegremente la inmensa piscina que tenían en su bonito jardín. Y todo esto… para que sus compañeros estuvieran con él. Pero Mario que era muy bueno sabía que lo que estaba haciendo no estaba bien y por eso un día se plantó y le dijo a su profe que quería hablar para toda la clase. Mario se puso de pie y les dijo a sus compañeros que los había estado engañando en cuento a su vida familiar. Mario empezó a relatar que su madre no hacía pasteles ya que estaba muy malita en la cama y su padre en paro se encargaba de cuidarla con mucho cariño, no tenían ni piscina ni un precioso jardín ya que su casa era muy humilde y carecía de muchos recurso necesarios.



Sus compañeros no daban crédito a lo que estaban escuchando y todos, uno a uno, empezaron a levantarse y a aplaudirle; poco a poco, cada uno de ellos se fue acercando a Mario para darle un fuerte abrazo. El delegado de clase habló en nombre de sus compañeros y le explicó a Mario que no debía mentir sobre su situación, que no debía ponerse una máscara, ya que el cole es la casa de todos y allí nos debemos sentir como en casa y tener confianza. REFLEXIÓN ¿Qué os parece la historia? A veces… ¿nos ponemos máscaras para aparentar lo que no somos como Mario? ¿Qué os parece la actitud de su clase? IMAGEN

ORACIÓN Ave María María Auxiliadora de los Cristianos… ruega por nosotros. ¡Que paséis un buen día!



Martes, 25 de febrero

EN ESTA CASA NOS PRESENTAMOS TAL Y COMO SOMOS

Hola ¿Qué tal estáis? Hoy el tema a trabajar en estos buenos días, no nos debe dejar indiferente. Prestemos atención. CITA BÍBLICA: 1 Pedro 3, 3-4 «Que la belleza vuestra no sea la externa, que consiste en adornos tales como peinados ostentosos, joyas de oro y vestidos lujosos. Que la belleza sea más bien la incorruptible, la que procede de lo íntimo del corazón y consiste en un espíritu suave y apacible. Ésta sí que tiene mucho valor delante de Dios». LECTURA: La rana Paca La rana Paca cambió su vida el día que vio la televisión por primera vez. Era un concierto de rock, y la rana Paca quedó fascinada. Pero no por la música, sino por las melenas de los cantantes.

- ¡Oh! ¡Qué pelo tan largo y bonito! Yo quiero algo así, que se note que soy especial.

Pero Paca era solo una rana. No había ido a la escuela y ni siquiera sabía que las ranas no tienen pelo, así que pensó que el pelo le saldría si se dedicaba a dar conciertos. Su croar de rana no encajó bien ni con el rock, ni con la ópera, ni con el pop, pero ella siguió dando conciertos allá donde iba. Viajó por pueblos y ciudades, por el mar y la montaña, por calles y jardines… hasta que un día dio su recital en una peluquería. Mientras cantaba sin que nadie supiera que allí había una rana, el peluquero cortaba el pelo a un cliente. Un largo mechón fue a caer precisamente sobre la cabeza de Paca y esta pensó, al verse con tanto pelo sobre su cabeza, que su sueño por fin se había hecho realidad. Emocionada, cantó con tanta fuerza y entusiasmo que despertó a Fredo, el gato del peluquero. Este, al ver aquel montón de pelo en movimiento saltó sobre él y se lo zampó pensando que se trataba de un ratón.



A Paca no la salvó su pelo largo, ni su estilo musical. La salvó ser una rana, porque a Fredo no le gustó el tacto frío y resbaladizo de su piel y la escupió: pero las huellas de aquel ataque quedaron para siempre marcadas con grandes cicatrices en la piel de Paca. Y también en su memoria, pues así aprendió que ser rana tenía también su lado bueno. A partir de ese momento, Paca estudió todas las ventajas de ser rana y la mejor forma de aprovecharlas y creó una escuela para ranas, de la que salieron las ranas más habilidosas y felices. Y… colorín colorado… IMAGEN

ORACIÓN Padre, estamos hoy aquí ante ti para presentarnos tal y como somos, sin falsas apariencias Ayúdanos a ir por el buen camino que la gente a nuestro lado se sienta como en casa que inspiremos confianza y alegría. Ayúdanos a no defraudar a la gente que nos quiere. Amén. María Auxiliadora de los Cristianos… ruega por nosotros. ¡Que tengáis un buen día!



Miércoles, 26 de febrero

LA CENIZA: CAMBIO EN NUESTRA VIDA ¡Buenos días a todos y todas! Estamos hoy aquí en clase rodeado de amigos/as. Hoy es miércoles, pero no es un miércoles cualquiera porque ¿quién sabe qué tiene de especial el día de hoy? ¡Efectivamente! Hoy es miércoles de ceniza. Seguro que hoy empezaremos a cambiar aunque sólo sea un poquito. EVANGELIO: Lucas 15, 3; 11-32 «En aquel tiempo, dijo Jesús esta parábola: Un hombre tenía dos hijos, y el menor de ellos dijo a su padre: “Padre, dame la parte de la hacienda que me corresponde”. El padre les repartió la hacienda. Pasados unos días, el hijo menor se fue a un país lejano y allí malgastó su fortuna viviendo perdidamente. Cuando lo hubo gastado todo, vino por aquella tierra un hambre terrible, y empezó él a pasar necesidad. Fue entonces y tanto le insistió a un habitante de aquel país, que lo mandó a guardar cerdos. Le entraban ganas de llenarse el estómago de las algarrobas que comían los cerdos; y nadie le daba de comer. Recapacitando entonces se dijo: “Cuántos jornaleros de mi padre tienen abundancia de pan, mientras yo aquí me muero de hambre. Me pondré en camino adonde está mi padre y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti, ya no merezco llamarme hijo tuyo. Trátame como a uno de tus jornaleros”. Se puso en camino hacia donde estaba su padre. Cuando todavía estaba lejos, su padre lo vio y se conmovió; y echando a correr, se le echó al cuello y se puso a besarlo. El hijo le dijo: “Padre, he pecado contra el cielo y contra ti, ya no merezco llamarme hijo tuyo”. Pero el padre dijo a sus criados: “Sacad el mejor traje y vestidlo; ponedle un anillo en el dedo y sandalias en los pies; traed el ternero cebado y matadlo; celebremos un banquete, porque este hijo estaba muerto y ha vuelto a la vida; estaba perdido y ha sido hallado”. El hijo mayor, al regresar del campo, se enfadó con el padre por la fiesta que había preparado para su hermano, y le dijo: “Yo siempre he estado junto a ti y nunca me has dado nada para preparar una fiesta con mis amigos”. Y el padre le contestó: “Hijo, tú estás siempre conmigo, y todo lo mío es tuyo: deberías alegrarte, porque este hermano tuyo estaba muerto y ha revivido, estaba perdido y lo hemos encontrado». LECTURA / IMAGEN Hoy vamos a resolver 4 cuestiones que seguramente te has hecho alguna vez. Las comentaremos entre todos a partir de la siguiente imagen.



REFLEXIÓN ¿Qué es lo más importante de la parábola que hemos escuchado? Este día es muy importante para nosotros los cristianos. Hoy seguramente a lo largo del día recibamos la ceniza. Vamos a pensar en estos 40 días de la Cuaresma qué cosas tenemos que mejorar en nuestra vida, qué comportamientos o actitudes tenemos que quemar para que desaparezcan. ORACIÓN Jesús, dame la capacidad y voluntad para: ayunar de palabras hirientes y transmitir frases de cariño, ayunar de descontento y llenar de gratitud, ayunar de enojos y ser más paciente, ayunar de pesimismo y llenar de esperanza, ayunar de preocupaciones y confiar en Dios, ayunar de quejarme y asombrarme con las cosas sencillas de la vida, ayunar de las presiones y llenar de oración.

María Auxiliadora de los cristianos… ruega por nosotros.



Jueves, 27 de febrero

LA CENIZA: EL CAMBIO PROVOCA COSAS BUENAS ¡Buenos días! ¿No notáis nada raro en vuestro cuerpo? Yo empiezo a notar que me siento mejor conmigo mismo, ¿no lo notáis? Ahhh ya sé, ayer fue miércoles de ceniza, yo recibí la ceniza y… me encuentro mucho mejor que otros días. Ayer me propuse un montón de retos que sé que algún día voy a cumplir. Quiero cambiar, quiero mejorar. EVANGELIO: Lucas 19, 1-10 «Habiendo entrado Jesús en Jericó, atravesaba la ciudad. Había allí un hombre llamado Zaqueo, que era jefe de los cobradores del impuesto y muy rico. Quería ver cómo era Jesús, pero no lo conseguía en medio de tanta gente, pues era de baja estatura. Entonces se adelantó corriendo y se subió a un árbol para verlo cuando pasara por allí. Cuando llegó Jesús al lugar, miró hacia arriba y le dijo: “Zaqueo, baja enseguida, pues hoy tengo que quedarme en tu casa”. Zaqueo bajó rápidamente y lo recibió con alegría. Entonces todos empezaron a criticar y a decir: “Se ha ido a casa de un rico que es un pecador”. Pero Zaqueo dijo resueltamente a Jesús: “Señor, voy a dar la mitad de mis bienes a los pobres, y a quien le haya exigido algo injustamente le devolveré cuatro veces más”. Jesús, pues, dijo con respecto a él: “Hoy ha llegado la salvación a esta casa, pues también este hombre es un hijo de Abraham. El Hijo del Hombre ha venido a buscar y a salvar lo que estaba perdido”. LECTURA Había una vez un conejo que siempre tenía miedo. Un conejo miedoso que se asustaba durante el día porque había mucha luz, y durante la noche a causa de la oscuridad. El zorro estuvo a punto de atraparlo una vez, y en otra ocasión lo persiguió un búho, por lo que apenas se atrevía a salir de la madriguera. Pero una noche, como tenía mucha hambre, se aventuró hasta el lindero del bosque y se metió en un campo de tréboles. De pronto se llevó un susto enorme... vio una gran lechuza posada sobre la rama de un árbol y se dio cuenta de que le estaba mirando con sus ojos verdosos y brillantes. —Me alegro mucho de que hayas venido, querido conejito –dijo la lechuza con amabilidad, y añadió—: ¡No sabes cuántas ganas tengo de comerte! El conejo se acurrucó entre los árboles y apenas podía moverse, a causa del gran miedo que sentía y que agarrotaba sus patitas.



Pero cuando volvió a levantar la vista hacia el lugar donde le acechaba, vio las estrellas que brillaban en el cielo, sobre el bosque. —Mi querida señora lechuza... —murmuró con voz trémula—. Estoy muy flaco... ¿Acaso no preferiría unas palomas para la cena? Si se molesta en levantar la cabeza verá siete palomas cruzando el cielo. —¿Por dónde? —gruñó la lechuza mientras alargaba el cuello. El conejito señaló hacia siete hermosas estrellas que estaban muy cerca unas de otras. La estúpida lechuza se relamió mientras pensaba: “¡Tengo que cogerlas!”. Comenzó a volar hacia arriba, mientras que el conejito volvía corriendo al bosque y se metía en su madriguera, donde se encontró seguro. REFLEXIÓN Es muy importante ser fuerte y tener fuerza de voluntad para cambiar y conseguir las cosas que nos proponemos en nuestra vida. ¿Te gustaría ser como el conejo de la lectura que acabamos de leer? ¿Por qué sí/no? IMAGEN

ORACIÓN Jesús, dame la capacidad y voluntad para: ayunar de juzgar a otros y descubrir al Jesús que hay en ellos, ayunar de tristeza y amargura para alegrar el corazón, ayunar de egoísmo y tener compasión por los demás, ayunar de faltas de perdón y reconciliarme, ayunar de palabras para llenar el silencio y escuchar a los otros.

María Auxiliadora de los cristianos… ruega por nosotros.



Viernes, 28 de febrero

RENACE NUESTRO BUEN CORAZÓN

¡Buenos días! Ahora que ya todos nos sentimos con muchas fuerzas y con ganas porque aprendimos ayer a ser positivos y seguir adelante sin rendirnos como el conejo. ¿Os acordáis del conejo de ayer? Pues seamos como él y venzamos nuestros miedos eso sí, siempre teniendo un buen corazón. EVANGELIO “En cierta ocasión le preguntaron los discípulos a Jesús: “¿Quién eres tú?”. Y Jesús les contestó: “Yo soy el camino, y la verdad y la vida, el que me sigue a mí tendrá vida en abundancia. Yo soy la vid, vosotros los sarmientos. El que permanece unido a mí ese da mucho fruto, porque sin mí no podéis hacer nada. A vosotros os llamo “amigos”. Os he destinado para que vayáis y deis fruto, y un fruto que dure. Sabed que yo estoy con vosotros todos los días». LECTURA En un lugar del bosque había una casita abandonada. Un duende anciano que vivía en la cavidad del tronco de un árbol la descubrió y decidió pintarla; tenía varios tarritos de distintos colores, así que fue usando un poco de cada uno y, después de varios días de trabajo, la casita multicolor quedó terminada. El señor duende era viejito, tenía una barba blanca muy larga y usaba un sombrero con varios parches, no tenía dinero y para conseguir comida iba a recoger frutos de los árboles. Un día empezó a recolectar ramas y con mucha paciencia fabricó una cama. - ¡Qué bien, ya tengo casa y también una cama! -dijo feliz el duende. Una noche llovía mucho, se oían truenos y los relámpagos iluminaban el bosque. El duende abuelo dormía tranquilo, pero de pronto unos golpecitos en la puerta lo despertaron. - ¿Podemos dormir esta noche aquí? -le preguntaron desde el exterior.



Se levantó para abrir y allí estaban tres pequeños duendes, mojados, embarrados y temblando de frío... - Pasad, pasad; está lloviendo mucho fuera -contestó. - ¡Qué hermosa casa tienes! -dijo uno. - ¡Y qué bien pintada! -agregó el otro. - Nos quedaremos solo esta noche, mañana continuaremos el camino -aclaró el último. - Podéis quedaros aquí todo el tiempo que querías; vivo solo -dijo el duende anciano mientras les preparaba un té caliente. Al día siguiente, los pequeños huéspedes abrieron una caja de madera llena de monedas de oro, que su bisabuelo les había regalado para que pudieran comprar sus víveres hasta que fuesen adultos, y decidieron ayudar al abuelo, ya que vieron que estaba un poco enfermo. - Aaaaahhhhhchissss… Aaaaahhhhhchissss -estornudó el viejito-. Voy a acostarme, que me duele mucho la cabeza -dijo. Al oír esto, los pequeños duendes decidieron quedarse para cuidar al anciano duende. Al día siguiente fueron a buscar unas hierbas curativas… y en el camino se encontraron con la bruja Elena, que les ayudó a conseguirlas. A las pocas horas, regresaron y prepararon té mágico; después de beberlo, el señor duende empezó a sentirse mejor… y un poco más tarde estaba ya totalmente curado. Con gran alegría, los duendes jovenzuelos decidieron construir un gran castillo, para alojar a todos los duendes que pasasen por allí y no tuvieran donde dormir. Entonces, utilizando su poder y su magia, convirtieron la pequeña casita multicolor en un enorme castillo, también multicolor. Desde ese día vivieron allí los tres… y todos los duendecillos que pasaban por allí tenían hospedaje en el castillo, porque el abuelo duende y los duendecillos ¡eran muy bondadosos! REFLEXIÓN Muchas veces nos olvidamos de poner en funcionamiento nuestro gran corazón, porque todos nosotros tenemos dentro un gran corazón. Deja que tu corazón responda y que tu corazón crezca y así entre todos conseguiremos un mundo mejor.



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ORACIÓN

Señor Jesús, mi buen pastor, te ofrezco mi corazón. Te pido, Señor, que lo cuides. Y Tú, con tu Sagrado Corazón, abraza mi vida. Ayúdame a tener un corazón humilde, que encuentre en ti la fuerza. Quiero un corazón como el tuyo, que busque más amar que ser amado, que sea reflejo de tu alegría y nunca pierda la certeza del amor infinito del Padre. María Auxiliadora de los cristianos… ruega por nosotros.

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EN ESTA CASA NOS QUITAMOS LAS MÁSCARAS · Mientras cantaba sin que nadie supiera que allí había una rana, el peluquero cortaba el pelo a un cliente. Un largo mechón fue a caer