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7/26/2019 Ficcin - Para Comprender La Teatralidad
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i
Domingo
dame
PARA C O M P R E N D E R L A
T E A T R A L I D A D
ceptos
fundamentales
o
* Xa
V
V-
* Xa
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7/26/2019 Ficcin - Para Comprender La Teatralidad
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niversid d
eracruzana
Dr. Ral Arias
Lov i l lo
Rector
Dr.RicardoCorzo Ramrez
Secretario Acadmico
Lic Vctor Aguilar Pizarro
Secretario de Administracin y Finanzas
Mt r o Enrique Salmern Crdoba
Director General del Area Acadmica de Artes
Dra. CeliadelPalacioMontiel
Directora General Editorial
Dr.DomingoAdame Hernndez
Director de la Facultad de Teatro
PARA CO MP RE ND ER LA TEA TRALI DAD
Primera edicin, agostode2 6
Universidad
Veracruzana/
Facultad
de
Teatro
Xalapa
Ver. Mxico
I S BN :
968-834-736-1
Impreso en Mxico Printed in Mxico
D i s e o : VctorCamas
Impresin:
Javier Estrada/Servicioseditoriales
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7/26/2019 Ficcin - Para Comprender La Teatralidad
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i c c i n
La ficcin es considerada producto de la imaginac in en
opos ic in
a realidad. Por
esta
misma
razn
se le asocia a
nociones que remitenalainvenc incomo apariencia,a r t i -
ficio, falsedad,verosimilitud,entre otras.
E n
el discursoteatral,
segn
Pavis, eltextoy la repre
sen tac in
son
n i c a m e n t e
una
ficcin,
puesto que son in
ventados para cada obra y las aseveraciones que contienen
no poseen n i n g n
valor
de verdad.La ficcinteatral es asu
mida
por el dramaturgo, el actor, el director y todos aque
llos
que tienen una funcin material en lap repa rac indel
espec tcu lo . Esta ficcin se presenta directamente, sin la
me dia c in
de un narrador,
lo
que
explica
la gran
im pre s in
de algo directo y real experimentado por el
pb l ico
(efecto
de realidad, de
i lus in .
Sin embargo, la
ficcin
no
puede ser
m e ta f s i camente
opuesta a la realidad, se produ
ce entre
ambas
una
in te rpene t rac in
compleja
al
mezclarse
la ficcin
textual y la
ficcin escnica
(1998: 206-207).
E n el teatro la realidad es represen tac in , o sea fic-
c in ,
y hay
ficcin
y realidad porque existe
laposibilidad
de
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PARA
COMPRENDER
LAT E A T R A L I D A D
repres en tac in . La teatralidad permite descubrir c m o se
construye una ficcin. Siestono se percibe no es posible
hablar de teatralidady ,por consiguiente, de teatro. Por eso
la fenomenolog a , como modo de ver y estrategia para de
finir
los fen me nos atravsde loscualesla conciencia per
cibe los objetos reales , es un soporte fundamental para su
conocimiento.
erspectiva
semitic
Existe una
estrecha
relacin ficcin-teatro propia decada
texto,
misma que
puede
ser modificada por la escenifica
c in . E luniverso imaginado porellector no es un universo
real en el mundo, sino un universo es cn ico ;Ubersfeld
dice que el lector de una tragedia deCorneilleno seimagi
na el acontecimientoh is t r ico ,sino lateatralizacinde ese
acontecimiento y llama s e m i t i c o a todo esfuerzo que
toma conciencia de la relaci n ficcin-teatro y tiende a
descubrir, nombrar, enumerar, jerarquizar de forma siste
mticay objetiva las unidades de
significado
y su organiza
c inen conjuntos de cualquierd i m e n s i n .Con su ayuda,
propone salir del subjetivismo del gusto tan desarrollado
po r lacrticaimpresionista.
D e manera general, los ter icos coinciden en una
misma idea: la teatralidad consiste en un juego de signos,
m s que en la cons trucc inde una ficcin.Los producto
res y receptores son operadores de signos y ambos requie
ren contar con experiencia y conocimientos teatrales.
D e acuerdo a la c o n d i c i n m n i m adel teatro s egn
Fischer-Lichte:A representa
a
X mientras Slomira.Ahora
bien,con el fin de encarnar a X ,A adquiere cierta aparien
ciaexterna, actade cierto modo, y lo
hace
en determinado
espacio. Esta des c r ipc in general de la actividad del
actor
no permitedistinguirlas diferencias entre su actividad y la
118
F I C C I N
de
todas
las
personas
que en lavidasocial preparan su
apa
rienciayac tande determinada manera en un espacio par
ticular.En labasede
esta
d is t inc ingeneral se
puede
decir
que la diferencia entre A como A y A representando a X
consiste en el cambio de apariencia y modo de evolucionar
en un espacio distinto. Sin embargo hay una diferencia
cualitativaentre los dos procesos: cualquier prenda utiliza
da por A comoA s e rpor una necesidad especfica. Lomis
m o
ocurre
si
A emprende una
acc in
como
A ,
por ejemplo
fabricarunutensilio,osibuscaun
sitio
especial para
estar
o
vivi r .En contraste, si A prepara su apariencia externa
para
ser X, se pone una prenda no por necesidad pragmtica ,
sino porque quiere decir algo deX .Lo que
hace
A cuando
representa a X no habla de A sino deX .Cuando A repre
senta
a X sus acciones, la forma y el lugares tn relaciona
dos con la presencia de unpbl ico ,para quien la apariencia
externa deA ,sus acciones, su comportamiento, su espacio
significan
los de X (1999: 27-30).
D eestemodo, en el proceso de a tr ibuc inde s ign if i
cado al signo, es cuando laapariencia/ficcin se revela en
toda su plenitud.
erspectiva
teatral
La teatralidad es artificio tanto en el sentido de ingenio
co n el que est hecho una
cosa ,
como en el sentido de
doblez . Por eso dice Fernando de Toro en ele s p e c t c u
loteatral todo es signo yartificialidad (1987: 68). El con
trato sobre la
artificialidad
del f e n m e n o teatral sebasaen
la convenc in ,o sea en la conformidad entre una
cosa
y su
signo, entre lo que se muestra y lo que se representa. L oar
tificial
ha sido valorado de distintas
maneras
a lo largo de la
historia
del teatro: rechazado por las po t icas mimticasy
aceptado
por las expresivas.
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PARACOMPRENDER LA TEATRALIDAD
Desde el punto de vista
o n to l g ico
las
neo-vanguardias de lasegundamitaddel siglo
X X
revela
ron ,
entre otrascosas,la
artificialidad intrns eca
de la rela
c i n ac to r -p b l i co
que afianzaba la
divisin
mente-cuerpo. Grotowskise opuso
a tal divisin
por su
i n
fluencia
destructiva en la
civilizacin
occidental, por eso
i n t en t
eliminar toda
separacin
entre actor-espectador,
llegando a abandonar la
represen tacin .
L o n ico au t n t i co
en el teatro es su teatralidad. To
dos
los
juiciossobre su verdad o falsedad
estn
en
relacin
co n
el sentido que se otorgue a la realidad. Desde la
pot ica
aristotlica
se tiene conciencia de que la verdad no tiene
en el teatro el mismo
valor
que en
la
vidacotidiana, por eso
se habla de
verosimil i tud
o sea la verdad teatral por la
cual
elespectador
identifica
al actor con el personaje que
interpreta y
ste ,
mediante
tcn icas
pertinentes,haceplau
sible su
actuacin .
Por
e l
contrario, la verdad
h is t r ica
es
la
del actor que elespectadorobserva y se
sabe
observado.
La verosimilitud oilusinde realidad,caracter s t i
ca de toda obra deficcin, estsiempre sujeta a convencio
nes o disposiciones culturales cuyaacep tacin haceposible
su existencia. La verosimil i tud se conecta con la simula
c i n
que afirma la verdad de algo inexistente y al presen
tarse
directamente produce una experiencia de realidad en
el pb l ico .Jonathan Culler advierte que algunos ter icos
en vez de decir que la obra se refiere a un mundo de fic
c i n ,pretenden que el acto de referencia es en s ficticio
(1993:
48). Lo mismo podradecirse del teatro, juego de
artificios donde todo
obedece
a las leyes de la ficcin.La
nica realidad con la que el teatro
puede
confrontarse, en
t r m i n o sde verdad, es con su propia realidadescn ica.En
estad i r ecc i n la teatralidad, como elemento
distintivodel
120
EICCION
teatro, porta la huella de la artificialidad, independiente
mente de lo real o
ficticio
de su referencia.
erspectiv sociolgic
E n
cuanto a la
relacin
teatro/vida el nuevo teatro del siglo
X X
p resen t
una
invers in
del
esquema
tradicionalfunda
do en las oposiciones falso/verdadero y
ficcin/realidad.
El
arte fue concebido como libertadtotaly
b s q u e d a
de las
esencias
ms
all
de las apariencias superficiales. La
vida
cotidiana y la realidad socialaparecencomo el lugar y el
tiempo de lo
in au tn t i co ,
de la falsedad, de las ficciones hi
pcr i tas ,
y el teatro como el lugar de la sinceridad y auten
ticidad: si
la
vidaes
espectcu lo
de las apariencias, el teatro
sirve para desenmascarar las mentiras cotidianas yhacer
resurgir la verdad del
ind iv iduo
o de la comunidad de la
que forma parte (De
Marin is ,
1998: 177). Esto fue perfec
tamente comprendido y desarrollado en suquehacerdra-
m a t r g i c o
por Rodolfo
U s ig l i
como consta en El
gesticulador.
Para
alcanzar la realidadau tn t ica ,oculta y
negada
en
la
vidareal, se manifestaron dos actitudes: a)
con t ig idad
co n lavidacotidiana, dcsalienar la mirada del
espectador
para ver los elementos que forman parte del paisaje
co t i
diano y admitirlos como
hechos
estt icos , y b) espa
cio-tiemposacro,
separado
de locotidiano,que en algunos
creadores
rep resen t
una especie de
re fu n d ac i n m g i
co-ritualdel teatro (178).
La imagen de un teat ro -espectcu lo reproductor o
reflejo m i m t i c o , fue cambiada por otra donde el
teatro
p ro d u c a lo real, lavida.
Para
distinguir entre teatralidad
social y esttica se han empleado categor as an tagn icas
como realidad/ficcin, autenticidad/falsedad, natural/arti
ficial, concreto/abstracto, simulado/efectivo. Si bien su
es-
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6/6
PARA
COMPRENDER
LA
T E A T R A L I D A D
tablecimiento ha servido para diferenciar t e r i c a m e n t
e
manifestaciones como
r i to
y teatro lo cierto es que en la
prct ica dif c i lmente
aparecen
completamente
separadas.
E l in te rsde lasociologay laa n t ropo log a por
hacer
evidente lapresenciade lo teatral en la vida cotidiana es
equivalente al in te rs de la teoray prcticadel teatro por
incorporar la vida confirmando elv n c u l o indisoluble se-
aladoal pr inc ip io
122
