Ella, es una mujer como cualquier otra. Trabaja, cuida a sus hijas, se encarga de su hogar…

Mientras estaba trabajando, entra su jefa a verificar las tareas del taller; y con una noticia que ella no esperaba recibir

Los rendimientos del taller, ya no eran tan buenos como siempre. Los despidos se hicieron masivos…

Discúlpame por la mala noticia. Vas a tener que firmar acá.Conocía esta

situación, pero no esperaba mi despido.

Debe regresar a su hogar, desempleada y con una profunda tristeza…

¿Cómo voy a hacer con mis hijas ahora?

En medio de la desesperación, decide buscar un nuevo rumbo para su vida y poder conseguir otro trabajo sustentable…

Buen día, yo vengo a ofrecerme como empleada.

Sin embargo, por más que busca un nuevo trabajo, no lo consigue…

Discúlpame, pero no necesitamos otra empleada.

La situación era difícil también para sus hijas. Cuando salían por las calles del pueblo, y pasaban frente a una vidriera, se lamentaban por no poder comprar algo

que querían…

Sin embargo, el apoyo entre la madre y sus hijas superaba todas las crisis…

No se preocupen, ya vamos a poder comprarlo..

¡Qué lindo reloj!

Cada vez la situación empeoraba más. El dinero no alcanzaba ni siquiera para cubrir las necesidades básicas…

Perdónenme hijas, ya se va a terminar todo esto.

Tampoco alcanzaba el dinero para pagar los impuestos. Todo era muy difícil…

¿Cómo hago para pagar esta boleta?

Tranquilízate mami, ya vas a poder.

Una tarde, mientras caminaba por las calles del pueblo tratando de conseguir trabajo, se encontró con una vieja amiga…

Hola, ¿cómo andas tanto tiempo? Vení a tomar algo conmigo.

¡Hola! Qué sorpresa encontrarte por acá.

Ambas se pusieron muy felices de encontrarse, después de un largo tiempo sin verse.

Durante la charla, se contaron las experiencias de cada una; trabajo, familia, etc.

Quédate tranquila que vas a salir adelante. Yo te voy a ayudar.

Gracias, pero se me complica mucho. Me siento fracasada. Ya no sé qué hacer.

Su amiga, la iba a ayudar de todas formas.

Quiero que lo aceptes y no sientas vergüenza.

¿Para mí? No puedo, es mucho dinero. ¿Cómo hago para devolvértelo?

Lo necesito, pero no sé si puedo aceptarlo.

Préstame el dinero y dime qué piensas después de ver esto.

Su amiga abolla el dinero y luego lo arroja al suelo…

¿Lo seguís queriendo?

Si, de todas formas sigue siendo dinero.

Mirándola sorprendida, no entiende el motivo por el que está pisando el dinero…

¿Lo vas a seguir queriendo todavía?

Claro, aún así no ha perdido el valor.

Le explica que representó su misma historia comparándola con dinero. Por más que ella esté pasando una mala situación, continúa teniendo su mismo

valor como persona, y eso no se pierde por sentirse fracasada…

Muchas gracias amiga, me hiciste sentir muy bien.

No te preocupes, tu valor es lo más importante.

Integrantes: Joaquina Solbes, Marianella Ponce, Antonella Pierdoménico, Eliana Manassero, Valeria Semprini y Camila Pagani.

Profesoras: Claudia Bardella y Adriana Gaiero

Materias: Lengua Castellana y Lengua Inglesa

Curso: 6º año naturales

¡GRACIAS POR SU ATENCIÓN!¡GRACIAS POR SU ATENCIÓN!