51
 Jordi Galcerán (n. Barcelona 1964) El método Grönholm (El mètode Grönholm) (2003) Traducción del catalán: RISARDO  para bibliote ca.d2g.com

Jordi Galceran - El método Grönholm.pdf

Embed Size (px)

Citation preview

  • Jordi Galcern (n. Barcelona 1964)

    El mtodo Grnholm (El mtode Grnholm)

    (2003)

    Traduccin del cataln: RISARDO

    para biblioteca.d2g.com

  • Jordi Galcern

    2

    Esta obra fue entregada a la editorial unas cuantas semanas antes de comenzar el proceso de ensayos.

    Es probable, por lo tanto, que la versin final del texto para el estreno

    presente alguna diferencia respecto del texto publicado, siempre a criterio del autor.

  • El mtodo Grnholm

    3

    Personajes

    Fernando

    Enrique

    Carlos

    Mercedes

  • Jordi Galcern

    4

    Sala de reuniones de una empresa. Mobiliario de calidad. Parqu. Paredes forradas de madera. Una mesa de juntas con ocho sillas. Sobre la mesa, botellas de agua y cuatro vasos. Un tapiz mironiano en la pared. Al fondo, una puerta doble. En un lateral, una puerta ms pequea. Un gran ventanal deja entrar la ltima luz de un atardecer. A travs del ventanal, el cielo. Intuimos que la sala se encuentra en un piso alto. En una de las sillas est sentado Fernando Aug, un hombre de unos treinta y ocho aos. Atractivo. Traje elegante y moderno. Delante de l, sobre la mesa, un maletn de ejecutivo. Despus de unos segundos, Fernando mira el reloj, saca del maletn un diario de informacin econmica y comienza a hojearlo. Suena un mvil. Fernando lo saca del bolsillo y lo conecta. FERNANDO (hablando por el mvil): S?... Hola, chico. Ya estoy aqu. Estoy esperando... (Por la puerta doble, entra Enrique Font. Fernando parece que no le ve.) Hostia, esta noche a cenar?... Y por qu quedas sin decirme nada? No, no vendr. No lo s, t mismo... Paso de lamer el trasero a estos tipos por cuatro duros. Si hoy me va bien esto, se pueden ir a tomar por el culo... Si no me va bien, me suicido... Que no, que no vendr.

    Fernando ve a Enrique. FERNANDO (hablando por el mvil): Te tengo que dejar.

    Fernando guarda el mvil. Enrique es un hombre regordete, que supera la cuarentena. Tambin viste traje, pero no tan moderno como Fernando. Maletn de ejecutivo en la mano, un maletn ms usado que el de Fernando.

    ENRIQUE: Buenas tardes. FERNANDO: Buenas tardes. ENRIQUE: Me han dicho que la entrevista es aqu... FERNANDO: S, a m tambin. ENRIQUE: Usted es de la empresa...? FERNANDO: No, no. Soy un candidato al... ENRIQUE: Ah, yo tambin. FERNANDO: Encantado. ENRIQUE: Igualmente.

  • El mtodo Grnholm

    5

    Se estrechan la mano. Enrique deja su maletn en la mesa. Hay unos segundos de silencio.

    ENRIQUE: Te han explicado alguna cosa? FERNANDO: No. Nada. ENRIQUE: Curioso, todo, no? FERNANDO: S. ENRIQUE: Tcnicas no convencionales. FERNANDO: Eso parece. ENRIQUE: Cuando me lo propusieron... No s. No es... habitual. Qu seremos, nosotros dos? FERNANDO: No lo s. Hay cuatro vasos. ENRIQUE: Quiz son para los que nos entrevistarn. FERNANDO: Quiz. ENRIQUE: Eso de la entrevista conjunta es un poco... Como mnimo, original. Y ms para un puesto de este nivel. Normalmente, es todo ms confidencial. FERNANDO: A m, eso... ENRIQUE: No, a m tambin, sin embargo, vaya... T y yo no nos conocemos. Pero sera fcil que nos encontrsemos algn conocido. FERNANDO: Y qu? ENRIQUE: Hombre, sera un poco violento.

    Enrique se sienta. Unos instantes de silencio. ENRIQUE: Has venido en coche? FERNANDO: S. ENRIQUE: Yo tambin. Menudo trfico, no? FERNANDO: Como cada da. ENRIQUE: Yo ya he hecho tres entrevistas. No s qu ms quieren saber de m. Y t, cuntas llevas? FERNANDO: Tres. ENRIQUE: Como yo. (Enrique saca una cajita de caramelos.) Un mentoln? FERNANDO: No, gracias. ENRIQUE: No tena muchas esperanzas de llegar hasta aqu. Vengo de una empresa pequea, y eso es... Bueno, en eso de los muebles y el bricolaje, es la segunda del mundo. FERNANDO: Una empresa es una empresa. ENRIQUE: S, pero yo no he trabajado nunca en una multinacional. Y t? FERNANDO: Yo he trabajado en muchos sitios. ENRIQUE: Y las condiciones son increbles. El sueldo es... Bueno, no s qu debes ganar t, pero yo casi doblara... Tena miedo de llegar tarde. Estaba en la Diagonal, atascado, y pensaba, ahora llegars tarde y quedars fatal. Estas cosas son importantes. A veces son los pequeos detalles los que hacen tomar una decisin. Yo he tenido que contratar gente y, al final, lo que me lleva a decidir son los pequeos detalles. La manera de vestir, cmo me han dado la mano... Y el coche. Siempre que puedo les acompao hasta su coche. Un coche dice mucho de su propietario. A veces te encuentras un tipo que parece muy aseado y tiene el coche hecho una mierda.

  • Jordi Galcern

    6

    FERNANDO: Tranquilo. No has llegado tarde.

    Por la puerta doble entran Mercedes Degs y Carlos Bueno. Treinta y pocos. Mercedes viste un elegante traje chaqueta. Carlos, ms informal, pantalones y americana sport, sin corbata. Pendiente en una oreja.

    CARLOS (a Mercedes): Pasa, pasa. MERCEDES: No, pasa t. CARLOS: Por favor. MERCEDES (sonriente): Por qu? Porque soy una mujer? CARLOS: S, porque eres una mujer. MERCEDES: De acuerdo, paso. Pero no porque sea una mujer. (A los otros.) Buenas tardes. FERNANDO y ENRIQUE: Buenas tardes. CARLOS: Buenas tardes. (Presentndose.) Carlos Bueno.

    Carlos ofrece la mano a Fernando. FERNANDO: Fernando Aug.

    Todos se estrechan la mano cuando se presentan. MERCEDES: Mercedes Degs. ENRIQUE: Enrique Font.

    Todos se dan la mano con todos. CARLOS: Son ustedes quines nos harn la entrevista? ENRIQUE: No, no, somos... entrevistados, tambin. CARLOS: Los dos? Nosotros tambin. MERCEDES: Y quin nos entrevista? ENRIQUE: No lo sabemos, an.

    Mercedes y Carlos dejan las cosas. MERCEDES: Tres hombres y una mujer. Como siempre. CARLOS: El veinticinco por ciento. Polticamente correcto. MERCEDES: Siempre tan gracioso, l. ENRIQUE: Os conocis? CARLOS: Estudiamos juntos. MERCEDES: Bueno, yo estudi un poco ms que l. CARLOS: "La matrculas", la llambamos. Lo tenemos crudo con ella. ENRIQUE: Te lo dije. Era lgico que alguien se conociera. CARLOS: Y qu hemos de hacer, ahora? FERNANDO: Esperar, supongo. MERCEDES: Nos harn le entrevista a los cuatro juntos? CARLOS: Eso me dijeron a m. Una entrevista conjunta con todos los candidatos.

  • El mtodo Grnholm

    7

    Pausa. ENRIQUE: Habis venido en coche? CARLOS: Yo s. ENRIQUE: Menudo trnsito, no? CARLOS: Horroroso. ENRIQUE: Suerte que tienen prquing, porque si no... CARLOS: S, aqu, est imposible aparcar. ENRIQUE: Tambin habis hecho tres entrevistas, vosotros? CARLOS: Yo s. MERCEDES: Yo tambin. ENRIQUE: Y esta es la cuarta. Ya he pasado algunas veces por esto, pero nunca me haban hecho cuatro entrevistas. No s qu ms quieren saber de m...

    En una de las paredes laterales se abre una pequea puerta. Se abre de arriba hacia abajo y se detiene al llegar a los cuarenta y cinco grados. Es como un buzn que, hasta ahora, haba permanecido disimulado en la pared. Mercedes es quien se encuentra ms prxima.

    MERCEDES: Eh. Se ha abierto eso.

    Un momento de silencio. CARLOS: Pues mira a ver qu hay.

    Mercedes lo mira. MERCEDES: Un sobre y un cronmetro. FERNANDO: Un cronmetro? MERCEDES: Digital. CARLOS: Pone algo, en el sobre? MERCEDES: No. Lo abro? FERNANDO: Y a m qu me explicas? No lo s.

    Mercedes abre el sobre. MERCEDES (leyendo): Buenos das y bienvenidos. Como ya les avanzamos, esta es la ltima fase del proceso de seleccin para acceder al cargo de director comercial de Dekia. Ustedes son los ltimos aspirantes. Sabemos que esta no es una prueba habitual. Seguimos el protocolo establecido por nuestra central de Suecia. Si en algn momento consideran que alguna de las propuestas que les haremos no es aceptable para ustedes, pueden abandonar el proceso. La puerta est abierta. Sin embargo, si salen de esta sala, sea por el motivo que sea, entenderemos que renuncian a continuar aspirando al cargo. La primera prueba es la siguiente. Les hemos dicho que son los ltimos aspirantes, pero no son los ltimos cuatro aspirantes. Solo hay tres autnticos aspirantes. Uno de ustedes es un miembro de nuestro departamento de seleccin de personal. Junto con el sobre han encontrado un cronmetro. Tienen diez minutos para averiguar quin de ustedes no es un

  • Jordi Galcern

    8

    autntico candidato. Por favor, pongan en funcionamiento el cronmetro. Es el botn de la derecha. Y ya est. CARLOS: Cojones. ENRIQUE: A ver, un momento... O sea, que uno de nosotros no es... CARLOS: Est muy claro. MERCEDES: Y debemos averiguar quin es. FERNANDO: Pensaba que esto sera una entrevista. MERCEDES: Yo tengo que hacer alguna cosa con el reloj. ENRIQUE: Hay un candidato que no es candidato. Y debemos descubrir quin es. CARLOS: Eso ya lo hemos entendido. ENRIQUE: Qu buena. FERNANDO: Buena? ENRIQUE: La prueba. Descubrir quin miente. Es buena, porque, evidentemente, cuando hemos entrado, todos pensbamos que ramos iguales, que ramos candidatos, y ahora resulta que no. MERCEDES: Qu, lo pongo en marcha?

    Mercedes aprieta el botn del cronmetro. MERCEDES: Diez minutos. ENRIQUE: A ver. Situmonos. Uno de nosotros no es... autntico.

    Pausa. Los cuatro se miran. MERCEDES: O sea, que el entrevistador es uno de vosotros. FERNANDO: Quiz eres t. MERCEDES: Yo? No, yo no lo soy. FERNANDO: Hay alguien que est fingiendo. Podemos ser cualquiera. ENRIQUE: Tenemos diez minutos. No es mucho tiempo. Creo que es ms rpido descartar que intentar descubrir directamente quin es el impostor. FERNANDO (irnico): El impostor. ENRIQUE: Hay una cosa que, de entrada, est clara. Vosotros dos os conocis.

    Mercedes y Carlos se miran. CARLOS: Pero haca tiempo que no nos veamos. ENRIQUE: Sin embargo si el candidato falso es uno de vosotros, lo podris averiguar ms fcil. Sabis cosas el uno del otro. Slo tenemos diez minutos. Os interesa descartar rpido, as tenis una persona menos de quin preocuparos. Qu decs? MERCEDES: Un momento. Djame pensar. CARLOS: Lo que s de Mercedes es de hace tiempo, tampoco es... MERCEDES: Espera, Carlos. Antes de decir nada, piensa. CARLOS: Qu quieres que piense? MERCEDES: Slo somos cuatro. CARLOS: S, y qu? MERCEDES: Nada. Piensa en lo que nos han pedido. Se trata de ver quin es capaz de descubrirlo y quin no es capaz. CARLOS: Ah, ya.

  • El mtodo Grnholm

    9

    Carlos mira a Fernando y Enrique.

    FERNANDO: No nos dirn nada. ENRIQUE: Por qu? FERNANDO: Porque si saben alguna cosa, la saben, y lo que no harn es decrnosla a nosotros, porque nos daran una ventaja que no tienen ningn necesidad de darnos. Es lo que yo hara. ENRIQUE: No lo entiendo. FERNANDO: Coo, que estamos compitiendo entre nosotros. No te darn ninguna informacin que no los interese dar. No, en realidad, la cosa tiene su qu. No se trata slo de averiguar quin est fingiendo, sino tambin de hacer que los dems se equivoquen, porque si los tres adivinamos quin es el falso ya me dirs t de qu sirve la prueba. Todo el mundo gana, y entonces qu? ENRIQUE: El papel dice que hemos de averiguar quin es el falso. No dice que tengamos que competir entre nosotros. FERNANDO: Hombre, eso est claro. No hace falta decirlo. Somos tres y slo hay un puesto. Estamos compitiendo. MERCEDES: No, l tiene razn. Bien pensado, lo que debemos hacer es colaborar. CARLOS: Colaborar? MERCEDES: S, creme. Yo no haba visto a Carlos desde la ltima cena de Esade... Hace dos o tres aos. CARLOS: Dos. MERCEDES: Y entonces trabajaba en un laboratorio farmacutico. CARLOS: Y an trabajo. MERCEDES: Es verdad. Encontr un compaero hace poco y me lo dijo. Por lo tanto, l no puede ser. CARLOS: Y t, Mercedes, estabas en una empresa de consulting. Pero no recuerdo cul era... MERCEDES: ICR. CARLOS: An trabajas all? MERCEDES: No, ahora estoy en un banco. Y no os dir cul, si no os importa.

    Unos segundos de silencio. Fernando y Enrique valoran las palabras de Mercedes y Carlos.

    FERNANDO: Lo ves? ENRIQUE: Qu? FERNANDO: Que eso no nos sirve de nada. Pueden estar mintiendo los dos. Si uno de ellos es el falso, ha mentido, y el otro, si lo sabe, no nos dir que miente, porque ya sabe quin es el falso y no tiene ninguna necesidad de revelarlo. ENRIQUE: Hostia, qu difcil. FERNANDO: Ellos ya han explicado su situacin laboral, les podemos creer o no. Ahora, explicamos nosotros la nuestra y as estaremos los cuatro igual. MERCEDES: Me parece que te equivocas. Esta prueba no es para descubrir quin es el ms listo, sino para evaluar nuestra capacidad de trabajar en equipo. Confiemos los unos en los otros. Trabajemos juntos para descubrir quin es el falso.

  • Jordi Galcern

    10

    FERNANDO: Muy bonito. Pero como el falso no dir que es falso, no podemos trabajar juntos. No nos podemos fiar los unos de los otros. CARLOS: A m me parece bien lo que has dicho... t. FERNANDO: Fernando. CARLOS: Eso, Fernando. Explicad de dnde vens vosotros dos. ENRIQUE: Yo soy director comercial de una empresa de alimentacin. FERNANDO: De cul? ENRIQUE: Ella no ha dicho en qu banco trabaja. FERNANDO: Fantstico. Pues yo tambin soy director comercial. De un laboratorio. Y por eso me extraa no conocerte (por Carlos). Yo trabajo en Disfarma, no tengo ningn problema en decirlo. En qu laboratorio trabajas t? CARLOS: Pues yo tampoco lo quiero decir. Y mucho menos ahora que s que t trabajas en el mismo sector. MERCEDES: Yo s dnde trabaja. Y dice la verdad. FERNANDO: Y cmo puedo saber que t dices la verdad? MERCEDES: Por qu debera mentir? FERNANDO: Lo acabo de decir, porque si t sabes que l trabaja aqu, mantendrs su historia del laboratorio, porque no te interesa darnos ventajas. MERCEDES: Si no quieres, no me creas, pero nos interesa actuar en equipo. Lo importante es que los tres autnticos colaboremos para encontrar... al impostor, como dice l. Mentir ira en contra ma. FERNANDO: Pues di en qu banco trabajas, no nos lo ocultes. Mentir va en contra tuya, no?

    Mercedes valora qu hacer. CARLOS: Yo trabajo en Rawental. Antes no lo he dicho porque... Porque no. Pero creo que es mejor que nos vayamos descartando, como dice l. FERNANDO: En Rawental? Desde cundo? CARLOS: Cinco aos. FERNANDO: Conoces a Flix Garrido? CARLOS: Nnnno, quin es? FERNANDO: Y a Laura... Laura Snchez? CARLOS: Conozco una Laura Vzquez. FERNANDO: S, tienes razn. Se llama Laura Vzquez. CARLOS: Quin es Flix Garrido? FERNANDO: Mi primo. Capitn de marina mercante. Cunto llevamos?

    Mercedes mira el cronmetro. MERCEDES: Cuatro, casi. FERNANDO: Pues vamos descartando. Para m,... Carlos es autntico. ENRIQUE: S, pero t puedes estar haciendo lo que has dicho antes que hara ella. Quiz sabes que miente y le sigues la corriente para que nosotros nos equivoquemos. FERNANDO: Si yo le sigo la corriente, ella tambin. CARLOS: Yo no miento y nadie me sigue ninguna corriente, pero t... Mira, lo siento, pero yo conozco al director comercial de Disfarma, y no te pareces en nada.

  • El mtodo Grnholm

    11

    FERNANDO: Y quin es el director comercial? CARLOS: Dmelo t. FERNANDO: Vctor Dunsberg. CARLOS: Pero t has dicho que eres... FERNANDO: Director comercial, pero de la delegacin de Gerona. CARLOS: No le conozco, al de Gerona. FERNANDO: Ya no lo puedes decir. ENRIQUE: Y ahora podis estar mintiendo los dos. FERNANDO: Y ella tambin? ENRIQUE: Si ella ha mentido, t tambin mentirs. FERNANDO: Si ella ha mentido, es su problema. Por qu debo mentir yo, si miente ella? ENRIQUE: Porque te unes a su mentira, para engaarme a m. MERCEDES: Yo no he dicho ningn mentira. Nadie se puede unir a una mentira que no he dicho. ENRIQUE: Quiz no, quiz no has dicho ninguna mentira, pero si l (Fernando) se ha dado cuenta de que l (Carlos) miente, creer que t tambin has mentido y se aadir a tu mentira aunque no sea mentira. FERNANDO: Oye.., te ests liando! ENRIQUE: No, seor. Si l (Carlos) no es el que ha dicho que es, y vosotros sabis que miente, me mentiris a m para mantener la mentira. FERNANDO: No pienses tanto, que ya se ve que no ests muy acostumbrado. ENRIQUE: Estoy intentando aclararme. FERNANDO: Ya te lo aclaro yo. Si yo mintiese, si yo fuese el impostor, ya sabra que l trabaja en un laboratorio, porque hemos hecho unas cuantas entrevistas para llegar hasta aqu. Hemos dado nuestro currculo. Si yo fuese de la empresa, lo sabra todo de l y me habra buscado una historia diferente, no que trabajo en un laboratorio, porque a la primera de cambio l podra descubrir que miento.

    Los otros tres se miran. ENRIQUE: Me lo puedes repetir? FERNANDO: Que Carlos me pregunte lo que quiera sobre el trabajo. CARLOS: No, no hace falta perder el tiempo. Yo le creo. Debis ser uno de vosotros dos. T, Mercedes, eso del banco, me mosquea. Alguien me lo habra comentado. MERCEDES: Es posible. Sin embargo, por la misma razn, si trabajase aqu, tambin te lo habra comentado alguien. CARLOS: Pues tienes razn MERCEDES: Pero ya que nos estamos sincerando... Trabajo en el Banco del Mediterrneo y soy directora de la seccin de mrqueting. CARLOS: Desde cundo? MERCEDES: Medio ao. CARLOS: Medio ao. Y ya quieres cambiar? MERCEDES: S, pasa algo? CARLOS: No, nada. FERNANDO (por Enrique): Faltas t. ENRIQUE: Ya lo tengo. Ya lo tengo... Estamos haciendo el... Nos estn tomando el pelo.

  • Jordi Galcern

    12

    FERNANDO: Ellos dos? ENRIQUE: No. Nos hemos credo que hay un candidato falso porque nos lo han dicho, pero lo que me parece es que los cuatro somos candidatos reales y que no hay ningn impostor. CARLOS: Entonces para qu sirve esta comedia. ENRIQUE: Pues para eso, para ver si somos capaces de darnos cuenta de que nos estn engaando. En los Estados Unidos, este tipo de pruebas son habituales en los procesos de seleccin. Te plantean problemas, enigmas, para ver si eres capaz de visualizar situaciones desde una ptica nueva. Aqu, de lo que se trata es de que todos creamos que el problema es que hay un candidato falso, que alguien de los que estamos aqu est engaando a los dems cuando, en realidad, los que nos han engaado, de entrada, son ellos. CARLOS: No. Y por una razn muy sencilla. No tiene ningn sentido que nosotros estemos aqu intentando demostrar nuestra perspicacia, si no hay nadie que lo valore. ENRIQUE: Cmo que no hay nadie? Nos estn valorando desde fuera. Seguro que hay micrfonos y nos estn oyendo. O cmaras, incluso. CARLOS: Cmaras? ENRIQUE: Se deja a los candidatos en una situacin en la que creen que estn solos y se observa cmo actan. CARLOS: Y dnde estn las cmaras? ENRIQUE: No lo s. Pueden estar escondidas en cualquier lugar. En las lmparas... Yo qu s. Hay mil maneras.

    Los cuatro miran la sala. CARLOS: Queris decir...? FERNANDO: Mira, lo que dices suena tan bien que no me lo creo. T eres el candidato falso. Eres el nico que no nos has dicho dnde trabajas. Y este conocimiento tan completo sobre este tipo de pruebas me demuestra que formas parte del equipo de seleccin. MERCEDES: S, estoy contigo. Adems, ha sacado este razonamiento cuando ya estaba acorralado. Cuando ha visto que nosotros tres ya estbamos descartados y l tena todos los nmeros, nos sale con la historia esta de que nos estn engaando. CARLOS: No lo s. A m, lo que ha dicho me cuadra. Que se explique un poco ms. FERNANDO: Primero que nos diga cul es la empresa de alimentacin donde trabaja. ENRIQUE: No os lo dir. CARLOS: Por qu? ENRIQUE: Porque no quiero. No lo encuentro necesario. CARLOS (a Mercedes): Tiempo? MERCEDES: Nos quedan dos minutos y... medio. CARLOS: No nos lo quiere decir porque est convencido de que tiene razn, y como antes deca Fernando de nosotros dos, no dir nada ms que nos pueda ayudar. Si nos dijese dnde trabaja y fuera creble, todos nos apuntaramos a su solucin, y quiere ganar l solo. Por lo tanto, yo creo que ha acertado. Los cuatro somos autnticos. FERNANDO: Mira, no. Adems, cuando ha entrado, antes de que llegaseis vosotros, estaba muy preocupado porque le sorprenda el sistema de seleccin. Sistemas no

  • El mtodo Grnholm

    13

    convencionales, me ha dicho. Y despus ha empezado a enrollarse sobre cmo haba elegido l a sus empleados... Me ha extraado su actitud desde el principio. ENRIQUE: Qu actitud? FERNANDO: Has dicho no s qu de que este sistema era extrao, de la confidencialidad... como si te pusieses en contra. Si fueses un candidato autntico haras como nosotros: una entrevista conjunta, ningn problema. Me entendis qu quiero decir? No es normal. ENRIQUE: Lo que no es normal es lo que dices t. FERNANDO: Eres t, compaero. Ahora lo tengo clarsimo. ENRIQUE: Podra daros un montn de razones para convenceros de que tengo razn, pero no lo har. Si os queris equivocar, all vosotros... FERNANDO: Nos podra dar un montn de razones, pero no nos las da. ENRIQUE: Porque no quiero. Y hasta he sido demasiado buena persona. Debera haber esperado a que pasasen los diez minutos, que la cagaseis, y despus dar la solucin. FERNANDO: No decas que tenamos que colaborar? MERCEDES: Nos queda... nada. Debemos decidirnos. CARLOS: Yo estoy con l. Los cuatro somos autnticos. ENRIQUE: Yo, ya lo sabis. FERNANDO: Yo digo que es l. ENRIQUE: Enrique Font, para servirle. FERNANDO: No creo ni que te llames as. Faltas t. MERCEDES: Yo no lo s. No estoy segura. CARLOS: No dudes tanto. No queda bien. Nos estn observando. MERCEDES: Pues venga, yo tambin digo que es Enrique.

    Pausa. FERNANDO: Y ahora, qu?

    Se abre la pequea puerta. CARLOS: Ahora lo sabremos. Mercedes, si quieres hacer los honores Y no porque seas una mujer

    Mercedes va a buscar lo que hay dentro del buzn. Saca un sobre y un cenicero.

    MERCEDES: Enrique Font. En el sobre est tu nombre.

    Enrique va a buscar el sobre y lo abre. Lo lee sin decir nada. FERNANDO: Lee en voz alta, hombre. ENRIQUE: No, no puedo.

    Enrique acaba de leer y vuelve a introducir el sobre en el buzn. El buzn se cierra.

  • Jordi Galcern

    14

    MERCEDES: Qu, quin tena razn? CARLOS: Qu pona? ENRIQUE: Quien quiera fumar, puede fumar.

    Mercedes pone el cenicero en medio de la mesa. Enrique se sienta. Se pone las manos en la cabeza, pensativo. Los otros le miran.

    FERNANDO: Quin ha ganado? ENRIQUE: No lo pona. MERCEDES: No pona nada? ENRIQUE: De eso, no. CARLOS: Por lo tanto, l y yo tenamos razn. Todos somos autnticos. Me parece que vosotros dos vais perdiendo. Qu hemos de hacer, ahora?

    Enrique an tiene las manos en la cabeza. Parece muy preocupado. ENRIQUE: No lo s. CARLOS: Qu pona en el papel? ENRIQUE: Me piden... No s qu debo hacer... MERCEDES: No lo sabes? No lo has entendido? ENRIQUE: S, s que lo he entendido. CARLOS: Y qu? ENRIQUE: Venga, intentar... intentar explicarlo bien. (Una pequea pausa.) Creo que en una empresa lo ms importante es obtener resultados y que eso est por encima de cualquier otra consideracin. CARLOS: Y? ENRIQUE: Pero tambin creo que en las grandes empresas, en las buenas empresas, tambin se ha de velar por lograr una dimensin humana, para conseguir que los empleados se sientan orgullosos de trabajar. Eso es lo que creo.

    Unos segundos de silencio. FERNANDO: Estoy completamente de acuerdo. Y, adems, cuando una empresa sabe tener en cuenta el bienestar de los empleados, eso se refleja en unos mejores resultados. ENRIQUE: Djame acabar, por favor. FERNANDO: Pensaba que ya habas acabado y que debamos hacer comentarios. ENRIQUE: No. A ver... Quiz no he comenzado bien. No, s que he comenzado bien. Eso deba quedar claro antes de que... Lo que os voy a explicar... La verdad es que no s... Bueno, es igual. El ao pasado me separ de mi mujer. No me lo esperaba. No me lo esperaba de ninguna manera. Y entr en una depresin. CARLOS: Qu dices? MERCEDES: Djalo. ENRIQUE: Mi mujer se dio cuenta... Bueno, el motivo es igual. Tengo dos hijos pequeos y ella se los llev. La separacin fue difcil. Como todas, supongo. Pero lleg a un punto en que me hund. No digo que que no sepa soportar la presin, pero sucedieron muchas cosas que no me esperaba. Me sent como... culpable. Era una sensacin... Tena la sensacin de que estropeaba todo lo que tocaba. Porque

  • El mtodo Grnholm

    15

    yo... mi mujer y yo ramos felices. Sinceramente. Ya s que todo el mundo dice lo mismo, pero en nuestro caso es verdad. Lo ramos. Ella misma me lo ha reconocido. El caso es que, de repente, me encontr solo en un piso de alquiler, sin... Yo tengo pocos amigos. No poda hablar con nadie y me fui cerrando. FERNANDO: Perdona, pero antes de que contines esta bonita historia, nos podras decir a qu viene este psicodrama?, por situarnos, ms que nada. ENRIQUE: Enseguida lo sabrs. Antes os quiero explicar otra cosa. Conocis el mundo de los chats? Internet y eso... Bien, comenc a meterme. Para hablar con alguien. Un da qued con una chica. Del chat, quiero decir. Nos vimos un da, para tomar un caf y muy bien... Era... Era muy guapa. Hablamos. Yo, haca tiempo que no poda hablar con nadie. Volvimos a quedar otro da y la llev a mi casa. Yo estaba... Tena ganas de... No es que tuviese ganas de... Lo que quiero decir es que estaba hecho polvo. Cuando fuimos al piso, sac una pistola y me amenaz. MERCEDES: Una pistola? ENRIQUE: S, y entonces vino un hombre. Me robaron todo lo que tena en casa. CARLOS: Nos ests tomando el pelo, verdad? FERNANDO: Hace rato. ENRIQUE: Despus me llevaron a un par de cajeros y sacaron todo lo que pudieron de las tarjetas. Es la primera vez que lo explico, porque quiero que entendis que yo creo que fue eso lo que me acab de rematar. A partir de ah perd el control. FERNANDO: Perdiste el control, de qu? De qu coo habla? CARLOS: Y yo qu s? ENRIQUE: Empec a encontrarme mal. El mdico me quera dar la baja, pero no quise cogerla. Estbamos a punto de abrir una fbrica en el extranjero y llevaba dos aos trabajando en la apertura del nuevo mercado en... en este pas extranjero. El caso es que quiz debera haber hecho caso del mdico porque mi rendimiento baj, lo reconozco, tom decisiones... deba tomar muchas decisiones, deba invertir el presupuesto que tena, todo el mundo tena prisa y la direccin confiaba en m... Me equivoqu. Me asoci con una empresa local y... bueno, la cosa no fue tan bien como estaba previsto. Crea que si me centraba en el trabajo, eso me ayudara a superar mis problemas personales, pero no. Fue peor. Total, que ahora parece bastante difcil enderezar la situacin y la empresa est pensando en... Yo, hasta ahora, en otros proyectos haba logrado muy buenos resultados y mi vala profesional est fuera de duda, por lo menos eso es el que dicen ellos, pero las cosas han ido como han ido y es natural que, ante esta situacin, mis jefes deban tomar una decisin sobre m, sobre mi futuro. Y ahora llego a lo que os interesa. Lo que me han pedido es que seis vosotros quienes tomis esta decisin, que pensis como si fueseis mi empresa. Debis decidir si contino en el proyecto del extranjero, si me asignis una nueva lnea de trabajo o si, sencillamente, prescinds de m, me despeds. CARLOS: Nosotros? ENRIQUE: S. MERCEDES: Eso es lo que te han pedido? ENRIQUE: S. CARLOS: Pero, es un caso terico o real? ENRIQUE: Qu diferencia hay? FERNANDO: Es que yo, amigo, an no tengo claro si t eres un candidato al puesto o eres de aqu o qu coo eres.

  • Jordi Galcern

    16

    MERCEDES: Muy bien. De acuerdo. Juguemos. Pero con lo que has explicado no tenemos suficientes elementos para tomar ninguna decisin. ENRIQUE: Preguntad. FERNANDO: No entiendo nada. Este sistema de seleccin es la polla. Con perdn. CARLOS: Comienzo. Por qu te dej tu mujer? ENRIQUE: No contestar a eso. CARLOS: No has dicho que preguntemos? ENRIQUE: S, pero slo contestar lo que quiera. CARLOS: Si empezamos as, malo. ENRIQUE: El motivo por el que me dej no es relevante. CARLOS: A ver... Somos nosotros los que debemos tomar la decisin, no? Por lo tanto somos nosotros quienes debemos determinar lo que es relevante y lo que no lo es. ENRIQUE: Ya os he explicado suficientes miserias de mi vida. FERNANDO: En eso tienes razn. La historia esta de la titi del chat da pena, chico. MERCEDES: Pongmonos en el papel. Juzguemos el caso desde un punto de vista profesional. CARLOS: Eso es lo que intento, y por eso pregunto lo que pregunto. Como directivo de tu empresa, que es lo que soy ahora, me parece que te debo hablar con claridad. Si no quieres contestar, no contestes, no te puedo obligar, pero si te interesa conservar tu puesto te aconsejo que seas mnimamente sincero, porque si no colaboras te vas a la calle de inmediato y me importa una mierda la indemnizacin que te tenga que dar. Te ha quedado claro? FERNANDO: Venga, juguemos. Pero de hecho, l tiene razn. No veo para qu nos servir saber por qu le dej su mujer. Quiz se fue con otro o estaba harta de vivir con un tipo tan inspido o se lig un negro... o lo que sea. Ya me dirs t de qu nos servir saberlo. CARLOS: A m s que me servir. Quiero conocer las causas de su situacin personal, porque estos conflictos, segn cmo evolucionan, tienen una traslacin directa al rendimiento laboral. FERNANDO: Que bien que hablas. Se nota que has estudiado en la privada. ENRIQUE: Mi mujer descubri que haba tenido una... aventura. FERNANDO: T? ENRIQUE: S. FERNANDO: Ahora s que no me creo nada. MERCEDES: Tanto da, si es verdad o no. Debemos trabajar con los elementos que l nos d. CARLOS: Con quin tuviste esa aventura? ENRIQUE: Con una comercial de la empresa. FERNANDO: Por m no es preciso que hablemos ms. Le ponemos de patitas en la calle y a tomar por el saco. MERCEDES: No es tan fcil. l es bueno. Hasta hace poco siempre ha trabajado bien. Es eso, no? ENRIQUE: Yo creo que s. MERCEDES: Si lo despedimos, quiz nos costar Dios y ayuda encontrar una persona con su perfil. No nos debemos precipitar. FERNANDO (irnico): Como usted quiera. No nos precipitamos. CARLOS: Y la aventura esa con la comercial, qu, se ha acabado o an dura?

  • El mtodo Grnholm

    17

    ENRIQUE: Se acab hace meses. CARLOS: Muy bien. Mejor. Y la separacin de tu mujer, la tienes superada o no la tienes superada? ENRIQUE: No lo s. Pienso mucho en ella, an. FERNANDO: Piensa mucho en ella... Escuchad, me sabe muy mal que el amigo se haya separado, sin embargo, sinceramente, para el caso que nos ocupa, me importa un rbano. Se li con una nia de la empresa, la mujer lo supo y le plant. Qu le vamos a hacer. Es la vida. Le cogi una depresin y comenz a hacer el idiota y a pasar del trabajo. Lo siento. Por m, el motivo por el que l pasa del trabajo me lo paso yo por el forro de los cojones. Lo que cuenta es que este desgraciado se ha quedado colgado y no seguiremos aqu perdiendo cuartos esperando que baje del rbol. Finiquito y a otra cosa. MERCEDES: Y si le damos unas vacaciones? FERNANDO: Vacaciones? Ahora que estamos abriendo mercado en... no s dnde? Este pamplinas la ha cagado hasta al fondo. Le puso cuernos a su mujer y ella le pill. Eso ya quiere decir que no es muy hbil. Nos ha desgraciado una inversin de cojones y encima le quieres dar vacaciones. Qu somos nosotros, Critas Diocesana? MERCEDES: Acepto que lo mejor, en estas circunstancias, es que su trabajo lo haga otro, pero una vez haya superado su depresin, lo podemos repescar. Es un ejecutivo valioso. Nos ha hecho ganar dinero, antes. Creo que merece una oportunidad. FERNANDO: Para m, ni oportunidades ni puetas. O funcionas o no funcionas. La vida es as. MERCEDES: Todos pasamos malos momentos, si nos echasen a la calle cada vez que tenemos una crisis personal, slo trabajaran las mquinas. FERNANDO: Habla por ti. Yo no he padecido ninguna crisis de estas. Y si tengo un mal da, en el trabajo ni se nota. Cuando llegas al despacho debes hacer como los payasos de circo, pintarte la cara que toque, de simptico o de hijo de puta, y tirar adelante. Quien no sabe hacer eso, no sirve. MERCEDES: Diriges un equipo de trabajo, t? FERNANDO: S, claro. MERCEDES: Te deben apreciar mucho. FERNANDO: Me la trae floja. Que aprecien a sus mujeres, sus hijos y sus amantes. A m, mientras cumplan los objetivos, si quieren, que me hagan vud por las noches. CARLOS: Escuchmoslo a l. A ver... Esa comercial, cmo era? ENRIQUE: Cmo era? CARLOS: S, qu tena, por qu te liaste con ella. ENRIQUE: Hombre... FERNANDO: Qu tena... Pues un culo y dos tetas, como todas las tas. Qu clase de preguntas son estas? CARLOS: Son mis preguntas. FERNANDO: Y por qu no le preguntas qu desodorante haca servir esa ta? Tambin debe tener una traslacin directa al rendimiento laboral. CARLOS: Lo que quiero saber es si an la tienes en la cabeza... T, cmo te ves? Ests bien? Te sientes recuperado? ENRIQUE: Un poco. CARLOS: En nuestro lugar, qu haras.

  • Jordi Galcern

    18

    ENRIQUE: No se trata de eso. CARLOS: S que se trata de eso. Si fuera yo quien hubiese explicado esta historia, qu decisin tomaras? ENRIQUE: Aqu cada uno tiene su papel. A m no me toca ese, ahora. MERCEDES: Sin embargo, por lo menos, lucha. Debemos decidir si te quedas o qu, y muestras una actitud de tanto se me jode todo que... Parece que tengas ganas de que te despidamos. Quieres quedarte en la empresa, o no? ENRIQUE: S. FERNANDO: Menudo entusiasmo... CARLOS: Mercedes tiene razn. Tendras... No s... Dinos que lo ests superando, que tu vida personal no volver a interferir en el trabajo... Yo qu s. Defindete. ENRIQUE: A ver... Os he explicado mi situacin con toda la sinceridad de la que he sido capaz. Ya me he defendido. A mi manera. FERNANDO: Pues para m tu manera es una mierda de manera. Sabes qu me gustara? Que esto no fuera un juego, que te pudiese despedir de verdad, por sinvergenza. Te aseguro que me sentira muy a gusto... Un momento. Esperad... Cuando hemos llegado, me ha dicho que l no haba trabajado nunca en una multinacional y ahora nos larga una historia de que la empresa donde trabaja estaba abriendo un nuevo mercado en el extranjero. Total, o miente ahora o menta antes o las dos veces. ENRIQUE: No he mentido. Nunca he trabajado en una multinacional. Mi empresa es la primera vez que abre un mercado en el extranjero. FERNANDO: S, hombre. Ahora arrglalo. Yo tena razn desde el principio. l es de aqu, de la empresa. ENRIQUE: Te aseguro que no. FERNANDO: No lo veis? Sin embargo, vaya, no tengo ningn problema en continuar el juego. Debemos decidir si despus de esta historia tan ejemplar que nos ha explicado, le despediramos. Pues, yo s. Le despedira. Y sin ningn remordimiento. Una cosa es el trabajo y otra los problemas que puedas tener en casa. Si lo mezclas, la has cagado. Y se acab. ENRIQUE: Antes me habis preguntado qu hara yo en un caso como el mo. La verdad es que no lo s, pero una vez hube de tomar una decisin parecida. La situacin no era exactamente igual, pero era un buen comercial que estaba pasando una depresin. Le desped. Le dije que cuando lo hubiese superado me viniese a ver, pero no volvi. Le llam al cabo de un tiempo pero haba cambiado de domicilio. No he sabido nada ms de l. FERNANDO: Por qu queras que volviera contigo, para volver a deprimirse? CARLOS: Oye, si piensas que es quien nos ha de seleccionar, te ests pasando un poco con l, no? FERNANDO: No, hombre, no, a esta gente les va la marcha. ENRIQUE: No sabes lo que te equivocas... MERCEDES: Una pregunta. Todos estos problemas que tenemos en este nuevo mercado, te ves con nimos de poderlos arreglar? ENRIQUE: Me parece que s. Debemos cortar las relaciones con nuestros socios, aunque nos cueste dinero y llevar directamente todo el proyecto. Al principio todos pensbamos que trabajar con gente de all, que conociese el mercado, era el sistema ideal, pero fue un error. Nuestro producto es bueno. Los batidos de... Lo que quiero decir es que casi no tenemos competencia. Hay que enviar un grupo de

  • El mtodo Grnholm

    19

    gente que trabaje sobre el terreno, y yo estoy dispuesto a trasladarme all y a coordinarlo el tiempo que haga falta. CARLOS: Y tus hijos? ENRIQUE: Los encontrar a faltar. Pero tambin pienso que, personalmente, me ir bien alejarme un tiempo de aqu. MERCEDES: Mira, a m me ha convencido. Que se quede y contine el trabajo. FERNANDO: Que se quede? MERCEDES: l es quien conoce mejor el proyecto. Adems, hay otra cosa, de cara al resto de los ejecutivos, daramos una psima imagen si despidisemos a alguien por motivos personales. Creo que es mejor darle apoyo. CARLOS: Venga, yo tambin, que se quede. FERNANDO: Y a eso le llamis tomar decisiones de manera profesional? No jodamos! CARLOS: Y siempre podemos enviar con l a alguien de confianza para que colabore. FERNANDO: Demasiado riesgo. Demasiadas complicaciones por un tipo que la ha cagado. MERCEDES: Es buena idea. Enviamos alguien con l, que se familiarice con el proyecto, y si vemos que la cosa no funciona, siempre estaremos a tiempo de hacerlo volver y ya tendremos all a alguien preparado. CARLOS: A l le damos una salida y nos cubrimos las espaldas. FERNANDO: Es un gasto intil... Yo... Yo le despedira, pero sois dos contra uno. Ganis. La democracia es eso, no? MERCEDES: Decidido. No te despedimos. ENRIQUE: Lo tenis claro? CARLOS: S.

    Enrique cierra los puos en seal de victoria. ENRIQUE: Ha sido ms fcil de lo que pensaba. Deba lograr que no me despidierais. La prueba era esta. Era para m. FERNANDO: Ser cabrn! CARLOS: La historia esta, eso de tu mujer y la separacin es verdad o no? ENRIQUE: S. CARLOS: Es lo que te ha pasado en la empresa esta de alimentacin donde trabajas? ENRIQUE: S. MERCEDES: Y ellos qu han hecho, te han despedido? ENRIQUE: Me han dado vacaciones. Y yo las estoy aprovechando. FERNANDO: Y eso de la mujer del chat, tambin te ha pasado de verdad? ENRIQUE: S y no. He exagerado un poco. Era una mujer que solo quera dinero, pero no me atrac ni nada. Slo lo he dicho por... Me ha parecido que servira para ablandaros un poco. Os lo digo de verdad, estoy alucinando con el sistema de seleccin que estamos siguiendo. Lo encuentro genial. Felicidades a quien se deban dar. FERNANDO (bajo): Adems de cabrn, pelota. ENRIQUE: Qu dices? FERNANDO: Nada, nada. CARLOS: Ahora se volver a abrir la puertecita, supongo. ENRIQUE: En una empresa americana hicieron una prueba muy curiosa. Reunieron los aspirantes en una sala, igual que a nosotros, esperando para pasar una entrevista y,

  • Jordi Galcern

    20

    de repente, empezaron a sonar las alarmas de incendio. Ellos lo filmaban todo y analizaban las reacciones de la gente. FERNANDO: Y qu esperaban que hiciese, la gente? Pues empezar a correr, como todos. ENRIQUE: A veces simplemente los dejan en una sala un buen rato y observan cmo interacta el grupo. Dicen que las personas que tienen cualidades de liderazgo las demuestran en cualquier situacin, incluso en una situacin donde no pasa nada especial. Son los que inician las conversaciones, los que se presentan a los dems... Estas cosas. FERNANDO: Por eso te hacas tanto el simptico cuando has llegado. Estabas demostrando tus capacidades de liderazgo? Lo has hecho muy bien. Deben haber quedado impresionados por tus comentarios sobre el trnsito. Yo, con todo el respeto, creo que estos sistemas... pero bueno, ya que estamos en eso... ENRIQUE: Eh, que te estn escuchando. FERNANDO: Mejor. A ver, har lo que me pidan, pero eso no quiere decir que me guste. Si son realmente buenos, valorarn mi sinceridad. Funcionan as. Os lo digo yo, los psiclogos estos son... Les va la caa, y los que trabajan para empresas, an ms. Encerrados en su despachito sin nada ms que joder que meterse en las vidas de los empleados. Hurgando, siempre hurgando. Y si uno tiene la desgracia de tener un mal da... porque el nio le ha suspendido las matemticas, o porque le han robado el coche, o porque le ha dejado la mujer o por lo que sea, comienzan a jorobarte, intentando ayudarte, intentando que no caigas en una depresin que podra afectar a tu rendimiento laboral y continan hurgando y hurgando hasta que logran que saques todo lo que llevabas dentro y cuando lo sacas, los muy hijos de puta te lo ponen delante de de las narices y ves que slo eres una mierda y entonces te coge la depresin de verdad y ellos contentos porque ya intuan que t estabas a punto de caer en una depresin. Es eso lo que hacen, no? ENRIQUE: Y yo qu s? Qu te pasa conmigo? FERNANDO: A m, nada. ENRIQUE: Debes haber tenido alguna mala experiencia con psiclogos. FERNANDO: Alguien ha tenido una buena? CARLOS: Ests nervioso, porque has perdido las dos pruebas. FERNANDO: No s quin ha perdido. Al final cogern a este y vosotros dos os quedaris con cara de idiota. ENRIQUE: A m? No dices que soy de la empresa, yo? FERNANDO: Mira, yo ya no digo nada ms.

    La pequea puerta se abre. MERCEDES: Eh.

    Enrique se acerca a mirar. ENRIQUE (sin dar crdito): No os lo vais a creer...

    Saca cuatro sombreros. Un sombrero de torero, uno de payaso, un sombrero de copa y una mitra de obispo.

  • El mtodo Grnholm

    21

    ENRIQUE (saca un sobre del buzn; lo lee): Pnganse un sombrero cada uno, despus abran el sobre. FERNANDO: Nos debemos poner estos sombreros? ENRIQUE (mostrando el sobre): A m no me mires. FERNANDO: Por favor... CARLOS: Pero, por qu? ENRIQUE: Eso es lo que debe explicar el sobre, pero primero nos los hemos de poner. MERCEDES: Cualquiera? ENRIQUE: Eso parece. FERNANDO: Surrealista. Lo encuentro surrealista. ENRIQUE: Bueno... No nos lo pensemos ms.

    Enrique coge el sombrero de copa y se lo pone. Mercedes coge el de payaso. Carlos, el de torero. A Fernando le queda el de obispo. Sin mucho entusiasmo, lo coge y se lo pone. Se miran, cada uno con su sombrero puesto.

    FERNANDO: Os pido un favor. Si algn da nos encontramos fuera de aqu, hagamos como si esto no hubiese pasado nunca. ENRIQUE: Leo. (Enrique abre el sobre y lee.) Ah, muy bueno. Yo ya he jugado a eso. FERNANDO: Venga, por favor ENRIQUE: Ustedes son los nicos ocupantes de un avin en llamas que est a punto de estrellarse. Un payaso, un torero, un obispo y un poltico. Slo tienen un paracadas. Deben defender delante de sus compaeros por qu su personaje es el que merece utilizar el paracadas y salvarse. Est muy bien. Yo jugu en una convencin. CARLOS: Parece uno de aquellos chistes de un francs, un alemn y un espaol... ENRIQUE: En aquella convencin haba una chica que haca dinmicas de grupo y jugamos a una cosa casi igual. Pero nosotros estbamos en un globo y los personajes no eran exactamente los mismos. Lo que debamos hacer era decidir a ver quin saltaba, porque el globo estaba perdiendo altura y no nos quedaba lastre para lanzar, y uno de los personajes deba saltar, y discutamos a ver quin era el menos importante. Fue muy divertido. Yo era... FERNANDO: Perdona que te corte. Hay una cosa en la mecnica que no entiendo. Si nosotros somos los nicos ocupantes del avin, lo que me gustara saber es quin estaba pilotando. Supongo que era el payaso, y por eso estamos a punto de jdernosla. MERCEDES (no le ha hecho gracia): Ja, ja. ENRIQUE: Lo que debemos hacer es discutir quin merece vivir. Quin es ms importante para el mundo. CARLOS: Pues yo, de torero, lo tengo fatal. FERNANDO: No quiero cortaros el rollo, pero recapacitemos un instante. Estamos optando a un cargo ejecutivo en una de las empresas ms grandes del mundo. Miraos, por favor. ENRIQUE: Qu pasa? FERNANDO: No, nada. No pasa nada. Debe ser problema mo. Continuemos. CARLOS: Qu hacemos, hablamos cada uno y despus discutimos? ENRIQUE: S, no?

  • Jordi Galcern

    22

    MERCEDES: Me dejis hacer una propuesta, antes? Entre nosotros hay un obispo. Un hombre de Dios. Un hombre que cree en la otra vida y que, adems, valora la caridad y solo piensa en hacer el bien... Yo propongo que l, voluntariamente, se sacrifique por los dems y renuncie a utilizar el paracadas. Me parece que sera una actitud muy cristiana. FERNANDO: T, de qu vas? Yo no me sacrifico por nadie. MERCEDES: Era una broma. FERNANDO: Una broma... Ah, claro, eres payaso... ENRIQUE: Quin empieza? CARLOS: Echmoslo a suertes. MERCEDES: Si queris empiezo yo. ENRIQUE: Vale. MERCEDES: No quiero menospreciar ninguno de vuestros oficios. El poltico trabaja para el pueblo, el obispo se cuida de la espiritualidad de la gente, el torero... Bueno, el torero... CARLOS: Soy un artista. MERCEDES: Bueno... Es igual. Lo que est claro es que yo, el payaso, cumplo una de las funciones ms nobles y tiles para la sociedad. Me dedico a hacer rer a la gente. FERNANDO: Si es por eso, el poltico tambin... MERCEDES: Pensad que cuando arranco una sonrisa de un nio le estoy proporcionando un momento de felicidad que slo yo puedo darle. Hay algo ms importante que la sonrisa de un nio? FERNANDO: Conmovedor. ENRIQUE: No te digo que no. No te digo que eso no sea importante, pero antes que de la sonrisa nos debemos preocupar por el bienestar de ese nio, para que pueda tener unas buenas escuelas donde educarse, unos buenos hospitales por si est enfermo. Nos debemos preocupar para que pueda tener un futuro. Los nios deben poder sonrer, es verdad, pero para poder hacerlo deben vivir en una sociedad que les proteja, que vele por su seguridad y por la de sus padres... FERNANDO: No te enrolles, que el avin est cayendo. ENRIQUE: Ya s que el prestigio de los polticos es muy bajo, hoy en da, pero sin nosotros, sin m, el payaso no podra hacer rer a los nios, el torero no podra torear y el obispo... El obispo tampoco tendra clientes, porque la gente slo se preocupa de la salvacin de sus almas cuando tiene la tripa llena. Por todo eso, creo que soy yo quien me debo salvar. Mi funcin es fundamental para nuestra sociedad. CARLOS: Ahora yo? Bien... Yo soy... torero. Vosotros podis pensar que un torero ms o un torero menos en este mundo, es igual. Pero no. De ninguna manera. Estis muy equivocados. Un torero es... Un torero tiene... Yo me juego la vida cada tarde. Vosotros no os habis puesto nunca delante de un toro. No sabis lo que es eso. Yo s. Los toreros tenemos... Cuando un torero est en la plaza, su madre est rezando, su mujer est rezando, toda su familia est rezando... Por qu rezan? Por un torero. Recordad aquellos versos de Garca Lorca... Aquellos versos que decan... (Cambiante.) Perdonad, pero es que lo mo es indefendible. No se me ocurre nada. Como soy el que soy, lo nico que puedo hacer es tener una actitud lo ms torera posible. O sea que coged vosotros el paracadas, que yo no tengo miedo de la muerte. FERNANDO: Ol. ENRIQUE: Venga, te toca a ti.

  • El mtodo Grnholm

    23

    FERNANDO: S, me toca a m.

    Fernando anda unos pasos, preparando su discurso. FERNANDO: Hermanos... Nos hemos reunido aqu... Lo que quiero deciros es que nunca habra pensado cuando vena hacia aqu, ilusionado, he de decirlo as, por la posibilidad de lograr un cargo de alto nivel en una empresa tan importante como Dekia, nunca habra pensado, digo, que acabara haciendo de obispo dentro de un avin en llamas. Pero bueno, la providencia tiene estas cosas y los designios del Seor son inescrutables...

    Comienza a sonar msica. Es la Danza hngara, nm. 5, de Brahms. FERNANDO: Y ahora qu? Hemos de ponernos a bailar?

    Suena un telfono mvil. Es el de Mercedes. MERCEDES: Perdonad, es que estaba esperando... FERNANDO: Tranquila... contesta..

    Mercedes lo conecta y va a un rincn de la sala. MERCEDES (al telfono): Laura? Di... Qu?... Hostia... FERNANDO: Espero que acabe la seora, no? ENRIQUE: Eso es... Mozart, verdad? CARLOS: Quieres decir? MERCEDES (al telfono): Cundo ha sido? ENRIQUE: S, a m me parece que es Mozart. CARLOS: No. ENRIQUE: Seguro? MERCEDES (al telfono): Y cmo se encuentra? Qu dice el mdico?... S, claro que vendr, pero estoy en medio de una reunin... CARLOS: No, Mozart seguro que no. ENRIQUE: Te gusta la msica? CARLOS: Estudi un poco de piano.

    Mercedes levanta la voz. Los otros no pueden evitar escucharla. MERCEDES (al telfono): No dices que no es grave? O es grave o no es grave, Laura, hostia... Para m grave quiere decir grave... Ya la hemos ingresado cincuenta veces. No vendr ahora de... A m no me digas eso. No tienes ningn derecho. Har lo que deba hacer. Siempre lo he hecho... Ni t ni nadie me ha de dar lecciones de cmo... Pues ya est... Que s, que vendr... Cuando pueda. Hala, adis.

    Mercedes desconecta el telfono y lo guarda. CARLOS: Algn problema? MERCEDES: No, nada. Os dijeron cunto durara, esto?

  • Jordi Galcern

    24

    ENRIQUE: No. MERCEDES: Continuemos. ENRIQUE: Venga, acaba. FERNANDO: Acabo. Escuchadme bien. Tal como estn las cosas en este avin, hay que tomar decisiones rpidas. Yo, ahora, con mucha tranquilidad, con mucha calma, coger el paracadas, me lo pondr y saltar del avin, y si alguno de vosotros intenta impedrmelo, lo nico que lograr es salir del avin antes que yo. Sin paracadas, naturalmente. ENRIQUE: Eh, lo debes hacer con seriedad. FERNANDO: Lo estoy haciendo muy seriamente. No intentis oponeros a la voluntad de la Iglesia. Tenemos ms fuerza de la que parece. Si no me obligis a utilizar la violencia y os quedis en el avin an tenis alguna posibilidad. Podis intentar apagar el fuego y que la payasa esta vuelva a tomar los mandos. Y bien, eso es todo, me parece que no hay nada ms que decir. Continuad discutiendo si es Mozart o no. Mozart... Yo me voy. Adis. CARLOS: Pero, qu dices... ENRIQUE: Eso es destrozar el juego. No puedes hacerlo. FERNANDO (alejando la voz): Lo siento. Ya no estoy. He saltaaaado. ENRIQUE: Has hecho trampa.

    Fernando se encoge de hombros. Mercedes se va al lado de la pequea puerta.

    ENRIQUE: Si no ests dispuesto a seguir las normas, no... Vaya, que as... CARLOS: Y ahora, qu? ENRIQUE: No lo s.

    Enrique se acerca a Mercedes. ENRIQUE (a Mercedes): De verdad no te pasa nada? No he podido evitar or... MERCEDES: Mi madre, que est delicada. Nada grave. ENRIQUE: Si es un caso de fuerza mayor, supongo que esta gente lo entender. MERCEDES: Que no es nada. Ya la hemos ingresado unas cuantas veces. Despus llamar.

    La msica deja de sonar. FERNANDO: Oh, se acab el baile.

    Se abre la pequea puerta. CARLOS: Eh.

    Carlos saca un sobre del buzn. CARLOS: No hay nada escrito fuera. Lo leo.

    Carlos abre el sobre y lo lee.

  • El mtodo Grnholm

    25

    CARLOS (enfadado): Qu cojones... Esto es... No tienen ningn derecho a... MERCEDES: Qu pasa? CARLOS: Una cosa es que hagamos juegos idiotas, otra meterse en... FERNANDO: Qu dice? Tenemos que hacer un nmero musical, ahora? CARLOS: Nada. No lo pienso leer. FERNANDO: Cmo que no lo piensas leer? CARLOS: Lo que dice aqu no os interesa. Ni a vosotros ni a ellos, que no s como cojones se han enterado. Hostia. ENRIQUE: Pero si no lo lees, qu hacemos? CARLOS: Aqu habla de m y de cosas concretas de mi vida que no os interesan para nada. Y, adems, que no tienen nada que ver con el trabajo. FERNANDO: No puedes hacer esto. CARLOS: Los que no lo pueden hacer son ellos. FERNANDO: Es su juego. Si no quieres continuar, te vas. Nos lo han dicho muy claro. CARLOS: Es que una cosa es que te hagan pruebas como las que hemos hecho, y otra que te destapen asuntos personales que son privados y que no le interesan a nadie para nada. ENRIQUE: A m tambin me han sacado cuestiones personales y lo he aceptado, si no lo aceptas, debes terminar. CARLOS: Pero es que es muy diferente, hostia. FERNANDO: T mismo. O lees y te quedas, o no lees y te vas.

    Carlos piensa un instante. FERNANDO: Supongo que ya nos podemos quitar estos sombreros.

    Todos se sacan los sombreros, excepto Carlos, que contina pensando. MERCEDES: Eh, Carlos. CARLOS: Qu? MERCEDES: El sombrero.

    Carlos se quita el sombrero. MERCEDES: Hala, venga, que no tenemos todo el da. CARLOS: Bien mirado, tampoco es nada de lo que me deba esconder, ni avergonzar, ni nada. De hecho, llegar un momento que ser evidente. Leo. Carlos Bueno ha iniciado un tratamiento hormonal que ha de desembocar en una operacin de cambio de sexo. Decidan si es el tipo de candidato conveniente para entrar a trabajar en nuestra empresa. Si ustedes llegan a la conclusin de que no es el perfil adecuado al cargo, Carlos Bueno deber abandonar el proceso de seleccin. Ya est.

    Carlos va hasta el buzn introduce el papel y lo cierra. MERCEDES: Carlos... CARLOS: Qu?

  • Jordi Galcern

    26

    MERCEDES: No, nada, que lo que acabas de leer es un poco... CARLOS: Sorprendente. MERCEDES: Pero no es... CARLOS: Pues mira, s, lo es. MERCEDES: Quieres cambiar de sexo? CARLOS: S.

    Mercedes no puede evitar rerse. MERCEDES: Perdona, pero es que... FERNANDO: Por favor. Esto es... No tengo palabras. Y mira que eso me pasa pocas veces, pero esta vez, lo debo admitir. No tengo palabras. CARLOS: Lo que no entiendo es cmo se ha enterado esta gente. No me lo explico. MERCEDES: Es coa, verdad? CARLOS: No. ENRIQUE: No? CARLOS: No. Hace unos meses, tom la decisin de llevarlo a cabo. Slo hace unas semanas que he comenzado el tratamiento hormonal. MERCEDES: Sin embargo, Carlos... FERNANDO: A ver si lo entiendo... O sea que de aqu a cuatro das te comenzarn a salir pechos, se te pondr la voz de canario y te acabarn cortando el pito. CARLOS: No exactamente as, pero bueno, s. Me operar y ser una mujer. Bueno, en realidad ya lo soy. FERNANDO: Pues lo disimulas de coa. CARLOS: Nada de cachondeo, eh. MERCEDES: Carlos... FERNANDO: Qu fuerte... La gente es la polla. Bueno, en tu caso no exactamente la polla... Es que tiene... No me extraa que ests buscando trabajo, porque en Rawental, que son del Opus hasta la mdula, te echarn antes de que te compres las primeras braguitas. CARLOS: Por eso estoy buscando trabajo. ENRIQUE: Y no lo habas dicho aqu? CARLOS: Por qu? FERNANDO: No tiene importancia, verdad? No afecta para nada al trabajo. Dekia contrata como director de mrqueting a un tipo que se llama Carlos y al cabo de unos meses Carlos se ha convertido en Carlota. Normal. Yo tampoco les he dicho que soy Hare-Krishna y de aqu a cuatro das, por sorpresa, recibir a los clientes cantando Hare, hareeeee... CARLOS: Y qu? FERNANDO: No, nada, ningn problema. ENRIQUE: Hombre... Que es un poco... Vaya. Un poco... No s. Que es... Coo. Es raro que te cagas. CARLOS: Tampoco pensaba esconderlo. Si me elegan, pensaba explicarlo. Pero no antes, quera que eso no afectase al proceso de seleccin. FERNANDO: Ya, y cuando te hubiesen contratado, t se lo explicabas y si te despedan los llevabas a magistratura. CARLOS: Qu dices...

  • El mtodo Grnholm

    27

    FERNANDO: Y tal como estn las cosas hoy en da, con tanta correccin poltica y tanta mandanga hasta habras sacado un montn de pasta. CARLOS: T has visto muchas pelculas. MERCEDES: Carlos. CARLOS: Qu? MERCEDES: Es que no me lo puedo creer. T, en la facultad, te habas enrollado con un montn de chicas. CARLOS: Porque no me haba aceptado tal como soy. FERNANDO: Toma frase. Chicos, vaya vidas de culebrn que tenis todos juntos. Este con la atracadora del chat y t, chutandote hormonas. MERCEDES: Carlos, por favor. No... No puede ser. Carlos, t y yo, en la facultad... CARLOS: S, y qu? MERCEDES: Hombre, que a m no me pareci que tuvieses problemas de identidad sexual, precisamente. Vaya, que... Ya sabes qu quiero decir. Fue muy... normal. Vaya, mejor que normal. Fue... CARLOS: Era una manera de intentar negar la evidencia. FERNANDO: Disculpad. Disculpad, pero con eso no puedo. No quiero ser desagradable, pero t... Cmo te debo llamar, Carlos o...? CARLOS: Me puedes llamar Carlos. FERNANDO: Pues Carlos. No puedes pensar seriamente en optar a un cargo como este y, al mismo tiempo, preparar oposiciones para travest. Es que es alucinante, la cosa. CARLOS: Un travest es otra cosa. FERNANDO: Lo que sea, pueta. Ahora parece que sea yo el que trabaja aqu, pero es que me pongo en su lugar y se me trastocan los esquemas. ENRIQUE: De hecho, lo que nos han pedido es que nos pongamos en su lugar. FERNANDO: Pues ya lo estoy. Y doy gracias por tener un servicio de personal lo suficientemente eficiente para haber descubierto todo eso antes de que pudiese hacer dao a la empresa. CARLOS: De qu manera puede hacer dao a nadie, eso? FERNANDO: Hombre, t mismo. CARLOS: En la oferta, en ningn momento han puesto limitaciones por razn de sexo. FERNANDO: Y qu queras que pusiesen en el anuncio? Se busca director de mrqueting. Travests potenciales abstenerse. CARLOS: No me vuelvas a llamar travest. FERNANDO: Y cmo tengo que llamarte? CARLOS: En todo caso, transexual, pero lo mejor es no poner etiquetas a las personas. FERNANDO: A ver, por m, como si te quieres transformar en pavo, pero lo que no puedes hacer es optar a una faena ocultando una cosa como esta. Si eres travest o transexual o transatlntico es cosa tuya, pero aqu ests optando a un cargo ejecutivo de alto nivel. Si no tienes claro si eres macho o hembra, quiere decir que en tu cerebro hay un lo de la hostia, y ahora que adems has empezado a chutarte hormonas en vena, tus pobres neuronas pueden acabar bailando una jota. Perdona, pero t debes estar ms sonado que el pito de un rbitro. CARLOS: Te crees que tienes mucha gracia. Te lo dir una vez y no ms. Como me vuelvas a faltar al respeto, te suelto una mano de hostias que te pondr los huevos por corbata y me importa una mierda la imagen que d.

  • Jordi Galcern

    28

    FERNANDO: Huy, qu femenina. CARLOS: Me cago en la hostia...

    Carlos se acerca a Fernando y le da un empujn. MERCEDES: Qu hacis?

    Mercedes se interpone entre ellos. CARLOS: Si te vuelves a pasar conmigo te hago una cara nueva. ENRIQUE: Tranquilos. FERNANDO: T tienes un problema. CARLOS: Y t tendrs ms de uno, si no paras. MERCEDES: Haced el favor. CARLOS: Hay cosas que no las paso. MERCEDES: Clmate. CARLOS: Ya est. No pasa nada. FERNANDO: Qu esperabas? Que me volvera? Yo no pego a las mujeres. MERCEDES: Basta ya. FERNANDO: De acuerdo. Vamos al grano. En el caso de ste habis decidido no despedirlo. Se puede llegar a entender, sobre todo por parte de Carlota. Pero ahora la cosa no tiene discusin posible. CARLOS: Ah, no? FERNANDO: No, y adems ya no es preciso ni tener en cuenta tus futuras sesiones de ciruga. Una persona que, a las primeras de cambio, reacciona utilizando la violencia de esta manera no tiene ningn futuro como ejecutivo. CARLOS: Quien no tiene ningn futuro es quien menosprecia a los dems y no los juzga por sus capacidades profesionales objetivas sino a travs de sus propios prejuicios. FERNANDO: De verdad, Carlota, dices unas frases que... Eso dnde os lo ensean, en la asociacin gay-lesbiana? MERCEDES: Quieres parar, por favor? FERNANDO: Callo. ENRIQUE: Bien, este caso es ms complicado que el mo. FERNANDO: Y eso que, a ti, con lo que te pas con la del chat, s que haba para cambiarse de sexo. Callo. ENRIQUE: El problema que nos han planteado slo se refiere al cambio de sexo. Debemos creer que nada tiene que ver con sus aptitudes profesionales. MERCEDES: Yo, qu quieres que te diga, se hace difcil hablar de eso. ENRIQUE: Pero lo debemos hacer. MERCEDES: Carlos es amigo mo. Le aprecio, pero... FERNANDO: Pero... MERCEDES: Es que me cuesta tanto creer que... ENRIQUE: Eso es igual. Trabajmoslo. Lo que debemos hacer es tener en cuenta todos los factores. Supongo que a causa de la operacin esta, cuando te la hagan, debers estar mucho tiempo de baja. CARLOS: No tanto.

  • El mtodo Grnholm

    29

    FERNANDO: El problema no es que est de baja. El problema es que cuando regrese de la baja y su secretaria le vea en traje de fallera mayor le puede dar un colapso y quedarse all de cuerpo presente. Entonces s que habr un problema de verdad. MERCEDES: No puedes hablar en serio de nada? FERNANDO: Cmo quieres que hable en serio de una cosa como esta? Si parece el argumento de una novela de la Brbara Cartland: Carlos, el director de mrqueting trabaja codo a codo con su subdirector, se admiran, forman un gran equipo... Y despus de las vacaciones el director vuelve transformado en Sofa Loren, el amor triunfa, se casan, y adoptan un nio colombiano. ENRIQUE: Tienes razn. FERNANDO: En qu? En el nio colombiano? ENRIQUE: Esto no hay quien se lo crea. Ahora lo veo. La prueba que t debes pasar es lograr que nos creamos que te quieres hacer esta operacin. Slo nos has ledo lo que has querido, y despus has vuelto a dejar el papel y el buzn se ha cerrado. Lo que pona era que nos debas hacer creer que te queras cambiar el sexo. CARLOS: Mira, t, lo que deberas hacer es dejar de dar tantas vueltas a las cosas. Aqu no es preciso ningn ptica nueva. Soy as. Quera ser discreto algunos meses ms, pero esta gente se ha enterado, qu le vamos a hacer. ENRIQUE: Cmo se pueden haber enterado de una cosa as si t no se lo has dicho? CARLOS: A m tambin me gustara saberlo. Supongo que han hablado con amigos mos y alguien se lo debe haber dicho. No hay mucha gente que lo sepa, pero la hay. ENRIQUE: S, ya. Vaya vaya con la prueba! Es buena. Si lograras hacernos tragar una historia como esta es que eras el mejor vendedor del mundo. CARLOS: Os digo que es verdad. MERCEDES: Debe ser eso. Cuando me toque a m, vete a saber qu me harn hacer... Os tendr que hacer creer que soy monja o... extraterrestre. CARLOS (saca su cartera, busca un papel): Mirad, aqu tengo las recetas de los medicamentos, y el telfono de mi mdico, llamadlo si queris. ENRIQUE: Puede estar preparado. CARLOS: Cmo quieres que est preparado. Yo no saba que me saldran con eso. Si llevo la receta es porque es ma. ENRIQUE: Quiz tu prueba ya vena preparada de antes. Quiz han hablado contigo, te han explicado el proceso y te han pedido que preparases una coartada. CARLOS: Oye, que estamos en un despacho de la Diagonal, no en una novela de Agatha Christie. FERNANDO: Lo que dice es verdad. Aunque parezca imposible, yo creo que dice la verdad. MERCEDES: Cmo lo sabes? FERNANDO: En el papel pona lo que nos ha ledo. Lo ha cogido l por casualidad. No estaba su nombre, en el sobre. Lo podamos haber cogido cualquiera de nosotros. Si hubiesen querido darle instrucciones solo para l, en el sobre habran puesto su nombre, como han hecho con Enrique. ENRIQUE: Si vena preparado de antes es igual. FERNANDO: Tienes razn, pero no lo creo. Es tan exagerado, que ha de ser verdad. ENRIQUE: Sin embargo, entonces, si decidimos que no es una persona adecuada, se ha de ir. Han dicho eso, no? FERNANDO: Exactamente. Echmoslo y uno menos!

  • Jordi Galcern

    30

    MERCEDES: Bueno... Son ellos quienes deben tomar esta decisin, no nosotros. FERNANDO: Est bien pensado. As no podrn decir que Dekia ha eliminado a nadie por motivos... discriminatorios o lo que sea. Lo habremos hecho nosotros. Ahora que, por m, ningn problema. MERCEDES: Yo, es que estoy convencida de que no es verdad, y si lo eliminamos, lo eliminaremos por una cosa que es mentira, o sea que no entiendo... CARLOS: Por qu no os lo queris creer? El cambio de sexo ya no es una cosa tan extraa como antes. Est cientficamente comprobado que hay hombres y mujeres atrapados en un cuerpo que no les corresponde. FERNANDO: Oye, hablas tan de manual que ya no s qu pensar. CARLOS: Djame en paz... Las personas que tenemos este problema, ahora, tenemos la posibilidad de solucionarlo. Y no es un camino fcil, os lo aseguro. Yo he tardado aos en decidirme. Me han hecho pruebas de todo tipo. Hace seis aos que me visita un psiquiatra y es l quien me ha recomendado la operacin. Si queris que os diga la verdad, este trabajo comienza a no ser tan importante para m. Ya encontrar otro. Prefiero que me creis y que aceptis la posibilidad de que una persona quiera reconducir su vida y que lo admitis como un hecho normal. T, Enrique, tienes hijos, verdad? Imagina que eso mismo le pasase a uno de tus hijos. Verdad que querras que pudiese vivir con normalidad? Siempre habr personas como l, que se reirn y que intentarn hacerte sentir ridculo, es inevitable; pero t, Mercedes, no eres as, me gustara que continuases siendo mi amiga. Para m, ahora, eso es lo ms importante. Yo seguir siendo la misma persona, slo que un poco ms feliz, espero. MERCEDES: Carlos, no me hagas esto. CARLOS: El qu? MERCEDES: Me ests haciendo sentir como una... No lo s. CARLOS: No pienses en la imagen que debes dar. Nos conocemos. Necesito que mis amigos me comprendan. MERCEDES: Es que no s qu decirte... CARLOS: Dime que seguirs siendo siempre amiga ma. MERCEDES: Bueno, t y yo tampoco somos tan amigos. Slo nos vemos de vez en cuando. CARLOS: Es igual. Aydame. MERCEDES: Qu quieres que haga, yo? CARLOS: No me elimines. T no, por favor. MERCEDES: Carlos... CARLOS: Ellos dos me echarn, seguro. Pero por lo menos t...

    Mercedes y Carlos se miran unos instantes. FERNANDO: Te puedo hacer una pregunta? CARLOS: Di. FERNANDO: Cuando hayas acabado de tocarle la fibra a ella, irs a por l, no? CARLOS: No. FERNANDO: Eres hbil. Hay que reconocer que eres hbil. CARLOS: Prefiero no volver a hablar contigo. (A Mercedes:) Qu dices? MERCEDES: Estoy pensando.

  • El mtodo Grnholm

    31

    FERNANDO: Pues yo s que quiero hablar contigo. Lo que ests haciendo es puro chantaje emocional. Como que la conoces y por lo visto, te la tiraste, ahora quieres ponerla tierna. MERCEDES: Oye, guapo, a m nadie me hace ninguna clase de chantaje. Har lo que me d la gana y si tuvimos una relacin, a ti no te importa para nada. FERNANDO: Usted perdone. MERCEDES: Carlos, si quieres que te sea sincera, contino sin poder creer lo del cambio de sexo, pero si fuera verdad y yo tuviese la responsabilidad de contratarte, no te seleccionara. CARLOS: Muy bien. Esperaba que t... Pero es normal. Lo entiendo. MERCEDES: Lo siento.

    Suena el mvil de Mercedes. MERCEDES: Perdona. (Mercedes ve quin es y conecta el mvil.) Qu pasa? CARLOS: A vosotros dos no es preciso que os pregunte. ENRIQUE: No tenemos alternativa. Nadie contratara a alguien... como t. Es demasiado arriesgado. MERCEDES (al mvil): Pero, cmo ha sido? FERNANDO: Pues yo s que te fichara, aunque slo fuera para ver si quedas guapa. Quiz eres la mujer de mi vida. CARLOS: Eres un capullo. MERCEDES (al mvil): Dios mo... S, s, ahora voy. Adis. (Cuelga.) FERNANDO: Parece que tu ex se tendr que ir. MERCEDES: Mi madre ha muerto. CARLOS: Qu dices? MERCEDES: Que ha muerto. ENRIQUE: Hostia... CARLOS: Qu ha pasado? MERCEDES: La tenan en la UVI... Un ataque de corazn. ENRIQUE: Lo siento. CARLOS: Pero si hace una rato te han llamado... MERCEDES: Se ve que mientras estbamos hablando ya haba entrado en crisis y mi hermana an no lo saba. CARLOS: Mercedes... MERCEDES: Bueno, me debo ir. CARLOS: Quieres que te acompae? Yo tambin me debo ir. MERCEDES: No es necesario. Tengo el coche aqu... Mierda. Debera haber ido cuando me ha llamado. CARLOS: Tampoco hace tanto... No habras llegado a tiempo. MERCEDES: Pero no he ido. Me he quedado aqu. Mierda. CARLOS: Quiz es mejor que no conduzcas. A m no me importa. MERCEDES: Gracias.

    Mercedes y Carlos recogen sus cosas. FERNANDO: Me sabe mal. MERCEDES: A ti?

  • Jordi Galcern

    32

    FERNANDO: S, a m. MERCEDES: T, lo nico que piensas es... Mira, dos menos. FERNANDO: Soy un poco malparido, pero no tanto. ENRIQUE: Estoy seguro de que entendern que te debes ir. FERNANDO: Al principio han dicho que quien se marchara, fuera por lo que fuera, quedaba eliminado. CARLOS: Como puedes ser tan... FERNANDO: Es lo que nos han dicho. ENRIQUE: En todo caso, no eres t quin lo ha de decidir. FERNANDO: No, pero lo han dicho. MERCEDES: Espero que te elijan. Yo lo hara. Hijos de puta como t no se encuentran cada da. FERNANDO: Eh, que yo no he matado a tu madre.

    Mercedes se lo queda mirando, enfurecida. FERNANDO: Qu pasa? Es verdad. No es culpa ma.

    Mercedes mira a Fernando. Un largo rato. Carlos se acerca a ella. CARLOS: Mercedes...

    Mercedes contina inmvil, mirando a Fernando. CARLOS: Vamos. MERCEDES: Me quedo. CARLOS: Qu? MERCEDES: Que me quedo. CARLOS: Mercedes... MERCEDES: Est muerta. No viene de media hora. CARLOS: Cmo puedes decir una cosa as? MERCEDES: No puedo irme. CARLOS: Pero... MERCEDES: Tengo mis motivos. Es cosa ma. CARLOS: No, ya s que es cosa tuya, pero... MERCEDES: Esto debe estar a punto de acabar. CARLOS: O no. MERCEDES: Si veo que se alarga, ya me marchar. CARLOS: No entiendo nada. MERCEDES: Es mi problema, de acuerdo? FERNANDO: Se nota que entre tu madre y t haba cario. MERCEDES: Di lo que quieras. A m no me pondrs nerviosa. CARLOS: Esto es increble. FERNANDO: Lo que est claro es que t s que debes largarte. CARLOS: Mercedes, vamos. No seas tonta. No merece la pena. MERCEDES: Por favor.

    Carlos los mira.

  • El mtodo Grnholm

    33

    CARLOS: Estis todos locos. Y yo no s como he aguantado tanto rato esta mierda de seleccin. Es vergonzoso que nos hagan hacer... Si tuvisemos un poco de dignidad, ya hace rato que deberamos haberlos enviado a tomar por el saco. Todos. FERNANDO: Anda, ve a hormonarte. CARLOS: Si slo os tienen a vosotros tres para elegir, que no le pase nada, a esta empresa. FERNANDO: Adis. CARLOS: Adis.

    Carlos abre la puerta y se va. Mercedes saca un paquete de cigarrillos y enciende uno. Coge el cenicero y se lo acerca.

    ENRIQUE: Perdona, no me quiero meter, pero... MERCEDES: Pues no te metas. FERNANDO: La chica sabe lo que quiere. MERCEDES: Mi madre hara lo mismo. FERNANDO: Cojones, qu familia. MERCEDES: Antes es cuando la he cagado. Antes, cuando me ha llamado la primera vez, debera haber ido. Ahora ya es tarde.

    Mercedes va hasta el buzn y golpea sobre l como si llamara. MERCEDES: Venga chicos, que es para hoy, a qu ms debemos jugar? ENRIQUE: Te lo repito. Es verdad que, al principio, nos han dicho que quien saliese de la sala, fuera por lo que fuera, quedaba eliminado del proceso, pero era una norma que no poda contemplar un hecho como este. Estoy seguro de que el departamento de personal entender perfectamente que te vayas y no lo tendr en cuenta a la hora de tomar una decisin.

    Fernando y Mercedes se miran. FERNANDO: Yo tena razn. Eres t. ENRIQUE: No, no soy yo. No tengo nada que ver con esta empresa, pero es lgico. Es un caso... Vaya, ms grave no puede ser. MERCEDES: Trabajas aqu? ENRIQUE: No. FERNANDO: Eres el nico que no has dicho en qu empresa trabajabas, y esta manera de hablar, eso que le has dicho... El departamento de personal entender perfectamente... ENRIQUE: Es que estoy convencido. Esta gente nos ha hecho pruebas extraas, pero tampoco deben ser unos monstruos. Adems, no pueden esperar que Mercedes muestre una actitud normal, evaluable, teniendo en cuenta lo que le acaba de pasar. MERCEDES: Para m, conseguir este trabajo es muy importante. Mi madre no resucitar porque yo ahora corra hacia el hospital. Nos habis puesto unas normas y pienso cumplirlas hasta... ENRIQUE: Eh, yo no he puesto ninguna norma. Soy un candidato como vosotros.

  • Jordi Galcern

    34

    FERNANDO: Y dale. Insiste... Muy bien. Si este es el juego, jugaremos. Pero que conste que yo te he clichado desde el principio. MERCEDES: Tardarn mucho en pasarnos otro papelito? ENRIQUE: Y yo qu s? MERCEDES: Porque me parece que resulta evidente que el hecho de quedarme demuestra el inters que tengo por el trabajo. Pero si me quedo es por algo. Si el trabajo depende de estos juegos, juguemos, pero rpido.

    La pequea puerta se abre. FERNANDO: Mira, te han hecho caso. MERCEDES: Gracias.

    Mercedes va hacia el buzn. Enrique la detiene. ENRIQUE: Espera.

    Enrique va hasta el buzn y lo vuelve a cerrar sin coger el sobre. ENRIQUE: No es preciso. Tenis razn. Mi nombre es Esteban Ripoll. Soy psiclogo del departamento de personal de Dekia. FERNANDO: Lo saba. ENRIQUE: Quedaban un par de pruebas ms, pero creo que, en vista de las circunstancias, podemos dejarlo. MERCEDES: Gracias. FERNANDO: Desde el principio. Que conste. Ahora, tu interpretacin, magnfica, eres un actorazo. Espero que no te hayas molestado por nada de lo que te he dicho. ENRIQUE: Carlos Bueno est fuera del proceso. Solo quedis vosotros dos. MERCEDES: Y ahora qu haris, cmo decidiris? ENRIQUE: En base a lo que hemos visto hasta ahora. MERCEDES: Oye, si queris hacer ms pruebas, por m ningn problema. FERNANDO: S, t tranquila. Ahora es cosa de la funeraria. MERCEDES (a Enrique): Lo digo en serio. ENRIQUE: Bueno... Podemos hacer una ltima prueba. La que estaba prevista. MERCEDES: Durar mucho? ENRIQUE: Depende de vosotros. MERCEDES: Pues, venga. Hagmosla. FERNANDO: Perdona, te puedo preguntar una cosa? ENRIQUE: Cuando acabemos, si queris, os explicar las bases de todo el procedimiento, pero antes debis hacer la ltima prueba. De todas formas, Mercedes, te repito lo que te he dicho antes. Entiendo perfectamente que te debas ir. Sois los dos ltimos candidatos. Os podemos convocar otro da. FERNANDO: Yo no tengo ningn problema en volver otro da, pero es ella la que ha querido quedarse. MERCEDES: Prefiero acabar. ENRIQUE: Seguro? MERCEDES: S. ENRIQUE: Como quieras. La ltima prueba consiste en lo siguiente. Es un juego.

  • El mtodo Grnholm

    35

    Lanza una mirada al techo, un gesto y la pequea puerta se abre. Saca dos sobres.

    ENRIQUE: Cada uno de vosotros tenis un objetivo oculto. Debis lograr cumplirlo. Quien lo logre antes se queda, el otro tendr que abandonar. Os dar a cada uno, uno de estos sobres. En su interior hay una tarjeta donde se detalla lo que debis lograr del otro. Lo leis, volvis a introducir la tarjeta en el sobre y lo dejis sobre la mesa. Cuando uno de vosotros logre el objetivo, lo demostrar al otro ensendole la tarjeta, y el otro abandonar la sala. Esta es una manera de acabar la prueba. Hay otra. Si uno de vosotros adivina cul es el objetivo del contrario antes de que lo logre, puede decirlo. Si lo acierta, tambin ha ganado. Est claro? (Los dos asienten.) Yo saldr y os dejar solos. Fernando, tu sobre es el nmero uno. Mercedes, el nmero dos. (Les da los sobres.) Leed la tarjeta. (Lo hacen.) FERNANDO: Cojones. Eso es... ENRIQUE: Si no quieres hacerlo, puedes renunciar. FERNANDO: No, no. Pero es... Supongo que ella tambin lo tiene igual de complicado. ENRIQUE: No puedo decir nada. Volvedla a guardar. Dejad el sobre en la mesa. FERNANDO: A ver, que no me equivoque. Si logro lo que pone aqu, gano, pero si ella lo adivina antes, pierdo. ENRIQUE: Exacto. Quien antes logre el objetivo o adivine las intenciones del otro se queda. El otro se tendr que ir. MERCEDES: Y si yo s lo que l quiere lograr, y entonces miro el sobre y no es aquello? ENRIQUE: Fuera. Primero lo debes decir, despus miras el sobre, si no lo aciertas te has de marchar. MERCEDES: De acuerdo.

    Dejan los sobres en la mesa. ENRIQUE: Suerte.

    Enrique abandona la sala. FERNANDO: Casi nada, eh? MERCEDES: S. FERNANDO: Yo, el mo, es... Bueno, si el tuyo es igual de difcil nos podemos pasar aqu toda la noche. MERCEDES: Yo no tengo toda la noche. FERNANDO: No, claro. (Bajando la voz.) De verdad, estos juegos son... (Con el dedo ndice hace el signo de locura.) MERCEDES: Pero bien que juegas. FERNANDO: Con lo que paga esta gente, si me lo piden, les bailo sobre la mesa el himno de Suecia. Ahora, una cosa es eso, y la otra es lo tuyo. MERCEDES: Qu? FERNANDO: Pues que no entiendo cmo, con eso de tu madre, continas aqu como si tal cosa. MERCEDES: Contino, pero no como si tal cosa. T qu habras hecho?

  • Jordi Galcern

    36

    FERNANDO: No lo s. No me ha pasado a m, pero... Me gustara ver cmo explicas a tu familia que estabas aqu jugando al objetivo oculto y que por eso no has podido ir antes al hospital. MERCEDES: A mi familia no le he de explicar nada. FERNANDO: Bueno, bueno... No es cosa ma. MERCEDES: Exactamente. FERNANDO: Pues vamos al grano, no te parece? Porque la cosa me parece que ser larga. MERCEDES: Qu cosa? FERNANDO: Este juego. Hemos de lograr que el otro haga una cosa pero no podemos ir directos, debemos dar treinta vueltas, porque si nos engancha, cagada. Est bien pensado. En el fondo, esto son tcnicas de venta. MERCEDES: No veo la relacin. FERNANDO: Vender es eso. Yo empec con excursiones de abuelos. Los meta en un autocar con la excusa de que iban a ver el castillo de no s qu, pero el objetivo autntico era venderles de todo. Les llenbamos la tripa de vino de garrafa, y cuando los tenamos bien trompillas, les encerrbamos en una sala y hasta que no compraban lo que tenamos previsto de all no sala ni Dios. Hostia, cmo llegamos a rernos... Un da colocamos doce rebobinadores de cintas de vdeo a un grupo que eran slo quince abuelos. Doce. Y te juro que ninguno de los que las compraron tena vdeo. MERCEDES: Ests casado? FERNANDO: Por qu me lo preguntas? MERCEDES: Por saberlo. FERNANDO: No, no estoy casado. MERCEDES: Por qu no? FERNANDO: Vocacin. Y t, ests casada? MERCEDES: No, tampoco. Pero he vivido en pareja. FERNANDO: Ah, muy bien. Me alegro. MERCEDES: Hijos? FERNANDO: No, que yo sepa. MERCEDES: Qu quiere decir no, que yo sepa? FERNANDO: Tienes razn. Es una respuesta idiota. Como si nosotros no lo debisemos saber, si tenemos hijos o no. Yo siempre he ido con mucho cuidado, pero si alguna vez hubiese dejado preada a alguna, se lo habra callado? Y una mierda. Me habra llamado con el predctor an caliente. No, no tengo hijos. MERCEDES: Te gusta la msica? FERNANDO: No, no me gusta. Y que conste que te estoy dejando llevar el peso de la conversacin porque quiero. No te creas que controlas nada. MERCEDES: Qu es lo que te gusta? FERNANDO: Mi trabajo. MERCEDES: Tienes amigos? FERNANDO: Claro que tengo amigos. MERCEDES: De dnde son? FERNANDO: Pues... De donde son todos los amigos. De aqu y de all. MERCEDES: Pero son amigos de verdad? FERNANDO: No, son muecos hinchables.

  • El mtodo Grnholm

    37

    Mercedes enciende otro cigarrillo. MERCEDES: Fumas? FERNANDO: No. MERCEDES: Quieres que te diga lo que pienso, de todo esto? Que no creo que nos elijan. Ni a ti ni a m. FERNANDO: Por qu? MERCEDES: Intuicin. FERNANDO: Y a quin quieres que elijan, a tu amiga de Esade? MERCEDES: Tengo la sensacin de que estn jugando con nosotros. FERNANDO: Mujer, eso est claro desde hace rato. Pero estos psiclogos son as. Aunque no nos han hecho jugar a las sillas musicales o a imitar ruidos de animales... MERCEDES: Yo tengo una especie de sexto sentido. Siempre lo he tenido. Cuando me quieren engaar me salta una alarma, y aqu hace rato que est sonando. FERNANDO: Ahora vas al grano, eh? Qu quieres, hacerme creer que todo esto es una engaifa? Es eso lo que debes lograr? No, si fuera eso no habras ido tan directa. Me ests probando... Ya te lo he dicho. Yo s que tengo el culo pelado de engaar a la gente, me conozco todos los trucos. MERCEDES: Piensa lo que quieras. Creo que no nos darn el trabajo, pero tambin hay alguna cosa que me hace quedar. Curiosidad, supongo. FERNANDO: Pues ha de ser una curiosidad de la hostia. Porque se te ha muerto tu madre y ests aqu de charla. T eres de esas que sufren por el hambre en el mundo y que da dinero a Mdicos Sin Fronteras, pero se muere tu madre y te sabe igual de mal que si se te hubiese pasado el arroz. MERCEDES: Y t eres un mierda que te piensas que puedes decir a la gente lo que te pase por los cojones. Carlos antes no te ha soltado la hostia que te mereces, vigila que no te la suelte yo. FERNANDO: Perdona, no te ofendas. Si yo admiro tu actitud. Tu madre est muerta, a eso ya no le puedes hacer nada, pero aqu tienes una oportunidad para conseguir un trabajo de narices y luchas para gnartela. No te retirars a ltima hora por veinte minutitos de nada. Yo admiro las personas prcticas y t lo eres. Me caes bien. De verdad. Se ve que eres una mujer que sabe lo que quiere. Mira, te lo confieso. Si me hubiese pasado lo mismo que te ha pasado a ti, me habra gustado reaccionar de la misma forma. Cuando te gane me sabr mal y todo. Nos podran coger a los dos. Haramos un buen equipo, no te parece? MERCEDES: Has querido alguna vez a alguien? FERNANDO: Coo, menudos cambios que haces. MERCEDES: Si no quieres, no contestes. FERNANDO: No, ningn problema. Una mujer, quieres decir? MERCEDES: S, una mujer. FERNANDO: Pues... creo que no. Ahora, te dir una cosa pero no s si te servir. Una vez ped a una mujer que se casara conmigo. MERCEDES: Y te dijo que no. FERNANDO: Me dijo que s. Iba sobre seguro. Si no, no se lo habra pedido. MERCEDES: Y despus la dejaste, eh? FERNANDO: La semana siguiente. MERCEDES: No es cierto. FERNANDO: Ah, no?

  • Jordi Galcern

    38

    MERCEDES: No. Te he dicho que tengo un sexto sentido. FERNANDO: Pues nena, si los otros cinco funcionan como este, hztelo mirar. MERCEDES: Por qu te dej? FERNANDO: Que la dej yo... Es igual. Estoy intentando averiguar a dnde quieres ir a parar con todas estas preguntitas, pero me parece que an no has empezado. Ests lanzando fuegos artificiales. Lo enfocas hacia un lado que nada tiene que ver para, despus, cuando me tengas liado, atacar por sorpresa, pero no te saldrs con la tuya, guapa. Llevo demasiado rato aqu dentro como para dejarme pillar. O sea, que si quieres continuar perdiendo el tiempo as, adelante. Tiempo tengo mucho ms que t. Si continas con esta estrategia incluso llegars tarde al entierro. MERCEDES: Ya te lo he dicho antes. No me hars perder los nervios con tus comentarios idiotas. Estoy de vuelta, de los cnicos. FERNANDO: No soy un cnico. Si incluso estoy empezando a apreciarte. MERCEDES: Qu, ya tienes alguna idea de cul es mi objetivo? FERNANDO: No, pero cuando la tenga sers la primera en saberlo. MERCEDES: Ests demasiado seguro de ti mismo. Nadie es as. Estoy convencida de que es una pose. Una manera de defenderte. FERNANDO: Perdona que sea yo quien cambie de tema, ahora. No te pienses que no me gusta hablar de m. Es uno de mis temas preferidos. Sin embargo, te lo tengo que decir, sufro por ti. Te estn esperando en el hospital... Me parece que sera mejor que lo dejases. No te saldrs del apuro, conmigo. MERCEDES: Y t, conmigo, s? FERNANDO: Pues seguramente. Aunque sea por agotamiento, lo conseguir. Recapacita un poco sobre la situacin en que te encuentras. Tu madre acaba de morir y t ests aqu, intentando lograr que un tipo que no conoces de nada, haga vete a saber qu. Es una cosa completamente absurda. El trabajo es un caramelo, eso es indiscutible, pero... quieres decir que merece lo que ests haciendo? Si te vas ahora no tendrs que dar ningn explicacin. Llegars un cuarto de hora ms tarde de lo que habras tardado si te hubieses ido cuando te han llamado. Puedes dar cualquiera excusa. Estoy intentando ser sincero contigo. Si tu objetivo es parecido al mo, y supongo que lo debe ser, es imposible que tengas xito. Si te vas al hospital, te sentirs mucho mejor contigo misma y el resultado ser idntico, porque no me podrs ganar por mucho que te empees. MERCEDES: No puede ser. FERNANDO: Qu? MERCEDES: No puede ser tan fcil. O s. T dices que me ganars, aunque sea por agotamiento... E intentas convencerme... Podra ser que tu objetivo fuera... No estoy afirmando nada, an. Estoy pensando en voz alta. Por eso, en todo este rato, realmente no has intentado nada, porque lo nico que debes hacer es esperar... Si tu objetivo es que yo me vaya voluntariamente... No lo estoy diciendo, an, slo... FERNANDO: Ests pensando en voz alta. MERCEDES: Pero si fuera este el objetivo, toda esta argumentacin que has hecho sera demasiado chapucera, demasiado evidente. Claro... Ya lo veo... Me has puesto la miel en la boca para ver si picaba. Lo que queras era que yo me lo creyese, mirase el sobre y la cagase. Buen intento, pero no. Lo siento, chico. FERNANDO: Huy, cmo te complicas. No haba ningn inters oculto. Te lo he dicho con toda mi buena fe. MERCEDES: S, seguro.

  • El mtodo Grnholm

    39

    Mercedes mira el reloj.

    FERNANDO: Si quieres llamar... MERCEDES: No, no quiero llamar. FERNANDO: Pues tu hermana te llamar pronto. Qu le dirs?

    Mercedes desconecta el mvil. MERCEDES: Ahora ya no me llamar. FERNANDO (medio decepcionado): Oooh. MERCEDES: Qu? FERNANDO: Si casi no he tenido que hacer nada... MERCEDES: Qu pasa? FERNANDO: Y si te dijese que mi objetivo era una cosa tan sencilla como que desconectases el mvil? MERCEDES: No jodas.

    Fernando coge el sobre y saca la tarjeta. MERCEDES: Mierda!

    Fernando mira a Mercedes y vuelve a guardar la tarjeta y a dejar el sobre en la mesa.

    FERNANDO: No. No es este. MERCEDES: Eres un... Muy gracioso. FERNANDO: Perdona, no me lo tengas en cuenta. MERCEDES: Sabes por qu me he quedado? Porque me caes tan mal que me quera dar la satisfaccin de joderte. FERNANDO: Tu madre se sentira orgullosa de ti. MERCEDES: T debes ser hurfano, verdad? FERNANDO: Hurfano? MERCEDES: Si tuvieras madre, no haras tanta coa. FERNANDO: Tengo madre y padre. MERCEDES: Espero que no necesiten nunca nada de ti. FERNANDO: Todo lo que necesiten de m, lo tendrn. Y mira, eso, ni tocarlo. Puedo parecer lo que sea, sin embargo, para m, mis padres son lo primero. O sea que no insines ni por un momento que yo pueda ser como t. Y no hablo de una situacin como la tuya, que es de juzgado de guardia. Te hablo de toda una vida. Te hablo de no fallarles nunca. Mis padres me han dado tanto, que por mucho que haga, por mucho que intente devolverles slo una pequea parte de todo lo que les debo, nunca llegar a acercarme a su generosidad. Ahora me has tocado la fibra, t... Sabes por qu no he tenido hijos? Porque creo que nunca podra llegar a quererlos como mis padres me han querido a m. Mi padre... T eres una nia de familia bien, ya se ve. Yo no, yo soy de barrio. Mi padre era revisor de la Renfe. Revisor de la Renfe toda la puta vida. Curraba ms horas que un reloj. Haba noches que no dorma en casa. Cuando volva, siempre me traa un regalo. Cosas pequeas. A

  • Jordi Galcern

    40

    veces slo un caramelo. Pero siempre, y cuando digo siempre es siempre, me trajo alguna cosa. Slo era un detalle, pero un detalle que quera decir que nunca, en ningn momento, nunca se haba olvidado de m. De vez en cuando, pasaba una semana fuera, entonces mi madre, el da antes de que volviera, compraba habas y, entre los dos las pelbamos, y mi madre le haca habas a la catalana, que era el plato que ms le gustaba. No entiendes de qu te hablo, verdad? En tu casa no se coman habas, claro. Pues en la ma s, y para m, ayudar a mi madre a preparar las habas de mi padre era lo mximo. An ahora, de vez en cuando, le hacemos habas a escondidas. Y an ahora, que ya tengo cuarenta aos, mi padre me coge del brazo y me dice: supongo que has ayudado a tu madre a pelar las habas, y me da un coscorrn, como cuando tena seis aos y t no lo puedes entender, pero veo los ojos de mi padre y s que an se siente orgulloso de m. Y mi madre, igual. Pero t no tienes ni puta idea de lo que estoy diciendo. T desconectas tu mvil. No fuiste nunca a la cama de tus padres, cuando tenas miedo por la noche? Qu te crees, que tu madre no tena miedo, hoy? Sabes qu es lo ms importante en esta vida, para m? Sabes por qu trabajo, por qu quiero prosperar en mi trabajo? Te lo dir, aunque no lo entiendas. Quiero que mi padre y mi madre puedan mirarme siempre con aquellos mismos ojos de orgullo con los que me miraban cuando tena seis aos y haca las cosas bien hechas. Por eso lucho, cojones. Por eso estoy dispuesto a todo, a ponerme un sombrero de capelln y a lo que haga falta. Porque quiero que mis padres sepan que lo he logrado. Y t me llamas cnico? Crees que eso que haces demuestra que eres muy fuerte, que este trabajo es muy importante para ti? Lo nico que demuestra es que no tienes valor. No tienes cojones de enfrentarte a la vida. Y antes, vas y me preguntas si he querido nunca a nadie... Escchame bien porque quiz aprenders alguna cosa, hoy. Llegar un da, nia de familia bien, que se te caer el culo y las tetas te colgarn como un calcetn, llegar un da que de tu brillante carrera slo quedar un plan de pensiones ridculo, llegar un da que todo lo bueno ya habr pasado. Ese da ya les ha llegado, a mis padres, pero me tienen a m, siempre me tendrn a m, hasta al final, y har todo lo que sea necesario para que piensen que su vida ha tenido sentido. T, qu tendrs? Nada. Querrs mirar hacia atrs y solo habr mierda.

    Fernando se queda mirando a Mercedes, fijamente. MERCEDES: Dios mo...

    Mercedes est llorando. FERNANDO: Ests bien?

    Mercedes saca un kleenex y se suena. FERNANDO: Perdona, pero es que me lo han puesto muy fcil.

    Fernando coge el sobre, saca la tarjeta y se la ensea a Mercedes. FERNANDO: Te deba hacer llorar.

  • El mtodo Grnholm

    41

    Mercedes lee la tarjeta. MERCEDES: Eres un hijo de puta. FERNANDO: Pero tengo razn, verdad?

    Mercedes recoge sus cosas. FERNANDO: Por cierto, mi madre est muerta y con mi padre hace quince aos que ni nos hablamos. (Mercedes le dirige una ltima mirada y se va. Fernando se ha quedado solo. No sabe muy bien hacia dnde mirar...) Ya est, no?... Qu hemos de hacer, ahora? Salgo, me quedo, me espero...? Yo soy respetuoso con las reglas, habis dicho que si salamos, quedbamos eliminados. Pues me espero. (Fernando se sienta. Unos segundos... Coge su maletn.) No os importa que acabe de leer el diario, verdad? (Fernando coge el diario y se pone a leer. Est leyendo durante un rato. De repente, cierra el diario y se levanta.) Bueno, tampoco me quedar a dormir aqu. Me escucha alguien? (Fernando va hasta el buzn y golpea llamando como si fuera una puerta.) Hola! Hay alguien?... Eh, salgo un momento, pero slo para ver si hay alguien. (Fernando va hasta la puerta doble. Intenta abrir pero no lo logra.) Qu cojones...! Eh, que eso no se abre! No jodamos con bromitas, eh? (Fernando va hasta la puerta lateral. Lo intenta pero tambin est cerrada.) Qu es esto, otro de vuestros juegos? No habis tenido suficiente? Y ahora qu esperis que haga, que la abra a patadas? (Fernando va a la ventana e intenta mirar al exterior, la ventana tampoco se puede abrir.) Si queris poner a prueba mi paciencia, lo estis consiguiendo. He hecho t