27
1 La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. María del Rosario Hernández Borges Tamara Ojeda Arceo 1. Introducción En AEpistemology Externalized@ (1990), Donald Davidson se caracteriza a sí mismo como un epistemólogo naturalizado porque defiende el enfoque de tercera persona a la hora de hacer epistemología. Esa es, en su opinión, la manera en que la naturalización entra en su epistemología y le acerca al proyecto de Quine. Sin embargo, Davidson critica la descripción que Quine da de la naturaleza del conocimiento por ser básicamente cartesiana y de primera persona. Varias preguntas se plantean sobre el tema: )Es acertada la caracterización que Davidson hace del enfoque quineano? )En qué puntos discrepan ambos autores? )Es suficiente mantener una perspectiva de tercera persona para declararse un epistemólogo naturalizado? )Es la perspectiva de tercera persona que defiende Davidson la perspectiva propia de las explicaciones científicas? Estas son algunas de las cuestiones que intentaremos responder aquí. Una cuestión previa a aclarar sería el concepto mismo de naturalización. Durante las tres últimas décadas, desde la publicación de AEpistemology Naturalized@ (1969) de Quine, las discusiones en torno al tema de la naturalización de la epistemología y de las consecuencias que ésta tiene para la filosofía han sido continuas. Aunque cada vez más autores se refieren a sí mismos como defensores de un punto de vista naturalista, qué sea ese punto de vista no es algo compartido. A pesar de las diferencias podemos señalar algunas tesis sobre las que hay cierto acuerdo a la hora de hablar de la naturalización

La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

  • Upload
    doantu

  • View
    220

  • Download
    2

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

1

La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine.

María del Rosario Hernández Borges

Tamara Ojeda Arceo

1. Introducción

En AEpistemology Externalized@ (1990), Donald Davidson se caracteriza a sí mismo como un

epistemólogo naturalizado porque defiende el enfoque de tercera persona a la hora de hacer

epistemología. Esa es, en su opinión, la manera en que la naturalización entra en su epistemología y le

acerca al proyecto de Quine. Sin embargo, Davidson critica la descripción que Quine da de la

naturaleza del conocimiento por ser básicamente cartesiana y de primera persona. Varias preguntas se

plantean sobre el tema: )Es acertada la caracterización que Davidson hace del enfoque quineano? )En

qué puntos discrepan ambos autores? )Es suficiente mantener una perspectiva de tercera persona para

declararse un epistemólogo naturalizado? )Es la perspectiva de tercera persona que defiende Davidson

la perspectiva propia de las explicaciones científicas? Estas son algunas de las cuestiones que

intentaremos responder aquí.

Una cuestión previa a aclarar sería el concepto mismo de naturalización. Durante las tres últimas

décadas, desde la publicación de AEpistemology Naturalized@ (1969) de Quine, las discusiones en torno

al tema de la naturalización de la epistemología y de las consecuencias que ésta tiene para la filosofía

han sido continuas. Aunque cada vez más autores se refieren a sí mismos como defensores de un punto

de vista naturalista, qué sea ese punto de vista no es algo compartido. A pesar de las diferencias

podemos señalar algunas tesis sobre las que hay cierto acuerdo a la hora de hablar de la naturalización

Page 2: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

2

de la epistemología.

La primera de estas tesis es el supuesto ontológico de que los humanos se sitúan en un continuo

con el resto de las criaturas vivas existentes. En esta tesis hay un compromiso mínimo con el naturalismo

por lo que podría interpretarse de formas diversas. Entendemos que la tesis de la continuidad

ontológica significa que (i) no existen entidades sobrenaturales, de naturaleza espiritual e inmaterial y

que, por tanto, los humanos no somos entidades de ese tipo, y que (ii) características señaladas

habitualmente como definitorias de la naturaleza humana como la capacidad de entender y producir

lenguaje, la capacidad de razonamiento o la autoconciencia no nos apartan del resto de la naturaleza

más de lo que un organismo unicelular lo está de un chimpancé. Podríamos decir, entonces, que todo lo

existente es material y lo humano no es sino la materia compleja organizada de cierta manera. La

evolución nos ha hecho organismos más complejos y con mayor capacidad de adaptación, pero eso

no ha levantado ninguna frontera entre lo humano y lo no humano. Nuestra naturaleza material, no

espiritual, nos identifica con el resto de lo existente; el grado de complejidad y organización nos

distingue de las otras cosas materiales. Por tanto, estaríamos comprometidos con el naturalismo si

fuéramos materialistas.

La tesis de la continuidad ontológica nos compromete con la continuidad metodológica, es

decir, con la idea de que cualquier estudio sobre lo humano usará el método científico o tomará los

resultados de la ciencia. Específicamente, la epistemología, sea su objeto de estudio las creencias legas

o las teorías científicas, sólo puede usar los resultados de la ciencia o convertirse ella misma en una

ciencia. Si esta segunda opción es la que se da, la epistemología se sustituiría por alguna ciencia como

la psicología. Esta es la conocida >tesis del reemplazo= planteada por Quine en algunas de sus obras.

Una posición naturalizada menos radical que la del reemplazo señalaría la relevancia que los resultados

Page 3: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

3

de las investigaciones científicas-naturales sobre los seres humanos tienen para la epistemología1. Estos

resultados se han considerado en ocasiones como herramientas para el epistemólogo que estudia no

sólo las creencias cotidianas, sino los propios desarrollos de la ciencia, es decir, la ciencia se aplicaría a

la ciencia. Desde el punto de vista de la epistemología tradicional esta concepción de la epistemología

constituiría un círculo vicioso inaceptable. Salvo en casos excepcionales como el de Hume, la

epistemología tradicional buscaba un método para alcanzar conocimiento verdadero con total

seguridad, método que, una vez conocido, se prescribe para dirigir nuestra actividad cognitiva y huir del

escepticismo. Lo que da seguridad a nuestro conocimiento es la fiabilidad del método, y esta fiabilidad

no se fundamenta en conocimiento empírico alguno, sino en la reflexión a priori. Por tanto, el

epistemólogo que estudia el conocimiento utilizando los desarrollos de la ciencia, utiliza la metodología

científica, que es parte de la ciencia, para estudiar la ciencia. Si estudiamos el conocimiento científico,

no estamos seguros de él, y tampoco lo estamos de su metodología. Giere lo explica así: AUna de las

cosas que cualquier estudio de la ciencia debe investigar son los métodos [...] que los científicos usan al

evaluar la evidencia. Para proseguir tal investigación científicamente se necesita usar datos acerca de la

práctica científica para alcanzar conclusiones acerca de los métodos científicos. Así, cualquier

investigación empírica que tuviera como propósito descubrir los criterios que los científicos usan para

evaluar la evidencia presupondría necesariamente al menos algunos de los criterios que supuestamente

nos proponíamos descubrir@2.

Como será relevante para lo que sigue, hemos de resaltar que la continuidad metodológica

1A. Shimony, AIntroduction@, en A. Shimony & D. Nails (ed.) Naturalistic Epistemology, Dordrecht, D.

Reidel Publishing Company, 1987, pp.1-16.

2 R. Giere, APhilosophy of science naturalized@, Philosophy of Science, n152, 1985, p.333.

Page 4: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

4

implica que una epistemología naturalizada ha de mantener una perspectiva de tercera persona, como

mantiene la ciencia.

En resumen, la continuidad metodológica se esgrime como crítica contra la epistemología como

disciplina a priori, que, separada de las ciencias, distingue el conocimiento válido del que no lo es. Por

el contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red completa

de creencias sobre el mundo3.

Además de la continuidad ontológica y metodológica, la epistemología naturalizada parece

abandonar o, al menos, reformular uno de los objetivos de la epistemología tradicional: la justificación

de las creencias. Para la vieja epistemología su tarea esencial no es descriptiva, sino normativa. La

epistemología tradicional no describe ni explica las creencias, sino que trata de justificarlas. Para huir del

escepticismo hemos de buscar un método o criterio que sirva para juzgar la verdad o la falsedad de

nuestro conocimiento. Si renunciamos a esta búsqueda, piensan muchos autores, ya no hablamos de

epistemología, simplemente cambiamos de tema. Desde posiciones naturalizadas se ha considerado que

o bien la tarea normativa debería quedar fuera de la epistemología, siendo la tarea epistemológica la

descripción del conocimiento, o bien las consideraciones normativas se derivan de alguna manera de las

descriptivas.

Lo que nos interesa discutir en este trabajo es hasta qué punto la teoría de Davidson apoya

estas tres tesis defendidas por las epistemologías naturalizadas, y en qué grado su posición coincide con

la de Quine.

3 Esta es, según S. Haack, una de las concepciones del naturalismo que sostiene Quine y que ella

denomina Anaturalismo modesto@ (S. Haack, AThe two faces of Quine=s naturalism@, Synthese, n1 94, 1993, pp.335-356).

Page 5: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

5

II. )Qué hay? La tesis de la continuidad ontológica.

1

Davidson se declara ontológicamente monista. En su ontología de eventos y objetos irrepetibles

y fechados no tienen cabida realidades no materiales, espirituales. Lo que existe es de naturaleza física y

puede ser descrito en términos de la física. )Dónde aparece lo mental en este mundo de entidades

físicas? Influido por el antimentalismo de Quine, y por su propia adscripción al conductismo en ciertos

momentos de su evolución teórica, lo mental no es, para Davidson, una categoría ontológica sino

conceptual. Esto se explica mejor si observamos que, como ya había hecho Anscombe, Davidson hace

depender la distinción entre lo mental y lo físico del lenguaje utilizado para describirlos. Así, un mismo

suceso puede ser físico, si se le describe en términos físicos y puede ser mental, si se le describe en

términos mentales. Una descripción física sería aquella que se formula en los términos de la ciencia

física o neurológica. Una descripción mental sería la que usando verbos mentalistas como creer, desear,

considerar, .... describe actitudes proposicionales de los sujetos. Pero lo relevante es que cuando

describimos un suceso mental en términos físicos perdemos aquellas características de lo mental que

nos hace concebirnos como humanos: nuestra capacidad de comunicación, de atribuirnos creencias y

deseos mutuamente, de planear nuestras acciones a la vista de tales atribuciones y de las conductas que

queremos producir en los demás. Por tanto, nuestras descripciones del mundo van a Ahacer surgir@

propiedades en los sucesos que, bajo otras descripciones, no estaban.

Intentando dejar a un lado las complicaciones de esta posición y limitándonos a describir

literalmente la posición davidsoniana, concluiríamos en que Davidson mantiene una posición materialista

fisicista y, por tanto, la continuidad ontológica. En este punto podríamos considerarlo un epistemólogo

naturalizado.

Page 6: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

6

2

En su ensayo ALa Relatividad Ontológica@ (1969 ), Quine afirma que, desde la perspectiva

epistemológica, no existe ningún fundamento para preferir una ontología u otra; así, cualquier ontología

sirve para validar la verdad de una oración, ya que dicha verdad no reside en la ontología que uno

escoja, sino en la relación que existe entre la oración y el estímulo sensorial. Por tanto, para Quine, los

objetos son meros instrumentos y la cuestión acerca de lo que hay (la cuestión verdaderamente

ontológica) no tiene especial relevancia para sus propósitos y, por eso, es un tema que deja abierto. Sin

embargo, en lo que sí se detiene es en la cuestión semántica, es decir, en el compromiso ontológico que

mantienen las teorías, de tal modo que la importancia radica en lo que las teorías refieren. A este

respecto, desde el nominalismo, Quine rechaza la existencia de los universales; en su universo limitado

sólo tienen cabida las variables ligadas o términos singulares. A esto se añade que Quine es un autor

fisicista, y, como tal, acepta las afirmaciones de la ciencia física: ALa posición heroica, la posición

quijotesca, es la del nominalista, el cual reniega de cualquier cuantificación de universales [...] El

nominalista ha repudiado el universo infinito de los universales como un mundo de sueño; no podrá, por

tanto, proceder a reconocer la infinitud de su universo de objetos particulares a menos que este

universo resulte efectivamente ser infinito, según garantía, digamos, del físico@4.

Atendiendo a lo dicho, se puede deducir que Quine es un autor materialista, en tanto sólo da

cabida en su universo a lo que el físico dice que hay y, por tanto, afirma que todo lo existente es

material, que no existen entidades sobrenaturales y que no hay nada en el ser humano que lo distancie

de otras criaturas.

4 W.V.O. Quine, Desde un punto de vista lógico, Barcelona, Ariel, 1962, pp. 185-186.

Page 7: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

7

III. )Cómo estudiamos lo que hay? La tesis de la continuidad metodológica

1

Con respecto a la continuidad metodológica, la posición de Davidson es clara. Al contrario que

Quine, se declara epistemológicamente antirreduccionista y en esto consiste lo original de su teoría: el

monismo anómalo. Siendo ontológicamente monista, Davidson considera que lo mental no puede ser

reducido a lo físico porque lo mental pierde sus propiedades distintivas bajo una descripción física. En

eso consiste la anomalía.

Para argumentar a favor de la anomalía, Davidson recurre a un experimento mental en el que

supone que hemos construido una réplica de ser humano que denominamos >Arte=. Arte se ha

construido a partir de un conocimiento perfecto acerca de lo que ocurre en nuestro cerebro;

conocimiento que nos permite describir toda correlación entre los procesos mentales y su reflejo en los

procesos físicos. Arte, además, es aparentemente indistinguible de cualquier humano, no sólo por su

aspecto físico, sino por su conducta. Davidson pretende demostrar que todo este conocimiento de

física (y, por tanto, de neurofisiología) no aportaría gran cosa al conocimiento psicológico, ya que sólo

en las descripciones psicológicas podemos captar las propiedades mentales. La cuestión sería hasta

qué punto el conocimiento en otros campos (tales como la neurociencia, o la biología) puede

constituirse en conocimiento psicológico. Davidson no niega que la construcción de Arte tendría

consecuencias importantes para la psicología: mostraría la compatibilidad del determinismo y la acción

intencional, introduciría importantes novedades en el estudio de la percepción, la memoria o el sueño.

Pero estas influencias nunca supondrían la posibilidad de explicar científicamente la acción humana

mediante leyes deterministas estrictas.

Page 8: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

8

Para estudiar lo mental adecuadamente debemos atender únicamente a las normas que rigen lo

mental. Lo mental constituye un campo autónomo sometido a sus propias >leyes=. Estas leyes no son

equiparables a las leyes científicas, son leyes de la interpretación. Estas normas no se sitúan en el marco

de ningún discurso científico ni su objetivo es la explicación y predicción, son más bien normas que

dirigen un proyecto interpretativo, que describen cómo nos comprendemos. Al ser estas normas tan

distintas de las leyes científicas no parece sensato pensar que la continuidad metodológica esté presente

en la propuesta davidsoniana. La anomalía del monismo de Davidson se basa, precisamente, en el

dualismo metodológico. En tanto nos queramos concebir como humanos, las ciencias naturales y el

método científico no nos dicen nada relevante.

En este punto Davidson no es un epistemólogo naturalizado. Pero )cómo explicamos que

pretenda ser considerado como tal al mantener una perspectiva de tercera persona? Ciertamente el

punto de vista científico es de tercera persona, esto es, el punto de vista del testigo que explica la

realidad a partir de informaciones que no dependen de vivencias personales, incorregibles o subjetivas,

pero veremos más adelante que, aunque Davidson defiende una posición epistemológicamente

externalista e intersubjetivista, esto no es suficiente para considerarlo un epistemólogo naturalizado.

2

Quine es uno de los pioneros de lo que podemos llamar >la continuidad metodológica=, pues si

no existe una frontera entre lo humano y lo no humano, lo primero puede ser estudiado por la misma

ciencia que estudia lo no humano, con lo que desaparece la necesidad de una disciplina especial. El

naturalismo quineano se eleva sobre la idea fundamental de que conocimiento, mente y significado

forman parte del mismo mundo con el que ellos están vinculados y que han de ser estudiados con la

misma actitud crítica que anima la ciencia natural. En otras palabras, en el naturalismo quineano no hay

Page 9: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

9

lugar para la filosofía primera.

Aquellos autores que mantienen el sueño cartesiano de fundamentar la certeza científica sobre

una base más firme que el propio método científico, sitúan a la filosofía en un lugar privilegiado al

ocuparla con la única tarea de especificar un lenguaje de los datos sensibles al que traducir, enunciado

por enunciado, el resto del discurso significante. De esta manera, la filosofía ocupa un lugar

extracientífico desde el que lleva a cabo la justificación del proceder del conocimiento científico. Esta

fue la posición del Círculo de Viena.

Desde la perspectiva quineana, este sueño queda rechazado, pero no sucede lo mismo con la

que ha sido la tarea central de la epistemología tradicional, a saber, la relación entre la ciencia y sus

datos sensoriales. ADe acuerdo con mi enfoque -afirma Quine- esta relación se da en el interior de

individuos de carne y hueso que habitan un mundo externo cuya existencia ha sido admitida de

antemano, y su estudio constituye un capítulo más de la ciencia que estudia ese mundo. [...] Llamo

epistemología naturalizada a esta empresa@5.

De este modo, Quine desaprueba el lugar apriorístico de la filosofía y, por tanto, su propuesta

se centra en observar cómo se desarrolla el conocimiento empírico a partir del estímulo de los

receptores sensoriales. En el marco de esta empresa, resulta imprescindible apelar a la psicología.

Desde esta perspectiva, la epistemología es un capítulo de la psicología y, por taanto, de la ciencia

natural. Dicho de otro modo, el naturalismo quineano consiste en validar los fundamentos de la ciencia

empírica mediante el uso de otra ciencia empírica. Así, el objeto de la epistemología continúa siendo (al

igual que en la epistemología tradicional) el lenguaje; pero el lenguaje, en esta epistemología

naturalizada, se considera un fenómeno empírico y, por tanto, susceptible de ser estudiado por una

5 W.V.O. Quine, La búsqueda de la verdad, Barcelona, Crítica, 1992, p.41.

Page 10: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

10

disciplina empírica. El lenguaje es un arte social que se adquiere a través de la conducta manifiesta en

circunstancias públicamente reconocibles; no hay, por tanto, un lenguaje privado y el significado, lejos

de ser una existencia psíquica, es una propiedad de la conducta.

3

Muchos autores se oponen al proyecto de naturalización de Quine porque ven en él la

bancarrota de la epistemología, en tanto interpretan esta epistemología naturalizada como una ruptura

con los temas tradicionales de la epistemología clásica. No obstante, no es éste el objetivo de Quine,

para quien la epistemología naturalizada aborda la relación entre la teoría y la evidencia pero desde una

perspectiva diferente. Y es en este punto donde se sitúan las principales discrepancias entre Quine y

Davidson: )cuál es la relación entre sensación y creencia (entre activaciones de terminaciones nerviosas

y nuestras proferencias lingüísticas)? y )de qué naturaleza es esa relación?

Davidson dice que coincide con Quine a la hora de defender una epistemología de tercera

persona, pero discrepa en la descripción quineana de la naturaleza del conocimiento, por ser, en su

opinión, cartesiana y de primera persona6. Según Davidson, cuando Quine describe la naturaleza del

conocimiento se centra en la relación entre los inputs neuronales y las oraciones observacionales, lo que

constituiría una descripción proximal del proceso. Desde una perspectiva distal, que Davidson

defiende, el mismo proceso se entendería como la relación entre oraciones de observación con

objetos/eventos intersubjetivamente observables. El problema, en opinión de Davidson, es que el

enfoque proximal no responde a la pregunta sobre la relación entre sensación o input neuronal y

creencia de tal forma que la primera justifique la segunda. Es decir, lo que se establece en la descripción

proximal es la relación causal entre sensación y creencia, pero no la relación evidencial. La justificación

6 D. Davidson, AEpistemología externalizada@, Análisis filosófico, vol.X n11, 1990, pp.1-13.

Page 11: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

11

de una creencia, aquello que nos asegure que podemos confiar en nuestros sentidos, no puede situarse

en las sensaciones porque éstas son engañosas. Por ejemplo, podría ocurrir que alguien tenga una

sensación y crea que no la está teniendo, con lo cual la sensación no juega ningún papel justificatorio, o

bien que aunque tenga la creencia de que tiene la sensación, esta creencia fuera falsa, por lo que la

sensación tampoco la justificaría. Las sensaciones no pueden ser ni verdaderas ni falsas, sólo a las

creencias (en tanto son actitudes proposicionales) se les puede aplicar valores de verdad. Por tanto, una

creencia sólo puede estar justificada por otra creencia y no por la sensación misma, es decir, sólo las

creencias pueden ser evidencia para las creencias. Por ello, explicar el origen de nuestro conocimiento

(científico o lego) recurriendo a la conexión entre ciertas sensaciones y ciertas oraciones no se libra de

las dudas planteadas por el escepticismo global: las estimulaciones sensoriales de una persona podrían

ser exactamente como son y sin embargo el mundo exterior puede ser muy diferente.

El mismo problema de la conexión entre sensación y creencia lo encuentra Davidson en el papel

epistemológicamente privilegiado que Quine otorga a las oraciones observacionales dentro de nuestro

conocimiento. El problema, señala Davidson7, no es la localización del estímulo, sino qué papel juega el

estímulo proximal en la epistemología o al determinar el contenido de las oraciones observacionales.

Debido a ese papel privilegiado que los patrones de estimulación juegan a la hora de distinguir el

conocimiento verdadero del que no lo es, Quine acepta la dicotomía esquema/contenido: el estímulo

proporciona el contenido, la evidencia última, y la ciencia es el esquema. Este es el dualismo del

esquema y el contenido, de lo objetivo y lo subjetivo, de la creencia y el mundo, de un sistema

organizador y algo que espera ser organizado. A esto lo llama Davidson Ael tercer dogma del

empirismo@. Este dualismo se ilustra con la imagen de que Aen una mano tenemos un dibujo del mundo,

7 D. Davidson, AReply to Quine@, en L.E. Hahn (ed.), The Philosophy of Donald Davidson, Open Court,

1999, pp. 80-86.

Page 12: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

12

que consiste en la totalidad de nuestras creencias, y en la otra mano tenemos una entrada empírica sin

conceptualizar que proporciona evidencia a favor de y el contenido de nuestras creencias empíricas@8.

Según Davidson, Quine mantiene el tercer dogma cuando afirma: Acomo un empirista yo continúo

pensando en el esquema conceptual de la ciencia como una herramienta [...] para predecir la

experiencia futura a la luz de la experiencia pasada@9 . Este dualismo ha sido rechazado por Davidson

en numerosos trabajos, ya que al conducirnos directamente al relativismo conceptual, no hace posible la

inteligibilidad de los sujetos. Si consideráramos que los datos de nuestros sentidos, o los hechos del

mundo, justifican nuestras creencias sobre él, concluiríamos que diferentes entornos harían verdaderas a

diferentes creencias, y, quizás, entornos radicalmente opuestos, justificarían creencias radicalmente

opuestas. Y a esas creencias empíricas se les atribuye prioridad epistémica. Pero el problema es que si

las estimulaciones sensoriales o las terminaciones nerviosas cambian de una persona a otra, esto es, si

son internas y subjetivas, cómo podemos fundamentar en ellas el carácter público del significado y

cómo podemos defendernos del ataque del escéptico global. Basar, como hace Quine, el significado en

las excitaciones nerviosas en la evidencia sensorial privatiza y hace inaccesible objetivamente los

significados.

En resumen, Davidson critica el empirismo de Quine porque es irreconciliable con el

externalismo ya que hace referencia a elementos subjetivos (sensaciones) y porque nos conduce al

relativismo y al escepticismo. )Es este un relato acertado del planteamiento de Quine?

4

8 D. Davidson, AReply to J. McDowell@, en L.E. Hahn (ed.), The Philosophy of Donald Davidson, Open

Court, 1999, p. 105.

9 W.V.O. Quine, ADos dogmas del empirismo @, en Quine, Desde un punto de vista lógico, cit., p.79.

Page 13: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

13

La epistemología empirista de Quine establece una relación entre la teoría y la experiencia

sensorial inmediata. Este vínculo, a su vez, está constituido por dos relaciones: a) la primera tiene lugar

entre la activación de nuestras terminaciones nerviosas (input) con otro tipo de eventos naturales como

es el de nuestro discurso sobre la naturaleza; b) la segunda se produce entre estos eventos vocales y el

resto de eventos vocales que constituyen el discurso cognitivo.

Los primeros eventos vocales directamente conectados con los impulsos exteriores reciben el

nombre de >oraciones observacionales=. Podemos distinguir tres características de este tipo de

oraciones. En primer lugar, es fundamental que la oración esté asociada a cierta gama de estímulos de

manera positiva y negativa, de modo que provoque respectivamente el asentimiento o el disenso

inmediato del sujeto. En segundo lugar, las oraciones observacionales son intersubjetivas, es decir,

suscitan el mismo veredicto en todos los sujetos lingüísticamente competentes que compartan la

situación. Así, la intersubjetividad se basa en que compartimos oraciones observacionales y no en la

identidad de la estimulación. Quine rechaza la igualdad estimulativa intersubjetiva argumentando que los

sujetos no comparten receptor sensorial alguno ni existe una aproximada homología en las

terminaciones nerviosas de los sujetos. Por último, son oraciones ocasionales, en tanto sólo son

verdaderas en ciertas ocasiones y falsas en otras. Debido precisamente a estas cualidades, las oraciones

observacionales juegan un importante papel en el ámbito epistemológico; ya que gracias a ellas

expresamos verbalmente la predicción que nos permite comprobar la validez de la teoría.

Ese proceso de contrastación10 se lleva a cabo mediante otro tipo de oraciones que se

encuentran en un nivel más complejo del entramado lingüístico: las categóricas observacionales. Esta

10

Resulta mejor emplear el término >contrastación= que >comprobación= debido a que, en este punto, Quine toma la teoría falsacionista de Popper y, como él, afirma que las teorías sólo se pueden refutar pero nunca probar y, que cuando buscamos apoyo para alguna hipótesis, lo que hacemos es argumentarla lógica y probabilísticamente a partir

Page 14: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

14

clase de oraciones son generalizaciones que resultan de la combinación de varias oraciones

observacionales11. Dicho de otro modo, si aplicamos una relación lógica de implicación entre varias

oraciones observacionales, obtenemos una generalización compuesta por una hipótesis (acompañada

de teoría) y una conclusión, que es la que se pone a prueba. A pesar de estar compuesta por varias

oraciones ocasionales, las categóricas observacionales son fijas, cualidad que hace posible que sea

implicada por la teoría científica.

Una vez hemos concretado los elementos relevantes para este análisis tenemos que retomar las

dos clases de relaciones que podemos encontrar en el vínculo observación-teoría. El primer tipo de

relación que mencionamos es la que se produce entre el estímulo sensorial y las oraciones

observacionales. Este tipo de relación es meramente causal y neurológica; la activación de ciertos

estímulos provoca (o causa) el asentimiento o el disenso de los sujetos. En cambio, el segundo tipo de

relación, que se produce entre las oraciones observacionales y las oraciones de un nivel más teórico, es

una relación causal, pues ya vimos que eran las oraciones observacionales las que dan lugar a las

categóricas observacionales; pero, además, también es una relación evidencial, donde las oraciones

observacionales fundamentan (son la evidencia de) el resto de las oraciones. Esta relación evidencial

está basada en el hecho de que ambos tipos de oraciones (las observacionales y las teóricas) están

formadas por elementos que comparten, es decir, las palabras que forman parte de una oración

observacional también forman parte de las teóricas y eso hace posible el establecimiento de conexiones

lógicas entre ambas. Son estos nudos lógicos los que convierten a las oraciones observacionales en

de creencias previamente establecidas; pero nunca podemos dar por probada una teoría.

11 El tipo de combinación al que Quine hace referencia aquí es una relación lógica de implicación.

Page 15: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

15

evidencia de la teoría.

Sin embargo no encontramos esta clase de enlaces en el primer tipo de relación, pues no hay

elementos compartidos entre el input o estímulo sensorial y el output o evento vocal. Por eso, esta

primera relación es meramente causal y no evidencial, ya que en el caso de ser evidencial, Quine tendría

que establecer algún tipo de conexión entre los objetos y sucesos observables y las activaciones de

nuestros receptores sensoriales. Para este autor, esa conexión no es posible porque existe un abismo

entre ambos elementos. Quine se detiene en la activación o estimulación, ya que en el conjunto de su

filosofía, lo importante es la asociación que establezca el individuo entre la oración observacional y la

gama de estímulos activada; no tiene relevancia aquí el objeto o suceso observable, que es un mero

auxiliar. En otras palabras, el que haya unos objetos u otros, no afecta a la verdad de las oraciones

observacionales, ni al apoyo que éstas proporcionan a las oraciones teóricas. Así, si sustituimos los

objetos de la teoría, lo que estamos haciendo es reinterpretar las oraciones, pero éstas siguen

asociadas con las mismas estimulaciones sensoriales que antes de la reinterpretación, y las

interconexiones lógicas entre oraciones sensoriales y oraciones teóricas permanecen intactas. En este

sentido, y recordando lo dicho más arriba, no existe ningún fundamento epistemológico para preferir

una ontología a otra.

Retomando lo que veníamos exponiendo, la relación entre estimulación y oración observacional

es causal, mientras que la vinculación entre las oraciones observacionales y el resto del discurso

cognitivo es causal y evidencial. En tanto Quine se detiene en la estimulación y ésta es privada,

Davidson, entre otros autores, le han criticado que sostiene una aproximación al conocimiento en

primera persona, que cae en el solipsismo y que no puede defenderse del escepticismo global. Sin

embargo, Quine ha contestado a esto que el tema epistemológico es un asunto de lenguaje y, por eso,

Page 16: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

16

aunque la estimulación sea privada, el lenguaje en el que se manifiesta es público12.

Para poder entender esto es preciso hacer algunas aclaraciones. Debido a la dificultad que

entrañan los conceptos de observación y evidencia, Quine los abandona y se detiene, como vimos, en

la noción de oración observacional. La oración observacional pertenece al ámbito lingüístico y éste es

público porque cuando un sujeto aprende una oración observacional lo hace en una situación pública y

observando el comportamiento de otros sujetos. Siguiendo este procedimiento (de condicionamiento o

imitación), el sujeto aprende a asentir y a disentir a determinadas oraciones en aquellas ocasiones en

que recibe determinados estímulos13. Esta forma de aprendizaje determina el carácter intersubjetivo

de las oraciones observacionales, intersujetividad que se pone de manifiesto en el hecho de que siempre

suscitan el mismo veredicto en todos los testigos de la situación que sean competentes desde el punto

de vista lingüístico.

Visto de esta manera, la teoría quineana no cae en el escepticismo porque fija su punto de

referencia en el lenguaje público. Es importante insistir en el hecho de que no se produce un salto de lo

subjetivo a lo objetivo, porque Quine no entra en el campo de lo subjetivo; se mantiene siempre en el

exterior; recordemos que el objeto de la epistemología es el lenguaje, un lenguaje que es público por las

razones expuestas anteriormente y que la epistemología naturalizada que él propone apela a la

psicología, pero a una psicología que es conductista y, como tal, se queda en las manifestaciones

observables (conducta) de los sujetos. Quine no entra en el interior de los individuos y, cuando se ve

obligado a utilizar un elemento interno (como el de la activación) relega su estudio a otra ciencia (en el

caso de la estimulación, a la neurología). Por todo esto, Quine no cree que su teoría sea una

12 W.V.O. Quine, La búsqueda de la verdad, cit.

13 Cabe señalar que las oraciones observacionales también se pueden adquirir de modo indirecto, construyéndolas a posteriori a partir de un vocabulario previamente adquirido y refinado. No obstante, este tipo

Page 17: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

17

formulación del conocimiento en primera persona, pues para explicar el proceso cognitivo adopta la

perspectiva científica recurriendo a la psicología. La psicología conductista, que analiza los aspectos

comportamentales del sujeto, es la base de la epistemología naturalizada que estudia el lenguaje y, a

través de él, la relación entre teoría y evidencia14.

5

A partir de la interpretación que hace de la teoría quineana como una explicación proximal al

tema del conocimiento, Davidson, desde una perspectiva distal, sostiene que los contenidos de las

creencias más básicas del sujeto están constituidas por determinados rasgos objetivos básicos del

entorno y, por tanto, son verdaderos y compartidos, rasgos que juegan un papel causal en las creencias.

Este supuesto asegura la objetividad de nuestro conocimiento y elimina la posibilidad de estar

equivocados acerca de todo, ya que nuestras oraciones más simples reciben su significado de las

situaciones que causan que las consideremos verdaderas o falsas. A[...] en los casos más simples y

básicos, [afirma Davidson] las palabras y las oraciones derivan su significado de los objetos y

circunstancias en las que fueron aprendidas. Si en el proceso de aprendizaje hemos sido condicionados

para considerar verdadera una oración en presencia del fuego, esta oración será verdadera cuando el

fuego esté presente; si hemos sido condicionados para considerar aplicable una palabra en presencia de

serpientes, esta palabra hará referencia a serpientes. Muchas palabras y oraciones no se aprenden de

este modo, por supuesto; pero son las que se aprenden así las que sujetan el lenguaje al mundo@15.

Para que el objeto funcione como causa del significado o de la creencia y no como evidencia

de aprendizaje no es relevante para la explicación.

14 Si la psicología conductista es la alternativa acertada o no para naturalizar la epistemología es una cuestión que excede los objetivos de este trabajo.

15 D. Davidson, AEl mito de lo subjetivo@, en D. Davidson, Mente, mundo y acción, Barcelona, Paidós, 1992, p.60.

Page 18: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

18

necesita una explicación ulterior de la proferencia lingüística en la que poco a poco Davidson y Quine

han confluido. Según Davidson, la capacidad para definir clases de causas relevantes tiene que ver con

la similitud de las respuestas y es una capacidad biológica la que nos permite llegar a estas similitudes.

ASomos nosotros, debido a la manera en que estamos construidos (la evolución algo ha tenido que ver

con esto), quienes encontramos esas respuestas naturales y fáciles de clasificar conjuntamente. Si no lo

hiciéramos, no tendríamos razón alguna para alegar que otros estarían respondiendo a los mismos

objetos y eventos (esto es, causas) a los que nosotros respondemos@16. Y en otro lugar afirma: "En

primer lugar, si alguien tiene pensamientos, ha de haber otro ser sensitivo cuyas respuestas innatas a la

similitud se parezcan lo bastante a las suyas para proporcionarle una respuesta a la siguiente pregunta:

)cuál es el estímulo al que está respondiendo?@17.

Ahora bien, las similitudes biológicas no son suficientes. La objetividad tiene, sobre todo, su

base en dos elementos: que dos criaturas interactúen entre sí y con un entorno común, y que exista

comunicación, es decir, que seamos conscientes de que compartimos con los demás pensamientos y un

mundo. Por eso no podemos resolver el tema de los contenidos mentales analizando a un individuo

aislado. Y es en el tema de la comunicación donde está presente lo social. En el aprendizaje del

lenguaje se observa que Aquien aprende es recompensado, deliberadamente o no, cuando emite sonidos

o responde de otro modo, de maneras que quien enseña considera apropiadas en situaciones que él

clasifica conjuntamente. Subsiguientemente, quien aprende es determinado a emitir sonidos similares

ante situaciones que él instintivamente clasifica conjuntamente@ 18.

La objetividad tiene, entonces, una doble vertiente: el mundo exterior de objetos y eventos y los

16 D. Davidson, AEpistemología externalizada@, cit., p. 11.

17 D. Davidson, ALas condiciones del pensamiento@ en D. Davidson, Mente, mundo y acción, cit., p.161.

Page 19: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

19

otros y sus respuestas. Así se constituye el triángulo que hace posible la comunicación y que tiene en

sus vértices al interpretado, el mundo objetivo y el intérprete, estableciendo relaciones causales entre

ellos. En palabras de Davidson: A[...] si las respuestas de alguien han de valer como pensamientos, han

de tener el concepto de un objeto; el concepto del estímulo: del timbre o de mesa. Puesto que el timbre

o una mesa se identifican sólo por la intersección de dos (o más) conjuntos de respuestas a la similitud

(líneas de pensamiento, podríamos casi decir), tener el concepto de una mesa o de un timbre es

reconocer la existencia de un triángulo uno de cuyos vértices es uno mismo, otro una criatura similar a

uno mismo y el tercero un objeto o evento (mesa o timbre) localizado en un espacio que se convierte

así en común"19. También esta interacción causal explica cómo los estados mentales propios (cuyo

conocimiento es para nosotros mismos personal y privilegiado) son conocidos por los demás y se

objetivan, individuándose de forma pública y compartida al estar determinados, en gran parte, por la

interacción con las otras personas.

Entonces es a través del propio proceso de comunicación, en la interpretación de las

proferencias de los otros, donde se desvanece el escepticismo global, ya que la comprensión mutua no

se puede alcanzar sobre la divergencia absoluta. Sólo el acuerdo mayoritario puede explicar alguna

diferencia o error en el proceso comunicativo, pero éste ha de ser mínimo si queremos entender al otro,

si queremos reconocer en él a un humano.

6

Davidson reconoce que las diferencias que mantenía con Quine sobre si la teoría del significado

18 D. Davidson, AEpistemología externalizada@, cit., pp.11-12.

19 D. Davidson, ALas condiciones del pensamiento@, cit. p.16.

Page 20: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

20

se conectaría con el estímulo distal o con el proximal se han ido acercando20. Cuando se estudian las

divergencias entre ambos autores, se observa que sus posiciones, probablemente, nunca estuvieron

distantes. El significado confuso de algunos conceptos quineanos condujo a Davidson a entender

erróneamente la posición de Quine.

El acercamiento de ambos autores se debe más a los esfuerzos de Quine por aclarar algunos de

sus conceptos y reformularlos en términos davidsonianos, que a un cambio real. Por ejemplo, en

AWhere do we disagree?@ (1999) Quine afirma que la interpretación de Davidson de su teoría del

significado en términos de la estimulación proximal se debe a una confusión provocada por el término

Asignificado estimulativo@. Esa confusión se aclararía Aparafraseándolo neutralmente en términos de la

activación de las terminaciones nerviosas@21. Como señalamos anteriormente, Quine estaría de acuerdo

con Davidson en que la relación entre el estímulo sensorial y las proferencias lingüísticas es una relación

causal. Lo que llama Davidson Aactivación proximal@ no tiene pretensiones de evidencia en la teoría de

Quine. Lo mismo sucedería con las oraciones observacionales que, según Quine, siempre versaban

sobre el mundo distal. En este sentido afirma: AComo Davidson, siempre he representado al traductor

como coordinando su habla con la del nativo considerando la presunta referencia distal y sin pensar en

las terminaciones nerviosas. Mi preocupación con lo proximal era epistemológica más que semántica@22.

Una aproximación similar ha sucedido con respecto al tema de la similitud perceptual. Alcanzar

la intersubjetividad significativa que asegure la comunicación es el objetivo de la teoría davidsoniana;

pero dicho objetivo no se puede alcanzar, en opinión de Davidson, a partir de los estímulos sensoriales

y de la similitud perceptual. Desde la posición de Davidson, la semejanza de patrones de estimulación

20 Cfr. D. Davidson, AReply to Quine@, cit.

21 W.V.O. Quine, AWhere do we disagree?@, en L.E. Hahn, op.cit., p.74.

Page 21: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

21

entre observadores nos podría conducir a una traducción errónea. En su opinión, lo que hace posible la

comunicación es el hecho de que muchos objetos, sucesos y aspectos del mundo son salientes para

toda la humanidad, provocando respuestas observacionalmente similares. En Del estímulo a la ciencia

(1998), Quine habla de similitud perceptual introduciendo un elemento nuevo: la similitud perceptual es

la base de todo aprendizaje, ya que ella misma se eleva sobre una inducción primitiva cuyo valor es la

supervivencia, en tanto dicha inducción es una anticipación de algo (peligro, comida,...); por este

motivo, la similitud perceptual no es (totalmente) aprendida, sino (en parte) innata. De este modo, el

autor introduce aquí la teoría darwiniana de la selección natural. Es la selección natural la que nos

proporciona los criterios de similitud perceptual otorgando mayor éxito a nuestras expectativas. Todo lo

dicho hasta ahora funciona en el ámbito privado de un individuo pero también funciona al nivel de la

comunidad mediante la coordinación de conductas. Tal coordinación precisa Aque si dos individuos

presencian juntos una escena, y presencian a continuación otra escena juntos también, y las

estimulaciones globales de uno de los testigos en ambas ocasiones son similares perceptualmente para

él, normalmente también serán perceptualmente similares para el otro testigo sus estimulaciones

correspondientes@23. A su vez el concepto de similitud está basado en la noción de empatía, que

introdujo en La búsqueda de la verdad y en una inferencia realizada a partir de la propia experiencia

del sujeto; elementos que permiten concluir que el otro posee similitud perceptual. Pero Quine matiza su

postura añadiendo que esta armonía pública de criterios privados de similitud perceptual se explica por

la selección natural. Este matiz es reforzado en AWhere do we disagree?@ (1999), donde manifiesta su

22 Ibid.

23 W.V.O. Quine, Del estímulo a la ciencia, Barcelona, Ariel, 1998, p.28.

Page 22: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

22

acercamiento a la posición de Davidson.

Algunos autores (Gibson, Picardi) coinciden en que en muchas ocasiones las discrepancias

entre Davidson y Quine se deben, más bien, a interpretaciones erróneas24. Por ejemplo, en lo referente

a la conexión entre similitud perceptiva y traducción radical, según Picardi, la situación de un intérprete

radical como la de un traductor radical es igual en lo que al escepticismo se refiere. No es cierto, como

cree Davidson, que la aproximación de Quine al tema deje abierta la posibilidad de que el estímulo

pueda estar despegado de su fuente de tal forma que ante los mismos estímulos el extranjero tome por

verdadera una oración que el nativo toma como falsa, ya que la propia situación de traducción radical lo

impediría. AUn manual de traducción que tradujera una oración observacional a la que el extranjero

asiente a una oración a la que el lingüista disiente se descalificaría como un manual de traducción@ 25.

Así que en este punto es difícil ver cómo el escéptico global puede aparecer en la teoría quineana. Sin

embargo, aunque, según Picardi, AQuine está ciertamente en lo correcto al decir que el lenguaje está

donde la intersubjetividad se sitúa, [...] por esta misma razón la mención del significado estimular

privado debería ser abandonado por irrelevante. De hecho, distrae de la circunstancia de que los

niveles intrasubjetivos de similitud que son relevantes para la comunicación se forman mediante niveles

de similitud intersubjetiva desarrollados en el intercambio lingüístico con otros hablantes@26.

Los matices y aclaraciones conceptuales que Quine ha realizado en su propuesta, atendiendo a

las críticas que le ha hecho Davidson, dejan claro que ni el escepticismo ni el solipsismo tienen sitio en

su teoría.

24 R. Gibson, AQuine and Davidson: two naturalized epistemologists@, Inquiry, vol. 37, n14, 1994, 449-463.

E. Picardi, ADavidson and Quine on observation sentences@, en G. Preyer et. al. (Ed.), Language, Mind and Epistemology, Kluwer Academic Publisher, 1994.

25 Ibid., p. 106.

26 Ibid., p. 108.

Page 23: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

23

IV. Epistemología con o sin normas

1

Cuando Quine habla de naturalismo haciendo alusión a la normatividad, distingue entre la

epistemología y la ética. Con respecto a la ética, afirma que no es posible su naturalización porque no

es una disciplina científica y porque el discurso ético trata de establecer él mismo los valores últimos de

las acciones morales. El caso de la epistemología es distinto, en tanto que el discurso epistemológico no

trata de establecer los objetivos últimos de la acción epistémica, que vienen dados por el propio juego

de lenguaje del proceder del conocimiento científico27, sino que trata de establecer los mejores medios

para alcanzar esos objetivos ya dados. Por tanto, el elemento normativo de la epistemología no es

abandonado con la naturalización. De esta manera, si ya dijimos que la epistemología teórica es

naturalizada al convertirla en un capítulo de la psicología, la epistemología normativa es naturalizada al

hacer de ella un capítulo del discurso tecnológico, es decir, es convertida en la tecnología de la

predicción de los estímulos sensoriales. Así, la norma que preside la epistemología naturalizada es el

lema del empirismo (Anihil in mente quod non prius in sensu@), según el cual toda nuestra información

sobre el mundo nos llega únicamente a través de los impactos que reciben nuestros receptores

sensoriales. Este lema, además de ser un hallazgo de la ciencia natural, posee fuerza normativa porque,

según Quine, nos previene contra telépatas y adivinos. Al mismo tiempo, el componente normativo de la

epistemología naturalizada incluye la heurística, es decir, el conjunto de estrategias de conjetura racional

que utilizamos en la construcción de las hipótesis científicas. En otras palabras, las consideraciones

normativas surgen en el proceso de elaboración y no en el de justificación o comprobación, que es

27 A este respecto, Quine se aventura a afirmar que esos objetivos son la predicción, el entendimiento de

la realidad y el control y modificación del entorno.

Page 24: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

24

donde habitan las condiciones de verdad y el contenido empírico.

2

Según el monismo anómalo de Davidson, las ciencias sociales no nos dicen nada sobre las

creencias y del conocimiento de los otros, y los sucesos mentales tienen una naturaleza normativa que

hemos de tener en consideración si queremos identificarlos e interpretarlos apropiadamente. Según

Davidson, sólo las explicaciones de la psicología popular atrapan esa naturaleza normativa al

racionalizar las acciones intencionales describiéndolas en términos de un Avalor que el agente espera

realizar, y una creencia de que al actuar como lo hace, tiene alguna oportunidad de realizar el valor"28.

Esta descripción impone ciertas normas mínimas de racionalidad. Si entendemos, siguiendo a Davidson,

que ninguna otra explicación alternativa de las acciones intencionales en términos de alguna ciencia

social será válida, entonces hemos de concluir que la disciplina científica aceptable para explicar lo

mental ha de asumir los niveles normativos impuestos por la psicología popular. Esta disciplina es, según

Davidson, la teoría de la decisión racional. Por tanto, lo normativo aparece en la teoría de Davidson en

el nivel descriptivo como un rasgo del objeto estudiado, y en el nivel de comprobación como una

condición necesaria (desde la teoría) para poder aplicarla, es decir, para entender al sujeto.

Las normas mínimas de racionalidad, las reglas del cálculo proposicional y de la teoría de la

cuantificación de primer orden, los principios de la teoría bayesiana de la decisión, el principio de

evidencia global en el razonamiento inductivo y el principio de continencia, según el cual "se debería

preferir (actuar según) el juicio basado en todas las consideraciones que se juzgan relevantes"29, son

28 D. Davidson, AA new basis for decision theory@, Theory and Decision, 18, 1985, p.89.

29 D. Davidson, AIncoherence and Irrationality@ , Dialectica, vol.39, 1985, p. 350.

Page 25: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

25

principios que constituyen a los sujetos, que guían sus acciones y que, al estar establecidos como una

cuestión >a priori=, no están sujetos a estudio empírico alguno. Explícitamente, Davidson afirma: "cuanto

más básica consideremos que es una norma, menos empírica es la cuestión de si el pensamiento y la

conducta del agente están de acuerdo con ella"30.

La tarea epistemológica para Davidson es un proyecto más interpretativo que explicativo o

predictivo, que no tiene mejor opción que adoptar el esquema explicativo de la psicología de sentido

común y las herramientas formales de la teoría de la decisión y que impone tales límites a las

posibilidades de estudiar con métodos científicos lo mental al afirmar que Aa lo que no se puede llegar

por estos métodos [los de la teoría de la decisión] no lo podemos considerar pensamiento, habla o

acción A31. En este sentido, la perspectiva davidsoniana es normativa.

)Dónde aparece la perspectiva de tercera persona en lo descrito hasta aquí de la posición

epistemológica davidsoniana? En esa empresa interpretativa que es el único objetivo que, según

Davidson, se puede conseguir sobre lo humano. Si aseguramos que el intérprete comprende las

acciones del interpretado, la explicación de sentido común que formule sería la adecuada y no habría

otra más válida.

La posibilidad de entenderse depende de que el intérprete presuponga que la actitud que el

hablante expresa en sus frases es en su mayoría consistente y correcta. Lo mismo ocurre con respecto a

la verdad de las proposiciones. En el proceso de interpretación el intérprete recurre a una proposición

propia tal que si el intérprete creyera que esa proposición es verdadera jugaría aproximadamente el

mismo papel en su razonamiento, acciones y sentimientos que el que jugaría en las del hablante si éste

30 Ibid, p.352.

31 D. Davidson, AA new basis for decision theory@, cit, p.92.

Page 26: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

26

creyera que la proferencia fuera verdadera. Es decir, la única manera de comprender a los demás es

trasladando los propios esquemas, los propios valores de verdad que asignamos a nuestras oraciones

acerca del mundo a las oraciones que profieren los demás. Y, como la consistencia y la corrección

están aseguradas al compartir principios de racionalidad, todos, en general, nos comprenderemos. Se

observa que lo normativo aparece de nuevo cuando se impone parte de la lógica del intérprete sobre la

del interpretado. Sin embargo, el resultado es el mismo: asegurada la comprensión, la explicación de

sentido común sería la única aceptable. Y así lo reconoce: APuedo imaginar una ciencia que se ocupe

de las personas y se halle expurgada de >psicología popular=, pero no puedo imaginar qué interés podría

tener@32. Este planteamiento no sólo simplifica excesivamente el tema, sino que niega toda posibilidad de

desarrollar una perspectiva científica sobre lo humano. Davidson, al imponer la lógica del intérprete

sobre la del interpretado está adoptando una perspectiva de tercera persona, pero de >sentido común=,

no >científica= como la de Quine.

Cuando desde posiciones naturalizadas se critica la normatividad, lo que se discute es el uso de

la reflexión a priori (no del conocimiento científico) como criterio sancionador de lo que es

conocimiento válido o no. Cuando Davidson parte de una concepción del humano como ser racional

que sigue reglas no estudiables empíricamente y cuyas conclusiones se usan para decidir qué es

pensamiento, acción o habla está elaborando una epistemología a priori y normativa. Igualmente lo hace

cuando sólo considera válida para el estudio de lo humano una ciencia formal que se ajusta a los

principios de racionalidad establecidos a priori: la teoría de la decisión.

V. Conclusiones

32 D. Davidson, AEl conocimiento de la propia mente@, en D. Davidson, Mente, mundo y acción, cit,

p.133.

Page 27: La epistemología naturalizada: los casos de Davidson y Quine. · PDF fileel contrario, la naturalización incluye los logros de la epistemología como parte de nuestra red c ompleta

27

En resumen, la epistemología de Davidson sólo defiende una de las tres tesis compartidas por

los enfoques naturalistas en epistemología y que hemos tomado aquí como criterios para juzgar si su

pretensión de ser un epistemólogo naturalizado está justificada. La defensa de la continuidad ontológica

no parece suficiente para describirse a sí mismo como un epistemólogo naturalizado y, además, entra en

contradicción con la crítica a la continuidad metodológica y con la defensa de una teoría normativa

como única posibilidad de explicar lo mental.

Por otro lado, sostener una perspectiva de tercera persona desde el conocimiento lego

tampoco es suficiente. Al estudiar los significados desde una posición naturalizada tendríamos que

distinguir tres niveles de análisis. Por un lado, las conductas que se han de explicar; por otro lado, las

explicaciones de sentido común, desde la primera o desde la tercera persona, que se dan de esas

conductas; y, por último, las explicaciones científicas de las conductas y de las explicaciones de sentido

común. La perspectiva de tercera persona del sentido común no es suficiente para naturalizar la

epistemología. Si lo fuera todos seríamos epistemólogos naturalizados.