Los Secretos de Steve Jobs

Esto es para los locos. Los inadaptados. Los rebeldes. Los problemáticos. Los que no encajan en ningún sitio. Los que ven las cosas de otra manera.No siguen las reglas. Y no tienen ningún respeto por lo establecido. Puedes alabarlos, puedes no estar de acuerdo con ellos, puedes citarlos, puedes no creer en ellos, glorificarlos o vilipendiarlos. Pero la única cosa que no puedes hacer es ignorarlos. Porque ellos cambian las cosas.Ellos inventan. Ellos imaginan. Ellos curan. Ellos exploran. Ellos crean. Ellos inspiran. Ellos impulsan la humanidad hacia delante.

El ADN del Innovador 5 destrezas que separan a los verdaderos innovadores

A los innovadores les encanta cuestionar el statu quo. Los investigadores descubrieron que los innovadores exitosos dedican grandes cantidades de tiempo a pensar en como cambiar el mundo.

Cuestionar

Los innovadores exitosos se ocupan de experimentar activamente, bien sea en exploración intelectual, ensayos físicos, o buscando nuevos entornos . Steve Jobs es un experimentador, fisica y espiritualmente.

Experimentar

Los investigadores han descubierto que los innovadores hacen trabajo en red, pero no en el sentido tradicional. Mas bien, se rodean de personas interesantes que amplían sus campos de conocimiento .

Funcionar en la red

Los innovadores observan cuidadosamente a la gente, especialmente al comportamiento de posibles clientes. Es durante esos momentos de observación cuando los innovadores exitosos parecen hacer sus mayores avances.

Observar

También nosotros vamos a pensar distinto y a atender a la gente que ha estado comprando nuestros productos desde el principio. Porque muchas veces las personas piensan que están locas, pero en esa locura nosotros vemos genio

Venda sueños no productos

La forma como abordamos el diseño es tratando de lograr lo máximo con lo mínimo. Nos consume el ansia de desarrollar una solución que sea muy sencilla, porque como seres físicos comprendemos la claridad

La simplicidad es la sofisticación definitiva

Presentado por:

José Alfonso David