Teora de los Discursos Sociales IIPrimer Examen Parcial
RecuperatorioAlbornoz, Nahuel MatasExcelente trabajo. Claridad
expositiva. Adecuado y conducente objetivo. Pertinencia terica y
coherente operativizacin. Pormenorizado y relevante anlisis del
corpus propuesto.10 (diez)
Recuperando la propuesta del Primer Examen Parcial, me dedicar
en el presente trabajo a realizar un breve anlisis sobre los
discursos que construyen, definen, tensionan y complejizan el
objeto megaminera en el marco de los sucesos ocurridos a partir del
da 13 de septiembre del ao 2015 en Veladero, una mina ubicada en la
localidad de Iglesia, provincia de San Juan (Argentina). A partir
de las nociones foucaulteanas de enunciado, formacin discursiva,
dispositivo y biopoltica, y la integracin de stas a la problemtica
del mundo cantera (Antonelli, 2014), intentar realizar un recorrido
particular por algunos artculos periodsticos digitales que
constituyen muestras materiales de una red interdiscursiva
obediente a ciertos regmenes de (in)visibilidades. Utilizar tambin
los aportes de Maurizio Lazzarato sobre las tecnologas del tiempo
(Lazzarato, 2006) y en cuanto al monolingismo de la lgica del
capital; resulta altamente productivo a mi anlisis concebir los
dispositivos de intervencin en la cultura (Antonelli, 2009) en
relacin a la operacin de las fuerzas centrpetas en Lazzarato.El
corpus de trabajo comprende una serie de artculos correspondientes
a cuatro medios digitales diferentes: Tiempo de San Juan
(www.tiempodesanjuan.com), El diario de
cuyo(www.diariodecuyo.com.ar), La nacin (www.lanacion.com.ar) y la
pgina web www.noalamina.org. Los dos primeros son diarios digitales
locales elegidos aleatoriamente (el primero de corte oficialista)
de una amplia variedad de diarios digitales que ofrece el buscador
google (www.google.com.ar). El tercero es un diario nacional de
alta difusin; estadsticamente uno de los medios digitales ms ledos
en Argentina. La pgina de No a La Mina es un espacio digital que
excede el mbito periodstico; es el espacio virtual creado a partir
(y como parte) de un movimiento vecinal surgido en rechazo a un
proyecto minero en la localidad de Esquel, provincia de Chubut, en
el ao 2003. Esta seleccin, arbitraria en su conjunto, obedece a dos
parmetros de diversidad dentro del corpus: la cobertura informativa
realizada por medios locales y nacionales (los dos primeros vs. los
dos segundos) por un lado, y el modo de tratamiento de la
informacin (los tres diarios vs la web de No a la mina) por el
otro. Cuando hago la distincin entre medios locales o provinciales
y nacionales, me estoy refiriendo al recorte geogrfico que el
propio diario realiza en su objeto periodstico, dado que la
circulacin a travs de internet pone nuevas posibilidades y escalas
de circulacin a sus discursos/objetos. Teniendo en cuenta estos
cuatro dominios web, realizar un recorrido a partir de las noticias
del da lunes 14 de septiembre sobre el derrame de cianuro en
Veladero, pasando por las del da sbado 19 del mismo mes;
detenindome luego en las noticias del da 6 noviembre y concluyendo
en la fecha mircoles 10 de noviembre. La extensin de la lnea
temporal y la recoleccin de datos son desde luego significativas,
pero no del todo aleatorias: considerando que el derrame ocurri el
da domingo 13 de septiembre, y que comienzo el corpus con las
noticias del da siguiente, los enunciados que abordar son,
respectivamente, una semana, y casi dos meses despus de los
primeros enunciados configuradores del episodio. Es un objetivo de
este trabajo estudiar la aparicin, desaparicin, transformacin y/o
transmutacin de los enunciados puestos en escena a partir del
derrame, en torno a la defensa, al ataque y a la reconfiguracin (o
reafirmacin) de la actividad minera y de las legitimidades
polticas, empresariales y comunitarias, en sus niveles regionales y
nacionales. Por tanto, un anlisis en diacrona es fundamental y
complementario al anlisis sincrnico que podamos establecer entre
enunciados sinrgicos o antagnicos.Comment by Usuario: Cules de
estos diarios sanjuaninos tienen edicin en soporte papel, y qu
lugar ocupan en ese mercado periodstico? Es importante precisar
este aspecto.Comment by Usuario: MBComment by Usuario: MB. Objetivo
general.
Primeras noticias sobre el derrame: construccin del incidente y
contradicciones
El titular de la noticia ubicada en la seccin Economa del diario
Tiempo de San Juan enuncia: Barrick neg que hubiera contaminacin en
Veladero. El agente activo de esta proposicin es la empresa
canadiense transnacional Barrick Gold Corporation, una de las
corporaciones mineras ms grandes y poderosas del mundo, encargada y
gestora del proyecto Veladero, una mina de explotacin a cielo
abierto. El ttulo del artculo pondera la determinacin de la empresa
sobre otros enunciados de otros medios que ya haban construido un
acontecimiento sobre el derrame de cianuro. Sin embargo debemos
notar aqu el escamoteo del elemento central: el cianuro,
significante contundente porque es veneno de renombre y su
toxicidad est asociada a la muerte en el imaginario social, es
desplazado por el significante contaminacin. Este ltimo es ms
ambiguo, su negatividad es graduada por la variedad de residuos que
puede evocar o incluso por la cercana del trmino a las condiciones
comunes de muchas contaminaciones aceptadas (o aceptables). El
artculo comienza indicando el accionar de la empresa (elaborar un
comunicado) frente a versiones de un presunto derrame. El episodio
derrame entonces est doblemente mediado: primero por unas voces que
al ser plurales dicen potencialmente cosas diferentes (diferentes
versiones) y despus por la categora de refutables (presuntas, no
verificadas). Los daos, segn el artculo, que enuncia a travs de
Barrick, son mnimos; apenas una rotura material de un cao, y los
trabajadores se encuentran a salvo. El artculo cierra adjuntando el
comunicado completo emitido por la minera, en donde se califica el
episodio como un incidente (en oposicin, podramos pensar, a
accidente) y se descarta la contaminacin del ro Jchal y los que
corren en su cuenca. Adems de negar terminantemente cualquier
peligro imaginable, el comunicado despliega las estrategias que
apelan a la seguridad y a la responsabilidad y control de la
actividad minera:Comment by Usuario: Est clasificado
internacionalmente como sustancia altamente txica (letal), no es
cuestin de mero imaginario social.Nuestro equipo de Medio Ambiente
est investigando las causas del incidente y monitoreando todas las
variables ambientales en la zona[footnoteRef:1]. [1: Comunicado de
la Barrick Gold Corporation en el artculo
http://www.tiempodesanjuan.com/economia/2015/9/14/barrick-nego-hubiera-contaminacion-veladero-103632.html]
La empresa tiene un equipo a cargo del Medio Ambiente, y adems
este equipo es capaz de considerar, monitorear y controlar todas y
cada una de las variables ambientales de la zona. Las retricas de
la minera responsable y de la seguridad empresarial operan aqu
rpidamente sobre cualquier desplazamiento que pueda llegar a
incluye algunos datos radicalmente diferentes en contenido y
precisin que los emitidos por el comunicado de la empresa.
Cuantifica la magnitud de cianuro en 1500 litros y aade mercurio
(otro compuesto qumico potencialmente nocivo al contacto y a la
ingesta) al derrame; y especifica que los materiales han sido
derramados directamente al ro (y no en piletas de contencin como
asegura la corporacin). Otro dato es susceptible de ser valorado a
la luz de los regmenes de enunciabilidad y de (in)visibilidad de
los enunciados de lo que nos advierte Foucault; el mensaje
telefnico que lleg a un nmero reducido de habitantes de Jchal
denuncia que los empleados de la mina no pueden decir nada, pero ya
sabe el gobernador y la polica minera pero seguramente la poblacin
ser la ltima en enterarse[footnoteRef:2]. [2: Cadena de Whatsapp
que alert a los vecinos de Jchal en
http://www.lanacion.com.ar/1827827-san-juan-detectan-derrame-de-cianuro-en-una-mina-que-explota-la-barrick-gold]
El no poder decir de los empleados de la mina es el indicador de
un rgimen: algo es decible en tanto y en cuanto haya una serie de
condiciones para que esto sea dicho y, sobre todo, en tanto y en
cuanto est permitido por los mecanismos de exclusin y de control
del discurso (Foucault, 1992). Como estoy pensando el enunciado en
su materialidad, como una cosa entre otras, me veo obligado a
considerar las condiciones concretas de aparicin de este mensaje
telefnico cuyo contenido tiene la particularidad de reflexionar
sobre sus propias sujeciones y sus posibilidades materiales de
existencia y circulacin. El enunciado aparece dentro de una red
limitada de contactos (los vecinos) y comienza a generar otro tipo
de enunciados (que para simplificar podramos llamar enunciados de
preocupacin) dentro de Jchal con otros tantos efectos divergentes,
multidireccionados e imposibles de cuantificar; la reproduccin del
enunciado fuera de sus condiciones de emergencia en asociacin con
la proliferacin discursiva que desencadena a nivel local y a
posterior nacional a travs de los medios digitales y no digitales
inscriben la potencialidad del enunciado en circuitos impredecibles
e impensados. Las fuerzas centrfugas de creacin, pensando con
Lazzarato, trabajan desde los enunciados producidos y reproducidos
atravesando escenarios discursivos, fortaleciendo, enfrentando,
desdoblando y pulverizando otros enunciados, esquivando o no los
mecanismos internos y externos que los sujetan o los anulan, que
los desvan o neutralizan. La materialidad del discurso se nos
muestra tan poderosa como frgil: un mensaje telefnico que se
dispersa entre unos pocos dice algo que los empleados mineros no
pueden decir, pero que el gobernador y la polica ya saben. Las
redes de visibilidades y los caminos de enunciabilidad se sospechan
bajo la voz impersonal de un discurso sin dueo. La peligrosa
materialidad del discurso es conjurada en una especie de enunciado
filtrado que ha escapado tarde: otros enunciados han desplegado sus
redes y sus efectos primero, adelantndose en tiempos y espacios y a
sus posibles efectos y derivados. Si lo que dice el mensaje es
cierto (no utilizar el mecanismo de control verdad/falsedad que
tambin constituye un modo de sujetar el discurso), el gobernador de
San Juan ya tiene la facultad de ejercer algn control sobre el
discurso, de regular el flujo de enunciados a partir de rplicas
estratgicas; cuenta con una posicin desde la cual puede especular
efectos y estimar el reacomodo de la red de enunciados frente al
emergente e imparable (aunque amortiguable) enunciado del derrame
(y sus incontables derivados). Las materialidades discursivas
comienzan entonces a modificarse, direccionarse, encontrarse y
desencontrarse en torno a la irrupcin de este enunciado susceptible
de entrar en sinergia con otros enunciados participantes de las
disputas asimtricas por la significacin de la actividad megaminera,
de la incidencia real en las bisfera y en la cultura de Jchal y de
Iglesia, pero tambin de la matriz discursiva que opera a nivel pas
y por supuesto a nivel mundo.Comment by Usuario: MBComment by
Usuario: Aqu estamos ante el rumor, como gnero que comporta una
prctica social de produccin y circulacin de enunciados, y,
eventualmente, con carcter veridictorio, cuya fuente de enunciacin
es impersonal, desoriginada, del orden del se dice
Reacomodo de las fuerzas: sostener lo sustentable
La gobernanza (Antonelli, 2014) activa y ejecuta sus mecanismos
pragmticos: programas de emergencia, sanciones judiciales e
intervenciones estatales se aplican en nombre del sostenimiento de
lo sustentable bajo la maqueta de castigo o correctivo. El Estado
Provincial se ve obligado a una intervencin significativa para
amalgamar la triple hlice[footnoteRef:3] (empresa, Estado,
comunidad) sobre la que descansa el universo responsable minero. El
da martes 15 de septiembre, el diario digital Tiempo de San Juan
publica un artculo en la seccin San Juan comunicando el accionar
del gobierno frente al suceso ocurrido. Afirma que el gobierno
llevar a la justicia una denuncia penal que implique la
investigacin sobre lo ocurrido en Veladero. Fechado ese mismo da,
el Diario de Cuyo (tambin digital y de distribucin diaria) sube un
artculo con el mismo titular y datos similares. El agente del
titular es en ambos casos el gobierno, quien adems ha pedido
restricciones en el consumo de agua por precaucin a tres
localidades iglesianas. Los artculos son cortos, concisos y ambos
adjuntan el comunicado oficial del gobierno sin precisar ms datos.
Resulta interesante oponer estos dos artculos a la entrada web de
la pgina de No a la mina. El ttulo nos sita en otro orden del
discurso: Testimonios de un crimen ambiental y social en las
cumbres de los Andes[footnoteRef:4]. No slo es preciso mencionar
que cuando los otros dos diarios apenas han utilizado la palabra
cianuro o derrame, este medio ha optado por la definicin
contundente y amplia de crimen ambiental y social; sino que resulta
crucial sealar el agente activo en este titular: los testimonios.
Mientras que el resto de los medios se aboca rpidamente a valorar o
sopesar la gestin del gobierno y los comunicados empresariales, la
web de No a la mina prioriza y jerarquiza los testimonios
vecinales, las declaraciones de gente del lugar y los aportes de
antiguos trabajadores de la Barrick. La construccin del episodio va
tomando diferentes formas de acuerdo a la lnea temporal propuesta
por cada medio (por cada serie de artculos); para los diarios
locales el episodio tiene comienzo el domingo 13 de septiembre.
Para el No a la Mina, el siniestro es parte de un conflicto mayor
que se remonta a la instalacin de la minera y a problemas de
contaminacin del ro Jchal en el ao 2002. Hay un planteo de
historicidad del problema por parte de los vecinos autoconvocados
que queda evidenciado en los testimonios que forman parte del
artculo (Jorge Morales y Fredy Espejo). Los medios locales (los
digitales, por lo menos) no realizan ninguna conexin con sucesos
anteriores ni describen la situacin o el accionar de los vecinos.
Desde sus enunciados, uno lee los trminos legales y judiciales
posteriores al suceso, con un reducido recorte de actores, elisin
de los efectos reales del suceso sobre la naturaleza y la poblacin,
e imposibilidad de contrastar voces en consenso y/o disenso. Una
lgica informativa del tipo secuencial: 1)hubo un inconveniente/2)ya
fue resuelto/3)las precauciones fueron tomadas/4)caso derivado a la
justicia. Esta lgica periodstica combina perfectamente con el
discurso prominero y tiene su correlato en la pragmtica de la
gobernanza; los conflictos (o como su variante minera lo quisiera,
los desafos) suscitados en el marco de las prcticas mineras estn
supervisados, reglados, regulados y controlados por leyes
estratgicas, convenios estatales-empresariales, funciones y
operatorias tcticas de los gobiernos y funcionarios. Para el
despliegue de esta necesaria gobernanza se busca una lgica
centrpeta monolinge; se busca un lenguaje comn cuyo punto nodal es
el consenso. Pero el lenguaje del consenso que propone el discurso
prominero es unvoco: nos requiere hablando el cdigo nico de la
minera responsable inscrita en la retrica mayor del desarrollo
sustentable y su feliz par, el progreso. La integracin prometida y
asociada a las oportunidades para todos, se funda en el doble
discurso de la diversidad: se expulsan comunidades y se matan las
tierras mientras se convoca al consenso, a la tolerancia y a la
educacin de lo que Antonelli ha llamado los nuevos brbaros. La
poltica del consenso (falsa poltica cuya cara visible acaba siendo
la fuerza policial) y la educacin a travs de la generacin de
parmetros cientficos establecidos entre universidades y empresas
son soportes legitimadores del poder semitico del capital minero.
Los marcos jurdicos nacionales e internacionales y la ampliacin de
las fronteras geopolticas para la intervencin cooperativa y
coordinada entre estados-nacin y las empresas, son insuficientes
para que la corporacin minera lleve adelante sus neoplanes
extractivistas. Y aqu radica la necesidad del poder semitico: para
intervenir de las formas en que lo hace sobre ecosistemas,
poblaciones y culturas, el poder corporativo debe crear y perpetuar
(aunque su forma nunca sea perpetua sino que se ve obligada a
mutar, como hemos visto con Antonelli al respecto de las actas
fundacionales de la nueva minera) un cdigo nico que posibilite
modelar imaginarios, intervenir en los cuerpos, producir
subjetividades y decidir sobre vidas. Esto equivale a la formacin
de un dispositivo biopoltico foucaulteano, es decir, como la red de
relaciones que se pueden establecer entre elementos heterogneos:
discursos, instituciones, arquitectura, reglamentos, leyes, medidas
administrativas, enunciados cientficos, proposiciones filosficas,
morales, filantrpicas, lo dicho y lo no dicho[footnoteRef:5].
Comment by Usuario: Nominacin del derecho ambiental penal.Comment
by Usuario: MB.Comment by Usuario: MB.Comment by Usuario: Muy bien.
Discurso tcnico experto, y buenas prcticas.Comment by Usuario:
MBComment by Usuario: Bien, esta es la definicin de dispositivo que
adoptamos hay otras-, pero sera oportuno decir por qu biopoltico.
[3: (Antonelli, 2009)] [4:
http://www.noalamina.org/mineria-argentina/san-juan/item/14660-testimonios-de-un-crimen-ambiental-y-social-en-las-cumbres-de-los-andes]
[5: Castro, Edgardo. Diccionario Foucault. Temas, conceptos y
autores. Siglo XXI editores, s.a. Buenos Aires 2011. ]
Las coincidencias con el plan minero son mximas: funciona como
programa instituyente para justificar (y ocultar) ciertas prcticas,
posee un carcter estratgico y una funcin definida y responde a una
urgencia determinada (pienso en las actas fundacionales que
definiran la nueva minera para continuar el saqueo); todas
caractersticas de un dispositivo. Adems, quisiera nombrar otro
carcter propio de un dispositivo que he marcado durante el trabajo
y que aparece manifiesto en el corpus seleccionado. Segn Foucault,
una vez constituido un dispositivo, ste puede sostenerse a s mismo
nicamente a travs de un proceso de sobredeterminacin
funcional[footnoteRef:6]: cada efecto (previsto o no, favorable o
desfavorable) sobre el dispositivo entra en resonancia o
contradiccin con los otros, exigiendo un reajuste. Los efectos
desencadenados a partir de la rotura del cao (cuya maquinaria en su
ms amplio sentido es parte del dispositivo) generaron enunciados y
efectos muy diversos sobre la red de instituciones, reglas, micro y
macro polticas. Comment by Usuario: Muy bien. [6: Castro, Edgardo.
Op. Cit.]
El da sbado 19 de septiembre, Tiempo de San Juan publica una
nota cuyo titular declara Mentiras internas y despidos en Barrick,
que consiste principalmente en un anlisis de culpas que desliga al
Estado de la provincia de cualquier participacin directa por un
lado, y plantea un escenario donde la empresa Barrick Gold, con
sede matriz en Toronto es ajena a la irresponsabilidad cometida.
Las responsabilidades son condensadas en un significante nuevo, un
engao, atribuido a una especie de gerencia intermedia y
malintencionada (que no pertenece a San Juan, ni tampoco a
Barrick). En el da de la fecha (11 de noviembre), Diario de Cuyo
informa que la empresa Barrick cambi el gerente a cargo de la mina
cuando ocurri el infortunio. Diversos diarios locales y nacionales
han publicado ya el volumen de cianuro derramado que en principio
fue negado y despus aligerado por el gobernador de San Juan y por
la misma empresa. La justicia suspendi el funcionamiento de la mina
por un corto perodo de tiempo y 15 empleados fueron desplazados de
sus puestos. Guillermo Cal, el director ejecutivo de la Barrick
Gold en Argentina renunci a su cargo hace cinco das. A esto llamo
reacomodo de las fuerzas.Comment by Usuario: MBComment by Usuario:
MB
Consideraciones finales
Nos interesa destacar la productividad de las categoras
analticas de enunciado y dispositivo en relacin a problemticas
actuales del capitalismo en su nueva fase; un capitalismo
corporativista que ha ideado redes transnacionales y
transcontinentales con articulaciones locales a fines de continuar
con el minucioso y a la vez vasto saqueo de recursos naturales.
Para hacer funcionar sus redes, la maquinaria capitalista se ve
obligada a estudiar, disear y construir imaginarios atractivos y
prometedores que permitan la adhesin, incorporacin y fagocitacin de
organizaciones, Estados, poblaciones y culturas. Es con ese fin que
se nutre de estrategias discursivas y retricas atrayentes e
inclusivas; la fundacin de un mundo cantera requiere una sinergia
de fuerzas centrpetas, fuerzas de expresin que pretendan el mismo
lenguaje; cdigo nico del mundo para y por el oro. Desentraar o
desenmascarar esas fuerzas que se retuercen cuando hay disputas (as
sean asimtricas) de poder y enunciados que escapan a su rgimen;
nombrarlas al menos, situarlas en su direccin y sentido;
adivinarles la distribucin de sus vectores componentes; todo esto
puede hacerse, o al menos, empezarse, desde un anlisis del discurso
como el que propone la ctedra.
Bibliografa
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http://nuso.org/articulo/megamineriatransnacional-e-invencion-del-mundo-cantera/
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2011FOUCAULT, MICHEL (1997) Introduccin y Las formaciones
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Editores. Pp. 139-158.LAZZARATO, MAURIZIO (2006) Entrevista y
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Artculos utilizadosLunes
14/09http://www.lanacion.com.ar/1827827-san-juan-detectan-derrame-de-cianuro-en-una-mina-que-explota-la-barrick-goldhttp://www.tiempodesanjuan.com/economia/2015/9/14/barrick-nego-hubiera-contaminacion-veladero-103632.html
Martes
15/09/2015http://www.tiempodesanjuan.com/sanjuan/2015/9/15/gobierno-pidio-investigue-derrame-cianuro-veladero-103884.htmlhttp://www.diariodecuyo.com.ar/home/new_noticia.php?noticia_id=685406http://www.noalamina.org/mineria-argentina/san-juan/item/14660-testimonios-de-un-crimen-ambiental-y-social-en-las-cumbres-de-los-andes
Sbado 19/9
http://www.tiempodesanjuan.com/economia/2015/9/19/mentiras-internas-despidos-barrick-104311.htmlLunes
21/09http://www.lanacion.com.ar/1829921-barrick-gold-informo-que-desplazo-a-15-empleados-de-veladero-para-facilitar-el-trabajo-de-la-justiciaMircoles
11/11/http://www.diariodecuyo.com.ar/home/new_noticia.php?noticia_id=693003
