EN PORTADA

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LA INCERTIDUMBRE SOBRE LA MUERTE DEL LDER NAZI DIO LUGAR A TODA CLASE DE RUMORES SOBRE SU POSIBLE HUIDA Y DESTINO FINAL

EN ABRIL DE 2015 SE CELEBRARON 70 AOS DEL PRETENDIDO SUICIDIO DE ADOLF HITLER. SIN EMBARGO, NO SON POCOS QUIENES CREEN QUE EL LDER NAZI ESCAP INDEMNE DEL BNKER DE BERLN. EL ESCRITOR ERIC FRATTINI HA TENIDO ACCESO A MS DE 2.000 PGINAS DE DOCUMENTOS EXTRADOS DE LOS PRINCIPALES SERVICIOS SECRETOS DEL MUNDO, ARCHIVOS QUE HABLAN DE LA PRESUNTA HUIDA DE HITLER Y EVA BRAUN A ALGN RECNDITO Y DISCRETO ENCLAVE EN LATINOAMRICA. FRUTO DE UNA LARGA INVESTIGACIN, ERIC FRATTINI HA ESCRITO MURI HITLER EN EL BNKER? (TEMAS DE HOY, 2015), UN LIBRO INSTRUCTIVO PERO MUY AMENO DEL CUAL LES OFRECEMOS EL SIGUIENTE EXTRACTO.

TEXTO ERIC FRATTINI

SDAMERIKA:EL LTIMO REFUGIO DE HITLER

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ENIGMAS Y ANOMALAS

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Se sabe, gracias a un mapa original que se conserva en la Franklin D. Roosevelt Presiden-tial Library de Nueva York, que Hitler tena

planeada en 1941 una reorga-nizacin de todo el continente sudamericano, desde Panam a Tierra de Fuego, una vez que sus tropas hubieran conquistado Eu-ropa. En la nueva Sdamerikas Hauptlinien, ideada por los nazis, desapareceran pases como Panam, Venezuela, Colombia y Ecuador, que se integraran en una sola nacin llamada Neus-panien. Guyana, Surinam y la Guayana Francesa quedaran unidas en una sola Guyana bajo el control de la Francia de Vichy. Per quedara anexionada a una gran Chile y parte de Bolivia. Paraguay, Uruguay y el resto de Bolivia desapareceran que-dando anexionadas a una gran Argentinien. Slo Brasil conti-nuara manteniendo su territorio

histrico. El 12 de septiembre de 1940, cuando los ejrcitos del Reich ya haban conquistado Polonia, Dinamarca, Noruega, Luxemburgo, Blgica, los Pases Bajos y Francia, el diario The Pittsburgh Press publicaba un reportaje titulado El pie de Hitler en Sudamrica, que realmente era un extracto del libro escrito por Hermann Rauschning Hitler Speaks: A Series Of Political Con-versations With Adolf Hitler On His Real Aims:

Fue en esta terraza donde, a principios del verano de 1933, estuve presente en una conver-sacin que fue de lo ms reve-ladora de las opiniones polticas de Hitler sobre Amrica. Me mostr hasta qu punto sus pla-nes eran de largo alcance, inclu-so entonces () Un destacado miembro de confianza de las SA acababa de regresar de Amrica del Sur y Hitler le anim a parti-cipar en la conversacin y le hizo numerosas preguntas. Estuvo

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especialmente interesado en Brasil (ver recuadro Democra-cia suicida).

Estaba claro desde 1933 que para Adolf Hitler y para los prin-cipales lderes del Tercer Reich el sueo del futuro, una vez conquistada toda Europa, co-menzara en Sudamrica. Hasta estas tierras llegara supuesta-mente Adolf Hitler acompaado de su esposa Eva Braun y de su secretario Martin Bormann. Pero cmo dio inicio esta leyenda?

DESEMBARCO EN ARGENTINAEl 17 de julio de 1945, siete das despus de la rendicin del U-530 en Mar del Plata, el corresponsal del Chicago Times en Montevideo (Uruguay), Vincent DePascal ase-guraba: Segn una informacin que acabo de recibir de Buenos Aires, es absolutamente cierto que Hitler y su esposa Eva Braun, esta ltima vestida con ropas masculinas, desembarcaron en

EL ENIGMA Los restos de Hitler jams se econtraron Qu mejor punto de partida para poner en duda la historia oficial.

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CONSPIRACIONES

Una noticia de la agencia AP inform en 1945 de la llegada de prominentes nazis a San Julin, en la Patagonia argentina (abajo).

Desde 1933 se saba que, tras conquistar Europa, Hitler pretenda desembarcar en Sudamrica acompaado por Eva Braun y Bormann (dcha).

Argentina y se encuentran en un in-menso establecimiento alemn en la Patagonia () Hitler y Eva Braun habran desembarcado de un sub-marino alemn no identificado, en una solitaria playa y estaran viviendo en uno de los numerosos esta-blecimientos adquiridos para dar refugio a los dirigentes nazis cuando fracasasen sus planes de conquista mundial () Hay razones para creer que el Gobierno argentino puede haber tenido conocimiento de que submarinos alemanes merodeaban frente a sus costas. Ciertamente, hay suficientes simpatizantes con los nazis en Argentina que se abalanzaran ante la perspectiva dar cobijo a un smbolo viviente del nacionalsocialismo.

ALERTA EN EL FBIEl 22 de julio de 1945, la agencia Associated Press se haca eco de la historia y publicaba la siguiente informacin: Un agente federal inform recientemente de que existan serias razones para creer que prominentes nazis pudieron desembarcar en San Julin, en la Patagonia, llevando tal vez con ellos oro en barras, joyas y otros objetos de valor que los ejrcitos aliados no controlaron en su aco-metida final hacia Berln. Adems, un informante del Ministerio del Interior declar que la embajada estadounidense en Buenos Aires realizara una investigacin sobre una informacin que apunta a que Hitler y Eva Braun se encuentran en Argentina. El citado portavoz dijo que la embajada investigar la noticia enviada por el correspon-

sal en Montevideo del Chicago Times, en la que afirma que la pareja lleg a una zona solitaria de la extensa costa argentina y vive ahora en una finca propiedad de alemanes en la Patagonia. Se seal tambin que Argentina ha dado repetidas seguridades a los gobiernos aliados de que su terri-torio no ser empleado para dar cobijo a los criminales de guerra.

El 28 de noviembre de 1945, la Oficina de Asuntos Legales en la embajada de Estados Unidos en Montevideo enva un informe al director del FBI, J. Edgar Hoover, respondiendo a las afirmacio-nes sobre Hitler en Argentina aparecidas en Magazine Digest

y en el Chicago Times. Hoover haba sido presionado desde el Congreso para que se investiga-sen los rumores que circulaban sobre la presencia del Fhrer y de su esposa en algn punto de Argentina. Al parecer, el FBI haba ordenado que su oficina en la capital uruguaya investigara a Vin-cent DePascal, el periodista que firm la informacin en el diario estadounidense (ver recuadro Re-putacin en entredicho).

Estaba claro que la intencin del informe de la oficina del FBI en Uruguay era la de desprestigiar al periodista DePascal, que fue quien escribi sobre la posibilidad de que Hitler y Eva Braun estuvieran en

J. Edgar Hoover (abajo) se tom muy en serio las informaciones que ubicaban a Hitler y a Eva Braun en algn lugar de Sudamrica.

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Argentina para el rotativo estadou-nidense, pero las noticias sobre la presencia del lder nazi en Sudam-rica no iban a detenerse ah.

El 17 de septiembre de 1945, la oficina del director del FBI enva un informe de carcter urgente a la oficina del FBI en la embajada de Estados Unidos en Londres y a la oficina del SIS, la inteligencia britnica, en la que Hoover hace precisas referencias a la presen-cia de Hitler en un Hotel de LA FALDA (Argentina), solo que esta vez la informacin ha sido reco-gida por agentes de la Oficina de Servicios Estratgicos (OSS) en la propia Argentina. En un punto del informe, Hoover hace referen-cia al matrimonio Eichhorn: La siguiente informacin se obtuvo de la Sala de Guerra a travs de XXXX de la OSS sobre el asunto titulado anteriormente, que a su vez la OSS recibi de XXXX. Una tal seora EICHHORN, miembro supuestamente respetable de la sociedad argentina y propietaria del ms grande hotel-spa en LA FALDA (Argentina) hizo, en una fiesta en familia hace algn tiem-po (exactamente cundo o dnde no se afirma), las siguientes ob-servaciones:

1. Su familia ha sido entusiasta partidaria de HITLER desde que se fund el Partido Nazi.

2. Incluso antes de que los nazis llegaran al poder ella inmediatamen-

te envi por cable todos los ingresos de su cuenta bancaria, un total de 30.000 marcos, a disposicin de GOEBBELS. Esto fue en respuesta a la peticin que este ltimo le hizo de unos 3.000 o 4.000 marcos para fines propagandsticos.

3. HITLER nunca olvid este acto y durante aos despus de llegar al poder su (se supone que se refiere a ella y a su marido) amistad con l lleg a ser tan estrecha que solan vivir juntos (sic) en el mismo hotel, con ocasin de su estancia anual en Alemania para el PARTEITAG. Se les permita entrar en las habita-ciones privadas del Fhrer en cual-quier momento sin ser anunciados previamente.

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4. Si el Fhrer en cualquier mo-mento tuviera dificultades, siempre podra encontrar un refugio seguro en LA FALDA, donde ya habran he-cho los preparativos necesarios

UN HOTEL DE LUJOEl documento del FBI hace referen-cia a Walter Eichhorn y su esposa Ida Bonfert, y al Eden Hotel, propie-dad del matrimonio en La Falda, en la provincia argentina de Crdoba. El hotel-spa haba sido levantado para alojar a las familias adineradas de Argentina y Europa. Cuando se inaugur en 1898, contaba con dos plantas, amplios salones, un cente-nar de habitaciones y cuatro baos por planta. En las remodelaciones de aos posteriores lleg a tener 38 baos, un saln comedor para ms de 250 personas y un come-dor auxiliar para nios y personal del servicio domstico, saln para fiestas, sala de lectura y biblioteca, dos jardines de invierno, bar, galera cubierta y dos balcones desde los que se apreciaba el parque con mi-les de rboles trados desde Europa. Tambin posea unas importantes caballerizas, ya que se practicaba en la zona la caza del zorro. En sus terrenos haba un campo de golf de 18 hoyos, una gran piscina con aguas termales, pistas de tenis y hasta dependencias bancarias que informaban, cada da, a los impor-tantes clientes de los movimientos burstiles de los principales merca-dos europeos y de Wall Street. Todo en el Eden Hotel era lujo. Su mobi-liario, sus vajillas, sus estatuas, sus fuentes, sus alfombras, sus pianos de cola e incluso las pinturas euro-peas que decoraban las paredes de los grandes salones donde se orga-nizaban elegantes bailes de obligada etiqueta. Walter Eichhorn se haba hecho cargo del establecimiento en 1912, pasando por sus salones y ha-bitaciones personajes de la talla de Arturo Toscanini, el Prncipe de Gales Eduardo Windsor (futuro Eduardo VIII), Humberto II de Saboya, el Che Guevara o Albert Einstein.

Se sabe que el matrimonio Eichhorn conoci a Adolf Hitler durante un viaje de estos a Mnich en 1924. Ida, la esposa de Walter, mostraba con orgullo el ejemplar nmero 110 de la edicin numerada del Mein Kampf, que Hitler le haba fi rmado de puo y letra. Ese mis-mo ao, los Eichhorn se afiliaron al

relacionada con la posible presencia de Adolf Hitler en Colombia. La oficina del FBI en la Embajada de EE UU en Bogot investig el relato de un informador que aseguraba que el Fhrer estaba oculto en alguna zona cercana a la capital colombiana. Incluso hace un relato muy pormenorizado a los agentes federales enviados por Hoover para comprobar la veracidad de la infor-macin: Hitler desembarc desde un submarino RVZ-1048 en Baha Honda, costa de Guajira, Colombia, en la madrugada del 19 de julio de 1945. Iba acompaado de seis hombres; dos de ellos expertos en instrumentos de precisin y radio; dos eran tenientes coroneles, uno de ellos oficial de infantera, y el otro un oficial de artillera; un hombre era un mayor del cuerpo de seales; y el ltimo un experto en submarinos. Todos ellos fueron vestidos con ropa de civil, disfrazados de campesinos. Llevaban equipos cubiertos con hule y bolsas conteniendo dlares americanos y () por valor de tres millones de dlares () Cuando el grupo desembarc en Baha Hon-da, ellos se encontraron con cuatro fuertes indios guajiros que les esta-ban esperando con el fin de guiarles a ellos y a su equipo a los lugares dispuestos. Dos agentes o los hom-bres de contacto llegaron con estos indios. Haban arreglado todo con antelacin, y tenan caballos y un camin esperando cerca. Hitler y su escolta tenan un viaje muy arduo. Se vieron obligados a viajar de no-che y a veces muy de madrugada. Finalmente, llegaron al pequeo puerto de Magdalena. Aqu, abor-daron pequeas embarcaciones de carga o barcazas y viajaron a otro puerto en el mismo Departamento.

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caso necesario. Exageraba el direc-tor del FBI cuando envi este docu-mento y pidi que se investigara a los Eichhorn? No lo parece a tenor de las pruebas que demostraban la estrecha relacin de los propietarios del Eden Hotel con Adolf Hitler. No hubiera sido posible que Hitler, tras huir de Berln en un avin pilotado por Hanna Reitsch, volar a Tnder en un avin pilotado por el capitn Pe-ter Erich Baumgart, hacer escala en el puerto de Barcelona o el de Kris-tiansand, en Noruega, subir a bordo del U-530 o del U-977 y desembar-car secretamente en San Julin o en algn otro punto de la costa sur de Argentina, llegara hasta algn lugar controlado por los Eichhorn o por uno de sus partidarios? ...

Otra de las denuncias que ms atrajo la atencin de J. Edgar Hoover y de sus hombres del FBI fue la

El Eden Hotel, hoy abandonado (1), fue erigido para recibir a las familias ms adineradas de Argentina y Europa. En sus lujosas instala-ciones se aloja-ron celebridades como Eduardo VIII (2), Albert Einstein (3) y, supuestamente, el propio Hitler.

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Hitler subi a bordo de un submarino en Noruega y desde all viaj a la Patagonia

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Partido Nacionalsocialista. Desde ese momento las misivas entre el matrimonio Eichhorn y Hitler fueron bastante fluidas. Se conocen al me-nos cuatro de ellas, casi siempre en agradecimiento por los fondos en-tregados por Ida Bonfert al NSDAP (Ver recuadro).

Es posible que se refugiaran Hitler y Braun en este estableci-miento bajo el manto protector del matrimonio Eichhorn tras la derrota de Alemania? Al menos el todopo-deroso director del FBI, J. Edgar Hoover, as lo crea cuando, el 13 de noviembre de 1945, enva una copia del informe redactado dos meses antes a la embajada de EE UU en Buenos Aires. El texto vuelve a centrarse en las estrechas relacio-nes del matrimonio Eichhorn con Hitler, y en la posibilidad de que ste encontrara refugio en La Falda, en

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CONSPIRACIONES

Viajaron por camin, y de Pamplo-na a Bogot fueron en un coche especial. Nunca pararon en ningn hotel de ningn tipo. Agentes de enlace, los hombres de contacto, se encargaron de conseguir el paso de los barcos, etc., y proporcionar transporte y provisiones. Camiones y otros vehculos siempre fueron abordados en lugares aislados que estaban bastante lejos de cualquier pueblo o ciudad.

OPERACIN NIEBLAPuede que la historia del informa-dor fuera verdadera o no, pero lo realmente cierto es que en la Unter-seeboot no exista ninguna unidad submarina con el nmero 1048. El cdigo de submarinos pasaba del U-1025, al mando del capitn Oskar Curio, al U-1051, al mando del teniente Heinrich von Holleben. En otro prrafo de la declaracin de este informador a los agentes del FBI dice lo siguiente: Solo una vez, a comienzos de 1946, cuando la Legacin Rusa en Bogot comenz a incrementar su personal, nos te-mimos que los soviticos hubieran descubierto el lugar donde estaba oculto el Fhrer. Nuestros temores se disiparon semanas ms tarde, cuando los agentes de la GPU (Poli-ca Secreta Rusa), frustrados en sus intentos de localizar a Hitler y a su grupo y que estaban llevando a cabo con alegra la Operacin Niebla, como llamaban al plan, regresaron a Mosc desalentados. Ahora sabe-mos por qu la Legacin Rusa en Bogot tuvo un gran incremento de personal. Hitler era consciente de cada uno de sus movimientos. El grupo tena un agente encubierto entre el personal de la Legacin Rusa. El informante termina ase-

DEMOCRACIA SUICIDAVamos a crear una nueva Alemania exclam Hitler. Encontraremos todo lo que necesita-mos all.Luego explic ampliamente todo lo que una persona trabajadora y un gobierno enrgico podan hacer para crear orden. Todas las precondiciones para una revolucin que, en unas pocas dcadas o incluso aos, transformara un estado corrupto y mestizo en un dominio alemn.Adems, tenemos derecho a este continente, por los Fugger y Weisers que tenan posesiones all. Tenemos lo conseguido anteriormente para reparar lo que nuestra desunin alemana ha destruido. No es cierto que hayamos perdido todo lo que una vez ocupamos. El tiempo ha pasado para darnos un lugar mejor que a Espaa o Portugal (pases histricamente coloniza-dores de Amrica).Von P., su husped, estuvo de acuerdo en cuanto a las oportunidades especiales de Alemania en Brasil.Aqu nos necesitan si quieren hacer algo de su pas remarc Hitler.Tenan un menor acceso, dijo, para capital de inversin que para el espritu de empresa y la capacidad de organizacin. Y estaban hartos de Estados Unidos. Saban que estaban siendo explotados, y no esperaban nada de ellos para el desarrollo de sus pases.[...]Si hay un lugar donde la democracia es insensata y suicida, es en Amrica del Sur continu Hitler. Debemos fortalecer la clara conciencia de esta gente, para que puedan tener la posibilidad de lanzar tanto su liberalismo y su democracia por la borda. Estn realmente avergonzados de su buen instinto. Piensan que todava tienen que dar voz a la democracia. Esperemos colonizar. Por esto, no tenemos necesidad de funcionarios oficiales o gobernadores. Juventud audaz es lo que queremos. No necesitan ir a la selva para limpiar el terreno. Lo que queremos son personas de buen nivel social.

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REPUTACIN EN ENTREDICHOEn referencia a la carta del FBI a la Oficina de Buenos Aires, una co-pia de la cual se presenta en esta oficina, a fecha 26 de octubre de 1945. Dicha carta sugera que se interrogara a XXXX para obtener datos que apoyaran las afirmacio-nes aparecidas en un recorte de Magazine Digest. Aunque no ha llegado ninguna copia del recorte a esta oficina, se presuma que haca referencia al informe XXXX del Chicago Times, en el que se hablaba de la posibilidad de que Hitler y Eva Braun estuvieran en Argentina. Este asunto fue denunciado al FBI y a la Oficina de Buenos Aires por radiograma y cable, respectivamente, el 19 de julio de 1945 con el ttulo Informe de Hitler y Eva Braun en Argentina. XXXXX es un amigo de XXXX y fue cuestionado de nuevo sobre la fuente de este ltimo. XXXX inform de que la informa-cin que l ofreci la recibi de un pariente en Argentina. Sigui defendiendo la probabilidad de que Hitler est en Argentina. Es un asunto muy comentado en Montevideo que una publicacin estadounidense como Chicago Ti-mes tenga un representante local de tan bajo calibre. Su reputacin es extremadamente pobre y se le considera un periodista sensacio-nalista y poco fiable. En vista de esto, no se estn realizando ms investigaciones en Montevideo en relacin con este asunto.

Al finalizar la guerra, la revista The National Police Gazette inform de que Hitler viva en Bogot, en coincidencia con informes del FBI.

gurando: Yo no he visto a Hitler desde el 5 de abril. Cuando retorn a la Plantacin el 15 de abril estaba completamente vaca. Los equipos, los laboratorios, todo haba desa-parecido. El agente del FBI que toma la declaracin escribe al final del documento: El autor de la carta asegura que Eva Braun muri du-rante el viaje en submarino de una embolia. Desde ese da, Hitler se ha vuelto extremadamente taciturno y aptico. Lo nico que inflama su en-tusiasmo es el pensamiento de una cruzada mundial contra los Rojos o Rusos.

ENCUENTRO EN BERLNEsta historia volvera a ver la luz en junio de 1968, cuando la revista estadounidense The National Police Gazette dedicaba tres pginas a relatar casi lo mismo que haba apa-recido en el informe del FBI, justo veinte aos antes, bajo el titular de Hitler est oculto en Bogot, Colom-bia. El periodista George McGrath hace referencia a documentos desclasificados del Departamento de Estado y habla de la Operacin Niebla, el nombre en cdigo del plan de evasin de Hitler.

El texto hace referencia a los misteriosos aviones que aterrizaron en y despegaron de Berln en los ltimos das del Reich, pero alega que fue el mariscal Ritter von Greim quien pilotaba el Fieseler Storch en el que supuestamente huyeron Hit-

Agencias de inteligencia occidentales hicieron circular fotografas que mostraban a Hitler tras someterse a un radical cambio de identidad.

CONSPIRACIONES

ler y Eva Braun. Desde all volaran a Hamburgo, en el mismo momento en el que su doble se disparaba en la boca y su cuerpo era pasto de las llamas. En el puerto alemn, Hitler subi a un submarino y naveg durante cincuenta das, escolta-do por una flotilla de submarinos, sumergido atraves el estrecho de Dinamarca, en direccin a Islandia y Groenlandia afirma McGrath. A partir de este punto, el periodista de The National Police Gazette hace un recorrido por la historia relatada por el informador en Colombia a los agentes del FBI.

Lo interesante del reportaje es que el periodista revela algunos da-tos sobre el informador del FBI. Por ejemplo, que es colombiano, edu-cado en Europa, y que se reuni con Hitler en Berln durante la ce-lebracin de los Juegos Olmpicos de 1936. Al parecer, le presentaron a Hitler gracias a la intervencin de un antiguo compaero de colegio con el entonces ministro de Guerra, el mariscal Werner von Blomberg.

Cada vez que yo visitaba Ale-mania, hablaba con el Fhrer y as creci nuestra amistad. Adems tambin le ayud con los diplom-ticos sudamericanos. Yo obtuve su consentimiento para realizar un experimento de industrializacin esponsorizado por Alemania. Yo deseaba hacerlo efectivo en las tierras que yo posea en el rea de Narino, en Colombia, declar el informador a George McGrath. El 12 de enero de 1945 me visitaron unos agentes alemanes. Uno de ellos me pregunt sobre lugares seguros en Sudamrica, y mi opi-nin para un refugio temporal para Hitler, un grupo de cientficos ale-manes y oficiales, en caso de que ellos quisieran desaparecer tem-poralmente de la escena mundial. Yo recomend mi patria, Colombia. Con inmensos territorios deshabi-tados y con tierras completamente abandonadas donde se podra mantener el secreto. El resto del texto es casi exactamente igual al informe del FBI, incluida la historia de la muerte de Eva Braun a bordo del submarino que los trasladaba hasta Colombia: Su cuerpo fue arrojado al mar, tras morir de una hemorragia cerebral.

Para terminar, el informador da varios datos sobre el nuevo Hitler:

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Adems de su reciente libro Muri Hitler en el bnker? (Temas de hoy, 2015), Eric Frattini es autor de ms de una veintena de ensayos publicados en quince idiomas y 42 pases. Frattini recibi en 2013 el II Premio Nacional de Investigacin Periodstica por su trabajo sobre el caso Vatileaks y, en julio de ese mismo ao, el Strillaerischia al Mejor Enviado Especial por su labor en Afganistn, ambos galardones concedidos en Italia.

otros dos nazis, su principal asesor, Martin Bormann, y el doctor de campo de concentracin Josef Mengele.

Los funcionarios del gobierno paraguayo permiten su presencia dijo. Es un pequeo detalle que hace que acercarse al campa-mento resulte peligroso.

Se ha descartado una reivindica-cin reciente de Rusia, que asegura que han identificado el cuerpo de Hitler por su dentadura, alegando que es un truco obvio, imitar la dentadura para dejar un rastro fal-so. El artculo hace tambin un breve repaso a los acontecimientos sucedidos con Adolf Eichmann y su secuestro por parte del Mossad israel; de Josef Mengele, quien supuestamente estara viviendo en Iguaz, en la frontera entre Brasil, Argentina y Paraguay; de Bormann, quien habra sido visto por diversos testigos en Chile, Argentina y en los estados brasileos de Ro Gran-de Do Sul y Santa Catarina, con importante presencia de comunida-des alemanas; o Herbert Cukurs, el nazi acusado del asesinato de cua-renta mil judos en Riga y que ha-bra sido asesinado en Montevideo, tras residir con su propio nombre, en Brasil desde 1950. n

JOR

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PUEN

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SABAS QU?

Berchtesgaden, en la ciudad yugos-lava de Bobovo, en la ciudad polaca de Legnica, o en las ciudades espa-olas de Reus, Mallorca o Tenerife.

EL FHRER SIGUE VIVOHasta finales de los aos 60 y comienzos de los 70, la prensa internacional continu dedicando pginas y pginas al famoso mito de Hitler en Sudamrica. Por ejemplo el 29 de abril de 1969, la estadounidense se haca eco de una informacin recogida por John Wilson, de la agencia Copley News Service, en Sao Paulo, Brasil, en la que se aseguraba que Hitler estaba vivo en Paraguay. Wilson afirmaba en su artculo que su fuente de informacin era un misterioso hombre de gafas oscuras quien en rueda de prensa habra anunciado que el Fhrer segua vivo:

El hombre misterioso, que se identific como Louis, se ofreci a llevar a la polica internacional hasta la guarida del Fhrer alemn de la Segunda Guerra Mundial.

Hitler est ms gordo, un poco deteriorado, con calvicie y se ha cortado el bigote, pero an est saludable dijo.

Louis asegur que Hitler viva en un campo en Paraguay junto con

Reciba todos los peridicos y el New York Times le era traducido diariamente. Tena tres estaciones de radio clandestinas en unidades mviles que le permitan estar en contacto constante con sus agentes. Hitler no es conocido por su nombre, y tampoco sus em-pleados le llaman Fhrer. Solo sus ms cercanos ayudantes conocen su identidad real. La estancia est en manos de trabajadores mos. Encontr una zona rural y de caza tranquila. Ahora lleva barba y gafas. Es completamente distinto.

Lo cierto es que los rumores sobre avistamientos de Adolf Hitler y su esposa en diferentes pases de Sudamrica y Norteamrica no cesaron con el paso de los aos. Al menos durante los siguientes veinte aos continuaron llegando a la sede del FBI en Washington decenas de declaraciones de testigos que declaraban haber visto a Hitler en la ciudad brasilea de Cassino, en Uruguay, en Venezuela en Bogot, en Chile, en Quebec e incluso en la Martinica Francesa. Tambin llega-ron pistas de testigos que dijeron haber visto a Hitler y a su esposa Eva Braun, incluso a Martin Bor-mann, en las ciudades alemanas de Schwindegg, Schleswig-Holstein o

Josep Mengele habra permanecido oculto en Iguaz (abajo), entre Brasil, Argentina y Paraguay.

INFORMES DEL FBI

DESTAPARON QUE HITLER PUDO HUIR A

AMRICA