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CENTRO DE INFORMÁTICA Y SISTEMAS

Ing. Lidia Ruiz Valera

ÍNDICE DE CONTENIDO

TERAPIA DE CONTENCIÓN, VENEZUELA, SEGÚN JIRINA PREKOP

¿QUE ES LA TERAPIA DE CONTENCIÓN? CONSIDERACIONES BÁSICAS DE LA ESPECIALIZACIÓN

¿En dónde surge la terapia de contención? ¿Cuál es su objetivo? ¿En qué casos específicos es recomendable la terapia de contención?

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TERAPIA DE CONTENCIÓN, VENEZUELA, SEGÚN JIRINA PREKOP

Se han desarrollado cuatro variantes de la terapia de contención. Existe,

entonces, la contención:

* Para restaurar el

vínculo emocional

que fue roto en la

fase más temprana

de la vida del niño;

* Entre madre e

hijo o entre padre e

hijo, para solucionar conflictos acumulados en la relación.

* Entre los integrantes de una pareja, también para solucionar

conflictos acumulados en la relación;

* Como terapia de reconciliación para adultos y sus padres que no puedan estar

presentes debido a su avanzada edad u otros motivos (por supuesto, esto se

aplica de manera especial cuando los padres ya han muerto). en este caso la

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confrontación se da con ayuda de una visualización dirigida por el terapeuta y en

un abrazo dado por un buen amigo (o por la pareja).

¿QUE ES LA TERAPIA DE CONTENCIÓN?

Es un tipo de terapia en la que, bajo la dirección de un terapeuta experimentado,

pueden trabajar los padres con sus hijos, para sanar relaciones en conflicto.

Es una nueva aproximación terapéutica para el manejo de trastornos tales como:

autismo, miedos, trastornos psicosomáticos, trastornos de sueño y alimentación,

agresión, hiperactividad, enuresis, encopresis, trastornos de conducta, niños tiranos,

trastornos de vinculación debido a casos de hospitalización, así como separaciones de

la madre por viajes, trabajo o enfermedad.

Esto genera un caos afectivo que genera una ambivalencia que caracteriza la

relación.

Los afectos destructivos en el niño (coraje, tristeza, miedo) no se controlan sino que estallan abruptamente. La respuesta más frecuente a esta conducta es aislar al niño, mostrar indiferencia o agredirlo, con lo que se refuerzan aún más las conductas destructivas esta situación va llevando a un círculo vicioso, es decir, a una crisis de relación que aumenta y se desarrolla en espiral ascendente.La Terapia de Contención está dirigida a la diada madre-niño y consiste en establecer un intenso contacto físico entre ambos, bajo las instrucciones del terapeuta. En el proceso, ambos se sujetan para llevar a cabo una apertura de sentimientos lo bastante fuerte, para romper los conflictos en la diada.

Dicha terapia rompe las conductas ambivalentes de amor y odio de ambos, proporciona a los padres un control más afectivo y permite al niño entrar en u n proceso de desarrollo de ligas afectivas (re­bonding). Los síntomas del niño desaparecen prácticamente después de la primera sesión.

01. La dinámica que surge en la contención con parejas, y en adultos para sanar la carencia materna, así como la

reconciliación con padres muertos es diferente, sin embargo los resultados son igualmente rápidos. La terapia ha

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mostrado resultados muy positivos con intervenciones a corto plazo, en países como: Alemania, Polonia, República

Checa, Suiza, Austria y ahora en Venezuela.

CONSIDERACIONES BÁSICAS DE LA ESPECIALIZACIÓN

02. La especialidad en terapia de contención está dirigida a: psicólogos, psiquiatras, Lic. en educación especial,

pedagogos y profesionales afines, con licenciatura y un año de experiencia mínima.

La actividad del terapeuta de contención exige mucho de su persona. Este se capacita para obtener una visión amplia

y profunda de las relaciones interpersonales y actúa sobre los seres humanos que acuden a su consulta a través de

consejos, dirección y ejemplo.

03. Esto exige un nivel determinante de responsabilidad, madurez personal y competencia profesional.

Su actuación como terapeuta debe estar fundamentada en estructuras éticas. El terapeuta de contención debe ser

capaz de adaptarse a las múltiples variantes del proceso terapéutico con el que se verá continuamente confrontado.

Esto exige de él, dependiendo de cada caso, un alto grado de empatía, flexibilidad y disposición a adaptarse a cambios

continuos.

04. En cada caso se verá confrontado con una profunda crisis de relación (entre dos seres unidos por el destino) a través

de la cual su vinculación está afectada o puesta en peligro. En esta situación, será de esperar que el terapeuta de

contención sea sensible a las necesidades de cada uno en su interacción entre el YO y el TU, que sea capaz de

actualizar conflictos ocultos, para que por medio de la confrontación, pueda llegar a la claridad y a la reconciliación.

05. Tendrá siempre la confianza de que es capaz de ayudar a transformar el estado grave y dramático del conflicto en el

que se encuentran madre e hijo en el desarrollo de un amor incondicional. Esto se aplica también para parejas y

para todas las diferentes modalidades de la Terapia de Contención. Aunque deberá empatizar subjetivamente con

ambos al mismo tiempo, tendrá que ser capaz de mantenerse objetivo frente a la problemática de dicha relación, sin

perder su distancia terapéutica.

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¿En dónde surge la terapia de contención?

Surge en Nueva York con la Dra. Martha Welch y posteriormente en Alemania con la Dra. Jirina Prekop

(checa de nacimiento). Se practica en Alemania, Polonia, República Checa, Suiza y Austria mostrando

resultados positivos en intervenciones a corto plazo.

¿Cuál es su objetivo?

La terapia de contención tiene como objetivo sanar relaciones en conflicto entre padres e hijos. Dicha

terapia se basa en la premisa de que hay casos en que se presentan déficits crónicos en la vinculación

madre­hijo y por tanto trastornos en la confianza básica del niño. Esto en ocasiones genera un caos

afectivo que echa a andar una relación de ambivalencia (amor­odio). Los afectos destructivos de coraje,

tristeza, miedo, etc. no se controlan sino que estallan abruptamente. Frecuentemente la respuesta del

adulto a esta conducta es aislar al niño, mostrar indiferencia o pegarle, reforzando aún más sus conductas

destructivas. Esta situación aumenta y se desarrolla en espiral. La terapia es una vía segura de

comunicación profunda que permite a los padres y a la pareja confiar en su rol aumentando en ellos y en

sus hijos la autoestima y potencializando su desarrollo.

¿En qué casos específicos es recomendable la terapia de contención?

Se recomienda en los siguientes casos: Vinculación deficiente por separación prolongada de la madre

(hospitalización, incubadora, viajes largos, trabajo de jornadas prolongadas, etc.) Depresión, miedo (incluso

miedo al contacto físico y al abandono) Autismo Niños con sentimientos de rechazo, falta de confianza

básica y seguridad Trastornos psicosomáticos (neurodermatitis, asma, frecuentes cuadros infecciosos, etc.)

Agresión contra sí mismos y contra los demás. Trastornos del sueño y de la alimentación. Hiperquinesia,

hiperactividad. Enuresis, encopresis. Todas las relaciones en que los padres sientan que el amor no fluye

libremente (conflictos profundos de ambivalencia amor­odio, franco rechazo y fuerte aislamiento).

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