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Estudios Iranios y Turanios Número 1 Año 2014 Edita SOCIEDAD DE ESTUDIOS IRANIOS Y TURANIOS (SEIT) Girona

Estudios Iranios y Turanios

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Estudios Iranios y Turanios

Número 1

Año 2014

Edita

SOCIEDAD DE ESTUDIOS IRANIOS Y TURANIOS (SEIT)

Girona

Estudios Iranios y Turanios

Director:

Alberto Cantera

Secretarios:

José Cutillas Ferrer Juanjo Ferrer Losilla

Comité de redacción:

Agustí Alemany Vilamajó Alberto Cantera

José Cutillas Ferrer Juanjo Ferrer Losilla Jaime Martínez Porro

Éric Pirart

Depósito Legal: S-58820-14 ISSN: 2386-7833 Imprimida por: Printcolor

Ctra. de Mollet a Sabadell Km. 4,3 – Pol. Ind. Can Vinyals, Nave 18 08130 Santa Perpètua de Mogoda (Barcelona)

© Queda prohibida la reproducción total o parcial de los contenidos de este Boletín sin permiso expreso de la Sociedad de Estudios Iranios y Turanios

Envío de originales a:

Alberto Cantera, Facultad de Filología, Pza. Anaya s/n, 37008 Salamanca (España). Correo-e: [email protected] José Cutillas, Dpto. de Filologías Integradas, Campus de Sant Vicent del Raspeig, 03080 Alacant (España). Correo-e:[email protected] Juanjo Ferrer, Facultad de Filología, Pza. Anaya s/n, 37008 Salamanca (España). Correo-e: [email protected]

Índice de contenidos

David B. BUYANER On a Pahlavi Metonymic Figure and its Indo-European Roots ........... 7  Alberto CANTERA Repetitions of the Ahuna Vairiia and animal sacrifice in the Zoroastrian long liturgy .................................................................... 25 Juanjo FERRER Brief note on the abbreviation marker K in the Avestan manuscripts 31  Fateme JAHANPOUR A new Wīdēwdād Manuscript of Marzabān Family Collection ......... 35  Götz KÖNIG Die Pahlavi-Literatur des 9./10. Jh. und ihre frühe Kodex-Überlieferung (II). Die Pahlavi-Kodices der Bundār Šāhmardān-Familie ................................................................................................ 43  Jaime MARTÍNEZ-PORRO Los manuscritos avésticos de la ceremonia Visperad ........................ 75  Éric PIRART La plegaria en el sacrificio mazdeo zoroástrico ................................ 95  Kianoosh REZANIA Immanenz und Transzendenz im Zoroastrismus: Absenz, Nachbarkonzepte und Entstehung .................................................... 113 

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La plegaria en el sacrificio mazdeo zoroástrico1

Éric Pirart Universidad de Lieja

ABSTRACT: This paper explains why the sacrifice as described in the Avesta necessarily includes a prayer or request and what the practical details of that request are.

KEYWORDS: Avesta, Zoroastrian sacrifice, prayer.

La obediencia religiosa que prevalecía en Irán antes del Islam, el mazdeísmo zoroástrico (dēn ī mazdayasnān ī zardušt), se instaló allí probablemente con los mismos pueblos iranios, en todo caso con los medos pues el antepasado de la dinastía meda en el siglo VIII antes de la era común, llevaba un nombre, Φραόρτης en el griego de Heródoto, *fravrti- en la lengua original, sin lugar a dudas reflejando dicha obediencia.

Los textos del mazdeísmo zoroástrico quizá no hubieran conocido nunca ninguna fijación, al menos única. De todos modos, las eventuales fijaciones regionales fueron orales en un primer tiempo. No sabemos de cuándo se fecha su puesta por escrito. Los Libros pahlavíes de los siglos IX y X, por lo tanto ya de la época musulmana, pretenden que estos textos conocieron el escrito en época de los Aqueménidas, hacía pues catorce o trece siglos, y, después de las destrucciones de las que acusan a Alejandro Magno, se tuvo que esperar la decisión de los últimos Arsácidas y primeros Sasánidas para que una nueva fijación escrita viera la luz. Tampoco esta vez se puede comprobar ni negar la realidad de lo que se nos dice.

Lo que ha llegado a nuestras manos sólo constituye dos o tres colecciones litúrgicas cuyas piezas se habían sacado del gran conjunto de los textos mazdeos zoroástricos que se había reconstituido y del que sólo conservamos también unas cuantas páginas por otra vía que no es la litúrgica. Este conjunto original perdido, o visto como original, se dividía en tres, como el Veda, pues había siete libros litúrgicos, siete jurídicos y siete relacionados con las Cantatas (Gāθā) que son cinco poemas redactados en el dialecto más arcaico. Los textos conservados a través de las colecciones litúrgicas se encuentran en su mayoría en la edición que Karl Friedrich Geldner dio de ellos a finales del siglo XIX2.

1 Este artículo se corresponde con la comunicación hecha en el primer encuentro de la

Sociedad Española de Iranología (septiembre 2010, Salamanca). 2 K. F. Geldner, Avesta, die heiligen Bücher der Parsen, 3 vol., Stuttgart, 1886-1896.

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Sin embargo, muchas páginas de los Libros pahlavíes deben ser consideradas traducciones de varios otros textos que pertenecieron al primitivo "Formulario sabio de la doctrina de los que ofrecen el sacrificio al Rey de la Sabiduría (Ahura Mazdā) de acuerdo con las recomendaciones de Zoroastro (Zaraθuštra), el hombre que tenía camellos viejos" (mąθrō spәṇtō daēnaiiā māzdaiiasnōiš zaraθuštrōiš), pues éste es el título auténtico de lo que se suele llamar "Avesta", una palabra tomada del pahlaví abestāg cuya etimología permanece incierta, si bien queda claro que se usaba para designar el texto original frente a su traducción en persa medio llamada zand.

Las colecciones litúrgicas nos han conservado principalmente los textos que pueden entrar en la composición del Recitativo de la liturgia larga (Yasna, Vīsp-rat, Vīdaēuu-dāt y Vīštāsp Yašt) y la recolección de las liturgias breves entre las que encontramos una serie de textos llamados Yašt "textos sacrificiales". Estos últimos, podemos pensar, debían constituir el componente verbal de sacrificios ofrecidos a las principales divinidades del panteón mazdeo zoroástrico. Los Yašt auténticos servían para rendir culto a los dioses llamados "adorables" (Yazata), los que se definen precisamente por los honores sacrificiales que se les rendían. La mayoría de los Yašt presentan efectivamente las características de textos litúrgicos, pues cada uno de sus movimientos se abre con una frase cuyo núcleo es el verbo "Ofrecemos el sacrificio a" (yazamaide), completado con el teónimo y los epítetos del mismo. En cambio, el quinto Yašt, con el que se rendía culto al Agua celestial o Vía láctea, caracterizado por el empleo del verbo "Conviene que ofrezcas el sacrificio a" (yazaēša), parece ser más de tipo jurídico. Este carácter litúrgico o jurídico pocas veces se respeta plenamente. Muchos Yašt contienen de hecho, bajo forma de conversaciones que el gran dios o la divinidad enfocada habían mantenido con Zoroastro, unos incisos con los que se exponen detalles, requisitos, pautas o considerandos de la ceremonia. Estas conversaciones también pueden ser la ocasión de aludir al mito etiológico del sacrificio en el que la frase clave, en boca de la divinidad enfocada, es "Si los mortales me ofrecieran el sacrificio (yazaiiaṇta), yo tendría la posibilidad de". Varios Yašt aparecen heterogéneos por otras razones. Sin embargo, no podemos justificar fácilmente esta situación: nos da la impresión de que la tradición, en una época que no podemos determinar, hubiera querido recuperar todo lo que aún permanecía a su alcance. Sin que podamos certificar aquí su vigencia, la lógica apuntaría que las tres versiones que se pueden detectar de los Yašt estuvieran repartidas entre las tres grandes partes del conjunto primitivo de los textos: la versión litúrgica habría cabido entonces en uno de los libros litúrgicos; la jurídica, en uno de los jurídicos; la etiológica, en uno de los relacionados con las Cantatas.

Algunos Yašt contienen lo que se ha acordado llamar "catálogo de sacrificantes": varios movimientos del texto o todos dan a continuación de la declaración del sacrificio ofrecido la mención de un adorador mítico que lo había ofrecido en un lejano o mítico antaño: "Ofrecemos al dios el sacrificio

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que, en su época, este héroe le ofreció". En base a los tres Yašt que lo precisan (Yašt 5, 9, 17), los sacrificios que la mayoría de los personajes míticos quisieron ofrecer a las divinidades comportan la inmolación de un gran número de animales (cien caballos, mil toros, diez mil carneros), si bien algunos operaron de forma distinta. Cabe destacar el hecho de que el mismo gran dios así como su interlocutor humano Zoroastro son los únicos personajes con los que el tipo de sacrificio se define exactamente en los mismos términos que los usados para ofrecerlo a los Yazata en los Yašt que tenemos. Lo vemos en las fórmulas conclusivas de sus distintos movimientos: el sacrificio se ofrece "con el Jugo cortado con leche, con el manojo de ramas, con la destreza o soltura de la lengua y el formulario, con la palabra y el gesto, con las libaciones y los textos que se tienen que recitar respetando la dicción continua".

Un personaje llamado Navegante (Nauuāza) parece seguir las mismas pautas (Yašt 5.61-66), esto es en conformidad con el estatuto sacerdotal que le confiere el hecho de llevar el título técnico de "entusiasta" (vifra), pero, a más de este tándem que forman el gran dios y Zoroastro, también hay que mencionar al dios Jugo Haoma (Yašt 9.17, 10.88, 11a.18, 17.36-37) y, quizá, a un tal Vistauru (Yašt 5.76-78) cuyo nombre podría significar "Quien se ha encontrado el alma"3. Sin embargo, subrayemos que no se especifica qué método sacrificial el dios Jugo siguió. De hecho, su caso es problemático, pues, lógicamente, por ser él mismo el ingrediente principal o emblemático de las libaciones, tendría que suicidarse.

Nada fuera de la naturaleza de las demandas que dirigen a los Yazata permite distinguir a los otros personajes positivos de los negativos: unos y otros ofrecen el mismo tipo de sacrificio, el que comporta la inmolación de animales: "conduciendo al área sacrificial cien caballos, mil toros y diez mil carneros a más de las libaciones". Diferencia de dos prácticas. ¿Zoroastro habría pues inaugurado una nueva práctica, con la que se renunciaba a inmolar animales y se rehusaba comer carne? Evidentemente hay que avanzarlo, pues los Libros pahlavíes lo sugieren, si bien no quiere decir que la práctica antigua estuviese necesariamente condenada o rechazada ya que no faltan en los textos alusiones hechas a la inmolación de víctimas sacrificiales animales. La coexistencia de las dos prácticas recordará que, en el mundo griego, el orfismo también había instaurado, al lado del sacrificio sangriento que tenía derecho de ciudadanía, una nueva manera, externa a la ciudad, de honrar a los dioses, en la que se renunciara a cometer semejantes crueldades. Las Cantatas ya se hacían eco de algunos reparos si bien parece que lo incriminado sea más bien un modo particular de dar la muerte al animal. Y, de hecho, el Yašt con el que se rendía culto al dios que representaba el poder que los textos sagrados tenían de romper los obstáculos levantados por las fuerzas deletéreas o demoníacas, el Varhrān Yašt contiene la descripción de una inmolación de tipo rechazado.

3 Véase É. Pirart, Corps et âmes du mazdéen, París, 2012, p. 212.

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Por su parte, el Yašt con el que se honraba a las diosas que representaban el compromiso individual de los adoradores de ofrecer el sacrificio mazdeo zoro-ástrico, el Fravardīn Yašt, al igual que el testimonio de algunos autores clá-sicos, menciona la existencia de inmolaciones lícitas de caballos.

Jerjes, hijo y sucesor de Darío Magno, no dice nada al respecto, pues sólo dice: "Allá donde anteriormente los Desafortunados (Daiva) se habían honorado con muchos sacrificios, yo he ofrecido el sacrificio al Rey de la Sabiduría recurriendo al texto ‛En base a la armonía’".

En la mayoría de los casos, los Yašt especifican la ubicación de los sacrificios que los héroes míticos de antaño habían ofrecido a los dioses. El catálogo de los sacrificantes se completa entonces con un catálogo de áreas sacrificiales. La cumbre de una montaña, con frecuencia. Esto se corresponde con lo que Heródoto indica: la costumbre de los persas era subir a las más altas para ofrecer sacrificios, pues no tenían ni altares ni templos ni estatuas.

El sacrificio que se ofrece a los dioses se considera el medio que el adorador tiene para darles la fuerza, llamada "gordura, potencia" (sauuah), con la que puedan desempeñar su papel y satisfacer las demandas o pedidos que se les hacen. Se trata de un intercambio, lo que el dios Miθra representa. Sin las palabras que las consagran, las ofrendas no tienen ningún efecto. Lo que la divinidad exige, es esta parte inmaterial de la ofrenda, un añadido que le viene del componente verbal del rito, o estas partes inmateriales de la víctima sacrificial que, con gestos adecuados y acierto, el inmolador puede extraer de ella, por ejemplo su alma. El adorador, con semejantes medios, suministra el sauuah a la divinidad de modo que ésta le entregue lo pedido, el "vigor" (iš), una fuerza que, por ejemplo bajo forma de lluvia, le garantice la seguridad alimentaria o la capacidad física de enfrentarse con éxito a sus enemigos. Las fórmulas conclusivas de los movimientos de todos los Yašt empiezan de hecho con esta justificación del sacrificio ofrecido: "Con la riqueza (rāi) y el alimento (xvarәnah) que este dios puede garantizarnos". Siempre hay una demanda, siempre se pide algo al dios honrado con el sacrificio que se le ofrece. Éste siempre ostenta una finalidad. Lo que se le pide, también es aquello de lo que la divinidad es capaz, la demanda llegando por lo tanto a confundirse con la alabanza. Con este propósito, la frase liminar de cada movimiento litúrgico se alarga con epítetos, llamados "nombres" (nąman), sean adjetivos, títulos o proposiciones subordinadas relativas, que aludan a las proezas divinas. La pronunciación de estos "nombres" refuerza al dios, le optimiza, le hace reflejar el sentido de los mismos. La plegaria mazdea zoroástrica pues es una demanda, un pedido que, siéndole hecho, honra al dios, literalmente le "hincha" de satisfacción: por aludir a sus capacidades, la ple-garia, de alguna manera, alaba al dios.

En el discurso mítico, la divinidad, para cumplir con intervenciones que ilustran sus poderes, adopta a veces una apariencia o forma (kәhrp), generalmente estereotipada, que convenga al papel que desempeña, o sea a su función o su fuerza. Por ejemplo, para combatir a un demonio, un dios

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determinado tendrá la forma de un caballo en cuya cabeza se colocará la corna-menta apotropaica de un ciervo. En otro ejemplo, la diosa, con los rasgos despampanantes de la quinceañera, acude en ayuda de algún héroe. Esta forma que la divinidad toma, tan sugeridora de la excelencia de sus hazañas o ilustradora de las capacidades que tiene para satisfacer las demandas del adorador, a veces recibe ella misma los honores sacrificiales: "Ofrecemos el sacrificio a la forma de este dios"4.

El sacrificio que los héroes del pasado legendario de los primeros tiempos de Irán o del mundo habían ofrecido se acompañaba a menudo con una petición guerrera. En cambio, Zoroastro pedía a los dioses la capacidad de aportar la buena doctrina a sus contemporáneos y la de preparar el mundo con vistas a la gran conflagración que marcará el final del tiempo lineal y la vuelta a la fijeza del infinito. La finalidad del sacrificante a menudo también es garantizarse la colaboración divina y llegar entonces sin tropiezo a un más allá merecido. Escatología general y escatología individual motivan el sacrificio.

La elección que el adorador hace de la divinidad a veces es función de la especialización que muestra en el momento de dar respuesta a determinadas demandas. Por ejemplo, el párrafo 133 del Fravardīn Yašt recomienda que, si queremos vencer de forma simultánea a varios enemigos, ofrezcamos el sacrificio a la diosa que representa la preferencia que el rey legendario llamado "El del enunciado bueno" (Husrauuah) había marcado para la buena doctrina. La manera con la que la demanda o plegaria tiene que conjugarse con los otros eventos rituales de la ceremonia sacrificial importa mucho. Antes de analizar sus ocurrencias textuales, hay que examinar el origen del verbo utilizado. En realidad, los textos iranios antiguos recurren a varios verbos "pedir" en el momento de dirigirse hacia los dioses. Las Cantatas conocen los verbos siguientes:

― ižd :: išasa- "exigir" (= védico ĪḌ)5: en la estrofa Yasna 31.4, el locutor exige a los Inmortales Sabios (Amәša Spәn ta), o sea a los dioses que representan las partes más abstractas de la mecánica sacrificial, que le den una cierta influencia sobre los Yazata; en la estrofa Yasna 50.2, el locutor exige que la Vaca paradigmática confiera la felicidad a su alma; la estrofa Yasna 51.19 todavía no se interpreta con la mínima certidumbre necesaria;

― yā :: yāsa- "pedir"6: en la estrofa Yasna 28.1, el locutor pide a los dioses que, llegado el día de la muerte, su alma pueda alcanzar el paraíso; en la estrofa Yasna 28.8, el locutor dirige al Rey de la Sabiduría una demanda similar; en la estrofa Yasna 32.1, la familia, el clan y la tribu, pero también los Desafortunados piden la alegría al gran dios; en la estrofa Yasna 49.8, el

4 É. Pirart, Corps et âmes du mazdéen, París, 2012, p. 97. 5 Literatura en J. Cheung, Etymological Dictionary of the Iranian Verb, Leiden, 2007, p.

160. 6 Literatura en J. Cheung, Etymological Dictionary of the Iranian Verb, Leiden, 2007, p.

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locutor pide al gran dios que le permita juntarse con el buen encaje ritual y quedarse listo para la eternidad; en la estrofa Yasna 49.12, el locutor pide a los Inmortales Sabios poder influir sobre los Yazata; en las estrofas Yasna 51.21 y Yasna 54.1, los locutores piden suerte al gran dios;

― yā :: ī- (= védico YĀ)7: en la estrofa Yasna 34.14, el locutor pide la capacidad de entenderlo todo correctamente al gran dios;

― ā+ yā :: ā.ī-: en la estrofa Yasna 31.2, el locutor pide al conjunto de los dioses que los suyos puedan vivir de forma armoniosa; la estrofa Yasna 33.7 todavía no se interpreta con la mínima certidumbre necesaria.

Añadamos que el locutor desea, en la estrofa Yasna 28.9 de la primera Cantata, que los dioses no se irriten por sus demandas (yāna-) y, en el párrafo Yasna 36.2 del arcaico Sacrificio séptuple (Yasna Haptaŋhāiti), que el fuego haga lo necesario para que dichas demandas sean satisfechas. En el Avesta reciente, es decir fuera de las Cantatas y del Sacrificio séptuple, el verbo yā pierde frecuencia. Cabe subrayar la competencia que el párrafo Yasna 65.11 del texto de la Libación vertida en las aguas (Āb Zōhr) crea entre los verbos yā y jad:

āpō yānәm vō yāsāmi mazāṇtәm tәm mē dāiiata yeŋhe dāiti paiti vaŋhō nisrīta anaiβi.druxti .·. āpō īštīm8 vō jaiδiiāmi pouru.sarәδąm amauuaitīm frazaṇtīmca xvāparąm yeŋhā pourūšca bәrәjaiiąn naēcišca aŋhā yāsāiti ziiānāi nōit snaθāi nōit mahrkāi nōit aēnaŋhe nōit apaiiatәe .·.

Aguas, os formulo una gran demanda: ¡ojalá me concedáis el favor con el que me pongáis mejor a cubierto ante cualquier injuria! Aguas, con el poder ofensivo que me dan las palabras sagradas, os encomiendo una exigencia múltiple y pido que me deis la capacidad de generar una buena descendencia a la que los dioses sean numerosos en saludar y de la que ninguno de ellos desee ni el despojo ni el asesinato ni la destrucción ni el maltrato ni la exclusión.

El uso que encontramos de yā :: yāsa- en los Yašt parece residual frente al de jad:

Yašt 5.130-131 āat vaŋvhi iδa sәuuište arәduuī +sūire anāhite auuat āiiaptәm yāsāmi yaθa

azәm huuāfritō masa xšaθra niuuānāni aš.pacina stūi.baxәδra fraoθat.aspa +xvanat.caxra xšuuaēβaiiat.aštra aš.baouruua niδātō.pitu hubaoiδi upa stәrәmaēšu vārәma daiδe parәnaŋhuṇtәm vīspąm hujiiāitīm iriθәṇtәm xšaθrәm zazāiti .·.

āat vaŋvhi iδa sәuuište arәduuī +sūire anāhite duua auruuaṇta yāsāmi [yimca] bipaitištānәm auruuaṇtәm yimca caθβarә.paitištānәm aom bi.paitištānәm auruuaṇtәm yō aŋhat āsuš uzgastō hufraouruuaēsō vāšā pәšanaēšuca aom caθβarә.paitištānәm yō haēnaiiā pәrәθu.ainikaiiā uua uruuaēsaiiat karana hōiiūmca dašinәmca dašinәmca hōiiūmca .·.

7 Literatura en J. Cheung, Etymological Dictionary of the Iranian Verb, Leiden, 2007, p.

210. 8 < *ižd-ti- ?

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(El sacrificante dice:) "Ven aquí, buena y poderosa, blanda (= líquida ?), potenciada e inalterable (Agua). Pues te he propiciado debidamente, te pido el favor de que yo pueda encadenar9 a los Desafortunados echando mano de la gran influencia ritual, o sea la que comporta una gran cocción y una importante ración, un carro del que tiran unos caballos alados y de cuyas ruedas sonoras los silbidos del látigo acompañan el avance, cargado con abundancia de alimentos e inciensos. ¡Ojalá yo pueda guarnecer las mesas de la fiesta sacrificial tanto como quiera, sin contar y con todos mis recursos vitales, pues los muertos pierden cualquier influencia!

Ven aquí, buena y poderosa, blanda, potenciada e inalterable (Agua). Te pido dos vehículos de combate, el primero con dos puntos de apoyo10 y el otro con cuatro11. Con el de dos puntos de apoyo, yo debería tener la posibilidad de extraerme con celeridad del alboroto para alcanzar la meta sin dificultad en las competiciones o los combates mientras que el de cuatro puntos de apoyo debería permitirme acosar a la Horda de las agudas picas, por el lado izquierdo tanto como por el derecho y por el derecho tanto como por el izquierdo";

Yašt 10.33 dazdi ahmākәm tat āiiaptәm yasә θβā yāsāmahi sūra ×uruuaite dātanąm

srauuaŋhąm īštīm amәm vәrәθraγnәmca hauuaŋhum ašauuastәmca haosrauuaŋhәm hurunīmca mastīm spānō vaēiδīmca vәrәθraγnәmca ahuraδātәm vanaiṇtīmca uparatātәm yąm ašahe vahištahe paiti.parštīmca mąθrahe spәṇtahe .·.

Intercambio, concédenos el favor que nos corresponda y que te pedimos a ti el poderoso, en el transcurso de la observancia del enunciado de las leyes : la capacidad sacrificial, el impulso y el poder de romper los obstáculos que las fuerzas deletéreas levantan ante nosotros, el derecho de acceder a la buena existencia y el estatuto de armonioso, el mérito de buenos enunciados12 y la bondad del alma, la fuerza de estudiar, la de enseñar y la de saber, todo esto os lo pedimos, a ti, al Poder que el Rey de la Sabiduría instauró de romper los obstáculos, a la victoriosa Superioridad del Encaje excelente y a la Exégesis del Formulario sabio.

Después de las Cantatas, cuando el substantivo yāna- "la demanda", derivado de la raíz yā, que de hecho también encontramos en persa antiguo, subsista en el uso corriente, en cambio, el verbo usual con el sentido de "pedir" se sacará de otra raíz: jad. Este verbo "pedir" del Avesta reciente, cuyo tema de presente se forma mediante el sufijo -iia-, coincide etimológicamente con el griego θέσσομαι13 o el gótico bidjan. Se trata de una raíz indoeuropea bien

9 El Ejercicio de la Influencia ritual, uno de los Inmortales Savants, pues también patrona

los metales, aquí representa las cadenas. 10 El carro. 11 El caballo. 12 El veredicto que los jueces divinos rendirán en las puertas del más allá. 13 Atestiguado principalmente en aoristo (véase P. Chantraine, Dictionnaire étymologique

de la langue grecque, París, 1968, pp. 432 sq.).

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documentada14. Y uno de los pocos verbos galos que conocemos, uediiumi "yo rezo, ruego"15, también se corresponde con él de forma exacta. Es el verbo empleado en el texto que se lee en una tablilla de plomo descubierta en Chamalières, una municipalidad del Puy-de-Dôme. En particular, se reza en este texto al dios Mápono y se le pide que inflija unas torturas a determinados adversarios16. La idea de "pedir" ( yā) va a la par de la de "dar" ( dā) como el tercero de los textos reunidos en el capítulo XVIII del Vīdaēuu-dāt lo ilustra:

Vīdaēuu-dāt 18.30-38 sraošō ašiiō drujim apǝrǝsat apaiiūxtāt paiti vazrāt .·. druxš axvāθre

ǝuuǝrǝzike tūm zī aēuua vīspahe aŋhәuš astuuatō anaiβiiāstiš17 +hunāhi .·. āat hē hā paiti.dauuata yā daēuui druxš .·. sraoša ašiia huraoδa nauua

azǝm [vīspahe aŋhәuš astuuatō] anaiβiiāstiš hunāmi hǝṇti bāδa māuuaiiacit caθβārō aršāna .·.

tē mąm auuaθa vǝrǝnǝṇte yaθa aniiāscit aršānō auui xšudrā xšaθrišuua hąm.vǝrǝnauuaiṇti .·.

sraošō ašiiō drujim apǝrǝsat apaiiūxtāt paiti vazrāt .·. druxš axvāθre ǝuuǝrǝzike kō tē aētaēšąm aršnąm paoiriiō .·.

āat hē hā paiti.dauuata yā daēuui druxš .·. sraoša ašiia huraoδa hō bā mē aētaēšąm aršnąm paoiriiō yat nā kasuuikąmcina yāŋhuiianąm auuarǝtanąm naire ašaone jasta18 ašaiia vaŋhuiia nōit daδāiti .·.

hō mąm auuaθa vǝrǝnūiti yaθa aniiāscit aršānō auui xšudrā xšaθrišuua hąm.vǝrǝnauuaiṇti .·.

sraošō ašiiō drujim apǝrǝsat apaiiūxtāt paiti vazrāt .·. druxš axvāθre ǝuuǝrǝzike ciš aŋhe asti uzuuarǝzǝm .·.

āat hē hā paiti.dauuata yā daēuui druxš .·. sraoša ašiia huraoδa aom aŋhe asti uzuuarǝzǝm yat nā kasuuikąmcit yāŋhuiianąm auuarǝtanąm naire ašaone ajasta19 ašaiia vaŋhuiia daδāiti .·.

hō mąm auuaθa †vǝrǝnąn nijaiṇti20 yaθa vǝhrkō caθβarǝ.zaṇgrō barǝθriiāt haca puθrǝm niždarǝ.dairiiāt .·.

El Discurso que vela por la armonía condujo a la Falencia a que le respondiera a la siguiente pregunta asestándole el garrote encima: "Falencia, miserable, tú que no vales para nada, ¿verdad es que sola en toda la existencia ososa puedes dar a luz sin que haya habido monta?"

La Desafortunada Falencia le contestó farfullando: "No, Discurso que velas por la armonía y muestras un buen desarrollo, sola no puedo dar a luz sin que haya habido monta. De hecho, cuatro machos tengo a disposición.

Capaces son de fecundarme al igual que otros machos pueden dejar preñadas a hembras".

14 Literatura en J. Cheung, Etymological Dictionary of the Iranian Verb, Leiden, 2007,

p. 220 sq. 15 Véase P.-Y. Lambert, La langue gauloise, 2a ed., París, 1995, p. 62. 16 Véase P.-Y. Lambert, La langue gauloise, 2a ed., París, 1995, pp. 150 sqq. 17 El zand dice: PVN ’nQDMlvbšnyh. 18 AMT zdyt|. 19 AMT LA zdyt|. 20 ZK L ’ytvn| ’pvsyh BRA znyt.

Éric Pirart, La plegaria en el sacrificio mazdeo

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El Discurso que vela por la armonía condujo a la Falencia a que le respondiera a la siguiente pregunta asestándole el garrote encima: "Falencia, miserable, tú que no vales para nada, ¿cuál es el primero de estos machos tuyos?"

La Desafortunada Falencia le contestó farfullando: "Discurso, tú que velas por la armonía y muestras un buen desarrollo, el primero de estos machos míos, por cierto es el hombre que, aun cuando demanda se le hace, no se preocupa por la armonía ni por darle al hombre armonioso por lo menos un poco de sus bienes amontonados.

Semejante hombre capaz es de fecundarme al igual que otros machos pueden dejar preñadas a hembras".

El Discurso que vela por la armonía condujo a la Falencia a que le respondiera a la siguiente pregunta asestándole el garrote encima: "Falencia, tú que no vales para nada, ¿quién hay para evitarlo?"

La Desafortunada Falencia le contestó farfullando: "Discurso, tú que velas por la armonía y muestras un buen desarrollo, basta para evitarlo con que un hombre, aun cuando ninguna demanda se le hace, le dé al hombre armonioso sólo un poco de sus bienes amontonados.

Semejante hombre me fulmina en cercarme [?] tanto como el lobo de cuatro patas desgarra el feto de la hembra".

En los Yašt, el verbo jad hace acto de presencia bastante a menudo a causa de las características mismas de este tipo de textos. El texto con el que se ofrece el sacrificio a la gran diosa irania hija del Rey de la Sabiduría, el Arәduuīsūr ī Bānūg Yašt, no escatima en darnos ejemplos donde jad aparezca claramente con el sentido de "decir que me des":

Yašt 5.18-19 āat hīm jaiδiiat .·. auuat āiiaptәm dazdi mē vaŋvhi sәuuište arәduuī +sūire

anāhite yaθa azәm hācaiiene puθrәm yat pourušaspahe ašauuanәm zaraθuštrәm anumatәe daēnaiiāi anuxtәe daēnaiiāi anu.varštәe daēnaiiāi .·.

daθat ahmāi tat auuat āiiaptәm arәduuī sūra anāhita haδa.zaoθrō.barāi arәdrāi yazәmnāi jaiδiiaṇtāi dāθriš āiiaptәm .·.

Entonces el Rey de la Sabiduría le pidió: "Concédeme este favor, buena y poderosa, blanda, potenciada e inalterable (Agua), de que yo pueda conducir al hijo del hombre de los caballos grisáceos, el armonioso Zoroastro, a ajustarse los pensares, las palabras y los gestos con la doctrina".

La blanda, potenciada e inalterable (Agua) le concedió este favor al sacrificante que llevaba las libaciones con acierto en el momento de pedírselo, pues ella capaz era de concederle este favor.

La partícula āat con la que se abre este extracto articula la demanda con el sacrificio ofrecido, lo que la continuación del texto confirma al agrupar los dos participios yazәmnāi jaiδiiaṇtāi "que sacrifica y pide". En el extracto siguiente, el participio acompaña o define el sujeto del verbo yazata: "aquel que pedía sacrificaba", para significar que la idea de "ofrecer el sacrificio" implica la de "pedir un favor". Una cosa no puede darse sin la otra:

Estudios Iranios y Turanios

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Yašt 5.53 tąm yazata taxmō tusō raθaēštārō baršaēšu paiti aspanąm zāuuarә

jaiδiiaṇtō hitaēibiiō druuatātәm tanubiiō pouru.spaxštīm tbišiiaṇtąm paiti.jaitīm dušmainiiunąm haθrā niuuāitīm hamәrәθanąm auruuaθanąm tbišiiaṇtąm .·.

El valiente Taciturno, un guerrero de estos que tenían carro, le ofreció el sacrificio en el lomo de su caballo, pidiéndole a la diosa impulso para su tronco, firmeza para su persona, buena guardia ante los malévolos, el medio de recha-zar y derrotar a los que, al profesar una mala opinión y prescindir de las observancias, se convierten en adversarios peligrosos. Lo hizo llevando al área sacrificial cien caballos, mil toros y diez mil carneros21.

La petición que el guerrero formula cabe en un marco guerrero. En cambio, la del gran dios era de alcance religioso. El guerrero busca cómo vencer a sus adversarios mientras que el gran dios desea convencer a Zoroastro de lo bien fundada que está la buena doctrina. La naturaleza del favor refleja al personaje que lo pide. Con el sacrificio ofrecido, el sacrificante desea tener la capacidad de desempeñar el papel que le corresponde, este papel cuyo carácter fundado Krṣṇa, en la Bhagavadgītā, le recuerda a Arjuna cuando intenta esquivarse de él. Los adversarios no actúan de forma distinta. También ellos ofrecen el sacrificio a la gran diosa irania encomendándole una demanda, pero los naipes, por lo visto, ya estaban echados desde el principio:

Yašt 5.58-59 āat hīm jaiδiiәn .·. auuat āiiaptәm dazdi nō vaŋvhi sәuuište arәduuī +sūire

anāhite yat bauuāma aiβi vaniiā taxmәm tusәm raθaēštārәm yaθa vaēm nijanāma airiianąm daxiiunąm paṇcasaγnāi sataγnāišca sataγnāi hazaŋraγnāišca hazaŋraγnāi baēuuarәγnāišca baēuuarәγnāi ahąxštaγnāišca .·.

nōit aēibiiascit daθat tat auuat āiiaptәm arәduuī sūra anāhita .·. ... Entonces los retoños de Débil le pidieron: "Concédenos este favor, buena

y poderosa, blanda, potenciada e inalterable (Agua), de que podamos imponernos victoriosos a Taciturno, un guerrero de los que usan carro; el favor de que podamos fulminar a las naciones iranias, devolviéndoles cien golpes por cincuenta, mil por cien, diez mil por mil y una infinidad por diez mil".

La blanda, potenciada e inalterable (Agua) no les concedió este favor.

La razón es el hecho de que los personajes negativamente connotados lo son por definición o de origen. Prisioneros de su estatuto de engañados, no llegarán nunca a inclinar a los dioses a su favor. El daño es congénito. El carácter negativo del personaje a menudo sólo se trasluce por su mismo nombre: "Débil" (Vīsaka). Los personajes de signo negativo, por mucho que se esfuercen en seguir escrupulosamente las pautas rituales específicas del

21 No sé si la lógica se tiene que invocar para rechazar esta frase con el argumento de que

no bastaría con un área sacrificial tan pequeña como lo es el lomo de un caballo para que en ella quepa tan sólo una víctima.

Éric Pirart, La plegaria en el sacrificio mazdeo

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culto que se rinde a un dios tan peculiar como lo es el Espacio (Vaiiu), no van a tener éxito:

Yašt 15.19-21 tәm yazata ažiš θrizafā dahākō upa kuuiriṇtәm dužitәm zaranaēne paiti

gātuuō zaranaēne paiti fraspāiti zaranaēne paiti upastәrәne frastәrәtāt paiti barәsmәn pәrәnәbiiō paiti γžāraiiatbiiō .·.

aom jaiδiiat .·. auuat āiiaptәm dazdi mē vaiiuš yō uparō.kairiiō ... .·. yaθa azәm amašiiąn kәrәnauuāni vīspāiš auui karšuuąn yāiš hapta .·.

nōit yazәmnāi nōit jaiδiiaṇtāi nōit zbaiiaṇtāi nōit arәdrāi nōit zaoθrō.barāi nōit ahmāi daθat tat auuat āiiaptәm vaiiuš yō uparō.kairiiō .·. ... ºoº

El Ajado, un ofidio con tres fauces, le ofreció el sacrificio en el Desagüe de fastidioso tránsito, en el zócalo de oro, en la alfombra de oro, en el cojín de oro, una vez esté erguido el manojo de ramas y estén llenas a rebosar las cucharas22.

Entonces le pidió: "Concédeme este favor, Espacio de las proezas incomparables, de que yo pueda eliminar a los mortales de todos los sectores de la tierra que son siete".

Por mucho que le ofreciera el sacrificio y se lo pidiera, le llamara, se lo hiciera con exactitud y le llevara las libaciones, el Espacio de las proezas incomparables no le concedió este favor al Ajado.

En cambio, otros personajes, únicamente por pertenecer ellos al grupo de los que tienen un signo positivo, consiguen convencer a la divinidad a que se les muestre favorable:

Yašt 5.73-74 āat hīm jaiδiiәn .·. auuat āiiaptәm dazdi nō vaŋvhi sәuuište arәduuī +sūire

anāhite yat bauuāma aiβi vaniiā dānauuō tūra viiāxana <a>karәmca asabanәm <a>varәmca asabanәm taṇcištәmca dūraēkaētәm ahmi gaēθe pәšanāhu .·.

daθat aēibiiascit tat auuat āiiaptәm arәduuī sūra anāhita †haδa.zaoθrō.barāi arәdrāi yazәmnāi jaiδiiaṇtāi† dāθriš āiiaptәm .·. ...

Entonces los (tres aliados) le pidieron: "Concédenos este favor, buena y poderosa, blanda, potenciada e inalterable (Agua), de que podamos imponernos victoriosos a los retoños del Achacoso y de la Sequía, que nos desafían; al Inútil y al Impotente, dos retoños del Ogro, así como al valentísimo guerrero de las señeras visibles desde lejos, en el combate que les libramos por estos rebaños".

La blanda, potenciada e inalterable (Agua) les concedió también este favor a ellos, los sacrificantes que llevaban las libaciones con acierto para pedírselo, pues capaz era de concedérselo.

Las cosas vienen a ser tan automáticas que el diascevasta omitió adaptar completamente el "texto modelo" (raθβiia- vac-)23: no convirtió las palabras

22 Con la indicación de que estos elementos son de oro, se quiere subrayar que se trata de

un culto debidamente rendido de día. 23 Yašt 10.31.

Estudios Iranios y Turanios

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haδa.zaoθrō.barāi arәdrāi yazәmnāi jaiδiiaṇtāi debidamente al plural para que concuerden con aēibiiascit, lo que he indicado con el óbelo.

Todas las clases sociales llegan a formular plegarias aunque la divinidad sólo las satisfará siempre que los sacrificios ofrecidos estén respaldados por la práctica del rey. Esto se ve en el extracto siguiente:

Yašt 5.85-87 yahmiia ahurō mazdā huuapō niuuaēδaiiat āiδi paiti.auua.jasa arәduuī

+sūire anāhite haca auuatbiiō stәrәbiiō aoi ząm ahuraδātąm .·. θβąm yazāṇte auruuāŋhō ahurāŋhō daŋhu.pataiiō puθrāŋhō daŋhu.patinąm .·.

θβąm naracit yōi taxma jaiδiiāṇte āsu.aspīm xvarәnaŋhasca uparatātō .·. θβąm āθrauuanō marәmnō āθrauuanō θrāiiaonō mastīm jaiδiiāṇte spānәmca vәrәθraγnәmca ahuraδātәm vanaiṇtīmca uparatātәm .·.

θβąm kaininō vaδre.yaona xšaθra huuāpā jaiδiiāṇte taxmәmca nmānō.paitīm .·. θβąm carāitiš zizanāitiš jaiδiiāṇte huzāmīm .·. tūm tā aēibiiō xšaiiamna nisirinauuāhi arәduuī +sūire anāhite

El Rey de la Sabiduría y de las obras buenas ordenó a la diosa: "Ven, blanda, potenciada e inalterable (Agua), vuelve a bajar de las estrellas brillantes a la tierra que yo he colocado en su sitio, de modo que, cada vez, los reyes que gestionan las reservas de agua, jefes de naciones hijos de jefes de naciones, te puedan ofrecer el sacrificio y que, si lo hacen,

cuando los hombres valientes os pidan caballos veloces para sus almas, tanto a ti como a las Superioridades del Alimento, cuando los sacerdotes que memorizan la triple ciencia y los que ya la poseen os pidan poder estudiar o enseñar, tanto a ti como al Poder de romper los obstáculos o a la victoriosa Superioridad,

cuando las doncellas o las hembras receptivas, con buenas obras, te pidan un marido bueno valiente maestro de casa o un macho protector, cuando las mujeres encinta o las hembras preñadas te pidan un buen parto, tú, blanda, potenciada e inalterable (Agua), puedas satisfacer sus demandas".

Sacerdotes, guerreros, mujeres y hembras verán cómo se colman sus deseos sólo si el rey cumple con sus obligaciones rituales. Mujeres y hembras están asociadas en la plegaria, y su plegaria refleja su condición o su papel de mujeres y hembras, sea quien sea la divinidad hacia la que se dirijan. Acabamos de verlas llamar a la gran diosa irania, y ahora dirigen semejante plegaria al Espacio (Vaiiu):

Yašt 15.40 āat †hīm jaiδiiәn .·. auuat āiiaptәm dazdi nō vaiiuš yō uparō.kairiiō yat

nmānō.paitīm viṇdāma yuuānō sraēštō.kәhrpa yō nō hubәrәtąm barāt yauuata gaiia juuāuua frazaiṇtīmca hō vәrәziiāt daŋrō.daṇtō hizuxδō .·.

Entonces ellas pidieron al Espacio: "Concédenos este favor, Espacio de las proezas incomparables, de que podamos encontrar un marido maestro de casa o un macho protector que convenga, sea hermoso de cuerpo, nos trate bien a lo largo de la vida que vivamos y sepa, con sus dientes expertos o con las voces de su lengua, honorar a nuestra capacidad procreadora".

La naturaleza de la plegaria por lo tanto no es función de la divinidad hacia la que los sacrificantes se dirigen, pero más bien depende del papel o estatuto

Éric Pirart, La plegaria en el sacrificio mazdeo

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social de los mismos. A veces, la demanda se limita a la de ser capaz de ofrecer correctamente el sacrificio. Evidentemente, éste es el caso de los miembros de la casta sacerdotal sin cuyas aptitudes técnicas nada sería posible. A menudo, el sacrificio o la petición inherente conciernen el más allá. Con los sacrificios ofrecidos, los mazdeístas quieren asegurarse una vida más allá de la muerte o prepararse para su último viaje:

Yašt 5.98 yim aiβitō mazdaiiasna hištәṇta barәsmō.zasta .·. tąm yazәṇta huuōuuāŋhō

tąm yazәṇta naotairiiāŋhō .·. īštīm jaiδiiaṇta huuōuuō āsu.aspīm naotaire .·. mošu pascaēta huuōuuō īštīm baon sәuuišta mošu pascaēta naotaire vīštāspō āŋhąm daxiiunąm āsu.aspōtәmō bauuat .·.

En la cumbre de los actos buenos alrededor de la que los mazdeístas venían con el manojo de ramas en mano, los del clan del De-las-buenas-vacas le ofrecieron el sacrificio así como los del clan del Barquero. Los del clan del De-las-buenas-vacas, para pedirle la capacidad sacrificial; los del clan del Barquero, caballos veloces para sus almas. Los del clan del De-las-buenas-vacas no tardaron en demostrar la mayor capacidad sacrificial; de todas estas naciones, los del clan del Barquero, sobre todo Histaspes, no tardaron en disponer para sus almas de los caballos más veloces.

En ocasiones, los frutos de la piedad de los adoradores son inesperados:

Yašt 8.49 tištrīm stārәm raēuuaṇtәm ×xvarәnaŋhuṇtәm yazamaide +θamnaŋhuṇtәm

+varәcaŋhuṇtәm yaoxštiuuaṇtәm xšaiiamnәm isānәm hazaŋrāi aiiaptanąm yō daδāiti kuxšnuuąnāi pauruš aiiaptā jaiδiiaṇtāi ajaiδiiamnāi mašiiāi .·.

Ofrecemos el sacrificio a Sirio, el astro de las riquezas y del alimento, asombroso y maravilloso medio de purificación, capaz de satisfacer a su adorador o concederle mil favores, que concede al que le reserve atenciones numerosos favores de los que los mortales pueden pensar o no en pedirle.

Ya lo habíamos visto con el gran dios que ofrecía el sacrificio a su propia hija, debemos a veces contar a los dioses mismos entre los solicitantes. Existe el ejemplo del dios Jugo (Haoma). Por anacoreta o sacerdote que la literatura posterior considere a este dios, la demanda que hace a la diosa De-los-caballos-fijos (druuāspā-) no deja de ser de contenido guerrero. Dioniso también puede mostrar una violencia de guerrero:

Yašt 9.17-18 tąm yazata haomō frāšmiš baēšaziiō srīrō xšaθriiō zairi.dōiθrō barәzište

paiti barәzahi haraiθiiō paiti barәzaiiā .·. āat hīm jaiδiiat auuat āiiaptәm .·. dazdi mē vaŋvhi sәuuište druuāspe tat āiiaptәm yaθa azәm baṇdaiieni

mairīm tūirīm fraŋrasiiānәm uta bastәm vāδaiieni uta bastәm upanaiieni bastәm kauuōiš haosrauuaŋhahe janāt tәm kauua haosrauua pasne varōiš caēcistahe jafrahe uruiiāpahe puθrō kaēna siiāuuaršānāi zūrō.jatahe narahe aγraēraθaheca narauuahe .·.

El Jugo que aportaba la perfección, el curandero, el rey glorioso que, con ojos amarillos, estaba encargado de ejercer la influencia sobre los dioses

Estudios Iranios y Turanios

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Adorables, ofreció a la diosa De-los-caballos-fijos el sacrificio en la cumbre más alta, en la alta Atalaya. Le formuló entonces esta demanda:

"Concédeme, buena y poderosísima Diosa de los caballos fijos, el favor de que yo pueda hacer que el Acurrucado, un guerrero del clan del Achacoso, acabe encadenado. Y el favor de que también yo pueda conducirle y entregarle a las cadenas del atento Vidente De-los-enunciados-buenos. El atento Vidente De-los-enunciados-buenos tendría que golpearle a orillas del Lago Tan-destacado, la alberca profunda donde las aguas están retenidas, con el fin de vengar tanto a su padre de tez azul, De-los-sementales-negros, pues este guerrero malo le ha asestado un golpe traidor, como al merecedor Del-carro-lanzado-por-delante-de-los-demás".

Pocas veces la naturaleza de la plegaria refleja el papel o la función de la divinidad hacia la que el adorador se vuelve. Por ejemplo, lo que el guerrero pide al Intercambio (Miθra), el dios garante de las relaciones que los hombres cultivan con los dioses, es bastante lógico que sea el hecho de mostrarse apto para ayudar a la defensa de esta relación que los impíos, por sus prácticas nefastas, podrían poner en peligro:

Yašt 10.10-11 miθrәm vouru.gaoiiaoitīm yazamaide ... .·. yim yazәṇte raθaēštārō barәšaēšu paiti aspanąm zāuuarә jaiδiiaṇtō

hitaēibiiō druuatātәm tanubiiō pouru.spaxštīm tbišiiaṇtąm paiti.jaitīm dušmaniiunąm ×haθraniuuaitīm hamәrәθanąm auruuaθanąm tbišiiaṇtąm .·. ...

Ofrecemos el sacrificio al Intercambio que reina en espaciosos prados, el Intercambio al que los guerreros ofrecen el sacrificio en el lomo de su

caballo con la esperanza de que dé impulso a sus troncos, la firmeza a sus personas, buena guardia ante los malévolos, el medio de rechazar o derrotar a los que, al profesar una mala opinión y prescindir de las observancias, se con-vierten en adversarios peligrosos.

En cambio, la plegaria que el Intercesor de hombros enjutos (Haošiiaŋha Paraδāta) dirige a la buena Entrega de las ofrendas (Aši), por ser de contenido bélico, no parece reflejar la función de esta Afrodita irania:

Yašt 17.24-25 tąm yazata haošiiaŋhō paraδātō [upa] ×upa.bde haraiiā bәrәzō srīraiiā

mazdaδātaiiā .·. <satәm aspanąm hazaŋrәm gauuąm baēuuarә anumaiianąm uta zaoθrąm frabarō .·.>

āat hīm jaiδiiat .·. †auuat āiiaptәm dazdi mē ašiš vaŋvhi yā bәrәzaiti .·. yat bauuāni aiβi vaniiā vīspe daēuua māzainiia yaθa azәm nōit tarštō frānmāne θβaēšāt parō daēuuaēibiiō frā ahmāt parō vīspe daēuua anusō taršta nәmāṇte taršta tәmaŋhō duuārāṇti .·.

El Intercesor de hombros enjutos ofreció el sacrificio a la buena Entrega de las ofrendas en las estribaciones de la hermosa Atalaya que el Rey de la Sabiduría había colocado en su sitio. Lo hizo conduciendo al área sacrificial cien caballos, mil toros y diez mil carneros a más de las libaciones.

Le formuló entonces esta demanda: "Concédeme, alta y buena Entrega, el favor de que yo pueda imponerme victorioso a todos los Desafortunados a los que el tirano honra; el favor de que, ante el peligro que los Desafortunados

Éric Pirart, La plegaria en el sacrificio mazdeo

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representan, yo no pueda contraer ningún miedo mientras ellos, sólo podrían temerme y, llenos de espanto, hundirse en las tinieblas".

Por definición, los seres demoníacos se ven honrados sólo por los impíos. Se considera inoportuno ofrecerles el sacrificio, pues nada se les puede pedir:

Yašt 21.1 vanaṇtәm stārәm mazdaδātәm ašauuanәm ašahe ratūm yazamaide .·. yazāi

vanaṇtәm amauuaṇtәm aoxtō.nāmanәm baēšazәm paitištātәe ajasta[ca] zōiždišta[ca] apaiiaṇtamahe[ca] aŋrahe mainiiәuš xrafstra o ... o oo

o Ofrecemos el sacrificio al astro Victorioso, el (adorable) al que el Rey de

la Sabiduría colocó en su sitio, que es un factor armonioso del Encaje bueno. Ofrezco el sacrificio al Victorioso, pues le acompaña el poder ofensivo, merece ser nombrado en el transcurso de las ceremonias sacrificiales y aporta los reme-dios. Lo hago con el fin de contrarrestar los ataques que los lamentables y repugnantes retoños del Parecer funesto perpetran: nada bueno se les puede pedir.

Fuera de los Yašt, encontramos la raíz jad sobre todo en los textos del Elogio del Jugo (Haom Staot) y de la Libación vertida en las aguas (Āb Zōhr). El Elogio del Jugo contiene toda una serie de demandas formuladas ante el dios Jugo (Haoma) en las que el sujeto del verbo "pedir" nunca se especifica. El paralelismo o la correspondencia que habíamos detectado en los Yašt entre solicitud y solicitante me sugiere la idea de que, normalmente, todas las frases Yasna 9.19-23 no se pueden poner en una y misma boca. Ahora bien, el texto sí parece ponerlas todas en boca de Zoroastro. Sin embargo, cabe señalar, como sabemos por otra parte, que este interlocutor habitual de los dioses tenía a la vez los estatutos de sacerdote, guerrero y campesino:

Yasna 9.19-23 imәm θβąm paoirīm yānәm haoma jaiδiiemi dūraoša .·. vahištәm ahūm

ašaonąm raocaŋhәm vīspō.xvāθrәm .·. imәm θβąm bitīm yānәm haoma jaiδiiemi dūraoša .·. druuatātәm aŋhāsә tanuuō .·. imәm θβąm θritīm yānәm haoma jaiδiiemi dūraoša .·. darәγō.jītīm uštānahe .·.

imәm θβąm tūirīm yānәm haoma jaiδiiemi dūraoša .·. yaθa aēšō amauuā θrąfәδō fraxštāne zәmā paiti tbaēšō.tauruuā drujәm.vanō .·. imәm θβąm puxδәm yānәm haoma jaiδiiemi dūraoša .·. yaθa vәrәθrajā vanat.pәšanō fraxštāne zәmā paiti tbaēšō.tauruuā drujәm.vanō .·.

imәm θβąm xštūm yānәm haoma jaiδiiemi dūraoša .·. pauruua tāiiūm pauruua gaδәm pauruua vәhrkәm +būiδiiōi.maiδi .∙. mā ciš pauruuō būiδiiaēta nō .∙. +vīspî pauruua +būiδiiōi.maiδi oo

o haomō aēibiš yōi auruuaṇtō hita taxšәṇti arәnāum zāuuarә aojāsca

baxšaiti .·. haomō +āzīzanāiti.biš daδāiti xšaētō.puθrīm ... .·. haomō taēcit yōi kataiiō naskō.frasāŋhō āŋhәṇte spānō mastīmca baxšaiti .·.

haomō tāscit yā kainīnō ×āŋhāire darәγәm aγruuō haiθīm rāδәmca baxšaiti mošu jaiδiiamnō huxratuš .·.

Te dirijo también estas seis plegarias a ti, Jugo desinfectante. La primera es que me concedas llegar a la existencia excelente de la que las almas de los armoniosos deben gozar, existencia puramente diurna, donde el bienestar les

Estudios Iranios y Turanios

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pertenece a todos. La segunda, Jugo desinfectante, es que me garantices la firmeza de la persona. La tercera, Jugo desinfectante, es que garantices la victoria definitiva a mi facultad de movimiento.

La cuarta, Jugo desinfectante, es que me des, llegado el momento, el vigor, la fuerza ofensiva y la alegría de erguirme en esta tierra24 para superar los perjuicios y vencer a la Falencia. La quinta, Jugo desinfectante, es que me des, llegado el momento, el poder de romper los obstáculos y vencer al adversario cuando yo me yerga otra vez en esta tierra para superar los perjuicios y vencer a la Falencia.

La sexta, Jugo desinfectante, es que nos concedas el poder de detectar los primeros la presencia del ladrón, del malandrín o del lobo. ¡Ojalá ninguno de ellos pudiera detectar nuestra presencia el primero! ¡Ojalá pudiéramos detectar los primeros la presencia de cada uno de ellos!"

(El Rey de la Sabiduría dijo a Zoroastro:) "El Jugo imparte impulso y prestancia a los caballos destreros que, bien embridados, están listos para hacer el trayecto a galope. El Jugo imparte a las hembras preñadas poder dar a luz a hijos esplendorosos. El Jugo también, a los que, por numerosos que sean, están listos para dedicarse al comentario de los libros, imparte las capacidades de estudiar y de enseñar.

El Jugo también, tanto a las doncellas como a las hembras que se han quedado mucho tiempo sin pareja, imparte encontrar la protección de un hombre santo o de un jefe de manada. El Jugo colma sin tardar nuestras plegarias siempre que la buena inteligencia las acompañe.

El Elogio del Jugo nos informa que la ausencia de plegaria dirigida a la divinidad demuestra la impiedad y genera la maldición. El hombre piadoso, podemos deducir de ello, es aquel que encomienda demandas a los dioses y, por lo tanto, les ofrece el sacrificio:

Yasna 11.2 aspō bāšārәm ×zauuaite .·. mā buiiā auruuatąm yūxta mā auruuatąm

aiβišasta mā auruuatąm niθaxta yō mąm zāuuarә nōit +jaiδiiehe +pouru.maiti haṇjamaine pouru.naraiiā karšuiiā .·.

Para proferirle una maldición, el caballo dice al jinete: "Tú no podrás nunca más uncir caballo destrero ni montar caballo destrero ni conducir caballo destrero si, en ocasión de la gran concentración, negliges encomendarme con corrección la demanda de tener impulso encima de la gleba en la que viven tantos hombres".

La plegaria que se dirige a las Aguas en el texto de la Libación vertida en ellas, en un primer tiempo, concuerda bastante con su papel de purificadoras, pues se habla de deprecación, si bien, a continuación, las demandas se muestran más genéricas a tal punto que las que se dirigen a las Aguas llegan a servir como modelos para las que, de contenido idéntico, se podrían enco-mendar a muchos otros Adorables (Yazata):

24 ¿Zoroastro reaparecerá en el último milenio?

Éric Pirart, La plegaria en el sacrificio mazdeo

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Yasna 65.10-12 auua.jastīm pauruuąm āpō jaiδiiōiš zaraθuštra .·. pascaēta aiβiiō zaoθrā

frabarōiš yaoždātā dahmō.pairīštā imą vacō framrū .·. āpō yānәm vō yāsāmi mazāṇtәm tәm mē dāiiata yeŋhe dāiti paiti vaŋhō

nisrīta anaiβi.druxti .·. āpō īštīm25 vō jaiδiiāmi pouru.sarәδąm amauuaitīm frazaṇtīmca xvāparąm yeŋhā pourūšca bәrәjaiiąn naēcišca aŋhā yāsāiti ziiānāi nōit snaθāi nōit mahrkāi nōit aēnaŋhe nōit apaiiatәe .·.

imat vō āpō jaiδiiemi imat zәmō imat uruuarā imat amәšā spәṇta huxšaθra huδāŋhō vaŋhauuasca vaŋvhīšca vohunąm dātārō imat ašāunąm vaŋvhīš frauuašaiiō uγrā aiβiθūrā imat miθra vouru.gaoiiaoite imat sraoša ašiia huraoδa imat rašnuuō razišta imat ātarә ahurahe mazdā puθra imat bәrәza ahura xšaθriia apąm napō auruuat.aspa imat vīspe yazatāŋhō yōi vaŋhazdā ašauuanō .·.

Conviene que, para empezar, pidas a las Aguas que te enmienden. Luego, conviene que lleves a las Aguas las libaciones corregidas o cuidadas con arte y pronuncies estos versos:

"Aguas, os encomiendo esta gran demanda: ¡concededme el favor con el que me pongáis mejor a cubierto ante cualquier injuria! Aguas, con el poder ofensivo que me dan las palabras sagradas, os formulo una exigencia múltiple y pido que me deis la capacidad de generar una buena descendencia a la que los dioses sean numerosos en saludar y de la que ninguno de ellos desee ni el despojo ni el asesinato ni la destrucción ni el maltrato ni la exclusión.

Aguas, os dirijo esta plegaria. Tierras, esta plegaria. Plantas, esta plegaria. Inmortales Sabios con quienes la influencia resulta buena al ejercerla sobre los dioses y las ofrendas se hacen buenas, que seáis los Buenos o las Buenas, vosotros que podéis darnos buenas cosas, esta plegaria. Buenas y poderosas Preferencias de los armoniosos que nunca tropezáis, esta plegaria. Intercambio que reinas en espaciosos prados, esta plegaria. Discurso que velas por la armonía y muestras un buen desarrollo, esta plegaria. Itinerario rectilíneo, esta plegaria. Fuego, hijo del Rey de la Sabiduría, esta plegaria. Tú, el alto rey que ejerces sobre los dioses la influencia ritual, nieto de las aguas que tienes caballos destreros, esta plegaria. Vosotros todos los Adorables armoniosos que nos aseguráis lo mejor, esta plegaria".

La plegaria se acompañaba con fórmulas rituales entre las que podemos encontrar extractos de los textos avésticos más arcaicos. Por ejemplo, el párrafo Yasna 68.21 del texto de la Libación vertida en las aguas indica el uso de toda una parte del Sacrificio séptuple (Yasna Haptaŋhāiti [YH]):

Yasna 68.21 vaŋvhīm iδāt ādąm vaŋvhīm ašīm āca nica mrūmaide V īžā yaoštaiiō (YH

38.2a) V apō at yazamaide (YH 38.3a) V ūitī yā vә vaŋvhīš (YH 38.4a) V apascā vā (YH 38.5a) .·. jaiδiiamnā nō yūžәm dasta xšaiiamnā raēšca xvarәnasca āpō dasta nō tәm yānәm yō yūšmat parō frauuistō ºoº

Aguas, solicitadas y sometidas a la influencia que ejercemos con el texto "Nos dirigimos de este modo a las diosas Presentación y Entrega de las ofrendas para comunicarles nuestro deseo" seguido de los párrafos 38.2-5 del

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Estudios Iranios y Turanios

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Sacrificio séptuple, dadnos la riqueza y el alimento, concedednos, Aguas, este favor que sólo podemos obtener de vosotras.

Para concluir, digamos que el verbo jad llegó a ocupar la casi totalidad del terreno y que una gran rigidez de las concepciones rige su uso. El orante sólo puede pedir a los dioses lo que le corresponda y nada más. Y esto, siempre que uno sea de signo positivo y les ofrezca el sacrificio con acierto. ¡Qué automaticidad mecánica más poco variable! En cualquier caso, sin pedirles nada, uno no puede ofrecer el sacrificio a los dioses.