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בירושליםבירושליםSUCOT

BIRUSHALAIM

Recorrer Jerusalén durante la festividad de Sucot es sin duda una experiencia muy peculiar. En numerosos patios, jardines, terrazas y

balcones – especialmente construidos de forma escalonada - aparecen en estos días las cabañas hechas de vigas de madera o lonas,

cubiertas por un techo de hojas de palma, siguiendo el precepto de ser de naturaleza frágil:

"El día quince del mes séptimo será festividad de las cabañas para el Eterno. Viviréis en cabañas siete días… para que vuestras

generaciones sepan que hice habitar a los hijos de Israel en tiendas cuando los liberé de la tierra de Egipto" (Vaikrá, 23:42-43).

En algunos barrios de la ciudad, la población cumple estrictamente los códigos de la ley judía milenaria y trata de emular, residiendo en estas

“sucot”, a nuestros antepasados que durante 40 años vivieron en el desierto, guiados por Moisés tras ser liberados de Egipto,

hace más de 3.000 años.

Las sucot, muchas de ellas llamativamente decoradas con guirnaldas, frutos, dibujos y bendiciones, conforman un paisaje colorido y alegre, siguiendo el precepto de la alegría que caracteriza a esta festividad:

“vesamajta bejagueja”, “y te regocijarás en tu fiesta” (Devarim, 16:14)

Fuentes utilizadas: www.jerusalemshots.comwww.deisrael.com/" 2004יום יום חג" - טקסים ופולחנים בישראל של ימינו. הוצאת כנרת, . 

Elaborado por:

Merkaz Iehuda Amijai - BAMA