01 Biodiversidad Baja

Embed Size (px)

Citation preview

  • reas protegidas del uruguay 01. especial biodiversidad MT 1

    en esTe nMero

    MVD UrUgUay #1 JUN. 2010

    reasprotegidas del uruguay

    Biodiversidad 2010nmero especial

    2010 ao internacional de la diversidad biolgica

    proyecto declarado de inters por la comisin nacional del uruguay para la unesco / unesco / mvotma / dicyt - ministerio de educacin y cultura

    informe especial: entrevistas: p.04. salvatore arico: 2010. ao internacional de la Biodiversidad. / p.11. daniel vidart: paisajes hollados. p.07. Zoom / p.08. conservacin de la Fauna y Flora silvestre. p.12-15. reas protegidas+snap. 01 15

    Comisin Nacional del Uruguay para la UNESCO

  • reas protegidas del uruguay 01. especial biodiversidad 2 3

    agradecimientos

    Andrea Vignolo [Comisin Nacional para la UNESCO]/ Clara Netto/ Roberto Elissalde/ Jorge Grandi [Oficina Regional de Ciencia para Amrica Latina y el Caribe - UNESCO]/ Cludia Karez, Sylvie Tewes [UNESCO]/ Alicia Torres [MVOTMA]/ Valeria Bolla/ Erika Hoffmann, Laura Modernell, Guillermo Scarlatto [SNAP]/ Enrique Gonzlez [Vida Silvestre y Museo Nacional de Historia Natural]/ Galera de las Misiones/ Jos Lavalleja Castro.

    01.

    fotografas

    Las imgenes que se publican en esta coleccin, y que figuran con su crdito correspondiente, pertenecen al SNAP, al archivo personal de Alejandro Sequeira, a fotgrafos independientes, a FototecaSur, al archivo fotogrfico del diario El Pas, o fueron cedidas para este nmero por colaboradores.

    vidalos humanitos, somos parte de la naturaleza, parientes de todos los que tienen piernas, patas, alas o races.

    eduardo galeano

    fotografa: alejandro sequeira.

    idea y direccin de proyecto Alejandro Sequeira / investigacin y redaccin Cristina Casaubou+Armando Olveira+Alejandro Sequeira asesoramiento didctico Cecilia Ratti / diseo, diagramacin y armado Trocadero.GabineteDDiseo. contactos Trocadero Telefax: 9012621. Montevideo - Uruguay. Email: [email protected]

    desde el cielo, la Tierra se ve de color azul. as lo dijo Yuri Gagarin, el primer astronauta que pudo alejarse lo suficiente como para descubrir el color del mundo. Ms del 70% de la superficie de nuestro planeta-hogar est cubierto de agua. los ocanos reinan en la Tierra. representan un 99% de la zona habitable. en ellos naci la vida, y en ellos se estima que habita el 80% del total de los seres vivos del planeta. recientemente el f sico y cosmlogo britnico

    stephen Hawking revolucion al mundo diciendo que probablemente exista vida extraterrestre. Quizs no estemos solos en el Universo. carl sagan, cuya pluma maravillosa nos present el cosmos, escribi: a veces creo que hay vida en otros planetas, y a veces creo que no. En cualquiera de los dos casos la conclusin es asombrosa. la vida en la Tierra se ha abierto paso durante millones de aos, en una estricta soledad espacial. es un evento nico que caracteriza este paraso de formas y colores, que hemos bautizado Tierra, el tercer planeta del sistema solar. la diversidad construy nuestro mundo y es parte de un valioso equilibrio que debemos comprender y cuidar. el ao internacional de la Biodiversidad proclamado por la UNesco convoca a la poblacin mediante el eslogan: Biodiversidad es vida, es nuestra vida.

    Agradecimiento especial a Vida Silvestre Uruguay por la revisin tcnica de los artculos de este nmero.

  • reas protegidas del uruguay 01. especial biodiversidad 4 5

    -E

    enTrevisTa

    alEjandro sEquEira

    si la prdida de una sola especie puede resultar en la prdida de un completo sistema de conocimiento y los usos asociados a di-cha especie en particular [...], pregunto por qu querramos perder nuestro seguro para el futuro?

    rea [ enTrevisTa ]

    con salvatore aricoUNESCO

    Biodiversidad

    ao internacional de la diversidad Biolgica

    Cules son las consecuencias ms importantes del aumen-to de extincin de especies que experimenta el planeta en las ltimas dcadas?

    n la actua-lidad, esta-mos experi-mentando lo que podra ser la prime-ra de las ex-

    tinciones globales inducidas por el hombre, no solo de especies, sino tambin de la diversidad gentica, as como de ecosiste-mas y de paisajes los cuatro ni-veles jerrquicos de la Biodiver-sidad. En el pasado, la Biodi-versidad siempre estuvo sujeta a nacimientos y extinciones, pe-ro nunca con el ritmo actual. La Evaluacin de los Ecosistemas del Milenio (The Millennium Ecosystem Assessment), un pro-yecto ambicioso co-patrocina-do por la Unesco, ha demostra-do que el rango actual de prdi-da de Biodiversidad es entre 100

    cimiento y los usos asociados a dicha especie en particular. Por lo tanto, pregunto Por qu querramos perder nuestro se-guro para el futuro?

    En la actualidad, las personas son ms concientes de las con-secuencias del Cambio Climti-co. Cree usted que existe una relacin directa entre el Cam-bio Climtico y la prdida de Biodiversidad? Si es as, Cu-les son?

    Gracias a la labor llevada ade-lante por la comunidad cientfica en el contexto del Grupo Inter-gubernamental de Expertos so-bre el Cambio Climtico Clim-tico (Intergovernmental Panel on Climate Change, IPCC), la re-lacin entre Cambio Climtico y Biodiversidad est bien estable-cida. El Cambio Climtico com-binado con la fragmentacin de hbitats representa el mayor de-safo a la Biodiversidad. Las res-puestas de la Biodiversidad a los cambios climticos han exis-tido siempre y seguirn existien-do, pero los cambios actuales no tienen precedente, y tampoco lo tienen sus efectos. Se ha podi-do observar huellas incuestiona-bles dejadas por el Cambio Cli-mtico en la distribucin y en los ciclos de vida de las especies el Cambio Climtico est alteran-do la Biodiversidad ahora!Las implicancias de la reduci-da capacidad de adaptacin al Cambio Climtico incluyen la re-duccin de la capacidad de las especies de ajustar sus territo-rios a las nuevas condiciones, lo que resulta en un empobre-cimiento gentico y finalmente, en la extincin. En esencia, la re-lacin entre Cambio Climtico y Biodiversidad siempre ha existi-do pero, una vez ms, la frecuen-

    cia e intensidad, a nivel global, del Cambio Climtico actual tiene un impacto sin preceden-tes en la Biodiversidad.

    Pensando en ejemplos con-cretos, cules son las herra-mientas ms efectivas para preservar la diversidad bio-lgica?

    Desde la perspectiva de mi-tigar los efectos adversos del Cambio Climtico en la Biodi-versidad, en el funcionamien-to natural de los ecosistemas, en el desarrollo sostenible y el bienestar humano, la herra-mienta ms efectiva consis-te en permitir que la Biodiver-sidad se adapte. Esto implica que miremos los paisajes de forma diferente. El paisaje de-be basarse en una matriz vi-va de corredores y reas que aseguren que la Biodiversidad pueda auto distribuirse frente a las nuevas condiciones cli-mticas. Pero la adaptacin no es un fenmeno ajeno a las personas, debido a que los procesos ecolgicos y la Bio-diversidad son, en realidad, parte de los sistemas socio-ecolgicos. La Biodiversidad y las personas se moldean en-tre s, con la Biodiversidad gestionada (y alterada) por las personas, y la cultura y las ac-tividades humanas moldea-das por la Biodiversidad. Por lo tanto, tenemos que pensar cmo reorganizar nuestra so-ciedad a la luz del Cambio Cli-mtico, lo que tambin ayu-dar a la conservacin de la Biodiversidad y su uso soste-nible. Una forma muy concre-ta de lograr esto refiere a las Reservas de Biosfera. Las Re-servas de la Biosfera son en-tidades dinmicas, en donde las comunidades se organizan

    de acuerdo a las prioridades de desarrollo y conservacin sobre la base de esquemas de manejo adaptativo.

    Cree usted que es posible lle-var a cabo proyectos econmi-cos sustentables sin perjudi-car la Biodiversidad biolgica y cultural?

    S. De hecho, el desarrollo puede, incluso, incrementar la diversidad biolgica y cultural! Ejemplo de ello son los paisa-jes de produccin socio-ecol-gicos en los cuales la Biodiversi-dad es conservada y utilizada de forma sustentable y equitativa

    por comunidades locales como recurso de subsistencia, y tam-bin para crear mercados loca-les de bienes y servicios, econ-micamente viables, que no po-dran mantenerse en el tiempo sin prcticas culturales asocia-das. El mantenimiento de tales prcticas acta como una garan-ta para conservar la Biodiversi-dad. ste es un ejemplo, de c-mo no solo la diversidad biolgi-ca y la cultural, sino tambin la naturaleza y el desarrollo pue-den coexistir perfectamente, y funcionar con sinergia. Tenemos ejemplos similares en todas las regiones del mundo, desde Bo-livia a Francia, desde Mxico a Japn, Marruecos, Senegal y Es-paa!

    Cules deberan ser los temas prioritarios a resaltar en los programas de Educacin Am-biental?

    Creo que la prioridad es lo-grar que la mayora de las per-sonas entienda que hay un vn-culo irrestricto entre las perso-nas y la Biodiversidad. Este es el objetivo de 2010, el Ao In-ternacional de la Biodiversidad, lanzado por Unesco en Pars, en enero de este ao, propiamen-te, con el objetivo de crear con-ciencia acerca de la Biodiversi-dad. La Biodiversidad es la in-fraestructura viviente de la cual depende el desarrollo humano. Las actividades y los programas educativos, as como aqullos dirigidos a crear conciencia p-blica, pueden ser de gran ayuda para difundir este mensaje, a to-dos los niveles.

    Cules son los principales objetivos del Programa del Hombre y la Biosfera (MAB)?

    Pocas personas saben que es-te programa de Unesco fue crea-

    El desarrollo puede incrementar

    la diversidad biolgica y cultural.

    Ejemplo de ello son los paisajes de produccin

    socio-ecolgicos en los cuales la Biodiversidad

    es conservada y utilizada de forma

    sustentable.

    El rango actual de prdida

    de Biodiversidad es entre 100 y 1.000

    veces ms alto que en el pasado

    milenio.

    y 1.000 veces ms alto que en el pasado milenio.

    En general, hay tres consecuen-cias principales de la prdida de especies y de biodiverdidad. La primera es que ecosistemas me-nos diversos traen como conse-cuencia prdidas parciales o to-tales de algunos de los servi-cios ecosistmicos de los cua-les dependemos, como el agua potable, alimentos, fibras, sue-los funcionales (frtiles) y la ab-sorcin de dixido de carbono. La segunda radica en el hecho de que la prdida de especies y genes nuevos para la Ciencia, no nos permitir utilizar el co-nocimiento cientfico sobre di-chas especies y genes para sus aplicaciones en productos far-macuticos y otros usos indus-triales derivados de la Biodi-versidad, incluidos cosmticos, biomimetismo (diseo de in-geniera basado en la Biodiver-sidad) y productos alimenticios. La tercera refleja los valores es-pirituales y estticos de la Biodi-versidad, y deberamos tener en cuenta, que en muchos casos, la prdida de una sola especie puede resultar en la prdida de un completo sistema de cono-

    SALVATORE ARICO

    Especialista en Biodiversidad y responsable cientfico de la UNESCO para el Ao Internacional de la Di-

    versidad Biolgica. Es doctor [Ph.D.] en Entorno martimo y Recursos, ttulo otorgado en 1992 por la Sta-

    zione Zoologica Anton Dohrn de Npoles, Italia. Trabaja en la UNESCO como especialista en el Progra-

    ma de Biodiversidad de la Divisin de Ciencias Ecolgicas y de la Tierra.

    especialista en Biodiverisdad

  • reas protegidas del uruguay 01. especial biodiversidad 6 7rea [ enTrevisTa ]

    el abanico de la vida

    la diversidad biolgica, o sea, la variedad de vida que ha-bita la Tierra, incluye a todos los seres vivos, cada uno de ellos, portador de una combinacin gentica nica que lo relaciona, y a su vez diferencia de los dems. Po lo tanto, la vida se expresa en un abanico biolgico, que incluye se-res minsculos, invisibles a simple vista, como las bacterias y protistas microscpicos, hasta el animal ms grande del planeta, la ballena azul, o las inmensas sequoias, las ms al-tas de todas las plantas. adems del valor intrnseco, la bio-diversidad tiene un importante valor instrumental, ya que brinda al Hombre importantes bienes y servicios. La Na-turaleza nos provee de muchas mercancas indispensables para la vida, tales como alimentos, fibras, medicinas, com-bustibles y materiales de construccin. Un caracol marino de Madagascar, que ha proporcionado una droga, la vin-cristina, para combatir la leucemia en nios, constituye un claro ejemplo del gran valor que las especies pueden llegar a tener para el Hombre.* l

    iMpacTos del caMbio cliMTico

    En el seminario Conserva-cin y uso sostenible de la biodiversidad, organizado por el Proyecto de Produc-cin Responsable (PPR) del Ministerio de Agricultura, Ganadera y Pesca, en abril de 2010, el Ing. Agr. Walter Oyhantabal sintetiz cua-tro de las consecuencias que produce el cambio climti-co: 1. Cambios en la distri-bucin de especies. 2. Au-mento de las tasas de ex-tincin (ej.: ms plagas y en-fermedades). 3. Cambios en los tiempos de reproduccin y 4. Cambios en la duracin de la estacin de crecimien-to de las plantas. A esto se agrega el aumento de muer-te de corales, el aumento de riesgos de incendios y la ten-dencia de la bisfera a con-vertirse en una fuente ne-ta de carbono. Con respecto a las pasturas del Uruguay unas de las ms ricas en es-pecies de gramneas de la regin plante que la pro-ductividad y la composicin botnica de las mismas se-r probablemente afectada por el cambio climtico por los efectos combinados de los cambios en: temperatu-ra, rgimen de lluvia, y con-centracin de CO2. La pro-teccin de la biodiversidad contribuye a la adaptacin al cambio climtico, que si bien es un fenmeno glo-bal, la adaptacin, incluyen-do la proteccin de la biodi-versidad, es local, afirm el especialista. l

    cliMa

    ciFraocanos

    ZooM

    137En las selvas hmedas, unas de las regiones de mayor biodiversidad del mundo, la tala de rboles provoca la prdida de 137 plantas, animales e insec-tos cada da. Al desapare-cer las especies, tambin desaparecen, todos los das, posibles medicinas. La magnitud del probble-ma puede apreciarse si te-nemos en cuenta que el 25 % de los frmacos de Oc-cidente proviene de plan-tas que habitan en dichas selvas. En la actualidad se estima que slo el 5% de las plantas que crecen en dicho ecosistema, ha sido estudiado. l

    corazn azulLos ocanos cubren ms del 70% de la superficie de la Tierra, y re-presentan el 99% del espacio habitable, del cual el Hombre ha ex-plorado menos del 10%. De hecho, se calcula que entre 50 y 80% del total de seres vivos habita en ellos (no se sabe con certeza cuntas especies viven en el planeta, se cree que podran ser en-tre 5 y 30 millones). Sin embargo, la mayora de las reas prote-gidas del mundo son fundamentalmente terrestres. Hoy, los ex-pertos hacen hincapi en proteger los ocanos con mayor efi-cacia. Recientemente la IUCN*, junto a Google Earth, logr con el proyecto Ocean [http://earth.google.es/ocean/] un avan-ce importante en la difusin de los ecosistemas ocenicos. El mis-mo permite que millones de personas puedan sumergirse en los ocanos del mundo a travs de internet, y sensibilizarse acer-ca de la importancia de proteger el corazn azul de la Tierra. l

    La biodiversidad de los suelos de las selvas tropicales es tan grande que se estima que tan solo un metro cuadrado del mismo contiene ms de 1.000 invertebrados e innumerables micro artrpodos.

    *De Prioridades Geogrficas para la Conservacin de la Biodiversidad Terres-tre de Uruguay, Coord. general: Alejandro Brazeiro. Facultad de Ciencias, UDE-LAR, 2008.

    Tomado de la exposicin didctica La Diversidad Biolgica es Nuestra Vida realizada por la UNESCO en el marco de 2010-Ao Internacional de la Diversidad Biolgica.

    do, incluso, antes que el Progra-ma de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente! El Progra-ma sobre el Hombre y la Biosfe-ra (The Man and the Biosphe-re Program MAB, en ingls) es un esfuerzo pionero que apunta a dilucidar cmo interactan el Hombre y la Biosfera, y cul es la mejor forma de reconciliar los intereses de Conservacin con los de Desarrollo. Luego de ca-si 40 aos de existencia, el pro-grama ha demostrado que esto es, de verdad, posible. Y debe-ramos complementar la globa-lizacin con sets de enfoques ms localizados para conserva-cin y desarrollo, ejemplifica-do por la nocin de Reservas de Biosfera. l

    Una mayor diversidad de especies en los ecosistemas da como resultado ecosistemas ms adaptables y resistentes a los cambios en las condiciones ambientales. Cada especie cumple una funcin especfica en la trama de la vida, y depende de otras especies para su supervivencia. La trama de la vida pierde su equilibrio cuando desaparece una especie, lo cual afecta ulteriormente, a los servicios ecosistmicos de los que nos beneficiamos.

    xisten especies que son particu-larmente sensi-bles a los cam-bios del ambien-te. Si se monito-rea el nmero de

    individuos de las poblaciones de estas especies, entonces se puede tener una idea de la salud del hbitat en donde viven. Son, por lo tanto, especies indicadoras, medi-dores de peligros ecolgicos. Muchas de estas especies son pequeos invertebrados y or-ganismos microscpicos (pro-tistas y bacterias). Sin embar-go, el estudio de organismos indicadores ms grandes y complejos, puede aportar da-tos ms tiles acerca del esta-do de un ecosistema.

    el caso de las lagartijas

    Segn el artculo Biodiversi-dad, de la especialista Ann Fullick, publicado en la revis-ta New Scientist, en 2002, las lagartijas son muy comunes al sur del Sahara africano y en muchas otras regiones clidas, tropicales y subtropicales. s-tas se alimentan de insectos, y son, a su vez, comidas por aves y pequeos mamferos, por lo cual son una parte im-portante de muchas cadenas y redes alimenticias. Las lagarti-jas tienen un metabolismo de bajo rango y son sensibles a muchos pesticidas, lo cual las convierte en buenos indica-dores del efecto causado por la fumigacin de pesticidas. Manteniendo un ojo sobre las lagartijas, los investigadores pueden inferir cmo afecta la

    Medidores de peligro

    Ebioindicadores

    fumigacin a los insectos, a las aves y a mamferos relaciona-dos por las cadenas trficas, y as predecir cualquier impacto en los rangos de polinizacin de las plantas.Fullick opina que las cifras in-ternacionales de extincin de especies subestiman la cri-sis que sufre la Biodiversidad Se han clasificado 1.2 millo-nes de especies de animales y 270,000 especies de plantas, pero solo se ha podido cono-cer el estado de conservacin de una pequea fraccin. [...] La IUCN alerta, por ejemplo, que 5.714 plantas se encuen-tran amenazadas, pero admite que solo se ha estudiado el 4% de las plantas conocidas. Y, por supuesto, hay miles de es-pecies que an no hemos des-cubierto, muchas de las cuales podran estar en peligro de ex-tincin. l

    ESPECIES EN PELIGRO Datos de la Lista Roja de la UICN (ver pgina 9) [2009].Basado en publi-caciones de la UNESCO.

    Ave

    s

    Anf

    ibio

    s

    Mam

    fero

    s

    50

    14%

    31%

    22%

    35%

    100

    0

    Co

    nfe

    ras

    *UICN: Unin Internacional para la Conservacin de la Naturaleza.

    1. Cianobacteria. esta cianobacteria es el organismo fotosinttico ms pequeo (0,5 micrmetros) pero tambin el ms abundante en la Tierra. [foto: cNrs Fotothque / Partensky Frdric li William K.W.] 2. Maz. la variacin cromtica del maz es orgullo de los indios huicholes y constituye un recurso gentico: pero los patrones de consumo tienden hacia el maz comercial, de plantas transgnicas. 3. Tutara (Sphenodon sp.) la temperatura determina el sexo del tutara. cuando las temperaturas del nido son superiores a los 21.5 grados centgrados, slo nacen machos. el aumento de la temperatura generado por el cambio climtico puede, por lo tanto, llevar a esta especie a la extincin.

    1 32

  • reas protegidas del uruguay 01. especial biodiversidad 8 9

    ada especie est representada por una combinacin gentica que se re-plica con cada ge-neracin, gracias a que los seres vivos

    son capaces de reproducirse. Cuando muere el ltimo ejem-

    plar de una especie, sin dejar descendencia, la misma se ex-

    C

    ConsErvaCin dE la fauna y flora silvEstrE dEl uruguay

    en la lista de especies prioritarias para la conservacin realizada por el snap se identificaron 27 mamferos, 53 aves, 16 anfibios, 30 reptiles, 18 moluscos terrestres y 788 plantas.

    especies prioriTarias

    rea [ panoraMa ]

    TexTo

    alEjandro sEquEira

    3ciFra

    Son las categoras de espe-cies amenazadas estableci-das por la UICN*: vulnerable: aquellas con alto riesgo de ex-tincin a mediano plazo; en pe-ligro: cuando existe peligro de extincin en un futuro cercano, y en peligro crtico: cuando la especie est gravemente ame-nazada, en peligro de extincin a corto plazo.

    las reservas de fauna y flora, y las reas protegidas, son espacios imprescindibles para la proteccin de la biodiversidad

    ESPECiES A PrOtEgEr POr SnAP. La lista rene 27 mam-feros, 53 aves, 16 anfibios, 30 reptiles, 18 moluscos terres-tres y 788 plantas. En ella figu-ran, entre otros, los siguientes animales y plantas:

    Coat Nasua nasua spadicea

    guazubir Mazama gouazoubira gouazoubira

    Oso hormiguero chico Tamandua tetradactyla chapadensis

    Zorro guar o aguaraguaz Chrysocyon brachyurus

    Venado de campo Ozotoceros bezoarticus

    Lobo fino sudamericano Arctocephalus australis

    and Rhea americana

    Perdiz Nothura maculosa

    Cisne de cuello negro Cygnus melancoryphus

    Viudita blanca grande Xolmis dominicanus

    Sapito de Darwin Melanophryniscus montevidensis

    Sapito de Devincenzi Melanophryniscus devincenzii

    tortuga verde Chelonia mydas

    tortuga lad Dermochelys coriacea

    Vbora de coral Micrurus frontalis

    Vbora de cascabel Crotalus durissus terrificus

    Ceibo Erythrina crista-galli

    Palma buti Butia capitata

    tingue. Es el final de un largo viaje durante el cual las especies acumula-ron informacin y transformaron su forma y compor-tamiento para po-der sobrevivir, pre-sionados por un proceso que el na-turalista Charles Darwin llam se-leccin natural.

    La contaminacin, la deserti-ficacin, la deforestacin (tala de bosques y selvas), el calen-tamiento global, la expansin de los cultivos, la destruccin

    y fragmentacin de los hbitats naturales son algunas de las causas de la desaparicin de es-pecies. Se ha comprobado que, a nivel global, el rango de extin-cin se est acelerando: 38 es-pecies de aves y mamferos se extinguieron entre 1600 y 1810, mientras que el nmero de ex-tinciones ascendi a 112 entre 1810 y 1995. Segn los registros

    de BirdLife Inter-national, de las 129 extinciones de aves registra-das, 103 desapa-recieron desde 1800. La prdida de biodiversidad no es inocua, si-no que tiene consecuencias i m p o r t a n t e s , muchas de las

    cuales son irreversibles. Segn Edward O. Wilson, uno de los cientficos que ms ha contribui-do a la formulacin del concep-to de biodiversidad, una de las consecuencias es la prdida

    de muchas de las enciclopedias genticas de la vida que han tar-dado millones de aos en cons-tituirse. Otra consecuencia es la prdida o el deterioro de ecosis-temas, debido a la desestabiliza-cin causada por la desaparicin de eslabones en las cadenas ali-mentarias. Tambin tenemos la prdida de posibilidades en m-bitos como la medicina, las bio-tecnologas y la agricultura, y por ltimo, aunque no por ello me-nos importante, la prdida defi-nitiva de una parte considerable del patrimonio natural del mun-do o de los pases. Cada una de las consecuencias que acabo de mencionar es, de por s sola, una tragedia, con el agravante de que todas ellas se estn produciendo a un mismo tiempo.

    listas rojasPara poder implementar una efi-caz estrategia de conservacin es imprescindible conocer las especies amenazadas, as como el grado de riesgo en que se en-

    cuentran. La Unin Mundial pa-ra la Conservacin de la natu-raleza (UICN) es la organizacin ms influyente de su tipo, a ni-vel global. A travs de una Comi-sin especial, la UICN trabaja en la elaboracin de listas rojas que clasifican las especies de acuerdo al estado de conserva-cin. Segn su situacin, las es-pecies amenazadas figuran co-mo vulnerables, en peligro o en peligro crtico.

    alerta uruguayUna forma de proteger las es-pecies amenazadas consiste en controlar su caza y comercio. En nuestro pas el decreto 164/996 prohbe la caza, trans-porte, tenencia, comercializa-cin e industrializacin de ani-males silvestres y otro decre-to (el 514/001) define las espe-cies afectadas por la norma. El cumplimiento de dichos decre-tos est regulado por la Direc-cin general de recursos natu-rales renovables (RENARE), del

    Ministerio de Ganadera, Agri-cultura y Pesca (MGAP). Con el mismo propsito se llev a cabo, en 1973, la Convencin sobre el Comercio internacio-nal de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES, en ingls), en la cual se redact un acuerdo internacional para asegurar que el comercio inter-nacional de especmenes de ani-males y plantas salvajes no ame-nace su supervivencia en su me-dio natural. Desde que comen-z a aplicarse, ninguna de las especies protegidas por la CITES se ha extinguido a consecuencia de su comercio. Uruguay cuenta hoy con 125 especies protegidas por dicha Convencin. Una herramienta de conserva-cin de hbitats y especies, con-siste en crear Reservas de fau-na y flora, Parques Nacionales y otras reas bajo proteccin. En nuestro pas se est implemen-tando un Sistema nacional de reas Protegidas (SNAP), un re-curso que permite armonizar el cuidado del ambiente, en par-ticular de la diversidad biolgi-ca, con el desarrollo econmi-co y social del pas (Ver pgina 12). Los expertos coinciden que las reas protegidas contribu-yen a la conservacin del patri-monio natural y cultural del pas y ayudan a reducir las presiones causadas por algunas activida-des humanas sobre estos am-bientes.En 2009, el SNAP elabor una lista de especies de nuestra fau-na y flora silvestre consideradas prioritarias para la conserva-cin. Dicho trabajo fue coordi-nado por la Direccin nacional de Medio Ambiente (DINAMA) y cont con el apoyo de diversas instituciones que, en conjun-to, comprometieron a unas 200

    la prdida de biodiversidad no es inocua sino que Tiene consecuencias iMporTanTes.

    Coend. es una de las tantas especies carismticas* de la fauna silvestre del pas. se conoce tambin como puercoespn sudamericano. en Uruguay vive en el Norte y este del pas, desde artigas a Paysand, durazno y Treinta y Tres, hacia la frontera, en donde pasa gran parte del da alimentndose en lo alto de los rboles. su cola prensil es una adaptacin a la vida arborcola, y la utiliza principalmente para sujetarse cuando desciende.

    vu en cr

    *As se llaman aquellas especies que por alguna caracterstica particular cuentan con la simpata de la gente como, por ejemplo, los ciervos en especial los que se parecen a Bambi, los delfines y los andes, entre otros.

    *UICN: Unin Internacional para la Conservacin de la Naturaleza.

    +info: http://www.iucn.org/es

    fotografas: 1. and (Rhea americana). 2. Perdiz (Nothura maculosa)*. 3. Lobo fino sudamericano (Arctocephalus australis)*. 4. Venado de campo (Ozotoceros bezoarticus)* fotos*: archivo del snap [mvotma-dinama]..

    1

    2 3

    4

  • reas protegidas del uruguay 01. especial biodiversidad 10 11

    rea [ panoraMa huMano ]

    Jaguar (Panthera onca) Ocelote (Leopardus pardalis) Lobo grande de ro (Pteronura brasiliensis)Ciervo de los pantanos (Blastocerus dichotomus)Chorlo polar (Numenius borealis) guacamayo azul (Anodorhynchus glaucus)Loro cabeza roja (Amazona pretrei)

    En la lista de especies CITES* de la fauna sil-vestre del Uruguay existen 7 especies anima-les catalogadas como extintas:

    especies exTinTas de la Fauna silvesTre de uruguay

    extinciones

    *CITES: The Convention on International Trade in Endangered Species of Wild Fauna and Flora (Convencin sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres). Es un acuerdo internacio-nal entre gobiernos, redactado como el resultado de la resolucin adoptada en 1973 en una reunin de los miem-bros de la Unin Mundial para la Defensa del Medio ambiente (World Conservation Union) (IUCN).

    +info: http://www.cites.org/esp/index.shtml

    Extinto EX

    Extinto en estado silvestre EW

    En peligro crtico Cr

    En peligro En

    Vulnerable VU

    Casi amenazado nt

    Preocupacin menor LC

    Datos insuficientes DD

    no evaluado nE

    caTegoras de la uicn+ abreviaTuras de uso coMn

    *En rojo las diferentes categoras bajo amenaza de extincin.

    Jaguar Lobo grande de ro Loro cabeza roja

    Adems de los organismos oficiales comprometidos con la conservacin de las especies en terriorio nacional la mayora coordinadas por la Di-reccin Nacional de Medio Ambien-te (DINAMA) a la cual pertenece el SNAP, existe un grupo de orga-nizaciones no gubernamentales (ONG) dedicadas a crear concien-cia acerca de la situacin de la bio-diversidad y el estado de los ecosis-temas del pas. Algunas de ellas tra-bajan con un grupo de animales en particular, mientras que otras, como Vida Silvestre por ejemplo, tiene un rango de accin ms amplio. En tr-minos generales, estas ONG coordi-nan proyectos entre s o con los or-ganismos gubernamentales. Tambin existen grupos de estudio y trabajo del Instituto de Investiga-ciones Prof. Clemente Estable, as como de la Facultad de Ciencias y el Museo de Historia Natural, entre otros, son puntales importantes en muchos de los proyectos que estu-dian la riqueza de especies de nues-tro pas. l

    En 2008, un equipo multidis-ciplinario formado por botni-cos, zologos, gegrafos y ec-logos de la Facultad de Ciencias de la Universidad de la Repbli-ca public el trabajo Priorida-des Geogrficas para la Conser-vacin de la Biodiversidad Te-rrestre de Uruguay. La inves-tigacin sobre la biodiversidad terrestre del pas se llev a ca-bo con el propsito de apoyar el proceso de planificacin del Sis-tema Nacional de reas Protegi-das (ver pgina 12).

    Como resultado, el equipo propuso la divisin del territorio nacional en biozonas* en las que se identificaron los puntos cuya conservacin se conside-ra pioritaria (1). El sistema pro-puesto consta de 6 biozonas que incluyen un total de 32 cuadrcu-las que contemplan la conserva-cin del 96,5 % de las 544 espe-

    muChas ong En aCCin

    Mapa de biodiversidad

    conservacin

    FaculTad de ciencias

    personas y varios aos de inves-tigacin. Para la seleccin se to-maron en cuenta tres criterios: la relevancia de la contribucin de Uruguay para la conservacin de especies a nivel global; la nece-sidad de implementar estrate-gias para evitar el deterioro a ni-vel nacional, y la utilidad en tr-minos de contribucin potencial o real de esas especies al bienes-tar humano.En la lista se identifican aquellas especies del pas que son objeto de especiales esfuerzos de pro-teccin, y se selecciona, adems, un subgrupo destinado a ser pro-tegido directamente por el SNAP (ver recuadro amarillo de la pgi-na anterior).

    La distribucin de estas espe-cies en el territorio nacional, en especial la de aqullas que se en-cuentran amenazadas, es uno de los principales factores que el SNAP tiene en cuenta para identi-ficar y delimitar las reas que in-gresan al sistema.

    El equipo de trabajo elabor, tambin, un documento en el que se destaca la importancia que ad-quieren las polticas de conserva-cin fuera de las reas protegidas y, sobre todo, la necesidad de ar-ticular todas las polticas de con-servacin que tiene el pas.

    cra y repoBlacinAdems de la proteccin direc-ta de poblaciones animales, una de las herramientas de conserva-cin de especies autctonas es la cra y posterior repoblacin en los ambientes naturales. Una de las experiencias de cra ms exi-tosas es la que se lleva a cabo con el Venado de campo (Ozoto-ceros bezoarticus) en la Estacin de Cra de la Reserva de Pan de Azcar, en donde se encuentra la poblacin de esta especie en semicautiverio ms grande del mundo. En los ltimos aos, los conservacionistas lograron bajar la mortalidad de los ejemplares nacidos en la reserva a un 18%, antes falleca el 50%.

    Hoy las poblaciones de vena-do de campo del Uruguay se con-centran bsicamente en dos lu-gares: el paraje Los Ajos, en el departamento de Rocha, y la zo-na de Arerungu, en el departa-mento de Salto.

    Arerungu, en donde se esti-ma viven unos 1.000 ejemplares de estos venados, ha sido de-clarada rea prioritaria por el Proyecto de Produccin Respon-sable del Ministerio de Ganade-ra, Agricultura y Pesca (PPR). En 1985, el gobierno declar al venado de campo Monumen-to Natural en Uruguay. Desig-naciones semejantes existen para proteger a la ballena fran-ca (Eubalaena australis) y a los palmares buti (Butia capitata). Asimismo, existe proteccin le-gal para lobos y leones marinos (Otaria flavescens y Arctocepha-lus australis), delfines y otros mamferos acuticos. Estn pro-tegidas tambin reas de repro-duccin y cra de ciertos peces, como, por ejemplo, el proyec-to de reduccin de impacto am-biental que se lleva a cabo en la

    represa de Salto Grande.Proyectos de cra y repoblacin de especies autctonas se reali-zan, tambin, en otras reas, co-mo el programa que se ocupa de coates en la Reserva de Flora y Fauna Dr. Rodolfo Tlice, en Flo-

    res, o el impulsado por el criade-ro de yacars Cerros Azules en el Departamento de Maldonado. Preservar la biodiversidad es uno de los objetivos ms impor-tantes del desafo ecolgico de estos tiempos. l

    Es una organizacin sin fines de lucro, que trabaja, desde 1995, para proteger las especies y eco-sistemas amenazados y conservar los recursos naturales del pas. La ONG ha sido contratada por el SNAP para realizar informes tcni-cos en base a los cuales se dieron los primeros pasos en la instru-mentacin del funcionamiento de reas como, por ejemplo, la Que-brada de los Cuervos, Esteros de Farrapos y los Humedales de San-ta Luca).

    Es una organizacin cuya misin es estudiar y conservar las aves silves-tres del pas y los ambientes que ellas requieren, dentro de polticas de desarrollo sustentable de los re-cursos naturales.

    Funciona desde 1999, a partir de un grupo formado por jvenes es-tudiantes, bilogos, veterinarios, maestros e investigadores que se unieron con el fin de conservar los recursos marinos de Uruguay, con especial nfasis en la difusin so-bre la situacin de las tortugas ma-rinas.

    vidasilvestre.org.uy

    www.avesuruguay.org.uy

    www.karumbe.org

    * Regiones geogrficas con una biota o grupo de especies comn.

    Segn el trabajo, las zonas rojas marcadas en el mapa son las ms valiosas para la con-

    servacin de biodiversidad del pas por su riqueza biolgica y por su grado relativa-

    mente bajo de modificacin por activi-dades humanas.

    2A: Grado de Alteracin (antropizacin).

    2B: Grado de Naturalidad.

    cies de las aves, reptiles, anfibios y mamferos del pas.

    Ayudados por imgenes sateli-tales, los expertos, tambin analiza-ron el grado de transformacin del ambiente natural debido a las acti-vidades humanas (antropizacin) (2A), basados especialmente en la suma de zonas cultivadas y fores-tadas.

    Segn el estudio, el mapeo permiti detectar altos niveles de prdida de hbitats en el litoral oes-te y sur del pas, asociado a los culti-vos intesivos y extensivos (foresta-cin y soja) as como a la urbaniza-cin. Asimismo, se observ otra zo-na de alto grado de antropizacin en el noreste, asociado a cultivos de arroz y forestacin. l

    Declarar una especie extinta no es algo sencillo. Segn cri-terios internacionales dicho diagnstico solo se estable-ce luego de 30 aos sin avis-tamientos de ejemplares. Se-gn, Enrique gonzlez, exper-to uruguayo en mastozologa, los mamferos que se pueden considerar extintos en estado silvestre en el pas, son el ja-guar, el pecar de collar y el oso hormiguero grande; sin em-bargo existen dudas respecto

    al estado de conservacin del ciervo de los pantanos y el lo-bo grande de ro, debido a que no existen bsquedas sistem-ticas que demuestren su au-sencia en territorio nacional.Declarar una especie extinta plantea adems un problema legal, ya que la ley de fauna solo protege especies amena-zadas y, por lo tanto, la espe-cie extinta queda desprotegi-da, presa de un vaco legal. l

    GIM, Grupo de Investigacin y Con-servacin de los Murcilagos de Uruguay es un grupo formado a fi-nes de 2005 por investigadores y colaboradores de la seccin mam-feros del MUNHINA (a nivel formal, no es una ONG). Sus principales ac-tividades son la educacin y la in-vestigacin cientfica en temas vin-culados a los quirpteros.

    La organizacin se cre en 2004. Sus objetivos son: establecer, de-sarrollar y fomentar la investigacin y conservacin de mamferos mari-nos en el pas, mediante proyectos concretos de investigacin y con-servacin.

    gim-uruguay.blogspot.com/

    www.cetaceos.org.uy

    1

    2a 2b

  • reas protegidas del uruguay 01. especial biodiversidad 12 13

    e trata de zonas que contribuyen a la con-servacin del patri-monio natural y cul-tural del pas y que ayudan a mitigar el efecto de algu-

    nas actividades realizadas por el hombre que son perjudiciales pa-ra el ambiente. Tambin brindan oportunidades para las comuni-dades locales y para la sociedad, al favorecer la recreacin, el turis-mo, la educacin, la investigacin cientfica, el desarrollo de activi-dades productivas compatibles con la conservacin, as como el mantenimiento de tradiciones y culturas locales que fortalecen la identidad nacional.

    rEas protEgidas

    las reas proTegidas conTribuyen a la conservacin del paTriMonio naTural y culTural del pas y ayudan a reducir el iMpacTo de algunas acTividades huManas.

    Sin embargo, esto no siem-pre fue as, pues con el fin de preservar las reas protegidas, en algunos pases del mundo, las comunidades locales fueron desalojadas y ubicadas fuera de ellas. El resultado de esa medida fue que se produjeran conflictos entre los administradores de las reas y sus habitantes; enton-ces, tanto el manejo del rea co-mo la conservacin de los recur-sos se vieron comprometidos. De ese modo, se comprob que la participacin de los poblado-res locales en la gestin y la de-fensa de la zona y de sus recur-sos, es beneficiosa.

    Actualmente, el uso, la pre-servacin y la gestin de las

    reas protegidas estn estableci-dos en un documento que contie-ne pautas, llamado Plan de Mane-jo. Ese documento rige la preser-vacin de las poblaciones locales, de las especies de flora y/o fau-na, de los suelos y del agua. Tam-bin regula las actividades de re-creacin, la explotacin racional y el aprovechamiento sustentable de los recursos. Comprende ade-ms la proteccin de hbitats na-turales, de formaciones geolgi-cas y geomorfolgicas relevantes, evitando su deterioro y haciendo posible el desarrollo y la sobrevi-vencia de especies amenazadas de flora y fauna.

    En Uruguay, las reas protegi-das se administran bajo la coordi-

    nacin del Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, a travs de la Direc-cin Nacional de Medio Ambien-te y con la participacin de diver-sas entidades pblicas y priva-das, y de sectores sociales invo-lucrados, mientras que el control directo dentro del lugar es llevado a cabo por guardaparques.

    las reas y sus categorasLas reas protegidas de nuestro pas se ubican bajo una clasifica-cin, segn la Ley 17.234 (apro-bada en el ao 2000) que esta-blece categoras de definicin y manejo:

    parque nacional

    Es una zona donde existe uno o varios ecosistemas que no se encuentren significativa-mente alterados por la explota-cin y ocupacin humana, es-pecies vegetales y animales, si-tios geomorfolgicos y hbitats que presenten un especial inte-rs cientfico, educacional y re-creativo, o comprendan paisa-jes naturales de una belleza ex-cepcional.

    MonuMenTo naTural

    Se trata de un rea con uno o va-rios elementos naturales espe-cficos de notable importancia

    s

    sanTuarios de biodiversidad

    rea [ inTroduccin ]

    quebrada de los cuervos

    paisaje proTegido

    estas reas son seleccionadas por su valor ambien-tal, histrico, cultural o paisajstico, y son repre-sentativas de los ambientes naturales de un pas como ros, sierras, montes, humedales, pastizales, quebradas, zonas marinas, costeras e islas, y tam-bin de sus valores culturales asociados.

    caTegoras ejeMplos

    PArqUE nACiOnAL Cabo Polonio (Rocha) Esteros de Farrapos (Ro Negro)

    MOnUMEntO Venado de campo nAtUrAL

    PAiSAJE PrOtEgiDO quebrada de los Cuervos (Treinta y Tres) Valle del Lunarejo (Tacuaremb)

    rEAS DE MAnEJO Cerro Verde (Rocha) DE HBitAt y/O ESPECiES islas de la Coronilla (Rocha)

    foto

    : pab

    lo b

    iell

    i [fo

    tote

    casu

    r]

    foto: archivo del snap [dinama-mvotma] Es la primera rea ingresada al SNAP bajo la categora Paisaje Protegido. Se emplaza en las serranas del Este, en el departamento de Treinta y Tres. La que-brada que da nombre al rea es un paso muy estrecho del arroyo Yerbal Chico.

  • reas protegidas del uruguay 01. especial biodiversidad 14 15

    +70%ciFra

    Uruguay, desde hace varios aos, se encuentra implementando un Siste-ma nacional de reas Protegidas (SnAP). Es decir, una herramienta que permite armonizar el cuidado del ambiente, en particular de la di-versidad biolgica, con el desarrollo econmico y social del pas.

    Su creacin est establecida en la ley 17.234, segn la cual dicho sistema tienen por objeto armoni-zar los criterios de planificacin y manejo de las reas a proteger, bajo categoras determinadas, con una regulacin nica que fije las pautas de ordenamiento (Art. 1).

    La norma determina adems los objetivos especficos del SNAP (Ver recuadro inferior).

    Para que una zona ingrese al SNAP, es necesario presentar una propuesta, debidamente fundada y basada en la ley 17.234 y en el de-creto 52/005, ante la Direccin Na-cional de Medio Ambiente con infor-macin detallada del lugar.

    La primera zona que ingres al SNAP fue Quebrada de los Cuervos (Treinta y Tres), en 2008. Luego se sumaron Esteros de Farrapos e Is-

    Es el porcentaje de territorio na-cional compuesto por prade-ras, una de las reas de mayor riqueza de especies de gram-neas o pastos del mundo.

    rea [ inTroduccin ]

    n PrOtEgEr la diversidad biolgica y los ecosistemas, que comprenden la conservacin y pre-servacin del material gentico y las especies, priorizando la conservacin de las poblaciones de flora y fauna autctonas en peligro o amenazadas de extincin.

    n PrOtEgEr los hbitats naturales, as como las formaciones geolgicas y geomorfolgicas rele-vantes, especialmente aqullos imprescindibles para la sobrevivencia de las especies amena-zadas; mantener ejemplos singulares de paisajes naturales y culturales.

    n EVitAr el deterioro de las cuencas hidrogrficas, de modo de asegurar la calidad y cantidad de las aguas.

    n PrOtEgEr los objetos, sitios y estructuras culturales, histricas y arqueolgicas, con fines de conocimiento pblico o de investigacin cientfica.

    n PrOVEEr oportunidades para la educacin ambiental e investigacin, estudio y monitoreo del ambiente en las reas naturales protegidas.

    n PrOPOrCiOnAr oportunidades para la recreacin al aire libre, compatibles con las caracters-ticas naturales y culturales de cada rea, as como tambin para su desarrollo ecoturstico.

    n COntriBUir al desarrollo socioeconmico, fomentando la participacin de las comunidades locales en las actividades relacionadas con las reas naturales protegidas, as como tambin las oportunidades compatibles de trabajo en las mismas o en las zonas de influencia.

    n DESArrOLLAr formas y mtodos de aprovechamiento y uso sustentable de la diversidad bio-lgica nacional y de los hbitats naturales, asegurando su potencial para beneficio de las gene-raciones futuras.

    las del Ro Uruguay (Ro Negro), Ca-bo Polonio (Rocha), Valle del Luna-rejo (Rivera), Laguna de Rocha (Ro-cha), San Miguel (Rocha) y Chaman-g (Flores). Mientras que transitan el proceso de ingreso: Cerro Ver-de (Rocha), Laureles-Caas (Tacua-remb-Rivera), Humedales de San-ta Luca (compartida entre Canelo-nes, Montevideo y San Jos) y Mon-

    snapsisTeMa nacional

    objeTivos del sisTeMa nacional de reas proTegidas

    cabo polonio parque nacional

    En 2009, la paradisaca punta rocosa de la costa rochense fue integrada al Sistema Nacional de reas Protegidas bajo la ca-tegora Parque Nacional.

    lechucita de campo (Athene cunicularia)

    tes del Queguay (Paysand). En tanto, son motivo de estudio y con-sulta para su posible incorporacin: Laguna Negra y Laguna de Castillos (ambas en Rocha), Laguna Garzn (Maldonado), Paso Centurin-Sierra de Ros (Cerro Largo), Bosques del Ro Negro (Soriano), Arequita (Lava-lleja) e Isla de Flores (Ro de la Pla-ta, frente a Montevideo). l

    cerro arequiTa

    Su imagen ocupa el cen-tro del escudo del de-partamento de Lavalle-ja. SNAP estudia su inte-gracin al Sistema.

    nacional, tales como una forma-cin geolgica, un sitio natural nico, especies o hbitats o ve-getales que podran estar ame-nazados, donde la intervencin humana, de realizarse, ser de escasa magnitud y estar bajo estricto control.

    paisaje proTegido

    Es una superficie te-rritorial continental o marina, en la cual las interacciones del ser humano y la natura-leza, a lo largo de los aos, han producido una zona de carc-ter definido, de sin-gular belleza escnica o con valor de testimonio natural, y que podr conte-ner valores ecolgicos o cul-turales.

    siTios de proTeccin

    Son aquellas reas relativamen-te pequeas que poseen valor crtico, dado que contienen es-pecies o ncleos poblacionales relevantes de flora o fauna, que en ellas se cumplen etapas cla-

    ves del ciclo biolgico de las especies, tienen impor-

    tancia significativa para el ecosistema que in-tegran, contienen ma-nifestaciones geol-gicas, geomorfolgi-

    cas o arqueolgi-cas relevantes.

    ecosisTeMas y biodiversidad

    La diversidad parece pro-mover la estabilidad de los ecosistemas, al mismo tiempo que propulsara su productividad. Varias espe-cies de insectos, murcila-gos y aves son las respon-sables de la polinizacin de las plantas con flores, in-cluso de aqullas que son cultivadas. Las plantas ver-des aportan oxgeno a la at-msfera, y retienen anhdri-do carbnico, gas promotor del efecto invernadero. Al-gunos hongos y microbios son fundamentales en la descomposicin de materia orgnica en el suelo, donde juegan un papel fundamen-tal en el reciclado de nu-trientes. Algunas especies de bacterias asociadas a las races de ciertas plantas fijan nitrgeno de la atms-fera, constribuyendo a la fertilidad de los suelos.* *D

    e P

    riorid

    ades

    Geo

    grf

    icas

    par

    a la

    Con

    serv

    aci

    n de

    la B

    iodi

    vers

    idad

    Ter

    rest

    re d

    e U

    rugu

    ay,

    Coo

    rd. g

    ener

    al: A

    leja

    ndro

    Bra

    zeiro

    . Fac

    ulta

    d de

    Cie

    ncia

    s, U

    DE

    LAR

    , 200

    8.

    uruguay es uno de los pases de aMrica del sur con Mayor canTidad de especies de aves, en relacin a su superFicie.

    reas de Manejo de hbiTaT y/o especies

    Se trata de zonas terrestres y/o marinas sujetas a intervencin activa con fines de manejo, pa-ra garantizar el mantenimiento del hbitat y/o satisfacer las ne-cesidades de determinadas es-pecies.

    reas proTegidas con recursos Manejados

    reas protegidas con recursos manejados: espacios que con-tienen predominantemente sis-temas naturales no modifica-dos, que es objeto de activida-des de manejo para garantizar la proteccin y el mantenimien-to de la diversidad biolgica a largo plazo y proporcionar, al mismo tiempo, un flujo soste-nible de productos naturales y servicios para satisfacer las ne-cesidades de la comunidad. l

    foto

    : arc

    hivo

    del

    snap

    [din

    ama-

    mvo

    tma]

    foto

    : ale

    jand

    ro se

    quei

    ra

  • reas protegidas del uruguay 01. especial biodiversidad 16 17

    punto de cumplir 90 aos, el 7 de octubre, el antro-plogo, investi-gador, ensayista y docente urugua-

    yo, sigue produciendo trabajos sobre su especialidad, como si se tratara de un joven egresado. Fue experto de la Unesco en te-mas agrarios y de educacin am-biental en Colombia y Venezue-la. En esa agencia de Naciones Unidas form parte del Colegio Internacional de Expertos para el estudio de la Ecologa Huma-na en la Zona rida. Es Ciudada-no Ilustre de la ciudad de Mon-tevideo y Miembro de Nmero de la Academia Nacional de Le-tras del Uruguay. Es bueno que exista un sistema que proteja al-gunos de los ya hollados pero an no destruidos santuarios naturales, por el azote del turis-mo o las heridas del trabajo: is-las, quebradas, montes indge-nas, rincones serranos, siste-mas lacustres y palustres, afir-ma convencido.

    qu es patrimonio natural?

    Patrimonio viene de pater, que en griego y latn significa-ban padre. Originariamente los invasores aqueos llevaban la patria (patris) consigo. s-ta era de carcter inmaterial: se trataba de un intangible reper-torio cultural. En cambio, el pa-trimonio, etimolgicamente ha-blando, se refiere a la herencia material y/o pecuniaria que pa-sa de los padres a los hijos. La patria intangible de los invaso-res de la Grecia pre-helnica se traslad, una vez que los nma-das se sedentarizaron y funda-ron ciudades, al dominio eco-nmico de aquellos bienes re-presentados por el dinero, los objetos y las posesiones inmo-biliarias. Finalmente la voz se transvasa al dominio social: se denomina patrimonio al conjun-to de costumbres, usos, visio-nes del mundo, repertorios de objetos y construcciones que una generacin trasmite, impl-citamente, sin previo discurso, a la que la suceder en el espa-cio y en el tiempo. Esta herencia sociocultural constituye una su-matoria de bienes materiales y valores espirituales, tangibles e intangibles como ahora se dice. Ergo: no hay patrimonio natural. Tanto filosfica como antropo-lgicamente se ha distinguido muy claramente entre Natura-leza, lo dado, y Cultura, lo crea-do artificialmente por el hom-bre. Por otra parte la Naturaleza y la Historia constituyen los he-misferios que confirman la uni-dad existente en el planeta Tie-rra entre lo csmico y lo huma-no. No existen, en consecuencia ni el Derecho Natural, ni el hu-mano Estado de Naturaleza ni el tan mentado Patrimonio de la Naturaleza. La Naturaleza configura una urdimbre plane-taria de geosistemas y ecosis-temas, en tanto que las culturas

    aenTrevisTaFoTos

    armando olvEira ramos

    alEjandro sEquEira

    se denomina patrimonio al conjunto de costumbres, usos, visiones del mundo, repertorios de objetos y construcciones que una gene-racin trasmite, implcitamente, sin previo discurso, a la que la su-ceder en el espacio y en el tiempo.

    rea [ enTrevisTa ]

    pgina izquierda: M 62 (detalle) del artista uruguayo Jos Gamarra, 1962. Tcnica mixta sobre tela. 51 x 65 cm. [gentileza de galera de las misiones].

    con daniel vidartantroplogo experto en Ecologa Humana

    Paisajes hollados

    Daniel Vidart

    Fue director del Departamento de Antropologa de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Universidad de la Repblica y profesor de Antropologa en el postgrado de Ingeniera Am-biental en la Universidad Na-cional de Colombia, que ade-ms le otorg el ttulo de Pro-fesor Emrito. Fue profesor de Antropologa en la Universidad Nacional de Chile; director del Centro de Estudios Agrarios de la Universidad Catlica de Santiago de Chile, y catedrti-co de Sociologa General y Na-cional en el Instituto de Profe-sores Artigas, de Montevideo. Ha editado numerosos libros acerca de los grandes temas de historia, sociedad y cultura. En Colombia public dos edi-ciones, la segunda ampliada, de un voluminoso tratado so-bre Filosofa ambiental (1 Edi-cin, Epistemologa, praxio-loga, didctica; 2 edicin, El ambiente como sistema). l

    patrimonio natural y cultural

  • reas protegidas del uruguay 01. especial biodiversidad 18 19

    La ganadera y la agricultura cambiaron la flora y la fauna del Uruguay interior, y si a ello le sumamos las vas de transportes, los cultivos, las industrias de todo tipo, y los contaminantes slidos, lquidos y

    atmosfricos provenientes de los sitios poblados y construidos, nada queda del territorio natural, que solamente fue virgen antes de la

    aparicin del perodo paleoindio.

    rea [ enTrevisTa ]

    y civilizaciones o sea las cultu-ras de las ciudades tejen sobre aqulla una trama de antropo-sistemas y tecnosistemas con rasgos propios.

    Est de acuerdo con la divisin que se hace sobre patrimonio cultural y natural?

    No, porque solo existe patri-monio cultural. En la Naturaleza pura solamente existen sitios, lugares, espacios terrqueos, en los que se alternan la tierra y el agua. Los paisajes, inexisten-tes en la virginidad prehuma-na de Gea, surgen merced a la obra del hombre del pago, el pa-ganus, el paisano, y del ciudada-no, padre y a la vez hijo de la ur-bs romana o asty griega, entida-des edilicias donde se convierte en cives o polits, sujeto de de-recho. La naturaleza humaniza-da se convierte de este modo en paisaje, landscape en ingls, y landschaft en alemn.

    qu es biodiversidad?

    Es un trmino que seala la interrelacin existente entre los integrantes de un nicho ecol-gico, donde el bioma y la biota deben estar en equilibrio. Mu-chas especies vegetales y mu-chas animales pensemos en el bosque tropical entretejen sus roles en la llamada cadena ecolgica, que es ms correc-to denominar alimenticia o tr-fica, iniciada a nivel de los seres auttrofos o productores, como son las plantas. La fauna de con-sumidores primarios o herbvo-ros (esta voz limita drsticamen-te el repertorio de alimentos que ofrece la flora: pensemos solamente en la jirafa, que de-vora hojas, o el mono frugvoro) es a su vez devorada por los car-nvoros, consumidores secun-darios. Entre stos, a su vez, los carnvoros ms diestros o pode-rosos se alimentan con los mas dbiles o vulnerables (el gui-la atrapa y come a la serpiente). Y al perecer los fagtrofos, que as se les llama a los integran-tes del reino animal, los hon-gos y los microorganismos re-ductores del suelo viven de fes-tn en festn, sin desplazamiento

    embargo eso no siempre ocu-rre porque las lluvias lavan los suelos laterticos, pobres en nu-trientes, y estos quedan expues-tos al sol, que quema y degrada. Entonces, esos peladeros roji-zos, que apenas pueden susten-tar a unos raquticos arbustos se transforman en los acusado-res testimonios de una imagina-da y glorificada sociedad armo-niosa entre el indio y la natura-leza. Esto, por cierto no signifi-ca que haya mesura en la caza y recoleccin. Pero ambas activi-dades siempre daan, siempre empobrecen el capital biolgico y muchas veces atentan contra la biodiversidad.

    Aunque el concepto de biodi-versidad es muy moderno, es imaginable que las comunida-des originales que vivieron en nuestro territorio, ya cuidaban el ambiente. quedan seas de identidad de ese trabajo?

    En el Uruguay nada resta en-tre las poblaciones paisanas de nuestro interior de las tcnicas indgenas de caza o pesca: so-lo sobrevive la tradicin de que el monte, al que tambin recu-rre la gente de tierra adentro, era la farmacia del indio. La gen-te de los pagos ha heredado ese conocimiento de las plantas be-nficas, que se utilizan, y de las dainas, que se desdean. Exis-ten pocos indicios de la econo-ma indgena. Los rompecabe-zas de las costas del Este, utili-zados para la matanza de lobos marinos, y las puntas de flecha y boleadoras que servan para la caza de herbvoros y andes, fundamentalmente, no pueden constituir indicios de una cui-dadosa administracin del am-biente, sino todo lo contrario. Las pesas lticas de red que han sobrevivido, apenas nos ofre-cen un indicio acerca de las ar-tes de pesca, en las que se recu-rra a los anzuelos, arpones, fle-chas, redes y, sin duda, nasas. Tambin podemos inferir, por comparacin con las prcticas comprobadas por la etnografa, que se utilizaba el ojeo pa-ra la caza, llamado chaco en quechua, y no ms. Ya no exis-

    ten tribus en el interior del pas y las tradiciones orales son in-suficientes como para intentar una verosmil reconstruccin de las prcticas conservacionistas. Se dice que el indio es un socio de la naturaleza y que el hombre blanco es un despiadado patrn de la misma.

    toda intervencin del hombre contamina? Cul es el lmite tolerable?

    No es del todo as. En parti-cular en esta poca, en la cual las tcnicas de produccin e in-dustrializacin pueden ser terri-blemente destructivas o juicio-samente conservativas, recons-tructivas o creativas. General-mente destruye y contamina, si no se racionaliza la demanda a la naturaleza y no demanda eco-lgica, lo que entraa un dis-parate pues la ecologa en tan-to que ciencia nada puede afec-tarla y el ecosistema en cuanto que entramado ambiental s pa-dece el saqueo, despojo y con-taminacin que impone el gne-ro humano. El hombre es un ser destructivo de su medio: para subsistir depreda, y ello ha su-cedido desde la prehistoria. Los tan ponderados ancestros don-de haba bosques los incendios nos legaron praderas: las saba-nas del Orinoco tienen ese ori-gen. Todo el bosque herciniano europeo cay pajo el hacha de los agricultores danubianos en su marcha hacia el Atlntico. Y ni que hablar de los espantosos castigos que la minera, el mo-nocultivo, la plantacin itineran-te, la deforestacin comercial y la minera les han impuesto a las florestas de la zona trrida. Otras veces, y ojal que estas prcticas se extiendan, gracias al desarrollo de una enseanza efectiva, a partir del jardn de in-fantes sin caer en el terrorismo ambientalista el hombre ayuda a la recuperacin o mejoramien-to de la naturaleza: planta bos-ques, domestica ros Egipto no es un don del Nilo sino del hombre neoltico, gana tierras al mar y en ellas se siembra tu-lipanes, como en Holanda, etc-tera. Pero todava dista mucho

    la culminacin de este sueo: los pases ricos contaminan sus ros, campos y poblaciones en tanto que los pases pobres, ex-poliados por las economas cen-trales, que roban sus recursos naturales, condenan a los mise-rables al saqueo de los ecosis-temas para durar en vez de vivir. Los lmites tolerables tienen que ver con la capacidad de adapta-cin de la especie humana.

    Uruguay trata de cultivar una imagen de pas natural, pero cunto se hace para llevar a la prctica esa idea?

    No hay Uruguay natural. Un ex-celente estudio realizado por el gegrafo Germn Wettstein de-mostr que desde el perodo in-dgena, pasando por el colonial, el del despertar republicano, el de las cruentas guerras civiles, el de los inmigrantes laboriosos del siglo XIX y el de la tecnifica-cin rural y urbana contempor-neas, la naturaleza fue, constan-temente, avasallada por el hom-bre. La ganadera y la agricultu-ra cambiaron la flora y la fauna del Uruguay interior, y si a ello le sumamos las vas de transpor-tes, los cultivos, las industrias de todo tipo, y los contaminan-tes slidos, lquidos y atmosf-ricos provenientes de los sitios poblados y construidos, nada queda del territorio natural, que solamente fue virgen antes de la aparicin del perodo paleoin-dio. Se han preguntado alguna vez los montevideanos y dems gentes del sur por qu ya no se ven lucirnagas ni grandes ma-riposas con alas amarillas y ne-gras? Pues la respuesta es sim-ple: los agroqumicos han aca-bado con ellas.

    Son necesarias las reas Pro-tegidas? Por qu? Para qu?

    Es bueno preservar algunos de los ya hollados pero an no destruidos santuarios por el azote del turismo o las heridas del trabajo: islas, quebradas, montes indgenas, rincones se-rranos, sistemas lacustres y pa-lustres. Se trata de emular la ins-talacin los Parques Nacionales, existentes en otros pases. Esta

    denominacin, aplicada a las estepas herbceas de Serenge-ti en frica o al Parque de Ye-llowstone en los Estados Uni-dos, consagra una buena prcti-ca, siempre que se controlen los desmanes del turismo. Aunque es un tema menor, podra discu-tirse el empleo de la voz nacio-nales al referirse a tales zonas protegidas. La nacin, un valor intangible, de carcter afecti-vo, encarnado en el nosotros y sazonado por la tradicin y la historia, es algo muy distinto al territorio o al pas en cuanto ex-tensin geogrfica, en cuya es-pacialidad se expresan los ele-mentos de la naturaleza y se ins-criben los precipitados paisajs-ticos de la cultura.

    qu sitios naturales del pas son los que ms disfruta?

    Yo soy sanducero. Desde ni-o me atrajeron las islas, los crepsculos ensangrentados, la cascadita del ro de los pei-nes o el agua peinada (en guaran Queguay), el Hervidero, ese delicado pulidos de gatas, la meseta desde donde Artigas de quien soy chozno es de-cir, directo descendiente con-templaba ideales federalistas antes que paisajes terrestres. Mas tarde, cuando recorr to-do el Uruguay, muchas veces a caballo, encontr rincones ma-ravillosos en las quebradas se-rranas, en las grandes praderas bajo la luna, en los amaneceres junto a los arroyos. Visit gru-

    tas, sub cerros y me tend en las arenas de Punta del Diablo para mirar las nubes salobres que finga la espuma al reven-tar la ola en la roca y, de paso, escuchar con deleite el rezongo del ocano. Hombre ya, escrib mucho sobre el paisaje urugua-yo, al que gust en sus aromas y colores, en su indescriptible encanto, en sus matices delica-dos, en sus vespertinas melan-colas. La poesa empieza a her-vir a borbotones: alto ya. Quie-ro decir, para finalizar, que amo mucho el cuerpo de mi patria, a veces senil, a veces increble-mente joven. Semeja a una mu-jer de suaves curvas tendida de horizonte a horizonte. l

    ni merodeo. Su mesa est siem-pre servida. A los restos anima-les hay que agregarle los de los vegetales: hojas, ramas, corte-zas, troncos. Para que este pro-ceso sea intenso es imprescin-dible la biodiversidad, la coexis-tencia de muchas especies en equilibrio con el medio y entre s. Entonces, a partir de la subs-tancia orgnica elaborada por los microorganismos y los hon-gos (microbiota y micobiota) re-comienza el ciclo vital pues los vegetales aprovechan el abono generado por los microorganis-mos y los elementos minerales del suelo.Hay una leyenda muy extendida acerca de la sociedad indgena-naturaleza. Yo he visto a los in-dios de la floresta trpico-ecua-torial sudamericana embarbas-car las aguas para adormecer a los peces, y cuando el barbasco abunda miles de peces atonta-dos, y no consumidos, perecen en los raudales y rabiones, o son comidos por las aves de presa. Y en esa misma selva sus habitan-tes originarios hacen grandes quemas de rboles para plantar all mandioca. Cuando el suelo ya no rinde, levantan las malo-cas, incendian otra rea bosco-sa, y as, estos plantadores itine-rantes van dejando grandes cal-veros, donde solo podr nacer una vegetacin secundaria. Sin

    El hombre es un ser destructivo

    de su medio: para subsistir depreda, y ello ha sucedido

    desde la prehistoria. Los tan ponderados

    ancestros donde haba bosques

    los incendios nos legaron praderas: las sabanas del Orinoco

    tienen ese origen.

  • reasprotegidas del uruguayndice de fascculos

    Salto

    Artigas

    Paysand

    Fray BentosMercedes

    Trinidad

    Durazno

    Colonia de Sacramento

    San Jos de Mayo Canelones

    Montevideo Maldonado

    RochaMinas

    Treinta y Tres

    Melo

    Tacuaremb

    Rivera

    Florida

    15

    11

    3

    3

    6

    6

    7

    8

    5

    2

    9

    10

    4

    14

    13

    12

    2 areQuita

    3

    4

    5

    6

    7

    8

    9

    10

    11

    12

    13

    14

    15isla de flores

    laguna de castillos palmares de rocha

    paso centurin

    QueBrada de los cuervos

    chamang

    humedales del santa luca

    laguna de garZn laguna de rocha

    laureles-caas

    valle del lunarejo

    arerunguy montes del Queguay

    caBo poloniocerro verde e islas de la coronilla

    esteros de farrapose islas del ro uruguay

    laguna negrasan miguel

    reas Protegidas del Uruguay resea ms de 17 reas que se distribuyen en diferentes departamentos del pas. algunas de ellas ya forman parte del sistema Nacional de reas Protegidas (sNaP), otras han sido propuestas y se encuentran en estudio, y algunas han sido incluidas en esta coleccin debido a su importancia ecolgica y cultural.Por motivos editoriales algunos fascculos abarcan ms de un rea en particular, y brindan informacin regional tomando como epicentro un punto considerado estratgico en cuanto a conservacin se refiere.

    nmero especial

    01