EL BAUTISMO DEL SEÑOR10 de enero 2021

Mc 1,7-11

1. Lectura. ¿Qué dice la Palabra de Dios?

Y predicaba así: Detrás de mí viene uno que es más poderoso que yo, y yo no tengo derecho a…Jesús se hizo bautizar por Juan bautista en el Jordán. Este bautismo es del Espíritu, es bautismo cristiano, no hay bautismo de fuego.El bautismo se da en un lugar público, aunque también es algo privado, ya que es un encuentro personal con Dios. Jesús es el único que ve el cie-lo abierto, ve al Espíritu bajar, es el único que escucha la voz celestial que dice: Tú eres mi Hijo. Así como el Sal 2,7, hace a Jesús ser el Hijo querido lleno de la fuerza del Espíritu.Jesús es el Hijo de Dios, es Jesucristo, él es el evangelio, por eso al final del evangelio de san Marcos un hombre, el centurión al pie de la cruz, confiesa: “Verdaderamente, este hombre era Hijo de Dios” (15, 39). Esta es una reacción que provoca Jesús cuando se escucha y se conoce su Evangelio.Vemos la aparición de la voz de Dios dirigiendo la palabra a su Hijo que-rido en el momento inicial de su misión. Todo esto comienza en Galilea.Despues de ser bautizado Jesús, sale del agua llevando el Espíritu en todo su ser. Este Espíritu se ha aparecido desde el cielo rasgado y ha bajado en la cabeza de Jesús; él lo ha visto, él ha oído lo voz su Padre celestial. El bautismo de Jesús nos puede recordar el pasaje del profeta Isaías cuando dice: “¡Ah sí rompieses los cielos y descendieses!” (Is 63, 19b).Ha llegado el Espíritu Santo y se ve como una paloma, el Padre ha habla-do de su Hijo y empieza una misión comenzada por Dios en este mundo,

el misionero ungido es Jesús. El espíritu prepara a Jesús para la misión encomendada, él es el enviado del Padre.Dios actúa también por medio de una paloma. El ejemplo más antiguo es la paloma de Noé (Gn 8, 9). Podemos ver el vuelo del Espíritu de Dios sobre las aguas (Gn 1, 2) con el revoloteo de un pájaro, de una paloma o de un águila. El Espíritu se manifiesta en forma de paloma y Jesús será el portador único del Espíritu de Dios; Jesús lo llevará siempre consigo y predicará, podrá sanar, podrá hacer prodigios con el poder de su Padre.Aparte de ver, también, escucha desde el cielo la voz divina que llegaba hasta él, le habla a él como a su consentido: Tu eres mi hijo amado, en ti me complazco. En la carta a los hebreos también así se habla de Jesús, como hijo de Dios: Hijo mio eres tú; yo te he engendrado hoy; o también: Yo seré para ti un padre, y él será para mí un hijo… (Heb 1,5). Textos que vale la pena leer y conocer.

2. Meditación. ¿Qué me dice la Palabra de Dios?

Podemos interpretar y aplicar estas bellas palabras a cada uno de noso-tros: Yo soy el hijo amado de Dios, en mi se complace. Palabras dirigidas a cada persona de nosotros; somos hermanos de Jesús y pudiéramos sentirnos también amados por el Padre; desde nuestro bautismo somos hijos reconocidos del Padre y somos sacerdotes para siempre.Escuchemos su palabra que proviene de del cielo y está puesta por escri-to en el libro sagrado, en la Biblia.El señor nos unge, nos llama hijos, nos envía a proclamar su palabra a to-das partes. Hagámoslo con la confianza que él va siempre junto a nosotros.

3. Oración. ¿Qué le digo al Señor?

Démosle gracias a Jesús por habernos elegido de entre muchos llamados. Démosle gracias a Dios por su palabra que hemos escuchado y que nos sigue alimentando de fe.Pidámosle perdón por haber callado a nuestros hermanos de todas esas maravillas que hemos descubierto con Jesús. Pidámosle que perdone nuestra ignorancia sobre quien es Jesús el Hijo de DiosPidámosle al Señor Jesús nos concede siempre el conocimiento y la fe para sentirnos siempre hijos amados del Padre

4. Contemplación.

…Tampoco Cristo se atribuyó el honor de ser sumo sacerdote, sino que lo recibió de quien le dijo: Hijo mío eres tú, yo te he engen-drado hoy…(Hb5,5)