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Pisando la

PelotaComentarios deportivosJ o s é A n t o n i o L i z a n a A .

Ediciones

Pisando la Pelota – Comentarios deportivosJosé Antonio Lizana A.

RPI: 237.727ISBN: 978-956-353-607-2

Corrección de textos: Raúl Cáceres Campos, Hernán Ortíz GonzálezEdición y corrección de materia: Felipe Risco CataldoDiseño de portada: Gabriela Ávalos AcevedoDiagramación: Luis Ugalde Muñoz

Contacto: [email protected]

Impreso en Gráfica LOMSantiago, mayo de 2014

Dedicado a mis ángeles, Juana de Dios Arce Carrasco y José Eugenio Lizana Vergara (Q.e.p.d).

A mis sobrinos, Dieguito y Cristóbal.

A mi hermana Pamela y a Marquitos.

A Luisa Fernanda con amor.

Pisando la PelotaComentarios deportivos 7

Futbolistas desaparecidos* (Óscar Hahn)

Después de haber hollado el frágil césped de esta efímera tierra, de esta cancha en la que alguna vez todos jugamos, los futbolistas desaparecidosestán pisando un campo inmarchitableen la región donde no se vuelve.Juegan allí un partido sempiterno.Con la pelota inventan una danza, una voluta, un arabesco, un triángulo. Toma el balón Garrincha, se lo pasa de taco a Ferenc Puskás que aceleray lanza al arco: súper atajadadel arquero Yashin, la araña negra. Giussepe Meazza inicia el contraataque.El Sapo Livingstone emprende el vuelo y desvía un misil vertiginoso.Stanley Matthews la cede a Fritz Walter.Este gira, dispara y da en el poste.Salta Obdulio Varela y de cabezala coloca en el rincón de las ánimas.Las estrellas fugaces, los cometas, los asteroides copian en su curso cada jugada de los futbolistas.El Gran Árbitro rige esta contienda.Los hinchas van llegando puntualmente.

*Poema cedido por el autor para ser publicado exclusivamente en esta obra.


Prólogo

El balón comienza a rodar

por Reinaldo Edmundo Marchant

(Autor del libro “El ángel de las piernas torcidas”)

El balompié y el deporte nacional gozan de una nueva camada de escritores que a gritos piden cancha. En silencio, abriéndose

espacios por todo el frente de ataque, dominan el esférico sin titubear ante los cancerberos que los esperan con el botín en el pecho. Se aprecia el desparpajo, la irreverencia, el afán de requerir y mostrar jugadas con vistosos movimientos. La popular aplaudirá. Yo ya me sumo.

Los ciclos tienen fecha de término, pero sucede que los veteranos quieren continuar mamando más leche a medida que el calcio falte a sus huesos. Uno de estos nuevos creadores es Pepe Lizana, que a sus treintaitantos años entrega su cuarta criatura: Pisando la Pelota. Ha llegado, junto a varios de su generación, a quedarse. A recrear con otra mirada y punto de vista el acontecer deportivo.

Seguramente los mañosos cancerberos no estarán tranquilos.

A mí me pone contento. Es una buena noticia. Una patria es fea cuando tiene la misma cara. Las arrugas deforman todo.

De pluma suelta y versátil, Lizana no se cansa de husmear temas. Aquí entrega una gama disímil, heterogénea, lo hace sin miedos ni

José Antonio Lizana A.10

arrogancia: simplemente goza con el fútbol, tenis, boxeo, con las diversas expresiones del arte deportivo.

Deja fluir la imaginación al evocar los acontecimientos. Y lo hace con mesura. Marcando palabras precisas. Describiendo detalles. Hurgando en la médula de aquellas hazañas y derrotas impregnadas en el imaginario colectivo. Ese es un acierto.

Evita los chismes, esos que venden y pudren las cosas. Toma las historias, anécdotas y sucesos como fueron, los elabora, pone en el quirófano y desmenuza espina por espina. En lo sucesivo deja para el paladar un buen comestible. Ese menú se puede degustar en estas páginas.

Hay coloquios con numerosas figuras que marcaron historia. Entrañables narraciones de los puños. Si alguna vez se pidiera a un autor que escriba los gloriosos momentos del boxeo criollo –Vicentini, Loayza, Godoy, etc–, sin duda habría que recurrir a Pepe Lizana. Tiene una facilidad expresiva para estos temas que Mister Huifa habría resaltado.

Quizás los puntos más altos del libro estén relacionados con el mundo de los púgiles. Para muestra, un botón: “Luis Alberto Cerda, un animal del ring, y Joel Mayo Antipichún, un guerrero del deporte”. Estas son dos verdaderas piezas literarias que podrían formar parte de cualquier antología de boxeo.

En esos textos están la vislumbre del talento que Lizana tiene para contar, agarrar de las mechas, entretener, en resumen: para hacer literatura del deporte. Amenas crónicas son las que ofrece la carta. Crónicas dúctiles. Crudas. Reales. Generosas y divertidas.

Brioso el puño fabulador de este joven escritor, que a cuentagotas enciende luces no para ser visto, sino que que cualquier lector abra la puerta y recorra la otra mirada que existe para disfrutar el deporte en general.


Los jóvenes escritores del deporte y el fútbol ya no piden cancha. Están en el terreno de juego para entrenar, jugar y celebrar. Llegará el día en que la galería voceará merecidamente sus nombres. Uno de ellos será el de José Antonio Lizana.


La “Roja” de ellos

La razón no acompaña al sentimiento tras la salida de Harold Mayne- Nicholls desde la testera de la Anfp, y con ello, el asesinato

deportivo que ha sufrido el proceso de Marcelo Bielsa.

Los clubes “grandes” y sus sociedades anónimas –que tienen como accionistas a los grupos empresariales más poderosos del país– impusieron sus apetitos comerciales por la vía “democrática” y así el punto final al proceso de un estratega que vino a extirpar nuestro fútbol arratonado e insulso.

En un país de memoria frágil y tibio poder de manifestación, la figura del rosarino se borrará lentamente con el tiempo y lo más probable es que nos resignemos y empaticemos con el mandato del nuevo presidente de la Anfp. Esto mismo lo he visto con las entradas más caras de Sudamérica, con el alza del transporte, del pan y otros servicios. Dicen que los argentinos salen a la calle cuando les suben el pan y nosotros salimos a comprar galletas.

Es por eso que manifiesto haber sido fanático del club de mis amores, de haberme gastado lo que no tenía para ir al estadio, de haberme comprado la última camiseta original con el número de mi ídolo, de haberme ido a las manos discutiendo con los archirrivales, de haber llorado una derrota a moco tendido en la galería, de haber cantado el himno nacional bajo la lluvia en un partido eliminatorio y pagar con esfuerzo mes a mes la señal del Cdf.


Los nuevos empresarios del fútbol simplemente me mataron la pasión, me demostraron que no pertenezco a sus colores, que la insignia es la chapa de sus sociedades anónimas. Me dejaron claro quiénes son los dueños de la pelota, que mi opinión como hincha no vale nada y que ellos tienen y tendrán la última palabra.

Es por eso que hoy me saco la camiseta, señores, y me desconecto del cable, porque su producto fútbol es malo, porque en las copas internacionales dan lástima, porque compran barato y venden caro, porque ustedes no aman la camiseta, aman el dinero. Esta vez no lloro de emoción por la grandeza de mi equipo, esta vez lloro por la pequeñez de sus administradores.

Confiemos en las buenas intenciones de la nueva testera de la Anfp y Dios quiera que nuestro balompié no tenga que esperar otro siglo para encontrar una identidad de juego. Parece que la “Roja” ya no es tuya, ni mía o de todos. La “Roja” hoy es de ellos.

10 de noviembre de 2010


¡Qué atropello a la razón!

Los chaqueteros de turno recalcan que Marcelo Bielsa no inventó el fútbol, que se equivocó en algunos pasajes del Mundial, que no

es irreemplazable y que pronto hay que dar vuelta la página. A esos mismos se les olvida que en el último tiempo la selección no jugaba nada, que hace algunos años éramos los últimos del continente y que nuestro fútbol era el hazmerreír en los torneos internacionales.

En la hora del adiós saltan al recuerdo varias actuaciones memorables por clasificatorias. Por ejemplo, el segundo tiempo de Chile frente a Uruguay en el mítico Centenario de Montevideo (2-2) y las acertadas estocadas del “Matador” Salas. Contra Bolivia, en La Paz (2-0), el tridente de ataque (Jean Beausejour, Humberto Suazo y Alexis Sánchez) impuso supremacía sobre la retaguardia altiplánica y el “Pitbull” Medel clavó sus colmillos en dos ocasiones. Notable fue también la presentación en Venezuela (2-3), en un partido con mucho vértigo y con la “Roja” apostando hasta el último minuto por el triunfo, el que finalmente llegó a través de un latigazo del “Chupete” Suazo.

Imposible olvidar las victorias sobre Argentina y Colombia en Santiago (1-0 y 4-0, respectivamente), Perú en Lima (3-1), Paraguay en Asunción (2-0) y la clasificación lograda en Medellín frente los cafetaleros por 4-2.

En el Mundial de Sudáfrica, Chile embelesó con el vértigo de su juego y con la destacada actuación de su bloque defensivo compuesto por Gary Medel, Waldo Ponce y Gonzalo Jara, quienes lideraron el ranking fifA de la primera fase de la cita planetaria. Recordemos que la victoria 1-0 sobre Honduras –gol anotado por Beausejour– tuvo una


connotación histórica, ya que ese mismo 16 de junio se cumplían 48 años desde la última victoria chilena en una justa máxima del balón, cuando Eladio Rojas anotó el 1-0 ante Yugoslavia y le entregó a la “Roja” el tercer puesto en el Mundial de 1962.

El posterior triunfo 1-0 sobre los suizos y el descuento de Millar ante España (1-2) clasificaron a Chile para la segunda ronda, donde nuestra bestia verdeamarelha nos despertó del sueño y nos mandó para la casa.

Para la casa también mandaron los clubes “grandes” a Mayne-Nicholls y Bielsa lo acompañó con lealtad y consecuencia. Un gesto que se aplaude en tiempos donde da lo mismo ser derecho que traidor, generoso o estafador, donde todo es igual, donde nada es mejor… Y siguiendo con el tango: ¡Qué falta de respeto, qué atropello a la razón!



¡Que se vayan todos, que no quede ni uno solo!

Cómo ignorar la crisis de Colo-Colo si en la micro, en la oficina y en todas partes se escuchan los lamentos de sus fanáticos tras

la eliminación en Copa Libertadores y tras el golpe de gracia que le propinó su archirrival el sábado pasado.

Digamos que los padecimientos albos se vienen extendiendo desde la temporada anterior y los dardos apuntan a la administración del club popular. Sí, la misma que se coludió para sacar a Bielsa de la Selección, la que ratificó a principios de temporada al inocuo Diego Cagna y la que cuenta las chauchas a la hora de reforzar al equipo.

Pastelero a tus pasteles y los concesionarios del Cacique mejor a los negocios, porque en lo futbolístico no están viendo una. En ese complejo escenario llega Jaime Pizarro a ordenar la casa y a robustecer una gerencia deportiva que ha pagado muy caro lo barato. La lista de erradas contrataciones parece interminable: Celso Ayala, Edison Giménez, Gilberto Velásquez, John Jairo Castillo, Carlos Salazar, Alex Von-Schwedler, Matías Quiroga, Claudio Graf, Javier Cámpora, Gino Clara, Mario Salgado, Agustín Alayes...

Esto ha incidido en que en las últimas 8 participaciones por Copa Libertadores –en una década solamente en una ocasión se avanzó a los octavos de final del torneo (2007). Además, con la última eliminación frente a Cerro Porteño se dejaron de percibir alrededor de 600 mil dólares por conceptos de Conmebol y de recaudación.

El fin del notable período de Claudio Borghi se llevó consigo el fútbol ofensivo al que siempre ha estado acostumbrado el adherente


colocolino. Así comenzó un desfile interminable de entrenadores a quienes les ha pesado el buzo albo.

Por ahora Colo-Colo pende de un hilo para clasificar a los playoff y la poda se augura monumental en Pedrero. Al menos, eso exige la hinchada a través de un cántico que cada vez retumba más fuerte: “¡Que se vayan todos, que no quede ni uno solo!”.

6 de mayo de 2011


La historia no está escrita

En la alta competencia los errores o “accidentes” se pagan caros, y si no que lo diga la gimnasta Makarena Pinto, quien se dobló el

tobillo en el Mundial de Rusia y desperdició un podio; o el mismísimo “Chaleco” López, quien se juega literalmente la vida en cada campeonato y que acabó gravemente accidentado en el Rally de Túnez. Pequeños grandes detalles que se pueden convertir en una medalla, en una copa, en un título o simplemente en lágrimas, como lo que le sucedió anoche al portero Paulo Garcés.

En el fútbol, el puesto de arquero es tremendamente ingrato. Los errores de quien cuida la puerta no se compensan y en segundos se pasa de héroe a villano. De nada le sirvió a la Católica dominar en el Centenario y doblegar a su adversario en la revancha. La clasificación se hipotecó aquella fatídica noche del portero estudiantil en pastos uruguayos, y no había que ser adivino para imaginar que los charrúas en la vuelta iban a desplegar toda su polenta, que iban a abusar del juego aéreo del “Palote” Olivera y que no se iban a dar por vencidos hasta el último minuto. Un libreto que les ha sido muy fértil en nuestro suelo: frente a River el ’66, frente a Cobreloa el ’82 y frente a América de Cali el ’87.

Señoras y señores: a eso se le llama categoría y a los del Atlántico vaya como les sobra; ¿o usted todavía cree en la mala suerte del chileno? Los partidos se ganan con goles, con picardía y no con buenas razones. Es así como el “Tolo” Gallego –un viejo zorro del fútbol– no podía concebir cómo su elenco dejaba escapar la clasificación a la segunda ronda de Copa Libertadores a dos minutos de finalizar el encuentro. En


su peculiar estilo, manifestaba que a los suyos les faltaba viveza, tirar la pelota sin asco a la galería o esas mañas propias de los rioplatenses que en más de un siglo no hemos podido aprender.

Garcés seguramente cargará con las frustraciones de aquellos de memoria frágil que se les olvidó que solamente una vez se alzó la Libertadores y que al “Gato” Osbén se le jabonó una pelota en el Mundial de España, al “Cóndor” Rojas en la Copa América del ’87, al “Pato” Toledo en un amistoso frente Argentina y al mismo Bravo frente a España en el Mundial pasado. La máxima dice que cada fracaso le enseña al hombre algo que tenía que aprender, quizás la historia no está totalmente escrita para el oriundo de Parral…

20 de mayo de 2011


¿Si es extranjero es bueno?

Como el mejor de los culebrones, nadie se quiere perder las semifinales de los playoff del fútbol chileno. Las parejas ya están

armadas: Unión La Calera, de Emiliano Astorga, frente a la Universidad Católica, de Juan Antonio Pizzi, y O’Higgins, de Ivo Basay, frente a la Universidad de Chile, de Jorge Sampaoli.

Recordemos que el último entrenador nacido en suelo chileno que alzó la copa fue Jorge Pellicer, en el Clausura de 2005, con la Universidad Católica. En 2006 y 2007, Claudio Borghi fue monarca absoluto con el tetracampeonato albo; Nelson Bonifacio Acosta, en el Apertura, 2008 con un Everton que les arrebató la copa a los colocolinos; Marcelo Pablo Barticciotto recuperó la corona para las huestes albas en el Clausura 2008; en el Apertura 2009, la “U” tuvo que echar mano a la garra charrúa de Sergio Markarián; en el Clausura 2009, el trofeo volvió a Macul con Hugo Tocalli y en 2010 la Universidad Católica de Juan Antonio Pizzi también le despojó el título al Cacique en las postrimerías del torneo.

Los concesionarios de los clubes “grandes” –en los últimos años– han depositado la confianza de sus vestuarios en entrenadores forasteros. No obstante, las fracasadas expediciones internacionales de estos clubes han demostrado que los mismos han estado por debajo o al mismo nivel que sus colegas nacionales.

En la “U” antecedieron a Jorge Sampaoli los uruguayos Gerardo Pelusso y Sergio Markarián, y anteriormente el rioplatense José Horacio Basualdo. En Colo-Colo precedieron al “Tolo” Gallego los trasandinos Diego Cagna, Hugo Tocalli y Marcelo Barticciotto (nacionalizado chileno). Los Cruzados en la última década apostaron por el también


trasandino Óscar Garré en 2004 y por el peruano José del Solar en 2007. Por estos días, los aplausos se los lleva Juan Antonio Pizzi, quien viene precedido de una dignísima participación en Copa Libertadores y de una excelente campaña en el torneo nacional.

Un fenómeno que se ratifica en la Selección Nacional, tras la abrupta salida del rosarino Marcelo Bielsa y el arribo de Claudio Borghi. Más allá de los méritos del “Bichi”, salta la interrogante si es que algún coach local estaba capacitado para asumir el relevo del rosarino.

Bajo este escenario, los técnicos criollos parecieran estar resignados a la subvaloración del medio y a los escasos recursos con que cuentan las escuadras que se “atreven” a contratarlos. Con ello un estancamiento que claramente los hace perder competencias y los hace poco apetecibles para el mercado internacional.

El ex Azul Víctor Hugo Castañeda y en 2010, golpeaba la mesa en una nota para el sitio prensafutbol.cl: “No hemos velado por nuestros derechos como corresponde, dando pie a que los extranjeros vengan y tengan poca exigencia. Cuando un chileno sale del país, se le exige mucho más que lo que les exigen a los extranjeros acá”.

Excepción a la regla un Manuel Pellegrini con todo su background internacional, quien se forjó a sí mismo en las ligas más competitivas del mundo y al que siempre se le ha resistido en el medio local. Un caso que definitivamente no responde a la “escuela” chilena o al proceso formativo de entrenadores de alguna institución. La vilipendiada clase dirigencial debería mirar la experiencia de Josep Guardiola en el Barcelona y comprender que no por levantarse antes amanece más temprano y que no por ser extranjero significa que es bueno…

31 de mayo de 2011


El que quiere puede

“Somos la ‘U’, no nos den por muertos”, repetía desafiante Jhonny Herrera tras el golpe que asestó la Católica en la ida de la finalísima

del Apertura. ¡Reconozcámoslo! Aquel hilo de ilusión nacía únicamente de quienes lideraban el camarín azul y de aquellos incondicionales que agotaron las entradas al otro día de la derrota. ¡El resto que no se suba a la micro de los campeones!

El 2-0 en contra suponía un bajón anímico de los azules y la revancha parecía un mero trámite para que los cruzados obtuvieran su primer bicampeonato. Sin embargo, los de San Carlos de Apoquindo evidenciaron las mismas falencias que en anteriores duelos. Recuérdese los cotejos frente a la propia “U” en la fase regular, ante Colo-Colo durante la primera media hora en el arranque de los playoff y con Unión La Calera en ambos partidos de semifinales. ¿El clon de Bielsa habrá analizado los defectos del rival? obvio que sí.

El medio era escéptico a la oferta de ataque de Jorge Sampaoli, pero el tiempo le fue dando la razón. Su escuadra fue la más goleadora y la menos vulnerada del certamen, con 54 tantos a favor y 25 en contra.

A principios de temporada, al casildense no le tembló la mano para prescindir de emblemáticos del club como Manuel Iturra y Rafael Olarra, quienes no encajaban en su propuesta. Y durante el torneo resistió con firmeza la presión de la hinchada que exigía la titularidad para Diego Rivarola. Súmele a esto la acertada elección de los refuerzos: Jhonny Herrera, Charles Aránguiz y Gustavo Canales.


¿Y a la Católica nadie le avisó que se trataba de partidos de ida y vuelta? ¿Adónde estuvo el fútbol y el mejor equipo del semestre?

Días antes de la final, el “Sapo” Livingstone comentaba que Juan Antonio Pizzi había jugado todo el año con el ventilador prendido y que así se corre el riesgo de cortarse los dedos. Y así fue, no más.

Las confusiones tácticas llevaron a los cruzados a la histeria colectiva, precisamente en el compromiso más importante del año. Lucas Pratto sin compañía en delantera y el gran crédito cruzado Felipe Gutiérrez en la banca resume prácticamente todo.

En síntesis, el título de Universidad de Chile es el premio al riesgo, a la valentía, a la convicción y a la vocación ofensiva que Jorge Sampaoli logró trasuntarles a sus dirigidos a lo largo del campeonato. También es la confirmación de un nuevo fútbol, aquel plasmado en Chile por Marcelo Bielsa, precisamente el ídolo de Sampaoli.

“El que quiere puede”, solía decirme mi padre desde pequeño y, a la luz de los hechos, Universidad de Chile quiso ser campeón.

14 de junio de 2011


Ser o no ser campeón... esa es la cuestión

La Copa América, sigue siendo esquiva e inalcanzable para el fútbol chileno. De hecho, Ecuador, Venezuela y Chile son los

únicos que no han levantado el trofeo del torneo de Selecciones más antiguo del mundo.

A esta soberana se le han abierto las puertas en algunas ocasiones y su negativa ha sido rotunda. Lo más destacado han sido los subcampeonatos de 1955, 1956, 1979 y 1987.

¿Será esta la ocasión para terminar con los triunfos morales? A Borghi se le ve bastante relajado y su confianza se sustenta en una generación de mentalidad ganadora, la cual posee a cuestas un Mundial juvenil, un Mundial adulto y una no despreciable participación en las mejores ligas del orbe: Gonzalo Jara (West Bromwich), Arturo Vidal (Bayer Leverkusen), Gary Medel (Sevilla), Carlos Carmona (Atalanta), Mauricio Isla (Udinese), Matías Fernández (Sporting de Lisboa) y Alexis Sánchez (Udinese), quien es pretendido por el fantástico Barcelona.

La asunción del “Bichi” distendió el camarín y eso podría ser postivo pero también algo peligroso sino se consiguen los objetivos y las metas trazadas. El ánimo se fue a las nubes tras la exitosa gira por Europa, en marzo pasado, con el empate frente a Portugal y con el triunfo sobre Colombia; tan en las nubes que nos dimos el lujo de no jugar amistosos ni en abril ni en mayo, a diferencia de nuestros rivales del grupo C (Uruguay, México y Perú).


Amistosos más o amistosos menos, Chile se presenta con el prestigio que se consiguió en la era Bielsa y la Copa América pareciera ser la instancia propicia para revalidar dichos créditos. Ser o no ser campeón… esa es la cuestión.

17 de junio de 2011


Sin tiempo para lamentarse

En la presente versión de la Copa América, los humildes mandaron para la casa a los grandes del continente y mezclados en ese

cambalache dijeron adiós Argentina y Brasil. Es así como Chile comenzaba a calzarse el traje de favorito –ese que nunca le ha quedado a la medida–, pero inexplicablemente se mareó y se pegó un tremendo costalazo con una de “vinotinto”.

¿Qué pasó? Al parecer, las bajas temperaturas mendocinas congelaron los primeros tiempos de la Selección, ya que la reacción ofensiva se hacía esperar hasta que los rivales le propinaran el primer combo. El vértigo y la agresividad de Bielsa se mutaron por un juego más hilvanado y por la tenencia del balón que a ratos trajo de vuelta esos extintos toques insulsos y pases lateralizados. En efecto, Borghi tiene la responsabilidad y la obligación de recuperar la dinámica extraviada en largos pasajes de la competencia continental.

La palabra fracaso ronda cuando no se consiguen los objetivos. La eliminación en cuartos de final fue un duro traspié y una frustración mayor cuando se ve a Paraguay instalado en la final sin haber ganado un solo encuentro.

Pese a la desazón, no hay que olvidar que la chilena es una generación joven y altamente cotizada en el mercado internacional, encabezada por Arturo Vidal y Alexis Sánchez, flamantes contrataciones de la Juventus de Italia y del Barcelona de España, respectivamente.

Ya vimos que las Selecciones sudamericanas se mostraron los dientes en esta Copa América y se declararon la guerra de cara a las próximas


clasificatorias. Esto hace imperioso algunos ajustes tácticos que requieren del rol protagónico de jugadores que vienen pidiendo cancha, como Jhonny Herrera, Felipe Gutiérrez, Francisco Silva, Eduardo Vargas, Diego Rubio, Carlos Muñoz, Mauricio Pinilla y si nos faltan goles, ¿por qué no el nacionalizado Gustavo Canales?

Chile debuta el 8 de octubre frente a Argentina en Buenos Aires y no hay mucho tiempo para lamentarse…

21 de julio de 2011


En el Club México respira el boxeo chileno

No es un misterio que el boxeo chileno se encuentra con respirador artificial, sin embargo, el Club México es actualmente el oxígeno

de la actividad en nuestro país. Las puertas del gimnasio, ubicado en la popular intersección de las calles San Pablo con Manuel Rodríguez, se abren mensualmente para recibir al millar de aficionados que se dan cita para ver sus espectaculares veladas pugilísticas.

Allí converge el obrero luego de su extenuante jornada laboral, el estudiante que hace un alto en las movilizaciones, el jubilado que le pellizca una “cola” a la mísera pensión y también la dueña de casa que acompaña al hijo boxeador en su sueño por ganarle un round a la vida.

El viernes 29 de julio se anunciaba la pelea del crédito chileno Óscar “la Máquina” Bravo, quien retornaba tras su malograda expedición en Ghana frente a Emmanuel Tagoe por el Título Intercontinental Superpluma de la Federación Internacional de Boxeo (fib). Esta vez el rival era el chileno Moisés Gutiérrez, retirado del cuadrilátero hace cuatro años y apodado “Matador”.

Como aperitivo, cuatro combates amateurs con noveles púgiles que enfervorizaron al respetable y entibiaron la jornada con su ímpetu y a ratos con su rusticidad.

Cuando el reloj marcó las 23:30 horas, ingresó al ring, después de 1.460 días de inactividad, el “Matador” Gutiérrez. Unos segundos más tarde, y con el estruendo popular, hizo ingreso al coliseo aztec Óscar “la Máquina” Bravo.


Acá no hubo round de estudio, porque los púgiles se repartieron una lluvia de “palos” a lo largo de todo el combate. No obstante, la balanza se desequilibró a favor de Bravo en virtud de su variado repertorio técnico y gracias a su habitual táctica de acomodarse a la pelea que le presenta su rival. Aun así, se le echa de menos una pegada noqueadora.

Gutiérrez se mostró como un contrincante oficioso y experimentado merced a su excelente esquive, su buen juego de piernas y una óptima cintura. Fin de la pelea y Ambos púgiles se sentían ganadores. Los vítores, los gritos y los aplausos no se hicieron esperar. Los jueces Hernán Moreno y Ricardo Smith votaron a favor de Bravo por 58-57 y 58-56, respectivamente; en tanto que Hernán Pacheco vio ganador a Gutiérrez por 59-57. En consecuencia, Bravo levantó los brazos, se abrazó con su coach y en lo inmediato evaluará una propuesta de radicarse en Estados Unidos para continuar allá su carrera profesional.

A raíz de esta gran pelea, la parcialidad se retiró animada y el locuaz presentador despidió contento la velada.

Pese a todo, en el Club México el boxeo todavía respira.

3 de agosto de 2011


Carolina “Crespa” Rodríguez, bendita seas entre todos los puñetes

A tono con los movimientos sociales, este año las mujeres también se “tomaron” el deporte chileno. Es así como la tiradora con

arco Denisse van Lamoen y la triatleta Bárbara Riveros han elevado el emblema patrio a lo más alto con sus títulos mundiales. En tanto, Francisca Crovetto (tiro skeet), Kristel Köbrich (natación), Erika Olivera (maratón), Natalia Ducó (lanzamiento de la bala) y Karen Gallardo (lanzamiento del disco) ya se matricularon para los Juegos Olímpicos de Londres 2012.

Asimismo, el boxeo femenino busca abrirse paso en la sociedad para terminar con los estigmas y prejuicios sexistas, y por sobre todo, para alertar a las autoridades sobre las precarias condiciones en que se encuentra dicha disciplina en Chile. La actividad femenina sólo respira gracias a la misericordia de algunos visionarios que se meten la mano al bolsillo. Este es el caso del ex campeón mundial de kick boxing y reconocido coach de boxeo, Claudio Pardo, quien el 20 de agosto reunió en el Club México a un ramillete de pugilistas en torno a la velada “Bellas y Furiosas”.

Fue una exhibición de cinco combates preliminares amateurs –dos de ellos frente a contrincantes argentinas– y una pelea profesional de fondo que anunciaba a Carolina Rodríguez, el único crédito nacional de la categoría, frente a la trasandina María Cecilia Román.

Recordemos que la “Crespa” es campeona nacional, panamericana y sudamericana de kick boxing y debutó en el profesionalismo el 30 de


abril de 2010, en este mismo reducto, con un triunfo por los puntos ante la rioplatense Natalia Burga, hito consignado en los libros como el primer combate profesional del boxeo femenino en Chile.

Con las trasandinas y las nacionales –con cara de pocas amigas– sobre el cuadrilátero se inició la ceremonia de interpretación de los himnos patrios. “O el asilo contra la opresión” estalló en el Club México como un solo coro.

A las once de la noche la ansiedad del público se reflejaba en el temblor del piso. No era para menos, ya que Carolina “Crespa” Rodríguez regresaba después de catorce meses sin pelear. A la criolla se le vio ágil y muy técnica. A ratos acusó su falta de boxeo, pero fue ganando confianza en el cuadrilátero y soltó sus nervios iniciales.

Fin del combate y el veredicto de los jueces resulta implacable: Vladimir Herve 60-56, Hernán Moreno 60-55 y Hernán Pacheco 60-55.

Triunfo sólido de Rodríguez, cuyo nombre retumbaba por los parlantes del recinto, ante la algarabía del respetable. Los flashes de las cámaras se fueron encima de la ganadora y los micrófonos se peleaban por sus palabras. “Voy a ser campeona del mundo. He imaginado hartas veces ese momento. Hay que esperar que llegue el día no más, porque va a ser así”, afirmaba convencida. ¡Dios la escuche y bendita sea entre todos los puñetes!

29 de agosto de 2011


Crónica de una debacle alba

Dígame si 2011no ha sido apocalíptico para Colo-Colo. Una temporada que partió con el pie izquierdo tras la insólita

ratificación de Diego Cagna en la banca del Cacique, y que prosiguió con el despido de tres referentes del equipo: Arturo Sanhueza, Rodrigo Meléndez y Miguel Riffo.

El cariacontecido técnico trasandino inauguró el 12 de febrero la temporada de boletas, tocando fondo con el 1-5 propinado por la Universidad de Concepción en el mismísimo Estadio Monumental. Toda una afrenta para la historia de Colo-Colo. Sin embargo, al ex boquense no sólo se le recordará por sus desaciertos técnicos, sino también por frases del siguiente tenor: “me gustaría jugar como el Barcelona”, “a esa hora yo duermo la siesta” y “no me preocupa lo que piense el hincha”.

Diez días después de esa goleada se sentaba en la banca Américo Rubén Gallego, conocido tanto por su destacada trayectoria como por su espontáneo verso. El ex técnico de Independiente de Avellaneda apeló a la motivación, pero sus alineaciones nunca satisficieron el paladar del exigente hincha. Humillantes, por decir lo menos, fueron las eliminaciones en fase de grupos de Copa Libertadores ante Cerro Porteño, en cuartos de final del Apertura ante la UC y en Copa Chile a manos del modesto Lota Schwager. Agréguele la estocada que le clavó Diego Rivarola en el minuto 90 del último superclásico.

En agosto la paciencia de la directiva se agotó y Gallego fue despedido. El “Tolo”, que pregonaba su viveza a los cuatros vientos, se iba de Macul sin ningún logro deportivo y con una indemnización que superaba los


$120 millones. “¡Hay que ser vivito!”, fue una de las frases que dejó para el recuerdo.

Aunque el interino “Lucho” Pérez hizo una correcta labor, la dirigencia alba igual presentó a Ivo Basay como el nuevo entrenador. Punto aparte es el morrocotudo entuerto con O’Higgins, situación que pospuso el debut oficial del “Hueso”.

La era de Basay comenzó con una victoria sobre Cobreloa en Calama, pero un nuevo frente de mal tiempo azotó a los albos, siendo humillados por La Serena (4-0) y Universidad Católica (4-0), lo que deja al descubierto las malas decisiones y la mínima erudición futbolística de los concesionarios del club popular, los mismos que tienen la responsabilidad de devolverles el honor y la vergüenza deportiva a aquellos que se gastan lo que no tienen para ir al estadio, los que sufren verdaderamente con las derrotas y los que de verdad aman la camiseta…

20 de octubre de 2011


El cielo está cada vez más azul

El único que se creía el cuento a su llegada a la “U” era el propio Jorge Sampaoli y en parte la directiva de Azul Azul, que se decidía

por el casildense tras la partida de Gerardo Pelusso y el infructuoso touch and go con Diego Simeone. Es que hay que tener hartas patas para arribar a un club grande y tomar decisiones antipopulares y el “zurdo” las tuvo cuando prescindió de figuras referenciales como Olarra e Iturra o cuando dejó en la banca a Rivarola y Canales.

Para hacer tortas hay que romper huevos y Sampaoli confió en sí mismo cuando ni siquiera los suyos lo hacían. De hecho, despectivamente lo apodaban “el Bielsa de los pobres”, en tiempos donde los mediocres estigmatizan como “viuda” a todo lo que se parezca al ex entrenador de la Selección chilena.

El 12 de junio, Sampaoli coronó campeón a Universidad de Chile, logrando su primer título como entrenador. Con eso bastó para acallar cualquier crítica y, de paso, los cruzados tuvieron que guardar el cotillón para otra fiesta.

Más allá del color de su camiseta, dígame si no le da gusto cuando a los chilenos les va bien en el deporte; dígame si no le dio gusto ver a los universitarios dándole un baile al equipo más popular de Brasil (Flamengo); dígame si no nos resarcimos del dientudo Ronaldinho y de todas las veces que celebró a costillas nuestras. Pelotas que antes se iban afuera, ahora caen envueltas en la red. El delantero Eduardo Vargas, vestido de frac, se desenvuelve ágil y mortífero como un felino. El equipo chileno corre los noventa minutos y termina asfixiando al rival.


Da gusto ver fútbol cuando el aparente chico se agranda y empequeñece al mínimo al poderoso.

Así está la “U”, transformada en la nueva potencia del balompié sudamericano. Y todo gracias a Sampaoli, quien, ante Flamengo en Río, provocó una de las mejores exhibiciones chilenas en tierras foráneas. Y ojo que aún queda calendario para este magnífico elenco azul. ¡Qué otras sorpresas nos depararán!



Luis Alberto Cerda, un animal del ring

Los treinta grados no daban tregua y el profesor de educación física menos. En la cancha del Liceo de Aplicación ordenaba diez vueltas

y había que aguantárselas.

Al concluir la prueba de resistencia, el docente le preguntó al alumno más aventajado por su deporte favorito. “¡Boxeo!”, exclamó el espigado muchacho. “¡Tai pintao pal Club México, cabrito!”, auguró el maestro.

Luis Alberto Cerda, a sus 13 años, ya sabía de golpes bajos y de caídas a la lona. “Cuando yo tenía 10 años, mi padre murió atropellado en el paradero 9 de Pajaritos. Venía camino a casa desde el trabajo”, cuenta emocionado el hoy destacado boxeador de 21 años.

En el México lo despabiló, a punta de coscachos, el extinto coach Luis Díaz. A poco andar, su sed de éxito y su gusto por las pizzas lo hicieron acreedor del apelativo “Animal”. “En realidad soy el animal de la mesa, de la comida… En 2009, en un Campeonato Nacional Juvenil, me coroné campeón de Chile con cuatro peleas ganadas en una semana, tres de ellas por K.o.”, relata con orgullo.

Una treintena de refriegas en el amateurismo nunca lo convencieron. “En Chile no es una opción dedicarse al boxeo amateur, porque no hay apoyo. Acá uno pelea con puros chilenos y con suerte con algún argentino de segunda mano, a diferencia de Europa, donde el boxeo amateur sí resulta porque pelean entre todos, lo que lo hace más competitivo”, comenta el esforzado deportista.

En 2010, el ex púgil Joel Mayo quedó perplejo con la exuberancia del muchacho sobre el ring y al poco tiempo lo becó por un semestre en


el viejo continente. Así, en Europa se enfrentó a la vida y asimiló una escuela técnica que marcaría su estilo para pelear. “Muchos dicen que el boxeo embrutece o que es un deporte para tontos. Pero como boxeador soy mucho más inteligente que cuando no lo practicaba. Gracias a esta disciplina conocí otras latitudes y aprendí a hablar otros idiomas”, defiende a su disciplina.

Tras su periplo por Europa, su cacería en el profesionalismo la inició el 4 de marzo de 2011 con un K.o. sobre Humberto Troncoso, quien no pasó del primer round. “Metí las manos precisas”, subraya Cerda.

Luego se codearía con las victorias, obteniendo su último triunfo el 25 de noviembre de este año ante el argentino Orlando Marcelo Colque. “Entre los boxeadores somos siempre respetuosos, al menos yo lo soy tanto arriba como abajo del ring, claro que eso no quita que salga a cortarle la cabeza a mi rival si puedo, porque es mi trabajo, soy yo o él, es mi carrera la que está en juego”, revela esta bestia del boxeo criollo.

Cerda suma cinco escaramuzas en el campo de los expertos, todas resueltas por la vía del cloroformo. En cada golpe se trasunta su admiración intrínseca por Manny Pacquiao, a quien describe como “lo más grande que tiene el boxeo en este momento”. También destaca a Floyd Mayweather, de quien dice que “da mucho espectáculo y es muy inteligente”. Además resalta a Juan Manuel Márquez y elogia “la valentía” de Arturo Gatti.

Cerda es oriundo de Maipú, pero hasta ahora es un hijo no reconocido por la comuna: “En la municipalidad no tienen idea de que existo o quizás no saben que soy de la comuna. Me gustaría que apoyaran. Ojalá hicieran lo mismo que la Municipalidad de Iquique, la que tiene una beca llamada Estanislao Loayza para apoyar a sus deportistas de alto rendimiento”.


El “Animal” sobrevive a las pellejerías de la actividad con los 5 mil pesos de las clases que imparte en el Club México. Y algo cae según la bolsa, conforme a los rounds que se disputen en las veladas organizadas por dicha entidad. Cerda confiesa que “durante mi carrera no he tenido auspiciadores. Es muy raro que se fijen en un boxeador para darle apoyo. Un respaldo monetario o de implementos es muy importante en la carrera de un deportista”.

Cerda sólo se muestra agradecido con el Club México y su director Luis Valenzuela, a quien considera como “muy importante para lo que se está logrando en el boxeo. Su arduo trabajo, su dedicación y su pasión por esta disciplina han dado frutos y han levantado la actividad. Gracias a él hay boxeo en Chile; gracias a él yo estoy presente en el boxeo chileno”.

Pese a las miserias, nunca se rinde. Todos los días recorre los catorce kilómetros de la ciclorruta que atraviesa la Avenida Pajaritos, la misma arteria donde cayó su viejo y donde se persigna cada vez que pasa por el paradero 9. A propósito, el “Animal” revela que “antes de cada velada me conecto con mi papá. Le pido por mi integridad, por mis compañeros y por mi sueño de ser algún día campeón del mundo”.

2 de diciembre de 2011


La copa de cartón

No había por dónde. Veinte años dimos lástima en las citas continentales y ahora venimos con que la Sudamericana es más

“penca” que la Libertadores.

Jorge Sampaoli le tapó la boca a medio mundo. Sí, “el Bielsa de los pobres”, el mismo que llegó a parchar a Diego Simeone, al que sus pupilos no le entendían ni jota. ¿Pero se acuerda de que a Platko, a Jozi y al propio Bielsa tampoco los entendían?

El oriundo de Casilda arribó a un club que se decía grande pero que no conocía de júbilos internacionales. En pedir no hay engaño y los concesionarios azules se la cantaron clarita apenas estampó su firma: clasificar a la Copa Sudamericana y alzar el Torneo de Clausura 2011.

Como buen argentino, el estratego se creyó el cuento y confió en sí mismo incluso cuando los suyos lo quisieron como pebre.

Su gloria comenzó al arrebatarle el Apertura a Universidad Católica. De ahí para adelante nadie pudo con su bosquejo ofensivo: ni la inexpugnable localía de los del Atlántico, ni la altura de Quito, ni menos la “mufa” del Nacional.

Nos cuesta tanto ganar algo y tan poco que nos cuesta chaquetearlo. Cuando un equipo juega bonito hay que dejar las miserias a un lado, ponerse de pie y aplaudirlo.

Es de esperar que nunca más nos falte la chaucha para el peso, que tampoco se nos cruce la fatalidad del chileno y que los archirrivales


se hermanen en pos del elenco que represente al país. No sería sano aguardar otras dos décadas para gritar campeón.

Con el reciente éxito de la “U”, quizás otro cuadro chileno se anima a ganar la mal llamada “copa de cartón”.

18 de enero de 2012


Todo fue lindo mientras duró

Bielsa hace milagros aquí, allá y en todas partes. Es puro amor a la pega. A la pega bien hecha, esa a la que siempre le hacemos el quite

por estos lados. Esa que le produjo urticaria a los concesionarios de los clubes grandes para sacar a Mayne-Nicholls de la Anfp.

Dejamos partir al estratego que Guardiola considera el mejor del orbe, al que nos mandó a jugar para adelante y al que paró la chacota en la Selección. Lástima que las revoluciones del balompié criollo han durado lo que dura un sueño, a raíz de quienes prefieren las pesadillas.

Al menos, los esquemas tácticos de Sampaoli y Berizzo consuelan a los amantes del fútbol de ofensiva y también a los deudos del coach rosarino. Ver al Athletic de Bilbao engullirse al Paris Saint Germain, al Manchester United y al Schalke 04, también nos trae a la memoria las grandes gestas de la “Roja” en las clasificatorias .

¿Se acuerda que acá santificaron a Bielsa? Cómo no, si el argentino exorcizó todos nuestros espectros en la cancha. No faltan los que le achacan que no ganó nada con la “Roja” o que no inventó el fútbol. Son esos mismos que ahora se retractan y le tiran toda la pérgola al Bilbao.

El fútbol, con sus idas y vueltas, cruzará a Chile con los senderos de Bielsa, ya que el Sporting de Lisboa de su regalón Matías lo esperará en semifinales de la Europa League y el Barcelona de su entrañable Alexis lo aguardará en la final de la Copa del Rey. Semifinal, final, palabras que conoce Bielsa para dicha de los vascos y nostalgia de los chilenos.

A propósito de Matías y Alexis, Bielsa nunca ocultó su afecto por el primero y se considera un admirador del tocopillano. Es decir, en


Europa Chile y Bielsa se corresponden el amor. Pero allá en Europa, porque acá, en Chile, sólo queda el recuerdo de un amor pleno que pudo extenderse si no hubiera sido por la ambición de los mismos de siempre.

¿Cuándo le habíamos guapeado a Uruguay en el Centenario? ¿Alguna vez le habíamos pasado por arriba a los argentinos? ¿Hace cuánto que no ganábamos en un Mundial..?

Con Bielsa en la banca nadie quería a Chile de rival. Fue lindo mientras duró.

11 de abril de 2012


Joel Mayo Antipichún, un guerrero del deporte

Dos cabros chicos a los puñetes les roban los aplausos y las carcajadas a los payasos del circo de la población Diego Portales, en Villarrica.

El pequeño Joel Mayo Antipichún se gana los tres chicles y los cinco dulces “Media hora” en disputa. Pero también una paliza en casa por no avisar su paradero.

Es que el chiquillo le hacía el quite al colegio y las tardes se las gastaba dándole al puching ball del Club Olímpico Carlos Lucas. Tanto ímpetu conmovería al entrenador Santiago Urrutia, su mentor en el arte de los puños y quien lo estrenaría en las competencias para aficionados.

En el Nacional Amateur de Talca de 1990, y con Urrutia en el rincón, Mayo se adosaría un bronce al pecho y sería citado por vez primera a la Selección Nacional.

El mapuche de Curarrehue se convertiría en figura del amateurismo con un saldo impresionante, ya que alzó los brazos en 90 combates (57 por K.o.), en 4 resignó el triunfo y en 2 terminó igualado.

El púgil logró esquivar las pellejerías de la actividad y el estigma de ser boxeador en Chile. Y la misericordia del empresario Antonio Eltit y un contacto con el manejador austríaco Hansi Neuner le posibilitaron asestar el mejor golpe de su carrera, pues al “Indio” se le abrieron las puertas del viejo continente, allí donde nunca antes bregó un chileno.

En Austria se haría inexpugnable. Entre 2003 y 2008 disputaría 12 contiendas en las tierras de Mozart y sólo conocería de victorias. Con su pegada al estilo Martín Vargas y “Mano de Piedra” Durán, envió a la lona a ocho de sus contrincantes. Uno de ellos fue el húngaro Sandor


Ferenc Gurmai, quien recibiría su implacable castigo la noche del 31 de julio de 2004, en el Crazy-Eddy de la ciudad de Silz, donde no alcanzaría a sostenerse en pie en el primer asalto.

El periplo europeo de Mayo consigna las caídas por el título intercontinental welter de la Wbo frente al invicto esloveno Jan Zaveck (Alemania, 2006), por el título welter de la ibC ante el polaco Rafal Jackiewicz (Polonia, 2006) y por el título mediano de la Wbo Asian Pacific ante el uzbekistaní Kuvanych Toygonbayev (Rusia, 2006).

Mayo se alejaría de los cuadriláteros a los 36 años y con 54 combates profesionales en el cuerpo. Tuvo 41 triunfos (25 por K.o.) y 13 caídas (6 por K.o.) ¿Qué le faltó? “Me faltó un título más grande, pero esos son los destinos de la vida y el mío fue bueno en el boxeo. Esta disciplina me abrió muchas puertas y me ha dado todo lo que tengo. Siempre fui al frente, tanto en la vida como en el deporte”. Palabras de un guerrero, un guerrero del deporte.

23 de mayo de 2012


Con gusto a caipirinha

La “Roja” se encaramó en la cima del continente y ahora soñamos con la segunda cita planetaria consecutiva, una gracia que ya hicimos

en Chile ’62 e Inglaterra ’66, aunque esa vez sólo se clasificó al torneo europeo, ya que en el certamen local participamos como organizadores.

Con cuatro cupos y medio y sin Brasil en el camino, ¿cómo no vamos a ir al Mundial?

Las metas son posibles de alcanzar cuando hay con qué y Chile hoy cuenta con una de sus hornadas más estelares. Es tal la bonanza del balompié criollo, que no se resiente la falta de jugadores del nivel de Mauricio Pinilla, Fabián Orellana, Carlos Villanueva, Felipe Seymour, David Pizarro, Marco Estrada, Gustavo Canales, Esteban Paredes y Jhonny Herrera.

Pero fíjese que siempre le buscamos la quinta pata al gato: que el Mundial del ’62 fue el peor de la historia, que la Sudamericana es más “penca” que la Libertadores, que la Chile 2011 le gana al Colo ’91 y ahora que el “Bichi” tiene mejores números que el “Loco”. ¡Pucha qué bueno sería que Borghi supere a Bielsa y que mañana Sampaoli o Pellegrini también mejoren lo del actual dt!, ¿no le parece?

En esta inédita coyuntura, la “U” campeona de la Sudamericana le ha dado una manito a la Selección, así como el ballet tiñó de azul a nuestra escuadra en la justa de 1962 y Colo-Colo ’73 fue la base en Alemania Federal 1974.

La pléyade universitaria cayó del cielo tras la marginación de Gonzalo Jara, Jean Beausejour, Carlos Carmona y Jorge Valdivia. El periplo por


Bolivia y Venezuela fue tan halagüeño que ya nadie echa de menos a los dicharacheros cracks. Súmele a ello la resurrección de “Matigol”, el bombástico retorno de Arturo Vidal, los goles de Charles Aránguiz y el cerrojo que Claudio Bravo le puso a su puerta.

Pese a que algunos insisten en celebrar por anticipado, a Chile aún le faltarían 12 puntos para clasificar a Brasil. Pero con seis partidos por jugar de local (ante Colombia, Argentina, Uruguay, Bolivia, Venezuela y Ecuador) pareciera que ya podemos tomarle el gustito a la caipirinha y admirar la belleza de las garotas en vivo y en directo.

15 de junio de 2012


Universidad de Chile: “Con hambre de león”

¡La “U” lo hizo de nuevo! “Tremenda novedad”, me dirá usted. Es cierto, lo de Sampaoli parece que ya no asombra. Ha obtenido

tres títulos locales y una estrella internacional en apenas un año y medio. Y los números son elocuentes: de 101 partidos ganó 66, igualó 22 y perdió 13.

Pese a su diminuta fisonomía, al entrenador casildense no le quedó grande el poncho azul. Porfiado como él solo, machacó hasta que sus pupilos mecanizaron su croquis ofensivo. Así también, el estratego tuvo maña para tocar el alma y el amor propio del equipo cuando estuvo averiado. En la derrota convenció a los suyos y los sublevó con la mítica consigna “lo damos vuelta”. Así tumbó a la Católica en el Apertura 2011, a Deportivo Quito en la Libertadores de este año y a Colo-Colo en las semifinales del Apertura 2012. A su vez, O’Higgins, que se aniñó en la finalísima de dicho torneo, tampoco pudo ante tan admirable mística.

La segunda parte del año ya está en marcha y aguardará a los azules con doce partidos en los próximos cincuenta días. Pero lo que es el agua para el pescado, lo es la competencia para los guerreros de “don Sampa”. Ahora van por el tetracampeonato, la Copa Chile, la Suruga Bank, la Recopa, el bis en la Sudamericana y hasta la Copa Gato si es posible. Un fenómeno que nos trae reminiscencias de las rebeliones futbolísticas de otros foráneos.

Hoy son los Sampaoli y los Berizzo quienes nivelan nuestro balompié hacia arriba. Son de esos entrenadores que a los jugadores malos los ponen buenos, de esos que nos hacen enamorarnos profundamente


del fútbol de ataque y de esos que tienen los lápices adecuados para reescribir nuestra escuálida historia deportiva.

Por algo el ensayista griego Plutarco decía que un ejército de ciervos dirigido por un león es mucho más temible que un ejército de leones dirigido por un ciervo.

9 de julio de 2012


En pedir no hay engaño

Un hombre carga un propulsor en su espalda y se deja caer en medio del Memorial Coliseum de Los Angeles en 1984. La secuencia me

deja impertérrito a mis 7 años. Así también quedé cuando Ben Johnson dio doping positivo en Seúl ’88. ¿Se acuerda que en esa misma cita un hombre de apellido raro se trajo una medalla a Chile? Sí, el aludido es el tirador al vuelo Alfonso de Iruarrizaga, quien rompió 32 años sin preseas para el deporte criollo.

Al “Chino” Ríos no le venían con cuestiones y en Sydney 2000 no quiso portar el emblema patrio. Pese a la controversia, la “Roja” olímpica alzó un bronce gracias a las gambetas de David Pizarro y los goles de “Choro” Navia y del “Bam-Bam” Zamorano. Memorable fue la boleta que le propinamos a una España que alineó a unos tales Xavi, Puyol, Albelda, Capdevila y Tamudo.

¡Fernando González y Nicolás Massú se las mandaron en Atenas 2004! Incluso, en su última edición, la prestigiosa revista Time eligió al “Vampiro” como un ícono de Chile. Pero no es todo, ya que por estos días una estación del metro de Londres lleva el nombre del “Nico”, mientras acá lo queremos mandar a los cuarteles de invierno.

En esa justa de Atenas González quedó picado tras su intempestiva lesión y eliminación en semifinales. Es por eso que en Beijing 2008 no tuvo clemencia a la hora de “agarrar a palos” al chino Peng, al croata Cilic, al francés Henri-Mathieu y al norteamericano James Blake. Sólo el inefable Rafael Nadal le amagaría la consecución de la máxima presea. En todo caso, con la plata adosada al pecho, el oriundo de La Reina se convirtió en el único deportista criollo que posee la tripleta metálica.


Pero ¿qué pasará si Tomás González, Kristel Köbrich, Denisse van Lamoen y Bárbara Riveros no se suben al podio en Londres 2012? Absolutamente nada. Cuando se proviene de un país que no prioriza el deporte, es una gracia ser favorito en cualquier disciplina. Algo radicalmente distinto a lo que sucede en los países deportivos, a cuyos representantes es imposible verlos pidiéndoles unas moneditas al Estado o a algún millonario de buen corazón. Tampoco se autoexilian por falta de infraestructura ni menos entrenan con estufas en invierno.

En consecuencia, ¿con qué cara podríamos exigir medallas si sólo nos acordamos cada cuatro años de que existen otros deportes aparte del fútbol?

26 de julio de 2012


Por las nubes

Está bien que estemos al tope de las clasificatorias, que la “U” exhiba un segundo puesto en el ranking mundial de clubes y que Alexis,

Vidal y Ángelo Henríquez estén en boca del primer mundo futbolístico. Pero está mal que la Anfp “se vaya al chancho” con los precios de las entradas para el partido entre Chile y Colombia.

¡Para qué estamos con cosas! La “Roja” de todos es el negocio de unos pocos y a esos no los conmueve el arraigo ni el sentimiento por la camiseta.

Por las trece luquitas de la galería, los capitalistas del fútbol podrían ofrecer un 2x1 o un ave mayo, y por el ticket de $165 mil, por lo menos un whiskycito, ¿no le parece?

Dicen que es la ley de la oferta y la demanda, pero si es así, el mercado continental es el que debería regir las tarifas. En Argentina, por ejemplo, una galería para el próximo confronte clasificatorio ante los paraguayos cuesta $80 transandinos, unos $8.410 chilenos. En Uruguay, la entrada más común para mirar el pleito con Ecuador vale 150 pesos locales, lo que se traduce a $3.444 chilenos. ¡Y eso que Uruguay es el actual campeón de América y el cuarto del mundo!

Supongamos que como somos los “jaguares de Sudamérica”, tenemos que estar a la altura de las tasas europeas. Pero aun así, fíjese que el boleto más oneroso para ver el cotejo entre Inglaterra y Ucrania, también por eliminatorias, es de $49.300 y el más accesible es de $8.800, en plata chilena. Los mismos holandeses, vigentes subcampeones del mundo,


ofrecen su aposentaduría más cara para el duelo con Turquía en $38.800 y la más barata en $14.900 chilenos.

Si les ganamos a los colombianos apriete su cinturón, porque los boletos para los cruces de local con Argentina en octubre y con Uruguay en marzo de 2013 prometen irse a las nubes. Aunque tal vez ni las nubes detienen este abuso.



¿Cómo no vamos a ir al Mundial?

Si no es un desayuno es un bautizo; y si no es una salida a una discoteca es una salida de madre. A la “Roja” no le faltan los entuertos en la

previa de cada fecha clasificatoria.

Son cuatro fechas de castigo por unas puteadas, que al parecer el “Bichi” nunca dijo. Entonces, a reclamarle a la fifA y a dirigir como se pueda ante la voraz amenaza de ecuatorianos, argentinos y uruguayos.

Tras la estrepitosa caída ante Colombia, Chile necesita sumar en esta doble pasada. Una misión algo compleja porque los puntos en la altura de Quito y frente a Argentina nunca se contemplan como ganados. La historia también nos recuerda que la Selección no sabe de victorias en el Guayas y que a los trasandinos se les ganó sólo una vez de manera oficial, por obra y gracia de Marcelo Bielsa.

Las clasificatorias son una especie de montaña rusa. Ayer estábamos primeros, hoy estamos quintos y mañana no sabemos. Lo cierto es que Chile se encuentra en zona de repechaje y por ahora depende de sí mismo para alcanzar un cupo mundialista. Al combinado nacional no le queda margen para ceder puntos de local y en su condición de forastero debe arrebatar al menos tres unidades en sus próximas expediciones. Las salidas más complicadas son a Ecuador y Colombia. En cambio, a Paraguay y Perú se les debería ganar por jerarquía o a lo menos empatar.

Es que con cuatro cupos y medio y sin Brasil en el camino, ¿cómo no vamos a ir al Mundial? Con una de las mejores generaciones de futbolistas y con figuras que triunfan en el Barcelona, en la Juventus y en otros clubes importantes de Europa, ¿cómo no vamos a ir al Mundial?


Con los estadios llenos y con una hinchada tan incondicional ¿cómo no vamos a ir al Mundial? Si estuvimos en Brasil 1950 y tenemos ad portas un evento planetario en el continente después de 36 años, ¿cómo no vamos a ir al Mundial? Si ahorramos unas luquitas y le pedimos permiso al jefe en la pega, ¿cómo no vamos a ir al Mundial?

Dígame, ¿cómo no vamos a ir al Mundial?



El largo y tortuoso camino a Brasil 2014

Cuando ya tenía un pie y medio en la repitencia, les prometí a mis padres las mejores calificaciones del año. Igualmente, con tres

derrotas al hilo y con casi los dos pies afuera del Mundial, la “Roja” promete recuperar el buen juego y un futuro esplendor para Claudio Borghi.

Es cierto que se corrió, se guapeó y se jugó bonito ante Argentina ¡pero se perdió! La Selección sacó aplausos, ¡claro! ¿Pero los colores patrios acaso no suponen matarse en la cancha? También es cierto que los metimos en su propio arco y les jugamos de igual a igual ¿Pero los partidos acaso no se ganan con goles?

Lamentablemente, al “Bichi” se le está acabando el saldo en la Selección. La falta de liderazgo, la tozudez táctica, la tirantez con la prensa, el fracaso en la Copa América y los consecutivos tropiezos en las clasificatorias ya le comienzan a pasar a la cuenta.

Por ahora, el oriundo de Castelar no dimitirá de su cargo y la Anfp respaldará su gestión hasta nuevo aviso. El receso hasta marzo de 2013 comprendería un segundo aire y una enmienda a todos los yerros de la primera rueda. No hay tiempo para lamentos de cara a la fecha doble que enfrentará a Chile con Perú en Lima y con Uruguay en Santiago. Acuérdese que los del Rímac se juegan la vida en cada clásico del Pacífico y a los charrúas –tal como la publicidad– “hay que matarlos bien muertos”.

En la segunda vuelta de las clasificatorias, la “Roja” tendrá que salir a buscar todos los partidos para lograr su peak de rendimiento.


Allí deberán aparecer los Alexis Sánchez, los Gary Medel, los Matías Fernández y los Arturo Vidal.

Debido a la abismante falta de gol, el estratego nacional tendrá que dejar los afectos a un lado para darles oportunidades a los goleadores Ángelo Henríquez, Esteban Paredes y Carlos Muñoz. Borghi también tendrá que flexibilizar su croquis táctico y su inamovible línea de tres, ya que las vergonzosas caídas como forastero dejaron un saldo de 18 goles en contra.

Los problemas son oportunidades y vaya qué oportunidad tiene la Selección para inscribirse en la historia y clasificar a un Mundial por segunda vez consecutiva.

En una de sus canciones, Serrat dice que son bienaventurados los que alcanzarán la cima porque el camino será cuesta abajo. Esperemos que esta cuesta no se incline más abajo del puesto de repechaje y que el camino rumbo a Brasil 2014 no sea tan largo y tortuoso.



Sampaoli se tiñe de rojo

El profesor era buena onda y por eso los alumnos se le subían al piano. En el año y ocho meses que el docente estuvo a cargo, el

curso bajó ostensiblemente su rendimiento y la disciplina se fue a las pailas. Fue tanto el despelote, que el directorio del establecimiento lo destituyó antes del término del año escolar. Ahora dicen que lo sucederá un profesor universitario con mucho carácter, al que no le tiembla la mano con los niños-problema.

A veces el parecido con la realidad no es mera coincidencia. ¿Usted qué piensa? Es que tras la abrupta salida de Claudio Borghi, la banca nacional necesita un técnico que mantenga con mano firme el timón. En este convulsionado escenario, a Jorge Sampaoli pareciera calzarle a la medida el buzo de la “Roja”. El oriundo de Casilda amalgama la erudición futbolística con un manejo de conflictos a prueba de todo. Acuérdese que en Universidad de Chile lo sufrieron algunos pesos pesados, como Diego Rivarola y Gustavo Canales.

“Don Sampa” no se complica a la hora de marginar a los elementos que acusan bajo rendimiento, indisciplina o desobediencia táctica. Con el trasandino a la cabeza, los problemas de conducta no deberían ser un tema en el oneroso camarín nacional. Al contrario, Chile necesita urgente esa dosis de amateurismo y de amor a la camiseta que Sampaoli pregona en sus equipos.

¿Y Gerardo Martino? Bueno, hace rato que andamos en busca de la fotocopia de Marcelo Bielsa y aquí parece que la encontramos. Es rosarino, dirige a Newell’s y juega a la usanza del “Loco”. Con Paraguay llegó a los cuartos de final del Mundial de Sudáfrica y a la final de la


última Copa América. Pero ¿cuánto sabe del fútbol chileno? ¿Estará al tanto de las juergas de la Selección?

¿Y don Manuel? Pellegrini tiene merecimientos de sobra, sin embargo su deseo es terminar su periplo en el viejo continente y luego conducir a Chile. Además, con el Málaga como vedette en Europa y con la Selección en turbulencias, las posibilidades son casi nulas.

Por estos días también saltó a la palestra el nombre del laureado Guardiola. “Pep” goza de un año sabático y en su horizonte no se ve muy cercana la posibilidad de comandar al representativo nacional. ¿Otros nombres que suenan? Rijkaard, Gullit, Carpegiani, Simeone...

En resumen, Sampaoli corre con ventaja y flirtea con la Anfp hace un buen rato. Por eso, el arribo del casildense a Juan Pinto Durán podría concretarse en cualquier momento. Y méritos tiene de sobra.



Las finales hay que ganarlas

Doce pasos hay entre el cielo y el infierno. Omar Merlo yace en el pasto y el grito se libera después de 38 años. Huachipato le arrebata

la corona de la cabeza a Unión Española, igual como lo hizo Everton frente a Colo-Colo en el Apertura 2008 y la “U” ante Universidad Católica en el Apertura 2011.

Nadie daba un peso por los siderúrgicos y la revancha parecía un mero trámite. Además, el gol en contra antes de la media hora suponía un desenlace irreversible. Sin embargo, los de la octava región endurecieron la piel y demostraron de qué están hechos. ¿Y a Unión Española nadie le avisó que la final era de ida y vuelta? ¿Adónde quedó la aplanadora que mandó para la casa a azules y albos?

Por eso, el triunfo de los acereros es también el triunfo del “nada es imposible” y del “sí se puede”. Es la victoria del humilde, de ese que de vez en cuando también tiene derecho a sonreír.

Huachipato acabó con la hegemonía de los clubes grandes de Santiago. Acuérdese que entre el Clausura 2008 y el Apertura 2012, Universidad de Chile, Colo-Colo y Universidad Católica se repartieron los trofeos.

Jorge Pellicer también le puso fin a la supremacía de los entrenadores extranjeros. Curiosamente, el ex estratego cruzado había sido el último técnico criollo en alzar la copa en 2005. El destacado palmarés de Pellicer se completa con el Clausura 2007 con Unión Atlético Maracaibo de Venezuela y con la Copa Chile 2009 con Universidad de Concepción.


Es cierto que los sureños no son ninguna maravilla a ras de césped, tal vez su alineación no se recitará de memoria en 20 años más y su camiseta quizás no será la más vendida en esta Navidad, pero las finales hay que ganarlas y Huachipato se la arrebató no más a Unión Española.



Con las uñas carcomidas y los nervios de punta

Una clasificación chilena a un Mundial no se concibe sin las uñas carcomidas y los nervios de punta. El rasguñado cuarto lugar en

el Sudamericano Juvenil pareciera apenas un premio de consuelo para un combinado que exhibió el fútbol más alegre y subversivo del torneo.

Tras la intempestiva salida de Fernando Carvallo, un novel Mario Salas se atrevía a tomar el fierro caliente, aceptando el desafío que la Anfp le trazaba: conseguir pasajes para la cita planetaria de Turquía. El ex dt de Barnechea modificó a contrarreloj algunos paradigmas futbolísticos y les trasuntó a sus pupilos un espíritu combativo que se inspira en sus ideales revolucionarios. De hecho, es un declarado admirador del Che Guevara.

Dígame si los discípulos de Salas no se tomaron a pecho el discurso del Che Guevara en la primera fase del torneo. ¡Hasta la victoria, siempre!, parecía ser la consigna y, con esa motivación, Chile terminó primero del grupo, invicto y como serio candidato al título. Con tantas loas y aplausos ni nos acordamos que el traje de favorito nunca nos ha calzado.

Pese a acceder bien aspectada al hexagonal, la “Roja” clasificó al Mundial pidiendo la hora y con angustia. ¿En qué momento el futbolista chileno se desvanece mentalmente y se despista de su curva de rendimiento? Si nos sacan a Brasil y Argentina de carrera, ¿cuáles son las excusas para no ser campeón? ¿Por qué tantas expulsiones? ¿Falta trabajo en el aspecto mental y disciplinario? ¿Por qué seguimos dando ventajas en este ítem si ya conocemos nuestras debilidades?


Ojalá que esta fructífera generación no se conforme con ir al Mundial Juvenil, con asistir a La Moneda o con ser jurado del Festival de Viña.

Si bien los Melo, los Huerta, los Lichnovsky, los Cuevas y los Rabello tienen embelesada a la afición, primero deben adquirir mayor regularidad en sus clubes para no quedar en el camino como tantas promesas de antaño. Y así, el día de mañana clasificaremos a un Mundial sin las uñas carcomidas y los nervios de punta.

5 de febrero de 2013


La pesadilla de Alexis

El orbe futbolístico se pregunta, ¿qué le pasa a Alexis?, ¿qué fue del “Niño Maravilla”? ¡Sí! El mismo jugador pícaro que hasta hace muy

poco sacaba aplausos con sus piruetas en el Camp Nou, hoy es blanco de pifias y de burlas blaugranas. Pareciera que la chispa y la alegría las extravió en medio de la subordinación a un esquema táctico de alta precisión y de las restricciones a sus instintivos desplazamientos. Nunca fue fácil jugar en el mejor equipo del mundo y menos con el número “9” en la espalda. Que lo digan Zlatan Ibrahimovic y Bojan Krki , quienes hacen parte de la mítica maldición de la camiseta “9” del Barcelona.

Cuando Guardiola y Vilanova seguían con exhaustivo sigilo cada paso del crack en Udinese, ya sabían de sus problemas de finiquito y para ambos sus cualidades eran ideales para complementar el ataque por las bandas y potenciar el juego colectivo del equipo. No contrataron a un goleador excluyente o al próximo Pichichi de la liga española. En el reino de Messi, esto podría ser algo subversivo.

Lamentablemente, en la última temporada el tocopillano se desdibujó en el frente de ataque y se divorció totalmente de las redes. Lo preocupante es que esta sequía se extiende en la Selección, donde marcó por última vez en la Copa América de 2011.

Su empatía y su capacidad física lo mantienen con vida en el cuadro catalán. ¿Pero cuánto tiempo le alcanzará con ese saldo? Algunos especialistas le aconsejan tomar un descanso y tranquilizarse, mientras otros derechamente piden con urgencia a su reemplazante. Se habla del arribo de Neymar y de su posible traspaso a la Juventus, donde podría engrosar la “armada chilena” junto a Mauricio Isla y Arturo Vidal.


El ex delantero de Cobreloa pareciera tener un pie afuera del Barca, aunque el fútbol es tan impredecible como la vida. Depende de Alexis que la pesadilla se acabe de una vez por todas.



El sueño de la “Crespa”

“A los deportistas se nos apoya cuando estamos arriba. Ojalá que este triunfo sirva para que las autoridades y las empresas respalden este

tipo de logros”. La noche del 22 de febrero, la púgil chilena Carolina “Crespa” Rodríguez alzó la voz y también el cinturón que la validó como campeona latinoamericana de peso gallo de la Amb.

Ser deportista en Chile a veces pareciera ser una condena. Díganselo a la puentealtina, quien ha tenido que bregar mucho más afuera que adentro del ring. Qué difícil es competir y ganar cuando no hay una competencia local, cuando por ende no hay rivales y cuando escasean los auspiciadores.

Consciente de esta dura realidad, Rodríguez se las emplumó rumbo a Argentina en 2012. Allende los Andes peleó tres veces en un mes y medio –ganó los tres combates–, lo mismo que había peleado en Chile en sus casi tres años de profesional. En su periplo trasandino, la prensa especializada alabó su valentía, su velocidad y también su condición física.

Recordemos que la “Crespa” debutó en el profesionalismo recién con 26 años. Fue el 30 de abril de 2010, cuando venció por puntos a la argentina Natalia Burga. La criolla se había consagrado otrora como campeona sudamericana y panamericana de kick boxing.

La primera boxeadora profesional de Chile exhibe una carrera meteórica que no conoce de derrotas, con siete triunfos en siete combates. Su última victoria por el cetro latinoamericano, frente a la brasileña Daiane Ribeiro, es hasta ahora la más importante de su palmarés.


Fue una refriega compleja para Rodríguez, ya que su rival la complicó en algunos pasajes del confronte con su técnica, con su estrategia defensiva y con su peligroso contraataque. No obstante, la púgil del Team Pardo fue la que siempre salió a buscar la pelea, la que se impuso en cada round y la que arriesgó con éxito. En el final, el combate alcanzó ribetes épicos, con la chilena propinándole un duro castigo a su oponente.

La “Crespa” posee un boxeo agresivo, pero a su ataque no debe darle pausas, porque en ese lapso es cuando su rival de turno crece. Algunas intermitencias en esta fase le podrían costar caro en instancias decisivas y ante rivales más linajudas.

Con el triunfo sobre la brasileña, la “Crespa” quedará entre las diez primeras del planeta, y con ello, a un paso más para alcanzar el sueño más preciado: la corona mundial.



Chile sube en las Clasificatorias

Cuando Chile le ganó a Paraguay en las clasificatorias pasadas, el más contento era el “Pato” Yáñez. ¿Cómo no?, si los tantos de Matías

Fernández y Humberto Suazo venían a darle un respiro a su mítico gol en Asunción en 1981. Igualmente, se repitió durante una década y media el milimétrico pase de Víctor Hugo Castañeda y el posterior gol de cabeza de Marcelo Salas a Uruguay rumbo a Francia ’98. Hasta la semana pasada, aquel era el último triunfo criollo ante los charrúas por clasificatorias.

Por el peso histórico y por la bravura de Uruguay, las victorias sobre los charrúas suelen adquirir el carácter de memorables. Es que lo difícil obliga a más, a darlo todo. Los celestes juegan hasta los amistosos con el cuchillo entre los dientes y ganarles por una clasificación mundialista vale y cuesta el doble.

Tras la fortuita caída con Perú en Lima, Jorge Sampaoli comprendió que no por madrugar se amanece más temprano. Es decir, no por mucho atacar se ganan los partidos. Al equipo le faltó gol en su expedición limeña y el escenario se emborrascó más con Alexis Sánchez afuera por acumulación de tarjetas amarillas.

¿Y ahora quién podrá defendernos?, se preguntó el casildense. No lo pensó dos veces y convocó de urgencia a Esteban Paredes. Sí, al mismo jugador que se echó al hombro a un Colo-Colo en crisis y que, pese a ello, se tuvo que ir por la puerta chica desde Macul. Aquel que los anteriores estrategos de la “Roja” también desestimaron y que, sin embargo, se dio maña para servirle el gol a Mark González en Sudáfrica 2010 y anotar en la última Copa América. Ese que viene a la Selección


sin que le rueguen y ese que definitivamente se ganó un cupo en la oncena titular de Chile.

Caso contrario al de Paredes representa Gonzalo Jara, quien, pese a sus irregulares actuaciones, es habitual en las nóminas. El defensor siempre ha convivido entre la adhesión de los entrenadores y la reprobación de los hinchas. Empero, el zaguero tapó bocas con su gran despliegue y hasta se dio el lujo de anular a un titán de talla mundial, como el odioso Luis Suárez.

Tras el celebrado 2-0 a Uruguay, Chile nuevamente ingresa en zona de clasificación directa. Pero no hay que confiarse. Ya sabemos que las eliminatorias son una montaña rusa donde está prohibido pestañear. La derrota ante Perú no nos rotula como los peores y el triunfo sobre Uruguay tampoco como los mejores.

Para sacar tickets a Brasil 2014 hay que imponerse de local sobre los que históricamente hemos sido superiores (Bolivia, Venezuela y Ecuador) y hay que ir a arrebatarles unidades a los paraguayos heridos y a los colombianos cuasi clasificados.

Señoras y señores, en esta pasada la “Roja” tomó el ascensor que va subiendo.

2 de abril de 2013


El boxeo es una fiesta en el Club México

La noche es un témpano, pero el ímpetu de los púgiles amateurs incinera la galería del Club México. La actividad está alicaída,

pero en el recinto de la calle San Pablo los laureles del boxeo chileno se reverdecen cada treinta días. Acá no hay Estadio Seguro ni combates de “alto riesgo”, y la fuerza policial brilla por su ausencia. En las gradas hay pura buena onda y no se manifiesta atisbo alguno de violencia.

En cada velada, los “aztecas” hacen respetar su localía y casi siempre se llevan los aplausos y las victorias. Contrariamente a la realidad de la disciplina, en el Club México las cosas se hacen bien y producto de ese buen trabajo brillan las figuras de Óscar “La Máquina” Bravo, Miguel “Aguja” González, Líner “Pac-Man” Huamán y Luis “El Animal” Cerda. Todos ellos protagonistas, en los últimos años, del escuálido circuito pugilístico nacional.

El peruano-chileno Huamán brinda espectáculo y emoción en cada refriega, tal como aconteció en diciembre pasado, cuando derrotó con tintes épicos al dominicano Diego Pichardo. Es que al púgil la vida le enseñó a resistir sus embates y en el ring es donde menos se va a amilanar. Que lo diga el chilote Luis “Zorrito” Oyarzún, quien no pudo superarlo en el último combate.

Diciembre también marcó el retorno de Luis “El Animal” Cerda, el crédito del Club México, quien hoy hace sus primeras armas en la meca del boxeo mundial, ni más ni menos que en Las Vegas. El oriundo de Maipú debutó en el profesionalismo en 2011 y ese año alcanzó 6 triunfos en línea por K.o. Ese impresionante palmarés lo llevó al competitivo boxeo estadounidense en 2012.


En tanto, en su temporal regreso a casa enfrentó a los argentinos César David Inalef en diciembre y a Miguel Leonardo Cáceres en abril. El primero lo derrotó ajustadamente y con muchas dudas en las tarjetas, y con el segundo también cayó por los puntos, pero esta vez de manera inapelable.

Su largo periodo sin competición en suelo norteamericano le pasó la cuenta. Nunca fue lo mismo entrenar que competir. En ambas refriegas se le vio lento, sin la chispa y pegada habituales. Sin embargo, se trata de un púgil de 22 años con un futuro esplendoroso, aunque antes debe capitalizar sus talentos y las oportunidades que se le presenten.

Aquella noche otoñal el trasandino ganó bien, por lo que fue despedido con aplausos. Y a Cerda también lo ovacionaron, porque el respetable compendió que se entregó al máximo, pese a la superioridad de su oponente. Así se vive el boxeo en el Club México, como una verdadera fiesta.

3 de mayo de 2013


Al rojo vivo

Unión Española bajó del firmamento su séptima estrella y lo hizo por vez primera en su cancha. Los de Santa Laura vencieron al

malogrado Colo-Colo y también a los fantasmas que los perseguían desde la impensada derrota en la final del Clausura, en Talcahuano.

José Luis Sierra edificó esta obra. Entrenador novel que impuso su irrenunciable filosofía futbolística y sus convincentes lineamientos técnicos en un equipo que este año prácticamente fue desmantelado. Es así como el título de Unión es también el triunfo de las segundas oportunidades y de las revanchas personales. Tales son los casos de Gustavo Canales, Raúl Olivares, Diego Sánchez y Francisco Castro.

A su vez, Universidad Católica abrigó sus esperanzas de alzar la corona con la maciza presentación ante Universidad de Chile. Sin embargo, los pupilos de Martín Lasarte no pudieron golear al descendido San Marcos de Arica. Una lección de que con el entusiasmo a veces no basta.

Fíjese que nadie se acordó de los playoff, quizás porque este sistema de torneo igual brindó competitividad y emoción. Así también lo entendió la Anfp y ratificó los campeonatos largos de 17 fechas más la reedición de las extinguidas liguillas de Copa Libertadores.

Cobreloa, Universidad de Chile y O’Higgins también tuvieron roles protagónicos en este reparto. Los naranjas del irascible Marco Antonio Figueroa clasificaron a la Sudamericana, los azules decepcionaron con los experimentos y con las disfunciones tácticas de Darío Franco, y los celestes de Eduardo Berizzo otra vez engordaron para morir flacos.


Mención aparte para un Colo-Colo en permanente crisis, que rozó en este certamen la peor campaña de su historia. Con el arribo a la presidencia de Arturo Salah se espera que las aguas vuelvan a su cauce en Macul. Su primer golpe de timón es la contratación del entrenador paraguayo Gustavo Benítez, un viejo conocido de la tienda alba, al que se elige por su sapiencia y por su comprobado manejo de camarines.

En otro plano, después de ocho años de ausencia y fiel a su perfil bajo, David Pizarro se integró a las prácticas de la “Roja”. Jorge Sampaoli porfió y logró el milagro, precisamente cuando Chile va por trascendentales unidades ante Paraguay y Bolivia. En tanto, Alexis Sánchez, Arturo Vidal y Marcelo Díaz aterrizan en Juan Pinto Durán como flamantes campeones de sus respectivas ligas en Europa.

Por donde se lo mire, el fútbol chileno está al rojo vivo.

2 de junio de 2013


Vuelve para ir al Mundial

Chile consiguió canasta completa en esta doble fecha clasificatoria. Algo que no ocurría desde hace un año, cuando se le ganó por la

quinta y sexta fecha a bolivianos y venezolanos en sus propios domicilios. Sin embargo, después del triunfo a la “vinotinto”, la “Roja” nunca más volvió a abrazarse con Claudio Borghi en la banca. Consecutivas caídas ante Colombia, Ecuador y Argentina sentenciaron la continuidad del ex dt de Colo-Colo.

Con la eliminatoria cuesta arriba, un 3 de diciembre de 2012 Jorge Sampaoli asumía el desafío de reemplazar al “Bichi”. Convengamos que el casildense pavimentó su camino a Juan Pinto Durán gracias a la campaña histórica que consagró a Universidad de Chile como tricampeón chileno y monarca de la Copa Sudamericana 2011.

De esa mítica alineación, hoy son fijos en la “Roja” Marcos González, José “Pepe” Rojas, Eugenio Mena, Marcelo Díaz y Eduardo Vargas. A esa pléyade azul súmele el aporte de los ex albos Claudio Bravo, Gonzalo Jara, Arturo Vidal, Matías Fernández, Esteban Paredes y Alexis Sánchez.

Nuestros representativos mundialistas siempre se cimentaron en los grandes equipos locales: el ballet azul para el Mundial del ’62, Colo-Colo ’73 para la cita de Alemania ’74, la “U” ’96 para Francia ‘98 y Colo-Colo 2006 para Sudáfrica 2010.

Todas estas oncenas fueron lideradas por caudillos de la talla de Leonel Sánchez, Eladio Rojas, Elías Figueroa, Alberto Quintano, Marcelo Salas, Iván Zamorano y Claudio Bravo, entre otros. Ahora, Arturo Vidal es el llamado a guiar a Chile al Mundial. El volante de la Juventus dio en


el Defensores del Chaco una de las mejores exhibiciones futbolísticas de un criollo en pastos forasteros. Y en Santiago ante los bolivianos, el oriundo de San Joaquín se ungió entre las figuras del cotejo.

El retorno de David Pizarro es un acierto de Sampaoli, ¿qué duda cabe? El porteño esquivó a la Selección durante ocho años, hasta que el estratego trasandino lo convenció con su dogma futbolístico y con su estricto régimen disciplinario. Así, el hijo pródigo vuelve a casa con la humildad de siempre y con la calidad intacta. El “Fantasista” no regresa para ser niñera de jóvenes de 19 años, tampoco para patear un letrero e irse para siempre. Esta vez vuelve para ir al Mundial…

17 de junio de 2013


Esto es morir con las botas puestas

El llanto de nuestros novatos guerreros en Estambul se explica porque a las nuevas generaciones ya no les interesan los triunfos

morales. Ahora no vamos de paseo a los mundiales y por eso el dolor cala tan hondo en estos talentosos muchachos. Resulta que desde hace un tiempo no muy lejano nuestra mentalidad cambió y nuestro paladar futbolístico se agudizó.

En estas épocas de modernidad, democracia y globalización, ya no se concibe un fútbol insípido, lento y timorato. Mario Salas tampoco lo concibe. En consecuencia, el ex estratego de Barnechea ofrece un bosquejo táctico con múltiples variantes ofensivas, lo que se celebra, aunque es oportuno precisar que el esquema adolece de ciertos resguardos defensivos. Recordemos que en el debut mundialista solamente la impericia de los egipcios frente al pórtico nos libró de un prematuro bochorno. Una táctica así de rígida damnifica claramente el juego de conjunto. De hecho, en ese pleito se hacía evidente el desacomodo posicional de Cristián Cuevas y Ángelo Henríquez.

Como nunca ocurre en una Copa del Mundo, Chile clasificó a segunda fase con anticipación e iba por el primer lugar del grupo E frente a Irak. Pero inexplicablemente, ante los asiáticos Salas presentó un equipo con 6 jugadores de alternativa. El liderato se hipotecaba ante una escuadra veloz que aprovechó las licencias defensivas que le otorgó el rival. En efecto, Chile cayó 1-2 ante los iraquíes, acabó segundo en su grupo y tuvo que dejar la ciudad de Antalya. Croacia lo esperaba en Bursa y había poquita fe.


En octavos de final apareció el elenco subversivo e irreverente que deslumbró en Mendoza y que al parecer se había quedado atascado en la aduana del Paso los Libertadores. El elenco criollo resolvió en los últimos nueve minutos un encuentro cerrado y de carácter reservado. Darío Melo, Nicolás Castillo y Christian Bravo se ungieron como luminarias del triunfo por 2-0 ante los europeos. Chile ya estaba entre los ocho mejores del mundo.

En cuartos de final, Mario Salas no iba a revocar sus convicciones tácticas. El duelo con Ghana se preveía de gran desgaste físico y de ida y vuelta. El primer combo lo pegó el rival con tanto de Moses Odjer, pero Chile respondió fuerte y golpeó dos veces con anotaciones de Nicolás Castillo y Ángelo Henríquez. Todo esto en la primera etapa. En el complemento Chile buscó asegurar, pero el portero Antwi ahogó sucesivamente el grito de gol.

Los africanos no cesaban en ofensiva con sus intentos por las bandas y con sus potentes tiros de distancia. El empate era inminente y llegó a ocho minutos del término en los pies de Ebenezer Assifuah. En consecuencia, el lance debía dirimirse en el alargue.

El gol del exhausto Ángelo Henríquez a los 8 minutos del suplementario abrigó las esperanzas de abrazar las semifinales. No obstante, también era la señal de que ya no había piernas ni corazón para aguantar los 22 minutos que restaban.

Ghana volvió a reaccionar y Seidu Salifu puso el 3-3 que cambió de forma agónica el encuentro. Pero faltaba el puñal de Assifuah, mediante cabezazo, en el postrero minuto 120. Gol que increíblemente contó con la complicidad de Huerta, Henríquez y Melo. La pelota volvió al centro y la ilusión duró apenas 50 segundos.


Se llegó a cuartos de final de un Mundial y Chile cayó en la lucha, como le gusta a Salas. A todas luces, un resultado positivo para el balompié criollo. Pero el hambre de gloria, expresado en el llanto de los jóvenes chilenos, puede ser el aviso de jornadas aún más auspiciosas para un fútbol que está en alza murio con las botas puestas.

12 de julio de 2013


Cristián Valenzuela, un campeón de la vida

¡Por Dios qué merecido el Premio Nacional del Deporte para el atleta paralímpico Cristián Valenzuela! Todavía recuerdo su visita

a los estudios de la Radio Santiago Bueras de Maipú, detrás del Templo Votivo y con más de 30 grados de calor. Un campeón de verdad, sin poses ni divismos baratos. Un ser humano de excepción. Un hombre de fe inconmensurable.

Con un bicampeonato del mundo y un oro olímpico, Valenzuela ya se inscribió en la historia grande del deporte chileno, al lado de Marcelo Ríos, Nicolás Massú, Fernando González y Don Elías Figueroa.

El oriundo de Conchalí es un ejemplo de resiliencia en un país donde ser deportista pareciera ser una condena más que una profesión. Asimismo, su historia personal nos invita a mirar las contrariedades de la vida como una forma de superarnos e ir más allá, incluso donde nosotros mismos creemos que podemos llegar.

A los doce años perdió la vista producto de un glaucoma, así también las ganas de vivir y de relacionarse con el mundo. Pero con el apoyo de amigos incondicionales, unos años más tarde abandonó su autorreclusión y abrazó la poesía y el deporte como vías de escape a un destino adverso.

El incentivo de su amigo Erwin Jiménez fue vital para sus inicios en el deporte. Lo introdujo en la práctica del goalball, una disciplina paralímpica creada para personas no videntes o con alguna deficiencia visual.


A partir de ese momento, Valenzuela se interesó en todas las actividades deportivas para ciegos. Su vida había dado un vuelco total. Es así como en unas pruebas atléticas, en el Estadio Nacional, deslumbró con su velocidad a los entrenadores y pronto comenzaron sus primeras competiciones internacionales y también sus primeros logros.

En los Juegos Parapanamericanos de Río de Janeiro 2007 corrió los 1.500 metros y acabó cuarto. Su estreno en unos Juegos Paralímpicos se produjo en la cita de Pekín 2008, donde compitió en los 1.500 metros en la categoría T-11 (ceguera total), en la cual obtuvo un tiempo de 4:27.94, rompiendo su anterior récord nacional de 4:35.54.

En 2011, en el Mundial de Atletismo Paralímpico de Christchurch, en Nueva Zelanda, consiguió oro en maratón. En tanto, en los Juegos Paralímpicos de Londres 2012, en la prueba de 5.000 metros obtuvo la medalla de oro con un tiempo de 15:26.26. Esta fue la primera vez que Chile ganó una presea tras 20 años de su debut en los Juegos Paralímpicos de Barcelona 1992. Ya en julio de este año, el chileno participó en el Mundial de Atletismo Paralímpico celebrado en Lyon, Francia, donde logró medalla de oro en la maratón y plata en los 5.000 metros y 1.500 metros.

Todos estos resultados lo han catapultado merecidamente a la cúspide del deporte chileno, por lo que ha recibido variadas distinciones. Pero de todas sus proezas, la más significativa es haberle ganado al destino y a la vida.



¡Gracias, Nico Massú!

Hace poco veía cómo, en una cancha argentina de quinta división, sacaban en andas a Diego Armando Maradona. También

recuerdo mi asombro tras visitar las estatuas del “10” en el Museo de Boca Juniors y la de Luis Ángel Firpo, “El toro salvaje de las Pampas”, en el Cementerio de la Recoleta en Buenos Aires. En síntesis, resulta admirable lo del pueblo trasandino con sus ídolos, pese a las mil y una embarradas que se ha mandado el “Pibe de Oro”.

Es por eso que en la hora del inminente retiro de Nicolás Massú, es imposible no acordarse de aquellos que pedían a gritos su jubilación del deporte blanco. Lamentablemente el viñamarino nació en un país que desconoce más de lo que reconoce y que crucifica más de lo que felicita.

Por su contribución al país, el “Vampiro” tiene el derecho de irse cuando quiera. Su espacio entre los grandes del deporte chileno se lo ganó legítimamente.

Asimismo, a Marcelo Ríos rara vez lo recordamos por sus episodios deportivos. Pero debido a sus recientes problemas de salud, volvieron a mostrar en los noticiarios sus exquisiteces en las canchas. Curiosamente a nadie se le ha ocurrido bautizar al court central del Estadio Nacional con su nombre. Y para qué vamos a pedir erigirle un monumento, eso definitivamente no está en nuestro Adn.

Los reconocimientos a veces vienen de afuera. La Atp celebró los 40 años de la creación del ranking mundial y el top one fue protagonista de la gala en Nueva York, donde desfilaron leyendas de la talla de Ivan Lendl, Rafael Nadal, Novak Djokovic y John McEnroe, entre otros. ¡Sí,


un chileno en la elite del tenis mundial! Si hasta el mismísimo Roger Federer subió una foto a su twitter al lado del “Chino”.

¿Se acuerda que durante los Juegos Olímpicos de Londres 2012 las estaciones del metro Oval y London Bridge se llamaron Nicolás Massú y Fernando González, respectivamente? ¿Y sabía que Elías Figueroa fue nombrado embajador de Porto Alegre –el único extranjero– para el Mundial de 2014? Es cierto, el estadio de Playa Ancha lleva el nombre del ex zaguero central, pero todavía falta el gran reconocimiento del país para quien es considerado uno de los mejores defensas de todos los tiempos.

En estos días que Massú ha desmentido el retiro, no nos olvidemos nunca que gracias al Nico la bandera chilena flameó en lo más alto. Que nunca se nos olvide que gracias al Nico y al Feña fuimos campeones olímpicos.



La hora de la “Crespa” Rodríguez

Carolina “Crespa” Rodríguez soñó muchas veces este momento, sin embargo, se le ve tranquila en la víspera de la disputa del cinturón

planetario de la WibA, en peso gallo. Debe ser porque la vida le enseñó que los rivales más enconados y los golpes más duros no están arriba de un ring.

Si en Chile es difícil hacer carrera en el deporte, imagínese lo que significa ser pugilista femenina. La puentealtina, en sus tres años de boxeo, ha pasado por todas. Un 9 de abril de 2010 debía debutar con Gabriela “Pulga” Aranda, pero la trasandina no se presentó a la velada que se montó en el Club México. Por eso, su estreno se pospuso veintiún días, cuando venció a la argentina Natalia Burga.

En las siguientes refriegas, su manejador y entrenador Claudio Pardo tuvo que gastar lo que no tenía para traerle rivales y para que su pupila siguiera peleando en nuestro país. Todo se hacía cuesta arriba sin una competencia local, por ende sin rivales y sin auspiciadores. En medio de este inhóspito panorama, el Team Pardo decidió ir a probar suerte a Argentina en 2012.

En el otro lado de la cordillera, la “Crespa” simplemente deslumbró. Peleó tres veces en un mes y medio –lo mismo que había peleado en Chile en sus casi tres años de “profesional”– y ganó los tres combates. La prensa trasandina elogió su técnica, su velocidad y sus ágiles desplazamientos.

El regreso a Chile, a fines de 2012, también fue la vuelta a la triste realidad. Por motivos extradeportivos, Rodríguez no pudo dedicarle tiempo completo a su trabajo técnico. Con escaso apoyo, comenzaría a


autogestionar la disputa del título latinoamericano de la Amb. También organizó rifas y fiestas que servirían para paliar los costos del evento. ¿Usted se imaginaría a Roger Federer o a Usain Bolt haciendo completadas o kermeses para poder realizar sus partidos o competiciones?

Finalmente el título quedó en casa, pero la púgil no quedó conforme con su cometido.

El 26 de julio último, la chilena se trajo otra victoria desde Argentina, derrotando por los puntos a la anfitriona Florencia Canteros. En consecuencia, mantuvo su invicto en Argentina de cuatro combates y general de ocho. Con ese palmarés llegará a Constitución para medirse con la venezolana Ana Lozano.

Carolina Rodríguez Solorza va por un cetro que se merece como nadie y que ha perseguido con tozudez, esfuerzo y convicción.

Señoras y señores, es la hora de la “Crespa”.

30 de septiembre de 2013

Nota: Carolina “Crespa” Rodríguez se coronó campeona mundial de la categoría gallo de la Wiba.

Triunfó por los puntos a 10 rounds y por decisión unánime del jurado.


Más temprano que tarde

La “Roja” de Jorge Sampaoli está a un suspiro del Mundial de Brasil. Méritos totales para un estratego que enmendó un proceso

clasificatorio convulsionado.

El oriundo de Casilda no concibe el fútbol sin sus experiencias de vida y por eso a sus equipos les impregna altas dosis de sacrificio, perseverancia, compromiso y concentración. Para el trasandino, lo imposible no existe, sólo cuesta un poco más de trabajo. Cuando a Sampaoli se le cierra una puerta, abre una ventana, y si le cierran la ventana, bota la muralla. Así siente su profesión y los resultados están a la vista.

Desde sus comienzos demostró esta característica, ya que tras prohibírsele el ingreso a una cancha, no halló nada mejor que dirigir al Club Atlético Belgrano de Arequito desde arriba de un árbol. Asimismo, sus esfuerzos fueron incesantes para que David Pizarro retornara a la escuadra nacional.

El adiestrador consigue todo lo que se propone y no se amilana ante las adversidades. Así se echó al bolsillo al pueblo azul cuando los resultados no se le daban y así también ordenó el camarín de Chile que estaba “patas para arriba” y con un equipo casi afuera del Mundial.

El argentino armó la Selección con la columna vertebral de la Universidad de Chile con la que alzó la Copa Sudamericana en 2011: Marco González, Eugenio Mena, Marcelo Díaz, Charles Aránguiz y Eduardo Vargas.


Esa pléyade universitaria la amalgamó con los cracks nacionales que triunfan en los mejores clubes del mundo y que componían el Colo-Colo de Borghi (Dt): Claudio Bravo, Arturo Vidal, Matías Fernández, Jorge Valdivia y Alexis Sánchez.

A ellos les sumó dos ilustres como Gary Medel y Mauricio Isla, quienes explotaron en el Mundial Juvenil de Canadá 2007 y hoy son imprescindibles en la oncena chilena.

Con el “zurdo” en la dirección técnica, el elenco de todos exhibe un rendimiento superlativo, ya que en 11 partidos consiguió 8 triunfos, 2 empates y apenas una derrota.

De cara a las dos últimas fechas, Chile está tercero con 24 unidades y en zona de clasificación directa con dos puntos más que sus perseguidores más cercanos, Ecuador y Uruguay, quienes se enfrentarán entre sí en la próxima jornada.

Como pocas veces, la “Roja” depende de sí misma y ya no necesitará de la calculadora si le gana a Colombia en Barranquilla o a Ecuador en Santiago. Y si llegara a caer en tierras cafetaleras, sólo le bastará un empate de local ante los del Guayas para clasificar. Esto siempre y cuando los ecuatorianos resignen puntos en Quito ante los charrúas.

Además de encaminar a Chile al Mundial, Sampaoli le faltó el respeto al campeón del mundo España, la cual rescató un postrero empate a dos en un amistoso jugado en Ginebra, Suiza.

Con Sampaoli en la conducción se acrecientan las ilusiones de hacer un gran papel en Brasil 2014. Al menos, ya nos ha regalado el derecho a soñar despiertos.

11 de septiembre de 2013


Por el honor de su historia

Qué triste es ver a Colo-Colo en estado de enfermo crítico. Al elenco popular se le extravió el fútbol y lo peor de todo: el alma.

Poco y nada queda de ese equipo fuerte y grande, de sangre altiva y de noble corazón.

Cada domingo, once fantasmas corren con el indio en el pecho que más parece una cruz en la espalda. Se habla de un equipo que está bajo presión y con averías sicológicas, pero ¿usted estaría deprimido en un trabajo que le gusta hacer, en el que recibe millonarias remuneraciones y en el que no lo despiden por mal rendimiento?

Es cierto que las malas decisiones de sus administradores han repercutido directamente en la cancha, pero ceñirse la camiseta blanca siempre supuso empuje y coraje.

El Estadio Monumental pasó de ser un reducto inexpugnable a una cancha donde los rivales se pasean como Pedro por su casa. Para muestra un botón: en las últimas tres temporadas, el Cacique ha perdido casi el 30 por ciento de sus duelos como anfitrión.

Las estadísticas en este torneo también son lapidarias, ya que Colo-Colo ha disputado cuatro encuentros en casa, registrando tres derrotas (con Everton, Unión Española y Palestino) y tan sólo una victoria (a Iquique). Así completó tres caídas en línea en el David Arellano (ante Unión, Pasto por la Sudamericana y Palestino), igualando su peor registro histórico de 2012, cuando fue doblegado por Universidad de Concepción, La Serena y el propio cuadro árabe.


El hincha ya no resiste más y con justa razón pide la cabeza de Gustavo Benítez, quien lleva cinco fechas sin ganar y tiene a Colo-Colo en la antepenúltima posición del Torneo de Apertura. Al igual que Cagna, Gallego, Basay y Labruna, el paraguayo tampoco resultó ser la solución al morrocotudo descalabro que arrastra la institución alba. En medio de esta crisis, Arturo Salah respalda a Benítez en el cargo, pues lo contrario sería poner en cuestión su propia gestión.

A estas alturas es difícil pensar en una remontada de la mano del propio Benítez o que hipotéticamente Fernando Vergara, Hernán “Bolillo” Gómez o Eduardo Berizzo vayan a apagar el incendio en el corto plazo. No faltan los entusiastas que postulan a Marcelo Bielsa y suena bastante bien, pero basta recordar su salida de la Selección chilena y sus dichos en contra de las concesionarias de los clubes grandes para descartarlo inmediatamente.

Aunque Colo-Colo prácticamente ya no tiene ninguna meta deportiva en este certamen, jamás debiera olvidar que siempre debe jugar por la vergüenza deportiva y por el honor de su historia.



Una cita con la historia

Ya tenemos un pie y medio en el Mundial. Bueno, siempre y cuando abrochemos la clasificación ante un Ecuador que no sabe de triunfos

en nuestros pastos.

En Barranquilla estuvimos a un tris de conseguir los boletos a Brasil, pero algunos yerros propios y un árbitro que apuró la clasificación de Colombia lo impidieron. No había por dónde. Antes de la media hora de juego, Chile le daba una paliza a los cafetaleros (0-3) y nada hacía presagiar un desenlace con angustia y polémica. Convengamos que la expulsión de Carlos Carmona, a los 66’, se convirtió en la clave del encuentro y fue lo que permitió la remontada de la Selección local.

A la hora de los cambios, Jorge Sampaoli tampoco acertó con los ingresos de José Rojas por Mauricio Isla y de Jean Beausejour por Jorge Valdivia. Chile se quedó sin ideas, sin fútbol y prácticamente a la espera de la reacción de los dirigidos de José Pekerman. El primer descuento colombiano llegó a los 69’ en los pies de Teófilo Gutiérrez, tras un mal despeje de la retaguardia chilena. A los 75’ y a los 83’, Radamel Falcao García cambió por gol los discutibles penales sancionados por el árbitro brasileño Paulo César de Oliveira.

Chile se trajo un punto desde Colombia, algo que parecía un buen negocio antes del partido pero finalmente no lo fue, ya que teníamos la clasificación ¡a menos de media hora! Pero nada ha sido sencillo en la vida del dt argentino y esta no iba a ser la excepción. El casildense ve en toda adversidad una oportunidad y esta noche, ante un Estadio Nacional repleto, su exitoso proceso debiera llegar a buen puerto. Sampaoli condujo con mano firme el timón y demostró su capacidad


superlativa al mando del equipo de todos, erradicando la indisciplina y nuestro fútbol cansino.

Hoy nos vestiremos de frac para una noche de gala. Los invitados llegarán de a poco y los fuegos de artificio aguardarán con ansias su libertad. La torta está servida y sólo espera su guinda. Hoy es el día en que un puñado de futbolistas chilenos se puede inscribir como el primero en clasificar en cancha a dos mundiales consecutivos. Hoy tenemos una cita con la historia y no podemos fallar.



Un lindo problema para Sampaoli

¡Chile es Mundial! No importa si fue con nervios o con los dientes apretados. Lo importante es que se clasificó por segunda vez

seguida a una cita planetaria, hito histórico de una de las generaciones más brillantes del fútbol chileno, la misma que formó parte de los mundiales juveniles de Holanda 2005 y Canadá 2007, la misma que hizo grandes campañas con el Colo-Colo de Borghi y con la “U” de Sampaoli, la misma que tumbó a Argentina por primera vez y la misma que ganó en un Mundial adulto después de 48 años.

No todos los días clasificamos a una magna cita del fútbol y hay que celebrarlo como corresponde, sin embargo, esta pléyade del balompié criollo no se puede quedar solamente en los festejos; tiene la responsabilidad y el desafío de superarse a sí misma.

Los especialistas avizoran a la “Roja” entre los ocho mejores de Brasil 2014, aunque el título del mundo ya le debe estar quitando el sueño a Jorge Luis Sampaoli. En efecto, ¿por qué no podemos soñar con la corona máxima? Equipo y entrenador hay.

Uno de los puntos a enmendar es la defensa, ya que entre tanto afán ofensivo también hay que proteger el rancho. En este proceso se sacaron valiosas lecciones de los amistosos con Brasil y España y del recordado empate frente a Colombia.

No hay grandes dudas respecto a la oncena criolla que se parará en la tierra de la samba. Salvo situaciones excepcionales, es casi imposible que salga del arco Claudio Bravo; en la zaga son piezas indiscutibles Mauricio Isla, Gary Medel, Marcos González y Eugenio Mena. En


tanto, José Rojas y Gonzalo Jara asoman como interesantes comodines de acuerdo al rival que se tenga al frente.

En el mediocampo, Marcelo Díaz, Arturo Vidal y Charles Aránguiz aportan disciplina táctica y un fútbol exquisito. Por su parte, Carlos Carmona, Matías Fernández y David Pizarro han respondido cuando se les ha requerido. A su vez, Jorge Valdivia rindió como mediapunta, aunque donde más brilla es como volante creativo.

En delantera el panorama es halagüeño, puesto que los titulares Alexis Sánchez y Eduardo Vargas exhiben un rendimiento notable. ambos fueron piezas clave del último tramo de las clasificatorias. En tanto, en la banca aguardan su turno Humberto Suazo, Junior Fernandes, Esteban Paredes, Gustavo Canales y Mauricio Pinilla, y en la lista de espera asoman Patricio Rubio, Ángelo Henríquez y Nicolás Castillo.

Por ahora, para Sampaoli es un lindo problema elegir a los 23 jugadores que viajarán a Brasil.

Por ahora.



La “Crespa” va por más

Un fin de semana largo supone descanso, distracción y esparcimiento. No obstante, para las metas y los sueños de Carolina “Crespa”

Rodríguez no hay días libres ni tampoco feriados. Es así como este viernes 1 de noviembre la campeona mundial de los pesos gallos de la WibA volvió al cuadrilátero y congregó a unos doscientos fanáticos en el Gimnasio Municipal de Puente Alto. Poco público y escuálida cobertura mediática para una de las mejores exhibiciones de la primera pugilista profesional criolla.

Lamentablemente, en nuestro país las cosas no mejoran con un cetro planetario en la mano. Es inconcebible que nuestra monarca tenga que montar sus propias veladas, que aún le falten rivales locales y que le sigan escaseando los auspiciadores.

A veces los reconocimientos vienen de afuera, ya que en su estadía en Argentina, en 2012, la “Crespa” supo cómo quieren al amigo cuando es forastero y sobre todo cuando tiene talento en algún deporte. Asimismo, el Consejo Mundial de Boxeo le extendió una invitación para que entrene un mes en Bangkok, Tailandia. Pero en Chile, hasta ahora sólo saca aplausos.

En el ring puentealtino, Rodríguez desplegó sus mejores recursos frente a la argentina Natalia “Princesa” López. Una oponente sin grandes destellos que sucumbió por K.o. en el quinto round a los certeros embates de la campeona chilena.

El nivel de la “Crespa” va en franca evolución y su concentración es tal que el desenlace de sus peleas hasta pareciera predecible. A su


conocido repertorio (esquive, condición física, rápidas combinaciones y una izquierda interesante) le agregó precisión en sus golpes y vaya cómo lo sintió la trasandina en su rostro. Empero, el exceso de confianza y la guardia descubierta le podrían jugar una mala pasada a la criolla, aunque es oportuno precisar que las correcciones a su boxeo se van reduciendo cada día más.

Carolina Rodríguez no se conforma con su invicto de 10 peleas en el profesionalismo, pues va por más. En diciembre disputará su segundo título del mundo, esta vez por la omb en Santiago, y el 18 de enero volverá al Club de Boxeo de Constitución para buscar el bicampeonato mundial de la WibA.



Alexis de clase mundial

Alexis Sánchez está de vuelta y vaya de qué manera. Atrás quedaron esos pálidos días en que los balones que tenía que mandar para

adentro, caprichosamente se le iban para fuera. El delantero afinó la puntería, respondiendo a los bonos que le entregó Gerardo Martino en el Barcelona y Jorge Sampaoli en la Selección.

El “Niño Maravilla” maduró en la adversidad y ahí fue donde confirmó su temple de “jugadorazo”, como él mismo se definió alguna vez. Además el ex dt de Newell’s revalorizó a un Sánchez que, pese a la escasez de gol, siempre creyó en sí mismo.

El arribo de Neymar a la tienda azulgrana también influyó en el alza del tocopillano. El brasileño ya es pieza clave en el ataque culé y con Alexis conforman una de esas grandes sociedades futbolísticas. La lesión que alejará a Lionel Messi de las canchas debería darle aún más rodaje a la nueva dupla sudamericana. Los especialistas sostienen que en ausencia del crack trasandino, el chileno levanta su rendimiento. Por eso, en las próximas semanas tiene la posibilidad de alcanzar su consolidación definitiva con la camiseta del conjunto catalán.

Asimismo, en la Selección chilena renació bajo el firme timón de Jorge Sampaoli. Con el casildense, el “Dilla” recuperó la capacidad anotadora, algo que también había extraviado en el proceso de Claudio Borghi. En el último tramo de las clasificatorias resultaron fundamentales sus tantos frente a Bolivia, Venezuela y Colombia.

Chile y Alexis Sánchez están ad portas de otro Mundial. El desafío se hace mayor que en otras justas debido al nivel que hoy exhiben nuestros


seleccionados. El triunfo frente a Inglaterra y los goles de AS9 confirman que los pupilos de Sampaoli están para algo más que unos octavos de final. Así también lo entienden en la testera de la Anfp, al gestionar amistosos frente a las potencias del fútbol mundial.

En consecuencia, no sería descabellado ilusionarse con repetir la gesta del tercer lugar de 1962. En lo futbolístico, en lo técnico y en individualidades, Chile tiene con qué. Al menos, Alexis ya avisó que es de clase mundial.



El “Aguja” González manda en casa

En ningún deporte es fácil derrotar a los argentinos, sin embargo, en el cuadrilátero del Club México los púgiles albicelestes no lo pasan

bien. Es así como el sábado recién pasado Miguel “Aguja” González brindó un gran espectáculo, imponiéndose con jerarquía sobre el actual campeón trasandino de los moscas: Raúl “Falucho” Medina.

Fue una pelea a ocho rounds, donde el campeón sudamericano desplegó lo mejor de su repertorio, sin darle concesión alguna a su rival. Es que desde hace un buen tiempo el “Aguja” se tomó la actividad en serio, lo que se nota en su espléndido rendimiento y en sus progresos en lo disciplinario, táctico y físico.

Atrás quedó ese púgil de pegada débil, que se enredaba entre asalto y asalto con las bravuconadas de sus contrincantes. Hoy estamos frente a un profesional con un alto grado de concentración, con una mano nada despreciable y con un gran ascendiente sobre el público. Precisamente, la galería fue la que más disfrutó este fin de semana con su perfomance.

Como la vida misma, González aprendió de sus errores y, al parecer, los corrigió a tiempo. Sus números en el campo del boxeo rentado son halagüeños y hablan de lo bien que está haciendo las cosas junto a su coach Iván Corral: de 19 peleas disputadas ha ganado 18 y sólo ha perdido una.

“Aguja” González es hoy por hoy el gran crédito del Club México y en el corto plazo también podría serlo del boxeo chileno. Recordemos que el renquino debutó en el profesionalismo en 2010 y ya en 2012 fue distinguido por el Círculo de Periodistas Deportivos de Chile como


el mejor boxeador profesional de la temporada. Este año se consagró campeón sudamericano supermosca del Cmb al derrotar al brasileño Reginaldo Martins Carvalho en el Teatro Caupolicán (triunfó por K.o. al octavo asalto), y por el título intercontinental del Wbo perdió por los puntos, en doce asaltos, ante el inglés Paul Butler en Inglaterra.

En 2014 sería bueno ver a González peleando como forastero. Así podríamos calibrar su fortaleza en la arena internacional y con el público en contra. Hasta ahora su palmarés sólo registra un combate como visita y de cara a sus gigantes progresos ya debería estar evaluando alguna opción del extranjero. Nunca fue lo mismo pelear en casa que afuera. La propia Carolina “Crespa” Rodríguez, en Argentina peleó en un mes y medio lo que en Chile peleó en dos años.

Son las proyecciones del “Aguja” González, ese que manda en el Club México, ese que manda en casa.



No hay atajos para llegar al cielo

Será o no la mala suerte del chileno, pero ni en los escenarios más apocalípticos del sorteo mundialista esperábamos encontrarnos en la

fase de grupos con los últimos campeón y subcampeón del mundo. Para nuestro consuelo, españoles y holandeses igualmente consideran que el sorteo no los favoreció y la idea de enfrentarse con nuestro combinado decididamente tampoco les simpatiza.

Acuérdese de que Vicente del Bosque no nos quería ver ni en pintura después del último amistoso entre España y Chile. El juego de la “Roja” –en palabras del mismísimo entrenador hispano– le resultó muy incómodo a su oncena. A su vez, para Louis van Gaal, dt de Holanda, los nuestros también son un rival non grato. E incluso el estratego del Scratch, Luiz Felipe Scolari, declaró que Chile es un equipo fastidioso y que prefiere a cualquier otro contrincante en octavos de final.

Pero antes de creernos el cuco de Brasil 2014 y de cualquier hipotética definición por el primer o segundo lugar del grupo, hay que ganarle a Australia en el debut. Pese a que todo es relativo en un Mundial, vencer o perder ese encuentro podría resultar clave. En el papel son los puntos más accesibles y con los que también cuentan nuestros rivales. Por eso, en caso de una definición a la otra ronda por diferencia de goles, convendría propinarles una buena boleta a los oceánicos.

Jorge Sampaoli ya les tomó el pulso a las grandes escuadras y sabe sobradamente que derrotarlas o arrebatarles el favoritismo no es una utopía. El triunfo ante Inglaterra a domicilio confirmó que esta “Roja” está para grandes cosas y que se le puede ganar a quien sea y donde sea. Seguramente, para el casildense es factible obtener el liderato del grupo


B. Más allá de la buena o mala suerte del chileno, este es el momento preciso para medirse con los mejores del mundo y también para darnos el gusto de derribarlos.

Cambiemos la mentalidad y no tomemos atajos para llegar al cielo.



Adiós, 2013. Bienvenido, 2014

Hace algunas horas, despedimos el año en el que nos contagiamos con el espíritu combativo y con la sangre furiosa de la Sub-20 de

Mario Salas. El año en el que Rafael Nadal nos dejó su estela tenística. Se fue el año en el que a Alexis al principio no le entraba ninguna pelota y en el que después le entraron todas.

El año en el que Carolina “Crespa” Rodríguez cumplió su sueño de ser campeona mundial de boxeo, pero en el que lamentablemente siguió esperando por auspicios. Una temporada en la que Cristián Valenzuela revalidó su cetro planetario y en la que también exigió igualdad a la hora de las condecoraciones.

El año en que Nicolás Massú colgó la raqueta y en el que se colocó el buzo de coach. Sí, el año en que la “Roja” clasificó en cancha por segunda vez consecutiva a un Mundial y en el que les faltó el respeto a brasileños, españoles e ingleses. No olvidemos que en 2013 Tomás González fue medalla de oro en saltos en la Copa del Mundo de Portugal y en suelo en el Sudamericano de Santiago. Asimismo, Natalia Duco se colgó la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos Universitarios.

Despedimos un año en el que la Unión Española y O’Higgins relegaron a un segundo plano a los grandes de Santiago. El año en el que Miguel “Aguja” González pegó más fuerte que nunca y en el que se ciñó la cinta de monarca sudamericano. Cómo no mencionar que, en 2013, el pesista paralímpico Juan Carlos Garrido y la patinadora María José Moya se inscribieron con sendos récords del mundo. Sí, se fue el año en que Christian Garín ganó Roland Garros Jr. y en el que debutó con un triunfo en el Atp de Viña.


En la temporada pasada, nadie fue mejor en el mundo que Daniela Callejas en muay thai y Felipe Miranda en esquí náutico.

Despedimos un año de alegrías y también de tristezas, de triunfos y derrotas. Despedimos un 2013 en el que celebramos la creación del Ministerio del Deporte y en el que lamentamos la pérdida de la sede de los Juegos Panamericanos de 2019.

No obstante, también recibiremos un año de grandes desafíos para el deporte nacional. ¡Qué duda cabe! 2014 es el año del Mundial de Fútbol y Chile, de la mano de Jorge Sampaoli y de una espléndida pléyade de jugadores que seguramente no va a ir de paseo a Brasil. Asimismo, será el año de los Juegos Suramericanos y Parasuramericanos de Santiago, una inmejorable oportunidad para que nuestro país retorne a los puestos de privilegio que alguna vez ostentó en la región. ¡Bienvenido, 2014!

2 de enero de 2014


Una “Crespa” de talla mundial

No todos los días podemos decir que los deportistas chilenos son los mejores del mundo. Es así como en 2013 nadie fue mejor en

el planeta que Daniela Callejas en muay thai, Felipe Miranda en esquí náutico, Cristián Valenzuela en atletismo paralímpico, Pangal Andrade y su equipo en rafting y Carolina Rodríguez en boxeo.

Asimismo, este fin de semana Ignacio “Perro” Casale se adjudicó el Dakar en la categoría quads y la “Crespa” retuvo el título mundial en la categoría gallo de la WibA en Constitución. Lamentablemente, el combate de la puentealtina no le interesó a la televisión abierta y el país entero se quedó sin la posibilidad de apreciar un gran espectáculo deportivo. Esto también les sucedió a las “marcianitas” del hockeypatín cuando se consagraron monarcas mundiales en 2006 y a otros deportistas que se han cansado de golpear las puertas de los canales nacionales.

No obstante, en regiones el público está ávido de este tipo de eventos y la parcialidad se hizo sentir en la cálida noche maulina. A estas alturas, el Gimnasio Enrique Donn Müller de Constitución se ha convertido en el recinto inexpugnable de la pugilista chilena. Recuerde usted que en agosto pasado, en ese mismo reducto, la criolla consiguió el título del mundo frente a la venezolana Ana María Lozano.

Este sábado pasado, la “Crespa” salió a buscar la pelea, con un boxeo agresivo, técnico y veloz. Convengamos en que una izquierda furibunda conectada en el rostro de Simone Duarte Da Silva en el primer asalto, marcó inmediatamente el trámite de la refriega. A partir de ese episodio la púgil verdeamarelha sintió la mano de la chilena y adoptó una estrategia evidentemente defensiva y de contragolpe.


En los siguientes rounds, Rodríguez desplegó lo mejor de su repertorio y no le dio concesiones de ningún tipo a su oponente. Su impronta se agigantó en cada asalto y a mitad de la pelea ya no había dudas de que la nacional se iba a alzar con la victoria. La puentealtina nunca cesó en la búsqueda del K.o. y al finalizar el combate ese esfuerzo fue premiado con la ovación cerrada de los presentes.

El triunfo de la “Crespa” fue legítimo e inapelable ante quizás una de las rivales con mejor línea técnica de las que haya enfrentado a lo largo de su carrera. Precisamente en la hora de los abrazos no hay que olvidar que estamos al frente de una deportista que nos representa como país, pero que prácticamente ha salido adelante con su propio esfuerzo y con el apoyo y los recursos de su entrenador. Hemos de esperar que sus triunfos venideros no sigan pasando inadvertidos para la televisión abierta, para los empresarios y para las autoridades. Aprovechemos y disfrutemos este momento, porque no todos los días tenemos una campeona del mundo de la talla de Carolina “Crespa” Rodríguez.

20 de enero de 2014


Soñar es tan barato

“¡Chile es fuerte, peligroso y extraordinario!”. Aunque usted no lo crea, esto salió de boca de Zinedine Zidane. También de

Fernando Hierro y últimamente del mismísimo Pelé.

Es cierto, no lo dice cualquiera, lo dicen leyendas del fútbol mundial. Pero aun así, no les deberíamos prestar mucha atención. ¿Por qué?, dirá usted. Porque no estamos acostumbrados a tanta pérgola y porque el traje de favoritos nunca nos ha quedado a la medida.

¿Podemos hacer algo grande en Brasil 2014? Sí, pero antes venzamos a australianos, españoles, holandeses y así sucesivamente. Los mundiales no se ganan con el cartel de favorito, se consiguen partido a partido. Y si no, que lo digan los pragmáticos italianos, alemanes y hasta los españoles en algunos pasajes del mundial pasado.

¿Se acuerda que en Inglaterra ’66 aterrizamos como terceros del mundo y terminamos eliminados en la primera vuelta? En Alemania ’74 íbamos con lo históricamente más granado de nuestro fútbol y tampoco sobrevivimos a la ronda inicial. El bochorno en España ’82 fue total, y con el excelentísimo Marcelo Bielsa en Sudáfrica 2010 nos alcanzó únicamente para la segunda ronda.

Entre medio de tantas loas es admirable cómo el discurso de Jorge Sampaoli se mantiene cauto e incólume. Sin embargo, es sabido que para el casildense no existen las utopías y los imposibles. Si en algún momento no lo fue la Copa Sudamericana o llegar a la Selección chilena, ¿por qué tendría que serlo la Copa del Mundo?


Hay que ir con calma, pero dicen que cuando el río suena es porque piedras trae, y por estos días los seleccionados chilenos están metiendo harto ruido en el orbe futbolístico. Alexis Sánchez está ahí entre los goleadores top ten de Europa; Arturo Vidal deslumbra cada día con su fútbol y va por el tricampeonato con la Juventus; Claudio Bravo es sondeado por el Barcelona y recibe elogios de Gerardo Martino; Eduardo Vargas recientemente se unió al Valencia de Pizzi, Nicolás Castillo al Brujas de Bélgica y Jorge Valdivia volvió en gloria y majestad al gol en Brasil. Charles Aránguiz aprobó en su debut en Internacional de Porto Alegre y Eugenio Mena en su estilo calladito la está rompiendo en el Santos de Pelé. Súmele a esto el hallazgo de Miiko Albornoz, los goles de Pablo Hernández y el buen momento de Esteban Paredes y de Gonzalo Fierro en el torneo local.

El Mundial de Brasil empieza el 12 de junio, son 32 selecciones clasificadas para solamente una copa. Chile nunca la ha ganado y esta podría ser la ocasión. ¿Soñemos? Total, soñar es tan barato.



El forastero Manuel

¡Pellegrini campeón de la Copa de la Liga de Inglaterra! Dicen que nadie es profeta en su tierra y el entrenador criollo lo confirmó

con otra estrella en pastos foráneos. Un título que lo catapulta –definitivamente– entre los adiestradores más cotizados y aplaudidos de Europa.

Asimismo, es curioso lo que ocurre en Chile con el estratego. Acá sus pares casi no lo citan como referencia técnica y para la afición tampoco es un ícono futbolístico. ¿Será el estigma de aquellos que les va bien, o todavía se le pasará la cuenta por el descenso a la Segunda División con la Universidad de Chile o por los títulos que perdió con la Universidad Católica?

En un medio donde los entrenadores no son un producto exportable, lo de Pellegrini alcanza ribetes casi insuperables y su trayectoria sólo tiene parangón con la de su mentor Fernando Riera.

Recuerde usted que entre los logros más rutilantes del entrenador chileno están los tres campeonatos nacionales que consiguió con Liga de Quito de Ecuador en 1999, San Lorenzo de Almagro y River Plate de Argentina en 2001 y 2003, respectivamente. En 1994 levantó la Copa Interamericana con la Universidad Católica, el único título internacional en la historia de la institución cruzada. También con San Lorenzo, en 2001, consiguió el primer trofeo continental de la institución: la Copa Mercosur. Súmele a lo anterior las mejores campañas en la historia del Villarreal con la semifinal en la Liga de Campeones de Europa y con el subcampeonato de la Liga.


Como entrenador del Málaga, el D.t. también quedó en los anales de dicho club. Con los blanquiazules logró el mejor rendimiento de su historia en la Liga, con mayor cantidad de puntos (58 puntos) y mejor posición histórica del club al final de un campeonato (4o lugar). Asimismo, clasificó a los boquerones por vez primera a la Champions League, superando la primera fase en calidad de invicto y como cabeza de su grupo. El Borussia Dortmund de Alemania los eliminó en cuartos de final en una llave que todavía se discute.

Pero nada ha sido fácil en la carrera de Manuel Pellegrini Ripamonti. El duelo frente al Sunderland por la Capital One Cup no comenzó bien para el Manchester City, ya que el Sunderland inauguró el marcador a los 10 minutos. Un gol que a lo largo de la primera fracción no pudo remontar el cuadro ciudadano. En la segunda etapa, los dirigidos del chileno reaccionaron con anotaciones consecutivas de Touré y Nasri a los 55’ y 56’, respectivamente. El español Jesús Navas amplió la ventaja en el minuto 90 y sentenció el encuentro.

La Copa de la Liga es del Manchester City pero el mérito para el forastero Manuel. Ese que triunfa en tierra ajena.

7 de marzo de 2014

Nota: El domingo 11 de mayo de 2014, el Manchester City se consagró como campeón de la Premier League frente al Whest Ham bajo la dirección del chileno Manuel Pellegrini.


Juegos Suramericanos: la última palabra no está dicha

¡Santiago ha sido invadido por seres que saltan más alto, que son más fuertes y que corren más rápido! No se alarme y tampoco crea que

se trata de alienígenas o extraterrestres. Ellos son los representantes de los 14 países de 31 disciplinas que participan en los X Juegos Suramericanos 2014.

Una fiesta del deporte que por estos días engalana a nuestra capital y la que se hizo en nuestro país por última vez en 1986. Recordará usted que en aquella cita se consiguió el segundo lugar continental y se mantuvo la posición de las dos versiones anteriores con 50 oros, 66 platas y 60 bronces. En la memoria del colectivo quedaron las sobresalientes actuaciones de los atletas Mónica Regonesi, Pablo Squella y Emilio Ulloa, del ciclista Miguel Droguett y del futbolista Ivo Basay. El primer lugar fue para Argentina, con 80 medallas doradas.

El pueblo ha dicho presente en esta nueva versión de la justa deportiva regional y se ha volcado en masa a los recintos y a las calles para apoyar a los representantes criollos. Es así como la gimnasia, de la mano de Tomás González, llevó en cuatro días más de 25 mil espectadores. Asimismo, Bárbara Riveros, Kristel Köbrich y Gabriela Bruna celebraron sus medallas de oro con un extraordinario marco de público. Esto demuestra fehacientemente que el fútbol no lo es todo y que el público nacional está ávido de eventos de esta envergadura.

Otro hito importante es que el deporte –no fútbol– después de un largo tiempo, volvió a ser exhibido por la televisión abierta.


Lamentablemente, la farandulización de los medios de comunicación se ha apoderado de las parrillas programáticas y el deporte ha sido uno de los grandes damnificados con esto. Disciplinas como la gimnasia, el atletismo o la natación sólo se pueden ver por cable o cada cuatro años con los Juegos Panamericanos o con los Juegos Olímpicos. Esperemos que a partir de los Juegos Suramericanos, diversas disciplinas vuelvan cada fin de semana –gratuitamente– a los televisores de los hogares chilenos. Otrora era un panorama para la familia ver un combate de boxeo, una carrera de ciclismo o un partido de hockeypatín. Este puede ser uno de los primeros desafíos para la nueva mandataria, para la nueva ministra del ramo y para los nuevos directores del canal de todos.

Pese a la impecabilidad del torneo suramericano, las dos últimas jornadas han estado marcadas por la polémica. El martes 11 de marzo la entrenadora del equipo chileno Isabel Lazo, instó a la gimnasta peruana Mariana Chiarela –en un curioso acto de “fair play”– a apelar ante los jueces para corregir un fallo que hasta ese momento le daba la medalla de plata a la gimnasta chilena Melany Cabrera en la viga de equilibrio. Como consecuencia de esto, Chiarela se quedó con la medalla de plata y Cabrera con la medalla de bronce. Cosas que solamente pasan en Chile.

El miércoles 12 de marzo, la ciclista chilena Irene Aravena se accidentó gravemente cuando disputaba la medalla de bronce en la prueba de persecución. La criolla no se percató de la partida falsa y chocó violentamente con un partidor, quedando tendida en la pista del velódromo y gravemente herida. El diagnóstico arrojó una fractura expuesta de rodilla y rótula. Tras ser operada, la deportista se encuentra estable y afortunadamente sólo se lamenta el final de su participación en los Juegos Odesur 2014.

Cuando ya se ha desarrollado la mitad de la competencia, Chile se ubica en un quinto puesto, que podría mantenerse hasta el final de la misma. Dura tarea será superar a Venezuela y una misión algo titánica a


Colombia, países que entendieron la importancia del deporte hace más de 20 años. No obstante, faltan cuatro días de competencia y todavía se puede superar lo de Medellín 2010. La última palabra no está dicha.

13 de marzo de 2014


¡Adiós, Santiago 2014! ¡Nos vemos en 2023!

Los Juegos Suramericanos organizados en casa representaban la gran ocasión para que nuestro país ascendiera algunas posiciones en

el escalafón regional. Sin embargo, y pese a todos los esfuerzos, nos mantuvimos en el quinto lugar del continente, históricamente por debajo de Brasil y Argentina y desde un tiempo a esta parte también de Colombia y Venezuela. ¡Y ojo que detrás nuestro viene Ecuador!

Pese a que se superó y son las medallas de Medellín 2010, igualmente hemos cedido terreno en lo estrictamente competitivo y mientras dichas naciones crecen y entienden la importancia del deporte, por estos lares seguimos enredándonos en líos federativos y en otros embrollos similares. Tomás González y Kristel Köbrich conocen muy bien de esto y ahora también Francisca Crovetto, quien se quedó sin lugar de entrenamiento en Santiago, tras el cierre del Club de Tiro de la Fach. ¿Hasta cuándo seguimos dando ventajas?

Esta también era una ocasión inmejorable para que la televisión estatal se luciera con transmisiones simultáneas, programas especiales y con un despliegue profesional y técnico instalado en todos los recintos. Lamentablemente, algunas disciplinas ni siquiera aparecieron en pantalla, y a los rostros del área deportiva se les vio más en el set de televisión que adonde las papas queman. Así también se les criticó, en las redes sociales, su falta de léxico técnico para describir en detalle cada disciplina. Definitivamente la estación pública quedó al debe con la cobertura de los Odesur.

Asimismo, los matutinos de mayor circulación, como Las Últimas Noticias y La Cuarta, no les dieron ninguna portada a los rutilantes


triunfos de Bárbara Riveros, Karen Gallardo, Natalia Duco, Gonzalo Garrido, Kristel Köbrich, Felipe Aguilar y Gabriela Bruna. Pareciera que para algunos medios de comunicación todavía el deporte no fútbol sigue siendo un ítem de menor importancia.

El público puso la nota alta y también fue uno de los grandes protagonistas de esta cita continental. Casi todos los recintos se abarrotaron y el interés por las entradas a ratos desbordó a los organizadores. Hay que poner atención y no desperdiciar los fenómenos que se produjeron con la gimnasia, la natación, la halterofilia y algunos deportes colectivos como el básquetbol, el vóleibol, el balonmano y el hockeycésped. No hay que desaprovechar el buen momento de estas disciplinas de cara a los próximos Juegos Panamericanos de Toronto 2015 y los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016. Los Juegos Suramericanos Santiago 2014 dicen adiós, sin embargo también podrían ser el comienzo del ciclo Panamericano en 2023. ¡Que así sea!

18 de marzo de 2014


Juegos Parasuramericanos, como para seguir soñando

Los deportistas discapacitados participantes en los Juegos Parasuramericanos Santiago 2014 no solamente nos dieron una clase

maestra de alto rendimiento, sino que también de cómo se pueden superar las limitaciones, las adversidades y los inconvenientes de la vida. Es así como nuestra capital, durante cinco días, se convirtió en el epicentro del deporte paralímpico subcontinental y en la primera estación de un torneo que sólo tenía como precedente los Juegos Parapanamericanos.

¿Sabía usted que los deportistas paralímpicos nacionales están representados por el recién creado Comité Paralímpico de Chile? La primera participación de la delegación chilena en Juegos Paralímpicos fue en Barcelona ’92 y la única medalla –oro– la consiguió el atleta Cristián Valenzuela en Londres 2012. En Juegos Parapanamericanos, nuestro país participa desde 1999 y se ubica en el 12.° lugar con 27 preseas: seis de oro, ocho de plata y trece de bronce.

Los I Juegos Parasuramericanos se realizaron en los mismos recintos de la cita convencional. Así también se repitió el buen ánimo de los organizadores, voluntarios y público en general. La actuación de Cristián Valenzuela en los 5.000 metros –sábado 29 de marzo– marcó el peak de asistencia del certamen con casi 4.000 espectadores en el coliseo central del Estadio Nacional. El bicampeón mundial y campeón paralímpico ganó cómodamente dicha carrera con un tiempo de 16 minutos con 10 segundos y 6 centésimas. Convengamos en que su más cercano perseguidor, el colombiano William Sosa, siempre lo escoltó a casi 300 metros de distancia.


Asimismo, el atleta criollo celebró el día anterior en los 1.500 metros y cumplió el sueño de abrazar a su madre y regalarle las medallas de oro que alguna vez había conseguido en otros suelos. Al finalizar su última presentación, Valenzuela agradeció a la señal oficial por toda la cobertura que se le dio al torneo y lamentó no haber podido superar sus propias marcas y haber conseguido un récord mundial.

En resumen, la historia consignará que en Santiago 2014, el Team Chile se ubicó en el quinto lugar con 43 medallas en total, distribuidas en los siguientes metales: 10 de oro, 16 de plata y 17 de bronce. Además de las dos medallas de oro de Cristián Valenzuela en atletismo, también destacaron con sus máximas preseas Juan Carlos Garrido y Frank Feliú en levantamiento de pesas; Macarena Quero y Francisca Castro en natación Juan Carlos Sepúlveda en tenis de mesa. Carlos Muñoz, Pablo Araya y Francisca Mardones y Macarena Cabrillana en tenis en silla de ruedas y Margarita Faúndez en atletismo.

Esta selecta pléyade del deporte chileno, fue recibida por la presidenta Michelle Bachelet en La Moneda –este miércoles 31–, quien ya en la inauguración del certamen se había comprometido a crear una línea directa de financiamiento para el deporte paralímpico. La mandataria agregó también a lo anterior la creación del Comité Paralímpico Chileno, además de la construcción y equipamiento del primer centro de actividad física y deportiva para personas con discapacidad. El tema de la inclusión se manoseó muchas veces, sin embargo, con los Juegos Parasuramericanos se volvió a poner en boga la discusión. Ojalá que se cumplan todas las promesas políticas y que las cosas se sigan dando como para seguir soñando y para que siga creciendo el movimiento paralímpico en Chile.

2 de abril de 2014


Como si fuera la primera

En el colegio, en la universidad y en el trabajo siempre se le exige mucho más al estudiante o al trabajador que es responsable,

eficiente y puntual. En el fútbol esto también es así.

Los equipos grandes tienen la obligación de ganarlo todo, y si esto no sucede, es sencilla y rotundamente un fracaso. ¿Cuánto no padeció el Colo-Colo de sangre altiva y noble corazón en un lustro de dique seco? El título está al alcance de la mano, pero así también es como el pan se quema a la entrada del horno. No se trata de ser aguafiestas ni mucho menos, pero la ansiedad también mató al gato y en los partidos anteriores esto se ha notado.

Sin embargo, el elenco albo ha sido de lo más regular en un torneo en el que la “U”, la Unión Española y O’Higgins se dedicaron a pensar en la Copa Libertadores y la Universidad Católica quizás en qué cosa. ¿Quién otro más quiso ganar este campeonato que Colo-Colo?

La regencia de Blanco y Negro entendió, después de varios costalazos, que los planteles se arman con buenos jugadores y con un entrenador que conozca las raíces más profundas de la institución. La solución para los males de Macul no estuvo en los Diego Cagna, en los Rubén Américo Gallego, en los Ivo Basay, en los Omar Labruna y tampoco en los Gustavo Benítez. La vida te da sorpresas dice la canción y nadie pensó alguna vez en que el novel Héctor “Tito” Tapia iba a conducir al Cacique a su tan anhelada estrella 30. A su arribo a la banca de Pedrero, el ex sub 17 exigió a Esteban Paredes como primer refuerzo, y a poco de andar conformó un plantel con una línea de juego mucho más sólida que la de sus antecesores. Para cualquier equipo del mundo, tener al internacional


paraguayo Justo Villar es un lujo y por ahí parte la columna vertebral de Colo-Colo. El defensa Cristián Vilches espantó los fantasmas de la temporada anterior y Julio Barroso se une al destacadísimo rendimiento de los laterales José Pedro Fuenzalida y Gonzalo Fierro. Los volantes Claudio Baeza, Esteban Pavez, Jaime “Pajarito” Valdés y Emiliano Vecchio aportan marca y fútbol en el medio. Goles son amores, y en la delantera Felipe Flores marcó en los momentos importantes y Esteban Paredes confirmó su categoría y estirpe asesina en cada encuentro. “Visogol” confió desde el inicio en la nueva corona y por eso usó la camiseta con el número treinta. Un crack que aportó el gol frente a Uruguay en las clasificatorias y que merece ir al Mundial.

Es cierto, en los últimos partidos le han tomado la mano a Colo-Colo, pero los campeonatos también se ganan con cojones, un poco de fortuna y una que otra ayudita de algún arbitro, Queramos o no, cuando Colo-Colo anda bien, el campeonato tiene más condimento. En Macul están esperando la treinta, pero es como si fuera la primera.

11 de abril de 2014

Nota: El domingo 13 de abril, Colo-Colo se coronó campeón del Torneo de Clausura 2014 al ganar por 1-0 en el Estadio Monumental a Santiago Wanderers. El gol fue obra de Felipe Flores.


¡Grande, don Elías!

En los recientemente finalizados y bien organizados Juegos Suramericanos, se aplaudió y se celebró el reconocimiento a Marlene

Ahrens, Nicolás Massú e Iván Zamorano, pero también se extrañó una mención al boxeador Ricardo Araneda, campeón de los Odesur en 1990, 1994 y 1998. ¿Simplemente mala memoria?

Asimismo, la semana pasada falleció en el más profundo de los silencios el ex boxeador Julio Gómez Vásquez. El excelente púgil fue campeón nacional amateur 1972 y como profesional fue campeón de Chile de peso welter en 1975. Realizó 24 peleas en Estados Unidos. Dentro de sus títulos más resonantes destacaron los “Guantes de Oro” en Chile y el “Cinturón de Diamantes”, que consiguió en la tierra del Tío Sam. Poca difusión en la hora del adiós de un grande del deporte de los puños.

En julio de 2008, el Estadio Nacional se rebautizó como Julio Martínez Pradanos. Lamentablemente, la idea se gestó con el deceso de Jotaeme en enero del mismo año. ¿No le parece una distinción algo tardía? ¿Se pudo hacer algo antes? Sí. El Estadio San Carlos de Apoquindo tiene una tribuna con el nombre de Sergio Livingstone Pollhammer, no obstante el “Sapito” merecía un mejor homenaje de parte de la institución cruzada. La UC, en este aspecto, tiene una deuda con sus máximos referentes. Esto que lo diga el también arquero Patricio Toledo.

Asimismo, el court central de tenis del Estadio Nacional espera su rebautizo como Marcelo Ríos Mayorga, Nicolás Massú Fried o Fernando


González Ciuffardi. También merece llamarse Luis Ayala Salinas o Anita Lizana de Ellis. ¿Qué esperan las autoridades?

Dicen que la justicia tarda pero llega, y este año el Estadio Playa Ancha de Valparaíso pasó a ser “Elías Figueroa”. Este podría considerarse el mayor estímulo que ha recibido el ex zaguero internacional en Chile. Es así como, la semana anterior, “Don Elías” fue el gran protagonista en la inauguración del nuevo Estadio “Beira Rio” del Internacional de Porto Alegre. El tres veces “Mejor de América” recibió un apoteósico homenaje en el recinto que será una de las sedes de la Copa del Mundo. Allí se recordó uno de los más grandes tantos del chileno y una de las piezas de museo del fútbol mundial: el “gol iluminado”, un gol de culto que le dio el título al Inter de Porto Alegre en 1975 y que, hasta el día de hoy, el pueblo brasileño recuerda con cariño y emoción. ¡Grande, Don Elías!

16 de abril de 2014


Las diferencias mínimas de la vida*por Ángelo Guíñez Jarpa

(Autor de los libros “El ajedrez en Chile” y “La vuelta al ajedrez en 90 años”)

Tengo la idea de que si a temprana edad no les explican las diferencias mínimas de la vida a los niños, éstos puedan terminar por confundir

y hasta degenerar su propio origen.

Era el año 1990 y supe que jugaría Naval contra U. Católica en El Morro “Ramón Unzaga” (en honor al jugador vasco que jugó en Talcahuano y patentó “la chilena”) y decidimos ir escondidos con un compañero de curso, con 9 o 10 años, a lo que sería nuestra primera experiencia de ver un partido en directo.

Al entrar los jugadores explotó el júbilo de los asistentes con un tsunami de epítetos contra Universidad Católica, que en dos minutos superaron en cantidad y creatividad a los que había escuchado en mis 9 años. Además, entró el cañón de Naval, el que hizo su aporte al ambiente de caos con una potente descarga.

En lo netamente futbolístico, y sin estar siquiera en los planes del hincha sureño más optimista, Naval se puso en ventaja con un temprano gol que no tuvo la óptima resistencia de la defensa de Católica.

El ambiente que se desarrollaba en una exuberante fiesta porteña, acompañado de bombos y cánticos guturales, tuvo un súbito golpe de silencio tras unos minutos cuando tras carrerón de Romero cobran


penal a favor de Católica. El verdugo de la falta fue Gerardo Manuel “la vieja” Reinoso, quien remató fuerte al medio del arco, enviando a Ramírez a un rincón equivocado marcando el gol del empate.

Avanzado ya un cuarto del segundo tiempo, el hábil delantero de Católica, Rodrigo Barrera, aprovechó un rebote en área chica y decretó el 2 a 1 para el equipo visitante. Ante el gol, mi amigo y yo fuimos los únicos que saltaron del asiento descontrolados de emoción pero un mar de miradas rabiosas nos sentaron con rapidez.

Seguía el partido, y el triunfo 2 a 1 pasaba susto con los embates de los delanteros “del ancla” que Toledo arrojaba por la borda con gran calidad. En eso, y contando que restaban aproximadamente 20 minutos, pensé en el acto kamikaze de enarbolar mi bandera sin importar que me la quitaran o lo que fuera, pero en eso ocurrió un ataque impecable de Naval, que concluyó con un pase profundo de Oscar Lee Chong a Héctor Francino quien de manera sólida esgrimió el empate.

El 2 a 2 no lo esperaba ninguno de los pocos aficionados de Católica, ya que, de hecho, la diferencia en la tabla de posiciones era infinitamente equidistante. Mucho menos era de sospechar que tras 5 minutos el delantero de Naval, Juan Carreño, barriera con todos los defensas cruzados y fusilara al portero con un cañonazo al primer palo marcando el 3 a 2 a favor del local.

Con esto, entró por tercera vez al campo el mítico cañón de Naval a disparar la salva que anunciaba que el equipo había marcado un gol.

Ahora, si bien tuve que ver perder a mi equipo, la imagen de observar ese carnaval causado por 11 gladiadores, capaces de rehabilitar el ánimo a un pueblo tan golpeado como el de Talcahuano, con un triunfo sobre una potencia de la capital, hizo un fuego extraño en mi corazón. Me sentí inmediatamente una especie de desertor o traidor de mi tierra...


todo porque nadie me había explicado “las diferencias mínimas de la vida”.

En fin, la vida quiso darme la lección de fidelidad y pertenencia a la tierra que te vio nacer de esa cruda manera. Por tanto, hoy en día no me avergüenza contar esa historia y me enorgullece ser de Talcahuano y de Naval.

Ser nacido en el puerto de Talcahuano y no ser hincha de Naval o de Huachipato, equipo que respeto como digno rival de la zona, es no entender nada del funcionamiento de las comunidades y del orgullo que debe existir al ser de este importante puerto chileno.

Y cómo no ser un orgulloso Navalino, si el único equipo chileno que ha tomado el desafío de vestirse con el uniforme rojo de la selección ha sido Naval, tanto en la Olimpiada de Helsinki en 1952 como en Lima en 1957. Por tanto, insisto... quienes nacen en Talcahuano y no comulgan con Naval o Huachipato no entienden nada, o bueno, “casi nada de nada nunca” de donde están parados.

* El autor cedió gentilmente este cuento para ser publicado exclusiva e inéditamente en este libro.


Loreto Soto Núñez: palabra de campeona

Una niña menudita se destaca en todas las pruebas físicas y demuestra habilidades y destrezas sobresalientes para los deportes. El docente

la observa detenidamente, toma nota y la elige para representar al colegio Inmaculada Concepción de San Fernando en los torneos interescolares nacionales. También la escoge para la selección de gimnasia rítmica y de fútbol femenino. La estudiante se lleva todos los sietes de la clase y sus compañeritos exclaman: ¡Profe, la Loreto es seca para los deportes. Así no se vale!

Es que para la campeona sudamericana de BodyFitnnes Loreto Soto Núñez el deporte no solamente se convirtió en su pasión y estilo de vida, sino también en su profesión y en su bandera de lucha. Desarrollar esta disciplina en Chile es muy difícil, y siendo mujer lo es más todavía. Este deporte es mal mirado y más aún con lo que ha pasado con Cristián Lobarede. A quienes lo practicamos se nos rotula como los típicos “cabezas de músculo”, pero me gustan las cosas difíciles.

Entre sus logros más rutilantes se encuentran el 11° lugar entre 56 participantes en el Torneo de Santa Susana, en Barcelona, España, en 2011. En 2013 se coronó campeona sudamericana en Cochabamba, Bolivia, y salió séptima en el Arnold Classic Sport, en Austria, y en el mismo torneo que se desarrolló en 2014 en Río de Janeiro, Brasil, ocupó el sexto lugar. El 2013 ha sido el mejor año de mi carrera, porque logré el campeonato sudamericano y salí séptima en Arnold Classic Sport en Europa. En Santa Susana me convencí de que podía llevar títulos y cosas


grandes para Chile, y también me di cuenta de que si quería seguir haciendo esto, tenía que trabajar mucho, porque la competencia es muy dura afuera.

Como en todo emprendimiento del deporte, los recursos no sobran y bien lo sabe “La Loba”, quien ha tenido que invertir casi el 100% de recursos propios y familiares para el desarrollo de su carrera. He tenido súper malas experiencias con los auspiciadores. Mejor dicho no las he tenido. Everlast me apoyó y me dio la oportunidad de ser su rostro, para así subir mi categoría y ser más interesante para algún auspiciador. Sé me pagó el trabajo fotográfico, pero ellos no han puesto plata en esto.

La Municipalidad de Rancagua el año pasado, me ayudó con plata para viajar al Mundial en Europa y creo que ese ha sido el auspicio más importante que he tenido. Con el esfuerzo mío y también de mi pareja, me costeo la alimentación, la preparación mensual y el entrenador. Y hasta el traje de baño que se usa para las competencias, que fluctúa entre los mil y los siete mil dólares.

Por la falta de apoyo en nuestro país, muchos deportistas criollos son tentados para competir por otras naciones que sí les dan una real importancia al deporte y a la actividad física. Loreto no es la excepción.

En 2011, cuando fui a competir a Barcelona en el Torneo Santa Susana y quedé en el 11° lugar, me llamó el presidente de la Federación de BodyFitness de España y en una reunión me pidió que compitiera por ellos. Me pusieron un entrenador y yo hablé con la Federación de Chile para decirles que estaba pensando en competir por España. Lamentablemente no se pudo concretar el vínculo porque la pretemporada en Europa duraba seis meses y yo tengo una hija menor de edad y no podía llevarla. Por España me hubiese ido mucho mejor, porque es una federación mucho más potente que la nuestra.

La sanfernandina es una activa usuaria de las redes sociales y a diario recibe cientos de comentarios, felicitaciones y piropos. También la


prensa le ha dedicado algunas páginas y algunas notas que resaltan su belleza y sus sorprendentes logros deportivos.

Nunca pensé salir ni siquiera en un solo diario, ni en broma, y de pronto salen con cosas como eso de: “La abuelita más rica de Chile” o la “Loreto rompecorazones” y tú dices ¿Yo? ¿Cuándo? Imagínate con la edad qué yo tengo, la familia y los niños y a ratos verse media sexy en bikini en “La Cuarta”. Ha sido notable para mí y creo que he dejado bien puestas a las mujeres cuarentonas en este país, y espero que todo lo que se ha hecho les sirva algún día a todas las mujeres que se interesen por el fitness.

Para la campeona sudamericana de BodyFitness no hay imposibles y tampoco hay techos. La vida le enseñó a sobreponerse a las adversidades y a torcerle la mano al destino, a ese que muchas veces nos golpea y nos deja sin respuestas.

El fitness me salvó de una depresión cuando tenía 35 años y sufrí del síndrome del nido vacío cuando mis hijos se fueron de la casa. Quiero inspirarlos a todos a llevar una vida sana, una vida activa, una vida que los lleve a crecer espiritualmente y emocionalmente. Yo compito en el circuito amateur y hay un circuito profesional. Mi techo es llegar al circuito profesional. Mi meta antes era el sudamericano, pero lo gané y ya no es mi techo. No puedo competir en Chile porque mi puesta en forma y mi nivel no me dan para competir acá, y en Sudamérica en un tiempo más tampoco.

Palabra de mujer, palabra de chilena, palabra de campeona.

5 de mayo de 2014


Paredes o Canales: ¿cuál es su elección?

Qué difícil se me hace la elección cuando me preguntan por Los Beatles o Elvis Presley, Maradona o Pelé. Asimismo, entre un

Merlot o un Cabernet Sauvignon o entre la Jennifer López y la Sofía Vergara. Por esto mismo, no me gustaría estar en el pellejo de Jorge Sampaoli a la hora de escoger entre Esteban Paredes y Gustavo Canales.

No es fácil la decisión porque se trata de dos artilleros de sangre fría, de esos que escasean en el fútbol chileno y que cualquier estratego quiere en su oncena titular. Sin embargo, es casi seguro que el “Mago” Valdivia irá al centro del ataque en Brasil 2014. Sí, el “9” mentiroso que alineó el maestro Marcelo Bielsa en Sudáfrica 2010 y que también convence a su discípulo Jorge Luis Sampaoli para esta cita planetaria. Finalmente, Mauricio Pinilla, Carlos Muñoz y Junior Fernandes actualmente no son mejores alternativas que “Visogol” y “Cara de globo”.

El candidato del pueblo es Esteban Paredes, y méritos tiene de sobra. El hincha de la “Roja” no olvida que el delantero peliteñido, le puso el gol a Mark González en Sudáfrica 2010, que anotó en la Copa América 2011, cuando Chile estaba ahogado con la selección B de México, y que les marcó a los uruguayos en las últimas clasificatorias.

Recuerde usted que el ariete también se echó al hombro al Colo-Colo en época de crisis y, de vuelta a club popular, prometió la estrella 30 y más encima fue goleador del campeonato. Este cetro antes lo había celebrado con Santiago Morning en el Apertura 2009 (17 tantos) y con los albos en el Clausura 2011 (14). Con esto igualó la producción de trigoleadores de alcurnia: Carlos Campos (1961, 1962, 1966), Oscar Fabbiani (1976, 1977, 1978), Carlos Caszely (1979, 1980, 1981) y


Rubén Martínez (1989, 1990, 1991). El delantero colocolino está al acecho del paraguayo Eladio Zárate, que ganó en cuatro ocasiones el pichichi en 1967, 1968, 1969 y 1971.

La actual temporada de Gustavo Canales ha estado principalmente marcada por la campaña con la Unión Española en Copa Libertadores de América. Sin embargo, entre sus hitos más importantes está la obtención del Torneo de Apertura 2011 y la Copa Sudamericana en la misma temporada con la Universidad de Chile. Asimismo, el título de Transición con la Unión Española en 2013.

El oriundo de General Roca fue citado por primera vez a la Selección Nacional un 18 de agosto de 2011. Sin embargo, una tendinitis que arrastraba tras la exigente temporada con la Universidad de Chile de ese año le impidió debutar por la “Roja”. Claudio Borghi lo volvería a nominar el 3 de noviembre de 2011. El naturalizado chileno no participó en el proceso de Jorge Sampaoli, rumbo a Brasil 2014, sin embargo sus características propias y su frialdad en el área, le podrían solucionar más de algún problema al entrenador nacional. Precisamente ahora que peligra la participación de un baluarte como Arturo Vidal. ¿Cuál es su preferido?


Manifiesto en amarillo y negro

Mi primer grito no fue de gol, pero me imagino que fue algo bien parecido. Nací el lunes 11 de abril de 1977 a las 9:45, en el

Hospital San Juan de Dios de Santiago. Fui criado en el seno de un hogar humilde, con escasísimos bienes materiales, pero con abundancia de espíritu y amor. Mi padre era obrero ferroviario y mi madre se dedicó abnegadamente a los hijos y también a los quehaceres de la casa.

Mi hermana Pamela me cuenta que hasta mi año y medio vivimos en la calle Bascuñán, al lado de las Broncerías Chile, en el barrio Blanco Encalada. Luego nos cambiamos a la calle Antofagasta, precisamente en el número 3045, en la casa 4 del barrio San Eugenio. Mi casa estaba a cinco cuadras de la Maestranza de Ferrocarriles y del Estadio de Ferroviarios “Hugo Arqueros Rodríguez”. Era un pasaje largo y angosto, donde hice mis primeros amigos y donde di mis primeros chutes. Con mis vecinos Panchito y Marcelo les hacíamos tremendas pichangas a los cabros del Mando Mando y del Saca Pica. También jugábamos con otros muchachos del barrio y de las poblaciones más cercanas como la Arauco y la Fresia. La angostura del campo de juego, obligaba a jugar de a tres por lado y a eso le sacábamos ventaja. Por ejemplo, nos hacíamos autopases con las murallas y así les marcábamos muchos goles a nuestros contrincantes. Sin exageraciones, un toque a la pared era como pasársela a Garrincha o a Lucho Pérez. El “3045” se convirtió en un recinto inexpugnable y casi nadie salía con el triunfo desde ahí.

En el arco el Pancho era portentoso y no entraba ni siquiera el viento. Le vi atajadas y voladas memorables, dignas del “Cóndor” Rojas, del


Pato Toledo o del “Súperman” Vargas. También le vi unos conatos al estilo Juan “Candonga” Carreño.

Marcelo, en la defensa, era el típico larguirucho malo para la pelota pero muy útil atrás. A lo Don Elías, el jugador pasaba pero no la pelota; mejor dicho, los jugadores no se atrevían a pasar porque este cristiano calzaba 41, y una patadita de esas nadie la quería de regalo. Pancho y Marcelo eran hermanos, sin embargo, en la cancha a veces esto se les olvidaba.

Como buen zurdo, a mí me tocaba la creación del fútbol y los goles. A lo Edgard Davis, nunca me sacaba los anteojos para jugar y en los cabezazos sufría porque se me caían o los cabros mal intencionados me los sacaban. Hartas veces tuve que aguantarme el reto de mi madre por los lentes rotos y por su inacabable ida a la óptica a repararlos. Finalmente me los parchaba con cinta adhesiva cada vez que llegaba con ellos destrozados.

Cuando mi mamá me llamaba a tomar onces, el partido se tenía que suspender por algunos minutos. Si íbamos perdiendo me daba rabia, y si íbamos ganando trataba de hacer tiempo. En un acto máximo de fair play y algo más calmado, invitaba a los rivales a sentarse a la mesa a tomarse un tecito y a comerse un rico pan con tomate. Con la guata llena seguíamos jugando hasta que oscurecía y no parábamos hasta que el marcador al menos indicara unos 50 goles para un lado y unos 40 para el otro. Me acostaba cansado y abrazado a la pelota.

Mis ídolos de infancia eran Diego Armando Maradona y Jorge Aravena. El “Pelusa” por sus regates endemoniados y por esa zurda mágica, y el “Mortero” por esa pegada imposible que dejó a los uruguayos calladitos en el Nacional en 1985.

Cuando no pateábamos una pelota, con mis amigos jugábamos ATARI o con las láminas de los álbumes de fútbol. En una cancha de


cholguán de esas de los taca-taca, distribuíamos a las figuras del balompié que Salo inmortalizaba. La “Copa Naranja” que organizamos con el Pancho y Marcelo, enfrentó a los “monitos” de Cobreloa campeón de Chile con Holanda campeón de Europa en 1988. El resultado fue un 5 a 4 a favor de Cobreloa con goles de Juan Covarrubias, Claudio Tello, Marcelo Trobbianni, Jorge “Pindinga” Muñoz y Jorge “Chicho” García. Para los cromos tulipanes anotaron Ruud Gullit, Marco van Basten, Frank Rijkaard y Ronald Koeman.

Los domingos por la mañana eran religiosos, uno porque no me perdía la misa de las diez y media en la Basílica del Perpetuo Socorro, en Blanco Encalada con Conferencia, y dos porque de vuelta me iba corriendo al Estadio de San Eugenio para ir a ver a Ferroviarios con mi papá. Mi viejo era más entusiasta que otro poco y, después de finalizar sus labores en la maestranza, se reunía con algunos colegas para ir a hermosear el estadio. En la base de una escalera de tijeras, se encaramaba para colocar las luces fluorescentes en los accesos del recinto. Las lámparas salían de su bolsillo y su remuneración era el triunfo del domingo. Un altavoz que hizo de latas y que pintó con los colores del equipo, le servía para alentar a los colegas de la barra. El “efe con e” que salía de su boca se escuchaba tanto o más fuerte que el pitar de la locomotora que pasaba a la hora del partido. Cuando jugábamos de visita, salíamos en caravana desde San Eugenio a las distintas localidades. El trayecto era pura camaradería y el Ferrito en la cancha siempre le hacía collera como forastero a Chiprodal de Graneros, Luis Matte Larraín de Peñalolén, Enrique Guzmán de Rengo y a Municipal de Curacaví. En esos tantos viajes, también fortalecí la relación que tuve con mi progenitor.

La confección de las banderas estaba a cargo de las esposas de los ferroviarios, quienes zurcían los paños amarillos y negros que después enarbolábamos en el estadio. El picado de papel era un trabajo menor y


de eso nos encargábamos los hijos de los obreros. La salida a la cancha del equipo era una fiesta y para eso había que prepararse toda la semana.

En 1991 Ferroviarios animaba el campeonato de Cuarta División y entre sus filas destacaba el “Guatón” Pérez, el “Ciego” Negrete, el “Negro” Martínez y Bucarey. En la banca estaba el profesor Francisco Graells, un estratego de gran trayectoria y de muy buen trato con el hincha. La cancha del “Ferro” se repletaba cada fin de semana, es decir, lo que iba quedando del estadio que se quemó allá por la década de los ’80. Los viejos contaban que en esos pastos, había entrenado en 1962 la selección brasileña con el mismísimo Pelé a la cabeza. A los mundialistas chilenos Carlos “Pluto” Contreras, Luis “Fifo” Eyzaguirre y Leonel Sánchez también se les recordaba su paso por Ferroviarios y el subcampeonato conseguido en el Torneo de Ascenso en 1972.

En todos los partidos, y a modo de cábala, me ubicaba en la parte más alta del esqueleto de la galería que daba a la calle Rondizzoni y desde ahí miraba a mi papá y lo seguía con sus cánticos: “¡Vamos, vamos tiznados, que esta tarde tenemos que ganar!”.

En el último partido de la temporada 1991, me lo sufrí todo con el empate a 3 frente a Chipodral de Graneros. ¡Les íbamos ganando por 3 a 0 en el primer tiempo! Lamentablemente el título se fue por la borda, cuando el “Guatón” Pérez desperdició el penal que nos daba el triunfo por 4 a 3 y el título de campeón. Dicen que el robusto mediocampista se vendió por unos cochinos pesos y por unas cuantas botellas de whisky. Me acuerdo que por algunos días el “10” no pudo salir de su pieza que precisamente estaba al frente del estadio.

Ese mismo año en que Colo-Colo se coronó campeón de la Copa Libertadores de América, se anunció un partido de los albos con Ferroviarios en San Eugenio. Había mucha expectación y en la calle los letreros se fueron multiplicando en los postes de luz y en las paredes del


barrio. Sin embargo, por la extenuante agenda del Cacique este pleito se trasladó a enero de 1992 en el Estadio Monumental. Ferro cayó por goleada, pero el recuerdo y la anécdota quedaron para siempre. Ahí estuvimos con mi viejo, como siempre en las buenas y en las malas.

Estudié la secundaria en el Liceo Darío Salas, que está ubicado en Avda. España con Gay, y para todos los peloteros del establecimiento era un orgullo saber que Carlos Humberto Caszely había estudiado allí. En los aniversarios del Liceo, el sempiterno delantero iba a jugar un partidito de baby fútbol con los alumnos. Curiosamente el “Chino”, también era hijo de ferroviario y también vivía a cuadras de la cancha de San Eugenio.

Los cuatros años en el Darío me los pasé en el patio jugando a la pelota con el “Churejas” Díaz, el “Ele”, el “Yegua” Benavides, el Alain y el Bórquez. Cuando nos fuimos de paseo a Los Vilos a fin de año, también nos la pasamos entre chilenas, taquitos, rabonas y enganches. A los cabros del curso, un día se les ocurrió hacerles un partido de baby a los carabineros de la 2da comisaría que está ubicada en Toesca al llegar a la Avenida España. No hubo problemas pero entramos asustados a la cancha, porque estábamos enfrentando a los mismos pacos que nos correteaban en las protestas. Un empate a cinco selló el amistoso y también unas cuantas chelas.

A los 17 años dejé el barrio San Eugenio para mudarnos con mi familia a la casa propia en Maipú, materialización de los 25 años en los que mi papá trabajó y dejó el alma y el corazón en la Empresa de Ferrocarriles del Estado. En ese mismo año, mi papá jubiló de manera anticipada y se alejó del estadio. Mis estudios y los pololeos también me distanciaron del Ferroviarios. Sin embargo, un viejo amor no se olvida ni se deja y hace unos cuantos años volví a la cancha a gritar por los aurinegros.

Esta vez ya no estaba el estadio y mi papá tampoco.

El autor


Índice

Futbolistas desaparecidos (Óscar Hahn) ...............................................................................7

Prólogo

El balón comienza a rodar ............................................................................................................9

La “Roja” de ellos ..................................................................................................................... 12

¡Qué atropello a la razón!....................................................................................................... 14

“¡Que se vayan todos, que no quede ni uno solo!” .......................................................... 16

La historia no está escrita ...................................................................................................... 18

¿Si es extranjero es bueno? ................................................................................................... 20

El que quiere puede ................................................................................................................ 22

Ser o no ser campeón... esa es la cuestión ........................................................................ 24

Sin tiempo paralamentarse ................................................................................................... 26

En el Club México respira el boxeo chileno ....................................................................... 28

Carolina “Crespa” Rodríguez, bendita seas entre todos los puñetes .......................... 30

Crónica de una debacle alba ................................................................................................. 32

El cielo está cada vez más azul ............................................................................................. 34

Luis Alberto Cerda, un animal del ring ................................................................................ 36

La copa de cartón ..................................................................................................................... 39

Todo fue lindo mientras duró................................................................................................ 41

Joel Mayo Antipichún, un guerrero del deporte ............................................................... 43

Con gusto a caipirinha ............................................................................................................ 45

Universidad de Chile: “Con hambre de león” ................................................................... 47

En pedir no hay engaño .......................................................................................................... 49

Por las nubes ............................................................................................................................. 51

¿Cómo no vamos a ir al Mundial? ........................................................................................ 53

El largo y tortuoso camino a Brasil 2014 ........................................................................... 55

Sampaoli se tiñe de rojo ........................................................................................................ 57

Las finales hay que ganarlas ................................................................................................. 59

Con las uñas carcomidas y los nervios de punta .............................................................. 61

La pesadilla de Alexis ............................................................................................................. 63


El sueño de la “Crespa” .......................................................................................................... 65

Chile sube en las Clasificatorias ........................................................................................... 67

El boxeo es una fiesta en el Club México ........................................................................... 69

Al rojo vivo ............................................................................................................................... 71

Vuelve para ir al Mundial ....................................................................................................... 73

Esto es morir con las botas puestas .................................................................................... 75

Cristián Valenzuela, un campeón de la vida ...................................................................... 78

¡Gracias, Nico Massú! ............................................................................................................... 80

La hora de la “Crespa” Rodríguez ........................................................................................ 82

Más temprano que tarde ........................................................................................................ 84

Por el honor de su historia..................................................................................................... 86

Una cita con la historia ........................................................................................................... 88

Un lindo problema para Sampaoli ....................................................................................... 90

La “Crespa” va por más ........................................................................................................... 92

Alexis de clase mundial .......................................................................................................... 94

El “Aguja” González manda en casa .................................................................................... 96

No hay atajos para llegar al cielo ......................................................................................... 98

Adiós, 2013. Bienvenido, 2014 ..........................................................................................100

Una “Crespa” de talla mundial ...........................................................................................102

Soñar es tan barato................................................................................................................104

El forastero Manuel ...............................................................................................................106

Juegos Suramericanos: la última palabra no está dicha ...............................................108

¡Adiós, Santiago 2014! ¡nos vemos en 2023! ..................................................................111

Juegos Parasuramericanos, como para seguir soñando ...............................................113

Como si fuera la primera ......................................................................................................115

¡Grande, don Elías! .................................................................................................................117

Las diferencias mínimas de la vida Ángelo Guíñez Jarpa..............................................119

Loreto Soto Núñez: palabra de campeona .......................................................................122

Paredes o Canales: ¿cuál es su elección? .........................................................................125

Manifiesto en amarillo y negro José Antonio Lizana Arce ..............................................127


Palabras del autor al terminar un ciclo

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