3
GPS GUÍA PARA SALIR Viernes 23.12.11 Confetis y rock en Valladolid y Burgos MÚSICA Micky & Los Colosos del Ritmo, Chloe o Kurt Savoy, esta noche, en concierto [P10] La última obra de Le Carré, en la gran pantalla CINE Tomas Alfredson firma ‘El topo’, con un solvente reparto encabezado por Gary Oldman [P7] :: JAVIER PRIETO Tres pueblos de la Sierra de Gata conservan, entre sus riquezas patrimoniales, una curiosa forma de hablar [P2] El valle de las lenguas ancestrales

111223 Jálama

Embed Size (px)

DESCRIPTION

Confetisyrock enValladolid yBurgos Laúltimaobra deLeCarré,en lagranpantalla Micky&LosColosos delRitmo,ChloeoKurt Savoy,estanoche, enconcierto [P10] TomasAlfredsonfirma ‘Eltopo’,conunsolvente repartoencabezadopor GaryOldman [P7] MÚSICA CINE Viernes 23.12.11 :: JAVIERPRIETO

Citation preview

Page 1: 111223 Jálama

GPSGUÍA PARA SALIR

Viernes23.12.11

Confetis y rocken Valladolidy Burgos

MÚSICA

Micky & Los Colososdel Ritmo, Chloe o KurtSavoy, esta noche,en concierto [P10]

La última obrade Le Carré, enla gran pantalla

CINE

Tomas Alfredson firma‘El topo’, con un solventereparto encabezado porGary Oldman [P7]

:: JAVIER PRIETO

Tres pueblos de la Sierrade Gata conservan, entresus riquezaspatrimoniales, una curiosaforma de hablar [P2]

El valle delas lenguasancestrales

Page 2: 111223 Jálama

PLANES Viernes 23.12.11EL NORTE DE CASTILLAGPS2

Uno de los tesoros patrimo-niales más valiosos de la ca-cereña sierra de Gata no sepercibe por los ojos, ni conel paladar. No se puede oler,ni beber. Y tampoco es posi-ble sacarle una foto. Simple-mente se escucha. Se oye porlas calles o al preguntar a unpaisano de sus tres pueblosmás occidentales: Valverdedel Fresno, Eljas y San Mar-tín de Trevejo. Es la fala. Una

forma dialectal propia quepor estas tierras del norte ca-cereño resulta tan exóticacomo una sidriña en Barba-te. Pero el caso que esta fala,queda dicho, ha pervividocomo una forma de comuni-cación propia, traspasandolos siglos sin dejarse conta-minar por los usos lingüísti-cos extremeños del entorno,para brillar hoy en día comouna rareza dialectal digna de

estudio. De hecho, está con-siderada Bien de Interés Cul-tural por la Junta de Extre-madura, como la Vía de laPlata o el teatro romano deMérida.

Dicen los filólogos que laexplicación de esta rareza lin-güística, que suena a una can-tarina mezcla de asturiano,gallego y portugués, se re-monta, nada menos, que a lostiempos de la Reconquista.

Al momento en el que los re-yes Fernando II y Alfonso IXhacen donación de la zonaa colonos llegados del noroes-te de la Península para quereemprendan sus quehace-res en estas nuevas tierras depromisión. Y, puede que dela misma forma que los ju-díos expulsados de la Penín-sula se fueron transmitien-do como una seña de identi-dad el habla que usaban en la

tierra que dejaron atrás, man-teniendo vivo al cabo de lossiglos el ladino, aquí, en elnorte de Cáceres, aquelloscolonos debieron de decidirque la mejor forma de no ol-vidar nunca el terruño delque procedían era seguir ha-blando de su vinu y de suquesu como si no hubierandejado nunca de estar entre‘carballus’ y ‘fieitus’ (roblesy helechos).

Pero el caso es mucho máscomplejo de lo que parecey hay teorías dispares. Lamás generalizada concretaque lo que se habla por aquíes una lengua romance que,por cuestiones aún descono-cidas, se quedó a caballo en-tre el portugués y el astur-leonés. O bien fue confor-mándose como un dialectogalaico-portugués con clarasinfluencias del asturleonés.Sea como fuere, no solo estaforma de comunicación suporesistir la ‘contaminación’del castellano o el portuguésen su evolución hasta llegaral momento actual. Lo más

El valle de JálamaPueblos y dialectos del norte en un esquinazocacereño de la Sierra de Gata

RUTAS CON ENCANTOEL VALLE DEJÁLAMA

JAVIERPRIETO

Page 3: 111223 Jálama

Viernes 23.12.11EL NORTE DE CASTILLA PLANES 3GPS

sorprendente aún es quecada uno de los tres pueblosque comparten esa extrañapeculiaridad lingüística, ape-nas separados por unos po-cos kilómetros, han acabadopor limar sus propias deriva-ciones dialectales: o ‘manhe-gu’ en San Martín de Treve-jo, o ‘lagarteiru’ en Eljas y o‘valverdeiru’ en Valverde delFresno.

Una demostración de queel aislamiento algo tuvo quever con el mantenimiento deformas dialectales propias esque a Valverde del Fresno,donde ‘falan valverdeiru’, hasido un poema llegar hasta ladécada de los 90 del siglo pa-sado. Este pueblo, con un lar-go tramo fronterizo con Por-tugal y a 17 kilómetros de lalocalidad salmantina de Na-vasfrías, vivió en el pasadomuy vinculado al estraperloy el contrabando. Hoy lohace, sobre todo, de los oli-vares que prosperan en suamplio término municipal,el más extenso de toda la sie-rra de Gata. También es el

pueblo con más habitantes,el más occidental de la sierray un buen punto de partidapara iniciar el itinerario porlos recovecos de este valle deJálama, pródigo en lenguas yanchurosos paisajes si bienla modernidad y el todo valeha machacado en muy pocasdécadas su patrimonio mástangible, el urbanístico, conexcepción de la iglesia de LaAsunción y la Casona de losFrades, del siglo XVIII.

Las estribaciones meridio-nales de la sierra, sobre cu-yos pliegues se asientan laspoblaciones del valle, sontambién los mejores balco-nes para contemplar las lla-nuras que se extienden des-de ahí hacia el sur. Así se vemientras se accede a Eljas,apiñado en torno al mogotesobre el que emergen losdespojos de su castillo, en lomás alto. Querer llegar encoche hasta arriba sin cono-cer el callejero de este pue-blo de rampas y estrecheceses una insensatez propia deforasteros.

El tercer ‘pueblu donde fa-lan’ es San Martín de Treve-jo, con un bello ‘cascu urba-nu’ en el que, por suerte, hansabido conservarse las hechu-ras de la arquitectura tradi-cional serrana. Es decir, en-tramados de madera y adobe,

escalones de granito para ac-ceder al piso bajo de las casasy callejas empedradas y estre-chas por cuyo centro corre elagua a raudales. Su bella pla-za Mayor, con un desmesu-rado soportal bajo el ayunta-miento, reúne una fuente del

siglo XIX en su centro, unatorre campanario del sigloXVI en uno de sus ángulos yel palacio de la Casa del Co-mendador en otro de sus cos-tados. Desde ella, el impres-cindible paseo a pie por la ca-lles del San Martín puede en-caminarse hacia la iglesia deSan Martín de Tours, queguarda en su interior tablaspintadas por Luis Morales, ‘elDivino’, y después por la ca-lle del Puerto hacia la partealta de la población. Girandoal final hacia la derecha poralguna de las calles con me-jor estampa del pueblo se lle-ga hasta la fuente Chafaril,con una gran escudo de Juande Austria. La calle do Portumarca también el inicio de unbonito paseo señalizado quea lomos de una vieja calzadaempedrada se eleva hacia elpuerto de Santa Clara. Antes,como a una hora del comien-zo, atraviesa el denso casta-ñar de Ojesto.

Desde Villamiel, el puebloa mayor altitud de la comar-ca, se toma la carretera –tam-bién aérea y montañosa– queconduce hasta Trevejo, unaminúscula alquería de he-churas pétreas y ancestralesubicada a los pies de los res-tos de un castillo templariocuyos vigilantes no debíandar abasto para vigilar tantocomo desde él se ve: la exten-sa llanada extremeña salpi-cada de encinares, carreterasy pueblecitos. Tras el replie-

gue musulmán, tan estraté-gica posición fue aprovecha-da por la orden del Templehasta que la fortaleza llegó amanos de la de Santiago en1186. Y así estuvo, codiciadapor todos cuantos pasaronpor estas tierras con ánimode conquista hasta que elejército francés decidió ha-cerla añicos en su retirada.Con la iglesia de San JuanBautista y una torre espada-ña a sus pies y rodeada detumbas antropomorfas quehablan de una larga historiahabitada, conserva lo sufi-ciente como para que sus pie-dras hagan gala de un indu-dable poder de evocación, es-pecialmente cuando la luzdorada del atardecer baña consus relumbres de fuego esterisco encastillado de vistascasi infinitas.

Cilleros, entre las sierrasde Santa Olalla y del Campe-te, entre el granito y la piza-rra, entre el robledal y el pi-nar, marca el final del viajepor el valle de Jálama. Famo-so por su vino blanco, en elpaseo por el casco urbano,del que destacan el caserónque alberga el ayuntamien-to, el palacio de Bacas y laiglesia de Nuestra Señora delos Apóstoles, merece la penalocalizar el Museo Etnográ-fico, con muchas curiosida-des sobre la vida rural de lacomarca a mediados del si-glo XX.� [email protected]

�En marcha. A Valverde delFresno, en la esquina noroc-cidental de la provincia deCáceres, se puede llegar des-de la localidad salmantina deNavasfrías por una retorcidacarretera de montaña en 17km.

�El paseo. Existen variossenderos señalizados en lazona, especialmente relacio-

nados con el paso del GR.10,que atraviesa la sierra deGata. Desde San Martín deTrevejo parte el PR-CC 184hacia el puerto de Santa Cla-ra y Navasfrías. A una horade San Martín se localiza elhermoso castañar de Ojesto.

�Información. www.sie-rradegata.org

Torre del campanariode la iglesia de San JuanBautista, junto al Castillode Trevejo. :: REPORTAJE

GRÁFICO DE JAVIER PRIETO

GUÍA

Soportales de la plaza Mayor de San Martín de Trevejo.

Ventana de una pared desmoronada del castillo de Trevejo.

Chozo tradicional de la Sierra de Gata.