8
[HplL] 13 MUNDO OBRERO / ENERO 2016 E l proceso del escribir y leer, del hablar y escuchar, plantea a ambas partes de esta recíproca labor exigencias cuyo grado de dificultad apenas nota nadie hoy, entre el inmenso voceo general que nos cir- cunda. Por todas partes se mueven bo- cas, se disparan palabras, por todas partes orejas temblonas captan las pa- labras, como si eso fuera la cosa más fácil del mundo. Las palabras que he- mos percibido se nos quedan almace- nadas en la memoria, y cuando nos las inyectan desde fuera tocan nuestra pro- pia experiencia. Los escribidores van yuxtaponiendo en papeles sus signos de escritura, hasta que ellos mismos creen haber obtenido un sentido mediante la sucesión de sí- labas, palabras y frases, y luego tiran a lo lejos las ho- jas de papel, pierden las ho- jas de vista, y ya han olvida- do lo que decían cuando otros cazan las hojas al vuelo, las descifran con paciencia y a lo mejor descubren en ellas un sentido. A menudo, cuando el que escribe se sirve de las palabras, éstas se ajustan al curso del pensamiento y reflejan lo que él se proponía. Pero mu- chas veces, cuando él se para a consi- derar lo que realmente tiene en la men- te, las palabras quieren escaparle, y él tiene que rastrear y dominar las pala- bras una a una, para incorporarlas a su lenguaje. El lenguaje se le aparece co- mo algo imposible, que sólo puede dar- se como consuelo de esta imposibilidad misma. Debajo de cada palabra que él logra encerrar en su escrito se escon- den los fundamentos y los orígenes de toda palabra, el tartamudeo y el balbu- ceo están en toda palabra, y a más hon- dura todavía se pueden oír sonidos inarticulados, un meneo de lengua, un chasquido de labios, y en la impotencia se prepara el aullido y luego ya sólo el silencio. El hablar, escribir y leer se mueve en el tiempo. Una frase choca con la frase opuesta, una pregunta con una respuesta. La respuesta con una nueva pregunta. Retiramos lo afirmado, valo- ramos de nuevo lo negado. Escritor y lector se encuentran en movimiento, es- tán perpetuamente abiertos a alte- raciones. Así llega el escri- tor, dando un rodeo por el desastre y la impo- tencia, al escribir, y ca- da palabra con la que él conquista una verdad ha surgido de du- das y de conflictos. Antaño fue cortado de todo enlace y arrojado a una libertad en la que se perdió de vista a sí mismo. Pero se manifiesta la posibilidad de que él, gracias al lenguaje que le sirve para su trabajo y que sólo en él tiene una re- sidencia fija, encuentre su hogar en to- do punto de aquella libertad. HERRAMIENTAS PARA LA LUCHA Cuaderno de ensayo y literatura Escribir, leer Por Peter Weiss Chema Madoz [HplL]

201601 n292 cuaderno ensayo literatura

Embed Size (px)

DESCRIPTION

Herramientas para la lucha. Cuaderno de ensayo y literatura. Edición Mundo Obrero Nº 292 Enero 2016

Citation preview

Page 1: 201601 n292 cuaderno ensayo literatura

[HplL] � 13MUNDO OBRERO / ENERO 2016

Elproceso del escribir y leer, delhablar y escuchar, plantea aambas partes de esta recíprocalabor exigencias cuyo grado de

dificultad apenas nota nadie hoy, entreel inmenso voceo general que nos cir-cunda. Por todas partes se mueven bo-cas, se disparan palabras, por todaspartes orejas temblonas captan las pa-labras, como si eso fuera la cosa másfácil del mundo. Las palabras que he-mos percibido se nos quedan almace-nadas en la memoria, y cuando nos lasinyectan desde fuera tocan nuestra pro-pia experiencia. Los escribidores vanyuxtaponiendo en papeles sus signosde escritura, hasta que ellos mismoscreen haber obtenido un sentidomediante la sucesión de sí-labas, palabras y frases, yluego tiran a lo lejos las ho-jas de papel, pierden las ho-jas de vista, y ya han olvida-do lo que decían cuandootros cazan las hojas al vuelo,las descifran con paciencia y alo mejor descubren en ellas unsentido. A menudo, cuando el queescribe se sirve de las palabras, éstasse ajustan al curso del pensamiento yreflejan lo que él se proponía. Pero mu-chas veces, cuando él se para a consi-derar lo que realmente tiene en la men-te, las palabras quieren escaparle, y éltiene que rastrear y dominar las pala-bras una a una, para incorporarlas a sulenguaje. El lenguaje se le aparece co-mo algo imposible, que sólo puede dar-se como consuelo de esta imposibilidadmisma. Debajo de cada palabra que éllogra encerrar en su escrito se escon-den los fundamentos y los orígenes detoda palabra, el tartamudeo y el balbu-ceo están en toda palabra, y a más hon-dura todavía se pueden oír sonidos

inarticulados, un meneo de lengua, unchasquido de labios, y en la impotenciase prepara el aullido y luego ya sólo elsilencio.El hablar, escribir y leer se mueve

en el tiempo. Una frase choca con lafrase opuesta, una pregunta con unarespuesta. La respuesta con una nuevapregunta. Retiramos lo afirmado, valo-ramos de nuevo lo negado. Escritor ylector se encuentran en movimiento, es-tán perpetuamenteabiertos a alte-raciones.Así

llegael escri-

tor, dandoun rodeo por el

desastre y la impo-tencia, al escribir, y ca-

da palabra con la que élconquista una verdad ha surgido de du-das y de conflictos. Antaño fue cortadode todo enlace y arrojado a una libertaden la que se perdió de vista a sí mismo.Pero se manifiesta la posibilidad de queél, gracias al lenguaje que le sirve parasu trabajo y que sólo en él tiene una re-sidencia fija, encuentre su hogar en to-do punto de aquella libertad.

HERRAMIENTASPARA LA LUCHACuaderno de ensayo y literatura

Escribir, leerPor Peter Weiss

Chem

aM

adoz

[HplL]

Page 2: 201601 n292 cuaderno ensayo literatura

14 � [HplL] MUNDO OBRERO / ENERO 2016

La obra del poeta Blas de Oterosufrió un cambio profundo en 1950con la aparición de Ángel fieramentehumano, que confirmó el dominio dela tendencia ideológica humanista enla poesía española de la época. Desdeentonces, y hasta su olvido en los añosochenta, la obra de Blas de Otero, con-vertida en canciones e interpretadaspor Paco Ibáñez y Ana Belén entreotros, representó una problemáticaespecífica de un tiempo que parecehaber desaparecido: España, el serhumano y la vida dañada.

M.O. - Su obra incluye varios de loslibros de poemas más significativos desu época: Pido la paz y la palabra(1955), En castellano (1959), Que tra-ta de España (1964) oMientras (1970)¿Qué le impulsa a escribir?

B. de O. - Si escribo/ es por seguirla costumbre/ de combatir/ la injusti-cia,/ luchar/ por la paz,/ hacer/ España/a imagen y semejanza/ de la realidad/más pura.

M.O. - En su obra se une vida y lite-ratura…

B. de O. - Toda la vida entre pape-les. Pero/ papeles transparentes. En lavida/ hundí, enterré la pluma, dirigida/igual que un proyectil, desde el tinte-ro.// De tener que escribir, lo que pre-fiero/ es la página rota, revivida,/ no lablanca, que va, que va perdida/ comosombra de nube en el otero.// Toda lavida. Siempre caminando/ aldeas ypaíses y ciudades:/ debajo de mi manoestá sonando.// Toda la vida entrepapeles. Pero/ entre papeles y realida-des,/ es la realidad lo que prefiero.

M.O. - Se ha dicho que su testimo-nio como poeta es el testimonio de unser humano que nace a través de él…

B. de O. - Aquí tenéis, en canto yalma, al hombre/ aquel que amó, vivió,murió por dentro/ y un buen día bajó ala calle: entonces/ comprendió: y rom-pió todos su versos.

M.O. - Pero no pone su literaturapor encima de la realidad, ¿no?

B. de O. - Yo doy todos mis versospor un hombre/ en paz. Aquí tenéis, encarne y hueso,/ mi última voluntad.

M.O. - El mundo, sin embargo, no

parece seguir sus pasos.B. de O. - Si he perdido la vida, el

tiempo, todo/ lo que tiré, como un ani-llo, al agua,/si he perdido la voz en lamaleza,/ me queda la palabra.// Si hesufrido la sed, el hambre, todo/ lo queera mío y resultó ser nada,/ si he sega-do las sombras en silencio,/ me quedala palabra.// Si abrí los labios para verel rostro/ puro y terrible de mi patria,/si abrí los labios hasta desgarrárme-los,/ me queda la palabra.

M.O. - ¿Es lo único que queda? ¿Lapalabra?

B. de O. - Creo en el hombre. Hevisto/ espaldas astilladas a trallazos,/almas cegadas avanzando a brincos/(españas a caballo/ del dolor y delhambre). Y he creído./ Creo en la paz.He visto/ altas estrellas, llameantesámbitos/ amanecientes, incendiandoríos/ hondos, caudal humano/ haciaotra luz: he visto y he creído./ Creo enti, patria. Digo/ lo que he visto: relám-pagos/ de rabia, amor en frío, y uncuchillo/ chillando, haciéndose peda-zos/ de pan: aunque hoy hay sólo som-bra, he visto/ y he creído.

M.O. - ¿Su tiempo es nuestro tiem-po?

B. de O. - Esta tierra, este tiempo,esta espantosa podredumbre/ que meacompañan desde que nací/ (porquesoy hijo de una patria triste/ y hermo-sa como un sueño de piedra y sol; deun tiempo/ amargo como el poso/ de lahistoria):/ esta tierra, este tiempo quetiran de mis pies/ hasta arrancar loshuesos a mi esperanza última,/ ¡ah, nopodrán, jamás podrán vencerme,/ por-que mi mano se me va y se agarra/ aotra mano de hombre y a otra mano/que me encadenan, madre inmensa ati!

M.O. - Un deseo para los próximosaños…

B. de O. - Gracias doy a la vida porhaberme nacido./ Gracias doy a la vidaporque vi los árboles, y los ríos y elmar./ Gracias en la bonanza y en laprocela./ Gracias por el camino y porla verdad./ Gracias por la contradic-ción y por la lucha./ Gracias por aire ypor cárcel./ Gracias por el asombro ypor la obra./ Gracias por morir; graciaspor perdurar.

Entrevista imaginaria a Blas de Otero (1916-1979)

“Entrepapeles yrealidadeses la realidadloqueprefiero”

Maurizio LazzaratoGOBERNARA TRAVÉS DE LADEUDA.Buenos Aires, Amorrortu, 251 páginas

Continuación de un libro anterior, La fábrica del hombre en-deudado, este ensayo es un intento por desvelar las tecnologíasde poder del capitalismo neoliberal. Frente a las ideas que con-ciben la deuda como un hecho económico, Lazzarato la concibecomo una relación política de sujeción y servidumbre. Esta in-vestigación que se inició hace ya algunos años tiene algunas te-sis bien importantes para el conocimiento de nuestra sociedad y

las posibilidades de actuar en ella: en primer lugar, que la nueva forma de sujetosocial es el hombre endeudado que funciona como aglutinante de todas las figurasde la precarización. La deuda permite a la ideología neoliberal romper el vínculode los individuos con sus condiciones de existencia al hacerle vivir en un espacioque se funda en la expropiación de su futuro. A partir de aquí, la deuda funcionacomo garante de que el sujeto sea quien se considere único responsable de su si-tuación y su carácter de continuada e impagable sirven como nuevomodo de disci-plinar a los pueblos, imponer reformas estructurales, subordinar las acciones degobierno a los intereses del capital y justificar ajustes sin necesidad demás expli-caciones. A partir de la lectura de las obra deGuattari, Deleuze,Marx o Foucault,Lazzarato realiza una crítica de la gubernamentalidad, entendida como una formadescentralizada del poder en la que los individuos participan activamente en supropio autogobierno, y de las estructuras de organización social que constituyenhoy por hoy la especificidad del capitalismo actual.

Fernando DíazPANFLETO PARA SEGUIR VIVIENDO.Madrid, La Oveja roja, 136 páginas

LaOveja Roja reedita el Panfleto para seguir viviendo.FernandoDíaz, su autor, fue presentado así: “Nació enMadriden 1979 y forma parte de una organización revolucionaria”.Eso es todo.El protagonista del Panfleto, no tiene nombre, “es yo”: un

obrero jodido como su familia. Como el escritor, el protagonis-ta, tambiénmilita, y no quiere ser escritor: “si intento aparentarque soy un escritor puede queme convierta en uno de ellos y

ya la hemos jodido”. El Panfleto arranca desde el desafío del ninguneado, con un“Estoy aquí. Puede que no seamucho pero tampoco es nada. Significa que aunquefuerais amandarlo todo a tomar por el culo, yo seguiría aquí. (…). Yo soy uno cual-quiera del baile de los que sobran” (…) “y puedo esperar el tiempo que haga falta”.Recoge Ignacio Echevarría que lo que hace al escritor “no es ver la verdad, sinoserlo”. El Panfleto es verdad. Creo en este escritor cuando escribe “La única can-ción queme interesa es la que diga a los responsables de este puto porvenir: Osvais a enterar”. FernandoDíaz arremete contra “la literatura demierda que nos haacostumbrado a que pensemos que somos peores de lo que creemos, másmezqui-nos, más corruptos, más capaces de la traición, indiferencia, crueldad y cobardía.Yo creo que tenemos derecho a pensar lo contrario”. Y concluye instándonos a po-litizarnos para hacer la revolución, la revolución como un verbo no como un nom-bre. “Mirad, esto no es un discurso, es una llamada que si no obtiene respuestanuncamás se repetirá, con lo cual quedará interrumpida toda relación”. Fernandono ha vuelto a publicar, pero ha sido reeditado. Una editorial, La Oveja Roja, quedeclara ser capaz de ver crecer la hierba, sostiene el desafío: “Me la juego si confíoen ti peromásme la juego si no confío.”

Marina GarcésFILOSOFÍA INACABADA.Barcelona, Galaxia Gutemberg, 335 páginas

Este libro se abre con un capítulo que ya en sumismo títuloseñala la posición de su autora: “cómo no filosofar”. A partir deaquí, la filosofía de Garcés no se plantea como un saber sobrenuestromundo sino como “una práctica de vida que desplazalos límites de lo que es visible y pensable en cada tiempo y paracada contexto histórico y social, a partir de la pregunta por unaverdad que debe ser buscada con el pensamiento”. En su libroanterior,Un mundo común, practicaba ya esta forma de pensar

aplicada al mundo común que tenemos y en respuesta a la pregunta por el noso-tros. Aquí lo hace poniendo como objeto de reflexión a la filosofíamisma en tantoque discurso necesario para la vida concreta. No se busca un sistema ni una con-cepción ética sino unmodo de entender el lugar en que pone a los individuos: unlugar excéntrico (fuera del centro), excesivo (algo que sobrepasa), hecho de nocio-nes y actitudes capaz de transformar la vida. Una filosofía de nuestro tiempo y unaindagación sobre los encuentros. EnEl País señalaba: “Siempre podemos reapren-der a ver el mundo, en esto consisten la filosofía, el arte y la poesía. Igual que so-mos interdependientes, estamos siempre retomando visiones, representaciones,ideas, legados culturales. Y el desafío es recibirlos libremente para poderlos trans-formar. No puede haber novedad sin receptividad. La novedad por la novedad es latiranía del mercado. Lo que ha cambiado, quizá, es que actualmente estamos encondiciones de acabar con el planeta, o por lomenos con nuestra vida en el plane-ta. Este es el problemamás serio de nuestro tiempo. Frente a él, defiendo que la fi-losofía tiene lamisión de “inacabar” lo que amenaza con agotarse, abrir proyectosposibles en estemundo que se acaba”.

Page 3: 201601 n292 cuaderno ensayo literatura

[HplL] � 15

Martín López Navia escribe que la novela es“la comprensión de una experiencia” y creoque acierta en su calado pero almismo tiem-po, así sin más, su afirmación puede resultar

demasiado “celebratoria” del poder y la potencia de la li-teratura en general y de la novelamás en concreto.Parece evidente que una novela, una buena novela, es

decir, aquella que es capaz de encajar la totalidad de unsuceder dentro de ese largo instante narrativo que la no-vela proyecta, tiene la capacidad de introducirnos en unescenario dinámico de vidas para invitarnos a su com-prensión en la doble dirección semántica de la palabra:comprender como abarcar y comprensión, como enten-dimiento que conlleva cercanía.Ahora bien, lo que ese enunciado no “comprende” es

el hecho de que toda experiencia, todo ese equipaje delectura, ya leve, hondo o consistente, está asentada tantoenel instrumental conceptualqueprecedea lapercepcióncomo en el lugar social desde el que ese abarcamiento olectura se realiza. López Navia parece olvidarse, o darpor supuesto, este suceder que, en cuanto que es acto depercepción, pasa a ser elemento constituyente de la na-rración. Es decir, toda experiencia es “paciente” de unaideología previa al hecho que se experimenta, ya en elsentido clínico del concepto: “el que está pendiente, depreferencia con anticipación a la aparición de los sínto-mas, a toda sensación de cambio”, ya en el sentido máscotidiano: “el que sufre con inquietud el paso del tiempo”.La ideología comomotor de la impaciencia.De ahí cabe deducir como hipótesis que toda expe-

riencia, y conmayor causa aquella que “nos acontece” enel interior de una novela, requiere paciencia, examen deconciencia y si la novela, da de sí toda su potencia –elQuijote por ejemplo, oGuerra y paz, o La educación sen-timental, Lo prohibido de Galdós o Campesinos deJoaquín Arderius-, propósito de la enmienda.

Experiencia,literatura eimpaciencia

Enmanuel RodríguezPOR QUÉ FRACASÓLADEMOCRACIA EN ESPAÑA.LA TRANSICIÓN Y EL RÉGIMENDEL 78.Madrid, Traficantes de Sueños, 385páginas

Sobre la transición se ha escritoen tres direcciones distintas: una, lamás abundante y que ha sido hege-mónica en todo este tiempo, la defi-

ne como un tiempo de conquista progresiva de la demo-cracia; otra, casimarginal pero bien importante en susplanteamientos, la considera una prolongación de las es-tructuras de poder que habían crecido al amparo de ladictadura de Franco y que utilizan, tras sumuerte, la for-ma parlamentaria para ampliar sus intereses. Una terce-ra, que es en la que se inscribe el libro de Rodríguez, apli-caría unametodología histórica diferente paramostrarque la Transición es respuesta a una crisis económica,política y social, la de los setenta, y que se desarrolla enfunción de una lucha entre los aparatos de poder y losmovimientos implicados en la transformación social (sin-dicatos, asociaciones vecinales, luchas autónomas en lasfábricas, etc.), por una parte, y de las contradicciones queesosmismos protagonistas tuvieron frente a las posibili-dades del cambio radical de la sociedad. El libro repasaminuciosamente los diferentesmomentos del proceso ylo que se juega en cada uno de ellos. Una escritura suges-tiva y clara describe el conjunto de acontecimientos rele-vantes que permiten esbozar otra interpretación del pe-riodo. Probablemente hubiera sido necesaria una contex-tualización internacional sin la que no es posible enten-der lo que sucedió en España y profundizar en lo queOrtídenominó el camino hacia la socialdemocracia transna-cional, pero la obra funciona como estímulo a la reflexiónproductiva y esto ya es fundamental.

Por Constantino Bértolo

Iván IllichEL DERECHOAL DESEMPLEO ÚTIL Y SUS ENEMIGOS PROFESIONALES.Madrid, Díaz&Pons, 135 páginas

Si en los últimos años hemos asistido a una recuperación de la obra del filósofo Ivan Illichcon la publicación de dos tomos deObras escogidas y la reedición de sus textos funda-mentales: La convivencialidad, La sociedad desescolarizada oEnergía e igualdad, tam-bién hemos podido acceder a otros textos que no estaban en castellano. ConEl derecho aldesempleo útil se trae un debate que fue fundamental en los años setenta, en el momentode encrucijada de la crisis ecológica y de la crítica del trabajo que venía de los sesenta.Este ensayo de Illich da cuenta de las características de la nueva sociedad que resume en

la tesis de la creciente dependencia de la población en los bienes y servicios industriales, y en el dominio delos técnicos y expertos que actúan sometiendo la convivencialidad y el desarrollo humano al crecimiento delmercado. Un nuevo tipo de pobreza se produce desde el mismo instante en que se traspasan los límites de lasnecesidades humanas y aparecen otras estandarizadas destinadas a elaborar demandas específicas que sólopueden ser satisfechas por profesionales. Se expropia a la gente de sus recursos propios y de sus posibilida-des productivas independientes de la sociedad industrial avanzada. El mercado de trabajo que conocemoshoy es, en realidad, un ámbito artificial que impulsan las empresas en la producción de sus propios interesesy que, con otros parámetros, resulta necesario.

Louis AlthusserSOBRE LA REPRODUCCIÓN.Madrid, Akal, 311 páginas

Publicado en Francia en 1995, esta reunión de los escritos de Althusser sobre la re-producción de las condiciones de producción de la sociedad, que incluye el famoso ydebatido “Ideología y aparatos ideológicos del Estado”, intenta presentar unmodelo ar-ticulado del funcionamiento de la ideología entendida como relación imaginaria de losindividuos con sus condiciones reales de existencia. Desde las instituciones que consti-tuyen los aparatos ideológicos del Estado y su vertebración para construir una espesared que atrapa a los sujetos, hasta la específica forma en que se vincula el individuo al

aparatomediante la interpelación, Althusser establece unamecánica de funcionamiento fundada en unama-terialidad de la ideología y no en una concepción idealista de lamisma. El libro está escrito de forma clara ydidáctica lo que sirve comomodo de acceso a la complejidad que supone responder a la pregunta acerca decómo semantiene la sociedad y cómo se perpetúa el dominio de una clase sobre otras.

Oliver Stone y Peter KuznickLA HISTORIA SILENCIADADE ESTADOS UNIDOS.Madrid, La Esfera de los Libros, 1053 páginas

Para los autores de este libro “la comprensión de la historia define la idea de lo con-cebible, de lo realizable”. Partiendo de esta premisa, hay una primera razón por la que seescribe este volumen: entender por quémuchos norteamericanos han dejado “de imagi-nar unmundo radicalmente distinto ymejor del que conocemos”, lo que puede extrapo-larse a lo que ha sucedido también en Europa. La segunda razón es que la historia deEstados Unidos que conocemos, la historia oficial, deja fueramuchos hechos notables ysignificativos, interpreta desde posiciones dominantes los acontecimientos fundamenta-les y escamotea los verdaderos intereses que se juegan en torno a los llamados valores

democrático y de justicia. Basada en la serie para televisión, el trabajo de Stone y Kuznick cuenta tanto la his-toria de Estados Unidos desde la consolidación como nuevo imperio hasta la presidencia de Obama, perotambién lamanifestación de las posibilidades que esa historia hubiera podido tener de haber sido otros losprotagonistas y sus actos. La crudeza de los planteamientos, el estar expuestos sin las constantes salvaguar-das habituales del “era lo que había que hacer para la democracia”, y la reorganización delmaterial históricoen términosmás ajustados a lo sucedido (restitución de documentos, rigor en la elaboración de la cronología,comparación entre hechos y declaraciones, etc.) muestran una historia apasionadamente distinta que, aun-que fundada en elmodelo tradicional, sirve como continuo contrapunto de lo que sabíamos y descubre, almismo tiempo,muchos elementos básicos que desconocíamos.

Vicente Campos (ed.)¡EXTRA, EXTRA!MUCKRAKERS, ORÍGENES DEL PERIODISMODEDENUNCIA.Barcelona, Ariel, 577 páginas

El periodismo crítico y la literatura socialista de reportajes contribuyeron, en el periododel cambio del siglo XIX al XX, al conocimiento analítico de la sociedad capitalista. Lasprácticas políticas corruptas que servían a los intereses de los grandes empresarios, la vio-lencia contra los obreros sindicados, lamercantilización de la salud, el infierno de la ex-plotación algodonera o el problema de las infraviviendas son algunos de los temas que tra-tan los trabajos de Jacob A. Riis, Ida Tarbell, EdwinMarkham, Nelly Bly o David GrahamPhillips que se reúnen en este libro. Estos artículos largos influyeron en la literatura de

Upton Sinclair o Theodor Dreiser, y sirvieron como forma de lucha a veces para conseguir reformas necesa-rias y, en otros casos, como orientaciones hacia la revolución. Toda unamanera de pensar el periodismo, ex-celentemente presentada y contextualizada por el editor, que informa sobre las consecuencias y efectos quetodo esta corriente crítica produjo como forma de transformar la sociedad y losmedios de comunicación. Unpúblico ávido de noticias sobre sumundo tuvo en estos escritores los testigos de cómo era: investigaron, con-trastaron y acusaron. Presentaron los hechosmás terribles pero siempre tratando demostrar la estructuraque los impulsaban: los intereses económicos y el poder. Una antologíamuy significativa de lo que fueron losmuckrakers que deja en evidencia el periodismo que tenemos.

MUNDO OBRERO / ENERO 2016

Page 4: 201601 n292 cuaderno ensayo literatura

16 � [HplL]

Precursor intelectual de la primera re-volución del siglo XX, la RevoluciónMexicana, fundó en 1900 el periódicoRegeneración desde el que criticó dura-mente la corrupción política y judicial de ladictadura de Porfirio Díaz. Exiliado enEstados Unidos, promovió la revoluciónsocial enMéxico en 1910 junto a EmilianoZapata, Pancho Villa y otros impulsoresdel proceso de transformación social. En1916 escribió la pieza teatral Tierra y liber-tadque se convirtió enunode los primerosejemplos de teatro político enLatinoamérica.

M.O. - Señor Flores, usted ha escritodiscursos, relatos, ensayos, panfletos,obras teatrales siempre desde una marca-da radicalidad.

R.F. - La libertad no se conquista de ro-dillas, sino de pie, devolviendo golpe porgolpe. La rebeldía es la vida: la sumisión eslamuerte.

M.O. - ¿Por qué no aceptar el reformis-mo?

R.F. -El cambio de amono es fuente delibertad ni de bienestar.

M.O. - ¿Cómo describiría el tiempo quevivimos?

R.F. - La humanidad se encuentra enestos momentos en uno de esos periodosque se llaman de transición, esto es, el mo-mento histórico en que las sociedades hu-manas hacen esfuerzos para transformarelmediopolítico y social enquehanvivido,por otro que esté en mejor acuerdo con elmodo de pensar de la época y satisfaga unpoco más las aspiraciones generales de lamasa humana.

M.O. - ¿Cómoexplicaría la luchade cla-ses hoy?

R.F. -El capitalismo ríe cuandoel traba-jador emplea la boleta electoral para con-quistar su libertad económica pero tiemblacuando el trabajador hace pedazos, indig-nado, lasboletas,quesólosirvenparanom-brar parásitos, y empuña el rifle paraarrancar resueltamente de las manos delrico el bienestar y la libertad. Ríe el capita-lismo ante las masas obreras que votan,porque sabe bien que el gobierno es el ins-trumento de los que poseen bienes mate-riales y el natural enemigo de los deshere-dados, por socialista que sea; pero su risa

se torna en convulsión de terror cuando,perdida la confianza y la fe en el paterna-lismo de los gobiernos, el trabajador ende-reza el cuerpo, pisotea la ley, tiene confian-za en sus puños, rompe sus cadenas y abrecon éstas, el cráneo de las autoridades ylos ricos.

M.O. - ¿No es una posición extrema laque señala?

R.F. -No queremos ricos, no queremossacerdotes ni gobernantes; no queremosbribones que exploten las fuerzas de lostrabajadores; no queremos bandidos quesostengan con ley a esos bribones, ni mal-vados que en nombre de cualquier religiónhagandel pobreun corderoque sedeje de-

vorar de los lobos sin resistencia y sin pro-testa. Porque cualquiera que esté una pul-gada arriba de nosotros es enemigo.

M.O. - ¿Y qué se necesita para que de-saparezcan?

R.F. - Justicia.

M.O. - ¿Qué haría la justicia?R.F. -El Juez debe tener como cualidad

especial una gran dosis de valor civil. Si elJuez titubea al poner el cauterio sobre lallaga, no está en lo justo, no cumple con sudeber, como no lo cumple el cirujano, quepara evitar nuevos sufrimientos al pacien-te, se abstiene de practicar una amputa-cióndolorosa.El Juezesel cirujanoaquientoca practicar esas amputaciones en elcuerpo social y debe hacérselas sin odiosni temores.

M.O. - Cien años de su obra teatralTierra y libertad, ¿qué tiene que decir?

R.F. - La tierra es de todos. El primerdueño apareció con el primer hombre quetuvo esclavos para labrar los campos, y pa-rahacersedueñodeesosesclavosydeesoscampos necesitó hacer uso de las armas yllevar la guerra a una tribu enemiga. Lapropiedadterritorial sebasaenelcrimen,y,por lo mismo, es una institución inmoral.Esta institución es la fuente de todos losmales que afligen al ser humano. Para pro-tegerla se hacen necesarios el ejército, lajudicatura, el parlamento, la policía, el pre-sidio, el cadalso, la iglesia, el gobierno y unenjambre de empleados y de zánganos.Tierra y libertad es un grito, una denuncia.

Mepregunto.Nos pregunta-mos: ¿podríamos los y las tra-bajadoras tomar losmediosde producción de las pala-

bras? Lo que supone no tomarlos, ya lo sa-bemos. Producir ensayos, novelas en unasociedad capitalista, implica venderlas, ha-cerlas comprables por las empresas cultu-rales (también editoriales).Lanzo la pregunta tras diez años de

hacer cine con gente cualquiera desdeCine sinAutor. Desde la respuestamate-rial de saber que ni la literatura, ni el cinese resentirían porque tomáramos susme-dios de producción. Lograríamos novelasy ensayos que cuestionarían un canondeexcelencia o entretenimiento, pero que acambio iniciarían una batalla por nuestrasoberanía literaria o audiovisual. En unejercicio de democratización cultural, im-postergable, lograríamos al hacer esa “to-ma”, que, la clase trabajadora, entre otrossujetos subalternos, explotados ymargi-nados, no fuera borrada delmapa. Y úni-camente, a lo que llamaríamos es a unajusta redistribución del negocio de los oli-gopolios empresariales de la industria cul-tural capitalista.DesdeContrabandos, LaOvejaRoja

viene años apreciando el privilegio degrandes empresas; privadas, sí, pero cons-tantemente subvencionadas por el estado.Pregunten cuántas ayudas gubernamen-tales ha disfrutado sin irmás lejos elGrupoPrisa para su expansión enAmérica Latina. Cuánto dinero ha recibi-do Planeta del estado español para repre-sentar a la “cultura española” en ferias in-ternacionales y etcétera, etcétera.“Cultura española” en la que no esta-

mos y de ahí, este llamamiento a atender aun libro colectivo escrito por un grupo detrabajadorxs, sus familias y la organiza-ción sindical que se han dado. El libro sellamará “SomosCocacolaenlucha” y lo fir-

mará@cocacolaenlucha y estamos a pun-to de lanzar, desde LaOvejaRoja, unacampaña demicrofinanciación enVerkami, para sostenerlo entre quienesnecesitamos leerlo, porque este libro noscuenta nuestra verdad, lo que necesitamossaber para vencer al capital y para com-prender cómonos derrota.Las redes sociales consintieron para

@Cocacolaenlucha una voz colectiva entwitter. Luego una escritora y un editor yunmilitante comunista, se sumaron al co-lectivo obrero, trabajando codo con codocon@cocacolaenlucha para generar obraliteraria. Testimonios personales, palabrasalimento de revolución, ensamblados enuna línea de tiempoque comienzan conunEREexterminador y concluyen con lareadmisión en sus puestos de trabajo delos y las espartanas que se han jugado lavida para no ser lo queCocacola quiso.La sinautoría posibilita unamétodo de

producción que cambia el contrato socialque la gente establecemos con la cultura.La cultura que usamos y nos sirven puededormitarnos o despertarnos, puede asus-tarnos, o darnos valor. El capital ya sabe-mos cómonos quiere.Hagamos pues dela cultura un armapara realizarnos. Paraizarnos a lo real. Para poder ser. Para con-sentirnos.Sea una novela, un arma, para que

unos “obrerillos demierda”, comodiceR.,cuenten y nos hagan saber que no soloexisten, y luchan, también se adueñan desu relato. Sea una novela, un armaparadenunciar que en este país el sindicalismosufre una persecución política.Sea “SomosCocacolaenlucha” una ad-

vertencia de que la literatura del sigloXXI,la ocuparemos también los y las obreras,de forma colectiva generando obra fecun-da, germinadora.Obras que como éstacompartirán su hacer con otras luchas, pa-ra que puedan también decir: “Somos”.

Todami vida he sido conscientede la existencia de otros tiem-pos y de otros lugares. He sidoconsciente de la existencia de

otras personas enmi interior. Y créame,lector, igual le ha sucedido a usted.Mirede nuevo en su niñez, y recordará estaconciencia de la que hablo como una ex-periencia de su infancia. Por aquel en-tonces usted no estaba acabado todavía,no estaba consumado. Era plástico, unalma fluctuante, una conciencia y unaidentidad en proceso de formación, deformación y olvido. Ha olvidadomucho,querido lector, y aun así, al leer estas lí-neas, recuerda vagamente las visionesconfusas de otros tiempos y de otros lu-gares que sus ojos de niño contempla-ron. Hoy le parecen sueños. Sin embar-go, aunque fuesen sueños, por tanto yasoñados, ¿de dónde surge sumateria?Los sueños no sonmás que una grotescamezcla de las cosas que ya conocemos.La esencia de nuestros sueñosmás pu-ros es la esencia de nuestra experiencia.Cuando era niño soñó que caía de altu-ras prominentes; soñó que volaba por elaire como vuelan los seres alados; le tur-barón arañas repulsivas y criaturas ba-bosas de innumerables patas; oyó otrasvoces, vio otras caras inquietantementefamiliares, y contempló amaneceres ypuestas de sol distintos a los que hoy, almirar atrás, sabe que ha contemplado.Bien. Estas visiones infantiles son visio-nes de ensueño, de otra vida, cosas quenunca había visto en la vida que ahoraestá viviendo. ¿De dónde surgen, pues?¿De otras vidas? ¿De otrosmundos?En cuanto amí, ya en los principios

demi vocabulario, a una edad tan tiernaque todavía expresabamediante ruidosque quería dormir o comer, sabía que ha-bía sido un vagabundo de las estrellas.Sí, yo, cuyos labios nunca habían pro-

nunciado la palabra "rey", recordaba queuna vez había sido el hijo de un rey.Másaún, recordaba que una vez había sidoesclavo, e hijo de un esclavo, y que habíallevado alrededor del cuello un collar dehierro. Y todavíamás. Cuando tenía tresaños, y cuatro, y cinco años, no era yomismo todavía. Era solamente una trans-formación en curso, un flujo del espíritutodavía caliente en el molde demi carne.Durante ese tiempo, todo lo que había si-do enmis diezmil vidas anteriores se en-tremezcló con el flujo demi espíritu, enun esfuerzo por incorporarse amí. A lostres, cuatro o cinco años, no era yomis-mo todavía. Estaba solamente brotando,mientras tomaba forma en elmolde de

mi cuerpo, y todo el poderoso e indes-tructible pasado se las arregló para de-terminar cuál sería el destino de aquellaevolución. No fuemi voz la que gritó enla noche por temor a cosas de sobra co-nocidas, pero que yo, en verdad, no co-nocía ni podía conocer. Igual ocurría conmis rabietas de niño, conmis llantos yconmis risas. Otras voces gritaban a tra-vés demi voz, las voces de hombres ymujeres de otras épocas, demis antepa-sados ocultos entre sombras. Y el gruñi-do demi rabia se fundía con los gruñidosde bestiasmás antiguas que lasmonta-ñas; y los dementes ecos demi histeriainfantil, con todo el rojo de su ira, semezclaban con los gritos estúpidos e in-sensatos de bestias prehistóricas anterio-res a Adán. He vividomuchas vidas através de los siglos.

El vagabundodelas letras

Entrevista imaginaria a Ricardo FloresMagón (1873-1922)

“Larebeldíaes lavida:la sumisiónes lamuerte”

Por Jack London

Escribirpara podersercomunistaPor Eva Lazcano Caballer

La esencia de nuestrossueños más puros es laesencia de nuestraexperiencia

MUNDO OBRERO / ENERO 2016

Page 5: 201601 n292 cuaderno ensayo literatura

[HplL] � 17

[1] Gunther AndersLA OBSOLESCENCIA DEL HOMBRE.Valencia, Pre-textos, 2011, 2 volúmenes

Publicado el primer tomo en 1956 y elsegundo en 1980, aunque conmaterialesde tres décadas, los ensayos que compo-nen este libromuestran las formas deconstrucción subjetiva y social que se danen nuestras sociedades a partir de la con-sideración de que las sucesivas revolucio-nes industriales y el desarrollo instru-mental de la ciencia han hecho del serhumano algo prescindible, unamera pie-za del engranajemaquínico dominante.El mundo convertido en un fantasma porlosmedios de comunicación, la amenazaatómica como la posibilidad de la aniqui-lación total del ser humano o el imperati-vo de consumo son algunos de los gran-des temas estudiados. Pero, igual que de-cía Hölderlin, allí donde crece el peligrotambién crece la salvación, estas ideasproveen formas de configuración críticas.

[5] Raoul VaneigemPOR UNA INTERNACIONAL DEL GÉNEROHUMANO.Barcelona, Octaedro 2000

Las categorías nacionales, las catego-rías clasistas, las categorías económicasson supeditadas aquí a la categoría de loviviente que se sobrepone por encima deldinero y del mercado que han corrompi-do todo lo que se podía comer, beber, res-pirar o amar. La violenta fuerza de estediscurso crítico del que fuera uno de losmás importantes situacionistas nos colo-ca frente a nuestra historia de seres hu-manos inacabados, explotados y daña-dos, mientras afirma con vigor y decisiónque nada se ha terminado, que todo estácomenzando ymadurará al viento quesiembra la tempestad de una vida capazde acabar con todas las violencias.

[3] Iván IllichLA CONVIVENCIALIDAD.Barcelona, Virus, 2012

Publicado originariamente en 1973,este ensayo es una guía para la acción, unintento de proponer las condiciones for-males de un procedimiento que permita acada colectividad elegir continuamente suutopía realizable. No se trata de un con-junto de normas ni unmanual técnico, niun tratado, sino de una reflexión sobre lamanera de construir colectivamente unasociedad convivencial en la que las herra-mientasmodernas estén al servicio de lapersona integrada en la colectividad y noal servicio de un cuerpo de especialistas.Una propuesta sólida de construcciónpostindustrial que conjugue la supervi-vencia y la equidad.

[4] Félix GuattariLÍNEAS DE FUGA.Buenos Aires, Cactus, 2013

Para delinear otromundo posible esnecesario que los agenciamientos colecti-vos de deseo que constituyen la realidaddel tejido social, se opongan a las institu-ciones sujetantes. Todo un nuevo vocabu-lario, unmodo de pensar nómada, quetrata de integrar en unmismo análisis lacondición inconsciente de los sujetos, re-alizada a través de diferentesmodos desemiotización, de significación, y su cons-titución como agentes colectivos situadosen territorios ajustados a finalidades pro-gramáticas, pero también las posibilida-des que plantea una economía del deseo,los procesos de desterritorialización ynuevos equipamientos, así como de com-ponentes de la fuerza de creación infra-individual como ejemplos de la revolu-ciónmolecular que se propone.

[10]WalterMignoloHISTORIAS LOCALES / DISEÑOS LOCALES.Madrid, Akal, 2003

Se trata de pensar desde otros pará-metros, desde un pensamiento fronterizo,sin centro. El conjunto de ensayos que seagrupan aquí se preocupa de interrumpirel flujo continuo de la razón occidental (decarácter instrumental) y de hacer jugar enel ámbito de la filosofía y del pensamientouna razón postcolonial, comprendiendolas dimensiones del sistema-mundo comouna forma de transformación social y polí-tica delmundo. La crítica del imaginariodominante, la dedicación a definir la rela-ción de subalternidad, la comprensión delas otras lenguas culturales, suponen laemergencia de una diferencia colonial quefavorece un conocimiento global y radi-calmente histórico de nuestro tiempo.

[12] Annie LeonardLA HISTORIA DE LAS COSAS.México, FCE, 2010

En el sistema capitalista se producesin fin, sin control y sin responsabilidad.Además de lo que significa como dramahumano en cuanto a la explotación de lafuerza de trabajo, también es un dramaecológico en cuanto a la explotación de lanaturaleza. El libro de Leonard, pensadopara llevar a un gran público la compleji-dad del circuito de la extracción, produc-ción, distribución, consumo y desecho decosas, ofrece un panorama aterrador dela contaminación y destrucción que el sis-tema capitalista hace en cada uno de esosprocesos. El modo de constitución em-presarial, la legislación y el funciona-miento corporativo favorecen la repro-ducción de esta barbarie, pero en cadacapítulo se señalanmaneras de cambiarlas cosas hasta llegar, al final del libro, auna visión de un nuevomundo. No habrásalida del capitalismo, viene a decir estelibro, si no somos capaces de pensarlo co-mo una fuerza destructiva de la vida.

[7] Jordi ClaramonteLA REPÚBLICA DE LOS FINES.Murcia, CENDEAC, 2010

El arte también puede pensarse comoun dispositivo de transformación a partirde la proyección de la autonomía sobrelos colectivos, los individuos y los pue-blos. El análisis de las diferentes formasen que se ha dado históricamente esa au-tonomía, la <autonomía ilustrada>, la<autonomíamoderna> y la <autonomíamodal>, y los límites que produjeron lasdos primeras dejan pendientes la explo-ración de la tercera cuya naturaleza debe-ría ser expansiva hasta hacer posible unordenamiento intelectual y político en elque se garanticen todos y cada uno de losproyectos de autonomía posibles.

[8] Jorge Riechmann, Óscar Carpintero yAlbertoMatarán (Coords.)LOS INCIERTOS PASOS DESDE AQUÍHASTAALLÁ: ALTERNATIVASSOCIOECOLÓGICAS Y TRANSICIONESPOSCAPITALISTAS.Granada, Universidad de Granada, 2014

Este libro es, por una parte, una expli-cación de la crisis ecológico-social origi-nada por el choque de las sociedades in-dustriales contra los límites biofísicos delplaneta; y, por la otra, un conjunto de pro-puestas sectoriales, planteamientos deanálisis mediante nuevas herramientasteóricas y proyectos de investigación queintentan impulsar el vínculo social, refor-zando las experiencias activas de la ciu-dadanía, y abrir un camino de transiciónque pueda señalar lo que podemos hacerfrente al abismo.

[9] José Iglesias FernándezLAS RENTAS BÁSICAS.Barcelona, El Viejo Topo, 2002

De los diferentes libros que se hanescrito sobre este nuevo derecho ciuda-dano, éste de Iglesias Fernández es elque hizo una apuesta más amplia ydesarrollada en todos los niveles de laRenta Básica, convertida más adelanteen Renta Básica de los Iguales. El dere-cho de toda persona a disfrutar de unaparte de los recursos naturales y de lariqueza social obtenida a partir de losmismos posibilita la transformación dela sociedad capitalista, además de serun instrumento de reestructuración dela distribución de la renta. Los modelos,los conceptos, los fundamentos éticos yla viabilidad económica y financierason elementos de emancipación delmercado capitalista.

[6] VV.AA.SIN PATRÓN.Buenos Aires, Lavaca, 2004

De los consejos obreros al controlobrero sólo hay un camino: la recupera-ción o el dominio de los pueblos de losmedios de producción que sostienen la vi-da biológica y social. Las diez historias defábricas que sirven como ejemplo en estelibro, gestionadas por trabajadores, queestructuran su producción no sólo en fun-ción del mercado sino de un nuevo ámbi-to social de circulación demercancíasque incluyemunicipalidades, comunida-des e instituciones públicas, demuestranque la riqueza no la crean los empresa-rios sino los trabajadores y que el merca-do no es la únicamanera de expresión delos intercambios de bienes. Un libro tam-bién de testimonios para aproximarse auna realidad enmarcha.

[2] Pierre Dardot y Christian LavalCOMÚN.Barcelona, Gedisa, 2015

Este ensayo sobre lo que ya se llama“la revolución del siglo XXI” parte de unacrítica a la lógica neoliberal y propone locomún como una nueva institución de lasociedad por ellamisma, que opone el de-recho de uso al derecho de propiedad; unprincipio de limitación delmercado, unprincipio que debe bloquear la lógica dela producción ilimitada propia del capita-lismo, constituyendo una democracia so-cial. Cada capítulo hace propuestas defuncionamiento, de articulación; y esta-blece losmarcos legales y jurídicos quefavorecen la institución de lo común.

[11] Archon Fung y Erik OlinWrightDEMOCRACIA EN PROFUNDIDAD.Bogotá, Universidad Nacional de Colombia,2003

Primer volumen de los cuatro de losque se compone el proyecto “Utopías rea-les” (pendientes aún), que presenta dife-rentes estudios de caso de experiencias dedemocracias expandidas en todo elmun-do, con características diferentes que sir-ven como ejemplo de nuevas formas departicipación en las decisiones políticas,de búsquedas de la sostenibilidad ecológi-ca, de transformaciones en elmedio ruralo de la planificación descentralizada.Formas institucionales de gobierno parti-cipativo comonuevomodelo democrático.

1 Libros necesarios paraCAMBIAR EL MUNDO

321 4

5 6 7 8

8

9 10 11 12

MUNDO OBRERO / ENERO 2016

2elpróximoaño

Page 6: 201601 n292 cuaderno ensayo literatura

18 � [HplL]

Novelista (Adiós a los padres, Puntode fuga), dramaturgo (Canto del fanto-che lusitano,Mockinpott), pintor y cine-asta, la obra deWeiss es una constanteindagación por encontrar una escrituramaterialista, hecha a partir del antago-nismo, que esté a la altura de las luchassociales que caracterizan su tiempo.Conocido por suMarat-Sade, su obrase abre camino por un realismo extensoy dialéctico.

M.O. - ¿Podría comentar la funcióndel escritor en la sociedad?

P.W. - Cada palabra que escribo yque doy a la imprenta es política, esdecir, apunta a un contacto con gruposnumerosos de población para produciren ellos un efecto determinado. Al co-municado que entrego a uno de estosaparatos de comunicación, sigue laelaboración de mi comunicado porparte de los consumidores. La formaen que son acogidas mis palabras vie-ne condicionada en gran manera por elorden social bajo el que son difundi-das. Puesto que mis palabras no repre-sentan siempre más que una partemuy exigua dentro de la opinión gene-ral, debo lograr la máxima precisiónposible para poder penetrar en ella conmi opinión.

M.O. - ¿Puede explicar la contradic-ción entre libertad de expresión y litera-tura crítica?

P.W. - Sí.Mientras sólo dé expresiónami incomodidad, ami tedio en la so-ciedad, se tratará siempre de un proble-ma psicológico que no perturba a losgobernantes en susmanejos. Puedodescribir sin trabasmi situación de faltade soluciones, porquemi falta de solu-ciones presupone sin duda la solidez desus instituciones. Seme compran inclu-so las ideasmás absurdas, mi sarcasmo,mi ironía, porque con ellos no hagomásque suministrar a los que detentan elpoder la prueba de su liberalidad. Deestemodo se sienten tan seguros en susposiciones, queme dan permiso para

que defiendamuchas cosas que amíme parecen progresivas.

M.O. -Entonces, ¿qué puede hacerel arte?

P.W. - La suprema cualidad del arteradica en su capacidad de influir en larealidad para transformarla. Un artequemuestre la esterilidad, la alienacióny el absurdo de una esfera vital, sin bus-car al mismo tiempo una alternativa, harenunciado a sí mismo como arte y seconvierte en parte integrante de suspropias negaciones.

M.O. - ¿Cómo puede valorar suobra?

P.W. - Sé lo difícil que resulta dife-renciar los componentes estéticos ymorales del arte, y la dificultad, muchomayor, que supone establecer el gradode utilidad del arte. La medida supre-ma que he podido aplicar ha sido elconcepto de «verdad», pero, al hacerlo,soy consciente de cómo ha cambiadodicho concepto en el curso de mi tra-bajo, hasta alcanzar la verdad que paramí resulta válida: que mi arte no sirvede nada si no está en contacto con lasfuerzas que hoy luchan por una trans-formación radical de las condicionessociales de vida.

M.O. - Para terminar, ¿cómo trabajausted?

P.W. -Una frase choca con la fraseopuesta, una pregunta con una respues-ta. La respuesta con una nueva pregun-ta. Retiramos lo afirmado, valoramos denuevo lo negado. Escritor y lector se en-cuentran enmovimiento, están perpe-tuamente abiertos a alteraciones.

Entrevista imaginaria a PeterWeiss (1916-1982)

“Elartequenobuscaunaalternativaharenunciadoasímismocomoarte”

Juan del RíoGUÍA DELMOVIMIENTODE TRANSICIÓN.Madrid, Los Libros de la Catarata, 238 páginas

Este libro, amedio camino entre ensayo ymanual práctico,parte del hecho de que la transición a otromodelo de sociedades inevitable: la crisis de sostenibilidad social, el fin del petró-leo, los límites del crecimiento determinan escenarios futurosde distinta naturaleza. Alejándose de los que desembocan enun colapso global, del Río plantea unmodelo de desarrollofundado en la resiliencia local. Se trata de favorecer la diversi-dad de losmiembros que forman esa comunidad, la descen-

tralización de las conexiones de esosmiembros (modularidad) y la potenciación dela distancia corta en lo que respecta a la relación causa-efecto. Este planteamientoabre el campo de posibilidades a la autoorganización, a la gestión colectiva de losrecursos y de los bienes comunes. A partir de aquí, el libro señala los pasos necesa-rios para poner enmarcha unmovimiento de transición en unmunicipio, en unpueblo o en una ciudad, un proceso, por tanto, enraizado en el lugar y un contexto,que provee de herramientas para transformar “los problemas en soluciones”. Elplan resulta sencillo: empezar formando un grupo, sensibilizar después a la comu-nidad, establecer alianzas, construir una visión comunitaria, crear un espacio parala transición interior y realizarmanifestaciones prácticas enmateria energética,alimenticia y comunitaria. Un proyecto que se desarrolla ya en todo el mundo.

Miguel BrievaLO QUE (ME) ESTÁ PASANDO.Barcelona, Penguin RandomHouse, 101 páginas

Autor de numerosos dibujos paródicos y críticos con losque ha intervenido en los diferentes procesos sociales quese han producido en el último decenio y que ha ido am-pliando en un intento por extender esa ácida representaciónde nuestromundo al sistema social y a su historia, este libroes, sin embargo, una novela gráfica en la que un joven, quelleva varios años en paro y con depresión, comienza a vivir

extraños fenómenos que lejos de alejarlo de la realidad, lo acercan a ella de formareveladora. Escrito y dibujado como si se tratara de un diario, a la visión inquietan-te de la sociedad se suma el progresivo descubrimiento de instantes de gran luci-dez sobre lo que está pasando. Los dibujos de Brieva se concretan aquí en lo narra-tivo, al contrario de lo que es su trabajo habitual, hechos en dos colores y estable-ciendo una trama argumental que pasa por el espinoso asunto de lo queme pasa amí y lo que nos pasa a todos: “Es que sólo lo que pase por el interior puede llegar alexterior. De ahí el juego en el título. Están pasandomuchas cosas pero parece quehasta que no pasan por nosotros, vía el sufrimiento o la empatía, no llegamos adarnos cuenta de su escala. Hasta que el tsunami no nosmoje los pies no vamos areaccionar. En el libro ocurre con algunos personajes, como el padre del protago-nista, que hasta que la tierra no empieza a resquebrajarse bajo sus pies no despier-ta. El cómic habla de que las cosas tienen que pasar por nosotros, sin embargo laidea fundamental es que justamente la solución no pasa sólo por nosotros sino porla unión”.

Domenico LosurdoLA IZQUIERDAAUSENTE.Barcelona, El Viejo Topo, 347 páginas

Los acontecimientos históricos de las últimas décadas (lacrisis económica, la tragedia del pueblo palestino, el uso dearmas químicas en Siria por parte de aliados deOccidente,etc.) no han tenido respuesta por parte de la izquierdamun-dial: no ha tenido el valor de hacer preguntas y plantear du-das en el momento en que se han producido los hechos y lamanipulación eramás intensa y no ha reaccionado cuando elmundo capitalista-imperialista todavía sigue acreditándose

como el “mundo libre”. Pero además de repasar los escenarios en los que la iz-quierda no ha estado presente, Losurdo también reflexiona sobre los efectos quelas ideas demuchos intelectuales de izquierda, comoDavid Harvey, Slavoj Zizek oSerge Latouche, están produciendo: distorsión de la realidad y ataques al Estadosocial. Las conclusiones a las que va llegando Losurdo son sumamente polémicaspero también productivas. Tal y como concluye su libro “cada nueva situación his-tórica exige a las fuerzas políticas un esfuerzo de reflexión profundo: es precisohacer un análisis de la nueva situación creada y definir una estrategia”. Su intentode comprender los cambios notables ocurridos en el TercerMundo, la desapari-ción del SegundoMundo y las grandes alteraciones del PrimerMundo, así como elconjunto de ideologías que tratan de legitimarlos y consagrarlos, a la luz de losproyectos emancipadores.Más allá de todo planteamiento sobre la izquierda, estelibro trata de abrir un debate sobre la nueva situación delmundo y las distincionesque se hacen habitualmente dentro de la izquierda (izquierdamoderada, institu-cional, radical, etc.) no parecen servir bien para entender sus posiciones en cadauno de los conflictos abiertos.

Mi arte no sirve de nadasi no está en contacto conlas fuerzas que luchanpor una transformaciónradical

MUNDO OBRERO / ENERO 2016

Page 7: 201601 n292 cuaderno ensayo literatura

[HplL] � 19

Acabode leer la recién publicada biografía deVicente Blasco Ibáñez, de Javier Varela (Tecnos,2015), un exhaustivo recorrido por la tumultuo-sa vida de un escritor que no se dedicó solamen-

te a la literatura sino que también fue político, editor y pe-riodista. Una vida apasionada desde la juventud: revolu-cionario, republicano, radical, ideas que llevó al parlamen-to cuando fue elegido diputado. A pesar de esa vida in-quieta, exuberante de actuacionesmúltiples, seguíaescribiendo sus novelas que alternaba con numerosos ar-tículos sobre arte, educación, política que publicaba parapoder vivir. En París compone La araña negra, tremendoataque a la Compañía de Jesús y una clara exposición desu oposición a la Iglesia católica.Más adelante escribe Lacatedral y en su cabeza bulle la idea de llevar a cabo unaHistoria de la revolución española. De vuelta a España co-labora con el diarioEl Pueblo, que ha fundado, y ayuda acrear una biblioteca popular con el fin de llevar la literatu-ra a la gente que tiene pocas oportunidades de acceder ala lectura. Recorremás tarde Chile y Argentina, donde daconferencias en Buenos Aires y concibe un proyecto paracrear en la Patagonia un enclave con el que sueña hacerfortuna y llevar a compatriotas que le sigan. Cuando esta-lla la guerra europea, acude a Francia donde se ha sentidobien siempre y es bastante conocido. Quiere seguir la con-tienda de primeramano y se lo pide al presidente francésque le da su anuencia para que visite los frentes de guerra.El resultado es una novela que le convertirá en un escritorde fama: Los cuatro jinetes del Apocalipsis. El próximoaño se cumple el centenario de su primera edición.Llevada al cine en varias ocasiones, les propongo que lalean y conozcan a este extraordinario escritor cuyos restossiguen hoy en unmísero nicho del cementerio civil deValencia, lugar que le vio nacer, crecer y luchar hasta el finpor sus ideales. Cien años después, los cuatro jinetes si-guen galopando sin freno por casi todas las tierras delmundo.

Cien años de‘Loscuatrojinetesdelapocalipsis’

Naomi KleinESTO LO CAMBIA TODO.Barcelona, Paidós, 703 páginas

Este libro parte de un reconoci-miento hecho por una autora quefue y sigue siendo referenciamun-dial en la crítica de la globalizacióncapitalista: “yomisma negué elcambio climático durantemástiempo del queme gustaría admitir.Sabía que estaba pasando, claro.

Pero no teníamás que una ideamuy aproximada y pocodetallada”. La posición inicial es fundamental para com-prender lamanera en que se escribe el libro: “convivircon esta especie de disonancia cognitiva es simplementeuna partemás del hecho de que nos haya tocado vivireste discordantemomento de la historia, en el que unacrisis que tanto nos hemos esforzado por ignorar nos es-tá golpeando en plena cara y, aún así, optamos por do-blar nuestra apuesta precisamente por aquellas cosasque son la causamisma de la crisis”. Amedio caminoentre un libro de crítica ecológico-social y un ensayo rei-vindicación de unmovimiento de respuesta urgente yfirme al ecocidio, el trabajo de Klein ataca algunos de losprincipios ideológicosmás consolidados: que el mercadonos salvará, cuando, en realidad, la espiral del creci-miento nos está hundiendo; que el desarrollo industrialevitará el colapso, lo que no se corresponde con el ori-gen delmismo; y, finalmente, que el ser humano es codi-cioso y egoísta por naturaleza, sin tener en cuenta laconformación de ese ser humano en esemismomundocodicioso y egoísta del quemuchos quieren salir. Uncompleto libro sobre el dónde, el cuándo, el quién y elpor qué de la crisis medioambiental generada por el ca-pitalismo.

Por Isabel Hernando Sacristán

Marc Blitzstein y OrsonWellesEL PODER SE TAMBALEARÁ.Madrid, La Linterna Sorda, 297 páginas

Una obra de 1936, The CradleWill Rock (El poder se tambaleará), escrita por elcompositor norteamericano comunistaMarc Blitzstein, se incluye en este volumenjunto a otrosmateriales: el primero, el guion cinematográfico que hizo OrsonWelles,que estrenó en 1937 la pieza, sobre los sucesos previos al estreno y durante el mismo.El segundo, algunas de las escenas del guión que TimRobbins rodó con elmismo títu-lo y el mismo asunto (estrenada en España comoAbajo el telón). El tercero las partitu-ras de las principales canciones de la obra teatral así como varios artículos del propioBlitzstein. La importancia de esta obra, una de lasmás importantes piezas de teatro

político, radica en que su análisis del poder incluye la presentación de las formas de extorsión y corrupciónque utilizan los capitalistas, el modo en que la justicia, la iglesia, la universidad, lamedicina, el arte y otros es-tamentos sociales son puestos al servicio de los intereses empresariales, así como la fuerza que la unión pue-de dar a los que son capaces de oponerse a ese estado de cosas. La edición, profusamente anotada y con nu-merosas fotografías de la época, permite conocer el contexto histórico de la obra (los efectos devastadores dela crisis del 29, el momento revolucionariomundial del periodo de entreguerras, la puesta enmarcha de unprograma estatal en EE.UU. para la creación de puestos de trabajo en el medio artístico y la potente línea de-sarrollada en el Proyecto del Teatro Federal, etc.), la tendencia estética, de raíz brechtiana, en la que se inscri-be la obramisma, la fuerza de la ironía y el humor comomodo de hacer frente al drama cotidiano de la ex-plotación. Y la convicción que sostiene la pieza de que el poder caerá.

Dorian Lynskey33 REVOLUCIONES PORMINUTO. HISTORIA DE LA CANCIÓN PROTESTA.Barcelona,Malpaso, 943 páginas

Que el arte ha acompañado, y en ocasiones producido, cambios sociales es algo queresulta obvio cuando se lee este libro y se advierte quemuchos de los acontecimientos ysucesos fundamentales de la historia crítica de la humanidad son conocidos porque unacanción fue compuesta para dar cuenta de ellos y llevarlos a todos los lugares y a todaslas personas. Concebida como una historia de la canción crítica desde 1939 y hasta 2008,este libro ensaya una forma de relatar los contextos en que se escribieron esas cancionesy de informar sobre los pormenores que rodearonmuchas de estas composiciones (re-cepción crítica, grabaciones, conciertos, etc.), al mismo tiempo que estudia las ideas y

emociones que alimentaban, los proyectos que alentaban y el mundo contra el que cantaban (el de la discri-minación racial, la amenaza nuclear, la guerra, la pobreza, la frustración). Todo unmapa de conexiones inte-gran las tendencias ideológicas que dan sentido a unas luchas y reivindicaciones de la cual se extraen cadanota y cada letra de estas canciones.

Jorge RiechmannAUTOCONSTRUCCIÓN.Madrid, Los Libros de la Catarata, 301 páginas

Con una demoledora afirmación, “la revolución (ecosocialista y ecofeminista) tendrí-amos que haberla hecho ayer” se abre este libro imprescindible que es, en primer lugar,un panorama desolador de lo que el imperativo de crecimiento del capitalismo ha produ-cido en nuestras sociedades y en cada una de las vidas del planeta, y en segundo lugar, esun constructivo y potente deseo de transformación a partir de las consideraciones bási-cas de la autocontención, la desconfianza en los discursos individualistas en tanto queaceptación de nuestra condición de seres interdependientes, la conversión de las condi-ciones de producción. Toda la sabiduría de una poéticamaterialista se pone al servicio de

este discurso crítico para revelar paradojas, contradicciones, disfunciones, apariencias, etc. comomuestra elepígrafe “somos lo que hacemos para cambiar lo que somos”. Como es habitual en los ensayos de Riechmanntambién aquí se dialoga en lasmismas páginas del libro, también se cita complementariamente y se acumu-lan razones suficientes para promover un cambio cultural radical que ponga como objetivo “vivir de otrama-nera”, para lo que hace falta no un cambio de ese yo sino un ser humano nuevomediante el descentramientodel yo y las posibilidades de una vida común.

Eduardo SartelliLA CAJITA INFELIZ. UN VIAJEMARXISTA A TRAVÉS DEL CAPITALISMO.Madrid, Akal, 862 páginas

Se trata de explicar el capitalismo, de hacerlo comprensible, para que entendamos quelamayor parte de los problemas estructurales de nuestromundo son resultado de estemodo de producir y de sus específicas formas de sujeción y dominación. Se ha intentadomediante novelas, comics, películas, ensayos filosóficos, resúmenes, introducciones, etc.El libro de Sartelli trata de elaborar una visión total del mundo producido por el capitalis-mo a partir de un viaje que atraviesa tanto las estructuras como las superestructuras, se-gún la conocida distinciónmarxista. Sin embargo, no se limita a describir hechos sino aexplicar su funcionamiento, y tampoco se limita a presentar las explicaciones sino a ha-

cerlas cercanas de lamayoría de la gente apelando a ejemplos concretos de la vida cotidiana y de la culturapopular. El resultado es un trabajo demoledor y terrible que, por el contrario, no desanima ni desactiva el de-seo de cambio. “Este libro fue escrito –dice al final del mismo- contra aquellos que creen que el capitalismo esun buen tipo de sociedad o, peor aún, que es el único tipo de sociedad posible. No importa si quienes piensanasí están conformes como está o ven necesarias ciertas reformas. Pero también fue escrito contra aquelloscompañeros que, seguramente bien intencionados, se lanzan a la lucha sin un conocimiento científico de larealidad que quieren transformar”.

MUNDO OBRERO / ENERO 2016

Page 8: 201601 n292 cuaderno ensayo literatura

20 � [HplL]

Julio Anguita / Julio FlorCONTRA LA CEGUERALa esfera de los libros, 2013

PeterWeissLA ESTÉTICA DE LA RESISTENCIAHiru, 1999

David BecerraMayor (Coord.)CONVOCANDOAL FANTASMA.Novela crítica de la España actualTierra de nadie ediciones, 2015

Sharon SmithFUEGO SUBTERRÁNEO "Historiadel Radicalismo de la ClaseObrera en los Estados Unidos"Hiru, 2015

James Agee /Walker EvansALGODONEROS: TRES FAMILIASDE ARRENDATARIOSCapitán Swing, 2014

Malcolm XAUTOBIOGRAFÍA Contada porAlex HaleyCapitán Swing, 2015

Belén GopeguiEL COMITÉ DE LA NOCHERandomHouse, 2014

Alberto García Teresa (Selec. y Edic.)DISIDENTES. Autobiografía depoetas críticos españoles(1990-2014)La oveja roja, 2015

Fernando BeltránDONDENADIEME LLAMA (Poesía1980-2010)Hiperion, 2011

Isaac RosaEL PUTO JEFELaMarea, 2015

Miguel Benasayag / Angélique del ReyEL COMPROMISO EN UNA ÉPOCAOSCURATierra de nadie ediciones, 2014

VV.AA.CUANDO EL PUEBLO SE ORGANIZA.Experiencias de lucha enla construcción de poder popularCISMA, 2015

Marta SanzFARÁNDULAAnagrama, 2015

La estanteríaLa estantería

MUNDO OBRERO / ENERO 2016