Upload
others
View
3
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
El sapitovegetariano
Ana María Romero Yebra / Arcadio Lobato
c u e n t o s d e a h o r a
22
38
5
c u e n t o s d e a h o r a
C O L E C C I Ó N A C O N S E J A D A D E S D E L O S 3 A Ñ O S
¿Por qué e l sapi to protagonista de esta h is tor ia
es vegetar iano? Probablemente t iene buenas razones
para ser lo , aunque su madre no esté de acuerdo con é l .
El
sap
ito
vege
tari
an
oA
na
Ma
ría
Ro
mer
o Y
ebra
/ A
rca
dio
Lo
ba
to
212121
Primera edición: febrero de 1998 Decimoprimera edición: marzo de 2015
Proyecto y dirección editorial: María Castillo Coordinación editorial: Teresa Tellechea
© del texto: Ana María Romero Yebra, 1998 © de las ilustraciones: Arcadio Lobato, 1998
© Ediciones SM, 1998Impresores, 2 - Parque Empresarial Prado del Espino
28660 Boadilla del Monte (Madrid)www.grupo-sm.com
ATENCIÓN AL CLIENTETel.: 902 121 323 / 912 080 403 e-mail: [email protected]
Cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública o transformación de esta obra solo puede ser realizada con la autorización de sus titulares, salvo excepción prevista por la ley.
Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos, www.cedro.org) si necesita fotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra.
Este libro pertenece a
... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Me lo ha regalado
... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
El día
.... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
5
En la charca grande, entre lo∫ carrizo∫, tuvo doña Sapa un sapo muy lindo.
6
Un sapito verde, con la piel brillante, grande∫ ojo∫ fijo∫ y boca muy grande.
7
Era el má∫ bonito de todo∫ lo∫ sapo∫. Pero no comía y estaba delgado.
8
Su madre trataba de hacerle comer: –E∫ que si no come∫, no va∫ a crecer.
9
Todo∫ eso∫ bicho∫ serán tu alimento. ¡Mira qué gordito∫! Se llaman insecto∫...
10
–¡Si no tengo hambre, querida mamá! ¡No quiero y no quiero! ¡No me insista∫ má∫!
11
–¡Ay, este hijo mío! ¡No me come nada! Tendrá que mirarlo doña Salamandra.