C O N T A C T O S FEBRERO de 2017 Nº 33 FEBRERO … · joven y apuesto capitán leonés Rodrigo de Lara vio en un ajimez a una bellísima ... El valiente leo-nés se presentó ante

C O N T A C T O S FEBRERO 2017

FEBRERO de 2017 Nº 33

Foto: José Luis González

2 C O N T A C T O S FEBRERO 2017

SUMARIO Página

Editorial: Pena 3

Contra los que vociferan 4

La Columna: Dos perfiles 4

Contrastes 5

Leyenda toledana: El arroyo de la degollada 6-7

El Arte Prehelénico 8

Entrevistando a Felipe 9-10

Una fiesta medieval 11-12

Reflexionemos con: … citas célebres 13

A mi admirado D. Camilo José Cela 14-15

Nuestro callejero antiguo 16

El caballo, ¿de culo o de cara? 17

Nuestras amigas las plantas 17

¿Sabias qué ...? 18

Los grandes toreros: Antonio Chenel “Antoñete” 19-20

Las grandes ganaderías: Guardiola 21

Historias 22-24

De la A a la Z de los toros 24

Plantas medicinales: El grosellero 25

El mazapán 25

Poesía: Guitarra española 26-27

Los truquitos de Pilar 28

La cocina de “Contactos” 28

Pasatiempos 29

Chisteando … por Mocaes 30

Programación actividades del Centro 31


CONTACTOS

EDITA

Centro de Mayores

TOLEDO I

COORDINA: Gema Cáceres Rodríguez

REDACCIÓN: Moisés Carrasco Escribano

Felipe Garrido Briceño

José Luis Galán

Benito del Moral

Benito García Martínez

Ángel González Pérez

Alejandro Vega

Dolores Duque Molina

Santiago Galán

REVISIÓN ORTOGRÁFI-

CA Y GRAMATICAL: José Luis González Sánchez

ENMAQUETACIÓN;

COMPOSICIÓN: José Luis González Sánchez

FOTOGRAFÍAS: Benito del Moral

José Luis González

Centro de Mayores

MECANOGRAFÍA;

TRANSCRIPCIÓN: Mari Luz Ovejero

DIRECCIÓN

C/ Santa Fe, 2

(45001) TOLEDO

Tfno. 925 223 916

PUEDEN VER EL PERIÓDICO

www.centrodemayorestoledo1

.com

¿Indignación? No es exactamente lo que yo siento. Tampoco

ira. Más bien es pena.

¿Qué por qué?

Pena al leer una entrevista que hacen a un chico joven –llamémosle chico-, que tenga un pensamiento tan retrógrado respecto a la igualdad como cuando dice que las mujeres de-

ben ser “guapas y con glamur, y los hombres, inteligentes”. Pena porque, a veces, me da la sensación de que todo el ca-mino avanzado para que hombres y mujeres tengan las mis-

mas oportunidades se va por la borda con ideologías de esta índole.

Pena porque todavía las mujeres tienen que seguir demostran-do su valía cuando a nosotros los hombres nos viene dada. Pena porque yo conozco a muchas mujeres inteligentes que

han tenido que quedarse en casa cuidando de familiares con discapacidad y dependientes.

Pena porque muchas de ellas no se pueden realizar laboral-mente, porque sus parejas inteligentes, no conocen la palabra “corresponsabilidad”.

Pena porque barreras ya superadas vuelven a caer. Pena, pena, pena. Así que, por favor, que a este chico joven

alguien le diga que la belleza no está reñida con la inteligen-cia y que, si no le importa, predique con el ejemplo. El de la inteligencia, digo.

Moisés Carrasco Escribano

PENA


CONTRA LOS

QUE VOCIFERAN

Hace un cierto tiempo se publicó en la prensa regional, que habían apareci-do en la fachada de la iglesia de un pueblo de nuestra provincia unas pin-tadas, en que se decía: “La iglesia que da más luz es la que arde”. Pues bien, transcurridos unos días, coincidió publicado en la prensa na-cional un artículo del conocido perio-dista Luis María Ansón, quien hacía una semblanza sobre su vida profe-sional, viniendo a decir que había visi-tado casi la totalidad de los países de nuestro planeta, conociendo sus cul-turas, y así fue desgranando todo lo que había experimentado; que había visitado esto, lo otro y lo otro, tales como hospitales, parándose en este punto para manifestar que siempre había encontrado a pie de cama, ade-más del personal sanitario y de algún familiar, a sacerdotes y monjas, y na-die más. Me gustaría sugerir que, a aquellos sacerdotes y religiosas, solo les mo-vería el deseo de prestar ayuda a aquellos seres humanos enfermos, cobrizos o malayos; si eran católicos o agnósticos, si tenían otras religio-nes, etc. etc. Y en cuanto a los que, de alguna for-ma vociferan contra la iglesia, tam-bién me hace sugerir que no pasarían por tales hospitales para prestar al-gún servicio, “ni de lejos”. Luego en-tonces,….. ¿de qué vamos?.- ¿Realmente la iglesia da luz, o quién la da son esos sujetos? Por todo ello, termino diciendo a to-dos esos “vocerudos”, que no nos vengan con milongas. ÁNGEL GONZÁLEZ PÉREZ

LA COLUMNA

DOS PERFILES

Comiendo en un restaurante, con mis hijos y nietos, presencié lo siguiente: En la mesa de al lado, una pareja con dos niños y una señora mayor, gente bien arre-glada, como diría mi abuela Vicenta. Cuando la camarera se les acerca, el hom-bre alzando la voz y de muy malas mane-ras, se dirige a la señora: Madre, ¿ya ha elegido lo que va a comer?. La mujer titubeando y sin alzar la mirada, contesta: “Lo que tú digas hijo”. Fue todo lo que se habló durante la comida. Pensé: la traen de canguro para cuidar a los niños, triste destino el de muchos abuelos. En ese mismo restaurante tuve la ocasión de ver la otra cara de la moneda. Una pare-ja y una señora mayor con muletas. El hombre se dirigió a la mujer en el aparca-miento: “Espere, suegra, usted tranquila, sin prisas”. Sacó del maletero del todote-rreno un alza de madera y lo acercó a la puerta del coche. Con paciencia y amor ayudó a la señora a subir al coche hasta que ella se acomodó en su asiento. La mirada del joven se cruzó con la mía y le sonreí. La verdad, que no está todo perdido cuan-do el amor, el cariño y sobre todo el respe-to priman sobre el interés. Moisés Carrasco Escribano


CONTRASTES

Dolores Duque Molina

La vida se compone de contrastes que

asombran y sorprenden al ser humano, di-

chos contrastes afectan a la propia vida.

Los hay de todo tipo, contraste de colores,

que sin tener nada en común, sin guardar

ninguna similitud como ocurre con el blanco

y el negro, o la luz y la oscuridad, aún sien-

do tan opuestos ofrecen un gran espectácu-

lo de belleza, armonía y conjunción.

También en la sociedad de la que forma-

mos parte, se aprecian dichos contrastes, la

temperatura por ejemplo, produce en el me-

dio ambiente el efecto frio–calor, lo hemos

comprobado esta semana en la que ha pre-

dominado el frío intenso en la mayor parte

del territorio español, mientras una parte de

las ciudades españolas amanecía cubiertas

de nieve, había otros lugares donde lucía el

sol y disfrutaban de temperaturas muy agra-

dables.

Si, la vida está llena de contrastes que for-

man parte de nuestra historia, las fiestas son

una de ellas, las hay de recogimiento, refle-

xión como la llamada "Semana Santa" fiesta

de interés turístico, que invita a recordar la

Pasión de Cristo, donde el redoble de tambo-

res contrasta con el silencio al paso de los

cofrades.

Otras fiestas, por su vistosidad y algarabía

ofrecen un espectáculo de color en sus des-

files, al igual que la falta de recato, esa es

la fiesta de Carnaval, y especialmente el de

Venecia que alcanzó su máximo apogeo en

el Siglo XVIII, a dicha festividad acudían

aristócratas llegados de lugares muy diver-

sos, también era normal que nobles y prínci-

pes se escaparan a disfrutar de dicho acon-

tecimiento, hubo un tiempo (cuando Napo-

león y su ejército ocuparon Venecia) en que

esta festividad quedó totalmente prohibida,

las razones eran que tenían miedo que se

generaran conspiraciones amparados en el

anonimato de un antifaz o máscara venecia-

na.

El Carnaval quedó de nuevo inaugurado

muchos años después y sigue hasta el día

de hoy con bastante auge. Es una fiesta con-

siderada pagana y que se vive con cierto

"desenfreno" simboliza la satisfacción de

los "deseos carnales" en espera del comien-

zo de la Cuaresma, y a partir de ese momen-

to, se busca el recogimiento y la espirituali-

dad profunda.

La gente afronta estas dos fiestas, que ofre-

ce un gran Contraste, con naturalidad, dicha

fiesta de Carnaval se vinculó a la Semana

Santa y ambas están relacionadas con los

ciclos Lunares de la antigua Roma, ese dato

hace que las dos fiestas sean movibles en

nuestro Calendario actual.

A partir del Miércoles de Ceniza, se inicia

un período de cuarenta días de abstinencia,

y también de Penitencia por los excesos co-

metidos, eso da lugar a esa parte de recogi-

miento que contrasta con el final del Carna-

val y da paso a la Semana Santa.

Estos son los contrastes de la vida.



El Arroyo de la

Degollada

Dice esta leyenda...

Festejaban aún los cristianos de Tole-

do la entrada victoriosa de Alfonso VI en

la ciudad y vigilaban sus angostas calles

patrullas de jinetes y soldados castella-

nos intentando evitar reyertas, cuando el

joven y apuesto capitán leonés Rodrigo

de Lara vio en un ajimez a una bellísima

morita que miraba embelesada, sin cubrir

su rostro, su esbelta figura y las cabriolas

de su brioso caballo. Rodrigo quedó he-

chizado con su insinuante y dulce sonrisa

y con la limpia mirada de sus rasgados y

negros ojos, pasó dos veces más ante la

casa, seguido de su escolta, y desde

aquel día no dejó de rondar por aquella

calleja con la esperanza de ver a la moci-

ta agarena detrás de una baja celosía.

Zulema o Zahira (que así la han llama-

do quienes han soñado su nombre o han

bebido en las antiguas crónicas) era hija

de un hacendado musulmán que se afa-

naba en buscarle un rico marido. Vivía

bajo su severa autoridad y poco sabía de

la alegría y bullicio de las calles, ni de los

aromas de rosas y jazmines que vendían

los perfumistas en el zoco, pero la provi-

dencia había puesto a su servicio una es-

clava cristianizada que le hablaba de Je-

sucristo y de la vida de Santa Casilda, y

había brotado en su mente un vivo deseo

de recibir el bautismo, tomando el nom-

bre de la princesa de su raza que había

abrazado la religión del Nazareno.

La fiel sirvienta, que conocía los anhe-

los de su joven ama, se hizo cómplice del

caballero leonés y la reja de Zulema fue

testigo de sus frecuentes y secretas visi-

tas y del nacimiento de un romance lleno

de ilusiones y de esperanzas.

Zulema habló a su enamorado de sus

deseos de hacerse cristiana, de llamarse

Casilda y de tener a su lado a un hombre

capaz de defenderla de la venganza que

sufriría por su apostasía. Él le juró respe-

tar su honra y casarse con ella y prepara-

ron la fuga con la ayuda de la esclava. El

padre de Zulema estaba ausente. Espe-

raron la noche, no había luna, las calles

estaban desiertas y nadie acechaba des-

de las azoteas. Era el momento opor-

tuno. Rodrigo aguardó en una esquina

cercana. Embozado con su capa, subió a

su amada a la grupa de su corcel y par-

tieron a galope con ansias de llegar a la

capilla de un castillo cercano, donde es-

peraba un sacerdote para bautizarla y

celebrar las bodas. Al llegar al torreón de

la cabeza del puente de Alcántara le die-

ron el alto los centinelas. El valiente leo-

nés se presentó ante ellos como capitán

de las mesnadas; se abrieron los porto-

nes a su paso y continuaron la marcha

por el camino romano que los conduciría

a su feliz destino.

Despuntaba ya el alba y cabalgaban

confiados divisando a lo lejos las siluetas

Leyenda Toledana


P

a

g

Editorial: Pena 3

Contra los que vociferan 4

La Columna: Dos perfiles 4

Contrastes

5

Leyenda toledana: El arroyo de la degollada 6 - 7

El Arte Prehelénico 8

Entrevistando a Felipe 9 - 10

Una Fiesta Medieval 11 - 12

Reflexionemos con:.. citas célebres 13

A mi admirado D. Camilo Jose Cela 14 - 15

Nuestro callejero antiguo 16

El caballo, ¿de culo o de cara? 17

Nuestras amigas las plantas 17

¿Sabías que…?

18

Los grandes toreros: Antonio Chenel “Antoñete” 19 - 20

Las grandes ganaderías: Guardiola 21

Historias

22 – 24

De la A a la Z de los toros

24

Plantas medicinales: el grosellero

25

El mazapán

25

Poesía: Guitarra Española

26 – 27

Los truquitos de Pilar

28

La cocina de “Contactos”

28

Pasatiempos

29

Chisteando…por Mocaes

30

Programación Actividades del Centro

31

de la mezquita mayor y las torres del Al-

cázar, cuando salieron a su encuentro

dos jinetes sarracenos que merodeaban

por aquellos parajes. Al ver a una joven

ataviada a la usanza musulmana, con

pañuelo de fina seda en la cabeza, y los

pies y manos alheñados con artísticos

dibujos, montada a la grupa del caballo

de un cristiano, pensaron que la llevaba

cautiva y le increparon. El intrépido caba-

llero no soportó la afrenta, clavó el acica-

te de su espuela en el flanco de uno de

sus potros y trató de escapar empren-

diendo una vertiginosa carrera persegui-

do por los agresores.

Al llegar a la vaguada de la vertiente

cercana al arroyo se precipitaron por los

peñascales y al intentar cruzarlo cayeron

a tierra. Los moros los alcanzaron y en la

refriega uno de ellos dio un tajo mortal

con su cimitarra en el esbelto cuello de

Zulema.

La leyenda cuenta que el enamorado

capitán no se amedrentó al ver malheri-

da a su amada: sacó su lanza, mató al

asesino y obligó a huir al compañero de

este. Al ver que Zulema tenía aún un so-

plo de vida se quitó el yelmo y la hizo

cristiana con el agua del mismo arroyo,

imponiéndole el nombre de Casilda, co-

mo ella había deseado. Después tomó

su cuerpo inerte en sus brazos, lo puso

sobre su corcel y continuó cabalgan-

do...Al llegar frente a la torre de Hierro,

que se alzaba próxima al embarcadero

de la Virgen del Valle pidió socorro a los

guardianes, atravesó el Tajo en la barca

de pasaje que se hallaba en el lugar, y

siguió la triste y lenta marcha para llevar

a su amada a la iglesia mozárabe de

San Lucas, donde recibió cristiana sepul-

tura.

Pocos días más tarde tomaba el hábito

de novicio en el monasterio cluniacense

de San Servando un joven y apuesto ca-

ballero llamado Rodrigo de Lara, que no

quería vivir en este mundo sin tener a su

lado a la mocita de sangre agarena que

le había sonreído, un día, desde un aji-

mez de una casa musulmana; y dicen

que el prior le concedía especial licencia

para ir a rezar cada tarde a la orilla del

arroyo donde había cerrado los ojos por

última vez la mora-cristiana que quiso

llevar el nombre de Santa Casilda.

Los Toledanos, celosos de sus tradicio-

nes y de sus leyendas, no olvidaron esta

bella historia de amor y se asegura que

llamaban ya, desde tiempos inmemoria-

les, "Arroyo de la Degollada" al arroyuelo

que baja al río Tajo desde los altos de la

Legua y de la Sisla.


Foto: Internet


“Estudiar la historia del arte griego es hacer la historia del arte de la Humanidad”. Estas palabras de Winckelman, el fundador de la arqueológica clásica, indican el interés capital y la sugestión exclusiva que ejerció el clásico durante largo tiempo. A principios del siglo pasado, el Oriente era un desconocido y también Egipto; el arte griego no sólo era el mejor de la antigüedad, sino también el único. Todos los otros pue-blos vagamente conocidos del mundo anti-guo eran bárbaros, y por tanto su arte in-comparablemente inferior al de Grecia y también al de Roma. Este era el concepto de Wickelman, que sub-sistió por mucho tiempo. Grecia, sometida al yugo turco, estaba cerrada a las investi-gaciones arqueológi-cas. No se conocían más obras de aquel arte que las recogidas en el suelo de Italia, y que habían entrado a formar parte de las colecciones de már-moles de toda Euro-pa: la colección de esculturas de los Papas en el Vaticano: la del municipio de Roma, en el palacio del Capitolio; las de Nápoles, formadas con los bronces y mármoles des-cubiertos en Pompeya y en otros lugares de Italia Meridional; las de Florencia y Parma, reunidas por príncipes aficionados a las an-tigüedades, que en varias ocasiones habían llegado a tener en Roma comisionadas y permanentes para adquisiciones de mármo-les antiguos; las de la Casa Real de Francia, con esculturas procedentes también de Ita-lia, a excepción de algunas estatuas encon-tradas en Provenza; la colección Farnesio, que hoy se halla reunida en el Museo del

Prado de Madrid, también formada en Italia; así como las de la mayoría de los príncipes alemanes, que habían reunido antiguos már-moles por medio de las compras hechas en Roma. Muy pocas de aquellas obras eran auténticas originales griegos. Este trabajo de clasifica-ciones fue continuado en Roma, después de su muerte un grupo de “anticuarios” de va-rias nacionalidades, entre los cuales se dis-tinguían el duque de Luynes y Gerhardt, fundaron en el año 1823 el Instituto interna-cional de correspondencia arqueológica. Con el tiempo se hizo preponderante el ele-

mento alemán, lo que obligó a crear la es-cuela francesa de Ro-ma y enseguida otras naciones establecie-ron también en Roma, Institutos arqueológi-cos. Por fin cuando Grecia hubo consoli-dado su independen-cia, Institutos análo-gos se fundaron en Atenas más a pesar de lo mucho y muy im-portante que se des-enterró a finales del

siglo XIX, los orígenes del arte griego o se-mejanzas de los del arte del Egipto, queda-ban todavía sumidos en el misterio. Única-mente en las islas del Egeo aparecieron con relativa abundancia unos ídolos femeninos desnudos, tallados en piedra, a modo de As-tartés Pelásgicas, isleñas mudas y solitarias, de la época neolítica. Por lo que a Creta res-pecta, contaban con las leyendas relativas a Minos y Dédalo, al Minotauro y al Laberin-to, y a la muerte de aquel ser monstruoso en manos del héroe Teseo. Apuntes recogidos de la Historia del arte. José Luis Galán Esteban.

EL ARTE PREHELÉNICO

Foto: Internet


ENTREVISTANDO A FELIPE: El pasado 20 de diciembre, fui a la Biblioteca de Castilla La Mancha a la presentación del libro “MI FORMA DE VERLO TODO”, que presentaba mi compañero y amigo de la revista “CONTACTOS”, Felipe Garrido Bri-ceño. La verdad, que he ido a varias presentaciones de libros a esa Biblioteca, pero haciendo justicia, he de decir que me sorprendió dicha presentación. Fue de lo más amena, graciosa, simpática…etc., es más, yo no pen-saba que iba a haber un SKETCH, el cuál he leído ya en la página 91 de dicho libro. No esperaba yo que fuese de esa forma, acostumbrado a ir a otras presentaciones tan serias, la verdad que me encantó. Al comentar con las personas que habíamos estado en ese evento, todos coincidíamos que fue magnífica y muy entrañable, podría decir, incluso muy familiar.

A mí, amigo Felipe, cuando habló su nieta “preferida” –pues no tiene otra, según él-, a mí me emocionó, sí, sí, me emocionó y a él no digamos, no obstante, yo vi a Felipe fuer-te y aguantando, “que tío”, creo que esa tar-de a él no se le va a olvidar nunca. No soy muy amigo de la poesía, pero este “jodío” desde que estoy leyendo su libro, ha hecho que me haga adicto, al leer esa clase de poesías, tan naturales. Tengo guardada una que me regaló él, que me impactó mu-chísimo, cuyo título es: “Toledo la despoja-da”, pues es tan cierto lo que en ella versa y comenta, que este rey, Felipe II, creo yo, que eso que hizo con mi Toledo, fue una venganza por el asunto de los Comuneros, los cuales se enfrentaron a su padre. Pero dejemos la historia. Oye, Felipe, “tío” me has picado en el amor propio, y ahora que estoy casi terminando de leer tu libro, me doy cuenta del tiempo que he perdido sin leer poesías, más bien, amigo, sin poner atención a ellas. Así que,

desde nuestra revista, te doy las gracias por haberme abierto los ojos, y ahora lo que temo, creo yo, es te-ner “mono” o adicción a la poesía. Dicho todo esto, sólo me queda pedirte un favor, si tienes a bien concedérmele, es entrevistarte para nues-tra revista. ¿De qué va a ir la entrevista? Es para que nos expliques, ¿qué te ha llevado a escribir el libro “MI FORMA DE VERLO TODO”. ? Si de amigo, comienza cuando quieras. Amigo Felipe, antes de iniciar la escritura de un libro, ¿qué se debe hacer? Pues hombre, un autor siempre debe tener bien presente que va a contribuir a aumentar en lo posible la cultura de su sociedad. Pero habrá algo que tener más en cuenta, ¿no? Claro, también tendrá en cuenta que la cultura de una sociedad es la forma que tiene ésta para manifestar su identidad y esencia. ¿Qué te ha motivado para la poesía? Te diré, amigo, que desde muy temprana edad cultivé la costumbre de leer. ¡Toma, y yo también!



Ya hombre, si ya sé que tú también lees. Pero contestando a tu pregunta, ¿qué qué me ha motivado?, paso a contestarte: Fue por algunos maestros, cuando yo iba al colegio, me implantaron la costumbre de leer en voz alta. ¿En clase o donde leíais? Fíjate que curioso, fue en el patio del colegio durante el recreo. ¿Y allí de pie en el patio? No, nos sentábamos en el suelo alrededor del profesor. ¿Y qué es lo que leíais? A los clásicos, como a Cervantes, Quevedo, Calderón de la Barca, Bécquer y muchos otros. ¿Y os lo mandaba el “profe”? Hombre, ¿tú qué crees?, leíamos, según su criterio y el libro que en aquel momento estuviera disponible. ¿Pero cómo lo hacíais? El libro pasaba de mano en mano para que todos participáramos de la lectura. ¿Qué despertó en ti el interés por la poesía? Estoy convencido que fue por la lectura de los clásicos.

Luego entonces, el “profe” te enseñaría a escri-bir poesías, ¿no? Pues no. Te hago constar que en ningún mo-mento nos enseñaron métrica ni las normas ne-cesarias para escribir y desarrollar un poema. Vamos Felipe, que ya desde pequeño descubris-te el mundo de la poesía, ¿no es así? Así es, amigo. Estudiarías alguna norma, ¿no? La verdad que no. Nunca, pero nunca me impu-sieron en ningún momento el estudio de nor-mas. Entonces Felipe, ¿el escribir poesías de donde ha salido? Mira Moisés, todo lo bueno o malo que he escri-to ha salido de mí.

¿Cómo qué ha salido de ti? Si hombre, quiero decir, que yo escribo las poesías según las pienso. Pero te habrás regido por algún método “tío” ¿no? Eres un poquito “pesao tío”, puedo decirte, que me he regido algo por lo que escuchaba en las tertulias a las que he asistido, para que te enteres. Ahora, amigo, ¿qué esperas de los lectores? Únicamente, espero de corazón que a toda persona que lea lo que he escrito le satisfaga. Hombre, todo lo que se escribe con el corazón, estoy seguro que triunfa. Ya por último, ¿qué es para ti la poesía? Pues es el bello modo con el que la sociedad, por medio de los poetas, expresa sus más profundos y queri-dos sentimientos. En fin, amigo, te deseo que tengas mucho éxito en esta nueva aventura de tu vida, gracias por haberme concedido esta entrevista y suerte con tu libro. FUENTE: “Mi forma de verlo todo” Moisés Carrasco



Una fiesta medieval

El convento franciscano de San Juan “ante portam lati-

nam”, es uno de los templos toledanos que nos causan

gran impresión a los seres sensibles, precisamente por

su enigmática y misteriosa belleza gótica. Fue mandado

construir por los Reyes Católicos para su propio enterra-

miento, entre finales del siglo XV y comienzos del XVI,

aunque estos cambiaron posteriormente de idea.

Su arquitecto Juan Guas, trazó un edificio con la idea

real, construyendo una colosal iglesia y un maravilloso

claustro en gótico isabelino, al que se adhirió otro claus-

tro posterior renacentista. Si su exterior es hermoso, su

interior además de bello es donde se guardan celosa-

mente los saberes ocultos de la antigua tradición, escrita

entre sus piedras por las cofradías de constructores de

templos.

Y fue en 1808 cuando las hordas francesas en su huida

hacia al norte, quemaron este bello monasterio y destru-

yeron sus excelentes crujías, después el ministro Mendi-

zábal, por la desamortización de bienes eclesiásticos

desde 1836 en adelante, acrecentó su ruina.

Pero hay que agradecer al poeta romántico Gustavo

Adolfo Bécquer, el que escribiera sobre esta venerable

fábrica en 1857, encendiendo la pasión entre otros del

militar arquitecto y escultor Arturo Mélida, que en 1883

acometió la restauración del conjunto para hacerle Mo-

numento Nacional, fundando para ello la Escuela de Ar-

tes y Oficios.

Las piedras de este edificio concentran una sutil sabidu-

ría, pero lo que más nos llama la atención son las increí-

bles figuras que componen las gárgolas de su claustro

interior. Estas figuras soportan y embellecen los canales

del agua que vierte al centro del patio, donde es recogi-

da. Ya debían existir en tiempos en que los hermanos

Egas terminaban esta parte de la obra, siendo posterior-

mente restauradas en 1888, según vemos en la fecha

tallada en una de ellas.

Si las estudiamos de forma simbólica y heterodoxa, es-

tas nos hablarán con sus diferentes mensajes ocultos,

también desde un punto de vista evangélico, tanto indi-

vidualmente, en esquina o siguiendo de forma general

antiguas pautas.

En este artículo me referiré a las tres gárgolas que con-

forman la esquina del lado noreste del claustro, pues

esta contiene la escena más costumbrista y mundana de

todas ellas, como es una antigua celebración.

Se componen con la figura de un gaitero, que con su

música armonizaba las fiestas populares medievales. Al

otro lado se encuentra un niño que trata de subir una

cucaña de forma helicoidal para conseguir un premio.

Se refiere al “juego de niños” alquímico, que simboliza

las dificultades en el aprendizaje de los problemas que

surgirán a lo largo de la vida.

A su lado cierra esta acción teatral el bufón de la corte o

loco del tarot, tocado con el “sombrero de tres picos” o

gorro de la sabiduría, que con sus contorsiones y el soni-

do de sus cascabeles atraía a las gentes sencillas, que

se quedaban boquiabiertas cuando veían sus difíciles

contorsiones y raras posturas, mientras este se reía de

ellas.

Según los ritmos estacionales, esta escena nos recuerda

al solsticio invernal y a sus fiestas entrando ya en el mes

de Enero, que es cuando comenzaba a faltar el alimento.

Después venía el mes lunar de Febrero, que se encon-

traba dedicado antiguamente a Plutón y en el que los

romanos conmemoraban otra fiesta, cuyas fechas dedi-

caban a los dioses infernales.

En Hispania en aquellos tiempos pretéritos, se hacían

teatros para rememorar a sus más arcaicos personajes,

simbolizados por las máscaras invernales y sus ritos pa-

ganos, los cuales pasaron sin ningún obstáculo al cristia-

nismo, pues la iglesia adaptó los cultos precristianos de

los ritmos temporales al calendario de sus celebraciones.

Comenzaba dicha fiesta el jueves lardero, hasta llegar al

miércoles de ceniza, al que seguía la Cuaresma.

Entre los visigodos del s. VII, estas fiestas eran critica-

das por el propio S. Isidoro, cuando decía: “se disfrazan

como fieras, gritando y danzando con iniquidad, excitán-

dose con el vino”.


Por tal motivo la escena de estas tres gárgolas de San

Juan de los Reyes en concreto, definen perfectamente la

ancestral fiesta costumbrista y medieval de las

“Carnestolendas”, con su inigualable ambiente, denomi-

nada posteriormente como “Carnaval”.

Dicha animación se encontraba motivada por los locos

danzantes, que provocaban grandes sonidos al vaciar las

vejigas con las hostigaban al público. Por ello, dicha fies-

ta con sus soplidos e irreverentes ruidos, estaba ligada

de forma inconsciente a la música de la formación del

universo, pues el aire es el portador de la vida.

Según el Génesis, Yahvé creó con barro al hombre e ins-

piró en sus narices el “soplo de la vida”. Por ello al co-

mienzo de la galería norte, vemos en esta escena al gai-

tero vestido a la manera medieval, que sopla su odre o

vejiga hinchándola, la cual se vacía por medio de sus tu-

bos y roncones, de los que sale una melodía de sonidos

placenteros, los cuales alegraban los actos más desor-

denados de entonces.

Pero con el establecimiento de la inquisición en Hispania,

estas fiestas cambiaron de talante, pese a seguirse feste-

jando, bajando su intensidad, haciéndose más recata-

das, por si las moscas. El toledano Sebastián de Orozco,

da fe de ello en sus “Relaciones Históricas Toledanas”

de 1555, pues en 1523 tras ser coronado Carlos I, procla-

mó este una ley prohibiendo disfrazarse con máscaras

tanto a las gentes del pueblo como a los nobles, con el

consiguiente castigo.

Al pasar unos años, dicha norma se fue relajando y cuan-

do su hijo Felipe II se desposó en 1554 con la inglesa

María Tudor, nos cuenta que se celebraron en Toledo

grandes fiestas de “Carnestolendas”, llenándose sus prin-

cipales calles con toda clase de máscaras, con disfraces

de celestinas, cardenales, judíos y cornudos. También

nos cuenta, que desfilaron otros muchos con las vesti-

mentas de los locos del Nuncio, mofándose de toda clase

social y las prostitutas de la mancebía se disfrazaron de

hombres, danzando al son de panderos.

En esta esquina del claustro de figuras carnavalescas,

vemos la figura del loco que como acróbata o titiritero se

encuentra boca abajo. Este volatinero, con sus piruetas

trataba de despertar nuestras dormidas conciencias y

hacernos comprender que la vida es realmente una aven-

tura suprema. Por tal motivo este loco o irónico bufón,

saltaba y bailaba con extravagancia en carnaval, burlán-

dose del estancamiento de la jerarquía y el orden esta-

blecidos, desafiando al poder.

Con dicha conducta quería invertir el orden reinante tra-

tando de modificar las normas vigentes, llenas de vicios,

maldad y podredumbre, pues estas se vuelven enfermi-

zas con el paso del tiempo. Solo hay que fijarse un poco

en nuestra sociedad actual y ser sinceros con nosotros

mismos, para darnos cuenta de nuestra necedad, estupi-

dez y mediocridad, encubiertas hasta la saciedad por el

régimen establecido.

Pero esta forma de querer cambiar las cosas, es muy

peligrosa para él mismo, terminando como víctima y sien-

do sacrificado por la raza humana. El sombrero de tres

picos sobre su cabeza, simboliza la comprensión del

mundo superior, que este esconde, gracias al arte del

disimulo, pues guardar los antiguos arquetipos es todo un

arte.

Cierra el ciclo en el centro de esta sabia esquina, un niño,

que sale de entre unos pañales y se aferra a una cucaña

tallada en espiral. El juego de la cucaña consistía en un

largo palo clavado verticalmente sobre tierra en una plaza

o inclinado horizontalmente sobre el agua, encontrándose

untado con sebo o jabón y en su final contenía un premio,

al cual costaba mucho acceder.

Los que observaban este juego, se reían a carcajada lim-

pia, al ver al niño caer una y otra vez al intentar atrapar el

premio, ya que esta era una fiesta para la alegría. Lo que

representaba la cucaña en espiral eran los problemas a

superar y el niño como símbolo del futuro, trataba de as-

cender por la espiral de los conocimientos. Quienes talla-

ron esta magnífica gárgola, sabían muy bien de la meta-

morfosis que debemos experimentar para nuestra propia

evolución.

Esta fiesta medieval que nos dejaron nuestros ancestros

en este lugar, contiene figuras a las que deberemos ha-

cer las preguntas correctas, para poder retornar a una

sociedad más justa, libre y tolerante.

Alejandro Vega Merino.


REFLEXIONEMOS CON:... CITAS CELEBRES.-

-A nuestra Felicidad; le hacen menos daño los Males, que el aburrimiento.

Concepción Arenal.

-El hombre, no puede hacerse sin sufrimiento, pues es a la vez el mármol y el

escultor. Alexis Carrel

-Una vida con muchos sacrificios, es mas agradable casi siempre,

que la de con amarguras.- Pio Baroja

-También el dolor desea desahogarse; el hombre abrumado por el

dolor, no debe sentir vergüenza de sus lágrimas.-

Triedrich M. Von Bodenstedt.

-El hombre, está mas organizado para el dolor, que para el placer.-

Anthelme Brillant-Savarin

-Las dificultades, están hechas para estimular, y no para quitar el ánimo. Ya que

el espíritu humano, debe fortalecerse en la lucha.-

William E. Channing

-Debemos conservar siempre, en los acontecimientos graves:

la mente bien serena.-

Horacio

-En aquel, que ha sido un ser afortunado; ¡seguro que en su vida!,

nada le fue fácil.- Sigmund Freud



A mi admirado d. camilo José cela

Se me ha ocurrido escribir esta situación un poco graciosa que “sin ser real”, bien se le

pudo ocurrir al admirado y gran escritor D. Camilo José Cela, cuya forma de hablar unas veces

jocosa y otras un tanto mal sonante a juicio de algunos, era en realidad y a mi entender, la clara

forma de mostrar su libertad de expresión en el lenguaje. Pues bien, habiéndole rogado la Di-

rección de un colegio mayor de Calatayud que fuera a dar una conferencia sobre Literatura, ma-

teria en la que era un gran erudito, y tal como era habitual en él, la preparó a conciencia y se

presentó en esa ciudad el día acordado por la mañana temprano y con horas de adelanto a la

hora señalada para darla. Ni que decir

tiene, que fue reci- bido con gran aga-

sajo por la Direc- ción del colegio.

Pero el Director, hombre conocedor

del lenguaje y chanzas que a ve-

ces empleaba Ce- la, llamándole

aparte le sugirió: que al estar en

Calatayud, no aprovechara la

ocasión para citar en su oratoria la

coplilla en la que se dice: <Si vas a

Calatayud, pregunta por la Do-

lores, que es una moza lozana y

amiga de hacer “favores”>; pues esta coplilla no les hace gracia escucharla, e irrita mucho a

los ciudadanos de esta ciudad. Cela se despidió del personal del Colegio alegando que iba a

recorrer a su aire la ciudad para conocerla mejor, pero lo que realmente hizo fue caminar hasta

el primer parque que encontró en su camino, pues le había sobrevenido una de sus ingeniosas

y brillantes ideas, por lo que sentándose en un banco se propuso aumentar el discurso que lleva-

ba preparado con unas coplillas o apostillas que se inventó y que venían a cuento con la que el

Director le había indicado que no citara y con el proverbio que dice <que a ese que no quiero

caldo, Tres tazas llenas>. Pues bien ya ante los oyentes en el auditorio, expuso el discurso que

había preparado y a continuación siguió diciéndoles que había paseado por la ciudad, la que le

agradó bastante y que tomándose un café en un bar, en él < conoció y se le ofreció una llama-

da Manuela, que era nieta de Dolores, y más puta que su abuela >.

Y que prosiguiendo su caminar le reconoció un hombre que había en una esquina y que

charlando con él del ambiente social de la ciudad, le comentó que: <si quiere “amor con

“mujer”, pregunte por la Martina, que hace lo que la Dolores, y te da dinero encima >.

Pero no paró ahí la cosa porque cuando llegó al hotel donde se hospedaba, el metre que le aten-

dió y con el que se puso a hablar también de la ciudad y de sus gentes, y quizás por querer ser

Camilo José Cela (Internet)


amable con él le comentó que si estaba pensando pernoctar allí la noche y salir a pasar un

buen rato con una muchacha fina, tal como se suele hacer, < fuera hasta el bar de la esqui-

na, y busque allí a la Isabel, que hace lo que la Dolores, pero con “dos” a la vez >. Y tam-

bién le habló de Daniel, pobre anciano deprimido, marido de la Dolores y un cornudo

mantenido. Pero qué como Daniel y en cualquier lugar también, son muchos los mante-

nidos. Como era esperar hubo división de opiniones sobre lo que Cela dijo, pero todos al final

comprendieron que Cela era un gran amante y defensor a ultranza de la libertad de expresión

en un escritor y que este la iba a usar hasta las últimas consecuencias. Por lo que a este ad-

mirado personaje no se le podían poner trabas en ese sentido, ni tampoco darle pistas o pie a

que dijera todo lo que anteriormente dijo. Por lo que éste, su alocución al despedirse del audito-

rio la remató diciendo este poemilla de su cosecha, que dice así:

En esta noble ciudad

como en otra cualquiera.

Mientras haya una mujer,

que guste de este “placer”,

¡Lo buscará cuando quiera!

Puede llamarse Isabel,

o Dolores, o Manuela.

Pero…por siempre logrará hacer

Lo que más gusto le diera

”Pa” poderse complacer…

¡Sin trabas y sin barreras!

Nota: Este relato es pura invención de este autor, en el que a su juicio y muy justamente,

se emplea la LIBERTAD DE EXPRESION.

Toledo, 1-11-2016, Felipe Garrido Briceño


Calle del Doctor Amusco: Calle a continuación de la plaza de Valdecaleros y antes llamada de las Villarea-les y Alacaba, se trata por tanto, de la llamada hoy calle de las Bulas. Fue un médico famoso en su tiem-po. Emilio Castelar, calle o plaza: Así denominó el Ayuntamiento durante la segunda República a la calle y plaza de Barrio Rey, con escasísima utilización po-pular en 1936, si es que llegó a ponerse la placa con ese nombre. Calle de la Encomienda: Este nombre se aplicaba en 1628 al comienzo de la calle de los Reyes Católicos, desde el paseo del Tránsito actual y el cruce con el callejón del Horno, hasta la plazuela de San Juan de Dios, aproximadamente. Calle y paraje de los Estantes: Se aplicó este nom-bre a un paraje poco preciso, que ya en 1835 y durante los siglos XVI y XVII se daba a la plazuela de los Cuatro Tiempos, las calles del Locum y la del Coli-seo, y a veces, incluso al comienzo de la cuesta de los Pascuales. La palabra estantales, equivale a puntales (estantalar = apuntalar) y aún se mencionaba en 1701. Estanislao Figueras: Así acordó el Ayuntamiento en 1931 que se llamase la calle Real. Nadie utilizó esta denominación porque era nacida de un propósito polí-tico, para borrar todo recuerdo del régimen caído el 14 de abril de 1931. Corral del Estoque: Sólo hay un documento donde se cita a este corral, fechado en 1477. En él se encon-traba un mesón, titulado de la Cadena y situado al fondo del callejón sin salida de la calle de la Sillería. Tal mesón, es donde se encontraba la imprenta de Gó-mez Menor y la fábrica de gaseosas “La Higiénica”. Plazuela de Fariñas: Se censó esta calle (parece ser) en 1561 bajo este epígrafe a diversas calles del barrio de San Justo: la de la Flor, San Lucas, San Juan de la Penitencia y tal vez la de Recogidas. Podría ser por tanto, el espacio ante la portería del citado convento franciscano. Callejón sin salida del Fraile: Está situado en la ca-lle de Hombre de Palo. Su final está cerrado en la ca-lle de la Chapinería y de la Lonja del Reloj. Se cree que este nombre se inventó en 1864. Hoy ha desapare-cido la placa que llevaba el nombre. Callejón del Doctor Córdoba: Podría ser el llamado hoy de Juan Guas o bien la bajada de la Tripería. Esta-

ba poblado con siete vecinos en 1561. Uno de sus ha-bitantes entonces, el último de los censados, era el doctor cuyo nombre llevaba. Plaza de la Gallinería o Gallinas: Aparece este nom-bre en el censo de 1561, en el cual habitaban en ella 19 vecinos. El doctor Pisa sitúa a la Gallinería entre barrio Rey y la calle Tornerías, o sea, en la plaza pre-via al Corral de Don Diego. Tanto este nombre como el de la plaza de los Cam-bios, aplicado también a este lugar, son evidentemente comerciales y denotan las actividades que en ellos se ejercieron durante siglos. Corral de Gámez: Estaba en la colación parroquial de Santa María Magdalena en 1561 y en el primer tra-mo de la calle Ancha desde Zocodover; al parecer, junto al comienzo de la cuesta de Belén y antes de la esquina con la calle de la Sierpe. Puede corresponder a cualquiera de las casas de esta zona, preferiblemente de la acera de los pares, con amplio solar aún hoy; quizá la antigua Calahorra, que ya no figura en el cen-so. Paseo de los Moreras: Es éste el nombre primitivo que llevo a la actual avenida de la Reconquista, moti-vado por los árboles que se plantaron en sus márgenes al trazarlo, como acceso directo al cementerio viejo. Callejón de la Muerte: Espacio que separa el Hospi-tal de Afuera de su jardín, cerrado en 1866. Su nom-bre tétrico se debía a que la Guerra de la Independen-cia y en las luchas carlistas, dado su aislamiento y ca-rencia de casas que tuvieran en él su entrada, se utili-zó para realizar en el fusilamiento más o menos lega-lizado. Tal vez sea este callejón el que separa el Hospital del Colegio de Huérfanos y de la Escuela de Educación Física, que carece hoy de placa, que se sepa, pero lla-mado callejón de San Lázaro. Novios, plazuela de los: “A la puerta del costado de San Miguel” dice, en 1777, el único documento que recoge este nombre, usado sin duda, por salir por tal puerta los recién casados. Solo tres casas se registran con puerta a esta plazuela, la mejor de ellas con 500 reales de renta anual, que era del Cabildo de Párrocos toledanos y tal vez sea la llamada casa del Temple. Hoy, la plazuela forma parte de la calle del Cobertizo de San Miguel. FUENTE: Historia de las calles de Toledo, de don Julio Porres. Moisés Carrasco Escribano.

NUESTRO CALLEJERO ANTIGUO


EL CABALLO, ¿DE CULO O DE CARA?

Nuestras amigas las plantas Callosidades y durezas: La palabra callo de origen latino, designa un espesamiento circunscrito de la capa córnea de la epidermis, provocando por presiones repetidas.

Se observan sobre todo en los pies, en los lugares comprimidos por zapatos demasia-

do estrechos. Incluso también en la planta de los pies. Siempre resultan dolorosos llueva o truene, la callosidad siempre hace padecer. La du-reza, por lo general está constituida por unas pequeñas callosidad muy limitada, pe-ro excepcionalmente puede presentarse ba-jo una forma más extendida.

Filoterapia.- En ese caso los herbolarios aconsejan un tratamiento a base de ajo. Tomar unas cabezas de ajos, aplastadas en un mortero y aplicarlas sobre la dureza an-tes de acostarse. La duración del tratamien-to debe ser de unos 10 a 15 días según los resultados obtenidos.

FUENTE: Apuntes cogidos del D. Guiseppe Alongi.

José Luis Galán

Creo recordaran aquella controversia que hubo entre los ediles de nuestro Ayuntamiento, referida al Ca-ballo de Alfonso VI, obra magistral del escultor toledano, D. Luis Martín de Vidales, que viene insta-lado a la entrada de la Ciudad, en “El Lucero”, y frente a “Toletum”, relativa a si habían de ponerla de culo o de cara, para con respecto a las personas que entran en la Ciudad. No, no es en esencia al caballo a lo que me quiero referir; lo que vengo a manifestar es que, si al caballo se le prestó una atención en cuanto a su orientación ideal, con mayor motivo se debiera atender a cues-tiones que afectan más directamente a los ciudadanos de a pie, como puede ser lo siguiente: Resulta que en la parada de autobuses urbanos, situada entre la Puerta de Bisagra y la Iglesia de San-tiago, se produce un charco de aguas pluviales, precisamente a la altura de la puerta de entrada a los vehículos, lo que es un inconveniente para los usuarios. Pues bien, en el año 2.015 se dirigió un escrito al Ayuntamiento, firmado por varios vecinos, interesan-do se subsanase esta anomalía, pero es lo cierto que hasta el momento presente todo continua igual. Por todo lo cual sugiero que no nos cansemos de insistir al Ayuntamiento, cuando se trate de cuestiones que nos afecte directamente, para que se resuelvan de forma , y para “que ponga a enfriar” aquellos otros temas del corte de lo del caballo. ANGEL GONZÁLEZ PÉREZ

Foto: Internet


¿SABIAS QUÉ …?

L a de Toledo, en 1085 por Alfonso VI, es el hecho de la Reconquis-ta que tuvo más reso-

nancia en el Islám y en la Cris-tiandad, y sin embargo no hay suceso más oscuro en su esencia y desarrollo, según Menéndez Pidal. En los muros de la catedral están cristalizados los esfuerzos de diez generaciones de toledanos. Sobre el dintel interior de la puerta de los Escribanos de la catedral todavía se lee una ins-cripción evocadora de que en el año 1493 “a fin del mes de enero fue acabada esta santa iglesia, de reparar todas las bóvedas e blan-quear e trazar”. Johan Barril dijo esta frase: la catedral de Toledo es como “una cajita del tiempo que va depu-rando el aire que pasó por los pulmones de los antiguos”. Nos dice Jaime Calomina Tor-ner: que en la catedral hay unas quinientas representaciones de la Virgen María: en pinturas, es-culturas, miniaturas, marfiles, vidrieras, esmaltes, orfebrería, bordados. Es en verdad, la Reina. ¿Se inclina a la derecha? Para el observador avispado no será un secreto, pero lo cierto es que la única torre de la catedral de To-ledo se inclina ligeramente hacia la derecha hacia su derecha se-gún se mira desde la fachada principal. El hecho es fácilmente visible desde la Biblioteca Re-gional. Desde la ventana de la cafetería se observa perfecta-mente esa inclinación de la torre catedralicia.

¿Por qué no se hizo la segunda torre de la catedral? A esta pre-gunta nos responde el profesor Téllez González: “la contesta-ción rápida es: no lo hemos sabi-do nunca. Si quisiéramos diva-gar sobre el tema, en primer lu-gar, la torre construida tiene car-gas propias, no forma parte de la fachada y es realmente un pris-ma adosado que anula la posibi-lidad de una puerta, final normal éste de cada nave. La capilla mozárabe ocupa el solar de lo que pudo ser la segunda torre. En segundo lugar, es de dimen-siones superiores, lo que ya indi-ca que no se quiso hacer otra torre igual. La puerta del Mollete.. Se deno-mina así, según escribe Sixto Ramón Parro, en su “Toledo en la mano”, porque en ella se re-partía desde tiempos antiguos una limosna diaria de pan coci-do, que se llamaban molletes, que eran panecillos de media libra. ¿Un cuerno de elefante? De la columna situada exactamente a la izquierda del visitante que penetra en la catedral por la puerta de la Feria pende un gran cuerno sujeto por una cadena que, según una tradición, corres-ponde a uno de los bueyes que transportaban las primeras pie-dras para levantar el templo y que cayó muerto al pie de la obra a causa del esfuerzo reali-zado. Su longitud, algo más de un metro, y su escasa curvatura, hacen pensar más bien en que perteneció a un elefante, quizás algún ex voto; algunos han pen-sado en que se trata de una espe-cie de bocina que los mozárabes usaban convocar a los fieles en sustitución de las campanas, cu

yo huso les estaba prohibido por los musulmanes. Nadie supo hasta ahora una explicación sa-tisfactoria. ¿De quién son estos huesos? En el exterior derecho de la capilla de San Ildefonso, a dos metros de altura, hay una oquedad de unos ocho centímetros de lado cubierta con una rejita a través de ella hay unos huecos donde los muchachos de mi generación metíamos los dedos y tocábamos unos huesecillos, ¿De quién son y porqué están allí? Ningún guía de la catedral lo explica. Erotismo. Algunas de las esce-nas esculpidas y labradas en el interior de la catedral represen-tan escenas eróticas. Las hay con referencias a episodios bí-blicos, como es el caso de uno de los relieves del trascoro en el que Judá avisa de Tamar, su nuera, confundiéndola con una prostituta. Esta violación recogi-da en los texto bíblicos no es la única escena erótica; otros ejem-plos los encontramos en el con-junto es cultórico del coro en el que aparece un 69, un cuerpo desnudo y sensual o una dama cabalgando a su mozo. Hay otros muchos, pero destaca-do éste: Eva estaba caída entre los árboles con sus ropas en des-orden y Adán sobre ella, con un gesto de locura sensual, la cogía los brazos para dominarla y pe-gaba la boca a su pecho con tan avidez que lo mismo podía besar que morder. FUENTES: La catedral de To-ledo en clave de anécdotas, de D. Luis Moreno Nieto

Moisés Carrasco


NOMBRE: Antonio Chenel Albadalejo. APODO: Antoñete. NACIMIENTO: 24 de junio de 1932, en Ma-drid. ALTERNATIVA: 8 de marzo de 1953, en Castellón de la Plana. Antoñete ha sido uno de los toreros que mejor ha toreado. Si Ordóñez y el Viti han sido –sin olvidar a Camino- los más regulares y mejores que han surgido desde la muerte de Manolete, no se debe olvidar que, cuando han estado inspirados, cuando han “cuajado” sus toros, tanto Antonio Chenel como Curro Romero han toreado mejor que el mejor. Por eso, tanto unos como otros han pasado a la historia en un lugar preferente. LUCES Y SOMBRAS EN LA CARRERA DE UN TORERO INSÓLITO Antoñete, aunque fue un torero inspirado co-mo el que más el día que se enfrentaba a su toro idóneo, ha sido también un diestro de téc-nica, y, sobre todo, un matador de toros va-liente, muy valiente, especialmente en su últi-ma etapa –la de los años 80-, porque hay que tener mucho valor para ponerse delante de un astado con más de cuarenta años. Se ha dicho que Antoñete sólo fue figura en su última etapa. Nada más alejado de la realidad, porque, aunque no llegó a mandar en el toreo, nadie puede negar que, en el periodo de 1953 a 1957, estuvo presente en todas las ferias de España, con mucha regularidad en las plazas de la periferia y con menor suerte en la de las Ventas de Madrid, que terminaría siendo la suya. Antoñete tenía una escuela muy madrileña, de una finura exquisita. Supo conjugar, como ha escrito el afamado cronista José Carlos Aréva-lo, el toreo clásico, combinando el hacer de Juan Belmonte con el de Manolete. “Un tron-co –en palabras del mismo escritor- del que salen Rafael Ortega, Antonio Ordóñez y Anto-nio Chenel.” ¿Qué le faltó a Antoñete para mandar en la fiesta de los cincuenta? Pues le faltó suerte, y

no es tópico. La lesión sufrida en Málaga, en la feria de Agosto del año que tomó la alterna-tiva, le cortó en seco una temporada en la que era novedad, junto con Jumilano y Pedrés. Antoñete había llegado, en 1953, a la alterna-tiva, tras liderar en 1952 a los novilleros, y lo-gró salir por la puerta grande de su villa natal dos días después de que Rafael Ortega le con-firmara la alternativa, que Julio Aparicio le había otorgado en Castellón. Además, Antoñete, con gran cartel en Barce-lona –que entonces era plaza fuerte-, en todas

las plazas del norte, en las castellanas y en las francesas, tuvo la mala fortuna de ser cornea-do dos años consecutivos, 1954 y 1955, en Madrid. Este último año, lo fue en la primera de las tres corridas que tuvo que torear, lo cual hizo que no pudiera refrendar de nuevo, en la cátedra, lo que hacía en otros casos. Finalmente, su enlace matrimonial, con la hija de un conocido ganadero, le hizo apartarse de los toros, sin una retirada efectiva, y cuando quiso volver en los años sesenta, su momento parecía haber pasado.

LOS GRANDES TOREROS: ANTONIO CHENEL “ANTOÑETE”

Foto: Internet


EL PRIMER RESURGIR. Así llega el verano de 1965. Sale a torear en Madrid una corrida para desesperados, cuando roto su matrimonio, había pasado a hacerse banderillero como única salida. Esa tarde, Antoñete torea como nunca. A su estilizado hacer añade unos espectaculares ci-tes de lejos, que serían como el ensayo –para

algunos resultó aún mejor- de la apoteosis del toro blanco del año siguiente. Antoñete da la vuelta al ruedo en un toro y corta las dos orejas del otro: abre la puerta grande y Madrid se le entrega. En 1966 parece su año. Tras soñar el toreo con el “ensabanao” de Osborne, tiene más de ochenta corridas firmadas. Pero de nuevo se queda en la cuneta por un desafortunado per-cance en la ciudad francesa de Frejus, el 17 de julio. En Madrid había sido el triunfador de la feria y de las corridas extraordinarias, y se ha-bía puesto, económicamente, al nivel del que más. DECLIVE, RETIRADA Y NUEVO REGRESO. Antoñete se mantiene en todo lo alto en 1967, e incluso en 1968. En 1969 tiene que recurrir a ser primer espada con el Cordobés y Palomo Linares en las famosas guerrillas, y comparte

cartel con otros nombres célebres, como César Girón, Gregorio Sánchez o el mexicano Alfre-do Leal. Los primeros años sesenta –con dos de ellos en blanco- no son rentables, pese algu-nos éxitos en Madrid. Decide retirarse matan-do seis toros en solitario, el 7 de septiembre de 1975, y realiza una gran faena entre otras va-rías sólo cumplidoras. A la fuerza, y debido al injusto olvido, le corta la coleta esa tarde u cuñado Paco Parejo. En Venezuela, al final de la década de los setenta, triunfa en un festival de diestros retirados con una gran faena. Esto le sirve para reaparecer en aquel país, que le vean taurinos conocidos, y que Salayero y Bandrés le ofrezcan una reapa-rición española en 1981. Lo demás es historia reciente. Se suceden los triunfos. Se pone a la altura de los mejores: Manzanares, Capea, su coetáneo –también re-aparecido- Manolo Vázquez, y compite con los nuevos que van llegando; Yiyo, Espartaco, Ojeda. Su nombre en la cima. Toda España lo espera y respeta, y Madrid le adora, porque esculpe nuevas faenas para el recuerdo. Im-pregna su hacer de torería: la verónica gallar-da, la media verónica, arrollándose el toro a la cintura, el ayudado por bajo de cincel, el natu-ral y el derechazo grandioso, el de pecho mo-numental, y, a veces, la estocada entregándose. Se va en olor de multitud. Vuelve porque la última tarde no triunfó como quiso. En su Ma-drid se quita la espina de su segunda retirada con una faena de ensueño a un toro de Álvaro Domecq. Casi igual que la de los “dos toros garzones” de esos años ochenta. O como la de los Bohórquez de los años cincuenta, o la del cameno, el osborne o los Núñez del glorioso 1966. Siempre que haya toros en Madrid se verá la imagen de Antoñete, con su inconfun-dible mechón blanco, dando las distancias pre-cisas a los toros, para torear con el arte con mayúsculas que sólo han tenido los maestros. Benito del Moral Galán. FUENTE: Pasión por los Toros. José Luis Súarez-Guanes. FOTOGRAFÍA: Europa Press. Internet.

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DIVISAS: Verde botella y oro viejo (Guardiola-Villamarta), azul y amarilla (Mª Luisa Domínguez Pedrajas). SEÑALES: Zarcillo en ambas orejas, Guardiola y Mª Luisa Domínguez. ANTIGÜEDAD: Guardiola, 23 de septiembre de 1945. FINCAS:”El Toruño” y“Pinganillo”, Utrera, Sevilla. ENCASTES: Guardiola, Villamarta; Mª Luisa Do-mínguez Pérez de Vargas, Pedrajas. En esta casa existen –y se llevan por separado, por antagónicas- cuatro ganaderías, perfectamente identi-

ficadas, con encastes diferentes, pero bajo un mismo espíritu selectivo presidido por el culto a la bravura. Son cuatro hierros los que posee la familia Guardio-la: el que figura a nombre de los herederos de don Salvador Guardiola Fantoni; el de los hermanos Guardiola Domínguez; el de los herederos del mayor de los Guardiola, llamado Salvador, que como rejo-neador encontró la muerte en Palma de Mallorca, y, por último el que se anuncia a nombre de doña Mª Luisa Domínguez Pérez de Vargas, matriarca del ex-tenso clan ganadero, quien, ya muy anciana, fallecía en su casa sevillana de la Puerta de Jerez en el año 1993. Pero en este capítulo nos centraremos en los dos hie-rros más significativos de la casa ganadera. GUARDIOLA. La marquesa viuda de Villamarta, poseedora de un importante nombre en la ganadería brava española, a su fallecimiento dividió dicha ganadería entre sus

hijos. El lote que le correspondió a su hija doña Ma-ría Dávila y Garvey fue adquirido por don Clemente Tassara, quien en 1942 lo vendió al marqués de Vi-llabragima, que varió el hierro original. A los dos años vendió la ganadería, con derechos de hierro y antigüedad, al conocido agricultor sevillano don Salvador Guardiola Fantoni. Hasta principios de la década de los años sesenta, los toros “Villamartas” de Guardiola pasearon el hierro marquesal por todas las plazas de España, cosechan-do importantes triunfos, que siguen en poder de sus herederos, bajo la dirección de su hijo Juan. Son to-ros de un tipo serio, pero bien hechos, bravos, pero colaboradores con el torero. En el palmarés de la casa se guardan trofeos de éxitos ganaderos en Cáceres, Pamplona (en los años 1989 y 1991), en Arles y Ni-mes (1976 y 1977) y los casi consecutivos de Sevilla de los años 1975,1977, 1978, 1979 y 1980. “LOS PEDRAJAS” DE DOÑA Mª LUISA. La antigua ganadería de don Antonio García Pedraja fue vendida en 1946 a don Salvador Nogueras, quien casi inmediatamente se la cedió a don Salvador Guar-diola. Éste la puso a nombre de su esposa doña Mª luisa. Son innumerables los premios que esta ganadería ha obtenido en los últimos veinte años, especialmente en Sevilla. La fama de su devisa ha impuesto la celebra-ción de una corrida más en el ciclo abrileño, que de siempre se cerraba con la de Miura y ahora lo hace con la de Pedrajas de doña Mª Luisa, haciéndose tra-dicional e imprescindible. Nadie olvidará el espectáculo que en la suerte de va-ras propició aquel “Topinero” en 1988, al igual que “Violoncelo” en 1991 y “Rojillo” al año siguiente. Esta divisa ha conseguido el honor, difícil de igualar, de alzarse con el premio a la mejor corrida del ciclo sevillano de abril en los años 1982, 1983, 1984, 1986,1989, 1990 y 1992, y en premio a las efeméri-des la Real Maestranza de Caballería le ha dedicado un azulejo en los aledaños de la bonita plaza sevilla-na. En “El Toruño” o en “Pinganillo”, en el término de Utrera, en la cuna del toro bravo, los toros “pedrajeños” de Guardiola son todo un testimonio del culto a la bravura. Benito del Moral Galán. FUENTE: Pasión por los Toros. Juan Carlos Martín Aparicio. FOTOGRAFÍA: Europa Press.

Las Grandes Ganaderías: GUARDIOLA

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HISTORIAS Albañiles, camareros, taxistas… la

dura vida de los toreros proletarios. Son la cara B de los ruedos: matadores que se jue-gan la vida, pero no llegan a fin de mes. Se ganan el sueldo de albañiles, vendedores, camareros… Juan Pelegrin. Feria de San Isidro, un mes de toros. Al final de una tarde cualquiera, un taxista espera para cargar frente a la Puerta Grande de la Monumental madrileña. Cuando arranca con su cliente, subiendo hacia Ma-nuel Becerra por la calle de Alcalá, un pensamiento no se le va de la cabeza: “Qué pensaría ese señor si supiese que soy matador de toros, que he estado to-reando ahí, en la Plaza de las Ventas”, remata con una media melancólica. El taxista es Alberto Lamelas (Cortijos Nuevos, Jaén, 1984). Tras tomar la alternativa en mayo de 2009, tardó cuatro años en confirmarla en Las Ven-tas. Hasta este mes de septiembre llevaba más de dos años sin pisar un ruedo en España aunque sí que se ha vestido de luces en Francia. ¿Por qué? “Es im-pensable que en Francia las condiciones económi-cas sean malas. Impensable. Allí se me ha respe-tado y por eso me he vestido allí de torero” ¿Y en España? Aquí las condiciones que me han ofrecido no eran las más oportunas. Silencio. Fiestas, grandes coches, intelectuales y hermosas mujeres revoloteando alrededor de los toreros que pasan el día en sus fincas. Ese es el estereotipo que se nos viene a la cabeza cuando pensamos en su ma-tador. Pero nada más lejos de la realidad: muchos tienen que completar sus ingresos con los oficios más variopintos. Hay camareros, albañiles, vende-dores, recolectores de aceitunas… Esta es la vida fuera de los ruedos de los toreros obreros. El propio Alberto Lamelas vio en 2011 que la si-tuación era insostenible y tomó una decisión: “No se puede vivir del aire y yo me sentía como un vago al depender casi al 100% de mi familia, así que decidí dar el paso de tener un taxi y no me arrepiento de nada”. Este trabajo, asegura, le ofrece la libertad que necesita: “No es una empresa donde tienes que fi-char de ocho a tres, no me quita ni un segundo de mi dedicación al toro”. Para entender la decisión de Lamelas, hagamos las cuentas. En las plazas de tercera categoría, donde

los matadores más modestos forjan sus breves tem-poradas, el salario mínimo, fijado en el BOE, es de 9944 euros. Una vez ejecutadas la estocada del IRPF y el descabello de la Seguridad Social, al tore-ro le quedan 7716 euros. Mientras tanto, los gastos, según el boletín, alcanzan los 8153 euros. Es decir, que un matador del grupo C que cobra los mínimos –lo más habitual-, le puede costar 437 euros jugar-se la vida en una corrida. Todo esto en un mundo ideal. Porque cuando Alber-to Lamelas afirma que las condiciones que le han ofrecido no son “las más oportunas”, está diciendo que en algunas plazas no le han ofrecido, ni siquiera, los mínimos establecidos por la ley. Es decir: que vestirse de torero, aguantar las envestidas del ani-mal, jugarse sus muslos, someterse a los caprichos del público y tener a su familia en vilo mientras dure el festejo le habría salido todavía más caro. “Me sentía vago al depender de mi familia. Pero el taxi no me quita el tiempo de dedicación al toro”

Bronca. Raúl Cámara (Colmenar de Oreja, Madrid, 1990), novillero, pone cifras al fenómeno: “Holgadamente del toro viven una mínima parte de matadores, ni el 20%... Los primeros del escalafón me atrevería a decir… La gente piensa que los tore-ros tenemos mucho dinero. Y no. Cuando toreas te ofrecen, con suerte, los mínimos y con eso no te queda nada”. Pase del desprecio: “Si además viene la televisión y te quita la comisión, entonces te cuesta dinero vestirte de luces”. Cuando la crisis se llevó por delante su negocio fa-miliar, Cámara se familiarizó con términos como inteligencia financiera o network marketing. Hace unos años tuvo que meterse a trabajar como vende-dor para una firma de productos de nutrición. Ahora es socio de dos tiendas y se dedica a formar a otros

Alberto Lamelas (foto Internet)


comerciales que le generarán beneficios por cada una de sus futuras ventas. “Esto es algo temporal”, espera. “Dentro de unos años me generará unas bue-nas cantidades y podré dedicarme al 100% al mundo del toro”. Harto de las ofertas a la baja para torear, Cámara decidió no pisar este año los ruedos. “El problema es que antes se quería torear para hacerse rico y ahora hay que ser rico para poder torear”, denuncia. “Cuando un torero va por debajo de los mínimos, lo que está en juego es la supervivencia de la profe-sión. Por eso yo no lo hago muchos compañeros míos tampoco”. Aún así, sigue entrenando seis horas al día. “Con el físico, la nutrición y estando bien mentalizado, estas siempre bien preparado”, apunta. “Además, como ahora tengo más dinero, estoy toreando en el campo más que cuando toreaba en las plazas”. “El problema es que antes se quería torear para ha-cerse rico y ahora hay que ser rico para torear” El toreo en el campo es la base de la preparación de todo matador. Se hace fundamentalmente en in-vierno, pero esa preparación también tiene un coste,

sobre todo si no eres un figura y los ganaderos no te invitan. “Un toro en el campo cuesta lo que quiera pedirte su criador: entre 800 y 1000 euros, en fun-ción del prestigio de la ganadería”, dice Cámara, lo que añade más gastos a sus economías poco boyan-tes. Así lo hizo el novillero Mario Sotos (Hinojosa, Cuenca, 1992), quien debutó con cierto éxito este agosto en las Ventas. Para preparar la cita más im-portante de su vida, lidió cuatro animales: “Dos va-cas que me echó de Samuel Flores y dos toros que maté en el campo”. Cada uno le costó 1.500 euros. Suponiendo que cobrara los honorarios mínimos en plazas de primera, después de impuestos, su éxito le saldría a deber: 550 euros a cambio de jugarse la vida en el ruedo más importante del mundo.

Mario dejó de estudiar a los 16 años. Durante la temporada, se dedica sólo al toro: “Hay que estar las 24 horas del día en cuerpo y alma”. Pero eso no lle-ga, ni de lejos, para meter un sueldo en casa. De ahí que, cuando la temporada se acaba, se busque la vi-da donde pueda: “En fincas de caballos, en la cons-trucción, en el bar de la familia…”. También el matador José Carlos Venegas (Beas de Segura, Jaén, 1988) tiene que encontrar el sustento fuera de los ruedos. “En invierno, a la aceituna”, di-ce. “Y luego hay que podar los olivos, pues también se va”. Eso sí, cuando llega el mes de marzo y vuel-ven las corridas, entonces todo su tiempo lo dedica al toro: “Por la mañana salgo a correr, toreo de sa-lón, entreno y hago campo”. ¿Y por la tarde? Pues lo mismo. Así, al cabo del día le salen a José Carlos unas siete u ocho horas de entrenamiento. Más que la mayoría de los atletas de élite y, si caemos en la demagogia, infinitamente más que las estrellas mejor pagadas de la Champions. Tras 10 años “muy duros”, de “cornadas sin apenas recompensa”, el jiennense sólo pide un deseo: “Que me pongan un año con las figuras, en carteles de figuras, con ganaderías de figuras y si después de no valgo, pues me voy a mi casa”. Sabe que es un ansia imposible, pero aún así no se pone plazos para triun-far: “Nunca se sabe el día que se le da la vuelta a la moneda”. Para bien y para mal. Pone como ejemplo a Manuel Escribano. El anda-luz circulaba por los arrabales del toreo hasta que, gracias a un triunfo en una sustitución en Sevilla en 2013, su carrera arrancó. Pero enseguida le llegó la cruz: este junio, un toro le rompió la femoral en Ali-cante y le tendrá sin torear hasta el final de la tempo-rada. “En un segundo se puede acabar no ya la profe-sión, sino la vida”, lamenta el taxista Lamelas. “Este año lo hemos vivido con la muerte de Víctor Barrio y es algo que mi generación no conocía. Sí, a Manolete lo mató un toro, a Paquirri lo mató un to-ro…Pero nosotros no habíamos vivido una tragedia de ese calibre en España”. Aún así, no tiene dudas: “Es mucho más duro estar ocho horas sentado en el taxi dando vueltas por Madrid que la voltereta de un Miura. La voltereta tiene reconocimiento del públi-co, lo otro…” Fernando Cruz empezó a buscarse empleos suel-tos: desde pintor a fotógrafo de niños con Papá Noel. También siente nostalgia del aplauso Fernando Cruz (Madrid, 1981), quién toreó de luces por última vez el 14 de julio de 2013. Dos años antes, cuando em-pezó a ver que su oficio no era rentable, Fernando

Mario Sotos (foto Internet)


ACORNEAR: Dar cornadas el toro; ya sea contra un bulto o contra el engaño. También se ha aplicado en el mismo sentido acornar. Debido a ello, se le ha denominado al toro acorneador; si bien es término empleado en poesía, y apenas entre los aficionados. ACORRALADO: Se considera acorralado al toro o torero que, con respecto a su oponente, no tiene esca-patoria. ACORTAR: Disminuir la distancia entre torero y res. También se considera acortar la acción de enco-gerse el caballo; y a sujetar el jinete las riendas más adelante para mantenerlas tensas. ACOSAR: Perseguir al toro a caballo, una collera de garrochistas, en campo abierto. Generalmente tiene lugar para practicar la tienta de machos. Al garro-chista que acosa a caballo una res en el campo se le denomina acosador. Debe ser un extraordinario ca-ballista y conocedor del ganado bravo. El garrochista puede actuar como amparador o bien como derriba-dor, en función de su labor en el acosamiento.

ACOSÓN: Dícese de la acción en que el toro aco-mete al diestro de a pie o de a caballo bruscamente y muy de cerca, sin llegar a tropezarlos. ACOSTARSE: Doblar el toro las manos y reposar en el cuerpo sobre la arena, herido de muerte. Tam-bién se emplea este término para indicar la acción de embestir el toro inclinándose a un lado de la direc-ción que sería la recta y normal de su acometida. Asimismo, se aplica esta voz cuando el torero se echa sobre el toro, en la suerte de matar, de forma derecha y muy ceñida. ACTUAR: Burlar los lidiadores al toro, luchando con él y esquivando sus acometidas hasta darle muerte, según las reglas de la tauromaquia. Se consi-dera actuación tanto la acción como el resultado de actuar los lidiadores en el festejo taurino. De ahí que a aquellos que intervienen activamente en el espec-táculo se les considere actuantes. FUENTE: Luis Nieto Benito del Moral Galán.

De la A a la Z de los Toros

empezó a buscarse empleos sueltos: pintor, quiroma-sajista, camarero en el Hotel Intercontinental y hasta fotografiando niños en las rodillas del Papá Noel de un conocido centro comercial. “Ahora mismo el romanticismo se me ha ido”, dice: “Pero seguiré hasta que pierda la última gota de gasolina, porque después de 24 años dedicado a la profesión, si me fuera así lo haría con un sabor un poco agridulce”. Estos días, está levantando con sus manos, la ayuda de un único albañil y algo de dinero prestado una placita en Casarrubios del Monte (Toledo) en la que acoger a los aficionados prácticos a los que les ense-ña a manejar los trastos. “Así estoy continuamente repasando, hablando de toros y lo que les enseño a ellos me lo voy aplicando a mí mismo”, se consuela. Cruz añora los tiempos en los que estuvo en las posi-ciones intermedias del escalafón. Si hubiera seguido allí siete u ocho años, tendría su casa pagada y vivi-ría del toro. “No digo rico”, recalca el torero, quien sobrevivió de milagro a una cornada en el abdomen el 15 de agosto de 2012 en las Ventas. “Digo vivir dignamente recogiendo los frutos de todo el es-fuerzo que le he dedicado a esto”. El suyo es un mundo muy distinto al de las figuras del toreo, que llegan a cobrar hasta 300.000 euros por la tarde en plazas como Madrid, Sevilla o Bil-

bao. Ellos si tienen, después de mucho trabajo y al-gunas cornadas, el reconocimiento que, en teoría, va asociado a los toreros. Pero son pocos y tanta de-sigualdad irrita a Fernando Cruz. “Aquí todos esta-mos para ganar dinero, empresarios, ganaderos y toreros”, dice. “Pero el que se pone delante del toro, el que sufre, el que llora, el que sangra y el que da mala vida a su familia, ése es el torero y ése es el que de verdad se lo tiene que llevar”. Hace un par de semanas, el 25 de septiembre, Alber-to Lamelas no esperaba en la puerta de la plaza la finalización del festejo. Por un día, dejó el taxi apar-cado y llegó a las Ventas en la furgoneta con su cua-drilla, vestido de torero. La tarde no salió como es-peraba. Los toros “pegaron bocados” y Alberto lidió y mató la corrida dignamente. Dos ovaciones. El lu-nes siguiente volvió a dar vueltas con su taxi por Madrid mientras recordaba los oles y las palmas. Subiendo hacia Callao por la Gran Vía, Alberto La-melas, matador de toros, pensaba que, aún sin cortar orejas, por tarde como la del domingo todo merece la pena.

FUENTE: Internet. SANTIAGO GALÁN


PLANTAS MEDICINALES : EL GROSELLERO

Tonifica los Órganos Digestivos. Este bello arbusto recuerda a primera vista a la vid, por sus hojas palmeadas y sus racimos de bayas col-gantes, de color rojo y sabor agridulce. Muy aprecia-do por su agradable sabor y sus propiedades estimu-lantes. PROPIEDADES E INDICACIONES: Los frutos contienen ácidos orgánicos, azúcares, mucílago y vi-tamina C. Tiene propiedades aperitivas, digestivas, depurativas, diuréticas y laxantes. Los ácidos orgá-nicos que contienen (málico, cítrico y tartárico), esti-

mulan las secreciones del estómago e intestinos, faci-litando y tonificando todo el proceso de la digestión. Las grosellas resultan muy adecuadas en caso de Inapetencia. Convalecencia de enfermedades febriles e Infecciosas. Reumatismo, gota y cálculos renales. PREPARACIÓN Y EMPLEO Las grosellas pueden tomarse frescas, en compota, jarabe o zumo (jugo), sin más límite que el dictado por el apetito. Hábitat: Originario de Europa central y del norte de Asia. En España se da espontáneamente en los bos-ques húmedos de los Pirineos. Cultivado en muchos lugares, incluso en el continente americano. Descripción: Arbusto no espinoso de 1-1,5 m de al-tura, de la familia de las Saxifragáceas. Sus frutos, de color rojo y colgante en racimo, contienen varias se-millas pequeñas. Partes utilizadas: Los frutos (bayas).

Benito del Moral Galán FUENTE: Enciclopedia de Plantas Medicinales.

EL MAZAPAN:

Al mazapán le ocurre lo que a Cristóbal Colón: varias ciudades se disputan el honor de haber sido su cuna. Y entorno a las hipótesis relacionadas con su nacimiento. La cosa anda entre las monjas y los árabes. Afirma una vieja leyenda toledana que a raíz de la invasión ára-be en España, cuando los musulmanes pusieron cerco a Toledo, unas monjitas, las que habitan el actual monasterio de San Clemente, concibieron la idea de mezclar la almendra con azúcar para sustituir al pan y resistir el asedio; la idea se divulgó en la ciudad y pronto se convirtió en mazapán toda la almendra que ha-bía almacenada procedente de los cercanos cigarrales. Esta hipótesis es bonita pero endeble, no existía entonces el monasterio de San Clemente. Los historiadores que han tomado cartas en el asunto, afirman por el contrario, que los verdaderos crea- dores del mazapán fueron los ára-bes, grandes consumidores de golo- sinas, que harían con la pasta unos pasteles planos en los que grababan en relieve la figura de un rey senta-do en su salió, lo que explica la palabra <<mazapán>> que deriva del vocablo <<Mauthaba>> y significa <<rey sentado>> Del Oriente llegó el mazapán a Chi- pre, desde allí a Venecia y desde aquí a España y a Toledo. Sea de ello lo que quiera, lo cierto es que el mazapán se ha naturalizado en Toledo como el turrón en Alicante. Y de Toledo salen cada año millones de kilos de mazapán que engullen españoles y extranjeros. Aún se conserva en Toledo la costumbre de expo-ner en los escaparates las grandes cajas de encargo, en las que se mantienen y se manila habilidad de los fabricantes, que al pulir y tallar estas figuras, más que reposteros se revelan como auténticos artífices. Algo hay, sin embargo, en el mazapán de Toledo, que no se ha explicado todavía. Lo que pudiéramos lla-mar el <<secreto de fabricación>> que los mismos fabricantes ignoran. José Luis Galán Esteban .

Foto: Internet

Foto: Internet


GUITARRA ESPAÑOLA

Tienes planta de mujer,

busto y caderas con formas;

cuello con gran esbeltez,

y en tu cabeza, seis rosas.

A gloria, suenan tus notas,

llegando hasta el corazón,

cuando en tus cuerdas, se pulsa,

desde la prima al bordón.

Tus notas, dan alegría,

sueños, dolor y canción;

que enlazadas en armonía,

las voces del Cielo son.

Tus arpegios, son de oro,

tu música, es pura plata;

es tu sonar un tesoro,

que al escucharlo: arrebata.

De morería, el joyero,

jardín con la gracia ibera,

de ruiseñores, gorjeo

y flor de la primavera.


A ese que te escucha y ve,

le apasionan tus sonidos;

sueña con volverte a ver,

y sentir, lo que ha sentido.

Eres “ronda” de Castilla,

y “jotíca” de Aragón,

la “gracia” en Andalucía,

y en todos: gozo y pasión.

En el flamenco: Montoya,

Sabicas y Niño Ricardo;

Paco Lucia y Sanlúcar,

gloria universal te han dado.

Yepes, Tárrega y Segovia,

en el clásico, nos dieron;

de tu sonar, gran constancia,

y fama en el mundo entero.

Guitarra: tu has sido y eres,

fuego y pasión, que no engaña;

en cantes, locuras y amores,

¡Eres: la Esencia de España!

Félix Suárez Sánchez y Felipe Garrido Briceño.


CREMA DE GUISAN-

TES CON VIRUTAS DE

JAMÓN.

Preparación: 20 minutos.

Calorías por ración: 250.

Precio para 4 personas: 30 €.

Dificultad: Baja.

Ingredientes para 4 personas. 600 gramos de guisantes en con-serva, 100 gramos de jamón se-

rrano, una cebolla, 1,5 de crema de leche, aceite de oliva virgen extra, sal.

Paso 1º: Pela y pica la cebolla muy fina. Pon una olla al fuego con un poco de aceite. Añade la

cebolla picada y cuando esté transparente, echa lo guisantes y rehoga unos segundos. Paso 2º: Incorpora el caldo a la olla y deja cocer unos 10 minutos o hasta que los guisantes estén tiernos. Paso 3º: Añade la crema de leche y tritura todo el conjunto. Rectifi-ca de sal. Corta el jamón en tiras finas y sirve la crema adornada con las tiras de jamón por encima. Consejo: Puedes sustituir el ja-món por tiras de beicon fritas y crujientes.

LA COCINA DE “CONTACTOS”

Botones bien cosidos: Si quieres que los botones per-manezcan inamovibles mucho tiempo cóselos como de costumbre, con unas cuantas vueltas de hilo, y aplica al final un poco de esmalte de uñas transparen-te. De esta manera verás que ese botón no vuelve a soltarse nunca más. Contra las bolsas de los ojos: Si no consigues nin-gún remedio para descongestionar las bolsas del con-torno de ojos, cuece una manzana y machácala hasta que quede una crema. Aplícatela cuando se enfríe y retírala 30 minutos después con agua tibia, te quedarás nueva. Sanitarios impecables: Para no tener que comprar ningún pro-ducto específico que limpie los baldosines y los sanitarios, usa vinagre o exprime un limón que tengas en casa. Aplícalo empapando un trapo de algo-dón y luego saca brillo con otro seco. ¡Ojos irritados! Si tus ojos tienden a irritarse cuando fijas mucho la vista en la T.V. o simplemente por el polvo del ambiente, haz una manzanilla, empapa un paño limpio en ella cuando esté fría, y ponlo suave-mente, sobre tus ojos cerrados cuando ya estés tran-quila.

Fresas contra las ojeras: Limpia las fresas con bi-carbonato para eliminar restos de gérmenes y córtalas en trozos. Machácalos con un tenedor y haz un puré, que extenderás después sobre el contorno de los ojos. Déjalo actuar 20 minutos y retira después con agua fría. Pelar ajos con facilidad: Para que al pelar un ajo no se quede un intenso olor en tus manos, antes de pe-larlo, mételo en el microondas a velocidad alta dos minutos. Sácalo, espera que se enfríe y manéjalo con

normalidad. Verás que la piel se desprende fácilmente. Vasos sin marcas: Con el pa-so del tiempo y el uso, los va-sos y las copas de cristal pre-sentan ralladuras por culpa de los estropajos. Podrás minimi-zarlas si pasas por ellos un al-godón empapado en vinagre caliente. Exceso de sal: Si te has pasa-

do salando el guiso que estás preparando, no te preo-cupes, introduce media cebolla pelada y continúa co-ciendo. Al final retírala con cuidado y verás que ya no está tan salado como al principio.

Hasta la próxima amigas.

Foto: Internet

Foto: Internet


AcertijosAcertijos :

1 Es muy fácil de agarrar, pero muy difícil de

lanzar. ¿Qué es?

2 ¿Porqué en la noche sale la luna?

3 Nunca he dicho la verdad y nunca he dicho

la mentira. ¿Qué puedo ser?

4 ¿ Qué es que cuánto mas grande se hace

menos se ve?

REFRANESREFRANESREFRANES. . .

Pon vocales en las rayas de este refrán.

_rc_ _r_s _n _l c_ _l_ , _g_ _ _n _l s_ _l_

Pon sílabas y sacarás un refrán con ellas:

Di_ _ la _ _ _ via _ _ vien_ _, _ _an _ _ tu

_ _ _ nes yo _ _ au _ _ _to.

SOLUCIÓN A PASATIEMPOS DEL Nº 32:

Refranes:

A canas honradas no hay puertas cerradas.

El que a larga vida llega, mucho vió y más espera.

Acertijos:

1 El dinero 3 La sombra

2 Una “R” 4 La campana

Fuente: www.pasatiemposparallevar.com


CHISTEANDO … Por MOCAES

U na cebra está visitando unas caballerizas, cuan-do se encuentra con un caballo percherón y le

pregunta: ¿Y tú quién eres? Yo soy un semental. ¿Un semental? ¿qué es? Quítate el pijama y lo verás. Un hombre llega bebido a un bar y le preguntan: Buenas, ¿qué desea? Ser arquitecto. No me ha entendido, que digo que qué va a ser… Pues eso arquitecto. ¿Qué lo que quiero decir es qué va a tomar? ¿Qué hay? El camarero mosqueado le dice: ¡Pues nada, ya ve, aquí limpiando la barra! Va un borracho al bar y le dice al camarero: Póngame una copa antes de la batalla. Al cabo de tres horas, el borrachín le había pedido ya nueve copas más con esa misma frase: Y dice el cama-rero: Perdone, pero usted cada vez que me pide una copa me dice: “Deme una copa antes de la batalla”… ¿A qué batalla se refiere? A la que vamos a tener usted cuando tenga que pagar-le. Se encuentran dos vascos y uno pregunta. ¿De dónde vienes Patxi? Nada, de dar una vuelta por ahí, por el campo. He visto una granja, y me he comprado 200 vacas. Luego vi un rebaño de ovejas y le compré todas, las 300 al pastor. Y también criaban patos y entonces les pedí que me pusieran 30. ¿Qué pasa, te vas hacer granjero? ¡Qué va! Pero voy hacer un Belén de la leche… Llega un señor enfadado a su casa, abre la puerta, da un portazo para cerrarla, va a la habitación y le grita a su mujer: Dímelo, ¿es cierto qué me estás engañando con el en-cargado de la radio del pueblo, María? Negativo Pepe, corto y cambio. Le dice un amigo a otro, mientras dan un paseo por la calle: Mira Manolo, esa mujer que se acerca… ¡Vaya bigote que tiene! Oye tú, que esa mujer es mi madre. Pues, chico. ¡Y lo bien que la sienta!

¿Sabes por qué los cazadores cierran un ojo al apun-tar? Porque si cerrasen los dos no verían nada… Un hombre se encuentra a un amigo en la calle. ¡Uf, estoy hecho polvo Jesús! Necesito ahora mismo 200 euros ¡y no sé a quién pedírselos! ¡Pues menos mal! ¡Por un instante pensé que venias a pedírmelos a mí! Se encuentra un hombre con un amigo al que hacía tiempo que no veía… Oye, ¿qué sabes de Paco? Hace tiempo que no le veo y antes siempre andabais juntos. Pues ya no. ¿Y eso? ¿Mira, tú quedarías con alguien que te pone los cuer-nos con tu mujer y te roba el puesto en el trabajo? Por supuesto que no. Pues él tampoco. En su alegato final, el fiscal, con gesto dramático, le dice al jurado: ¡Miren al acusado! Su frente estrecha, su mirada aviesa, sus ojos hundidos, su siniestra apariencia… Y el acusado interrumpe indignado: ¿Me están juzgando por asesino o por feo? Un señor está tristón en el bar, se acerca uno de sus amigos y le pregunta: ¿Qué te pasa? Que casi atropello a mi suegra. ¿Y eso, que es lo que pasó, Dios mío? ¿Te fallaron los frenos o qué? No… ¡lo que me falló fue el acelerador! En un manicomio: ¡Yo soy el enviado de Dios! De eso nada monada, el enviado del Señor soy yo. Eso ni lo sueñes, yo soy quien ha asignado para re-presentarle en la Tierra. Durante más de media hora, los dos locos discuten sobre el asunto sin cesar. Hasta que un tercero se le-vanta de la mesa, alza la voz y dice: No sé por qué discutís tanto, ninguno tiene razón por-que… ¡Yo no he enviado a nadie! Entra un borracho en un bar, sonriente y feliz, y grita: ¡Feliz Navidad a todos los presentes! La camarera que le oye se acerca a él y le dice: ¿Feliz Navidad en febrero? ¿No me diga usted que estamos ya en febrero? ¡Dios mío, mi mujer me mata! ¡Nunca me había retra-sado tanto!


INFORMÁTICA:

22/02-03/04: Curso: Informática avanzada impartida por los voluntarios de AVICEMCAM. Horario:

Lunes y Miércoles de 10:30 a 12:30 y de 16:30 a 18:30 h.

07/03-06/04: Curso: Iníciate a la informática a través de la Obra Social de la Caixa. Horario: Martes y

Jueves de 12:00 a 14:00 h.

07/03-06/04: Curso: Crea y diseña documentos de texto a través de la Obra Social de la Caixa. Hora-

rio: Martes y Jueves de 10:00 a 12:00 h.

EXCURSIONES Y VISITAS CULTURALES:

18/02: Excursión a San Clemente: Visita guiada por el conjunto monumental de la localidad y Museo

de la Tinaja en Villarrobledo.

02/03: Visita Cultural al Museo del Greco: Visita guiada a la exposición “Iconos bielorrusos: Misterios

del tiempo y el espíritu”.

24/03-26/03: Viaje a la Suiza Manchega: Recorrido guiado por los municipios de Alcaraz, Ayna, Rio-

par, Yeste y Alcalá del Júcar.

OTROS TALLERES OBRA SOCIAL DE LA CAIXA:

20/02-29-05: Taller: Vivir como yo quiero: Desarrollo personal, control de nuestra vida, motivación…

Horario: Lunes de 12:00 a 13:30 h.

01/03-24/05: Taller: Vivir en positivo: Aprender a reinventarse, trabajar las fortalezas, sentirse

bien… Horario: Miércoles de 16:30 a 18:00 h.

07/03-02/05: Amigos lectores: Promoción de la lectura y la cultura, comunicación y relaciones socia-

les… Horario: Martes de 17:00 a 18:30 h.

30/03-25/05: Alimenta tu bienestar: Salud y nutrición, dieta equilibrada, alimentación en el enveje-

cimiento… Horario: Jueves de 17:00 a 18:30 h.

30/03-25/05: Entrena: Hábitos de cuidado personal, actividad física, prevención de caídas… Horario:

Jueves de 12:00 a 14:00 h.

PROGRAMACIÓN ACTIVIDADES EN EL CENTRO


Consejería de Bienestar Social

CENTRO DE DÍA DE MAYORES “TOLEDO I”

Dirección: C/ Santa Fe, 2 – 45001 TOLEDO

Teléfono: 925 223 916 Fax: 925 210 212

VISITA AL MUSEO DE SANTA CRUZ

VISITA AL MUSEO DEL EJERCITO

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C O N T A C T O S FEBRERO de 2017 Nº 33 FEBRERO … · joven y apuesto capitán leonés Rodrigo de Lara vio en un ajimez a una bellísima ... El valiente leo-nés se presentó ante