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Centro de Investigación Científica de Yucatán, A.C. Posgrado en Energía Renovable PRETRATAMIENTO ÁCIDO Y SACARIFICACIÓN ENZIMÁTICA DEL BAGAZO DE HENEQUÉN. ESTUDIO DE LOS AZÚCARES LIBERADOS EN EL PROCESO Tesis que presenta IBQ FRANK ANDRÉ UICAB BALLOTE En opción al título de: MAESTRO EN CIENCIAS EN ENERGÍA RENOVABLE Mérida, Yucatán, Abril 2011.

Centro de Investigación Científica de Yucatán, A.C ... · reductores en el ensayo preliminar de pretratamiento químico 34 Figura 12. Liberación de azúcares reductores con los

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Centro de Investigación Científica de Yucatán, A.C.

Posgrado en Energía Renovable

PRETRATAMIENTO ÁCIDO Y SACARIFICACIÓN ENZIMÁTICA DEL BAGAZO DE HENEQUÉN.

ESTUDIO DE LOS AZÚCARES LIBERADOS EN EL PROCESO

Tesis que presenta

IBQ FRANK ANDRÉ UICAB BALLOTE

En opción al título de:

MAESTRO EN CIENCIAS EN ENERGÍA RENOVABLE

Mérida, Yucatán, Abril 2011.

DECLARACIÓN DE PROPIEDAD

Declaro que la información contenida en la sección de Materiales y Métodos

Experimentales, los Resultados y Discusión de este documento proviene de las

actividades de experimentación realizadas durante el período que se me asignó, para

desarrollar mi trabajo de tesis, en las Unidades de Biotecnología, Materiales y de

Bioenergía del Centro de Investigación Científica de Yucatán, A. C, y que dicha

información le pertenece en términos de la Ley de la Propiedad Industrial, por lo que no

me reservo ningún derecho sobre ello.

Mérida, Yucatán. México

Abril del 2011

__________________________________________________

IBQ Frank André Uicab Ballote

Este trabajo se realizó en los laboratorios de las Unidades de Biotecnología, Materiales y

de Energía Renovable del Centro de Investigación Científica de Yucatán A.C., bajo la

dirección de la Dra. Blondy Beatriz Canto Canché y del Dr. Luis Felipe Barahona Pérez.

_________________________________________________ Dr. Oscar A. Moreno Valenzuela

Director Académico Centro de Investigación Científica de Yucatán A.C.

Agradecimientos

Agradezco extensamente las facilidades que me concedieron para llevar a cabo la parte

experimental a las Unidades de: Biotecnología, Materiales y Energía Renovable. Al CONACYT

por la beca otorgada con folio No. 2787.

Quiero expresar mi sincero y efusivo agradecimiento a las personas que tanto directa como

indirectamente han hecho posible la realización de esta Tesis:

A los Dres. Blondy Beatriz Canto Canché y Luis Felipe Barahona Pérez, directores de esta

Tesis; por todo el aporte tanto a nivel científico, como por sus conocimientos y enseñanzas, a

nivel personal por ser como unos padres, debido a la paciencia, la confianza y Fe que depositaron

en mí. Por su esfuerzo y dedicación en esta Tesis mil gracias.

A la Dra. Liliana Alzate Gaviria, Coordinadora del posgrado de Energía Renovable por

considerarme para continuar mis estudios de posgrado y permitirme un logro más en mi vida.

Por su comprensión muchas gracias.

A los Dres. Elsy Noemí Tamayo Canul y Gonzalo Canché Escamilla, por darle seguimiento a

este trabajo con sus observaciones, análisis, comentarios, críticas y sugerencias, las cuales han

sido fundamentales para la realización de esta Tesis.

A los técnicos MC. Miguel Tzec Simá, MC. Leticia Peraza Echeverría, MC. Jorge Domínguez

y la QI. Tanit Toledano, por sus apoyos técnicos y sugerencias para realizar mis experimentos

con la mayor calidad y eficiencia posible.

A mis compañeros de laboratorio que me acompañaron durante los primeros años de la Tesis y

a los que conocí al final de ésta. En especial a: Eglé May, Blanca Moreno, Muhilan Mahindran

Xenia Espino, Nuvia Kantún, Jairo Torres, Heidi Espadas, Yamili Burgos y Miguel Canseco por

ser mis “hermanos científicos”, y compartir su amistad incondicional, en hora buena les deseo

mucho éxito a cada uno de ustedes.

A todos mis compañeros de posgrado, les agradezco su cálida compañía y total comprensión

hacia mi persona durante este breve lapso de tiempo que compartimos, pero que nos dejó una

duradera amistad. Agradezco de manera particular a: Andrés Guerrero, Diego González, Samuel

Herrera, Angélica Herrera, Ana Maciel y Areli Solís por añadir a mi vida muchas alegrías y

anécdotas inolvidables.

A ti “PUTSIKAL” por aguantarme el trote antes y durante esta maestría, gracias por ser única y

especial en mi vida, te comparto mi dicha y felicidad. Deseo de corazón poder compartir más

éxitos y bendiciones contigo. En verdad muchas gracias Erika Chan.

A mis hermanas, a mis padres y a los nuevos integrantes de la familia, por estar conmigo en

todo momento en mi mente y en mi corazón. Les dedico este logro.

Y por último a DIOS por dejarme compartir con todas estas personas una parte de mi existencia.

i

INDICE

i

INDICE DE TABLAS

iv

INDICE DE FIGURAS

v

RESUMEN

1

ABSTRACT

2

INTRODUCCIÓN

3

1. ANTECEDENTES

5

1.1. Estado Actual de la producción del Bioetanol

4

1.2. Bioetanol de primera y segunda generación

6

1.3. Los materiales lignocelulósicos

8

1.3.1. Naturaleza de los materiales lignocelulósicos

9

1.3.2. Composición química y estructural de los materiales Lignocelulósicos

10

1.4. Pretratamientos y sacarificación de los materiales lignocelulósicos

13

1.4.1. Pretratamientos mecánicos y fisicoquímicos

15

1.4.2. Pretratamientos químicos

15

1.4.3. Tratamientos ácidos

16

1.4.4. Tratamientos alcalinos

16

1.4.5. Tratamientos biológicos

17

1.5. El bagazo de henequén (Agave fourcroydes Lemaire) como residuo lignocelulósico

19

1.5.1. Aplicación de pretratamientos en agaves

20

1.6. Elaboración del Bioetanol

21

1.6.1. La fermentación alcohólica

21

1.7. Justificación

26

1.8. Objetivo general

26

1.8.1. Objetivos particulares 26

ii

1.9. Hipótesis

27

2. MATERIALES Y MÉTODOS

28

2.1. Diagrama de flujo del proceso

28

2.2. Material vegetal

29

2.3. Pretratamiento químico del bagazo de henequén con diferentes concentraciones de ácido y tiempos de reacción

29

2.4. Determinación de la actividad enzimática celulasa

31

2.5. Sacarificación enzimática del bagazo de henequén pretratado

31

2.6. Curva de crecimiento de la levadura Saccharomyces cerevisiae en hidrolizados enzimáticos de bagazo de henequén

32

2.7. Fermentación de los hidrolizados enzimáticos del bagazo de henequén

32

2.8. Destilación

32

2.9. Determinación de azúcares reductores

32

2.10. Determinación de azúcares totales

33

2.11. Determinación de azúcares por HPLC

33

2.12. Determinación de etanol

33

2.13. Análisis estadístico

33

3. RESULTADOS Y DISCUSIONES

34

3.1. Resultados del ensayo preliminar del pretratamiento químico

34

3.2. Pretratamiento químico del bagazo de henequén con diferentes concentraciones de ácido y tiempos de reacción

35

3.3. Determinación de la actividad enzimática en el lote usado de celulasa comercial

38

3.4. Ensayo preliminar de sacarificación enzimática del bagazo de henequén previamente pretratado

38

3.5. Sacarificación enzimática del bagazo de henequén previamente pretratado

40

3.6. Identificación de los azúcares presentes en los hidrolizados enzimáticos del bagazo de henequén por HPLC

41

iii

3.7. Curva de crecimiento de la levadura Saccharomyces cerevisiae en

hidrolizados enzimáticos de bagazo de henequén

43

3.8. Fermentación de los hidrolizados enzimáticos del bagazo de henequén

44

3.9. Producción de etanol

46

4. CONCLUSIONES Y PERSPECTIVAS

47

BIBLIOGRAFÍA

48

ANEXO A 54

iv

INDICE DE TABLAS Tabla 1. Composición de materiales lignocelulósicos

10

Tabla 2. Rasgos esenciales y deseables en los microorganismos para producir etanol a partir de fuentes lignocelulósicas

25

Tabla 3. Diseño factorial para el pretratamiento ácido del bagazo de henequén

30

Tabla 4. Valores de actividad enzimática sobre distintos sustratos, determinados por la liberación de glucosa (U= g de producto liberado) en 1 hora

38

Tabla 5. Tiempos de retención de los estándares de azúcares obtenidos por HPLC

41

v

INDICE DE FIGURAS

Figura 1. Ciclo del CO2 en el uso del bioetanol como biocombustible

7

Figura 2. Procesos de producción de etanol de primera y segunda generación

8

Figura 3. Producción de biomasa a nivel mundial

9

Figura 4. Conformación de la celulosa

11

Figura 5. Componentes y subcomponentes de la lignocelulosa

13

Figura 6. Diagrama simplificado de los procesos para la obtención del bioetanol celulósico

14

Figura 7. Estructura química de la celulosa y sitios de acción de la celobiohidrolasa, endo-β-glucanasa y β-glucosidasa

18

Figura 8. Rutas metabólicas para la producción de etanol utilizando pentosas y hexosas; a) ruta pentosa fosfato, b) glicolisis, y c) ruta de Entner-Doudoroff. (Ribo5P) ribosa-5-fosfato, (Sedo7P) seudoheptulosa7-fosfato, (F6P) fructosa-6-fosfato, (Glyceral3P) gliceraldehido 3-fosfato, (Gal) galactose, (Man) mannose, (Acetal) acetaldehido, (6PG) 6-fosfo-gluconolactona, (2KDPG) 2-ceto-desoxy-fosfoglucanato,(TKL) transcetolasa (TAL9) transaldolasa, (XK) xiluloquinasa, (XR) xilosa reductasa, (XDH) xilitol dehidrogenasa

24

Figura 9. Diagrama de flujo del proceso de obtención de etanol. Se cuantificaron los azúcares por el método del DNS, Fenol sulfúrico (*), (**) y HPLC (**). El etanol se cuantificó por el método del dicromato

28

Figura 10. Obtención del material vegetal a) recolección de bagazo, b) etapa de secado c) bagazo seco molido

29

Figura 11. Efecto de la concentración del ácido en la producción de azúcares reductores en el ensayo preliminar de pretratamiento químico

34

Figura 12. Liberación de azúcares reductores con los diferentes pretratamientos con ácido y calentamiento (121ºC, 1.1 bar) a diferentes tiempos

35

Figura 13. Liberación de azúcares totales con los diferentes pretratamientos con ácido y calentamiento (121ºC, 1.1 bar) a diferentes tiempos

36

Figura 14. Efecto del pretratamiento en la reducción de peso del bagazo (peso inicial del bagazo seco = 20g)

37

Figura 15. Ensayo preliminar de sacarificación enzimática de bagazo de henequén pretratado con ácido sulfúrico al 0.4% durante diferentes tiempos (15, 60, 105 min)

39

vi

Figura 16. Sacarificación enzimática del bagazo de henequén pretratado

40

Figura 17. Cromatograma de la mezcla de azúcares separados por HPLC. La señal a 1.575 min corresponde al sistema móvil

42

Figura 18. Cromatograma de una muestra del bagazo de henequén hidrolizada enzimáticamente

43

Figura 19. Curva de crecimiento de Saccharomyces cerevisiae en bagazo de henequén hidrolizado enzimáticamente con celulasas

44

Figura 20. Fermentación del hidrolizado enzimático de bagazo de henequén

44

Figura 21. Consumo de los azúcares durante la fermentación del hidrolizado enzimático del bagazo de henequén. Se midieron los azúcares reductores (AR), azúcares totales (AT) y por HPLC

45

1

RESUMEN

En este trabajo, se realizó un estudio preliminar para determinar si el bagazo de

henequén se puede aprovechar como materia prima para la producción de etanol. Se

aplicaron pretratamientos al bagazo seco basándose en un diseño factorial, variando la

concentración de ácido sulfúrico y el tiempo, para determinar el efecto de estas variables

sobre la cantidad y tipo de azúcares liberados y determinar si este procedimiento produce

compuestos que puedan inhibir los procesos posteriores de sacarificación enzimática y

fermentación alcohólica.

Se evaluó de igual forma la hidrólisis enzimática sobre los materiales pretratados con el

ácido, en la que se cuantificaron los azúcares liberados por la utilización de una celulasa

comercial. Se observó que empleando bajas concentraciones de ácido sulfúrico como

pretratamiento (0.4% v/v) y aplicando posteriormente una hidrólisis enzimática, se logra

obtener una conversión de cerca del 23 % (w/w) de este residuo lignocelulósico a

azúcares fermentables.

Se determinó que el único carbohidrato liberado durante el pretratamiento y la hidrólisis

enzimática del bagazo fue la glucosa, lo que facilita el proceso de fermentación.

Finalmente, se realizó un seguimiento del consumo de la glucosa, mediante HPLC,

durante la fermentación del bagazo sacarificado, utilizando la levadura Saccharomyces

cerevisiae como microorganismo modelo. Durante la fermentación, se consumió el 78%

de la glucosa generada por el pretratamiento y la hidrólisis enzimática. Se obtuvo un 36%

del rendimiento teórico en la fermentación, sin embargo, este es susceptible de ser

mejorado.

2

ABSTRACT

In this work, a preliminary study of the use of henequen bagasse as a source of

biomass for lignocellulosic ethanol production was conducted. Bagasse pretreatment was

based on a factorial design using different concentrations of sulfuric acid and different

heating times to determine the effect of these variables on the amount of released sugars

and if these conditions produce any compound that could inhibit the subsequent enzymatic

saccharification and alcoholic fermentation steps.

The next step in this study was to perform an enzymatic hydrolysis of the pretreated

materials with a commercial cellulase. Different conditions were evaluated and the

concentration of released sugars determined. We found that when using low sulfuric acid

concentrations and heat as a pretreatment (0.4% v/v) and then applying enzymatic

hydrolysis with commercial cellulases it was possible to obtain approximately 23% (w/w) of

fermentable sugars from this lignocellulosic residue.

It was determined that the only carbohydrate released during the pretreatment and

enzymatic hydrolysis was glucose, and that facilitates the fermentation process.

Finally, the consumption of glucose during fermentation of the saccharified bagasse using

the yeast Saccharomyces cerevisiae as model organism was monitored by HPLC. 36% of

the fermentation theoretical yield was obtained. This preliminary study showed that ethanol

can be obtained from henequen bagasse but the fermentation step has to be optimized.

3

INTRODUCCIÓN

En años recientes el crecimiento de la economía e infraestructura de los países se ha

visto reflejado en un aumento en la demanda de energía. El petróleo es la fuente de

energía que provee mayormente la movilidad en los sectores de la industria y de

transportes. Por otro lado, el incremento en la demanda de energía ha provocado una

disminución de las reservas del petróleo de fácil acceso y en consecuencia la

inestabilidad de su precio es cada vez mayor. Es por esta razón que se ha encendido la

alerta en varias partes del mundo sobre la necesidad de encontrar una fuente de energía

que sustituya a los hidrocarburos fósiles y se busca que ésta sea económica, renovable y

sustentable [1,2].

Aunque la idea de encontrar fuentes de energías renovables no es nueva, la primera

década del actual siglo ha sido de gran importancia en la investigación y el desarrollo de

nuevos suministros de energía [3]. Una de estas fuentes son los biocombustibles, entre

los que se encuentran los denominados de segunda generación, estos se refieren a

aquellos cuya tecnología no utiliza materia prima que pueda ser destinada para el

consumo humano (maíz, caña de azúcar, papa, remolacha, yuca etc.) sino que utilizan

subproductos ó desperdicios agroindustriales (bagazo de caña, rastrojo de maíz, etc.)

para obtener un producto de bajo costo utilizando nuevas tecnologías [4, 5, 6]. Se sabe

que los desechos agroindustriales o lignocelulósicos son una fuente importante de

carbohidratos estructurales, que pueden ser utilizados para la producción de etanol (o

bioetanol). El bioetanol de origen lignocelulósico proveería combustible para el transporte,

debido a que constantemente se genera biomasa vegetal en el planeta y se puede

obtener a partir de los cultivos o desechos agroforestales hasta de la biomasa producida

por las microalgas [6].

La importancia del bioetanol como biocombustible radica en que actualmente es utilizado

como un aditivo o substituto de la gasolina en varias naciones del mundo. Actualmente la

mayor parte de la producción mundial es obtenida de dos cultivos: la caña de azúcar y del

maíz, por medio de la fermentación de los carbohidratos que contienen, en un proceso

denominado de primera generación, ya que se emplean materias primas que son

utilizadas también para la alimentación. El interés en desarrollar bioetanol de segunda

generación se debe a la posibilidad de aprovechar los desechos agroindustriales. Sin

embargo, durante el proceso de obtención del bioetanol a partir de estas fuentes se

4

presentan diferentes problemas, entre los que destacan, la degradación de los

carbohidratos liberados por efecto de los pretratamientos, la formación de inhibidores que

afectan los subsecuentes procesos y la liberación de carbohidratos que no son

asimilables por los microorganismos típicos de una fermentación industrial [7]. Esta es

una de las razones por las que el estudio de fuentes lignocelulósicas y su procesamiento

tienen relevancia en el campo de la biotecnología, en particular en el mejoramiento y

desarrollo de microorganismos con capacidades para aplicación industrial [5, 6, 7]. En la

actualidad hay un gran interés a nivel mundial por la producción de energía a partir de

éstos recursos renovables.

En este trabajo se utilizó bagazo de henequén para la obtención de bioetanol. Se observó

que utilizando como pretratamiento bajas concentraciones de ácido sulfúrico (0.4% v/v) y

calentando por 60 min a 120°C y 1.1 bar, y aplicando posteriormente una hidrólisis

enzimática con celulasas comerciales, se logró obtener una conversión del 23% (w/w) del

material lignocelulósico a azúcares fermentables. Además se pudo determinar que el

único carbohidrato liberado durante el pretratamiento del bagazo así como de su hidrólisis

enzimática es la glucosa. La utilización de una enzima comercial permitió sacarificar el

material pretratado y proceder a realizar la fermentación alcohólica con una cepa de

Saccharomyces cerevisiae. El crecimiento de la levadura y el consumo de los azúcares

indicaron que no se producen inhibidores durante las etapas anteriores a la fermentación.

En este trabajo se presenta en el Capítulo 1, la importancia de los materiales

lignocelulósicos como biomasa para la producción de etanol y los procesos que se aplican

para el aprovechamiento de la celulosa y de la hemicelulosa que contiene. En el Capítulo

2 se presenta la metodología llevada a cabo durante la realización de los experimentos y

en los Capítulos 3 y 4 los resultados y las conclusiones surgidas en esta investigación,

respectivamente.

5

CAPÍTULO I

ANTECEDENTES

1.1. Estado actual de la producción del bioetanol

El etanol fue considerado como una alternativa de combustible antes de la primera

perforación de un pozo petrolero realizada por Edwin Drake en 1859 en Pensilvania [3].

Previo a esos años, la crisis de energía giraba en torno a la falta de aceite de ballena,

especie que estuvo a punto de extinguirse por esta valiosa característica. Se pretendía

sustituir este aceite por aceites vegetales para su uso en las lámparas, las cuales eran

utilizadas para el alumbrado público de aquella época. En 1930 el etanol se mezcló con

trementina de pinos refinada y reemplazó a los costosos aceites de ballena, dando inicio

al uso del etanol como combustible [3,4]. Su utilización disminuyó por la aparición del

petróleo, producto de fácil procesamiento y extracción, lo que hizo a este último

comercialmente atractivo [2].

El primer programa masivo para la producción de bioetanol se inició en Brasil en 1975 a

partir de la caña de azúcar. Surgió como respuesta a la crisis del petróleo en esa década,

creándose el programa PROALCOOL [3, 4]. Hasta 1989 este programa se apoyó con

subsidios e incentivos fiscales para impulsar esta tecnología y actualmente su

comercialización es autosuficiente. Brasil cuenta con aproximadamente 2 millones de

vehículos adaptados para usar el bioetanol mezclado con la gasolina y la demanda de

este biocombustible sigue en aumento, por lo que el incremento de las extensiones de

cultivo de la caña de azúcar también ha provocado debates ecológicos entre los mismos

brasileños [5]. Actualmente el etanol se ha propuesto como una alternativa entre los

biocombustibles para el sector del transporte ya que tiene el potencial para aumentar la

seguridad energética, mejorar el impacto medioambiental y ayudar a satisfacer la

creciente necesidad energética. En el caso de los EE.UU. hay un interés en sustituir el

30% del consumo anual de gasolina por etanol para el año 2030, lo que equivale a

producir 60 mil millones de galones de etanol al año [2, 4]. Los EE.UU. producen bioetanol

a partir de maíz; esto se debe a la entrada en vigor en 1978 de la ley del impuesto a la

energía, que también introdujo incentivos fiscales para su producción. No obstante el

verdadero impulso para el consumo de etanol fueron las prohibiciones del uso del metil

6

ter-butil éter en algunos estados de la Unión Americana, debido a que la contaminación

de pozos de agua con este compuesto provocaba graves daños a la salud.

Tanto EE.UU como Brasil tienen grandes extensiones de territorio y de cultivo además de

que sus políticas han impulsado estos desarrollos. Para los años 2000-2007, Brasil

produjo entre 11 y 16 mil millones de litros por año, EE.UU. produjo 10 mil millones de

litros por año y se perfilaba para una mayor expansión en años posteriores ya que se

posicionaría como primer lugar en producción de bioetanol a partir de 2007 [5,7].

Mientras tanto en la Unión Europea, países como Francia, España y Alemania entre otros,

comenzaron a producir bioetanol a partir de otras fuentes (remolacha, trigo y cebada) y a

importar bioetanol de Brasil. En Asia, desde hace dos años, China y la India se

consolidaron como productores importantes de bioetanol. Sin embargo, estos tipos de

desarrollos comenzaron a presentar sus inconvenientes ya que para producir el bioetanol

se desviaban productos alimenticios (como el maíz), lo que provocaba un aumento de

precios en los mismos, generando un conflicto entre producir alimentos o energía [5, 6, 7].

Otra fuente de etanol es la obtenida de la celulosa. El etanol de celulosa ó lignocelulósico

tiene un gran potencial como biocombustible para cubrir una parte importante de las

necesidades de combustible. La característica de este biocombustible reside en que

puede obtenerse de fuentes ricas en celulosa, como por ejemplo, la biomasa proveniente

de residuos agroindustriales.

1.2. Bioetanol de primera y segunda generación

El tema de los biocombustibles ha generado controversias debido a la sobreexplotación

de los suelos, así como un incremento en el precio de las materias primas utilizadas para

su producción ya que se rigen por el mercado alimentario como pasa con el maíz o la

remolacha. Sin embargo se ha optado por utilizar nuevos cultivos más productivos y

rentables, que no tengan una importancia o vínculo a la industria de los alimentos; como

el sorgo azucarero (Sorghum bicolor L.), la pataca (Helianthus tuberosus), los pastos

perennes (Panicum virgatum L.) [8]. Por otro lado, una de las ventajas representativas del

bioetanol con respecto a los combustibles pétreos, es que su utilización provoca una

emisión neta de gases de efecto invernadero casi nula, debido a la captación del CO2 por

los propios cultivos (Figura 1), es decir, la combustión del combustible libera CO2 a la

atmósfera pero es el que las plantas fijaron durante la fotosíntesis. En el caso del

7

petróleo, el CO2 se capturó hace miles de años y actualmente se está liberando al

ambiente, lo cual aumenta su concentración en la atmósfera. [4, 5, 7]

Figura 1.Ciclo del CO2 y el uso del bioetanol como biocombustible.

Actualmente el bioetanol se produce principalmente a partir del maíz y de la caña de

azúcar, los cuales son productos importantes del sector alimentario. A este tipo de

combustible se le denomina de primera generación. Por otra parte también se puede

obtener bioetanol de materiales lignocelulósicos. Estos materiales adquirieron importancia

en la producción de bioetanol ya que provienen de desechos agroindustriales, de otros

sectores industriales o si es el caso, de cultivos predestinados exclusivamente para la

producción de biomasa no destinada a la alimentación humana [6, 8]. A este bioetanol se

le designó de segunda generación. La diferencia entre la primera y segunda generación

radica principalmente en el tipo de proceso y la materia prima que se emplea para obtener

los carbohidratos que serán convertidos a este combustible. Los costos de producción del

etanol de segunda generación son mayores debido a las etapas adicionales de

procesamiento (Figura 2). El bioetanol ha estado subsidiado generalmente por los

gobiernos para hacerlo competitivo con otros combustibles, sin embargo se espera que al

desarrollarse este tipo de tecnología y al disminuir las reservas de petróleo, la industria

del bioetanol pueda sostenerse de manera autónoma [8, 9, 10, 11].

8

Figura 2. Procesos de producción de etanol de primera y segunda generación [9].

1.3. Los materiales lignocelulósicos

El término lignocelulósico se forma a partir de los vocablos lignina y celulosa que son los

dos compuestos principales que conforman estructuralmente a este tipo de material

orgánico. El término es ampliamente utilizado para referirse a materiales que puedan

provenir de desechos agroindustriales o agroforestales. En el planeta existe una

abundancia de fuentes de biomasa natural. De hecho, la producción primaria de biomasa

estimada en equivalentes energéticos, es de 6.9x1017 kcal/año, siendo utilizada solamente

el 7 % de esta cantidad (Figura 3) [12]. La productividad biosintética neta de la biósfera,

bajo condiciones de cultivo no intensivo, se estima en alrededor de 155 billones de

ton/año. Estas fuentes renovables a su vez pueden ser utilizadas directa e indirectamente

para la producción de biomoléculas o derivados químicos [7, 8, 11, 12, 13]. Dependiendo

del tipo de planta, la composición y el porcentaje de lignina y holocelulosa varían. Ésta es

Segunda generación Primera generación

9

la razón por la cual se considera antes de implementar cualquier proceso, caracterizar

químicamente la biomasa. Así se podrá determinar el tipo de pretratamiento con el cual se

puedan obtener los mejores rendimientos.

Figura 3. Producción de biomasa a nivel mundial [12].

1.3.1. Naturaleza de los materiales lignocelulósicos

Es importante conocer las generalidades y propiedades de los materiales lignocelulósicos

para lograr un mejor aprovechamiento del material. La pared celular es el rasgo más

característico de los vegetales que los hace diferentes de otros organismos. Su existencia

pone de manifiesto la relación entre estructura y función celular. En las plantas se puede

distinguir varios tipos de células, con características propias y a veces únicas para una

variedad vegetal.

Esto se puede ejemplificar considerando las distintas funciones que tienen los órganos

vegetales para transportar y almacenar sus nutrientes esenciales. Entre otros aspectos, el

estado de desarrollo y genotipo influyen en la composición de la pared, lo que permite

diferenciar entre una pared celular primaria y una secundaria. La pared celular es una

matriz compleja formada de diferentes clases de polímeros que interactúan para formar

una estructura de protección, que además tiene la función de transporte de agua e

intercambio de información de afuera hacia adentro de la planta. En términos generales,

la pared celular está compuesta de aproximadamente 30-40% de celulosa, 30%

hemicelulosa, 15% lignina y entre 5 y 10% de proteínas [12, 13, 14, 15].

10

1.3.2. Composición química y estructural de los materiales lignocelulósicos

Por lo general, los principales constituyentes de los materiales provenientes de las

paredes celulares de los vegetales son la celulosa, la hemicelulosa, la pectina, la lignina y

las proteínas. Los tres primeros componentes son polisacáridos; la lignina está constituida

de polímeros fenólicos y las proteínas de aminoácidos. La proporción relativa de estos

polímeros depende de la especie, los tipos de células y su estado de desarrollo,

principalmente. La cantidad de celulosa y hemicelulosa presentes en un desperdicio

lignocelulósico agroindustrial o urbano puede variar, como se muestra en la Tabla 1 [13,

14, 15, 16]

Tabla 1 Composición de algunos materiales lignocelulósicos [15]

Materiales lignocelulósicos Celulosa (%) Hemicelulosa (%) Lignina (%)

Maderas duras 40–55 24–40 18–25

Maderas suaves 45–50 25–35 25–35

Cáscaras de nuez 25–30 25–30 30–40

Mazorca de maíz 45 35 15

Gramíneas 25–40 35–50 10–30

Papel 85–99 0 0–15

Rastrojo de maíz 30 50 15

Basura orgánica 60 20 20

Hojas 15–20 80–85 0

Semillas de algodón 80–95 5–20 0

Periódicos 40–55 25–40 18–30

Residuos de pulpeo del papel 60–70 10–20 5–10

Sólidos primarios de aguas residuales ago-15 NA 24-29

Residuos de cerdo 6 28 NA

Residuos sólidos de estiércol de ganado 1.6–4.7 1.4–3.3 2.7–5.7

Hierbas costeras 25 35.7 6.4

Pasto varilla (swichtgrass) 45 31.4 12

(NA) No se tiene información

% en peso seco del material lignocelulósico

En la estructura interna del material lignocelulósico cada componente principal está

conformado de subcomponentes que aportan funciones y características específicas.

11

CELULOSA.

Tiene la función de dar resistencia mecánica a la estructura, resistencia que irá en la

misma dirección de las fibrillas que integran la fase cristalina.

La celulosa es el compuesto orgánico de mayor abundancia en la naturaleza, de gran

importancia a nivel biológico y un polímero de interés industrial. [5, 6, 14, 16, 17]

Químicamente es un polímero de moléculas de D-glucosa, que se unen entre sí por

enlaces -1,4; disposición que la hace estable además de poseer enlaces de hidrógeno

que une sus moléculas entre sí, confiriéndole propiedades que le permiten ser un buen

material estructural de la pared celular [17, 18, 19, 20]. La base de la estructura de la

celulosa es la unidad de anhidroglucosa (Figura 4) en conformación química de silla, cuyo

número determina el grado de polimerización [21]. Cada cadena de celulosa está ligada a

otras mediante enlaces de hidrógeno que le aportan rigidez al material. Si los enlaces de

hidrógeno son pocos, la celulosa es amorfa, mientras que una disposición especial, más

organizada y simétrica de estos enlaces generan casi siempre diferentes formas

cristalinas. Así, la celulosa puede presentarse en cuatro macro estructuras cristalinas

denominadas I, II, III, y IV [17, 20, 21]. Las dos primeras son las más importantes que hay

que considerar para el establecimiento de los pretratamientos sobre los materiales

lignocelulósicos. La celulosa I es la que normalmente se encuentra en la pared celular

vegetal. La clase II, es la más estable desde el punto de vista termodinámico y resulta de

la recristalización de la celulosa amorfa o de su mercerización en solución de hidróxido de

sodio [20, 21, 22].

Figura 4. Conformación de la celulosa [20].

12

HEMICELULOSA.

Las hemicelulosas (también son repeticiones de glucosa con uniones -1,4 pero en bajo

contenido y entrelazadas con la celulosa cristalina); son amorfas y poco polimerizadas

debido a que no pueden formar puentes de hidrógeno. Dentro de las hemicelulosas

destacan los carbohidratos de 5 carbonos como los xiloglucanos, los xilanos y los

xiloglucanos mixtos.

Xiloglucanos: la cadena central del polímero está formada por unidades de

glucosa con ramificaciones de tipo xilosa.

Xilanos: la cadena central del polímero contiene unidades de xilosa.

Xiloglucanos mixtos: Se componen de residuos de D-glucosa con enlaces -1,3 y

-1,4.

LIGNINA.

Es un compuesto exclusivo de la pared secundaria, tiene carácter hidrofóbico y aporta

resistencia mecánica al material vegetal. La lignina provoca que haya menos agua y

menos capacidad de hidratación del material. Su formación depende del hábito de

crecimiento y del genotipo específico de la especie vegetal. Sus moléculas se condensan

al azar y su biosíntesis por deshidrogenación enzimática se origina de los precursores de

tipo alcohol, entre los que se encuentran mayoritariamente: el cumarílico, el coniferílico y

el sinapílico. Tras ello tiene lugar una polimerización no regulada enzimáticamente, que

confiere gran diversidad estructural a las ligninas. Para que se lleve a cabo la

polimerización los precursores deben estar disponibles y activados. El espacio físico

disponible también juega un papel importante. La estructura polimérica de la lignina se

entrelaza con las microfibrillas de celulosa y también se une a las hemicelulosas y

pectinas mediante enlaces de tipo éster. El resultado es una red hidrofóbica que rodea los

demás componentes de la pared proporcionándole mayor resistencia, rigidez y protección

contra ataques microbianos [17, 19, 20, 22, 23].

En la figura 5 se muestran los componentes principales de un material lignocelulósico.

13

Figura 5. Componentes y subcomponentes de la lignocelulosa [20]

1.4. Pretratamientos y sacarificación de los materiales lignocelulósicos

El valor agregado que puede tener cualquier tipo de biomasa como materia prima para la

producción de bioetanol depende de que tan fácil y/o costoso sea el proceso para su

obtención [23]. Se han realizado trabajos de investigación sobre diferentes fuentes de

biomasa cuyo cultivo no tenga una repercusión significativa sobre el subsuelo o los

alimentos [9, 10, 11]. Se han investigado cultivos que no necesiten mucha inversión,

además de presentar un crecimiento rápido. Entre ellos destacan, los cultivos nativos y

herbáceos perennes [8, 13, 14]. Un cultivo nativo no necesitaría adaptación y sus

condiciones de crecimiento serían favorables, sin que tenga repercusiones sobre el suelo

y su entorno [8, 24]. Otro factor de importancia es que los cultivos tengan características

naturales o proporcionadas por la ingeniería genética, como puede ser un mayor

Enlaces de

H Entrecruzamientos Celulosa Lignina Hemicelulosa

14

contenido de celulosa y menor contenido de lignina, además de tener un bajo costo de

inversión en su cultivo [10, 24, 25].

De las diferentes etapas necesarias para la producción de bioetanol de fuentes

lignocelulósicas, (ver figura 6) los pretratamientos y la sacarificación (hidrólisis enzimática)

son los principios fundamentales en el aprovechamiento de estos materiales. Los

pretratamientos tienen como objetivo remover o abrir la cubierta de lignina que protege a

la celulosa y liberar la mayor cantidad de hemicelulosa para su aprovechamiento. Se ha

desarrollado un extenso estudio sobre los pretratamientos para los materiales

lignocelulósicos, los cuales se pueden dividir en cuatro grupos: mecánicos, fisicoquímicos,

químicos y biológicos [24, 25, 26]. Entre los pretratamientos utilizados comúnmente en la

actualidad se puede mencionar la hidrólisis ácida o alcalina, explosión con amonio,

explosión con vapor y pretratamientos con disolventes orgánicos [27]. La sacarificación

por medio de la hidrólisis enzimática es un proceso importante ya que su objetivo es el de

liberar de la celulosa, la mayor cantidad de glucosa para fermentar. En algunos casos, el

pretratamiento se puede confundir con la sacarificación porque se emplean soluciones

ácidas para solubilizar la lignina que hidrolizan también la celulosa [6, 26, 27]. Es por eso

que es importante conocer las características de la biomasa lignocelulósica y los procesos

a los cuales puede ser sometida, para una mayor eficiencia de conversión.

Figura 6. Diagrama simplificado de los procesos para la obtención del bioetanol

celulósico. Modificado de [6]

15

1.4.1. Pretratamientos mecánicos y fisicoquímicos

Básicamente estos pretratamientos se refieren a las acciones de limpieza mecánica y

física o en su defecto físico-química, así como la reducción de tamaño de la biomasa. Los

métodos más frecuentemente utilizados son la molienda y el tamizado de la partícula,

aunque se han realizado pruebas utilizando otros tipos de procesos como las vibraciones

ultrasónicas con la intención de fracturar la capa de lignina, sin embargo, éstas resultan

más costosas y consumen mucha energía [26, 27, 28]. El objetivo de este pretratamiento

es remover o quebrantar lo mayor posible la capa de lignina o hemicelulosa, disminuir la

cristalinidad de la celulosa, incrementar su área superficial o incrementar la porosidad de

la celulosa para proveer accesibilidad a la hidrólisis química o biológica. Cada tipo de

materia prima (tanto blanda como dura, por ejemplo, bagazo de caña, rastrojo de maíz,

residuos de madera, etc.) exige un pretratamiento para exponer al máximo el sustrato de

interés y aumentar lo mayor posible el rendimiento de los azúcares y por consiguiente el

del etanol [6, 25, 26, 27].

1.4.2. Pretratamientos químicos

La hidrólisis química como pretratamiento utiliza álcalis o ácidos en distintas

concentraciones, temperaturas (presiones) y tiempos.

El fin del pretratamiento químico es hacer que la lignina y la hemicelulosa se fraccionen

para poder exponer a la celulosa a un ataque posterior. Cabe mencionar que en algunos

casos debido a la composición o características de la biomasa, se desea que con el

pretratamiento se abra o remueva la capa de lignina, para aprovechar los carbohidratos

de la hemicelulosa, que en algunos casos puede ser mayor o de igual proporción que la

celulosa contenida [6, 27].

En resumen se debe tener presente que un pretratamiento debe cumplir con 4 aspectos

para considerarlo eficiente:

1. Mejorar la accesibilidad y formación de los azúcares para los subsecuentes

procesos, ya sea la hidrólisis o la fermentación, respectivamente.

2. Evitar la degradación de los carbohidratos sean pentosas y/o hexosas.

3. Evitar la formación de subproductos que puedan inhibir la fermentación.

4. Que sea económico y sustentable.

16

Debido a que en los pretratamientos de la biomasa se emplean ácidos y bases, hay que

tener presente el comportamiento de los monosacáridos, ya que son estables frente a los

ácidos minerales diluidos calientes y los ácidos concentrados, (ácido sulfúrico y

clorhídrico) sin embargo, originan una deshidratación de los azúcares para formar

furfurales (derivados aldehídicos del furano). Las bases acuosas diluidas, a temperatura

ambiente, inducen reordenamientos en torno al átomo de carbono anomérico y su

carbono adyacente. A temperaturas y/o concentraciones elevadas, los álcalis provocan

que los monosacáridos experimenten más reordenamientos, a excepción de algunos

glúcidos y polisacáridos [6, 25, 26, 27, 28, 29].

1.4.3. Tratamientos ácidos

Durante este pretratamiento, las primeras fracciones en ser atacadas son la lignina y la

hemicelulosa, liberando compuestos fenólicos, furfural, hidroximetilfurfural, pentosas y

algunas hexosas; estos azúcares provienen de la hemicelulosa que por efecto de ácido

diluido y bajo condiciones moderadas, libera pentosas como: D-arabinosa, D-xilosa, D-

ribosa entre otras [6]. Para hidrolizar la celulosa por medios químicos se necesitan

condiciones más severas. Si la hidrólisis se lleva a cabo con ácido diluido, se utilizan

generalmente altas temperaturas y altas presiones. Las concentraciones de ácido se

encuentran entre 2 a 5%. [25, 26, 27]. Para una hidrólisis con ácido concentrado, se

utilizan concentraciones que oscilan entre 10, 30 y 72%, temperaturas menores a 50ºC y

presiones ambientales. La exposición de la celulosa o la remoción de la hemicelulosa con

este tipo de proceso dependerán del tiempo del tratamiento, Es importante recalcar que si

se utilizan condiciones extremas, se puede provocar la degradación de los azúcares o la

formación de otros compuestos inhibidores para la sacarificación enzimática y/o la

fermentación [6, 23, 25, 27].

1.4.4. Tratamientos alcalinos

Los pretratamientos alcalinos son mayormente utilizados antes de realizar una hidrólisis

enzimática ya que la mayoría de los reportes [6, 27] indican que incrementan la

digestibilidad de la celulosa. Esto es posible debido a que el efecto de las bases por lo

general es el de la remoción de la lignina y la hinchazón de la estructura celulósica,

17

haciendo que el ataque enzimático sea más factible. Por lo general, dependiendo del

catalizador usado, los pretratamientos alcalinos pueden ser divididos en dos grupos: a)

tratamientos que usan sodio, potasio, o hidróxido de calcio y b) los tratamientos que usan

amonio. Cada grupo se diferencia por el tipo de manipulación empleado (concentración,

temperatura, tiempo de exposición, tipo de biomasa). Contrariamente a los procesos

hidrotérmicos ácidos, los pretratamientos alcalinos son más efectivos para la

solubilización de la lignina haciendo menor la solubilización de la hemicelulosa y la

celulosa. En síntesis, se podría decir que el ácido fracciona a la lignina, mientras que los

álcalis la disuelven. Algunos de los pretratamientos con amonio han demostrado que

producen significativos rendimientos de biomasa sólida conteniendo principalmente

celulosa, pero este tipo de proceso requiere de mucha energía y de equipos especiales

para su ejecución [6, 23, 25, 27, 28].

1.4.5. Tratamientos biológicos

Los procesos enzimáticos sobre los materiales lignocelulósicos se encuentran en pleno

desarrollo y se han centrado en la investigación de la sacarificación enzimática.

Actualmente se desea “deslignificar” e hidrolizar la celulosa en un solo proceso utilizando

un “coctel enzimático” tal como lo hacen los rumiantes. Estos procesos son menos

dañinos para el medio ambiente y de ser posible requerirían menos energía, haciéndolos

rentables. La sacarificación enzimática de los materiales lignocelulósicos se realiza

utilizando generalmente celulasas, complejo constituido por una mezcla de

celobiohidrolasas, endoglucanasas y β-glucosidasas, denominadas así por el tipo de

enlaces que rompen, como se muestra en la Figura 7 [6, 16, 17, 27, 28].

Esta última no es una celulasa, ya que sólo hidroliza celobiosa a dos moléculas de

glucosa; sin embargo, juega un papel muy importante en la sacarificación ya que la

celobiosa siempre es el producto final de muchas celulasas [26, 27, 28].

18

Figura 7. Estructura química de la celulosa y sitios de acción de la celobiohidrolasa, endo-β-glucanasa y β-glucosidasa [16].

Las enzimas son inhibidas por sus propios productos finales. La acumulación de alguno

de los productos de la hidrólisis de la celulosa afecta negativamente el proceso; la β-

glucosidasa por ejemplo, es inhibida por la glucosa. El máximo de actividad para la

mayoría de las celulasas y β-glucosidasas de hongos se obtiene en condiciones que

oscilan entre 50 ± 5 ºC y pH de 4.0-5.0. Sin embargo, las condiciones óptimas para la

hidrólisis enzimática están en función del tiempo de residencia de la enzima sobre el

material lignocelulósico pretratado [25, 27, 28] y de otros factores.

La aplicación de enzimas como pretratamiento se puede realizar utilizando hongos que

degradan la lignina, pero se ha observado que en ocasiones también consumen a los

carbohidratos, siendo hasta ahora una desventaja. Las diversas condiciones de

concentración de sustrato, dosis de enzima, temperatura y velocidad de agitación son

factores que intervienen durante la hidrólisis enzimática. Una forma general de iniciar

cualquier prueba enzimática es utilizar la enzima al 1% (en función del peso de la celulosa

contenida), buscando evitar la formación del producto final con exceso de catalizador. La

cuantificación de la actividad celulolítica está referida a la máxima liberación de glucosa

por unidad de tiempo a cierta temperatura por gramo de sustrato digerido (Avicel, papel

filtro Whatman ó Carboximetilcelulosa, generalmente). Sin embargo, esta efectividad

enzimática no se alcanza en la sacarificación de materiales lignocelulósicos debido a la

formación de inhibidores durante el pretratamiento de éstos materiales, reduciendo los

rendimientos teóricos [6, 27, 28].

19

1.5. El bagazo de henequén (Agave fourcroydes Lemaire) como residuo lignocelulósico

Los Agaves son plantas monocotiledóneas, muchas de las cuales tienen su centro de

origen en México, donde algunas especies han sido domesticadas y son de importancia

económica (Agave tequilana, Agave angustifolia, etc.). La especie más cultivada en la

Península de Yucatán es Agave fourcroydes L. (henequén) de la cual se aprovechan las

fibras en sus hojas. Desciende del ancestro silvestre Agave angustifolia Haw. Estos

agaves son monocárpicos perennes y producen flores solamente una vez hacia el final de

su ciclo de vida, el cual es de aproximadamente 20 años, después de lo cual mueren. Al

henequén también se le conoce como sisal yucateco o sisal mexicano. Existen diferentes

variedades, las cuales difieren en el largo y ancho de las hojas, peso de la planta y edad a

las que se le hace el primer corte. Se sabe que durante su vida pueda dar hasta 250 hojas

por planta, de las que se extraen las fibras duras. Estas fibras están compuestas de

aproximadamente un 70% de celulosa y de un 20-25% de hemicelulosa, así como de

ceras y proteínas [25, 26, 28, 29, 30, 31].

La producción de fibras de henequén en el Estado de Yucatán en el 2008 fue de 6 000

toneladas y se ha mantenido hasta ahora. Actualmente se procesan alrededor de 120-125

mil hojas por día, de lunes a sábado y se producen de 3 a 6 mil kilos de fibra que se

utilizan en la industria textil, y se desperdician grandes cantidades de jugo y bagazo

(75,000 m3 y 35,000 ton, respectivamente); este último se desecha o se regala a los

horticultores de la zona, junto a otros ganaderos que acuden a buscar el bagazo verde,

utilizándolo para alimentar al ganado. El bagazo de henequén es un residuo agroindustrial

que apenas está tomando importancia en el sector Bioenergético. Está compuesto de los

residuos de la raspa de hojas o pencas de esta planta; generalmente se considera que

representa el 35-40 % del peso de la hoja fresca, [30, 31, 33] y se puede dividir en dos

fracciones: una parte fibrosa que no es retenida en las desfibradoras (fibras cortas) y otra

parte compuesta de fragmentos foliares, como la cutícula de la penca.

El bagazo de henequén tiene un contenido aproximado de 67% de holocelulosa, 15% de

lignina y 17% de extraíbles [33]. Es una fuente rica en celulosa pero ésta no es de fácil

acceso, como en cualquier material lignocelulósico.

20

1.5.1 Aplicación de pretratamientos en agaves

En la literatura, existen algunos reportes sobre el contenido celulósico de las fibras de

agaves y su pretratamiento para la obtención de biocombustibles. Hernández-Salas y col.

[34] reportaron la producción de etanol a partir del maguey (Agave atrovirens L), una

especie de agave que se utiliza para la producción de “aguamiel” en el norte de la

República Mexicana. El material lignocelulósico fue dividido en 2 fracciones: el mezontete

que son las hojas y la piña después de la extracción del aguamiel y el metzal que es el

material celulósico que se obtiene después de la extracción del “aguamiel”. La

investigación consistió en una hidrólisis química ácida y una hidrólisis enzimática con

distintos cócteles enzimáticos comerciales. Para la hidrólisis química se utilizó HCl al

1.2% en distintas proporciones, en relación al peso de la muestra de los residuos de

agave. Para la hidrólisis enzimática se realizó un pretratamiento con NaOH calentando en

autoclave por 4 h. Posteriormente se ajustó el pH a las condiciones necesarias de las

enzimas a utilizar. Se calentó a baño María a 55ºC por 4 h. Se analizaron las muestras

por DNS y HPLC. Para el metzal y el metzontete los rendimientos de azúcares reductores

con el pretratamiento alcalino fueron de 5 % y 9.1 % respectivamente, y para las muestras

tratadas con enzimas se obtuvieron rendimientos de 11-20% de azúcares reductores.

En otro trabajo, Caro-Bermúdez y col. [35] caracterizaron varios tipos de bagazos de

agave provenientes de la industria tequilera, mezcalera, de destilados y otros. Utilizaron

reportes técnicos NREL/TP-510-42619, 42620, 42622 y 42624 y posteriormente aplicaron

tratamientos termoquímicos. Los tratamientos consistieron en la aplicación de ácido

sulfúrico diluido al 2 y 4 %, en distintas relaciones de sólido y líquido, a temperaturas de

121° con distintos tiempos de reacción. Los resultados reportados indican que el bagazo

de agave, en base seca, está constituido por: glucanos 35.03; xilanos 12.60; lignina 22.14;

extractivos 16.74; ácido acético 4.4; cenizas 2.64 y otros 6.45 % (p/p). Aplicando

tratamientos hidrotérmicos-químicos se encontró que las diferentes concentraciones de

ácido y relaciones entre la fracción líquida y sólida no influyen significativamente en la

liberación de xilosa (principal azúcar de la fracción hemicelulósica), ya que en la mayoría

de los casos se obtiene una eficiencia promedio del 90% de liberación de este azúcar.

En base a estos trabajos es importante considerar la utilización de ácidos para la

remoción de la fracción hemicelulósica. Empleando bajas temperaturas se podría evitar la

formación de compuestos inhibitorios, para poder exponer la fracción celulósica del

bagazo y poderla sacarificar enzimáticamente.

21

1.6. Elaboración del Bioetanol

1.6.1. La fermentación alcohólica

El término fermentar deriva del latín ferver que significa hervir, esto debido a que los

primeros observadores notaron un burbujeo donde se suscitaba dicho fenómeno. A nivel

industrial, un proceso de fermentación típico es esencialmente un proceso que se realiza

en un fermentador o biorreactor, donde determinados sustratos que componen el medio

de cultivo son transformados en metabolitos y biomasa por la acción microbiana. El

microorganismo va aumentando en su concentración en el transcurso del proceso al

mismo tiempo que el medio se va modificando y se forman productos nuevos como

consecuencia de las actividades catabólicas y anabólicas [36, 37, 38].

Para que se realice una fermentación se necesita siempre de un microorganismo que

posea las características necesarias para degradar el sustrato. Para que esto funcione se

deben tener las condiciones óptimas necesarias para llevar a cabo la transformación: los

nutrientes, la temperatura, el pH y la concentración del sustrato [38, 39]. Además, es

imprescindible establecer un medio adecuado de cultivo; aunque al principio si no se

tienen reportes o estudios previos sobre la acción de un microorganismo en un

determinado sustrato, se puede por lo general iniciar con una composición elemental de

nutrientes, la cual difiere poco de un microorganismo a otro: hidratos de carbono 50%,

oxigeno 20%, nitrógeno 14%, hidrógeno 8%, fósforo 3%, potasio 2%, azufre 1%, calcio,

magnesio y cloro 0.05%, hierro 0.2% y un total de elementos traza del 0.3% que

comprenden manganeso, cobalto, cobre, zinc y molibdeno. Cada elemento tiene un papel

importante para los procesos metabólicos que permiten asimilar los nutrientes para

producir material celular. En términos generales todo microorganismo requiere agua,

fuente de energía, vitaminas, además de los elementos minerales [8, 36, 37, 38, 39, 40].

El carbón es el componente central que se incorpora a las rutas biosintéticas. El

hidrógeno es también un componente clave de las macromoléculas y participa en los

procesos de generación de energía. El oxígeno es importante para la respiración de

muchos microorganismos aunque en algunos casos puede ser tóxico. Generalmente los

microorganismos lo obtienen de la fase líquida. El azufre es requerido para la síntesis de

proteínas y vitaminas y en algunos tipos de microorganismos está involucrado en la

respiración celular y la fotosíntesis. El fósforo es tomado como fosfato inorgánico y es

incorporado a los ácidos nucleicos y fosfolípidos. Los elementos traza son generalmente

22

utilizados como cofactores por la enzimas, para llevar a cabo la construcción y

funcionamiento de la maquinaria microbiana [36, 38, 40].

La fermentación alcohólica es una biorreacción que permite oxidar azúcares hasta alcohol

y formar dióxido de carbono. La conversión se representa mediante la siguiente ecuación:

C6H12O6 2C2H5OH+2CO2 (1)

Los principales microorganismos responsables de esta transformación son las levaduras.

Saccharomyces cerevisiae es la levadura usada con mayor frecuencia [36]. Existen

estudios para producir alcohol con otros microorganismos como hongos y bacterias, por

ejemplo la bacteria Zymomonas mobilis [7] pero la explotación a nivel industrial es

mínima. Siempre se considera la patogenicidad y la factibilidad en el control de los

microorganismos y por lo general el etanol se ha hecho para el consumo del ser humano.

Sin embargo para la producción de bioetanol como carburante no debe de existir

inconveniente.

A pesar de que a nivel estequiométrico parece una transformación simple, la secuencia de

transformaciones para degradar la glucosa hasta dos moléculas de alcohol y dos

moléculas de dióxido de carbono es un proceso muy complejo, pues al mismo tiempo la

levadura utiliza la glucosa y nutrientes adicionales para reproducirse. Para evaluar la

eficiencia de esta transformación se usan dos tipos de rendimiento:

Rendimiento biomasa/sustrato (Yx/s): es la cantidad de levadura producida por

cantidad de substrato consumido.

Rendimiento substrato/producto (Yp/s): es la cantidad de producto sintetizado por

cantidad de substrato consumido.

El rendimiento estequiométrico teórico calculado por Gay Lussac a finales del siglo XIX

para la transformación de glucosa en etanol es de 0.511g de etanol y 0.489g de CO2 por 1

g de glucosa. En la realidad es difícil lograr este rendimiento, porque la levadura también

utiliza la glucosa para la producción de otros metabolitos. El rendimiento experimental

puede variar significativamente del teórico. Los rendimientos en la industria se encuentran

entre 87 y 93% del rendimiento teórico [36, 37]. Otro parámetro importante es la

productividad, la cual se define como la cantidad de etanol producido en gramos (g) por

unidad de tiempo (h) y de volumen (L). Los parámetros aquí mencionados se definen con

relación a la fase y al modo de funcionamiento del biorreactor o fermentador [5].

23

La utilización de materiales lignocelulósicos como materia prima para un proceso de

fermentación requiere de microorganismos con capacidad de utilizar todos los azúcares

liberados, como la xilosa, por ejemplo. La S. cerevisiae es incapaz de fermentar pentosas

y por lo tanto es de uso limitado para los sustratos lignocelulosicos, a menos que se trate

de una S. cerevisiae modificada genéticamente y tenga integrados los genes necesarios

para aprovechar estos carbohidratos. Existen dos grupos de microorganismos, las

bacterias entéricas y algunas levaduras, que son capaces de fermentar pentosas, pero

con bajos rendimientos de etanol. En el caso de la fermentación de la xilosa por levaduras

(Pachysolen tannophilus, Candida shehatae y Pichia stipitis), su utilización a gran escala

ha sido obstaculizada por su sensibilidad a las altas concentraciones de etanol (≥ 40 g/l),

la necesidad de vigilar atentamente las condiciones microaerofílicas, la alta sensibilidad a

los inhibidores y la incapacidad para fermentar xilosa a un pH bajo; todo esto provoca que

sea complicada y costosa su aplicación [7, 36, 37, 38, 41].

Las rutas bioquímicas para el consumo de hexosas y pentosas (Figura 8) son diferentes

entre las bacterias entéricas y las levaduras. En las bacterias, la enzima xilosa isomerasa

convierte xilosa a xilulosa, que después de la fosforilación, se metaboliza a través de la

vía pentosa-fosfato [42, 43, 44, 45]

En las levaduras la xilosa se convierte en xilitol y posteriormente a xilulosa en reacciones

catalizadas por la xilosa reductasa y la xilitol deshidrogenasa empleando NAD-H y NAD+,

respectivamente. Debido a la falta de un microorganismo natural para una eficiente

fermentación de sustratos derivados de lignocelulosa, se ha propuesto la construcción de

un organismo eficaz mediante ingeniería metabólica [7, 41, 42, 43, 44].

24

Figura 8. Rutas metabólicas para la producción de etanol utilizando pentosas y hexosas;

a) ruta pentosa fosfato, b) glicolisis, y c) ruta de Entner-Doudoroff. (Ribo5P) ribosa-5-

fosfato, (Sedo7P) seudoheptulosa-7-fosfato, (Eritro 4-P) eritrosa-4-fosfato (F6P) fructosa-

6-fosfato, (Gliceral3P) gliceraldehido-3-fosfato, (Gal) galactosa, (Man) mannosa, (Acetal)

acetaldehido, (6PG) 6-fosfo-gluconolactona, (2KDPG) 2-ceto-desoxy-fosfoglucanato,

(TKL) transcetolasa (TAL) transaldolasa, (XK) xiluloquinasa, (XI) xilosa isomerasa, (XR)

xilosa reductasa, (XDH) xilitol dehidrogenasa [7].

La ingeniería metabólica se ha definido como "la mejora del producto celular o la

formación de un producto nuevo a través de la modificación de propiedades en una

reacción bioquímica específica o la introducción de un nuevo ADN mediante la tecnología

recombinante [15, 41, 42, 43]. De esta forma, a través de la ingeniería metabólica se han

transferido varios rasgos deseados a algunos microorganismos. Son muchas las

características que deberían poseer los microorganismos para el aprovechamiento de los

materiales lignocelulósicos y en su diseño se debe considerar el material o sustrato

específico que se emplee en la producción de bioetanol. Muchas especies vegetales

producirían diferentes inhibidores durante su procesamiento, ya sea durante su

pretratamiento o en su sacarificación. Esto amplía las capacidades que debería tener el

microorganismo, algunas de las cuales se resumen en la Tabla 2.

25

Tabla 1. Rasgos esenciales y deseables en los microorganismos para producir etanol a

partir de fuentes lignocelulósicas [15].

Una estrategia de trabajo es primero determinar los carbohidratos que se pueden liberar

del material lignocelulósico aplicando pretratamientos y sacarificaciones químicas o

enzimáticas y poder elegir el tipo de microorganismo con el cual se obtenga un

rendimiento de etanol más alto y lograr un mejor aprovechamiento del material.

Rasgos esenciales Rasgos deseables

Amplio intervalo de utilización de

sustratos

Utilización simultánea de diferentes

azúcares

Altos rendimientos de etanol y alta

productividad

Hidrólisis de celulosa y hemicelulosa

Formación mínima de subproductos Ser reciclable

Mayor tolerancia a inhibidores Tolerancia a bajos pH y altas

temperaturas

Tolerancia a procesos rudos La adición de suplementos

nutricionales mínimos

26

1.7. Justificación

La planta de henequén es explotada comercialmente para aprovechar la fibra de sus

hojas. También se produce un residuo que es desechado en los campos de cultivo y sólo

una parte de éste es utilizado como alimento para el ganado. Este residuo contiene 60%

de holocelulosa, por lo que podría ser una buena opción para la obtención de bioetanol.

La fermentación alcohólica se realiza comercialmente con levaduras pero estos

microorganismos son incapaces de metabolizar los polisacáridos presentes en los tejidos

vegetales por lo que es necesario establecer un proceso que permita hidrolizarlos en

azúcares simples además de conocer la cantidad y el tipo de azúcares liberados de este

material.

1.8. Objetivo general

Establecer un proceso de pretratamiento y sacarificación del bagazo de henequén,

evaluando la cantidad y el tipo de azúcares liberados.

1.8.1. Objetivos particulares

Realizar el pretratamiento químico del bagazo de henequén empleando ácido

sulfúrico y calor, así como la sacarificación enzimática con una celulasa comercial.

Realizar la fermentación alcohólica de los hidrolizados utilizando la levadura

Saccharomyces cerevisiae.

Cuantificar mediante los métodos colorimétricos de DNS y fenol-sulfúrico los

azúcares liberados durante las hidrólisis química y enzimática del bagazo de

henequén y el consumo de los mismos durante la fermentación alcohólica.

Identificar por HPLC los azúcares liberados después del proceso pretratamiento-

sacarificación, así como durante la fermentación alcohólica.

Determinar el rendimiento de etanol en el proceso planteado.

27

1.9. Hipótesis

El bagazo de henequén contiene cantidades importantes de holocelulosa, material

potencialmente aprovechable para obtener azúcares fermentables. Aplicando condiciones

adecuadas de pretratamiento e hidrólisis, puede ser posible liberar azúcares simples que

podrán posteriormente ser fermentados para producir etanol.

28

CAPÍTULO II

MATERIALES Y MÉTODOS

2.1. Diagrama de flujo del proceso

En la figura 9 se presentan las distintas etapas que se llevaron a cabo para la obtención

de etanol a partir de bagazo de henequén.

Figura 9. Diagrama de flujo del proceso de obtención de etanol. Se cuantificaron los azúcares por el método del DNS, Fenol sulfúrico (*) y HPLC (**). El etanol se cuantificó

por el método del dicromato.

29

2.2. Material vegetal.

Se colectó el residuo vegetal (bagazo) después de la raspa de hojas de henequén de la

Hacienda San Carlos, en el municipio de Baca. El bagazo se puso a secar al aire libre 2

días, posteriormente se deshidrató en un horno de secado por 24 h a 100 ºC. El material

seco se molió para reducir el tamaño de partícula y aumentar el área superficial;

posteriormente se tamizó para separar tamaños de partícula en un molino Brabender

equipado con una malla para tamaño de partícula de 2mm (Figura 10).

Figura 10. Obtención del material vegetal a) recolección de bagazo, b) etapa de secado

c) bagazo seco molido.

2.3. Pretratamiento químico del bagazo de henequén con diferentes

concentraciones de ácido y tiempos de reacción

Para un primer ensayo se pesaron 18 muestras de 20g de bagazo, las cuales fueron

depositadas en matraces de 500 ml. A cada matraz se le adicionó 134 ml de agua

destilada, se procedió a agitar manualmente hasta humedecer el bagazo; en algunos

casos se formaron aglomerados. Se prepararon soluciones “stock”, cada una con un

volumen de 100 ml, de diferentes concentraciones de ácido sulfúrico (1, 3, 5, 7, y 10 %

v/v), y se añadieron en cada matraz por triplicado. Las concentraciones finales del ácido

en los pretratamientos fueron respectivamente 0.4, 1.2, 2, 2.8 y 4%. En los ensayos

control se adicionó solamente agua, también por triplicado. Se agitó por 5 min para

homogenizar la mezcla. Se taparon los matraces y se depositaron en el autoclave,

calentando a 121 ºC por 15 min.

30

Las muestras hidrolizadas se centrifugaron a 4000 rpm por 20 min. Se obtuvo una fase

líquida de color ámbar y una fase sólida, ambas fases fueron ajustadas a un pH de 4.8

con hidróxido de sodio. La fase sólida se secó en un horno a 80 ºC por 24 h, se guardaron

en bolsas de plástico y se almacenaron en un lugar fresco y seco. Se tomaron alícuotas

de 3 ml de cada muestra para realizar la cuantificación de azúcares reductores por el

método del DNS. El resto del hidrolizado se almacenó a -20 °C.

Se realizó un diseño factorial para determinar el efecto de la concentración de ácido y del

tiempo de reacción como pretratamiento. El límite mínimo y el máximo de ambas variables

fueron determinados con base en los resultados preliminares. Los ensayos se realizaron

en matraces de 500 ml con 20g de muestra de bagazo seco. Se les añadió 250 ml de una

solución de ácido sulfúrico, alcanzando las concentraciones finales especificadas en la

Tabla 3. Las condiciones del autoclave se mantuvieron constantes (121 ºC y 1.1 bar),

durante los tiempos especificados. Los tratamientos se realizaron por triplicado.

Tabla 3. Diseño factorial para el pretratamiento ácido del bagazo de henequén.

Factores Nivel

Concentración de ácido sulfúrico (% v/v) 0.0

0.4

4.0

8.0

Tiempo de calentamiento (min) 15

60

105

Después del pretratamiento con ácido y calor se procedió a centrifugar a 4000 rpm por 20

min para separar las fases. La fase líquida se ajustó a pH 4.8 y se almacenó en

congelación para su posterior análisis. La fase sólida se lavó con soluciones de NaOH al

70% y agua destilada hasta obtener un pH de 6.0 en el agua de lavado. Posteriormente

las muestras sólidas se secaron en un horno a 100 ºC por 24 h.

En la fase líquida se determinó la concentración de azúcares reductores y totales por los

métodos del DNS y Fenol-sulfúrico, respectivamente. La fase sólida se pesó para

determinar su disminución con respecto al peso original.

31

2.4. Determinación de la actividad enzimática celulasa

Para la determinación de la actividad enzimática del lote al momento de uso se empleó la

celulasa comercial ACCELLERASE (Genecor®). La enzima fue preparada de acuerdo a

las recomendaciones del fabricante, utilizando avicel, carboximetilcelulosa y papel filtro

como sustratos. La reacción se llevó a cabo en baño María a una temperatura de 50 ºC ±

1 y se tomaron muestras a intervalos de tiempo (1, 3, 6, 9, 12, 24, y 48 h). A cada alícuota

se le determinó la concentración de azúcares reductores mediante el método del DNS.

2.5. Sacarificación enzimática del bagazo de henequén pretratado

En un primer experimento se utilizaron las muestras pretratadas con una concentración de

ácido sulfúrico de 0.4% y tiempos de calentamiento de 15, 45 y 105 min. Estas muestras

fueron seleccionadas debido a que presentaron las menores disminuciones de peso con

el pretratamiento ácido, lo que hace suponer que tienen la mayor cantidad de fibra (o

sustrato para la hidrólisis enzimática). Se utilizaron 100 mg de cada muestra, se agregó la

enzima y se incubaron en agitación por 24 h a 50 ºC. Se tomaron muestras cada 6 h

durante día y medio para determinar la concentración de azúcares reductores.

Con base en los primeros resultados se diseñó otro experimento de sacarificación, con el

objeto de aumentar la concentración de azúcares liberados. A 8 matraces de 500 ml con

20g de bagazo de henequén seco y molido cada uno, se les añadió 250 mL de una

solución de ácido sulfúrico al 0.4% y se calentó en autoclave por 60 min a 121 °C como se

realizó en los pretratamientos. Posteriormente se centrifugaron las muestras por 15 min a

4000 rpm. Se separó la fase sólida y se le aplicaron lavados hasta obtener un pH entre 5

y 6. La fase sólida recuperada de dos matraces se juntó en uno y se añadieron 150 ml de

una solución enzimática conteniendo 28 000 U en un buffer de citratos a un pH de 4.8.

Los matraces se incubaron por 24 h, en agitación a 150 rpm y 50 °C. Posteriormente se

recuperó la fase líquida, se midió el volumen total y se almacenaron en refrigeración. Se

tomaron alícuotas para determinar la concentración de azúcares reductores.

32

2.6. Curva de crecimiento de la levadura Saccharomyces cerevisiae en hidrolizados

enzimáticos de bagazo de henequén

Se utilizó una cepa comercial de Saccharomyces cerevisiae (marca Safoeno, de Safmex

SA de CV) mantenida en cajas de Petri con medio GELPA (dextrosa, extracto de levadura

y agar). Para monitorear el crecimiento de la levadura, a un matraz de 250 mL se añadió

100 mL del hidrolizado enzimático de bagazo de henequén y se inoculó la levadura a una

concentración de 3 x 107 cel mL-1. Se añadió sulfato de amonio a una concentración de

1.5 g L-1 y se incubó a 30ºC, en agitación orbital a 150 rpm. Se tomaron muestras cada 3

horas para evaluar la concentración celular y la viabilidad del cultivo. El experimento se

realizó por triplicado.

2.7. Fermentación de los hidrolizados enzimáticos del bagazo de henequén

A un matraz de 250 mL con 225 mL de hidrolizado enzimático de bagazo de henequén, se

añadió sulfato de amonio a una concentración final de 1.5 g L-1 y 25 mL de un inóculo de

la levadura previamente incubada por 14 h, como se describió anteriormente. La

concentración celular final fue de 3 X 107 cel.mL-1. Se tomó una primera alícuota como

tiempo cero para la determinación de la concentración de azúcares. El matraz se puso a

incubar sin agitación a 30 ºC por 60 h. Se tomaron alícuotas de la fermentación cada 12 h

para la determinación de azúcares. El experimento se realizó por triplicado.

2.8. Destilación

Se mezcló 100 mL de mosto fermentado con 100 mL de agua y se realizó una destilación

utilizando una columna Vigreux hasta obtener 100 mL de destilado. Seguidamente se

determinó la concentración de etanol en el destilado (anexo A). La destilación se realizó

por triplicado.

2.9. Determinación de azúcares reductores

La concentración de los azúcares reductores en las muestras provenientes de los

pretratamientos ácidos, de la sacarificación enzimática y de la fermentación, fue analizada

por el método del ácido 3,5-dinitro salicílico (DNS), de acuerdo a Miller [45]. El método se

encuentra descrito en el Anexo A.

33

2.10. Determinación de azúcares totales

La concentración de los azúcares totales en las muestras provenientes de los

pretratamientos ácidos y de la fermentación, fue analizada por el método del fenol-

sulfúrico, de acuerdo a Dubois y colaboradores [46]. El método se encuentra descrito en

el Anexo A.

2.11. Determinación de azúcares por HPLC

Para el análisis de los azúcares por HPLC se utilizó un equipo Agilent Series 1100 con un

detector de Índice de Refracción. La columna empleada fue una ZORBAX Carbohydrate

de 4.6 x 150 mm (Agilent Technologies). La fase móvil fue una solución al 75% de

Acetonitrilo en H2O, a un flujo de 1.4 ml min-1. La temperatura de la columna fue de 30 ºC

y se inyectaron 20 μL de muestra. La estandarización de la técnica (Anexo A) se basó

inicialmente en Sesta (2006) [47], adaptando las condiciones de trabajo de acuerdo a los

resultados obtenidos.

2.12. Determinación de etanol

Las muestras destiladas fueron analizadas para determinar la concentración de etanol por

el método del dicromato (Williams y Reese, 1950) [48]. El método se encuentra descrito

en el Anexo A.

2.13. Análisis estadístico

Para los análisis de varianza de los distintos tratamientos se utilizó el paquete estadístico

Statgraphics v 4.1 (Statistical Graphics Corp, Warrenton,USA).

34

CAPÍTULO III

RESULTADOS Y DISCUSIONES

3.1. Resultados del ensayo preliminar del pretratamiento químico

La producción de azúcares reductores en el experimento preliminar se muestra en la

Figura 11. Se puede observar que en el control (agua solamente), también hay una

liberación de azúcares reductores, aunque es mínima.

Figura 11. Efecto de la concentración del ácido en la producción de azúcares reductores en el ensayo preliminar de pretratamiento químico.

A partir de una concentración de 1.2% de ácido es cuando se observa una liberación

apreciable de azúcares reductores, los cuales se mantienen en el mismo intervalo cuando

se emplean mayores concentraciones, hasta 4% del ácido. El análisis de varianza indicó

que no hay diferencia significativa entre los valores de AR liberados en los

pretratamientos con 1.2 a 4 % de concentración del ácido (n=3, valor p = 0.05).

35

3.2. Pretratamiento químico del bagazo de henequén con diferentes

concentraciones de ácido y tiempos de reacción

En el ensayo preliminar se observó que a partir de una concentración de ácido de 1.2% se

obtuvo una producción de azúcares que fue constante hasta el pretratamiento con 4% de

ácido. Se optó por probar concentraciones mayores y diferentes tiempos de

pretratamiento en un diseño experimental (Capítulo 2), con el fin de obtener más

información acerca del efecto de estos dos parámetros sobre la liberación de azúcares. La

producción de azúcares reductores en los diferentes tratamientos se muestra en la Figura

12.

Figura 12. Liberación de azúcares reductores con los diferentes pretratamientos con ácido y calentamiento (121ºC, 1.1 bar) a diferentes tiempos.

Al igual que en el experimento anterior se pudo observar que el agua sola (control) libera

una pequeña cantidad de azúcares reductores. A la concentración de 0.4 % de ácido se

observó que existe una relación entre el tiempo de calentamiento y la producción de

azúcares reductores. Esto no sucede a las concentraciones de 4% y 8%. Este es el primer

trabajo que se enfoca a estudiar la hidrólisis del bagazo que sale de las desfibradoras de

henequén, por lo que no hay información con la que se pueda comparar de manera

directa. En un estudio realizado en otro agave, Hernández-Salas y col. [34] realizaron un

36

pretratamiento con HCl sobre dos tipos de residuos de Agave atrovirens (maguey), a los

que llaman metzal (piña) y mezontete (piña y hojas). Estos residuos son los que se

obtienen después de la producción del aguamiel. Estos autores reportan una producción

de azúcares reductores de 4.8 y 10 % (g/g de materia seca) para el metzal y mezontete,

respectivamente. Los valores de azúcares reductores obtenidos en el presente trabajo

están dentro de ese intervalo. En ese reporte no se describe la composición del metzal,

pero Núñez et al. [49], en un compendio de revisión bibliográfica sobre Agaves, describen

la composición del bagazo derivado de la piña de Agave tequilana luego de la extracción

de los azúcares. El bagazo de la piña de A. tequilana contiene 20-50% de celulosa, 19%

de hemicelulosa y 15% de lignina aproximadamente. Esta composición es similar a la del

bagazo de henequén, la cual es aproximadamente 16% de lignina y 67% de holocelulosa

[33]. Estos datos apoyan que los resultados obtenidos en el presente trabajo están en el

intervalo de lo esperado.

Los valores de la producción de azúcares totales se presentan en la Figura 13.

Figura 13. Liberación de azúcares totales con los diferentes pretratamientos con ácido y calentamiento (121ºC, 1.1 bar) a diferentes tiempos.

Se puede observar que con la concentración de 0.4 de ácido, el tiempo de calentamiento

influye en el valor de producción de azúcares totales. Los resultados de azúcares totales

37

son similares a los obtenidos en el análisis de azúcares reductores, a excepción de los

resultados con la concentración de 8% de ácido, en la que los valores obtenidos para

azúcares totales son menores que los obtenidos para azúcares reductores. Una posible

explicación para este resultado contradictorio es que además de los azúcares reductores

se pudiera estar liberando o produciendo un compuesto de naturaleza reductora, pero que

no fuese un carbohidrato. De esta manera sería cuantificado con los azúcares reductores

pero no entre los azúcares totales.

Otro parámetro que puede dar una idea de la eficiencia del pretratamiento es medir la

cantidad de material que se solubiliza durante el proceso, ya que este valor indica si

además de los azúcares medidos, otros compuestos presentes se están solubilizando.

Esto se refleja en la reducción del peso del bagazo y puede ser medida después del

pretratamiento. Los valores de reducción de peso del bagazo en los diferentes

pretratamientos se muestran en la Figura 14.

Figura 14. Efecto del pretratamiento en la reducción de peso del bagazo (peso inicial del bagazo seco = 20g).

Se puede observar que cuando no se utiliza ácido (control), no hay un efecto del tiempo

en la reducción del peso del bagazo. El promedio de la reducción de peso en los controles

es de 13%, valor cercano al 17% reportado para el bagazo de henequén como extraíbles

38

[33]. A medida que se adiciona ácido y se aumenta la temperatura de pretratamiento, la

reducción del peso es más evidente, lo que indica que además de los extraíbles, se pierde

peso debido a la hidrólisis parcial de la celulosa y hemicelulosa (holocelulosa). Con los

pretratamientos con ácido al 8% se recupera el 44% del peso inicial de bagazo. Si se

toma en cuenta que la lignina equivale al 16%, entonces se está recuperando 29% de la

holocelulosa (como se mencionó anteriormente el contenido de holocelulosa en el bagazo

de henequén es de 67%), por lo que se puede inferir que este pretratamiento está

degradando la holocelulosa. No se puede discutir de manera particular qué porcentaje es

de celulosa y de hemicelulosa, debido a que este material no se ha caracterizado en estos

componentes.

Con base en estos resultados el mejor tratamiento entre los evaluados sería el de 0.4%

de ácido, ya que permite la solubilización de los extraíbles y no degrada la holocelulosa.

3.3. Determinación de la actividad enzimática en el lote usado de celulasa

comercial

Los resultados del ensayo enzimático se presentan en la Tabla 4.

Tabla 4. Valores de actividad enzimática sobre distintos sustratos, determinados por la liberación de glucosa (U= g de producto liberado) en 1 hora.

Sustrato Actividad (U min

-1 g

-1)

Avicel 2.9 x 10-3

Carboximetilcelulosa 1.0 x 10

-3

Papel filtro 7.8 x 10-4

Los resultados con los diferentes sustratos se deben a los diferentes componentes del

complejo en la celulasa ACCELERASE. Este complejo usualmente contiene más

exoglucanasas, que actúan sobre el avicel, que endoglucanasas, las cuales actúan sobre

la carboximetilcelulosa (información de Genencor).

3.4 Ensayo preliminar de sacarificación enzimática del bagazo de henequén

previamente pretratado

Se procedió a realizar un ensayo preliminar de sacarificación del bagazo de henequén

pretratado con ácido al 0.4% con los tres tiempos de calentamiento empleados. Siguiendo

39

recomendaciones del fabricante, la sacarificación se realizó usando 1400 U g-1 de bagazo.

La liberación de azúcares reductores se monitoreó durante 36h. Los resultados se

presentan en la Figura 15

Figura 15. Ensayo preliminar de sacarificación enzimática de bagazo de henequén pretratado con ácido sulfúrico al 0.4% durante diferentes tiempos (15, 60,

105 min).

Se puede observar que el pretratamiento con calentamiento por 60 min libera la mayor

cantidad de azúcares reductores. Por otro lado, a partir de las 12 h se empieza a notar un

decremento en la velocidad de liberación de los mismos. En este punto, se libera

aproximadamente un 37% de azúcares reductores.

La menor cantidad de azúcares liberados por las celulasas en los materiales pretratados

durante 15 y 105 minutos puede deberse, en el primer caso a que la estructura

lignocelulósica esté menos abierta y dificulte el acceso a las celulasas. Esto explicaría

porque se recupera menos azúcares en esta sacarificación, a pesar de que 15 min de

pretratamiento reduce menos el peso de la muestra, en comparación con los otros

tiempos evaluados. También explicaría porque se alcanza un máximo constante de

azúcares cuyo valor es menor al de los otros casos.

En el caso del material pretratado durante 105 min, es posible que una mayor cantidad de

celulosa se haya hidrolizado desde el pretratamiento, dejando menos sustrato a las

40

celulasas. Adicionalmente, también es posible que se hayan generado algunos inhibidores

que provocaran que las enzimas actuaran más lentamente. Es decir, la menor velocidad

de reacción puede deberse a presencia de inhibidores y/o menor sustrato inicial.

3.5. Sacarificación enzimática del bagazo de henequén previamente pretratado

Para determinar el mejor pretratamiento, se realizó una sacarificación enzimática a cada

uno de ellos. La liberación de azúcares reductores fue determinada a las 12 h. Los

resultados se muestran en la Figura 16.

Figura 16. Sacarificación enzimática del bagazo de henequén pretratado.

Se puede observar que en el caso del control (sin ácido), con las muestras calentadas

por 60 y 105 min presentaron una mayor sacarificación enzimática, no así con la muestra

calentada por 15 min. Esto puede deberse a que con agua sola se requiere mayor tiempo

de calor para lograr abrir la estructura lignocelulósica. En el caso de los pretratamientos

con 0.4% de ácido, la muestra calentada por 15 min dio 17% de azúcares reductores

mientras que en las muestras calentadas por 60 y 105 min el rendimiento de azúcares

libres aumentó a 28%. Cuando se utilizó una concentración mayor de ácido, los

41

rendimientos de azúcares bajaron. La reducción en la liberación de azúcares con respecto

al experimento preliminar, puede deberse a que hubo una diferencia en los volúmenes

utilizados de muestra. Aunque la relación porcentual de la muestra no cambia, la variación

en el tamaño del ensayo puede afectar los resultados del proceso. En esta etapa se tuvo

que aumentar la cantidad de muestra porque el producto sería utilizado para la

fermentación y se requería una mayor cantidad de material. Aunque se trató de mantener

las proporciones en todos los aspectos, el uso de un mayor volumen de muestra pudo

haber afectado la eficiencia de la sacarificación.

Hernández-Salas y colaboradores [34] reportaron la hidrólisis enzimática después de un

tratamiento alcalino del bagazo de maguey, obteniendo 60% de azúcares en base seca

para la piña y 35% para la mezcla piña-hojas; en ese trabajo también utilizaron una

celulasa comercial. Los valores más altos obtenidos por estos autores se deben a que los

materiales que utilizaron contienen todo el contenido de fibras (celulosa) producido por la

planta. En nuestro caso, el bagazo proviene de un material en el que precisamente son

las fibras las que ya se extrajeron para ser comercializadas.

3.6. Identificación de los azúcares presentes en los hidrolizados enzimáticos del

bagazo de henequén por HPLC

La identificación de los azúcares presentes en las muestras se basó en los tiempos de

retención que presentaron los estándares puros. Las soluciones de los estándares se

inyectaron primero separadas y luego en una mezcla para corroborar la reproducibilidad

de los tiempos de retención. Los valores de los tiempos de retención para cada azúcar se

presentan en la tabla 5.

Tabla 5. Tiempos de retención de los estándares de azúcares obtenidos por HPLC1.

Los tiempos de retención se indican ± SD (n=3) 1 Bajo las condiciones experimentales descritas en Materiales y Métodos

Azúcar Tiempo de retención (min)

Xilosa 3.741 ± 0.03

Fructosa 4.614 ± 0.02

Glucosa 5.354 ± 0.03

Sacarosa 7.538 ± 0.04

42

En la figura 17 se puede observar el cromatograma obtenido para la mezcla de los

estándares de los azúcares analizados.

Figura 17. Cromatograma de la mezcla de azúcares separados por HPLC. La señal a 1.575 min corresponde al sistema móvil.

El único azúcar identificado en la fase líquida de los hidrolizados fue la glucosa, como se

puede observar en la figura 18. Sin embargo, se puede notar que la señal muestra dos

picos juntos. Este problema se presentó después de haber iniciado la inyección de las

muestras hidrolizadas. Aunque no se pudo detectar cual fue la causa verdadera, se pudo

continuar con el análisis ya que al inyectar nuevamente el estándar de glucosa, la señal

consistió también en dos picos, idénticos a los de las muestras. La curva de calibración se

realizó considerando los dos picos y la línea de regresión calculada tuvo un factor de

correlación satisfactorio (r2 = 0.9682).

El resultado obtenido en el hidrolizado es congruente con lo esperado, debido a que en la

hidrólisis enzimática con las celulasas se debería liberar glucosa y fracciones de

celobiosa. Aunque no se inyectó el estándar para identificar la celobiosa, parece no estar

en el hidrolizado del henequén, ya que no se observó ninguna señal adicional a la de la

glucosa, aún cuando se dejó correr el análisis por un tiempo suficiente para que salgan

todas las señales.

Xilo

sa

Fru

cto

sa

Glu

cosa

Saca

rosa

43

Figura 18. Cromatograma de una muestra del bagazo de henequén hidrolizada

enzimáticamente.

Por otro lado, el análisis por HPLC de una muestra proveniente del pretratamiento con

ácido al 0.4% y 60 min de calentamiento mostró que el único azúcar presente fue la

glucosa.

3.7 Curva de crecimiento de la levadura Saccharomyces cerevisiae en hidrolizados

enzimáticos de bagazo de henequén

La levadura Saccharomyces cerevisiae fue crecida en el sobrenadante que resultó de la

hidrólisis enzimática del bagazo de henequén. La curva de crecimiento que presentó esta

levadura se muestra en la figura 19.

Se observó que la fase líquida del hidrolizado enzimático no inhibe el crecimiento de la

levadura, pese a que contiene los remanentes de enzima y de solución buffer. El máximo

de producción de biomasa se alcanzó a las 18h, aunque se decidió iniciar la fermentación

con un inóculo de 14h, para que la levadura esté todavía en su fase de crecimiento

exponencial.

Glu

cosa

44

Figura 19. Curva de crecimiento de Saccharomyces cerevisiae en bagazo de henequén hidrolizado enzimáticamente con celulasas.

3.8 Fermentación de los hidrolizados enzimáticos del bagazo de henequén

Se pudo observar la formación de espuma aproximadamente a las 12 horas de iniciada la

fermentación, como se muestra en la figura 20.

Figura 20. Fermentación del hidrolizado enzimático de bagazo de henequén.

El consumo de la glucosa presente en el hidrolizado se monitoreó por la medición de los

azúcares reductores, totales y por HPLC. Los resultados se muestran en la figura 21.

45

Figura 21. Consumo de los azúcares durante la fermentación del hidrolizado enzimático del bagazo de henequén. Se midieron los azúcares reductores (AR), azúcares totales

(AT) y por HPLC.

Se puede observar que los valores obtenidos en el análisis de azúcares reductores por el

método del DNS son similares a los que se obtuvieron por HPLC, lo que apoya que con el

tipo de proceso y análisis aplicado, el azúcar presente en mayor concentración en el

hidrolizado es la glucosa.

Los valores obtenidos de azúcares totales son más altos, lo que hace suponer que en el

sobrenadante existan azúcares unidos a otras moléculas, y que fuesen liberados al

momento de adicionar el ácido sulfúrico concentrado (de acuerdo al protocolo seguido

para cuantificar los azúcares totales). Esta especulación también es congruente con el

hecho de que la diferencia entre los valores de los AR ó de HPLC (que están midiendo

sólo glucosa) y los valores de los azúcares totales es constante.

La fermentación inició con una concentración de glucosa de 26.8 g L-1 y terminó con una

concentración de 3.4 g L -1 lo que indica que hubo un consumo del 87% de la glucosa.

El comportamiento casi lineal del consumo de la glucosa se debe a que se encontraba en

bajas concentraciones y no se presenta la fase inicial (exponencial) de consumo de

sustrato.

El que la levadura haya consumido casi toda la glucosa indica que no hay en el medio

compuestos que inhiban su metabolismo. Con los resultados del inciso anterior, se puede

46

concluir que la hidrólisis enzimática no libera compuestos que inhiban el crecimiento o el

metabolismo de la levadura.

3.9 Producción de etanol

Los destilados de los mostos fermentados tuvieron una concentración de etanol de 4.3 g

L-1. Tomando en cuenta que hubo un consumo de glucosa de 23.4 g L-1, el rendimiento de

etanol (Yp/s) obtenido en el presente estudio es de 0.1837 con lo que se obtiene un 35.9%

del rendimiento teórico.

Estos resultados indican que no toda la glucosa consumida fue transformada a etanol. En

otros trabajos se ha reportado la presencia de otros subproductos generados en la

fermentación alcohólica con Sacharomyces cerevisiae. Entre los productos que se

acumulan se pueden mencionar por ejemplo al piruvato y al acetaldehído [50]. Sin

embargo, el principal subproducto que se acumula es el glicerol [50, 51] éste tiene la

función de proteger a la levadura contra el estrés osmótico producido por sales y azúcares

o por la acumulación de otros metabolitos [50, 51, 52, 53]. El glicerol se produce de la di-

hidroxiacetona derivada de la hidrólisis de la glucosa-6-fosfato [53] por lo que su

producción reduce la síntesis del etanol.

El rendimiento del etanol puede mejorarse modificando las condiciones de fermentación,

por ejemplo suplementando con azúcares obtenidos de otros materiales de desecho,

monitoreando la producción de etanol durante el proceso, modificando la concentración

del inóculo, probando con otra cepa de levadura o mediante el uso de organismos

genéticamente modificados.

47

CAPITULO IV

CONCLUSIONES Y PERSPECTIVAS

La concentración de 0.4 % de ácido sulfúrico con 60 min de calentamiento resultó

ser el mejor pretratamiento. Aunque los balances de materia indican que se liberó

una buena cantidad de azúcares es necesario realizar pruebas al residuo para

corroborar si quedan carbohidratos por liberar.

En la hidrólisis enzimática, se liberó 23 % de glucosa con respecto al peso seco

del bagazo. Sería conveniente realizar más estudios con otras celulasas (o mezcla

de celulasas con hemicelulasas) para tratar de aumentar la cantidad liberada de

azúcares.

Se identificó a la glucosa como el único carbohidrato presente en las muestras

pretratadas y en las hidrolizadas enzimáticamente. Este es un aspecto positivo, ya

que la glucosa es el sustrato que mejor consumen las levaduras y no se producen

otros azúcares que no pueden ser fermentados, como es el caso de otros

materiales lignocelulósicos.

Es necesario mejorar los rendimientos de la fermentación. En este aspecto, es

necesario iniciarla con una concentración de azúcares mayor, así como realizar

estudios sobre la concentración del inóculo, tiempo de fermentación, etc.

Este trabajo demostró que es posible obtener etanol del bagazo de henequén y

permite abrir una nueva vía de aprovechamiento de este residuo. Bajo las

condiciones utilizadas en este trabajo, se necesitarían 30 kg de bagazo seco, para

obtener 1 L de etanol.

48

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54

ANEXO A

MÉTODO DE AZÚCARES REDUCTORES

Reactivos:

Tartrato de sodio y potasio 200 g L-1

Fenol 2 g L-1

Meta bisulfito de sodio 0.5 g L-1

Hidróxido de Sodio 10 g L-1

DNS (Acido-3,5-Dinitro Salicílico) 10 g L-1

Preparación de la solución.

Se disuelven los reactivos en aproximadamente 600mL de agua destilada, dejando al

último el DNS, el que se debe adicionar poco a poco hasta lograr completa disolución, y

se afora a un litro.

Procedimiento.

A 0.5 mL de la solución problema se le adiciona 1.5 mL de la solución de DNS, se agita y

se coloca en un baño a punto de ebullición durante 15 minutos.

Se enfría a temperatura ambiente. Se agregan 8 mL de agua destilada, se agita y se lee

al espectrofotómetro a 550nm.

Curva de Calibración.

Se utiliza una solución patrón de dextrosa a una concentración de 1 gL-1. Se trabaja en un

rango de concentración de 0.1 a 1 gL-1 de dextrosa.

55

MÉTODO DE AZÚCARES TOTALES

Reactivos:

Ácido sulfúrico concentrado 97.5%

Fenol al 5%

Procedimiento.

A 1 ml de la solución problema se adiciona 1 ml de la solución de fenol al 5%, enseguida

se agregan 5 mL de ácido sulfúrico concentrado en forma brusca, para homogenizar bien

la muestra y que la hidrólisis sea más uniforme.

Se deja enfriar por 10 minutos, se agita y se coloca en un baño de agua fría durante 10

minutos. Se lee al espectrofotómetro a 490nm.

Curva de Calibración.

Se utiliza una solución patrón de sacarosa de 0.1 gL-1 para preparar una curva de

calibración con un rango de concentración de 0.01 a 0.1 gL-1

56

MÉTODO DEL DICROMATO DE POTASIO

Reactivos:

Dicromato de Potasio 33.76 gL-1

Ácido Sulfúrico 325 mL

Preparación de la solución:

Se diluye el ácido sulfúrico en aproximadamente 400 mL de agua destilada, se deja

enfriar y se agrega el dicromato diluido en aproximadamente 200 mL de agua destilada

por último se afora a un litro con agua destilada.

Procedimiento.

A 1 mL de la muestra se agrega 2mL de la solución de dicromato de potasio y se agita,

se deja reposar durante 10 minutos y posteriormente se agregan 5 mL de agua destilada

para finalmente agitar y leer al espectrofotómetro a 585nm.

Curva de Calibración.

Se utiliza una solución patrón de etanol de 20 gL-1. El rango de concentración para

preparar la curva es de 2 a 20 gL-1.

57

DETERMINACIÓN DE CARBOHIDRATOS POR HPLC.

Se utilizó un equipo HPLC Agilent series 1100 con detector de Índice de refracción, una

columna de carbohidratos marca Agilent: ZORBAX Carbohydrate. Tamaño de columna

4.6 x 150 mm.

Las condiciones de trabajo fueron las siguientes:

Fase móvil: 75% ACN/H2O.

Velocidad de flujo: 1.4 ml/min;

Inyección: 20 μL. Temperatura: 30 ºC.

Se prepararon soluciones estándar grado reactivo de glucosa y en agua grado HPLC,

posteriormente estas soluciones se diluyeron en un sistema acetonitrilo:agua grado HPLC

en proporciones de 50:50. Cada muestra se filtró individualmente y se desgasificó por 10

min.

Para la curva de calibración se realizó una solución stock con una concentración de 20 g

L-1 y se hace una curva de calibración de 1 hasta 15 mg/mL.