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DADAISMO Fundado en Zurcí en 1916 por el rumano Tristán Tzara, es tal vez el vanguardismo más radicalmente destructivo. El nombre procede de la palabra “dadá” (que intenta reproducir un balbuceo infantil). El dadaísmo es un movimiento artístico y literario que surgió durante la Primera Guerra Mundial como una forma de protesta ante los cánones estéticos dominantes. El término tiene su origen en el francés dadaïsme. Los historiadores del arte nombran a Tristan Tzara como el primer impulsor de este movimiento que se burlaba de las manifestaciones artísticas y que pretendía destruir las convenciones propias del orden establecido. El dadaísmo trascendió la vanguardia artística y supuso una crítica a los valores vigentes durante la Primera Guerra Mundial y los años posteriores. Esta pretensión revolucionaria hace que el dadaísmo suela ser conocido como el anti-arte. Sus integrantes apelaban, por ejemplo, a materiales inusuales para la confección de las obras artísticas. La libertad absoluta, lo inmediato, la contradicción y la espontaneidad de dadaísmo buscaban derrocar las leyes de la lógica , el pensamiento inmóvil, los conceptos abstractos, lo universal y la eternidad de los principios. Los dadaístas proponían el caos por sobre el orden y llamaban a romper las fronteras entre el arte y la vida. Aunque los orígenes del nombre del movimiento no están claros, se cree que Tzara eligió dicha nominación por los primeros balbuceos que realiza un niño (“dada”). El movimiento buscaba crear una nueva forma de arte partiendo desde cero, tal como empieza un niño su camino por la vida. La influencia del dadaísmo hace que, en la actualidad, todavía se debata sobre qué es el arte y qué creaciones deben ser consideradas como artísticas. La ausencia de reglas fijas y convenciones que promulgaban los dadaístas aún tienen vigencia para muchos artistas.

DADAISMO[1]

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literatura

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Page 1: DADAISMO[1]

DADAISMO

Fundado en Zurcí en 1916 por el rumano Tristán Tzara, es tal vez el vanguardismo más radicalmente destructivo. El nombre procede de la palabra “dadá” (que intenta reproducir un balbuceo infantil).

El dadaísmo es un movimiento artístico y literario que surgió durante la Primera Guerra Mundial como una forma de protesta ante los cánones estéticos dominantes. El término tiene su origen en el francés dadaïsme.

Los historiadores del arte nombran a Tristan Tzara como el primer impulsor de este movimiento que se burlaba de las manifestaciones artísticas y que pretendía destruir las convenciones propias del orden establecido. El dadaísmo trascendió la vanguardia artística y supuso una crítica a los valores vigentes durante la Primera Guerra Mundial y los años posteriores.

Esta pretensión revolucionaria hace que el dadaísmo suela ser conocido como el anti-arte. Sus integrantes apelaban, por ejemplo, a materiales inusuales para la confección de las obras artísticas.

La libertad absoluta, lo inmediato, la contradicción y la espontaneidad de dadaísmo buscaban derrocar las leyes de la lógica, el pensamiento inmóvil, los conceptos abstractos, lo universal y la eternidad de los principios. Los dadaístas proponían el caos por sobre el orden y llamaban a romper las fronteras entre el arte y la vida.

Aunque los orígenes del nombre del movimiento no están claros, se cree que Tzara eligió dicha nominación por los primeros balbuceos que realiza un niño (“dada”). El movimiento buscaba crear una nueva forma de arte partiendo desde cero, tal como empieza un niño su camino por la vida.

La influencia del dadaísmo hace que, en la actualidad, todavía se debata sobre qué es el arte y qué creaciones deben ser consideradas como artísticas. La ausencia de reglas fijas y convenciones que promulgaban los dadaístas aún tienen vigencia para muchos artistas.

De dada, movimiento que surge durante la guerra europea. El  dadaísmo  se manifiesta en contra del racionalismo burgués que había conducido  Europa a la catástrofe bélica, también rechaza criterios formalistas, esclavos del sentido común;  encuentra en la improvisación, el desorden y la duda, la suma de los valores del nuevo lirismo.  Para los dadaístas la poesía es, intrínsecamente, libertad.  Tristán Tzara, R. Huelsenbeck y Hans Arp, abriendo un diccionario por una página cualquiera, bautizan con el nombre dada este movimiento: 

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“Dada no significa nada y, sin embargo, la primera idea que se revuelve en las cabezas es de orden bacteriológico;  encontrar un origen etimológico, por lo menos.  Así, se anuncia en los periódicos que los negros Krou llaman a la cola de una vaca santa:  DADA.  El cubo y la madre, en cierta región de Italia: DADA.  El caballo de madera, el ama de cría, en ruso y en rumano: DADA.” 

Tristán Tzara Su desdén compartido con el futurismo por el arte elaborado los llevó a afirmar que “el pensamiento se hace en la boca”.  Sin una ideología definida, buscaban “escandalizar al burgués”, con sus espectáculos-provocación, rompiendo con la actitud pasiva del espectador y con el concepto tradicional de obra de arte.  La obra de arte se hace inconclusa, que el espectador debe completar con personales procesos de creación (arte cinético, poesía concreta).  El gran mérito de Dadá fue la remoción  de valores que produjo, al poner en tela de juicio e incluso negar todo el arte anterior, sin proponer todavía, nada concreto en cambio. Anuncia Tzara en el Manifiesto Dadá:

“Destruyo los cajones del cerebro y los de la organización social:  desmoralizar todo y echar mano desde el cielo al infierno, los ojos del infierno al cielo, restablecer la rueda fecunda de un circo universal en los poderes reales de la fantasía de cada individuo”. Cirlot sostiene que el dadaísmo emplea el elemento destructor de las jerarquías intelectuales, porque su misión consiste en propagar la irracionalidad.  Su técnica es exquisitamente rudimentaria:  el automatismo y la virtud de la imagen en sí y para sí;  “el pensamiento puede y debe funcionar en la más completa de las indiferencias hacia todo sentido de rigor, de unidad, de coherencia o de ideario”. 

El movimiento Dadá, en su contenido o temática, se caracterizó por:- Protesta continua contra las convenciones de su época.- Actitud de burla total y humor. Se basan en lo absurdo y en lo carente de valor.- Medios de expresión irónico-satíricos, a través del gesto, el escándalo, la provocación.- Poesías ilógicas o de difícil comprensión (El poema dadaísta suele ser una sucesión de palabras y sonidos).- Inclinación hacia lo dudoso, rebeldía, destrucción, terrorismo, muerte y nihilismo, lo fantasioso, etc.- Promoción por el cambio, la libertad del individuo, la espontaneidad, lo inmediato, lo aleatorio, la contradicción, el caos, lo imperfecto, la intuición.- Manifestaciones contra la belleza, la eternidad, las leyes, la inmovilidad del pensamiento, la pureza de los conceptos abstractos, lo universal, la razón, el sentido, la construcción del consciente.- Negativo y en contra el modernismo, el expresionismo, cubismo, futurismo y abstraccionismo.

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- Quieren volver a la infancia.- Consideran más importante al acto creador que al producto creado.

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Esperanza

Aun cuando todo esta cubierto de niebla, yo sigo firme ante tanta adversidad

procurando defenderme....

de todo aquello que me pueda lastimar, de todo lo que me pueda derrotar;

protegiendo mi alma de la oscuridad,de todo maldad;

dentro de una caja de cristal.

Desconsolada sigo por la vida,por el mismo camino;

con la frente muy en alto y siguiendo a cada paso; sin poder respirar

una esperanza de vida, una esperanza de verdad,aun en el final.