Dar a Dios lo que es de Dios

El Evangelio de este domingo nos presenta una de las mayores convicciones de la fe: “Todo es de “Todo es de Dios”Dios”. De Dios es el mundo, la vida, las personas, nuestras alegrías y nuestras tristezas. Y de Dios, principalmente son los pobres, los pequeños y los frágiles de este mundo. “Dar a Dios lo que es de Dios”, nos pone frente a frente con la gran bondad que experimentó Jesús. Por ello, ser amigo de Jesús significa ser buenos como Jesús.

El Elogio dicho a Jesús: Maestro, sabemos que eres sincero y que enseñas el camino de Dios conforme a la verdad, es tan denso, que, aunque haya sido dicho con malicia por parte de los fariseos, encierra una profunda verdad. Pero una verdad marcada por la sencillezuna verdad marcada por la sencillez de Jesús, el hombre bueno que en hechos y palabras se ha convertido en el amparo de todo el que le busca. Una verdad tan gratificadoraUna verdad tan gratificadora que traspasa toda lógica humana ofreciendo paz y descanso. Una verdad tan tiernaUna verdad tan tierna que sabe recomponer y dar sentido a los entuertos de quienes padecen dolencias, hambre y exclusión. Toda esta verdad de Jesús es la que no soportan los fariseos y por eso buscan cómo hacerle caer.

Cuando Jesús dice: Den al Cesar lo que es del César, y a Dios lo que es de Dios, no está pensando en Dios y el César como dos poderes que pueden exigir cada uno sus derechos a sus súbditos. Porque Jesús, como hombre fiel y verdadero, sabe que a Dios le pertenece « la tierra y todo lo que contiene, el orbe y todos sus habitantes» (salmo 24). ¿Qué le puede pertenecer al César, que no sea de Dios? Sólo su poder opresivo y su dinero injusto (Cf. J. A. Pagola). Y a nosotros, ¿qué nos puede pertenecer que no sea de Dios? Nada, porque todo es de Dios.

Jesús llama hipócritas a los fariseos ya que ellos saben muy bien que ni al César, ni a ningún poder en la tierra, le pertenece nada. Y de igual forma a nosotros también nos interpela Jesús, porque en la medida que digamos ser amigos y amigas del Señor, sólo podemos serlo si asumimos sus sentimientos y actitudes, porque con ello damos a Dios lo que es de Dios.

[ Comienza la oración ]

En aquel tiempo, se reunieron los fariseos para ver la manera de hacer caer a Jesús, con preguntas insidiosas, en algo de que pudieran acusarlo.

Comprendiendo Jesús la malicia de sus intenciones, les dijo: ¡Hipócritas!, ¿por qué me tientan? Enséñenme la moneda del tributo. Y ellos le presentaron una moneda.

Le enviaron, pues, a algunos de sus secuaces, con algunos del partido de Herodes, para que le dijeran: “Maestro, sabemos que eres sincero y que enseñas con verdad el camino de Dios, y que nada te arredra, porque no buscas el favor de nadie. Dinos, pues, qué piensas: ¿Es lícito o no pagar el tributo al César?

Jesús les preguntó: ¿De quién es la imagen y la inscripción de esta moneda? Le respondieron: Del César. Y Jesús concluyó: Den, pues, al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios. Palabra del Señor.

[ Continúo ]

Al final, rezo el Padrenuestro,

saboreando cada palabra.

Me sereno para esta cita con Dios.Me acomodo con una postura que implique todo mi ser. Al ritmo de la respiración doy lugar al silencio.( Una y otra vez repito este ejercicio )

[ Continúo [ Continúo ] ]

Me sereno para esta cita con Dios.Me acomodo con una postura que implique todo mi ser. Al ritmo de la respiración doy lugar al silencio.( Una y otra vez repito este ejercicio )

[ Sigo adelante ]

NOTA: La oración preparatoria me ayuda a experimentar libertad de apegos. La repito tantas veces como quiera, dejando que resuene en mí.

NOTA: Este paso merece hacerlo con esmero. Le dedico unos 10 minutos.

[ Sigo adelante ]

(Si me ayuda, puedo decir varias veces la petición)

Señor,

danos

tus sentimientos

y actitudes,

que eso nos basta

[ Y continúo la oración ]

“Todo es de Dios”. De Dios es el mundo, la vida, las personas, nuestras alegrías y nuestras tristezas.

Y de Dios, principalmente son los pobres, los pequeños y los frágiles de este mundo.

“Dar a Dios lo que es de Dios”, nos pone frente a frente con la gran bondad que experimentó Jesús. Por ello, ser amigo de Jesús significa ser buenos como Él.

[ Y continúo la oración ]

Que el Maestro sea sincero y enseñe el camino de Dios conforme a la verdad, quiere decir que su verdad su verdad es sencillaes sencilla tanto en hechos como en palabras, porque Él se ha convertido en el amparo de todo el que le busca.

Que su verdad es gratificadorasu verdad es gratificadora porque traspasa toda lógica humana ofreciendo paz y descanso.

Y que su verdad es tiernasu verdad es tierna porque sabe recomponer y dar sentido a los entuertos de quienes padecen dolencias, hambre y exclusión.

[ Y continúo la oración ]

Quien quiera ser amiga y amigo del Señor, ha de cultivar su misma cultivar su misma convicción.convicción.

Porque los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias de los hombres y mujeres de nuestro tiempo, sobre todo de los pobres y de cuantos sufren, son a la vez gozos y esperanzas, tristezas y angustias de los discípulos de Cristo.

Nada hay verdaderamente humano que Nada hay verdaderamente humano que no encuentre eco en el corazón de no encuentre eco en el corazón de los amigos y amigas de Cristo.los amigos y amigas de Cristo.

[ Comienza el Cierre de la oración ]

DIOS NO SE DEJA GANAR EN AMOR

Una cosa yo he aprendido de mi vida al caminar:

"No puedo ganarle a Dios, cuando se trata de dar,"

Por más que pueda yo darle, siempre Él me gana a mí,

porque me regresa mucho, mucho más de lo que yo di.

Se puede dar sin amor, pero no se puede amar sin dar.

Si yo doy, no es porque tengo, mas bien tengo, porque doy.

Y es que cuando Dios me pide, es que él me quiere dar.

Y cuando mi Dios me da, es que me quiere pedir.

Si tú quieres, haz lo mismo, y comienza a dar hoy.

Y verás que en poco tiempo tú también podrás decir:

"Una cosa yo he aprendido de mi vida al caminar.

No puedo ganarle a Dios, cuando se trata de dar," (Juan Romero)

Para centrar la experiencia vivida en la Oración, respondo en forma sencilla las siguientes interrogantes:

[ Termino con la oración siguiente ]