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PILITA CLARK

CORRESPONSAL DE MEDIO AMBIENTE

ENERGA. SE vIENEN 15 MESES COMPLICADOS PARA LA INDuSTRIA DE LOS COMBuSTIBLES fSILES

LOS LDERES MUNDIALES SE RENEN EN LA ONU PARA INICIAR UN PROGRAMA DE ACCIN CLIMTICA

Esta no es una buena semana para los inversio-nistas en compa-as de petrleo o

carbn. Todo comenz con ma-

nifestaciones en capitales de todo el mundo, donde decenas de miles de perso-nas marcharon para exigir ms medidas para luchar contra el cambio climti-co. Las actividades conti-nuarn con una cumbre de la ONU en Nueva York el martes, en la cual Barack Obama, el presidente de EE.UU., se reunir con ms de 120 lderes internacio-nales para establecer qu ti-po de accin piensan tomar con respecto al clima.

Probablemente nada de esto afecte el precio de la ac-cin de una empresa mine-ra de carbn como Peabody Energy, o de una petrolera de calibre mundial como ExxonMobil. Pero s marca el inicio de 15 meses poten-cialmente incmodos para la industria de los combus-tibles fsiles con miras a la reunin de la ONU en Pa-rs en diciembre del prxi-mo ao, donde los lderes se han comprometido a fir-mar un acuerdo global para frenar los gases de efecto in-vernadero que impulsan el cambio climtico.

La reunin de Nueva York no forma parte de las negociaciones formales para la reunin de Pars. Se

ga estn prestando debida atencin a las conversacio-nes de Pars. Varias de ellas han enviado ejecutivos a la cumbre de Nueva York, in-cluyendo la empresa china Sinopec. Por un lado, el p-nico de la crisis financiera global que fue el teln de fondo de la conferencia de Copenhague ha disminui-do, incluso si la recupera-cin no es slida.

Por otra parte, China ha cambiado. El mayor emisor mundial de dixido de car-bono rehusaba a compro-meterse a cualquier accin con respecto al cambio cli-mtico en las negociacio-nes de Copenhague, que se inici sin ningn acuerdo entre Beijing y el segundo mayor emisor, EE.UU. Aho-ra, un nuevo liderazgo en Beijing ha prometido aca-bar con la contaminacin del carbn que asfixia sus ciudades, mientras que el pas se ha convertido en el mayor inversor del mundo en energas renovables.

China invirti ms en energas renovables que el conjunto de Europa en el 2013, la primera vez que esto ha sucedido. El total de China fue de $56 mil millo-nes, segn la ONU, muy por delante de los $48 mil mi-llones de Europa y los $36 mil millones en EEUU.

El presidente Obama ha mostrado un nuevo inters en hacer del clima un dis-tintivo de su presidencia. Los severos lmites de emi-siones impuestos a las plan-tas de carbn de EE.UU., que se pusieron en marcha en junio, todava enfrentan una multitud de desafos legales, pero es poco proba-ble que sean las ltimas ac-ciones con respecto al clima que el Sr. Obama tome.

EE.UU. y China ya han iniciado conversaciones detalladas con vistas a Pa-rs, por lo que muchas per-

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ILuSTRACIN: vCTOR AguILAR

China ha cambiado.

Hasta hace

poco, el mayor

emisor mundial

de dixido de

carbono rehusaba

comprometerse a

cualquier accin

con respecto al

cambio climtico

supone que refuerce el pro-ceso forzando a los lderes a concentrarse en lo que hay que hacer antes de finalizar un acuerdo en Francia.

La ltima vez que tantos jefes de Estado se reunie-ron para hablar de acciones a tomar en pro del clima fue en 2009 en Copenhague, donde no pudieron desa-rrollar un plan efectivo.

Si la historia sirve de gua, el acuerdo de Pars no debera tampoco llegar a ningn lado: la ONU ha in-tentado negociar un acuer-do climtico mundial signi-ficativo desde 1992. Desde entonces, las emisiones de dixido de carbono, el prin-cipal gas de efecto inverna-dero que emiten las centra-les, fbricas y automviles del mundo, han subido un 50%.

Mucho ha cambiado desde Copenhague, sin em-bargo, por lo que muchas grandes empresas de ener-

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sonas cercanas a las nego-ciaciones creen que hay una probabilidad mucho mayor de que se llegue a un acuerdo.

Uno de los mayores cambios desde la reunin en Dinamarca, sin embar-go, tiene que ver con la eco-noma, no la poltica. Desde entonces, el costo de los pa-neles solares ha cado en un 80%, mientras que los cos-tos de energa elica han disminuido en un 15%, por lo que estas formas de ener-ga son las ms baratas en ciertas partes del mundo.

Eso ha impulsado otro nuevo fenmeno: el au-ge de un movimiento de desinversin en el combus-tible fsil el cual sostiene que los inversores deben estar conscientes de que la

Uno de los mayores

cambios, sin

embargo, tiene que

ver con la economa,

no la poltica: el

costo de los paneles

solares ha cado

un 80%, mientras

que los costos de

energa elica han

disminuido en 15%

China invirti

ms en energas

renovables en el

2013. El total de

China fue de US$56

mil millones, por

delante de los $48

mil millones de

Europa y los US$36

mil millones en

EE.UU.

to de 2 grados centgrados de calentamiento a nivel global con respecto a la era preindustrial.

El ms reciente inte-grante al movimiento es el Rockefeller Brothers Fund,

nacido de la vasta riqueza acumulada de la Standard Oil. Este movimiento llev a ExxonMobil y a Shell a to-mar la indita medida este ao de informarles a sus in-versores que hay poco que

te significa que incluso si los gobiernos deciden fortale-cer sus medidas en pro del clima, se necesitarn d-cadas para sentir cualquier efecto que pudieran aca-rrear. Esta es una conside-racin importante, al igual que el hecho de que pocas inversiones ofrecen el ren-dimiento, la escala y el cre-cimiento de la renta varia-ble que ofrecen el petrleo y el gas, un hecho sealado elocuentemente en un tra-bajo reciente de Nathaniel Bullard del grupo de in-vestigacin de Bloomberg New Energy Finance.

As que el movimiento climtico podra enfrentar una batalla cuesta arriba, pero los prximos 15 meses todava podran resultar in-teresantes.

mayor parte de las reservas de carbn, petrleo y gas de las empresas que cotizan en bolsa tienen que permane-cer en el suelo si el mundo ha de evitar un potencial-mente peligroso aumen-

temer. Una creciente pobla-cin mundial significa que la demanda de combusti-bles fsiles se mantendr alta durante dcadas, dije-ron, y la inmensa infraes-tructura energtica existen-

MERCADO. Hay quienes piden desinvertir en el combustible fsil.

REUTERS