Universidad de SANTIAGO de CHILEFacultad de HumanidadesDepto. de EducaciónMagister en Currículum y Evaluación

Ensayo Sobre la influenciaPedagógica de John Dewey en

Chile

Estudiantes : Jorge Amigo G.

Marietta Díaz C. Marcos Flores M.

Profesor : Dr. Jaime Caiceo

Introducción

Cada día los educadores debemos aprender y aprender, nuevos conocimientos para poder desenvolvernos en el ámbito educativo. Dentro de esta necesidad, el conocer nuestra historia educativa se vuelve fundamental, para comprender los procesos que hemos vivido y las oportunidades que hemos perdido. Al pensar en la influencia de Dewey en nuestra educación, nos sorprendemos al encontrarnos, quizás con el primer teórico constructivista, quien modifica el paradigma educativo centrando a comienzos de siglo la mirada en el estudiante, ente principal del proceso de enseñanza aprendizaje. Chile siempre ha sido permeado por miradas extranjeras, recibiendo la influencia europea o norteamericana. La llegada de Dewey a Chile, coincide con una reciente evaluación realizada por Darío Salas a través de su libro “El problema nacional”, ya en esa época se exigía una revisión de los procesos establecidos por el estado para educar a nuestros estudiantes y también el tomarse en serio los procesos que han comenzado para lograr erradicar el analfabetismo y extender los años de educación obligatoria, entendiendo la oportunidad de progreso y bienestar que significaría para nuestro país. Ha pasado un siglo prácticamente desde que se nos propuso cambiar nuestra mirada educativa.

Es, en este contexto que nos aventuramos a plantearnos la siguiente interrogante “En la actualidad cuánto del pensamiento de Dewey se pone en práctica en nuestras unidades educativas”. Veremos qué sorpresas guarda para nosotros la educación que estamos viviendo y de la somos responsables por ser promotores de cambios del siglo XXI.

Desarrollo

El paradigma de la Escuela Nueva llega a Chile a comienzos del Siglo XX con el pensamiento de John Dewey, es el máximo teórico de la escuela activa y progresista, quien propone un nuevo estilo de pedagogía, de trabajo en el aula, vale decir un cambio en la metodología de la enseñanza. En 1897, escribió su gran obra “Mi credo Pedagógico” en ella plantea que la “escuela es antes que todo una institución social, una vida social simplificada. La educación es el método fundamental del progreso y de la acción social. La escuela es un instrumento esencial y más eficaz de progreso y de reforma social” (Alighiero, p. 497).

La Escuela Nueva y específicamente de Dewey, llegó a Chile a partir de educadores laicistas, como Darío Salas y Maximiliano Salas Marchant, ellos generaron cambios fundamentales en el sistema educacional chileno (Caiceo, 1998). Para este movimiento de la Escuela Nueva era importante denunciar y modificar los vicios de la educación tradicional: pasividad, intelectualismo, superficialidad, enciclopedismo, verbalismo con el propósito de definir un nuevo rol a los diferentes participantes del proceso educativo. La presencia de este nuevo pensamiento de Dewey en Chile, influye definitivamente en la Reforma Educacional que se implementó en 1928, la cual en el mes de Octubre del mismo año se detuvo en algunos aspectos, manteniéndose sólo en la enseñanza primaria, el espíritu inicial.

Una de las formas más concretas en que se ve la aplicación de esta Nueva Escuela es la creación un “laboratorio pedagógico”, el cual será un colegio. El 29 de Marzo de 1932 por Decreto N°604, el Ministerio de Educación estableció:

Teniendo presente la necesidad de crear un establecimiento cuya característica permita ensayar reformas de organización didáctica, nuevos métodos de enseñanza y diferentes agrupaciones de materias en los programas; que tales innovaciones ensayadas y vigiladas, en un establecimiento adecuado, permitirán dar base sólida a las reformas que se intentan en la educación secundaria general, y considerando que los actuales establecimientos de educación secundaria no cuentan con los medios necesarios para ensayar esas innovaciones. Decreto:

1. Créase un Liceo en la Comuna de Ñuñoa que se denominará "Liceo Manuel de Salas" y que ser destinado a la aplicación y experimentación de nuevas organizaciones, más, todos y programas de enseñanza secundaria. 2. Este Liceo comenzar a funcionar el 1º de abril próximo, y deberá regirse por las disposiciones y reglamentos que dicte el Presidente de la República".1

1 Decreto Nº 604, Mineduc, 28-III-1932, citado por Florencia Barrios. El Liceo Experimental Manuel de Salas, Edic. U. de Chile, Santiago, 1983, p. 14. Extracto obtenido del documento Conferencia inaugural en las Cuartas Jornadas de Historia de la Educación Chilena.

Es importante nombrar en esta Escuela Nueva a Irma Salas, quien estudiará personalmente con Dewey en Columbia y traerá las propuestas de su maestro a nuestro país, a través de su participación en la Universidad de Chile y como directora del Liceo experimental Manuel de Salas, introduciendo conceptos innovadores que se mantuvieron en el tiempo como el Consejo de curso, la Orientación, el Profesor Jefe y el gobierno estudiantil. (Caiceo, 1998).

Según Dewey la educación se define como un instrumento de transformación de la acción social y un método fundamental del progreso donde el maestro al enseñar no solo educa individuos, sino que contribuye a formar una vida social justa. Él propuso una nueva forma de hacer, un nuevo método que se fundamentó en la experiencia y en la acción cuya finalidad estuvo encaminada a la formación de ciudadanos aptos para la vida en democracia. El proceso de aprendizaje consiste en la adquisición de una serie de posibilidades de acción, que se concretan en el aprender haciendo y tiene como finalidad utilizar íntegramente las capacidades de las personas para que puedan ser incorporadas a la vida social.

Dewey (1951), planteó que una educación que no se base en el descubrimiento es irreal tanto desde el punto de vista del conocimiento como de la práctica cotidiana, sin embargo, la actividad no es un puro activismo, sino que tiene que estar unida a la reflexión y al pensamiento para convertirse así en una experiencia reflexiva. Agrega “la mera actividad no constituye la experiencia. Es centrifuga y dispensadora. La experiencia como ensayo supone cambio, pero el cambio es una transición sin sentido a menos que esté conscientemente conexionada con la ola de retorno de la consecuencias que surgen de ella”. Además, fomenta la creación de una mente abierta e indagadora, por lo cual la educación se debe concebir como acumulación de experiencias y vivencias personales en el educando. De acuerdo a este pensamiento, el Docente en su labor debe considerar los siguientes cinco aspectos:

1. Consideración de alguna experiencia actual y real del niño.

2. Identificación de algún problema o dificultad suscitados a partir de esa experiencia.

3. Inspección de datos disponibles, así como búsqueda de soluciones viables.

4. Formulación de la hipótesis de solución.

5. Comprobación de la hipótesis con la acción.

También presenta cuatro puntos pedagógicos que todavía se deben subrayar:

1. La educación debe preparar al estudiante para ser útil a la sociedad (pragmatismo).

2. La educación debe basarse en los intereses del alumno.

3. El niño “aprende haciendo”.

4. El Profesor dirige el aprendizaje, respondiendo preguntas cuando el alumno lo necesita y propiciando que el medio estimule la respuesta necesaria.

El pensamiento de Dewey es un gran cambio de paradigma, especialmente en el modelo de Educación Católica, que es contraria a su pensamiento. Surge en este momento la figura del Padre Alberto Hurtado quien desarrolla su Tesis Doctoral, conciliando la pedagogía de Dewey con la educación católica. El padre Hurtado quiso hacer un aporte significativo a uno de los problemas científicos-pedagógicos que preocupaban a los católicos, que era buscar los puntos de conciliación entre la educación católica y la educación nueva. “Para esto extrapoló la teoría de Dewey como lo había hecho San Agustín con Platón o Santo Tomás con Aristóteles, es decir, estudiar el valor intrínseco de su doctrina filosófica-pedagógica. Esto se oficializa cuando en el año 1963 el Cardenal Raúl Silva Henríquez, Presidente de la Comisión episcopal para la educación, declara que los principios educativos católicos estaban entrelazados y complementados con los de Dewey.” (Caiceo, 1998)

Estas ideas innovadoras de Dewey influyeron en la Reforma Educacional del año 1965 por el gobierno de Eduardo Frei Montalva, en el cual los discípulos de Dewey aportaron el pensamiento curricular y evaluativo en este proceso reformista.

Por otro lado, lo más importante del Padre Hurtado son los aportes metodológicos de Dewey y su doctrina filosófica – pedagógico, que los resumió en 14 puntos:

1. El fin inmediato de la educación que no es ni exclusivamente individual ni puramente social, sino ambos aspectos.

2. La concepción del niño como un todo -en contraposición a aquella concepción que lo considera como un simple agregado de acción y reacción-, y la integración de la personalidad por el pensamiento reflexivo.

3. El valor que atribuye a los intereses del niño como punto de partida en los estudios y como medio necesario para promover el desarrollo del mismo.

4. El maestro como el guía más experimentado que ayuda al niño a adquirir más experiencias y lo conduce a descubrir la verdad por sí mismo y la transmite cuando sea necesario.

5. La actividad y la libertad que ocupan un lugar prominente como medio de progreso, crecimiento y perfeccionamiento.

6. El tomar en consideración la situación social en cuanto aporta condiciones favorables al aprendizaje y al desarrollo de cualidades deseables de convivencia social.

7. La vida escolar que no debe ser considerada como un período desprovisto de valor intrínseco, ni tampoco como simple preparación para la vida del adulto.

8. El valor social de las diferentes materias de estudio y los intereses del niño que constituirán el criterio de selección y correlación de las diferentes ramas de la enseñanza.

9. Los principios metodológicos para la enseñanza de algunas asignaturas, como historia, geografía, ciencias y trabajos manuales. Las teorías acerca de la continuidad entre el juego y el trabajo, entre el interés y el esfuerzo y el carácter realista y menos teórico de la enseñanza.

10. La educación moral realizada por medio de la vida social, junto con el trabajo y el pensamiento reflexivo: además, por medio del trabajo comunitario dirigido hacia un fin común, por el valor moral de las acciones ordinarias, por la unión íntima entre la vida intelectual y moral.

11. La educación de la voluntad del niño acostumbrándole, sobre todo, a que obre en virtud de motivos personales y alentándote en toda actividad física, intelectual o afectiva que emprenda.

12. Una concepción más amplia de la disciplina escolar.

13. El colegio que debe preparar para la vida democrática.

14. El colegio como un instrumento de reforma social.

Luego Jean Piaget, plantea el cognitivismo o teoría psicogenética, según Caiceo consiste en establecer que es una conducta, sea motora, perceptiva, memorística o propiamente inteligente, es un intercambio entre el sujeto y el mundo exterior; donde el aprendizaje es un proceso de modificación interna que se produce como el resultado de la interacción procedente del medio y del sujeto activo.

Según Piaget el Educador debe tener en cuenta cuatro aspectos:

1. Los educandos necesitan aprender a través de experiencias concretas.

2. Respetando los estadios de desarrollo cognitivo desde la infancia a la adolescencia se posibilita el aprendizaje.

3. Esta propuesta se basa en la noción de estructuras operatorias.

4. El aprendizaje parte desde los intereses del niño y es su propia actividad.

Otro gran teórico constructivista Jerome Brunner, plantea el concepto de psicología cognitiva; en esta teoría el principal interés se encuentra en el desarrollo de las capacidades mentales, la educación debe perseguir que los estudiantes vayan más allá de los aprendizajes por condicionamiento. Se distinguen tres sistemas de procesamiento de la información: la acción, las imágenes mentales y el lenguaje. El eje fundamental de esta teoría es la construcción del conocimiento mediante la inmersión del estudiante en situaciones de aprendizaje problemáticas, de esta forma el aprendiz aprende descubriendo. Se busca alcanzar objetivos de aplicación para que el alumno traduzca o interprete lo comprendido, es decir, supone una comprensión previa de un método o concepto. Permite que cada educando desde su propia capacidad pueda aprender. El autor distingue entre alumno (aprendiz) y profesor (docente). El primero juega un papel importante puesto que él es un protagonista activo para desarrollar su capacidad de imaginación, de intuición, deducción y potenciar al máximo su capacidad de descubrir y

crear. El docente, es un mediador entre el aprendiz y el conocimiento, es un facilitador del aprendizaje, diseñando estrategias y actividades acordes con el conocimiento que desea enseñar. De esta forma el aprendizaje adquiere significado desde la propia construcción del mismo, es decir, constructivismo puro.

Posteriormente, Howard Gardner, planteó en el año 1983 la Teoría de la Inteligencias Múltiples. Este autor dice que hay una multiplicidad de inteligencias y que deben ser estimuladas en sus potencialidades, con la finalidad de hacer del aprendizaje una experiencia motivadora y enriquecedora. La propuesta pedagógica de Gardner, se centra en promover al interior de los establecimientos la necesidad de hacer transformaciones en los procesos didácticos y de generar enfoques educativos, innovadores centrados en los estudiantes.

Surge una corriente contemporánea llamado constructivismo de Lev Vygotsky que es el mayor exponente de una teoría de cómo los seres humanos aprenden a resolver problemas y dilemas que su medio ambiente les presenta. El individuo es quien construye su conocimiento, y lo hace con lo que tenga a su disposición en términos de creencias y conocimiento formal.

Según Caiceo lo relevante es que el Docente debe conducir a sus estudiantes a un pensamiento reflexivo como la mejor forma de pensar. Además plantea que aun cuando el niño en forma innata posee curiosidad e imaginación, el Educador debe fomentar en él una actitud científica que propenda a que éste tenga un pensamiento reflexivo, lo que lo llevará a ser innovador y progresista.

Podemos aportar desde otra teoría contemporánea que la atención a la diversidad es el principio didáctico del constructivismo, vale decir, el estudiante construye sus aprendizajes de acuerdo a su propio ritmo. Según Cesar Coll, la disposición para el aprendizaje está compuesta por aspectos emocionales que afectan positiva o negativamente el proceso didáctico. El Docente debe disponer de tiempo y voluntad para conocer estos rasgos y así orientar la actividad docente hacia la construcción del conocimiento. Coll plantea que “cuando el alumno se enfrenta con un nuevo contenido por aprender, lo hace siempre armado con una serie de conceptos, concepciones, representaciones y conocimientos adquiridos en el transcurso de sus experiencias previas” (Coll, 1993, p. 50).

El Constructivismo tiene fortalezas que son las siguientes:

1. Respeta los ritmos de aprendizaje de los estudiantes, porque está orientado al desarrollo de las habilidades y capacidades.

2. Permite el desarrollo personal de los estudiantes, debido a que considera los aprendizajes previos y experiencias de la vida, lo que permite generar motivación e interés hacia los conocimientos.

3. El Profesor es un facilitador, mediador y guía del conocimiento.

4. Permite integración, debido a que se basa en una metodología activa y participativa.

5. Permite y genera más de una posibilidad de aprendizaje de los estudiantes.

6. Es adaptativo a la sociedad del conocimiento y tiempos actuales, porque permite que los estudiantes se puedan manejar en la información que está disponible en todos lados.

7. Es integrador, porque toda la información que tienen los estudiantes y Docentes, aportan para la construcción del conocimiento.

CONCLUSIÓN

Según el Consejo Mundial de la UNESCO, Chile desde el año 2000 al 2025 debe fortalecer entre nuestros estudiantes la Autonomía intelectual, moral, afectiva y social y también la Autoestima, con esto se pretende lograr un ser íntegro e integrador. Esta actitud debe impulsar y fortalecer la educación de calidad para este siglo XXI.

El Constructivismo es la culminación de una serie de ideas pedagógicas que se han venido dando a través del tiempo, comenzó hace ya un siglo con Dewey y aunque sabemos que nuestros estudiantes deben adquirir aprendizajes significativos, hoy nuestras aulas, nuestro Liceos emblemáticos, tienen una mirada academicista, donde no importa mucho lo que el estudiante “es” en su contexto, sino lo que es capaz de aprender con una estructura determinada. Desde esta perspectiva Chile, en su mayoría sigue con una educación bancaria, donde hay un expositor y no un mediador, que dirige el aprendizaje, pero no logra desarrollar el pensamiento del educando.

Creemos por tanto, que tenemos una tarea pendiente, que nuestra sorpresa después de leer este texto, es más bien pesimista, pero al mismo tiempo, sabemos que somos constructores de realidades y que nuestro pequeño aporte, a pesar de ser un grano de arena, puede ser una gran oportunidad, si logramos transmitir la experiencia del aprendizaje, si logramos encantar a nuestros Docentes con su labor, si logramos dar sentido a su labor y entender que en esta sociedad del conocimiento es indispensable preparar a los jóvenes para poder responder a las problemáticas a las que se verán enfrentados, probablemente no serán las mismas que nosotros hoy imaginamos, sin embargo, nos quedamos con la satisfacción de haber intentado formar y educar a un ser capaz de mirar el futuro sin temor y vivir el presente como un nuevo desafío.

BIBLIOGRAFIA.-

ALIGHIERO, M. (1999) “Historia de la Educación 2, del 1500 a nuestros días” Siglo XXI Editores, México D.F.

CAICEO, Jaime (1999) “Conferencia inaugural en las Cuartas Jornadas de Historia de la Educación Chilena. Universidad Católica de Valparaíso.

CAICEO, Jaime (2011) “Pensamiento Pedagógico en Chile en el siglo XX: desde la Escuela Nueva al Constructivismo” Rev. Teoría e Política da Educacao, v. 14 n. 2

COLL, C. (1993) “El Constructivismo en el aula” Editorial Graó – España.

HUERTA, C (2006) “Corrientes Pedagógicas Contemporáneas” Odiseo – Revista Electrónica de Pedagogía - México

PALACIOS, J. (1999) “La cuestión Escolar: críticas y alternativas” México, D.F: Fontamara Colección.

PICARDO, O., ESCOBAR, J. (2002) “Educación y Sociedad del Conocimiento: Introducción a la filosofía del Aprendizaje” San José de Costa Rica.