13
EUTANASIA Aspecto político Jurídico-político: regula las relaciones entre los hombres por la convivencia en paz, seguridad y libertad y protege los bienes comunes de los que participamos todos y en los que la vida física de cada hombre es presupuesto necesario para la existencia de otros bienes. No es un deber del Estado hacer bueno al hombre a través de las leyes civiles, pero sí proteger a todos los que pueden verse privados del derecho fundamental a la vida especialmente ante la vulnerabilidad que comporta la enfermedad. Aspecto moral Regula los actos individuales. El presunto derecho al suicidio asistido es una opinión o deseo personal. Una cosa es el deseo que todos tenemos de morir bien y otra bien distinta despenalizar el acto intencionado de supresión de una vida: el homicidio.

EUTANASIA

Embed Size (px)

DESCRIPTION

Descripción y contexto

Citation preview

EUTANASIA

Aspecto político

Jurídico-político: regula las relaciones entre los hombres por la convivencia en paz,

seguridad y libertad y protege los bienes comunes de los que participamos todos y en los

que la vida física de cada hombre es presupuesto necesario para la existencia de otros

bienes. No es un deber del Estado hacer bueno al hombre a través de las leyes civiles,

pero sí proteger a todos los que pueden verse privados del derecho fundamental a la vida

especialmente ante la vulnerabilidad que comporta la enfermedad.

Aspecto moral

Regula los actos individuales. El presunto derecho al suicidio asistido es una

opinión o deseo personal. Una cosa es el deseo que todos tenemos de morir bien y otra

bien distinta despenalizar el acto intencionado de supresión de una vida: el homicidio.

El derecho a la protección de la vida física de cada persona y bajo cualquier

circunstancia de enfermedad o de vejez es el fundamento que nos protege de los criterios

éticos de los demás sobre la propia existencia, de la forma en cómo los otros "me ven", e

incluso de la moralidad particular de aquel que no descubre el respeto debido siempre al

otro, como el médico que practica eutanasias.

Aspecto religioso

La institución que actualmente rechaza y combate a la eutanasia, es la Iglesia

católica, la cual ha realizado una serie de declaraciones al respecto a través de la

Comisión Permanente Episcopal: “Respetamos sinceramente la conciencia de las

personas, santuario en el que cada uno se encuentra con la voz suave y gente del amor

de Dios. No juzgamos el interior de nadie. Comprendemos también que determinados

condicionamientos psicológicos, culturales y sociales pueden llevar a realizar acciones

que contradicen radicalmente la inclinación innata de cada uno a la vida, atenuando o

anulando la responsabilidad subjetiva. Pero no se puede negar la existencia de una

batalla jurídica y publicitaria, con el fin de obtener el reconocimiento del llamado ‘derecho

a la muerte digna’, es esta postura pública la que tenemos que enjuiciar y denunciar como

equivocada en sí misma y peligrosa para la convivencia social. Una cosa son la

conciencia y las decisiones personales y otra lo que se propone como criterio ético legal

para regular las relaciones entre los ciudadano”.

La Iglesia católica considera que el aprecio por toda vida humana fue un progreso

introducido por el cristianismo, lo que supone que se vive en la actualidad es un retroceso.

Un retroceso que hay que colocar en lo que el Papa denomina “cultura de la muerte”.

De esta manera, la Iglesia considera a la eutanasia como aquella actuación cuyo

objeto es causar la muerte a un ser humano para evitarles sufrimientos, bien a petición de

éste, bien por considerar que su vida carece de calidad mínima para que merezca el

calificativo de digna. Esta práctica convertiría a la eutanasia en una forma de homicidio,

pues implica que un hombre da muerte a otro, ya mediante un acto positivo, ya mediante

la omisión de la atención y cuidados debidos.

Aspecto social

El principal deber de un médico y de su equipo con respecto al cuidado de los

pacientes terminales consiste en facilitar toda la gama de cuidados paliativos, que "incluye

aliviar o prevenir el sufrimiento y dar al paciente la asistencia necesaria para proteger o

mejorar su calidad de vida. Los conocimientos y la conciencia del médico se concentran

en cumplir esta obligación... No es ético tomar medidas cuya finalidad sea terminar

deliberadamente con la vida de un paciente, tanto si son a petición del mismo o de sus

familiares como si no". Así lo expusieron todas las órdenes médicas europeas en la

reunión que mantuvimos en septiembre de 2004.

El mejor final para una vida es lograr que el paciente muera con dignidad. Por ello,

en situaciones terminales, lo más importante es respetar los derechos de los pacientes.

En primer lugar, el paciente tiene derecho a su autonomía, incluso a rechazar

procedimientos diagnósticos, tratamientos o alimentación. En segundo lugar, el paciente

tiene derecho a decidir si quiere que el tratamiento médico de apoyo vital se abandone o

no se empiece en función de sus deseos. En definitiva, y por encima de todo, está la

dignidad del paciente y su derecho a que se respete su intimidad. Todo ello, conjugando

los principios de autonomía del paciente, de bienestar del paciente y de justicia social.

Aspecto en enfermería

La solución de los problemas éticos que surgen a diario en el ejercicio de la

enfermería depende, en gran medida, del planteamiento de los mismos. La enfermera no

accede al debate sobre la eutanasia para sumar o restar su opinión al índice estadístico

de eutanasia, sí o no a la eutanasia, sin más; tampoco acepta, por responsabilidad

profesional la ejecución en cada caso de órdenes recibidas. Aquí la enfermera, por

definición, deberá traducir en un sistema de Cuidados y en su correspondiente prestación

los criterios éticos propios o asumidos en equipo.

La enfermera/o suele ser el miembro del equipo de salud que mantiene la relación

más estrecha y continuada con el enfermo, y especialmente si éste está protagonizando

la última etapa de su vida. Este hecho, por sí mismo, convierte al profesional de

Enfermería en pieza clave de la relación asistencial.

Consecuentemente, al ser tan intenso y continuado el tiempo de interactuación

entre los enfermos, cuya muerte es cercana, y el personal de enfermería, es obvio que

surjan una gran variedad de conflictos éticos en dicha relación sanitaria, y que afectan,

por una parte, a la dignidad humana del mismo enfermo y, por otra, al reconocimiento de

la misma por parte de la enfermera/o que está interviniendo.

Las actuaciones de la enfermera/o en el ámbito en que pudiera plantearse la

cuestión eutanásica deben contemplarse siempre dentro del proceso de la toma de

decisiones clínicas, participando como un miembro más del equipo asistencial junto al

mismo enfermo, médicos, familiares, representantes, etc. Difícilmente una enfermera

puede asumir la responsabilidad de unas intervenciones que previamente no haya

decidido o no haya asumido como propias

Es un hecho indiscutible que todos tenemos que morir y enfrentarnos a solas con

este problema. “Morir como personas” significaría agotar totalmente en la última fase de la

vida las posibilidades de desarrollo que a cada uno le ofrece la vida o vivir lo que tenemos

hasta que dure, sin necesidad de apurar más allá. Esto es importante sobre todo en una

sociedad en que la muerte y la preparación para ella se han convertido en tema tabú, y la

mayor parte nos encontramos sin saber qué hacer en esa última experiencia y gran lucha

de la vida.

Por ello, precisamente, el enfermo que vive hoy su proceso de muerte necesita

especialmente de unos Cuidados de Enfermería dignos, a fin de que sus vivencias y

luchas íntimas encuentren un eco humano

Dilema

Cuando el dolor es insoportable, algunos enfermos piensan en la eutanasia. Pero,

¿qué opinan sus familiares, médicos e, incluso, la sociedad en general?

Defendida por algunos, vilipendiada por otros, la eutanasia siembra la polémica

entre diferentes sectores sociales, pues mientras unos la consideran una opción válida

para terminar con la agonía de un enfermo, otros opinan que contradice el juramento

hipocrático de sólo curar.

Adiós al dolor y la agonía

Para los defensores, la práctica constituye una solución para despojar del dolor y

el sufrimiento insoportables a pacientes terminales, muchos de los cuales la solicitan a su

médico mientras aún controlan su mente.

Tal grupo también toma en cuenta el llamado derecho a morir que tienen todas las

personas y que les da la opción de elegir entre seguir viviendo o fallecer para poner fin a

la agonía.

ECOLOGÍA

Aspecto político

Aspecto religioso

Nuestro hogar el planeta tierra, la creación de Dios, es un lugar bello,

extraordinario y fructuoso. En estas últimas décadas los científicos nos han ayudado a

entender algo de la historia de la tierra. Esa historia retrocede 13.7 billones de años al

inicio de la tierra misma. Hasta donde sabemos nuestra tierra es el único lugar donde

encontramos la vida en tanta abundancia. Apropiadamente nuestra tierra se llama “El

Planeta Jardín” del universo. La vida misma se inició como una chispa en los océanos

hace más de 3, 000, 000,000 de años.

Hay formas de vidas simples y más complejas, se encuentran en profusión, en casi

todas partes del mundo. Nosotros los seres humanos somos relativamente recién

llegados a la tierra. Pero, como todas las otras especies vivientes, nosotros dependemos

totalmente del funcionamiento adecuado del planeta, por el aire que respiramos, el agua

que tomamos, la comida que nos sostiene y las múltiples maneras en que la tierra nos

mantiene y a todos los otros seres vivientes. Aunque la tierra parece muy fuerte, sabemos

que puede ser muy frágil. Los pequeños cambios, con el tiempo, pueden causar

consecuencias muy grandes.

Parece que el Papa Benedicto XVI se refería a eso mismo cuando se dirigió al

clero de la diócesis de Belluno-Feltre y Treviso el 24 de junio del 2007. Habló sobre la

necesidad de “estar atentos a la voz de la tierra” Hoy todos nos damos cuenta que los

seres humanos podarían destruir los fundamentos de nuestra existencia, la tierra…….

Tenemos que respetar las leyes internas de la creación de esta tierra, aprender de estas

leyes, y obedecer estas leyes, si queremos sobrevivir.

Por lo tanto, esta obediencia a la voz de la tierra, a la vida, es más importante por

nuestra futura felicidad (bienestar), que por las voces del momento, los deseos del

momento.

Aspecto Moral

En un principio la relación del ser humano con la naturaleza se manifestó como

una lucha por la supervivencia de la especie. Pero hoy nos encontramos en una situación

totalmente distinta, ya que estamos ocasionando daños, muchos de ellos irreparables, en

nuestro entorno. Surgen así los problemas ecológicos, que son todos aquellos que tienen

que ver con la relación adecuada del ser humano con la naturaleza. En la medida en que

los humanos, con nuestra inteligencia y nuestra libertad, podemos acomodarnos de muy

diferentes formas al medio en el que vivimos surgen estos problemas ecológicos. Nuestra

relación con la naturaleza puede ser de respeto o de dominio. Al modificar la naturaleza

puede suceder que nos equivoquemos y que los efectos de nuestra acción resulten

perjudiciales, incluso para nosotros mismos…

El hombre, directa o indirectamente, daña el medio ambiente. Si no se toman

medidas, en un futuro cercano se producirá el cambio climático. De este problema somos

responsables todos.”

“Nuestro planeta es el hogar común a todos, por lo que debemos cuidarlo para que

en un futuro poder seguir disfrutando de él.

“Los seres humanos somos agentes geológicos, aunque muy distintos a los demás

agentes; somos especiales porque somos morales, tenemos conciencia y voluntad.

Aspecto Social

Hoy en día, las ideas que fundamentan un gran número de movimientos sociales,

iniciativas gubernamentales, acciones educativas y actividades industriales son:

La conservación de la naturaleza

La búsqueda de la calidad ambiental

Un planteamiento ecológico de la vida

Estas ideas lentamente han ido conformando, en ciertos sectores, una nueva

cultura, denominada “cultura verde”

Las actividades humanas están cambiando los procesos naturales, y a menudo

alteran la escala y la velocidad de los impactos

Por lo tanto, el manejo ambiental efectivo demanda una comprensión más

cabal de las relaciones entre los humanos y el ambiente

Concepto de desarrollo sustentable

Su definición se originó con el reporte de 1987 en “Nuestro Futuro Común”, por

la Comisión Mundial del Ambiente y Desarrollo (Comisión Bruntland)

La expresión desarrollo sustentable se refiere a un modelo hipotético

ecológico, económico y social en el que se satisfagan mejor las necesidades

materiales de las generaciones presentes y futuras sin traspasar los límites de

la naturaleza