AULOUn entorno de aprendizaje ecofeminista

La Casa Encendida12-17 junio 2018

Un proyecto producido por:

Codiseñado por:

Coordinado por:

MaríaAcaso

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AULOUn entorno de aprendizaje ecofeminista

Un proyecto producido por La Casa Encendida, codiseñado por

[VIC] + María Acaso y coordinado por Pedagogías Invisibles

Intro

Las pedagogías del aula tradicional se configuran en torno a una estructura invisible que, de manera no explícita, opera desde la verticalidad, la centralidad, la voz única y lo masculino, creando un espacio de producción de conocimiento hegemónico para un único tipo de cuerpo.

AULO nace como una investigación, generada desde la creación de contextos alternativos a esta aula patriarcal, que propone una estructura espacial, temporal y de acción colectiva para impulsar el proyecto histórico de los vínculos, los afectos y el arraigo –como propone la antropóloga argentina Rita Segato− frente al proyecto neoliberal de las cosas, a través de una educación artesana que se opone a una educación industrial.

Teniendo en cuenta los infinitos tipos de diversidad, la creación de conocimiento rizomático, los presupuestos ecologistas que trabajan desde la vulnerabilidad de nuestros cuerpos y de los límites del planeta, la visibilización de determinados cuidados, así como otros modos de iluminar, dar color, elegir formas, texturas, materiales y colores, AULO desea promover una investigación no resuelta sobre cómo nos gustaría que fuese un entorno de aprendizaje en el contexto de la revolución transfeminista y sus demandas de bienestar.

AULO se genera a partir de cinco operatividades y tres arquitecturas de transmisión que se materializan en el entorno de aprendizaje que es AULO.

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Operatividades

1. El arraigo y el proyecto histórico de los vínculos

Reconocemos el aula tradicional como un espacio diseñado para consolidar lo que Rita Segato denomina «el proyecto histórico de la productividad o de las cosas», basado en la acumulación de bienes y la consideración de los estudiantes no como ciudadanos y ciudadanas sino como consumidores y consumidoras. Para constituir este proyecto, los contextos educativos han reproducido un espacio que trabaja desde la individualidad para la individualidad, desde la competitividad para el mercado, potenciando las desigualdades de género, raza y clase. AULO pretende visibilizar el malestar neoliberal que el aula tradicional propicia para trabajar sobre la idea del camino del buen vivir. Para que cada ser humano transite este camino, AULO invierte en los vínculos, los afectos y el arraigo como operatividades básicas desde donde construir comunidades vinculares. Si el gozo del consumo produce, como afirma Segato, individuos encapsulados y mansos, y el gozo de lo vincular produce comunidades pensantes, AULO apuesta, definitivamente, por el gozo de lo vincular.

AULO es, por lo tanto, un entorno que cuida y al que se le cuida, un espacio en el que se visibilizan recíprocamente las labores que permiten transitarlo, deshaciendo la estructura de prestigios que ha denigrado y denigra trabajos históricamente femeninos como la limpieza, situándolos en un rango de ocupación inferior en comparación con los trabajos masculinos.

Por definición, AULO pone encima de la mesa esta estructura de prestigios, desautoriza los roles de trabajo impuestos por el patriarcado y plantea que todas y todos debemos cuidar los espacios que habitamos, así como que esos espacios deben cuidarnos. Los dispositivos de limpieza que posibilitan que la vida pueda desarrollarse han de mostrarse y utilizarse de manera comunitaria y sin asignación de géneros.

2. Un lugar de decrecimiento

En un momento de crisis, de choque sistémico entre un modelo económico y un mundo con una realidad finita, AULO es un lugar donde queremos aprender a decrecer; donde, asumiendo la existencia de límites físicos tanto micro como macro y la enorme vulnerabilidad que de alguna manera nos sostiene, se evidencia nuestra naturaleza ecodependiente e interdependiente. Cuando el capitalismo alimenta la ilusión de que se pueden mantener sus necesidades sin abusar de la tierra, AULO pretende ser un espacio de aprendizaje para reflexionar sobre este abuso desde los propios materiales que lo componen, preguntándonos cómo han llegado hasta nosotros, quiénes los han trabajado, por qué tenemos esos materiales, y no otros, y qué ocurrirá cuando AULO termine.

En AULO se pondrá de manifiesto que nadie puede vivir emancipado de su propio cuerpo ni de la naturaleza, se pondrá de manifiesto que solo se puede vivir sin materia cuando delegamos nuestros propios cuidados y los de otras en personas que se ocupan de ellos. ¿Quiénes son esas personas en los espacios de aprendizaje?, ¿quiénes limpian, cocinan, abren y cierran, recogen la ropa perdida, nos atienden cuando nos sentimos indispuestos? Lejos de mantener ocultas las herramientas de limpieza, de ocultar las cocinas o de mantener la irreflexividad sobre nuestra dieta, AULO abordará todas estas cuestiones clave.

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3. Un espacio de seguridad compartida y de diversidad de cuerpos

AULO es un lugar seguro para cualquier tipo de cuerpo, de género, de ser humano. Es un lugar que, lejos de vigilar y castigar, genera espacialidades de confianza plena donde la diversidad se siente a salvo. Desde los lugares invisibilizados por antonomasia, como los baños −donde la preservación de la intimidad facilita todo tipo de abusos− o los patios −donde las masculinidades hegemónicas ocupan los espacios reproduciendo la herencia patriarcal a través del fútbol−, AULO dispone espacios que problematizan las relaciones de poder patriarcales que se producen en los contextos de aprendizaje, visibilizando las jerarquías y las inseguridades, las agresiones y violencias simbólicas que las relaciones de poder hegemónicas imponen en los contextos educativos.

AULO atiende la infinita diversidad de cuerpos que se despliega en el hecho pedagógico, y que el aula tradicional niega al estandarizar la posición de cualquier cuerpo, negando las subjetividades y castigando lo que no entra dentro del canon. Respecto a la ratio, la propuesta de AULO es trabajar con grupos reducidos que permitan la generación de vínculos en la comunidad de aprendizaje. Pero, consciente de lo complicado que resulta llevar esto a cabo, invita a repensar la proporción entre profesores y estudiantes para plantear fórmulas diferentes a las habituales, como, por ejemplo, alentar a las profesoras a trabajar en equipo a la hora de dinamizar grandes grupos.

4. Estar conectadas significa estar vivas

AULO está conectada con el afuera, entendiendo este afuera como parte de la comunidad del adentro, por lo que está preocupada por el aprendizaje y no por la certificación. Silvia Federici, en su obra Calibán y la bruja, nos explica que la ética burguesa, a través del capitalismo, convierte la adquisición en el objetivo final de nuestras vidas, en vez de ser un medio para que podamos vivir. Si prolongamos este proceso hacia lo educativo, vemos que hemos pasado de la certificación como medio a la certificación como objetivo. Combatir este hecho no pasa solo por transformar los espacios, sino por generar un giro educativo radical en el que la certificación vuelva a entenderse como un medio.

5. Operando desde las lógicas del placer y la lentitud como demanda

AULO opera desde las lógicas del placer, recuperando lo que el proyecto de la productividad capitalista ha eliminado de los contextos educativos: el goce por el ritual, la fiesta, el juego, la risa, el baile.

AULO es mágica e impredecible, y obstaculiza los encapsulamientos del conocimiento a través de asignaturas desconectadas de la realidad social.

En AULO se desbaratan todas las lógicas de la producción capitalista, incluidos sus ritmos, porque la lentitud es parte de la demanda feminista cuando nos referimos a los usos del tiempo. Por lo tanto, lo distante y lo cercano se contraen para realizar una práctica en lentitud, como demanda para un aprendizaje en bienestar.

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Arquitecturas de transmisión

1. Composición y mobiliario

Frente al altar sagrado (blanco y masculino) de los espacios tradicionales, AULO propone una estructura de aprendizaje basada en el concepto de rizoma de Deleuze y Guattari, una organización en la que «no hay puntos o posiciones, como ocurre en una estructura, un árbol, una raíz. En un rizoma solo hay líneas».

AULO se genera sobre una composición rizomática de los espacios de aprendizaje que no tiene un centro reconocible y que impide el trabajo desde la voz única, vertical y patriarcal. Similar a la estructura del hogar, del lugar de reunión en las casas alrededor del fuego, la disposición de AULO −sin sillas, sin mesas y sin puertas− pretende volver a ese espacio cambiante, flexible y poderoso a través de la óptica de los cuidados, las voces múltiples y la creación de vínculos alrededor de una hoguera, desde donde poder salir y entrar con libertad.

2. Formas y texturas

Lo cóncavo, lo redondo, lo orgánico, los espacios que dejan fluir la comunicación y los cuerpos estructurarán AULO frente a lo recto, lo cuadrado y lo artificial, herramientas formales que impiden la comunicación, la libertad y la autonomía. AULO es uterina y envolvente, prioriza el bienestar y la generación de lazos con el espacio y con las otras personas que habitan ese espacio con nosotras.

Para establecer el «proyecto de los vínculos» frente al «proyecto de las cosas» necesitamos estructuras arquitectónicas revestidas de texturas que nos alienten tanto a tocarlas como a tocarnos, que amplíen los dispositivos de generación de conocimiento, reducidos al maestro y el libro en el aula tradicional. Necesitamos crear otros dispositivos (blandos, rugosos, suaves y fuertes) que sepamos de dónde proceden, que respeten los límites del planeta y que nos posibiliten sabernos independientes y dependientes a la vez.

3. Iluminación y color

La luz es una herramienta política que ha posibilitado, desde determinados posicionamientos, el proyecto patriarcal hegemónico. La iluminación eléctrica, expiatoria, constante y expeditiva que asola los espacios de aprendizaje puede ser sustituida por otros sistemas donde la luz natural, la penumbra, las sombras y la posibilidad de utilizar diversos sistemas de iluminación en un mismo espacio entren en escena.

Finalmente, frente al monocolor «sufrido», AULO plantea la diversidad de color en el aula como herramienta para trabajar la diversidad de la vida y su complejidad, además del trabajo con el color como metáfora, ampliando el volumen de la performatividad del acto pedagógico a través de simbolismos y ficciones divergentes.

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INFO

1. Proyecto de investigación para experimentar el prototipo:del miércoles 13 al viernes 15 de junio

Queremos comprobar qué es lo que pasa cuando en AULO se programa una actividad relacionada con el aprendizaje. Por esta razón invitamos a comunidades de aprendizaje de cualquier tipo (clases de infantil, primaria, secundaria y universidad, colectivos, asociaciones y familias) a desarrollar una actividad diseñada por ellas.

El horario para llevar a cabo las actividades, por convocatoria, será el siguiente:

Miércoles 13: de 10:30 a 14:00 hJueves 14: de 10:30 a 14:00 hViernes 15: de 10:30 a 14:00 h

Convocatoria abierta hasta el 25 de mayo del 2018. Para más información puedes descargarte las bases de la convocatoria en el link que aparece a continuación:

http://www.pedagogiasinvisibles.es/proyecto/aulo/

AULO sucederá en La Casa Encendida (Madrid) del martes 12 al domingo 17 de

junio del 2018. Este prototipo consta de tres actividades:

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2. Cursos de formación del profesorado: del martes 12 al viernes 15 de junio (de 19:00 a 21:00 h)

Con el deseo de transformar las aulas de una manera real, hemos organizado un curso de formación del profesorado basado en los fundamentos teóricos de #AULO. Para participar en estos cursos, dirígete a la página web de La Casa Encendida.

«Francisco versus Federico. Hackeo de mobiliario escolar»Alejandra AguileraMartes 12 de junio

Taller práctico que propone repensar el mobiliario del aula. En una lógica de reciclaje y DIWO (Do It With Others), Alejandra Aguilera (La Tapicera | El Rastro) propondrá distintas técnicas para repensar el mobiliario de nuestras aulas y espacios pedagógicos a través de la reutilización de telas y espumas, la creatividad y la colaboración de comunidades escolares, transformando las estructuras duras en blandas, tanto física como intelectualmente, rescatando las premisas de Francisco Giner de los Ríos y poniendo en duda el mobiliario tradicional de Federico Giner.

«No tiene que ser así»Marta VerdeMiércoles 13 de junio

El principal criterio a la hora de utilizar el color en el aula tradicional es la «sufridez», la selección de los colores más «sufridos» para asegurar la durabilidad. Al ser el color una herramienta simbólica de gran poder, mediante este taller, y a través de la técnica del «vídeo mapping», Marta Verde nos propondrá distintas posibilidades para transformar los espacios pedagógicos mediante colores que tal vez nunca hayamos pensado que fueran educativos.

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«De las cosas a los vínculos»MetroHuertoJueves 14 de junio

La introducción de la naturaleza en el aula supone la inclusión de un elemento vital necesario para desarrollar los cuidados entre alumnos y maestros que generen comunidades de aprendizaje basadas en los vínculos y en el arraigo. El autorriego de las plantas establece un sistema semiautónomo que combina la necesidad de cuidados con la resiliencia de la planta en períodos vacacionales, permitiendo la viabilidad de la plantación durante todo el curso escolar. Además, el sistema permite combinar el crecimiento vegetal con la introducción de peces transformándolo en acuaponía. De la mano de MetroHuerto, construiremos un sistema de autorriego para generar un nuevo relato natural en el aula y provocar el cuidado de la naturaleza como una rutina incorporada en los espacios de aprendizaje.

«Siguiendo la luz»Berta Gutiérrez y Monika SeyfriedViernes 15 de junio

La tecnología de la luz y su influencia en la percepción humana, así como la luz como elemento político y de aprendizaje, serán los principales conceptos que analizaremos en este taller. A lo largo de la historia se han desarrollado una serie de tecnologías lumínicas que se interrelacionan con nuestro cuerpo y nuestro entorno alterando los estados emocionales, la visión y la percepción espacial. Desde la tecnología más funcionalista hasta el uso de la luz como elemento recreativo en sí mismo, con Berta Gutiérrez y Monika Seyfried trabajaremos lo lumínico desde una perspectiva política que pretende poner en relación los avances tecnológicos y las transformaciones sociales, haciendo hincapié en su influencia en los procesos de enseñanza y aprendizaje.

3. Uso libre del prototipo: del martes 12 al domingo 17 de junio (de martes a viernes, de 14:00 a 18:00 h; sábado y domingo, de 10:00 a 21:00 h)