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Fortaleciendo a los Parlamentos d e l m u n d oe l P a r l a m e n t o e u r o p e o y l a p r o m o c i ó n d e l a d e m o c r a c i a
Oficina para la prOmOción de la demOcracia parlamentaria
Parlamento euroPeo
Prefacio
democracias emergentes, la tarea de construir
y mantener una cultura de derechos humanos
y de hacer que la democracia funcione para los
ciudadanos es de hecho un reto que no tiene
fin y que incumbe ante todo al pueblo de cada
país2».
Así, la democracia y los derechos humanos,
valores comunes que unen a los Estados miem-
bros de la Unión Europea, se han incorporado al
proceso de integración europea desde su inicio.
En las décadas de los setenta y los ochenta,
la perspectiva de pertenecer a la UE fomentó
acciones encaminadas a la democracia en
Grecia, España y Portugal y contribuyó a la in-
sólita reunificación de Alemania. La experiencia
derivada de las sucesivas ampliaciones otorga
a la UE una posición única en el fomento de la
reforma democrática.
Aun así, a pesar de que, desde la década de
los noventa, la Unión Europea ha incluido en to-
dos sus acuerdos de cooperación y asociación
La esencia de la democracia – la voluntad de
las personas debe ser la base de la autoridad
del gobierno – engloba tanto procedimientos
como contenido, instituciones formales y pro-
cesos informales, mayorías y minorías, hombres
y mujeres, gobiernos y sociedad civil, aspectos
políticos y economía, a escala nacional y local.
O, como indicaba Václav Havel, no podemos
percibir y entender la democracia únicamente
como un ente institucional o técnico que se ma-
nifiesta simplemente a través de características
externas, sino que debemos ver también su
espíritu y su contenido1.
La Unión Europea describe la democracia
también como proceso continuo «que se
desarrolla desde dentro y que implica a todos
los sectores de la sociedad y a un conjunto de
instituciones que han de garantizar la participa-
ción, la representación, la capacidad de res-
puesta y la depuración de responsabilidades.
Aunque particularmente difícil y urgente en las
3
1. Václav Havel, Conferencia de Praga sobre cómo crear consenso en las políticas comunitarias relativas al apoyo democrático, 9 de marzo de 2009.
2. Comunicación sobre un programa temático para la promoción de la democracia y los derechos humanos en todo el mundo 2007 COM (2006)23 de 27.1.2006.
4
una cláusula que dispone que las relaciones
entre la UE y los terceros países se basarán en
el respeto de los principios democráticos y los
derechos humanos, existe un consenso cada
vez mayor entre las instituciones comunitarias
que afirma que es hora de elaborar un concepto
mucho más amplio de promoción de la demo-
cracia. Después de todo, la democratización y
la buena gobernanza no son únicamente fines
en sí mismos, sino aspectos vitales para la re-
ducción de la pobreza y el desarrollo sostenible,
como subrayó el Consenso Europeo sobre
Desarrollo de 2005.
En la actualidad, los distintos interlocutores e
instrumentos europeos cuya tarea es promover
la democracia no están suficientemente coor-
dinados, y esto repercute en la eficacia y co-
herencia general de los esfuerzos comunitarios.
Varias presidencias del Consejo de Ministros de
la UE han iniciado conversaciones encamina-
das a lograr un acuerdo interinstitucional para
una política comunitaria de consolidación de
la democracia. El Parlamento Europeo es un
defensor activo de estas iniciativas.
A partir de su propio desarrollo, el Parlamen-
to Europeo ha demostrado que es posible dejar
de ser una mera tertulia para convertirse en un
parlamento auténtico con plenas capacidades
legislativas y de control. Y es esta experiencia,
que ha demostrado su éxito al integrar 27
prácticas y tradiciones parlamentarias distintas,
y el respeto a las distintas culturas e historias,
lo que ha llamado la atención. Al comple-
mentar su adhesión a los principios y valores
fundamentales que forman la base de la Unión
Europea, el Parlamento Europeo también ha
mostrado interés por el fortalecimiento de los
sistemas parlamentarios en todo el mundo. Los
intercambios entre parlamentos favorecen y
fortalecen sus funciones dentro de cada país y
contribuyen a la difusión mundial de los valores
democráticos.
La creación de la Oficina para la Promoción
de la Democracia Parlamentaria (OPPD) en 2008
pone de manifiesto el firme compromiso del
Parlamento Europeo con el apoyo de la demo-
cratización en todo el mundo y su interés en el
fortalecimiento de los parlamentos. Al subrayar
en su discurso inaugural que la Unión Europea
se basa en una unión de valores, el Presidente
Jerzy Buzek sin duda situó el fomento de la
democracia y los derechos humanos entre sus
principales prioridades.
Nos complace presentarles aquí la misión y
el trabajo de la OPPD.
Dick Toornstra
Asesor Especial para la Promoción
de la Democracia
La Oficina para la Promoción de la Democracia Parlamentaria (OPPD) se creó para apoyar el desarrollo parlamentario en las democracias nuevas y emergentes
¿Por qué la Unión Europea fomenta la reforma democrática más allá de sus fronteras?
rrollo basado en los derechos humanos también
ha logrado una mayor aceptación en el marco
de la ayuda al desarrollo. El grado de consenso
internacional existente sobre esta cuestión que-
dó reflejado en la Cumbre del Milenio de 2000,
donde los líderes mundiales decidieron que:
Nuestra percepción de ciertos aspectos de
la democracia puede variar, pero, en general, la
democracia se considera un valor universal cu-
yos principios están consagrados en numerosos
textos y convenios internacionales. Junto con la
libertad de pensamiento, opinión y expresión, la
posibilidad de elegir a los líderes y legisladores
es un derecho fundamental, un deseo común
de todas las personas.
• Un consenso cada vez mayor
Desde el fin de la guerra fría, han surgido
políticas más firmes para fomentar la democra-
cia y los derechos humanos en el mundo. Estas
políticas han adoptado distintas formas a escala
nacional, comunitaria y de las Naciones Unidas:
un compromiso político constructivo, asistencia
técnica, observación de elecciones, contactos
entre los pueblos y acuerdos de condicionali-
dad. Esta estrategia renovada ha coincidido
con la creciente aceptación de que la sobe-
ranía del Estado está condicionada o debería
condicionarse al respeto y a la aplicación de los
derechos humanos y los principios democrá-
ticos como fuente de legitimidad internacional
por parte de los Estados; el desarrollo de la
agenda de la «responsabilidad de proteger» y
la creación de la Corte Penal Internacional son
manifestaciones de este cambio de mentalidad.
A escala política, ello ha ocasionado un com-
promiso más sólido para con la racionalización
de los derechos humanos en todos los ámbitos
políticos. El concepto de un enfoque del desa-
…no escatimaremos esfuerzos para promover la democracia y para fortalecer
el Estado de Derecho, tan bien como respetar los derechos humanos y las libertades fundamentales por todos
internacionalmente reconocidos, incluyendo el derecho al desarrollo.
5
6
• La UE y la democracia: un compromiso de siempre
Los tratados básicos de la Unión Europea
manifiestan un compromiso muy sólido con la
democracia y los derechos humanos. Estudios
recientes indican que también los ciudadanos
europeos comparten ampliamente este com-
promiso.3 El artículo 11 del Tratado de la Unión
Europea afirma que uno de los objetivos de la
Política Exterior y de Seguridad Común es «el
desarrollo y la consolidación de la democracia
y del Estado de Derecho, así como el respeto
de los derechos humanos y de las libertades
fundamentales».
Desde 1995 se viene insertando de manera
sistemática una cláusula relativa a los derechos
humanos y a la democracia en los acuerdos ex-
ternos de la Unión Europea, como los acuerdos
comerciales, de asociación y de cooperación
entre la UE y Estados terceros u organizaciones
regionales. El incumplimiento de esta cláusula
puede tener distintas repercusiones, desde la
limitación o la suspensión de la cooperación
hasta sanciones más graves.
• Una situación que beneficia a todos
El proceso democrático también tiene ven-
tajas más amplias. Aunque podrían cuestionarse
los vínculos entre la democracia y la prosperidad,
la evidencia sugiere que las auténticas democra-
cias poseen mayor capacidad para proteger el
crecimiento económico de los efectos negativos
de la inestabilidad política. Tienden a ser más
receptivas que los regímenes autoritarios y pue-
den gestionar una transición pacífica del poder
sin distorsionar la economía. Al ser más abiertas
y responsables, pueden controlar mejor la ex-
tensión de la corrupción. Es más probable que
respeten el Estado de Derecho, que resuelvan
los conflictos de manera pacífica, que fomenten
la gestión por méritos en lugar del patrocinio y
que tengan más capacidad para gestionar las
consecuencias políticas del cambio. Por último,
las democracias suelen ser Estados estables que
mantienen relaciones estables con sus vecinos
inmediatos y con la comunidad internacional.
La inclusión de la democracia y los proce-
sos democráticos en terceros países también
«La democracia es un proceso que se desarrolla desde dentro y que implica a todos los sectores de la sociedad y a un conjunto de instituciones que han de garantizar la par-ticipación, la representación, la capacidad de respuesta y la depuración de responsabilida-des. Aunque particularmente difícil y urgente en las democracias emergentes, la tarea de
construir y mantener una cultura de derechos humanos y de hacer que la democracia fun-cione para los ciudadanos es de hecho un reto que no tiene fin y que incumbe ante todo al pueblo de cada país.»
Comunicación de la CE sobre un Programa Temá-tico para la Promoción de la Democracia y los Derechos Humanos a escala mundial (2007-2013), COM(2006)23, enero de 2006
3. Comisión Europea, Eurobarómetro Estándar 69, Valores de los europeos, noviembre de 2008, p. 14-21.
ofrece las mejores perspectivas para desarrollar
unas políticas efectivas vinculadas a las cues-
tiones internacionales que también preocupan
a los ciudadanos de la UE. Por ejemplo, los
sistemas democráticos pueden combatir mejor
el crimen transnacional, el tráfico y la inmigra-
ción ilegal, la protección del medio ambiente,
el mantenimiento de un sistema abierto de
comercio internacional y la garantía de un su-
ministro energético sostenible y competitivo.
Asimismo, para hacer realidad su visión como
interlocutor mundial responsable, buscando
la paz, la estabilidad y la prosperidad a través
de un multilateralismo efectivo, la UE también
necesita tener como socios a terceros países
democráticos que piensen como ella, tanto en
forma de países con ingresos bajos y medios
como de países más industrializados.
• Múltiples modelos, valores universalesEl compromiso de la UE con la democracia y
los derechos humanos no significa que la UE «lo
sepa todo»; como ha dicho el Presidente de la
Comisión, mostrar el camino no significa impo-
nerlo.4 Las diversas experiencias y expresiones
de la democracia en la propia UE, por ejemplo,
subrayan la ausencia de un modelo único y, en
cambio, señalan múltiples modelos que reflejan
las tradiciones y las características específicas
de numerosos países. Habiendo dicho esto, la
UE cree firmemente que existen una serie de
necesidades y deseos comunes a todos los
seres humanos: la capacidad de expresar nues-
tras opiniones e influir en el modo como se nos
gobierna, la confianza en el Estado de Derecho
y la administración equitativa de justicia, un
gobierno transparente que no robe a la gente y
libertad para vivir según nuestros deseos. Y no
se trata solo de ideas europeas, son derechos
humanos universales. Y por esa razón la Unión
Europea las apoya en todas partes.
• El Parlamento Europeo: un defensor proactivo de la democraciaDurante las dos últimas décadas, el Parla-
mento Europeo (PE) ha adquirido poder e in-
fluencia, y la defensa de los derechos humanos
y el fomento de la democracia en el mundo han
sido una de sus preocupaciones principales.
La opinión del Parlamento Europeo en materia
de democracia y derechos humanos es omni-
presente y la gente la escucha. Sus resolucio-
nes, informes, misiones en Estados terceros,
delegaciones interparlamentarias y audiencias
especiales, así como el Premio Sájarov, que se
concede anualmente a los activistas de dere-
chos humanos, y su participación activa en las
misiones de observación de elecciones en todo
el mundo son un testimonio de este compro-
miso firme y coherente. También responsabiliza
al Consejo y a la Comisión Europea sobre las
acciones relativas al apoyo de la democracia y
7
4. José Manuel Barroso, Bruselas, 14 de abril de 2008.
8
los derechos humanos a través de debates pú-
blicos en sesión plenaria, comisiones y grupos
de trabajo.
• Mejora de la imagen de asistencia democrática
de la UELa democracia y los derechos humanos son
temas incluidos en el diálogo político desde hace
tiempo. Sin embargo, con el cambio de siglo, la
UE y el PE consideraron que la democratización
y la gobernanza debían ocupar un lugar más
destacado en la política de cooperación al de-
sarrollo de la UE. Esta consideración se basaba
en el reconocimiento de que la gobernanza de-
mocrática era necesaria para la erradicación de
la pobreza, la estabilidad y el desarrollo sosteni-
ble. Se necesitaba un enfoque más exhaustivo,
más allá del apoyo habitual de la administración
pública o la efectividad ejecutiva y la asistencia
electoral limitada que se proporciona única-
mente cuando se acercan las elecciones. Esta
nueva opinión política subrayaba la importancia
del fortalecimiento del Estado de Derecho con
un sector de justicia accesible y eficaz, unos
medios de comunicación llenos de vida, y por
último, pero no por ello menos importante, la
prestación de ayuda a instituciones democráti-
cas como los parlamentos5 y los partidos políti-
cos, como elementos fundamentales del apoyo
integral a la gobernanza democrática.
5. En este documento, se utiliza principalmente el término «parlamento», pero se puede intercambiar con «congreso», «asamblea» o «legislatura».
Apoyo práctico a la democracia: observación de elecciones
La observación electoral ha sido una de las piedras angulares de la acción del Par-lamento Europeo en apoyo a la democra-cia. Desde finales de los años ochenta, el PE ha participado en más de 120 misiones de observación de elecciones en más de 60 países.
El objetivo de este compromiso es ayudar a fortalecer los valores democrá-ticos en terceros países, para facilitar la lucha contra el fraude y la violencia y crear confianza en el proceso electoral entre los diversos candidatos políticos, la sociedad civil y los electores en general. Las misio-nes de observación de elecciones de la UE suelen estar encabezadas por un Miembro del Parlamento Europeo.
El compromiso del Parlamento Europeo en la observación de elecciones constituye un valioso instrumento para la promoción de la democracia; pero no es más que un primer paso hacia la democracia.
«La observación de elecciones (…) se ha de completar con otras actividades y medidas postelectorales debidamente financiadas a fin de promover la demo-cracia, en especial a través del desarrollo de las capacidades para los parlamentos nacionales, los partidos políticos, la fun-ción pública, los agentes no estatales y la sociedad civil.»
Resolución del Parlamento Europeo sobre las misiones de observación electoral: objetivos, prácti-cas y futuros desafíos, mayo de 2008
6. PE, Informe sobre gobernanza en la política de desarrollo en la UE (A5-0219/2004), marzo de 20047. Conclusiones del Consejo de 19 de mayo de 2009
La Comunicación de la Comisión Europea
de 2003 sobre «Gobernanza y desarrollo» des-
tacaba el cambio en el enfoque global de los Es-
tados miembros de la UE sobre la gobernanza,
especialmente más allá del enfoque relativo a
procesos económicos y eficiencia administrati-
va para englobar cuestiones más amplias como
la democracia, la justicia y la participación. El
informe del Parlamento Europeo (2004) sobre la
Comunicación de la Comisión subraya «la im-
portancia de continuar las reformas electorales y
parlamentarias, más allá del establecimiento de
sistemas electorales pluralistas, para garantizar
la actividad política eficaz entre la población»7.
Desde entonces, esta política más exhausti-
va se ha integrado en los distintos instrumentos
de cooperación al desarrollo de la Comisión
Europea. El Instrumento de Cooperación para
el Desarrollo (DCI), el Fondo Europeo de De-
sarrollo (FED), el Instrumento de Estabilidad y
el Instrumento Europeo para la Democracia y
los Derechos Humanos (IEDDH) proporcionan
posibilidades significativas de gobernanza de-
mocrática y apoyo institucional y a la creación
de capacidades. En cuanto a si este cambio
político se ha traducido en medidas apropiadas
sobre el terreno, la perspectiva solo es parcial-
mente positiva en este momento. Es evidente
que todavía queda mucho trabajo por hacer,
o, como indicaba el Consejo de Ministros de la
Unión Europea, «puede exigirse un enfoque más
coherente de la UE para aumentar la eficacia de
la ayuda comunitaria»8.
9
Reflexionando sobre la posición del Parla-
mento Europeo, esta idea expresa una voluntad
cada vez mayor de considerar a los parlamen-
tos como pilares centrales de la democracia
que ocupan un lugar destacado en la agenda
del apoyo a la democracia y de intercambiar
activamente experiencias y buenas prácticas
con otros parlamentos de todo el mundo,
convencidos del valor del apoyo entre homó-
logos. Esta posición común entre parlamentos
también coincide con una demanda creciente
de apoyo del Parlamento Europeo por parte de
los parlamentos nacionales y multinacionales de
• Los Parlamentos: la necesidad de fomentar
la capacidad institucionalEn junio de 2006, la Conferencia de porta-
voces de los parlamentos de la UE concluyó
que «el desarrollo de las instituciones parlamen-
tarias es sinónimo de democratización, y su
buen funcionamiento es requisito fundamental
de la democracia»8. La cooperación entre los
parlamentos a distintos niveles de desarrollo
contribuye a la difusión de los valores democrá-
ticos en todo el mundo, y es, pues, un medio
fundamental de fomento de la democracia.
8. Conferencia de los portavoces de los Parlamentos de la UE, Copenhague, 30 de junio de 2006
10
«La democracia está basada en el dere-cho de todas las personas a participar en la gestión de los asuntos públicos; por ello requiere la existencia de instituciones repre-sentativas en todos los niveles y en particular en el Parlamento, representativo de todos los
componentes de la sociedad y dotado de poderes y medios para expresar la voluntad del pueblo legislando y controlando la acción gubernamental»
Declaración Universal sobre la Democracia adoptada por el Consejo Interparlamentario, septiembre de 1997
La OPPD pretende establecer un diálogo y una asociación continuos con las democracias nuevas y emergentes (DNE) de todo el mundo y apoyar su participación en la comunidad democrática.
¿Pero por qué necesitan ayuda los parlamentos o asambleas?
las democracias nuevas y emergentes (DNE) de
todo el mundo.
Afortunadamente, en la actualidad está
surgiendo un consenso entre las instituciones
comunitarias, los donantes y los países en
desarrollo que consideran la gobernanza de-
mocrática como un componente esencial de la
buena gobernanza y que prevén una atención
mayor al fortalecimiento y al desarrollo de insti-
tuciones parlamentarias.
• Apoyo parlamentario a las DNE: necesidades y pedidos sin cumplir
Desde la década de los noventa, un número
cada vez mayor de países a escala internacional
han sufrido cambios estructurales fundamentales y
han realizado la transición hacia democracias mul-
tipartidarias. Aunque, con frecuencia, estos países
se benefician de una asistencia electoral conside-
rable y de la observación de elecciones en la fase
inicial de transición, en la mayoría de casos, las
instituciones de representación constituidas a raíz
de estas elecciones no reciben la misma atención.
Así, en muchas de estas democracias nuevas y
emergentes, los parlamentos siguen siendo frágiles
y a menudo carecen de los recursos apropiados.
Además, la agenda legislativa de estas DNE suele
ser muy amplia, y con frecuencia el Parlamento no
cuenta con la experiencia necesaria, el personal
formado, la información apropiada y el material
para servir a sus miembros de manera eficaz. En
los países que salen de conflictos violentos, los
parlamentos de representación poseen una función
esencial adicional a la hora de aunar las distintas
opiniones e intereses de una sociedad fragmen-
tada, creando una cultura del diálogo y contribu-
yendo a la restauración de la estabilidad. A pesar
de esto, los recursos y programas internacionales
de desarrollo se han centrado principalmente en
los interlocutores ejecutivos y de la sociedad civil,
ignorando ampliamente, y por tanto, socavando, el
papel y la autoridad del parlamento.
La política comunitaria de ayuda a la democra-
cia ha evolucionado. Pero esta evolución todavía
no se ha traducido en medidas prácticas. Aunque
la UE dedica una gran atención y ofrece ayuda a las
elecciones y los sistemas electorales, es evidente
que el desarrollo democrático sostenible no termina
con unas elecciones libres y justas. De hecho, las
elecciones son el principio, un paso crítico, aunque
preliminar, en el camino hacia la madurez democrá-
tica. Este camino requiere esfuerzos exhaustivos a
largo plazo para crear y consolidar un parlamento
representativo que funcione correctamente y capaz
de garantizar una aplicación sólida de sus poderes
legislativos y de control. La transparencia, la res-
ponsabilidad, el respeto mutuo y un establecimien-
to constitucional que permita controles y equilibrios
son elementos indispensables de este proceso.
Por otra parte, los Parlamentos frágiles e ineficaces
pueden tener repercusiones preocupantes para la
confianza a largo plazo del público en la democra-
cia y la gobernanza representativa.
11
• La función de control del Parlamento Europeo
El PE defiende la integración sistemática de
los parlamentos (y los partidos políticos) en los
esfuerzos comunitarios por apoyar la democra-
cia, por ejemplo, garantizando que los distintos
instrumentos de la Comunidad Europea inclu-
yan el apoyo a las instituciones democráticas
o utilizando su derecho a controlar las medidas
de la Comisión Europea en el terreno.
A la luz del compromiso de la UE de ajus-
tar mejor su cooperación al desarrollo con las
estrategias de desarrollo de los países socios
y de incrementar el uso del apoyo sectorial y
presupuestario, el Parlamento Europeo ha reco-
mendado reforzar el papel de las instituciones
democráticas nacionales, como los parlamen-
tos, directamente implicados en los procesos
de toma de decisiones pertinentes en virtud de
la legislación nacional y responsables del control
de los presupuestos estatales. El PE considera
que la prestación de una ayuda presupuestaria
directa debe ir acompañada de esfuerzos des-
tinados a mejorar la gestión financiera pública,
no solo a través del fomento de la capacidad
del ejecutivo, sino también mediante el fortale-
cimiento de otras instituciones como tribunales
de cuentas y parlamentos.
El mandato del PE incluye el control del
presupuesto comunitario; en consecuencia, co-
rresponde al interés y al mandato del PE com-
probar el fortalecimiento de los parlamentos de
las DNE en relación con su propia capacidad de
control sobre el apoyo presupuestario directo
de la UE. Las alianzas con parlamentos sólidos
de las DNE son esenciales para que el control
del PE sea efectivo; a largo plazo, ello contribui-
rá a lograr una mejor cooperación al desarrollo
y un desarrollo «tout court» en los países socios
de la UE.
• Control parlamentario e instituciones internacionales
La unión de fuerzas es algo positivo, y no solo
para la agenda de cooperación al desarrollo. En
un mundo interdependiente que se caracteriza
por fenómenos globales como el cambio climá-
tico, las crisis económicas y la lucha contra el
terrorismo, gran parte de la toma de decisiones
se produce fuera del eje tradicional nacional
ejecutivo-legislativo. El G-20, las Conferencias
de las Naciones Unidas y la OMC son tan solo
algunas de las múltiples esferas en las que los
gobiernos toman decisiones amplias y en las
que la influencia de los parlamentos sigue sien-
do demasiado vaga y poco sistemática.
Como afirmaba el anterior Presidente del
Parlamento Europeo, el señor Pöttering, todas
las medidas de cooperación política externa
deben ser automáticamente objeto de control
parlamentario. También subrayaba que los
pasos encaminados a lograr una cooperación
suprarregional más sólida solo serán posibles
12
si se basan en decisiones parlamentarias
democráticas9. Para lograr este objetivo, ne-
cesitamos fomentar la cooperación parlamen-
taria basada en la igualdad y el respeto de las
distintas culturas. Todos los parlamentos deben
contar con capacidad suficiente para cumplir
con sus atribuciones y para actuar de manera
independiente frente a sus poderes ejecutivos.
El Parlamento Europeo quiere contribuir a con-
seguir estos objetivos para crear organismos
parlamentarios sólidos en todo el mundo.
dirigido, y se han dirigido desde entonces, al
Parlamento Europeo para solicitar ayuda y apo-
yo tangible en la creación de parlamentos efec-
tivos. El carácter único del PE es reconocido
ampliamente, y su experiencia en transformarse
de un mero órgano consultivo a un parlamento
de pleno derecho, elegido democráticamente
y con un historial demostrado de éxitos en la
gestión de distintas culturas y tradiciones par-
lamentarias, es considerada por muchas DNE
como un modelo a seguir.
En 2007,10 el Parlamento Europeo creó la
Oficina para la Promoción de la Democracia
Parlamentaria (OPPD) para contribuir activa-
mente al fortalecimiento de los parlamentos de
todo el mundo, compartiendo experiencias con
los parlamentos de las NDE e intercambiando
buenas prácticas y experiencias. La OPPD
se creó en el seno de la Dirección General de
Políticas Externas de la Secretaría General del
Parlamento Europeo.
Muchos parlamentos de las DNE se habían
La Oficina para la Promoción de la Democracia Parlamentaria coordina todas las actividades de fomento de la democracia en el Parlamento Europeo. ¿Pero qué hace exactamente la OPPD? ¿Cómo puede ayudar activamente a los procesos de democratización?
La OPPD: un instrumento de apoyo eficaz
9. Cumbre Preliminar Parlamentaria UE-África, Lisboa, 7 de diciembre de 2007.10. Decisión de la Mesa del PE, 18 de junio de 2007.
13
La tendencia hacia la integración regional
en todo el mundo, desde África (Unión Afri-
cana, ECOWAS, etc.) hasta América Latina
(MERCOSUR, etc.) y la creación de parlamen-
tos regionales asociados, se acoge con gran
satisfacción en el Parlamento Europeo, que
puede ofrecer un valioso apoyo gracias a su
propia experiencia única en este ámbito. El
apoyo a los parlamentos regionales constituye
una de las prioridades de la OPPD.
La OPPD actúa a petición de los parla-
mentos de las DNE y se orienta a las necesi-
dades identificadas en cada parlamento. Las
iniciativas de apoyo también pueden surgir
de resoluciones adoptadas por el propio Par-
lamento Europeo, la Asamblea Parlamentaria
Paritaria ACP-UE u otras asambleas transna-
cionales como EUROMED.
La OPPD presta su asistencia en el esta-blecimiento y la reforma de los parlamentos y busca fortalecer su capacidad de llevar a cabo las funciones principales de legislación, control y representación.
Y lo consigue mediante:• Ayuda impulsada por la demanda de
creación de capacidad institucional.•Relaciones duraderas con los parlamen-
tos de las DNE basadas en la igualdad y la gestión conjunta de programas de ayuda adaptados.
•Ayuda entre homólogos que incluye formación, asesoramiento estratégico e intercambio de experiencias.
•Coordinación con otras instituciones co-munitarias y agentes internacionales.
• Capacidadparaofrecerunseguimientodelas misiones de observación electoral.
Puede ofrecer asistencia técnica específica y de creación de capacidad para:• laconstitucióndeórganosparlamentarios;• larealizacióndereformasadministrativase
institucionales;• lainiciacióndecooperaciónlegislativainter-
parlamentaria y el intercambio de buenas prácticas;
• eldesarrollodeestrategiasdeinformaciónycomunicación (TIC).
14
¿Cómo puede ser útil la OPPD?
El trabajo de la OPPD1. Programas de cooperación a largo plazo
El PE cree firmemente en el valor de la
cooperación a largo plazo con sus homólogos
de las democracias nuevas y emergentes. Tras
la solicitud de cooperación y apoyo realizada
por un portavoz o un secretario general de un
parlamento de una DNE, y basándose en las
directrices políticas establecidas por los líderes
del Parlamento Europeo, la OPPD realiza una
misión de evaluación de necesidades en el país
asociado. Dicha misión identifica los posibles
modos de cooperación celebrando debates
con todas las partes interesadas, principalmen-
te parlamentarios y personal parlamentario,
pero también con otros interlocutores activos
en el apoyo del parlamento y con representan-
tes de la sociedad civil.
Las recomendaciones del informe de eva-
luación de necesidades se comparten con el
Parlamento de la DNE para establecer un orden
de prioridades, y posteriormente un proceso
de actividades circular a largo plazo, iniciando
la retroalimentación. El programa de coopera-
ción a largo plazo puede incluir los siguientes
elementos:
• ColocacióndepersonalenelPEatravésdel
Programa de Becas para la Democracia;
• Misiones de estudio objetivas para parla-
mentarios y/o personal del PE;
Hermanamiento del PE con el Parlamento Panafricano (PAP)
Una de las principales prioridades de la OPPD es trabajar con los parlamen-tos regionales. El PE ha sido un aliado próximo y un socio permanente del Parla-mento Panafricano desde su creación en marzo de 2004. Acompaña al Parlamento Panafricano en el establecimiento de su estrategia y prioridades para su desarrollo y le asiste en distintos esfuerzos, desde la creación de su infraestructura, la selección de TIC o el establecimiento de mecanis-mos de interpretación y traducción, hasta el desarrollo de sistemas financieros y de auditoría, así como en el intercambio de mejores prácticas.
Esto se hace a través de varias misio-nes de estudio y servicios de asistencia técnica, tanto en el PE como en Midrand (Sudáfrica), donde el Parlamento Panafri-cano tiene su sede, a través de una serie de becas para su personal básico, y de la participación activa en debates estraté-gicos sobre el desarrollo del Parlamento Panafricano. La estrecha coordinación de actividades por parte de otros donantes se garantiza a través de conferencias bianuales.
15
parlamento socio, como pueden ser la reforma
de las normas y procedimientos administrativos,
el trabajo legislativo y de comité, el refuerzo de
las actividades de comunicación de los parla-
mentos o la recopilación de experiencia sobre
soluciones de TIC para su uso por parte de los
parlamentos. Los becarios suelen ser acogidos
por el servicio del PE correspondiente al servicio
parlamentario del país en cuestión. El Progra-
ma de Becas para la Democracia permite que
los becarios obtengan experiencia práctica en
el funcionamiento del PE como miembros del
servicio de acogida del PE. El Parlamento Eu-
ropeo cubre los gastos de viaje, alojamiento y
subsistencia que conlleva la participación.
3. Visitas de estudio de los parlamentos de las DNE
Además de formas más exhaustivas de co-
operación, la OPPD acoge visitas temáticas de
estudio concretas para parlamentos de las DNE.
Estas visitas tienen como objetivo profundizar en
el conocimiento de los grupos objetivo sobre el
PE, y en especial, sobre el tema concreto que
aborda la misión. También ofrecen una oportu-
nidad para evaluar posibilidades e intereses en
una mayor cooperación. Las visitas pueden servir
como primer paso para crear un programa de
apoyo a largo plazo y también pueden formar
parte de programas de desarrollo parlamentario
más amplios de socios del PE como la Comisión
Europea y el PNUD.
• OrganizacióndeseminariosenelPEoenel
país socio;
• Suministrodeasistenciatécnicaatravésdel
envío de personal o diputados al PE para
que trabajen con sus homólogos parlamen-
tarios en las DNE.
En caso necesario, la OPPD colaborará es-
trechamente con las Delegaciones de la UE en
los países implicados en proyectos de asistencia
parlamentaria de índole financiera y técnica.
2. El Programa de Becas para la Democracia
El objetivo del Programa de Becas para la
Democracia es apoyar el desarrollo parlamen-
tario en las democracias nuevas y emergentes
fortaleciendo la capacidad de los parlamentos
para aplicar las principales funciones legislati-
vas, de control y representación. El Programa
está dirigido a funcionarios de rango medio,
y – en menor medida – a los diputados de
los parlamentos de las DNE. Las becas, que
incluyen formación y prácticas laborales en el
Parlamento Europeo, se basan en la iniciativa
y en las necesidades del parlamento de la
DNE en cuestión. Dichas becas ofrecen una
oportunidad de trabajar en equipo, durante un
período máximo de tres meses, con colegas de
varios departamentos del Parlamento Europeo
para buscar soluciones para las necesidades
de creación de capacidad identificadas en cada
16
4. Creación de asociaciones de desarrollo parlamentario
y coordinación
La OPPD colabora con los parlamentos
nacionales de la UE, los parlamentos (sub)
regionales, las asociaciones parlamentarias y
las organizaciones internacionales en el ámbi-
to del desarrollo parlamentario. El objetivo es
Ejemplos de visitas de estudio al PE
• VisitadediputadosypersonaldelParla-mento de Chile para estudiar el trabajo de las comisiones y los sistemas de apoyo a los Diputados del Parlamento Europeo.
• Visita de los líderes de los grupos po-líticos del Parlamento de Kirguistán, centrada en el trabajo de los grupos po-líticos del PE y la administración política.
•Misióndelosmiembrosdelparlamentode ECOWAS para analizar las elecciones directas al PE.
• Visita de trabajo del personal del Par-lamento de Georgia para familiarizarse con el trabajo legislativo del PE.
•Misióndeestudiopara losparlamenta-rios del Iraq, centrada en las opciones de control parlamentario.
• VisitadeloslíderesdelaAsambleaLe-gislativa de África Oriental (EALA) para familiarizarse con la gestión política del PE y la exploración de modos de coope-ración.
crear una comunidad de profesionales parla-
mentarios. También favorece el intercambio de
experiencias y mejores prácticas de métodos y
aplicaciones parlamentarias. La OPPD trabaja
en asociación con el PNUD, el Instituto del Ban-
co Mundial, el Instituto Nacional Democrático,
el Instituto Internacional para la Democracia y
la Asistencia Electoral y la Comisión Europea
para lanzar un centro de conocimiento global
para el desarrollo parlamentario. Este centro de
conocimiento, denominado Agora, tiene como
objetivo funcionar como una ventanilla única
para toda la información pertinente sobre de-
sarrollo parlamentario y favorecer el intercambio
y el debate de distintos aspectos del trabajo
parlamentario.
Cuando la OPPD recibe una petición de
apoyo, se relaciona estrechamente con el resto
de interlocutores que participan en el apoyo del
parlamento socio para establecer la coopera-
ción y la coordinación. Con ello debería evitarse
la duplicación y garantizar el mejor uso posible
de medios limitados en este ámbito de trabajo.
5. Fomento de la investigación y apoyo de una agenda comunitaria sólida de
promoción de la democracia
Hasta la fecha, la investigación y el estudio
de prácticas parlamentarias no ha recibido la
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Como interlocutor global que incluye 27
democracias y representa aproximadamente a
500 millones de personas, y como principal do-
nante del mundo, la UE tiene que desempeñar
un papel crucial en el apoyo a los esfuerzos de
creación de democracia en Estados terceros.
Será necesario un marco político más coheren-
te para la creación de democracia que tenga
en cuenta todas las funciones principales de los
parlamentos. O, en palabras de Jerzy Buzek,
Presidente del Parlamento Europeo:
suficiente atención por parte de los académi-
cos ni de los profesionales parlamentarios. En
consecuencia, la OPPD pretende fomentar esta
investigación, ya sea a nivel interno o subcon-
tratándola a expertos.
En la medida de lo posible, la investigación
se realiza en asociación con otros profesionales
clave del desarrollo parlamentario. Por ejemplo,
la OPPD se ha unido a otros socios a la hora
de desarrollar marcos de referencia o normas
para parlamentos democráticos con el objetivo
de estimular herramientas de autoevaluación
parlamentaria eficaces para identificar desafíos
y necesidades esenciales.
Por último, la OPPD se compromete a
ayudar al PE en sus esfuerzos por lograr una
posición más destacada del fomento de la de-
mocracia en la agenda comunitaria y por desa-
rrollar una política exhaustiva de la democracia
a escala de la UE.
Sin unas instituciones de representación sólidas, con poder y capaces de expresar la voluntad
de las personas legislando y supervisando la acción del gobierno,
la democracia permanecerá incompleta, frágil y frustrante.
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S I D E S E A M Á S I N F O R M A C I ó N , P U E D E P O N E R S E E N C O N TA C T O C O N :
OPPD – Oficina para la Promociónde la Democracia Par lamentar ia
DG EXPO – Parlamento Europeo
Rue Wiertz 60 (Edificio Willy Brandt 04M061) B-1047 Bruselas, BéLGICA
Correo electrónico [email protected]
tel. +32 (0)2 284 42 29
fax +32 (0)2 284 90 05
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