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  • Captulo 3. FUNDAMENTOS CIENTFICOS DE LA PSICOLOGA

    Lo que conocemos como ciencia moderna se desarroll a lo largo del siglo XVII, en un

    momento en el que los dualismos y contradicciones de la Escolstica, que trataba de conciliar el

    conflicto entre razn (ciencia) y revelacin (fe) propio del pensamiento cristiano-, empiezan a

    superarse a travs de una confianza cada vez mayor en el conocimiento a travs de nuestros

    sentidos y capacidad de razonamiento. Esa dignificacin de nuestra capacidad de conocer se fue

    afianzando con los enormes avances que tuvieron lugar en campos como la astronoma

    (Coprnico, Galileo, Christiann Huygens), la qumica (Boyle) o la fsica (Newton). La idea de

    que el universo es uno, y uno es tambin el conocimiento que podemos tener de l estaba

    estrechamente ligada a una concepcin matemtica del conocimiento (matemtica universal).

    Sobre estas bases se desarroll precisamente el racionalismo clsico (desde Descartes hasta

    Leibniz), que propona una lectura del mundo en clave matemtica (Cassirer, 1965).

    Esta concepcin matemtica del mundo no estaba en modo alguno limitada al mundo fsico,

    sino que se extenda tambin al mundo espiritual (ambos haban pasado a formar parte de un

    mismo universo). En este sentido, con la excepcin de Descartes, cuyo dualismo planteaba una

    concepcin del alma como sustancia inextensa, incuantificable e indivisible, el racionalismo

    clsico apostaba por un conocimiento en clave matemtica del alma (como veamos en Leibniz,

    retomado por Herbart). Lo mismo ocurra con campos como la tica (que Spinoza entender en

    trminos geomtricos) o el moderno derecho natural1.

    A esta concepcin del mundo, matemtica y mecanicista, que caracteriza en lneas generales

    toda la filosofa de la Ilustracin a lo largo del siglo XVIII, vendra a oponerse en los ltimos

    aos del siglo precisamente el movimiento romntico, al que nos referamos en el captulo

    anterior. El romanticismo, impulsado por figuras como Herder, dar lugar a una nueva

    concepcin del conocimiento, crtico con el panmatematicismo y el mecanicismo, que pondr de

    relieve ms bien una concepcin vitalista, organicista, de la realidad. Este organicismo ser el

    rasgo fundamental de toda una filosofa de la naturaleza, que influir entre otras cosas en la

    imagen evolutiva de la naturaleza (germen del propio evolucionismo darwiniano, como

    veremos). Pero su influencia ser todava mayor en el estudio del mundo espiritual, de los

    fenmenos socio-culturales, como el lenguaje, la poesa, el mito y la historia, que frente al

    objeto fsico de las ciencias naturales y exactas, pasarn a ser vistos como objetos privilegiados

    1 Con la excepcin de Descartes, que estableci la existencia de dos sustancias, a saber, la materia y el alma o la mente (inextensa, indivisible e incuantificable), el racionalismo, como veamos en el caso de Spinoza y Leibniz, extiende la concepcin matemtica al mundo espritu. As, Spinoza plantear por ejemplo una nueva forma de tica orientada hacia la geometra; y el moderno Derecho Natural establecer una analoga entre la ciencia jurdica y la ciencia matemtica. (Cassirer, 1965).

  • de conocimiento (Cassirer, 1965). El romanticismo sigue a este respecto los planteamientos de

    Giambattista Vico (1668-1744), para quien el conocimiento de las creaciones humanas (mito,

    lenguaje, religin, poesa) aparece como la va fundamental para llegar al auto-conocimiento,

    objetivo ltimo de todo saber2.

    Se desarrolla entonces toda una filosofa de la historia y de la cultura, que marcar la

    proliferacin de ciencias como la filologa, la lingstica o la historia a lo largo del siglo XIX,

    que hoy conocemos como ciencias humanas o sociales (llamadas entonces ciencias del

    espritu). Estas lneas de investigacin al menos en sus inicios estarn fuertemente marcadas

    por el inters en estudiar otras culturas, poniendo en valor la superioridad de formas pasadas

    (como el mundo griego), as como haciendo valer la existencia de particularidades y

    diferencias frente a la universalidad racional y el cosmopolitismo francs de la poca.

    Paralelamente a estos desarrollos disciplinares, por los que apostar firmemente la universidad

    alemana de los primeros aos del siglo XIX, en Francia, en un contexto de fuerte agitacin

    social (los aos que siguieron a la revolucin), empezaran a aparecer otras tentativas en torno a

    una ciencia de lo social. Marcadas por el ideal ilustrado de progreso, estas tentativas surgen al

    servicio de un ideal de reorganizacin de la sociedad segn criterios racionales y cientficos.

    Esta misma idea de sociedad, en todo caso, ms que darse en trminos matemticos, se vera

    atravesada la misma concepcin organicista que haba impulsado el vitalismo romntico3. En

    esa lgica, de hecho, estas tentativas se plantearn como una fisiologa social, marcando as

    su relacin de continuidad (material, objetivo) con las ciencias naturales.

    El siglo XIX ve as conformarse nuevas lneas disciplinares: junto a la filosofa, que logra por

    fin un estatuto igual, si no superior, al de las antiguas facultades de derecho, medicina y teologa

    (a la ltima de las cuales haba estado sometida durante siglos), cobrarn ahora entidad nuevas

    disciplinas como las ciencias histricas, la filologa, la qumica o la fisiologa. A ello contribuir

    la progresiva institucionalizacin de estos saberes en la universidad, que hasta el siglo XVIII se

    haba mantenido, por lo general, anclada a la enseanza medieval4. Ser sobre todo la reforma

    2 Giambattista Vico (1668-1744), en su Scienza Nuova, de 1744, plantea ya que lo nico que podemos conocer plenamente es aquello que la humanidad misma ha creado. Por eso, el conocimiento de la naturaleza es un conocimiento inferior al que podemos tener de la sociedad y de la historia - entendida sta como el proceso por el que el ser humano se crea a s mismo. Vico anticipa una distincin que se hara ms clara con Herder y despus, en el XIX, en los historiadores alemanes, entre las Naturwissenschaften (ciencias de la naturaleza) y las Geisteswissenschaften (ciencias del espritu). 3 El individualismo que vena configurndose desde el Renacimiento y que a lo largo del siglo XVII y XVII sienta las bases para una idea de sociedad entendida como asociacin de individuos aislados, como veremos, entrar en crisis, abriendo el paso una visin ms orgnica de la sociedad y a una reconsideracin del ser humano como ser social. 4 Desde su creacin en la Alta Edad Media, se trataba de la transmisin de conocimientos puestos al servicio de los poderes laicos y eclesisticos del momento, que requeran de profesionales para la buena marcha y administracin de negocios, transmisiones patrimoniales y transacciones. La ciencia reina, en todo caso, era la Teologa. Esta era la ciencia sagrada frente a las artes liberales, formadas por las

  • universitaria que lleva a cabo el Estado prusiano, en los primeros aos del siglo XIX, la que

    contribuir a ello5.

    El modelo, diseado en buena medida a partir de las ideas de Wilhelm von Humboldt (1769-

    1859), que l mismo contribuir a poner a marcha en Berln (con el apoyo tambin de su

    hermano, el naturalista Alexander von Humboldt), aspiraba a vincular la reflexin filosfica-

    humanista con la ciencia. Concebida al servicio de un proyecto de Estado, esta universidad

    estaba pensada expresamente contra la recin implantada reforma napolenica, un sistema

    tecnocrtico pensado para el beneficio de las elites sociales y la transformacin de las

    universidades en escuelas de oficios. Frente a ese modelo, el Estado prusiano apostaba por

    formar personas cultivadas, que no fueran solo serviles funcionarios o profesionales, y que

    pudieran contribuir a la vez a la formacin de las nuevas generaciones, desde la primaria y el

    Gymnasium (instituto) hasta la enseanza universitaria6.

    Las nuevas disciplinas por las que apuesta este modelo universitario, que van desde las ciencias

    exactas o naturales hasta las ciencias humanas y sociales (sin que exista an una lnea divisoria

    neta entre ellas), irn reclamando progresivamente su autonoma, marcando sus distancias no

    tanto con la filosofa (de la que, en general, se consideran parte) sino con una filosofa de corte

    puramente especulativo, apostando por un trabajo emprico y objetivo. Ser en ese marco

    donde, en el ltimo tercio del siglo XIX, tenga lugar la consolidacin institucional de la

    psicologa. Hasta entonces, las cuestiones psicolgicas no formaban an una lnea de

    investigacin autnoma, sino se podan encontrar, como veamos en el captulo anterior, tanto

    en manos de la filosofa (con Herbart o Lotze), como de la fisiologa (Weber, Fechner), o la

    filologa y la lingstica (Lazarus y Steinthal). En este ltimo caso, veremos una importante

    lnea de continuidad entre la va, inaugurada por Kant, de una psicologa emprica como ncleo

    de un proyecto antropolgico, y la psicologa de los pueblos. Todas estas tentativas para el disciplinas en torno a la elocuencia, el llamado trivium (gramtica, retrica, lgica), y en torno a la matemtica, el llamado quadrivium (aritmtica, msica, astronoma, geometra). La filosofa y dems saberes eran siervas de la teologa. La difusin del conocimiento ms innovador, tanto en la filosofa como en las humanidades clsicas y las ciencias, desarrollado sobre todo gracias a la supervivencia de los saberes aristotlicos durante la Edad Media y a las traducciones que se hicieron, se hizo en buena medida al margen de las universidades. Para ello, a lo largo del siglo XVII y XVIII, se crearan de sociedades eruditas o cientficas (academias) y escuelas superiores especializadas. 5 Aunque haba habido otras reformas universitarias con anterioridad, ser este modelo, orientado tanto a la difusin como a la creacin (innovacin) de conocimientos, el que supondr una ruptura definitiva con respecto a la universidad medieval. Los nuevos acadmicos, que no slo eran docentes sino investigadores originales, se dedicaban a formar a nuevas generaciones de acadmicos, promoviendo un desarrollo exponencial de estas disciplinas a la vez que seguan difundiendo su trabajo a un pblico ms general, como parte de una educacin nacional. 6 Este modelo de universidad, y la apuesta por la autonoma disciplinar de la psicologa, no tardara en convertirse en un ejemplo a seguir para muchos otros pases. Los estudiantes de todo el mundo iran a pasar una temporada a Alemania para adquirir experiencia en investigacin. Como seala Smith (1997), as lo hicieron por ejemplo los rusos a mediados de siglo, que al volver a su pas occidentalizaron sus propias universidades; los franceses, especialmente tras su derrota en la guerra franco-prusiana en 1870; e incluso los rectores de las jvenes universidades norteamericanas.

  • estudio emprico de la mente, ya sea en una va ms matemtica, fisiolgica o cultural,

    encontrarn una plataforma de despegue sin igual en la figura de Wundt.

    Veamos a continuacin con un poco ms de detalle en qu consisten todos estos desarrollos

    disciplinares, que condicionarn, de una u otra forma, las bases para el desarrollo del proyecto

    wundtiano, pero tambin de otros desarrollos alternativos contemporneos menos hegemnicos.

    En un primer apartado, no del todo ajeno a las ciencias naturales, o en todo caso, a la

    perspectiva organicista y evolutiva de la realidad que ponen de relieve, desarrollaremos, por un

    lado, el papel de la filologa como matriz articuladora a principios del siglo XIX, de las ciencias

    humanas en vas de desarrollo; y por otro, el de una incipiente sociologa o ciencia de lo social,

    tanto en la figura de Comte como de Marx. En ambos casos, como veremos, se pondr de

    manifiesto una dimensin social o colectiva de la conciencia (la naturaleza social del ser

    humano, en definitiva), que no ser ajena a los proyectos psicolgicos en desarrollo. En un

    segundo apartado veremos cules fueron las principales corrientes de las ciencias naturales que

    formaron parte del caldo de cultivo en que naci la psicologa. Dedicaremos la mayor parte del

    espacio al darwinismo, dada su importancia histrica, cientfica y cultural. Lo dems lo

    presentaremos de una forma casi telegrfica, como mero contexto para ubicar mejor el

    darwinismo.

    3.1. CIENCIAS HUMANAS Y SOCIALES: FILOLOGA, ANTROPOLOGA,

    SOCIOLOGA

    Las profundas transformaciones que tienen lugar a lo largo de los siglos XVII y XVIII en el

    pensamiento y la consideracin de la naturaleza humana encuentran su mxima expresin en la

    Revolucin Francesa, que con su Declaracin de los Derechos Humanos certifica el triunfo del

    individuo, como ciudadano de la Repblica, frente a la idea de sbdito de la monarqua, tal

    como vena dibujndose desde el Renacimiento. Como expone Dumont (1985), si ese

    progresivo aislamiento del individuo, como una unidad en s mismo, haba conllevado a lo largo

    del siglo XVIII el desarrollo de teoras de carcter jurdico, poltico y econmico, basadas en la

    idea de un contrato social (Hobbes, Locke, Rousseau), en los ltimos aos del XVIII y

    principios del XIX, aos de fuerte agitacin social, se buscar la reintegracin del individuo en

    la sociedad (y en el Estado).

    La idea de sociedad (societas) que se impone a lo largo del siglo XVII y XVIII, como

    asociacin y construccin artificial de individuos originalmente aislados, empieza a entrar en

    crisis, abriendo espacio para una reconsideracin del ser humano como ser social. Ms all del

    hecho evidente de que cada individuo es uno, con su propia conciencia individual, se trataba de

  • poner de relieve las races sociales del ser humano y el carcter social de eso que llamamos

    conciencia. Esta inquietud, que se haba empezado a manifestar ya en los crticos con el exceso

    hegemnico de la razn y el progreso, que haban exaltado el papel de los sentimientos, la

    espiritualidad y las diferencias culturales, se manifestar tambin en el seno mismo de los

    proyectos de reforma y reorganizacin social herederos del racionalismo ilustrado.

    Por un lado, los movimientos romnticos a los que nos referamos en el captulo anterior ponan

    precisamente de relieve una concepcin organicista de la humanidad y de las diferentes culturas

    (volkgeist), como conjuntos internamente estructurados. Estos movimientos ejercern una

    notable influencia en el desarrollo de la antropologa y de la filologa a principios del siglo XIX,

    que se adentra en el estudio de pueblos y civilizaciones antiguas diferentes, como

    manifestaciones singulares de una humanidad universal.

    Paralela, y de forma relativamente independiente a estos desarrollos, que compaginarn el

    trabajo filosfico conceptual con el anlisis emprico de los fenmenos socio-culturales (no slo

    textos literarios sino otro tipo de manifestaciones religiosas, artsticas, jurdicas, etc.), con el

    objeto de comprender otros mundos, veremos aparecer tambin las primeras referencias a una

    ciencia social, una sociologa. El nacimiento de esta nueva ciencia de las relaciones sociales,

    que aspira a fundamentar cientficamente un proyecto de reconstruccin social, estar en buena

    medida ligado al desarrollo del socialismo, como apunta Dumont (1985). As lo veremos tanto

    en Francia, donde la sociologa se desarrolla en el marco de una filosofa positiva (Saint Simon,

    Comte), como en Alemania (Marx), desde una crtica materialista al idealismo hegeliano. Nos

    seguimos encontrando, en ambos casos, ante la idea ilustrada del progreso y la organizacin

    racional de la sociedad.

    Veamos a continuacin estas lneas de desarrollo con un poco ms de detalle.

    3.1.1. Filologa, antropologa e historia: de Humboldt a Steinthal

    En el siglo XVIII, como veamos en el captulo sobre las ideas filosficas, nos encontramos con

    el desarrollo de una filosofa de la historia que supone una transformacin muy importante de lo

    que hasta entonces vena siendo la historia (relatos ms o menos anecdticos de acontecimientos

    polticos y militares, sin sistematicidad ni apoyo en documentacin). La filosofa de la

    ilustracin vendr precisamente a introducir esa sistematicidad, estableciendo relaciones entre

    los acontecimientos polticos y blicos, as como entre otros fenmenos relacionados con el

    comercio, las tcnicas, las instituciones, la literatura, etc., en el marco de una visin general de

    la historia de la humanidad, basada en el progreso y la hegemona de la razn. Frente a esa

    filosofa de la historia, como veamos, reaccionar el romanticismo, con Herder a la cabeza, que

    escribir en 1774 una filosofa alternativa. Dicha filosofa se nutra, entre otros, de figuras como

  • Winckelmann (1717-1812), que en la llamada querella entre los Antiguos y los Modernos,

    se haba posicionado del lado de los antiguos, es decir, del humanismo, si bien con un

    humanismo renovado7. Frente a la idea de progreso acumulativo e ilimitado de los Modernos,

    Winckelmann mirar al pasado para reivindicar el arte griego como la mxima realizacin de la

    esencia del arte, de la idea misma de belleza, estableciendo a su vez una correspondencia entre

    la perfeccin del arte y la libertad. Su trabajo dara lugar a toda una serie de investigaciones

    sobre el mundo griego, en la que se implicarn desde los romnticos de primera generacin,

    como el mismo Herder, Goethe o Schiller, hasta Schelling, Hegel y Humboldt.

    Estas investigaciones revitalizarn enormemente el campo de la llamada filologa clsica, que

    estudia la Antigedad. Al calor de esta una nueva filosofa de la historia, esta nueva filologa

    ampliar su objeto y mtodo (tradicionalmente limitado al estudio formal de textos) para abarcar

    otro tipo de fenmenos culturales o institucionales (econmicos, jurdicos, religiosos, artsticos,

    etc.), con el objeto de comprender el conjunto de una cultura (el mundo griego pero tambin el

    mundo romano o los pueblos orientales). Recogiendo la tradicin de la crtica textual a la luz de

    la hermenutica (de Schleiermacher)8 y la investigacin sobre las objetivaciones del espritu

    humano, la filologa se presenta as como una ciencia integradora cuyo fin ltimo es la

    comprensin de pocas o civilizaciones diferentes, y en ltimo trmino, de la alteridad (Britta

    Rupp-Eisenreich, 1990). Esta especie de ciencia matriz articular en sus inicios una buena parte

    de lo que despus, con la especializacin, se convertir en una multiplicidad ciencias humanas,

    culturales y sociales.

    La filologa se desarrollar de hecho con un gran dinamismo a partir de ese momento,

    convirtindose en una de las disciplinas fundamentales en las universidades alemanas (a la

    altura de la filosofa y la teologa). Por ella haba apostado precisamente Humboldt, quien como

    veamos en la introduccin se haba encargado de llevar a las figuras ms relevantes en este

    campo a la Universidad de Berln, convertida en el mayor centro de estudios filolgicos de

    Europa (Bravo, 1968). Su investigacin filolgica se enmarcara precisamente en un proyecto

    antropolgico ms general, que se mantendr en las generaciones siguientes, tanto en la

    filologa clsica de Ernst Boeckh como en la psicologa de los pueblos de Heymann Steinthal.

    Wilhelm von Humboldt (1767-1835): la filologa como ncleo de una antropologa

    7 Este neo-humanismo cambia profundamente la imagen tradicional de la antigedad elaborada por los humanistas, revalorizando el arte griego del siglo V a.C. y desdeando la literatura posterior por su pedantera. 8 Schleiermacher (1768-1834) plantea lo que se conoce como crculo hermenutico, una forma circular de conocimiento segn la cual para comprender una parte (un texto o un fragmento) necesitas remitirte al todo (contexto histrico, social, autor), a la vez que para comprender el todo necesitas comprender las partes.

  • Wilhelm von Humboldt, conocido fundamentalmente por sus trabajos sobre lenguaje, es una

    figura difcilmente clasificable. Contemporneo de Hegel, Humboldt pertenece tanto a la

    Ilustracin como al Romanticismo y al Idealismo. Su primer contacto con la filosofa es el

    movimiento ilustrado en Berln, en torno al racionalismo de Leibniz y a la filosofa crtica de

    Kant. Pronto, en todo caso, Humboldt complementar esta formacin con la investigacin

    emprica, estudiando filologa clsica en la Universidad de Gotinga. La profundizacin en el

    estudio de los antiguos le llevar a alejarse del movimiento ilustrado berlins, siguiendo los

    pasos de Hamann y Herder y acercndose al romanticismo de los hermanos Schlegel, Novalis y

    Schleiermacher con los que compartir una fra indiferencia ante el idealismo de Hegel (Di

    Cesare, 1999). Humboldt reorienta as su trabajo filosfico (racionalista y crtico, hasta ese

    momento) en la direccin de una investigacin emprica de las diferentes formas en que se

    manifiesta la humanidad, es decir, reorienta su filosofa hacia una antropologa en un sentido

    semejante al que veamos en Kant, por otro lado.

    El trabajo de Humboldt se presenta a partir de entonces como una antropologa, entendida como

    una indagacin de las formas fenomnicas empricas- individuales en que se despliega la

    humanidad (lo universal) a lo largo de la historia. En su Plan de una antropologa comparada,

    de 1795, Humboldt defender que el Espritu (Geist), pese a su universalidad, solo puede ser

    aprehendido en la variedad emprica de sus manifestaciones individuales, en la que adquiere

    existencia si bien, debido a su naturaleza dinmica (energa de una fuerza viva), el espritu

    no se agota nunca en ellas sino que tiende a seguir manifestndose de una manera siempre

    nueva en el mundo fenomnico. De ah se derivar para Humboldt una primaca de lo individual

    sobre lo universal y la necesidad de una investigacin que no sea slo trascendental sino

    emprica, planteando una sntesis de lo transcendental con lo emprico, de lo filosfico con lo

    histrico. Esta cuestin, adems, era crucial para Humboldt, en su perfil poltico como

    diplomtico: le permita legitimar la variedad que se manifiesta en el mundo desde una

    perspectiva filosfica y examinarla bajo el aspecto histrico.

    Una vez esbozado el plan de esta antropologa comparada, Humboldt volver a centrarse en el

    lenguaje, que para l, de las diferentes formas de actividad en las que puede manifestarse el

    espritu humano, es la manifestacin por excelencia, clave para penetrar en la naturaleza

    humana. Lo desarrollar a travs de un ensayo dedicado a su amigo Goethe, sobre la

    imaginacin potica y la posibilidad de creacin de lo nuevo (uno de los ncleos de debate de la

    filosofa postkantiana)9, en el que termina planteando una filosofa del lenguaje. Su objetivo

    9 El marco nuevamente tienen que ver con la crtica al exceso de razn en la Revolucin Francesa, su falta de creatividad y su represin de la sensibilidad.

  • ltimo, en todo caso, sigue siendo el hombre, no el lenguaje. Su proyecto lingstico se entiende

    como una sntesis de reflexin filosfico-transcendental e investigacin lingstico-emprica10.

    Su apuesta por el desarrollo de la filologa en la Universidad de Berln (recordemos que la

    reforma universitaria la lidera en buena medida a l mismo), a partir de 1810, haciendo llamar a

    los ms prestigiosos fillogos del momento, tendr que ver con todo este proyecto, que no es

    solo un modelo intelectual sino moral, en tanto que aspira a realizar el ideal humanista de

    comprensin de la alteridad. Este ser el modelo que recoger la filologa clsica, de nuevo

    cuo, de Ernst Boeckh, una de las mximas autoridades en la Universidad de Berln en los aos

    1820.

    Ernst Boeckh (1785-1867): la filologa como historia del espritu

    La nueva filologa, histrica y cultural, que se desarrolla en la estela del neohumanismo y del

    romanticismo, abrindose al estudio de productos culturales ms all de los textos literarios,

    encontrar su mxima expresin en la figura de Boeckh (1785-1867) gran autoridad en la

    Universidad de Berln del momento, junto a su contemporneo Hegel (1770-1831), con cuya

    filosofa especulativa mantendr un importante intercambio.

    Uno de los esfuerzos ms importantes de Boeckh es la publicacin de una magna Enciclopedia

    de las Ciencias de la Antigedad (1807), donde se esfuerza por organizar conceptual, cientfica

    y sistemticamente las diferentes disciplinas filolgicas. En ella definir la filologa clsica

    como la ciencia que estudia el espritu tal y como se manifest en la Antigedad (pueblos

    orientales, mundo griego y romano) (Bravo, 1968).

    En el desarrollo de esta nueva filologa tendr en efecto una influencia importante la filosofa

    del espritu hegeliana, a la que Humboldt se haba mostrado ms reticente. Ahora bien, como

    Humboldt, lo que Boeckh reivindicar es una sntesis de trabajo filosfico y emprico. Para

    Hegel, como veamos en el captulo anterior, la nica ciencia posible era la filosofa

    especulativa. Desde esa perspectiva, la historia filolgica, entendida como erudicin y anlisis

    de hechos empricos, perteneca al dominio de lo arbitrario - y por tanto, desdeable como

    10 En su obra Acerca de la tarea del historiador (1821), Humboldt insiste en la idea de que el conocimiento histrico no se limita a establecer hechos y un encadenamiento causal entre ellos. La tarea ms elevada del historiador es descubrir las "ideas partiendo de los hechos: es una actividad creadora, ms o menos como una actividad potica. Para descubrir las ideas tras los hechos, el historiador debe de alguna forma llevar ya en su alma estas ideas. Por eso presupone una concordancia previa entre sujeto y objeto. La comprensin sera la aplicacin de un universal que estara presente con anterioridad, a un nuevo particular. Esta teora de la identidad fundamental entre el sujeto particular y el espritu que se manifiesta en la cultura de una sociedad aparece tambin en su principal ensayo terico, Introduccin al Kawi (publicado pstumamente, en 1836).

  • carente de valor. A este respecto, Boeckh, que comparta una concepcin del espritu y la

    historia propia del idealismo objetivo, segn la cual todos los fenmenos histricos son

    manifestaciones del espritu (producto o expresin de nuestra actividad mental), se cuida mucho

    de defender la especificidad y el estatuto cientfico de la filologa respecto de la filosofa

    especulativa: la cognicin de lo conocido no puede ser una pura construccin o

    deduccin; debe basarse en la induccin, trabajando sobre los datos de la experiencia. La

    filosofa construye lo esencial, el contenido de los fenmenos, al partir del concepto. Pero para

    eso, necesita conocer los fenmenos, y es justamente la filologa la que los estudia. Boeckh

    pretende fundar la filologa en tanto que ciencia complementaria a la filosofa especulativa

    (Bravo, 1968).

    Esta idea de interdependencia entre la construccin especulativa y la filologa deber tambin

    mucho a la figura de Humboldt, que Boeckh conoca bien. El modelo de Boeckh, en realidad,

    como seala Rupp-Eisenreich (1990), puede entenderse como la puesta en obra del pensamiento

    humboldtiano. Este modelo, que insiste en las condiciones de conocimiento de conjuntos

    culturales que nos resultan opacos y extraos, que se trata de hacer inteligibles, segn defiende

    esta autora, podra haber servido tambin de ejemplo a la incipiente etnologa, incipiente

    disciplina que apuntaba a incluir la experiencia no europea en la historia universal, mediante el

    estudio de los entonces llamados pueblos exticos, naturales o salvajes11.

    La etnologa del momento, representada por figuras como Adolf Bastian (1826-1905) o Rudolf

    Virchow (1821-1902), estaba ms preocupada por la recoleccin y clasificacin de datos, de

    materiales propios de esos pueblos naturales, cuya pureza amenazaba con extinguirse por el

    contacto con el mundo occidental, la revolucin de los medios de transporte y comunicacin-,

    que por una teora de la comprensin. Para Bastian, el tiempo de la teora no haba llegado.

    Antes bien, haba que preservar todos esos datos, que nos permitieran constituir un registro

    integral de las ideas, del saber humano. Ms que una comprensin intuitiva de otros pueblos, la

    etnologa, apostaba por un mtodo emprico puramente inductivo. Este celo empirista se

    manifiesta en las dems disciplinas en que se apoya, como la botnica, la anatoma y la

    fisiologa, pero sobre todo se dar tambin dentro la propia lingstica (comparativa). Este

    programa se plantear en ltimo trmino como una alternativa al modelo filolgico, alejndose

    as del proyecto antropolgico humboldtiano y de un horizonte moral que apuntaba a la

    comprensin de la alteridad12.

    11 Junto a esta etnologa de pueblos naturales (salvajes o primitivos, como tambin se llamaron), se desarrolla en Alemania una etnologa propia, verncula, que busca las races o fundamentos de su propia cultura, la germanstica. 12 Paralelamente, en el seno de la misma filologa, el proyecto de Boeckh, basado en la reconstruccin de individualidades histricas como mediaciones entre lo universal y lo singular, se fue diluyendo ante una progresiva atomizacin de la investigacin. La unidad sinttica de partida, que estudiaba no solo la

  • Dentro de la lingstica, en todo caso, una corriente minoritaria seguir encontrando una

    importante fuente de resistencia en el proyecto humboldtiano. ste ser retomado precisamente

    por Heymann Steinthal (1823-1899), que construir todo un sistema explicativo del espritu

    humano y de sus objetivaciones, retomando a su vez la metodologa hermenutica de

    Schleiermacher y Boeckh. El proyecto, a su vez, sera reinterpretado a la luz de la psicologa de

    Herbart (1776-1841), en la que sera introducido por su amigo y colaborador Moritz Lazarus

    (1824-1903) (Rupp-Eisenreich, 1990). El resultado adoptar la forma de una psicologa de los

    pueblos, piedra angular de ese sistema, que Lazarus y Steinthal pondrn en marcha a travs de

    un ambiciosa apuesta editorial, la Revista de Psicologa de los Pueblos y Filologa [Zeitschrift

    fur Volkerpsychologie und Sprachwissenschaft]

    Esta revista, publicada peridicamente entre 1859 y 1890, recibir todo tipo de colaboraciones,

    desde lingistas y filsofos como Cohen, Dilthey o Windelband, hasta etnlogos (como

    Bastian) y futuros socilogos como Simmel. En ella se encuentran los fundamentos intelectuales

    de su psicologa de los pueblos, como veremos en el epgrafe correspondiente del captulo cinco

    (dedicado a la obra de Wundt).

    Mientras Lazarus y Steinthal ponan en marcha su ambicioso proyecto, a contracorriente del

    ascenso imparable del cientificismo, otras tentativas trataban de sentar por su cuenta las bases

    para un estudio emprico y objetivo de la sociedad y las relaciones sociales.

    3.1.2. Sociologa

    Auguste Comte (1798-1857): la filosofa positiva y la ciencia de lo social

    El trmino sociologa para describir una ciencia de la sociedad fue introducido por Auguste

    Comte. Lejos de marcar una separacin con las ciencias naturales, su trabajo consisti en

    articularlas, entendiendo la sociedad como un organismo.

    Comte recoga en realidad las ideas desarrolladas por Henri Saint Simon (1760-1825), uno de

    los mximos representantes del llamado socialismo utpico (o primer socialismo13), que haba

    planteado la necesidad de una ciencia de la organizacin social en trminos de una fisiologa

    social (como rezaba el ttulo de su compendio de 1825). Fascinado por el progreso en las

    matemticas y las ciencias naturales, especialmente en las llamadas ciencias de la vida, Saint

    literatura sino las leyes, costumbres o economa como expresiones de una determinada mentalidad, terminara dando lugar a una suma de ramas especializadas y dominios especficos de anlisis. 13 La expresin socialismo utpico fue acuada posteriormente por Engels, que ve en estas primeras formas de socialismo un ideal irrealizable, superado dialcticamente por el socialismo cientfico de Marx.

  • Simon aspiraba a alcanzar una ciencia humana unificada, desde la fisiologa y la medicina hasta

    la ciencia social, que permitiera una intervencin racional a favor de la salud colectiva. Ese

    mpetu racionalista, en todo caso, no le impedira a Saint Simon como a Comte despus-,

    reivindicar la religin como fuerza vinculante esencial, planteando una reforma de las

    instituciones religiosas existentes (en particular, la Iglesia catlica), para construir una religin

    de la humanidad y lograr as la armona moral y social. El objetivo fundamental de Comte, que

    fue su secretario personal entre 1817 y 1824, sera tambin la fundacin de una nueva religin,

    un aspecto ineludible, por paradjico que pueda parecer, de su filosofa positiva.

    Filosofa positiva

    La sociologa de Comte es inseparable de su filosofa positiva o positivismo, que hace

    referencia a una concepcin acerca del conocimiento cientfico que an hoy, con algunas

    reformulaciones, sigue estando vigente, siendo incluso hegemnica. El positivismo, tal como lo

    plantea Comte, define el conocimiento como el establecimiento de regularidades (leyes

    naturales invariables) entre fenmenos observables. Se opone as a la bsqueda de causas que

    estuvieran ms all de los fenmenos mismos, rechazando toda referencia a abstracciones como

    las que venan predominando en la filosofa convencional (como la idea de una causa primera

    que sera Dios). Su ideal a este respecto era al teora del calor de Fourier, que se poda expresar

    matemticamente, sin referencia alguna a la naturaleza del calor.

    Su visin de la historia, como la de la mayora de la gente en el siglo XIX, estaba basada en el

    progreso de la ciencia. Comte planteaba que la historia de cada ciencia, y la de la humanidad en

    su conjunto, pasaba por tres etapas, a saber: una etapa teolgica, donde la gente atribuye los

    acontecimientos a alguna forma de deidad; una etapa metafsica, donde atribuimos causas a

    fuerzas o formas abstractas (conceptos metafsicos); y una etapa final, positiva, donde la ciencia

    busca regularidades entre fenmenos observables. Esta etapa positiva, segn Comte, haba sido

    alcanzada primero por las ciencias fsicas (en el siglo XVII) y luego por las ciencias biolgicas

    (a principios del XIX). La tarea que l mismo se propona era llevar la ciencia social a ese

    estado, es decir, fundar una ciencia positiva de la sociologa.

    Como parte de su proyecto de filosofa positiva, Comte llev a cabo tambin una clasificacin

    de las ciencias. En primer lugar, histrica y lgicamente, estaran las ciencias fsicas, base a

    partir de la cul se desarrollaran las ciencias biolgicas, que seran dependientes de las

    primeras, pero irreductibles a ellas, pues tienen su propio objeto (de mayor complejidad) y sus

    propias leyes. Dentro de estas ciencias biolgicas, Comte distingua dos partes: primero estara

    la fisiologa, y por otro la sociologa, lgica e histricamente posterior, y que a su vez sera

    irreductible a la anterior, contando con su propio objeto (de mayor complejidad, tambin) y

    leyes. La ciencia positiva de la sociologa, apoyndose sobre la fisiologa, estudiara las

  • relaciones orgnicas ms complejas, las del mundo social. En ltimo trmino, para Comte, el

    conocimiento de estas leyes nos permitira delimitar nuestra accin poltica, estando as al

    servicio de la humanidad.

    En su esquema, entre la fisiologa y la sociologa Comte no contempla ningn espacio para la

    psicologa. Para Comte, la psicologa, representada fundamentalmente por la filosofa

    espiritualista de Victor Cousin, era equivalente a la introspeccin, y como tal observacin

    interior no poda entender como fuente de conocimiento positivo14. De forma parecida a las

    reservas que apuntaba Kant respecto a la introspeccin, Comte planteaba que una persona no

    puede dividirse en dos y observarse a la vez que sigue razonando. Como mucho, Comte podra

    aceptar la frenologa de Gall, en tanto que teora fisiolgica de las funciones mentales tal y

    como se pueden observar en el crneo; pero nunca la introspeccin.

    Comte, en todo caso, ms que elaborar los detalles de la ciencia positiva de la sociologa por la

    que abogaba, se dedic a poner en prctica una religin de la humanidad, que nos guiara. En ese

    sentido, en los primeros aos cincuenta public un Sistema de poltica positiva y un Catecismo

    Positivo, llegndose a fundar iglesias comteanas en diferentes puntos del planeta. Estas derivas

    religiosas, sin embargo, seran consideradas excentricidades susceptibles de ser dejadas de lado

    por los seguidores ms liberales del positivismo, como Mill (en Gran Bretaa) y Littr (en

    Francia).

    Karl Marx (1818-1883)

    Decamos, siguiendo a Dumont (1985), que si la revolucin francesa haba marcado el triunfo

    del individualismo, este triunfo, ligado a la idea de sociedad como un agregado de individuos,

    no tardara en mostrar sus puntos flacos, produciendo hasta cierto punto el resurgimiento de

    valores contrarios, que vendran a poner en valor una concepcin ms organicista de la sociedad

    y, a la vez, una concepcin ms social del ser humano. En ese marco acabamos de presentar el

    caso de Comte, en la lnea de Saint Simon, y su apuesta por una ciencia de lo social, una

    sociologa, al servicio de una regeneracin de la sociedad, donde pudiera reinar la armona

    social y moral.

    14 Victor Cousin (1792-1867), discpulo de Pierre Paul Roger Collard y de Maine de Biran, era toda una autoridad en la educacin superior francesa (en la Sorbona y en la Ecole Normale Suprieure). Desarroll una filosofa eclctica, que recoga aspectos del racionalismo cartesiano, el empirismo sensualista, la filosofa del sentido comn y el idealismo especulativo. En ltimo trmino, pretenda fundamentar la filosofa sobre una psicologa introspectiva, apostando por una filosofa espiritualista que se opona al materialismo inmoral de los philosophes.

  • Esa concepcin ms organicista de la sociedad era tambin uno de los rasgos propios de las

    tendencias romnticas e idealistas15 que se venan desarrollando, si bien con otros matices,

    desde finales del siglo XVIII en Alemania, como veamos. Tambin aqu, a mediados del XIX,

    tomar fuerza una propuesta para su estudio cientfico, material, ligado al socialismo. Se trata

    del proyecto liderado por Marx, un antiguo estudiante de Hegel, que mantendr su concepcin

    dialctica, procesual, del conjunto de la realidad, pero invirtiendo la relacin entre realidad e

    idea o Espritu (Geist) - desmistificndola. En lugar de hacer de la realidad un producto del

    Espritu, que se despliega hasta hacerse consciente de s mismo, har del Espritu (identificado

    ahora no con una idea abstracta sino con la humanidad) un producto de la realidad, es decir, de

    las condiciones materiales, sociales, econmicas, etc. En ese sentido, su propuesta reivindicar

    la naturaleza esencialmente social e histrica del ser humano (frente a la idea del individuo

    como una unidad en s mismo).

    Karl Marx (1818-1883) estudia filosofa en Berln, donde conoce de primera mano el idealismo

    absoluto de Hegel. De este sistema, al que Marx se opondr desde muy joven, tomar sin

    embargo aspectos tan cruciales como la concepcin dialctica, procesual, de la realidad, segn

    la cual sta avanza a travs de la resolucin de contradicciones. La diferencia fundamental,

    estriba, en primer lugar, como decamos, en la inversin de los trminos entre realidad y

    espritu. Mientras para Hegel el fundamento de la dialctica es ideal (el despliegue de un

    Espritu absoluto hasta su autoconocimiento), para Marx es material: el espritu, el pensamiento,

    la conciencia, es resultado de unas determinadas condiciones materiales. En segundo lugar, la

    diferencia estriba en que mientras para Hegel ese proceso habra llegado a su fase final, con el

    Estado (prusiano) como culminacin del espritu absoluto (donde todas las contradicciones se

    habran resuelto), para Marx ese proceso no ha acabado. Marx, lejos de admirar el Estado

    burgus existente (como expresin autoconsciente del espritu absoluto), plantear que existen

    en l nuevas contradicciones, como consecuencia de la existencia misma de una nueva clase

    social, el proletariado (resultado de la industrializacin), que habran de ser resueltas16.

    A este respecto, cabe sealar a pesar de su materialismo, Marx, lejos de negar la libertad, hizo

    de ella la verdadera esencia del ser humano de ah el radicalismo de sus teoras. La libertad no

    se identifica, como en Hegel, con el Espritu (Geist) hacindose consciente de s mismo, sino

    15 Hegel criticaba precisamente la idea de libertad de los revolucionarios franceses como una idea puramente negativa y destructiva, reivindicando el Estado y sus leyes como la mayor expresin de la libertad humana. El individuo consciente, para Hegel, est llamado a reconocer en el Estado su Yo superior (Dumont, 1985).

    16 Para Marx, las contradicciones se resolveran en un sistema comunista, en el que ya no habra clases sociales y no hara falta el Estado previo paso por el socialismo o dictadura del proletariado, donde los trabajadores se habran apropiado de los medios de produccin (y el Estado, no burgus, los controlara en funcin de las necesidades de la sociedad).

  • con un rasgo inherente al ser humano que, bajo determinadas condiciones materiales, se le ha

    ocultado. El trabajo de Marx consistir precisamente en estudiar las condiciones materiales en

    que esta libertad se le ha velado y cmo restaurarla17 (Smith, 1997). Se trata as de una teora

    crtica y revolucionaria, que pretende contribuir en la prctica a transformar esas condiciones

    materiales (sociales, econmicas, tecnolgicas, etc.) que la humanidad ha creado para s

    misma18.

    El anlisis histrico de esas condiciones, desde el Imperio Romano y la Edad Media hasta la

    poca moderna, es lo que Engels, su amigo y protector, llam materialismo histrico. En ese

    anlisis cobrar una importancia crucial el estudio objetivo del grado de desarrollo de las

    fuerzas productivas, es decir, de los mecanismos econmicos y tecnolgicos (desde el

    esclavismo y el feudalismo hasta la revolucin industrial). Sobre esa base material (que recibir

    el nombre de infraestructura) se erigen todos los dems productos de la actividad humana,

    como la religin, la moral, el sistema jurdico, el arte o la ciencia (que recibirn el nombre de

    superestructura). Todas estas instituciones y sistemas culturales, que vendran a ser una

    expresin de las relaciones de produccin y, a su vez, una legitimacin de ese orden existente,

    conformaran algo as como nuestra mentalidad o conciencia social. Nuestro pensamiento o

    conciencia, por tanto, lejos de ser algo abstracto (inmutable, universal), tendra un

    fundamento material. No es la conciencia del hombre la que determina su ser, sino, por el

    contrario, el ser social es lo que determina su conciencia. (Marx, Prlogo a la Contribucin a

    la crtica de la Economa Poltica, 1859).

    Estudiar a lo largo de la historia cmo la gente ha organizado colectivamente la produccin y,

    en el proceso, dado lugar a instituciones y adquirido creencias que legitiman ese orden, negando

    la realidad de sus circunstancias, se convierte en la base de la sociologa concebida

    precisamente como una herramienta revolucionaria y emancipadora. En la estela de la tradicin

    ilustrada, en definitiva, lo que plantea es que la razn nos har libres.

    Marx y los diferentes autores la tradicin marxista que le seguirn influirn sobre todo en el

    anlisis sociolgico, subrayando la preeminencia de las relaciones econmicas. Pero tambin

    influir fuertemente en una parte de la psicologa, que har del estudio de nuestra condicin

    histrico-social el ncleo de su programa (como veremos especialmente en el captulo dedicado

    a Vigotsky).

    17 Como seala Smith (1997), la mxima preocupacin de Marx fue superar la tensin entre libertad y determinismo, siendo ah donde reside el valor de su pensamiento a pesar de que ninguna de las formas de vida poltica llamadas marxistas haya logrado hacerlo, mermndole toda credibilidad. 18 Como para Hegel (y antes que l Vico o Herder), para Marx lo que llamamos naturaleza no es algo ajeno a nosotros, sino el resultado mismo de nuestra actividad.

  • La sociologa, en todo caso, como la psicologa, no se institucionalizar como disciplina hasta

    finales del siglo XIX. Si el dato fundacional del inicio psicologa se sita con Wundt en

    Alemania, el dato fundacional de la sociologa como disciplina autnoma y cientfica se situar

    sobre todo en Francia, con la figura de Emile Durkheim (1858-1917). Su sociologa,

    especialmente interesada en el anlisis de la conciencia colectiva (las representaciones

    colectivas), beber tanto del positivismo iniciado por Comte, como del socialismo y de la

    psicologa de los pueblos alemana (Mucchielli, 1998). Esta sociologa mantendr una relacin

    tan intensa como compleja con la psicologa en vas de institucionalizacin, con la que se

    disputa el monopolio del aspecto social de la conciencia. De la mano de su principal discpulo

    Marcel Mauss, que matizar de forma importante el determinismo social de su maestro, esta

    relacin dar lugar a un enriquecedor dilogo, del que dar buena muestra su discurso sobre las

    Relaciones prcticas y reales entre la psicologa y la sociologa (1924/1999) cuya actualidad

    veremos en el ltimo epgrafe del siguiente apartado.

    3.2. CIENCIAS NATURALES: FISIOLOGA, BIOLOGA Y DARWINISMO

    3.2.1. La fisiologa a finales del siglo XIX

    Mecanicismo, vitalismo y filosofa natural

    Desde al menos el siglo XVII existan en lo que a veces se llamaban las ciencias de la

    vida tendencias organicistas o vitalistas y tendencias mecanicistas. Las primeras suponan que

    los seres vivos posean principios de organizacin especficos, irreductibles a leyes qumicas o

    fsicas. Los organismos biolgicos no podran, entonces, explicarse como si fueran artilugios

    mecnicos cuyo funcionamiento consistiera en un mero juego de presiones, contactos y empujes

    de piezas. Por su parte, el mecanicismo desconfiaba de la atribucin de fuerzas ocultas o

    principios pseudoexplicativos a lo viviente y pretenda, en efecto, explicar el mundo biolgico

    en trminos puramente mecnicos similares a los que Isaac Newton haba aplicado al mundo

    fsico en 1687, cuando formul la teora de la gravitacin universal. El problema es que, en

    fsica, el mecanicismo efectivamente supuso una depuracin, pero en biologa obstaculizaba la

    comprensin de algunos fenmenos que el vitalismo, en cambio, defina de una manera ms

    adecuada, como el funcionamiento del sistema nervioso o el fenmeno de la irritabilidad de

    los tejidos, esto es, su reaccin a los cambios fsico-qumicos del entorno (Duchesneau, 1982;

    Canguilhem, 1955; Westfall, 1971).

    Entre finales del siglo XVIII y principios del XIX la filosofa natural era una rama de la

    filosofa casi indistinguible de la biologa y en el seno de la cual se formularon las concepciones

    acerca de los seres vivos que heredaron autores tan importantes como Darwin (Fernndez, 2005;

  • Richards, 2002). Fue especialmente en el mundo germano donde la filosofa natural se

    desarroll, as como la fisiologa. En aquel ambiente, ligado tambin al movimiento romntico,

    predominaban los enfoques organicistas, que entendan no ya los seres vivos sino la naturaleza

    orgnica en su totalidad -y en algunos casos la naturaleza a secas- como una realidad regida por

    principios irreductibles a fuerzas puramente mecnicas. Darwin recogera ese organicismo a la

    hora de estudiar la naturaleza con una mirada de naturalista que buscaba hallar principios de

    organizacin interna del mundo orgnico. En cierto modo, su imagen evolutiva del rbol de la

    vida sera resultado de esa mirada y su teora de la seleccin natural representara el principio

    bsico de organizacin interna de lo viviente.

    Fisiologa sensorial, psicofsica y sistema nervioso

    La fisiologa del sistema nervioso, especialmente desarrollada en Alemania, tuvo una

    importancia crucial para el surgimiento de la psicologa experimental. En concreto, constituy el

    antecedente inmediato del trabajo de laboratorio de Wundt, como veremos en el tema

    correspondiente. Uno de sus mximos representantes fue el mdico y fsico Hermann von

    Helmholtz (1821-1894). De formacin kantiana, Helmholtz pretenda estudiar empricamente

    los procesos de sntesis u obtencin del conocimiento a partir de datos sensoriales tal y como los

    haba definido Kant. Eso fue lo que inspir su trabajo de laboratorio en fisiologa sensorial.

    Quera fundamentar cientficamente la teora del conocimiento kantiana. Para ello, no obstante,

    rechaz la idea de Kant segn la cual la captacin de datos sensoriales es un proceso pasivo

    consistente en asimilar dichos datos a categoras abstractas circunscritas a un marco espacio

    temporal universal y suministradas por la razn e innatas. Hemlholtz quiso demostrar

    particularmente que la percepcin del espacio no es innata. Recurri a la teora de las energas

    especficas formulada por Johannes Peter Mller en 1820, segn la cual el tipo de nervio

    estimulado (ocular, tctil, olfativo, etc.) es lo que determina el tipo de sensacin que se

    percibir, independientemente del objeto que produzca la estimulacin. Esto demostrara que las

    condiciones trascendentales del conocimiento son en realidad orgnicas: no captamos objetos,

    sino las sensaciones con la que stos afectan a nuestro cuerpo. Hemlholtz tambin recurri a la

    teora de los signos locales formulada por Rudolf Hermann Lotze en la segunda mitad de la

    dcada de los 50 del XIX. Segn esta teora acerca de la percepcin visual, la imagen retiniana

    supone que a partir del objeto se proyectan una serie de puntos (signos locales) cuya relacin

    mutua nos suministra las claves espaciales que, a travs de la coordinacin de los movimientos

    oculares y los del cuerpo en general, nos permite aprender a percibir los objetos como tales

    objetos. Ello contribuira a mostrar que la percepcin del espacio y de los objetos en general no

    es innata, sino aprendida, algo que Helmholtz generaliza ms all de la percepcin visual.

  • Por ltimo, Helmholtz formul la teora de la inferencia inconsciente, segn la cual el

    proceso perceptivo no es pasivo, sino anlogos al proceso de pensamiento, en el sentido de que

    consiste en extraer una conclusin (el objeto percibido) a partir de una serie de premisas (las

    estimulaciones sensoriales, los signos locales) y mediante los movimientos corporales, que

    permiten aprender hbitos cuya estabilizacin es la que en ltima instancia hace que nuestro

    mundo objetivo se estabilice a su vez (ntese que para Helmholtz el sujeto, a diferencia de lo

    que pensaba Kant, es orgnico; pero, al igual que el sujeto trascendental kantiano, es un ser

    activo). De acuerdo con la teora de la inferencia inconsciente, existe un proceso del que no se

    da cuenta el sujeto y en virtud del cual las impresiones sensoriales, que en s mismas son

    fragmentarias y cambiantes, son asimiladas a toda una estructura cognitiva producto de la

    experiencia previa del sujeto y as son reconocidas, o lo que es lo mismo, dan lugar a objetos

    propiamente dichos, reconocidos como tales. Dicho de otro modo: percibir consiste en inferir

    inconscientemente que tal impresin sensorial corresponde a tal objeto. As pues, las categoras

    a priori del conocimiento tal y como las haba definido Kant no eran en realidad innatas, sino

    que consistan en hbitos aprendidos y automatizados a partir de los cuales es posible inferir

    (o concluir cul es) el objeto de la experiencia. En definitiva, el conocimiento consiste en una

    sntesis activa -aunque no necesariamente consciente- de informacin sensorial realizada por el

    sujeto, como quera Kant, pero ese sujeto es un sujeto de carne y hueso y la sntesis pasa por el

    funcionamiento de un dispositivo fisiolgico-sensorial que permite estabilizar activamente

    hbitos de percepcin de objetos y, en esa medida, conocer dichos objetos -o lo que es lo

    mismo, objetivarlos, construirlos como tales objetos- (Aivar, 1999; Aivar y Fernndez, 2000;

    Moulines, 1993; Snchez et al., 1995). Wundt, por un lado, proseguir con la tarea de llevar al

    laboratorio la concepcin kantiana del conocimiento, basndose en los trabajos de Helmholtz -

    de quien haba sido alumno- e inaugurando la psicologa experimental propiamente dicha.

    Aunque no podemos entrar en ellos por falta de espacio, Wundt tambin se bas en los mtodos

    que haba utilizado Gustav Theodor Fechner (1801-1887) en sus trabajos de psicofsica

    publicados en 1860. La psicofsica, para Fechner, consista en el estudio de la conexin entre el

    mundo fsico y el mental a travs de las sensaciones. Lo que hizo fue cuantificar las sensaciones

    pidiendo a los sujetos experimentales que comparasen caractersticas sensoriales de objetos, que

    variaban gradualmente (p.ej., el peso o la intensidad del sonido). Observando cul era la

    diferencia mnima perceptible por los sujetos, Fechner relacion matemticamente la magnitud

    de los estmulos con la intensidad de la sensacin que producan. Reelabor as lo que se

    conocera como la ley de Weber-Fechner (ya que haba sido anticipada por Ernst Heinrich

    Weber en 1840), segn la cual la fuerza de una sensacin es una funcin logartmica de la del

    estmulo; expresado matemticamente en una versin simplificada, S = k log E, donde k es una

    constante que depende de la modalidad sensorial de que se trate. As pues, y ms all de lo que

    Fechner pensaba acerca de su propio trabajo, podemos sugerir que la psicofsica represent

  • tambin un paso en la naturalizacin de la subjetividad, mediante el cual se detectaban

    regularidades en los procesos perceptivos (para una interpretacin historiogrfica y a la par

    terica de la psicofsica en una lnea similar, vase Fernndez, 2003).

    Darwin, por otro lado, proseguir con la naturalizacin del sujeto, aunque no mediante

    investigaciones de laboratorio sino mediante observaciones minuciosas del mundo natural y

    recopilacin de datos zoolgicos, geolgicos, botnicos, etc.

    Pero hubo otro mbito de investigacin dentro de las ciencias naturales que conviene

    mencionar, aunque sea muy rpidamente, porque entre otras cosas es uno de los antecedentes

    histricos de la neurociencia contempornea. Se trata del estudio del sistema nervioso.

    La idea de que el alma es una sustancia que se localiza en una parte del cuerpo es muy

    antigua. En la tradicin cultural occidental sus precursores estn en la Grecia del siglo VIII

    antes de nuestra era, cuando se crea que diferentes partes de lo que ms tarde se teorizara como

    alma residan en diferentes partes del cuerpo. En realidad, en aquella poca no exista un

    concepto de alma propiamente dicha, como algo que da unidad psquica a la persona. Seran

    Platn y Aristteles, en los siglos V y IV antes de nuestra era, quienes formulasen el concepto

    de alma. Modernamente, cuando se ha supuesto que el alma (o sucesores suyos ms recientes

    como la mente o la conducta) debe ser localizada anatmicamente, se ha situado en el cerebro,

    un rgano que, no obstante, tal y como lo entendemos hoy fue no definido hasta la poca

    renacentista (s. XVI). Sea como sea, suele considerarse al alemn Franz Joseph Gall (1758-

    1828) como el padre de los intentos contemporneos por localizar las funciones psicolgicas en

    el cerebro, que desembocan en la neuropsicologa y la neurociencia de nuestros das. Gall crea

    que el cerebro era el rgano de la mente y se propuso demostrarlo descubriendo relaciones entre

    partes del cerebro y facultades psicolgicas, suponiendo adems que las facultades que una

    persona ejercita ms provocan que las partes del cerebro correspondientes a ellas se desarrollen

    ms (igual que el ejercicio de un msculo lo hipertrofia). Cada facultad psicolgica, que adems

    considera innata, la ubica Gall en una parte del cerebro, dando lugar as a un autntico mapa de

    localizaciones y a una ciencia, la frenologa, que fue bastante popular durante el siglo XIX. La

    frenologa se basaba en la medicin de las partes del cerebro ms desarrolladas -

    correspondientes, por tanto, a capacidades psicolgicas ms ejercitadas- tal y como se reflejaban

    en las protuberancias del crneo de cada individuo. Gall elabor una lista muy completa de

    facultades psicolgicas, como la agresividad, la amistad o el lenguaje, que sus seguidores

    alargaron con otras como la religiosidad. Como puede apreciarse, desde un punto de vista

    conceptual es una estrategia similar a la que se emplea actualmente en investigaciones que

    intentan mostrar, por ejemplo, las bases neurobiolgicas de cosas tales como la identidad

    sexual, la conducta maternal o el uso adictivo de drogas.

  • 3.2.2. Evolucionismo y darwinismo

    El evolucionismo predarwiniano

    Aunque en nuestros das el concepto de evolucionismo remite automticamente a

    Darwin, la darwiniana no fue la nica teora de la evolucin, aunque s, sin duda, la ms

    importante. Frente a lo que se denominaba fijismo, segn el cual las especies haban sido

    siempre iguales y haban creadas por Dios independientemente unas de otras, en el siglo XVIII,

    cuando se formul el concepto moderno de especie biolgica, se empez a discutir acerca la

    posibilidad de que las especies se transformaran. El principal naturalista de la poca, el sueco

    Carl Linneo (1707-1778), mantena una posicin fijista seguida por una gran cantidad de

    autores. Otros, como el francs Georges Louis Leclerc, conde de Buffon (1707-1788),

    sugirieron que las especies podan haber sufrido cambios. Buffon elabor toda una teora de las

    pocas de la naturaleza, como l deca, segn la cual la Tierra haba pasado por siete periodos

    desde su formacin hasta el presente. En el tercer periodo haban sido creados los moluscos, en

    el quinto los animales superiores y en la sexta el ser humano (la sptima, correspondiente al

    sptimo da del relato bblico de la creacin segn el cristianismo, sera aquella en que el ser

    humano simplemente se desarroll hasta llegar al presente).

    Sin embargo, fue el tambin francs Jean-Baptiste Lamarck (1744-1829) el ms

    conocido defensor del transformismo, principal punto de vista evolucionista previo a Darwin.

    Lamarck, a principios del XIX, defendi no slo que las especies haban experimentado

    transformaciones hasta llegar a su estado actual, sino adems que unas haban surgido a partir de

    otras, incluyendo al ser humano. La transformacin de las especies, segn ese punto de vista,

    obedece a leyes. En concreto, Lamarck atribuye las modificaciones a tres causas: las

    condiciones fsicas en que viven los animales, el cruzamiento reproductivo y el principio del uso

    y el desuso. Es este ltimo principio en que se hizo ms famoso. Consiste en afirmar que,

    cuando el medio cambia, las actividades de los animales cambian a su vez para adaptarse a l y,

    con ello, cambia tambin su cuerpo. Dicho de otro modo, el uso recurrente de un rgano hace

    que ste se hipertrofie; en cambio, su falta de uso hace que se atrofie. Pero adems Lamarck

    crea en un principio de transmisin hereditaria que mucho ms tarde -a principios del siglo XX-

    se demostrara imposible pero que fue ampliamente aceptado incluso por Darwin: la herencia de

    los caracteres adquiridos, en virtud de la cual los efectos del uso y el desuso sobre los rganos

    se transmiten a los descendientes. El ejemplo tpico es el de la jirafa: ante la imposibildad de

    conseguir alimento en otros lugares, los ancestros de las jirafas se esforzaron por alcanzar las

  • ramas de los rboles y ello hizo que su cuello se estirase, caracterstica morfolgica que

    transmitieron de generacin en generacin.19

    La obra de Darwin20

    Una de las principales vas a travs de las cuales el discurso cientfico del siglo XIX

    naturaliz la subjetividad, si no la principal, fue el evolucionismo darwinista. A partir de la obra

    de Darwin, incluso quienes se oponan al evolucionismo y mantenan posiciones creacionistas

    tuvieron que elaborar sus argumentos teniendo en cuenta el darwinismo. En el mundo cientfico

    e intelectual ste supuso una revolucin y, sobre la base de un acuerdo generalizado en biologa

    en cuanto al hecho de la evolucin, no ha dejado de suscitar discusiones hasta nuestros das.21

    En cuanto a las teoras psicolgicas, desde finales del siglo XIX ya no han podido

    elaborarse a espaldas del evolucionismo. Y no slo por la imposibilidad general de producir

    discursos cientficos al margen de la teora de la evolucin, sino tambin porque en la obra del

    propio Darwin los componentes psicolgicos desempearon un papel apreciable, como

    enseguida veremos.

    Charles Darwin fue un naturalista ingls que naci en Shrewsbury en 1809 y muri en

    Kent en 1882. De familia acomodada, desde joven se aficion a la historia natural y, tras cursar

    estudios de medicina, teologa y geologa, realiz un viaje -al que haremos referencia a

    continuacin- que le proporcion numerosos datos para elaborar su versin del evolucionismo.

    El resto de su vida transcurri en Down House, su casa de campo. All realiz algunos

    experimentos cruzando plantas y animales, se carte con otros cientficos e intelectuales y

    escribi ms de de una veintena libros y monografas. Los ms importantes fueron El origen de

    las especies (1859), donde expuso su concepcin de la evolucin basada en la seleccin natural,

    y El origen del hombre (1871), acerca de la evolucin de la especie humana. La idea central del

    primero de estos dos libros es que la evolucin consiste en una descendencia con

    modificaciones regida por la seleccin natural: los descendientes, aunque conservan rasgos de

    sus ancestros, poseen tambin nuevos rasgos que pueden ser ms o menos adaptativos y, por

    19 . A menudo el trmino lamarckismo es sinnimo de herencia de los caracteres adquiridos. 20 . Nuestra interpretacin de Darwin toma ideas de Toms R. Fernndez (2005; Fernndez y Snchez, 1990) y Jos Carlos Snchez (1999; Snchez y Fernndez, 1990). Para ampliar informacin sobre el darwinismo y su historia hasta tiempos recientes vanse los libros de Francisco J. Ayala (2001), Ernst Mayr (1991), Robert J. Richards (1992) y Michael Ruse (1979). Una completa revisin del darwinismo desde un punto de vista terico, basado en el materialismo filosfico de Gustavo Bueno (pero interesante ms all de ste), se encuentra en el artculo de David Alvargonzlez (1996), del que tambin tomamos algunas ideas. Por lo dems, para un resumen sencillo y breve del estado de la biologa en el siglo XIX vase el librito de Alberto Gomis (1991). 21 . Actualmente el creacionismo -la idea de que los seres vivos han sido creados por una inteligencia sobrenatural- es un fenmeno marginal, difundido en algunos centros educativos islmicos y protestantes, estos ltimos radicados sobre todo en Norteamrica, donde ha prendido una versin remozada del creacionismo denominada teora del diseo inteligente.

  • tanto, favorecer la lucha por la existencia y la supervivencia. La idea central de El origen del

    hombre es que el ser humano desciende de algn antepasado ms primitivo. En este libro

    tambin se realizan comparaciones entre las capacidades psicolgicas humanas y las de otras

    especies. Asimismo, se dedica una parte a la cuestin de la seleccin sexual, esto es, la eleccin

    de pareja reproductiva.

    La teora evolucionista de Darwin fue la que acab triunfando hasta eclipsar a las

    dems. El triunfo se complet a finales de los aos 30 del siglo XX, si bien ni siquiera entonces

    se cancelaron todas las discusiones sobre el mecanismo que explicaba la evolucin. A finales

    del siglo XIX y principios del XX no todos los evolucionistas aceptaban la teora de la seleccin

    natural y no todos entre quienes la aceptaban la entendan de la misma manera (Bowler, 1983).

    La aceptacin generalizada de la teora de la seleccin natural lleg a finales de los aos 30,

    cuando surgi el denominado neodarwinismo o teora sinttica de la evolucin. El

    neodarwinismo, an vigente hoy en muchos de sus aspectos, combinaba la teora darwiniana de

    la seleccin natural con 1) el redescubrimiento de las leyes de Mendel (leyes de la transmisin

    de rasgos hereditarios descritas por Gregor Mendel en 1865 y redescubiertas a principios del

    siglo pasado), 2) la teora de la mutacin gentica como proceso aleatorio (contra el

    lamarquismo, para el cual el ambiente poda causar mutaciones) y 3) la gentica de poblaciones

    (apoyando la idea de que la evolucin, y en concreto el surgimiento de nuevas especies, puede

    entenderse como un cambio en las frecuencias de unos genes u otros dentro de las poblaciones

    de animales). Ahora bien, el neodarwinismo no clausur las discusiones en torno a la seleccin

    natural; slo las redefini -las desplaz, las llev a otro nivel- conectndolas con la gentica

    (Bowler, 2003). Como luego veremos, form parte de esas discusiones la cuestin de cmo

    encajar el comportamiento de los organismos (esto es, la actividad psicolgica) dentro del

    darwinismo.

    As pues, el concepto bsico de la teora darwiniana es el de seleccin natural. Darwin

    lo formul haciendo converger trabajos suyos e ideas procedentes de varios mbitos: la zoologa

    y la botnica, la geologa y la paleontologa, la embriologa, las prcticas de seleccin artificial

    y la demografa malthusiana. En cuanto a la zoologa y la botnica, fue sobre todo el viaje que

    realiz entre 1831 y 1836 en el bergantn Beagle (Darwin, 1887) lo que le llev a recabar datos

    sobre plantas y animales y sobre la relacin entre las variedades de unas y otros con sus

    respectivos entornos fsicos y con las condiciones geolgicas de cada lugar (tambin tom notas

    antropolgicas). Durante ese viaje, que le permiti visitar diversas tierras e islas de Amrica del

    Sur y tambin las Islas de Cabo Verde, Tahit y algunas costas de Australia y Nueva Zelanda,

    Darwin (1839) elabor un diario donde registr meticulosamente sus observaciones y que le

    sirvi para, mediante la comparacin entre las caractersticas morfolgicas de plantas y

    animales, y en funcin de sus semejanzas y diferencias segn los distintos ambientes, conjeturar

  • filiaciones evolutivas (filogenticas) entre unas y otras especies. Surga la idea de que entre las

    especies semejantes existe parentesco filogentico. Por su parte, la geologa y la paleontologa

    sugeran asimismo a Darwin relaciones entre estratos geolgicos y pocas de las que podran

    proceder los fsiles, algo que reforzaba su inters por la relacin entre las especies y el medio

    ambiente de cada una de ellas.

    Por lo que respecta a la embriologa, cuando Darwin comenz a elaborar su teora

    estaba en boga la ley biogentica. Aunque hubo varias versiones de esta ley, que estuvo vigente

    hasta el surgimiento del neodarwinismo y recientemente ha sido recuperada en algunos de sus

    aspectos por el enfoque evo-devo (al que nos referiremos muy brevemente ms abajo),

    bsicamente consista en relacionar la morfologa adulta de animales inferiores con la de

    animales superiores en su estado embrionario. De ah la denominada teora de la recapitulacin -

    expresin usada normalmente como sinnimo de ley biogentica-, segn la cual la ontogenia

    recapitula la filogenia, es decir, las fases que atraviesa un organismo durante su vida individual

    (ontogenia) corresponden, de forma abreviada, a las que atravesaron sus antepasados durante la

    evolucin (filogenia). Dicho de una manera muy sencilla, es lo que subyace a la idea popular de

    que, por ejemplo, un embrin humano se parece a un pez. Pues bien, Darwin incorpor la teora

    de la recapitulacin (Richards, 1992) al interpretar que las similitudes entre fases embrionarias y

    estadios filogenticos primitivos demostraban su concepcin de la evolucin como

    descendencia con modificaciones regida por la seleccin natural: si el embrin recuerda a

    estados filogenticos primitivos es porque no ha sido afectado por la seleccin natural y, por

    tanto, su morfologa no ha tenido que ajustarse a las demandas del ambiente.

    Por su parte, las prcticas de seleccin artificial eran las de los ganaderos, agricultores,

    criadores de caballos, gallos y perros de caza, jardineros, colombfilos, etc., que realizaban

    cruces e hibridaciones para seleccionar variedades de plantas o razas de animales que

    presentaran las caractersticas deseables para la agricultura, la caza, la ganadera, la equitacin,

    las peleas de gallos, etc. As, injertaban unas plantas en otras o hacan que se reprodujeran entre

    s los individuos que presentaban los rasgos buscados (resistencia, olfato, docilidad,

    fertilidad...). Lo que se le ocurri a Darwin fue proyectar eso mismo en la naturaleza e imaginar

    que las condiciones fsicas y sociales del medio (factores como el clima, los recursos

    alimentarios o la competencia y la colaboracin con otras especies e individuos) haban

    contribuido a la supervivencia de los ms aptos; es decir, los individuos mejor adaptados al

    entorno o los que mejor se haban sabido adaptar a l haban sobrevivido y haban legado a sus

    descendientes sus rasgos adaptativos. En esto consiste la seleccin natural: es la propia

    naturaleza, metafricamente hablando (puesto que no lo hace intencionadamente), la que

    selecciona unas u otras variedades de plantas y unos u otros linajes de animales, que con el paso

    del tiempo se acaban aislando (es decir, ya no se cruzan entre s) y dando lugar as a especies

  • distintas. El rbol filogentico, tal y como se lo imaginaba Darwin, consista en una enorme

    ramificacin de especies a partir de un antepasado troncal comn. Aqu tambin entra en juego

    influencia de la preocupacin por la clasificacin taxonmica, caracterstica de la ciencia de la

    poca y procedente del siglo anterior, de autores como el antes mencionado Linneo, quien haba

    realizado la clasificacin ms importante de las especies animales, que sin embargo no era

    evolucionista sino esttica, fijista (Lamarck s haba intentado realizar una clasificacin

    evolucionista, o mejor, transformista) (Alvargonzlez, 1992). Darwin no tard en sospechar

    relaciones de parentesco evolutivo sugeridas por las similitudes morfolgicas y fisiolgicas

    entre distintas clases de organismos. Desde un punto de vista darwinista, la taxonoma poda

    adaptarse a un formato evolutivo, dinmico, donde las categoras clasificatorias derivaban unas

    de otras debido a la descendencia con modificaciones. Las categoras ms generales (p.ej.

    mamferos) englobaban a otras ms especficas (perros, gatos, humanos, delfines...) porque

    aqullas haban constituido troncos o ramas principales de donde estas ltimas haban derivado

    como ramas secundarias.22

    Por ltimo, la demografa del britnico Thomas Malthus (1766-1834), y en concreto la

    idea de este autor segn la cual los recursos naturales crecen en progresin aritmtica mientras

    que la poblacin humana crece en progresin geomtrica, proporciona a Darwin la base para

    imaginar la lucha por la vida como competencia por unos recursos que siempre son limitados (o

    sea, no dan para todos). Malthus supona que la supervivencia de individuos y naciones

    dependa de su ingenio, de su capacidad para buscar soluciones innovadoras con las que

    procurarse el sustento. Ahora bien, Darwin no necesariamente pensaba la lucha por la existencia

    en trminos de pura competencia o pelea despiadada. Tambin caba la colaboracin. La lucha

    por la vida y la supervivencia del ms apto simplemente se referan al hecho de que los

    organismos, presionados por las circunstancias ambientales y por sus propias necesidades

    fisiolgicas, deben buscarse la vida -si se nos permite expresarlo as- y ello constituye el motor

    del cambio evolutivo.

    Veamos, para terminar este epgrafe, cmo explica la seleccin natural el propio Darwin

    (1859, p. 156):

    Si en condiciones cambiantes de vida los seres orgnicos presentan diferencias

    individuales en casi todas las partes de su estructura -y esto es indiscutible-; si, debido a

    su progresin geomtrica de aumento, hay una rigurosa lucha por la vida en alguna

    edad, estacin o ao -y esto, ciertamente, no puede discutirse-; entonces, considerando

    la complejidad infinita de las relaciones de todos los seres orgnicos entre s con sus 22 . Otro tipo de prctica que facilit a Darwin la elaboracin de su teora fue el coleccionismo, al que eran bastante aficionadas las clases altas europeas de su poca; en este caso, el coleccionismo de flores singulares, minerales, animales disecados, mariposas, escarabajos, fsiles, etc.

  • condiciones de vida, que causan una diversidad infinita en la estructura, constitucin y

    costumbres, para ventaja suya, sera el hecho ms extraordinario que no se hubiesen

    presentado nunca variaciones tiles a la prosperidad de cada ser, del mismo modo que

    se han presentado tantas variaciones tiles para el hombre. Pero si alguna vez ocurren

    variaciones tiles a cualquier ser orgnico, los individuos as caracterizados tendrn

    seguramente las mayores probabilidades de conservarse en la lucha por la vida, y, por el

    poderoso principio de la herencia, stos tendern a producir descendencia con caracteres

    semejantes. A este principio de conservacin o supervivencia de los ms aptos lo he

    llamado seleccin natural. Conduce este principio al perfeccionamiento de cada ser en

    relacin con sus condiciones orgnicas e inorgnicas de vida, y, por consiguiente, en la

    mayor parte de los casos, a lo que puede considerarse como un progreso en la

    organizacin. Sin embargo, las formas inferiores y sencillas persistirn mucho tiempo si

    estn bien adecuadas a sus sencillas condiciones de vida.

    Seleccin natural y psicologa

    La obra de Darwin no incluye una teora psicolgica propiamente dicha. Slo hay en

    ella elementos de psicologa asociacionista procedente la filosofa empirista (segn la cual los

    contenidos de la mente seran resultado de la asociacin de sensaciones o de sensaciones23 y

    movimientos) y una distincin general entre inteligencia (creacin de hbitos), hbitos

    (entendidos como inteligencia automatizada) e instintos (hbitos hereditarios) que era bastante

    tpica en la poca. No obstante, la presencia de lo psicolgico en la obra de Darwin puede

    detectarse en su teora sobre la expresin de las emociones, sus reflexiones sobre el instinto y en

    la propia idea de seleccin natural. La nocin de instinto, como ahora veremos, es transversal a

    ambas.

    En cuanto a la expresin de las emociones, Darwin (1872) estudi las expresiones

    faciales y corporales de las diferentes emociones en varias especies y en varias culturas

    humanas, concluyendo que existe una continuidad entre los animales y el ser humano y que las

    emociones humanas bsicas son universales. La teora darwiniana sobre las emociones era

    bsicamente lamarquista, en la medida en que supona que acciones que originariamente (en

    momentos pasados de la evolucin) haban sido voluntarias, inteligentes, se haban acabado

    automatizando en forma de hbitos y finalmente se haban convertido en instintos, o sea, en

    acciones innatas, heredadas. Tal sera el caso de la mayor parte de las expresiones emocionales

    humanas, y de ah su universalidad y su similitud con las de los animales filognticamente ms

    23 . Con el significado de estimulaciones de los rganos sensoriales.

  • cercanos a nosotros. En cuanto a la seleccin natural, un problema importante era el del papel

    del comportamiento (o lo psicolgico) en la evolucin. Aqu se cruzaban cuestiones de

    psicologa comparada y problemas relativos a la teorizacin de los instintos en su relacin con

    los hbitos y la inteligencia (volveremos sobre esto en el tema 7). Por lo pronto, la extensin a

    la naturaleza de la idea malthusiana de la lucha por la existencia en circunstancias de escasez de

    recursos supona que aquello que los animales consiguen hacer para adaptarse a esas

    circunstancias y explotar mejor los recursos disponibles es decisivo para su supervivencia. En

    consecuencia, es muy fcil entender esta idea en el sentido de que los animales (o grupos) ms

    inteligentes o ms capaces de aprender soluciones innovadoras (p.ej. para conseguir alimento

    antes que otros) son los que sobrevivirn. Esto sita lo psicolgico en el centro de la seleccin

    natural y, por ende, de la evolucin. Esta cuestin sera central para la psicologa funcionalista

    norteamericana y la psicologa comparada. Baste ahora sealar que Darwin no ofreci una

    solucin definitiva. Se limit a considerar los problemas de algunas de las soluciones que se

    barajaban en la poca y a las que l mismo tenda a veces, especialmente la lamarquista y la

    mecanicista (Snchez, 2009). De acuerdo con el lamarquismo, como vimos antes, la funcin

    crea el rgano; es decir, aquello que los animales aprenden al enfrentarse a las demandas del

    medio acaba fijndose de algn modo en su cuerpo y es transmitido a los descendientes (algo

    que aos ms tarde se demostrara bioqumicamente imposible). De acuerdo con las

    perspectivas ms mecanicistas, carece de sentido introducir en la teora de la evolucin

    conceptos como el de inteligencia -o, en general, conceptos psicolgicos- y todo lo que hay que

    hacer es entender aquello que los animales hacen como una mera expresin de capacidades ya

    contenidas de forma innata en ellos: el aprendizaje de nuevos comportamientos adaptativos no

    sera ms que un proceso mecnico a travs del cual los instintos ajustan al organismo a su

    medio. Una tercera va, que Darwin no explor, fue la de la teora de la seleccin orgnica

    formulada por el funcionalista James Mark Baldwin y otros autores a finales del siglo. Lo nico

    que adverta Darwin es que el lamarquismo, a pesar de que l mismo lo utilizaba en cuestiones

    como la de las emociones, al poner por delante el aprendizaje de nuevos hbitos y subordinar a

    l el surgimiento de los rganos, constitua una suerte de nuevo creacionismo camuflado, pues

    implicaba algo as como que el cuerpo es una creacin de la mente: el animal decide qu rgano

    necesita. Ahora bien, Darwin tambin desconfiaba de la solucin contraria, la mecanicista,

    segn la cual el rgano produce la funcin, de modo que el comportamiento de los seres vivos

    no es sino un producto mecnico del funcionamiento de su sistema nervioso, puro movimiento

    corporal, meros instintos. Darwin desconfiaba de esta perspectiva porque anulaba el sentido de

    la lucha por la existencia: si los organismos son como marionetas carentes de inteligencia,

    entonces no se puede hablar propiamente de novedades adaptativas; el xito o el fracaso en la

    competencia por los recursos, en realidad, se encuentra ya predeterminado de forma innata, no

    depende del ingenio o el aprendizaje: no hay novedades adaptativas, no se forman nuevos

  • hbitos. De hecho, Darwin (1877) criticaba la nocin de lo que en aquel momento se llamaban

    instintos perfectos, esto es, conductas (supuestamente) innatas que se desplegaban en las

    circunstancias necesarias sin necesidad de aprendizaje alguno. Si fuera as -razonaba-, lo normal

    sera que las especies se extinguieran debido a la rigidez de su repertorio de comportamientos,

    incapaz de adaptarse al ms mnimo cambio del ambiente. Es necesaria, pues, la inteligencia,

    que permite el aprendizaje.

    Con todo, el neodarwinismo, al que volveremos dentro de un momento, se orient hacia

    una versin geneticista de la perspectiva mecanicista e intent dejar fuera de la teora de la

    evolucin las cuestiones relativas al comportamiento, a lo psicolgico. Antes de ver cmo lo

    hizo, vamos a detenernos un instante en algunas derivas sociopolticas del darwinismo que

    prolongan sus tentculos hasta nuestros das con resultados ideolgicos y polticos criticables: el

    darwinismo social y el hereditarismo

    Darwinismo social y hereditarismo

    Como dijimos antes, el impacto del darwinismo en la ciencia y el pensamiento de

    finales del siglo XIX fue decisivo. Uno de sus efectos ms importantes -especialmente relevante

    para las ciencias sociales, la psicologa y la poltica- fue el denominado darwinismo social, una

    extensin del darwinismo a la interpretacin de la organizacin y evolucin de la sociedad

    humana que, adems, legitimaba cientficamente ciertas polticas liberales: las del laissez faire,

    es decir, la no intervencin -que sera artificial- en el libre curso del intercambio de mercancas

    y el flujo de capital y fuerza de trabajo. En realidad el darwinismo social no procede de Darwin

    (quin adems lo critic), sino que es ligeramente anterior. Su mximo representante fue el

    filsofo ingls Herbert Spencer (1820-1903), que comenz basndose en Lamarck y luego

    intent incorporar a su concepcin del evolucionismo algunas ideas darwinianas. Spencer pona

    en un primer plano la competencia entre individuos como motor del progreso social y rechazaba

    la ingerencia estatal en la sociedad (Spencer, 1884). Para este autor, la sociedad que respete esa

    competencia disfrutar de una prosperidad generalizada y representar la cima de la evolucin

    biolgica, cultural y moral.

    En general, el darwinismo social supone simplemente que las leyes que rigen la

    sociedad constituyen un subconjunto de las leyes biolgicas. De hecho, algunos darwinistas

    sociales, a diferencia de Spencer, consideraban que la cooperacin, ms que la evolucin,

    constitua la base de la evolucin social. No obstante, la expresin darwinismo social suele

    identificarse con la versin spenceriana del mismo, que pivotaba en torno a la competencia.

    Cercana al darwinismo social, con el que comparta el innatismo, estaba una tendencia

    ms difusa a la que podemos denominar hereditarismo. Es la idea de que todas las capacidades

  • psicolgicas humanas, o al menos las bsicas, son innatas e inmodificables, o en el mejor de los

    casos difciles de modificar. Como puede suponerse, esta idea tuvo y sigue teniendo multitud de

    versiones, unas ms radicales que otras, aunque normalmente ha ido y va ligada -al igual que el

    darwinismo social- a la justificacin de ciertos proyectos polticos basados en la (supuesta)

    desigualdad natural de los seres humanos: dicho en romn paladino, unas personas nacen listas

    y otras nacen tontas, de manera que -al menos en ausencia de ingerencias estatales que a travs

    de la reasignacin de recursos desvirten el libre juego de la competencia entre las capacidades

    de unas personas y otras- el lugar que cada cual ocupa en la sociedad se debe a sus

    competencias innatas; cada persona ocupa en la sociedad el lugar que naturalmente merece. Uno

    de los principales hereditaristas de finales del siglo XIX fue Francis Galton (1822-1911), primo

    de Darwin y uno de los pioneros de la psicometra. Galton fue un darwinista social al que se

    conoce asimismo por ser uno de los principales promotores de la eugenesia, de la cual ofreci la

    primera sistematizacin. La eugenesia consista (y consiste) en la prctica de la seleccin

    artificial para conseguir el perfeccionamiento biolgico de la especie humana. En general, se

    considera eugenesia a todo control de la reproduccin humana con fines profilcticos,

    teraputicos o, sobre todo, de mejora biolgica (son eugensicas, pues, prcticas como la

    esterilizacin de los dbiles mentales, la obligatoriedad del certificado mdico prenupcial o

    ciertos tipos de aborto). Galton suele tratarse en historia de la psicologa como creador de los

    tests de inteligencia, aunque a veces se valora ms positivamente la creacin de los mismos que

    realiz un poco despus en Francia Alfred Binet (1857-1911), orientados a la deteccin de nios

    subnormales para proporcionarles una educacin especial. En todo caso, James McKeen

    Cattell, quien acu la expresin test mental en 1890, importara a los Estados Unidos las

    pruebas de Galton. Lo que buscaba Galton era un procedimiento de medicin mental orientada a

    detectar un factor general de inteligencia, precursor del clebre factor g definido por su seguidor

    Charles Spearman en 1904. De acuerdo con sus convicciones eugensicas, Galton propona

    utilizar las pruebas de inteligencia -pruebas que pasaba en un laboratorio antropomtrico que

    haba construido a las afueras de Londres- como vas para averiguar quines deban emparejarse

    y, por tanto, reproducirse.

    No es casual que uno de los mbitos en que ha desarrollado el hederitarismo en

    psicologa haya sido el de la psicometra, y en especial el de la medicin de la inteligencia (sin

    que ello implique que toda la psicometra actual sea hereditarista, desde luego). A continuacin,

    y por falta de espacio, damos solamente unas pinceladas al respecto (para ms informacin

    vase una exposicin crtica en Lpez Cerezo y Lujn, 1989).

    El antecedente del hereditarismo contemporneo fue el ingls Cyril L. Burt (1883-

    1971), que a principios del siglo pasado, sien