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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA UNIVERSIDAD DEL ZULIA FACULTAD DE MEDICINA DIVISION DE ESTUDIOS PARA GRADUADOS POSTGRADO DE PUERICULTURA Y PEDIATRÍA HOSPITAL “NUESTRA SEÑORA DE LA CHIQUINQUIRAINFECCIÓN URINARIA EN NIÑOS MENORES DE 10 AÑOS QUE ACUDEN A LA EMERGENCIA PEDIÁTRICA Trabajo Especial de Grado presentado ante la División de Estudios para Graduados de la Facultad de Medicina, Universidad del Zulia, Maracaibo, Venezuela, para optar al título de Especialista en Puericultura y Pediatría. Tutora: Autora: Dra. Dexi Vera de Soto M.C. Joseline M. León Alaña. C.I.: 4.058.563 C.I.: 15.194.654 Especialista en Pediatría Profesora Titular de LUZ Dra. En Ciencias Médicas Maracaibo, Noviembre 2011

INFECCIÓN URINARIA EN NIÑOS MENORES DE 10 …tesis.luz.edu.ve/tde_arquivos/34/TDE-2014-01-15T09:50:03Z-4378/... · en hemograma, velocidad de sedimentación globular (VSG), proteína

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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA UNIVERSIDAD DEL ZULIA FACULTAD DE MEDICINA

DIVISION DE ESTUDIOS PARA GRADUADOS POSTGRADO DE PUERICULTURA Y PEDIATRÍA

HOSPITAL “NUESTRA SEÑORA DE LA CHIQUINQUIRA”

INFECCIÓN URINARIA EN NIÑOS MENORES DE 10 AÑOS QUE ACUDEN A LA EMERGENCIA PEDIÁTRICA

Trabajo Especial de Grado presentado ante la División de Estudios para Graduados de la Facultad de Medicina, Universidad del Zulia, Maracaibo, Venezuela, para optar al título de Especialista en Puericultura y Pediatría. Tutora: Autora: Dra. Dexi Vera de Soto M.C. Joseline M. León Alaña. C.I.: 4.058.563 C.I.: 15.194.654 Especialista en Pediatría Profesora Titular de LUZ Dra. En Ciencias Médicas

Maracaibo, Noviembre 2011

4

DEDICATORIA

A Dios, por ser la luz y guía durante toda mi

vida.

A los pacientes pediátricos, base fundamental

en el ejercicio de mi profesión.

5

AGRADECIMIENTO

A Dios, principalmente por permitirme realizar una de mis metas.

A la Dra. Dexi Vera de Soto, mi asesora de tesis, por sus conocimientos

impartidos durante estos tres años de estudios.

A la Dra. Evelin Villalobos de Rivero por sus enseñanzas durante esta

especialidad.

Al personal del Hospital Chiquinquirá, mi más profundo agradecimiento.

Joseline.

6 LEÓN ALAÑA, Joseline Marilioz. “INFECCIÓN URINARIA EN NIÑOS MENORES DE 10 AÑOS QUE ACUDEN A LA EMERGENCIA PEDIATRÍCA”. (2011). Trabajo Especial de Grado presentado ante la División de Estudios para Graduados, Facultad de Medicina, Universidad del Zulia para optar al Título de Especialista en Puericultura y Pediatría. Maracaibo, República Bolivariana de Venezuela, 47 p.

RESUMEN

La infección de vías urinarias en la edad pediátrica se considera un problema importante y creciente a nivel mundial. Objetivo: Determinar la posible relación entre los aspectos clínicos y de laboratorio en la Infección Urinaria en niños menores de 10 años que acuden a la Emergencia Pediátrica del Hospital Chiquinquirá de Maracaibo del estado Zulia. Material y Métodos: Se realizó una investigación descriptiva, prospectiva, y longitudinal con diseño no experimental. Se incluyeron 96 pacientes entre un mes a diez años de edad. Se tomó información de las historias clínicas revisando las variables: edad, género, signos y síntomas, estado general, antecedentes familiares, leucocitosis en hemograma, velocidad de sedimentación globular (VSG), proteína C reactiva, examen de orina y urocultivo, comparando cada una de ellas con el resultado del ecograma renal. Resultados: se mostró un predominio en el sexo femenino (66,7%), la edad promedio correspondió a 3,9 ± 0,9 años. La mayoría procedían de la zona rural (75%), el 91,6% era su primer episodio. La fiebre (87,5%), el vómito (54,2%) y el malestar general (50%) fueron las principales formas clínicas de presentación. Se encontró examen de orina patológico donde predominaron las bacterias (94%), leucocitosis más de 10 leucocitos por u/L (90%), nitritos (45%) y piocitos (42%). Se observó leucocitosis más de 15.000mm³ en el hemograma (70,8%), velocidad de sedimentación globular mayor de 20mm en la primera hora (87,5%) y proteina C reactiva positiva en el 51,1% de los casos. El germen más frecuentemente encontrado fue la Eschericha coli (83,3%), el antibióticograma mostró sensibilidad a cefadroxilo (84%), amoxicilina (68%) y amoxicilina + acido clavulánico (68%). Conclusión: Se concluye que existe relación entre la clínica, el laboratorio y el uroanálisis. Palabras claves: Infección urinaria – Niños – Clínica – Examen de Orina – Urocultivo. Correo electrónico: [email protected]

7 LEÓN ALAÑA, Joseline Marilioz. “URINARY INFECTION IN SMALLER CHILDREN OF 10 YEARS THAN GOES TO THE PAEDIATRIC EMERGENCIA” (2011). Trabajo Especial de Grado presentado ante la División de Estudios para Graduados, Facultad de Medicina, Universidad del Zulia para optar al Título de Especialista en Puericultura y Pediatría. Maracaibo, República Bolivariana de Venezuela. 47 p.

ABSTRACT

Urinary tract infection in children is considered a major and growing problem worldwide. Objective: To determine the relationship between the clinical and laboratory urinary tract infection in children under 10 years attending the Pediatric Emergency Chiquinquirá Hospital of Maracaibo, Zulia state. Material and Methods: A descriptive, prospective, and longitudinal non-experimental design. We included 96 patients from one month to ten years old. Information was taken by reviewing medical records: age, gender, signs and symptoms, performance status, family history, leukocytosis in blood count, erythrocyte sedimentation rate (ESR), C reactive protein, urinalysis and urine culture, comparing each of them with the outcome of renal echogram. Results showed a predominance in females (66.7%), the average age fell to 3.9 ± 0.9 years. Most came from rural (75%), 91.6% was its first episode. Fever (87.5%), vomiting (54.2%) and malaise (50%) were the main clinical forms of presentation. We found abnormal urine test bacteria dominated (94%), leukocytosis more than 10 leukocytes per U / L (90%), nitrite (45%) and piocitos (42%). Leukocytosis was observed over 15.000mm ³ blood count (70.8%), erythrocyte sedimentation rate greater than 20mm in the first hour (87.5%) and positive C-reactive protein, 51.1% of cases. The most frequently found germ was Escherichia coli (83.3%), the sensitivity was antibióticograma cefadroxil (84%), amoxicillin (68%) and amoxicillin + clavulanic acid (68%). Conclusion: We conclude that there is a relationship between clinical, laboratory and urinalysis. Keywords: Urinary tract infection - children - Clinical - Urine Test - Urine culture Correo electrónico: [email protected]

8

INDICE DE CONTENIDO

Pág. Dedicatoria ……………………………………………………………..……….……….. 4

Agradecimiento …………………………………………………………………….……. 5

Resumen ………………………………………………………….…………………..….. 6

Abstrasct ……………………………………………………………………………..… 7

Índice de Contenido …………………………………………………………………... 8

Índice de Tablas …………………………………………………………………………. 9

Índice de Figuras ……………………………………………………………………….. 10

Introducción ............................................................................................................ 11

Materiales y Métodos .............................................................................................. 22

Resultados .............................................................................................................. 24

Discusión ................................................................................................................ 37

Conclusiones …....................................................................................................... 40

Recomendaciones…................................................................................................ 41

Literatura Citada ….................................................................................................. 42

Anexo ….................................................................................................................. 45

9

ÍNDICE DE TABLA

Pág.

TABLA 1 Infección de vías urinarias según antecedentes familiares ………. 28

TABLA 2

Infección de vías urinarias según número de episodios …………..

29

TABLA 3

Infección de vías urinarias forma clínica de presentación ……...…

30

TABLA 4

Infección de vías urinarias según examen de orina ……………….

31

TABLA 5

Infección de vías urinarias según examen de laboratorio…………

32

TABLA 6

Infección urinaria según sensibilidad antimicróbiana ………..…….

36

10

ÍNDICE DE FIGURA

Pág.

FIGURA 1 Infección de vías urinarias según edad y sexo ………….………… 26

FIGURA 2

Infección de vías urinarias según localidad ….. ………….…………

27

FIGURA 3

Infección de vías urinarias según ecograma renal …….……………

33

FIGURA 4

Tipo de malformación congénita ……………………………………...

34

FIGURA 5

Infección de vías urinarias según reporte del Gram ………………..

35

11

INTRODUCCIÓN

La infección de vías urinarias (IVU) es la enfermedad bacteriana, de carácter no

epidémico, más frecuente en la infancia. Aproximadamente entre 3 a 5% de las

hembras y entre 1-2% en los varones se verán afectados a lo largo de su infancia por al

menos un episodio. Por lo tanto, constituyen un motivo frecuente de consulta en la edad

pediátrica, con una incidencia variable según la edad y sexo1. La IVU, por su clínica a

veces silenciosa y otras muy variadas, pasan a menudo desapercibidas, las cuales

pueden complicarse, si no se instaura precozmente el tratamiento adecuado

evolucionando hacia una pielonefritis, sepsis o daño renal irreversible2,3.

La infección del tracto urinario (IVU) se define como la presencia de síntomas y

signos sugerentes asociado a invasión y multiplicación en la vía urinaria de organismos

patógenos, especialmente bacterias1,3,4. Estos microorganismos provienen mayormente

de la región perineal (vía ascendente), aunque existen otras vías de infección menos

frecuentes como la vía sistémica (hematógena) y la vía directa (cirugías urológicas,

traumas abdominales, etc.)5,6.

Desde el punto de vista práctico la infección de vías urinarias en niños puede ser

clasificada en1,7,8:

1. Primera infección: Cuando se presenta un primer episodio. En lactantes y niños

la primera infección es considerada complicada por la alta prevalencia de

anormalidades del tracto urinario asociadas a IVU y que predisponen a daño renal9,10.

2. Infección recurrente. Se puede dividir en: a) Infección (bacteriuria) no resuelta:

Generalmente asociada a tratamiento inapropiado, más frecuentemente secundario a

resistencia antimicrobiana al antibiótico usado, b) Recaída: Ocurre luego de tener la

orina estéril demostrada por urocultivo negativo. Se reinfecta por el mismo germen

inicial. Se presenta más frecuentemente cuando existen anormalidades de base en el

tracto urinario, y c) Reinfecciones: Se producen por gérmenes diferentes al inicial. Es

secundario a ruta fecal–perineal–uretral en niñas y colonización periuretral en niños11.

12

Las categorizaciones clínicas en alta versus baja, complicada versus no

complicada, o cistitis versus pielonefritis implican severidad de la infección. La IVU

complicada implica un factor predisponente de base que produce la misma. Estas

clasificaciones son útiles para establecer la agresividad del tratamiento inicial, pero es

difícil determinar según ellas, cuáles requieren una evaluación menos rigurosa. Al

evaluar todo niño con IVU, hay que tener en cuenta la definición de bacteriuria

asintomática, la cuál es la presencia de bacteriuria significativa en urocultivos repetidos

en niños asintomáticos12,13.

La IVU es una de las infecciones más frecuentes en niños, siendo superada solo

por la faringoamigdalitis aguda y la otitis media aguda. En la población menor de 1 año

la prevalencia en niñas es de 6.5% y en varones es del 3.3%. Luego del año de vida, la

prevalencia disminuye en varones al 1.9% y en niñas aumenta al 8.1%14. El riesgo en

niños circuncidados es 5 a 20 veces mayor que en niños no circuncidados,

presentándose esta predisposición en menores de 1 año15,16.

Dentro de la etiopatogenia de la IVU es necesario distinguir factores bacterianos y

del huésped17,18.

• Factores bacterianos: Los gérmenes más frecuentemente encontrados son

bacilos entéricos gramnegativos, principalmente Escherichia coli en más del 80% de los

casos. En pacientes con alteraciones del aparato urinario, sondaje vesical ú otro tipo de

instrumentación urológica o tratamiento antimicrobiano, aumenta la frecuencia de

bacterias diferentes, como Proteus sp, Klebsiella aerobacter, Enterococcus sp y

Pseudomonas aeruginosa. También se pueden encontrar ocasionalmente cocos

grampositivos, como Staphylococcus aureus y epidermidis19,20.

De las 150 cepas de E. coli, diez de ellas son responsables de la mayoría de las

IVU. Esta situación está relacionada con la presencia de factores bacterianos

virulentos, como la alfa hemolisina (proteína citolítica que lesiona la membrana celular),

sideróforos (proteína quelante de hierro que prolonga la vida de la bacteria), y

polisacáridos capsulares (que disminuyen la activación del complemento). La presencia

13 de fimbrias en las bacterias, que favorecen su adherencia al urotelio, también es un

factor de virulencia importante: El 91% de las cepas de E. coli que producen pielonefritis

tienen fimbrias, contra 19% en las que producen cistitis, 14% en las obtenidas en

bacteriuria asintomática y el 7% en las cepas fecales en controles20,21.

• Factores del huésped: Las bacterias pueden acceder al tracto urinario a través

de cuatro vías: a) Vía ascendente, desde la uretra y la vejiga a los riñones, la más

común; b) Hematógena: en pacientes inmunocomprometidos ó en neonatos; c)

Linfática, desde el recto, colon y linfáticos periuterinos, difícil de comprobar; y d) Directa,

a través de fístulas rectovaginales ó a cualquier parte del tracto urinario22,23.

Los factores del huésped que están implicados en la presencia de bacteriuria se

pueden resumir en:

1. Edad: Los neonatos tienen mayor predisposición a IVU por la inmadurez de su

sistema inmunológico. Además existe una elevada colonización periuretral en el primer

año de vida16.

2. Colonización fecal, periuretral y prepucial: La importancia de la colonización

fecal no se puede hacer a un lado ya que el mecanismo de infección ascendente es el

más frecuente. El uso indiscriminado de antibióticos de cualquier tipo favorece la

proliferación de cepas virulentas y multirresistentes. Este hecho esta relacionado con la

disminución de la prevalencia de IVU en niños circuncidados con respecto a los no

circuncidados15,16.

3. Género: Posiblemente por factores anatómicos inherentes a la mayor

accesibilidad de la vejiga a los gérmenes en las niñas que en los niños por tener la

uretra más corta1.

4. Genéticos: Con mayor frecuencia los niños con IVU recurrentes tienen en su

epitelio urinario receptores, glucolípidos antígenos del grupo sanguíneo P, que facilitan

la adhesión de las fimbrias o pili de E. coli13,24.

14

5. Anormalidades genitourinarias: las IVU en los niños requieren especial atención,

ya que indican frecuentemente anormalidades anatómicas del tracto urinario. Estas

alteraciones deben ser identificadas tempranamente, ya que si no son corregidas a

tiempo pueden llevar a secuelas como cicatrices renales, pérdida de parénquima renal,

hipertensión arterial e insuficiencia renal crónica. Es por esta razón que se recomienda

el estudio imagenológico en todos los pacientes que se presenten con IVU. Dentro de

las principales anormalidades genitourinarias se encuentra1,25,26:

a) Reflujo vesicoureteral (RVU): Se define como el flujo retrógrado anormal de la

vejiga al tracto urinario superior a través de una unión ureterovesical incompetente.

Cuando se asocia a IVU recurrente, es la causa más común de cicatrices renales en

niños. En niños sin historia de IVU la prevalencia se ha calculado en menos del 1%,

pero si existe IVU sintomática, la incidencia aumenta a un 8 a 40% en niños estudiados

en su primera IVU, siendo mayor la prevalencia a menor edad del paciente. Aunque en

la mayoría de los casos se presenta como una entidad aislada y primaria, puede estar

asociado a otras anomalías genitourinarias: vejiga neurogénica (mielomeningocele,

lesión de la médula espinal), obstrucción (disfunción vesical, valvas ureterales

posteriores, ureteroceles ectópicos, duplicación del sistema colector, síndrome de

Prune belly, extrofia vesical) 16.

b) Vejiga neurogénica: Tienen alto riesgo de deterioro de la función renal con IVU

debido a aumento de la presión en el tracto urinario, vaciamiento vesical incompleto y

manipulaciones frecuentes.

c) Síndrome de eliminación disfuncional (SED): Se llaman así a las

manifestaciones de disfunción vesical sin alteración neurológica ni anatómica. Puede

influenciar la severidad y la frecuencia de IVU. Incluye problemas como inestabilidad

vesical, micción infrecuente, urgencia urinaria ó enuresis secundaria. Se puede

acompañar de estreñimiento ó encopresis16.

El diagnóstico de infección del tracto urinario se debe realizar en base a tres

aspectos: historia clínica, examen de orina y examen complementarios4,6,23.

15

A). Historia clínica, los cuales incluyen la amnanesis y el examen físico. Se debe

prestar especial atención a la existencia de:

- Antecedentes familiares de malformaciones de vías urinarias, infecciones urinarias

y litiasis renal.

- Antecedentes personales de Infección urinaria previa, estreñimiento, incontinencia

urinaria, vulvovaginitis.

- Sintomatología actual de fiebre, disuria, polaquiuria, incontinencia urinaria, dolor

suprapúbico21.

No hay signos específicos de IVU en lactantes y preescolares. En este grupo de

edad los signos más comunes son inespecíficos e incluyen fiebre, irritabilidad,

inapetencia, vómito, retraso en el crecimiento y diarrea. Se puede presentar fiebre sin

foco aparente como única manifestación de IVU en niños de 2 meses a 2 años de edad

hasta en un 5% de los casos, por lo tanto se debe considerar su diagnóstico en este

grupo poblacional. La posibilidad de que una IVU sea la causa de la fiebre se puede

incrementar si hay historia de llanto con la micción ú orina de mal olor. También se

puede encontrar en niños mayores los signos clásicos de disuria, urgencia urinaria,

enuresis, polaquiuria ó dolor hipogástrico ó lumbar15,20.

Los hallazgos físicos generalmente son inespecíficos, y en algunos pacientes se

puede limitar a dolor a la palpación en los puntos ureterales abdominales ó puño

percusión lumbar positiva. En todo caso se debe examinar de manera completa el

abdomen y los genitales del niño ó niña.

Es importante anotar que síntomas como la fiebre ó dolor en el flanco, que

habitualmente se consideran signos de pielonefritis, se correlacionan poco con

localización alta de las bacterias en el tracto urinario, ya que menos del 50% de

pacientes con diagnóstico de IVU con esta sintomatología tienen compromiso de las

16 vías urinarias altas. Por otra parte, un 20% de los pacientes con IVU sin estos síntomas

tienen presencia de bacterias en el tracto urinario alto14.

Se pueden diferenciar tres entidades clínicas diferentes:

- Infección urinaria de vías superiores. Pacientes que incluyen uno o más de los

siguientes criterios: Fiebre superior a 38ºC., escalofrios, lumbalgia, VSG > 30, PCR > 1

mg/dl, osmolalidad < 700 mOsm/Kg, hematuria, cilindros leucocitarios, aumento de β-2-

microglobulina en orina, proteinuria superior a 1 g/día12.

- Infección urinaria de vías inferiores. Pacientes con síndrome miccional no incluidos

en el apartado anterior.

- Bacteriuria asintomática. Puede cursar con enuresis nocturna4,22.

B). Toma de la muestra de orina. El diagnóstico de IVU requiere de la toma de

urocultivo. La orina se puede tomar por cuatro métodos:

1) Toma de muestra por micción espontánea con bolsa recolectora de orina: Es la

menos traumática. Requiere una limpieza exhaustiva del área perineal antes de tomar

la muestra y la bolsa no puede permanecer más de 30 minutos colocada para disminuir

la posibilidad de contaminación. Desafortunadamente, los falsos positivos son muy

altos, entre el 85 al 99%.

2) Toma de muestra por micción espontánea de la mitad del chorro urinario: Por

su facilidad es de elección en niños y niñas mayores que controlen esfínteres, con la

salvedad de que puede existir contaminación bacteriana periuretral en niñas y prepucial

en niños1.

3) Toma por cateterización vesical: Es invasiva y puede introducir gérmenes en

una orina de otro modo estéril. Comparada con la muestra por punción suprapúbica

17 tiene una sensibilidad del 95% y una especificidad del 99%, lo que la convierte en una

buena alternativa para la punción en niños pequeños5,9.

4) Toma de muestra por punción suprapúbica: De elección en lactantes y niños

pequeños sin control de esfínteres. Es el gold estándar en la toma de urocultivo por la

ausencia de contaminación en la toma de la orina.

El examen químico y microscópico de la orina puede evidenciar proteinuria,

leucocituria, piuria, cilindros con inclusiones leucocitarias, presencia de nitritos y

hematuria. La sensibilidad y especificidad de cada uno de estos analitos es variable

(cuadro 1).

Cuadro 1 Sensibilidad y especificidad de algunos componentes del examen de orina

Análisis Sensibilidad % Especificidad %

Nitritos positivos 53 98

Leucocitos* 73 81

Bacterias 81 83

* Sobre 10 leucocitos por uL

La presencia de algunos de estos elementos en el examen de orina es sugerente

de IVU y puede ayudar a seleccionar una población en la que se puede iniciar terapia

antimicrobiana precoz, mientras se espera el resultado del urocultivo. Existen casos de

IVU con examen citoquímico de orina normal (5%), y viceversa. Una tinción de Gram de

muestra de orina, obtenida por punción o cateterismo vesical, que muestra una o más

bacterias es altamente sugerente de IVU18,21.

El urocultivo, tomado con técnica apropiada, es el gold estándar para el diagnóstico

de IVU. Cuándo es positivo hay que tener en cuenta la técnica de recolección de la

muestra. El cultivo de una muestra de bolsa recolectora puede dar lugar a equívocos por

la alta probabilidad de contaminación, y se debería tomar por una técnica más apropiada

para confirmar su resultado si es positivo. Si es negativo por bolsa, descarta el diagnóstico

de IVU. Los criterios para el diagnóstico de IVU se especifican en la cuadro 2.

18 Cuadro 2. Criterios de urocultivo para el diagnóstico de IVU

Método de Recolección Recuento (UFC*/ml) Interpretación

Punción Suprapúbica Cualquier recuento de bacilos gramnegativos Cocos grampositivos en adolescentes, más de 5000

Positivo para IVU Positivo para IVU

Cateterismo vesical 50.000 ó más 10.000 a 50.000 Menor de 10.000

Positivo para IVU Infección probable según patógeno y cuadro clínico Infección muy poco probable

Orina limpia de la mitad de la micción

100.000 ó más 10.000 hasta menos de 100.000 Menos de 10.000

Infección muy probable Dudoso, repetir Infección muy poco probable

Bolsa recolectora, una muestra

100.000 ó más 10.000 hasta menos de 100.000 Menos de 10.000

Dudoso, confirmar con una técnica más confiable Dudoso, confirmar con una técnica más confiable. Infección poco probable.

Abreviatura: * UFC: Unidades formadoras de colonias. Fuente: Tomado de: De la Cruz J, Lozano J, Figueroa J, Morales Y. 26

C) Examenes complementarios. A todos los niños y niñas menores de 5 años de

edad con IVU confirmada y en niños mayores con pielonefritis aguda ó IVU recurrentes, se

les debe solicitar ecografía renal, cistografía y gamagrafía renal DMSA – Tc99m. Esto

debido a que es importante detectar alteraciones anatómicas ó funcionales del sistema

urinario, ya mencionadas previamente, que pueden requerir tratamiento específico y que

se convierten en factores predisponentes de IVU, llevando a recurrencias que aumentan el

riesgo de daño renal.23,24.

Dentro de las complicaciones se encuentran:

- IVU recurrentes: Después de la primera IVU cerca del 50% de las niñas menores

de un año de edad tendrán otra infección urinaria en el siguiente año y el 75% en el

transcurso de dos años. En niños el 18% recurrirán en el año siguiente. En el transcurso

de los siguientes cuatro años de la IVU inicial el 8% recurrirá con la misma. Esta tendencia

no cambia, independientemente su la primera IVU fue asintomática ó sintomática, cistitis ó

pielonefritis1.

19

- Cicatrices renales: Están asociadas con reflujo vesicoureteral e IVU en niños. Se

cree que la IVU inicial en el paciente menor de 5 años produciría el daño y que esta

respuesta determina el pronóstico futuro del riñón. Aunque los niños mayores de esta

edad tienen menor riesgo para cicatrices renales postinfecciosas, ellos no están

completamente libres de tenerlas hasta la pubertad. Entre el 6 y el 15% de los niños con

IVU presentan cicatrices renales secundarias, de desarrollo progresivo, que se evidencian

entre uno a tres años luego de la infección1,24.

Dado que la pielonefritis aguda ó infección urinaria alta, a diferencia de la cistitis ó

infección urinaria baja, puede producir lesión renal y cicatrices que alteran la función renal

de forma irreversible, se hace necesario determinar su diagnóstico. La pielonefritis aguda

se presenta entre el 50 al 80% de IVU, siendo mayor el riesgo de padecerla en menores

de dos años y en aquellos con mayor compromiso clínico, sin que estas dos

características sean confiables para su diagnóstico. Esta razón ha llevado a que se

recomiende, de manera discutida, la práctica de una gamagrafía renal con ácido

dimercaptosuccínico-Tc99m (DMSA) en la fase aguda de la enfermedad, sobre todo en

niños con las características descritas, con el fin de diagnosticar pielonefritis aguda.

Si esto no es posible, es deseable realizar una ecografía renal, la cual tiene una baja

sensibilidad para pielonefritis aguda (50% a 60%). Si no se dispone de ellas el diagnóstico

se basará en el cuadro clínico y en el hemograma y los reactantes de fase aguda (PCR y

VSG), a pesar de su alta tasa de falsos positivos19.

- Hipertensión arterial: La causa más común de hipertensión arterial en niños

continúan siendo las cicatrices renales. Se ha encontrado una prevalencia de

hipertensión entre el 12% y el 30% en niños con cicatrices renales, muy superior al 1%

de la población pediátrica general. En este evento parece estar involucrado el

mecanismo de la renina – angiotensina – aldosterona.

El objetivo fundamental del diagnóstico y tratamiento de las infecciones urinarias es:

a) Aliviar la sintomatología y prevenir el desarrollo de daño renal, sobretodo cuando se

habla de lactantes pequeños. b) Erradicar el agente infeccioso. c) Documentar la

20 integridad de las vías urinarias ya que es un factor que puede agravar la infección o

predisponer a la infección de vías urinarias altas y d) Evitar las recidivas7. En el período

neonatal y hasta los 3 meses de edad, se considera que cualquier ITU puede afectar al

riñón e, incluso, evolucionar a una sepsis, por lo cual se debe iniciar tratamiento por vía

parenteral y con dos antibióticos para asegurar una adecuada cobertura antibiótica15,21.

La mejor opción terapéutica es asociar ampicilina con un aminoglucósido

(habitualmente gentamicina) o con Cefotaxima, a las dosis recomendadas para la sepsis

neonatal hasta completar 10 – 14 días de tratamiento. En el niño o niña de más de 3

meses con una ITU complicada es conveniente iniciar el tratamiento por vía parenteral con

un aminoglucósido como la gentamicina o amikacina, o con una cefalosporina como la

Cefotaxima. Una vez mejorada la sintomatología y conocido el resultado del urocultivo, se

continúa el tratamiento por vía oral hasta completar 10-14 días1,9.

En pacientes de más de 3 meses con ITU no complicada febril pero sin afectación

del estado general se puede dar el tratamiento por vía oral ya desde el comienzo;

aunque existen diversas alternativas válidas (cefalosporinas orales, acido nalidíxico). La

antibioticoterapia se mantendrá durante 7 a 10 días. La amoxicilina, al igual que en

muchos países, se ha vuelto poco efectiva, por la presencia de E. coli resistentes. Las

manifestaciones clínicas que sonespecificas en pacientes mayores de 1 ó 2 años,

habitualmente niñas, con síntomas miccionales y sin fiebre son candidatos para

tratamientos cortos de 3-5 días vía oral24.

Una infección urinaria en niños menores o iguales a la edad escolar puede ser

tratada en forma oral con Trimetropim/Sulfametoxasol o una cefalosporina de 2da o 3ra

generación. La dosis de Trimetropim/Sulfa es de 8- 12 mg /kg/día dividido en dos tomas

cada 12 horas, durante diez días en los lactantes y preescolares por 5-7 días en

escolares y adolescentes. Otras drogas, incluyen las cefalosporinas de segunda

generación como cefuroxime: 40 mg/kg/día, las de tercera generación como Cefixime:

8mg/kg/día o el trimetropim solo. La amoxicilina, en dosis de 40mg/kg/día dividida en tres

dosis y la nitrofurantoína: 5mg/kg/día dividida en dos dosis son muy efectivas contra el

enterococo25.

21

El tratamiento parenteral hospitalario, en caso de sepsis o pielonefritis, puede

utilizarse las Cefalosporinas de 2 y 3 generación son efectivas contra los bacilos Gram

negativos; Cefuroxime: 100mg/kg/día dividida en 3 dosis, Cefotaxime: 100 mg/kg/día

(dividida en 3 dosis), Ceftriaxone: 80 mg/kg/día dividido en dos dosis y Ceftazidime: 15

mg/kg/dosis dividido en 3 dosis. Los antibióticos más utilizados son: la Amikacina:

15mg/kg/día dividido en 3 dosis en niños mayores de 2 meses y dividido en 2 dosis en

niños menores de 2 meses y la Gentamicina: 5rng/kg/día dividido en 2 dosis9.

En caso de sospechar o confirmar una pielonefritis se deberá iniciar con una

cefalosporina de 3ra generación por un periodo no menor a 72 horas de tratamiento o

hasta que haya desaparecido la fiebre y luego pasar a una cefalosporina oral de 3ra

generación como es la Cefixime: 8 mg/kg/día dosis únicas por una semana1.

Sobre las bases de las consideraciones anteriores se hace necesario realizar la

presente investigación, con la finalidad de determinar la posible relación entre los

aspectos clínicos y de laboratorio en la Infección Urinaria en niños menores de 10 años

que acuden a la Emergencia Pediátrica del Hospital Chiquinquirá de Maracaibo del

estado Zulia.

22

MATERIAL Y METODOS

Se realizó un estudio descriptivo, prospectivo y longitudinal, de diseño no

experimental. Se evaluaron 96 niños, ambos géneros, menores de 10 años que

acudieron a la Emergencia Pediátrica del Hospital “Nuestra Señora de Chiquinquirá”,

durante los meses de julio de 2010 a julio del 2011, con diagnóstico clínico de infección

de vías urinarias. Fueron excluidos del estudio los recién nacidos y los niños mayores

de 10 años, niños con patologías asociadas, niños que no se realizaron el urocultivo, y

aquellos niños cuya madre se negó a que participara en el estudio.

La recolección de la información se obtuvo a través de una encuesta elaborada

por el autor (anexo). Se revisaron las siguientes variables: edad, definida por grupos

etáreos, género, masculino o femenino; signos y síntomas presentes, características,

concomitantes; antecedentes familiares de malformaciones de vías urinarias,

infecciones urinarias y litiasis renal; antecedentes personales: si el niño ha padecido en

otras oportunidades de infecciones urinarias, estreñimientos, incontinencias urinaria y

vulvovaginitis en caso de ser niña. Se considero fiebre: temperatura igual o mayor de 38

grados centígrados; estado general: bueno, regular o malo;

A cada niño se le tomó 3 cc de sangre venosa (vena ante cubital), para determinar

los niveles séricos de hemoglobina, hematocrito, volumen corpuscular medio,

plaquetas, cuenta blanca y fórmula, velocidad de sedimentación globular, proteína C

reactiva. Asimismo, se tomo muestra de orina. Las muestras fueron procesadas en el

Laboratorio Clínico del Hospital Chiquinquirá. Se considero leucocitosis: mayor de

15.000 leucocitos en el cuadro hemático; elevación de VSG: mayor de 20 mm; proteína

C reactiva positiva; hipostenuria: densidad urinaria igual o menor de 1.005; nitritos:

presencia o ausencia en el uroanálisis y EL: presencia de estearasas leucocitarias en el

uroanálisis. A todos los pacientes se les solicito el urocultivo para analizar el tipo de

germen aislado y antibióticograma.

Posteriormente, a la evaluación clínica se indicó tratamiento médico en forma

empírica, todos los niños fueron programados para su control por la Consulta de

Pediatría en un lapso de diez días. Con la finalidad de obtener los resultados del

23 urocultivo y comparar el Gram y la antibioticoterapia con la indicada al niño. Los

resultados de los exámenes solicitados fueron anexados a cada formulario.

La información fue tabulada en un procesador de base de datos sobre Windows xp

profesional. El análisis estadístico se realizó a través de la estadística descriptiva, se

utilizaron distribuciones de frecuencias absolutas y relativas. Asimismo, se utilizaron

medidas de tendencia central como la media y sus desviaciones estándar. Los resultados

fueron representados en tablas.

24

RESULTADOS

Se estudiaron 96 niños con diagnóstico clínico y por laboratorio de infección de

vías urinarias (IVU). Del total de la población evaluada el 33,3% correspondió a niños

menores de 1 año, de los cuales el 18,8% (18) fueron del sexo femenino y 14,5% (14)

masculino. El 50% correspondió a niños entre las edades de 1 a 5 años donde el 40,6%

(39) correspondió al sexo femenino y el 9,4% al masculino (9). Del mismo modo, se

obtuvo 16,7% casos de IVU en niños cuyas edades oscilaron entre 6 y 10 años, donde

7,3% (7) correspondió al sexo femenino y 9,4% (9) al masculino, tal como se observa

en la figura 1. El promedio de edad de los niños evaluados correspondió a 3,9 ± 0.9

anos de edad.

En la figura 2, se observa la distribución de la población según la localidad,

determinándose que el 75% (72) de los pacientes evaluados procedían de la zona

urbana, mientras que el 25% (24) de la zona rural.

En la tabla 1, se muestra el antecedente familiar de IVU, donde se determinó que

el 50% de la población evaluada no tenía antecedentes familiares de IVU, el 20,8%

presentó antecedente familiar positivo para IVU, un 20,8% de litiasis renal y 8,4% de

malformaciones de vías urinarias.

La tabla 2, muestra el número de episodios de la infección de vías urinarias en

cada uno de los pacientes, determinándole un 91,6% (88) era su primer episodio, 4,2%

(4) su segundo episodio, y 4,2% (4) su tercer o más episodios.

En la tabla 3, se observa la forma de presentación clínica de la IVU en la población

evaluada, donde se observa que el 87,5% (84) de los casos presentaron fiebre, 54,2%

(52) vómitos, 50% (48) malestar general, 33,3% (32) dolor abdominal, 25% (24)

polaquiuria, 20,8% (20) disuria, 8,3% (8) retención urinaria, y 4,2% (4) hematuria

macroscópica.

La tabla 4 se aprecia los resultados del examen de orina, los cuales arrojaron que

en 94 casos presentaron bacterias, 90 casos leucocitosis (sobre 10 leucocitos por uL),

25 46 casos positivos para nitritos, 42 casos tenían piocitos, 29 casos cilindros y 17 casos

proteínas en la orina.

En la tabla 5, se muestra el resultado de los exámenes de laboratorio, donde se

encontró la eritrosedimentación positiva (> 20mm) en el 87,5% (84), leucocitosis en el

70,8% (68) y proteína C reactiva (PCR) positiva en el 51,1% de los casos.

La figura 3, muestra el resultado del ecograma renal, donde el 91,7% (88) de la

población el resultado fue normal, y solo en el 8,3% (8) resulto patológico.

En la figura 4, se observa los tipos de malformaciones congénitas que presentaron

los niños evaluados, donde se observó 12,5% (12) casos de sinequia de labios

menores, 4,2% (4) reflujo vesicoureteral, 4,2% (4) hidronefrosis. El 79,1% (76) de los

casos no presentaron ningún tipo de malformación congénita.

La figura 5, muestra el resultado del estudio microbiologico, donde se observa que

el 83,3% (80) resultaron positivos para Eschericha Coli, 8,3% (8) para Klebsiella, 4,2%

(4) para Proteus y 4,2% (4) para Enterobacter.

En la tabla 6, se observa el resultado del antibióticograma, donde 84 casos eran

sensibles al cefadroxilo, 68 casos amoxicilina, 68 a amoxicilina + acido clavulánico, 40 a

cefotaxima, 36 a amikacina, 16 a ceftriaxona, 12 a gentamicina, 8 a cloranfenicol, entre

otros.

26

FIGURA 1 INFECCIÓN DE VÍAS URINARIAS SEGÚN EDAD Y SEXO

18,8%14,5%

40,6%

9,4% 7,3% 9,4%

0

10

20

30

40

50

60

Por

cent

ajes

< 1 año 1 - 5 años 6 - 10 años

Grupo etáreo

Femenino Masculino

F.I. Encuesta elaborada por el autor Promedio de la edad de la población en estudio (Ӽ)= 3,9 ± 0.9 años de edad

Femenino: 66,7% (64) Masculino: 33,3% (32)

27

FIGURA 2 INFECCIÓN DE VÍAS URINARIAS SEGÚN LOCALIDAD

25%

75%Urbana Rural

F.I. Encuesta elaborada por el autor

28

TABLA 1 INFECCIÓN DE VÍAS URINARIA SEGÚN ANTECEDENTES FAMILIARES

ANTECEDENTES FAMILIARES

NÚMERO

PORCENTAJES

Infecciones Urinarias Litiasis Renal Malformaciones de Vías Urinarias Ninguna

20

20

2

48

20,8

20,8

8,4

50,0

TOTAL

96

100,0

F.I. Encuesta elaborada por el autor

29

TABLA 2 INFECCIÓN DE VÍAS URINARIA SEGÚN NÚMERO DE EPISODIOS

NÚMERO DE EPISODIOS

NÚMERO

PORCENTAJES

Un episodio Dos episodios Tres o más episodios

88

4

4

91,6

4,2

4,2

TOTAL

96

100,0

F.I. Encuesta elaborada por el autor

30

TABLA 3 INFECCIÓN DE VÍAS URINARIA SEGÚN FORMA CLÍNICA DE PRESENTACIÓN

FORMA CLÍNICA DE PRESENTACIÓN

NÚMERO

PORCENTAJES

Fiebre

Vómitos

Malestar general

Dolor abdominal

Polaquiuria

Disuria

Retención urinaria

Hematuria macroscópica

84

52

48

32

24

20

8

4

87,5

54,2

50,0

33,3

25

20,8

8,3

4,2

F.I. Encuesta elaborada por el autor

31

TABLA 4 INFECCIÓN DE VÍAS URINARIA SEGÚN EXAMEN DE ORINA

EXAMEN DE ORINA Nº CASOS POSITIVOS

Nº CASOS NEGATIVOS

Bacterias

Leucocitosis*

Nitritos

Piocitos

Cilindros

Proteinuría

94

90

46

42

29

17

02

06

50

54

67

79

F.I. Encuesta elaborada por el autor

*Sobre 10 leucocitos por uL.

32

TABLA 5 INFECCIÓN DE VÍAS URINARIA SEGÚN EXÁMENES DE LABORATORIO

EXAMEN DE LABORATORIO Nº CASOS POSITIVOS

Nº CASOS NEGATIVOS

Eritrosedimentación (VSG)

Leucocitosis

Proteína C Reactiva (PCR)

84 (87,5%)

68 (70,8%)

49 (51,1%)

12 (12,5%)

28 (29,2%)

47 (48,9%)

F.I. Encuesta elaborada por el autor.

33

FIGURA 3 INFECCIÓN DE VÍAS URINARIAS SEGÚN ECOGRAMA RENAL

91,67%

8,33%

Normal Patológico

F.I. Encuesta elaborada por el autor.

34

FIGURA 4 TIPO DE MALFORMACIÓN CONGÉNITA

12,5%4,17% 4,17%

79,16%

0102030405060708090

100

Porc

enta

jes

Sinequia delabios menores

Reflujovesicoureteral

Hidronefrosis Sinmalformaciones

Malformación Congénitas

F.I. Encuesta elaborada por el autor.

35

FIGURA 5 INFECCIÓN URINARIA SEGÚN REPORTE DEL GRAM

83,33%

8,33%4,17% 4,17%

0102030405060708090

100

Porc

enta

jes

EscherichaColi

Klebsiela Proteus Enterobacter

Germen aislado

F.I. Encuesta elaborada por el autor.

36

TABLA 6 INFECCIÓN URINARIA SEGÚN SENSIBILIDAD ANTIMICROBIANA

SENSIBILIDAD ANTIMICROBIANA

NÚMERO DE CASOS

Cefadroxilo

Amoxicilina

Amoxicilina + Acido Clávulanico

Cefotaxima

Amikacina

Ceftriazona

Gentamicina

Cloranfenicol

Otros*

84

68

68

40

36

16

12

8

16

F.I.: Encuesta elaborada por el autor.

Nota: Otros*: (Ampicilina Sulbactam, Meropenen, Ceftazidima, Cefipime).

37

ebre, ocasi

DISCUSIÓN

A pesar de que hoy en día, existen medios de prevención contra las

enfermedades infecciosas de orden urinario, estas siguen causando serias

complicaciones sobre todo en los niños que aún, recibiendo tratamiento profiláctico, con

frecuencia presentan recaídas11. Por consiguiente, la identificación precoz y precisa del

niño con infección urinaria es de capital importancia para reducir la morbilidad y las

secuelas asociadas.

En la actualidad se cuenta con varios métodos diagnósticos tales como el examen

de orina y Gram de orina; esta es la primera ayuda diagnostica utilizada en la clínica, que

si bien, no es 100% específica, tiene gran aceptación y se utiliza como base para

posteriores estudios complementarios, como el urocultivo y antibiograma; por medio de los

cuales se puede aislar el germen específico y su comportamiento (resistencia/sensibilidad)

frente a determinados antibióticos6.

Con el objeto de hacer una aproximación diagnóstica de la posible relación entre

los aspectos clínicos y de laboratorio en la infección de vías urinarias (IVU) en niños

menores de 10 años, se realizó un estudio descriptivo, prospectivo, y longitudinal,

tomando como parámetro clínico la historia clínica, examen de orina, laboratorio y

urocultivo. Los resultados demostraron que la edad promedio de los niños afectados fue

de 3,9 ± 0,9 años de edad, siendo el sexo femenino el que predomino, lo cuál coincide a

lo reportado por Martínez y colaboradores11 siendo la frecuencia de casos inversamente

proporcional a la edad, con predominio de los preescolares. En el sexo femenino la

infección urinaria es más frecuente por la menor longitud de la uretra, la cercanía con

gérmenes de la vagina y el ano y el aseo incorrecto de la región perineal15,23.

En cuanto al número de episodio de IVU, se demostró que no hubo una diferencia

estadísticamente significativa ya que en la mayoría era su primer episodio. Sin

embargo, nuestro estudio difiere al de Muñoz y Zorro (2009) los cuales encontraron un

alto porcentaje de recurrencia en la población evaluada. Al respecto, estos autores

consideran que los episodios de recurrencia pueden ser debidos a recaídas o

reinfecciones. Las recaídas son recurrencias por el mismo germen que originó el

38 episodio anterior, dentro de las dos semanas siguientes al término del tratamiento. Las

reinfecciones son recurrencias producidas por gérmenes diferentes al que determinó el

episodio inicial y se asocian con mayor frecuencia a una enfermedad subyacente del

aparato urinario. La frecuencia en la infancia es de 1 - 2%, los varones lactantes

presentan una mayor incidencia y con frecuencia está asociada a anomalías

congénitas; es en la edad preescolar cuando se producen muchas de las lesiones

renales atribuidas a la infección urinaria sintomática y/o al reflujo vesicoureteral15.

Por lo tanto, la importancia de la evaluación de las vías urinarias viene justificada

por el hecho de que 2% de las hembras y 10% de los varones con infección urinaria

presentan malformaciones obstructivas; que 30% de los niños investigados, con

recurrencias, presentan reflujo vesicoureteral y 85% de estos últimos presentan signos

radiológicos de pielonefritis crónica. Sin embargo, en nuestro estudio las IVU no

estuvieron relacionadas con malformaciones congénitas ya que el 79,1% de nuestra

población no la presentaron.

Dentro de los antecedentes familiares importantes se encontró en el 20,8% de los

casos antecedentes de IVU, litiasis renal, caso similar reportado por Díaz y

colaboradores17. Al evaluar la forma de presentación clínica de las IVU se encontró un

alto porcentaje de niños los cuales presentaron temperatura mayor a 38ºC, vómitos y

malestar general. El síndrome febril agudo se señala como la forma clínica más común

en el niño menor de 5 años, coincidiendo con los autores Carvajal y colaboradores

(2009), y Martínez (2007). Los cuales señalan que la presencia de fiebre se ha

aceptado como un marcador clínico de afección directa del parénquima renal. La

frecuencia de IVU sin foco en niños con fiebre es 5%. En niñas menores de un año la

prevalencia es del 6,5%, mientras que en niños es 3,3%. En niñas entre uno y dos años

de edad es de 8,1% y en niños de 1,9%. De 3 a 5% de las niñas y 1 a 2% de los niños,

presentarán al menos una IVU sintomática a lo largo de su infancia.

Al evaluar los exámenes de laboratorio, se observó en el examen de orina alto

porcentaje de leucocitosis (90 casos), bacterias abundantes y la presencia de nitritos y

piocitos. Con respecto a la velocidad de sedimentación globular el 87,5% de los casos

39 fue mayor de 20mm en la primera hora, cuentas blancas elevadas más de 15.000mm³,

y una proteína C reactiva positiva. Estos datos son compatibles con los presentados por

Carvajal y colaboradores (2009) y Muñoz y Zorro (2009) para la identificación clínica y

paraclínica de IVU. Los pacientes que presentaron leucocitosis, aumento de la VSG y

EL positivas en forma simultánea, tuvieron una probabilidad 1.81 veces mayor de

presentar IVU, comparado con pacientes con estos tres laboratorios dentro de límites

normales.

Debe tenerse en cuenta que no siempre el aumento del número de leucocitos,

presente en 80 a 90% de las infecciones urinarias, es absoluto para el diagnóstico,

pudiendo encontrarse en niños febriles con infecciones no localizadas en el tracto

urinario o por contaminación vaginal.

Igualmente, encontramos en nuestro estudio un alto porcentaje de gérmenes

gramnegativos en el estudio microbiológico, lo cuál coincide a lo reportado en la

literatura, donde se señala que los bacilos Gram-negativos son los principales

implicados en las infecciones urinarias pediátricas. Constituyen un grupo complejo

formado por varios géneros en los cuales los principales determinantes de virulencia

bacteriana están presentes en la mayoría de sus especies. Escherichia coli es la

causante del 80 al 90% de las infecciones adquiridas en la comunidad y

aproximadamente en la mitad de las personas hospitalizadas con factores de riesgo.

Por otra parte al evaluar el antibióticograma se observó una alta sensibilidad a los

antibióticos como el cefadroxilo, amoxicilina y amoxicilina + acido clavulánico, lo cuál se

debe de tener presente al momento de indicar el antibiótico empírico a niños menores

de 10 años. Los aminoglucósidos ocasionaron muy baja resistencia en los

uropatógenos habituales, ya que un porcentaje considerable de cepas de Escherichia

coli fueron resistentes a la amikacina y demás antimicrobianos. Es evidente entonces,

que el uso de los antibioticos en niños se debe utilizar de manera racional pensando

siempre en los gérmenes frecuentes en las IVU en niños, por lo que este estudio se

considera de gran importancia debido a la frecuencia de esta patología en esta edad de

la vida.

40

CONCLUSIONES

Las infecciones de vías urinarias fue más frecuentes en el sexo femenino, siendo

el promedio de edad en los niños afectados de 3,9 años.

La mayoría de los niños evaluados eran de la zona urbana.

El antecedente familiar de patologías renal no fue un factor determinante en la

población de estudio.

La fiebre, el vómito y el malestar general constituyeron los principales signos y

síntomas en la población evaluada.

Todos los niños presentaron alteración del examen de orina, encontrandose

principalmente: bacterias, leucocitos, nitritos.

El germen principalmente involucrado en las IVU fue la Eschericha coli.

La gran mayoría de las cepas encontrados fueron sensibles al cefadroxilo,

amoxicilina y amoxicilina + acido clavulánico.

Se encontró una relación entre VSG >20mm, PCR positiva y leucositosis

(>15.000mm³) con la IVU.

El ecograma renal fue normal en la mayoría de los pacientes evaluados.

41

RECOMENDACIONES

• Efectuar charlas a nivel de las Consultas de Pediatría y Crecimiento y Desarrollo

sobre el aseo de los genitales, especialmente de las niñas.

• Identificar precozmente la infección de vías urinarias, teniendo en cuenta los

signos y síntomas para evitar complicaciones en el niño.

• Diseñar estrategias adecuadas que lleguen hasta el grupo más afectado de la

población, promocionando el aseo de genitales, toma correcta del examen de

orina, así como también educar a las madres en forma individual mediante las

consultas preventivas para reconocer esta patología.

42

LITERATURA CONSULTADA

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45

ANEXOS

46

ASPECTOS CLÍNICOS EPIDEMIOLÓGICOS DE LA INFECCIÓN URINARIA EN PEDIATRÍA

FICHA DE RECOLECCIÓN DE LOS DATOS

Nº de Historia_______________ Nº del paciente: _______

Fecha de la 1era. entrevista: _________

Fecha de la 2da. entrevista: _________

Nombre del paciente: ____________________________________

Edad: ______ Sexo: F ( ) M ( )

Localidad: Rural ( ) Urbana ( )

ANTECEDENTES FAMILIARES:

Malformaciones de vías urinarias ( ) Infecciones urinarias ( )

Litiasis renal ( )

ANTECEDENTES PERSONALES:

Infección urinaria previa ( ) Estreñimiento ( )

Incontinencia urinaria ( ) Vulvovaginitis ( )

EN RELACION A LA CLINICA DE LA INFECCIÓN URINARIA: Fiebre ºC ( ) Disuria ( ) Polaquiuria ( ) Malestar general ( )

Lumbalgia ( ) Alteración del calibre del chorro miccional ( )

Hematuria Macroscópica ( ) Vómitos ( ) Dolor abdominal ( )

Retención urinaria ( ) Incontinencia Urinaria ( )

EN RELACIÓN AL RESULTADO DEL UROANALISIS:

Cantidad: __________ Densidad Urinaria: ____________ PH: _____________

Color: ____________ Olor: __________ Leucocitos x campo: _______________

Bactérias x campo: ______________ Nitritos: _______________

Hematuria: ______________ Piocitos: ________________ Proteinuria: ________

Cilindros: _____________ Otros: _______________________________________

47 EN RELACIÓN AL RESULTADO DEL UROCULTIVO: Germen aislado:

Eschericha Coli ( ) Klebsiela ( ) Proteus ( )

Otros ( ) Especificar: _______________________________________

Nº de colônias x campo: ______________

Sensibilidad antimicrobiana:

• Trimetropin/Sulfametoxazol: Si ( ) No ( )

• Cefadroxilo: Si ( ) No ( )

• Amoxicilina: Si ( ) No ( )

• Amoxicilina + Acido Clavulánico: Si ( ) No ( )

• Otros: Si ( ) No ( ) Especifique: _________________________

ASPECTOS RELACIONADOS CON EL MEDICAMENTO EMPLEADO PARA LA PROFILAXIS DE LAS INFECCIONES URINARIAS: Medicamento: _________________ Dosis: _________ Tiempo: _________________

Vía de administración: ______________ Efectos secundarios: __________________

RECURRENCIA DE INFECCIONES URINARIAS: Si ( ) No ( )

Nº recaídas de IUT

Fecha de recaida de

IUT

Germen causal de

ITU

Antibioticoterapia en uso

Tiempo de uso de ATB

Dosis

INVESTIGADOR RESPONSABLE________________________