Jesús el Príncipe de Paz que trae división.

Mateo 10:34-36

Pastor Wilson Carrero

23 de marzo 2014

• Mat 10:34 No penséis que he venido para traer paz a la tierra; no he venido para traer paz, sino espada.

• Mat 10:35 Porque he venido para poner en

disensión al hombre contra su padre, a la hija contra su madre, y a la nuera contra su suegra;

• Mat 10:36 y los enemigos del hombre serán los de su casa.

Introducción• Jesús es Príncipe de Paz• Debemos entender el texto en su contexto pues

no parece su venida pacífica según los versos leídos.

• Mateo 10 es la entrega del trabajo ministerial a sus discípulos.

• Jesús les da autoridad, los envía a sanar, los envía a predicar, algunos confesarán a Jesús otros no profesaran arrepentimiento.

• Su venida y sus palabras despiertan emociones, se toman decisiones y causan una revolución en todas las relaciones personales.

La venida del Príncipe de Paz• Mat 10:34 No penséis que he venido para traer paz a

la tierra; no he venido para traer paz, sino espada. La espada es una figura, sobre la guerra.– Traería una revolución nada pacífica– Su venida encendió una batalla que no termina

• Su presencia, sus palabras, su llamado, han iniciado una guerra. – Traería división entre las relaciones más íntimas

al extremo de la enemistad.

• Mat 10:35 Porque he venido para poner en disensión al hombre contra su padre, a la hija contra su madre, y a la nuera contra su suegra;

• Mat 10:36 y los enemigos del hombre serán los de su casa.

El príncipe de paz en acción• La paz de Dios no es la paz del mundo• Juan 14:27 La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la

doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.

• La obra redentora de Jesús nos da paz con Dios• Rom 5:1 Justificados, pues, por la fe, tenemos paz

para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo; • La oración y confianza en Dios nos da paz• Fil 4:6 Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas

vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.

• Fil 4:7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.

El Príncipe de Paz y el mundo• La verdad de Jesús es libertadora, pero no aceptada

por el mundo.• El mundo está en rebeldía contra Dios– Nada hay en el mundo en armonía con Dios

• Rom 8:21 porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios.

• 1Jn 2:15 No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él.

• 1Jn 2:16 Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo.

• 1Jn 2:17 Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.

• Juan 16:33 Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.

El Príncipe de Paz y mi decisión Interior

• Gal 5:17 Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y éstos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis.

Exterior• Mat 5:10 Bienaventurados los que padecen persecución por

causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos. • Mat 5:11 Bienaventurados sois cuando por mi causa os

vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo.

• La única postura que nos permitirá tener paz con Dios

– Amarle de todo corazón, por encima de todo.

• Mat 10:37 El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí;

• Mat 10:38 y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí.

El Príncipe de paz y mi guerra personal• Hay abundancia de paz en la vida con Jesús• Pero habrá abundancia de oposición de parte del

mundo hacia ti.• Vivimos en una circunstancia especial– El mundo se nos opone– El reino de Dios nos bendice

– Nuestra paz es andar en a voluntad de Dios, sabiendo que no pertenecemos, que por amar a Jesús, tendremos enemigos- pero hemos decidido amar a Dios sobre todas las cosas.