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Los cambiosdetrs del cambioDesigualdades y movilidad social en
Bolivia
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Depsito legal: 4 - 1 - 2405 - 10ISBN: 978-99954-711-3-2
Edicin: Jos Luis Exeni
Apoyo en la edicin: Patricia MontesIlustracin de tapa: Alejandro
SalazarImpresin: EdobolDiseo y diagramacin:
www.salinasanchez.com
1ra. edicin impresa en Bolivia, noviembre de 20104.000
ejemplares
Informe Nacional sobre Desarrollo Humanodel Programa de las
Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD)Calle 14 de Calacoto,
esquina Snchez BustamanteEdificio de las Naciones Unidas, Piso
6Telfono (591-2) 262-4528Fax (591-2) [email protected]
http://idh.pnud.bo Casilla postal 9072La Paz, Bolivia
La responsabilidad de este Informe es de quienes participaron en
su elaboracin y no compromete
necesariamente la lnea de pensamiento del PNUD.
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CoordinadoraVernica Paz Arauco
Equipo de investigacinIsabel Crespo Quintanilla, Milenka
Figueroa Crdenas,
Milenka Ocampo Mendoza y Ma. Daniela Snchez Lpez
Investigadores asociadosRoger Cortez, Jos Luis Exeni,
George Gray Molina y Germn Guaygua
ColaboradoresRodrigo Ayala, Miguel Bustos, Mara del Carmen
Choque,
Patricia Espinoza, Elizabeth Jimnez, Carlos Alberto Foronda,
Werner Hernani Limarino, Carmen Ledo, Fernando Mayorga, Fernando
Molina,
Ricardo Nogales, Claudia Pea, Jorge Viaa, Adrian Waldmann,
Ernesto Yez, Gilmar Zambrana
AdministracinCecilia Ledezma Aranbar y Shirley Torrez Pinto
DifusinJacques Duhaime y Vernica Cooper
Pgina http://idh.pnud.boMilenka Ocampo Mendoza
Informe Nacional sobre Desarrollo Humano en Bolivia
Los cambios detrs deL cambio
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5
Este informe no hubiera sido posible sin la colaboracin
desinteresada de nume-rosas personas e instituciones. Exten-demos
nuestro sincero agradecimiento a:
Yoriko Yasukawa, Representante Residente del Programa de las
Naciones para el Desa-rrollo y Coordinadora Residente del Sistema
de las Naciones Unidas en Bolivia, y a Cielo Morales, Representante
Residente Adjunta del Programa de las Naciones para el Desa-rrollo,
por el apoyo comprometido al equipo del IDH durante la
investigacin.
La Embajada del Reino de los Pases Bajos, en particular a los
embajadores Martin de la Beij y Franz Bijvuet, as como a la
consejera y jefa de Cooperacin To Tjoelker, cuyo apoyo ha sido
esencial para la produccin de esta investigacin.
La Embajada de Dinamarca, en especial al embajador Morten
Elkjaer; y a la jefa de cooperacin a.i. y encargada de negocios de
la Embajada de Suecia Ann Stdberg, por su respaldo para la difusin
del informe.
Los colegas Xavier Alb, Wilson Jimnez, Gary Montao y Rodney
Pereira por su con-tribucin en distintas etapas de discusin y
revisin de la investigacin. Asimismo, desta-camos la colaboracin de
Alberto Borda y Luis Estrada, ex funcionarios del Ministerio de
Pla-nificacin, por sus valiosos aportes y sugeren-cias en la fase
inicial de la investigacin.
El antroplogo Ramiro Molina Barrios, por su invalorable
orientacin en el diseo general de la investigacin rural. A los
inves-tigadores Zulema Lehm Ardaya y Hugo Salas, por su aporte en
el diseo del trabajo de campo en el pueblo mojeo.
Antonio Aranbar Arze y Ernesto Prez de Rada del PNUD por su
contribucin en las diferentes fases de la investigacin.
Vivian Arteaga, Isabel Arauco, Vctor Hugo Bacarreza, Gonzalo
Caldern, San-tiago Daroca, Christian Jett, Cecilia Larrea, Kathlen
Lizarraga, Natasha Loayza, Armando
Ortuo, y Eliana Quiroz, del PNUD, por sus valiosos aportes y
sugerencias.
Julio Ribera Paniagua, Miguel Guaseve Tamo, sor Anuncia Garca de
Acel e Ignacio Apace Garca, que facilitaron el contacto con los
integrantes del pueblo moxeo.
Jrgen Riester, director de APCOB, por el apoyo de su institucin
en la Chiquitana y el Isoso. A Mario Arrien, Adrin Waldmann,
Leonardo de la Torre, Alberto Rivera, Fernando Prado Salmn e
Isabella Prado, por facilitarnos informacin de relevancia para este
estudio.
Fiona Clark, Pilar Contreras y Maria Dolo-res Castro de HelpAge
International, por sus muy valiosas entrevistas realizadas con
ciuda-danos de la tercera edad.
Los directores de cine Vernica Crdova, Fernando Vargas y Marcos
Loayza por haber puesto su gran creatividad al servicio del IDH y
de sus mensajes.
Carlos Camargo, Alberto Garca y Cristina Loma, del Programa de
Fortalecimiento Demo-crtico del PNUD, por la organizacin tanto del
ciclo de los conversatorios sobre desigual-dad como de la gira
nacional de presentacin del informe, en ambos casos en asociacin
con la Fundacin Boliviana para la Democracia Multipartidaria y de
IDEA Internacional.
Iigo Retolaza y Gaby Gmez Garca, del Proyecto de Fortalecimiento
de las capacida-des propositivas y dialgicas de los movimien-tos
sociales en Bolivia del PNUD por la orga-nizacin de dos encuentros
con dirigentes y tcnicos de varias organizaciones sociales.
Por el apoyo administrativo y logstico, al PNUD en general, y en
particular a Oscar Agra-mont, Andrs Cariaga y Edwin Copa, a Gonzalo
Jemio y al equipo de compras, a Sara Snchez y al equipo de
finanzas, Sdenka Martnez, Mnica Sarmiento, Virginia Tapia y Jenny
Tejada.
El Centro de Informacin de Naciones Unidas (CINU), por el apoyo
indefectible de Robert Brockmann, Patricia Cusicanqui, Amalia
Espejo y Willy Vargas.
AgrADECImIENtos
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7
Presentacin 19
sinoPsis 21
INTRODUCCIN
Introduccin 44 1. Bolivia hoy: el desafo y la oportunidad 44
2. El horizonte normativo: una sociedad intercultural con
igualdad 49
3. Voces y datos de la transformacin social 51
4. Viejas y nuevas tensiones de una preocupacin histrica 51
a. El Estado que desiguala 51
b. Desigualdades, coloniales y republicanas 54
c. Desiguales en tiempos de Revolucin 56
d. Desigualdades y movilidad social en la agenda 57
De qu desigualdades hablamos? 59
Enfoque: una mirada multidimensional de la desigualdad 61
Contenido del Informe 62
caPtulo 1ANDAMIOS DEL CAMBIO POLTICO:
PARA UNA DEMOCRACIA INTERCULTURAL CON IGUALDAD
Introduccin 66
1.1 La disputa por la construccin democrtica 66
1.2 Andamios de la refundacin del Estado 71
1.3 El ejercicio del poder: percepciones y expectativas 75
1.4 Los beneficiarios y las consecuencias del poder 78
1.5 Hacia una democracia intercultural con igualdad 82 a.
Algunas premisas (de trabajo) 83
b. Algunas asignaturas (de nfasis) 84
c. Algunos retos (de agenda) 84
caPtulo 2
TREINTA AOS DE CAMBIO SOCIAL:
ENTRE LAS DESIGUALDADES DE SIEMPRE Y LAS DESIGUALDADES
EMERGENTES
Introduccin 88
2.1 Desarrollo humano y desigualdad 89
a. Desigualdades departamentales y municipales en desarrollo
humano 92
b. El ndice de Desarrollo Humano ajustado por desigualdad 95
c. La suma de obstculos en el ciclo de vida 96
Desiguales desde que nacemos 96
Desiguales en la escuela 97
Desigualdades en el mundo laboral 99
CoNtENIDo
-
8
2.2 Las vas estructurales del cambio social 100
a. El agotamiento de la migracin liderando el cambio social
101
De dnde y hacia dnde se migra? (Desarrollo humano y migracin)
103
Perfil de los migrantes 105
b. La formacin educativa 106
c. Cambios en el mercado laboral 108
Cambios en la estructura ocupacional 110
2.3 El estrato medio: recomposicin y emergencia de nuevos
actores en el medio de la pirmide social 112
a. Los estratos medios y sus diferencias en el tiempo 112
b. Composicin sociodemogrfica del estrato medio 117
c. El cuidado de la salud en los estratos bajo y medio 120
d. El perfil educativo en el estrato medio 121
e. Caractersticas laborales de los estratos socioeconmicos bajo
y medio 122
Evolucin del empleo en los estratos socioeconmicos medios
124
La nueva pirmide social 126
caPtulo 3
TERRITORIO, DESIGUALDADES Y ESTRATEGIAS
DE MOVILIDAD SOCIAL EN LOS PUEBLOS INDGENAS: CINCO ESTUDIOS DE
CASO
Introduccin 130
3.1 Desigualdades en el mundo originario 134
3.2 Pueblos indgenas de tierras bajas y altas. Cinco estudios de
caso 136
a. El mundo chiquitano. Lejos del mercado, cerca de la pobreza
136
Las rutas de la movilidad ocupacional 137
El rostro femenino del empleo 140
La Chiquitana rural 140
b. Mojeos. Entre vulnerabilidad climtica y concentracin de la
propiedad de la tierra 141
Determinantes de la inequidad social 142
c. Guanares en el desierto verde 145
El lugar donde las aguas se pierden 145
Vida cotidiana y poder en el desierto verde 146
Desigualdad y explotacin extremas 146
Los guaranes ms all del infierno verde 148
Migracin zafrera y produccin en el Isoso 149
El enganche en el origen de la servidumbre 149
d. Los quechuas de Potos 150
Ruralidad tradicional 151
e. Aymaras de tierras altas 153
Produccin tradicional en el Altiplano central 153
El secreto del grano de oro 154
Ganancias y prdidas simblicas 155
3.3 Una nueva ruralidad es posible. Acciones pblicas frente a
los retos de las desigualdades en el mundo indgena originario.
156
-
9
caPtulo 4
TRANSMISIN DE CAPACIDADES: LOGRO EDUCATIVO Y MOVILIDAD
SOCIAL
Introduccin 160
4.1 Entre logros y desafos educativos 162
a. La educacin como derecho 162
b. Desigualdades segn grupos de ingreso 165
Hacia una asistencia universal 165
c. La persistencia de las desigualdades en el logro educativo
167
d. La pirmide educativa y sus grandes brechas 168
4.2 De una carrera con obstculos a una carrera sin obstculos
170
a. Mayor abandono escolar en el rea rural 170
b. La carrera de obstculos educativa 171
4.3 La distribucin de la oferta educativa 174
a. Pruebas para medir la calidad educativa 175
b. Docentes y directores formadores de una educacin de calidad
175
c. Distribucin desigual de la oferta educativa 177
d. El gasto social en educacin 178
4.4 La transmisin de capacidades en la educacin 179
a. Movilidad intergeneracional de la educacin 180
Transmisin segn generaciones 181
Transmisin segn gnero 181
Transmisin segn condicin tnica 182
Transmisin segn rea 182
b. Movilidad intergeneracional de ingresos 182
c. El logro educativo y las condiciones de origen 183
d. La movilidad social va profesin 184
4.5 Ms all de la cobertura, los desafos de la educacin 185
caPtulo 5
TRANSMISIN DE OPORTUNIDADES: EMPRENDIMIENTO, HERENCIA
OCUPACIONAL, MIGRACIN Y REMESAS
Introduccin 188
5.1. Una mirada al mercado laboral a partir de estratos de
ingresos 190
a. La pirmide ocupacional boliviana 192
Sectores del mercado laboral 194
b. Empleo formal e informal 195
5.2 Mercado informal: entre el espritu emprendedor y la
vulnerabilidad 198
a. El estrato medio vulnerable del sector informal 202
5.3 La transmisin de oportunidades: movilidad laboral
intergeneracional 206
a. Clivajes tnicos y de gnero 208
b. Retornos a la educacin en el mercado laboral 209
c. La herencia laboral entre padres e hijos 210
Movilidad total y estructural o absoluta 211
La herencia y el origen por categoras ocupacionales 212
5.4 Los migrantes como actores en el desarrollo: remesas y sus
impactos 214
a. Impacto de las remesas en la pobreza y desigualdad 216
Pobreza 217
Desigualdad 219
b. Ms all de la ausencia: remesas y movilidad social 219
-
10
5.5 Ms all de la transmisin de oportunidades: tres preguntas
para el debate 221
a. Que paquetes de polticas econmicas y sociales son las ms
adecuadas en un contexto como el boliviano, donde gran parte de los
emprendimientos y ms del 60% de la poblacin ocupada se mueve en el
sector informal? 221
b. Bolivia tiene un lento proceso de movilidad social? 222
c. La migracin internacional y las remesas son una va de
movilidad social? 223
caPtulo 6ESTILOS DE VIDA, DESIGUALDADES Y ESTRATEGIAS DE
MOVILIDAD SOCIAL URBANA
Introduccin 226
a. El marco de anlisis 226
b. Tres escenarios sociales para la construccin de las
identidades 227 c. Cuatro ciudades como espacios de estudio 228
6.1 Inmigrante y desigual: la pirmide social de El Alto 228
a. El crculo entre etnicidad y desigualdad material 229
b. La emergencia de la lite negociante 230
La va educativa en el imaginario de las negociantes 231
El lujo en la construccin de la distincin y la desigualdad altea
232
El nuevo sentido de la solidaridad andina 233
El quiebre generacional 234
c. La clase media en El Alto 235
Los buenos alteos. La cultura como mecanismo de distincin social
235
d. La clase popular subiendo escalones 236
Peldao a peldao 236
e. Identidades marcadas por el estatus de origen 236
La joven diversidad cultural altea 236
El gnero en la identidad negociante 237
f. Entre la desigualdad social y la diversidad cultural 237
Las rutas de la movilidad social altea 238
6.2 Cochabamba: entre los actores de siempre y los nuevos grupos
sociales 238
a. La lite de siempre y los grupos emergentes 238
La gente de siempre y el reconocimiento simblico 239
La nueva generacin de la lite 240
b. Identidades en el medio 241
Quechuas o vallunos mirndose desde el otro 241
Las costumbres y la identidad del qochala 242
La percepcin de barreras a la movilidad social 242
Variaciones en la clase media: Los emigrantes de Washington
243
c. La centralidad del trabajo en la microempresa popular 244
d. Vivir bien para el medio de la pirmide social 245
e. Transformaciones en la pirmide social 245
6.3 Desigualdad y movilidad social en La Paz 246
a. La fragmentada lite pacea 246
El empresariado tradicional en el espejo de los estilos de vida
247
La ms urbana de las burguesas populares 247
Movilidad social en el espacio simblico paceo 247
-
11
b. El segmentado medio 250
La va de la profesionalizacin en el estrato medio alto 250
Gnero y movilidad intergeneracional 251
Desde las provincias. El origen territorial del estrato bajo
251
Territorializacin urbana y brechas sociales 251
Estilo de vida, aspiraciones e identidad 252
Trabajadores calificados: entre la permanencia y la precariedad
252
Entre dos aguas 253
c. El estrato popular en bsqueda de calificacin 253
d. La percepcin pacea de la exclusin social 254
Desigualdad simblica 254
6.4 Identidades en la modernidad? Diferenciacin y redes sociales
en Santa Cruz 255
a. La diversa burguesa crucea 255
De que manera perciben los distintos grupos de la burguesa
crucea? 256
De Mineros a la China. La ruta de tres generaciones cruceas de
la burguesa popular 257
b. Los pilares simblicos de la clase media 257
Las redes sociales institucionalizadas como sustento de la clase
media 258
Trabajo andino versus trabajo camba 258
c. El sector popular cruceo 259
d. Tiempos de discriminacin 259
Espacios de exclusin social 259
6.5 Facetas de la movilidad social y la desigualdad simblica
260
a. Vas de movilidad social en los estratos altos 260
b. Obstculos materiales en la percepcin de los estratos medio y
popular 261
c. Techos de vidrio simblicos y prestigio social 261
6.6 De los privilegios de pocos a los derechos de todos 261
conclusionesARENAS PARA LA REFLEXIN Y ACCIONES DE POLTICA
PBLICA
1. Detrs del cambio: cunto avanzamos y cunto nos falta? 266
2. Bolivia hoy: el desafo y la oportunidad 266
a. Con la desigualdad todos perdemos 268
b. Enfoque multidimensional de la desigualdad 269
c. Sujetos de polticas, actores diversos 270
d. Tres premisas para asegurar un cambio social con igualdad
273
Universalizar los derechos sociales 273
Democratizar el empleo y el trabajo dignos 278
Fortalecer la interculturalidad 287
3. Hacia una sociedad democrtica intercultural con igualdad
292
BIBLIOGRAFA 293
ANEXO METODOLGICO 310
ANEXO ESTADSTICO 321
-
12
introDuccin
grFICos
Grfico 1 Indicadores de desempeo de la democracia en Amrica
Latina, 2009 46
Grfico 2 Percepciones sobre la justicia en la distribucin de la
riqueza en Amrica Latina, 2009 47
Grfico 3 Poblacin total segn estratos de ingreso per cpita del
hogar, 2007 58
Grfico 4 Percepciones sobre discriminacin y privilegio en
Bolivia, 2009 59
Grfico 5 Desigualdades en escolaridad e ingresos segn quintiles
de edad y condicin tnica 60
Grfico 6 Un enfoque multidimensional de la desigualdad 61
rECUADros
recuaDro 1 Los derechos en la trayectoria constitucional (1880,
1938, 1967, 2009) 47
recuaDro 2 Igualdad de qu? 50
recuaDro 3 La estructura social en la colonia 52
recuaDro 4 Siglo XIX, imposicin de nuevas categoras raciales en
la era republicana 55
CUADros
cuaDro 1 Ciudadana, derechos y garantas constitucionales
1880-2009 48
cuaDro 2 Estratificacin social en la Repblica, segn raza y
actividad econmica 55
cuaDro 3 Concentracin del ingreso del hogar 1970-2007 58
caPtulo 1
grFICos
Grfico 1.1 Indicadores de desempeo de la democracia en Amrica
Latina, 2009 78
Grfico 1.2 Percepciones sobre la justicia en la distribucin de
la riqueza en Amrica Latina y el Caribe, 2009 80
CUADros
cuaDro 1.1 Bolivia: ampliacin normativa de la democracia
(Constituciones de 1967 y de 2009) 70
cuaDro 1.2 Bolivia: Democracia comunitaria 70
cuaDro 1.3 Bolivia: El modelo de Estado en las Constituciones
1967 y 2009 71
caPtulo 2
mAPAs
MaPa 2.1 IDH municipal 2001 95
MaPa 2.2 Poblacin migrante segn departamento de nacimiento
102
MaPa 2.3 Poblacin migrante segn municipio 103
MaPa 2.4 Poblacin migrante segn autopertenencia a algn pueblo
indgena 105
nDiceMaPas, Grficos Y recuaDros
-
13
grFICos
Grfico 2.1 Poblacin boliviana segn estratos de ingreso per cpita
del hogar 88
Grfico 2.2 Divergencia externa - Diferencia regional en los
componentes social y econmico del IDH 2007 90
Grfico 2.3 Bolivia: Evolucin del desarrollo humano y sus
componentes (1975-2007) 90
Grfico 2.4 ndice de desarrollo humano e ingresos por regin
(1970-2005) 91
Grfico 2.5 Bolivia: Divergencia interna - Pobreza y desigualdad
92
Grfico 2.6 La divergencia interna en el desarrollo humano
departamental (1976-2007) 93
Grfico 2.7 La partida y llegada: los lmites de una convergencia
desigual en desarrollo humano 94
Grfico 2.8 Atencin de parto por personal institucionalizado 2007
97
Grfico 2.9 Aos promedio de escolaridad 2007 98
Grfico 2.10 Ingreso laboral mensual promedio 2007 (Expresado en
bolivianos) 100
Grfico 2.11 La dinmica de la pirmide sociodemogrfica segn nivel
de bienestar 101
Grfico 2.12 La estratificacin medida por ingresos (1999-2007)
113
Grfico 2.13 Peso relativo y absoluto de los estratos de ingreso
(1999-2007) 115
Grfico 2.14 Ampliacin y vulnerabilidad del estrato medio
(1999-2007) 116
Grfico 2.15 Estratos de ingreso segn rea de residencia
(1999-2007) 117
Grfico 2.16 Pirmide poblacional del estrato medio (1999-2007)
118
Grfico 2.17 Condicin tnico lingstica del estrato medio
(1999-2007) 119
Grfico 2.18 Resumen de las caractersticas sociodemogrficas del
estrato medio 119
Grfico 2.19 El seguro de salud en el estrato medio 120
Grfico 2.20 Tasa de matrcula neta del estrato medio 121
Grfico 2.21 Poblacin ocupada por sectores de actividad segn
estrato 124
Grfico 2.22 Distribucin de la poblacin segn estratos de ingreso
per cpita del hogar 2007 127
rECUADros
recuaDro 2.1 Treinta y cinco aos de desarrollo humano en el
mundo 91
recuaDro 2.2 Historia de vida - Don Agapito, el profesor rural
104
recuaDro 2.3 Historia de vida - Don Hctor, entre las races
mineras y la migracin 110
recuaDro 2.4 Propuestas de medicin de la clase media 113
CUADros
cuaDro 2.1 El avance educativo segn nivel socioeconmico 107
cuaDro 2.2 Poblacin ocupada segn rama de actividad y nivel
socioeconmico 108
cuaDro 2.3 Poblacin ocupada segn grupo ocupacional y nivel
socioeconmico 111
cuaDro 2.4 Promedio de aos de estudio del estrato medio 122
cuaDro 2.5 Condicin de actividad y caractersticas
sociodemogrficas de la poblacin ocupada en los estratos medios
123
cuaDro 2.6 Poblacin ocupada por sectores de actividad y grupo
ocupacional segn estrato 125
caPtulo 3
mAPAs
MaPa 3.1 Bolivia. Distribucin territorial de los pueblos
indgenas 132
MaPa 3.2 Ubicacin territorial de los pueblos indgenas estudiados
133
MaPa 3.3 Bolivia. ndice de Desarrollo Humano municipal.
Municipios con 60%
o ms de autopertenencia indgena, 2001 134
-
14
MaPa 3.4 Santa Cruz. Municipios de San Javier, Concepcin y San
Antonio de Lomero 136
MaPa 3.5 Beni. Municipios de Trinidad y San Ignacio de Moxos
141
MaPa 3.6 Santa Cruz. Municipio de Charagua. Distrito Municipal
Isoso. 146
MaPa 3.7 Potos. Municipios de Unca y Chayanta 151
MaPa 3.8 Oruro. Municipios de Corque y Quillacas 153
grFICos
Grfico 3.1 El enfoque: desigualdades, identidades y movilidad
social 131
Grfico 3.2 Actores de los pueblos indgena originarios: espacios
de desigualdad territorial, oportunidades y polticas pblicas.
157
rECUADros
recuaDro 3.1 El regreso del territorio 131
recuaDro 3.2 La interculturalidad chiquitana 137
recuaDro 3.3 De las demandas por tierra a la poltica pblica
138
recuaDro 3.4 Inversin pblica en el campo 141
recuaDro 3.5 Los daos del Nio y la Nia en Beni 142
recuaDro 3.6 Rehabilitacin y reconstruccin por daos 143
recuaDro 3.7 Desigualdad en el activo tierra 144
recuaDro 3.8 Carayanas de la Amazona 144
recuaDro 3.9 Una dinasta guaran 147
recuaDro 3.10 Si queremos trabajar todo es posible. Pero con
precauciones 155
CUADros
cuaDro 3.1 Bolivia. Poblacin de 15 aos o ms por pertenencia a
pueblos originarios segn rea de residencia, 2001 130
cuaDro 3.2 Bolivia. Poblacin rural de 15 aos o ms por pueblos
originarios de pertenencia, 2001 132
cuaDro 3.3 Municipios indgena originarios seleccionados segn
ndice Municipal de Desarrollo Humano, 2005 135
cuaDro 3.4 Desigualdad de ingresos segn rea de residencia. ndice
de Gini 135
cuaDro 3.5 Ingreso familiar rural por ao segn fuentes, 1999-2001
135
caPtulo 4
mAPAs
MaPa 4.1 Establecimientos de educacin segn poblacin, 2007
178
grFICos
Grfico 4.1 Tasa de cobertura neta por nivel de educacin 161
Grfico 4.2 Tasas de cobertura y trmino 164
Grfico 4.3 Tasa de asistencia escolar segn estratos 165
Grfico 4.4 ndice de Desarrollo Humano Municipal, con y sin el
Programa Nacional de Alfabetizacin, 2005 166
Grfico 4.5 Aos promedio de escolaridad segn estrato 167
Grfico 4.6 Aos promedio de escolaridad segn rea y estrato
168
-
15
Grfico 4.7 Poblacin de 19 aos o ms segn logro educativo 169
Grfico 4.8 Tasa de abandono por rea y nivel educativo 171
Grfico 4.9 Carrera de obstculos en educacin por rea y gnero
171
Grfico 4.10 ndice de Oportunidades Humanas 173
Grfico 4.11 Nmero de alumnos por docente en la educacin pblica
176
Grfico 4.12 Prioridad macroeconmica del gasto social segn sector
(% PIB) 179
Grfico 4.13 Aos promedio de escolaridad segn nivel educativo
alcanzado por el padre 181
Grfico 4.14 Aos promedio de escolaridad segn generacin del hijo
181
Grafico 4.15 Aos promedio de escolaridad dado el nivel educativo
alcanzado por el padre segn gnero 182
Grfico 4.16 Aos promedio de escolaridad dado el nivel educativo
alcanzado por el padre segn identificacin tnica 182
Grfico 4.17 Aos promedio de escolaridad dado el nivel educativo
alcanzado por el padre segn rea geogrfica 182
Grfico 4.18 Bolivia: Ingreso laboral esperado dado el ingreso
alcanzado por el padre 183
Grfico 4.19 Transmisin intergeneracional de oportunidades entre
padres e hijos segn grupo de edad 184
Grfico 4.20 Poblacin segn logro educativo y estrato de ingreso
184
rECUADros
recuaDro 4.1 Intervenciones diferenciadas para alcanzar los
Objetivos de Desarrollo del Milenio en educacin primaria universal
163
recuaDro 4.2 El impacto del Programa Nacional de Alfabetizacin
en el desarrollo humano 166
recuaDro 4.3 El nivel de desigualdad de oportunidades 172
recuaDro 4.4 Mejor calidad para lograr educacin para todos
174
CUADros
cuaDro 4.1 Nivel de instruccin alcanzado en la poblacin de 19
aos o ms de edad (%) 163
caPtulo 5
grFICos
Grfico 5.1 Pirmide ocupacional boliviana 193
Grfico 5.2 Tipos de empleo segn estrato 195
Grfico 5.3 Tipo de actividades de emprendedores 200
Grfico 5.4 Pirmide ocupacional del sector informal 203
Grfico 5.5 Generacin de empleo por sectores 205
Grfico 5.6 Estratificacin ocupacional en Bolivia 207
Grfico 5.7 Categoras por origen tnico 209
Grfico 5.8 Ingresos por categoras ocupacionales 210
Grfico 5.9 Cambios de categoras ocupacionales entre padres e
hijos 211
Grfico 5.10 Remesas en Bolivia al 2008 216
Grfico 5.11 Remesas por zonas y rea 217
-
16
rECUADros
recuaDro 5.1 Formas combinadas de empleo en Bolivia: los cuenta
propias y los asalariados 191
recuaDro 5.2 Hechos y realidades del mercado informal en Bolivia
196
recuaDro 5.3 Las actividades econmicas informales en Bolivia
198
recuaDro 5.4 Trabajadores independientes en Bolivia: quines son
y dnde estn? 201
recuaDro 5.5 La economa de base estrecha en Bolivia 204
recuaDro 5.6 De Bolivia al mundo: migracin internacional 215
recuaDro 5.7 A donde van las remesas? 217
CUADros
cuaDro 5.1 Sectores de insercin en el mercado laboral por gnero
194
cuaDro 5.2 rea urbana: composicin de la poblacin ocupada en el
sector informal 197
cuaDro 5.3 Categoras Ocupacionales 206
caPtulo 6
grFICos
Grfico 6.1 Escenarios sociales de construccin de identidades
228
Grfico 6.2 Ciudades capitales y El Alto. Inmigrantes y
emigrantes de 5 y ms aos (1996-2001) 229
Grfico 6.3 El Alto y La Paz. Nivel educativo alcanzado
(2002-2006) 232
Grfico 6.4 Bolivia. Estimacin de emigrantes segn pas de destino.
2006 243
Grfico 6.5 Escenarios urbanos. Identidades entre el
reconocimiento y la discriminacin social, la inclusin y la exclusin
material 263
rECUADros
recuaDro 6.1 El consumo y los estilos de vida 227
recuaDro 6.2 El escenario principal del comercio alteo 231
recuaDro 6.3 El escenario de la consagracin de las lites alteas
234
recuaDro 6.4 La va de la diversificacin empresarial 240
recuaDro 6.5 La inmigracin de occidente 245
recuaDro 6.6 Penas y triunfos de una mujer migrante 248
recuaDro 6.7 De Quime a La Paz 253
recuaDro 6.8 Los grupos de la nueva burguesa crucea 255
CUADros
cuaDro 6.1 Cochabamba. Cambios en la estructura de la lite.
1952-1985-2009 239
cuaDro 6.2 Ciudades estudiadas segn ndice de Desarrollo Humano
2001 246
cuaDro 6.3 Vas de movilidad social en la burguesa crucea 256
-
17
conclusiones
mAPAs
MaPa 1 IDH municipal, 2001 268
MaPa 2 Unidades educativas por cada mil alumnos segn tamao de la
poblacin, 2007 276
MaPa 3 Poblacin migrante segn autopertenencia a algn pueblo
indgena 288
grFICos
Grfico 1 Enfoque multidimensional de la desigualdad 269
Grfico 2 Poblacin total segn estratos de ingreso per cpita del
hogar, 2007 271
Grfico 3 Vencer la carrera de obstculos en educacin 274
Grfico 4 Evolucin de la tasa de abandono de nios del nivel
primario (%) 275
Grfico 5 Desigualdades en el ingreso laboral en reas urbanas,
2007 279
Grfico 6 Contribucin al empleo y participacin en el PIB segn
ramas de actividad, 2007 285
rECUADros
recuaDro 1 Una poltica para universalizar la educacin: El Bono
Juancito Pinto 275
recuaDro 2 Debate: transferencias de ingresos, buenas, pero
suficientes? 277
recuaDro 3 Debate: productividad del mercado laboral, causa o
efecto? 280
recuaDro 4 La va asociativa de la insercin laboral 282
recuaDro 5 La Otra Frontera: El corazn de una economa
alternativa en Bolivia 283
recuaDro 6 Cmo generar masa crtica empleadora? 285
recuaDro 7 El reto del interculturalismo y la construccin de una
comunidad de ciudadanos 287
recuaDro 8 Iguales aunque diferentes: una propuesta de accin
pblica centrada en la interculturalidad 289
recuaDro 9 Debate: La No discriminacin versus la Accin
Afirmativa 291
-
19
El Informe Nacional sobre Desarrollo Humano 2010 plantea una,
entre muchas alternati-vas, de visualizar el largo camino que
recorren los bolivianos y las bolivianas en busca de un sueo
histrico: construir una sociedad ms incluyente, equitativa y justa
donde todos gocen del derecho a una vida digna, plena y libre, y en
base a ello logren una verdadera convivencia. Este anhelo de
construir una sociedad de iguales es el horizonte normativo del
presente Informe.
El trabajo de investigacin y anlisis que ponemos a consideracin
rene el aporte de miles de ciudadanos que desde su experiencia
cotidiana brindan una lectura transparente y sincera sobre el
estado de cumplimiento de algunos derechos sociales en Bolivia. El
Informe recorre parte del territorio nacional desde las comunidades
aymaras y quechuas de los muni-cipios de Quillacas y Unca en los
departamentos de Oruro y Potos, pasa por comunidades mojeas
ignacianas y chiquitanas de las riveras del Apere y el Mamor,
recorre algunos pue-blos guaranes del chaco, hasta llegar a los
centros urbanos ms poblados del pas que hoy acogen a una diversidad
de identidades tnicas y culturales.
Este Informe Nacional, el sexto desde 1998, trae una noticia que
ha madurado en los lti-mos aos: la ampliacin del grupo de
bolivianos y bolivianas que hoy logran salir de la pobreza y, entre
otros, ejercer los derechos a la educacin y a la salud como
resultado, en muchos casos, de estrategias de sobrevivencia y
movilidad social al margen de las acciones del Estado. Al mismo
tiempo, da cuenta de la mayor participacin de los sectores
tradicionalmente exclui-dos, especialmente los indgenas, en el
ejercicio del poder poltico. Sin embargo, esta mayor igualdad en el
poder poltico entra en tensin con las persistentes brechas en el
ejercicio de derechos fundamentales: existen enormes desigualdades,
tanto de ingresos como de acceso a servicios sociales bsicos y
niveles de discriminacin, que an impiden una convivencia arm-nica
entre todos.
Hoy Bolivia tiene una oportunidad sin precedentes de superar las
desigualdades histri-cas e impedir la emergencia de nuevas
exclusiones. El sostenido supervit fiscal de los ltimos aos, la
estabilidad macroeconmica, el amplio escenario de rediseo
normativo, la inclusin poltica y un proceso de descentralizacin y
autonomas con potencialidad de revertir la histo-ria de la
discontinuidad de la presencia estatal en el territorio nacional,
ofrecen la posibilidad de una gestin pblica que responda mejor a
las necesidades reales de la gente.
Uno de los grandes retos para Bolivia en la dcada que viene es
trascender las fronteras del cambio poltico, dar un salto hacia la
garanta universal de los derechos sociales, democra-tizar el empleo
y el trabajo dignos y promover la interculturalidad.
Tenemos la esperanza sincera de que el Informe que tiene en sus
manos aporte al debate plural y a la reflexin en el proceso de
transformacin que vive hoy el pas. Los cambios detrs del cambio,
pues, renueva nuestro compromiso con el sueo de construir en
Bolivia una socie-dad de iguales.
Yoriko YasukawaREPRESENTANTE RESIDENTE DEL PNUD EN BOLIVIA
PrEsENtACIN
-
Los cambios detrs del cambio
Sinopsis
-
22
Informe Sobre DeSarrollo Humano en bolIvIa
IntroduccIn La sociedad boliviana no est inmvil. Los
cambios detrs del cambio que describe este Informe retratan la
transformacin de la socie-dad boliviana, de larga y corta duracin,
que modific el perfil demogrfico, poltico, social y cultural de
Bolivia. Dan cuenta de muchos cambios, en especial de una ampliacin
del ejercicio de los derechos a la educacin y a la salud, y de la
participacin de sectores tradicio-nalmente excluidos, especialmente
los pueblos indgenas, en el ejercicio del poder poltico.
El Informe analiza las estrategias de sobre-vivencia y
acumulacin que adopt la pobla-cin boliviana durante las ltimas tres
dca-das, y caracteriza los procesos de movilidad individual y
colectiva, originados en muchos casos al margen del Estado. Retrata
un cam-bio social en construccin en el que persisten desigualdades
histricas de origen tnico, de gnero, y entre reas urbanas y
rurales, a las que se suman nuevas desigualdades resultantes de un
mercado laboral segmen-tado y de nuevas identidades urbanas basadas
en los estilos de vida. Estas desigualdades fre-nan el desarrollo y
limitan la convivencia por-que se reproducen en un contexto de
elevada pobreza y producen prcticas de exclusin y discriminacin. Al
mismo tiempo plantean nuevos retos para la accin.
La construccin de una sociedad inclu-yente, equitativa y justa
es un sueo histrico de los bolivianos y las bolivianas. Sin
embargo, el momento actual constituye una oportuni-dad sin
precedentes en nuestra historia para revertir las tendencias de un
desarrollo des-igual. El sostenido supervit fiscal de los lti-mos
aos, la estabilidad macroeconmica, el amplio escenario de rediseo
normativo, un proceso de descentralizacin y autonomas con
potencialidad de revertir la historia de la discontinuidad de la
presencia estatal en el territorio nacional ofrecen la oportunidad
de una gestin pblica que responda mejor a las necesidades reales de
la gente.
A estas condiciones favorables se suma un optimismo de la
sociedad sobre la mayor jus-
1 Sakiko Fukuda-Parr y A.K. Shiva Kumar , 2005. Readings in
Human Development.
2 Amartya Sen, 1979. Equality of what? y Amartya Sen, 1999.
Development as Freedom. 3 Para una referencia sobre nuevas
metodologas de medicin del bienestar que incluyen dimensiones
objetivas y sub-
jetivas vanse Amartya Sen, Joseph Stiglitz y Jean Paul Fitoussi,
2009. Report by the Commission on the Measurement of Economic
Performance and Social Progress. Y Sabina Alkire, 2007. The Missing
Dimensions of Poverty Data.
ticia en la distribucin de la riqueza, una per-cepcin de que se
gobierna para el pueblo y la expectativa de mejores das paras las
gene-raciones futuras. El reto de este momento histrico es
trascender las fronteras del cam-bio poltico y lograr mejoras
concretas en el bienestar de la gente, al mismo tiempo que superar
la discriminacin y construir una verdadera convivencia entre todos
los bolivia-nos. El horizonte normativo que vislumbra el Informe es
una sociedad democrtica inter-cultural con igualdad.
El horIzontE normatIvo: una socIEdad dEmocrtIca IntErcultural
con IgualdadLos conceptos mismos de desigualdad,
justicia y equidad se construyen social-mente y son parte de una
disputa continua. La discusin sobre los distintos conceptos de
igualdad adquiere matices en cada socie-dad, y stos dependen en
gran medida de la nocin de bienestar en la que se sustentan.
La investigacin que aqu presentamos procura dialogar con dos
visiones norma-tivas de bienestar. La primera se inspira en el
enfoque de desarrollo humano for-mulado en los aos noventa por
Amartya Sen y Mahbub ul Haq1. En este enfoque, el bienestar se
funda en las libertades en los campos simblico y relacional: estar
social-mente integrado, lograr el respeto y recono-cimiento de los
otros, libertades que deter-minan tambin las oportunidades de
lograr un desarrollo humano pleno. De la misma manera, asume que el
espacio de las decisio-nes autnomas de individuos y comunidades no
puede darse por debajo de ciertos niveles de igualdad2. La discusin
mundial actual de este enfoque se centra en la necesidad de otorgar
mayor atencin a la dimensin subjetiva del bienestar, as como dar
mayor importancia a su desigual distribucin3.
La segunda visin nace en Bolivia con el Plan Nacional de
Desarrollo (PND) y se forma-liza en la nueva Constitucin Poltica
del Estado
-
23
SInopSIS
(NCPE) en los postulados del paradigma de bienestar denominado
Vivir bien. Esta visin asume que el bienestar de una sociedad debe
asentarse en principios y valores de igualdad, solidaridad,
reciprocidad y respeto de la dife-rencia. Se define como expresin
cultural que condensa la forma de entender la satisfaccin
compartida de las necesidades humanas ms all del mbito de lo
material y econmico, por-que incluye la afectividad, el
reconocimiento y el prestigio social4.
Qu tienen en comn estas visiones? Ms all de las divergencias,
cuya principal caracterstica es que se basan en una nocin distinta
de bienestar, estos enfoques conver-gen en un ideal de desarrollo
que trasciende el mbito material, pero sobre todo coinci-den en los
principios de igualdad, respeto y reconocimiento social. Por ello,
el horizonte requiere romper el ciclo de reproduccin de las
desigualdades garantizando el ejercicio de los derechos sociales,
civiles y polticos a lo largo del ciclo de vida, pues aquellos
derechos que no son ejercidos por toda la poblacin se convierten en
privilegios5.
agEnda dE InvEstIgacIn: una mIrada multIdImEnsIonal dE la
dEsIgualdadEl Informe parte de la premisa de que no
es posible entender las desigualdades de hoy si no entendemos
las desigualdades histri-cas. Tampoco es posible dar cuenta de
ellas sin antes describir las transformaciones socia-les que dieron
origen a una nueva estructura social. Qu tipos de desigualdades
persis-ten? Cules se reproducen entre generacio-nes? Qu nuevas
desigualdades emergen en una sociedad dinmica en permanente
trans-formacin?
Para responder a estas preguntas el Informe adopta una mirada
multidimensional, cuya complejidad se sintetiza en el grfico 1. En
el eje horizontal las desigualdades aparecen por su carcter
histrico (exclusiones por ori-gen tnico, de gnero o lugar de
residencia) o emergente (intraurbanas, informalidad y for-
malidad, insercin global, capacitacin y edu-cacin). En el eje
vertical, a su vez, aparecen las desigualdades por su carcter
material (educa-cin, ingresos, ocupaciones) o simblico (gus-tos,
estilos de vida, identidades). Estos cuatro cuadrantes reflejan la
complejidad de la pro-blemtica de las desigualdades.
En el cuadrante I se ubican las desigual-dades que producen
exclusiones en la edu-cacin, la generacin de ingresos decentes, el
acceso a determinadas ocupaciones, y que al mismo tiempo afectan a
grupos histrica-mente excluidos: pueblos indgenas, mujeres y
poblacin rural. Forman parte del cuadrante II las desigualdades
materiales que reprodu-cen exclusiones por diferencias en la
acumu-lacin de capital humano, la insercin en un mercado laboral
segmentado, y otros factores relacionados con una economa
globalizada. Este tipo de desigualdades afectan de manera
particular a poblaciones en los extremos de la pirmide de edades:
los ms jvenes, y la poblacin adulta mayor.
El cuadrante III refleja las desigualdades que producen
discriminaciones y exclusiones sim-blicas, producto de factores
culturales o trans-formaciones sociales que provocan importan-tes
mutaciones en los hbitos de consumo, los estilos de vida y las
identidades. Finalmente, el cuadrante IV agrupa las desigualdades
simb-licas, que en el espacio de las relaciones socia-les producen
un reconocimiento social que excluye a grupos histricamente
discrimina-dos (indgenas, mujeres y poblacin rural). La dinmica de
las desigualdades descritas en los cuatro cuadrantes opera de
manera articulada, y en muchos casos, sobrepuesta.
Cmo operan los mecanismos que rela-cionan las distintas formas
de desigualdad? Las desigualdades materiales determinan de manera
poderosa, aunque no nica, la adqui-sicin de los bienes ms
valorados, aquellos que distinguen o estigmatizan; a su vez, las
desigualdades simblicas intervienen en las posibilidades de logro
material en un crculo de fuerte interrelacin.
Estas desigualdades y su interrelacin son objeto de estudio en
este Informe.
4 Ministerio de Planificacin del Desarrollo, 2006. Plan Nacional
de Desarrollo.
5 Para una revisin de las tres dimensiones de ciudadana: civil,
poltica, y social; y su relacin con el concepto de democracia de
ciudadanos, vase PNUD-OEA, 2009. La democracia de ciudadana.
-
24
Informe Sobre DeSarrollo Humano en bolIvIa
dos puntos dE partIdaDos tensiones de la actualidad desafan
el
cambio social futuro y constituyen el punto de partida del
Informe.
1. El agotamiento de los factores estructurales que dinamizaron
el cambio socialLa primera tensin que identifica el
Informe es que Bolivia debe resolver el agota-miento de los
factores estructurales que dina-mizaron el cambio social. Una
mirada dete-nida a las tendencias de la transformacin social de las
ltimas tres dcadas permite identificar la importancia que tuvieron
fac-tores estructurales tales como la migracin campo-ciudad, la
terciarizacin de la econo-ma y la orientacin de las polticas
sociales, especialmente en la educacin y la salud, en un mayor
bienestar de los bolivianos.
Entre 1975 y 2007, Bolivia pas de ocupar el puesto 57 de 82
pases, al puesto 113 entre 177 pases en el ranking mundial del
ndice de Desarrollo Humano (IDH). En este periodo el
IDH pas de un nivel de desarrollo humano medio bajo (0,512) a un
nivel de desarrollo humano medio alto (0,729). Al mismo tiempo, la
esperanza de vida aument de 45 a 65 aos, y mejoraron
sustancialmente los indicadores de acceso y logro educativo de la
poblacin que se traducen, por ejemplo, en el aumento de la tasa de
alfabetizacin de 63 a 91%.
Sin embargo, esta tendencia de desarro-llo humano creciente en
el pas, sugiere una desaceleracin de los logros sociales en el
tiempo (grfico 2). En el campo de la poltica social, mejoras
futuras en los componentes sociales del desarrollo humano sern
margi-nales debido a que llegar a las reas rurales dispersas con la
oferta de servicios bsicos y mejorar la calidad de los mismos en
reas urbanas y rurales requiere mayores esfuer-zos de lo que
signific la ampliacin de los servicios en las ciudades durante el
proceso de urbanizacin.
En el campo de la poltica productiva y de la generacin de
ingresos, es difcil imaginar mayores transformaciones producto de
la ter-
GRFICO 1 Un enfoque multidimensional de la desigualdad
Fuente: elaboracin propia
-
25
SInopSIS
GRFICO 2 Evolucin del desarrollo humano y sus componentes
(1975-2007)
Fuente: elaboracin propia sobre la base de PNUd, 2009.
ciarizacin de la economa, o de la amplia-cin del sector informal
que ya acoge a siete de cada diez ocupados. Mejoras futuras en la
estructura de ingresos del mercado laboral dependern de acciones
concretas orienta-das a mejorar la distribucin del ingreso, de
mayores articulaciones entre actores produc-tivos de la economa
plural, y de un impulso especial a la productividad de los sectores
que utilizan mano de obra de manera intensiva.
Tres resultados alertan sobre la desacele-racin de los avances
sociales de los ltimos aos.
Primero, se constata la progresiva reduc-cin de las ganancias
derivadas de la migra-cin campo-ciudad: un proceso de urbaniza-cin
que acerc a la poblacin a servicios bsi-cos, educacin y salud
contribuyendo de una manera acelerada a la reduccin de las
dispa-ridades en las oportunidades de desarrollo de la poblacin6.
Estudios recientes para Bolivia
identifican que los flujos de poblacin pobre desde reas rurales
hacia reas urbanas mejor equipadas con servicios, contribuyeron
signi-ficativamente a mejorar las condiciones de vida de la
poblacin7. Cunta mayor ganan-cia en desarrollo humano es posible
esperar de futuros procesos migratorios?
Segundo, se evidencia el agotamiento de los impactos
provenientes de las refor-mas sociales iniciadas en la dcada de los
noventa, centradas en el aumento de la oferta de servicios bsicos,
educacin y salud a tra-vs de mayores niveles de inversin pblica y
gasto corriente, pero no necesariamente traducidas en mejoras
sustanciales en la calidad y eficiencia en la prestacin de los
mencionados servicios. El estado de situa-cin de la educacin en
Bolivia, por ejem-plo, revela avances importantes en educa-cin
primaria, y logros ms bien modestos en otros niveles y mbitos de la
educacin.
6 La literatura especializada para Amrica Latina explica dicha
transformacin como producto de la transicin de una economa rural
tradicional a una economa urbana moderna, sugiriendo que la mayor
causa de las desigualdades persistentes tiene origen en cambios
estructurales de larga data. Vase Ewout Frankema, 2006. A Theil
decomposi-tion of Latin American income distribution in the 20th
Century: Inverting the Kuznets Curve?.
7 Greg OHare y Sara Rivas 2007; Changing poverty distribution in
Bolivia: the role of ruralurban migration and urban services,
George Gray y Ernesto Yaez, 2009. The Moving Middle: Migration,
Place Premiums and Human Development in Bolivia. Como parte de los
resultados de este estudio se comprueba la existencia de un premio
para los trabajadores migrantes residentes en reas urbanas que con
iguales caractersticas a las de sus pares en reas rurales perciben
entre dos y cinco veces ms ingreso.
-
26
Informe Sobre DeSarrollo Humano en bolIvIa
A estos resultados se suman logros concre-tos en materia de
reduccin de la mortalidad infantil, en la niez y materna, como
resul-tado de la ampliacin de la cobertura insti-tucional alcanzada
por el Seguro Materno8. Es posible pensar en mayores ganancias
derivadas de estas acciones sin nuevas pol-ticas que amplen la
cobertura, garanticen la sostenibilidad y orienten nuevos esfuerzos
a la oferta de servicios de calidad?
Y tercero, se destacan importantes avances en materia de
disminucin del porcentaje de personas que viven por debajo de la
lnea de pobreza en la ltima dcada (grfico 3). Entre los aos 2000 y
2008, la pobreza moderada disminuy en siete puntos porcentuales, y
los efectos ms fuertes se registraron en reas rurales. La pobreza
extrema tuvo una disminu-cin mayor pasando de 45 a 33% en el mismo
periodo. Llama especialmente la atencin la reduccin de la pobreza
extrema el ltimo ao, situacin que puede explicarse, entre otros
factores, por el impacto de las transferencias condicionadas y no
condicionadas a los hoga-res Bono Juancito Pinto, Renta Dignidad y
Bono Juana Azurduy. Si bien an no se cuenta con estimaciones
oficiales, el impacto de estas polticas de carcter universal puede
tener un importante grado de progresividad ya que los sectores de
la poblacin que ms se benefician son los ms pobres.9 Sin embargo,
cuntos puntos porcentuales ms de pobreza ser posible reducir
garantizando incluso la sostenibilidad de estas polticas?
2. La creciente igualdad poltico-legal y la persistente
desigualdad econmico-socialLa segunda constatacin se refiere a la
ten-
sin entre la creciente igualdad poltico-legal frente a la
persistente desigualdad econmi-co-social. La creciente igualdad
poltico-legal se traduce en la ampliacin de la democracia mediante
la complementariedad de distintas formas de democracia (directa y
participativa, representativa y comunitaria), as como en la
inclusin de grupos tradicionalmente margi-nados del ejercicio del
poder poltico, como
8 Mario Galindo Soza, 2010. El progreso invisible. El Seguro
Universal Materno Infantil.
9 En el caso del Bono Juancito Pinto se estima que el 70% de los
beneficiarios pertenecen al 50% ms pobre de la poblacin. Vase: Del
Granado et al, 2010. Generacin, distribucin y uso del excedente de
hidrocarburos en Bolivia.
GRFICO 3 Pobreza y desigualdad, tendencias de una dcada
Fuente: elaboracin propia sobre la base de UdaPe.
los indgenas y las mujeres. A travs de un estudio sobre
representaciones sociales acerca de las transformaciones polticas
que vive el pas, el Informe explora las percepciones y expectativas
de las bolivianas y los bolivianos respecto a tres ejes temticos:
quin ejerce el poder?, cmo lo ejerce? y a quin benefi-cia? Los
resultados revelan que el centro de la representacin sobre el poder
poltico es que se ejerce a travs del gobierno para mejorar la
situacin econmica y defender los inte-reses de la gente pobre.
Tambin estn presentes valoraciones positivas acerca de la
entrega de bonos y donaciones, asociadas a un acto de justicia o
reparacin histrica respecto a los pobres y, en mirada crtica, a una
actitud paternalista y rentista que fomenta la flojera y el
derroche de dinero. A estas representaciones se suma un sentido
comn que ratifica la percepcin de una mayor inclusin y participacin
pol-ticas: se percibe, por ejemplo, que los indge-nas y las mujeres
tienen mayor posibilidad de acceder a cargos pblicos en relacin a
ante-riores gobiernos (grfico 4).
-
27
SInopSIS
Respecto al estilo de ejercicio del poder, se identifica una
tensin entre inclusin y exclu-sin. Por un lado, se reconoce la
inclusin en la toma de decisiones de los indgenas y el protagonismo
de sectores populares con un gobierno que obedece el mandato del
pue-blo. Pero al mismo tiempo existe una per-cepcin de exclusin de
la clase media, profe-sionales y empresarios, quienes afirman que
las decisiones son en beneficio de los mili-tantes del partido
oficialista y gente sin ins-truccin. En general, predomina una
mirada positiva sobre el accionar gubernamental y no existen dudas
sobre el sujeto del poder, el gobierno. Pero hay miradas duales
sobre las
10 La encuesta sobre Estratificacin y movilidad social (EMES)
llevada a cabo para este Informe el ao 2009 incorpora una seccin
que indaga sobre los factores que la gente considera ms importantes
para Vivir bien.
11 El informe regional sobre desarrollo humano ubica a Bolivia
en el primer puesto de desigualdad entre pases de Amrica Latina en
el periodo 1995-2005. Vase PNUD, 2010. Actuar sobre el futuro:
romper la transmisin interge-neracional de la desigualdad.
consecuencias de la gestin: la positiva privi-legia la justicia,
la igualdad y la inclusin; la negativa, en tanto, enfatiza la
exclusin de la clase media, la ilegalidad y el autoritarismo.
Las demandas indgenas y la mayor par-ticipacin poltica de este
grupo permiten visualizar la importancia de la democracia
intercultural en el sentido de una mayor parti-cipacin poltica
asentada en la diversidad y el pluralismo. Si bien la democracia no
aparece en las representaciones sociales de manera explcita, su
importancia est presente y de manera recurrente tras los reclamos
de la vigencia de las leyes y el Estado de dere-cho y a travs del
consenso sobre la percep-cin generalizada de la mayor participacin
indgena en el gobierno. En este sentido, la democracia no se ve
como problema ni como demanda, sino como oportunidad o va para que
el cambio beneficie a todos por igual. Esta percepcin es
fundamental para avanzar en el desafo de consolidar la democracia
en una sociedad diversa con igualdad.
En este contexto de cambio poltico, qu elementos que inciden en
el bienestar de la gente aparecen entre las expectativas de la
poblacin? Segn una encuesta llevada a cabo para este Informe, el
bienestar social y econmico seran el centro de preocupacin de los
bolivianos y las bolivianas10. Los deseos convergen en torno a
temas fundamenta-les como asegurar un empleo estable con salario
justo, una buena produccin y una buena cosecha, una vivienda
propia, una vida sana con buena alimentacin y una educacin de
calidad. Deseos a los que se suman expectativas de una vida
armoniosa y de convivencia en una sociedad diversa.
Sin embargo, y pese a los avances en materia social y econmica
de las ltimas dcadas, y de la creciente igualdad en mate-ria de
participacin y representacin polti-cas de los ltimos aos, Bolivia
es uno de los pases ms desiguales de la regin en trminos de
ingreso11. La sociedad boliviana tiene una estructura socioeconmica
des-igual que arrastra desde hace dcadas: la
Nota: Pregunta. en relacin a los anteriores gobiernos usted
considera que los siguientes
actores tienen mayor, menor o igual posibilidad de ejercer un
cargo pblico importante?
Fuente: PaPeP, 2010.
GRFICO
4Percepciones sobre la posibilidad de acceso a cargos pblicos
segn grupo social, 2010
CUADRO 1 Concentracin del ingreso del hogar
(1970-2007)ConCentraCIn
Del IngreSo 1970-74 2007
20% ms rico 59% 60%20% ms pobre 4% 2%
Fuente: elaboracin propia sobre la base de James dunkerley, 2003
y eH 2007.
-
28
Informe Sobre DeSarrollo Humano en bolIvIa
acumulacin del ingreso el ao 2007, carac-terizada por una
concentracin en pocas manos, era muy parecida a la de 1970.12 A lo
largo de cuatro dcadas la poblacin creci de 4,6 a diez millones de
habitantes, pero la distribucin del ingreso se mantiene tan
desigual como antes.
En 1970, el 20% ms rico de la poblacin concentraba el 60% del
ingreso y el 20% ms pobre apenas acumulaba el 2%. Una realidad que,
en el presente, alerta sobre la necesidad de resolver la tensin
entre la creciente igual-dad poltico-legal y la persistente
desigualdad econmico-social (ver cuadro 1).
El agotamiento de los factores estructu-rales que dinamizaron la
transformacin social de las ltimas tres dcadas y la cre-ciente
igualdad poltico-legal frente la per-sistente desigualdad
econmico-social son los puntos de partida de este Informe, y a la
vez motivan su dedicacin al anlisis de la
12 James Dunkerley, 2003. Rebelin en las venas: La lucha poltica
en Bolivia 1952-1982.
persistencia de desigualdades histricas, y la descripcin de las
desigualdades emergen-tes. Los principales hallazgos se sintetizan
a continuacin.
los hallazgos dEl InformE
1. recomposicin territorial de las identidades tnicasUno de los
resultados ms relevantes de
la transformacin social de las ltimas tres dcadas es la
recomposicin territorial de las identidades tnicas. Como resultado
de un intenso proceso migratorio, los departa-mentos albergan hoy
un abanico de iden-tidades socioculturales. Esta situacin dio
origen a una compleja composicin de la poblacin que reside en un
departamento distinto del departamento en el que naci (ver mapa
1).
Fuente: elaboracin propia sobre la base de cNPV 2001, iNe.
MAPA 1 Poblacin migrante segn departamento de nacimiento
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29
SInopSIS
El 2001, los departamentos con mayor proporcin de habitantes
migrantes nacidos en otros departamentos eran Cochabamba (77%),
Pando (71%), Santa Cruz (65%) y Tarija (63%). En Pando, por
ejemplo, de los siete de diez migrantes nacidos en otro
departamento, 39% eran del Beni y 15% de La Paz. Mientras que en
Santa Cruz, de los 684 mil migran-tes registrados el mismo ao, 15%
haba nacido en Cochabamba, 13% en Chuquisaca, 10 % en La Paz y 10%
en Potos. En el otro extremo, en los departamentos de Potos y La
Paz, la mayor parte de la poblacin migrante haba nacido en el mismo
departamento, con proporciones de 80 y 74%, respectivamente. La
relevancia de esta nueva territorialidad radica en las
repercusiones en la recomposi-cin identitaria, la convivencia entre
distintas culturas en clave de interculturalidad y la integracin
social.
Ahora bien, cmo se reconfigura terri-torialmente la
autopertenencia tnica emer-gente de estos cambios? De los dos
millones de migrantes de toda la vida, identificados el
Fuente: elaboracin propia sobre la base de cNPV 2001, iNe.
ao 2001 a nivel nacional, el 63% se decla-raba perteneciente a
algn pueblo originario. Tres departamentos concentraban el 71% de
la poblacin migrante indgena: La Paz (34%), Cochabamba (15%) y
Potos (21%).
Al mismo tiempo, cada departamento aco-ga un abanico diverso de
identidades tni-cas resultante de la migracin. En La Paz, producto
de una migracin altamente repre-sentada por migrantes del mismo
departa-mento, 62% de los migrantes se identificaba con el pueblo
aymara y 14% con el quechua. En Santa Cruz, producto de una
migracin proveniente de todo el territorio nacional, la poblacin
migrante se identificaba con distintos pueblos: 26% con el quechua,
7% con el aymara, 6% con el pueblo chiquitano, 4% con el guaran y
2% con el mojeo. Beni representaba tambin una compleja gama de
identidades tnicas. Entre la poblacin migrante que habitaba el
departamento el ao 2001, 7% eran quechuas, 8% aymaras, 11% mojeos y
11% pertenecan a otros pue-blos nativos.
MAPA 2 Poblacin migrante segn autopertenencia a algn pueblo
indgena
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30
Informe Sobre DeSarrollo Humano en bolIvIa
En sntesis, la poblacin indgena por autopertenencia con mayor
presencia en todo el territorio nacional es de origen quechua y
aymara. Sin embargo, la pluralidad de iden-tidades tnicas se
extiende a lo largo y ancho del territorio nacional y es la sntesis
de la Bolivia plurinacional y diversa.
2. territorio, desigualdad y movilidad social en pueblos
indgenasA modo de ilustrar los elementos que
caracterizan las condiciones de desigualdad que enfrentan los
habitantes de pueblos ind-genas que habitan reas rurales, el
Informe recoge testimonios de habitantes de comuni-dades de cinco
pueblos: aymaras, chiquitanos, quechuas, guaranes y mojeos. Sus
voces relatan la vivencia cotidiana y dan cuenta de que el
territorio, entendido como sistema de actores y relaciones
sociales, define rasgos comunes y distinciones sociales que
gene-ran desigualdad y posibilidades de movilidad social.
La relativa homogeneidad material y cul-tural en las comunidades
de los pueblos ind-genas determina que sean dispersos los rela-tos
sobre discriminacin social. Sin embargo, sta se hace visible en los
espacios de encuen-tro con otros grupos sociales. Es el caso de los
residentes urbanos que regresan a la comuni-dades con patrones de
ostentacin urbana o marcados por la experiencia de la emigracin
internacional.
En las tierras bajas, la discriminacin se expresa, entre otras
formas, en el escenario de las relaciones laborales entre los dueos
de las haciendas y los trabajadores deno-minados mozos en Beni, y
tambin en la relacin de servidumbre entre los campesi-nos guaranes
y los hacendados ganaderos de la regin del Parapet. Asimismo, las
Tierras Comunitarias de Origen permiten el acceso a tierras algunas
veces mejor conectadas con mercados intermedios. El acceso a la
tierra, tal como relatan con especial nfasis los habi-tantes de las
comunidades chiquitanas, cons-tituye una va de movilidad
social.
La combinacin de factores climticos adversos, la falta de agua y
el envejecimiento de la poblacin rural son enunciados por los
productores aymaras de Corque, provin-
cia Carangas de Oruro, como factores que hacen vulnerable la
reproduccin de su eco-noma. Mientras que para los pobladores
aymaras de la comunidad de Sevaruyo, pro-vincia Avaroa del
departamento de Potos, la concentracin de la actividad agrcola en
la produccin extensiva de la quinua, gene-radora de excedentes,
permite a los produc-tores financiar tecnologa productiva y crear
empleos que atraen a trabajadores de diver-sas procedencias.
Muchos de los casos de movilidad social muestran una asociacin
poderosa con esfuerzos individuales ms que con dict-menes de
poltica pblica. Se trata ms del instinto de los actores para
encontrar nuevos territorios y nichos de mercado en los cuales
insertarse laboralmente, que de mejoras en la distribucin de
oportunidades y activos de parte del Estado.
3. tendencias de la movilidad educativa y ocupacional entre
generaciones Qu tendencias se rescatan de las opor-
tunidades de educacin y ocupacin para las nuevas generaciones?
La poblacin joven goza hoy de mayor escolaridad con respecto a sus
padres. Los logros educativos de las ltimas dcadas se traducen en
una movi-lidad educativa creciente, especialmente en los hogares ms
pobres. Entre 1976 y 2007, los aos de escolaridad promedio de la
poblacin subieron de 4 a 9 aos, aunque esta mejora se traduce en
incrementos de distinta intensidad para diferentes grupos de la
poblacin.
Qu factores del cambio estructural explican las altas tasas de
movilidad educa-tiva entre generaciones? Primero, los bajos niveles
de educacin de inicio es decir, de la poblacin que asisti a la
escuela en las dcadas de los sesenta y setenta dej un amplio
espacio para una movilidad edu-cativa ascendente. Se registra una
mayor movilidad en general en las reas urbanas, mantenindose las
brechas segn condicin tnica y de gnero.
Segundo, la continua ampliacin de la cobertura en educacin
primaria entra en tensin con el cuello de botella en el acceso y
culminacin de la secundaria. La creciente
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31
SInopSIS
movilidad educativa entre generaciones parece alcanzar un techo
en este nivel, donde nueve de cada diez personas que culminaron la
secundaria son hijos de padres con educa-cin secundaria o incluso
superior.
En cuanto a la movilidad ocupacional, sta se asocia a los
cambios en la estructura de la economa y del mercado laboral.
Existe una movilidad ocupacional entre generaciones, pero es todava
insuficiente para mejorar las condiciones y las oportunidades para
un gran nmero de trabajadores. Tres de cada diez personas se
insertan en ocupaciones mejor remuneradas que las de sus padres,
dos en categoras y oficios de similar remu-neracin y una en
ocupaciones peor remu-neradas; mientras que cuatro de cada diez
bolivianos heredan la categora ocupacional de sus padres.
Qu rasgos de la transformacin de la economa y del mercado
laboral ayudan a explicar este patrn de movilidad diferen-ciada?
Durante las ltimas tres dcadas el crecimiento del empleo en el
sector tercia-rio empez a ser el motor de la movilidad ocupacional;
sin embargo, se tradujo en un mayor nmero de empleos no calificados
y de baja productividad, y un menor nmero de empleos calificados.
Por un lado, destaca el aumento relativo y absoluto de los
pro-fesionales y tcnicos (sectores financie-ros, comercial y
administracin pblica); as como de las ocupaciones rutinarias no
manuales (empleados de oficina, tra-bajadores de servicios varios y
vendedores de comercios y mercados). Asimismo, se registra un
aumento importante de ocupa-ciones manuales no calificadas en
varios sectores (obreros de la minera y la indus-tria, vendedores
ambulantes y trabajadores de la construccin).
Por el otro, resalta la disminucin rela-tiva del trabajo manual
no calificado en la agricultura (pequeos propietarios, zafre-ros,
peones y jornaleros) y de las ocupa-ciones manual calificadas, en
todos los sectores (operarios y artesanos). Esta situa-cin refleja
que el modelo econmico y las reformas estructurales impulsados en
dca-das pasadas no ayudaron a generar oportu-nidades laborales para
la mayor parte de la poblacin.
4. Persistencia de desigualdades histricas El cuarto rasgo que
caracteriza el patrn
de transformacin de la sociedad boliviana es la persistencia de
las desigualdades his-tricas (condicin tnica, de gnero y entre reas
urbanas y rurales). Estas desigualda-des son evidentes, como lo
refleja la compo-sicin de los extremos de la pirmide social
resultante de la estratificacin de la pobla-cin segn el ingreso per
cpita del hogar (ver grfico 5).
El ao 2007, el extremo superior de la pirmide, el estrato alto
aqul que agrupa al 5% de los hogares con mayor ingreso per cpita
rene a 496 mil personas. La pobla-cin es predominantemente urbana
(90%) y no indgena (63%). La poblacin ocupada, de la que forman
parte 291 mil trabajadores, se dedica principalmente a actividades
del sector formal: 22% estn insertos en el sector estatal y 44% en
el empresarial. La rama de activi-dad econmica ms comn es la de
ventas y reparaciones (17%), seguida de la educacin (15%),
manufacturas (10%) y de la adminis-tracin pblica y defensa
(9%).
En el otro extremo en el estrato bajo de ingresos se concentran
los hogares cuyo ingreso per-cpita era menor a la lnea de pobreza
moderada estimada para el ao 2007. El perfil de este estrato es
predomi-nantemente indgena (58%) y an mantiene una importante
presencia en reas rurales (47%). Los 2,8 millones de ocupados que
componen este estrato se dedican princi-palmente a actividades
agrcolas (53%), un importante porcentaje al sector de la indus-tria
extractiva (15%), y otro tanto al de servi-cios (12%). El 75%
realiza actividades dentro de la economa familiar, en actividades
eco-nmicas diversas.
Al mismo tiempo, las brechas en indica-dores de bienestar entre
grupos ilustran la persistencia y reproduccin de desigualdades que
representan restricciones en la acumula-cin bsica de capacidades.
Estas desigualda-des afectan especialmente a las mujeres, la
poblacin indgena, las comunidades rura-les y los hogares ms pobres.
As lo refleja la acumulacin de desigualdades en el logro educativo
calculadas para el ao 2007 (ver grfico 6).
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32
Informe Sobre DeSarrollo Humano en bolIvIa
GRF
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07, i
Ne.
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33
SInopSIS
5. Ampliacin del estrato medio de ingresos En medio de profundas
desigualdades, la
poblacin boliviana encuentra da a da vas concretas de movilidad
social: la migracin interna y externa, la educacin y los
emprendi-mientos en el mercado informal son las estra-tegias ms
comunes. Como resultado de este esfuerzo, entre otros factores, en
el periodo 1999-2007, el estrato medio de ingresos cre-ci de 30 a
36%13. Un ritmo de crecimiento
anual promedio de 138 mil personas entre las cuales se
incorporan nuevos grupos sociales y nuevas identidades.
El ao 2007, 3,6 millones de bolivianos y bolivianas ocupaban el
estrato medio de ingresos. El 82% de la poblacin habitaba en reas
urbanas y cuatro de cada diez personas eran indgenas. Aunque la
mayor parte de la poblacin ocupada en este estrato (65%), estaba
inserta en actividades del sector ter-ciario (servicios y comercio)
y un importante porcentaje se dedicaba a actividades del sec-tor
secundario (industria manufacturera y extractiva).
La relevancia de este grupo en trminos del bienestar no slo
radica en que el nivel de ingresos de los hogares supera la lnea de
pobreza, sino en que tambin logra un mejor cumplimiento de los
derechos sociales. Esta situacin se refleja en la comparacin de
algu-nos indicadores con relacin al estrato bajo: un promedio de
escolaridad de nueve frente a seis aos; y una afiliacin a un seguro
mdico de salud de 73 frente a 55%.
Este estrato, sin embargo, no est exento de contradicciones y de
amplias desigualda-des. Se estima que cerca de 2,3 millones de
personas del nuevo estrato medio forman parte de un medio
vulnerable, poblacin cuyo ingreso per cpita del hogar oscilaba el
ao 2007 entre una y dos lneas de pobreza.
13 Para propsitos de este Informe se ha delimitado el estrato
medio al rango de ingreso per cpita del hogar com-prendido entre
Bs. 463 y 2.041, que corresponden a la lnea de pobreza moderada del
ao 2007 y al 95vo percentil de la distribucin del ingreso,
respectivamente.
GRFICO 6 La acumulacin de desigualdades histricas en educacin,
2007
Fuente: elaboracin propia sobre la base de eH 2007, iNe.
GRFICO 7 La ampliacin y vulnerabilidad del estrato medio de
ingresos (1999-2007)
Fuente: elaboracin sobre la base de mecoVi 99 y eH 2007,
iNe.
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34
Informe Sobre DeSarrollo Humano en bolIvIa
Las percepciones sobre la desigualdad en los estratos medios que
emergen de los estu-dios de caso realizados en las ciudades de La
Paz, Santa Cruz, El Alto y Cochabamba, per-miten identificar
particularidades en cada una de estas sociedades urbanas. En El
Alto este grupo encuentra barreras en el desarrollo de sus
actividades como profesionales, por lo que los pequeos
emprendimientos produc-tivos y/o comerciales y el doble empleo son
adoptados como estrategias para enfrentar los obstculos de su
insercin en el mercado de trabajo. La escasa calificacin de la mano
de obra y la debilidad del servicio pblico de for-macin profesional
son consideradas como barreras que dificultan contar con la mano de
obra necesaria para el crecimiento de sus emprendimientos.
La reducida retribucin salarial que reci-ben los trabajadores
dependientes de los estratos medios en Cochabamba, figura en su
criterio como uno de los principales obs-tculos para mejorar sus
condiciones de vida. A este grupo se contraponen los emigran-tes
bolivianos que regresan a Cochabamba, irrumpiendo como un nuevo
colectivo social con un capital econmico y patrones de
com-portamiento que compiten con la clase media tradicional.
La profesin altamente calificada es con-siderada entre los
estratos medios de la ciu-dad de La Paz como una va de incorporacin
competitiva en un mercado de trabajo cada vez ms exigente. Mientras
que la va de post-formacin de profesionales se percibe como
cimiento para entrar o mejorar posiciones en el mercado
laboral.
Los hbitos de consumo y las redes sociales son referentes con
los que se autodefinen los estratos medios en Santa Cruz, pues
operan como factores centrales en el proceso de asig-nacin de
prestigio social. Al mismo tiempo, la pertenencia a fraternidades y
comparsas de car-naval proporciona apoyos para el desempeo de los
grupos sociales en el mercado laboral.
6. Nuevas desigualdades materiales: informalidad, calificacin y
remesasEn la estructuracin de los ingresos del
hogar no slo inciden las desigualdades tra-dicionales las
brechas de gnero, etnia
y lugar de residencia, sino que a stas se suman disparidades
adicionales que ataen a la segmentacin del mercado laboral urbano
(formal-informal), las posibilidades de gene-rar mayores ingresos a
travs de remesas internacionales, y las diferencias de acceso y
logro educativo.
La insercin en un mercado laboral seg-mentado adquiere una
importancia particu-lar. Un ejemplo de la dinmica de las
des-igualdades en el mercado laboral se retrata en el grfico 8, que
evidencia importantes bre-chas en el ingreso laboral en el rea
urbana, segn distintas caractersticas. El ingreso laboral promedio
mensual el ao 2007 era de Bs 1.525 bolivianos, monto que se reduce
a Bs 1.148 para una persona ocupada en el sector informal, y
aumenta a Bs 2.280 en el caso de una persona inserta en el sector
for-mal. Las brechas entre hombres y mujeres, y entre la poblacin
indgena y no indgena, siguen siendo importantes y reproducen las
condiciones de desigualdad ya descritas para el campo de la
educacin.
Al mismo tiempo, la retribucin al empleo revela diferencias
importantes entre ocupa-ciones, desigualdades que se asocian a
nive-les distintos de calificacin. Para el ao 2009, el Informe
estima que las ocupaciones mejor remuneradas son los profesionales,
propieta-rios y gerentes quienes alcanzaban un ingreso promedio
mensual de Bs 3.800; seguida de los trabajadores por cuenta propia
y profe-sionales independientes en actividades dis-tintas a la
agricultura, quienes declararon un ingreso laboral promedio de Bs
3.100. Entre los profesionales y tcnicos de nivel medio, el ingreso
declarado alcanzaba a Bs 2.500. El ingreso laboral en estas
ocupaciones alta-mente calificadas es muy superior al ingreso que
generan los trabajadores no calificados de distintas ramas de la
economa, para quienes la retribucin promedio al trabajo no supera
los Bs 1.000.
Un factor que representa una oportunidad real de incrementar los
ingresos del hogar son las remesas enviadas desde el extranjero por
la poblacin migrante. El ao 2008, el valor de las remesas
registradas por el Banco Central de Bolivia alcanz a 1.000 millones
de dlares, monto casi tres veces superior a la Ayuda al Desarrollo
(AOD) y el doble de
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35
SInopSIS
la Inversin Extranjera Directa (IED) regis-tradas para el mismo
ao. Las remesas cons-tituyen un medio concreto para aumentar el
ingreso del hogar. Se estima que en su ausencia el ingreso promedio
de los hogares que las reciben se reducira en 43%, y 160 mil
personas caeran por debajo de la lnea de pobreza. Si bien el
Informe no profun-diza sobre el impacto de las remesas en la
desigualdad global, se estima que stas inci-den en aumentos de la
desigualdad, en tanto quienes las reciben pertenecen a los hogares
de los quintiles de ingreso medio.
7. Nuevas desigualdades simblicas: estilos de vida que
transforman identidades La emigracin rural, el consecuente
creci-
miento de las ciudades, la reconfiguracin de los mercados de
trabajo urbanos, los cambios polticos y el impacto de la
globalizacin eco-nmica, de la informacin y la comunicacin virtual,
estn transformando a la sociedad boliviana contempornea. En este
contexto emergen nuevas desigualdades simblicas. Cmo perciben los
bolivianos y las bolivia-nas que viven en las ciudades los cambios
ocurridos en las identidades?
La etnicidad figura en el imaginario de la poblacin boliviana
como el componente ms fuerte de las identidades. Piel,
indumentaria, habla y riqueza son nombrados como los elementos
sobre los que transitan la discri-minacin y las tensiones sociales.
Al mismo
tiempo, los bolivianos han construido en los ltimos aos una
serie de nuevas identidades en las que se reconocen o con las que
descri-ben a los dems.
As, Jailones nombra a los estratos socioeco-nmicos ms altos de
La Paz mientras que Negociantes es como se denomina la nueva
burguesa popular de El Alto. Provincianos es como se reconocen a s
mismos quienes llegan del campo a La Paz, en tanto que son llamados
Paisanos los migrantes andinos en el Beni. Las Familias
tradicionales de Cocha-bamba estn integradas por profesionales. Los
estratos medios en la ciudad de El Alto se designan a s mismos como
los Buenos Alte-os, y la crucea como Gente bien.
Esas identidades reflejan los desplaza-mientos poblacionales,
las experiencias de los emprendedores bolivianos y la persisten-cia
de desigualdades materiales, porque son formas de sealar las
diferencias entre ricos y pobres. Tambin muestran desigualdades
simblicas, que resultan de la desigual distri-bucin del poder
social basado en la clasifica-cin que las personas realizan de
bienes a los que atribuyen ciertos valores, as como de los
individuos que los poseen. Estas desigualda-des intervienen como
obstculos en algunos casos, y como oportunidades de movilidad
social en otros.
La desigual distribucin de poder social se expresa en integracin
social pero tam-bin en exclusiones y discriminaciones. Unas veces
el xito material no coincide
GRFICO 8 Desigualdades en el ingreso laboral promedio en reas
urbanas (Bs/mes), 2007
Fuente: elaboracin propia sobre la base de eH2007, iNe.
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Informe Sobre DeSarrollo Humano en bolIvIa
con el social, como es el caso de las Nego-ciantes de El Alto
quienes sienten discrimi-nacin por su baja escolaridad, situacin
que compensan con el reconocimiento social que obtienen por su
participacin en cada vez ms lujosas fiestas patronales. En otras,
como en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, el logro econmico se
fortalece por la va de la integracin/exclusin en las redes sociales
formadas por comparsas y fraternidades sociales. En Cochabamba, al
igual que en otras ciudades, el control del territorio urbano marca
los lmites entre los grupos sociales.
ImplIcacIonEs y campos dE accIn para un cambIo socIal con
Igualdad
Qu desafos de poltica pblica emer-gen de esta radiografa de
nuevas y viejas desigualdades en Bolivia? Sin duda el desa-fo
central apunta a la necesidad de extender a todos los bolivianos y
bolivianas, el ejerci-cio de los derechos a una educacin y salud de
calidad, buenos ingresos, buenas condi-ciones laborales, y que sean
reconocidos por sus pares como iguales. Los hallazgos de este
Informe sugieren una reflexin sobre la urgencia de reducir las
desigualdades en los prximos aos, e invocan a realizar nuevos
pactos territoriales a favor de una sociedad de iguales.
La desigualdad debera ocupar un lugar central en las decisiones
de polticas futuras. Por ello, el primer paso radica en comprender
que con la desigualdad, todos perdemos. El segundo paso implica
reconocer que los suje-tos de las polticas pblicas son actores
diver-sos. Y el tercero consiste en definir tres pre-misas gua para
acciones futuras: la universa-lizacin de los derechos sociales, la
democra-tizacin del empleo y el trabajo dignos, y el
fortalecimiento de la interculturalidad.
1. Con la desigualdad todos perdemos La primera noticia, en
materia de pol-
ticas pblicas, que emerge de este anlisis apunta a promover
acciones en pos de la
igualdad en los distintos niveles territoria-les. El Informe
estima que la prdida en desarrollo humano que produce la
desigual-dad en los municipios oscila entre 4 y 34% (0,033 y 0,230
puntos) del ndice de Desa-rrollo Humano. Segn este ejercicio,
rea-lizado para el ao 2001, el municipio con mayor desarrollo
humano corregido por desigualdad sera Cobija, capital del
depar-tamento de Pando; y el con menor ndice, el municipio
Tacobamba, perteneciente a la provincia Saavedra del departamento
de Potos. Como resultado de esta prdida, la posicin de los
municipios en el ranking de desarrollo humano plantea nuevos
desafos a las polticas pblicas locales.
Resaltan las posiciones que ganan algu-nas ciudades intermedias
y del rea metro-politana de Santa Cruz, como Pailn, Cotoca y La
Guardia, que se ubican entre los veinte lugares del ranking
municipal. En el otro extremo, la desigualdad afecta a munici-pios
de varios departamentos del pas. As, la mancha de municipios con
menor desa-rrollo humano, esta vez penalizado por desigualdad,
abarca varios municipios de los departamentos de Chuquisaca, Potos
y Cochabamba.
Asimismo, las capitales de departa-mento que sufriran las
mayores prdidas seran Sucre y Potos, que caen de los pues-tos 12 y
16 a los puestos 38 y 40, respecti-vamente. Cochabamba cae del
primero al quinto lugar, La Paz del tercero al cuarto y Oruro del
noveno al onceavo, en tanto que Santa Cruz se mantiene en la
segunda posicin. Las capitales de departamento que suben son
Trinidad, Tarija y Cobija, cuatro, diez y trece posiciones,
respectiva-mente, alcanzando esta ltima el primer lugar con el
ajuste, desplazando incluso a los municipios capitales del eje
central del pas.
En este escenario de profundas brechas entre departamentos y
municipios, y al inte-rior de los mismos, la incorporacin de
medi-ciones de desigualdades en el logro de indi-cadores sociales
en la planificacin departa-mental y municipal parece una tarea
inelu-dible para asegurar un proceso autonmico democratizador de
derechos.
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SInopSIS
2. Los sujetos de polticas, actores diversos La segunda noticia
objeto de atencin de
polticas pblicas es la nueva estructura social emergente de la
transformacin de la socie-dad que plantea nuevos retos para la
accin. Los sujetos de polticas orientadas a reducir desigualdades
son actores diversos y enfren-tan distintas restricciones a su
bienestar.
El primer grupo enfrenta restricciones que impiden la acumulacin
bsica de capacidades para el desarrollo humano. El ao 2007, cerca
de seis millones de personas vivan en condiciones de pobreza, y
cerca de 3,7 millones en condiciones de pobreza extrema. Las
limitaciones asociadas a la pobreza incluyen problemas de
desnutricin, bajo nivel educativo y baja esperanza de vida, que son
privaciones de derechos fundamentales y a la vez se constituyen en
las mayores restricciones al logro de oportunidades a lo largo del
ciclo de vida. Son sujetos de polticas aquellos habitantes urbanos
de los estratos de ingreso ms bajos, que independientemente del
origen tnico, viven en condiciones de
pobreza. Se suman tambin a este grupo los pueblos indgenas que
habitan reas rurales alejadas y que enfrentan serias limitaciones
al crecimiento de la economa rural de subsistencia. En muchos casos
se trata de poblaciones expuestas a vulnerabilidades climticas,
inundaciones y sequas. Las polticas para estos actores se mueven
sobre todo en el mbito de la poltica social y territorial donde
predomina la pobreza extrema en el pas.
Para el segundo grupo las limitaciones estructurales se
relacionan con el mercado laboral, y se traducen en restricciones
de pro-ductividad, capacidad de emprendimiento, espe-cializacin y
educacin. Se trata de la pobla-cin que hoy forma parte del estrato
medio de ingresos, es decir, cuyo ingreso familiar per cpita
mensual supera la lnea de pobreza, pero que an enfrenta una alta
vulnerabilidad de caer por debajo de la misma. Este grupo de
actores, que rene a 2,3 millones de personas, agrupa a un milln de
ocupados con una edad promedio de 36 aos, y una escolaridad que no
alcanza la secundaria. Un gran nmero de
MAPA 3 IDH municipal 2001
Fuente: elaboracin propia sobre la base del cNPV 2001, iNe.
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Informe Sobre DeSarrollo Humano en bolIvIa
trabajadores en este sector se dedica a acti-vidades
semiempresariales y familiares. Las polticas para estos actores se
mueven sobre todo en el mbito de las polticas laborales y
productivas que promuevan una distribucin ms equitativa del
ingreso.
El tercer grupo de actores, no se concentra en un estrato en
particular, rene a los diez millones de bolivianos y bolivianas,
quienes enfrentan restricciones que limitan la intercul-turalidad.
Esta temtica involucra a toda la poblacin boliviana porque es un
requisito indispensable para la convivencia armnica en una sociedad
diversa. Cerca de tres millo-nes de bolivianos y bolivianas habitan
en una localidad distinta a la de su lugar de origen. Al mismo
tiempo, tres de cada diez bolivia-nos se sienten discriminados; las
causas ms frecuentes de dicha discriminacin son: el color de la
piel, la manera de hablar, el origen tnico y el no tener dinero.
Esta situacin de discriminacin plantea la impo-sibilidad de
convivir en armona en una sociedad que acoge a una diversidad de
cul-turas. Las acciones para fomentar la inter-culturalidad deberan
promoverse en varios campos, y requieren acciones con especial
intensidad en las ciudades y centros urbanos intermedios receptores
de flujos migratorios importantes.
3. tres premisas para asegurar un cambio social con igualdad
Frente a este complejo escenario, qu
priorizar? Tres premisas pueden ser orien-tadoras de un cambio
social con igualdad: i) la universalizacin de los derechos
sociales, ii) la democratizacin del empleo y el trabajo dignos y
iii) la interculturalidad como condi-cin de convivencia,
reconocimiento y unidad en la diferencia.
Universalizar los derechos sociales Cmo enfrentar las
restricciones que
impiden la acumulacin bsica de capacida-des? Una va de polticas
que apunte a resol-ver estas restricciones, apunta tambin a
uni-
versalizar el ejercicio de los derechos sociales. En este
Informe centramos la atencin en el derecho social a la educacin, en
el marco de la concepcin de ciudadana entendida como precepto de
igualdad bsica asociada al ejer-cicio de derechos civiles,
polticos, econmi-cos, sociales y culturales14. Tres noticias que
recogemos del Informe confirman la impor-tancia que adquiere la
educacin en materia de bienestar: es una va concreta de genera-cin
de ingresos, representa un activo sim-blico en trminos de
reconocimiento social y su garanta constituye una oportunidad de
promover valores de integracin e intercultu-ralidad en una sociedad
diversa.
En este campo se requiere combinar esfuerzos de manera que se
abarque la educacin a lo largo del ciclo de vida, se proporcione
una infraestructura accesible, se eliminen las restricciones
econmicas de los hogares, se fomente la integracin y se erradiquen
las prcticas de discriminacin. Sin embargo, los resultados dependen
de la intervencin de varios actores y requieren de un compromiso de
los distintos niveles de gobierno, en funcin de sus atribuciones y
responsabilidades, de asegurar la disponibilidad de recursos a
travs de una prioridad presupuestaria que considere a la educacin
como un inters superior de la sociedad. Una accin de
universalizacin debera promover la calidad de la oferta educativa y
el respeto de los derechos humanos.
educacin para todosLa educacin bsica para todos puede ser
el primer paso de un proceso gradual hacia la universalizacin.
La provisin de escue-las, maestros, libros y equipos constituye un
requisito esencial de la educacin. Este obje-tivo an no se cumple
en todo el territorio nacional. La distribucin de establecimientos
educativos muestra que existe an mucho espacio para la accin en
materia de inversin en infraestructura educativa. El ao 2007, el
promedio de unidades educativas que ofre-can los tres niveles de
educacin (inicial, pri-maria y, secundaria) en cada municipio,
no
14 La centralidad de los derechos sociales en la discusin en
particular del derecho a la educacin no resta im-portancia a los
otros grupos de derechos mencionados, ni tampoco a otras
generaciones de derechos. PNUD-OEA, 2009. Op. Cit.
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SInopSIS
superaba el 10%, y una proporcin similar ofreca solamente los
niveles de primaria y secundaria. Al mismo tiempo, seis munici-pios
del pas no contaban con establecimien-tos educativos que ofrecieran
los tres niveles, y cuatro de ellos slo contaban con unidades
educativas donde se impartan nicamente los niveles inicial, y
primaria.
Si bien el Bono Juancito Pinto poltica de incentivo a la demanda
de educacin per-miti un avance hacia este objetivo desde su
implementacin el ao 2006, pues se estima que entre 2006 y 2009 el
abandono escolar se redujo de 5,3 a 2,5%, su mayor efectividad
depender de que se garantice la oferta de servicios educativos de
calidad.
En materia de la nueva normativa que regula las competencias del
sistema de educacin nacional, la Constitucin Poltica del Estado
plantea la concurrencia del nivel central del Estado y las
entidades territoriales autnomas; y la Ley Marco de Autonomas y
Descentralizacin se refiere a una ley especial en materia de
educacin que regular el desarrollo curricular. El marco de este
nuevo escenario institucional y normativo puede constituirse en una
oportunidad para establecer las bases de la universalizacin de la
educacin bsica en los prximos aos.
calidad y derechos humanos en la educacinLa universalizacin de
la educacin debe-
ra ir acompaada de acciones concretas que promuevan la calidad
educativa. La calidad de la educacin no debera circunscribirse
nicamente a garantizar las competencias bsicas para el aprendizaje,
sino tambin a fomentar valores de justicia, democracia y
tolerancia. Para universalizar una educacin de calidad orientada a
reducir las desigual-dades el principio de no discriminacin es
esencial. Este principio debera regir todas las polticas y acciones
en el Sistema Educa-tivo de manera que se eliminen las barreras
culturales y sociales, y se garanticen los dere-chos humanos desde
la escuela. El respeto de la identidad y la diferencia es
primordial y
puede iniciarse a travs de programas de edu-cacin
intercultural.
Finalmente, en materia de poltica social es necesario garantizar
la sostenibilidad tanto en trminos de la provisin de servicios
(oferta), como en trminos de la ampliacin de su cobertura
(demanda). Este desafo est sujeto a un cambio de la lgica
esencialmente distributiva de las rentas del gas, a una lgica de
cumplimiento de metas sociales. En este campo es posible aprender
de experiencias mundiales que reducen la volatilidad de los
ingresos fiscales por fluctuaciones en los precios de los bienes
primarios, como son los fondos de estabilizacin15.
Democratizar el empleo y el trabajo dignosLa segunda premisa que
plantea el
Informe sugiere actuar en el mbito de la democratiz
