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Hombre de celuloide Silent Hill Tome usted una historia truculenta, coreografíe con sus amigas una escena de enfermeras satánicas. Coloque usted a una niña de sonrisa equívoca al centro de la arena dramática y salpique todo con varios litros de salsa de tomate y dos o tres toneladas de vísceras de pollo: Tendrá usted ——instantánea—— su versión casera de Silent Hill, película escrita por Roger Avary, dramaturgo de videoclub quien, cuenta la leyenda, fue el que realmente escribió los guiones de Reservoir Dogs y Pulp Fiction, por más que diga Quentin Tarantino. Silent Hill tiene un severo problema de verosimilitud (no de verdad, de verisimilitud) y esto debería preocupar a cualquier fanático del género. El terror para ser tal tiene que ser verosímil. Y no importa que la historia sea un engendro licuado con escenas de todas las películas de culto que vengan a la cabeza, todas ellas (las buenas películas de horror) tienen cuando menos un elemento realista (en Hellraiser, los asesinatos eran realistas); aquí todo puede suceder. Uno se siente en un juego de niños muy chiquitos que dictan reglas por capricho. Silent Hill tiene, eso sí, vistosos golpes plásticos y escenas con efectos por computadora que deben haber costado miles de dólares. La historia está basada en un juego de video y se nota. El arco dramático de los protagonistas resulta tan interesante como el de cualquier monito computarizado. La heroína en este caso, debe cruzar un pueblo fantasma y enfrentar cualquier cantidad de seres bizarros para buscar a la hija desobediente que se bajó del coche a mitad de la carretera. Jugar una o dos horas en la computadora en busca de una niña rebelde puede ser divertido, ver Silent Hill no. Pocos son los niños que leen el librito con las instrucciones de los juegos de video. Y es que en el fondo, todos tratan de lo mismo. La lógica narrativa (los estudiosos les llaman “de narrativa no lineal”) es siempre muy fácil de entender: Uno necesita recuperar “algo” y para ello necesita encontrar las pistas que conduzcan a la batalla final. Así, con precisión de relojito, la heroína encuentra pistas, a cual más tonta y descabellada, y cruza de la escuela abandonada hasta la iglesia llena de blancos

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Crítica de cine de la película Silent Hill por Fernando Zamora

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Hombre de celuloide

Silent Hill

Tome usted una historia truculenta, coreografe con sus amigas una escena de enfermeras satnicas. Coloque usted a una nia de sonrisa equvoca al centro de la arena dramtica y salpique todo con varios litros de salsa de tomate y dos o tres toneladas de vsceras de pollo: Tendr usted instantnea su versin casera de Silent Hill, pelcula escrita por Roger Avary, dramaturgo de videoclub quien, cuenta la leyenda, fue el que realmente escribi los guiones de Reservoir Dogs y Pulp Fiction, por ms que diga Quentin Tarantino.

Silent Hill tiene un severo problema de verosimilitud (no de verdad, de verisimilitud) y esto debera preocupar a cualquier fantico del gnero. El terror para ser tal tiene que ser verosmil. Y no importa que la historia sea un engendro licuado con escenas de todas las pelculas de culto que vengan a la cabeza, todas ellas (las buenas pelculas de horror) tienen cuando menos un elemento realista (en Hellraiser, los asesinatos eran realistas); aqu todo puede suceder. Uno se siente en un juego de nios muy chiquitos que dictan reglas por capricho. Silent Hill tiene, eso s, vistosos golpes plsticos y escenas con efectos por computadora que deben haber costado miles de dlares.

La historia est basada en un juego de video y se nota. El arco dramtico de los protagonistas resulta tan interesante como el de cualquier monito computarizado. La herona en este caso, debe cruzar un pueblo fantasma y enfrentar cualquier cantidad de seres bizarros para buscar a la hija desobediente que se baj del coche a mitad de la carretera. Jugar una o dos horas en la computadora en busca de una nia rebelde puede ser divertido, ver Silent Hill no.

Pocos son los nios que leen el librito con las instrucciones de los juegos de video. Y es que en el fondo, todos tratan de lo mismo. La lgica narrativa (los estudiosos les llaman de narrativa no lineal) es siempre muy fcil de entender: Uno necesita recuperar algo y para ello necesita encontrar las pistas que conduzcan a la batalla final. As, con precisin de relojito, la herona encuentra pistas, a cual ms tonta y descabellada, y cruza de la escuela abandonada hasta la iglesia llena de blancos fanticos y finalmente al hospital donde uno se entera de la historia truculenta de una nia a la que violaron y quemaron por bruja. Por qu la madre encuentra en la boca de un zombi la clave para buscar a su hija, es uno de los muchos misterios que nunca quedan claros en esta pelcula. En un juego de video las cosas as son, de eso se trata: el nio detrs de la pantalla busca objetos en todos lados, pero el cine suele ser un poco ms complicado en la construccin de sus narrativas, cosa que parece que el director francs Christophe Gans no entendi.

Hay slo dos cosas realmente misteriosas en Silent Hill: qu fumaron los creativos que decidieron producirla y por qu en Mxico le otorgaron la clasificacin C cuando cualquier noticiero de la tarde resulta ms macabro que esta sarta de peripecias que no tienen como los zombis ni pies ni cabeza.

http://serpentcharmer.blogspot.com/

Silent Hill. Direccin: Christophe Gans. Guin: Roger Avary. Con: Radha Mitchell, Sean Bean y Laurie Holden. Msica, Jeff Danna y Akira Yamaoka. Estados Unidos, 2006.

Fernando Zamora