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INVESTIGACIÓN ORIENTADA A LA CONSERVACIÓN DEL PATRIMONIO HISTÓRICO MUSEO ARQUEOLÓGICO MUNICIPAL DE CARTAGENA -ACTIVIDAD 3- RUBÉN SÁNCHEZ MORALES 2014-2015

Museo Arqueologico Cartagena

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Trabajo y analisis del Museo Arqueologico de Cartagena.

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Page 1: Museo Arqueologico Cartagena

INVESTIGACIÓN ORIENTADA A LA CONSERVACIÓN DEL

PATRIMONIO HISTÓRICO

MUSEO ARQUEOLÓGICO MUNICIPAL DE CARTAGENA

-ACTIVIDAD 3-

RUBÉN SÁNCHEZ MORALES

2014-2015

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*ÍNDICE*

1. Introducción………………………………………………………………………………. p. 3-4

2. El Museo…………………………………………………………………………………… p. 4-8

3. Exposición y criterios museográficos………………………………………… p. 8-17

4. El público y la promoción…………………………………………………………. p. 18-21

5. Recursos humanos……………………………………………………………………… p. 22

6. Bibliografía…………………………………………………………………………………. p. 23

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1. Introducción:

Nos encontramos ante la PED 3 de la asignatura Investigación orientada a la

conservación del Patrimonio Histórico, cuyo objetivo principal es el aprendizaje de los

contenido del temario y llevarlos a cabo mediante un trabajo de investigación sobre un

museo arqueológico, exponiendo en esta actividad los rasgos principales del mismo

(museo, exposiciones, características museográficas, difusión, etc.).

En la actualidad, se entiende como museo a una institución cultural pública o

privada que conserva colecciones de objetos, y cuyo propósito es la educación de los

visitantes1. Se trata de una institución muy reputada, con enorme prestigio en nuestro

tiempo, cuyo origen es milenario.

En este caso, el objeto de estudio es el Museo Arqueológico Municipal de

Cartagena, actualmente situado en la Calle Ramón y Cajal nº45 de Cartagena, sobre los

restos arqueológicos de una necrópolis romana de la época tardo-antigua (como veremos

más adelante, se puede decir que es una musealización de un yacimientos arqueológico).

Es un museo de tipo histórico-arqueológico por su contenido, ya que en su interior

encontramos restos materiales y arqueológicos del pasado, además de público.

En este trabajo, vamos a estudiar el museo como contenedor (estructura,

construcción y entorno), su contenido (exposición, características museográficas de las

mismas, etc.) y los criterios de promoción, tanto in situ como de forma digital.

Antes de comenzar el análisis de esta institución, es preciso hacer una breve

contextualización histórica del museo para situar al lector. La actual sede que conocemos

del museo fue fundado en 1982, pero la primera iniciativa museística municipal en

Cartagena surge sobre 1943 por Antonio Beltrán Martínez, en un pequeño local del casco

antiguo de la ciudad, aunque en los siglos precedentes existían algunas pequeñas

colecciones, como las inscripciones conservadas desde el S. XVI el obispo Sancho Dávila

en la Casa de los Cuatro Santos. El museo sufrió varias remodelaciones y cambios de

sede hasta llegar a la actual. Con el descubrimiento en 1967 de la necrópolis de San Antón,

el director del museo Pedro San Martín planteó al ayuntamiento la construcción de la

1 Ballart, J. Manual de museos, Editorial Síntesis, Madrid, 2008.

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nueva sede del Museo Arqueológico alrededor del yacimiento para permitir su

conservación in situ, que no sería inaugurado hasta 1982. 2

2. El museo:

Como hemos visto en el epígrafe anterior, el Museo Arqueológico Municipal de

Cartagena se encuentra situado en pleno casco urbano de la ciudad de Cartagena en la

Región de Murcia (ver Imagen 1).

Imagen 1 (situación geográfica del museo)

Ante esta situación debemos resaltar varias cuestiones.

La primera de estas cuestiones tiene relación con algo que ya he comentado en la

introducción, y es que nos enfrentamos a un museo creado sobre los restos arqueológicos

de una necrópolis romana de tipo paleocristiana que se fecha sobre el Siglo IV y V d. C.

Por tanto, debemos hablar de una musealización de un yacimiento arqueológico como

primera característica del mismo. Podemos definir musealización como:

“Acción y efecto de incorporar algo a la exposición estable de un museo. Por

analogía, en el caso de yacimientos, musealizar es hacerlos visitables y

accesibles, transformándolos en una exposición estable, como si de un museo se

2 Martín, M. Cartagena a través de las colecciones de su Museo Arqueológico. Editorial KR, Murcia, 1999, 174 p.

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tratara. Musealizar es, por lo tanto, hacer de un yacimiento arqueológico un

museo o una exposición estable de sí mismo.” 3

De este modo, se puede decir que musealizar un yacimientos arqueológico es

convertir en un museo el propio yacimiento. En nuestro caso particular, una vez excavada

y estudiada la necrópolis paleocristiana se decidió musealizar el yacimiento arqueológico,

convirtiéndolo en el actual Museo Arqueológico Municipal alrededor del mismo (ver

Imagen 2), que como veremos, contiene restos materiales y arqueológicos de la historia

de Cartagena, desde la Prehistoria hasta época medieval. Por tanto, se puede decir que se

ha llevado a cabo una musealización in situ, que se logra mediante la acción y la

incorporación de elementos contemporáneos para su protección y conservación, para

hacerlo visitable, y para contener información del mismo, y en este caso, de otra gran

cantidad de restos arqueológicos.

Imagen 2 (Necrópolis paleocristiana como centro del museo)

3 Prieto, M. A. & Lasheras J. A. "Explicar o contar: la selección temática del discurso histórico en la musealización." De la excavación al público: procesos de decisión y creación de nuevos recursos. Área de Cultura y Turismo, Servicio de Cultura, 2005, pp. 129-136.

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Una segunda cuestión es la situación geográfica del museo con respecto al casco

urbano (ver Imagen 1), por tanto debemos hablar de arqueología urbana. Con el

crecimiento urbano de la antigua ciudad de Cartagena, se descubrió el citado yacimiento

arqueológico. Uno de los grandes retos del presente y del futuro es hacer compatible esa

necesidad de preservación del patrimonio arqueológico con el crecimiento y renovación

de nuestras ciudades4. Anteriormente, ambos sectores, actuaban independientemente,

pero, como he dicho, en la actualidad van unidos de la mano al comprenderse la

importancia del patrimonio histórico, en factores tan importantes como en el aspecto

cultural y económico (como veremos más adelante la cultura y los museos son un foco

principal para el turismo).

Por tanto, por un lado podemos hablar de una musealización de la necrópolis, y por

otro, de una integración del yacimiento y del museo en la propia ciudad cartagenera.

El edificio cuenta con unas dimensiones 697 𝑚2, distribuido alrededor de la ya citada

necrópolis, que se encuentra en el centro del edificio en la parte baja. A su alrededor se

configuran las dos plantas del museo con vistas a la necrópolis central (ver Imagen 2),

que forman una superficie total de 1.100 𝑚2, en donde se exponen las diferentes

colecciones del museo (que analizaremos en el próximo epígrafe).

Antes de analizar la estructura del edificio que alberga este museo, es preciso destacar

que en la parte exterior del museo se encuentra una zona ajardinada con fuentes y bancos,

dentro de las vallas del mismo, con numerosos elementos arquitectónicos de gran tamaño,

dedicado al esparcimiento del visitante (Imagen 3).

Imagen 3

4 i Martí, A. N. "Excavar, exponer, conservar o reservar: criterios técnicos para un proceso de decisión." De la excavación al público: procesos de decisión y creación de nuevos recursos. Área de Cultura y Turismo, Servicio de Cultura, 2005, pp. 17-24.

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Para acabar este apartado, debemos referirnos a la estructura y la construcción del

edificio que alberga el museo alrededor de la necrópolis paleocristiana. Como ya hemos

ido viendo en ilustraciones anteriores, el centro del edifico lo compone el yacimiento

arqueológico (Imagen 2), donde a su alrededor se construyó el edificio de forma

rectangular. El museo consta de dos plantas para las exposiciones, sujetadas desde los

cimientos por vigas y columnas metálicas (Imagen 4), acabando las diferentes plantas en

materiales de construcción.

Imagen 4 (Estructura del edificio)

La parte superior del edificio o techumbre esta rematada por una cúpula piramidal

sostenida por vigas metálicas, que tiene un gran vano de cristalera que recorre todo el

ancho para que pase la luz solar e ilumine el museo y la necrópolis (Imagen 5).

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Imagen 5 (Techo del edificio)

El edificio, y por consiguiente su estructura y materiales, está preparado para

conservar y preservar tanto la necrópolis como los restos materiales y arqueológicos que

se encuentran en su interior de los factores y agentes externos que pudieran dañarlos

(climatología, humedad, etc.).

Además de contar con esta distribución, el museo cuenta con otras dependencias para

almacenar, lavar, clasificar e inventariar los materiales que entran constantemente de las

excavaciones de la zona, y también una serie de despachos para el personal y una sala con

documentación y libros. Por supuesto, esta zona está restringida para los visitantes. Se

encuentra situada en la Primera Planta, al entrar a la derecha.

3. Exposición y criterios museográficos:

Podemos dividir este epígrafe en dos apartados, por un lado estudiaremos el plan de

exposición o exhibición general del museo, y por otro, las características museográficas

que se han empleado en el mismo. Ambos conceptos están íntimamente ligados en un

museo:

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3.1. Exposición:

Una exposición es un conjunto de cosas u objetos expuestos para que sean vistas, uno

de los medios fundamentales para captar la atención del público, pero debemos

profundizar más en el tema en cuestión.

En el Museo Arqueológico de Cartagena se ha seguido un criterio didáctico en la

exposición de los materiales y los restos que en él se conservan y exhiben. En la actualidad

no puede negarse el papel fundamental que juegan los museos en el ámbito educativo y

aprendizaje cultural.5 Este tipo de institución en los últimos años ha unido múltiples

acciones didácticas con el ocio en sus actividades y exposiciones (recursos muy variados).

La función educativa se ha introducido en la mayoría de los museos, como en este caso,

donde los mensajes expositivos (como veremos), claros y sencillos, hacen que puedan ser

entendidos por la mayor parte de la población que lo visite.

Los Seminarios de Arqueología y Enseñanza que se llevan dando estos últimos años

surgieron como respuesta ante la necesidad de crear o reforzar esta relación entre la

arqueología y la enseñanza, tanto en los museos como en los centros educativos

(acercamiento interdisciplinario). Los museos deben seguir siendo lugares de cultura,

pero adaptados a las necesidades de toda la población, para que pueden ser entendidos y

tomados como un lugar de ocio y aprendizaje.6

Este museo cumple los tres factores que nos propone González, P.:

Contextualización e información referentes a los materiales arqueológicos

expuestos.

Relación con el entorno que le rodea y con su patrimonio histórico.

Finalidad didáctica del museo, con la participación activa de los agentes que la

visitan (talleres, actividades, etc.)

Como ya he dicho anteriormente, el Museo Arqueológico de Cartagena está formado

por dos plantas en donde se exponen sus restos.

La Primera Planta o planta baja consta de una exposición permanente colocando los

restos materiales por orden cronológico. En ella se encuentran la mayor parte de los restos

5 Antolí, N. S., & Mestre, J. S. Museografía didáctica. Ariel, 2005, 653 p. 6 González, P. “Arqueología y enseñanza: la función social y educativa de los museos”. Treballs d'Arqueologia, 2002, p. 1-8.

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materiales expuestos relacionados con Cartagena y sus alrededores, que abarcan desde

época prehistórica hasta la Edad Media, como ya he dicho, expuestos de manera

cronológica (Imagen 6).

Imagen 6

La Primera Planta, en cambio, está dedicada a exposiciones histórico-arqueológicas

temporales principalmente, como la de la minería romana en la sierra cartagenera o la del

yacimiento ibérico de Los Nietos, es decir, exposiciones monográficas (ver Imagen 7).

En esta parte alta también encontramos la sala de audiovisuales y el aula didáctica (para

cursos y visitas).

Imagen 7

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3.2. Criterios museográficos del museo:

En primer lugar, es preciso definir el término museografía como la actividad,

disciplina o ciencia, que tiene como objeto principal las exposiciones, su diseño y

ejecución, así como la adecuación y museización de determinados espacios para facilitar

su presentación o comprensión.7 Todo esto se puede resumir como el conjunto de técnicas

y prácticas relativas al funcionamiento de un museo, y que agrupa las técnicas de

concepción y realización de una exposición, sea temporal o permanente.

En este apartado vamos a tratar y explicar algunas cuestiones básicas en museografía

sobre el Museo Arqueológico de Cartagena (con las respectivas imágenes), como las

vitrinas, iluminación, modos de exhibición, tipos de información gráfica, material

didáctico, organización de las salas, tipo de recorrido, etc.

Como podemos ver en el plano de las plantas (Imagen 6 y 7), el recorrido que nos

ofrece la visita a este museo comienza desde la entrada por orden cronológico desde la

Prehistoria hasta la Edad Moderna y exposiciones temporales de la planta superior. El

recorrido se hace a pie en las diferentes etapas de la exposición, dando la vuelta en los

pasillos a la necrópolis tardo-romana, apreciable desde cualquier punto.

Cada sala o espacio histórico-temporal del museo no está delimitada por ningún

elemento físico de envergadura (pared, muro, etc.), sino que es una exposición temporal

corrida desde su inicio hasta volver al inicio para pasar a la siguiente planta. Los

diferentes periodos históricos están diferenciados por unos rótulos en el suelo que

delimitan el espacio (ver Imagen 8).

Imagen 8

7 Antolí, N. S., & Mestre, J. S. ídem, p. 49-50.

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Siguiendo esta explicación de las características museográficas, y antes de entrar en

su análisis pormenorizado, es preciso a modo de ejemplo situar al lector con una visión

general de dos de las salas que encontramos en este museo: Sala de Prehistoria (Imagen

9) y Sala de Romanización (posiblemente la más extensa e importante del museo, Imagen

10), que vamos a tomar ambas como ejemplo.

Imagen 9 (Sala de Prehistoria)

La Sala de Prehistoria es la primera que encontramos al entrar al museo, y está

formada por cinco vitrinas en las que encontramos los materiales más antiguos

conservados en el museo, que son de Cueva Victoria (Llano del Beal), con algunos restos

paleontológicos de animales de casi 2 millones de años y una falange de homínido datada

con más de 1 millón de años. Además encontramos cerámica y otros utensilios

prehistóricos de la zona de Cartagena.8

8 Martín, M. Cartagena a través de las colecciones de su Museo Arqueológico. Editorial KR, Murcia, 1999, 174 p.

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Imagen 10 (Varias partes de la Sala de Romanización)

Se puede decir que la Sala de Romanización es la más importante del museo, por su

extensión y por la gran variedad y calidad de los restos arqueológicos asociados a ella,

debido a la época de esplendor que vivió la ciudad de Cartago-Nova bajo dominación

romana. Ocupa casi los dos largos y un ancho de la Planta Baja. La distribución es la

siguiente:

7 vitrinas a la izquierda de un lateral largo del museo, completado con la colección

epigráfica en la pared derecha (Ver Imagen 10). Se debe destacar la importancia

de las inscripciones funerarias y la colección de cerámicas y vidrios romanos en

las vitrinas.

En el lado corto del museo que continua el recorrido encontramos una

reconstrucción de una habitación romana con decoración y elementos

constructivos (mosaicos y columnas, Imagen 10).

El otro lateral que cierra la Planta Baja del museo está dedicada a elementos

utilizados en la minería romana, numismática, comercio, etc. en el mundo romano

(ver Imagen 11). En la pared encontramos colgadas ejemplos de ánforas y vasijas

romanas.

Por tanto, se puede decir, que casi el 80% de la Planta Baja del Museo Arqueológico

de Cartagena está dedicada a periodo o época romana, y a sus restos materiales.

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Imagen 11 (comercio, minería y numismática)

Siguiendo con este análisis de los criterios museográficos, hay que resaltar las

vitrinas, colocadas mayoritariamente en los laterales de los pasillos o contra la pared,

dejando un pasillo central para el recorrido. Las dimensiones de las mismas varia,

dependiendo de su contenido. La morfología de las vitrinas es simple, están formadas por

una base o soporte metálico a modo de patas, que sujetan la estructura de cristal donde se

depositan los restos arqueológicos y que resguarda los mismos de cualquier agente

externo (Imágenes 9, 10 y 11).

Dentro de cada vitrina

encontramos los diferentes objetos y

materiales arqueológicos

seleccionados para la exposición,

numerados y colocados sobre

diferentes soportes de cristal u otros

materiales decorativos para crear

diferentes juegos de altura dentro de

cada vitrina (ver Imagen 12 y 13).

Imagen 12 (decoración interior vitrina)

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Imagen 13 (pendientes y anillos de un ajuar funerario romano)

Cada elemento numerado remite a la leyenda o cartel colocado en el interior de cada

vitrina que contiene su nombre y características (ver Imágenes 12 y 14).

Imagen 14 (Ejemplo de leyenda de una vitrina)

Otro aspecto a destacar dentro de las vitrinas es el material didáctico complementario

que tienen algunas de ellas, que amplían la información de los materiales arqueológicos

que se exhiben en su interior, contextualizándolos históricamente los mismos y situando

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al lector y visitante de lo que está observando, para una mejor comprensión. Esto es lo

que denominados museografía didáctica (de lo que venimos hablando desde el principio

de este epígrafe), que tiene la intención de educar y fortalecer el aprendizaje cultural de

los visitantes con relación a los restos arqueológicos expuestos (ver Imagen 15).

Imagen 15 (carteles de información y material didáctico)

Dentro de este apartado de tratamiento museográfico es preciso citar el tratamiento

de la zona epigráfica del museo, situada en la primera parte de la Sala de Romanización,

a lo largo de toda la pared (ver Imagen 16). Siguen un orden cronológico. En esta zona

tenemos una de las colecciones de epigrafía funeraria romana más importantes. Se puede

observar su colocación sobre soportes rojos en la pared del museo del mismo color, con

su respectivo letrero o cartel con la traducción (Imagen 17).

Imagen 16

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Imagen 17

Para finalizar este apartado, es preciso citar la importancia de la iluminación en los

museos, y sobre todo en el tema museográfico, algo esencial para la exposición e

exhibición del patrimonio en un museo, y en este caso, de los restos arqueológicos.

Podemos citar dos tipos de iluminación en este museo:

La iluminación natural: la luz del sol entra en el museo por el gran vano

acristalado situado en la techumbre (ver Imagen 5).

La iluminación artificial: todo el museo está iluminado por focos de luz en la parte

superior o techo de cada planta sobre las vitrinas, complementando la luz solar

(Imagen 18).

Imagen 18

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4. El público y la promoción:

El destinatario principal de cualquier museo es el público visitante, donde la

interpretación es una forma de comunicación a quienes buscan esparcimiento, disfrute o

cultura en un museo (conocido en los museos como servicio de educación, por el cual se

enseña, educa y muestra a los visitantes los contenidos del museo). De este modo, dos

factores son cruciales en este aspecto con el público, y es que sea agradable e interesante

(atractivo), además de lo suficientemente comprensible.9

Dentro de los servicios, hay que destacar la exposición permanente al público de los

restos arqueológicos cartageneros, junto con las exposiciones temporales de la planta alta.

El horario de visita del Museo Arqueológico de Cartagena es de martes a viernes de 10:00

a 14:00 horas y de 17:00 a 20:00 horas, y los sábados y domingos de 11:00 a 14:00 horas.

Podemos hablar de la promoción y difusión del Museo y su contenido desde dos

perspectivas, por un lado en el propio museo, es decir in situ, y por otro de manera digital.

In situ:

En primer lugar debemos de hablar de lo que se denomina como publicaciones

interpretativas, que son todos aquellos folletos, panfletos o guías diseñados para

interpretar espacios con valor patrimonial, destinados a ser utilizados dentro de esos

espacios.10 En el Museo Arqueológico de Cartagena tenemos este tipo de folleto a la

entrada del mismo (Imagen 19).

Imagen 19 (Portada y final del folleto)

9 Morales Miranda, J. Guía práctica para la interpretación del patrimonio: el arte de acercar el legado natural y cultural al público visitante. 1998, 313 p. 10 Morales Miranda, J. ídem, p. 218

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Otro de los aspectos a destacar dentro del museo son los llamados carteles

interpretativos, cuya función es explicar a los visitantes los valores y contenidos de ese

lugar que están visitando.11 Estos carteles deben de tener una seria de características

principales, como ser claros, sencillos e interesantes para los visitantes. El Museo

Municipal de Cartagena tiene este tipo de carteles en todas sus salas, ya sea dentro de las

propias vitrinas como ya vimos anteriormente (Imagen 15), o a lo largo del recorrido de

la visita (Imagen 20).

Imagen 20 (Ejemplo de Carteles Interpretativos)

Estos carteles cumplen los requisitos básicos en el diseño de los mismos para una

buena interpretación, con un título que destaca, y una combinación de párrafos sencillos

e imágenes atractivas.

Con respecto a los medios audiovisuales, considerados como los instrumentos de

audio, visuales o audiovisuales que pueden ser usados para ayudar a que el público

comprender mejor ciertas materias.12 En el Museo Arqueológico de Cartagena contamos

con un sistema de audio y video colocado en la propia sala para que el visitante pueda

utilizarlo durante la visita (Imagen 21). Es una pantalla de televisión donde se pueden ver

una serie de videos relacionados con los restos expuestos en el museo, como en este caso

la Necrópolis Paleocristiana.

11 Morales Miranda, J. ídem, p. 224 12 Morales Miranda, J. ídem, p. 238

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Imagen 21

Dentro de estos medios audiovisuales debo citar la importancia que tiene la sala

situada en la Primera Planta destinada a conferencias, talleres y exposiciones, donde

encontramos un sistema de proyección utilizado para videos o presentaciones con

diapositivas.

Otro de los servicios destacables es la organización de visitas, tanto individuales (de

30 minutos o una hora) como a grupos, incluso a grupos escolares con actividades

didácticas al finalizar, pudiendo contratarse in-situ o reservarse a través de la página web

del museo (Imagen 22). También he de decir que el museo y su personal organizan

periódicamente actividades o cursos para grupos de adultos o menores de diferentes

temáticas históricas relacionadas con el museo y sus materiales.

Imagen 22

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Para acabar este apartado, es preciso destacar que El Museo Arqueológico de

Cartagena cuenta con una revista propia, denominada Mastia, en donde se recogen

artículos histórico-arqueológicos relacionados con el ámbito cartagenero desde la

Prehistoria, aunque destaca en época romana. Además de la revista, el museo cuenta con

varias publicaciones de libros, a la venta para los visitantes.

- Digital:

En este apartado vamos a centrarnos en lo que se denomina como los museos

virtuales, que debido a la importancia de Internet y la era virtual en estas últimas décadas

ha supuesto una incorporación esencial para los museos y para su difusión y promoción.13

La difusión o promoción del Museo Arqueológico de Cartagena de manera digital se

centra principalmente en su página web14, donde encontramos todo tipo de información

sobre el mismo. Es una web bastante completa en lo referente al museo, donde nos

informa de todos los servicios y nos aporta todo lo necesario para conocer el Museo

(servicios, exposiciones, aula didáctica, publicaciones, investigación, galería multimedia

con videos e imágenes, etc.).

La sección de galería multimedia nos remite a videos de Youtube subidos por el canal

de cultura de Cartagena.15

Por último, ya hemos hablado de la revista Mastia, pero no hemos comentado que

encontramos en la propia web del museo artículos de importancia de ésta digitalizados y

consultables en PDF16, así como otros materiales o cuadernos didácticos muy sencillos

de entender para todos los públicos17.

13 Castro Morales, F. Patrimonio, museos y turismo cultural: claves para la gestión de un nuevo concepto de ocio: actas del curso celebrado en el marco de los Seminarios Fons Mellaria 1997 (Fuente Obejuna, Córdoba, 21-25 de Julio). Servicio de Publicaciones, Universidad de Córdoba, 1998. 14 http://www.museoarqueologicocartagena.es/ 15 Ejemplo: https://www.youtube.com/watch?v=JQh_vl3rxjo 16http://www.museoarqueologicocartagena.es/publicas/publicaciones/revista_mastia/_DgyFCGw3wip5UW8OPDKhPA 17http://www.museoarqueologicocartagena.es/publicas/publicaciones/cuad_didacticos/_Axiv49H7eJPtBr32S5XqiQ

Page 22: Museo Arqueologico Cartagena

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5. Recursos humanos:

Los museos son instituciones sociales administradas, dirigidas y operadas por

personas que trabajan en equipo en el seno de una organización estructurada con el

objetivo de facilitar el logro de la mayor profesionalidad posible.18

El Museo Arqueológico de Cartagena es público, por lo que la mayoría de sus

empleados sus funcionarios al servicio del Estado (directos, arqueólogos, museólogos,

etc.), pero además encontramos algunos empleados contratados (limpiadores, guías, etc.).

En este museo encontramos un tipo de organigrama típico para los museos, con el

director del mismo a la cabeza, los investigadores y arqueólogos, encargados de atención

al visitante y guías, administrativo y contable seguidamente, y por último el personal

contratado como vigilante, limpiadores, etc.

De forma general, para estas instituciones conocemos seis funciones museísticas

claves, que son “coleccionar, documentar, conservar, investigar, exponer, y por último,

comunicar e interpretar”. El Museo Arqueológico de Cartagena como institución cumple

todas estas funciones, es decir, colecciona los restos arqueológicos e históricos de la

ciudad de Cartagena y Municipio desde época prehistórica, el personal del museo y

arqueólogos se encargan de documentar y conservar los restos materiales e investigar

nuevos yacimientos, con la finalidad, por último, de exponer en el museo y comunicar

con los usuarios. Como se puede ver, el museo no cumple solo la función de coleccionar

y exponer los restos arqueológicos, sino que sus trabajadores llevan a cabo un proceso

mucho más complejo. Este personal del museo, junto con los investigadores asociados

(como profesores de la Universidad de Murcia), llevan a cabo supervisiones de las

excavaciones del municipio.

18 Ballart, J. ídem, p. 91

Page 23: Museo Arqueologico Cartagena

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6. Bibliografía:

Antolí, N. S., & Mestre, J. S. Museografía didáctica. Ariel, 2005, 653 p.

Ballart, J. Manual de museos, Editorial Síntesis, Madrid, 2008.

Beltrán Martínez, A. Catálogo sistemático y topográfico del Museo Arqueológico Municipal de

Cartagena. Cartagena, 1945, 16 p.

Castro Morales, F. Patrimonio, museos y turismo cultural: claves para la gestión de un nuevo

concepto de ocio: actas del curso celebrado en el marco de los Seminarios Fons Mellaria 1997

(Fuente Obejuna, Córdoba, 21-25 de Julio). Servicio de Publicaciones, Universidad de Córdoba,

1998.

García Rubio, C. Los sistemas de información y documentación en los Museos Arqueológico y

Naval de Cartagena y Minero de La Unión. Murcia, 1994.

González, P. “Arqueología y enseñanza: la función social y educativa de los museos”. Treballs

d'Arqueologia, 2002, p. 1-8.

i Martí, A. N. "Excavar, exponer, conservar o reservar: criterios técnicos para un proceso de

decisión." De la excavación al público: procesos de decisión y creación de nuevos recursos. Área

de Cultura y Turismo, Servicio de Cultura, 2005, pp. 17-24.

Kotler, N., & Kotler, P. Estrategias y marketing de museos. Editorial Ariel, 2001.

Martín, M. Cartagena a través de las colecciones de su Museo Arqueológico. Editorial KR,

Murcia, 1999, 174 p.

Morales Miranda, J. Guía práctica para la interpretación del patrimonio: el arte de acercar el

legado natural y cultural al público visitante. 1998, 313 p.

Prieto, M. A. & Lasheras J. A. "Explicar o contar: la selección temática del discurso histórico

en la musealización." De la excavación al público: procesos de decisión y creación de nuevos

recursos. Área de Cultura y Turismo, Servicio de Cultura, 2005, pp. 129-136.