NOTA TÉCNICA SOBRE LOS RIESGOS DE AFECCIÓN A LA …

MINISTERIO DE EDUCACIÓN Y CIENCIA

Instituto Geológicoy Minero de España

NOTA TÉCNICA SOBRE LOS RIESGOS DE AFECCIÓN A LA TURBERA DE DUEÑAS (CUDILLERO) POR LA

CONSTRUCCIÓN DE UNA ZONA URBANIZADA EN LAS PROXIMIDADES

Marzo 2007

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MINISTERIO DE EDUCACIÓN

Y CIENCIA

INSTITUTO GEOLÓGICO Y MINERO DE ESPAÑA

1.- INTRODUCCIÓN

El Instituto Geológico y Minero de España (IGME), Organismo Público de Investigación adscrito al Ministerio de Educación y Ciencia, viene realizando diversas labores de asesoramiento técnico tanto a la Administración Central como a las administraciones autonómicas, locales y a todo tipo de instituciones, empresas y particulares, en temas relacionados con la geología, la aguas subterráneas, los recursos naturales y el medio ambiente.

En esta línea de actuación se enmarca esta nota técnica, que se emite como contestación a la petición de fecha 16 de marzo de 2007, enviada al Director de Hidrogeología y Aguas Subterráneas del IGME por la Sra. Viceconsejera de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio del Gobierno del Principado de Asturias, solicitando de este Organismo asesoría técnica para la valoración de un proyecto de “impacto ambiental” presentado como requisito necesario para la urbanización y construcción de viviendas en las proximidades de la Turbera de Dueñas, en el término municipal de Cudillero, que está considerada como un área protegida.

La Administración del Principado de Asturias pretende, con la solicitud de este informe, que el IGME les asesore en la valoración de los posibles riesgos de afección al sistema acuífero que alimenta a dicha turbera por la realización de las obras mencionadas. 2.- ANTECEDENTES

La Turbera de Dueñas (foto nº 1) es un espacio protegido de gran interés natural. Está catalogada con la categoría de Monumento Natural e incluido en la lista asturiana de Lugares de Importancia Comunitaria (LIC), es parte de la Red de Espacios Protegidos de Asturias y pertenece a la Red Natura 2000. Es la única turbera plana de zonas litorales de la red asturiana y se trata de una turbera ácida activa, que cubre sedimentos de rasa. Está situada en el término municipal de Cudillero, al oeste del pueblo de Villademar, en las inmediaciones del paraje conocido como Las Dueñas.

La empresa “Taller de Estudios de Medio Ambiente S.L. (TEMA 3)”, recibió el encargo de ANJOCA Grupo, promotora de una operación inmobiliaria en las proximidades de la Turbera de Dueñas, para realizar un dictamen orientado a la identificación y valoración de los riesgos de alteración de las condiciones actuales de la turbera inducidos por las obras de construcción de una urbanización de viviendas y los elementos asociados a las mismas. El objetivo principal perseguido fue poner de manifiesto la posible influencia y la importancia que podrían tener sobre dicha turbera los movimientos de tierra y, especialmente, las excavaciones y los drenajes.

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Foto nº 1.- Vista general de la Turbera de Dueñas desde la cima del Monte Santana

En el mencionado dictamen se incluyen los siguientes aspectos técnicos:

• resumen de valores que justifican el interés de conservación de la turbera • elaboración de un modelo de funcionamiento hidrogeológico • análisis de los riesgos que pueden afectar a la turbera • propuesta de medidas preventivas y, en su caso, propuesta correctiva de los

riesgos identificados

3.- ASPECTOS TÉCNICOS INCLUIDOS EN EL ESTUDIO PRESENTADO

En el dictamen presentado, tras los primeros apartados, en el capítulo Funcionamiento hidrológico se especifican los aspectos geológicos, geomorfológicos e hidrológicos de la Turbera de Dueñas.

La Turbera de Dueñas está desarrollada sobre un depósito de sedimentos recientes que se disponen discordantemente sobre una superficie seudo - plana (rasa), ligeramente inclinada hacia el norte, formada sobre los materiales silíceos de la Formación Cándana-Herrería (Cámbrico).

Turbera de Dueñas

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El sustrato rocoso está constituido por areniscas cuarcíticas y cuarcitas más o menos feldespáticas (foto nº 2), entre las que se intercalan limolitas (denominadas frecuentemente pizarras) de la Formación Cándana, cuya disposición estructural tiene un dirección dominante NNE – SSO. Los estratos presentan un buzamiento próximo a los 70º y preferentemente al O.

En términos generales, los sedimentos de recubrimiento sobre la superficie de la rasa están formados por depósitos de gravas subredondeadas y subangulosas clastosoportadas o con matriz arenosa, que se alternan irregularmente con niveles de arenas grises, principalmente (foto nº 3). Corresponden a una serie de abanicos torrenciales adosados lateralmente y proceden de la erosión de los materiales del Monte Santana.

La formación de turberas tiene lugar cuando se reúnen una serie de

condicionantes; entre los más importantes, cabría destacar los siguientes: sustrato impermeable, condiciones climáticas concretas y retención de agua sobre un suelo vegetal con alta tasa de actividad biológica (foto nº 4).

Foto nº 2.- Aspecto de los materiales de la Formación Cándana recubiertos por depósitosrecientes

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Foto nº 3.- Niveles de gravas y cantos con matriz arenosa que constituyen las víaspreferentes de circulación de agua

Foto nº 4.- Nivel de agua aflorante en una zona de turbera activa

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3.1.- Modelo de funcionamiento

El modelo que se propone en el mencionado dictamen parte del hecho de que las aguas de lluvia constituyen la principal aportación de agua a la turbera, con la consideración de que el sustrato es impermeable y que la circulación de la misma tiene lugar, preferentemente, por escorrentía superficial y a través de los depósitos de gravas y arenas incluidos en los abanicos torrenciales. En la figura 23 de la página 48 del dictamen (figura 1) se esboza el modelo hidrológico correspondiente a la alimentación de agua de la turbera. En ella se puede observar la forma del abanico torrencial por el que discurre el agua superficial y subterránea, así como el esquema de circulación hídrica.

Figura 1.- Reproducción de la figura 23 del informe “Caracterización ambiental y determinación de riesgos asociados a posibles actuaciones en el entorno del monumento natural de la Turbera de Dueñas”

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3.2.- Medidas preventivas y correctoras En el informe se hace hincapié en que para el mantenimiento del equilibrio ecológico de la turbera se debe mantener libre de cualquier afección el cauce que discurre por el borde oriental de la turbera (foto nº 5). Del mismo modo, se debe respetar la zona de protección que se especifica, y la urbanización y construcciones previstas no deberían alterar las condiciones actuales de drenaje de la turbera. Por otro lado, se hace mención a que debería protegerse el área de alimentación hídrica de la turbera situada en la falda del Monte Santana ante cualquier obra constructiva de gran envergadura, como la inminente construcción del tramo de la Autovía del Cantábrico que atravesará esta zona.

Foto nº 5.- Arroyo que constituye uno de los drenajes naturales de la turbera

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4.- COMENTARIOS TÉCNICOS Una vez analizada la información presentada en el dictamen mencionado, se realizaron varias visitas técnicas a la zona de estudio. Además se mantuvo una reunión de trabajo con algunos de los autores del informe. En primer lugar, se quiere destacar la calidad del estudio realizado por TEMA 3. En términos generales, se coincide con las conclusiones expresadas sobre el modelo hidrológico de alimentación de la Turbera de Dueñas así como con lo especificado sobre su funcionamiento hídrico.

Sin embargo, se considera que el sustrato rocoso constituido por las areniscas y cuarcitas de la Formación Cándana presenta una permeabilidad secundaria por fracturación y fisuración que permite que el agua se almacene y circule a través de la red de fracturación. Este fenómeno se puede apreciar en la trinchera del ferrocarril situado en el borde norte de la turbera (foto nº 6). Además se pueden observar manantiales (foto nº 7) en la falda del Monte Santana que corresponden a drenajes de dicha formación, cuyos caudales se incorporan al flujo que circula por los depósitos de pie de monte (abanico torrencial).

Foto nº 6.- Materiales de la Formación Cándana en la trinchera del ferrocarril. Aspecto general de lafracturación con muestras de circulación de agua (planos con musgo)

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Por otra parte, se pretende resaltar que para que la turbera permanezca activa se debe cumplir que el nivel freático esté muy próximo a la superficie o aflorante; esto se consigue cuando la alimentación de agua es permanente y el agua queda semi-estancada debido a las condiciones endorreicas de la cuenca. Además, para que el nivel freático se mantenga elevado es necesario que exista un nivel permeable (gravas y arenas) cerca de la superficie, por encima de un nivel impermeable (arcillas) (fotos nos 8 y 9) . Un ejemplo de este modelo se puede ver en las figuras 19 y 20 (calicatas nº 4 y 5, respectivamente) de las páginas 37 y 38 del informe presentado (reproducidas en la figura 2).

Foto nº 7.- Manantial que surge en la Formación Cándana, en la falda del MonteSantana (coordenadas UTM: X = 728.573; Y = 4.825.545; Z = 320 m)

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Foto nº 8.- Afloramiento en un talud reciente: nivel arcilloso a muro y a techo nivel de gravas conmatriz limoarcillosa, con presencia de pequeños rezumes de agua en el contacto entre ambos

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Foto nº 9.- Detalle de una surgencia de agua relacionada con la presencia de un nivel de arcilla

Figura 2.- Reproducción de las figuras 19 y 20, de las páginas 37 y 38 del informe presentado porTEMA 3, en relación a la Turbera de Dueñas

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5.- CONSIDERACIONES FINALES La Turbera de Dueñas es un espacio protegido de gran interés natural, declarado Monumento Natural y Lugar de Importancia Comunitaria (LIC), por lo que deberían tomarse las medidas preventivas necesarias para su conservación. Como se ha comentado anteriormente, los aspectos fundamentales para el mantenimiento activo de la turbera son una alimentación hídrica constante y la presencia del nivel freático en superficie o muy próximo a ella (foto nº 10). Por lo tanto, se debe proteger por un lado la alimentación hídrica al sistema, constituida por aguas superficiales, subsuperficiales y subterráneas procedentes de la ladera NE del Monte Santana, y, por otro, se debe evitar el drenaje del área ocupada por la turbera, lo que supone que los arroyos existente deben seguir constituyendo los drenajes naturales de la misma.

Cualquier obra constructiva que se realice en las proximidades de la turbera deberá cumplir las especificaciones citadas en el párrafo anterior y no debería afectar al nivel freático. Por lo tanto, la construcción debería realizarse a una cota superior a dicho nivel, como sucedió en su momento con la obra de ejecución de la carretera de acceso al puerto de Cudillero.

Por otra parte, y coincidiendo con lo expresado en el dictamen realizado por

TEMA 3, si la mencionada construcción del tramo de Autovía del Cantábrico que atravesará esta zona cortase la alimentación hídrica de la turbera, debería recuperarse esta alimentación utilizando los medios técnicos oportunos para garantizar el mantenimiento activo, en las condiciones actuales, de la Turbera de Dueñas.

Oviedo, marzo de 2007

LOS AUTORES DEL INFORME

Fdo. Mónica Meléndez Asensio Fdo. César Nuño Ortea

CONFORME, Jefe de la Oficina de Oviedo

Fdo. Miguel Luis Rodríguez González

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Foto nº 10.- Interior de la turbera, en la que se observa el nivel freático aflorante

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