Upload
carmengn62
View
722
Download
1
Embed Size (px)
Citation preview
ONCE DE MARZO
Madrid extiende las manos,
Madrid de puertas abiertas
acoge en su suelo fértil
flores de todas las tierras.
Madrid cultural y viva,
mestiza y heterogénea,
nocturna como ninguna,
bulliciosa y jaranera.
- Hijo, no regreses tarde,
mañana vas a la escuela.
- A la Facultad, mamá.
Crecí, aunque no te lo creas.
Madrid, aunque nunca duerme
por la mañana despierta.
Hijos propios y adoptados
circulan por sus arterias.
- Hijo, desayuna un poco.
- Me marcho, que el tren no espera,
no quiero perderme clases;
en el INEF hoy no hay huelga.
Raíles inadvertidos
mecen la muerte viajera.
Se abre un huracán de fuego,
volcán de entrañas abiertas,
pétalos rojos de sangre,
horror, desconcierto, estrellas
de pensamiento apagadas,
ojos rotos, nubes secas,
vértigo, vértigo... y sólo
imágenes inconexas.
Es el silencio más fuerteque el aullar de las sirenas.Madrid se muerde los labios,solloza la primavera.Madrid se derrama en manosy sus millones de célulasacuden hasta la heridaen su corazón abierta.- Hijo, ¿dónde está mi hijo?¿Por qué al móvil no contestas?El éxodo da comienzo,la esperanza por bandera.
Madrid solidaria sufre,destila en sangre su penatransformándola en ayuda:del dolor obtiene fuerza.- ¿Sabéis dónde está mi hijo?¿No llegó...? Veloz e intensala angustia se abre caminodejando la boca seca.Los compañeros y amigosno se separan de ella,búsqueda por hospitalesocupan la noche entera,sin dormir siguen buscando... la claridad reverbera.
Madrid en luces y sombras
su madrugada comienza.
Párpados enrojecidos
y manos, manos que tiemblan.
Hospital tras hospital,
hospitales ya no quedan.
- Lo siento, te quiero, madre,
pero estoy en el IFEMA.
- Hijo, no puedo abrazarte,
¿qué es lo que de ti me queda?
¿Por qué sólo me han dejado
parte de tu camiseta?
Hijo, desayuna un poco...
- Me marcho, que el tren no espera...
Raíles inadvertidosmecen la muerte viajera.
Madrid llora, cae la tardey las lágrimas arrecian.Madrid extiende sus manos,soles malvas, lunas negras,en los árboles los brotesnacen cargados de pena,gimen triste las farolas, se estremecen las aceras,dolor, millones de manos,lazos negros, flores, velas...
Se ha desgranado la noche,pero la ciudad no sueña.Madrid llora por sus hijosque hoy moran en las estrellas.
MENCAR LEZAGÓN