372
PENSAMIENTOS PASCAL Ediciones elaleph.com

Pascal, Blaise - Pensamientos 1

Embed Size (px)

Citation preview

P E N S A M I E N T O S P A S C A L

Ediciones elaleph.com

Editado por elaleph.com

2001 Copyright www.elaleph.com Todos los Derechos Reservados

PENSAMIENTOS

Cronologa biogrfica y bibliogrfica 1616 (Etienne Pascal, nacido en 1588, hijo de Martin Pascal y de Marguerite Pascal, casa con Antoinette Bgon, nacida en 1596.) 1620 (Nace Gilberte Pascal.) 1623 19 de junio: nace Blaise Pascal, en Clermont (Auvernia). 27 de junio: bautismo de Pascal. 1624 Enfermedad infantil de Pascal. 1625 (Nace Jacqueline Pascal.) 1626 (Muere Antoinette Pascal, madre de Blaise.) 1631 (Etienne Pascal, con sus tres hijos, en Pars. Frecuenta a libertinos y a matemticos.) Educacin de Pascal por su padre, segn los preceptos de Montaigne. 1634-1635 Tratado de los sonidos y demostracin de la proposicin 32 del primer libro de Euclides, por Pascal. 1638 (Ettienne Pascal en Auvernia, escapando a la Bastilla.)3

PASCAL

1639 (ttienne Pascal en Run, como Comisario del Rey para los impuestos.) 1640 Primera obra impresa de Pascal: Ensayos sobre los cnicos. (Publicacin del Augustinus, obra pstuma de Jansenio.) 1641 (Gilberte Pascal casa con su primo Florin Prier.) 1642 Pascal trata de fabricar una mquina aritmtica. Primeros sntomas de enfermedad. 1643 (Un movimiento de "conversin" cristiana, dirigido por Jean Guillebert, prroco de Rouville, se extiende por Normanda; amigos de los Pascal pertenecen a l.) 1645 Pascal publica la Carta dedicatoria al Canciller acerca de la nueva mquina aritmtica, con una Advertencia. 1646 Enero: dos "rouvillistas", los hermanos Deschamps, viven tres meses en casa de los Pascal, y convierten a Blaise, a su padre, a sus hermanas y a Florin Prier. Influencia de los escritos de Saint-Cyran y de Arnauld. Agosto-noviembre: Blaise, su padre y Pierre Petit repiten en Run la experiencia de Torricelli sobre el vaco: hay proceso verbal de ella. 1647 Controversia de Pascal y otros con Jacques Forton, Frre Saint-Ange, en Run.

4

PENSAMIENTOS

1648

1649

1650 1651

23 y 24 de septiembre: Pascal, enfermo en Pars, se entrevista dos veces con Descartes; desacuerdo. 4 de octubre: Nuevas experiencias acerca del vaco. Prefacio para un Tratado del vaco. Discusin sobre el vaco con el jesuita Nol: Respuesta al R. P. Nol (24 de octubre). Febrero: Carta al Sr. Le Pailleur (sobre el vaco). Marzo: Generacin de las secciones cnicas (en latn; perdido). julio: relaciones ya slidas de los Pascal con Port-Royal. 19 de septiembre: experiencia de Pascal con Prier en Puy-de-Dme, para verificar las hiptesis de Torricelli: Carta a Prier (15 de noviembre). Repeticin de ella por Pascal en Pars, en la torre de Saint-Jacques de la Boucherie. Octubre: Relato de la gran experiencia del equilibrio de los lquidos. (Mayo: los Pascal en Clermont.) Blaise se ocupa de la mquina aritmtica. Concesin del privilegio para la mquina aritmtica. (Noviembre: los Pascal de nuevo en Pars.) Julio-agosto: dos Cartas al Sr. de Ribeyre (sobre el vaco). Tratado del vaco (inconcluso; los fragmentos se publican despus de la muerte de Pascal). (24 de septiembre: muere tienne Pascal; discusiones entre Blaise y5

PASCAL

Jacqueline a causa de la profesin de sta en Port-Royal y su dote.) 17 de octubre: Carta a los Prier sobre la muerte del padre. 1652 (4 de enero: Jacqueline entra en Port-Royal.) Modelo definitivo (5 ensayo?) de la mquina "pascalina". Abril: Pascal presenta la mquina aritmtica y expone su teora del vaco en el saln de la Sra. de Aiguillon. Junio: Carta a la reina Cristina de Su6ca, envindolo la mquina aritmtica. Octubre: Pascal en Clermont. 1653 Mayo: retorno de Pascal a Pars. Disputas entre Pascal y Jacqueline acerca de la herencia. (31 de mayo: bula de Inocencio X condenando las Cinco Proposiciones del Libr de Jansenio; comienza la disputa jansenista.) (5 de junio: profesin de Jacqueline en Port-Royal.) Tratado del equilibrio de los lquidos, Tratado de la pesadez de la masa de aire (publicacin pstuma, 1663) Tratado de mecnica (perdido). Septiembre: viaje de Pascal por Poitou, el duque de Roannez, el caballero de Mr, Miton. Ideas fundamentales y mximas del Discurso sobre las pasiones del amor. Empresas lucrativas de Pascal. 1654 Tratado del tringulo aritmtico y tratados co6

PENSAMIENTOS

nexos (publicacin pstuma, 1665). Memoria a la Academia parisiense de matemticas (conservada en una copia de Leibniz: intencin de una geometra del azar"). Julio-octubre: Correspondencia con Fermat (sobre la "regla de los partidos). Septiembre: Pascal, con "desprecio del mundo" y disgusto por las personas que en l estn", entabla relaciones de confidencia con Jacqueline. Escrito sobre la Conversin del pecador (publicado por Bossut en 1770) 23 de noviembre: noche de conversin de Pascal. (V. la Memoria.) 1655 7-21 de enero: primer retiro de Pascal en Port-Royal des Champs. Conversacin con de Saci sobre Epicteto y Montaigne (publicacin en 1728). Comparacin de los cristianos de los primeros tiempos con los de hoy (publicacin por Bossut en 1779). Resumen de la vida de Jess (publicacin en 1844). El misterio de Jess. Pascal convierte al duque de Roannez. Conversaciones con los Seores de Port-Royal. Su sobrino tienne Prier entra en las Pequeas Escuelas de Port-Royal: Mtodo (silbico) para ensear a leer a los nios. 1656 (La Sorbona condena a Amauld.) Retiro de Pascal por unos das en Port-Royal:7

PASCAL

entra en la polmica. 23 de enero: primera Provincial. Provinciales: entre enero de 1656 y el 1 de junio de 1657. 24 de marzo: milagro de la Santa Espina en Port-Royal de Pars, en Marguerite Prier, sobrina de Pascal. Respuestas al P. Annat (sobre el milagro). Agosto-septiembre: Cartas piadosas a Charlotte de Roannez, hermana del duque. Pascal ha comenzado la Apologa. Colaboracin de Pascal en los Factum(s) de los prrocos de Pars (diciembre de 1657-julio de 1658), Carta de un abogado del Parlamento, Proyecto de mandamiento para los vicarios generales, etc. Escritos sobre la gracia (publicados en 1779). Elementos de geometra (para las escuelas de Port-Royal; obra perdida). Investigaciones cientficas. 6 de septiembre: condena de las Provinciales por la Congregacin del Indice. 1658 Pascal contina la Apologa. Escritos de los prrocos de Pars y otro Factum. Junio-julio: Primera carta circular relativa a la cicloide (o "ruleta"). Correspondencia, hasta 1659, con Carcavi, Huyghens, Laloure, Sluse, Wallis. Historia de la ruleta o cicloide (10 de octubre), Tratados de geometra. Arte de persuadir (publicacin pstuma).8

PENSAMIENTOS

El espritu geomtrico (publicacin pstuma). Octubre-noviembre?: Conferencia de Pascal en Port-Royal sobre el plan de la Apologa (redaccin por Filleau de la Chaise en 1672). Pascal clasifica en legajos las notas para la Apologa. 1659 Febrero: Carta a Huyghens sobre la dimensin de las lneas curvas. Postracin enfermiza de Pascal; se retira a Vaumurier: colabora en la traduccin francesa de la Biblia, en la educacin del duque de Chevreuse, en una Antologa potica para Port-Royal. 10 Mayo-septiembre: Pascal en Bien-Assis, cerca de Clermont, en casa de Gilberte Prier; sigue escribiendo la Apologa. Plegaria para el buen uso de las enfermedades. 10 de agosto: Carta a Fermat. Tres Discursos sobre la condicin de los grandes (publicacin pstuma por Nicole en 1670) 1661 (Exigencia de la firma del formulario dispersin de las Pequeas Escuelas de Port-Royal.) (4 de octubre: muere Jacqueline Pascal.) Octubre: retorno de Pascal a Pars. Escrito sobre la firma. Port-Royal resiste la opinin de Pascal sobre el formulario, y Pascal se retira de la controversia. 1662 Enero: Pascal obtiene Cartas patentes para una empresa de transportes colectivos (cuyos beneficios seran para los habitantes del Blaisois).9

PASCAL

18 de marzo: inauguracin, en Pars, de los mnibus ("carrozas a cinco sueldos"). 29 de junio: Pascal, muy enfermo, se hace llevar a casa de Gilberte Prier. 4 de julio: confesin de Pascal con el P. Beurrier, y conversaciones con el Sr. de Sainte-Marthe, confesor de Port-Royal. 3 de agosto: testamento de Pascal. 17 de agosto: Pascal recibe la extremauncin; entra en agona. 19 de agosto, a la una de la maana: muere Pascal. 21 de agosto: entierro de Pascal.

10

PENSAMIENTOS

Nota: Para la composicin de esta Cronologa se han seguido principalmente la que aparece en el libro Pascal par lui-mme, por Albert Bguin (ditions du Seuil, 1952), y la que precede las Obras completas de Pascal (edicin de Jacques Chevalier, La Pliade, 1954).

11

PASCAL

Preliminares bibliogrficos Orgenes Como ocurre con todas las obras radicales, el arraigo de los Pensamientos, en cuanto "Apologa de la religin cristiana", es mltiple y complejo: en la ancdota biogrfica, en la tesitura psicolgica, en la coyuntura histrica. Adems, conviene distinguir el motor y motivo del proyecto y las fuentes del contenido. La raz primera es producto de esos tres niveles: es la fe religiosa, la Mstica de Pascal, su tnica existencial bsica como persona, en un medio social (y familiar) notablemente afn. Sin esta levadura primigenia, los acontecimientos biogrficos habran pasado casi imperceptibles. Hay dos que son claves. El primero, cronolgicamente, es la confirmacin mstica de la noche del 23 de noviembre de 1654 (cuya Memoria precede esta traduccin): a partir de ella, Pascal, que nunca se haba despreocupado de lo religioso, har de la religin su ms valiosa ocupacin. El segundo es el "milagro de la Santa Espina", acontecido en Port-Royal a Margarita Prier el 24 de12

PENSAMIENTOS

marzo de 1656: a partir de l, se propone dedicarse a una Apologa de la religin. As se decide el proyecto. Pero ste implica un designio, es decir, un paradigma del contenido. Pascal es hombre de su poca Y, en su poca, es hombre de partido. La concepcin de su Apologa est predeterminada por su sentido cientfico, por las lecturas contemporneas (entre las cuales Montaigne tiene privilegio), por el Jansenismo al que haban adherido Pascal y su familia. Con respecto a esto, hay que adelantarse hasta el ao 1646 en que, por accidente del padre de Blas, la familia se puso en relacin con dos adeptos de la doctrina de Jansenio. En 1652, Jacoba (Jacqueline), su hermana, entra en el monasterio de Port-Royal. Despus de la noche de 1654, se produce intensamente la coincidencia entre Pascal converso y Port-Royal: la inclinacin mstica recaa hacia la doctrina teolgica que, biogrficamente, era la ms probable. Desde entonces (1656), los escritos de Pascal poseen una tnica mstica fundamental y un contenido teolgico confesional. Es muy probable que ya existieran motor y motivo para una Apologa, es bastante probable que ya se procediera a su composicin y redaccin. Entre esos escritos, algunos se publicaron (Las Provinciales son el conjunto ms importante): estn desglosados. Los otros, manuscritos y sin ttulos particulares, siguen confusos. En 1658, ante un auditorio escaso y selecto, Pascal expone una abreviatura de esa Apologa de la que ya ha escrito algo. Se conserva de la conferencia una memoria de Filleau de la Chaise (que fue publicada en 1672); el Prefacio de Esteban Prier a la edicin de Port-Royal tambin intenta un resumen13

PASCAL

de ella. Desde 1659, la salud de Pascal empeora; los estudios (y quizs los escritos) para la Apologa continan. En los ltimos meses de su vida (1662), dado su estado de salud, es probable que haya escrito poco. La Apologa, compuesta en gran parte durante cuatro aos de agona, queda inconclusa, entre los papeles pstumos de Pascal. Y de all hay que extraerla (junto con lo dems), diferenciarla y organizarla.

Originales Los papeles manuscritos (no todos autgrafos, pues a menudo Pascal dictaba) fueron recogidos por Florindo Prier, el ejecutor testamentario. Los hay desde 1651 hasta la muerte de Pascal, y algunos escritos, completados o corregidos en distintas pocas. Aparecan en legajos compuestos de papelitos escritos de un solo lado o en hojas sueltas, que haban sido enhebrados (a veces ms de una vez, para cambiarlos de legajo; a veces cortados, para distribuirlos en distintos legajos). Lo primero que se hizo fue copiarlos tales como estaban. Hay que distinguir, pues, la Coleccin de manuscritos y la Copia. Los manuscritos son depositados en 1711, por Agustn Prier (hijo de Gilberta Pascal), en la abada benedictina de Saint-Germain-des-Prs. Se pide que se agrupen en tres volmenes (el primero con los "originales del libro de los Pensamientos" de 1670); se agregan tambin entonces el escrito autgrafo que es la Memoria de la noche de 1654, el perga14

PENSAMIENTOS

mino que se le parece y su copia hecha por Esteban Prier. En 1715, Juan Guerrier deposita, en la misma abada, otros legajos manuscritos. En 1726, Margarita Prier, hija de Gilberta, lega el resto de los papeles de su to al Oratorio de Clermont-Ferrand. Todo esto constituye la "Coleccin" de los manuscritos. Estos fueron pegados en hojas ms grandes, agrupados en 41 cuadernos, los cuales, con uno que contiene los certificados Prier y el escrito de 1654 (original y copia), son encuadernados en un volumen. Ttulo: Originales de los Pensamientos de Pascal. Al pegar y al encuadernar, el orden fue alterado muchas veces. La Coleccin no representa el orden en que Pascal dej sus manuscritos. En 1790, la Coleccin pasa a la Biblioteca Real, junto con la coleccin del Padre Guerrier. Actualmente est en la Biblioteca Nacional de Pars, "Fonds Francais", con el N 9202. Ha desaparecido el pergamino de la Memoria, pero subsisten su autgrafo y la copia. Todo esto es lo que los editores llaman el Recueil. La copia que se mand hacer inmediatamente despus de la muerte de Pascal pas tambin, en 1731, a la abada de Saint-Germain-des-Prs, en una serie de cuadernos que fueron encuadernados con el ttulo: Copia de los Pensamientos de Pascal. El orden de los escritos en ella tiene mayor probabilidad de corresponder al de Pascal, no cronolgicamente, sino como ste los dej (ya bastante ideolgicamente). Dice Z. Tourneur en el Prefacio de su edicin de los Pensamientos (Cluny, Pars, 1938, p. XXVIII): "Si se comparan en conjunto la Copia y la Coleccin, se advierte de entrada que un cierto nmero de textos conservados en la Coleccin no aparecen15

PASCAL

en la Copia; son los que presentan carcter de confidencias personales o de notas para Las Provinciales. En cambio, textos que figuran en la segunda parte de la Copia faltan en la Coleccin. Del mismo modo, ciertos textos que estn mutilados en la Coleccin aparecen reproducidos ntegramente en la Copia; prueba de que sta es anterior a la confeccin de la Coleccin. Por el contrario, la Copia omite los pasajes tachados en el manuscrito. Por ltimo, ciertos vestigios de escritura y cortes en el papel muestran que muchos textos, tachados y desechados sin duda por el mismo Pascal, no estn ni en la Copia ni en la Coleccin." En 1790, la Copia pasa a la Biblioteca de Pars, donde ahora figura con el N 9203. Existe una 2 ; Copia, hecha por la misma mano que la primera; proviene de la coleccin del Padre Guerrier. Con respecto a la I , en sta aparecen algunas transposiciones de pginas, algunos fragmentos nuevos y algunas modificaciones del texto." (Z. Tourneur, p. XXXIX.) Lleva el N 12.449. Sobre estos manuscritos (originales y transcripciones) se plantean los problemas previos a una edicin de los papeles pstumos de Pascal.

Problemas Son fundamentalmente tres, y se originan en el estado inconcluso de la obra principal, en la intromisin de escritos ajenos a sta, en la confusin y el desorden de los papeles, en las dificultades de lectura debidas a la grafa.16

PENSAMIENTOS

A) El texto: Se lo pretende con exactitud. Con respecto a qu original? A la Coleccin o a la Copia? Es una decisin previa, que puede aliviarse recurriendo a las variantes en Notas. Ms ardua es la exactitud objetiva de lectura, a causa de la letra, las distintas grafas, las lneas y la disposicin de stas; adems, a causa de las correcciones del mismo Pascal. En cambio, quizs convenga dejar de lado la ortografa de los manuscritos. Se han intentado algunas ediciones paleogrficas, y hay una fototpica del manuscrito. El texto actual, el de las ltimas ediciones crticas, si bien no definitivo, se puede considerar muy ajustado y, en verdad, muy suficiente. B) El orden o plan: Desde que se resolvi editar los papeles de Pascal, quedaron determinados los modos en que eso poda ser realizado (como puede verse en el Prefacio de Esteban Prier). Son los siguientes: 1 Orden cronolgico: es casi imposible, porque no lo es el de los escritos actualmente (ni siquiera el de la Copia, que quizs reproduzca el ltimo ordenamiento de Pascal, aunque no el que hubiera sido definitivo); en cuanto a estudios del papel, de la letra, de los agujeros para enhebrar, de las ideas, todo ello dara un orden hipottico, muy discutible. 2 Orden autogrfico: sera el de Pascal, tal como figura en la Copia (quizs con algunas mejoras, por indicios de los manuscritos); pero no sirve para todos los escritos, sino principalmente para la Apologa. 3 Orden apologtico: o sea, disponer los fragmentos de acuerdo con el plan de la Apologa. Dos obstculos: qu seguridad en cada ubicacin singular?, cul era con preci17

PASCAL

sin ese plan? En efecto, las exposiciones de Filleau de la Chaise y de Esteban Prier son muy generales y se refieren a una etapa no definitiva de la concepcin y de la composicin de Pascal; por ejemplo, no figura en ellas el argumento de la apuesta. Adems, no sabemos si existi tal plan definitivo, o si slo es lcito hablar de plan ltimo. Por otra parte, este plan sirve para la Apologa, pero deja en desorden los escritos que no corresponden a ella, y ni esto lo sabemos con certeza. 4 Orden topolgico: se pueden tomar todos los papeles pstumos y agruparlos en torno a centros temticos (que pueden abarcar varios temas). Es lo que se resolvi para la primera edicin y, con otra distribucin, lo que hizo Brunschvicg para la suya. Este plan se puede combinar con el apologtico, con tal que se lo siga con flexibilidad: los distintos tpicos de la topologa pueden seguir el orden ms o menos probable y verosmil de la Apologa (que puede ser adems el orden autogrfico de la Copia). En estos tres casos (ms o menos coincidentes), nos enfrentamos con un orden ideolgico, a diferencia de lo que nos ocurre con los otros dos: el cronolgico, (que es biogrfico) y el autogrfico puro (que es morfolgico). C) El criterio: Es lo primero que se debe resolver, y tiene que decidir sobre dos aspectos: 1 la cantidad: se publican todos los papeles pstumos, o solamente la Apologa? Si se resuelve esto, qu se hace con lo dems? O acaso todo (o casi todo) servira para la Apologa? Si se sostiene esto, hay que tratar de incluir todo en el18

PENSAMIENTOS

plan de aqulla (solucin de Brunschvicg). Si se resuelve lo contrario, hay que separar: por un lado, la Apologa; por el otro, los dems escritos (ya Condorcet haba dividido, arbitrariamente, Pensamientos filosficos y Pensamientos religiosos; separar es la solucin de Tourneur, Cluny, en dos tomos, cuyo primer tomo contiene la Apologa en el orden de la Copia). 2 la calidad: se publican los escritos suficientemente explcitos y acabados (las piedras o las vigas), o tambin los insuficientes (el pedregullo, las virutas)? Se podran combinar varios criterios y sentidos del siguiente modo: en la parte superior de las pginas, los textos suficientes, primero la Apologa (en orden topolgico y, si es posible, apologtico), luego los otros escritos pstumos (en qu orden? Cronolgico, si se pudiera; topolgico, en caso contrario o restante); en la parte inferior de las pginas, los escritos insuficientes (en cuanto sea posible clasificarlos; los que no pueden ser clasificados, juntos al final). La tipografa sealara variantes, correcciones, supresiones, agregados, etc. El criterio que se adopte y se siga determinar el ttulo de la obra. El menos pretencioso y, al mismo tiempo, el ms comprensivo parece ser el de la primera edicin: Pensamientos de Pascal sobre la religin y otros temas, que se encontraron despus de su muerte entre sus papeles; es el ttulo que adopt Tourneur para su edicin. Y es lo que se resume en el titulo abreviado: Pensamientos (cuya mxima extensin consiste en abarcar todos los papeles pstumos); es el ttulo ms frecuente, y el que se adopta en esta traduccin.19

PASCAL

Ediciones (Se marcan con asterisco las que se consideran ms importantes.) * 1669/1670 de Port-Royal (con Prefacio de Esteban Prier): orden topolgico. 1678 de Desprez: reimpresin de la anterior. 1727 de Colbert, obispo de Montpellier ("Sobre los milagros"). 1728 del P. Desmolets (dos fragmentos: "El arte de persuadir", "El espritu geomtrico"). 1740 en Utrecht, la "Memoria". 1776 de Condorcet.

1778 reedicin de la anterior (con Notas de Voltaire). * 1779 del abate Bossut (Pensamientos de filosofa, moral y bellas artes y Pensamientos sobre religin"). 1783 del P. Andr (segn texto de Bossut, en el orden de 1670)20

PENSAMIENTOS

1785 del abate Ducreux. 1803 y 18l2 de Renouard. 1817 de Didot.

1835 del abate Frantin (texto de Bossut, orden apologtico). * 1842 Vctor Cousin: Relacin sobre la necesidad de una nueva edicin de los Pensamientos de Pascal. * 1844/1846 de Faugre: en un primer volumen, los textos y fragmentos extraos a la Apologa, en orden topolgico; en el segundo volumen, la Apologa, con prefacio general y dos prefacios particulares, en dos partes segn los originales (Miseria del hombre sin Dios, Felicidad del hombre con Dios). * 1852 y 1866 de Havet (texto de Faugre, plan de Bossut). 1857 de Asti (orden apologtico). 1874 de la Librairie des Bibliophiles y de Flammarion. * 1877/1879 de Molinier (orden de Faugre, ortografa de los manuscritos). * 1877/1878 Salomn Reinach: Estudio critico sobre el texto de los Pensamientos. * 1896 de Michaut (orden del manuscrito). 1897 de Margival (orden de Havet). * 1897 editio minor de Brunschvicg (Hachette: orden topolgico y aproximadamente apologtico). * 1904 editio maior de Brunschvicg (Hachette). * 1905 fototpica del manuscrito, por Hachette (texto impreso segn Brunschvicg).21

PASCAL

1907 de Gazier (como la de Port-Royal).

1924 de Giraud (orden de Brunschvicg). * 1925 de Chevalier (orden apologtico, con comentario continuo). 1927 del P. Dieux (orden apologtico). 1929 de Massis (orden apologtico). * 1930 de Strowski (orden topolgico). 1934 editio minor de Brunschvicg (Cluny). 1935 de Souriau (ortodoxa, orden topolgico: el Hombre, Dios, Jesucristo, la Iglesia). 1936 de Chevalier (La Pliade).

1937 de J. Dedieu. * 1938 de Tourneur (Cluny: orden de la Copia). * 1942 de Toumeur (Vrin). * (1912), 1946 editio minor de Brunschvicg (Hachette); es la que se sigue en esta traduccin con notas. * 1948 de Couchoud: Discurso sobre la condicin del hombre. 1949 de Chevalier (con comentario continuo). * 1951 de Lafuma (del Luxemburgo: orden de la Copia, con agregados de la Coleccin y de otras fuentes). * 1952 de Lafuma (Delmas). * 1954 de Chevalier (La Pliade: orden apologtico, sin comentario continuo).

Por sus amables indicaciones en cuanto a las ediciones de Pascal y por su erudito auxilio sobre algunos puntos dif22

PENSAMIENTOS

ciles de la traduccin, quiero expresar mi agradecimiento al Profesor Jos A. Ora. OSCAR ANDRIEU.

23

PASCAL

Prefacio de la edicin de Port-Royal Nota: Mme. Prier cuenta la historia de este Prefacio en carta del 19 de abril de 1670 al seor Vallant, para Mme. de Sabl: "Advierto que la seora marquesa desea saber quin ha compuesto el prefacio de nuestro libro. Sabis, seor, que no debo tener secretos para ella; por ello, os suplico decirle que la escribi mi hijo. . ." Esteban Prier es, pues, el autor de este Prefacio. En el que se dice de qu manera estos Pensamientos fueron escritos y recopilados; por qu se retras la edicin; cul era el propsito del autor en esta obra y cmo pas los ltimos aos de su vida. Pascal, que haba abandonado muy joven el estudio de las matemticas, de la fsica y de las otras ciencias profanas, en las cuales haba realizado gran progreso, empez, hacia los treinta aos, a dedicarse a temas ms serios y ms nobles, a estudiar, en la medida en que su salud se lo pudo permitir, las Escrituras, los Padres de la Iglesia y la moral cristiana.

24

PENSAMIENTOS

Pero, aunque no sobresali menos en estas ciencias (como lo ha demostrado en obras que se consideran bastante buenas en su gnero), se puede decir sin embargo que, si Dios hubiese permitido que trabajara algn tiempo ms en la que tena el propsito de componer sobre la religin y a la cual pensaba dedicar todo el resto de su vida, esta obra habra superado en mucho todas las otras que de l conocemos, porque, en efecto, las ideas que sobre este tema haba elaborado eran infinitamente superiores a las que tena sobre todos los otros. Estoy seguro de que no habr nadie que no quede fcilmente persuadido de ello con slo ver lo poco que ahora se le muestra, por imperfecto que parezca, y ms an al saber cmo l trabaj y toda la historia de la coleccin que se consigui. Todo ocurri as. Pascal concibi el proyecto de esta obra varios aos antes de su muerte; sin embargo, no hay que asombrarse si durante mucho tiempo no escribi nada, porque tena la costumbre de pensar mucho los temas y de disponerlos en su espritu antes de manifestarlos, con el fin de considerar y examinar cuidadosamente cules deba poner al principio o al final y el orden que convena a todos, de modo que produjeran el efecto que l deseaba. Y como tena una memoria excelente, aun prodigiosa, al punto de que a menudo afirm que nunca haba olvidado nada una vez que haba fijado algo en su espritu; cuando se haba dedicado as algn tiempo a un tema no tema que se le escapasen los pensamientos que se le haban ocurrido. Por ello, bastante a menudo difera el25

PASCAL

escribirlos, sea por falta de oportunidad, sea porque su salud, que fue casi siempre claudicante, no era suficientemente buena como para permitirle trabajar con asiduidad. Por esta razn se ha perdido con su muerte la mayor parte de lo que ya haba concebido acerca de su proyecto, pues no escribi casi nada de los principales argumentos que pensaba emplear, de los fundamentos sobre los cuales pretenda basar su obra y del orden que en ella quera seguir, todo lo cual, con seguridad, era muy importante. Todo eso estaba perfectamente grabado en su espritu y en su memoria; pero, porque descuid escribirlo cuando todava hubiera podido quizs hacerlo, se encontr, cuando lo quiso hacer, en la imposibilidad de trabajar. Sin embargo, en una ocasin, hace unos diez o doce aos (Nota: Puesto que el Prefacio data a lo sumo de 1669, entre 1657 y 1659.), se lo oblig no a escribir lo que sobre ese tema pensaba, sino a decir algo de viva voz. As pues, lo hizo en presencia y por ruego de algunos amigos suyos, personas de consideracin. Desenvolvi para ellos, en pocas palabras, el plan de toda su obra; les present lo que habra de ser el tema y la materia; les inform abreviadamente de las razones y los principios, y les explic el orden y la sucesin de las cosas que en esa obra quera tratar. Y esas personas, tan capaces como las que ms de juzgar sobre temas de tal clase, confiesan que nunca escucharon nada ms hermoso, ms vigoroso, ms eficaz, ms convincente; que ellas quedaron encantadas y que lo que vieron de ese proyecto y de ese designio en un discurso de dos o tres horas, hecho de repente y26

PENSAMIENTOS

sin haber sido premeditado ni elaborado, les permiti juzgar lo que podra ser un da, si fuera ejecutado y llevado a la perfeccin por una persona cuya fuerza y capacidad ellas conocan, persona que tena por costumbre esforzarse de tal modo en todas sus obras que no se contentaba casi nunca con sus primeros pensamientos, por buenos que parecieran a los dems, y que a menudo rehizo hasta diez o doce veces trabajos que otra hallaba admirables desde la primera. Despus de haberles mostrado cules son las pruebas que mayor efecto producen sobre el espritu de los hombres y que son las ms capaces de persuadirlos, se propuso demostrar que la religin cristiana presentaba tantas seales de certeza y de evidencia como las cosas que los hombres consideran como las ms indudables. Comenz primero por una descripcin del hombre, y en ella no olvid nada que pudiera hacerlo conocer por dentro y por fuera de l mismo, y hasta los ms secretos movimientos de su corazn. Luego supuso a un hombre que, habiendo vivido siempre en una ignorancia total y en indiferencia con respecto a todo, y principalmente con respecto a s mismo, se considera en ese cuadro y llega a examinar qu es l. Se sorprende al encontrar all una infinidad de cosas en las cuales nunca haba pensado, y no podra observar, sin asombro y sin admiracin, todo cuanto Pascal le hace sentir acerca de su grandeza y de su pequeez, de sus ventajas y de sus debilidades, de las pocas luces que le quedan y de las tinieblas que lo rodean casi por todas partes, de todas las contradicciones asombrosas que aparecen en su naturaleza. Despus de esto,27

PASCAL

ya no puede permanecer indiferente, si posee alguna razn; por insensible que haya sido hasta entonces, debe desear, despus de haber conocido de ese modo lo que l es, conocer tambin de dnde viene y cul ser su futuro. Pascal, despus de haberlo puesto en tal predisposicin de curiosidad acerca de una duda tan importante, lo enva primero a los filsofos, y all, una vez que le ha expuesto lo que los ms grandes filsofos de todas las sectas han dicho acerca del hombre le hace observar tantos defectos, tantas flaquezas, tantas contradicciones y tantas falsedades en todo lo que han opinado, que no le resulta difcil a ese hombre juzgar que no es con eso que se debe contentar. Luego, le hace recorrer todo el universo y todas las pocas, sealndole la infinidad de religiones que pueden encontrarse; pero, al mismo tiempo, le demuestra, mediante razones tan poderosas y tan convincentes, que todas esas religiones slo estn llenas de vanidad, de locura, de errores, de extravos y de extravagancias, que ese hombre no halla en ellas nada que pueda satisfacerlo. Por ltimo, lo induce a echar una ojeada sobre el pueblo judo, y le muestra circunstancias tan extraordinarias que atrae fcilmente su atencin. Despus de haberle hecho notar toda la singularidad de este pueblo, se dedica especialmente a sealarle un libro nico segn el cual este pueblo se rige, libro que abraza conjuntamente su historia, su ley y su religin. No bien ha terminado de abrir ese libro, ya sabe que el mundo es la obra de un solo Dios, que este mismo Dios ha creado el hombre a su imagen y lo ha dotado de todas las28

PENSAMIENTOS

ventajas corporales y espirituales que convenan a ese estado. Aunque nada haya todava que lo convenza de tal verdad, sta no deja de gustarle; y basta con la razn para que encuentre ms verosimilitud en esta suposicin (de que Dios es el autor de los hombres y de todo cuanto existe en el universo) que en todo lo que estos mismos hombres se han imaginado mediante sus propias luces. Algo lo detiene en este momento, y es advertir, por la descripcin que se le ha hecho del hombre, que l se halla muy lejos de poseer todas las ventajas que tena cuando sali de las manos de su autor. Pero no permanece mucho tiempo en esta duda: en efecto, apenas prosigue la lectura de ese mismo libro, sabe que, despus que el hombre hubo sido creado por Dios en estado de inocencia y con toda clase de perfecciones, su primera accin consisti en rebelarse contra su creador y emplear en ofenderlo todas las ventajas que de l haba recibido. Pascal le hace entonces comprender que, porque ese crimen fue el ms grande de todos los crmenes en todas esas circunstancias, l haba sido castigado no slo en ese primer hombre (el cual, habiendo perdido por ello su estado, cay juntamente en la miseria, en la debilidad, en el error y en la ceguera), sino tambin en todos sus descendientes (a los cuales ese mismo hombre comunic y comunicar todava su corrupcin durante toda la sucesin de los tiempos). Le muestra luego distintos pasajes de ese libro en los cuales encontr esa verdad. Le advierte que en ellos slo se habla del hombre en relacin con ese estado de debilidad y desorden; que se dice a menudo que toda carne est corrom29

PASCAL

pida, que los hombres estn abandonados a sus sentidos y que desde el nacimiento tienen una predisposicin hacia el mal. Le muestra adems que esa primera cada es la fuente no slo de cuanto hay de ms incomprensible en la naturaleza del hombre, sino tambin de una infinidad de efectos que estn fuera de ste y cuya causa le resulta desconocida. En fin, le presenta al hombre tan bien pintado en todo ese libro, que no le parece distinto de la primera imagen que de l haba trazado. No basta con que tal hombre conozca su estado colmado de miseria; Pascal le ensea tambin que en ese libro encontrar con qu consolarse. En efecto, le hace notar que all se dice que el remedio est en las manos de Dios, que a Dios debemos recurrir para tener las fuerzas que nos faltan, que Dios se dejar convencer y que hasta enviar a un liberador, el cual satisfar por ellos y suplir la impotencia de ellos. Despus de haberle explicado muchas observaciones muy especiales sobre el libro de ese pueblo, le seala que es el nico libro que habla dignamente del Ser soberano y que da una idea de una verdadera religin. Le indica las seales ms notables de sta y las aplica a las que ese libro ha enseado; le incita a que advierta con atencin particular que ella hace consistir la esencia de su culto en el amor de Dios que ella adora; lo cual es una caracterstica singular, que la distingue claramente de todas las otras religiones, cuya falsedad resulta evidente por la falta de esa nota tan esencial. Aunque Pascal, despus de haber guiado tanto a ese hombre al cual se haba propuesto persuadir insensiblemen30

PENSAMIENTOS

te, no le ha dicho nada todava que pueda convencerlo de las verdades que le ha hecho descubrir, sin embargo lo ha colocado en predisposicin de recibirlas con gusto, con tal que se le pueda demostrar que debe dejarse persuadir, y aun de desear de todo corazn que esas verdades sean seguras y tengan buen fundamento, puesto que en ellas encuentra tales ventajas para su reposo y para la dilucidacin de sus dudas. Tal es el estado en el que debiera estar todo hombre razonable si comprendiera bien la serie de argumentos que Pascal termina de exponer: es verosmil creer que, despus de esto, se dejara persuadir fcilmente por todas las pruebas que el autor luego aportara para confirmar la certeza y la evidencia de todas esas verdades importantes de las que ya habl y que constituyen el fundamento de la religin cristiana, acerca de la cual tena el propsito de persuadir. Digamos en pocas palabras algo de esas pruebas. Despus de haber mostrado en general que las verdades que eran tema de su exposicin estaban contenidas en un libro acerca de cuya certeza ningn hombre de buen sentido poda dudar, se dedic principalmente al libro de Moiss, en el cual esas verdades son ms abundantes, y demostr, por gran nmero de circunstancias indudables, que era igualmente imposible que Moiss hubiera dejado por escrito cosas falsas o que el pueblo al cual l las haba dejado se hubiera dejado engaar, aunque el mismo Moiss hubiera sido capaz de engao. Habl tambin de los grandes milagros que se narran en ese libro y de la importancia que tienen para la religin que en l se ensea, y prob que no era posible que ellos no fue31

PASCAL

sen verdaderos, no s1o debido a la autoridad del libro que los contiene, sino tambin a causa de las circunstancias que los acompaan y que los hacen indudables, Mostr adems de qu manera toda la ley de Moiss era figurativa; que todo lo que haba sucedido a los judos slo haba sido la figura de las verdades consumadas con la llegada del Mesas, y que, puesto que el velo que cubra esas figuras haba sido levantado, resultaba fcil comprobar la realizacin y la consumacin perfecta de ellas en favor de los que han recibido a Jesucristo. Luego se propuso probar la verdad de la religin mediante las profecas, y sobre este tema se extendi mucho ms que sobre los dems. Porque se haba dedicado mucho a ste y tena opiniones propias muy particulares, las explic de manera muy inteligible: mostr el sentido y la concatenacin de ellas con maravillosa facilidad, y las expuso con toda su luz y con toda su fuerza. Por ltimo, despus de haber recorrido los libros del Antiguo Testamento y de haber sealado adems algunas observaciones convincentes como fundamentos y pruebas de la verdad de la religin, comenz a hablar del Nuevo Testamento y a extraer sus pruebas de la verdad misma del Evangelio. Empez por Jesucristo. Aunque ya lo haba probado irrefutablemente mediante las profecas y todas las figuras de la ley, cuya consumacin perfecta se vea en l, present adems muchas pruebas sacadas de su persona misma, de sus milagros, de su doctrina y de las circunstancias de su vida.32

PENSAMIENTOS

Luego se detuvo en los apstoles. Para mostrar la verdad de la fe que ellos publicaron con tanta energa por todas partes, despus de haber establecido que ellos no podan ser acusados de falsedad (a menos de suponer que hubiesen sido engaosos o engaados), mostr con claridad que ambas suposiciones eran igualmente imposibles. En fin, no olvid nada que pudiera ser til para la verdad de la historia evanglica, agregando muy acertadas observaciones sobre el Evangelio mismo, sobre el estilo y las personas de los evangelistas, sobre los apstoles en particular y sus escritos, sobre el nmero prodigioso de milagros, sobre los mrtires, sobre los santos; en una palabra, sobre todas las vas por las cuales la religin cristiana qued enteramente establecida. Y aunque no tuvo oportunidad, en un simple discurso, de tratar extensamente materia tan vasta, como tena el proyecto de hacerlo en su obra, dijo por lo menos bastante acerca de ello como para convencer que todo eso no poda ser obra de los hombres y que slo Dios pudo conducir el acontecimiento de tantos efectos diferentes, todos los cuales sirven en igualdad para probar de manera irrefutable la religin que l mismo vino a establecer entre los hombres. Tales son en substancia los principales temas de los cuales se propuso hablar en todo ese discurso, y slo los present a quienes lo escucharon como la abreviatura de una gran obra que meditaba, y lo poco que yo termino de referir y que despus ha llegado a nuestro conocimiento proviene de uno de los que en esa ocasin estuvieron presentes. (Nota: Se

33

PASCAL

trata probablemente de Filleau de la Chaise, cuya parfrasis resume Esteban Prier.) Entre los fragmentos que se entregan al pblico se encontrar algo de ese gran proyecto, pero bastante poco; y las cosas mismas que se encontrarn son tan imperfectas, tan poco extensas y tan mal digeridas, que ellas slo pueden ofrecer una idea muy grosera de la manera como l se propona tratarlas. Por lo dems, no hay que asombrarse si, en lo poco que se entrega, no se conserv su orden y sucesin para la distribucin de los materiales. Como casi nada de lo que se tena estaba ordenado, habra sido intil seguir ese orden, y nos hemos contentado con disponerlos ms o menos segn el modo ms apropiado y conveniente a lo que se tena. Esperemos en verdad que habr pocas personas que, despus de haber concebido una vez con claridad el designio del autor, no suplan por si mismas la falta de ese orden y que, considerando atentamente las diversas materias contenidas en estos fragmentos, no juzguen fcilmente dnde ellas deban ser colocadas segn la idea del que las haba escrito. Si por lo menos se conservara por escrito aquel discurso, completo y tal como fue pronunciado, podramos consolarnos algo por la prdida de esta obra, y decir que estara en nuestro poder, en el peor de los casos, una pequea muestra, aunque muy imperfecta. Pero Dios no permiti que ninguna de esas dos cosas ocurriera, pues poco despus cay enfermo de una enfermedad de languidez y debilidad que dur los cuatro ltimos aos de su vida y que, aunque pareca muy34

PENSAMIENTOS

poco desde afuera y no lo obligaba a guardar cama ni a quedarse en su cuarto, no dejaba de incomodarlo mucho y le impidi casi totalmente toda clase de ocupacin; por lo cual, el cuidado mayor y la principal preocupacin de los que estaban a su lado fue impedirle que escribiera, y aun que hablara de todo lo que exiga alguna tensin del espritu, y tratar con l cosas indiferentes y que no pudieran fatigarlo. Sin embargo, durante esos cuatro ltimos aos de languidez y de enfermedad l compuso y escribi todo lo que queda de esa obra que proyectaba y todo lo que se entrega al pblico. En efecto, aunque esperaba que su salud se restableciera por completo para ponerse a trabajar firme en ella y para escribir las cosas que ya haba digerido y dispuesto en su espritu, sin embargo, cuando se le ocurran nuevos pensamientos, algunos puntos de vista, algunas ideas o aun algn giro y algunas expresiones que algn da l prevea que pudieran servirle para su proyecto, porque entonces no se encontraba en estado de dedicarse a eso con tanta firmeza como cuando se hallaba bien de salud ni poda imprimirlos en su espritu y en su memoria, prefera dejar sentado algo por escrito para no olvidarlos. Para esto, tomaba el primer pedazo de papel que hallaba al alcance de su mano y en l escriba su pensamiento en pocas palabras, muy a menudo slo con medias palabras. En efecto, slo escriba para l, y por eso se contentaba con hacerlo muy sucintamente, para no cansarse el espritu, y con mentar slo las cosas que eran necesarias para que luego l pudiera recordar los puntos de vista y las opiniones que tena.35

PASCAL

De ese modo compuso la mayor parte de los fragmentos que se encontrarn en esta coleccin; as pues, no debe asombrar que haya algunos que parezcan bastante imperfectos, demasiado cortos y muy poco explicados, en los cuales hasta se puedan encontrar trminos y expresiones menos apropiados y menos elegantes. Ocurra, empero, que, a veces, con la pluma en la mano, no poda detenerse en su inclinacin y profundizaba sus pensamientos, los extenda un poco ms, aunque nunca con la misma fuerza y la misma aplicacin espiritual con que lo hubiera hecho si hubiera gozado de perfecta salud. Por ello, se encontrarn tambin algunos ms extensos y mejor escritos, y captulos ms compuestos y ms perfectos que otros. (...) Como era conocido el proyecto que tena Pascal de escribir sobre la religin, se puso mucho cuidado, despus de su muerte, en recoger todos los escritos que haba dejado sobre ese tema. Se los encontr todos juntos enhebrados en diversos legajos, pero sin orden alguno, sin continuidad entre ellos, porque, como ya lo he sealado, slo se trataba de las primeras expresiones de sus pensamientos, que l escriba sobre pedacitos de papel a medida que ellas se le ocurran. Todo lo cual era tan imperfecto y estaba tan mal escrito, que descifrarlo cost esfuerzos infinitos. Lo primero que se hizo consisti en hacerlos copiar tal como estaban y en la misma confusin en que haban sido encontrados. Pero, cuando se los vio en tal estado y cuando se pudo leerlos y examinarlos con mayor facilidad que en los originales, parecieron de entrada tan amorfos, tan poco me36

PENSAMIENTOS

tdicos y la mayor parte de ellos tan insuficientemente explicados, que durante mucho tiempo no se pens en hacerlos imprimir, aunque varias personas de importancia lo pidiesen a menudo con instancias y palabras muy urgentes. En efecto, se estimaba que, si se publicaban esos escritos como estaban, no se poda satisfacer la espera y la idea que el pblico tena de esa obra, de la cual ya haba odo hablar mucho. Finalmente, hubo que ceder a la impaciencia y al enorme deseo de todos por verlos impresos. Todo se allan con tanta mayor facilidad por cuanto se pens que los que los leeran seran capaces de discernir entre el esbozo de un proyecto y una obra totalmente concluida, y de juzgar la obra a partir de la muestra, por imperfecta que sa fuera. Y as se resolvi entregarla al pblico. Pero, como esto se poda llevara cabo de distintas maneras, se tard algn tiempo en determinar la manera que se deba elegir. La primera en que se pens, sin duda la ms fcil, consista en hacerlos imprimir de inmediato en el mismo estado en que se los haba encontrado. Pero muy pronto se pens que, si se proceda de tal suerte, se perdera casi todo el fruto que de ello se poda esperar, porque, dado que los pensamientos ms razonados, ms claros y ms extensos estaban mezclados y, por decirlo as, absorbidos entre muchos otros apenas esbozados, y entre algunos tambin casi ininteligibles a toda otra persona que no fuera el que los haba escrito, se poda creer con razn que los segundos apartaran de los primeros, y que tal volumen, aumentado por tantos pensamientos imperfectos, slo sera considerado como un mon37

PASCAL

tn confuso, desprovisto de orden y de continuidad, totalmente intil. Haba otra manera de ofrecer al pblico estos escritos: ocuparse de ellos previamente, aclarar los pensamientos oscuros, terminar los inconclusos, y, siguiendo en todos estos fragmentos el designio del autor, suplir de algn modo la obra que ste quera realizar. Este camino habra sido seguramente el mejor, pero era en cambio muy difcil llevarlo a feliz trmino. Sin embargo, se lo adopt durante bastante tiempo, y se haba comenzado el trabajo en ese sentido. Pero, por ltimo, se resolvi rechazarla como la primera, porque se consider que era casi imposible penetrar suficientemente en el pensamiento y en el designio de un autor, ante todo de un autor como Pascal, y que, de ese modo, no se habra presentado su obra, sino una obra completamente distinta. As, para evitar los inconvenientes que ofrecan una y otra manera, se eligi una intermedia, que es la seguida en esta coleccin. Se tomaron solamente, entre ese gran nmero de pensamientos, los que parecieron ms claros y ms acabados, y se los entrega tales como fueron hallados, sin agregar ni cambiar nada. Slo se hizo lo siguiente: los pensamientos estaban sin continuidad, sin conexin, confusamente dispersos por uno y otro lado; se los puso en algn orden, y se colocaron bajo los mismos ttulos los que se referan a los mismos temas; y se suprimieron todos los que eran o demasiado oscuros o demasiado imperfectos. (...) Si aparecen todava en esta coleccin algunos pensamientos un poco oscuros, yo creo que, con un poco de38

PENSAMIENTOS

dedicacin, podrn, sin embargo, ser comprendidos muy fcilmente, y se estar de acuerdo en que no son los menos hermosos, y que ms convena darlos como estn que aclararlos con muchas palabras que slo habran conseguido hacerlos lentos y lnguidos y les habran quitado uno de sus principales mritos, el de decir muchas cosas en pocas palabras. (...) Me parece conveniente adems, para desengaar a quienes esperen quizs encontrar aqu pruebas y demostraciones geomtricas de la existencia de Dios, de la inmortalidad del alma y de varios artculos de la fe cristiana, advertirles que no era tal el proyecto de Pascal. No pretenda probar todas esas verdades de la religin mediante tales demostraciones fundadas sobre principios evidentes, capaces de convencer la obstinacin de los ms empedernidos, ni mediante razonamientos metafsicos, que a menudo extravan el espritu ms de lo que lo persuaden, ni mediante lugares comunes tomados de los efectos naturales, sino mediante pruebas morales que se dirigen al corazn ms que al espritu. 0 sea, que su propsito no era tanto convencer y persuadir el espritu, cuanto llegar al corazn y predisponerlo a favor. l saba, en efecto, que las pasiones y los nexos viciosos que corrompen el corazn y la voluntad son los mayores obstculos y los principales impedimentos que tenemos para la fe, y que, si se logran salvar estos obstculos, no le resulta difcil al espritu recibir las luces y las razones que pueden convencerlo.

39

PASCAL

(...) Asombrar quizs tambin encontrar en esta coleccin tanta diversidad de pensamientos, muchos de los cuales parecen bastante alejados del tema que Pascal se haba propuesto tratar. Pero hay que tener en cuenta que su designio era mucho ms amplio y ms extenso de lo que nos imaginamos, y que no se reduca a refutar los razonamientos de los ateos y de los que atacan algunas de las verdades de la fe cristiana. El grande amor y el aprecio singular que por la religin senta lo llevaba a no poder soportar no slo que se la quisiera destruir y aniquilar totalmente, sino adems que se la hiriera o se la corrompiera en lo ms mnimo. De modo que quera declarar la guerra a todos los que atacan su verdad o su santidad; es decir, no slo a los ateos, a los infieles y a los herticos, que rehusan someter a la fe las falsas luces de su razn y reconocer las verdades que ella nos ensea, sino aun a los cristianos y a los catlicos, los cuales, aunque estn en el cuerpo de la verdadera Iglesia, no viven, sin embargo, segn la pureza de las mximas del Evangelio, que all nos son propuestas como el modelo segn el cual debemos regular y conformar todas nuestras acciones. Tal era su proyecto, y ese proyecto era bastante vasto y grande como para abarcar la mayor parte de los temas que aparecen en esta coleccin. Sin embargo, se podrn encontrar algunos que ninguna relacin tienen con l y que, en efecto, no estaban destinados a formar parte de l. As, por ejemplo, la mayor parte de los que aparecen en el captulo de los Pensamientos diversos, que tambin fueron encontrados entre los papeles de Pascal y que hemos juzgado conveniente agre40

PENSAMIENTOS

gar a los dems. En efecto, no presentamos este libro simplemente como una obra compuesta contra los ateos o sobre la religin, sino como una coleccin de Pensamientos sobre la religin y sobre algunos otros temas.(...)

En cuanto al texto de los Pensamientos de Pascal, la edicin de Brunschvicg, que se ha seguido en esta traduccin, puede ser considerada una de las ms satisfactorias, salvo excepciones no excesivamente numerosas. Como se ha dicho en los Preliminares bibliogrficos, su distribucin de los fragmentos (o sea, su paradigma ideolgico, que se refleja en su ndice) puede no satisfacer a todos. Para que sirvan de comparacin, agregamos las disposiciones temticas de otras ediciones, algunas de las ms importantes.

41

PASCAL

P.-L. Couchoud: Blaise Pascal: Discours de la condition de lhomme (Albin Michel, Paris, 1948) Cmo se presentan, segn la Copia, los legajos de Pascal ? Los 27 primeros legajos (189 pginas de la Copia) llevan cada uno un ttulo. Los ttulos son de Pascal ... Despus de este conjunto ordenado, vienen 34 legajos (283 pginas de la Copia) sin orden ni ttulo (salvo uno, intitulado Miscellanea). Los designar con nmeros romanos. Renen, en general, notas de la misma poca, a menudo muy diversas, cuyo destino era ms bien ser conservadas que clasificadas. El anlisis permite distinguir dos grupos entrecruzados. 23 legajos sin ttulo (III a XIX, XXVI a XXXI) son posteriores a los legajos con ttulo, posteriores por lo tanto a la planificacin de la Apologa. Representan el trabajo de bsqueda de Pascal segn ese plan y corresponden a los aos entre 1659 Y 1662 ... Por el contrario, II legajos (I y II, XX a XXV, XXXII a XXXIV) son anteriores a ese plan de la Apologa. Datan de42

PENSAMIENTOS

los aos entre 1656 y 1659. Su cronologa me parece la siguiente: XXXII a XXXIV (1656), XX a XXV (1657-1659), II y I (1659). Hay que agregar el grupo de los papeles que la familia Prier no transcribi en la Copia..., pero que no dej que se perdieran. Estn conservados, dispersos, en la Coleccin de los autgrafos. Aparecen reunidos al comienzo de la edicin paleogrfica de Tourneur. Muchos estuvieron enhebrados en los legajos de Pascal; presentan los agujeros para el hilo. Entre ellos estn la Memoria de la noche mstica del 23 de noviembre de 1654, las meditaciones religiosas (entre ellas el Misterio de Jess) del ao 1655, y un pequeo grupo acerca de la batalla de las Provinciales y de los Facta (1656-1658). En resumen, los legajos de Pascal se dividen, por orden cronolgico, en cuatro grupos, con estas fechas provisorias: 1654-1658: los papeles no copiados por la familia Prier. 1656-1659: II legajos anteriores al plan de la Apologa: XXXII a XXXIV (notas para una Carta sobre los milagros), XXIII (Miscellanea sobre el hombre), XXII (Diferencia entre el espritu de geometra y el espritu de agudeza), XXV y XXIV (pensamientos sobre el hombre y la religin), II (argumento de la Apuesta), I (Gestacin del proyecto de la Apologa). 1659: Los 27 legajos con ttulo (clasificados por Pascal para una Apologa de la religin cristiana). 1659-1662: 23 legajos acumulados por Pascal para emplear en esa Apologa. (Couchoud, Introduccin, p. 10-11.)

43

PASCAL

Los 27 legajos de la Copia 9203 Como hemos afirmado antes y como demostr L. Lafuma en sus Investigaciones pascalianas (1949), la Copia Manuscrita N 9203 de la Biblioteca Nacional de Pars presenta un valor especial, por el hecho de que se la debe identificar, segn toda probabilidad, con la copia de la que habla Esteban Prier, hecha enseguida despus de la muerte de Pascal (es decir, durante el ao 1663) y que restituye el estado en el que fueron encontrados los papeles de Pascal. Esta copia nos ofrece primero, desde la pgina 1 hasta la pgina 188, una serie de 382 artculos, agrupados en 27 legajos con ttulos, y luego, desde la pgina 191hasta la pgina 472, 33 series de textos (530 artculos), sin orden ni ttulos, con excepcin de las tres ltimas series, que llevan el ttulo Milagros. Los 27 legajos fueron distribuidos casi seguramente por el mismo Pascal, antes que la enfermedad, a comienzos de 1659, lo obligara a detener su trabajo. El orden de esta clasificacin nada prejuzga acerca del orden que l hubiera seguido en su exposicin. La Copia 9203 presenta los fragmentos empezando por el ltimo papel enhebrado, es decir por el de arri44

PENSAMIENTOS

ba de cada legajo. El orden de clasificacin de los 27 legajos y la mayor parte de sus ttulos parecen ser obra de Arnauld y de Nicole, que seguan, como Filleau de la Chaise en su Discurso, el plan de la exposicin de Pascal en Port-Royal en 1658. Del orden de esta copia se inspiran las ediciones de Tourneur (1938 Y 1942, Cluny y Vrin), y L. Lafuma sigue escrupulosamente ese orden en su edicin de 1951 (Ediciones del Luxemburgo), tanto para 1os 27 legajos como para las 33 series. Este autor agrega los textos que no aparecen en la copia y que figuran en la Coleccin original 9202 (en la cual los pensamientos suprimidos por la familia de Pascal estn agrupados en los cuadernos IX y X, folios 85 a 107 y folio 121), y pensamientos sacados de otras fuentes. En su segunda edicin de los Pensamientos (Delmas, 1952), L. Lafuma respeta el orden de clasificacin de los 27 legajos y agrega en cada uno de ellos los fragmentos no clasificados que se relacionan con ellos, y reserva para una segunda seccin los textos que l considera que no fueron redactados para la Apologa. (Nota de J. Chevalier.)

Los 27 legajos 1. Orden. 2. Vanidad. 3. Miseria. 4. Tedio y cualidades esenciales del hombre. 5. Razn de los efectos.45

PASCAL

6. Grandeza. 7. Contrariedades. S. Diversin. 9. Filsofos. 10. El Supremo Bien. 11. A P. R. 12. Comienzo. 13. Sumisin y uso de la razn. 14. Excelencia de esta manera de probar a Dios. 15. Transicin del conocimiento del hombre a Dios. 16. Falsedad de las otras religiones. 17. Hacer que la religin sea digna de amor. 18. Fundamentos de la religin y respuesta a las objeciones. 19. Que la ley era figurativa. 2o. Los rabinos. 21. Perpetuidad. 22. Pruebas de Moiss. 23. Pruebas de Jesucristo. 24. Profecas. 25. Figuras particulares. 26. Moral cristiana. 27. Conclusin.

46

PENSAMIENTOS

Primera edicin: de Port-Roya1 (1670) Pensamientos del seor Pascal sobre la religin y sobre algunos otros temas, hallados despus de su muerte entre sus papeles (32 captulos) Pensamientos sobre la religin (20 captulos): 1) Contra la indiferencia de los ateos. 2) Seales de la verdadera religin. 3) Verdadera religin probada por las contradicciones que hay en el hombre y por el pecado original. 4) No es increble que Dios se una a nosotros. 5) Sumisin y uso de la razn. 6) Fe sin razonamiento. 7) Ms ventajoso es creer que no creer lo que ensea la religin cristiana.

47

PASCAL

8) Imagen de un hombre que se canso de buscar, a Dios exclusivamente por el razonamiento y que empieza a leer las Escrituras. 9) Injusticia y corrupcin del hombre. 10) Judos. 11) Moiss. 12) Figuras. 13) La ley era figurativa. 14) Jesucristo. 15) Pruebas de Jesucristo por las profecas. 16) Diversas pruebas de Jesucristo. 17) Contra Mahoma. 18) Designio de Dios de esconderse a unos y de descubrirse a otros. 19) Los verdaderos cristianos y los verdaderos judos slo tienen la misma religin. 20) Slo se conoce tilmente a Dios mediante Jesucristo.

Pensamientos sobre el hombre (6 captulos): 1) Contradicciones asombrosas en la naturaleza del hombre con respecto a la verdad, a la felicidad y a varios otros temas. 2) Conocimiento general del hombre.48

PENSAMIENTOS

3) 4) 5) 6)

Grandeza del hombre. Vanidad del hombre. Debilidad del hombre. Miseria del hombre.

Pensamientos sobre los milagros (I captulo). Pensamientos cristianos (I captulo). Pensamientos morales (I captulo). Pensamientos sobre la muerte (I captulo). Pensamientos diversos (I captulo). Oracin para pedir a Dios el buen uso de las enfermedades.

49

PASCAL

Edicin de Fortunat Strowski (0llendorf-Albin Michel, Pars, 1930) Notas para las Provinciales. Apologa de la Religin:

I) La Apologa. 2) La apuesta. 3) El hombre en el universo. 4) El pueblo judo. 5) Los Libros sagrados. 6) Jesucristo. 7) Reflexiones, Mximas, Miscelneas. Otras notas para las Provinciales.

50

PENSAMIENTOS

Edicin de Jacques Chevalier (NRF, Bibliothque de la Pliade, Pars, 1954).

PREFACIO GENERAL: PROPSITO, ORDEN, PLAN DE LA OBRA El inters y el deber del hombre: cmo obtener que l los vea y los siga. Los caminos de la conviccin: llevar otra vez los hombres al corazn. Discernimiento de los espritus. El espritu de geometra y el espritu de agudeza. El recto sentido. Las reglas del juicio. Diversidad y unidad. Las reglas del lenguaje. El buen uso social. El orden. El plan.

51

PASCAL

PRIMERA PARTE: EL HOMBRE SIN DIOS CAPITULO I: EL LUGAR DEL HOMBRE EN LA NATURALEZA: LOS DOS INFINITOS CAPITULO II: MISERIA DEL HOMBRE. LOS PODERES ENGAOSOS 1. Los sentidos y la memoria. 2. La imaginacin. 3. La costumbre. 4. El amor propio. 5. El orgullo y el espritu de vanidad. 6. Contrariedades. 7. Locura de la ciencia humana y de la filosofa. 8. La diversin. 9. El hombre en sociedad: La injusticia de las leyes humanas. Las imitaciones de la justicia: la opinin y la Fuerza, su poder tirnico. Conclusin de tales hechos: nuestra justicia no es la justicia. CAPITULO III: SEALES DE LA GRANDEZA DEL HOMBRE. 1. Se infiere del sentimiento mismo de su mise52

PENSAMIENTOS

ria. El pensamiento. 2. Se infiere de su miseria. El instinto de la verdad y del bien, aun en sus desvos. 3. La justicia humana y la razn de los efectos: inversin del a favor en contra; el orden de la justicia verdadera. 4. La grandeza de la humanidad reside en lo medio. CAPITULO IV: CONCLUSIN: ES NECESARIO BUSCAR A DIOS

SEGUNDA PARTE: EL HOMBRE CON DIOS SECCIN I: LA BSQUEDA 1. Los filsofos: dogmticos y pirrnicos. 2. Las religiones. 3. El pueblo judo: sus ventajas; su libro. 4. La dificultad. 5. Solucin de la dificultad: la naturaleza cada. 6. Las seales de la verdadera religin. 7. Conclusin. SECCION II: EL NUDO 1. Quitar los obstculos. 2. La incomprehensibilidad. La existencia de Dios. Nuestra lgica limitada.53

PASCAL

3. Infinito-nada: la apuesta. 4. Sumisin y uso de la razn. 5. Utilidad de las pruebas mediante la mquina: el autmata y la voluntad. 6. El corazn. 7. La fe y los medios de creer. SECCIN III: PRUEBAS DE JESUCRISTO CAPITULO I: EL ANTIGUO TESTAMENTO 1. Moiss. 2. La ley. 3. Las profecas. La esperanza mesinica. 4. Realizacin de las profecas por la venida del Mesas, Jesucristo, que instaura un reino interior y espiritual. 5. Razn de las figuras. Fundamentos de la religin cristiana: los dos sentidos de las Escrituras; su nico objeto es la caridad; Dios escondido. CAPITULO II: EL NUEVO TESTAMENTO. JESUCRISTO Jesucristo Hombre-Dios, centro de todo. Pruebas de Jesucristo: 1. Realizacin de las profecas. 2. Milagros. 3. Su oscuridad: el misterio de la Eucarista.54

PENSAMIENTOS

4. Redencin. 5. Efectos de la Redencin. La Gracia. 6. La moral. 7. El orden de la justicia universal. El renunciamiento. 8. Los caminos de la salvacin. 9. Jesucristo: El misterio de Jess.

CAPTULO III: LA IGLESIA 1. Vas de establecimiento de la religin cristiana. Verdad de la historia evanglica. Los Apstoles. 2. Vas de mantenimiento de la religin cristiana: los milagros y la gracia. 3. La perpetuidad. 4. La infalibilidad doctrinaria de la Iglesia. El Papa y la unidad. CONCLUSIN: EL ORDEN DE LA CARIDAD Y EL MISTERIO DEL AMOR DIVINO El deber del hombre. Objecin: la religin cristiana no es la nica. La locura de la Cruz. El orden de los cuerpos, el orden de los espritus, el orden de la caridad. La vida sobrenatural. Accesible a todos.55

PASCAL

El misterio del Amor divino.

56

PENSAMIENTOS

Memoria a (MEMORIAL) b = c El ao de gracia de 1654, Lunes, 23 de noviembre, da de san Clemente, papa y mrtir, y otros en el martirologio, Vspera de san Crisgono, mrtir, y otros. Desde ms o menos las diez y media de la noche hasta ms o menos las doce y media de la noche,

Fuego. d Dios de Abraham, Dios de Isaac, Dios de Jacob e no de los filsofos y de los sabios. f57

PASCAL

d Certeza. Certeza. Sentimiento. Alegra. Paz. g Dios de Jesucristo. Deum meum et Deum vostrum. h Tu Dios ser mi Dios i Olvido del mundo y de todo, salvo de Dios. d Slo se encuentra por los caminos enseados en el Evangelio. J Grandeza del alma humana. k Padre justo, el mundo no te conoci, pero yo te conoc. L Alegra, alegra, alegra, lgrimas de alegra d De l me separ: Dereliquerunt me fontes aquae vivae. m Dios mo, t me abandonars? n No est yo separado de l eternamente. Esta es la vida eterna, que ellos te conozcan nico verdadero Dios, y al que t has enviado, Jesucristo. n

Jesucristo. o Jesucristo. De l me separ; hu de l, renunci a l, lo crucifiqu. No est yo nunca separado de l. Slo se conserva por los caminos enseados en el. Evangelio. j Renunciamiento total y dulce. d58

PENSAMIENTOS

Sumisin total a Jesucristo y a mi director. p Eternamente en alegra por un da de ejercicio sobre la tierra. q Non obliviscar sermones tuos. r Amen. s

Notas a la Memoria a) El origen de este documento, ridculamente llamado por Condorcet el Amuleto, est atestiguado por el P. Guerrier con las siguientes palabras: "Pocos das despus de la muerte del seor Pascal, un criado de la casa advirti por azar que, en el dobladillo del jubn de este ilustre difunto, haba algo que pareca ms grueso que lo dems y, habiendo descosido ese lugar para averiguar de qu se trataba, encontr un pequeo pergamino doblado y escrito por el mismo Pascal, y dentro de ese pergamino un papel escrito por la misma mano: uno era la copia fiel del otro. Estos dos objetos fueron enseguida entregados a la seora Prier, que los mostr a varios amigos particulares. Todos estuvieron de acuerdo en que no caba dudar de que ese pergamino, escrito tan cuidadosamente y con letra tan notable, fuese una especie de memoria que l conservaba muy cuidadosamente para guardar el recuerdo de algo que quera tener siempre presente ante sus ojos y su espritu, puesto que durante ocho aos l mismo se tomaba el trabajo de coserlo y descoserlo cada vez que cambiaba de traje."

59

PASCAL

El pergamino ya no existe; pero el papel autogrfico, que es su copia, est puesto como primera hoja del manuscrito 9202 de la Biblioteca Nacional de Pars, y debiera estarlo en todas las ediciones de los Pensamientos. Tenemos en l, en efecto, escrita por la propia mano de Pascal, la fecha de su segunda y definitiva "conversin", la que puso trmino a la larga crisis moral cuyas vicisitudes nos relat su hermana Jacqueline en la clebre carta del 25 de enero de 1655, crisis que duraba desde haca ms de un ao". Durante esa noche memorable, "el gran abandono por parte de Dios, del cual se quejaba Pascal, termin sbitamente; se reabrieron las fuentes, aparentemente agotadas, de su vida interior, y, en un arrobo ntimo, en una especie de inundacin espiritual de la gracia, volvi a tomar realmente contacto con Dios. (Nota de V. Giraud.) b) El nombre que se le ha dado a ese documento en francs es mmorial. Esta palabra existe en castellano, pero con sentido algo diferente. La traduccin ms exacta sera memorndum, "lo que debe ser recordado", pero me pareci muy pretenciosa, por ser latina. Traduzco por memoria, una de cuyas acepciones corresponde a la palabra francesa. (Nota del T.) c) A pesar de que la Memoria es un documento mstico, en Pascal coexiste el hombre de ciencia; de ah, quizs, la cuidadosa cronologa que inicia este testimonio, principalmente en su aspecto horario. (Nota del T.) d) La experiencia mstica de Pascal no est relatada en la Memoria en orden biogrfico; el documento o testimonio es ms60

PENSAMIENTOS

bien un resumen del resultado. Por ello, no se advierten en l claramente las etapas o grados de la Mstica. Pero se pueden desentraar: la acidia previa (que se conoce biogrficamente), la asctica preliminar (que es presumible durante meses o aos), la iluminacin (fuego, que pudo ser sbita), la evidencia mstica y teolgica (aunque en ste caso no hubo unin), la solucin dogmtica, las vivencias o valencias de! estado teoptico (certeza, alegra, paz). stas persisten una vez concluido el xtasis mstico; de ah que la experiencia que la Memoria reitera para el recuerdo (o para la revivencia) pueda haber sido una de las fuentes de la Apologa, y de ah que tal Memoria convenga como prembulo para los Pensamientos. (Nota del T.) e) xodo, III, ; Mateo, XXII, 32. f) No se puede negar la clarividencia de Pascal: ha separado ntidamente la arquitectnica mstica de la crtica (filosfica y cientfica), y se ha puesto resueltamente en la primera. A pesar de sus trabajos cientficos, debemos pensar que Pascal se conoca, y que eligi lo que en l consideraba ms valioso. No slo es creyente (y no agnstico o ateo o libertino), sino que su Dios no es el de un tesmo difuso, sino el de una religin eclesistica. (Nota del T.) g) En el manuscrito esta lnea fue seguramente redactada despus, y su grafa parece apresurada y triunfal. (Nota de V. Giraud.) h) Juan, XX, 17 Mi Dios y vuestro Dios. i) Ruth, 1, 16.

61

PASCAL

j) Aqu es an ms notable la adhesin de Pascal a una religin dogmtica: no cualquier fidesmo, sino la religin del Evangelio, la de Jesucristo. (Nota del T.) k) Algo de la Apologa asoma en esta afirmacin: "grandeza" del hombre en su alma, porque en ella puede revelarse Dios; de otro modo, miseria "sin Dios". (Nota del T.) l) Juan, XVII, 25. m) Jeremas, II, 13: "Me abandonaron a m, que soy la fuente de agua viva." n) Mateo, XXVII, 46. n') Juan, XVII, 3. o) La misma ubicacin en el manuscrito seala la preeminencia de esta evidencia mstica: Cristo en el centro, como estuvo la palabra "fuego". Lo que ste fue para la imaginacin, Cristo ahora lo es para la fe. (Nota del T.) p) La eleccin de un director fue la ocasin de los conflictos ms violentos de Pascal consigo mismo. q) He aqu una observacin de validez eminentemente humana: lo cotidiano puede convertirse en asidero de lo perenne. En el caso de la Mstica, el xtasis teolgico instantneo es el fundamento de un persistente estado teoptico. (Nota del T.) r) Salmo CXVIII, 16: "No olvidar tus enseanzas." s) Estas tres ltimas frases no figuran en la copia autogrfica de la Biblioteca Nacional; sin embargo, es posible que hayan pertenecido al pergamino original. V. Giraud coloca, despus de la Memoria, el Misterio de Jess. Faugre fue su primer editor; desde entonces, se lo publi62

PENSAMIENTOS

ca generalmente con los Pensamientos. Giraud piensa que no debe formar parte de la Apologa. Porque hemos seguido el orden de Brunschvicg, se lo puede encontrar, en esta traduccin, con el N553. Nos parece que los N 552, 553, 554, 555 debieran separarse de la Apologa y publicarse fuera de ella, aunque junto con ella, quizs como final. (Nota del T.)

63

PASCAL

Pensamientos Edicin Se ha traducido la edicin de los Pensamientos de Len Brunschyicg, Hachette, editio minor, Pars, 1912 y 1946. Indice de la edicin de Brunschvicg y de esta traduccin Seccin I: Pensamientos sobre el espritu y el estilo. Seccin II: Miseria del hombre sin Dios. Seccin III: De la necesidad de la apuesta. Seccin IV: De los medios de creer. Seccin V: La justicia y la razn de los efectos. Seccin VI: Los filsofos. Seccin VII: La moral y la doctrina. Seccin VIII: Los fundamentos de la religin cristiana. Seccin IX: La perpetuidad.64

PENSAMIENTOS

Seccin X: Los figurativos. Seccin XI: Las profecas. Seccin XII: Pruebas de Jesucristo. Seccin XIII: Los milagros. Seccin XIV: (Apndice): fragmentos polmicos.

65

PASCAL

Indicaciones tipogrficas Cifra del medio: orden de la presente edicin (Brunschvicg). Cifra de la izquierda: nmero de la pgina del manuscrito en la que se encuentra el fragmento (salvo otra indicacin). Un tilde (') junto a ese nmero: el fragmento no est escrito por la mano de Pascal. Dos tildes (") junto a ese nmero: el fragmento contiene correcciones o agregados autogrficos. Entre barras / ... /: pasajes tachados por Pascal. Entre barras y subrayadas palabras agregadas o rectificadas por Pascal.

66

PENSAMIENTOS

Seccin I 405") I

Diferencia entre el espritu a de geometra b y el espritu de sutileza. c En el primero, los principios son palpables d pero se apartan del uso comn; de modo que nos cuesta volver la cabeza hacia ese lado, por falta de hbito. Sin embargo, basta con que lo hagamos un poco, y vemos claramente los principios; sera necesario que nuestro espritu estuviera totalmente falseado para razonar mal sobre principios tan visibles que es casi imposible que se nos escapen. Pero, en el espritu de sutileza, los principios pertenecen al uso comn y estn delante de los ojos de todos. No tenemos que volver la cabeza ni violentarnos; slo se trata de tener buena vista, pero hay que tenerla buena, pues los principios son tan tenues e y numerosos, que es casi imposible que algunos no se nos escapen. Y como la omisin de un principio lleva al error, hay que tener la vista muy ntida para

67

PASCAL

ver todos los principios, y hay que tener adems el espritu exacto para no razonar en falso sobre principios conocidos. Por lo tanto, todos los gemetras seran sutiles si tuvieran buena vista, pues no razonan en falso sobre los principios que conocen; y los espritus sutiles seran gemetras si pudieran acostumbrar su vista a los principios inhabituales de la geometra. 406) As pues, ciertos espritus sutiles no son gemetras porque nunca pueden volverse hacia los principios de geometra; pero ciertos gemetras no son sutiles porque no ven lo que est delante de ellos y porque, acostumbrados a los principios precisos y groseros de geometra y a no razonar sino despus de haber visto y manejado cuidadosamente sus principios, se pierden en las cosas de sutileza, donde los principios no se dejan manejar del mismo modo. Casi no se los ve, ms se los siente de lo que se los ve; cuesta infinito trabajo hacer que los sientan aquellos que no los sienten espontneamente: son cosas tan delicadas y tan numerosas, que se necesita un sentido muy delicado y muy ntido para sentirlas y para juzgar correcta y exactamente de acuerdo con ese sentir f, cosas que, las ms de las veces, no se pueden demostrar ordenadamente como en geometra, porque no se poseen como en sta los principios, e intentarlo sera cosa de nunca acabar. Hay que ver todo el asunto de repente, con una sola mirada, y no mediante un progreso de razonamiento, por lo menos hasta un cierto grado. Por ello, es excepcional que los gemetras sean sutiles y que los sutiles sean gemetras, porque los gemetras quieren tratar geomtricamente esas cosas68

PENSAMIENTOS

sutiles y se tornan ridculos, ya que quieren comenzar por las definiciones y luego por los principios, manera de obrar que no es la adecuada para esta clase de razonamiento. El espritu no deja de hacerlo, pero lo hace tcitamente, con naturalidad y sin arte g, pues la expresin de esto supera a todos los hombres y el sentir slo pertenece a pocos hombres h. Por el contrario, los espritus sutiles, acostumbrados a juzgar con una sola mirada, quedan tan asombrados -cuando se les presentan proposiciones en las que no comprenden nada y en las que, para entrar, hay que pasar por definiciones y principios tan estriles, los cuales no tienen ellos costumbre de considerar tan detalladamente-, que sienten por stos repulsa y disgusto. Pero los espritus falsos i no son nunca sutiles ni geomtricos. Los gemetras que slo son gemetras tienen, por lo tanto, el espritu recto J, con la condicin de que se les expliquen bien todas las cosas mediante definiciones y principios; de otro modo, son falsos e insoportables, pues su rectitud slo se apoya sobre los principios muy dilucidados. Y los espritus sutiles que slo son sutiles no pueden tener la paciencia de descender hasta los primeros principios de las cosas especulativas e imaginativas, que nunca han visto en el mundo y que estn totalmente fuera del uso 213') 2

69

PASCAL

a Diversas clases de sentido recto; unos, en un cierto orden de cosas y no en los otros rdenes, en los cuales desvaran. Unos extraen bien las consecuencias a partir de pocos principios, y esto es una rectitud de sentido. Otros extraen bien las consecuencias de las cosas en las que hay muchos principios. Por ejemplo, unos comprenden bien los efectos del agua, en lo cual hay, pocos principios; pero las consecuencias de esto son tan sutiles, que slo una extremada rectitud puede alcanzarlas. Y stos no seran quizs por ello grandes gemetras, porque la geometra comprende gran nmero de principios, y una naturaleza de espritu puede ser tal que pueda penetrar hasta el fondo en pocos principios, y que no pueda penetrar nada en las cosas en las que hay muchos principios. Por lo tanto, hay dos clases de espritus: una penetra aguda y profundamente en las consecuencias de los principios, y es el espritu de exactitud b; la otra comprende un gran nmero de principios sin confundirlos, y es el espritu de geometra. Lo uno es fuerza y rectitud de espritu, lo otro es amplitud de espritu. Ahora bien lo uno puede existir sin lo otro, ya que el espritu puede ser fuerte y estrecho, y puede ser tambin amplio y dbil.

70

PENSAMIENTOS

229)

3

Quienes estn acostumbrados a juzgar de acuerdo con el sentir nada comprenden de las cosas de razonamiento, pues pretenden de entrada penetrar con una sola mirada y no estn acostumbrados a buscar los principios. Los otros, por el contrario, que estn acostumbrados a razonar mediante principios, nada comprenden de las cosas del sentir, pues buscan en ellas principios y no pueden ver con una sola mirada a. 169) 4

Geometra, sutileza. - La verdadera elocuencia se burla de la elocuencia, la verdadera moral se burla de la moral; es decir que la moral del juicio se burla de la moral del espritu: ella a carece de reglas. Pues juicio es aquel al que pertenece el sentir, mientras que las ciencias corresponden al espritu. La sutileza es la parte del juicio, la geometra es la parte del espritu. Burlarse de la filosofa, es en verdad filosofar b. 137) 5

Quienes juzgan una obra sin tener regla son, con respecto a los otros, como quienes /no tienen/ a reloj en relacin con los otros. Uno dice: "Hace dos horas"; el otro dice: "Slo hace tres cuartos de hora". Miro mi reloj, y le digo al uno:71

PASCAL

"Os aburrais"; y al otro: "El tiempo no se os vuelve largo"; pues ha pasado una hora y media, y yo me burlo de los que dicen que el tiempo se me hace largo a m y que yo lo calculo caprichosamente: no saben que yo juzgo de acuerdo con mi reloj b. 51) 6

El espritu se deteriora del mismo modo como se deteriora el sentir. El espritu y el sentir se forman mediante las conversaciones. El espritu y el sentir se deterioran a causa de las conversaciones a. De este modo, las buenas o las malas lo forman o lo deterioran. Importa mucho, pues, saber elegir bien, para formarlo y no deteriorarlo; y no se puede llevar a cabo tal eleccin si no se lo tiene ya formado y no deteriorado. As, esto constituye un crculo, y bienaventurados son los que salen de l. 213) 7

A medida que se tiene ms espritu a, se encuentra mayor nmero de personas originales b. Las personas vulgares no encuentran diferencia entre los hombres c. 273) 8

72

PENSAMIENTOS

Muchas personas escuchan el sermn como si escucharan vsperas. 401) 9

Cuando se quiere reprender tilmente y mostrarle a otro que se equivoca, hay que observar el punto de vista desde el cual encara el asunto, pues ste generalmente es verdadero desde ese punto de vista, y confesarle esta verdad, pero descubrirle tambin el punto de vista desde el cual el asunto es falso. Queda contento con esto, pues se da cuenta de que no se equivocaba y de que le faltaba solamente ver desde todos los puntos de vista. En efecto, no nos molestamos si no lo vemos todo, pero no queremos haber /nos/ engaado: quizs esto provenga de que, naturalmente, el hombre no puede verlo todo, y de que, naturalmente, no puede equivocarse desde su punto de vista a. As, por ejemplo, las aprehensiones de los sentidos son siempre verdaderas. 201') 10

Generalmente nos persuaden mejor las razones que nosotros mismos hemos encontrado que las que se les han ocurrido a los otros. Copia 396) II

73

PASCAL

A Todas las grandes diversiones son peligrosas para la vida cristiana, pero entre todas las que el mundo ha inventado la ms temible es el teatro. Es una representacin tan natural y delicada de las pasiones, que las conmueve y las suscita en nuestro corazn, ante todo la pasin del amor; principalmente cuando se /lo/ representa muy casto y honesto. En efecto, cuanto ms inocente parece a las almas inocentes, tanto ms ellas son capaces de sentirlo: su violencia complace nuestro amor propio, que enseguida desea causar los mismos efectos que ve tan bien representados. Al mismo tiempo, nos hacemos una conciencia basada sobre la honestidad de los sentimientos que all se ven, los cuales quitan el temor de las almas puras: ellas se imaginan que amar con un amor que les parece tan prudente no es ir contra la pureza. De este modo, dejamos el teatro con el corazn tan lleno de todas las bellezas y de todas las dulzuras del amor, y con el alma y el espritu tan persuadidos de su inocencia, que estamos bien preparados para recibir sus primeras impresiones o, ms an, para buscar la ocasin de hacerlas nacer en algn otro corazn, y recibir as los mismos placeres y los mismos sacrificios que hemos visto tan bien pintados en el teatro. 123) 12 Scaramuccia, que slo piensa en una cosa.

74

PENSAMIENTOS

El doctor, que sigue hablando un cuarto de hora despus de haberlo dicho todo, tan grande es su deseo de decir a. 441) 13

Nos gusta ver el error, la pasin de Cleobulina, porque ella no la conoce. Nos disgustara, si ella no estuviera equivocada a. 420) 14

Cuando una elocucin expresa con naturalidad una pasin o un efecto psquico, encontramos en nosotros mismos la verdad de lo que escuchamos. No sabamos que la contuviramos, de modo que esto nos incita a amar al que nos lo hace sentir: pues no nos ha mostrado lo suyo, sino lo nuestro. Este beneficio nos lo torna digno de amor; adems, la comunidad intelectual que con l tenemos inclina necesariamente el corazn a amarlo. 130) 15

Elocuencia que persuade por dulzura, no por imperio; como tirano, no como rey a. Apndice al fragmento 15 b. La elocuencia es un arte de decir las cosas de manera que: 1 aquellos a los que se habla puedan escucharlas sin pena y con placer; 2 que se sientan interesados en esas cosas,75

PASCAL

de modo que el amor propio los lleve ms gustosamente a reflexionar acerca de ellas. Consiste, por lo tanto, en una correspondencia que se trata de establecer entre el espritu y el corazn de las personas a las que se habla (por un lado), y (por el otro) los pensamientos y las expresiones que se emplean. Esto supone un estudio previo del corazn del hombre para conocer todos sus mecanismos y resortes y para encontrar luego las adecuadas proporciones del discurso que se quiere engarzar. Hay que ponerse en el lugar de los que nos deben escuchar y ensayar en nuestro propio corazn la forma de nuestro discurso, para comprobar si el uno se corresponde con el otro y si podemos estar seguros de que el oyente se siente como obligado a dejarse convencer. Hay que limitarse, en lo posible, a la simple naturalidad; no agrandar lo que es pequeo ni empequeecer lo que es grande. No basta que algo sea hermoso; es necesario que convenga al tema, que nada en ello sobre ni falte.

439)

17

Los ros son caminos que marchan y que llevan adonde se quiere ir. a. 443') 18

76

PENSAMIENTOS

Cuando se desconoce la verdad acerca de algo, conviene que haya un error compartido que fije el espritu de los hombres, como por ejemplo la luna, a la que se le atribuyen la sucesin de las estaciones, el progreso de las enfermedades, etc.; pues la enfermedad principal del hombre es la curiosidad inquieta por las cosas que no puede saber, y menos nocivo le resulta estar en el error que en esa curiosidad intil. 444) La manera de escribir de Epicteto, de Montaigne y de Salomn de Tultie es la de mayor utilidad, la que mejor se insina, la que permanece ms tiempo en la memoria y la que ms se impone en las citas, porque la componen totalmente pensamientos surgidos de las conversaciones ordinarias de la vida. As, por ejemplo, cuando se habla del error comn que corre por el mundo, de que la luna es causa de todo, no se dejar nunca de decir que Salomn de Tultie dice que, si se desconoce la verdad acerca de una cosa, conviene que haya un error compartido, etc., que sea el pensamiento del otro lado a. Edicin de 1678, Cap. XXXI) 19

Lo ltimo que se encuentra al componer una obra, es saber qu se debe poner primero. 433) 20

Orden. - Por qu me resolver a dividir mi moral en cuatro y no en seis? Por qu establecer la virtud en cuatro,77

PASCAL

y no en dos o en uno? Por qu en abstine et sustine a, y no en "seguir la naturaleza" b o en llevar a cabo sus asuntos particulares sin injusticia", como Platn c, o de otra manera? -Pero, diris, as todo est encerrado en una palabra.S, pero eso es intil si no se lo explica, y, apenas queda explicado, desde que se abre ese precepto que contiene todos los otros, stos salen en la misma confusin que querais evitar. De tal modo, cuando estn todos encerrados en uno, estn escondidos y son intiles, como en un cofre, y slo aparecen en su confusin originaria, natural. La naturaleza los ha establecido a todos sin encerrarlos unos en otros. 427) 21

La naturaleza ha puesto todas sus verdades cada una en s misma; nuestro arte las encierra unas en otras; pero esto no es natural: cada una ocupa su lugar. 431) 22

No se diga que yo no he dicho nada nuevo: la disposicin de los temas es nueva; cuando se juega a la pelota, ambos jugadores usan la misma pelota, pero uno la coloca mejor que el otro. Sera lo mismo si me dijeran que he empleado palabras antiguas. Como si los mismos pensamientos no formaran otra exposicin, debido a una disposicin diferente, del

78

PENSAMIENTOS

mismo modo como las mismas palabras forman otros pensamientos debido a su diferente disposicin!

225)

23 Las palabras arregladas de manera distinta generan un sentido distinto a, y los sentidos, arreglados de manera distinta, producen efectos diferentes b.

429)

24

Lenguaje. - No hay que desviar el espritu hacia otro objeto de atencin, sino para que descanse, y en el momento en que esto sea oportuno: descansarlo cuando es necesario, y no de otra manera; pues quien descansa inoportunamente, cansa; y quien cansa inoportunamente, descansa, pues se deja entonces todo. De tal modo la malicia de la concupiscencia se complace en hacer todo lo contrario de lo que quiere conseguir de nosotros sin procurarnos placer, que es la moneda por la cual damos todo lo que de nosotros se quiere. 402) 25

Elocuencia. - Es necesario combinar lo agradable y lo real, pero es necesario tambin que lo agradable se extraiga de lo real.

79

PASCAL

142)

26

La elocuencia es una pintura del pensamiento; por ello, quienes, despus de haber pintado, todava siguen agregando, en lugar de un retrato hacen un cuadro. a. 127) 27

Miscelnea, lenguaje. - Quienes hacen anttesis forzando las palabras se parecen a los que hacen falsas ventanas para la simetra: su regla no es hablar con precisin, sino hacer figuras precisas a. 125) 28

Simetra, en lo que se ve de una sola ojeada, basada sobre el hecho de que no hay razn para proceder de otro modo; y basada tambin sobre la figura del hombre, de lo cual resulta que slo se busca la simetra en ancho, no en alto ni en profundidad a. 427) 29

Cuando encontramos un estilo que tiene naturalidad nos quedamos asombrados y extasiados porque esperbamos encontrar un autor, y vemos a un hombre. En cambio, los que tienen bueno el gusto y, al ver un libro, creen encontrar a un hombre, se quedan sorprendidos de encontrar un autor:80

PENSAMIENTOS

Plus Poetice quam humane locutus es a. Aqullos honran a la naturaleza, porque le ensean que ella puede hablar de todo, hasta de teologa. 12) 30 Slo consultamos el odo porque nos falta el corazn. La regla es el buen-trato-mundano a. Bellezas de omisin, de juicio.

439)

31

Todas las falsas bellezas que criticamos en Cicern tienen admiradores, y numerosos a. 127) 32

Hay un cierto modelo de agrado y de belleza que consiste en una cierta relacin entre nuestra naturaleza, dbil o fuerte, tal como es, y la cosa que nos gusta. Todo lo que est formado de acuerdo con este modelo nos agrada: sea casa, cancin, discurso, verso, prosa, mujer, pjaros, ros, rboles, cuartos, vestidos, etc. Todo lo que no est hecho de acuerdo con este modelo disgusta a los que tienen bueno el gusto a.81

PASCAL

Y del mismo modo como hay una relacin perfecta entre una cancin y una casa hechas de acuerdo con el modelo bueno, porque ellas se parecen a ese modelo nico aunque cada una segn su clase, hay tambin una relacin perfecta entre las cosas hechas de acuerdo con el modelo malo. Esto no se debe a que el modelo malo sea nico, pues son infinitos; pero cada mal soneto, por ejemplo, no importa hecho sobre qu modelo falso, se parece perfectamente a una mujer vestida de acuerdo con ese mismo modelo. Para comprender cun ridculo puede ser un soneto falso, nada mejor que considerar su naturaleza y su modelo, e imaginarse luego una mujer o una casa hecha de acuerdo con tal modelo. 129') 33

Belleza potica. - Del mismo modo como decimos belleza potica, deberamos decir tambin belleza geomtrica y belleza medicinal; pero no lo decimos: esto se debe a que sabemos bien cul es el objeto de la geometra, y que consiste en pruebas, y cul es el objeto de la medicina, y que consiste en curar; pero no sabemos en qu consiste el agrado, que es el objeto de la poesa. No sabemos qu es ese modelo natural que se debe imitar; y, a falta de tal conocimiento, hemos inventado ciertos trminos raros: "siglo de oro, maravilla de nuestros das, fatal etc.; y llamamos a esta jerga belleza potica a. Pero quien imagine a una mujer de acuerdo con tal modelo, que consiste en decir cosas pequeas con grandes pala82

PENSAMIENTOS

bras, ver a una linda seorita muy llena de espejos y de cadenas, y se reir de ella porque se sabe mejor en qu consiste lo que agrada en una mujer que lo que agrada en los versos. Pero los que no lo supieran, la admiraran en tal atuendo, y en muchas aldeas la tendran por reina. Razn por la cual llamamos reinas de aldeas a los sonetos hechos de acuerdo con ese modelo b. 129) 34

Nadie en el mundo es considerado perito en versos si/no/ ha colgado muestra de poeta, de matemtico, etc. Pero las personas universales no quieren tales muestras y casi no establecen diferencia entre la profesin de poeta y la de bordador. Las personas universales no son llamadas ni poetas ni gemetras, etc., pero son todo esto, y adems jueces de todos sos. No se las sospecha. Hablarn de lo que se hablaba cuando ellas entraron. No se advierte en ellas una cualidad en desmedro de otra, salvo la necesidad de utilizarla; pero entonces las recordamos, porque forma parte tambin del carcter de esas personas que no se diga de ellas que hablan bien, cuando no se trata del lenguaje, sino que se diga de ellas que hablan bien, cuando del lenguaje se trata. As pues, se concede a una persona un falso elogio cuando se dice de ella, en el momento que entra, que es muy hbil en poesa, y es mala seal cuando no se recurre a un hombre si se trata de juzgar algunos versos a.83

PASCAL

440')

35

Es necesario que no se pueda /decir/: "es matemtico", ni "predicador", ni "elocuente", sino "es un hombre de mundo" a. Slo esta cualidad me gusta. Mal signo cuando, al ver a un hombre, recordamos su libro; me gustara que slo se advirtieran las