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Pedagogía de la cooperación: una opción educativa centrada en el trabajo
en equipo cooperativo y la zona de desarrollo próximo entre iguales.
Por: Carla Yeneris Caballero M. Maestría Virtual en Gestión del Desarrollo Comunitario
Curso: Procesamiento de datos cualitativos y cuantitativos Mayo, 2013
Introducción Este ensayo se basa en el análisis de 35 imágenes recuperadas de distintos sitios de Internet, en su mayoría compartidas por el facebook de ABACOenRed (www.facebook.com/ABACOenRed) y es parte de un ejercicio orientado en en el curso de Procesamiento de Datos de la I Maestría Virtual en Gestión del Desarrollo Comunitario 2012-2014 (UNAN/ FAREM Estelí – ABACOenRed). La selección de las imágenes fue intencionada y se basó en el método de comparación constante propuesta en la teoría fundamentada (De la torre, G. et al., 2006) y de acuerdo a las categorías y sub-categorías que definí en función del tema: “Pedagogía de la Cooperación”. Una vez seleccionadas las imágenes las organicé en grupos de tres de acuerdo a su similitud y relación con la
categoría o sub-categoría definida. Para el grupito de imágenes elaboré una ficha que incluía el código,
categoría, sub-categoría, descripción de la imagen y una interpretación del significado (memos) que me
transmitían dichas imágenes. Posteriormente organicé los memos de acuerdo a las categorías y procedí a la
exposición de las ideas que comparto en este escrito.
En este ensayo desarrollo tres aspectos interrelacionados entre sí. El primero es sobre la Pedagogía de la cooperación enfocándome, principalmente, en el concepto de cooperación como esencia humana y como camino para desarrollar acciones educativas. En un segundo momento abordo el tema de la cooperación como acción pedagógica relevando la importancia de orientar el proceso educativo en función de “cooperar” en vez de “competir” ya que una actitud cooperativa potencia y desarrolla el trabajo en equipo cooperativo. Al final hablo de la categoría pedagógica de Zona de Desarrollo Próximo (ZDP)1 y más específicamente la ZDP entre iguales (ZDP=) que es la que se establece entre pares o iguales; es decir, aquella en que las/os estudiantes se ven como las/os actoras/es principales en el contexto y proceso de cooperación y donde todas/os y cada una/o de ellas/os son responsables y beneficiarias/os en la tarea de llegar a umbrales superiores de aprendizaje. Para desarrollar la ZDP= es importante la valoración y el disfrute de la diversidad, la heterogeneidad y la intersubjetividad de todas/os y cada una/o de las/os miembros de los equipos de trabajo cooperativo. Al final comparto algunas reflexiones conclusivas sobre el tema que ha guiado este ensayo.
1 La Zona de Desarrollo Próximo (ZDP) es una categoría pedagógica desarrollada por el psicólogo y pedagogo ruso Lev Vigotkiy (1896-1934) definida como la distancia entre el
nivel real de desarrollo, determinado por la capacidad de resolver independientemente un problema y el nivel de desarrollo potencial, determinado a través de la resolución
de problemas bajo la guía de un adulto o tutor. Cuando esta asistencia al desarrollo del aprendizaje se realiza entre pares o iguales es lo que Cristóbal Suárez denomina como
la Zona de Desarrollo Próximo entre Iguales (ZDP=).
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Fuente http://qmdices.com/para-reflexionar/si-
quieres-llegar-rapido-camina-solo/ Mayo, 2013
1. Pedagogía de la cooperación: un reto a construir cooperando
Cuando hablamos de este tema nos enfocamos en la cooperación como esencia
humana y como camino para desarrollar acciones educativas efectivas.
Desde las culturas de los pueblos originarios es notable encontrarnos con frases
centradas en la unidad y la cooperación como opción de comunidad. En la cultura
africana así como en la cultura pre-colombina latinoamericana se rescatan frases que
expresan una declaración humana y esencial: la necesidad de la cooperación.
Así, el saludo maya “IN LAK´ ECH”, que significa “yo soy otro tú”, todos somos uno
mismo, y se contesta: “HALA KEN”: “tú eres otro yo” (ver imagen 1) invita a reconocer al
otro(a) y comprender que nos complementamos en la temporalidad de nuestras
circunstancias, siendo una realidad fundamental e ineludible.
La expresión aquí recoge la conciencia de ser iguales y que integramos un único
organismo: “los otros son parte mía y yo soy parte de ellos”. Para los Mayas, el reino
mineral, vegetal, animal y toda la materia del universo, “desde un átomo hasta una
galaxia, son seres vivos con conciencia evolutiva”. Al vivir en unidad, si eres feliz, yo
soy feliz y viceversa. Porque “yo soy tú” y “tú eres yo” y cualquier cosa que me haces a
mí, te la haces a ti. La cosmovisión expresada en el lenguaje, en tradiciones y en el
saludo reconoce al otro/a como nuestro yo, desprendiendo solidaridad, respeto, unión
y armonía2.
Por su parte, el proverbio congolés “las huellas de las personas que caminaron juntas
nunca se borran” (ver imagen 2) también son un recordatorio de lo vital de lo que somos
siendo y es una invitación a reconocer lo que cada una/o de nosotros/as ES en la
medida que SOMOS con otras/os (Nos-otras/os) en la diversidad y universalidad, para
buscar armonía desde lo personal y colectivo en equilibrio, equidad y unidad.
Si seguimos recorriendo la historia nos damos cuenta que personas notables como el
francés Montesquieu (imagen 4) y el propio Albert Einstein (imagen 3) defendieron el
concepto de cooperación y promulgaron el cooperativismo como un movimiento
emergente para alcanzar justicia social. Albert Einstein, gustaba decir “todos los días
me repito que lo que sé es producto de la cooperación”3 que es coherente con la idea
de que la Pedagogía de la Cooperación posee los atributos doctrinales, conceptuales,
metodológicos y el criterio de la producción de aprendizajes significativos de manera
2 Reflexión encontrada en http://www.taringa.net/posts/solidaridad/15309332/Yo-soy-otro-tu---Tu-eres-otro-yo.html
3 En http://www.ellibrepensador.com/2010/09/22/enfoques-cooperativos-hoy-pedagogia-de-la-cooperacion-un-camino-humanizante/
Imagen 1- Fuente: http://twicsy.com/i/Jfce3b, Mayo, 2013
Imagen 2- Fuente https://twitter.com/MonicaGasteiz/status/202158921702576128, Mayo, 2013
Imagen 3. Fuente: http://www.ellibrepensador.com/2010/09/22/enfoques-cooperativos-hoy-pedagogia-de-la-cooperacion-un-camino-humanizante/ Mayo, 2013
Imagen 5- Fuente http://qmdices.com/para-reflexionar/si-quieres-llegar-rapido-camina-solo/ Mayo, 2013
Imagen 4- Fuentehttp://www.facebook.com/photo.php?fbid=568955163137474&set=
a.273583216008005.74496.273543599345300&type=1&theater Mayo, 2013
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teórica y práctica que podrá construir a ese hombre y mujer cooperativo hacedores
del camino humanizante en donde todas y todos tengamos una participación activa
(imagen 5).
Y es que hablar de cooperación no es algo nuevo; como nos dice Cristóbal Suárez “la
escuela no requiere inventar la cooperación, lo que necesita es asumirla – e implicarla
en los modelos pedagógicos- como condición social de aprendizaje” (2008: 15). Para
este autor debemos ser conscientes que la cooperación, como estrategia de
desarrollo humano, no requiere mucha presentación, es tan antigua como la
humanidad que la ha validado en innumerables ocasiones para subsistir, progresar y
sobre todo, configurar lo propiamente humano con otros, la cultura.
Una de las imágenes que frecuentemente usamos en nuestras reflexiones como
ABAOCenRed es la que tiene una secuencia de dos burritos que intentan comer su
comida (ver imagen 6). En las tres primeras escenas vemos cómo cada burrito hala para
su propio lado con la idea de comer su comida a toda costa hasta que por fin los dos
se cansan; luego de reflexionar en cómo hacer para alcanzar su objetivo deciden que
los dos juntos primero irán a uno de los lugares para comer, cuando la comida se
acaba aquí van al otro lugar, siempre juntos. Si esta ilustración la vinculamos a los
procesos educativos que acompañamos nos damos cuenta que siempre es mejor
trabajar juntos (cooperar) que buscar nuestro propio objetivo personal ya que si
competimos al menos uno saldrá perdiendo pero si cooperamos igual los dos
ganamos (imagen 6 y 7).
Herman Van de Velde (2012:3) en su artículo “Cooperar – ¡un acto esencialmente
educativo!” rescata el pensar de Botello (2004,1) cuando considera el concepto de
cooperación como manifestación actitudinal de solidaridad, hacia la solución de
necesidades o problemas comunes. Esta solidaridad, como base de la cooperación,
tiene que tener una relación de horizontalidad de ambas vías lo que implica un
profundo respeto mutuo (imagen 8).
Para Van de Velde (2012), la cooperación, sea como estrategia educativa, como
expresión de economía solidaria o en el contexto de la cooperación (local, nacional,
internacional) debe considerar los siguientes aspectos, válidos en cada contexto
particular:
el ejercicio consciente y permanente de solidaridad (responsabilidad y equidad)
el ejercicio del diálogo sincero, entre pares, entre ‘iguales’ sin pre-condicionamientos
y sin hipocresía (imagen 9).
la identificación con un interés general, la que permite la integración social, la
integración entre las partes involucradas, entre las y los actoras/es relacionadas/os en
función de un proyecto político-ideológico (participación ciudadana y compromiso
comunitario)
Imagen 8- Fuente http://www.cosas-que-pasan.com/la-caridad-es-
humillante-porque-se-ejerce-verticalmente-y-desde-arriba-la-solidaridad-es-horizontal-e-implica-respeto-mutuo-eduardo-galeano/ Mayo, 2013
Imagen 6- Fuente http://www.cuantarazon.com/747533/cooperacion Mayo, 2013
Imagen 7- Fuente: http://www.cosasparatumuro.com/competir_o_cooperar-fotos.html Mayo, 2013
Imagen 10- Fuente: Imágenes de archivo – ABACOenRed Mayo, 2013
Imagen 9- Fuente: Imágenes de archivo – ABACOenRed Mayo, 2013
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el respeto profundo por el aporte de cada uno de los actores involucrados. Que como
también plantea Erich Fromm es tener “la capacidad de ver a una persona tal cual
es… preocuparse porque la otra persona crezca y se desarrolle tal como es…” (imagen
10)
identificación de una coincidencia en intereses, sobre la base de valores éticos
la consideración de la diversidad como una oportunidad para el aprendizaje y el
desarrollo, resultando en un ejercicio activo y constructivo de interculturalidad
el sentimiento de necesidad de aprendizaje y desarrollo desde cada uno de los
actores involucrados, sin excepción (apoyo mutuo).
Efectivamente, la cooperación, desde el contexto que sea, necesariamente y en
esencia, es y será un acto educativo, una acción político-pedagógica, de ahí que
hablemos de la cooperación como acción pedagógica en donde se evitan los actos de
competir y se potencian los actos para cooperar, en el próximo subtítulo
reflexionamos por qué.
2. La cooperación como acción pedagógica
Cada vez que se habla de este tema sobresaltan muchas justificaciones técnicas de
por qué seguimos utilizando la palabra ´competir´ para referirse a desarrollar
habilidades, destrezas y capacidades que permitan a las/os estudiantes desarrollar su
verdadero potencial de aprendizaje. Sin embargo, también es cierto que ´competir´
transmite la idea de que siempre una persona (la más capaz) será la ganadora y el
resto (los menos capaces o incapaces) estarán en lugares secundarios (ver imagen 11);
de que la persona con más luz para poder sobresalir tendría siempre que opacar o no
dejar que brille la luz de las otras personas (imagen 12); es realmente una relación de
poder-sobre entre unas personas y otras.
Las imágenes y mensajes identificados para este ensayo que se relacionan con
´competir´ muestran a personas tristes y decepcionadas con sus resultados (imagen 11)
y más bien sugieren que si existiera la opción de ´competir´ debería ser contra una/o
misma/o para superar nuestros propios límites y convertirnos en la mejor versión de
nosotras/os mismas/os (imágenes 13 y 14).
En vez de promover “competir” me sumo a la invitación de Piotr Kropotkin quien dijo:
“¡practicad la ayuda mutua! Ya que según él, es el medio más justo para garantizar la
seguridad máximo y la mejor garantía para la existencia y el progreso físico,
intelectual y moral (ver imagen 15). Considero que competir nos cansa, nos debilita, nos
quita energías positivas y no nos hace aprovechar todo el potencial que tenemos si
trabajamos en equipo.
Imagen 15- Fuente http://www.taringa.net/mi/pin/%23Kropotkin/ Mayo, 2013
Imagen 14- Fuente http://desmotivaciones.es/5368772/Aprendi-a-no-
competir Mayo, 2013
Imagen 12 - Fuente: http:// urielarte.wordpress.com/2013/02/16/no-hay-que-apagar-la-luz-del-otro-para-lograr-que-brille-la-nuestra, Mayo, 2013
Imagen 11- Fuente: http://www.desmotivar.com/desmotivaciones/7445_lo_importante_es_c
ompetir Mayo, 2013
Imagen 13- Fuente: http://elcandildelospensamientos.com/2012/07/12/no-compitas-con-
nadie/ Mayo, 2013
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Caminar juntas/os por el mismo camino es cooperar y lo debemos hacer de forma genuina, verdadera… pero
¿Qué significa cooperar genuinamente? y más importante aún ¿Qué se requiere para que podamos cooperar de
forma genuina?
Para contestar esta pregunta retomo la propuesta de ABACOenRed cuando describe 5 pilares y 2 ambientes
necesarios para una cooperación genuina.
En un artículo reciente de Herman Van de Velde (2013), él apunta
que la cooperación genuina se convierte en un sueño a concretar
para una Educación Alternativa, a partir del mismo momento que
identificamos y reconocemos su carácter esencialmente humano, y
logramos caracterizarla como, también ‘en esencia’ un acto
educativo, una acción político-pedagógica, sustentada por 5 pilares (imagen 16):
1. El arte de escuchar (solidaridad, diversidad, respeto,
interculturalidad, diálogo, coincidencia,...) (apertura)
2. La habilidad de interpretar (contextualizar, respeto a la
diversidad particular según el contexto, el aporte desde
abajo,…) (lectura)
3. La voluntad de compartir (solidaridad, respeto, diálogo,
integración, interculturalidad, necesidad de aprendizaje y
desarrollo,...) (ternura)
4. La decisión de compromiso (solidaridad, integración,
interculturalidad, (co-)responsabilidad...) (postura)
5. La visión de integración (coincidencia en intereses,
solidaridad, responsabilidad,...) (contextura).
5 pilares que se articulan entre sí gracias a un ambiente de
CONFIANZA y la capacidad de (AUTO-) CRÍTICA constructiva.
Además, para poder cooperar de forma genuina es elemental basarse en relaciones de respeto ya que
considero que ´cooperar´ no es un mero regateo en el que el éxito de una persona se logra a expensas o gracias
a la exclusión del éxito de otras.
El objetivo constante de la cooperación es el beneficio mutuo en las interrelaciones humanas; se fundamenta
en el principio del respeto mutuo. El valor, la consideración, el cuidado y la participación proporcionan un
fundamento a partir del cual puede desarrollarse el proceso de la cooperación genuina para lo cual el trabajo
en equipo cooperativo es fundamental.
¿Y a qué nos referimos cuando hablamos del trabajo en equipo cooperativo?
Imagen 16- Fuente: Archivo ABACOenRed compartida en www.facebook.com/ABACOenRed. mayo, 2013
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2.1. ¿Qué implica el trabajo en equipo cooperativo?
El término francés equipe es de donde procede el concepto castellano de equipo que se
define como un grupo de seres humanos que se reúnen y trabajan en conjunto para
alcanzar una meta en común. Para esto, el equipo mantiene una cierta organización que
le permita conseguir sus objetivos4.
Sin embargo, no todo grupo conforma un equipo, así como no todo tipo de equipo es de
tipo cooperativo. ¿Por qué afirmo esto? Porque la sola organización en grupo no garantiza
que las personas trabajen juntas y que además, lo hagan de forma cooperativa.
La esencia del trabajo en equipo cooperativo no es solamente la unión de varias personas,
aunque sin duda cada persona del equipo de importante (imagen 17), sino más bien la
cohesión que se consigue a partir del compromiso, la solidaridad, la equidad, la
diversidad, la reciprocidad en las relaciones socio-afectivas donde cada una/o de sus
integrantes no busque sus intereses u objetivos personales sino el objetivo del equipo;
esto implica evitar a toda costa la individualidad y buscar los objetivos colectivos y el
desempeño armónico de su labor (imagen 18).
Para que el trabajo en equipo cooperativo sea efectivo es importante que cada quien
cumpla su papel, la interdependencia positiva y el apoyo mutuo. Las imágenes 19 y 20
nos recuerdan la importancia del equilibrio y la sincronía en las relaciones dentro de un
equipo y donde cada una/o, trabajando en perfecta armonía, formamos una pieza
armónica, para lograr un todo bien organizado, distribuido y sincronizado.
Y aunque aprender cooperando es algo de naturaleza humana, también en el reino
animal nos encontramos muchos ejemplos de animales que trabajan como si fueran un
equipo y que nos transmiten muchas lecciones significativas; por ejemplo los gansos
(imagen 21) nos enseñan el valor de la solidaridad y el sentido de comunidad. Diríamos que
ellos comparten la misma dirección y el sentido de grupo. Observar el vuelo y
comportamiento de los gansos, nos revela la importancia de trabajar en equipo y es que
trabajar juntas/os resulta provechoso no sólo para una persona sino para todo el equipo
involucrado. Nos traerá más satisfacción y nos hará más sociables, también nos enseñará
a respetar las ideas de los demás y ayudar a las/os compañeras/os si es que necesitan
nuestra ayuda.
Ahora la pregunta ¿Cómo desarrollar el trabajo en equipo de forma cooperativa?
4 http://definicion.de/equipo/
Imagen 19- Fuente: Archivo ABACOenRed compartida en www.facebook.com/ABACOenRed Mayo, 2013
Imagen 17- Fuente http://www.facebook.com/FrasesDeBaloncesto?group_id=0 Mayo, 2013
Imagen 18- Fuente http://www.grupodistri.com/Universidad%20Grupo%20Distri/ Mayo, 2013
Imagen 21- Fuente: http://industrialopusnova.blogspot.com/2011/10/los-gansos-la-importancia-de-trabajar.html, Mayo, 2013
Imagen 20- Fuente: Imágenes de archivo – ABACOenRed Mayo, 2013
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Según lo escrito en el blog sobre “Liderazgo y dirección de personas” 5 existen al menos 5
principios básicos para que el trabajo en equipo cooperativo funcione:
1) Todo el equipo debe conocer y aceptar los objetivos: De esta forma cada quien puede
encontrar nuevas formas de alcanzarlos y no estar atados a cierta manera de hacer las cosas.
Además, todo el equipo debe saber que es su responsabilidad como grupo alcanzar estos objetivos
y no de una sola persona.
2) Todo integrante del equipo debe tener claro cuál es su responsabilidad y el trabajo que le fue
asignado. Si necesitas la colaboración de alguien para terminar una tarea ya sea su opinión o
ayuda en otro sentido, la debes pedir.
3) Todos deben cooperar: cada miembro del equipo debe estar comprometido con lo que se está
haciendo en conjunto. El liderazgo no es de uno solo, el liderazgo es compartido. En un equipo
todos deben estar en la capacidad de relevar a alguien si esta persona no puede cumplir por algún
motivo, en un equipo todos deben estar dispuestos a dar y recibir ayuda.
4) Información compartida: un equipo debe tener buena comunicación, aprovecha todo lo que
ofrecen las redes sociales, usa herramientas como Twitter, Facebook, etc. para mantenerse en
contacto constantemente. Además de asegurarse de que exista un buen ambiente de trabajo que
fomente la participación de todos los integrantes y la libre expresión de opiniones sin burlas y
prejuicios.
5) Recompensa las cosas que quieres en el equipo. Como bien dijo Yoriento “si quieres que
colabore más demuéstralo valorando mi colaboración”. Es muy importante la crítica y la (auto)
crítica de forma constructiva, pero no es suficiente con decir “lo hiciste mal” sino siempre explicar
los porqués y sugerir alternativas para hacerlo mejor. Esto ayudará a que los miembros del equipo
permanezcan motivados y tengan la oportunidad de crecer.
Sin duda estos principios se reflejan en las actitudes y mensajes compartidos en las
imágenes 22 a 24.
Además, en el trabajo en se requiere desarrollar el valor de la relación entre iguales, lo
cual descarta la idea de que para aprender es indispensable seguir instrucciones de
alguien necesariamente considerado como “más sabio” (Van de Velde, 2012: 4). Tal
como muestra la imagen 25, la comprensión y el respeto hacia el otro/a es fundamental.
Comprender la importancia del trabajo en equipo cooperativo nos lleva a entender mejor
el proceso de aprendizaje inmerso en una red de relaciones sociales, y
consustancialmente al desarrollo cultural que es en esencia lo que Lev Vigotsky desarrolló
en su teoría socio-cultural de la cual hablaremos en el próximo apartado.
5 http://loquelediga.com/5-principios-basicos-del-trabajo-en-equipo/ revisado en mayo de 2013.
Imágenes 22.,23 y 24 Fuente: Banco de Imágenes de
ABACOenRed. Mayo, 2013
Imagen 25- Fuente http://necesitodetodos.org/2012/05/comprension-y-respeto/ Mayo, 2013
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3. La Zona de Desarrollo Próximo entre Iguales (ZDP=)
El psicólogo ruso Lev Vigotsky (1896-1934) es el precursor de la teoría socio-histórica
(también llamada teoría socio-cultural) en la cual el aprendizaje es concebido como
producto de procesos internos socialmente situados, interactivos, mediados y
distribuidos (Suárez, 2008: 20).
Al hablar del aprendizaje, Cristóbal Suárez en su libro sobre la cooperación como
condición social de aprendizaje (2008) dice que éste es producto de la construcción social
y que se efectúa por la reestructuración subjetiva (internalización) a partir de los
instrumentos de mediación cultural en condiciones de interacción social
(intersubjetividad) de forma tal que las relaciones sociales, culturales e históricas son
fundamentales en el proceso de aprendizaje.
En este proceso de mediación se toma en cuenta la categoría conceptual de la Zona de
Desarrollo Próximo (ZDP) como herramienta de percepción pedagógica que brinda la
posibilidad de entender la acción educativa como un proceso inmerso en las ventajas que
el contexto intersubjetivo otorga al desarrollo del aprendizaje (Suarez, 2008: 29). Según
Vigostkiy, la ZDP es la distancia entre el nivel real de desarrollo, determinado por la
capacidad de resolver independientemente un problema, y el nivel de desarrollo potencial,
determinado a través de la resolución de problemas bajo la guía de un adulto o el
colaboración con otro compañero más capaz (relación entre la intersubjetividad y la
intrasubjetividad).
Al hablar de la ZDP, Cristóbal Suárez (2008) observa dos tipos de asistencia para su
desarrollo: la guía o la cooperación. El primer caso en la relación entre estudiante y
docente/facilitador (imagen 29) y en segundo caso, la influencia de la cooperación entre
pares o iguales, es decir entre los/as mismos estudiantes (imagen 27).
La secuencia de imágenes 26 a 29 nos muestra estas interrelaciones entre iguales
visualizándose una “participación dinámica y recíproca de los que, estando en situaciones
semejantes de expectativa y nivel de aprendizaje, comparten y resuelven tareas de
aprendizaje en torno a una finalidad educativa planeada en conjunto” (Suárez, 2008: 29).
El papel del otro, par o igual- es la co-construcción no es de dirección sino de compromiso
compartido – mutuo- entre estudiantes sobre su aprendizaje. No se trata de guía, sino de
una experiencia recíproca como rasgo intencional.
En el caso de estas imágenes se identifica la relación y la interdependencia que se ejercen
mutuamente niños y niñas en el proceso de aprender, sea en contextos educativos
institucionalizados o en los otros, más espontáneos.
Imagen 27- Fuente: Banco de Imágenes de
ABACOenRed.Mayo, 2013
Imagen 28- Fuente: Banco de Imágenes de
ABACOenRed.Mayo, 2013
Imagen 29- Fuente: Banco de Imágenes de
ABACOenRed.Mayo, 2013
Imagen 26- Fuente: Banco de Imágenes de
ABACOenRed.Mayo, 2013
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Imagen 33- Fuente
http://perdonenquenomelevante.wordpress.com/2013/03/16/ven-a-mi-
lado-para-poder-caminar-juntos/ Mayo, 2013
Las imágenes seleccionadas para esta categoría comparten significados sobre los valores
que se necesitan para desarrollar procesos educativos entre iguales, entre los que se
destaca el liderazgo y las responsabilidades compartidas. Se expresa el valor de la
solidaridad, la positividad, la comunicación asertiva, el apoyo mutuo y la cooperación
entre pares o iguales.
Vemos pues que, en la ZDP entre iguales, la cooperación representa un ámbito de
intersubjetividad más allá de la guía, es decir, como interacción cooperativa entre iguales.
En esta región de interacción, los estudiantes no son entes pasivos, sino interlocutores
que guían, regulan, ayudan, esclarecen, planifican, estimulan, participan, es decir, buscan
entenderse e imbricarse entre sí.
Y siendo tan importante desarrollar esta herramienta pedagógica ¿Qué podemos hacer
como facilitadores/as o docentes para incluirla en nuestros procesos educativos?
Si nos basamos en las imágenes seleccionadas y sus significados vinculantes con este
tema diría que es importante promover un ambiente de aprendizaje en donde
facilitadores/as y participantes reconozcan, valoren y disfruten la diversidad y la
intersubjetividad (imagen 30). La diversidad en cuanto a rasgos físicos, antecedentes,
cultura, ideas y la intersubjetividad para referirnos a los acuerdos, a significados
construidos de forma colectiva por las personas en sus interacciones sociales (imagen 31 y
32). Y como mencionado antes, también es importante reconocer el valor del
compañero/a alguien que camina a nuestro lado y con quien no es necesario competir
(imagen 33).
Lo anterior puede lograrse si se organiza el proceso educativo tomando en cuenta lo
sugerido por Van de Velde (2010:4) citando a Ebbens:
1. Interdependencia mutua positiva: tal que la cooperación tenga sentido (imagen
31).
2. ‘Rendición de cuentas’ a nivel personal: una responsabilidad personal. No es el
grupo, sino cada participante quien responde por lo aprendido.
3. Interacción directa: todas las personas involucradas deben disponer de
mecanismos de comunicación directa (imagen 34).
4. Habilidades sociales: cooperar se tiene que aprender y para esto se necesitan
habilidades sociales que también deben ser aprendidas (imagen 35).
5. Atención para el proceso grupal: no sólo el producto, sino también el proceso
debe ser tomado en cuenta, valorado y evaluado (imagen 35).
Se trata aquí de cinco conceptos inter-relacionados, representando componentes de una
cooperación de calidad. Existe un objetivo común, el cual sólo puede alcanzarse si cada
una y cada uno aporta, inter-actuando de manera constructiva y permanente con las y los
demás del grupo.
Imagen 34- http://necesitodetodos.org/2013/04/dime-y-olvidare/ Mayo, 2013
Imagen 30-Fuente: http://narau-2012.blogspot.com/2012/08/primer-
principio-interdependenciapositi_8.html, mayo 2013
Imagen 31-Fuente: Banco de Imágenes de
ABACOenRed.Mayo, 2013
Imagen 32- Fuente: Banco de Imágenes de
ABACOenRed.Mayo, 2013
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Por supuesto, para que la ‘ZDP entre iguales’ pueda desarrollarse no basta con dosificar adecuadamente las
tareas individuales en función del desarrollo real, o del grado de desarrollo previo al aprendizaje de una
capacidad; ante todo, será necesario asegurar que los estudiantes hayan comprendido y asuman su nueva
posición de negociación en la ZDP; esto es, los estudiantes deben verse como los actores principales en ese
contexto y proceso de cooperación, donde todos y cada uno de ellos son responsables y beneficiarios en la tarea
de llegar a umbrales superiores de aprendizaje para formar un equipo armónico y cooperativo (imagen 35).
Todo lo que hemos desarrollado supone un viaje común al aprendizaje de la mano del otro/a, desde su
experiencia a la suya, y viceversa. Por ello, la ZDP nos brinda una categoría ventajosa para la comprensión
prospectiva del desarrollo del aprendizaje, en este caso, como actividad cooperativa entre compañeros.
Distinguir la interacción entre iguales desde la posición añadida por la noción de ZDP entre iguales es adjudicar
el proceso educativo, nuevas oportunidades de aprendizaje a través de la interacción cooperativa.
Conclusión
Como hemos analizado a través de las ideas compartidas en este ensayo, la cooperación es esencia humana y como tal implica una relación educativa entre personas y como tal puede y debe considerarse como ´objeto’ de una pedagogía de cooperación.
En los procesos cooperativos es muy importante desarrollar el trabajo en equipos cooperativos y la ZDP entre
iguales que potencie el desarrollo personal y colectivo a partir de la interacción entre docentes y estudiantes;
desarrollando en éstos últimos la interdependencia mutua y positiva y las habilidades sociales necesarias para
desarrollar una sociedad justa y equitativa para todas y todos. Desarrollar la ZDP entre iguales permitirá que
las/os participantes en procesos educativos sean interlocutores que guían, regulan, ayudan, esclarecen,
planifican, estimulan, participan, es decir, buscan entenderse e imbricarse entre sí.
Construir procesos educativos basados en una pedagogía de la cooperación es un reto constante pero a su vez
necesario para que nuestras comunidades educativas sean inclusivas y crezcan en valores de equidad,
solidaridad, compromiso y respeto mutuo tan necesarios para construir ese otro-mundo-posible que soñamos.
11
Bibliografía
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