View
235
Download
0
Embed Size (px)
DESCRIPTION
Periódico Parroquial de la Parroquia Santa Beatriz de Silva de la Arquidiócesis de Monterrey, México.
Citation preview
Monterrey, N. L ., México MAyo de 2014 Año VIII No. 104
M uy queridos , Hermanos y Hermanas :
Las voces del mes de Mayo se están yendo. Hoy es el último día del mes dedicado a la Virgen María, Madre de Dios
y Madre nuestra y lo cerramos conmemorando el 50° aniversario de la coronación pontificia de la imagen de la Virgen del Roble y de su proclamación como Patrona principal de la Arquidiócesis de Monterrey.
Termina el mes en el que celebramos el Trabajo, a las Mamás, a los Maestros… sin contar otras celebraciones civiles y religiosas.
Muchos momentos de alegría y gozo hemos vivido en este, enmarcados todos en la alegría del tiempo de la Resurrección de nuestro Señor Jesucristo, que le da plenitud y sentido a nuestra
vida, a nuestros esfuerzos cotidianos, a los trabajos y empeños de cada día que Dios nos regala. Como todos sabemos, sigue Junio, y con sus propios afanes,
pasos, tristezas, gozos y alegrías, habremos de ir viviendo cada día del nuevo mes, sabiendo que no vamos solos, que el Padre providente nos acompaña, que el Hijo redentor nos alimenta y fortalece y el Espíritu Santo nos impulsa y guía.
Dios va siempre con nosotros y, por si fuera poco, nos ha bendecido, como bien sabemos, con el don de su santísima
Madre la Virgen María, quien nos acompaña al caminar, la Tesorera de las gracias y “con tan grande medianera, nada tema el pecador”.
Celebraremos el ocho de junio el domingo de PENTECOSTES, la conmemoración del momento en que después de una novena de días de oración, la primera de la Iglesia, el Espíritu Santo descendió sobre los Apóstoles y la Virgen María, para dar paso a
la manifestación de la Iglesia. Concedió en ese primer Pentecostés sus dones a los Apóstoles y
así, llenos del Espíritu Santo, se lanzaron con valor a predicar la Buena Nueva de la Salvación, el mensaje siempre nuevo de Jesús, el amor del Padre, la entrega redentora del Hijo, la santificación
del Espíritu de Amor, la
Iglesia comunidad nueva de los nuevos creyentes. Pidamos al Espíritu Santo
actualice su presencia en nosotros, a la manera de un nuevo Pentecostés,
en que los dones del Espíritu Santos nos hagan también a nosotros muy valientes
para vivir y compartir nuestra fe, seamos servidores unos de otros y demos frutos de
amabilidad, comprensión, servicialidad, paciencia, alegría, gozo y paz.
Que demos frutos como en la primera predicación evangélica, que nos esforcemos en ser auténticos y mejores discípulos misioneros de Jesús llevando a Cristo a todos nuestros hermanos
especialmente a los más alejados y necesitados. Tenemos para lograrlo dos grandes guías, la primera el Plan Diocesano de Pastoral Orgánica y el segundo el de nuestra Parroquia que inspirado en el primero quiere aterrizar para
nuestra realidad sus lineamientos. Este año 2014-2015, nuestro Objetivo Parroquial será:
“IMPULSAR LA FORMACION BIBLICA, LITURGICA Y SOCIAL DE LOS AGENTES DE PASTORAL, PARA SEGUIR REALIZANDO NUESTRA VIVENCIA Y COMPROMISO DE DISCIPULOS MISIONEROS Y SEGUIR RENOVANDO NUESTRA PARROQUIA, BUSCANDO LA INTEGRACION
Y ATENCION DE LOS MAS ALEJADOS Y NECESITADOS”.
Ponemos en manos del señor, por medio de Santa Beatriz de Silva, nuestros anhelos y este proyecto, para que EL lo lleve, con
nuestra cooperación, a feliz término.
¡Bendiciones!
P. Juan Carlos Castillo Ramírez Párroco.
Por su reportero Capsulito
1) ¡Hola mis apreciados lectores y lectoras! Empezamos
nuestro reporte mensual viendo como Mayo ha sido un mes muy lleno de actividades. Empezamos el día primero del mismo mes de mayo con la Misa de acción de gracias por el 33° aniversario sacerdotal de nuestro Párroco el Padre Juan Carlos Castillo Ramírez, que fue ordenado sacerdote el primero de mayo de 1981, por el Arzobispo José de Jesús Tirado Pedraza (+).
2) Después de esa Misa hubo un sencillo convivio con taquitos
al vapor y pastel para unirse a la alegría del Padre Castillo a quien se le dio un Ramillete Espiritual y algunos regalitos de
parte de los grupos de apostolado. ¡Felicidades!
3) El día dos los y las integrantes de la Asociación del
Santísimo encabezaron la Hora Santa mensual y después
tuvieron su reunión.
4) El grupo parroquial del Apostolado de Fátima inició el día
tres los Rosarios de Aurora que se efectuaron los cinco sábados de Mayo y culminaron el 31.
5) Tuvimos el Domingo de la Caridad Fraterna el día cuatro.
Gracias a todos los que cooperaron con despensa y ropa para familias necesitadas, que después la UEM llevó a algunos hogares y la ropa se envió a la Parroquia de …. En Juárez, N. L. siendo recibida por el P. Leonardo Huicab, su Párroco.
6) Los Ministros Extraordinarios de la Comunión le siguieron
avanzando en el estudio de la Exhortación del Papa Francisco “Evangelii Gaudium”, ya mero la terminan y ya acabaron de ver la Carta del señor Arzobispo. ¡Qué buena onda!
7) En el mes hubo Tardeada Bohemia el nueve y el 23,
animadas como siempre, bajo la batuta de la señora Lety Peña y asociados.
8) Con gran vuelo el grupo parroquial del Apostolado de
Fátima celebró a su Santa Patrona la Virgen de Fátima, con triduo de Misas, renovación de su compromiso y convivio. ¡Antes hablan! Además están de plácemes
porque ha habido una mejor respuesta en la asistencia al
Rosario con ofrecimiento de flores a la Virgen María este año. Animo doña Yola de Lozoya! Que a propósito, no invitó al pastel el 19: jaja!
9) El 17, día mensual dedicado a nuestra Santa Patrona
Parroquial, oramos especialmente por toooooda la Parroquia, por sus bienhechores y amigos.
10) Luego el 19 y 20 de mayo, los niños y niñas del
catecismo de los sábados y martes respectivamente
presentaron, como dice el P. Juan Carlos, su “examen profesional” para ser admitidos a la primera Comunión, con total éxito. Felicidades a los niños y niñas, y a sus catequistas que en dos años los han ido preparando.
11) El 21 fue la Misa de acción de gracias por la Canonización
del Papa Juan XXIII y del Papa Juan Pablo II.
12) La Unión de Enfermos Misioneros tuvo la Misa mensual
por las y los enfermos de la Parroquia y después su convivencia, que esa vez les celebró el P. Marcos Alanís, nuestro Vicario Parroquial.
13) El 27 se llevó a cabo la junta mensual y final de los papás
y mamás de los niños y niñas del catecismo. La señora Clarita y las demás catequistas los atendieron y vieron las fechas de las confirmaciones y primeras comuniones en la próxima festividad de Santa Beatriz de Silva.
14) El día 31 cerramos el mes con la celebración de los 50
años de la coronación pontificia de la imagen de la Virgen del
Roble y su proclamación como Patrona principal de la Arquidiócesis de Monterrey. En 1964 el Papa Paulo VI autorizó su coronación delegando a Monseñor Alfonso Espino y Silva entonces Arzobispo de Monterrey para que la coronara e hiciera la proclamación. Hoy los festejos los encabezó el Arzobispo de Monterrey actual, Monseñor Rogelio Cabrera, estando de invitado especial el Cardenal Francisco Robles
Ortega quien fuera nuestro Arzobispo y ahora lo es de Guadalajara. ¡Viva la Virgen del Roble! Y que nos siga
protegiendo con su manto.
Ya me voy.
Pues ya trabajé mucho. Hasta la próxima les dice: “Capuslito”.
2
ORACION DEL PARROCO A MARIA SANTISIMA (Original de la Congregación para el Clero)
Oh María, Madre de Jesucristo, Crucificado y Resucitado,
Madre de la Iglesia, pueblo sacerdotal.
Madre de los sacerdotes, ministros de tu Hijo: acoge el humilde ofrecimiento
de mi mismo, para que en mi misión pastoral pueda anunciar la infinita misericordia
del Sumo y Eterno Sacerdote: oh “Madre de misericordia”.
Tú que has compartido con tu Hijo, su “obediencia sacerdotal” y has preparado
para él un cuerpo en la unción del Espíritu Santo,
Introduce mi vida sacerdotal en el misterio inefable de tu divina maternidad,
Oh “Santa Madre de Dios”.
Dame fuerza en las horas oscuras de la vida, confórtame en la fatiga de mi ministerio,
que tu Jesús me ha confiado, para qye, en Comunión contigo,
pueda llevarlo a cabo con fidelidad y amor, oh Madre del Eterno Sacerdote,
“Reina de los Apóstoles, Auxilio de los Presbíteros”.
Tú que has acompañado silenciosamente a Jesús en su misión de anunciar
el Evangelio de paz a los pobres, hazme fiel a la grey
que el Buen Pastor me ha confiado. Haz que yo pueda guiarla siempre
Con sentimientos de paciencia, de dulzura, de firmeza y amor,
En la predilección por los enfermos, por los
pequeños, por los pobres, por los pecadores, oh “Madre Auxiliadora del Pueblo Cristiano”.
Concédeme oh Madre, que en la celebración de la Eucaristía,
Centro y fuente del ministerio sacerdotal Pueda vivir mi cercanía a Jesús en tu
cercanía materna, Porque “cuando celebramos la Santa Misa
tú estás junto a nosotros” y nos introduces en el misterio de la
ofrenda redentora de tu divino Hijo, oh “Mediadora de las gracias que brotan de esta
ofrenda para la Iglesia y para todos los fieles” oh “Madre del Salvador”. Amén. 3
INSTITUCION DE
LA SANTA MISA
El primer Jueves Santo de la historia, al atardecer y antes de entregarse Jesús a sus enemigos para la Pasión, tuvo lugar en el Cenáculo de Jerusalén el “Natalicio del Cáliz”, como decían con entrañable amor los antiguos cristianos. Allí nació la Misa, la Eucaristía, el Santo Sacrificio, Con la Misa llevó al extremo el Señor Jesús su amor para con los hombres, antes de volver a Su Padre. Allí murió mística y verdaderamente ante los Doces, antes de morir a la vista de todos en la Cruz. “Muriendo destruyó la muerte” y El quedó vivo y glorioso en el Misterio eucarístico, mientras sus enemigos se empeñaban en raerlo de sobre la faz de la Tierra. ¡Misterio de fe, misterio de amor infinito! Todos los días en la Misa, se relata esta institución en las llamadas “Plegarias Eucarísticas” en términos iguales. Interesa recordar aquí el relato de los evangelistas y el de san Pablo: “Y cuando ellos estaban cenando, tomó JESUS el pan, dio gracias y lo bendijo, y lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo: Tomad y comed: éste es mi Cuer-po, que se da por vosotros: haced esto como memorial mío. Y asimismo, tomando el cáliz, después que hubo cenado, dio gracias, y se lo dio, diciendo: Bebed de él todos. Porque ésta es mi sangre del Nuevo testamento , que será derramada por muchos, por vosotros, para remisión de los pecados. Y bebieron de él todos” (ver: Mt 26, 26-29: Mc 14, 22-25; Lc 22, 19-20). Y San Pablo haciéndose eco de una tradición viva, si es que no de una comunicación directa del señor, escribía a los Corintios en su primera Carta 11, 23-27: “El Señor Jesús, la noche en que era entregado, tomó
pan, y después de dar gracias, lo partió diciendo: Esto es mi Cuerpo, el que se da por vosotros,
haced esto en memoria mía. Igualmente después de la cena, tomó el cáliz, diciendo: Este Cáliz es la Nueva Alianza por la Sangre mía; cuantas veces lo bebáis, hacedlo como memorial mío. Pues cada vez que co-méis este pan y bebéis este cáliz, proclamáis la muerte del Señor, hasta que venga. Por lo cual, quien coma el pan y beba el cáliz del Señor indignamente, será reo del Cuerpo y de la Sangre del Señor”. Y continúa San Pablo recomendando a los cristianos de Corinto el examen de su conciencia para no comulgar sacrílegamente, y para “no comer y beber su propia condenación”. Esta es la Eucaristía nacida en la Cena del señor, hecha Pascua Cristiana, dejando atrás para siempre a la Pascua judía e iniciando la Nueva y Eterna Alianza del nuevo Pueblo de Dios. *Contiene todo el dinamismo del Misterio Pascual, rememora el Tránsito de Cristo y realiza sacramentalmente nuestro paso de este mundo al Padre*. Este es el Sacramento de la fe, en el que los elementos de la naturaleza, cultivados por el hombre, se convierten en el Cuerpo y Sangre gloriosos con la cena de la comunión fraterna y la degustación del banquete celestial (Gaudium et spes 38). A esta conversión maravillosa la Iglesia la llama transustanciación, evitando otros términos (transfinalización-transignificación) con que pretenden algunos demostrar lo filosófica y humanamente indemostrable, cuando sólo lo hace creíble la fe teologal.
4
FINES DE LA MISA. Toda la Liturgia, pero especialmente la Misa, cumple los cuatro consabidos fines clásicos: . Rinde a Dios el culto de adoración, para reconocer su infinita excelencia, poder y majestad, por lo que la Misa es un sacrificio lateréutico. . Agradece a Dios sus inmensos beneficios reconociéndole Dueño y Señor de todo y de todos, y dador universal, por lo que la Misa es el sacrificio eucarístico por excelencia. . Pide a Dios bienes materiales y espirituales, temporales y eternos, y a este respecto es la Misa un sacrificio impetratorio. . Satisface a Dios por todos los pecados cometidos contra su Majestad y por las penas merecidas, así de los vivos como de los difuntos, y por eso es también la Misa un sacrificio propiciatorio. Todos estos fines los cumplió Cristo redentor durante toda su vida y de un modo especial en su muerte de Cruz, y los sigue cumpliendo ininterrumpidamente en el altar, con el Misterio Eucarístico. De ahí que la Misa llene todas las necesidades y satisfaga todas aspiraciones del alma, y sea en absoluto la oración y la devoción cristiana por excelencia, e insustituible. A ella confluye el rezo diario universal del Oficio Divino (Liturgia de las Horas) y de ella recibe éste toda la efi-cacia. Es que en ella está Cristo mismo, con Su Iglesia,
siempre adorando, siempre agradeciendo, siempre aplacando, siempre impetrando al Padre del cielo, y siempre redimiendo a los hombres. LOS NOMBRES DE LA MISA El nombre más tradicional del Sacrificio Eucarístico es MISA. Este vocablo deriva de las dos despedidas que antiguamente hacía el diácono, dentro de la celebración: la primera a los catecúmenos y penitentes, en enseguida del Evangelio; la segunda a toda la Asamblea al disolverla. A los primeros les decía: Ite, dimissio est : retírense, es su despedida. Lo mismo decía a la Asamblea, al final. Este aviso diaconal se convirtió en nuestro Ite Missa est, traducido ahora por: Pueden ir en paz. El Papa San Gregorio Magno y Santo Tomás dan al nombre Misa una interpretación mística. Según ellos se debería a que en la Misa se efectúa una como transmisión de votos y súplicas del Pueblo de Dios, por mediación del sacerdote de Cristo; o bien porque en la misa se remite o envía a Dios una Víctima que es Jesucristo inmolado en el altar, y a la cual Dios corresponde con la fluencia de bienes celestiales a la Tierra. En la sucesión de los siglos se ha designado a la Misa con diversos nombres. Los griegos la denominaban “Sagrada Liturgia”, o simplemente “Liturgia”, o “Synaxis”, o “Anáfora”. Su primer nombre fue FRACCION DEL PAN, luego EUCARISTIA, y “Dominicum”. Los latinos: “Colecta”, “Acción” o “Agenda”, “Oblación”, “Comunión”, etc. El nombre preferido fue Dominicum, evocando el “Memorial” del Señor. El Misal Romano ha conservado secularmente el nombre de MISA. En el siglo II, por algún tiempo, la denominación Eucaristía sustituyó a la palabra “Cena”, para designar la Misa. En el siglo XVI los protestantes adoptaron el de “Cena”.
(Tomado de "La Flor de la Liturgia Renovada") 5
LA VIRGEN MARIA
La piedad popular se ha encargado de manifestar el
amor que se tiene a la Virgen María, a través de los
cantos, de las advocaciones y diversas manifestaciones
que en reconocimiento a su participación en la historia
de la salvación, se tienen por todo el mundo.
La Virgen María es reconocida como la hija amada del
Padre, que elegida por EL desde la eternidad, fue
preparada por el mismo Padre, para ser la Madre del
Redentor, Jesucristo Nuestro Señor.
Es considerada como la mujer sencilla y humilde que
reconoce que el Poderoso ha hecho obras grandes en
ella para bien de la humanidad.
Santa María siempre Virgen aceptó ante el anuncio del
ángel de que había sido elegida para ser la Madre del
Redentor, la voluntad del Padre y el Verbo se encarnó
en ella por obra del Espíritu Santo.
Se inició así el tiempo de gracia para la humanidad de
todos los tiempos. El Verbo de Dios latía en el seno
virginal de María para nacer a favor de los hombres y
mujeres de todos los tiempos, de todas las naciones,
lenguas y razas.
La Virgen María fue asociada así a la obra salvador de
Jesús, quien con su sangre preciosa habría de
reconciliar al género humano con el Padre.
María está presente en el inicio de esta parte relevante
de la historia de amor entre Dios y el hombre. Un amor
maltratado por el hombre, que engañado por el
demonio, sucumbe ante la tentación y su infracción, lo
lleva a ser expulsado del paraíso.
Pero en el mismo momento, Dios le promete un
Redentor, que nacería de la descendencia de la mujer y
le aplastaría la cabeza.
María estará asociada por voluntad del Padre al camino
redentor del Hijo y llena del Espíritu Santo vivirá su
gran labor: ser la nueva Arca de la Alianza, concebir y
dar a luz al Hijo de Dios, nutrirlo, formarlo,
acompañarlo y ser la primera discípula de Jesús.
Así, la veremos
“adelantar el reloj”
de la misión de
Jesús en las Bodas
de Caná y
permanecer al pie
de la cruz,
compadeciendo
con Cristo en los
dolorosos
momentos de la
entrega salvífica de
Jesús.
La Virgen María acompañará a los Apóstoles en su
novena de días de oración, que los llenará de fortaleza
y valor para lanzarse a proclamar el Evangelio a todas
las naciones y cumplir con el mandato misionero de
Jesús: “Vayan por todo el mundo y prediquen el
Evangelio a toda creatura…”
María santísima irá viviendo también su propia misión
después de la resurrección de Cristo y como
embajadora del evangelio, llegará a los más diversos
lugares de la Tierra. Fátima, Lourdes, México.
Vino a nuestra Patria con el rostro mestizo y la
vestidura indígena y anunció el mensaje de amor de su
divino Hijo y con su presencia conjunto las diferentes
etnias de la Nueva España, del naciente México, que
bajo su amparo se protege desde entonces y avanza en
el camino de la fe y del progreso.
Veamos siempre a María como ejemplo de vivencia de
la voluntad del Padre, de espiritualidad y de servicio
así como de misionera que va llevando el mensaje de
Jesús y como Madre de la Iglesia que se entrega con
Cristo en la labor de engendrar nuevos hijos, nuevos
discípulos de Cristo en las naciones del mundo.
¡Santa María, Madre de Dios, Madre Nuestra,
acompáñanos en nuestro caminar y ahora y
siempre y ayúdanos a vivir nuestro
compromiso cristiano!
6
Los cuatro evangelistas
¡El Señor de la historia y de la vida los siga acompañando
en esta pascua de resurrección para que den frutos según
el deseo de Cristo!
Continuando con la segunda parte del curso de san Mateo en
esta ocasión veremos el significado de los animales que se
designan a cada uno de los evangelistas y en el siguiente mes
nos introduciremos directamente a san Mateo. Esto podemos
tomarlo como una introducción para seguir contemplando
esta maravillosa Historia de Salvación, en la que Dios nos ha
comunicado su designio amoroso y misericordioso.
En primer lugar tenemos a san Mateo se simbolizó con un
ángel (un hombre con alas) porque su evangelio comienza
con la lista de los antepasados de Jesús, el Mesías: Mt 1,1-
16. Esta lista es de gran valor para este evangelio porque
presenta a Jesús como hijo de David (el más importante de
los reyes) e hijo de Abrahán (el padre del pueblo de Dios).
Mateo quiere afirmar que Jesús lleva a su perfección la
historia del pueblo. Esta lista de mensajes tiene tres períodos
de generaciones (3=número perfecto), y cada uno de los
períodos se compone de catorce generaciones (14=7+7,
número perfecto). Las mujeres también juegan un papel
importante en esta genealogía; se trata de Tamar, Rajab, la
mujer de Urías (Betsabé) y María. Son mujeres
comprometidas con la justicia. Por eso Mateo las incluye en
la lista.
En segundo lugar tenemos a San Marcos al cual se le
representa con un León porque su evangelio comienza con la
predicación del Bautista en el desierto, donde había animales
salvajes. Su evangelio fue el primero en escribirse (en la
década de los años 60 después de Cristo) y sirvió como texto
de catequesis para los que se preparaban para recibir el
bautismo. Es el evangelio más corto. Para el pueblo de la
Biblia, el desierto representaba, entre otras cosas, el lugar
donde se fraguan los nuevos proyectos. Esto es lo que hizo
el pueblo de Dios cuando salió de la esclavitud de Egipto.
Juan Bautista se da a conocer en el desierto, lo que pone de
manifiesto que está preparando al pueblo para la gran
novedad que supone la vida y las prácticas de liberación de
Jesús. Partiendo de Ap 3,8, podemos afirmar que la voz del
león simboliza la voz de los profetas que denuncian la
violación de los planes de Dios Ap 10,3. Por tanto, Juan
Bautista es el profeta que denuncia la injusticia y que apunta
a la novedad
que aportará
Jesús.
También tene-
mos a san Juan
es representado
por un águila,
la mirada diri-
gida al sol,
porque su
evangelio se
abre con la
contemplación
del Jesús-Dios:
Jn 1,1. El evan-
gelio de Juan fue el último en aparecer, y no se escribió en
pocos días. Lo escribieron los discípulos de Juan. Una de las
características del Jesús del evangelio de Juan es esta: el
Maestro nos conoce a cada uno de nosotros mejor de lo que
nos conocemos nosotros mismos: Jn 1,48. Poco más
adelante dice que Jesús "no necesitaba que le informasen de
nadie, pues él conocía muy bien el interior del hombre." (Jn
2,25). Los símbolos de cuatro evangelistas surgieron a partir
de Ez 1,10. En Ap 4,6-10 hay cuatro vivientes con ese
aspecto, pero no se refieren a los evangelistas
El evangelista san Lucas se ha simbolizado mediante un
buey o un toro porque su evangelio comienza con la visión
de Zacarías en el Templo, donde se sacrificaban animales
como bueyes, terneros y ovejas. El evangelio de Lucas
comienza y termina en el Templo; los Hechos de los
apóstoles constituyen la segunda parte del evangelio de
Lucas. Si en el evangelio encontramos el camino de Jesús,
en los Hechos tenemos el camino de las comunidades que
siguieron a Jesús. El libro de los Hechos termina llegando
Pablo a Roma, ciudad que, para Lucas, representa "los
confines del mundo".
Dios nos ayude a percibir su presencia entre nosotros y saber
que realiza su salvación en nuestra vida.
Pbro. Marcos Eugenio Alanís Salinas.
7
MENSAJE DEL PADRE VICARIO
Pbro. Marcos Eugenio Alanís Salinas.
La fortaleza de papá.
¡Que Dios Padre llene su hogar de infinito amor para que
encuentren la felicidad y realización en cada acontecimiento
de su vida familiar!
Hace unos días estaba pesando en qué podría escribir para
este mes de junio, claro que inmediatamente se vino a mi
mente escribir algo referente a los padres, iba a enfocarme
en cinco o diez cualidades de mi padre o de los padres en
general, pero al final decidí hablar sólo de una, la fortaleza.
Tal vez alguno se preguntará y ¿por qué sólo una cualidad y
por qué esa?
Lo que sucede es que en estos pocos años que llevo en el
ministerio sacerdotal he notado la importancia de esta
cualidad, porque los hijos somos en extremo testarudos y
por más que nos señalan el camino con mucho amor, no
logramos recapacitar y caemos una y otra vez y esto es en
extremo agotador para estos seres tan estupendos que nos
aman sin condición, pero que se angustian al vernos
fracasar de una u otra manera y que sienten el mismo
sufrimiento cuando somos lastimados.
Todos los días me encuentro con papás que están tentados
a dejarse vencer por los criterios del mundo, ya que sus hijos
quieren seguir esos criterios y muchos, cansados de luchar
se dejan arrastrar también y dejan la educación de sus hijos
en manos de una libertad mal entendida, del “¡que hagan lo
que quieran, pero que no me molesten!”. Claro otros
combaten con todo su empeño pero en ocasiones se quedan
sin ímpetu y se desesperan.
Esta fortaleza como mencioné, ayuda a los padres a no
darse por vencidos al ver que sus hijos van creciendo y
toman pésimas decisiones, a seguir aconsejándolos aunque
ellos no quieran y sean groseros, mal agradecidos y los
hagan a un lado en su decisiones y que al final, cuando todo
sale mal, retornan a casa y no escuchan un solo reproche
por sus acciones.
Como seres humanos puede darnos miedo el perder una
batalla, y más si se trata, como en el caso de los padres que
tienen problemas con sus hijos. La fortaleza de la que hablo,
obviamente no se trata de una demostración de fuerza bruta,
con gritos, caras enojadas o cualquier otra demostración de
poder para dar miedo, no, esa no es la verdadera fuerza.
Un padre de familia debe cuestionarse para mantenerse
firme en la virtud ¿Qué clase de persona quiero que sea mi
hijo? ¿Qué educación quiero para mi hijo? ¿Quiero que sea
feliz? Estas preguntas deben ayudarnos a encontrar el
camino correcto. Como lo mencioné antes, la fortaleza no es
un acto de violencia momentáneo para desahogarme, sino
que es ser constantes en el bien que se quiere lograr a largo
plazo.
Con frecuencia les pregunto a los papás que me comentan
de las faltas de paciencia con los hijos ¿qué ganaste con
eso? ¿realmente acabó el problema y el niño o adolescente
dejó de hacer aquello que te molestaba? O ¿sólo
descargaste tu frustración? Y la respuesta es “NO”, para
nada, siguió haciendo aquello que quería y ya no le dije
nada. La formación de los hijos, como saben los papás, no
es nada fácil, de hecho tienen un labor titánica porque todo
contradice la buena educación en la familia, pero no deben
darse por vencidos, recuerden que el amor debe ir
estrechamente unido a la disciplina, así no será una persona
caprichosa, inestable o reprimida, sabiendo que todo lo que
les digan, hagan, o les prohíban será para su bien y porque
los aman.
Solo quiero terminar encomendando a todos los papás a
nuestro señor san José, padre de Jesús, para que les
enseñe a tener esa fortaleza que viene de la fe en Dios y los
anime en tiempos de tribulación.
San José, ruega por nosotros.
8