CELEBRAR CON ARQUITECTURAIdentifico cuatro motivos de celebración que tienen una ma-nifestación especial en el lugar: acontecimientos en el entor-no y cualidades de la relación del hombre con su entorno.

Me preocupan enormemente los graves problemas que en-frenta nuestra sociedad manifestos en la Isla del Sol.

Pero no debemos condenarnos a una insatisfacción eterna que sólo encuentra consuelo en el futuro. En cómo no son las cosas.

No debemos limitar la arquitectura a el “deber ser” como si el “ser” estuviera ya descifrado y agotado.

Busco una arquitectura que guíe celebrando el “ser” para disfrutarlo más. La incapacidad de descifrarlo no será un obs-táculo sino una fuente de regocijo.

Para cuestionar la arquitectura como herramienta del correcto y eficiente direccionamiento de la sociedad. Para disfrutar el “ser”en vez de dirigir el “deber ser” con arquitectura.

Para preguntarse qué es el progreso y cómo dirige nuestras vidas. Para evaluar el progreso como un mito desde el entorno físico de la sociedad y no sólo desde las reflexiones teóricas. Para que la arquitectu-ra deje de someterse a un mito y empiece a discutir-lo.

Para dejar preguntas abiertas. Para que la incapacidad de descifrar nuestro entorno no sea un obstáculo sino una fuente de riqueza.

Para que el discurso de la arquitectura admita valores que la práctica de la arquitectura sí admite.

POR QUÉ CELEBRAR