9
Lección 11 para el 13 de marzo de 2021

Presentación de PowerPointEl plan de redención: El alto precio de la salvación. Isaías 55:1-5. Más allá de nuestra comprensión. Isaías 55:6-13. El ayuno: El ayuno que desagrada

  • Upload
    others

  • View
    4

  • Download
    0

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: Presentación de PowerPointEl plan de redención: El alto precio de la salvación. Isaías 55:1-5. Más allá de nuestra comprensión. Isaías 55:6-13. El ayuno: El ayuno que desagrada

Lección 11 para el 13 de marzo de 2021

Page 2: Presentación de PowerPointEl plan de redención: El alto precio de la salvación. Isaías 55:1-5. Más allá de nuestra comprensión. Isaías 55:6-13. El ayuno: El ayuno que desagrada

El plan de redención:

El alto precio de la salvación. Isaías 55:1-5.

Más allá de nuestra comprensión. Isaías 55:6-13.

El ayuno:

El ayuno que desagrada a Dios. Isaías 58:1-5.

El ayuno que agrada a Dios. Isaías 58:6-12.

El sábado:

Deleitarse en Dios. Isaías 58:13-14.

Como si estuviésemos oyendo a Jesús mismo, Isaías nos invita a ir a los brazos divinos para calmar nuestra sed de salvación (Mateo 11:28; Juan 4:13-14); a compartir lo que tenemos con el necesitado (Lucas 6:35); y a disfrutar de la compañía del “Señor del sábado” (Mateo 12:8).

Page 3: Presentación de PowerPointEl plan de redención: El alto precio de la salvación. Isaías 55:1-5. Más allá de nuestra comprensión. Isaías 55:6-13. El ayuno: El ayuno que desagrada

“A todos los sedientos: Venid a las aguas; y los que no tienen dinero, venid, comprad y comed. Venid, comprad sin dinero y sin precio, vino y leche” (Isaías 55:1)

¿Comprar sin dinero, sin tarjeta de crédito, sin cheques, sin transferencias bancarias? ¿Cómo puede ser eso?

Efectivamente, Dios pone a nuestra disposición la salvación sin pedir nada a cambio, y sin ponerle precio alguno.

Sin embargo, debemos comprarla. No es algo sin valor. La salvación tiene un gran valor, costó un gran precio. Si la queremos, tenemos que valorarla, desearla, y pedirla (Hechos 16:30-31).

Fue al precio de la muerte de Dios mismo que se consiguió nuestra salvación. Y Dios nos la ofrece como un regalo de amor (Romanos 6:23).

Page 4: Presentación de PowerPointEl plan de redención: El alto precio de la salvación. Isaías 55:1-5. Más allá de nuestra comprensión. Isaías 55:6-13. El ayuno: El ayuno que desagrada

“La salvación es un don gratuito, y sin embargo ha de

ser comprado y vendido. En el mercado administrado

por la misericordia divina, la perla preciosa se

representa vendiéndose sin dinero y sin precio. En

este mercado, todos pueden obtener las mercancías

del cielo…

El Evangelio de Cristo es una bendición que todos

pueden poseer. El más pobre es tan capaz de comprar

la salvación como el más rico; porque no se puede

conseguir por ninguna cantidad de riqueza

mundanal. La obtenemos por una obediencia

voluntaria, entregándonos a Cristo como su propia

posesión comprada”

E.G.W. (Palabras de vida del Gran Maestro, pg. 88-89)

Page 5: Presentación de PowerPointEl plan de redención: El alto precio de la salvación. Isaías 55:1-5. Más allá de nuestra comprensión. Isaías 55:6-13. El ayuno: El ayuno que desagrada

Nuestra mente no puede comprender el misterio de la salvación. Solo puede ser discernido espiritualmente (1Co. 2:14). Por eso, Dios nos da el conocimiento necesario para comprender los fundamentos de la salvación (1Tim. 2:3-4).

Este conocimiento irá aumentando a través de nuestra relación diaria con Cristo (Col. 1:10; 2P. 3:18). Pero aún así, no podremos llegar a comprenderlo plenamente. El plan de la redención será nuestro estudio por la eternidad.

“[El tema de la redención] Será la ciencia y canción de los redimidos por los siglos sin fin de la eternidad. ¿Acaso no merece ser estudiado y meditado cuidadosamente ahora?” (E.G.W., “La verdad acerca de los ángeles”, pg. 304).

Page 6: Presentación de PowerPointEl plan de redención: El alto precio de la salvación. Isaías 55:1-5. Más allá de nuestra comprensión. Isaías 55:6-13. El ayuno: El ayuno que desagrada

El día de la expiación era el único día de ayuno ordenado por Dios en todo el año. Por esto se lo llamaba “el ayuno” (Hch. 27: 9). Los otros ayunos diarios o semanales, que fueron añadidos posteriormente, no eran exigidos por Dios, ni recibían su aprobación (Zac. 7:3-10).

Esperaban recibir la aprobación divina por su ayuno (Is. 58:3). Sin embargo, recibieron una respuesta inesperada: “no ayunéis como hoy, para que vuestra voz sea oída en lo alto” (v. 4).

A través de su “religiosidad” esperaban ablandar el corazón de Dios y comprar su perdón. Pero Dios no estaba pidiendo nada de esto.

Page 7: Presentación de PowerPointEl plan de redención: El alto precio de la salvación. Isaías 55:1-5. Más allá de nuestra comprensión. Isaías 55:6-13. El ayuno: El ayuno que desagrada

“¿No es que partas tu pan con el hambriento, y a los pobres errantes albergues en casa; que cuando veas al desnudo, lo cubras, y no te escondas de tu hermano?” (Isaías 58:7)

Curiosamente, lo que agrada a Dios no tiene nada que ver con dejar de tomar alimentos. Consiste en compartir lo que tengo, en preocuparme por las necesidades de los demás. En definitiva, es una forma de vivir.

Cuando manifestamos en nuestra vida el amor hacia los demás, Dios se agrada de nuestro ayuno, nos pastorea, sacia nuestra alma y nos vigoriza (Isaías 58:11).

“La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las

viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin

mancha del mundo” (Santiago 1:27).

Page 8: Presentación de PowerPointEl plan de redención: El alto precio de la salvación. Isaías 55:1-5. Más allá de nuestra comprensión. Isaías 55:6-13. El ayuno: El ayuno que desagrada

“Si retrajeres a causa del sábado tu pie, de hacer tu voluntad en mi día santo, y lo llamares delicia; y al día santo de Jehová, honorable; y lo honrares, no andando en tus propios caminos, ni buscando tu negocio, ni hablando de él, entonces te deleitarás en Jehová; y yo te haré subir sobre las alturas de la tierra, y te alimentaré con la heredad de Jacob tu padre; porque la boca de Jehová lo ha hablado” (Isaías 58:13-14)

¿Qué relación existe entre afligir el alma, ayudar a los demás y guardar el sábado?

Los tres requieren concentrarse en Dios y en sus prioridades, y reconocer nuestra dependencia de Él.

Los tres son maneras en las que buscamos la santidad al imitar a Dios, quien se humilló a sí mismo (Filipenses 2:8), demostró bondad abnegada (Hechos 10:38), y descansó y honró el sábado (Génesis 2:2-3).

Además de ser un deleite, la observancia del sábado trae bendiciones especiales (v. 14).

Page 9: Presentación de PowerPointEl plan de redención: El alto precio de la salvación. Isaías 55:1-5. Más allá de nuestra comprensión. Isaías 55:6-13. El ayuno: El ayuno que desagrada

“Las buenas acciones son una doble

bendición, pues aprovechan al que las

hace y al que recibe sus beneficios. La

conciencia de haber hecho el bien es una

de las mejores medicinas para las

mentes y los cuerpos enfermos. Cuando

el espíritu goza de libertad y dicha por

el sentimiento del deber cumplido y por

haber proporcionado felicidad a otros,

la influencia alegre y reconstituyente

que de ello resulta infunde vida nueva al

ser entero”E.G.W. (El ministerio de curación, pg. 199)