Proyecto de Tesis. Enrique Riobó

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Formato Presentacin Proyecto de Tesis

PROYECTO DE TESIS DE (PROGRAMA)

ALUMNO: Enrique Riob ___________________________________________________________________________________

PROF. PATROCINANTE: Claudia Zapata _______________________________________________________________

TTULO DEL PROYECTO: Raza, nacin y civilizacin. La prefiguracin de lo griego y lo indgena en los textos escolares mexicanos y chilenos. 1920-1950. PALABRAS CLAVES: raza, nacin, civilizacin, prefiguracin, Grecia antigua, indgenas _________________________________________________________________RESUMEN: mximo 250 palabras

En este trabajo buscar desarrollar una comparacin entre los discursos relativos a griegos en la antigedad y a indgenas americanos contenidos en dispositivos escolares oficiales de Chile y Mxico entre 1920 y 1950. Tomar como ejes analticos los conceptos de raza, nacin y la dicotoma civilizacin/barbarie, para revisar los modos en que los discursos relativos a estos afectaron o se pueden encontrar operando en el corpus documental analizado. De ese modo, busco reflexionar en torno a las maneras en que las culturas griega e indgena se presentan como relevantes, o no, para el proyecto histrico oficial chileno y mexicano. Asimismo, se buscar inquirir en torno al por qu de los posibles cambios y continuidades presentes en el discurso revisado, as como las diferencias y similitudes existentes entre los casos chileno y mexicano.A modo de hiptesis, se sostiene que en el caso mexicano este discurso relativo a lo indgena tendr una valoracin ms positiva que en Chile, al tener un mayor peso en lo correspondiente al proyecto nacional ya que la figura del mestizo eje del mismo, al menos en el mbito cultural- deja de tener mpetu si una de sus partes es pensada como decadente o racialmente inferior. Por el contrario, esto ltimo sera ms cercano a lo que ocurre en Chile, donde el proyecto cultural hegemnico no le entrega tanta importancia a lo mestizo, y menos an a lo indgena, en torno al cual perviven elementos de la dicotoma civilizacin/barbarie.Por otra parte, sobre lo griego antiguo existir un mayor consenso, y en ambos casos se comprender de manera muy idealizada, como paradigma de lo civilizado y racialmente superior, as como fundamental para un legado universal en que ambos pases se incluyen.

FIRMA PROF. PATROCINANTE: _____________________

FECHA DE ENTREGA: _____________________________

FORMULACIN DEL PROYECTO: describa el problema que abordar (el estado del debate) y la tentativa de solucin del mismo (hiptesis de trabajo). Mximo 3 pginasEste trabajo buscar comparar el discurso contenido en dispositivos educacionales oficiales (Textos escolares, revistas oficiales de educacin, planes y programas controlados o emanados desde el Estado) en Chile y Mxico, referido a los pueblos indgenas de los respectivos pases como del continente en general- y a los antiguos griegos, entre los aos 1920 y 1950, con el afn de analizar los modos en que una matriz que habilita una cierta gama de posibles proyectos histricos/nacionales puede verse reflejada en estos.

Se buscar, por tanto, analizar las bases a partir de las cuales se construye marco para comprender la nacin, su desarrollo y su cultura nacional. Por ejemplo, ser parte de Occidente implica que slo son posibles algunos modos de desarrollarse como grupo humano es decir, se limitan las posibilidades de pensarse en trminos nacionales, as como la relacin entre civilizacin y barbarie. Estos modos posibles de pensarse como grupo humano son distintos si es que la base no es lo blanco, sino lo mestizo o lo indgena. En ese sentido, se intenta dar cuenta del modo en que una parte de la sociedad que controla el aparato estatal en un momento determinado- fomenta y masifica un cierto discurso nacional, del que griegos e indgenas sern tomados como referentes, que limita las posibilidades de auto-representarse o de pensarse como sociedad. Lo anterior, necesariamente, forma parte de un proceso de construccin de hegemona.

Esto ser realizado a partir del discurso sobre griegos e indgenas, debido a que ambos podran ser situados en polos identitarios opuestos. Los primeros, en tanto paradigma desde el siglo XVIII aproximadamente (Bernal, 1993; Vlassopoulos, 2010)- de lo occidental, adquieren un relevante rol en los procesos que buscan civilizar y blanquear a la poblacin latinoamericana (Taboada, 2013, 207), mientras que los segundos, especialmente a lo largo del siglo XIX y hasta principios del XX, son erigidos como modelos de la barbarie, son, en gran medida, la poblacin que debe ser modificada para que el continente logre civilizarse. En efecto, mientras los estados fomentaban la inmigracin de poblacin blanca y europea para que ayudara a civilizar y a modernizar el continente (Carmagnani, 1984, 51-52; Hale, 1991, 36), al unsono se realizaban tambin matanzas, despojos de tierras o polticas vejatorias para con los indgenas americanos. Si bien estos procesos se desarrollan principalmente durante el siglo XIX especialmente en la segunda mitad-, son fundamentales para comprender las coyunturas polticas y culturales de la primera mitad del siglo XX, cuando las repblicas oligrquicas junto con los discursos radicalmente europeizantes de varios intelectuales del siglo XIX entren en crisis con la revolucin mexicana, por un lado, y el periodo entre 1925 y 1938, por otro-, lo que devino en que nuevas ideas se hicieran relevantes para pensar Amrica Latinacon mayor o menor nfasis segn cada caso particular-, como lo fueron los indigenismos, los hispanismos, los nacionalismos o la centralidad del mestizaje, entre otras. En ese sentido, las primeras dcadas del siglo XX resultan un contexto en el cual nuevos sujetos estn emergiendo y hacindose relevantes dentro de los debates en torno a la identidad latinoamericana y, aunque con menor centralidad, en los nuevos procesos polticos, sociales y culturales lo que no implica que los anteriores hayan desaparecido, sino que su hegemona se ve disputada-, de modo que resulta un espacio temporal idneo para preguntarse por cmo se configuran, por parte de los dispositivos escolares oficiales, ciertos sujetos histricos en este caso, los dos polos seran los blancos-europeos-occidentales (cuya cuna sera Grecia) y los indgenas americanos, con posibles y diversas posturas intermedias- y cmo se relacionan con ese momento de la sociedad chilena y mexicana. Dicha operacin, me parece, reflejara elementos que pueden ayudarnos a vislumbrar los proyectos histricos sustentados por el Estado chileno y mexicano, respectivamente.De lo anterior surge una pregunta que corresponde al eje central de esta propuesta: De qu maneras las culturas griega e indgenas se presentan como relevantes, o no, para el proyecto histrico oficial chileno y mexicano, cmo cambian a lo largo del periodo, qu diferencias y similitudes podemos encontrar entre el caso chileno y el mexicano y a qu responden stas?La hiptesis propuesta para este problema es la siguiente: en el caso chileno, se le entrega una relevancia excepcional a lo griego como central para su contemporaneidad, debido a que el proyecto histrico promovido implica la insercin total en la civilizacin occidental, por lo tanto, lo griego resulta fundamental para Chile. En otras palabras, lo griego se plantea como el punto de partida de un modo de existir que es al que se debe aspirar, el occidental-civilizado, lo que se relaciona, en ese momento, con la superioridad de la raza blanca. Lo indgena, por otra parte, juega el rol exactamente opuesto, es visto como el paradigma de lo negativo, de la barbarie, de lo que se busca superar, lo que se relaciona con una raza decadente y llena de vicios. De ese modo, su relevancia para la actualidad es presentada como insignificante, e incluso nula. En el caso mexicano se tratara de modo distinto a ambas culturas. Por una parte, lo griego tambin se presentara como el punto de partida de lo occidental, pero ste no sera o al menos no de modo tan radical como en Chile-, el eje de lo que se est promoviendo ser como nacin, no obstante se presenta como relevante para la cultura mexicana del momento. Por otro lado, lo indgena ha de tener una mayor valoracin, por lo que la idea de civilizacin no quedara slo circunscrita a lo europeo, sino tambin a lo indgena americano. En ese sentido, las culturas americanas no seran presentadas como negativas y brbaras, sino como relevantes para la actualidad mexicana. Asimismo, en el mbito racial, tanto lo blanco como lo indgena son valorados relativamente, en el entendido que el sujeto histrico que se busca distinguir no es el uno o el otro, sino el mestizo, la mezcla entre ambos que toma lo mejor de cada uno (Vasconcelos, 1925; Gamio, 1916).A su vez, sostengo que, si bien en ambos casos los cambios a lo largo del periodo estudiado no sern muchos, y respondern ms a las inquietudes o matices especficos de los dispositivos particulares que a un cambio en la valoracin general de estas culturas, durante las dcadas revisadas existir una paulatina disminucin de la importancia general de lo griego clsico en los dispositivos mencionados, mientras que lo contrario ocurrir con los pueblos indgenas, que progresivamente sern ms valorados. Las diferencias y similitudes entre Chile y Mxico estaran dadas por la valoracin y relevancia para la actualidad de ese momento que se entreg a cada cultura, en el caso de los griegos seran ms parecidos, aunque tendra una posicin ms central en el caso chileno, mientras que las diferencias ms radicales se encontraran en la valoracin de las culturas indgenas.Lo anterior respondera a las distintas experiencias histricas de Chile y Mxico, que condicionan de modos particulares los discursos en torno a indgenas y griegos. En el caso mexicano, la revolucin de 1910 resulta fundamental, en tanto implic que gran parte de los intelectuales del porfiriato, todos darwinistas sociales en tanto que positivistas y evolucionistas (Garciadiego, 32), perdieran relevancia (exiliados, en muchos casos) y aparecieran como ms relevantes nuevas posturas, donde el Ateneo de la Juventud y los intelectuales populares tuvieron una mayor jerarqua. Asimismo, la aparicin de un proyecto nacional ms especfico, y el mestizo como sujeto histrico de aqul son tambin determinantes. En el caso chileno, dicha situacin no ocurre, ya que, aunque existen fuertes cambios polticos, y existe una tendencia nacionalista relevante, esta difiere de la mexicana al ser una de corte ms europeizante. (Subercaseaux, 2011, 227)Desde un punto de vista terico, esta investigacin se inserta dentro de la historia de las ideas, buscando aproximarme a la relacin entre unos discursos especficos en torno a un tema particular con su contexto histrico, enfocndome principalmente en las relaciones existentes entre ambos y los modos en que el primero puede dar cuenta de algunos aspectos relevantes del segundo. De ah que el concepto de prefiguracin resulte central, es decir, el modo en que un grupo social hegemnico ha comprendido y valorado a la antigua Grecia y las culturas indgenas americanas, de qu manera [las] han moldeado en torno a su realidad poltica, social y artstica y en qu estado resultante han transmitido esa idea al futuro. Un segundo elemento de esta prefiguracin corresponde al modo en que se proyect sobre el mundo antiguo y las culturas indgenas las necesidades, realidades e ilusiones de su momento histrico, dotando a estos de unas caractersticas que no existan en tales culturas, sino que provenan de su propio universo cultural (Garca de Quevedo: 2002, 10). Finalmente, me interesa relevar los modos en que se busca masificar esa prefiguracin a partir de los dispositivos escolares antes mencionados.En este caso, tres nociones -que considero fundamentales para comprender el panorama ideolgico y cultural de la poca- raza, civilizacin/barbarie y nacin, sern los aspectos que considerar como centrales para analizar la prefiguracin del discurso sobre las culturas griega e indgenas, en tanto pueden ser vistas como muy relevantes, e incluso hegemnicas, dentro de los discursos culturales de la poca.

OBJETIVOS (GENERALES Y ESPECFICOS): jerarquice los objetivos de la investigacin por orden de importancia. Describa aquellos ms generales primero y luego los especficos.Objetivo general: Analizar y comparar la prefiguracin de las culturas griega antigua e indgenas americanas en dispositivos educacionales oficiales chilenos y mexicanos, entre 1920 y 1950, a partir de tres nociones: raza, nacin y civilizacin/barbarie.

Objetivos especficos:

1) Caracterizar el discurso sobre la Grecia antigua y las culturas indgenas americanas a lo largo del periodo abarcado, enfatizando en sus cambios y continuidades, as como categoras recurrentes, momentos, personajes y distintos aspectos destacados.

2) Relacionar el discurso de la Grecia antigua y las culturas indgenas americanas con el contexto mexicano y chileno del periodo.

3) Analizar la valoracin que se asigna a cada cultura para en Chile y Mxico, en trminos raciales, polticos, culturales y espirituales.4) Comparar el discurso sobre lo griego con el de las culturas indgenas americanas en los dispositivos educacionales oficiales de Chile y Mxico.5) Comparar el modo en que aparece el par civilizacin/barbarie puede detectarse en las fuentes seleccionadas.

METODOLOGA: describa los mtodos que planea utilizar para abordar los objetivos del proyecto.

Un primer paso para abordar los objetivos corresponde a la revisin bibliogrfica, tanto histrica como terica. En el primer caso el enfoque estar dado por la justificacin de las fechas de inicio y final de este trabajo, as como adentrarse en los procesos culturales ms significativos del periodo. La intencin de partir el trabajo en 1920 radica en poder comparar a un Mxico que comienza a institucionalizar su salida de la crisis de las repblicas oligrquicas, ya pasada una dcada del comienzo de la revolucin, con un Chile que se encuentra en los aos previos a la vivencia de dicha coyuntura. En tanto, la fecha de cierre, 1950, corresponde al fin de una dcada en la cual se comenz a desarrollar un nuevo contexto mundial marcado por la Guerra Fra, principalmente-, pero que tambin ve, con la Segunda Guerra Mundial, las nefastas consecuencias de la ideologa racial llevada al extremo. En ese sentido, entiendo que desde la dcada de 1950 se hace cada vez ms complejo el desarrollo de un proyecto cultural que tenga como eje la idea de raza. Entre los principales procesos culturales del periodo nos encontramos con la consolidacin de una nueva matriz nacional, la paulatina consolidacin de los llamados Estados de compromiso, el desarrollo del indigenismo mucho ms importante en Mxico que en Chile- y, en gran medida como consecuencia de lo anterior, la bsqueda por integrar al proyecto poltico y cultural hegemnico a toda la poblacin. Estos tres aspectos se encuentran ms desarrollados en el siguiente apartado.

En el mbito terico, el enfoque estar centrado en desarrollar los tres ejes principales de anlisis (raza, nacin y civilizacin/barbarie), especficamente en torno a los contextos de Mxico y Chile entre 1920 y 1950. Considero como necesario realizar esta operacin ya que, aun cuando en los tres conceptos existan aspectos que son hegemnicos a nivel continental por ejemplo, la relevancia de la raza en la comprensin de las sociedades-, existen algunas especificidades en cada caso particular por ejemplo, existe una valoracin de la raza indgena como decadente, en el caso chileno (Pea y Lillo, 1931, 32; Acua, 1942. 199-200), que en el caso mexicano se encuentra en fuerte entredicho (Gamio, 1916, 38). En ese sentido, aun cuando el contexto continental sea similar, las distintas experiencias locales implican, para Mxico y Chile, una aproximacin singular a los mismos tres ejes. Asimismo, en este mbito se incluirn las principales bases tericas que sustentan este trabajo, las que se encontrarn desarrolladas de modo escueto en el siguiente apartado. Finalmente, se integrar bibliografa relativa a los dispositivos escolares oficiales y a su especificidad como soportes y medios para la masificacin de un cierto proyecto cultural.Realizado lo anterior, se comenzara con el anlisis del corpus de documentacin, por lo que resulta menester definirlo. En primera instancia, se revisara todo aquello que, en textos escolares utilizados entre 1920 y 1950, haga referencia a los griegos antiguos o a los pueblos indgenas americanos. Estos documentos se encuentran, principalmente, en las Bibliotecas Nacionales de Chile y Mxico. Por otra parte, las revistas o publicaciones peridicas sobre educacin, que sean controladas por las respectivas instituciones estatales encargadas de la educacin, tambin sern revisadas y, nuevamente, se har hincapi en aquellos textos que se refieran a los griegos antiguos o a los pueblos indgenas americanos. En el caso chileno, la Revista de Educacin oficial del Ministerio se encuentra completa en la Biblioteca de Filosofa y Humanidades de la Universidad de Chile. Finalmente, en lo relativo a los planes y programas, buscar aquellos que rijan las materias a analizar, especialmente como una gua para conocer los contenidos vistos como imprescindibles en cada momento. En todo caso, es necesario sealar que los planes y programas de las primeras dcadas del siglo XX no son tan detallados como los actuales y que, en ocasiones, se encuentran incluso en los mismos libros de texto. Para esta indagacin resultar necesaria la bsqueda en las revistas de educacin antes mencionadas y, en caso de no encontrarse all, en archivos especializados. Cabe sealar que, realizada una primera exploracin, se tratara de un corpus abordable para una investigacin como la que se propone.En lo relativo al anlisis documental, el primer elemento relevante es la idea de lectura a contrapelo (Spivak:2003, Mallon:2001), en tanto, se revisan fuentes oficiales, pero se buscan interpretar de modo crtico. Mi intencin no es dar cuenta de cmo se enseaba lo griego y lo indgena, sino cmo se pueden comprender elementos ms generales -en este caso, la matriz de los posibles proyectos nacionales a desarrollar-, a partir de tales discursos. En ese sentido, los siguientes criterios sern fundamentales en la interpretacin general de las fuentes: valoracin explcita de la cultura griega para la sociedad chilena y mexicana, valoracin explcita de la cultura indgena americana para la sociedad chilena y mexicana, incorporacin de la sociedad chilena y mexicana a algn ente abstracto ms amplio (occidente, civilizacin, cultura mestiza, etc.), utilizacin de lo griego o lo indgena para ejemplificar o sustentar una necesidad o problema del momento actual, operaciones de naturalizacin, cambios cuantitativos en los textos escolares, planes y programas y comparacin entre posturas sustentadas en las revistas de educacin y en los textos escolares. Esto ser relevante para los objetivos 1, 2, 3, 4 y 5.A lo anterior debemos incorporar otros tres modos de aproximarse al corpus de documentacin seleccionado, cada uno relativo a uno de los ejes principales de investigacin. En el caso de la raza, los criterios utilizados para relevarla sern los siguientes: mencin explcita a la idea de raza, separacin de la humanidad en razas, caracterizacin fsica o mental de un grupo racial, afiliacin de un pueblo o grupo humano especfico a una raza particular, caracterizacin fsica o mental esencial de uno de los pueblos de la categora anterior, explicacin de fenmenos histricos, polticos, sociales, econmicos, a partir de caractersticas o dinmicas raciales, determinismo geogrfico. Esto ser relevante para los objetivos 1, 2, 3 y 4.Para la idea de nacin, se utilizarn los siguientes criterios: mencin explcita a elementos griegos o indgenas- que componen la nacin actual, definir a las culturas griegas y/o indgenas como naciones, aspectos relevantes para la unidad nacional de ambas culturas, caracterizacin fsica, mental o cultural de la nacin actual o antigua-, relevancia de la ley en la conformacin nacional, relacin entre la nacin y el organizacin poltica. Esto ser relevante para los objetivos 1, 2, 3 y 4.En el caso de la civilizacin/barbarie: caractersticas de lo civilizado, caractersticas de lo brbaro, inclusin de griegos o indgenas americanos en lo civilizado o brbaro, inclusin de Chile o Mxico en la civilizacin o la barbarie, formas para pasar de la barbarie a la civilizacin y elementos catalizadores o negadores de civilizacin. Esto ser relevante para los objetivos 1, 2, 3, 4 y 5.Las comparaciones sern desarrolladas del siguiente modo:Primero se realizar una comparacin entre planes y programas disponibles de cada pas, luego, entre los modos en que se trata cada tema en las revistas de educacin oficiales. Un tercer paso ser entre el tratamiento de iguales temas en cada pas, dentro de los textos escolares. Luego se tomarn los resultados de estas comparaciones para visualizar las principales regularidades discursivas, as como tambin las diferencias. En ese sentido, se buscar relacionar tanto las primeras como las segundas con aquellos aspectos contextuales que nos ayuden a comprender el por qu de las mismas.

DISCUSIN BIBLIOGRFICA: distinguir las fuentes primarias y secundarias del proyecto; agregue hojas si es necesario. Explique sucintamente por qu las fuentes citadas son relevantes al problema en discusin o a la hiptesis de trabajo.Durante el periodo de las repblicas oligrquicas que es fechado entre 1850 y 1930 por Marcelo Carmagnani (1984)- es posible vislumbrar la paulatina consolidacin del Estado en el continente americano (Pinto, 2002, 100-104), lo que va acompaado de los intentos por construir una comunidad imaginada, a partir de la expansin de la educacin, polticas pblicas, fomento a la literatura e historia nacionales, etc. (Colmenares, 1997, xxxi). Estos elementos no se desvanecen una vez que comienza el proceso de crisis de las repblicas oligrquicas, sino que toman otro sentido y, aun, se fortalecen. Es el caso especfico de la educacin que, a medida que avanza el siglo XX adquiere una relevancia cada vez mayor, tanto para el discurso hegemnico como para la instauracin de un proyecto histrico particular. Es ms, vemos que varios autores le ponen un especial nfasis a la relevancia de la escuela y la educacin para el desarrollo nacional, lo que se puede ver a nivel literario (Subercaseaux, 2011, 342), en el mbito de la historiografa particularmente las posturas de Encina, sobre la necesidad de educacin industrial- (Subercaseaux, 2011, 247) y en la misma pedagoga (Pea y Lillo, 1931, 8).En el caso chileno, previo a la crisis oligrquica encontramos que en la escuela existe un fuerte nfasis por lo clsico y lo europeo (Castillo, 1996, 37-43; Villalobos, 2009, 45-50), lo que va en consonancia con una de las principales crticas hacia la cultura decimonnica chilena que se incluye dentro de la cultura latinoamericana, cuestionada en el mismo sentido: la europeizacin o afrancesamiento, en desmedro de lo nacional. En ese sentido, dentro del mobiliario escolar es posible encontrarse con medallas que tienen a la diosa Atenea (Minerva) en sus caras o diversas lminas murales relativas a lo europeo y lo clsico. Del mismo modo, Rbinson Lira plantea que a principios de siglo la idea de nacin se vincula al ideal liberal republicano y a un horizonte de expectativas cifradas en la plena insercin de Chile en la civilizacin cristiana- occidental (Lira, 2009, 305), visin que cambia a partir de la aparicin de nuevas ideas particularmente el nacionalismo- y la crisis de la oligarqua chilena, cuando una nueva trama nacionalista, de cuo romntico (Lira, 2009, 326) entiende a la nacin como una entidad orgnica con alma propia, siendo esta ltima un conjunto de dimensiones y posturas espirituales que animan las conductas, que se hacen patentes tanto en el plano individual como colectivo, en el mbito privado como pblico. (Subercaseaux, 2011, 394)Para el caso mexicano nos encontramos con una realidad distinta, donde la revolucin de 1910 fue la primera manifestacin de la crisis de los Estados oligrquicos e implic la cada de Porfirio Daz, quien durante su gobierno tambin apel a la nacin moderna, pero desde la pretensin de universalidad de la repblica decimonnica, que a travs del neoclasicismo apelaba a un vnculo eterno con la antigua Grecia, cuna de la cultura occidental, la que se buscaba alcanzar (Moya, 2007, 177).

De este modo, hacia 1920 Mxico estaba consolidando su salida de la revolucin e institucionalizando un proyecto histrico nacionalista, que se ve materializado tanto en el mbito econmico (Halperin, 1969, 409-412; Garciadiego, 2010, 35) como poltico (Halperin, 1969, 413) y cultural, siendo este ltimo el ms relevante en este caso y teniendo como eje la bsqueda por conformar una nacin mestiza, como podemos ver en dos intelectuales orgnicos del Estado mexicano en el periodo a estudiar: Manuel Gamio y Jos Vasconcelos.Cabe sealar que la idea de nacin es un concepto nebuloso, con distintos usos polticos, cuya sola mencin no nos remite a un significado fijo ni a un proyecto especfico (Zapata, 2003, 298) y por tanto, lo nacional adquiere connotaciones determinadas segn el origen y la intencin de quienes pronuncian (Zapata, 2003, 298) tal concepto. No obstante, un elemento central de gran parte de los discursos nacionales de la poca es la bsqueda de la homogeneidad o uniformidad nacional, lo cual implica un afn para integrar a una misma cultura los diversos grupos humanos y culturales que viven en cada uno de los pases tratados. A partir de lo anterior se desarrollan otros dos problemas, primero el de la definicin de lo nacional y luego la masificacin de tal idea. En torno a lo primero a lo segundo me referir ms adelante-, existirn varios modos de definir lo que corresponde a lo nacional, o no, pudindose utilizar para ello un criterio cultural, racial e incluso religioso, dependiendo del autor referido. En el caso mexicano nos encontramos con una bsqueda por la homogeneizacin de la nacin, que para la lite era condicin indispensable de progreso (Zapata, 2003, 301), pero que luego de la Revolucin ve en el surgimiento del indigenismo un aspecto que no podr ser ignorado. Dentro de este contexto, la versin integracionista del indigenismo ser la ms relevante para el proyecto nacional hegemnico (Zapata, 2003, 301-303), el cual tomar como eje lo mestizo en todo sentido, reivindicando tal condicin como idnea para el desarrollo local (Gamio, 1916, 18-19), en tanto podra armonizar la diversidad que, de otro modo, se encontrara en continua tensin. Gamio ejemplifica esta dinmica a travs de la esttica, que lograra integrar elementos indgenas y occidentales de modo equilibrado (Gamio, 1916, 65-66). As, existen posturas dentro del Estado mexicano que reivindican positivamente el mestizaje como una nueva raza, portadora del mpetu necesario para el progreso nacional y continental (Vasconcelos, 1925; Subercaseaux, 2011, 217, 307). La conformacin de dicha raza tendra como agente al Estado mexicano, como lo plantea Manuel Gamio: Toca hoy a los revolucionarios de Mxico empuar el mazo y ceir el mandil del forjador para hacer que surja del yunque milagroso la nueva patria hecha de hierro y de bronce confundidos (1916, 6). En ese sentido, la raza indgena no se ver como decadente o como intrnsecamente inferior, sino como una que ha sufrido los embates de la historia y que ha sido radicalmente descuidada, de tal modo que han devenido inepto (s) para recibir y asimilar la cultura de origen europeo (Gamio, 1916, 38). En cualquier caso, se entiende que los indgenas no pueden, por s mismos, lograr el desarrollo esperado para la nacin mexicana, como lo plantea Gamio hablando sobre la clase indgena: No despertars espontneamente. Ser menester que corazones amigos laboren por tu redencin (1916, 33). El caso chileno es diferente. No obstante existan algunos autores que reivindiquen al mestizaje como algo ptimo, que devino en una mejora racial (Palacios, 1918; Subercaseaux, 2011, 225), en general el nacionalismo de desarrolla por otro camino, aunque tambin la necesidad de integracin ser central, la cultura indgena ser mucho menos valorada, por lo que se apelaba ms a una occidentalizacin del indgena que a una reivindicacin del mestizaje (Subercaseax, 2004, 226) y se buscar enaltecer a figuras de otra ndole, como por ejemplo el roto chileno (Subercaseaux, 2011, 224-225), a hroes patrios como Arturo Prat (Subercaseaux, 2011, 228-229; 381-382) o a autoritarios hombres de Estado como Diego Portales (Colmenares, 1997, 67-68). De este modo, si bien se recoge parte de la cultura indgena y tradicional como nacional (Subercaseaux, 2011, 317) sta no parece tener un lugar en el desarrollo de un proyecto histrico nacional. En efecto, ngel Rama plantea que para la incorporacin de estos elementos a la nacin era necesario que estuvieran muriendo como formas vivas de la cultura rural (Rama, 1998, 73). Asimismo, esta inclusin est mediada por su insercin y articulacin con otros elementos que componan el discurso nacional hegemnico en cada caso, por lo que es una operacin comprendida como legitimadora de lo nacional (Rama, 1998, 73-74)Por otro lado, y siguiendo en el mbito de lo racial, nos encontramos que la escuela jugaba un rol central como una instancia de defensa y desarrollo de la raza muchas veces comprendida como equivalente a la nacin- (Subercaseaux, 2011, 245), lo cual foment la educacin fsica, la gimnasia y el deporte como necesidades educacionales, las que muchas veces eran justificadas a partir de la Grecia antigua, viendo a los atletas de la antigedad como los cuerpos ideales (Bisquertt, 1930, 664-675; Godoy, 1946, 317-318).

Lo anterior es an ms profundo cuando nos referimos a los momentos previos a la crisis oligrquica, cuando la idea de barbarie estaba relacionada de modo casi intrnseco a la vida indgena contempornea e, incluso, lo clsico era visto como una manera de lograr civilizar tanto al vulgo como al indgena: La intencin de diseminar tanto perfil mitolgico y heroico la expres sin querer un dirigente argentino, quien, al abogar por una educacin que estuviera regida, ms que por estudios formales, por el ejemplo de clases superiores, traa a colacin las escaleras de mrmol y la Diana que adornaban el Jockey Club de Buenos Aires, ante la cual el indio ms guarango quedaba vencido y dominado. En efecto, el objetivo final de los clasicistas criollos era el de civilizar al paisaje y a la sociedad americana, a la chusma misma: la cita latina fue compaera inseparable de la represin y el chicote en nuestra historia. (Taboada, 2013, 207)En ese sentido, la dicotoma civilizacin/barbarie adquiere importancia para este trabajo ya que, aun cuando no sea una idea del todo hegemnica a principios del siglo XX, sigue operando incluso hasta el da de hoy (Alam, 2007; Allione, 2007). Esta dicotoma tiene como hito fundacional latinoamericano el libro Facundo de Faustino Sarmiento, donde se plantea que: el continente se encontraba en la encrucijada de la barbarie indgena y de la civilizacin occidental o, con otras palabras, naturaleza contra cultura, donde no caba la asuncin simultnea de ambos extremos. La civilizacin no es otra cosa que la alternativa asociada a Europa y los Estados Unidos, alternativa que incuestionablemente conduca al desarrollo y al progreso (Alfaro, 2014). Al aceptar, las lites latinoamericanas, esta nocin de cultura europea occidental como el canon de lo civilizado, lo que no corresponde a sta quedara relegado a la categora de inferior, subdesarrollado, salvaje, primitivo, indeseable, decadente. A fin de cuentas, lo brbaro (Colmenares, 1997, 20-24). Ante esta situacin, se hace del todo necesario el proceso que buscar civilizar o eliminar- a aquellos que son parte de lo brbaro, dentro del cual la educacin tuvo un rol importante.Asimismo, dentro de Amrica Latina tanto la nocin de nacionalismo como las de civilizacin y barbarie se vern, desde mediados del XIX (Colmenares, 1997, 25-26), pero especialmente desde finales de este siglo hasta la primera mitad del XX, permeadas, cuando no determinadas, por ideas raciales (Larran, 2001, 145-158; Subercaseaux, 2011, 292-307; Hale, 1991, 27), las que a su vez fueron subsidiarias de los racismos europeos que, en ocasiones, fueron trasplantados como prismas hermenuticos para la realidad latinoamericana. De este modo, entre los autores europeos ms ledos se encontraban Gustave Le Bon (Hale, 27-28) quien afirmaba la existencia de una esencia para cada raza, inalterable en el tiempo y biolgicamente heredada que, a su vez, determinaba el carcter de cada una de ellas (su psicologa). A partir de este carcter, las razas podan tener una mayor o menor inteligencia, posibilidad de desarrollo material, propensin de civilizarse, etc., por lo que fueron clasificadas jerrquicamente por el autor, poniendo a los blancos indoeuropeos anglosajones como superiores (Hale, 1991, 28). Por otro lado, este autor presenta argumentos a favor de la conservacin de la pureza de las razas, lo cual es recogido y matizado por Carlos Bunge, quien entiende que la mezcla racial no es problemtica cuando es una transicin, pero que es degenerativa si se la repite y perpeta por medio de continuos cruzamientos entre mestizos semejantes" (Bunge, 1918, 99). Lo anterior, como vimos, no tiene efectos homogneos en los casos de Chile y Mxico dentro del espacio temporal propuesto. En cuanto a la justificacin de las fuentes utilizadas, parto de la base que todo sistema de educacin es una forma poltica de mantener o de modificar la adecuacin de los discursos, con los saberes y los poderes que implican (Foucault, 1992b). Los dispositivos educacionales, que forman parte importante del sistema educacional en el periodo analizado, son vistos como dispositivos culturales especficos: como vehculos de socializacin, que proyectan una determinada visin de la sociedad, su historia y sus actores, de acuerdo con el proyecto poltico-social de quienes los producen. Los textos escolares apegados al currculo oficial operan, generalmente, dentro del sistema educativo como transmisores de lo que entendemos por la "ideologa oficial", es decir, el conjunto de cogniciones, valores, normas y "cosmovisin" que el Estado establece y considera aceptable para la sociedad, y de la cual, como en todo discurso, se derivan representaciones sociales, estereotipos y otras imgenes sociales sobre ciudadana, identidad, diversidad, clases sociales, gnero, etc., los cuales se transmiten a la sociedad institucionalmente, a travs del sistema educativo, lo cual hace pertinente el anlisis de los contenidos vertidos en este tipo de material (Yez: 2010, 17) De este modo, las representaciones sociales en ellos transmitidas suelen ser aquellas que el Estado considera vlidas y por tanto suelen ser expresin de la ideologa de grupos sociales que se encuentran en posiciones de influencia dentro del aparato del Estado (Yez: 2010, 18).

Se entiende, a su vez, que el discurso sobre lo griego y lo indgena americano que se encuentra plasmado en las fuentes a revisar no es enunciado por la sociedad en su conjunto, sino por una agrupacin ms o menos acotada: los grupos acadmicos y docentes que, al estar en sintona con el proceso poltico hegemnico, lo sustentan culturalmente por lo que producen y/o reproducen el conocimiento que se encuentra en dichos textos. stos, a su vez, estn fuertemente influenciados por el conocimiento histrico que se va desarrollando en los espacios acadmicos ms connotados, principalmente los europeos, cuyo discurso est fuertemente mediado por su contexto. Lo que se escribe sobre lo griego e indgena americano en Chile y Mxico tiene como elemento constitutivo un discurso acadmico hegemnico sobre dicho tpico.

A su vez, no todos los discursos sobre lo griego o lo indgena americano cuentan con la aceptacin para ser enseados; sta proviene de instituciones y grupos sociales concretos, como lo son el Ministerio de Educacin de Chile y la Secretara de Educacin Pblica de Mxico, las editoriales y los grupos que en los distintos momentos controlan el aparato estatal. Lo que para estos es vlido, aceptable o posible de enunciar es lo que se puede ver reflejado en estos textos. A su vez, dichos criterios no son inmviles ni totalizantes porque distintos grupos, en diferentes momentos, tendrn diversas matrices conceptuales que pueden, o no, disputarse la hegemona de lo que es vlido, aceptable y posible de ensear. En ese sentido, los criterios que definen lo aceptable para ensear se van modificando a lo largo de las dcadas a estudiar en Chile y Mxico. La forma en que lo hacen, su relacin con los contextos histricos e ideolgicos en que se desarrollan, la identificacin de ideas que se mantengan en el tiempo; por lo tanto, su prefiguracin, ser como ya se dijo- el eje del problema de mi investigacin. Cabe sealar que no atender la dimensin individual de la produccin discursiva, sino sta en su conjunto.Con respecto a los aspectos tericos en los que este trabajo se sustenta, partir aceptando el relativo consenso que existe hoy en da sobre la no-neutralidad de los discursos, en este caso particular, historiogrficos. La nocin de discurso ser comprendida como una rejilla conceptual de visibilidad, especificacin y clasificacin mediante la cual los individuos dotan de significado al contexto social y confieren sentido a su relacin con l, mediante el cual se conciben y conforman a s mismos como sujetos y agentes y mediante el cual, en consecuencia, regulan su prctica social. (Cabrera:2001, 51)

Entre aquellos elementos que condicionan fuertemente los discursos se encuentra su momento de enunciacin, las relaciones de poder que los entrecruzan y el rgimen de verdad al cual estn sometidos los que, ciertamente, no son neutrales.

En ese sentido, es posible plantear que un proceso, momento o situacin histrica determinada no est en relacin slo con ella misma, sino tambin al espacio y momento desde la cual sta se enuncia, es decir, est en continuo dilogo con el(los) discurso(s) dominante(s), hegemnicos o contra-hegemnicos -segn sea el caso- en tanto se condicionan mutuamente ya sea en la conservacin, la aceptacin inconsciente o en la resistencia de uno u otro.

Ahora, existen diversos elementos que son tremendamente relevantes para comprender la forma en que se da un determinado dilogo entre el(los) discurso(s) y un momento histrico determinado. En este caso me enfocar en los dos que considero ms relevantes para mi investigacin, el poder y la verdad, ambos comprendidos desde una perspectiva esencialmente histrica.

El primero lo entiendo como una relacin dinmica (Rouse:2005, Foucault:1992a), que se da en distintos niveles y se concreta de diversas maneras, por lo que es imposible tenerlo en trminos absolutos, sino que existen posibilidades de ejercicio del poder. Ahora, existen grupos sociales ms o menos determinados que, generalmente, tienen ms sino todas las- posibilidades de ejercer poder sobre los dems, lo que Castro denomina como un estado de dominacin, donde habra: una descomposicin de larelaciones de poder, en que stas dejan de ser mviles y se impide a quienes intervienen la modificacin de las mismas, para convertirse en una estructura bloqueada y rgida (Castro:2007, 17). Existen diversas maneras para llegar a tener esa mayor posibilidad de ejercer poder, entre las que se encuentra contar con recursos simblicos (Van Dijk:2004, 9). Dentro de estos, el ms relevante para este proyecto es el acceso preferencial al discurso pblico (Van Dijk:2004, 9), lo que permitira la enunciacin de un(os) discurso(s) aceptado(s) como vlido(s), y la consecuente bsqueda de obstaculizar la posibilidad de enunciar uno que difiera de aqul(los). En ese sentido, es posible comprender que el discurso y las relaciones de poder estn en continua relacin y se van condicionando mutuamente, y mi intencin es revisar un modo en que esta dinmica se materializa en un mbito concreto y esencial para los casos Chile y Mxico en el periodo a revisar.

PLAN DE TRABAJO: en relacin con los objetivos planteados, seale detalladamente las etapas o actividades contempladas en la ejecucin del proyectoEl plan de trabajo tendr como primera etapa la revisin bibliogrfica de textos que puedan complementar y ampliar, tanto histrica como tericamente, la base aqu presentada. Paralelamente se profundizar en la bsqueda y revisin de programas, currculums, textos escolares y revistas oficiales chilenas de la poca. Luego se proceder a la revisin y fichaje del corpus documental, para seguir con la transcripcin de los datos ms relevantes. Luego, se har necesaria replicar la misma operacin (la bsqueda, revisin y fichajes del corpus documental), pero en relacin a los textos mexicanos. Para esto ser imprescindible viajar a dicho pas con el objeto de desarrollar este trabajo. En ese contexto, la Biblioteca Nacional de Mxico ser imprescindible, as como tambin los archivos de la Secretara de Educacin Pblica.Una vez finalizado dicho trabajo, se proceder a la etapa crucial de la tabulacin y ordenacin de los datos, necesaria para los anlisis posteriores. Esto se realizar acorde a lo planteado previamente, en el apartado metodolgico.

Posteriormente, se llevar a cabo el anlisis de las fuentes, a partir de los datos ya recogidos, ordenados y tabulados; y una vez avanzada esta etapa, ser posible comenzar con la interpretacin y escritura final de la tesis. El ltimo momento dentro del plan de trabajo corresponde a la revisin y correccin de la investigacin, que ser llevada a cabo por la profesora gua, quien escribe y pares estudiantes e investigadores que puedan aportar, tanto en trminos formales como tericos e historiogrficos, a la complementacin y correccin del trabajo.

FICHA RESUMEN DE TESIS DE (PROGRAMA)

NOMBRE DEL CANDIDATO: Enrique Riob___________________________________PROFESOR PATROCINANTE: Claudia Zapata_____________________________________TTULO DE LA TESIS: La prefiguracin de lo griego y lo indgena en los textos escolares mexicanos y chilenos. 1920-1950. Raza, Nacin y Civilizacin.

AO Y SEMESTRE DE INICIO: 2014, II Semestre_________________________________PALABRAS CLAVES: Grecia Antigua Indgenas americanos raza nacin civilizacin/barbarieRESUMEN DE LA TESIS (NO SUPERAR LAS 250 PALABRAS):

En este trabajo buscar desarrollar una comparacin entre los discursos relativos a griegos antiguos y a indgenas americanos contenidos en dispositivos escolares oficiales de Chile y Mxico entre 1920 y 1950. Tomar como ejes analticos los conceptos de raza, nacin y la dicotoma civilizacin/barbarie, para revisar los modos en que los discursos relativos a estos afectaron o se pueden encontrar operando en el corpus documental analizado.

De ese modo, busco reflexionar en torno a las maneras en que las culturas griega e indgena se presentan como relevantes, o no, para el proyecto histrico oficial chileno y mexicano. Asimismo, se buscar inquirir en torno a al por qu de los posibles cambios y continuidades presentes en el discurso revisado, as como las diferencias y similitudes existentes entre los casos chileno y mexicano.

As, postulo que en el caso mexicano este discurso relativo a lo indgena tendr una valoracin ms positiva que en Chile, al tener un mayor peso en lo correspondiente al proyecto nacional ya que la figura del mestizo eje del mismo, al menos en el mbito cultural- deja de tener mpetu si una de sus partes es pensada como decadente o racialmente inferior. Por el contrario, esto ltimo sera ms cercano a lo que ocurre en Chile, donde el proyecto cultural hegemnico no le entrega tanta importancia a lo mestizo, y menos an a lo indgena, en torno al cual perviven elementos de la dicotoma civilizacin/barbarie.

Por otra parte, sobre lo griego antiguo existir un mayor consenso, y en ambos casos se comprender de manera muy idealizada, como paradigma de lo civilizado y racialmente superior, as como fundamental para un legado universal en que ambos pases se incluyen.

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Parto desde la siguiente base: lo griego clsico y la consecuente naturalizacin de unas formas especficas de acercarse a ellos- ha sido utilizado de diversas maneras a lo largo de la historia. Por ejemplo, para legitimar la idea de una superioridad europea por sobre el resto del mundo, y por lo tanto, tambin a los imperios y colonias de la poca (Vasunia:2005); para sustentar teoras raciales relativas a dicha superioridad (Bernal:1993); para justificar una supuesta labor civilizadora por parte de los europeos para con el resto del mundo (Weiss:2011), para sustentar prcticas culturales excluyentes y elitistas (Schein:2008). Asimismo, tambin sern apropiados para criticar dichas polticas e ideas, en Amrica Latina se han ledo los clsicos como significativos para el proceso de independencia (Bochetti:2009, Laird:2009), o en frica se han llevado a cabo importantes trabajos de apropiacin y relectura de tragedias y tpicos clsicos, las que dialogan con los momentos y realidades de tal espacio, generalmente con afanes de crtica tanto al colonialismo poltico como al eurocentrismo cultural (Hardwick:2007). Similar situacin ocurre en el Caribe (Greenwood:2005).

Comprendida como el punto de inicio, la experiencia en comn o la base sobre la que se construyen una diversidad de discursos, prcticas, instituciones y/o saberes, que siendo diversos y, en ocasiones, aun contradictorios, parten de la misma premisa. En ese sentido, desde una matriz se generan diferentes posibilidades, cuyo desenvolvimiento no est normado por sta.

Grupo ntimamente relacionado con los motivos clsicos europeos.

Que se inicia con la revolucin mexicana y abarca un periodo de varias dcadas si se piensa a lo largo de Amrica Latina (la revolucin boliviana, costarricense y sandinista, son algunos ejemplos exitosos y dismiles en trminos cronolgicos). Esta crisis implic un cambio en la configuracin de fuerzas dentro de los estados, apareciendo nuevos actores polticos y culturales con otros proyectos histricos y nacionales que se ponan en pugna con las oligarquas que, hasta ese momento, controlaban es estado de modo total. Desde esta perspectiva, la crisis va ms all de la coyuntura de crisis econmica mundial de 1929, y est explicada mayormente por las tensiones internas derivadas del modo en que se desarroll el sistema poltico, econmico y social hasta ese momento (Cardoso y Faletto, 1975, 56). En todo caso, para Halperin, la crisis econmica de 1929 es fundamental para la comprensin de este proceso, en tanto 'alcanzo de inmediato un impacto devastador sobre Amrica Latina' (1969, 361), teniendo devastadores efectos en las economas continentales, agravando la coyuntura, no slo al mbito poltico, sino tambin al econmico, lo que traera importantes consecuencias para el modelo de desarrollo posterior, fuertemente marcado por la industrializacin y el proteccionismo.

El simbolismo de Atenea o Minerva en relacin a la educacin y la racionalidad es llevada al extremo durante el gobierno de Estrada Cabrera en Guatemala, cuando instaura las llamadas Minervalias o fiestas a Minerva en celebracin de los estudiantes (Garca Lira, 2010; Carrera, 1998)

Ver galera de imgenes en Construir la nacin: Enseanza de la Historia y Geografa (Disponible en la pgina web del Museo de la Educacin:

HYPERLINK "http://www.museodelaeducacion.cl//Vistas_Publicas/publicGaleria/galeriaPublicDetalle.aspx?galeria=2187" http://www.museodelaeducacion.cl//Vistas_Publicas/publicGaleria/galeriaPublicDetalle.aspx?galeria=2187) y la galera de imgenes en: Emblemtica escolar: identidad, memoria y consolidacin de la escuela (Disponible en la pgina web del Museo de la Educacin:

HYPERLINK "http://www.museodelaeducacion.cl//Vistas_Publicas/publicContenido/ContenidoPublicDetalle.aspx?folio=17878" http://www.museodelaeducacion.cl//Vistas_Publicas/publicContenido/ContenidoPublicDetalle.aspx?folio=17878)

Un caso distinto es la reivindicacin de las grandes civilizaciones antiguas como parte de la construccin de nacin, pero la negacin de los indgenas contemporneos como relevantes para tal proceso (Rodrguez, 2005, 121-144)

Relevante socilogo e intelectual argentino del periodo finisecular.

Por ejemplo, la revolucin francesa (Cnfora:1991), el imperialismo ingls (Vasunia:2005, Harrison:2005) o los regmenes nazis y fascistas (Prez:2010, Cnfora:1991) afectan de modo claro el modo en que se piensan los clsicos dentro de cada contexto.