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Semana del 11 al 17 de Agosto 2014
[E. Libro] [E.M.T] [R. Servicio] [Atalaya]
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[Cántico 71 ][E. Libro] [Inicio]
[ 9 ][ 10 ][ 11 ][ 12 ][ 13 ][ 14 ][ 15 ][ 16 ]
cl cap. 11 párrs. 9 - 16
La misericordia y la justicia perfecta de Jehová
9-11. a) ¿Qué relación existe entre la justicia de
Jehová y su misericordia? b) ¿Cómo se manifiestan
la justicia y la misericordia de Jehová en su manera
de tratar a los seres humanos pecaminosos?
[ 9 ] [Textos] La justicia de Jehová, como las demás
facetas de su inigualable personalidad, es perfecta, sin
deficiencia alguna. Moisés exaltó al Creador con estas
palabras: “La Roca, perfecta es su actividad, porque
todos sus caminos son justicia. Dios de fidelidad, con
quien no hay injusticia; justo y recto es él”
(Deuteronomio 32:3, 4). Toda expresión de su justicia es
equilibrada: ni muy indulgente ni muy severa.
[ 10 ] [Textos] Existe una relación muy estrecha entre
esta cualidad del Altísimo y su misericordia. Salmo
116:5 dice: “Jehová es benévolo y justo; y nuestro Dios
es Uno que muestra misericordia”. Sí, es justo y
misericordioso a la vez. Estos atributos no son
contradictorios. Su ejercicio de la misericordia no atenúa
su justicia, como si esta fuera muy severa. Más bien, él
suele expresar ambas cualidades simultáneamente e
incluso en la misma acción. Veamos un ejemplo.
[ 11 ] [Textos] Todos los seres humanos hemos heredado el pecado, por lo que merecemos la pena capital (Romanos 5:12). Pero Jehová no se complace en que mueran los pecadores: es “un Dios de actos de perdón, benévolo y misericordioso” (Nehemías 9:17). Sin embargo, su santidad no le permite aprobar la injusticia. Entonces, ¿cómo podría tratar con misericordia a personas pecadoras por naturaleza? Hallamos la respuesta en una de las verdades más preciosas de las Escrituras: el rescate que ha provisto para la salvación de la humanidad. En el capítulo 14 aprenderemos más detalles sobre esta amorosa dádiva, que demuestra a la vez profunda justicia y suma misericordia. Mediante ella, el Creador expresa tierna misericordia a los pecadores arrepentidos y al mismo tiempo mantiene sus normas de justicia perfecta (Romanos 3:21-26).
La justicia de Jehová es reconfortante
12, 13. a) ¿Por qué nos atrae a Jehová su justicia?
b) ¿A qué conclusión llegó David sobre la justicia de
Jehová, y cómo nos reconforta?
[ 12 ] [Textos] La justicia de Jehová no es una
cualidad fría que nos inspire rechazo, sino que es
atrayente y nos acerca a él. Como indica la Biblia con
claridad, es un atributo que se caracteriza por la
compasión. Analicemos algunas de las alentadoras
formas en que lo ejercita.
[ 13 ] [Textos] La justicia perfecta del Todopoderoso lo
mueve a ser fiel, a ser leal a sus siervos. El salmista
David pudo constatar por sí mismo esta faceta de la
rectitud divina. ¿A qué conclusión lo llevó su propia
experiencia y el estudio de los caminos de Dios?
“Jehová es amador de la justicia, y no dejará a los que
le son leales. Hasta tiempo indefinido ciertamente serán
guardados”, declaró (Salmo 37:28). ¡Qué garantía tan
reconfortante! Ni por un momento abandonará él a sus
leales. Por lo tanto, podemos confiar en que estará
cerca de nosotros y nos cuidará con cariño, pues lo
garantiza su justicia (Proverbios 2:7, 8).
14. ¿Cómo se evidencia en la Ley el interés de
Jehová por los desfavorecidos?
[ 14 ] [Textos] La justicia divina es sensible a las
necesidades de los afligidos. Si examinamos la Ley que
Jehová dio a Israel, resulta evidente que él se preocupa
por los desfavorecidos. Por ejemplo, vemos
disposiciones especiales para asegurar el cuidado de
huérfanos y viudas (Deuteronomio 24:17-21). Como
Dios reconocía lo difícil que solía ser la vida para ellos,
él mismo se convirtió en su Juez y Protector paternal,
quien “ejecuta[ba] juicio para el huérfano de padre y la
viuda” (Deuteronomio 10:18; Salmo 68:5)*Véase la nota
.
Advirtió a los israelitas que no se aprovecharan de tales
mujeres y niños desamparados, porque oiría sin falta su
clamor. “Verdaderamente se encenderá mi cólera”,
señaló (Éxodo 22:22-24). Aunque la cólera no es una de
sus cualidades dominantes, siente justa indignación
ante los abusos deliberados, sobre todo si los sufren los
humildes e indefensos (Salmo 103:6).
Nota: * Aunque el término hebreo para “huérfano de padre”
sea masculino, no indica en modo alguno desinterés por el
sexo femenino. Jehová incluyó en la Ley el relato sobre una
decisión judicial que garantizaba que las hijas del difunto
Zelofehad recibieran una posesión hereditaria. Aquella
sentencia sentó un precedente que amparaba los derechos de
las huérfanas (Números 27:1-8).
15, 16. ¿Qué gran prueba hay de la imparcialidad de
Jehová?
[ 15 ] [Textos] Jehová también nos asegura que “no
trata a nadie con parcialidad ni acepta soborno”
(Deuteronomio 10:17). A diferencia de muchos seres
humanos poderosos o influyentes, no deja que pesen en
sus decisiones las riquezas materiales o las apariencias,
ni tiene prejuicios ni favoritismos de ningún tipo. Veamos
una prueba sobresaliente de su imparcialidad: lejos de
limitar a una minoría selecta la oportunidad de ser sus
adoradores verdaderos, con vida eterna en mira, “en
toda nación, el que le teme y obra justicia le es acepto”
(Hechos 10:34, 35). Ofrece esta maravillosa perspectiva
a todas las personas, sin importar la posición social, el
color de la piel ni el país de residencia. ¿No es esta la
mejor justicia posible?
[ 16 ] [Textos] Hay otro aspecto de la justicia perfecta
de Jehová que es digno de análisis y respeto: cómo
trata a quienes quebrantan sus justas normas.
[E.M.T] [Inicio]
[P.S] [Nº1] [Nº2] [Nº3]
[P.S] Lectura de la Biblia: Números 7 a 9 | Puntos
Sobresalientes
Lecciones para nosotros:
8:25, 26. Para distribuir de manera conveniente los puestos de servicio de los levitas y por consideración a la edad, a los hombres mayores se les apartaba del servicio obligatorio. Sin embargo, podían ofrecerse para ayudar a otros levitas. Aunque en nuestros días no se jubila a nadie de su labor como proclamador del Reino, el principio implícito en esta ley nos enseña una valiosa lección. Aquel cristiano cuya edad avanzada le impida desempeñar ciertas obligaciones puede participar en otros aspectos del servicio que estén a su alcance.
[Nº1] Núm. 1: Números 9:9-23
9 Entonces Jehová habló a Moisés, diciendo:
10 “Habla a los hijos de Israel, y di: „Aun cuando
cualquier hombre de ustedes o de sus generaciones esté inmundo por un alma, o se halle en un viaje distante, él también tiene que preparar el sacrificio de la pascua a Jehová.
11 Deben prepararlo en el segundo
mes, el día catorce, entre las dos tardes. Deben comerlo junto con tortas no fermentadas y verduras amargas. 12
No deben dejar que quede nada de él hasta la mañana, y no deben quebrarle hueso alguno. Conforme al estatuto entero de la pascua deben prepararlo. 13
Pero cuando el hombre estuviera limpio o no se hallara de viaje, y dejara de preparar el sacrificio de la pascua, aquella alma entonces tiene que ser cortada de su pueblo, porque no presentó la ofrenda de Jehová a su tiempo señalado. Aquel hombre responderá por su pecado.
14 ”‟Y en caso de que un residente forastero esté
residiendo con ustedes como forastero, él también tiene que preparar el sacrificio de la pascua a Jehová. Conforme al estatuto de la pascua y conforme a su procedimiento regular es como debe hacerlo. Debe existir un solo estatuto para ustedes, tanto para el residente forastero como para el natural del país‟”.
15 Ahora bien, el día en que se erigió el tabernáculo,
la nube cubrió el tabernáculo de la tienda del Testimonio, pero, al atardecer, lo que parecía ser fuego continuó sobre el tabernáculo, hasta la mañana.
16 De
esa manera siguió constantemente: La nube lo cubría de día, y la apariencia de fuego de noche.
17 Y siempre
que la nube subía de sobre la tienda, los hijos de Israel
partían inmediatamente después, y en el lugar donde residía la nube, allí era donde acampaban los hijos de Israel.
18 Por orden de Jehová partían los hijos de Israel,
y por orden de Jehová acampaban. Todos los días que la nube residía sobre el tabernáculo, se quedaban acampados.
19 Y cuando la nube prolongaba su
detención sobre el tabernáculo muchos días, los hijos de Israel también guardaban para con Jehová su obligación de no partir.
20 Y a veces la nube continuaba unos
cuantos días sobre el tabernáculo. Por orden de Jehová se quedaban acampados, y por orden de Jehová partían.
21 Y a veces la nube continuaba desde el
atardecer hasta la mañana; y se alzaba la nube por la mañana, y ellos partían. Fuera de día o de noche que se alzara la nube, ellos también partían.
22 Fueran dos días
o un mes o más días durante los cuales la nube prolongara su detención sobre el tabernáculo, residiendo sobre él, los hijos de Israel se quedaban acampados y no partían; pero cuando se alzaba, partían.
23 Por orden de Jehová acampaban, y por orden
de Jehová partían. Guardaban su obligación para con Jehová por orden de Jehová, mediante Moisés.
[Nº2] Núm. 2: Una vez salvo no significa siempre salvo
(rs pág. 342 párrs. 4-7)
Una vez que uno está salvo, ¿sigue estando siempre salvo?
Jud. 5, VV (1977): “Mas quiero recordaros, ya que una vez lo habéis sabido, que el Señor, habiendo salvado al pueblo sacándolo de Egipto, después destruyó a los que no creyeron.” (Las bastardillas son nuestras.)
Mat. 24:13, VV (1977): “El que persevere hasta el fin, éste será salvo.” (De modo que la salvación final de la persona no se determina al momento que empieza a ejercer fe en Jesús.)
Fili. 2:12, VV (1977): “Tal como siempre habéis obedecido, no como en mi presencia solamente, sino mucho más ahora en mi ausencia, procurad vuestra salvación con temor y temblor.” (Estas palabras se dirigieron a los “santos” de Filipos, como se declara en Filipenses 1:1. Pablo los instó a no estar demasiado confiados, sino reconocer que su salvación final todavía no estaba asegurada.)
Heb. 10:26, 27, VV (1977): “Si continuamos pecando voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los pecados, sino una horrenda expectación de juicio, y un fuego airado, que está a punto de consumir a los adversarios.” (Por tanto, la Biblia no está de acuerdo con la idea de que, sin importar qué pecados cometa una persona después de estar „salva‟, no perderá su salvación. Anima a uno a ser fiel. Véase también Hebreos 6:4-6, donde se muestra que hasta una persona que ha sido ungida con espíritu santo puede perder su esperanza de salvación.)
[Nº3] Núm. 3: Acán. Las terribles consecuencias de
robarle a Dios (it-1 pág. 39)
ACÁN
(relacionado por un juego de palabras con Acar, que significa: “Acarreador de Extrañamiento [Dificultad]”).
Hijo de Carmí, de la casa de Zabdí, de la familia de Zérah, que pertenecía a la tribu de Judá; también llamado Acar. (1Cr 2:7.)
Cuando los israelitas cruzaron el Jordán, Jehová dispuso explícitamente que las primicias de la conquista, es decir, la ciudad de Jericó, „tenían que llegar a ser una cosa dada por entero a la destrucción; pertenecían a Jehová‟. Su plata y su oro habían de entregarse para el tesoro de Jehová. (Jos 6:17, 19.) Sin embargo, cuando Acán se encontró una costosa prenda de vestir de Sinar, una barra de oro de 50 siclos (unos 6.400 dólares [E.U.A.]) y 200 siclos de plata (440 dólares [E.U.A.]), se lo quedó y lo enterró en secreto debajo de su tienda. (Jos 7:21.) En realidad, había robado a Dios. Debido a esta violación de las instrucciones explícitas de Jehová, cuando atacaron a Hai, la siguiente ciudad, Jehová retiró su bendición e Israel fue puesto en fuga. ¿Quién había sido el culpable? Nadie confesó. Entonces todo Israel fue sometido a juicio. Tribu por tribu, luego familia por familia de la tribu de Judá y, finalmente, hombre por hombre de la casa de Zabdí, fueron pasando todos delante de Jehová hasta que Acán, el culpable, “llegó a ser escogido”. (Jos 7:4-18.) Fue entonces cuando, por primera vez, Acán admitió su pecado. La ejecución no se demoró. Apedrearon a Acán, su familia (que era muy improbable que ignoraran lo que él había hecho) y su ganado, y luego, junto con todas sus posesiones, “los quemaron con fuego” en la llanura baja de Acor, que significa “Extrañamiento; Dificultad”. (Jos 7:19-26.)
[R. Servicio] [Inicio]
Cántico 107
5 min. “1914-2014: cien años de gobierno del
Reino.” Análisis con el auditorio. Pídale a alguien
que lea el párrafo que está al principio de esta
página. Este mes, las Reuniones de Servicio
destacarán el tema del Reino. Repase los planes
de la congregación para el servicio del campo.
1914-2014 Cien años de gobierno del
Reino
En 1922, el hermano Rutherford proclamó con valor:
“¡Miren, el Rey rige! [...] Anuncien al Rey y su reino”.
Este año se cumple un siglo de gobierno del Reino, y
estas palabras todavía nos llenan de emoción.
Esforcémonos al máximo para que agosto sea un mes
de actividad histórica y ayudemos a otras personas a
aprender del Reino usando nuestro sitio de Internet
jw.org.
10 min. “Usemos el nuevo tratado Visite jw.org.”
Analice el contenido del tratado. Que un
publicador demuestre cómo ofrecerlo y le enseñe
a la persona el sitio de Internet jw.org con su
dispositivo electrónico.
Usemos el nuevo tratado Visite jw.org
El título completo del tratado es ¿Dónde hallar
respuestas a las grandes cuestiones de la vida? Al
dorso plantea tres preguntas. Cuando hable con una
persona, averigüe qué pregunta le interesa más y
muéstrele cómo encontrar la respuesta en nuestro
sitio de Internet bajo ENSEÑANZAS BÍBLICAS >
PREGUNTAS SOBRE LA BIBLIA. Allí también hallará
respuestas a preguntas como estas: “¿Qué es el Reino
de Dios?” y “¿Qué cosas logrará el Reino de Dios?”.
Lleve siempre con usted algunos ejemplares de este
tratado para ayudar a la gente a aprender lo que dice
la Biblia sobre el futuro maravilloso que
disfrutaremos gracias al Reino de Dios.
15 min. “Mejore sus habilidades en el ministerio:
hable del Reino con valor y convicción.” Análisis
con el auditorio. Que dos publicadores
escenifiquen la siguiente situación: un publicador
está haciendo fila en una tienda. La persona que
está a su lado mira un periódico y dice: “Este
mundo es un desastre. Todos se creen que tienen
la solución, pero las cosas no hacen más que
empeorar”. El publicador piensa en voz alta:
“Debería decirle algo, hablarle del Reino”.
Entonces le dice: “Sí... No hay más que malas
noticias, pero me gustaría que leyera este
impreso. El sitio de Internet que se menciona ahí
me ha ayudado a hallar respuestas a muchas
cuestiones importantes de la vida”. El publicador
destaca un punto del tratado, y la persona
demuestra interés en lo que está escuchando.
Mejore sus habilidades en el
ministerio: hable del Reino con valor y
convicción
Por qué es importante. Para obedecer el claro
mandato de 2 Timoteo 1:7, 8, es importante que
hablemos del Reino con convicción. ¿De dónde
podemos sacar el valor para hacerlo?
Cómo hacerlo:
Póngase en el lugar de la gente (Filip. 2:4). A muchas
personas les angustia la situación mundial o tienen
numerosos problemas. La empatía nos motiva a
hablarles del Reino.
Asegúrese de que lleva algunos tratados antes de
salir de casa.
Intente esto durante el mes:
Piense en una persona a la que le gustaría darle
testimonio. Pídale a Jehová que le dé valor para
hablarle del Reino y la oportunidad para hacerlo.
Cántico 92 y oración
Cántico 84 [Atalaya] [Inicio]
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22 ]
“Tienes que amar a tu prójimo”
“Tienes que amar a tu prójimo como a ti mismo.”
(MAT. 22:39)
Cántico 72
¿QUÉ RESPONDERÍA? • ¿Quién es nuestro prójimo? • ¿Por qué debemos mostrar amor a nuestro prójimo, y cómo podemos hacerlo? • ¿Cuáles son algunos de los aspectos del amor que se mencionan en 1 Corintios 13:4-8?
1, 2. a) ¿Cuál dijo Jesús que era el segundo
mandamiento más importante de la Ley? b) ¿Qué
preguntas contestará este artículo?
[ 1 ] [Textos] CUANDO un fariseo le preguntó a Jesús
cuál era el principal mandamiento de la Ley, este le
contestó: “Tienes que amar a Jehová tu Dios con todo
tu corazón y con toda tu alma y con toda tu mente”.
Ya vimos en el artículo anterior lo que esto significa.
Pero luego Jesús añadió que el segundo mandamiento
más importante era este: “Tienes que amar a tu
prójimo como a ti mismo” (Mat. 22:34-39).
[ 2 ] [Textos] En efecto, Jesús dijo que debemos amar
a nuestro prójimo como a nosotros mismos. Ahora
bien, ¿quién es nuestro prójimo? ¿Y cómo podemos
demostrarle amor? Este artículo contestará esas
preguntas.
¿QUIÉN ES NUESTRO PRÓJIMO?
3, 4. a) ¿Qué parábola usó Jesús para contestarle
al hombre que le preguntó quién era su prójimo?
b) ¿Cómo ayudó el samaritano al judío maltrecho?
(Vea la ilustración del principio.)
[ 3 ] [Textos] Cierto hombre le preguntó a Jesús:
“¿Quién, verdaderamente, es mi prójimo?”. En
respuesta, Jesús le relató la parábola del buen
samaritano y le enseñó lo que significa amar al
prójimo (lea Lucas 10:29-37). Le contó que a un judío
lo habían atracado, golpeado y dejado medio muerto
en el camino. Entonces pasó un sacerdote, y luego, un
levita. ¿Lo ayudaron, como se esperaría de ellos? No.
Cuando lo vieron, siguieron adelante. Fue un
samaritano quien se detuvo a ayudarlo. Algo
sorprendente, pues en aquel tiempo los judíos y los
samaritanos se despreciaban (Juan 4:9).
[ 4 ] [Textos] Para curar las heridas del judío
maltrecho, el samaritano vertió en ellas aceite y vino.
Después lo llevó a una posada y le dio al dueño dos
denarios —el equivalente a dos días de trabajo—
para los cuidados que el judío pudiera necesitar (Mat.
20:2). Es fácil darse cuenta de que el samaritano fue
quien se portó como un buen prójimo. La parábola de
Jesús nos enseña a demostrar amor y compasión por
todas las personas, sin importar su nacionalidad o
cultura.
5. ¿Cómo demostraron los siervos de Jehová amor
al prójimo durante un reciente desastre natural?
[ 5 ] [Textos] En estos “últimos días” es muy difícil
encontrar personas compasivas; muchas son crueles
y violentas, y el prójimo les importa poco (2 Tim. 3:1-
3). Prueba de ello es lo que ocurrió cuando el huracán
Sandy azotó la ciudad de Nueva York, a finales de
octubre de 2012. En una zona muy afectada de la
ciudad, algunos desvalijaron las casas de gente que ya
estaba sufriendo la falta de electricidad, calefacción y
otras cosas necesarias. En cambio, en la misma zona,
los testigos de Jehová organizaron un programa para
ayudarse entre ellos y también socorrer a otras
personas. Los cristianos actuamos así porque
amamos al prójimo. Pero ¿de qué otras maneras
podemos demostrarle amor?
Los siervos de Jehová ayudan a los demás (Vea el
párrafo 5)
¿CÓMO PODEMOS DEMOSTRAR AMOR AL
PRÓJIMO?
6. ¿Por qué es una muestra de amor al prójimo
predicar las buenas nuevas?
[ 6 ] [Textos] Démosle a nuestro prójimo ayuda
espiritual. Cuando predicamos, les ofrecemos a las
personas “el consuelo de las Escrituras” (Rom. 15:4).
No hay duda de que les demostramos amor al darles
a conocer las buenas nuevas del Reino (Mat. 24:14).
Es un verdadero honor llevarles el mensaje del “Dios
que da esperanza” (Rom. 15:13).
7. a) ¿Cuál es la Regla de Oro? b) ¿Cómo nos
beneficia seguir la Regla de Oro?
[ 7 ] [Textos] Sigamos la Regla de Oro. Jesús nos
dijo en qué consistía esta regla cuando pronunció las
siguientes palabras en su Sermón del Monte: “Todas
las cosas que quieren que los hombres les hagan,
también ustedes de igual manera tienen que
hacérselas a ellos; esto, de hecho, es lo que significan
la Ley y los Profetas” (Mat. 7:12). Cuando tratamos a
los demás como aconsejó Jesús, actuamos de acuerdo
con el espíritu de “la Ley” (los libros de Génesis a
Deuteronomio) y “los Profetas” (los libros proféticos
de las Escrituras Hebreas). En estos escritos vemos
que Dios bendice a los que demuestran amor por los
demás. Por ejemplo, a través del profeta Isaías,
Jehová dijo: “Guarden el derecho y hagan lo que es
justo. [...] Feliz es el hombre mortal que hace esto” (Is.
56:1, 2). Está claro que, si amamos a nuestro prójimo
y somos justos con él, Jehová nos bendice.
8. a) ¿Por qué debemos amar a nuestros
enemigos? b) ¿Qué puede pasar si les mostramos
amor a nuestros enemigos?
[ 8 ] [Textos] Amemos a nuestros enemigos. Jesús
enseñó: “Oyeron ustedes que se dijo: ‘Tienes que
amar a tu prójimo y odiar a tu enemigo’. Sin embargo,
yo les digo: Continúen amando a sus enemigos y
orando por los que los persiguen; para que
demuestren ser hijos de su Padre que está en los
cielos” (Mat. 5:43-45). El apóstol Pablo dio un consejo
parecido cuando escribió: “Si tu enemigo tiene
hambre, aliméntalo; si tiene sed, dale algo de beber”
(Rom. 12:20; Prov. 25:21). Según la Ley mosaica, si
un israelita veía que el animal de su enemigo había
quedado atrapado bajo la carga, debía ayudarle a
liberarlo (Éx. 23:5). Esa colaboración podía hacer que
anteriores enemigos llegaran a ser buenos amigos. Lo
mismo es cierto hoy. Cuando tratamos con amor a
nuestros enemigos, incluso a los perseguidores más
crueles, podemos ablandarlos y hacer que cambien
de actitud. ¿Y quién sabe? Quizás algunos hasta se
hagan siervos de Jehová.
9. ¿Qué dijo Jesús acerca de hacer las paces con
nuestro hermano?
[ 9 ] [Textos] “Siga[mos] tras la paz con todos.”
(Heb. 12:14.) Por supuesto, esto incluye a nuestros
hermanos, pues Jesús dijo: “Si estás llevando tu
dádiva al altar y allí te acuerdas de que tu hermano
tiene algo contra ti, deja tu dádiva allí enfrente del
altar, y vete; primero haz las paces con tu hermano, y
luego, cuando hayas vuelto, ofrece tu dádiva” (Mat.
5:23, 24). Jehová nos bendecirá si, cuando tenemos
problemas con algún hermano, le mostramos amor y
tratamos de hacer las paces enseguida.
10. ¿Por qué no deberíamos andar buscando las
faltas de los demás?
[ 10 ] [Textos] No seamos criticones. “Dejen de
juzgar, para que no sean juzgados —dijo Jesús—;
porque con el juicio con que ustedes juzgan, serán
juzgados; y con la medida con que miden, se les
medirá. Entonces, ¿por qué miras la paja que hay en
el ojo de tu hermano, pero no tomas en cuenta la viga
que hay en tu propio ojo? O, ¿cómo puedes decir a tu
hermano: ‘Permíteme extraer la paja de tu ojo’;
cuando ¡mira!, hay una viga en tu propio ojo?
¡Hipócrita! Primero extrae la viga de tu propio ojo, y
entonces verás claramente cómo extraer la paja del
ojo de tu hermano.” (Mat. 7:1-5.) ¿Cómo vamos a
criticar las pequeñas faltas de otros cuando nosotros
mismos somos culpables de faltas muy grandes? ¡Qué
lección tan impresionante!
UNA MANERA ESPECIAL DE MOSTRAR AMOR AL
PRÓJIMO
11, 12. ¿De qué manera especial mostramos amor
a nuestro prójimo?
[ 11 ] [Textos] Jesús nos enseñó que una manera
especial de mostrar amor a nuestro prójimo es
predicar las buenas nuevas del Reino (Luc. 8:1). Él
mandó a sus seguidores: “Hagan discípulos de gente
de todas las naciones” (Mat. 28:19, 20). Al cumplir
con esta comisión, intentamos ayudar a otros a
abandonar el camino ancho que lleva a la destrucción
y tomar el camino estrecho que conduce a la vida
(Mat. 7:13, 14). Sin duda, a Jehová le complacen
nuestros esfuerzos y los bendice.
[ 12 ] [Textos] Al igual que Jesús, ayudamos a la
gente a darse cuenta de que necesita a Jehová (Mat.
5:3). Si alguien muestra interés en aprender,
satisfacemos esa necesidad transmitiéndole “las
buenas nuevas de Dios” (Rom. 1:1). Los que aceptan
el mensaje del Reino se reconcilian con Dios gracias
al sacrificio de Jesucristo (2 Cor. 5:18, 19). Sin duda,
la predicación es una manera sumamente importante
de mostrar nuestro amor al prójimo.
13. ¿Cómo ve usted la obra de proclamar el
Reino?
[ 13 ] [Textos] Cuando nos preparamos bien para
volver a visitar a las personas y darles clases de la
Biblia, tenemos la satisfacción de ayudarles a
amoldarse a las justas normas de Dios. Para algunos,
esto tal vez signifique hacer grandes cambios en su
vida (1 Cor. 6:9-11). Nos da mucho gusto ver que Dios
atrae a aquellos que están “correctamente dispuestos
para vida eterna” y les ayuda a hacer los cambios
necesarios para que puedan disfrutar de una estrecha
amistad con él (Hech. 13:48). En el caso de muchos, la
desesperación da paso a la felicidad. Las
preocupaciones que tenían desaparecen a medida
que confían más y más en su Padre celestial. ¡Cuánto
nos alegra observar cómo van progresando! ¿Verdad
que es una gran bendición poder demostrar amor a
nuestro prójimo de esta manera especial?
¿CÓMO SE DESCRIBE EL AMOR EN LA BIBLIA?
14. ¿Qué aspectos del amor mencionados por
Pablo le llaman la atención a usted?
[ 14 ] [Textos] El apóstol Pablo hizo una descripción
del amor. Si ponemos en práctica sus palabras
cuando tratamos con el prójimo, agradaremos a
Jehová, nos ahorraremos muchos problemas y
seremos felices (lea 1 Corintios 13:4-8). Repasemos
brevemente lo que Pablo escribió y veamos cómo
ponerlo en práctica al tratar con los demás.
15. a) ¿Por qué debemos ser pacientes y
bondadosos? b) ¿Por qué debemos evitar los
celos y el orgullo?
[ 15 ] [Textos] “El amor es sufrido [o, “paciente”] y
bondadoso.” Jehová ha demostrado paciencia y
bondad con todos los seres humanos, imperfectos
como somos. ¿No deberíamos nosotros con mucha
más razón ser pacientes y bondadosos con los demás
cuando cometen errores, incluso cuando son
desconsiderados? “El amor no es celoso.” Si amamos
de verdad a nuestros hermanos, no les tendremos
envidia, ni por las cosas que tengan ni por las
responsabilidades que hayan recibido en la
congregación. Además, si nuestro amor es sincero, no
seremos orgullosos ni andaremos haciendo alarde de
nosotros mismos. La Biblia dice que Jehová odia a
quienes tienen “ojos altivos y un corazón arrogante”
(Prov. 21:4).
16, 17. ¿Qué maneras de demostrar amor se
describen en 1 Corintios 13:5, 6?
[ 16 ] [Textos] El amor nos ayudará a comportarnos
siempre con decencia, a no mentir a nuestro prójimo
ni robarle ni hacerle nada que vaya contra las normas
de Jehová. El amor también nos impulsará a
interesarnos no solo por nuestro propio bien, sino
también por el de los demás (Filip. 2:4).
[ 17 ] [Textos] El amor sincero “no se siente
provocado. No lleva cuenta del daño”. Si alguien nos
trata mal, no nos enojamos enseguida. Tampoco
tomamos nota de las veces que nos hacen daño (1
Tes. 5:15). No podríamos agradar a Dios si fuéramos
rencorosos. Por otra parte, esos resentimientos
podrían arder en nuestro interior como un fuego,
perjudicándonos a nosotros mismos y a otros (Lev.
19:18). Mejor es perdonar y olvidar. Además, como el
amor “no se regocija por la injusticia”, no nos
alegramos cuando alguien que nos odia es maltratado
o sufre alguna injusticia (lea Proverbios 24:17, 18).
18. ¿Qué nos enseña sobre el amor 1 Corintios
13:7, 8?
[ 18 ] [Textos] Pablo señaló que el amor “todas las
cosas las soporta”. Por eso, cuando alguien nos
ofende pero luego nos pide disculpas, el amor nos
motiva a perdonarlo. El amor también “cree” todas
las cosas. Creemos todo lo que dice la Biblia y
agradecemos el alimento espiritual que recibimos de
la organización de Dios. Además, el amor “espera”
todas las cosas. Esperamos con confianza lo que
Jehová ha prometido; y como amamos a la gente, le
hablamos de esa esperanza (1 Ped. 3:15). Y cuando
nos hallamos en circunstancias muy difíciles, le
oramos a Jehová y esperamos que todo salga bien.
Otra característica del amor es que “aguanta” todas
las cosas. Hasta si alguien peca contra nosotros o si se
nos persigue, aguantamos. Finalmente, Pablo
aseguró: “El amor nunca falla”. Así es, los siervos de
Dios seguirán demostrándolo por toda la eternidad.
NO DEJEMOS DE AMAR AL PRÓJIMO COMO A
NOSOTROS MISMOS
19, 20. ¿Qué textos bíblicos nos muestran lo
importante que es amar a nuestro prójimo?
[ 19 ] [Textos] Si hacemos caso de lo que nos dice la
Biblia, siempre amaremos a nuestro prójimo como a
nosotros mismos (Mat. 22:39). Jehová y Jesús esperan
que lo hagamos. Es más, esperan que amemos a todas
las personas, sin importar su origen o su cultura.
¿Nos cuesta a veces demostrarle amor a alguien? Si es
así, pidámosle espíritu santo a Jehová. Eso lo
complacerá, y él nos ayudará a actuar con amor
(Rom. 8:26, 27).
[ 20 ] [Textos] El mandato de amar al prójimo como
a uno mismo es tan importante que se le llama “la ley
real” (Sant. 2:8). En la Ley mosaica, Jehová les dio a
los israelitas muchas normas que les enseñaban a
amar al prójimo. Más adelante, inspiró a Pablo a
escribir: “Cualquier otro mandamiento que haya, se
resume en esta palabra, a saber: ‘Tienes que amar a
tu prójimo como a ti mismo’. El amor no obra mal al
prójimo; por lo tanto, el amor es el cumplimiento de
la ley” (Rom. 13:8-10). Así pues, no debemos dejar de
amar al prójimo.
21, 22. ¿Por qué debemos amar a Dios y al
prójimo?
[ 21 ] [Textos] Al reflexionar en las razones que
tenemos para amar a nuestro prójimo, es bueno
recordar las palabras de Jesús cuando dijo acerca de
su Padre: “Hace salir su sol sobre inicuos y buenos y
hace llover sobre justos e injustos” (Mat. 5:43-45).
¿Qué nos enseña esto? Que debemos amar a nuestro
prójimo, sea este justo o injusto. Y, como ya se
mencionó, una manera muy importante de
demostrarle nuestro amor es llevándole el mensaje
del Reino. Si acepta las buenas nuevas con un corazón
sincero, podrá hacerse amigo de Dios. ¿Acaso hay una
bendición mayor?
[ 22 ] [Textos] Tenemos razones de sobra para amar
a Jehová sin reservas. Y, como hemos visto, hay
muchas maneras de mostrarle amor a nuestro
semejante. Si amamos a Dios y a nuestro prójimo,
estaremos obedeciendo los dos mayores
mandamientos. Pero, sobre todo, agradaremos a
nuestro Padre celestial, Jehová.
Textos del Libro
Párrafo 9
(Deuteronomio 32:3, 4) Porque yo declararé el nombre
de Jehová. ¡Atribuyan ustedes grandeza, sí, a nuestro
Dios! 4 La Roca, perfecta es su actividad, porque todos
sus caminos son justicia. Dios de fidelidad, con quien no
hay injusticia; justo y recto es él.
Párrafo 10
(Salmo 116:5) Jehová es benévolo y justo; y nuestro
Dios es Uno que muestra misericordia.
Párrafo 11
(Romanos 5:12) Por eso, así como por medio de un solo hombre el pecado entró en el mundo, y la muerte mediante el pecado, y así la muerte se extendió a todos los hombres porque todos habían pecado...
(Nehemías 9:17) De manera que rehusaron escuchar, y no se acordaron de tus maravillosos actos que ejecutaste con ellos, sino que endurecieron su cerviz y nombraron un cabeza para volver a su servidumbre en Egipto. Pero tú eres un Dios de actos de perdón, benévolo y misericordioso, tardo para la cólera y abundante en bondad amorosa, y no los dejaste.
(Romanos 3:21-26) Mas ahora, aparte de ley, la justicia de Dios ha sido puesta de manifiesto, según dan testimonio de ella la Ley y los Profetas;
22 sí, la justicia
de Dios mediante la fe en Jesucristo, para todos los que tienen fe. Porque no hay distinción.
23 Porque todos han
pecado y no alcanzan a la gloria de Dios, 24
y es como dádiva gratuita que por su bondad inmerecida se les está declarando justos mediante la liberación por el rescate [pagado] por Cristo Jesús.
25 Dios lo presentó
como ofrenda para propiciación mediante fe en su sangre. Esto fue con el fin de exhibir su propia justicia, porque estaba perdonando los pecados que habían ocurrido en el pasado mientras Dios estaba ejerciendo longanimidad;
26 para exhibir su propia justicia en esta
época presente, para que él sea justo hasta al declarar justo al hombre que tiene fe en Jesús.
Párrafo 12
Párrafo 13
(Salmo 37:28) Porque Jehová es amador de la justicia, y no dejará a los que le son leales. Hasta tiempo
indefinido ciertamente serán guardados; pero en cuanto a la prole de los inicuos, esta en verdad será cortada.
(Proverbios 2:7, 8) Y para los rectos atesorará sabiduría práctica; para los que andan en integridad él es un escudo,
8 mediante la observación de las sendas
del juicio, y él guardará el mismísimo camino de los que le son leales.
Párrafo 14
(Deuteronomio 24:17-21) ”No debes pervertir el juicio del residente forastero ni del huérfano de padre, y no debes apoderarte de la ropa de una viuda como prenda. 18
Y tienes que recordar que llegaste a ser esclavo en Egipto, y Jehová tu Dios procedió a redimirte de allí. Por eso te estoy mandando hacer esta cosa.
19 ”En caso de
que siegues tu mies en tu campo, y se te haya olvidado una gavilla en el campo, no debes volverte atrás para conseguirla. Debe quedar para el residente forastero, para el huérfano de padre y para la viuda; a fin de que Jehová tu Dios te bendiga en todo hecho de tu mano. 20
”En caso de que apalees tu olivo, no debes recorrer sus ramas, en rebusca tras de ti. Debe quedar para el residente forastero, para el huérfano de padre y para la viuda.
21 ”En caso de que vendimies tu viña, no debes
recoger los sobrantes, en rebusca tras de ti. Estos deben quedar para el residente forastero, para el huérfano de padre y para la viuda.
(Deuteronomio 10:18) que ejecuta juicio para el huérfano de padre y la viuda y que ama al residente forastero para darle pan y un manto.
(Salmo 68:5) padre de huérfanos de padre y juez de viudas es Dios en su santa morada.
(Éxodo 22:22-24) ”No deben afligir a viuda alguna ni a un huérfano de padre.
23 Si de manera alguna lo
afligieras, entonces si él de manera alguna clama a mí, sin falta oiré su clamor;
24 y verdaderamente se
encenderá mi cólera, y ciertamente los mataré a ustedes a espada, y sus esposas tendrán que quedar viudas y sus hijos huérfanos de padre.
(Salmo 103:6) Jehová está ejecutando actos de justicia y decisiones judiciales para todos los que están siendo defraudados.
Párrafo 15
(Deuteronomio 10:17) Porque Jehová su Dios es el Dios de dioses y el Señor de señores, el Dios grande, poderoso e inspirador de temor, que no trata a nadie con parcialidad ni acepta soborno,
(Hechos 10:34, 35) Ante aquello, Pedro abrió la boca y dijo: “Con certeza percibo que Dios no es parcial,
35 sino
que, en toda nación, el que le teme y obra justicia le es acepto.
Párrafo 16
Textos Atalaya
Párrafo 1
(Mateo 22:34-39) Los fariseos, después de oír que había
hecho callar a los saduceos, se juntaron en un grupo. 35Y
uno de ellos, versado en la Ley, preguntó, para
probarlo: 36“Maestro, ¿cuál es el mandamiento más
grande de la Ley?”. 37Él le dijo: “‘Tienes que amar a
Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y
con toda tu mente’. 38Este es el más grande y el primer
mandamiento. 39El segundo, semejante a él, es este:
‘Tienes que amar a tu prójimo como a ti mismo’.
Párrafo 2
Párrafo 3
(Lucas 10:29-37) Pero, queriendo probar que era justo,
el hombre dijo a Jesús: “¿Quién, verdaderamente, es mi
prójimo?”. 30Respondiendo, Jesús dijo: “Cierto hombre
bajaba de Jerusalén a Jericó y cayó entre salteadores,
que lo despojaron y también le descargaron golpes, y se
fueron, dejándolo medio muerto. 31Ahora bien, por
casualidad, cierto sacerdote bajaba por aquel camino,
pero, cuando lo vio, pasó por el otro lado. 32Así mismo,
un levita también, cuando bajó al lugar y lo vio, pasó por
el otro lado. 33Pero cierto samaritano que viajaba por el
camino llegó a donde estaba y, al verlo, se enterneció. 34De modo que se le acercó y le vendó sus heridas, y
vertió en ellas aceite y vino. Luego lo montó sobre su
propia bestia y lo llevó a un mesón y lo cuidó. 35Y al día
siguiente sacó dos denarios, se los dio al mesonero, y
dijo: ‘Cuídalo, y lo que gastes además de esto, te lo
pagaré cuando vuelva acá’. 36¿Quién de estos tres te
parece haberse hecho prójimo del que cayó entre los
salteadores?”. 37Él dijo: “El que actuó
misericordiosamente para con él”. Entonces Jesús le
dijo: “Ve y haz tú lo mismo”.
(Juan 4:9) Por lo tanto, la mujer, la samaritana, le dijo:
“¿Cómo es que tú, a pesar de ser judío, me pides de
beber a mí, que soy mujer samaritana?”. (Porque los
judíos no se tratan con los samaritanos.)
Párrafo 4
(Mateo 20:2) Cuando hubo convenido con los obreros
en un denario al día, los envió a su viña.
Párrafo 5
(2 Timoteo 3:1-3) Mas sabe esto, que en los últimos
días se presentarán tiempos críticos, difíciles de
manejar. 2Porque los hombres serán amadores de sí
mismos, amadores del dinero, presumidos, altivos,
blasfemos, desobedientes a los padres, desagradecidos,
desleales, 3sin tener cariño natural, no dispuestos a
ningún acuerdo, calumniadores, sin autodominio,
feroces, sin amor del bien,
Párrafo 6
(Romanos 15:4) Porque todas las cosas que fueron
escritas en tiempo pasado fueron escritas para nuestra
instrucción, para que mediante nuestro aguante y
mediante el consuelo de las Escrituras tengamos
esperanza.
(Mateo 24:14) Y estas buenas nuevas del reino se
predicarán en toda la tierra habitada para testimonio a
todas las naciones; y entonces vendrá el fin.
(Romanos 15:13) Que el Dios que da esperanza los llene
de todo gozo y paz por el creer de ustedes, para que
abunden en la esperanza con poder de espíritu santo.
Párrafo 7
(Mateo 7:12) ”Por lo tanto, todas las cosas que quieren
que los hombres les hagan, también ustedes de igual
manera tienen que hacérselas a ellos; esto, de hecho, es
lo que significan la Ley y los Profetas.
(Isaías 56:1-2) Esto es lo que ha dicho Jehová: “Guarden
el derecho y hagan lo que es justo. Porque a la mano
está mi salvación para entrar, y mi justicia para ser
revelada. 2Feliz es el hombre mortal que hace esto, y el
hijo de la humanidad que se ase de ello, que guarda el
sábado para no profanarlo, y que guarda su mano para
no hacer ninguna clase de maldad.
Párrafo 8
(Éxodo 23:5) Si vieras echado debajo de su carga el asno
de alguien que te odia, entonces debes guardarte de
dejarlo. Junto con él, sin falta has de librarlo.
(Mateo 5:43-45) ”Oyeron ustedes que se dijo: ‘Tienes
que amar a tu prójimo y odiar a tu enemigo’. 44Sin
embargo, yo les digo: Continúen amando a sus
enemigos y orando por los que los persiguen; 45para que
demuestren ser hijos de su Padre que está en los cielos,
ya que él hace salir su sol sobre inicuos y buenos y hace
llover sobre justos e injustos.
(Romanos 12:20) Pero, “si tu enemigo tiene hambre,
aliméntalo; si tiene sed, dale algo de beber; porque
haciendo esto amontonarás brasas ardientes sobre su
cabeza”.
(Proverbios 25:21) Si el que te odia tiene hambre, dale
pan de comer; y si tiene sed, dale agua de beber.
Párrafo 9
(Hebreos 12:14) Sigan tras la paz con todos, y la
santificación sin la cual nadie verá al Señor,
(Mateo 5:23-24) ”Por eso, si estás llevando tu dádiva al
altar y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo
contra ti, 24deja tu dádiva allí enfrente del altar, y vete;
primero haz las paces con tu hermano, y luego, cuando
hayas vuelto, ofrece tu dádiva.
Párrafo 10
(Mateo 7:1-5) ”Dejen de juzgar, para que no sean
juzgados; 2porque con el juicio con que ustedes juzgan,
serán juzgados; y con la medida con que miden, se les
medirá. 3Entonces, ¿por qué miras la paja [que hay] en
el ojo de tu hermano, pero no tomas en cuenta la viga
[que hay] en tu propio ojo? 4O, ¿cómo puedes decir a tu
hermano: ‘Permíteme extraer la paja de tu ojo’; cuando
¡mira!, hay una viga en tu propio ojo? 5¡Hipócrita!
Primero extrae la viga de tu propio ojo, y entonces verás
claramente cómo extraer la paja del ojo de tu hermano.
Párrafo 11
(Lucas 8:1) Poco después iba viajando de ciudad en
ciudad y de aldea en aldea, predicando y declarando las
buenas nuevas del reino de Dios. Y con él iban los doce,
(Mateo 28:19-20) Vayan, por lo tanto, y hagan
discípulos de gente de todas las naciones, bautizándolos
en el nombre del Padre y del Hijo y del espíritu santo, 20enseñándoles a observar todas las cosas que yo les he
mandado. Y, ¡miren!, estoy con ustedes todos los días
hasta la conclusión del sistema de cosas”.
(Mateo 7:13-14) ”Entren por la puerta angosta; porque
ancho y espacioso es el camino que conduce a la
destrucción, y muchos son los que entran por él; 14mientras que angosta es la puerta y estrecho el camino
que conduce a la vida, y pocos son los que la hallan.
Párrafo 12
(Mateo 5:3) “Felices son los que tienen conciencia de su
necesidad espiritual, puesto que a ellos pertenece el
reino de los cielos.
(Romanos 1:1) Pablo, esclavo de Jesucristo y llamado a
ser apóstol, separado para las buenas nuevas de Dios,
(2 Corintios 5:18-19) Pero todas las cosas vienen de
Dios, que nos ha reconciliado consigo mediante Cristo y
nos ha dado el ministerio de la reconciliación, 19a saber,
que Dios mediante Cristo estaba reconciliando consigo
mismo a un mundo, no imputándoles sus ofensas, y nos
ha encomendado la palabra de la reconciliación.
Párrafo 13
(1 Corintios 6:9-11) ¡Qué! ¿No saben que los injustos no
heredarán el reino de Dios? No se extravíen. Ni
fornicadores, ni idólatras, ni adúlteros, ni hombres que
se tienen para propósitos contranaturales, ni hombres
que se acuestan con hombres, 10ni ladrones, ni personas
dominadas por la avidez, ni borrachos, ni injuriadores,
ni los que practican extorsión heredarán el reino de
Dios. 11Y, sin embargo, eso era lo que algunos de ustedes
eran. Pero ustedes han sido lavados, pero ustedes han
sido santificados, pero ustedes han sido declarados
justos en el nombre de nuestro Señor Jesucristo y con el
espíritu de nuestro Dios.
(Hechos 13:48) Al oír esto los de las naciones,
empezaron a regocijarse y a glorificar la palabra de
Jehová, y todos los que estaban correctamente
dispuestos para vida eterna se hicieron creyentes.
Párrafo 14
(1 Corintios 13:4-8) El amor es sufrido y bondadoso. El
amor no es celoso, no se vanagloria, no se hincha, 5no se
porta indecentemente, no busca sus propios intereses,
no se siente provocado. No lleva cuenta del daño. 6No
se regocija por la injusticia, sino que se regocija con la
verdad. 7Todas las cosas las soporta, todas las cree,
todas las espera, todas las aguanta. 8El amor nunca falla.
Pero sea que haya [dones de] profetizar, serán
eliminados; sea que haya lenguas, cesarán; sea que
haya conocimiento, será eliminado.
Párrafo 15
(Proverbios 21:4) Ojos altivos y un corazón arrogante —
lámpara de los inicuos— son pecado.
Párrafo 16
(Filipenses 2:4) no vigilando con interés personal solo
sus propios asuntos, sino también con interés personal
los de los demás.
Párrafo 17
(1 Tesalonicenses 5:15) Vean que nadie pague daño por
daño a ningún otro; antes bien, sigan siempre tras lo
que es bueno los unos para con los otros y para con
todos los demás.
(Levítico 19:18) ”’No debes tomar venganza ni tener
rencor contra los hijos de tu pueblo; y tienes que amar a
tu prójimo como a ti mismo. Yo soy Jehová.
(Proverbios 24:17-18) Cuando caiga tu enemigo, no te
regocijes; y cuando se le haga tropezar, no esté gozoso
tu corazón, 18para que Jehová no vea, y sea malo a sus
ojos, y ciertamente vuelva su cólera de contra él.
Párrafo 18
(1 Pedro 3:15) Antes bien, santifiquen al Cristo como
Señor en su corazón, siempre listos para presentar una
defensa ante todo el que les exija razón de la esperanza
que hay en ustedes, pero haciéndolo junto con genio
apacible y profundo respeto.
Párrafo 19
(Mateo 22:39) El segundo, semejante a él, es este:
‘Tienes que amar a tu prójimo como a ti mismo’.
(Romanos 8:26-27) De igual manera el espíritu también
acude con ayuda para nuestra debilidad; porque el
[problema de] lo que debemos pedir en oración como
necesitamos hacerlo no lo sabemos, pero el espíritu
mismo aboga por nosotros con gemidos no expresados. 27Sin embargo, el que escudriña los corazones sabe cuál
es la intención del espíritu, porque este aboga en
conformidad con Dios por los santos.
Párrafo 20
(Santiago 2:8) Por eso, si ustedes practican el llevar a
cabo la ley real según la escritura: “Tienes que amar a tu
prójimo como a ti mismo”, hacen bastante bien.
(Romanos 13:8-10) No deban a nadie ni una sola cosa,
salvo el amarse unos a otros; porque el que ama a su
semejante ha cumplido [la] ley. 9Porque el [código]: “No
debes cometer adulterio, No debes asesinar, No debes
hurtar, No debes codiciar”, y cualquier otro
mandamiento que haya, se resume en esta palabra, a
saber: “Tienes que amar a tu prójimo como a ti mismo”. 10El amor no obra mal al prójimo; por lo tanto, el amor
es el cumplimiento de la ley.
Párrafo 21
(Mateo 5:43-45) ”Oyeron ustedes que se dijo: ‘Tienes
que amar a tu prójimo y odiar a tu enemigo’. 44Sin
embargo, yo les digo: Continúen amando a sus
enemigos y orando por los que los persiguen; 45para que
demuestren ser hijos de su Padre que está en los cielos,
ya que él hace salir su sol sobre inicuos y buenos y hace
llover sobre justos e injustos.
Cántico 71
El espíritu santo, regalo de Dios (Lucas 11:13)
1. Oh Padre amado, Gran Soberano,
eres mayor que mi corazón.
Lleva mi carga, calma mi angustia.
Tu santo espíritu dame, Señor.
2. Bien sé que nadie tu gloria alcanza,
soy pecador desde que nací.
Por eso imploro que me concedas
tu santo espíritu para vivir.
3. Cuando me encuentro débil o triste,
tu santa fuerza me da poder.
Logro, Jehová, cual águila alzarme,
y así servirte sin desfallecer.
(Véanse también Sal. 51:11; Juan 14:26; Hech. 9:31.)
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Cántico 107
Subamos a la montaña de Jehová (Isaías 2:2-4)
1. ¡Miren qué alta es
la montaña de Jehová!
¡Vean! Se eleva
sobre todas las cumbres hoy.
Pueblos van hacia allá
animando a los demás:
“¡Vengan, subamos
a la casa de nuestro Dios!”.
El Señor prometió
que el pequeño sería un millar.
Grande es la nación
que a su tiempo ha formado Jehová.
Miles y miles van
por las sendas de la paz.
Fieles, prometen
acatar su dominación.
2. Cristo nos ordenó
la palabra predicar.
¡Vamos! Hay que llegar
al más remoto confín.
Reina nuestro Señor
en su trono celestial.
¡Oigan!, él nos ofrece
bendiciones sin fin.
¡Qué emoción contemplar
el aumento del pueblo de Dios!
Tu labor fruto da,
sigue fiel con tu noble misión.
A los mansos harás
esta alegre invitación:
“¡Vamos, a la montaña
de Jehová hay que subir!”.
(Véanse también Sal. 43:3; 99:9; Isa. 60:22; Hech.
16:5.) volver
Cántico 92
“Predica la palabra” (2 Timoteo 4:2)
1. Dios te ha confiado una misión:
pregonar las nuevas de salvación.
Prepárate para responder
a quien te pida cuenta de tu fe.
(ESTRIBILLO)
¡Ve a predicar
hasta el último confín!
Haz saber
que muy pronto viene el fin.
Anda y di
que Jesús gobierna ya.
Hazlo, sí.
¡Ve a predicar!
2. En tiempos de dificultad
nuestra voz intentarán silenciar.
Mas los fieles del supremo Dios
jamás nos callaremos por temor.
(ESTRIBILLO)
¡Ve a predicar
hasta el último confín!
Haz saber
que muy pronto viene el fin.
Anda y di
que Jesús gobierna ya.
Hazlo, sí.
¡Ve a predicar!
3. En tiempos de favor habrá
quienes la verdad querrán escuchar.
Proclama el mensaje salvador,
al manso instruye siempre con amor.
(ESTRIBILLO)
¡Ve a predicar
hasta el último confín!
Haz saber
que muy pronto viene el fin.
Anda y di
que Jesús gobierna ya.
Hazlo, sí.
¡Ve a predicar!
(Véanse también Mat. 10:7; 24:14; Hech. 10:42; 1 Ped.
3:15.) volver
Cántico 84
“Quiero” (Lucas 5:13)
1. ¡Oh, qué amor Jesús demostró!
La gloria del cielo dejó.
Descendió a morar con la humanidad,
su sangre por ella vertió.
El dolor del hombre mortal
curó con inmensa piedad.
Su misión realizó con gran celo.
A Dios dijo él: “Sí, quiero”.
2. ¡Oh, qué amor Jehová demostró!
A su esclavo fiel designó.
Le mandó pregonar su santa verdad
a hombres de toda nación.
Con amor debemos buscar
a quienes anhelan la paz,
y al hermano que pida consuelo,
gustosos decir: “Sí, quiero”.
(Véanse también Juan 18:37; Efe. 3:19; Fili. 2:7.) volver
Cántico 72
Cultivemos el verdadero amor (1 Corintios 13:1-8)
1. El santo espíritu de Jehová
produce gozo, paciencia y paz;
mas la virtud de mayor valor
es un sincero y profundo amor.
Talento y dones podré tener,
mi fe montañas podrá mover;
no importa si hasta la vida doy:
si no cultivo amor, nada soy.
2. A las ovejas hay que enseñar
con gran bondad y amabilidad;
no basta usar solo la razón,
hay que apelar a su corazón.
Amar es ser tierno, ser cortés,
mostrar afecto y fiel interés,
jamás sentir celos ni rencor;
así es el verdadero amor.
(Véanse también Juan 21:17; 1 Cor. 13:13; Gál. 6:2.)
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Números 7 a 9
7 Ahora bien, aconteció que en el día que Moisés
acabó de erigir el tabernáculo, procedió a ungirlo y santificarlo, y todos sus enseres y el altar y todos sus utensilios. Así, los ungió y los santificó.
2 Entonces los
principales de Israel, los cabezas de la casa de sus
padres, hicieron una presentación, pues eran los principales de las tribus y estaban sobre los inscritos,
3 y
llevaron su ofrenda delante de Jehová: seis carros cubiertos y doce reses vacunas, un carro por dos principales y un toro por cada uno; y los presentaron delante del tabernáculo.
4 Ante esto, Jehová dijo a
Moisés: 5 “Acéptalos de ellos, puesto que tienen que
servir para efectuar el servicio de la tienda de reunión, y tienes que darlos a los levitas, a cada uno en proporción con su propio servicio”.
6 De modo que Moisés aceptó los carros y el ganado
vacuno y los dio a los levitas. 7 Dio dos carros y cuatro
reses vacunas a los hijos de Guersón, en proporción con su servicio,
8 y dio cuatro carros y ocho reses
vacunas a los hijos de Merarí, en proporción con su servicio, bajo la mano de Itamar hijo de Aarón el sacerdote.
9 Pero a los hijos de Qohat no dio ninguno,
porque el servicio del lugar santo estaba sobre ellos. Efectuaban la transportación sobre el hombro.
10 Ahora bien, los principales hicieron su
presentación en la inauguración del altar, el día en que este fue ungido, y prosiguieron los principales con la presentación de su ofrenda delante del altar.
11 De modo
que Jehová dijo a Moisés: “Un principal un día y otro principal otro día es como presentarán su ofrenda para la inauguración del altar”.
12 Ahora bien, el que presentó su ofrenda el primer
día resultó ser Nahsón hijo de Aminadab de la tribu de Judá.
13 Y fue su ofrenda un plato de plata, de ciento
treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, según el siclo del lugar santo, ambos llenos de flor de harina ligeramente mojada con aceite, para ofrenda de grano;
14 una copa de oro de diez siclos,
llena de incienso; 15
un toro joven, un carnero, un cordero en su primer año, para ofrenda quemada;
16 un
cabrito de las cabras para ofrenda por el pecado; 17
y, para sacrificio de comunión, dos reses vacunas, cinco carneros, cinco machos cabríos, cinco corderos de un año de edad cada uno. Esta fue la ofrenda de Nahsón hijo de Aminadab.
18 El segundo día Netanel hijo de Zuar, el principal de
Isacar, hizo una presentación. 19
Presentó como su ofrenda un plato de plata, de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, según el siclo del lugar santo, ambos llenos de flor de harina ligeramente mojada con aceite, para ofrenda de grano; 20
una copa de oro de diez siclos, llena de incienso; 21
un toro joven, un carnero, un cordero en su primer año, para ofrenda quemada;
22 un cabrito de las cabras para
ofrenda por el pecado; 23
y, para sacrificio de comunión, dos reses vacunas, cinco carneros, cinco machos cabríos, cinco corderos de un año de edad cada uno. Esta fue la ofrenda de Netanel hijo de Zuar.
24 El tercer día [se presentó] el principal para los hijos
de Zabulón, Eliab hijo de Helón. 25
Su ofrenda fue un plato de plata, de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, según el siclo del lugar santo, ambos llenos de flor de harina ligeramente mojada con aceite, para ofrenda de grano;
26 una copa de oro de
diez siclos, llena de incienso; 27
un toro joven, un
carnero, un cordero en su primer año, para ofrenda quemada;
28 un cabrito de las cabras para ofrenda por el
pecado; 29
y, para sacrificio de comunión, dos reses vacunas, cinco carneros, cinco machos cabríos, cinco corderos de un año de edad cada uno. Esta fue la ofrenda de Eliab hijo de Helón.
30 El cuarto día [se presentó] el principal para los
hijos de Rubén, Elizur hijo de Sedeur. 31
Su ofrenda fue un plato de plata, de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, según el siclo del lugar santo, ambos llenos de flor de harina ligeramente mojada con aceite, para ofrenda de grano;
32 una copa
de oro de diez siclos, llena de incienso; 33
un toro joven, un carnero, un cordero en su primer año, para ofrenda quemada;
34 un cabrito de las cabras para ofrenda por el
pecado; 35
y, para sacrificio de comunión, dos reses vacunas, cinco carneros, cinco machos cabríos, cinco corderos de un año de edad cada uno. Esta fue la ofrenda de Elizur hijo de Sedeur.
36 El quinto día [se presentó] el principal para los
hijos de Simeón, Selumiel hijo de Zurisadai. 37
Su ofrenda fue un plato de plata, de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, según el siclo del lugar santo, ambos llenos de flor de harina ligeramente mojada con aceite, para ofrenda de grano; 38
una copa de oro de diez siclos, llena de incienso; 39
un toro joven, un carnero, un cordero en su primer año, para ofrenda quemada;
40 un cabrito de las cabras para
ofrenda por el pecado; 41
y, para sacrificio de comunión, dos reses vacunas, cinco carneros, cinco machos cabríos, cinco corderos de un año de edad cada uno. Esta fue la ofrenda de Selumiel hijo de Zurisadai.
42 El sexto día [se presentó] el principal para los hijos
de Gad, Eliasaf hijo de Deuel. 43
Su ofrenda fue un plato de plata, de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, según el siclo del lugar santo, ambos llenos de flor de harina ligeramente mojada con aceite, para ofrenda de grano;
44 una copa de oro de
diez siclos, llena de incienso; 45
un toro joven, un carnero, un cordero en su primer año, para ofrenda quemada;
46 un cabrito de las cabras para ofrenda por el
pecado; 47
y, para sacrificio de comunión, dos reses vacunas, cinco carneros, cinco machos cabríos, cinco corderos de un año de edad cada uno. Esta fue la ofrenda de Eliasaf hijo de Deuel.
48 El séptimo día [se presentó] el principal para los
hijos de Efraín, Elisamá hijo de Amihud. 49
Su ofrenda fue un plato de plata, de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, según el siclo del lugar santo, ambos llenos de flor de harina ligeramente mojada con aceite, para ofrenda de grano;
50 una copa
de oro de diez siclos, llena de incienso; 51
un toro joven, un carnero, un cordero en su primer año, para ofrenda quemada;
52 un cabrito de las cabras para ofrenda por el
pecado; 53
y, para sacrificio de comunión, dos reses vacunas, cinco carneros, cinco machos cabríos, cinco corderos de un año de edad cada uno. Esta fue la ofrenda de Elisamá hijo de Amihud.
54 El octavo día [se presentó] el principal para los
hijos de Manasés, Gamaliel hijo de Pedahzur. 55
Su
ofrenda fue un plato de plata, de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, según el siclo del lugar santo, ambos llenos de flor de harina ligeramente mojada con aceite, para ofrenda de grano; 56
una copa de oro de diez siclos, llena de incienso; 57
un toro joven, un carnero, un cordero en su primer año, para ofrenda quemada;
58 un cabrito de las cabras para
ofrenda por el pecado; 59
y, para sacrificio de comunión, dos reses vacunas, cinco carneros, cinco machos cabríos, cinco corderos de un año de edad cada uno. Esta fue la ofrenda de Gamaliel hijo de Pedahzur.
60 El noveno día [se presentó] el principal para los
hijos de Benjamín, Abidán hijo de Guideoní. 61
Su ofrenda fue un plato de plata, de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, según el siclo del lugar santo, ambos llenos de flor de harina ligeramente mojada con aceite, para ofrenda de grano; 62
una copa de oro de diez siclos, llena de incienso; 63
un toro joven, un carnero, un cordero en su primer año, para ofrenda quemada;
64 un cabrito de las cabras para
ofrenda por el pecado; 65
y, para sacrificio de comunión, dos reses vacunas, cinco carneros, cinco machos cabríos, cinco corderos de un año de edad cada uno. Esta fue la ofrenda de Abidán hijo de Guideoní.
66 El décimo día [se presentó] el principal para los
hijos de Dan, Ahiézer hijo de Amisadai. 67
Su ofrenda fue un plato de plata, de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, según el siclo del lugar santo, ambos llenos de flor de harina ligeramente mojada con aceite, para ofrenda de grano;
68 una copa
de oro de diez siclos, llena de incienso; 69
un toro joven, un carnero, un cordero en su primer año, para ofrenda quemada;
70 un cabrito de las cabras para ofrenda por el
pecado; 71
y, para sacrificio de comunión, dos reses vacunas, cinco carneros, cinco machos cabríos, cinco corderos de un año de edad cada uno. Esta fue la ofrenda de Ahiézer hijo de Amisadai.
72 El undécimo día [se presentó] el principal para los
hijos de Aser, Paguiel hijo de Ocrán. 73
Su ofrenda fue un plato de plata, de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, según el siclo del lugar santo, ambos llenos de flor de harina ligeramente mojada con aceite, para ofrenda de grano;
74 una copa
de oro de diez siclos, llena de incienso; 75
un toro joven, un carnero, un cordero en su primer año, para ofrenda quemada;
76 un cabrito de las cabras para ofrenda por el
pecado; 77
y, para sacrificio de comunión, dos reses vacunas, cinco carneros, cinco machos cabríos, cinco corderos de un año de edad cada uno. Esta fue la ofrenda de Paguiel hijo de Ocrán.
78 El duodécimo día [se presentó] el principal para los
hijos de Neftalí, Ahirá hijo de Enán. 79
Su ofrenda fue un plato de plata, de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, según el siclo del lugar santo, ambos llenos de flor de harina ligeramente mojada con aceite, para ofrenda de grano;
80 una copa de oro de
diez siclos, llena de incienso; 81
un toro joven, un carnero, un cordero en su primer año, para ofrenda quemada;
82 un cabrito de las cabras para ofrenda por el
pecado; 83
y, para sacrificio de comunión, dos reses
vacunas, cinco carneros, cinco machos cabríos, cinco corderos de un año de edad cada uno. Esta fue la ofrenda de Ahirá hijo de Enán.
84 Esta fue la ofrenda de inauguración del altar, el día
en que fue ungido, de parte de los principales de Israel: doce platos de plata, doce tazones de plata, doce copas de oro;
85 de ciento treinta siclos cada plato de plata, y
de setenta cada tazón, de modo que toda la plata de los vasos era dos mil cuatrocientos siclos según el siclo del lugar santo;
86 las doce copas de oro llenas de incienso
eran de diez siclos respectivamente cada copa, según el siclo del lugar santo, de modo que todo el oro de las copas era ciento veinte siclos;
87 y todo el ganado para
la ofrenda quemada era doce toros, doce carneros, doce corderos de un año de edad cada uno y sus ofrendas de grano, y doce cabritos de las cabras para ofrenda por el pecado;
88 y todo el ganado del sacrificio de comunión
era veinticuatro toros, sesenta carneros, sesenta machos cabríos, sesenta corderos de un año de edad cada uno. Esta fue la ofrenda de inauguración del altar después que fue ungido.
89 Ahora bien, siempre que Moisés entraba en la
tienda de reunión para hablar con él, entonces oía la voz que conversaba con él desde más arriba de la cubierta que estaba sobre el arca del testimonio, de entre los dos querubines; y le hablaba.
8 Y Jehová procedió a hablar a Moisés, y dijo: 2 “Habla a Aarón, y tienes que decirle: „Siempre que
enciendas las lámparas, las siete lámparas deben alumbrar la zona [que está] enfrente del candelabro‟”. 3 Y Aarón empezó a hacerlo así. Encendió las lámparas
para la zona enfrente del candelabro, tal como Jehová había mandado a Moisés.
4 Ahora bien, esta era la
hechura del candelabro. Labor a martillo era, de oro. Hasta sus lados y hasta sus flores era labor a martillo. Conforme a la visión que Jehová había mostrado a Moisés, así este había hecho el candelabro.
5 Y Jehová habló nuevamente a Moisés, y dijo:
6 “Toma a los levitas de entre los hijos de Israel, y tienes
que limpiarlos. 7 Y esto es lo que les debes hacer para
limpiarlos: Salpica sobre ellos agua limpiadora de pecado, y ellos tienen que hacer pasar una navaja por toda su carne y tienen que lavar sus prendas de vestir y limpiarse.
8 Entonces tienen que tomar un toro joven y
su ofrenda de grano de flor de harina ligeramente mojada con aceite, y tú tomarás otro toro joven para una ofrenda por el pecado.
9 Y tienes que presentar a los
levitas delante de la tienda de reunión y congregar a toda la asamblea de los hijos de Israel.
10 Y tienes que
presentar a los levitas delante de Jehová, y los hijos de Israel tienen que poner las manos sobre los levitas.
11 Y
Aarón tiene que hacer que los levitas se muevan de acá para allá delante de Jehová como ofrenda mecida de parte de los hijos de Israel, y ellos tienen que prestar servicio para efectuar el servicio de Jehová.
12 ”Entonces los levitas pondrán las manos sobre las
cabezas de los toros. Después de eso, ofrece uno como ofrenda por el pecado y el otro como ofrenda quemada a Jehová para hacer expiación por los levitas.
13 Y tienes
que hacer que los levitas estén de pie delante de Aarón y sus hijos, y tienes que hacer que se muevan de acá para allá como ofrenda mecida a Jehová.
14 Y tienes que
separar a los levitas de entre los hijos de Israel, y los levitas tienen que llegar a ser míos.
15 Y después los
levitas entrarán para servir con relación a la tienda de reunión. De modo que tienes que limpiarlos y hacer que se muevan de acá para allá como ofrenda mecida. 16
Porque ellos son gente dada, dados a mí de entre los hijos de Israel. Tengo que tomarlos para mí en lugar de los que abren toda matriz, todos los primogénitos de los hijos de Israel.
17 Porque mío es todo primogénito entre
los hijos de Israel, entre hombres y entre bestias. Me los santifiqué el día en que herí a todo primogénito en la tierra de Egipto.
18 Y tomaré a los levitas en lugar de
todos los primogénitos entre los hijos de Israel. 19
Y daré a los levitas como gente dada a Aarón y sus hijos de entre los hijos de Israel, para que efectúen el servicio de los hijos de Israel en la tienda de reunión y para que hagan expiación por los hijos de Israel, para que no ocurra plaga entre los hijos de Israel porque los hijos de Israel se acerquen al lugar santo”.
20 Y Moisés y Aarón y toda la asamblea de los hijos
de Israel procedieron a hacer así a los levitas. Conforme a todo lo que Jehová había mandado a Moisés respecto a los levitas, de aquella manera les hicieron los hijos de Israel.
21 Así que los levitas se purificaron y lavaron sus
prendas de vestir, después de lo cual Aarón hizo que ellos se movieran de acá para allá como ofrenda mecida delante de Jehová. Entonces Aarón hizo expiación por ellos para limpiarlos.
22 Tras eso los levitas entraron por
primera vez para efectuar su servicio en la tienda de reunión delante de Aarón y sus hijos. Tal como Jehová había mandado a Moisés respecto a los levitas, así les hicieron.
23 Jehová entonces habló a Moisés, y dijo:
24 “Esto es
lo que aplica a los levitas: De veinticinco años de edad para arriba él vendrá a entrar en la compañía, en el servicio de la tienda de reunión.
25 Pero después de la
edad de cincuenta años se retirará de la compañía de servicio y no prestará más servicio.
26 Y él tiene que
ministrar a sus hermanos en la tienda de reunión al encargarse de la obligación, pero no debe prestar servicio. Conforme a esto harás a los levitas en sus obligaciones”.
9 Y Jehová procedió a hablar a Moisés en el desierto
de Sinaí en el segundo año de la salida de ellos de la tierra de Egipto, en el primer mes, y dijo:
2 “Ahora bien,
los hijos de Israel deben preparar el sacrificio de la pascua a su tiempo señalado.
3 El día catorce de este
mes, entre las dos tardes, ustedes deben prepararlo a su tiempo señalado. Conforme a todos los estatutos y todos los procedimientos regulares de este deben prepararlo”.
4 De modo que Moisés habló a los hijos de Israel
para que prepararan el sacrificio de la pascua. 5 Entonces prepararon el sacrificio de la pascua en el
primer mes, el día catorce del mes, entre las dos tardes, en el desierto de Sinaí. Conforme a todo lo que Jehová había mandado a Moisés, así hicieron los hijos de Israel.
6 Ahora bien, sucedió que había unos hombres que
se habían hecho inmundos por un alma humana, de modo que no podían preparar el sacrificio de la pascua en aquel día. Por lo tanto, se presentaron delante de Moisés y Aarón en aquel día.
7 Entonces le dijeron
aquellos hombres: “Estamos inmundos por un alma humana. ¿Por qué se nos debe restringir de presentar la ofrenda a Jehová a su tiempo señalado en medio de los hijos de Israel?”.
8 Ante esto, Moisés les dijo: “Párense
allí, y déjenme oír lo que Jehová mande acerca de ustedes”.
9 Entonces Jehová habló a Moisés, diciendo:
10 “Habla a los hijos de Israel, y di: „Aun cuando
cualquier hombre de ustedes o de sus generaciones esté inmundo por un alma, o se halle en un viaje distante, él también tiene que preparar el sacrificio de la pascua a Jehová.
11 Deben prepararlo en el segundo
mes, el día catorce, entre las dos tardes. Deben comerlo junto con tortas no fermentadas y verduras amargas. 12
No deben dejar que quede nada de él hasta la mañana, y no deben quebrarle hueso alguno. Conforme al estatuto entero de la pascua deben prepararlo. 13
Pero cuando el hombre estuviera limpio o no se hallara de viaje, y dejara de preparar el sacrificio de la pascua, aquella alma entonces tiene que ser cortada de su pueblo, porque no presentó la ofrenda de Jehová a su tiempo señalado. Aquel hombre responderá por su pecado.
14 ”‟Y en caso de que un residente forastero esté
residiendo con ustedes como forastero, él también tiene que preparar el sacrificio de la pascua a Jehová. Conforme al estatuto de la pascua y conforme a su procedimiento regular es como debe hacerlo. Debe existir un solo estatuto para ustedes, tanto para el residente forastero como para el natural del país‟”.
15 Ahora bien, el día en que se erigió el tabernáculo,
la nube cubrió el tabernáculo de la tienda del Testimonio, pero, al atardecer, lo que parecía ser fuego continuó sobre el tabernáculo, hasta la mañana.
16 De
esa manera siguió constantemente: La nube lo cubría de día, y la apariencia de fuego de noche.
17 Y siempre
que la nube subía de sobre la tienda, los hijos de Israel partían inmediatamente después, y en el lugar donde residía la nube, allí era donde acampaban los hijos de Israel.
18 Por orden de Jehová partían los hijos de Israel,
y por orden de Jehová acampaban. Todos los días que la nube residía sobre el tabernáculo, se quedaban acampados.
19 Y cuando la nube prolongaba su
detención sobre el tabernáculo muchos días, los hijos de Israel también guardaban para con Jehová su obligación de no partir.
20 Y a veces la nube continuaba unos
cuantos días sobre el tabernáculo. Por orden de Jehová se quedaban acampados, y por orden de Jehová partían.
21 Y a veces la nube continuaba desde el
atardecer hasta la mañana; y se alzaba la nube por la mañana, y ellos partían. Fuera de día o de noche que se alzara la nube, ellos también partían.
22 Fueran dos días
o un mes o más días durante los cuales la nube prolongara su detención sobre el tabernáculo, residiendo sobre él, los hijos de Israel se quedaban acampados y no partían; pero cuando se alzaba,
partían. 23
Por orden de Jehová acampaban, y por orden de Jehová partían. Guardaban su obligación para con Jehová por orden de Jehová, mediante Moisés.
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