Shearman Hugh - Clara Codd Impresiones

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  • 7/26/2019 Shearman Hugh - Clara Codd Impresiones

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    Clara Codd: Algunas impresiones

    Hugh Shearman

    Cuando el Obispo Leadbeater dio cuentas de las vidas pasadas de sus colegas y conocidos,lo que l describi, a menudo pareca, de algn, modo encajar con la persona a quien

    conoci en esta vida.

    Algunos mantendrn que eso !ue una evidencia de verdad objetiva de lo que el Obispo

    Leadbeater describi, otros dirn que lo que escribi personi!icando al menos una sonadaintuicin.

    "l caso de Clara Cod es un buen ejemplo. #e manera graciosa, el Obispo Leadbeater le

    asignaba a ella como ego reencarnante, el nombre de la constelacin de $iscis, el pe%,

    &aciendo uso del el &ec&o de que un cod 'bacalao( es un tipo de pe%. )uien quiera seguirlas vidas de $iscis en las e*tensivas tablas dadas en +Las vidas de Alcione, encontrar que

    el personaje con ese nombre siempre tena un compaero de matrimonio di!erente en cada

    vida. Otros podra regresar al antiguo compaero, pero $iscis siempre volva cada ve% demanera aventurada con alguien nuevo.

    "sta mirada de regreso a su pasado de eleccin la cual la -ida o!rece, sirve admirablemente

    para e*presar y simboli%ar algo que estaba muy pro!undo en la naturale%a de Clara Codd.

    "lla no era el alma gemela de nadie. "n todo lo que &aca &aba una calidad que erapro!undamente virginal. "n un sentido social y psicolgico, este suceso naturalmente de su

    pasado, creciendo como lo &i%o en la antigua nglaterra -ictoriana en un !amilia de muc&as

    &ermanas quienes, incidentalmente, tambin se unieron y sirvieron a la /ociedad 0eos!ica.$ero la cualidad en ella que puede ser llamada virginal no era meramente social o

    psicolgica. 1o se mani!est por si mismo en un sentido separativo ni en ningn !also

    !astidio. "ra la perpetua pure%a de motivo de alguien que saba !undamentalmente a dondeiba y lo que tena que &acer.

    Con gran sutili%a, tambin posea una gran !uer%a la cual vena de no tener que depender de

    nadie. "lla poda combinar una intimidad de cuidados y compasin con una actitud sumisa

    que era aventuradamente impersonal y universal. 2rillaba con una clara y suave lu% igualpara todos. $ero para cada uno muy personalmente. "*iste muc&as personas que pueden ser

    universales y desinteresados en actitud sin parecer !ros, y ella era seguramente uno de

    ellos.

    "ra esa me%cla de universalidad ideal y personalidad inmediata que la &aca una presenciamaravillosa de ideales y una de las ms grandes oradoras pblicas que la /ociedad

    0eos!ica &a tenido. /us lecciones eran &ec&as de pensamientos y sentimientos los cuales

    llegaban a ella como respuestas a su necesidad &umana. La 0eoso!a aqu, no era unaestructura intelectual o una e*plicacin. "ra una respuesta de a!ecto a las necesidades,

    triste%a, incertidumbres, ansiedades y sensacin de vaco de los seres &umanos. #ebe ser

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    dada desde el cora%n. Al mismo tiempo sin ser intelectual en el sentido que el mundo

    entiende la intelectualidad, ella era pro!undamente y con!idencialmente inteligente.

    Cuando joven era muy bella, y era imposible para ninguna audiencia escapar del &ec&i%o desu elusiva !eminidad o esquivar sus miradas de ese e*presivo rostro. 3a en edad avan%ada,

    ella permaneca &ermosa, tal y como la gente anciana es &ermosa. 4na gran amabilidadbrillaba de esos !lacos rasgos, una amabilidad que estaba siempre ligada a ser baado encualquier momento por su agudo sentido de lo absurdo. Astutos pero nunca poco amables

    indicios de travesura estaban latentes detrs de ese rostro, y algunos gestos con!iados y

    graciosamente de c&ica ere transmitido por su e*traamente e*presivo &abito de

    ocasionalmente parpadear o cerrar sus ojos.

    /u alta y delgada !igura estaba casi siempre vestida de negro lo que le daba una cierta

    elegancia austera cuando se para a &ablar. "ra benevolentemente divertida con la gente que

    le deca que el negro era un mal color para vestirse, particularmente si uno era un ocultista,y ella les aseguraba no llevar negrura en su cora%n. Lo que !uera que alguien pudiera

    &aber dic&o en algunos libros sobre la negrura oculta del color negro, ella no iba aabandonar un estilo que consideraba le iba bien y la ayudaba a comunicar e!ectivamente sus

    ideas.

    5uc&os recordarn ese ideal caracterstico que usaba de manera e*cesiva de mantener su

    mano levantada como si previniera al encargado de la reunin de escuc&ar un pequeo

    secreto privado que pareca compartir con cada uno de los individuos presentes. $odra ser

    uno se sus pro!undas verdades de la vida, o podra ser algo divertido sin importancia.

    /u audiencia era muy querida por ella, mientras ellos escuc&aban, ella les daba su atencin

    muy sensible y de todo cora%n. 4no encontrara eso, cuando una con!erencia terminaba,

    ella &aba recodado individuos en la audiencia y quera que se le &iciera saber acerca deellos. "lla preguntara sobre la naturale%a de la angustia o perturbacin que saba deba

    &aber venido a la vida de alguna persona presente detrs de la congregacin, a quien nunca

    &aba visto antes y que probablemente no volvera a ver otra ve%, pero cuyas condiciones

    ella &aba sentido con precisin.

    /u amor iba particularmente a las personas simples y a los jvenes. 6otogra!as de &ijos de

    otras personas, a los cuales muc&os de nosotros miraramos con cortesa en ve% de pro!undo

    inters. "ran de un vivo inters para ella. Aos antes de &aberse quedado en la casa de

    alguien en el transcurso de un viaje de con!erencia, ella quera noticias sobre esa !amilia ysobre su personal domstico las personas que &aban cocinado all. Amaba conocer

    personas en un viaje, y le enviaba correspondencia a cientos de ellos, sin olvidar a nadie.

    $or un tiempo, en edad de veje%, como gente simple acudan a ella, consideraba la idea de

    dejarse declinar por los aos siendo cuidada en un convento de monjas de la glesia

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    7omana a quienes ella &aba conocido. Las &aba encontrado un poco tontas en ciertos

    aspectos, pero dulces, lindas y buenas en tanto que es muc&o ms importante

    /u perpetuo entusiasmo por la gente, la dominada e*uberancia de su amor por la naturale%a&umana, &icieron de ella muc&as veces un gran c&isme, pero nunca uno que no !uera

    amable. "lla poda entretener un oyente de con!ian%a con las ms escandalosas yespelu%nantes &istorias sobre los eventos pasados y personalidades en la /ociedad0eos!ica, contndoselos con un gran candor y una inocencia especulativa de una colegiala.

    3a en su veje%, estaba muy sorda, algunas veces le &aca preguntas a la gente sobre otros a

    quienes ellos encontraban e*tremadamente embara%oso responder en vo% alta como para

    poderla &acer escuc&ar. 1adie pareca estar muy seguro si ella &aca esto en una inocenciainconciente o si no &aba en ello un pequeo toque de travesura ligado a su agudo dis!rute

    por lo absurdo de la naturale%a &umana.

    #urante los largos aos de servicio a la 0eoso!a, ella dio su mensaje a cientos de miles de

    personas en cada continente, les dijo que la 0eoso!a es una e*periencia de sanacin yesplendor. 4n blsamo para los pesares de la &umanidad, un camino a la reali%acin y la

    pa%. /i uno pudiera viajar a travs de los aos a mediados de este siglo dentro de la

    /ociedad 0eos!ica, uno encontrara lo que pereciera ser una completa generacin de seriosmiembros quienes &ablaran de cmo se &aban unido a la /ociedad luego de escuc&ar un

    discurso de Clara Codd.

    "lla public un gran nmero de pequeos libros, basados en muc&os casos en sus propias

    notas de sus lecciones. La mayora de estos, llevan algo del sabor de sus ensean%as y supresencia, de su serena sabidura y buena naturale%a

    /i uno tuviera que seleccionar uno de nuestros libros que revele de una manera

    completamente lo que yace ms cercano a su cora%n, e indicando ms claramente los

    !undamentos de su vida, sera probablemente el pequeo libro titulado +0&e ConsecratedLi!e8 'La -ida Consagrada(, un corto comentario sobre el &imno el cual contiene las lneas9

    +0oma mi vida y djala ser

    Consagrada, /eor, a 0i8

    /u devocin, sin embargo, no era &acia una !orma espec!ica o santuario. "lla sola citaresas palabras de una carta de 5a&atma: +#eja la devocin y servicio ser solo para ese

    /upremo "spritu solo del cual cada uno es una parte8. /u larga vida de trabajo dentro de la

    /ociedad 0eos!ica !ue su e*presin de esa dedicacin.

    Tomado de The Theosophist (El Tesofo) Oct 1976