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Shibam Shibam La Manhattan del desierto La Manhattan del desierto

Shibam una maravilla desconocida

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ShibamShibam

La Manhattan del desiertoLa Manhattan del desierto

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En los áridos desiertos del Yémen, existe una curiosa ciudad llamada Shibam, la “Manhattan del desierto”.

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La diferencia con la Gran Manzana de Nueva York, de acero y cristal, es que sus edificios, algunos de hasta 8 y 9 pisos, son de adobe.

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Por sus calles, en vez de transitar miles de vehículos, apenas si se ve alguna cabra, un burrito, una mujer y algún ciclomotor

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Shibam en el globo

terrestre:

Shibam

Yémen

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Es muy anterior a Nueva York; el origen de sus siete mil habitantes, viene del siglo XII a.C. Fue un importante centro en la ruta del incienso y las especias.

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La riqueza del incienso contribuyó a levantar toda

esta arquitectura local basada en el adobe, troncos de palmera, y

cimientos de piedra.

La gente es tranquila y vive feliz

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Tres mujeres con atuendos típicos y una bella puerta de madera antigua.

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La intención defensiva de las murallas, que rodean la

ciudad, era para contrarrestar los ataques de

los beduinos en pleno desierto.

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El primer piso, la recepción, es un ambiente masculino; el siguiente es para la familia o dormitorio, luego vienen habitaciones privadas, incluida la cocina, ambiente femenino. El último piso o mafrach, es para reuniones familiares.

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En las reuniones familiares se suele mascar qat, leer poesía, escuchar música tradicional; allí en el ático, las ventanas son más grandes.

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A nivel de calle, los muros tienen 1m de espesor para asegurar apoyo a los pisos superiores, cuyas paredes tienen al final, 30cm de ancho.

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Planes de emergencia, con intervención de la Unesco, alguna empresa alemana, y otras ayudas, han permitido mejorar y restaurar edificios.

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La red de agua, tendido eléctrico y telefónico conectaron la ciudad con la modernidad.

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Ahora se ven cables aéreos

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Hay fachadas muy bien conservadas; algunas, blanqueadas con cal.

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Hubo y hay esfuerzos para que la ciudad no sea un mero museo, surgieron apuestas por el turismo que aporta divisas, genera empleos y puede dar motivo de orgullo a

los habitantes.

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Fachadas muy coloridas

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El color se adueñó de algunos edificios

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Por desgracia, Yémen es un país con mala prensa, años atrás se hablaba de secuestros de extranjeros, atentados de Al Qaeda, revueltas, asesinatos terroristas,

que empañan su nivel de seguridad.

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El adobe y la luz del desierto le confieren una tonalidad dorada a estos ‘rascacielos’ de barro.

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Bloques de adobe al sol.

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Nunca falta quien adapta el sueño del gimnasio propio a la zona, bajo el cielo del desierto.

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El fútbol como manifestación universal.

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Vajilla de metal, típica de Shibam

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Algún ciclomotor, un gato, una mujer con su atuendo…

Calle muy angosta.

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Escenas callejeras cotidianas

Calle muy angosta, como para la letra de una canción de Teresa Parodi.