POSIBILIDAD DE UNA TERAPIA DE

REMPLAZO CELULAR

Sheila Ramos13-0211

TERAPIA DE REMPLAZO CELULAR

La terapia de remplazo celular es conocida en la actualidad como el tratamiento de trasplante de médula ósea, en el cual las células se obtienen del interior de los huesos pélvicos de un donante y se transfunden al cuerpo de un receptor. El trasplante de médula ósea se practica sobre todo para tratar linfomas y leucemias, que son tipos de cáncer que afectan los leucocitos sanguíneos. Para efectuar este procedimiento, el paciente se expone a un alto nivel de radiación o se trata con sustancias tóxicas, o ambas; estos agentes destruyen a las células cancerosas pero también a las células relacionadas con la formación de células sanguíneas rojas y blancas.

Una vez que estas células son destruidas, se remplazan con células de médula ósea trasplantadas que proceden de un donante sano. La médula ósea puede regenerar el tejido sanguíneo del receptor del trasplante debido a que contienen un pequeño porcentaje de células que pueden proliferar y restituir el tejido, produciendo sangre. Estas células productoras de sangre se llaman: células madre hematopoyéticas (CMH), quienes remplazan millones de células sanguíneas que envejecen y mueren cada día en el organismo. Las células madre se definen como células indiferenciadas capaces de auto-renovarse y sufrir diferenciación en dos o más tipos celulares maduros. Las CMH de la médula ósea son tan solo un tipo de célula madre, la mayoría de los órganos del humano adulto contienen células madre capaces de reponer células específicas.

A pesar de todo esto, existen dudas sobre cómo el trasplante de células podría mejorar la calidad de vida de muchos pacientes. Por ejemplo se hacen trasplantes de islotes pancreáticos para que produzcan insulina a partir de cadáveres donantes y trasplantes de neuronas de fetos abortados para pacientes con Parkinson. Pero ni los cadáveres ni los fetos son fuentes adecuadas de células para trasplante, por esta razón es un tema muy controversial y debatido.

Pero la mayor expectación en el campo de trasplante celular, proviene de los estudios sobre células madre embrionarias (ES), que son células de embrión en una etapa temprana que dan origen a las diversas estructuras del feto. Estas pueden cultivarse por tiempo indefinido y no hay controversia acerca de su capacidad de diferenciación, ya que son pluri-potenciales, es decir, pueden diferenciarse en cualquier tipo de célula del cuerpo. El objetivo a largo plazo de los investigadores clínicos es aprender a inducir a las células ES para que se diferencien en cultivo en los tipos celulares deseados que puedan usarse para la terapia de remplazo celular.