DESCRIPCIÓN GENERAL
Nota: Las fotos han sido tomadas en el bosque de neblina del caserío Agua Azul distrito de Chontalí – Jaén – Cajamarca; la descripción de las aves están manifestadas de manera general.
Tangara parzudakii “Tangara cara de fuego” Especie distribuida por Colombia,
Ecuador, Venezuela y Perú, en los
bosques húmedos subtropicales o
tropicales de tierras bajas y los bosques de
montaña; por ello se le denomina
“común”. En Perú se le suele encontrar en
bosque montano húmedo a lo largo de la
vertiente de los andes, en el noroeste,
suroeste de la cuenca del Amazonas, en
las partes altas (dosel) de los bosques. Se
alimenta de frutas y de insectos. En cuanto
a las frutas como las bayas de las
melastomatáceas (frutos más grandes)
y Cecropia. Se cuelga boca abajo desde
los pecíolos o de las hojas para empujar pequeños amentos de las Cecropia y después se vuelve a su posición inicial
y los come. En cuanto a los insectos busca lenta y deliberadamente en ramas con líquenes y musgos dentro de la
copa de los árboles, donde se posa boca abajo casi por 5 segundos o más para revisar por el revés de los musgos.
Lamentablemente, a veces es usada como mascota, pero es importante en el bosque ya que disemina las semillas.
Chaetocercus mulsant “Estrellita de Vientre Blanco” Especie distribuida en la Cordillera Oriental de Colombia, Ecuador, Perú y al
centro de Bolivia (Yungas de Cochabamba), en la zona húmeda de los andes,
se le denomina “común”. Habita en los bosques húmedos siempre verdes,
bosques secundarios, bosques, pastizales y áreas cultivadas con árboles,
ubicado mayormente en borde de bosques. Vuelan muy lento y produce un
sonido muy similar a los abejorros. El plumaje es principalmente verde
brillante con manchas blancas debajo; machos presentan manchas iridiscentes
garganta que se ven de color rojo púrpura con la luz adecuada y colas cortas y
puntiagudas; hembras tienen garganta blanca (sin parche garganta) y en los
flancos anaranjados y bandas torácicas (como de la imagen). Se alimentan
principalmente de néctar de las flores, a veces se puede ver colgando de la
flor mientras se alimentan. Muchas plantas nativas y cultivadas en cuyas
flores estas aves se alimentan en gran medida dependen de ellos para la
polinización. La mayor parte tubular en forma de flores en realidad excluir a
la mayoría de las abejas y las mariposas se alimentan de ellos y, posteriormente, a partir de la polinización de las
plantas. También se alimentan de algunas pequeñas arañas e insectos, fuentes importantes de proteína especialmente
necesarios durante la temporada de cría. La hembra es responsable de construir el nido en forma de copa de fibras
vegetales entrelazadas y musgo verde por fuera para el camuflaje en un lugar protegido en un arbusto o árbol.
Adelomyia melanogenys “Colibrí Jaspeado” Especie distribuida en las montañas al norte de Venezuela y en los
Andes, hasta el noroeste de Argentina. En bosque montano húmedo en
la vertiente este de los andes de Perú. Se le denomina “bastante común”.
Vive a la sombra de los bosques subandinos y la franja baja de los
bosques andinos. Puede resultar difícil descubrirlo en medio de su
oscuro hábitat, donde pasa volando a gran velocidad, deteniéndose un
instante a libar unas pocas flores, antes de partir como una exhalación.
Este colibrí visita gran variedad de flores de arbustos, enredaderas y
plantas epífitas, especialmente aquellas que se encuentran en los
estratos bajo y medio del bosque; no es común que suba hasta la copa
de los árboles a buscar alimento. Sus flores predilectas tienen una corola
corta, donde su pequeño pico encaja sin problemas. Sin embargo,
también visita flores más largas, a las cuales les roba el néctar
libándolas por los costados. Las flores que visita tienen diversos colores, pudiendo ser rojas, anaranjadas, amarillas,
moradas, rosadas e incluso blancas. Cada vez que puede liba las flores colgándose de ellas con sus patas, al tiempo
que aletea, en lugar de hacerlo en vuelo suspendido como muchos otros colibríes. Obtienen el néctar de arbustos en
floración y lianas incluyendo: Lobelia (Campanulaceae), Fuchsia (Onagraceae), Psammisia (Ericaceae), Palicourea
(Rubiaceae) y Bomarea (Alstroemeriaceae). También se alimenta de insectos que son recogidos de la superficie de
hojas o capturados en el aire. Se reconoce por su verde metálico opaco arriba, mejillas oscuras, superciliar
blancuzco. Cremoso abajo con prominente punteado verde en la garganta y lados del cuerpo. Cola bronceada
ligeramente bifurcada con claras puntas crema. Sexos similares. Aunque su patrón es algo similar a los ermitaños,
varias características de plumaje y la forma y longitud del pico son claramente distintos.
Colibrí coruscans “Oreja Violeta de Vientre Azul” Su distribución comprende las regiones andinas desde Venezuela hasta
Argentina. Habita en las selvas lluviosas, selvas nubosas, vegetación
secundaria, terrenos donde hay árboles, jardines. Éste es un colibrí
grande y resistente, común en áreas cultivadas y transformadas por los
seres humanos. Es una de las pocas especies de clima frío que se adapta
a los ambientes urbanos, donde vive en parques y jardines. Muy activo.
Durante todo el día, los machos cantan casi sin parar, posados en ramas
elevadas. Son agresivos y atacan a otros colibríes en defensa de su
territorio. A menudo, una de estas aves se instala junto a una rica fuente
de alimento, por ejemplo un arbusto lleno de flores o un comedero para
colibríes y espanta una y otra vez a los demás colibríes que quieren
alimentarse allí. Las peleas entre dos machos de esta especie suelen
producir la rápida huida de uno de estos, pero en ocasiones dos aves se
enfrentan durante un rato prolongado, entonces es posible ver cómo extienden, como si fueran “orejas”, las plumas
azul violeta que tienen a ambos lados de la cabeza, los combates son animados por una rápida serie de inconexos y
metálicos chillidos y por duras notas drrr! y así, entre un combate y otro y entre un zumbido de actividades, pasan el
día. Se le reconoce por ser mayormente verde metálico con parche azul-violeta en el centro del vientre y desde la
garganta hacia la lista auricular. Cola azul metálica, apenas bifurcada, banda subterminal oscura. Parche auricular
más pequeño en la hembra.
Diglossa cyanea “Pincha Flor
Enmascarado” En los Andes, desde Venezuela hasta
el norte de Bolivia. Habita en bosques
y matorrales montanos húmedos, a
pesar de tener un plumaje vistoso
puede pasar desapercibido, ya que
vive en medio de una espesa
vegetación y vuela generalmente por
la copa de los árboles. Cuando se
tiene la oportunidad de observarlo en
detalle y con buena luz, se puede ver
su “antifaz” negro y, en medio de él, los brillantes ojos rojos. Muestra una marcada preferencia por los frutos
silvestres, los cuales componen una buena parte de su dieta, se lo observa comiendo frutos de tunos (Miconia) y
moras (Rubus). De todas formas, también bebe néctar, que recoge de Ericáceas como la uva camarona (Macleania)
y el agraz (Vaccinium). Esta especie prefiere tomar el néctar metiendo el pico dentro de las flores cortas, evitando
en lo posible perforar su base. Se le reconoce por su pico negro, relativamente largo y recurvado hacia arriba,
plumaje en general azul brillante. La cabeza con una máscara negra que va desde la base del pico y frente hasta los
lados del cuello, ojos de color rojo muy intenso. Frecuentemente solitaria, integrando alguna bandada de otras
especies de pequeñas aves frugívoras.
Tangara vassorii “Tangara Azul y Negra” En los Andes, desde Venezuela hasta el norte de
Bolivia. Esta tangara es un ave pequeña que habita en
los bosques montanos. Casi todas las especies
de Tangara viven desde el nivel del mar hasta unos
2500 metros de elevación. La única especie del
género que habita con regularidad en las frías
regiones por encima de 3000 metros es la tangará
negriazul. Incluso se la ha reportado hasta 3400
metros; sin embargo, parece que no es residente
permanente en estas elevaciones tan altas. Se cree que
esta especie realiza migraciones estacionales, bajando
y subiendo por las laderas de las montañas. La tangará
negriazul es muy ágil e inquieta, se la pasa saltando sobre los árboles, picoteando los insectos que hay en las ramas
y el follaje. Se detiene por más tiempo cuando descubre un árbol o arbusto que está produciendo abundantes frutos,
sus favoritos son bayas relativamente pequeñas, por ejemplo las de diversas especies de tunos (Miconia). Su
plumaje, de un brillante color azul y negro destaca mucho contra los tonos opacos o pálidos del follaje que la rodea
en su hábitat natural. La tangara vive en parejas o en pequeños grupos; y normalmente está acompañada por otras
especies de aves propias de bosques montanos como otras tangaras, conirrostros y atrapamoscas.
Anisognathus lacrymosus “Tangara de Montaña Lacrimosa” Se encuentra en el oeste de Venezuela hasta Bolivia. Se le denomina como
“bastante común” y distribuida en la vertiente de los andes. Habita en bosque
húmedo montano y bode de bosques y en vegetación secundaria adyacente,
busca su alimento a cualquier altura y se le ha registrado en altitudes de
hasta 3800 m, y parece alimentarse en gran medida de las bayas y frutas,
aunque los insectos también constituyen parte de la dieta de la especie. Parte
ventral amarillo leonado, alas y cola negra orillada de azul parte dorsal
oscuro opaco, más negro en la coronilla y lados de la cabeza; mancha abajo
del ojo y detrás de los auriculares amarillo, rabadilla coberteras
supracaudales y alares menores y medianas azul purpúreo muy lustroso.
Pipreola riefferii “Frutero Verde y Negro” En los Andes desde el oeste de Venezuela hasta el centro de Perú. Se le
denomina como “bastante común” y distribuida en la vertiente de los andes.
En los estratos medios de bosque montano y márgenes de bosque en la zona
subtropical y templada baja de ambas estribaciones de los Andes. Es un ave
confiada, que percha frecuentemente inmóvil por periodos prolongados. Se
posa calladamente o salta desde el sotobosque hasta los estratos medios. El
nido lo construye en la vegetación no muy alta. La nidada consiste de dos
huevos. Aparentemente sólo frutos pero sin embargo se afirma que también
se alimenta de insectos. Frutos de árboles y enredaderas, especialmente
de Hedyosum sp., Chloranthaceae. Al este de los Andes se alimenta de frutos
de Chloranthaceae, Ericaceae y Melastomataceae. Usualmente se encuentra
solo o en parejas, aunque en ocasiones se reúne en grupos de hasta seis
individuos bajo árboles frutales. Toma los frutos mientras se encuentra
posada o los agarra mientras se sostiene en el aire torpemente. En ocasiones
acompaña bandadas.
Turdus fuscater “Zorzal Grande” En los Andes desde el oeste de Venezuela hasta el oeste de
Bolivia; Sierra de Perijá y montañas de Santa Marta. Una de
las aves más comunes en los climas fríos, donde destaca por
su tamaño, por su plumaje de color oscuro y por sus patas y
pico anaranjados. Esta especie, nativa de los Andes. Es
fuerte, despierta y territorial; y además, muy adaptable, ya
que se la puede encontrar tanto en ambientes silvestres, por
ejemplo bosques nativos y páramos, como en los sitios más
intervenidos, entre ellos las zonas arboladas, techos y antenas
de los edificios de la ciudad. Ave omnipresente y agresiva,
que aleja a otras especies de aves de sus comederos favoritos
y que ocasionalmente mata pequeños pájaros para alimentarse con ellos o para dárselos de comer a sus crías. Esto
ha generado el rechazo de muchas personas hacia esta ave, que la ven como una especie de plaga que está acabando
con otras especies de pájaros. Sin embargo, en principio, no es un ave carnívora. Incluso cuando come pajaritos,
sólo lo hace de vez en cuando, pues la mayor parte de su dieta consiste en frutos, insectos y lombrices. Hace menos
daño a la avifauna una o un grupo de ellas que un gato. Además, también cuenta con cualidades, por ejemplo, una
de las más importantes dispersoras de semillas de árboles de clima frío. Y, aunque parezca asombroso, una de las
mejores cantoras entre las aves de la madrugada. Sucede que la mirla canta sólo en un horario muy restringido,
principalmente en las madrugadas cuando todavía está oscuro. Por esto, a menos que uno sea muy madrugador, es
fácil pasar por alto este canto. Al inicio de cada día, el aire fresco se llena de delicados silbidos, burbujeos y trinos:
son las mirlas cantando, aprovechando los breves instantes en que muestran su virtuosismo. Luego de algunos
minutos, las aves se silencian y normalmente no vuelven a emitir estos agradables sonidos durante el resto del día,
salvo, a veces, al atardecer o cuando el día está oscuro y nublado. Pico y patas anaranjado brilloso, anillo ocular
amarillo (macho solamente). Mayormente negro parduzco o cenizo, con alas más oscuras y partes ventrales un poco
más pálidas. La hembra carece de anillo ocular. El juvenil es más deslucido, incluyendo pico, patas y anillo ocular.
Aunque el Mirlo Negribrilloso (T. serranus) es algo parecido, es más pequeño, más lustroso (la hembra es parda) y
vive en hábitats boscosos.
Colaptes rivolii “Carpintero de Manto Carmesí” Distribución fragmentada, encontrándose a lo largo de los Andes desde el
oeste de Venezuela hasta el oeste y centro de Bolivia, incluyendo
Colombia, Ecuador y el centro de Perú. Es una de las aves más vistosas en
los bosques húmedos de montaña, donde se destaca por su gran tamaño
(mide 28 cm de longitud), así como por sus colores, rojo carmesí por
encima y amarillo por debajo. En su hábitat, es la única especie de ave con
este patrón de coloración. Si se lo observa de cerca, es posible ver sus
mejillas blancas, así como el escamado y punteado oscuros del pecho. Al
igual que otros carpinteros, esta especie se alimenta de insectos, sus larvas
y otros invertebrados. Para encontrarlos, trepa por troncos y ramas y los
picotea, sacando los animalitos ocultos bajo la corteza o entre el musgo
que crece allí. Un rasgo especial de esta especie es que también revisa con
cuidado las bromeliáceas que crecen encima de los árboles. Dentro de
estas plantas se oculta una gran variedad de pequeños animales y para
encontrarlos el carpintero carmesí picotea con cuidado sus bases, mira
entre las hojas muertas e incluso se mete dentro de las rosetas de hojas de
las especies de mayor tamaño. No forma grandes grupos con otros
carpinteros de su misma especie. Más bien, como suelen serlo los pájaros carpinteros, es solitario o, a lo sumo, vive
en parejas. En ocasiones pueden verse tres individuos juntos, pero en este caso casi siempre se trata de una pareja
con su cría ya crecida. Sin embargo, es frecuente que el carpintero carmesí acompañe a otras especies de aves, como
atrapamoscas, tangaras y reinitas. Los carpinteros y todas las otras aves se mueven juntos y conforman las bandadas
mixtas, tan típicas de los bosques de montaña. Rojo carmesí dorsalmente, cara amarillenta, garganta negra, amarillo
hacia abajo con el pecho densamente escamado negro y rojo. Hembra similar
pero la corona enteramente negra.
Coeligena torquata “Inca Acollarado” Andes desde el occidente de Venezuela hasta centro y sur de Perú y
occidente de Bolivia. Denominado “común” de los bosques húmedos que
cubren las montañas. El macho es notable por tener gran parte del plumaje de
color negro, lo cual no es muy usual en la familia de los colibríes. Sin embargo,
presenta amplias manchas blancas en el pecho y en la cola, muy visibles cuando
vuela. Es silencioso. Aparece repentinamente y, cuando hay una persona cerca,
parece no mostrar miedo alguno, pues se suspende en el aire cerca de ella,
libando sus flores. Luego, se aleja tan rápida y silenciosamente como llegó. Sus
flores favoritas son las de varias especies de plantas trepadoras y las de plantas
que crecen encima de las ramas de los árboles (epífitas). Por ejemplo, visita
especies de quiebraplatos (Bomarea), fucsias (Fuchsia), curubos (Passiflora) y
uvos de monte (Cavendishia, Macleania). Como estas flores suelen estar
dispersas por el bosque, el colibrí hace todos los días largos recorridos en su búsqueda, regresando cada tanto al
punto de partida, para volver a libar las flores que visitó un rato antes. Este tipo de colibríes que no establecen
territorios de alimentación, sino que se desplazan ampliamente en busca de su alimento, son conocidos
como ruteadores. El plumaje presenta muchas variaciones interesantes. Para empezar, es distinto el de hembras y
machos. El de aquellas es básicamente verde brillante, con las mismas áreas blancas en el pecho y en la cola que
tiene el macho. Pico largo y recto. Macho principalmente negro aterciopelado, con visos verde
metálicos en la garganta, lados del pecho y rabadilla. Parche morado iridiscente en el centro de la
corona (no muy distintivo) y una amplia pechera blanca pura. Cola algo alargada, recta,
predominantemente blanca pero con puntas oscuras. Hembra tiene similar patrón pero es mucho más
verde. Inconfundible por su pechera blanca sobresaliente y su cola mayormente blanca.
Fuente:
Descripción. Bglo. Hóman Benítez
Foto: Bglo. José Huaroto.
Diseño: Lic. Cindy Díaz.
RECORDAR QUE: - Los colibríes son solitarios en todos los aspectos de la vida que no sea la reproducción, y la única participación del
macho en el proceso reproductivo es el apareamiento real con la hembra.
- Los colibríes son polinizadores de muchas plantas especialmente silvestres.
- El género Tangara es uno de los más diversos en el mundo de las aves: alrededor de 50 especies pertenecen a él.
- El género Tangara son aves de pequeño tamaño, con plumajes coloridos y brillantes.
- Casi todas las especies de Tangara viven desde el nivel del mar hasta unos 2500 metros de elevación.