EDUCACIÓN INTERACTIVA EN UN MUNDO DIGITAL
‘Somos más que agua, más que tierra, más que sol.Somos la fuerza viviente que
se da un motivo para vivir’. Ray Bradbury
1 EDUCAR EN NUESTRO TIEMPO DIGITAL
Desde que el ser humano encontró distintos recursos dentro de la formación de
espacios y escenarios para la delimitación de un lenguaje propio y específico, se
han dado contribuciones al reconocimiento de un contexto específico.1 El gran
dilema de la comunicación radica en el enfoque social y cultural en el que es
concebida y en los clichés que ha recibido a lo largo de una historia definida por la
estandarización, la robotización y politización de la información.
Es por eso que hacer uso de los “nuevos recursos tecnológicos y de los
medios audiovisuales” no para transmitir contenidos sino, al contrario, para buscar
a través de ellos la ruptura con la pedagogía de la transmisión. 2
Precisamente acá es donde la comunicación y la educación resultan ser
dos campos, disciplinas y áreas inmersas dentro del desarrollo humano en donde
se deben repensar y reconfigurar los ámbitos que rodean las sociedades,
aspectos dentro de lo político, lo económico, y múltiples ejercicios que codifican
toda una realidad en la cual como sujetos deberíamos ser partícipes, de ahí que,
para realizar esta concepción de la educación como práctica de la libertad, su
dialogicidad empiece, no al encontrarse al el educador-educando con los
1 Freire, Paulo. (S.F) Pedagogía del oprimido. Consultado el 2 de marzo de 2013. Tomado de la web: www.servicioskoinonia.org/biblioteca/general/FreirePedagogiadelOprimido.pdf Versión PDF. Pagina 92 2 Silva, Marcos. (S.F) Educación Interactiva. Digitalizado por: Luis Fernando Rincón. Docente USTA. Capítulo 1. Educar en nuestro tiempo digital. Página 23.
educando-educadores en una situación pedagógica, sino antes, cuando aquél se
pregunta en torno a qué va a dialogar con éstos. Dicha inquietud en torno al
contenido del dialogo es la inquietud a propósito del contenido programático de la
educación. (Freire, S.F.) El educador Paulo Freire llamó la atención sobre el
problema. Para él, la educación auténtica no se hace A a B o de A sobre B, sino A
con B. El papel del profesor no es transmitir el conocimiento sino crear las
posibilidades o construcción: El profesor aún es un ser superior que enseña a los
ignorantes. Esto forma una conciencia “bancaria” [sedentaria-pasiva]. El educando
recibe pasivamente los conocimientos, convirtiéndose en un depósito del
educador. (Silva, S.F)
Para el “educador bancario”, en su antidilogicidad, la pregunta obviamente,
no es relativa al contenido del diálogo, que para él no existe, sino con respecto al
programa sobre el cual disertará a sus alumnos. Y a esta pregunta responde él
mismo organizando su programa.
Para el educador humanista o el revolucionario auténtico, la incidencia de la
acción es la realidad que debe ser transformada por ellos con los otros hombres y
no con los hombres entre si. (Freire, S.F)
La tecnología, abre un mundo de nuevas oportunidades frente a esta
situación, que lleva a un tratamiento adecuado del proceso comunicativo, de forma
tal que permita efectivizar las interacciones y el aprendizaje en lugar de la
transmisión y la memorización.
El campo digital es la ventana a las grandes posibilidades para la acción del
usuario. En el ordenador, el palmtop y el teléfono móvil, es usuario interactúa
fácilmente con imágenes, sonidos y textos dinámicos. La información tiene esa
cualidad semiótica intrínseca por que es definida matemáticamente en
combinaciones numéricas de <<1>> y <<0>>.
El lenguaje digital es el responsable de una revolución tecnológica y cultural
sin precedentes. Es la transformación de átomos en bits, lo cual supone la
aparición de la “vida digital”. (Negroponte, 1996).
La codificación digital permite la manipulación de documentos, creación y
estructuración de elementos de información, las simulaciones o los formatos
evolucionarios en los entornos, concebidos principalmente para crear, manejar,
organizar o mover una documentación basada en palabras, grafismos elementales
y números.
El texto digitalizado puede ser un hipertexto, es decir, un tejido de
conexiones de un texto con otros innumerables textos. La idea fue enunciada por
primera vez por Vannevar Bush en 1945. Este matemático imaginaba un sistema
de organización de informaciones que fusionase de modos semejantes al sistema
de raciocinio humano: es decir de manera asociativa, no lineal intuitiva y muy
inmediata. En la década de 1960, Theodore Nelson acuñó el término
<<hipertexto>> para expresar el funcionamiento de la memoria de un ordenador.
En las escuelas y universidades los alumnos son los nuevos lectores o
nuevos espectadores. Son menos pasivos, más intuitivos y tienden a un
aprendizaje fundado menos en la dependencia de los adultos que en la propia
exploración que realizan con sus compañeros en la utilización de la imagen y del
sonido, de la conectividad y de la velocidad.
El nuevo espectador aprende con la nueva gramática de lo digital. Aprende
nuevos parámetros de lectura y conocimientos. La lectura es de tipo sinestético y
conectivo, atenta al mismo tiempo a lo que es mostrado en varios cuadros
simultáneos y a lo que es comentado por medio de innumerables textos,
conectados por links, que corren paralelamente sobre imágenes, iconos, sonidos y
videos.
El movimiento de las tecnologías digitales nos enseña que comunicar no es
simplemente transmitir, sino proporcionar la libertad de conectividad y de
intervención del interlocutor. La comunicación sólo se realiza mediante su
participación. Para entender esto es preciso hacer una distinción entre la
modalidad comunicacional tradicional unidireccional y la interactiva, que puede ser
formulada así
para visualizar el movimiento de las tecnologías comunicacionales a partir del
cuadro anterior, los cuadros siguientes presentan las características básicas de los
“medios de comunicación de masas” y de las “tecnologías digitales” formuladas
por Lévy (1998, pág. 51s):
2 LOS DESAFÍOS DE LA ERA DIGITAL: INFOEXCLUSION Y ANALFABETISMO DIGITAL
El proceso de adaptación de la educación a todo ello es lo que podemos
denominar "aprendizaje aumentado", el que partiendo del cambio de foco desde la
educación al aprendizaje autónomo en el contexto anterior permite aprovechar la
potencia de la web a un nuevo individuo, permanentemente conectado a la
inteligencia colectiva.
Si llegamos a entender el internet como constructo socio-técnico complejo,
existen dos aspectos (tecnología y personas) que observar en torno a una misma
necesidad: la de la educación o el aprendizaje orientados al máximo
aprovechamiento del ecosistema de comunicación, aprendizaje y participación
actual.3
Las nuevas experiencias de uso como las que ofrecen las tablets implican
también la generación de contenidos no sólo adaptados los diseños curriculares,
sino también al entorno informático de los dispositivos. En este campo, lo que se
encuentra actualmente es gran cantidad de recursos dispersos. Desarrollos de
empresas, instituciones educativas, editoriales, pero cada uno por su lado y sin
una integración que facilite la búsqueda de los docentes para su uso didáctico.
No se trata de pasar una presentación de diapositivas a una tableta, sino de
aprovechar al máximo las ventajas de cada dispositivo. Pero también de encontrar
nuevos modelos de interacción con estos contenidos. (Dolors, 2012) La selección
de diferentes materiales, termina convirtiendo al docente, cada vez más en un
3 Reig, Dolors. Abril de 2012. Las TIC están haciendo posibles viejas utopías educativas. Conferencia en Organización de los Estados Iberoamericanos de Buenos Aires, Argentina. Consultado el 5 de mar. de 13. Rescatado de http://www.oei.es/noticias/spip.php?article10412
“curador de contenidos”, en un guía que facilita y promueve entornos propicios
para la generación de inteligencia colectiva.
Es por eso que la educación interactiva no depende de las tecnologías
digitales, dado que la interactividad no es un concepto informático y si de
comunicación. Esto quiere decir que incluso en el aula infopobre que puede haber
educación interactiva. Quiere decir también, que el rigor, la educación interactiva
no depende de la inclusión digital.
1. La sociedad de la información y la cibercultura Nuestra época está caracterizada por las tecnologías de la información y la
comunicación. En este sentido, Balsemão expresa lo siguiente:
Cada vez se produce más información, cada vez son más las personas
cuyo trabajo es informar, cada son más también las personas que dependen de la
información para trabajar y vivir. La economía se asienta en la información. La
información se penetra sobre la sociedad como una red capilar y , al mismo tiempo
como infraestructura básica… (Balsemão, 1998, pág. 282).
La red mundial de ordenadores, Internet, amplía el sector de servicios
(terciario), de tal forma que hoy se habla de “sector cuaternario”. Los servicios se
han intensificado de tal forma que se volvió necesario inventar a expresión sector
cuaternario, se incluye todo lo nuevo que trajo internet; por ejemplo la libertad del
usuario para intercambiar, ejecutar, copiar, distribuir o modificar un producto.
Las sociedades multiculturales rechazan las jerarquías que funcionaron
bien en la era industrial, centralizada piramidal. En su lugar, gana espacio el
modelo de red organización y comunicación que tiene raíces en la formación
espontánea, igualitaria y natural de grupos de personas que comparten intereses
semejantes. Las redes reestructuran el poder y el flujo de comunicación, tanto
vertical como horizontalmente. Ello significa una reestructuración de las esferas
tecnológicas, mercadológica y social.
2 infoexclusión y analfabetismo digital No basta solo con tener acceso a las tecnologías digitales on-line. Es
necesario saber utilizarlas, y no precisamente como un receptor de medios
clásico. Internet es un medio interactivo, en donde somos espectadores y
participantes al mismo tiempo.
Es por eso que la participación es uno de los fundamentos de la
interactividad, conforme veremos más adelante. Las tecnologías digitales on-line
traen en su “naturaleza” esa dimensión comunicacional que perite al espectador
clásico actuar también como emisor, como colaborador y como creador. Cuando
son subutilizadas en ésa que es su peculiaridad esencial, refuerzan
paradójicamente la infoexclusión de los propios usuarios.
El acceso a las tecnologías digitales será lo menos problemático
comparado con el desafía que significa llegar al conocimiento y a la participación a
partir de múltiples enlaces. Los propietarios de los medios tradicionales de difusión
de información están disputando su espacio por medio de alianzas
transnacionales. Aquellos que solo tenían el diario impreso, la radio o la TV, hoy
amplían o garantizan su mercado ofreciendo múltiples opciones de servicio on-
line.
3. la disolución del sujeto en el ciberespacio En la actualidad estamos preparados para que en una hora más de 80
publicaciones noticiosas nos informen de lo que está ocurriendo en el mundo, más
de 3 mil videos musicales son descargados y se envían más de 100 mil millones
de correos por hotmail o gmail. Sumado a esto no solo nos sentimos a gusto con
dejar nuestro sello personal en la web, sino que pretendemos que muchos otros
sigan lo que estamos haciendo.
Internet no está diseñado para volcar o generar los contenidos y
esconderlos, ¿acaso hay alguien que quiera concentrar algo que no se pueda
divulgar?, estos mensajes están hechos para compartirlos. Definitivamente
compartir es un gesto cotidiano, en nuestro día a días nos damos a la fructífera
labor de intercambiar mensajes, ideas, detalles o cosas personales, sea cara a
cara, enviando un mensaje de texto o a través de una video-llamada por Skype.4
Ello significa que la mediación electrónica jamás contempla la verdadera
interactividad, que sólo es posible en la comunicación natural. La interactividad
electrónicamente medida no es más que una interposición de interfaces. Es decir
entre los sujetos y las máquinas, o entre los mismos sujetos, se interponen filtros,
pantallas, mediaciones. La interactividad sería, en definitiva, resguardarse detrás
de las coberturas que nos ofrecen los autómatas que parecen dar vida a las
máquinas o que mediatizan el pensamiento y el lenguaje.
Por:
Carlos Andrés Rubiano Castillo
Código: 2090041
Asignatura: Escenarios virtuales de aprendizaje
4 Peña, Guillermo. 2013. ¿Qué nos motiva a compartir en el mundo virtual?. Versión on-‐line. Rescatado de: http://www.redtierras.org/profiles/blogs/que-‐nos-‐motiva-‐a-‐compartir-‐en-‐el-‐mundo-‐virtual. Consultado el 6 de marzo de 2013
Bibliografía Consultada • Freire, Paulo. (S.F) Pedagogía del oprimido. Consultado el 2 de marzo de 2013.
Tomado de la web: www.servicioskoinonia.org/biblioteca/general/FreirePedagogiadelOprimido.pdf Versión PDF. Pagina 92
• Silva, Marcos. (S.F) Educación Interactiva. Digitalizado por: Luis Fernando Rincón. Docente USTA. Capítulo 1. Educar en nuestro tiempo digital. Página 23.
• Reig, Dolors. Abril de 2012. Las TIC están haciendo posibles viejas utopías educativas. Conferencia en Organización de los Estados Iberoamericanos de Buenos Aires, Argentina. Consultado el 5 de mar. de 13. Rescatado de http://www.oei.es/noticias/spip.php?article10412
• Peña, Guillermo. 2013. ¿Qué nos motiva a compartir en el mundo virtual?. Versión on-‐line. Rescatado de: http://www.redtierras.org/profiles/blogs/que-‐nos-‐motiva-‐a-‐compartir-‐en-‐el-‐mundo-‐virtual. Consultado el 6 de marzo de 2013