FACULTAD DE EDUCACIN
DPTO. DE TEORA E HISTORIA DE LA EDUCACIN
-TESIS DOCTORAL-
La Universidad de Salamanca durante el franquismo (1956-1968)
Vol. II
Autora: Director:
Sara Gonzlez Gmez Dr. Jos Mara Hernndez Daz
(SALAMANCA, 2013)
433
NDICE DE CONTENIDO
VOLUMEN II
Captulo V. El alumnado universitario salmantino
5.1. Evolucin de la matricula durante el franquismo y la transicin espaola
(1939/78)
5.2. Alumnos y eleccin de estudios entre 1956 y 1968
Anlisis por facultades
Anlisis por tipo de matrcula
5.3. Estructura y composicin del alumnado
5.3.1. Gnero
Breve apunte: las cuestiones de gnero desde la perspectiva de las universitarias
5.3.2. Procedencia geogrfica
5.3.3. Extraccin social y tipologa del alumnado salmantino
5.3.4. Residencia en la ciudad
5.3.5. La casustica particular de los alumnos internos de la Facultad de Medicina
5.4. Estudiantes extranjeros
5.4.1. Anlisis por facultades y estudios
5.4.2. Anlisis por procedencia geogrfica
5.5. El Sindicato Espaol Universitario: una postrimera anunciada
5.5.1. Breve aproximacin al significado y sentido del SEU
5.5.2. El SEU en Salamanca
Cine-club del SEU
I Conversaciones Nacionales de Cinematografa de Salamanca
Cursos de Estudios Universitarios de Cine
5.6. Las asociaciones de estudiantes
5.6.1. La Asociacin de antiguos alumnos y amigos de la Universidad de Sala-
manca
5.6.2. El nacimiento de las asociaciones profesionales de estudiantes
5.6.3. El asociacionismo de estudiantes iberoamericanos
5.7. Movilizacin estudiantil y clima de agitacin universitaria
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Sucesos universitarios salmantinos y repercusin de los acontecimientos nacio-
nales
5.8. Hbitos de estudio, actividad cultural y ocio del alumno salmantino
5.8.1. Excursiones y viajes de estudios
5.8.2. Revistas estudiantiles salmantinas
5.9. El final de la vida universitaria: Da del Licenciado
Captulo VI. Difusin cientfica, extensin universitaria y relaciones institu-
cionales
6.1. Publicaciones e intercambio cientfico
6.1.1. Revistas cientficas salmantinas
6.1.2. Condiciones de las bibliotecas universitarias
Biblioteca general
Bibliotecas de facultad
Bibliotecas de seminario
La evolucin hacia un modelo bibliotecario descentralizado coordinado
6.2. Congresos y actividades de difusin cientfica
6.3. Vnculos y acuerdos con universidades y centros extranjeros
Iberoamrica
Estados Unidos
Europa
Marruecos y la Asociacin cultural hispano-marroqu
6.4. Actividades de extensin cultural y universitaria
Ctedra de msica Francisco Salinas
Entidades de carcter gratuito-caritativo con vinculacin o dependencia universi-
taria
6.5. Relaciones universidad/sociedad: Conexin o desconexin entre universidad
y ciudad?
6.5.1. Patronato universitario
6.5.2. Universidad versus Ayuntamiento
6.5.3. Universidad versus Diputacin Provincial
6.5.4. Universidad versus Cmara de Comercio
Captulo VII. Hacienda e instalaciones universitarias
7.1. Presupuestos universitarios salmantinos
7.1.1. Fondos generales
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7.1.2. Junta de obras
7.1.3. Un caso particular: la creacin de una comisin econmica en la Facultad
de Filosofa y Letras
7.2. Retribucin econmica docente
7.3. Poltica de becas del franquismo: subvenciones para estudiantes
7.4. La repercusin de los planes de desarrollo en la universidad
7.5. Espacios y dependencias acadmicas
7.5.1. Planificacin del nuevo recinto universitario
7.5.2. Nuevas construcciones e inauguraciones oficiales
Pabelln de quirfanos del Hospital clnico y provincial
Clnica psiquitrica universitaria
Escuela de Matronas de la Facultad de Medicina
El nuevo edificio de la Facultad de Ciencias
Campo de deportes y pistas universitarias de atletismo
7.5.3. Alojamiento universitario
Conclusiones
Fuentes
Bibliografa
Anexos
I. Breve semblanza biogrfica del elenco de catedrticos de la Universidad de Sa-
lamanca (1956/68)
II. Tesis doctorales defendidas en la Universidad de Salamanca (1956/68)
Apndice documental (CD)
Apndice de tablas y grficos (CD)
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VOLUMEN I
Introduccin
Captulo I. Contextualizacin general: el franquismo, Salamanca y la univer-
sidad espaola
1.1. La Espaa de los aos cincuenta y sesenta: aproximacin al contexto general
1.2. El escenario salmantino
1.2.1. Detrs del teln: el marco local de la ciudad de Salamanca
1.2.2. Subiendo el teln: lugares de encuentro e iniciativas culturales, intelectuales
y de ocio de la sociedad salmantina
1.3. El modelo de universidad franquista desde el punto de vista del marco norma-
tivo
1.3.1. Ley sobre ordenacin de la universidad espaola de 1943
1.3.2. Posteriores decretos, rdenes y disposiciones de inters
1.3.3. Mximos responsables de la poltica universitaria
1.3.4. Recapitulando: aproximacin a las coordenadas bsicas de la universidad
franquista
Captulo II. Organizacin jerrquico-administrativa de la Universidad de
Salamanca y principales actos acadmicos
2.1. Estructura de gobierno
2.1.1. rganos individuales
2.1.2. rganos colectivos con funciones universitarias
2.2. Ordenacin del distrito universitario
2.3. Implantacin del nuevo modelo de organizacin departamental
2.4. Gestin administrativa y personal subalterno
2.5. Calendario escolar y actos acadmicos reseables
Captulo III. Estructuracin y dinmica de los estudios
3.1. La facultad como rgano especfico de la funcin docente
3.2. Planes de estudio: caractersticas generales y nacimiento de nuevas secciones
3.2.1. Facultad de Filosofa y Letras
Estudios comunes
Seccin de Filologa Clsica
Seccin de Filologa Romnica
Seccin de Filologa Moderna
Seccin de Historia
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3.2.2. Facultad de Ciencias
Seccin de Qumicas
Seccin de Biolgicas
Seccin de Geolgicas
3.2.3. Facultad de Derecho
3.2.4. Facultad de Medicina
3.2.5. Propuestas de estudios malogradas
3.3. Estudios de Doctorado
3.3.1. Normativa y sistema
3.3.2. Cursos monogrficos de doctorado por facultades
3.4. Seminarios y enseanzas especiales
3.4.1. Facultad de Filosofa y Letras
Curso Superior de Filologa Hispnica
Curso de verano para extranjeros
Lectorados de lenguas extranjeras
Seminario de Arqueologa
3.4.2. Facultad de Ciencias
Enseanzas de Edafologa Aplicada
3.4.3. Facultad de Derecho
Seminario de Derecho Poltico
3.4.4. Facultad de Medicina
Seminario de Historia de la Medicina
3.5. Institutos de formacin y escuelas profesionales
3.5.1. Instituto de Idiomas
3.5.2. Instituto Jurdico y Escuela de Prctica Jurdica
3.5.3. Clnica Psiquitrica Universitaria
3.5.4. Las nuevas escuelas profesionales de la Facultad de Medicina
Captulo IV. Rgimen docente y actividad investigadora
4.1. La figura del catedrtico en la universidad
4.1.1. Derechos y obligaciones del catedrtico
4.1.2. Escalafn de catedrticos numerarios
4.1.3. Consideraciones generales en torno a la dinmica del cuerpo de catedrti-
cos: procedencia, permanencia, edad y gnero
Ser mujer en la universidad franquista
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La nica catedrtica del periodo: Gloria Begu Cantn
4.1.4. La problemtica del absentismo docente y de las situaciones de excedencia
activa
4.2. Profesores adjuntos y ayudantes
4.3. Profesorado extranjero
4.4. La nueva figura del profesor agregado
4.5. Rgimen de dedicacin exclusiva y preferente a la universidad
4.6. Revisin del estado de la actividad investigadora salmantina
4.6.1. El pulso de algunas ctedras activas
4.6.2. Iniciativas encaminadas a fomentar la investigacin en la universidad
Institutos de investigacin
Instituto de Investigacin Mdica Clnica
Instituto de Orientacin y Asistencia Tcnica del Oeste
Proyectos fallidos de creacin
La labor de los doctorandos: tesis doctorales 1955/70
4.6.3. Movilidad docente: viajes y visitas nacionales e internacionales
NOTA PRELIMINAR: Todas las tablas y grficos que se presentan en este trabajo han sido elaborados por la autora a partir de la informacin recopilada a travs de las fuentes inditas
e impresas manejadas. Por este motivo, se ha obviado hacer alusin a este aspecto en cada
uno de ellos.
NOTA ORTOGRFICA: Para la denominacin de cargos acadmicos y ministeriales, ttulos nobiliarios, dignidades, etc. se ha optado por emplear una de las novedades incluidas en
la Ortografa de la lengua espaola de 2010 que recomienda su escritura con minscula en todos
los casos. Esto incluye nombres de autoridades civiles, militares, acadmicas y religiosas tales
como presidente, ministro, embajador, director, rector, decano, etc. Sin embargo, se ha res-
petado la grafa de los documentos originales, en los que se emplea sistemticamente la
mayscula, en todas las citas y frases textuales que aparecen siempre entrecomilladas.
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SIGLAS Y ABREVIATURAS
Archivo Central
Asociacin Catlica Nacional de Propagandistas
Asociaciones de Estudiantes
Archivo de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Salamanca
Archivo de la Facultad de Derecho de la Universidad de Salamanca
Archivo de la Facultad de Filologa de la Universidad de Salamanca
Archivo de la Facultad de Medicina de la Universidad de Salamanca
Asociaciones Profesionales de Estudiantes
Artculo
Asistencia Social
Asociacin de antiguos alumnos y amigos de la Universidad de Salamanca
Asistentes Tcnico Sanitarios
Archivo Histrico de la Universidad de Salamanca
Archivo de la Universidad Pontificia de Salamanca
Biblioteca General
Boletn Oficial del Estado
Confrntese
Colegio Mayor
Curso monogrfico variable
Curso monogrfico de doctorado
Consejo Nacional de Educacin
Curso Superior de Filologa Hispnica
Consejo Superior de Investigaciones Cientficas
Departamento
Director/Directores
Documento
Editor/Editores
Enseanza Universitaria
Enseanza Superior e Investigacin
Excelentsimo
Falange Espaola Tradicionalista
Fondo Nacional para el desarrollo de la investigacin cientfica
Federacin Universitaria Escolar
AC
ACNP
AE
AFC
AFD
AFF
AFM
APE
Art.
AS
ASUS
ATS
AUSA
AUPSA
BG
BOE
Cfr.
CM
CMV
CMD
CNE
CSFH
CSIC
Dpto.
Dir./Dirs.
Doc.
Ed./Eds.
EU
ESI
Excmo.
FET
FONDIC
FUE
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Repositorio documental de la Universidad de Salamanca
Instituto Nacional de Estadstica
Instituto Nacional de Industria
Instituto de Orientacin y Asistencia Tcnica del Oeste
Junta de ofensiva nacional-sindicalista
Ley sobre estructura de las facultades universitarias y su profesorado 1965
Ley General de Educacin de 1970
Ley sobre ordenacin de la universidad espaola de 1943
Ley de reforma universitaria de 1983
Magnfico
Memoria acadmica de la Universidad de Salamanca
Ministerio de Educacin y Ciencia
Ministerio de Educacin Nacional
Nmero
Orden Ministerial
Obra citada
Pgina/pginas
Proteccin Escolar
Producto interior bruto
Producto nacional bruto
Patronato Nacional Psiquitrico
Plan Parcial del Recinto Universitario
Pesetas
Servicio de Asociaciones del Profesorado de Enseanza Superior y Media
Servicio Espaol del Profesorado de Enseanza Superior
Seguro Obligatorio de Enfermedad
Servicio de Publicaciones, Intercambio Cientfico y Extensin Universita-ria
Seor/Seora
United Nations Educational, Scientific and Cultural Organization
Por ejemplo
Vase
Vase debajo
Vase arriba
Vuestro magnfico y eminentsimo
Volumen
GREDOS
INE
INI
IOATO
JONS
LEFUP
LGE
LOU
LRU
Magfco.
MAUSAL
MEC
MEN
N
OM
Op. cit.
p./pp.
PE
PIB
PNB
PNP
PPRU
Ptas.
SAPESYM
SEPES
SOE
SPICEU
Sr./Sra.
UNESCO
V. g.
Vid.
Vid. infra
Vid. supra
V.M.E.
Vol.
LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA DURANTE EL FRANQUISMO (1956-1968) 441
EL ALUMNADO UNIVERSITARIO
SALMANTINO
En el gran escenario universitario dos son los protagonistas indiscutibles en la esceni-
ficacin de la obra: docentes y alumnos. Tras explorar las notas definitorias del profesorado
salmantino de la poca, nos disponemos ahora a adentrarnos en el anlisis de los segundos.
Muchos son los aspectos que se pueden estudiar, motivo por el cual se ha realizado una
seleccin de aquellos que, a nuestro juicio, resultan ms representativos y reveladores.
Debemos tener en cuenta que la enseanza universitaria del momento se encontraba
muy lejos de los planteamientos de enseanza-aprendizaje que manejamos hoy en da. El
estudiante, relegado a un papel secundario, se converta en el receptor de unas clases magis-
trales y de algunas pequeas sesiones prcticas en las cuales no ejerca, tal y como lo enten-
demos actualmente, un papel activo. Por tanto, su funcin primordial era bsicamente la de
actuar como un mero receptor de conocimiento e informacin.
Con todo, independientemente del concepto, funcin y caractersticas del alumnado,
el hecho de dirigir nuestra mirada hacia el universitario de la poca debe conducirnos ms
all de su consideracin como un sector especfico, para permitirnos situarle como una clave
longitudinal que nos ayudar a interpretar una parte trascendental de la historia de la Univer-
sidad de Salamanca del periodo 1956/68.
En este captulo se presentar, en primer lugar, una panormica general sobre la evo-
lucin de la matrcula a lo largo del franquismo. A ello le seguir un estudio detallado de la
misma durante el periodo 1956/68, atendiendo tanto al tipo de estudios como a la forma de
matrcula. En segundo lugar, se acometer el anlisis de la composicin y estructura del
alumnado, preocupndonos por aspectos tales como el gnero, procedencia geogrfica, ex-
traccin social, residencia en la ciudad, tipologa genrica o alumnado extranjero.
Posteriormente, se abordar el estudio del SEU y de las asociaciones de estudiantes,
para proseguir con el anlisis de la movilizacin estudiantil en Salamanca y el efecto produ-
cido por los acontecimientos nacionales.
En penltimo lugar, se reflejarn algunos aspectos que servirn como muestra de los
hbitos de estudio, actividad cultural y ocio del alumnado. Para concluir, se cerrar el captu-
V
442 SARA GONZLEZ GMEZ
lo con la descripcin de un nuevo acto acadmico, inaugurado durante el periodo rectoral de
Balcells Gorina, mediante el cual se proceda a la despedida oficial de los alumnos licencia-
dos.
5.1. Evolucin de la matricula durante el franquismo y la transicin espa-ola (1939/78)
Antes de comenzar con el estudio detallado del alumnado de la Universidad de Sala-
manca del periodo que acota este trabajo, consideramos conveniente echar un vistazo gene-
ral a la evolucin de la matrcula salmantina durante todo el franquismo y los primeros aos
de la transicin. Con ello obtendremos una visin global tanto de los quince aos preceden-
tes como de la dcada posterior al marco cronolgico que nos ocupa.
Conclusa la guerra civil espaola, el nmero de estudiantes de la universidad salman-
tina se desplom, muestra evidente de la difcil situacin en la que qued sumido el pas. De
4985 estudiantes en el curso 1939/40 se pas a 1840 en 1940/41, un descenso drstico, pero
con una explicacin que resulta obvia: la universidad era una vctima ms, aunque fuera
colateral, de aquella terrible y absurda contienda.
La complicada coyuntura y las duras condiciones vitales por las que atravesaba la ma-
yor parte de la poblacin repercutieron de manera directa en la institucin. Asimismo, el
carcter elitista de la formacin superior as como el duro proceso de depuracin sufrido por
el profesorado se convirtieron en claros obstculos para la recuperacin de una universidad
abatanada y maltrecha.
Lan Entralgo, al hablar sobre las funciones de la universidad en un seminario cele-
brado en la Universidad de Salamanca a finales del ao 1977, defina aquella tesitura univer-
sitaria de posguerra del siguiente modo:
() Ingres en la ctedra poco despus de conclusa la guerra civil. Como penosa se-
cuela de sta, la Universidad -en parte por obra de exilio voluntario o forzoso, en parte por
obra de exclusin torpe y fantica; 'depuracin la llamaron', para escarnio de nuestro idioma-
haba perdido muchos de sus mejores docentes. Poco ms tarde, ordenanzas de carcter ide-
olgico y presiones de orden factual, a veces policaco, alicortaron y deprimieron la vida uni-
versitaria1.
El nmero de estudiantes de las doce universidades espaolas era, en esos momentos,
de 35.555. Dos dcadas despus, la cifra prcticamente haba alcanzado a duplicarse y entre
1960/61 y 1967/68 se pas de 62.105 universitarios a 115.5902. Esta evolucin puede ayu-
darnos a contrastar, comparar y poner en orden los datos salmantinos.
1 ENTRALGO, Lan: Funciones de la Universidad, op. cit., p. 33. 2 Cfr., Estadstica de la Enseanza Superior en Espaa del curso 1967/68, Presidencia del Gobierno Instituto Nacional de Estadstica, 1970, p. 17.
LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA DURANTE EL FRANQUISMO (1956-1968) 443
Tabla 20: Matrcula universidad espaola (1940/41-1967/68)
Por tanto, la matrcula fue creciendo paulatinamente durante todo el franquismo, pe-
ro llegados los aos sesenta, y especialmente a partir de los setenta, la universidad inici un
proceso de masificacin y aumento acelerado. Esta tendencia se observa de forma idntica
en la mayor parte de las universidades del territorio nacional3.
De vuelta a nuestro marco local de referencia, a partir del ao 1940/41, la evolucin
positiva en la tasa de matrcula se produjo de un modo muy lento, siguiendo una tendencia
que se vena operando desde el siglo anterior. Durante el primer lustro del franquismo, el
nmero de alumnos de la universidad salmantina slo creci en 294, una cifra verdadera-
mente escasa.
La reparacin del pas se emprendi de una forma pausada, fruto del sistema poltico
impuesto por Franco en sus primeros aos de mandato, y en Salamanca se vivi de una
forma particular, aspecto que tuvo una evidente incidencia sobre la universidad. No en vano,
las caractersticas de esta tierra, eminentemente agrcola y ganadera, as como su situacin
geogrfica condicionaron el acceso a la misma. Adems, la considerable presencia de secto-
res del integrismo catlico ms tradicional no coadyuv a una recuperacin fugaz de las
tasas de matrcula.
Sin embargo, al comps de la recuperacin nacional, durante el siguiente quinquenio
de los cuarenta la matrcula salmantina lleg a duplicarse respecto a la del ao acadmico
1940/41. Por su parte, la evolucin en las inscripciones durante la dcada de los cincuenta
present cierta estabilidad, sin grandes ascensos ni bajadas significativas.
Alcanzados los aos sesenta, la matrcula salmantina comenz a experimentar nota-
bles variaciones y se pueden observar reveladoras permutas en la evolucin general de la
misma. El curso acadmico 1962/63 marc el punto de inflexin en la tendencia. A partir de
aquel ao, el nmero de estudiantes comenz a crecer con mayor fuerza y de una manera
incesante. Hasta llegar al ao 1967/68, la matrcula aument en 2201 estudiantes respecto a
la cifra registrada en el curso 1962/63 (3769).
Respecto al proceso posterior acaecido durante la dcada de 1967/68 a 1977/78, nos
encontramos con un crecimiento entre ambos cursos que se situ en 5900 alumnos, pasan-
do de 5970 a 11.870. Por tanto, se duplic la cifra y se inici un proceso tendente a la aper-
tura social de la educacin superior.
3 Esta informacin se puede cotejar bien a travs de los datos proporcionados por el INE o bien a travs de algunos estudios que abordan esta cuestin, v. g.: BALD LACOMBA, Marc: Los alum-nos, VV.AA.: Historia de la Universidad de Valencia. Vol. II. La Universidad Liberal (siglos XIX y XX). Valencia, Universitat de Valncia, 2000, pp. 261-274; VV.AA.: Historia de la Universidad de Valladolid. Vol. II, Valladolid, Dpto. de Publicaciones de la Universidad de Valladolid, 1989.
444 SARA GONZLEZ GMEZ
Numerosos autores han coincidido en apuntar la mediana de los aos sesenta como
el momento en el que se dieron los primeros pasos hacia la masificacin de la universidad.
No podemos hablar entonces de una universidad de masas, ni mucho menos, pero s pode-
mos fijar esa fecha como el principio del gran cambio. A partir de aquel momento, y como
consecuencia del proceso de crecimiento econmico y cambio social -xodo rural, urbaniza-
cin, desarrollo de capas medias, etc.-, no slo fue aumentando la matrcula nueva ao tras
ao sino que se produjo un salto cuantitativo de la misma en un plazo de tiempo muy breve.
Sin embargo, en el documento elaborado a partir de la celebracin del Curso-coloquio
sobre planteamiento integral de la educacin, organizado por el MEN con la colaboracin de la
UNESCO durante el mes de abril de 1962, se lleg a apuntar que resultaba necesario evitar
la universidad masiva si se quera que la institucin universitaria cumpliera su funcin4. Evi-
dentemente, ni la concepcin del modelo universitario vigente ni su estructura de soporte
estaban preparados en esos momentos para hacer frente a un alumnado multitudinario.
Quiz la mejor forma para visualizar los datos que de un modo muy general se han
expuesto hasta este momento5 es a travs del siguiente grfico. En el mismo se incluye una
lnea gruesa y punteada que refleja la evolucin de la matrcula global, una lnea continua con
las cifras correspondientes a los varones y una lnea fina y punteada que indica la tendencia
seguida en la matriculacin de mujeres:
Grfico 4: Evolucin de la matrcula salmantina durante el franquismo
y los primeros aos de la transicin (1939/78)
4 La educacin y el desarrollo econmico-social. Planteamiento integral de la educacin: objetivos de Espaa para 1970, Madrid, curso-coloquio celebrado del 4 al 28 de abril de 1962, p. 77. 5 En el Apndice de tablas y grficos (CD) de este trabajo se pueden consultar una serie de tablas con los datos pormenorizados de matrcula anual por facultades, tipo de inscripcin y gnero.
LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA DURANTE EL FRANQUISMO (1956-1968) 445
Como vemos, la matrcula general y la de varones discurrieron casi a la par hasta el
curso 1963/64, primera muestra reveladora de un tipo de institucin que estaba integrada,
mayoritariamente, por estos ltimos. A partir de ese momento, la distancia se ir ampliando
como consecuencia del aumento del alumnado universitario y del mayor acceso de la mujer
a la educacin superior.
El progreso de la lnea que representa la matrcula femenina fue muy lento hasta el
curso 1963/64, fecha a partir de la cual se inici un acelerado despegue. En el ao 1974/75,
el 44,8% de las inscripciones salmantinas correspondan a mujeres, es decir, al final del fran-
quismo se haba alcanzado una proporcin bastante cercana entre gneros.
Esta situacin de crecimiento que se dej sentir a partir de mediados de los sesenta,
no slo en Salamanca sino tambin en el resto de universidades espaolas, gener numero-
sos problemas universitarios como consecuencia de la deficiente dotacin de unas institu-
ciones incapaces de avanzar al comps de este fenmeno. Es lo que Mariano Fernndez
Enguita define como la dilucin de los recursos6, al indicar que este fenmeno de apertura
entraaba en gran medida una mayor inversin que por entonces no se produca al comps
del crecimiento.
Tal y como comentaba Lora Tamayo en la inauguracin oficial del curso acadmico
1964/65 en la Universidad de Oviedo, y que recoga la prensa local salmantina en sus pgi-
nas, las universidades espaolas no estaban en condiciones para hacer frente a esta nueva
situacin y, en consecuencia, se haca inexcusable la toma de las decisiones oportunas por
parte del gobierno:
El aumento de la poblacin estudiantil ha sobrepasado ya con exceso los linderos de
nuestros recintos universitarios, an en construcciones, que datan de los veinte aos ltimos, y
plantea adems crecientes exigencias bibliogrficas e instrumentales para seminarios y labora-
torios7.
Bajo una concepcin democrtica de la educacin, este aumento del alumnado uni-
versitario, con la consiguiente destruccin del sistema elitista, es algo absolutamente positi-
vo. Que el coto universitario dejara de estar vedado para muchos abri las puertas a un nue-
vo mundo que pretenda romper con algunas de las desigualdades ms acusadas en la educa-
cin superior a lo largo de los siglos. Pero esto tambin trajo consigo innumerables proble-
mas a los cuales no se dio una solucin inmediata. En los aos sesenta la problemtica se
redujo, prcticamente por completo, a la falta de dotacin, tanto de carcter material como
personal, de las instituciones as como al mantenimiento de un modelo universitario arcaico
y conservador. Pero si avanzamos en el tiempo, vemos como las dificultades se agravaron y,
entre otras cosas, retomando las palabras del socilogo Fernndez Enguita, comenz a pro-
ducirse la siguiente situacin:
6 FERNNDEZ ENGUITA, Mariano: La transformacin de la universidad espaola, Revista Inter-universitaria de Formacin del Profesorado, 34 (1999), p. 35. 7 El Adelanto, 4 de octubre de 1964.
446 SARA GONZLEZ GMEZ
() La parte superior de la pirmide educacional (los estudios universitarios) se ha
ensanchado notablemente, pasando de pirmide egipcia a pirmide azteca, pero la pirmide del
empleo no lo ha hecho, con lo cual no hay sitio -de la calidad prometida- para todos a la sali-
da. Son muchos los llamados pero pocos los elegidos8.
A partir de finales de los sesenta, las universidades, hasta entonces enfocadas a una
minora de la poblacin, se vieron desbordadas por un alumnado en constante aumento. La
atencin de grupos masivos oblig no slo a la adecuacin de las instalaciones sino tambin
a la multiplicacin del profesorado. Sin embargo, como menciona Bald Lacomba, enton-
ces, las anquilosadas estructuras acadmicas se resintieron y las deficiencias en la planifica-
cin y en las dotaciones se hicieron ms que evidentes9.
Hoy ms que nunca, ante la difcil situacin econmica del pas, el debate sobre estas
y otras cuestiones educativas vuelve a estar en la calle. Sin duda, el tiempo ha pasado y los
problemas son otros, pero conocer lo que suceda en la universidad hace tan slo unas
dcadas podra aportar algunas pistas sobre las posibilidades de accin o los errores ya co-
metidos para enfocar el futuro desde nuevas perspectivas.
5.2. Alumnos y eleccin de estudios entre 1956 y 1968
Enfrentarse a la eleccin de una carrera universitaria ha supuesto siempre una com-
plicada decisin para el estudiante. Dicha eleccin acadmico-profesional es el resultado de
una serie de condicionantes sociales, as como de esfuerzos, expectativas e intereses perso-
nales que confluyen a lo largo del tiempo y en los lugares en los que transcurre la vida de
quienes se enfrentan a ese dilema10.
Durante el franquismo, esta eleccin se vio coartada por la propia mentalidad que el
rgimen impuso a la poblacin, a travs de diversos mecanismos. Recordemos que la propia
LOU adjudic a la universidad la funcin de formadora de los hombres que interesaran al
pas, pero la pregunta es en qu interesaba instruirlos. Echando un vistazo a la primera mitad
del franquismo, podemos comprobar cmo los estudios de Derecho se convirtieron en la
principal cuna de legitimadores del rgimen, aglutinando a la mayor parte de los estudiantes
durante el periodo referido. Tras ellos la carrera de Medicina y, muy por detrs, las de Cien-
cias y Filosofa y Letras.
Los estudios de Filosofa y Letras, los nicos que se vean como ms apropiados para
las fminas, reflejaron esta concepcin en sus tasas de matrcula. Por tanto, entendemos que
el gnero se convirti en un factor especialmente condicionante en la eleccin de los estu-
dios universitarios.
8 FERNNDEZ ENGUITA, Mariano: Op. cit., p. 37. 9 Cfr., BALD LACOMBA, Marc: Op. cit., pp. 270-271. 10 Cfr., MOSTEIRO GARCA, M Josefa: El gnero como factor condicionante de la eleccin de la carrera: hacia una orientacin para la igualdad de oportunidades entre los sexos, Revista galego-portuguesa de psicoloxa e educacin, 1 (1997), p. 306.
LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA DURANTE EL FRANQUISMO (1956-1968) 447
Por otra parte estaba el prestigio de la propia institucin universitaria. Salamanca, ele-
vada por la LOU como un modelo a imitar por las doce universidades nacionales, se situaba
a la cabeza en cuanto al reconocimiento de sus estudios de Derecho. Medicina ira ganando
terreno con el devenir del tiempo, a medida que mejoraba y ampliaba sus instalaciones y
dotaciones. Ciencias se encontraba en una complicada situacin frente al resto de facultades
de este tipo, aspecto que jugaba en su contra y le haca perder una parte importante del con-
tingente universitario espaol de esta rama. Por ltimo, Filosofa y Letras consigui hacerse
un hueco entre las ms conocidas, gracias al renombre y saber hacer de algunos de los ca-
tedrticos que pasaron por ella a lo largo de los aos en estudio.
Ahora bien, la evolucin acontecida desde mediados de los aos cincuenta hasta fina-
les de los sesenta no nos permite realizar generalizaciones pues, como veremos, la situacin
de las facultades experiment variaciones notables. Derecho fue perdiendo fuelle; Medicina
creci a un ritmo acelerado; Filosofa y Letras situ sus tasas de matrcula por encima de las
de Derecho; y Ciencias, gracias a la mejora en sus instalaciones, a una mayor oferta educativa
y al avance de la ciencia y la investigacin espaolas, consigui con el paso del tiempo atraer
a un nmero cada vez mayor de estudiantes.
Por tanto, gnero y prestigio son dos condicionantes a tener en cuenta; a ellos cabra
aadir, entre otros, la propia situacin geogrfica de la Universidad de Salamanca, unida al
importante gasto econmico que supona para las familias el costear los estudios de sus hijos
o hijas. Ms adelante conoceremos la procedencia geogrfica de su alumnado, pero ya po-
demos adelantar que el mayor porcentaje estuvo representado por estudiantes cuyos padres
o tutores tenan fijada su residencia habitual en Salamanca. Es decir, que a travs de las va-
riables de situacin geogrfica y coste universitario estamos haciendo referencia a que mu-
chos de los estudiantes no tendran otra opcin que elegir alguno de los estudios impartidos
en las cuatro facultades salmantinas, a pesar de que ello pudiera chocar frontalmente con sus
intereses vocacionales o personales. La reduccin de gastos que supona para las familias, al
ahorrarse los de alojamiento y manutencin fuera del ncleo familiar, condicionara proba-
blemente la eleccin de algunos de ellos.
Estos son algunos de los factores ms influyentes en la eleccin del tipo de estudios
efectuada por parte del alumnado salmantino de la segunda mitad del franquismo. Somos
conscientes que podran sealarse muchos ms -tales como los familiares o los relativos al
medio social, personal, psicolgico, etc.-, pero no entraremos en mayores consideraciones
en este momento, pues este tipo de cuestiones sern abordadas en pginas sucesivas. Pase-
mos a analizar los datos disponibles atendiendo a cada una de las cuatro facultades.
Anlisis por facultades
La distribucin del estudiante universitario por las cuatro facultades salmantinas nos
sirve como muestra de la situacin de cada uno de los centros, con mayores o menores tasas
de matrcula, al tiempo que se convierte en el reflejo de la preferencia de aqullos a la hora
de optar por unas u otras carreras.
448 SARA GONZLEZ GMEZ
El grfico que se incluye a continuacin nos sirve para describir unos datos cuantita-
tivos que no dejan de ser el espejo de una parte de la fisonoma universitaria salmantina:
Grfico 5: Evolucin de la matrcula en las cuatro facultades salmantinas (1955/56-1967/68)
La imagen presentada podra partirse perfectamente en dos para describir a la perfec-
cin la situacin de la Universidad de Salamanca. Esa lnea divisoria se situara en torno al
ao 1960/61, momento en el que accedi al puesto de rector el catedrtico Balcells Gorina.
As, entre los cursos 1956/57 y 1959/60, la tendencia en la matrcula muestra un ligero des-
censo sin cadas bruscas, pero con una merma constante de estudiantes curso a curso (3903
en 1956/57; 3856 en 1957/58; 3596 en 1958/59; y 3442 en 1959/60). Por tanto, el rectora-
do de Beltrn de Heredia se caracteriz por una prdida leve de alumnado, movimiento que,
por otro lado, sufriran todas las facultades, aunque de un modo desigual.
El segundo cuadro estara representado por el rectorado de Balcells, momento a par-
tir del cual la tendencia sealada se modific para iniciar un proceso de sutil crecimiento
entre 1960/61 (3510 estudiantes) y 1963/64 (4434 estudiantes) y de acelerado y revelador
aumento a partir de dicho momento. El ltimo ao de mandato de este rector registr un
total de 6380 alumnos. Es decir, durante estos ocho aos la Universidad de Salamanca
prcticamente lleg a duplicar su matrcula, como ya se ha apuntado anteriormente.
Ahora bien, la tendencia general debe ser analizada tambin dentro de cada una de las
cuatro facultades salmantinas, porque no todas experimentaron el mismo desarrollo ni evo-
lucionaron de un modo similar.
Durante el rectorado de Beltrn, las mayores tasas de matrcula se concentraron en la
Facultad de Derecho, que desde el final de la contienda civil se haba convertido en un refe-
rente nacional. Tal y como nos explica Martnez Neira, a partir de aquel momento retom
LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA DURANTE EL FRANQUISMO (1956-1968) 449
un protagonismo en parte perdido11, situacin a la que coadyuv el hecho de que Madrid se
situara en el bando republicano, lo que permiti a Salamanca convertirse en el alma cultural
del bando nacional, al menos durante los primeros aos del franquismo12.
Sin embargo, durante la segunda mitad de la dcada de los cincuenta, este centro ex-
periment una cada brusca de su alumnado, perdiendo prcticamente mil alumnos entre
1956/57 y 1960/61. Situados ya en la etapa rectoral de Balcells, la tendencia de descenso del
alumnado en este centro se agrav considerablemente. Dej de ocupar la cspide de la
pirmide de matrcula para pasar a un segundo lugar, desplazada ahora por Medicina. Pero
no se acab aqu su calvario, pues en el curso 1964/65 tambin le superara Filosofa y Le-
tras y un ao despus lo hara Ciencias.
Las posibles causas de este fenmeno podran atribuirse a una prdida del inters del
universitario por este tipo de estudios; a una mayor diversificacin en la opciones de elec-
cin de carrera; al incremento de las secciones de algunas facultades con el consiguiente
aumento de la oferta educativa; o a la vigencia de una estructuracin de las enseanzas que,
con el transcurso del tiempo, se haca verdaderamente arcaica y tradicionalista. Por otra
parte, el ligero aumento en el acceso de la mujer a la educacin superior no se vio reflejado
en esta facultad, a diferencia de las otras, en buena parte por el blindaje al que todava en los
aos cincuenta estaban sometidas determinadas profesiones jurdicas para las fminas.
En definitiva, el cambio en la situacin de esta facultad, en un plazo muy breve de
tiempo, result verdaderamente drstico. Pas de ocupar el primer lugar en la eleccin de
estudios del universitario a estar relegada al ltimo puesto y a ver como su matrcula, mien-
tras comenzaba a masificarse en el resto de facultades, segua la tendencia opuesta. El presti-
gio alcanzado fue perdindose y toc fondo en el ao 1968/69 con slo 581 alumnos frente
a los 2586 de Medicina, 1994 de Filosofa y Letras y 1246 de Ciencias. Como vemos, las
diferencias resultan verdaderamente significativas.
Con el inicio del rectorado de Lucena Conde, Derecho recuper ligeramente sus
nmeros. Este hecho se debi, principalmente, al incremento de la matrcula femenina. An
as, en una dcada este centro slo consigui incrementar sus estudiantes en 287, pasando de
los 581 alumnos registrados en el curso 1968/69 a los 868 matriculados en 1978/7913.
Medicina fue la segunda facultad salmantina en nmero de matrcula hasta el curso
1960/61, momento a partir del cual ascendi al primer puesto. De 1130 estudiantes en el
curso 1956/57 descendi a 1090 alumnos al ao siguiente; esta leve bajada, sin mayores
11 MARTNEZ NEIRA, Manuel: La Facultad de Derecho de Salamanca en la posguerra, TORI-JANO PREZ, Eugenia et al. (coords.): El derecho y los juristas en Salamanca (siglos XVI-XX): en memoria de Francisco Toms y Valiente, 2004, p. 180. 12 Cfr., FUENTES LABRADOR, Antonio et al.: Apoyo institucional en un centro de poder: la Uni-versidad de Salamanca durante la guerra civil. Un modelo de comportamiento, CARRERAS ARES, Juan Jos y RUIZ CARNICER, Miguel ngel: La Universidad Espaola bajo el rgimen de Franco (1939-1975): Actas del Congreso (Zaragoza, del 8 al 11 de noviembre de 1989). Zaragoza, Instituto Fernando el Catlico, 1991, pp. 257-282. 13 Cfr., AUSA, MAUSAL, curso acadmico 1978/79, Rev. 1178/50, p. 32.
450 SARA GONZLEZ GMEZ
consideraciones, puso el punto inicial de un proceso de acelerado crecimiento que se em-
prendi de forma suave en los aos de rectorado de Beltrn y que tom una considerable
fuerza durante el de Balcells.
Sin duda, la eleccin de este tipo de estudios por parte del alumnado se puede acha-
car a multitud de factores. Por ejemplo, en numerosos casos respondera a condicionantes
de tipo vocacional o por saga familiar (padre o abuelo mdico) y, en otros, la eleccin se
realizara por considerar que ofreca una salida profesional decorosa y bien remunerada. De
cualquier modo, independientemente de lo que llevara al estudiante a este tipo de formacin,
lo cierto es que esta facultad fue la que protagoniz el mayor auge durante el arco temporal
que abarca este trabajo.
Por su parte, las facultades de Ciencias y Filosofa y Letras tuvieron una trayectoria
que discurri casi a la par. Sus tasas de matrcula se situaron muy por debajo de las de Dere-
cho y Medicina durante el periodo rectoral de Beltrn de Heredia, mostrando algunos altiba-
jos que resultaron ms acusados en la de Filosofa y Letras que, por ejemplo, pas de regis-
trar 401 alumnos en el curso 1957/58 a 278 en el curso siguiente. Por su parte, la Facultad
de Ciencias se movi en unos nmeros que se mantuvieron bastante constantes durante este
tramo (431 en 1956/57; 492 en 1957/58; 512 en 1958/59; y 423 en 1959/60).
Pero durante el rectorado de Balcells, el estado de sus matrculas vari considerable-
mente. La Facultad de Filosofa y Letras inici un camino de apresurado crecimiento que se
dej sentir, especialmente, a partir del curso 1963/64. En aquel momento contaba con 637
alumnos y las diferencias entre hombres y mujeres comenzaban a acortarse. Debemos tener
en cuenta que estamos ante la nica facultad en la que el nmero de mujeres superaba con
creces al de varones. Hacia el final de este rectorado, la matrcula ascenda a 1667, cifra que
nos indica que la cantidad haba llegado a cuadruplicarse con respecto a la de una dcada
anterior. La diferencia, por tanto, resulta especialmente significativa.
Las razones que explicaran estos datos pueden encontrarse, por ejemplo, en el mayor
acceso del hombre a este tipo de formacin (de 58 universitarios en el curso 1957/58 se
pas a 662 en 1967/68); tambin influira de manera decisiva el incremento de la variedad en
la oferta educativa, al aparecer nuevas secciones con las que la universidad salmantina no
contaba en los aos cincuenta. Asimismo, el trabajo docente e investigador desarrollado por
algunos destacados catedrticos que pasaron por este centro -lase Lzaro Carreter, Real de
la Riva, Tovar o Snchez Ruiprez- influy positivamente en el aumento de su prestigio.
Por su parte, la Facultad de Ciencias inici el mismo proceso de crecimiento durante
la segunda mitad de la dcada de los sesenta, pero a un ritmo bastante ms pausado del sea-
lado para la anterior. De contar con 492 estudiantes en 1957/58 pas a 1106 en el curso
1967/68. Las razones que se pueden alegar son semejantes a las apuntadas para el otro cen-
tro, encontrando en los condicionantes de gnero y en los de carcter institucional las prin-
cipales pistas. En este caso, el mayor acceso femenino a este tipo de formacin facilit el
incremento en la matrcula: de 117 alumnas en 1957/58 a 397 en el curso 1967/68. Asimis-
mo, la puesta en marcha de nuevas secciones y la mejora en las instalaciones ayudaron a la
LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA DURANTE EL FRANQUISMO (1956-1968) 451
captacin de un mayor nmero de estudiantes.
Pero tengamos en cuenta tambin que las facultades de Ciencias de todo el territorio
espaol pasaron de contar con 6428 estudiantes en el curso 1940/41 a 25.596 en el de
1967/6814. De esta ltima cantidad, Salamanca representaba tan slo un 4,3%, por tanto, a
pesar de las mejoras y del aumento en la atraccin de estudiantes, todava estaba muy lejos
de los porcentajes que mantenan universidades como Madrid o Barcelona.
Para ampliar la informacin presentada pueden consultarse las tablas incluidas en el
apndice a travs de las cuales se desgranan los datos de matrcula por facultades, gnero,
tipo y ao acadmico15.
Anlisis por tipo de matrcula
En la universidad del periodo en estudio se admita la matrcula tanto de estudiantes
oficiales como libres. La Ley de 16 de julio de 1949 especific que, en relacin a la forma de
cursar los estudios, la enseanza universitaria quedara clasificada en oficial y libre, siendo la
primera la cursada oficialmente en las universidades del Estado y la segunda la cursada por
aquellos alumnos que, no estando adscritos a la enseanza anterior, realicen las pruebas de
examen en la Universidad, por asignaturas y ante Tribunales compuestos por Catedrticos y
Profesores de la misma, designados por la autoridad universitaria competente16.
A partir del curso 1949/50, los estudiantes podran acogerse a cualquiera de las dos
modalidades indistintamente, con la condicin de no simultanearlas en un mismo ao
acadmico. Los alumnos oficiales estaran obligados, de acuerdo a la orden que dictaba las
normas para la aplicacin de la ley anteriormente mencionada17, a la asistencia a todas las
clases impartidas en la universidad y correspondientes a las asignaturas en las que estuvieran
matriculados.
Los alumnos libres se someteran a exmenes en el mes de junio, simultnea o inme-
diatamente despus de haber terminado los de los alumnos oficiales, ajustndose al siguiente
orden: a) Asignaturas pendientes del curso anterior; b) Asignaturas del primer cuatrimestre;
c) Asignaturas del segundo cuatrimestre; d) Alumnos dispensados de escolaridad.
Seran juzgados por un tribunal compuesto por tres catedrticos numerarios o por
profesores adjuntos, cuando de los primeros no existiera nmero suficiente para constituir
dicho tribunal. De cualquier forma, se estableca que, como mnimo, deberan estar integra-
dos por dos catedrticos numerarios.
14 Cfr., Estadstica de la Enseanza Superior en Espaa del curso 1967/68. Presidencia del Gobierno Instituto Nacional de Estadstica, 1970, p. 17. 15 Vid. Apndice de tablas y grficos (CD), Matrcula por facultades, tipo de inscripcin y gnero. 16 Ley de 16 de julio de 1949 por la que se reforman los artculos 18 y 58 de la de Ordenacin Univer-sitaria de 29 de julio de 1943, BOE n 198 de 17 de julio de 1949. 17 Orden de 6 de septiembre de 1949 por la que se dictan normas para aplicar lo dispuesto en la Ley de 16 de julio de 1949, BOE n 254 de 11 de septiembre de 1949.
452 SARA GONZLEZ GMEZ
Veamos el siguiente grfico en el que se muestra la evolucin de este tipo de matrcu-
la en la Universidad de Salamanca:
Grfico 6: Evolucin de la matrcula oficial y libre en la Universidad de Salamanca
Las diferencias entre estos dos tipos de matrcula en la Universidad de Salamanca re-
sultan significativas y difieren en gran medida entre unas y otras facultades. Durante los
cursos 1956/57 y 1957/58, Derecho y Medicina presentaron una matrcula libre muy supe-
rior a la oficial. Por ejemplo, en el caso de la primera tenemos unas cifras de 1416 alumnos
libres frente a 557 oficiales para el primer curso sealado y 1375 libres y 496 oficiales para el
segundo. En Medicina, las proporciones no fueron tan desorbitadas, pero tambin son no-
tables: 649 libres y 481 oficiales para el curso 1956/57 y 598 libres frente a 492 oficiales en el
curso 1957/58.
La tendencia observada en Derecho la podemos constatar tambin a nivel nacional;
durante el curso 1957/58, por ejemplo, la universidad espaola contaba con 7064 alumnos
oficiales y 10783 libres matriculados en estos estudios. No suceda lo mismo en Medicina, en
donde, para aquel curso acadmico, las cantidades eran de 9935 oficiales y 6657 libres18.
Por el contrario, en Filosofa y Letras y en Ciencias se produjo el fenmeno contrario,
es decir, la matrcula oficial super a la libre. Como dato que puede servir de referencia, en el
curso 1957/58, en la primera haba 314 alumnos oficiales frente a la pequea cifra de 55
estudiantes libres; en la segunda, se matricularon 302 alumnos oficiales y 129 libres. En este
caso, la tendencia se repiti igualmente a nivel nacional. Durante el curso 1957/58, Filosofa
y Letras cont con un total de 4021 alumnos oficiales y 2465 libres, mientras que Ciencias
tuvo 7670 oficiales y 2727 libres.
A partir del ao 1958/59, la Facultad de Medicina abandon la tendencia reflejada y
pas a registrar un nmero mayor de alumnos oficiales, en detrimento del de libres. Por el
contrario, la de Derecho, que tambin vio como la matrcula libre se fue reduciendo progre-
sivamente con el paso de los aos, mantuvo tasas superiores de alumnos libres hasta el ao
1966/67. A partir de aquel momento, con unas cifras de libres y oficiales muy similares (324
18 Cfr., Estadstica de la Enseanza Superior en Espaa del curso 1957/58. Presidencia del Gobierno Instituto Nacional de Estadstica, 1960, p. 19.
LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA DURANTE EL FRANQUISMO (1956-1968) 453
para los primeros y 354 para los segundos), la tendencia comenz a invertirse. Sera, por
tanto, la ltima facultad en contar con la mayor parte de sus alumnos como oficiales.
La evolucin general de este fenmeno en la Universidad de Salamanca nos muestra
que la matrcula libre, en trminos medios, fue superior a la oficial hasta el ao 1959/60. A
partir de aquel momento, y de una forma acelerada, sta empez a reducirse.
Como puede apreciarse, las tendencias entre la matrcula oficial y libre estn clara-
mente contrapuestas. Mientras la primera realiz un recorrido ascendente, la segunda expe-
riment el fenmeno inverso. Las cifras aportadas y que acompaan al texto han quedado
recogidas en la siguiente tabla:
Durante el curso 1956/57, la matrcula
libre represent el 58% del total. Es decir, ms
de la mitad de los estudiantes de la Universidad
de Salamanca eran libres, con las implicaciones
lgicas que este fenmeno tena para la institu-
cin. En el ao 1960/61 este porcentaje ya se
haba reducido a un 41%; y si nos desplazamos
hasta el de 1967/68 la cifra se haba rebajado
hasta un pequeo 16%. Por tanto, nada tuvo
que ver el tipo de matrcula de los primeros
aos del rectorado de Beltrn de Heredia con la
de los ltimos aos del de Balcells.
Tabla 21: Matrcula por tipo de enseanza
Si echamos un vistazo a la situacin general en la universidad espaola, observamos
lo siguiente: en el curso 1957/58, la matrcula oficial era de 34.720 alumnos y la libre de
29.561 (representaba el 46% del total)19. Por tanto, la diferencia no era tan acusada como la
de la Universidad de Salamanca. Si nos vamos al curso 1960/61, la matrcula libre nacional
representaba el 36% del total20; una reduccin algo menor a la sufrida por la universidad
salmantina, pero que evidencia la misma tendencia decreciente. Por ltimo, si nos desplaza-
mos al ltimo ao de rectorado de Balcells, constatamos como la matrcula oficial y libre
nacionales cada vez se distanciaban ms la una de la otra: 92.592 alumnos oficiales frente a
22.998 libres (no llegaba al 20%)21.
Por tanto, al igual que en la matrcula por facultades, percibimos cierta similitud en la
tendencia seguida por la Universidad de Salamanca y el resto de universidades nacionales en
cuanto a tipo de matrcula.
19 Cfr., Estadstica de la Enseanza Superior en Espaa del curso 1957/58, Presidencia del Gobierno Instituto Nacional de Estadstica, 1960, p. 19. 20 Cfr., Estadstica de la Enseanza Superior en Espaa del curso 1960/61, Presidencia del Gobierno Instituto Nacional de Estadstica, 1963, p. 22. 21 Cfr., Estadstica de la Enseanza Superior en Espaa del curso 1967/68. Presidencia del Gobierno Instituto Nacional de Estadstica, 1970, p. 19.
454 SARA GONZLEZ GMEZ
Pero por otra parte, cabe sealar que el asunto de estos dos tipos de matrcula gener
algunos problemas en la universidad salmantina, que fueron manifestados por algunos de
sus catedrticos. El principal obstculo recay, nuevamente, en la falta de espacios y en la
caresta de recursos materiales de los centros para hacer frente a esa doble matrcula. As lo
expresaron algunos docentes de Medicina en la sesin de 30 de septiembre de 1965 de su
junta. Snchez Rodrguez apostaba en aquel momento por la adopcin de un criterio un-
nime a la hora de admitir o no en las clases a los alumnos libres. El profesor Zamorano,
adhirindose a la misma opinin, iba ms all al plantear el siguiente razonamiento:
() Los alumnos libres perjudican la docencia de las ctedras, cuyo alumnado oficial
sobrepasa la posibilidad de locales, material y personal y la propia orden reguladora previene,
precisamente, que en ningn caso la concurrencia de alumnos libres podr perjudicar la ense-
anza de alumnos oficiales22.
Zamorano Sanabra se refera a la Orden de 14 de julio de 196523 por la que se haba
procedido a regular la asistencia de los alumnos libres a las clases terico-prcticas. La expe-
riencia adquirida durante los ltimos aos, que se haba encargado de demostrar que un
porcentaje muy alto de estudiantes libres cursaban sus estudios igual que lo hacan los oficia-
les, con asistencia a clases tericas y a las prcticas realizadas en laboratorios, seminarios o
clnicas, aconsejaba una regulacin del asunto.
El problema vena dado por el considerable aumento del alumnado oficial, que aba-
rrotaba los locales universitarios disponibles y que, en consecuencia, no permita la asistencia
constante de los libres. El gobierno crey que era el momento de garantizar los derechos
adquiridos por los estudiantes oficiales, sin perjuicio, eso s, de facilitar a los libres que lo
desearan, siempre y cuando fuera posible, el acceso a las clases, laboratorios, seminarios, etc.
junto a los primeros.
En virtud de esta disposicin, se autoriz a los decanos a la toma de las decisiones
oportunas, valorando su situacin particular. El proceso fijado consista en exigir la solicitud
por parte del alumno libre que deseara asistir a clase y, posteriormente, recibir el informe
favorable por parte del profesorado encargado del curso. Todo ello, se recalcaba, siempre
que esta aceptacin no supusiera perjuicio para la enseanza de los oficiales. En el caso de
las prcticas, los alumnos libres deberan elaborar un escrito dirigido al decano y, en caso de
obtener respuesta afirmativa, procederan a abonar el importe correspondiente a los dere-
chos de prcticas.
Todas estas autorizaciones no podran concederse hasta estar completamente resuel-
tos los listados oficiales de alumnos y previa comprobacin, a la vista de los mismos, de la
capacidad de las aulas, laboratorios, clnicas, etc. En ningn caso se concedera esta autoriza-
cin si la asistencia de alumnos libres obligaba a dividir las clases tericas o si el nmero
exceda la capacidad prevista para los grupos de prcticas.
22 AFM, Junta de Facultad, sesin de 30 de septiembre de 1965. 23 Orden de 14 de julio de 1965 por la que se regula la asistencia a las clases terico-prcticas de las Facultades universitarias, BOE n 181 de 30 de julio de 1965.
LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA DURANTE EL FRANQUISMO (1956-1968) 455
El decano de Medicina, volviendo al argumento de Zamorano Sanabra, mencion
que ese criterio de no admisin de alumnos libres podra suscitar un serio problema dado
que muchos de los alumnos cursaban por enseanza libre por el impedimento legal que
supona tener asignaturas diversas comprendidas en varios aos de carrera, y no les era ad-
mitida en tal situacin la matrcula por enseanza oficial. Varios vocales alegaron entonces
que deba evitarse, en la medida de lo posible, que los alumnos pudieran llevar asignaturas de
varios cursos.
Finalmente, atendiendo a la insuficiencia de locales, medios materiales y personal, as
como tambin al nmero de alumnos oficiales, se acord, por unanimidad, no admitir du-
rante el curso acadmico 1965/66, como asistentes a clases prcticas, de conformidad con lo
previsto en la orden citada, a los alumnos que se matricularan por enseanza libre, en evita-
cin de perjuicio a los oficiales.
Un ao despus la situacin se repiti, de nuevo por carencia de medios de toda
ndole -personal, material e incluso capacidad adecuada del Hospital Clnico- para ofrecer a
estos alumnos las enseanzas prcticas necesarias24. Continu entonces sin admitirse en
este centro la asistencia a prcticas mientras las circunstancias de referencia persistieran.
Durante el curso acadmico 1967/68 el problema se mantena pero, en aquella oca-
sin, la junta entendi que no poda realizarse la carrera de Medicina sin una asistencia habi-
tual a clases y prcticas y sin una escolaridad obligada que, por otra parte, exiga la ley25. Por
ello, al dar cumplimiento a lo dispuesto por la Direccin General de EU para apertura de
convocatoria de matrcula libre, en sustitucin a la que no se llev a afecto en el mes de abril
ltimo, la junta decidi que debera advertirse en la convocatoria que publicara la secretara
que, para poder verificar exmenes, los interesados deberan acreditar mediante certificacio-
nes haber realizado trabajos prcticos.
Claramente, la enseanza libre en todas las facultades universitarias salmantinas tenda
a desaparecer. Con los medios disponibles, muy lejos del sistema de enseanza a distancia
que hoy en da funciona en Espaa y en otros pases, y ni remotamente imaginables enton-
ces las facilidades que ms tarde proporcionaran las nuevas tecnologas, este tipo de forma-
cin adoleca de una calidad mnima para formar correctamente a aquellos profesionales.
La propia Facultad de Medicina, en sesin de su junta de fecha 6 de julio de 1967, in-
formaba haber solicitado a la junta de gobierno de la Universidad de Salamanca que interesa-
ra del Ministerio la supresin de la enseanza libre para la Facultad de Medicina. Nada ms
se ha conseguido rastrear sobre este asunto en la documentacin consultada.
Sin duda, la magnitud del asunto fue mayor en Medicina que en el resto de faculta-
des salmantinas, cuestin que por otra parte es obvia al tratarse de un centro en el que la
formacin prctica copaba una parte muy amplia del currculum y exiga la asistencia fre-
cuente del alumnado. Es cierto que en otras facultades el problema planteado con los alum-
24 AFM, Junta de Facultad, sesin de 29 de septiembre de 1966. 25 Cfr., AFM, Junta de Facultad, sesin de 6 de julio de 1967.
456 SARA GONZLEZ GMEZ
nos libres no adquiri esta proporcin y no se han encontrado muestras significativas de un
intento por reducir o extirpar este tipo de enseanza. nicamente cabe sealar que en la
Facultad de Filosofa y Letras, en sesin de su junta con fecha de 16 de octubre de 1965, se
adopt la decisin de establecer para los alumnos oyentes, de manera anloga al carnet crea-
do para los alumnos oficiales, un carnet de facultad en el que haran constar las asignaturas
para las que se les hubiere autorizado la asistencia26. Era, pues, la adopcin de un simple
mecanismo de control, sin mayores consideraciones.
5.3. Estructura y composicin del alumnado
5.3.1. Gnero
El estudio de esta dimensin nos proporciona otra cara de la semblanza de la univer-
sidad salmantina de los aos cincuenta y sesenta. Entendemos que esta categora resulta de
enorme utilidad en el anlisis histrico27, dado que nos revela diversas conexiones tales co-
mo gnero-poder, gnero-relaciones personales, gnero-tipo de estudios, etc.
El modelo universitario espaol, como ya se ha descrito, se ajustaba a unas coordena-
das clasistas y tradicionales. Predominaba lo masculino dentro del cuadro docente, tengamos
en cuenta que en Salamanca, durante la dcada de los cincuenta, todava no encontramos a
ninguna catedrtica. Asimismo, en el plantel general de estudiantes sobresalieron los porcen-
tajes de hombres por encima de los de mujeres. Por tanto, entindase que s haba mujeres
en la universidad, pero en una proporcin muy reducida si lo comparamos con el nmero de
varones. En esencia, la universidad se amoldaba a los dictados de un entorno tradicional-
mente masculinizado28.
Digamos que la mujer no tena las puertas de las universidades completamente abier-
tas. Para acceder a la formacin superior deba enfrentarse a numerosos obstculos y salvar
ciertas barreras sociales. Las mujeres, que durante la II Repblica haban conseguido abrirse
paso dentro del coto universitario, sorteando en un nmero importante aquella empalizada,
volvan a tener el acceso a la educacin superior algo complicado debido, en parte, a la pro-
pia mentalidad impuesta por el rgimen. Por tanto, el franquismo gener un drstico retro-
ceso en cuestiones de gnero y, concretamente, en el papel y en las funciones de la mujer.
Las principales trabas para el acceso femenino a la formacin superior venan dadas
por la propia concepcin que de la mujer sostena el franquismo. Se pensaba en ella nica-
mente como madre y esposa, destinada a la reclusin en el hogar para desempear funciones
familiares, de procreacin, cuidado y atencin de hijos y marido; es decir, toda su prepara-
cin estara destinada a convertirla en una profesional del hogar. A esta concepcin con-
26 AFF, Junta de Facultad, sesin de 16 de octubre de 1965. 27 Cfr., SCOTT, Joan W.: El gnero: una categora til en el anlisis histrico, AMELANG, J. y NASH, M. J.: Historia y gnero: las mujeres en la Europa Moderna y Contempornea, Universidad de Valen-cia, 1990, pp. 23-58. 28 Cfr., LECUONA NARANJO, M del Pino: Gnero y Universidad, Enseanza, 23 (2005), p. 144.
LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA DURANTE EL FRANQUISMO (1956-1968) 457
tribua tambin la Iglesia, defensora de la mujer como salvaguarda de la familia cristiana,
cuya accin estara restringida al mbito familiar y a las labores cristianas. En definitiva, co-
mo argumenta Molinero Ruiz, la poblacin femenina se vea obligada a la clausura en un
pequeo mundo29.
Obviamente, aquellas fueron las concepciones ms tradicionales y arcaicas del rgi-
men30 que, todava, se mantenan impertrritas a mediados de ste, pero bien es cierto que ya
con ciertos matices y algunas notas de color que alegraban aquel ceniciento panorama. Los
aos trascurridos tras la contienda civil, el inicio de la salida del aislamiento internacional y el
progreso en algunos aspectos de la vida comenzaron a cambiar, poco a poco, el concepto de
mujer sostenido por el franquismo. An as, la transformacin fue muy lenta y, evidente-
mente, todava estaban muy lejos unas condiciones de igualdad en materia de gnero.
Desde la perspectiva ms rancia del rgimen, los estudios universitarios, a los que
muy poco a poco iba accediendo un mayor nmero de mujeres, se consideraban casi como
un entretenimiento para aqullas. Esa formacin no deba hacer que la mujer descuidara u
olvidara la verdadera misin para la que estaba llamada: la familia. Por ello, se estableca una
especie de interrelacin directa entre el tipo de estudios y el gnero; el rgimen acepta las
mujeres universitarias, siempre que sus estudios guarden la consideracin necesaria hacia las
caractersticas de su sexo. Los estudios de Filosofa, Historia, Lenguas Clsicas o Modernas,
cumplen semejante objetivo31. Es decir, se comenzaba a normalizar la situacin de la mujer
con respecto a su presencia en la universidad, pero acotndola a unas carreras que se valora-
ban como las ms adecuadas o idneas para ella.
Por tanto, lo normal en este periodo ser encontrar un mayor nmero de mujeres
universitarias dentro de las carreras de letras, y especialmente dentro de las facultades de
Filosofa y Letras, en detrimento de su presencia en otras especialidades como las de Dere-
cho, Medicina o en las carreras tcnicas. Parece ser que la mujer no estaba tan capacitada
como el hombre para estos menesteres, esa era la cruda realidad franquista que sufra la
poblacin femenina. Como suscribe Laura Lpez de la Cruz: la presencia de la mujer en la
universidad espaola era minoritaria, frente a la de los hombres, y se circunscribe a determi-
nados estudios considerados por la sociedad como mucho ms adecuados al papel que ella
desarrolla en el seno familiar32.
Con todo, de forma pausada y superando trabas e impedimentos, pero sin freno, la
mujer de los aos cincuenta y sesenta fue rompiendo algunas barreras opresoras, entre-
29 MOLINERO RUIZ, Carmen: Mujer, franquismo, fascismo. La clausura forzada en un pequeo mundo, Historia Social, 30 (1998), pp. 97-117. 30 Vid., v. g.: ORTIZ HERAS, Manuel: Mujer y dictadura franquista, Aposta. Revista de Ciencias Socia-les, n 28 (2006), pp. 1-26; SANCHIDRIN BLANCO, Carmen: La mujer espaola y el hada del hogar. Las mujeres y la universidad en los sesenta, en VV.AA., La universidad en el siglo XX: Espaa e Iberoamrica. X Coloquio de Historia de la Educacin, Murcia, Universidad de Murcia, 1998, pp. 614-626. 31 RAMOS RUIZ, Isabel: Profesores, alumnos y saberes, op. cit., p. 176. 32 LPEZ DE LA CRUZ, Laura: La presencia de la mujer en la universidad espaola, Revista Histo-ria de la Educacin Latinoamericana, 4 (2002), p. 291.
458 SARA GONZLEZ GMEZ
abrindose camino por terrenos embarrados y normalizando una situacin que jams de-
bera haber sido anmala. El nmero de mujeres universitarias creci considerablemente a lo
largo de los doce aos en estudio33 y es que, como apunta Garca Lastra:
Sin lugar a dudas, que la mujeres ocuparan y hayamos ocupado durante este siglo el
mundo universitario no ha sido sino reflejo y continuacin de un proceso que comenz a fra-
guarse dcadas antes que las leyes concediesen a las mujeres este derecho a la educacin supe-
rior. La Ley Moyano de 1857 y todas las normativas posteriores que de manera paulatina fue-
ron sentando las bases para el acceso de las mujeres al mundo educativo y cercenando la su-
premaca (o monopolio) varonil, fueron los pilares sobre los que se alz este logro que sin ti-
tubeos debe ser contemplado como una pieza fundamental en la importante transformacin
acontecida en la situacin social de las mujeres, donde precisamente son aquellas que han po-
dido acceder a estudios superiores y desarrollar una profesin acorde a stos las que represen-
tan la punta del iceberg en el proceso de cambio de la 'definicin social de lo femenino'34.
Resultara muy interesante realizar un estudio en el que se analizara la senda profesio-
nal que siguieron las mujeres que emprendieron sus estudios universitarios durante la poca
que nos ocupa. Conocer en qu medida aquellos estudios les sirvieron para acceder a un
puesto de trabajo o si, finalmente, quedaron como un adorno en su currculum, excluyen-
do evidentemente la gran aportacin que significaran para su persona independientemente
del uso profesional posterior que hicieran de los mismos. Este trabajo se sale de las preten-
siones y el alcance de esta tesis doctoral, pero consideramos que es una lnea de investiga-
cin abierta, absolutamente sugerente y todava insuficientemente explorada.
Tras esta breve introduccin, centrada en aportar unas breves pinceladas en relacin
al papel de la mujer y universitaria del franquismo, procede el adentrarnos en el anlisis de
los datos concretos de la Universidad de Salamanca. Lo cierto es que en Salamanca, en ma-
teria de gnero, no se aprecian grandes diferencias con respecto a la dinmica general de la
universidad espaola. Para comprender la evolucin en la matrcula salmantina, tomando la
variable gnero, basta con acercarnos al siguiente grfico que recoge los datos de matrcula a
lo largo de todo el franquismo:
33 Este asunto ha sido abordado por la autora de este trabajo en: GONZLEZ GMEZ, Sara: Rompiendo las barreras del franquismo, op. cit. 34 GARCA LASTRA, Marta: La voz de las mujeres en la universidad, RASE. Revista de la Asociacin de Sociologa de la Educacin, vol. 3 - 3 (2010), p. 357.
LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA DURANTE EL FRANQUISMO (1956-1968) 459
Grfico 7: Evolucin de la matrcula de hombres y mujeres en la Universidad de Salamanca
(1939/40-1974/75)
Como podemos observar, la evolucin en la presencia de hombres y mujeres resulta
desigual. Mientras que la lnea continua muestra innumerables altibajos, aunque con una
tendencia creciente en lneas generales, la lnea discontinua no experimenta cambios tan
bruscos y sigue una tendencia ms o menos esttica los veinte primeros aos e inicia, a partir
de la dcada de los sesenta, un proceso ascendente que se ve incrementado notoriamente a
partir de los aos setenta.
En el caso femenino, si tomamos como referencia el primer ao
del rectorado de Beltrn de Heredia y el ltimo del franquismo, consta-
tamos que la matrcula lleg a multiplicarse prcticamente por ocho,
mientras que en la de los hombres no lleg ni a duplicarse. La cifra regis-
trada durante el curso 1956/57 represent slo el 13,5% de la matrcula
que se dio en el curso acadmico 1974/75. Por tanto, la lnea que nos
indica el acceso de la mujer a la universidad salmantina muestra la evolu-
cin de un proceso que se inicia, de un modo muy tmido, en los prime-
ros aos del periodo que nos ocupa y que toma la fuerza decisiva a partir
del ao 1963/64, momento en el que se incoar un crecimiento acelerado
que llegar hasta nuestros das. Sin embargo, ser el rectorado de Felipe
Lucena Conde (1968/72) el feliz protagonista de la verdadera explosin
de la matrcula femenina en la Universidad de Salamanca.
Tabla 22: Mujeres USAL
Los grficos circulares que aparecen en la siguiente pgina nos dan muestra visual del
progreso de la matrcula por gnero desde el primer ao de rectorado de Beltrn de Heredia
(85% de hombres y 15% de mujeres) al ltimo de Balcells Gorina (67% de hombres y 33%
de mujeres). Como puede apreciarse, todava estamos muy lejos de un reparto equitativo de
los puestos universitarios, pero el avance en aquellos doce aos resulta verdaderamente
460 SARA GONZLEZ GMEZ
relevante y debe ser tenido en cuenta a la hora de interpretar algunas circunstancias de la
universidad salmantina de la segunda mitad del franquismo.
Veamos tambin grficamente esta evolucin en el acceso de la mujer a la
Universidad de Salamanca entre 1955/56 y 1972/73. La figura resultante que se presenta a
continuacin simboliza la montaa que, poco a poco, las mujeres comenzaron a escalar,
pasando de la base a la parte previa a la cumbre.
Grfico 9: Evolucin de la matrcula de mujeres USAL (1955/56-1972/73)
Grfico 8: Proporcin hombres/mujeres USAL
Si comparamos los datos mostrados con los relativos a la media nacional observamos
ciertas similitudes. En el ao 1960/61, la universidad espaola contaba con un total de
62.105 estudiantes, de los cuales 48.327 eran varones y 13.778 mujeres (22,2% del total); en
el curso 1967/68 esa cifra nacional ascenda ya a un total de 115.590 estudiantes, de los cua-
les 34.677 eran mujeres (30%). Las medias en el porcentaje de mujeres se aproximan bastan-
te a las de la institucin salmantina.
No obstante, gnero y tipo de estudios deben abordarse de un modo conjunto para
realizar las diferenciaciones pertinentes y desgranar la situacin real que se vivi en cada uno
de los centros salmantinos. Dentro de sus cuatro facultades, la presencia de la mujer fue
dispar y las razones atendieron bsicamente a lo que ya hemos apuntado ms arriba: la con-
sideracin que de la mujer se tena por parte del rgimen y, consecuentemente, entre muchas
familias; la percepcin que se tena de los estudios; las preferencias de las mujeres, influen-
ciadas o no, por uno u otro tipo de formacin, etc.
A continuacin, nos limitaremos a apuntar las diferencias entre las mismas y las posi-
bles explicaciones nicamente desde la perspectiva de gnero. Obviamente, la interpretacin
de algunos de los datos de matrcula proporcionados se encuentra en aspectos que nada
tienen que ver con el gnero (condiciones materiales y docentes de los centros, secciones
con las que contaban, universidad de provincia versus universidad central, etc.) y que sern
tratados en los apartados que correspondan.
LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA DURANTE EL FRANQUISMO (1956-1968) 461
Partiremos de los datos generales que se presentan en la siguiente tabla y que han sido
utilizados para la elaboracin de los grficos que se incluyen ms adelante:
Tabla 23: Matrcula por sexo en las cuatro facultades salmantinas
Facultad de Filosofa y Letras
Si algo distingui especialmente a este centro del resto fue la importante presencia
femenina registrada; a lo largo del periodo estudiado, curso a curso, sta fue bastante supe-
rior a la de varones. El periodo rectoral de Beltrn de Heredia se abri con 330 mujeres
frente a 39 varones, representando las primeras el 89,5% del total de la matrcula. Al ao
siguiente, el nmero de varones creci considerablemente y el de mujeres lo hizo de forma
muy leve. En el curso 1958/59, se produjo un descenso notable en la matrcula femenina,
decreciendo hasta 184, mientras que la de hombres sigui un proceso de crecimiento que no
ces a lo largo de todos los cursos analizados. Ese bache provoc que la matrcula en esta
facultad descendiera de un modo notable.
A partir del curso 1959/60, tanto el nmero de varones como de mujeres aument
ao a ao, reducindose el amplio porcentaje que hemos tomado como punto de partida.
De 330 mujeres en el curso 1956/57 se pas a 1005 en el curso 1967/68, un crecimiento a
todas luces espectacular. Pero tambin aument el de varones de una forma sobresaliente,
pasando de slo 39 a 662.
En el ltimo ao de mandato rectoral de Balcells, las universitarias de este centro re-
presentaban el 60% del total de matrcula. Por tanto, si por algo se puede caracterizar al
periodo estudiado en esta cuestin concreta es porque invirti por completo una tendencia
que se haba venido produciendo a lo largo de dcadas.
En resumen, esta facultad acogi a un porcentaje muy elevado del alumnado femeni-
no de la Universidad de Salamanca. La concepcin de estos estudios, asumidos como los
ms apropiados y acordes para la formacin superior de la mujer, se constata claramente. Sin
462 SARA GONZLEZ GMEZ
embargo, el transcurso de estos doce aos tambin nos da muestra de una mayor apertura
de miras en esa mentalidad, demostrada por el incremento en el acceso masculino.
Como vemos en el siguiente grfico, la evolucin de las lneas que representan a va-
rones y mujeres se produce de forma bastante simtrica durante la dcada de los sesenta.
Sirva el mismo para hacernos una idea general de la tendencia en cuanto gnero vivida en
este centro:
Grfico 10: Matrcula
por gnero en la Facul-
tad de Filosofa y Letras
Facultad de Ciencias
Estamos ahora ante el segundo centro con mayor nmero de mujeres, aunque no en
superioridad respecto a los varones. Entre 1956 y 1960 se registraron 500 fminas y 1358
varones. Durante el primer ao rectoral de Beltrn, el centro cont con 121 mujeres frente a
310 varones, es decir, las universitarias representaban el 28% del total de matrcula. En el
curso 1967/68, esa proporcin se haba incrementado de forma ligera, pasando a un 35,9%.
Con todo, de esas 121 mujeres para el curso 1956/57 se pas a 397 en el curso 1967/68, una
cifra nada desdeable.
Lo que nos demuestran estos datos es que el acceso a la formacin superior en Cien-
cias se ira abriendo lentamente durante estos aos. Las mujeres reivindicaban as su derecho
a elegir carrera de forma libre, a pesar de que los prejuicios se mantenan latentes. No todas
se atrevieron a oponerse a la cerrada concepcin respecto al gnero y tipo estudios de la que
hemos hablado, pero los nmeros nos muestran como su presencia fue ganando peso.
Veamos de una forma general en el siguiente grfico la evolucin de la matrcula en
este centro desde la perspectiva que nos ofrece la variable gnero:
LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA DURANTE EL FRANQUISMO (1956-1968) 463
Grfico 11: Matrcula
por gnero en la Facul-
tad de Ciencias
Facultad de Derecho
El nmero de mujeres que cursaron estos estudios en la universidad salmantina resul-
ta muy reducido. Los porcentajes se vuelven absolutamente esclarecedores: durante el curso
1956/57 slo 71 mujeres, frente a 1902 hombres, estudiaron en esta facultad, lo que repre-
senta un 3,5% femenino en la matrcula total. Si nos situamos en el ltimo ao de rectorado
de Balcells, observamos un ligero incremento (113 mujeres/517 varones); las primeras re-
presentaban entonces un 18%, pero debemos tener en cuenta la brusca reduccin de la
matrcula de hombres que, al mismo tiempo, se haba venido produciendo. El nmero de
hombres lleg a rebajarse hasta una cuarta parte mientras que el nmero de mujeres slo se
increment ligeramente.
Por tanto, entre las preferencias de las universitarias salmantinas de la poca no esta-
ban los estudios de Derecho, pero quiz no tanto por una decisin personal de la universita-
ria como por las limitaciones laborales que todava se mantenan en este mbito. Veamos el
panorama general del centro en cuanto gnero en el siguiente grfico:
Grfico 12: Matrcula
por gnero en la Facul-
tad de Derecho
464 SARA GONZLEZ GMEZ
Facultad de Medicina
Durante el primer curso del periodo rectoral de Beltrn de Heredia, este centro con-
taba nicamente con 61 mujeres frente a 1069 varones. Por tanto, aqullas representaban un
reducido porcentaje del 5,4% respecto al total de la matrcula. Con todo, la comparacin con
la Facultad de Derecho nos permite cotejar una mayor presencia femenina en los estudios
mdicos. Asimismo, la tendencia seguida en la matrcula de mujeres nada tuvo que ver con
los datos del anterior centro.
A lo largo del periodo en estudio, el ritmo de progresin del acceso femenino se ace-
ler de forma vertiginosa. En diez aos, la Facultad de Medicina salmantina pas de registrar
una matrcula de 61 mujeres (curso 1956/57) a una de 433 (curso 1966/67). Al ao siguien-
te, aquel nmero ascendi a 452, representando un 17,6% del total de matrcula. Un creci-
miento importante y relevador que lleg a multiplicar la matrcula femenina por siete.
En este caso, al contrario de lo que sucedi en Derecho, la matrcula masculina creci
tambin de un modo acelerado, alcanzando a multiplicarse en los doce aos en estudio (de
1069 en el curso 1956/57 a 2115 en el curso 1967/68).
Quiz sean estos los estudios a travs de los cuales mejor se constata el sobresaliente
incremento de universitarias en carreras que, en un tiempo muy cercano, no se vean como
las ms apropiadas para la mujer. Si nos remitimos a una dcada posterior, podemos obser-
var un fenmeno de crecimiento acelerado que se muestra incesante (curso 1975/76: 970
alumnas). El siguiente grfico nos sirve para ilustrar lo descrito hasta este momento:
Grfico 13: Matrcula por
gnero en la Facultad de
Medicina
Breve apunte: las cuestiones de gnero desde el punto de vista de las universitarias
Como hemos visto, el acceso de hombres y mujeres a la formacin universitaria se
produjo de una forma verdaderamente diferenciada. Pero la informacin expuesta nos obli-
ga a distinguir entre la situacin acontecida durante la segunda mitad de la dcada de los
cincuenta y los aos sesenta. Probablemente, el marco cronolgico que acota este estudio
LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA DURANTE EL FRANQUISMO (1956-1968) 465
sea uno de los ms apropiados para constatar los incipientes cambios en cuestiones de gne-
ro dentro de la universidad.
La idea de la mujer universitaria cursando slo aquellos estudios que guardasen la
consideracin necesaria a las caractersticas de su sexo empez, muy lentamente, a desmitifi-
carse. Un grupo importante de mujeres comenz a desbrozar el camino, probablemente no
sin impedimentos de todo tipo. Algunas mujeres estudiaran slo como mero entretenimien-
to de su tiempo y otras lo haran con la plena conviccin de que esa formacin les reportara
excelentes beneficios tanto profesionales como personales; es decir, con el deseo de desem-
pear una profesin en y para la sociedad.
Sin embargo, las evidentes distinciones y el diferenciado acceso a la universidad de
hombres y mujeres no parecan preocupar a algunas universitarias. Es comprensible que,
ante la educacin recibida tanto dentro de la familia como en la escuela, muchas tuvieran
una concepcin inferior de s mismas con respecto a los varones. No olvidemos que, como
sostienen algunos estudios, la educacin es probablemente la condicin previa ms impor-
tante para la emancipacin, pues la ignorancia es un medio tanto para mantener sometida a
la mujer como para justificar ese sometimiento35.
En nuestra opinin, el franquismo utilizaba y se serva de esa ignorancia. Le interesa-
ban los ciudadanos nica y exclusivamente formados en sus ideales; jvenes gregarios y
adocenados en unas determinadas concepciones tanto polticas como culturales y religiosas,
que no se salieran de la senda preestablecida y marcada para ellos.
Y este tipo de percepciones se pueden constatar entre algunas universitarias salmanti-
nas, evidentemente sin caer en generalizaciones que nos conduciran a error. Lo que se pre-
senta a continuacin es slo el ejemplo del pensamiento de algunas estudiantes que se ha
podido rastrear a travs de la consulta de la prensa local.
En declaraciones a El Adelanto por parte de M Antonia Serrano Alberca, madrina de
los estudiantes de Ciencias en las fiestas de San Alberto Magno del ao 1964, el entrevista-
dor le preguntaba si haba odo hablar de los derechos de la mujer y cul era su parecer, a lo
que la jovencita responda: Yo creo que las pretensiones de algunas mujeres de equipararse
al hombre me parecen excesivas. Si lo consiguiera, perdera un perfil muy acusado en ella: la
feminidad36. La universitaria, confundida, pareca identificar la igualdad entre hombres y
mujeres con una transformacin de las segundas y una adopcin de caractersticas varoniles.
Sin duda, todava muchas mujeres, incluso aqullas que accedan a la universidad, se sentan
en un segundo plano y en una situacin de inferioridad, pero lo aceptaban como una posi-
cin propia y natural; algunas no vean un gran problema en ello, si atendemos a las declara-
ciones de esta universitaria. Afortunadamente, no sucedi lo mismo en todos los casos y un
nmero cada vez mayor de mujeres fue reclamando unos derechos que les correspondan y
unas igualdades que el f