¿ LA MALDICION DE LOS REYES CATOLICOS ?
Fuentes: Wikipedia
El 31 de marzo de 1492 los Reyes Católicos, Fernando II de Aragón e Isabel I de Castilla, firmaron el Decreto de la Alhambra el en el cual se
obliga a todos los judíos de la península Ibérica a convertirse al catolicismo o ser expulsados en un plazo de cuatro meses, es decir,
hasta el 31 de julio.
En un edicto posterior, para compensar el tiempo que transcurrió entre la promulgación y el conocimiento del decreto, Torquemada
amplió el plazo 10 días, hasta el 11 de agosto de 1492, es decir 9 Av 5252, fecha hebrea de la destrucción de los Templos de
Jerusalén.
La desobediencia a este edicto suponía la condena a muerte y la confiscación de los bienes.
Se estima que entre 100.000 y 300.000 judíos salieron de España.
EL DECRETO DE LA ALHAMBRA
Don Issac Abravanel, descendiente del rey David, era hombre de Estado, filosofo, comentador bíblico y financiero
de los Reyes Católicos.
Se dice que escribió una respuesta al decreto de expulsión en la forma de una maldición contra España, prohibiendo a
los judíos pisar el suelo español.
Esta prohibición ha sido en vigor hasta la abolición del decreto por el general Franco en 1967.
¿ Leyenda ? Sin embargo, la descendencia de los Reyes Católicos tuvo un destino poco afortunado.
LA RESPUESTA DE DON ISSAC ABRAVANEL
El matrimonio tuvo 5 hijos:
Isabel
Juan
Juana
María
Catalina
GENEALOGIA DE LOS REYES CATOLICOS
El 3 de noviembre de 1490, Isabel, de 20 años, contrajo matrimonio con el Infante Alfonso de Portugal, que tenía
apenas 15.
A pesar de esta diferencia de edades, desde el primer instante que se conocieron se enamoraron; así, lo que en un
comienzo fue un matrimonio político terminó siendo una unión por amor.
Lamentablemente, la feliz unión de Isabel y Alfonso sería de corta duración: el 13 de julio de 1491, el joven Príncipe
fallece a causa de una caída de caballo.
ISABEL
Sin hijos y devastada por el dolor, Isabel vuelve a España como princesa viuda de Portugal.
Se dedica a vivir silenciosamente sumida en las oraciones, adoptando el hábito de las hermanas de
Clares, solicitando entonces a sus padres su permiso para convertirse en monja.
Pero los Reyes Católicos tenían otros planes para ella.
ISABEL
Isabel y Fernando deseaban casarla con el rey de Portugal, Manuel I, que se sentía atraído por ella.
Lo único que quería la princesa viuda, gran defensora de la fe cristiana con mucha intolerancia hacia los herejes, era dedicarse a
la oración y tomar los hábitos. Pero al final no pudo resistir la presión de sus padres; por ello en 1496 accede a casarse con el
rey Manuel de Portugal, pero impone una condición: los judíos deben ser expulsados de Portugal.
En primera instancia el rey Manuel vaciló porque admiraba a los judíos por sus conocimientos y por los servicios financieros que
aportaban a la corona, pero luego accedió. Así que el 30 de septiembre de 1497, Isabel se convierte en reina de Portugal.
Le quedaba menos de un año de vida.
ISABEL
El 23 de agosto de 1498, da a luz un niño varón que se llamó Miguel de la Paz.
Una hora después del nacimiento de su hijo, Isabel murió a los 27 años.
Miguel de la Paz murió en Granada el 20 de julio de 1500, sin haber llegado a cumplir los dos años de
edad. Fue sepultado en Toledo. Con él, murió el sueño de la unificación ibérica.
ISABEL
En 1497, el único varón de los Reyes Católicos y heredero de la corona de España, contrajo matrimonio con Margarita de Austria, hija del emperador germánico Maximiliano I de
Habsburgo.
Seis meses después de su boda, murió en Salamanca, a consecuencia de la tuberculosis, a los 19 años.
Tuvo un hijo póstumo que nació muerto.
JUAN
En 1496, contrajo matrimonio con Felipe el Hermoso de Habsburgo (también hijo del emperador Maximiliano I).
Felipe pronto perdió el interés en la relación, lo cual hizo nacer en Juana unos celos patológicos.
Cuando en 1503 su marido, Felipe, se marchó a Flandes a resolver unos asuntos, dejando a Juana en plena gestación,
parece ser que se agravó su estado mental.
JUANA
Por la concordia de Villafáfila (junio de 1506), Fernando se retiró a Aragón y Felipe fue proclamado rey de Castilla en
las Cortes de Valladolid con el nombre de Felipe I.
Pero el 25 de septiembre de 1506, muere Felipe I el Hermoso supuestamente envenenado, y entonces
aumentan los rumores sobre el estado de locura de Juana, nombrada reina de Castilla con el nombre de Juana
I y el apodo “la loca”.
JUANA
Ante el evidente desequilibrio mental de la reina, Fernando vuelve a ser regente de Castilla ante el llamamiento del
Cardenal Cisneros, dada la creciente inestabilidad propiciada por la nobleza.
La demencia de la reina seguía agravándose. No quería cambiarse de ropa, no quería lavarse.
Finalmente, su padre decidió a encerrarla en Tordesillas el mes de febrero del año 1509.
JUANA
En 1516 murió Fernando II el Católico y, aunque Juana se convirtió en reina nominal en Aragón, su hijo Carlos se
benefició de la coyuntura de la incapacidad de Juana para proclamarse rey.
Desde que su padre la recluyera en 1509, la reina Juana permaneció en una casona-palacio-cárcel de Tordesillas hasta que murió, el 12 de abril de 1555, después de 46 años de reclusión forzosa y siempre vestida de negro, con la única compañía de su última hija, Catalina, ninguneadas
y maltratadas física y psicológicamente por sus servidores.
JUANA
En los últimos años, a la enfermedad mental se unía la física, teniendo grandes dificultades en las piernas,
las cuales finalmente se le paralizaron.
Entonces volvió a hablarse de su indiferencia religiosa, llegándose incluso a comentar que podía estar
endemoniada.
Falleció en Tordesillas (Valladolid) en 12 de abril de 1555, a los 75 años.
JUANA
Con su esposo Felipe I el Hermoso tuvo seis hijos:
Leonor
Carlos
Isabel
Fernando
María
Catalina
JUANA
Leonor (1498 – 1558), reina consorte de Portugal siendo la tercera esposa de Manuel I de Portugal. Tuvo dos hijos:
Carlos, muerto a los 8 meses y María.
A la muerte de Manuel, abandono su hija de 6 meses para contratar matrimonio con Francisco I de Francia. No
tuvo hijos con él que la despreciaba.
HIJOS DE JUANA LA LOCA
Carlos (1500 – 1558), rey de España con el nombre de Carlos I y Emperador del Sacro Imperio con el nombre de Carlos V no tuvo
éxito en sus objetivos:
Su sueño de un Imperio universal bajo los Habsburgo fracaso.
No consiguió impedir el asentamiento de la doctrina luterana.
Sus posesiones de ultramar se acrecentaron enormemente pero sin que sus gobernadores puedan implantar estructuras administrativas
estables.
En 1555, Carlos abandona la corona de España y las Indias a su hijo Felipe y en 1558, deja el gobierno imperial a su hermano
Fernando.
HIJOS DE JUANA LA LOCA
Isabel (1501 – 1526), reina consorte de Dinamarca y la Unión de Kalmar, esposa de Cristián II.
Tuvo seis hijos (4 mueren muy jóvenes) y tiene que abandonar Dinamarca cuando Cristian II pierde el
trono.
Muere a los 25 años.
HIJOS DE JUANA LA LOCA
Fernando (1503 – 1564), Emperador del Sacro Imperio, con el nombre de Fernando I, al suceder a su hermano Carlos en el puesto. Juntos crearon la línea austriaca y
española de los Habsburgo.
En cuatro generaciones y menos de 150 años, la endogamia acabo con la línea española de los
Habsburgo, llevando a la Guerra de Sucesión.
HIJOS DE JUANA LA LOCA
María (1505 – 1558), reina consorte de Hungría y Bohemia, esposa de Luis II que muere en una batalla contra los
turcos.
Viuda, sin hijos y sin corona a los 21 años, es nombrada Gobernadora de los Países Bajos por su hermano Carlos.
HIJOS DE JUANA LA LOCA
Catalina (1507 – 1578), creció junto a su madre encerrada en el castillo de Tordesillas, donde padeció
privaciones y maltratos en manos de los marqueses de Denia, guardianes de la reina Juana.
Fue reina consorte de Portugal, casada con su primo Juan III.
Tuvieron 9 hijos (7 muertos muy jóvenes) y fue abuela del rey Sebastián I de Portugal por su hijo Juan, muerto a los
16 años.
HIJOS DE JUANA LA LOCA
María, cuarta hija de los Reyes Católicos, contrajo matrimonio en 1500 con el viudo de su hermana Manuel I de Portugal, el
Afortunado y se exilió a Portugal como reina.
En 1508 consiguió de su marido el perdón por las intervenciones destructivas y violentas del pogromo contra
los judíos de 1506.
Fue madre de diez hijos, entre ellos Juan Luis de Avis, casado secretamente con una judía, Violante Gómez la Pelicana. De
esta relación nació Antonio I de Portugal, que reinó un mes entre julio y agosto de 1580.
Irónicamente, un bisnieto de los Reyes Católicos era judío y llego a reinar sobre Portugal.
MARIA
Catalina, quinta hija de los Reyes Católicos, fue prometida en matrimonio con el príncipe Arturo de Gales, primogénito de
Enrique VII de Inglaterra.
A Catalina le causó un gran daño moral abandonar la Alhambra, ya que había pasado en el castillo rojo su niñez y adolescencia. El 14 de noviembre de 1501, contrajo matrimonio con el príncipe
Arturo de Gales, que murió pocos meses después de la boda.
Los intereses de ambas coronas llevaron a negociar el matrimonio de la viuda con el siguiente en la línea de sucesión, el príncipe
Enrique, hermano del difunto, que tan solo tenía 11 años.
CATALINA
En 1509 murió el rey Enrique VII de Inglaterra y el 11 de junio, Catalina fue nuevamente desposada tras una larga y solitaria espera de siete años, llena de incertidumbre,
por Enrique VIII de Inglaterra.
Fue un matrimonio feliz para ambos -con infidelidades por parte del rey-, durante 18 años, hasta que Enrique VIII comenzó a preocuparse seriamente ante la necesidad
de un heredero varón y el fin de la fertilidad de la reina.
CATALINA
Sus hijos fueron:
- Un hijo (1510) que murió tras el alumbramiento;
- Enrique (1511) que moriría tan sólo 52 días después de su nacimiento;
- Un aborto (1513);
- Enrique (1514) que moriría al mes de su nacimiento;
- María I de Inglaterra (1516 - 1558) que será reina de Inglaterra como María Tudor (“Bloody Mary”) de 1553 a
1558 y morirá a los 42 años sin descendencia.
- Otro aborto (1518)
CATALINA
El rey Enrique VIII, enamorado de Ana Bolena, solicitó la nulidad eclesiástica a la Iglesia Católica con el pretexto de
que su matrimonio era ilegítimo por haber sido Catalina su cuñada. Ante la negativa del papa Clemente VII, el arzobispo de Canterbury anuló el matrimonio del rey con Catalina declarando
el rey como jefe supremo de la nueva Iglesia de Inglaterra.
Catalina fue confinada sucesivamente en Ampthill, en Buckden y en el castillo de Kimbolton, donde murió de un
cáncer del corazón, el 7 de enero de 1536, a la edad de 50 años. Aunque nunca renunció al título real, fue enterrada en la Catedral de Peterborough con un funeral propio de Princesa
viuda en lugar del de una reina.
CATALINA
¿ CASUALIDADES…
O MALDICION ?
Música: Zarabanda de la Suite n°11 en Re menor de Händel