En tiempos de Maricastaña, durante el otoño, los niños y niñas aprendían poesías y canciones en la escuela para recitar en la magosta, una fiesta popular.
Recitamos la poesía y cantamos la canción del gatito.
Ya está la nieve en la cumbre,el fuego arde en la lumbre,las castañas por asar…
Un gatito con castañas,bromeaba el muy salao,le salpicó una en la cara…